“MUJERES EXTREMEÑAS HACIENDO CULTURA A TRAVÉS DE LA POESÍA Y LA PINTURA: APROXIMACIÓN A UNA PERSPECTIVA DE GÉNERO” Laura García Rodríguez, Pablo García Rodríguez e Inés Rodríguez Sánchez. Facultad de Educación. UEx. 1ª.- En la primera parte de nuestro trabajo vamos a analizar un libro de poemas, desde una perspectiva de género, pues entendemos que esta forma de análisis nos permite comprender las características que definen a las mujeres y a los hombres de manera específica y observar las semejanzas y las diferencias, parafraseando a Marcela Lagarde. Por lo tanto no haremos ninguna aportación a la obra en sí, es decir, como están realizadas esas poesías desde el planteamiento de la crítica literaria. La obra “Antología de Poetas Extremeñas”, de Manuel Miguel Ramos López, escritor que nació en Santa Amalia en 1975, se autoeditó su primer libro, y obtuvo el IX Premio de Oliva de la Frontera, entre otras obras, es el compilador de las poesías de 29 mujeres poetisas, el libro contiene además unas aportaciones pictóricas de dos mujeres dedicadas a las bellas artes, las pinturas que aparecen son suaves, sin propósito de irritar y sin animo de crear una atmósfera que no sea la placidez y la armonía, elementos que vienen muy bien como marco para la poesía. Queremos hacer un pequeño recorrido por la vida de estas poetisas, para que aparezca su genealogía, es decir que sean ellas mismas y sin estar supeditadas por ser hijas, hermanas o esposas de..., son ellas con su obra y que no dependen de nadie, para ser las protagonistas de su propia creación literaria. Muchas veces se ha mantenido una posición de subordinación actuando como auxiliares o ayudantes, y son las mujeres las que, en contra de la presión social con códigos muy convencionales, han sido capaces de salir de esa misma presión, que confinaba sus expectativas al ámbito del hogar y el cuidado de la familia, entornos muy estrechos para estas mujeres. Sus biografías es lo que las hace que sean únicas e irrepetibles, aunque es una prioridad en el mundo en el que se mueven las mujeres, hay que entender que, existen unos intereses y acciones que se deben realizar conjuntamente con otras mujeres y abrir espacios de participación de todas, dentro de la especificidad de cada una. Las características generales de las 31 artistas, podemos decir que todas son extremeñas, 25 son de la provincia de Badajoz y 5 de la provincia de Cáceres, aunque hay una autora que no reseña el lugar de su nacimiento, doce son Licenciadas en ramas humanísticas, tres son doctoras, en Filología Hispánica, en Medicina y en Geografía e Historia, una ha realizado estudios de Teología, una no ha estudiado, cuatro son maestras de distintas especialidades, tres nos dicen que han realizado estudios medios, una es Terapeuta, cuatro no reseñan sus estudios, una es Inspectora de Policía y una posee estudios primarios. Carolina Alcalá Núñez, ha realizado poesía, una novela corta además de cuentos y relatos. Alicia Alves Rodríguez, es Licenciada en Psicología por la Universidad de Salamanca, profesora de Instituto, finalista del Premio Felipe Trigo y del V Certamen Literario San Isidoro de Sevilla de la UEx. Gran admiradora de García Lorca y Saramago. Susana Antequera Correa, es Profesora de EGB, aficionada a la música, ha participado en recitales y pertenece a Poetas por la Paz. Ha publicado poemas. Milagros Doblado Calatrava, cursó estudios medios, ganó la primera Mención de honor de lo Juegos Florales del Colegio Claret, empezó a escribir a los catorce años, pertenece a un grupo de creación literaria de Alcalá de Henares. Rosa Calzado Castaño, es Terapeuta, empezó a escribir poesía en su juventud, ha participado en tertulias y ha ofrecido diversos recitales. Victoria Carande Herrero, es Licenciada en Filología Románica por la Universidad de Sevilla, trabaja como traductora para la Comisión Europea, ha vivido en distintas partes del mundo, ha publicado, “Sonetos de Bruselas”. Ana Castillo Moreno, es Maestra de Primaria y trabaja en un Colegio, pertenece a tertulias literarias, ha recibido diversos premios literarios y tiene publicados dos libros de poemas. Antonia Cerrato Martín-Romo, es Maestra en Filología Lengua Castellana e Inglesa, ha publicado diversos libros sola y con otros autores. Juana del Rosario Collado Berrocal, ha obtenido varios premios literarios, ha publicado parte de su obra y ha participado en talleres de literatura. Efi Cubero Barroso, es corresponsal de la Revista Frontera y colaboradora de otras, posee varios libros publicados y premios, ha realizado entrevistas a personajes muy conocidos y ha prologado entre otros escritores a la escritora Dulce Mª Loynaz. Dulce Chacón, tiene varios libros publicados de poesía, ensayo y teatro. Mª del Carmen Díez Filgueras, es autodidacta y ha recibido diversos primeros premios, le gusta la poesía social, la música y el teatro. Mª José Fernández, ha cursado Bachillerato Superior, empezó a escribir con nueve años y ha publicado algunos de sus poemas. Pilar Fernández Rodríguez, es Licenciada en Filología Hispánica por la Universidad de Valencia, es autora de varios libros de poemas y locutora de Radio Forum de Mérida. Mª José Flores, es doctora en Filología Hispánica por la UEx, es profesora en la universidad de Génova, ha publicado varios poemarios, tiene varios premios.
Piedad González-Castell Zoido, estudió Arte Dramático en el Teatro Estudio de Madrid, Diplomada en Teología y Ciencias Religiosas, comenzó a escribir muy joven, ha realizado diversos recitales y tiene libros publicados y otros inéditos de poesía, cuentos y novelas cortas. Mª del Mar Gómez Fornés, es Licenciada en Ciencias de la Información, rama de Periodismo, por la Universidad Complutense de Madrid, colabora en la prensa regional extremeña, directora de Radio Nacional de España en Mérida y está en posesión de diverso premios, tiene trabajos publicados. Josefa Lema Gordillo, tiene estudios de Graduado Escolar, ha publicado parte de su obra. Rosa Mª Lencero, es Licenciada en Geografía e Historia, ha publicado libros de poemas y de relatos y está en posesión de diversos premios. Emilia Oliva García, es licenciada en Filología Española, sección Literatura por la UEx., es profesora de francés, está en posesión del primer Premio de Poesía Ciudad de Zaragoza, ha publicado diversos libros. Milagrosa Ortega Rodríguez, trabajó como Inspectora de Policía en Madrid, dio su primer recital de poesía a los dieciocho años, tiene varios premios y publicaciones. Petra Portillo, es Licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla, especialidad Diseño y Grabado, ha publicado cuentos y poemas y ha realizado diversas exposiciones. Carmen Rejas, es Licenciada en Filología Hispánica por la UEx., ha realizado cursos de doctorado y ha publicado algunos poemas. Trinidad Ródenas Alcón, es Diplomada en Magisterio en la especialidad de Ciencias Humanas, ha publicado parte de su obra y es colaboradora de revistas literarias. (más adelante hablaremos con ella) María Sainz Martín, es Doctora en Medicina Preventiva y Salud Pública, jefa del Área de Educación para la Salud en el Hospital Clínico San Carlos y profesora en la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid ha recibido diversos premios y tiene parte de su obra publicada. Ada Salas, inicia sus estudios de Filología Hispánica, es profesora de Instituto, recibe diversos premios, ha publicado sus poemas, el último poemario se llama “Lugar de la derrota”, dice la autora en una noticia del periódico ABC, “Derrota, porque el hombre sabe que ha de morir y el poeta debe estar en el cauce y en las orillas del río viendo venir la muerte”. (1) Beatriz Sánchez, Licenciada en Geografía e Historia por la Universidad de Salamanca, hizo su tesis doctoral en Zurich, lugar donde vive, es traductora, empezó a escribir poesía a los siete años, ha publicado poesía, relatos cortos y cuentos para niños y niñas. Irene Sánchez Carrón, es Licenciada en Filología Inglesa por la UEx y Filología Hispánica por la UNED, es Profesora de Instituto y obtuvo el Premio Adonais en 1999 con el libro, “Escenas principales de un actor secundario”, está en posesión de otros premios de poesía. Rosa Mª Píriz de la Cruz, May Sierra para efectos literarios y pictóricos, está en posesión de diversos premios, como el Primer Premio en el I Concurso José Agustín Goytisolo en Barcelona en el año 2000, tiene publicados varios poemarios. Sara Samino García, es Licenciada en Bellas Artes en la Especialidad de Restauración de Pintura y Escultura por la Universidad de Sevilla, colabora en tareas de catalogación y restauración, ha realizado exposiciones de su obra. Victoria Guill, es Licenciada en Bellas Artes en la Especialidad de Pintura, tiene varios premios y ha realizado diversas exposiciones. Hemos querido llamarlas poetisas, pues por poetas entendemos que se habla de un oficio de hombres y que cuando hablamos o escribimos se convierte en norma, para las mujeres hay que poner el artículo femenino, y muchas veces, su obra, es la excepción, por lo cual si escribimos o hablamos de poetisas no lo estamos haciendo en genérico ni le ponemos el artículo para diferenciar el sexo, así con el nombre de poetisas creemos que todo es más fácil y no crea ningún tipo de problema. Además hemos utilizado la herramienta de los diccionarios para dar un poco más de luz a la acepción de poetisa, el Diccionario de Uso del Español de María Moliner, nos habla de la “forma femenina de poeta, del latín poetissa”. En el Diccionario de la Lengua Española, en su 21 edición, nos dice que “poetisa es la mujer que compone obras poéticas y está dotada de las facultades necesarias para componerlas”, en la 2ª acepción es, “Mujer que hace versos”, la misma significación encontramos en la voz poeta, pero en masculino, sin embargo hemos constatado que en la actual edición del DRAE, en la 2ª acepción, de la voz poeta, se ha cambiado por, “persona que escribe obras poéticas”. En el Breve Diccionario Etimológico de la Lengua Castellana, de Joan Corominas, no contempla la voz poetisa, sólo como derivado y en la voz poeta, dice que es “autor de literario, propiamente hacedor, creador”, como vemos todo en masculino. No hay, a nuestro juicio, ninguna opción negativa para no denominar a las mujeres su oficio en femenino, si ello es posible, pues el lenguaje es una construcción social y como tal tiene algunos vicios y también virtudes, como es que dejemos de utilizar la palabra en femenino porque a lo largo de los siglos era algo realizado por hombres y por las mujeres pero en el espacio privado, creemos que es necesario conquistar “el derecho a ser nombradas” (2) Por otra parte sabemos, que a ellas no les gusta el nombre de poetisas, aunque no debemos confundir en cómo pueda emplearse, si es en igualdad o es para significar dependencia o minusvaloración de la poesía realizada por mujeres. Incluso Carolina Coronado no era amiga de que a las mujeres se les llamara poetisas, por ejemplo Gerardo Diego, llama poetisa a nuestra autora, “Carolina es además de la poetisa confidente de sus lirismos, de muchacha, de señorita Doña, de su fe religiosa y de su temperamento exaltado, una poetisa, un poeta responsable que canta el progreso de su siglo.”, (3) la cita es sugerente para reafirmar, que poetisa no es siempre
sinónimo del trabajo bien hecho, sino va acompañado de la palabra poeta, que es el que es responsable, sin embargo poetisa es la exaltación y los prejuicios, de esta forma nos parece natural que a la Coronado no le gustara la palabra poetisa. “Un caso aparte es el de poeta, masculino acabado en –a por su origen, que se ha convertido en una palabra de doble género a efectos reales, ya que muchas mujeres que escriben poesía no quieren que se les llame poetisas, que es el femenino tradicional, sino poeta...era consciente de que poetisa no gustaba a las mujeres, porque demasiado tiempo se había empleado para referirse a las señoritas que se entretenían haciendo unas cuantas rimas, la mayor parte de las veces penosas. Es sabido que Unamuno empleó un masculino poetisos para ridiculizar a los malos poetas, insistiendo en la carga negativa del femenino” (4). Es decir, debemos utilizar, y lo hacemos desde un planteamiento feminista, la palabra poetisa para aquellas mujeres que escriben poesía. Por lo tanto, no existe razón alguna para que la palabra poetisa haya que unirla a la idea de plañideras, más bien creemos que puede existir un cierto complejo, o una tendencia mimética a copiar las maneras y los modos masculinos, o la percepción de que el lenguaje femenino es un lenguaje sin poder y por lo tanto sin valor, pues es cierto que hay muchas mujeres que el nombre de su profesión dicha en femenino tienen la sensación de ser de segunda categoría, parece que no es lo mismo un ingeniero que una ingeniera, un médico que una médica, un abogado que una abogada, cuando la realidad es que es la misma profesión pero ejercidas por hombres o por mujeres. Creemos que ya es tiempo de reclamar que aquellas palabras que puedan decirse en femenino se haga, ya que sabemos que las lenguas avanzan o retroceden por su utilización o no, cuando se quedan anquilosadas o pueden morir, por lo tanto hay que utilizar el femenino sin tensionar hasta el absurdo su significado, es un ejercicio excelente para el avance lingüístico y además es una realidad social a la que no podemos sustraernos, y de esta forma no invisibilizaremos a las mujeres que desempeñan sus profesiones en el mismo nivel de competencia que los hombres, pues si no se nombra no se sabe, por lo tanto nombrar en femenino o en masculino es esencial para saber de que sexo estamos hablando, pues el sólo hecho de ser masculino no comporta ser superior por el sólo hecho de serlo, pues como decía Pierre Guiraud, que el leguaje es signo, como la vestimenta, por lo tanto podemos elegir nuestro lenguaje dentro de las posibilidades que la lengua nos ofrece, “Y eso por qué porque, consciente o inconscientemente, el femenino no tiene para estas mujeres el mismo valor que el masculino. Está devaluado. La razón principal está en que, durante mucho tiempo, el femenino no designó a la mujer profesional, sino a la esposa, a la mujer que estaba casada con un profesional: la ingeniera era “la mujer del ingeniero”, la médica era “la mujer del médico, la generala, “la mujer del general. Y, además, esos femeninos tenían algo de burlón y de vulgar que no ha terminado de desaparecer del todo” (5) 2ª.- En la segunda parte de nuestro trabajo, nos referiremos muy sucintamente a localizar en el espacio y en el tiempo a nuestras poetisas, es decir, la segunda mitad del siglo XX en España, pues todas las autoras nacen, escriben o pintan en este momento histórico, más concretamente en el último tercio del siglo, tiempo que coincide más o menos con la muerte de Franco y el inicio de la democracia, sobre todo con esa gran experiencia que es la promulgación de la Constitución en 1978, que dará lugar al final de la llamada transición, dice Domínguez Ortiz, “... corresponde a lo que suele llamarse la Transición, una de las más originales e interesantes etapas de nuestra historia; ha suscitado estudios numerosos, muchos testimonios de admiración y se le ha considerado como modelo a imitar por los países que quieren realizar de un modo pacífico el difícil paso de una situación dictatorial a otra de normalidad democrática”. (6) Aunque la idea de que el modelo de transición española puede ser extrapolable a otros países, es puesta en cuestión por muchos analistas de la Historia, ya que las condiciones internas y externas que se dieron en ese momento de la Historia de España y que fueron decisivas para que se produjera una transición como la que se realizó, es muy complicado que vuelvan a repetirse para producir el mismo efecto, debemos añadir el comportamiento individual y colectivo de los españoles y las españolas, los sindicatos, los partidos políticos, la Iglesia, el ejercito, los y las intelectuales, la prensa y todos los medios de comunicación de masas, los diversos grupos sociales, el carácter de la oposición democrática, las influencias del pasado, la geografía española y en especial las coyunturas económicas, políticas y sociales concretas de aquel momento concreto, además de que los regímenes dictatoriales o autoritarios son múltiples y no corresponden a un solo patrón, etc. Por lo tanto la Constitución Española, aprobada por referéndum es el comienzo de una nueva etapa histórica, es el tiempo en el que se “mueven” las mujeres que estamos tratando, lo hacen en sus casa, en sus trabajos, en sus estudios y en sus poesías o en sus pinturas, nos dice Domínguez Ortiz, “ Pero tenemos ya la intuición del papel decisivo que representan para el ser de España y sus moradores, para su papel histórico de mediadora entre los pueblos que la integran y esa otra unidad superior que es el mundo occidental al que pertenecemos, estas etapas finales del milenio” (7). Estamos hablando de la España de las Autonomías y de la Europa de las Regiones. Extremadura, desde los inicios de 1976 con la democratización del país y la reestructuración del Estado en Comunidades Autónomas, veía la necesidad de adecuarse a este nuevo momento histórico a favor de un estatuto que fuera válido para todos los extremeños y extremeñas, se quería realizar un anteproyecto de estatuto regional junto al anhelo secular de desarrollar esta tierra extremeña, aunque todo ello sumido en una apatía sociopolítica importante, que sin lugar a dudas era debido a la larga etapa franquista y al fuerte individualismo, era por tanto muy difícil llegar a acuerdos y a consensos, “aunar voluntades y energías colectivas se convirtió en tarea prioritaria” (8). En este clima de democratización y regionalismo y antes de que se produjeran las deseadas primeras elecciones democráticas, surgió Acción Regionalista Extremeña, AREX, que después se diluiría en el partido político de Unión de Centro Democrático, UCD, las elecciones se celebraron en junio de 1977 y se obtuvieron 8 escaños para UCD y 4 para el PSOE, que se convirtió en la primera fuerza política de izquierda.
En este mismo año, se reunían por primera vez todos los diputados y senadores, para constituir la Junta de Parlamentarios de Extremadura e iniciar la elaboración del Estatuto de Autonomía, además de realizar un estudio en profundidad de las necesidades estructurales que la economía y la sociedad extremeña demandaba. Pasado el verano, en el otoño del 77 se empezaron a celebrar las reuniones y los debates coordinados por Manuel Clavero Arévalo, que era Ministro para las Regiones, de esta forma en los inicios del año 1978, se aprobó el primer proyecto de estatuto autonómico por la Junta de Parlamentarios, aunque se llevó a cabo con pocos puntos de unión entre centristas y las fuerzas de izquierda, por lo que fue necesario muy pronto negociar un nuevo texto, que se aprobó en el Consejo de Ministros el 2 de junio de 1978, es decir, justo un año después de aquella primera reunión de parlamentarios y senadores extremeños, por lo tanto ya se había elaborado un documento para que echara a andar el régimen preautonómico para la región, se constituyó la Junta Regional y en septiembre el diputado por UCD, Luis Ramallo García tomó posesión como máximo representante de la recién nacida Comunidad Autónoma de Extremadura. La falta de acuerdo, incluso de ruptura en algunos momentos, seguía produciéndose entre los dos partidos mayoritarios en la región, junto con un gran desinterés de gran parte de la población extremeña en cuanto al problema autonómico se refiere, Se optó después de innumerables reuniones y debates, por la vía del artículo 143 de la recién aprobada Constitución Española, ello posibilitó el poner las bases para la elaboración del Estatuto, donde volvieron a verse claramente las dos grandes realidades políticas de la región y que en muchos casos eran antagónicas, incluso salió a la luz la tradicional enemistad entre las dos provincias, Cáceres y Badajoz, debido principalmente al número de parlamentarios que tendría una y otra para la constitución del Parlamento Autonómico, llegándose al acuerdo que 35 correspondería a Badajoz y a Cáceres 30, en función del número de habitantes de una y otra provincia, de esta forma se reunió la Asamblea en Mérida el 12 de diciembre de 1981, en donde se aprobaba el Proyecto de Estatuto de Autonomía. En las elecciones de 1982, se asistía a la victoria del PSOE y al derrumbamiento del hasta entonces partido hegemónico en la región, UCD, dio lugar a que 9 parlamentarios pertenecieran al PSOE y 3 al nuevo partido, Alianza Popular, fundado por Fraga Iribarne, ante el deterioro que se estaba produciendo en las fuerzas políticas de centro. Lo mismo sucedió en las elecciones municipales y autonómicas de 1983, donde salió elegido Presidente de la Comunidad Juan Carlos Rodríguez Ibarra, cargo que sigue ocupando en la actualidad, después de 20 años en el ejercicio de poder en la Comunidad Extremeña, lo cierto es que ya no puede decirse lo que recogía A. Michaner, el escritor norteamericano y ganador del premio Pulitzer, cuando decía en su país que venía a Badajoz, le contestaban, “ Por Dios bendito, ¿por qué Badajoz? Allí no hay absolutamente nada.” (9). Ahora en Extremadura hay muchas cosas, es afortunadamente distinta, y es el momento de seguir el camino trazado, como dice el profesor García Pérez, “... en función de los rasgos auténticamente distintivos de Extremadura y los extremeños (estructuras socioeconómicas; carácter, mentalidad y sistema de valores), las bases de la personalidad regional sólo comenzaran a sentarse en el periodo bajomedieval, para afianzarse en los tiempos modernos y consolidarse de manera definitiva durante la contemporaneidad.” (10). Por lo tanto, a partir de que Extremadura entiende con más o menos acierto, la cultura y la identidad de esta región, también sucede que ha dejado de estar estancada demográficamente, no tanto por los nuevos nacimientos como por el regreso de los emigrantes ante este nuevo rumbo que está tomando la España de las autonomías, está creciendo económica y socialmente, tiene un ecosistema y unas cualidades ecológicas que la hacen envidiable con respecto a otras regiones con un ecosistema más degradado, estas son algunas de las bases para que en los inicios del siglo XXI, Extremadura tenga en el conjunto de las regiones de España el lugar que le corresponde después de muchos años de estancamiento y recesión, queremos aportar dos datos muy significativos del momento actual, “en el 2003 el 22,4% de la población extremeña ya es usuaria de Internet”, según los datos del último Estudio General de Medios y aportada por el periódico Hoy (11), el segundo dato que queríamos aportar es que en la Encuesta de Población Activa del 2º trimestre de este año en Extremadura el número de parados descendió un 15,90% y el de ocupados aumentó un 4,86%, la EPA sitúa a esta Comunidad Autónoma la segunda en generación de empleo, es importante que señalemos además que ha aumentado un 13,2% el número de mujeres trabajadoras frente al 4,86% a nivel nacional, es decir, la tasa de paro extremeño ha recortado las distancias que le separaba de la media nacional, situándose a 5,3 puntos mientras que en el año 2002 esta distancia se situaba en el 7,46 puntos, son algunos datos recogidos datos del periódico Hoy de 26 de julio de 2003. 3ª.- En la tercera parte abordamos el análisis de las poesías del libro de Antología de Poetas Extremeñas, lo haremos desde un planteamiento de género, que es aquellas formas tanto de conducta como de actitudes que son categorizadas por las sociedades sobre las cuales son más apropiadas para unas personas u otras en función del sexo, ello provoca jerarquización, es decir, las actividades realizadas por los hombres son de mayor importancia que las realizadas por mujeres, dando lugar a espacios distintos, los privados para las mujeres y los públicos para los hombres, aunque debemos decir que desde los finales del siglo XX vinieron determinados por la mayor conquista de todos los tiempos de espacios públicos por parte de las mujeres, sobre todo en los países de los llamados primer mundo o los que están en vías de desarrollo, pues todavía en el tercer mundo queda mucho por hacer. Es decir, no vamos a analizar el estilo, la técnica y si son buenas o malas las poesías, pues no somos críticos literarios, veremos los estereotipos de género que puedan darse, si hablan de la ternura, los hijos, el amor y el desamor, la ansiedad, la tristeza, la bondad. El candor, etc., y si estos temas son tratados como los trataría cualquier otro autor de poesía o por el contrario son temas recurrentes y podemos hablar de estereotipos.
La conquista de espacios antes reservados a los hombres por parte de las mujeres, es un hecho aunque queda mucho por hacer, sólo es necesario mirar a las mujeres en los países islámicos, que provoca que no se realice un verdadero desarrollo integral, que nos lleva a que se sigan perpetuando los modelos tradicionales que muchas veces da lugar a una ausencia de modelos femeninos en las diversas esferas de poder, ya sea político, económico o social, por lo que los estereotipos como los que hemos visto, son imágenes mentales muy simplificadas de personas o de grupos, estas imágenes son compartidas por una mayoría de población que generaliza y divide en categorías a la sociedad en función del sexo, que etiqueta y empobrece a esos grupos o personas y se impone como un cliché difícil de superar o borrar de las mentes de la sociedad, y conlleva la mayoría de las veces a una evaluación negativa de la imagen de la mujer, en el amplio sentido de la palabra, Askew en 1991, realizó una serie de adjetivos referidos al hombre como duros, fuertes, agresivos, independientes, valientes, sexualmente activos, racionales e inteligentes, para las mujeres les atribuía el ser amables, cariñosas, vulnerables, débiles, estúpidas, pasivas, dependientes e inmaduras (12). Como hemos visto los estereotipos de género, adquiere unos roles distintos para los hombres que para las mujeres, y tendríamos que ampliar todo el planteamiento que estamos haciendo, pues se da también en los niños y niñas más pequeños y en los y las jóvenes, pues estos papeles se desempeñan en la familia, en la escuela, en las profesiones, en el lenguaje, en la política, es decir, en la sociedad en su conjunto. A pesar de las investigaciones sobre los factores de cambio que pueden intervenir en el cambio de estereotipos, la realidad es que todavía las sociedades desde las más avanzadas a las menos, siguen produciendo estereotipos de género y que son difíciles de erradicar a pesar de que existen factores de cambio, como por ejemplo que las personas se alejen y que repitan las características estereotipadas que hemos visto, las instituciones tienen que intervenir, por medio de campañas a favor del cambio, los medios de comunicación y a través del lenguaje, y creemos que la escuela y las familias tienen mucho que hacer en este sentido, para crear modelos que no sean sexista y estereotipados. Para encontrar dichos modelos hemos buscado en cuatro obras de literatura, la primera el tomo III de Manuel Pecellín Lancharro, “Literatura en Extremadura, Escritores Contemporáneos (1939-1982)”, y dentro del género de poesía, la segunda el tomo Iv de la obra coordinada por J.Mª. Díez Borque, “Siglo XX”, la tercera “Historia de la Literatura Española” de G.G. Brown, y la cuarta, es el coordinador Javier Gutierrez Palacio, de “Historia de la Literatura”, hemos elegido estas obras porque están en el fondo bibliográfico de la Biblioteca de la Facultad . Nos hemos encontrado que en la obra de Pecellín, sólo aparece Pureza Canelo Gutiérrez, y en un apartado en el que hace una pequeña relación de poetas de un próximo futuro, no aparece ni una sola poetisa, bien es verdad que el texto termina en 1983, que quizás no alcanza el tiempo en el que estas mujeres han visto publicada parte de su obra. Pureza Canelo, al que el autor llama poetisa y dice de ella analizando su obra, “...balbuceos típico en obras iniciales”, (13), palabras que no hemos encontrado en el análisis de los poetas, como Álvarez Lencero, Manuel Pacheco o Delgado Valondo por sólo poner unos ejemplos y que suponemos que en los inicios de cualquier profesión siempre existen balbuceos debido principalmente a la inexperiencia, y Gerardo Diego dijo de ella “milagro natural de la poesía”, en 1980 obtuvo el premio “Juan Ramón Jiménez” para poetas menores de 40 años y por obra publicada, consigue el Premio Adonais en 1970. En la segunda obra que hemos analizado aparecen más mujeres como Concha Méndez, Rosa Conde, Gloria Fuertes etc., pero en vez de enumerarlas hemos realizado un recuento de nombres de mujeres que aparecen, siguiendo el mismo esquema del autor, con el resultado siguiente: de 1.467 nombres 93 son nombres de mujer, es decir el 6,33%, en el apartado La Prosa Narrativa hasta 1936 hay 10 mujeres, en La Poesía hasta 1936, son 6 las mujeres que aparecen, El Teatro hasta 1936, una, en La Prosa Narrativa desde 1936 son 9 mujeres, en La Poesía desde 1936 están documentadas 15 mujeres, en el apartado El Teatro desde 1936 son 8 mujeres, y por último hemos realizado un apartado en donde hay nombres de mujeres pero que no son ni poetisas, ni escritoras de teatro, ni de prosa narrativa, en este apartado encontramos 44 mujeres, son actrices, directoras de teatro, cantantes, sociólogas de la literatura, críticas, científicas, pintoras, hispanistas, etc. (14) Como curiosidad en la tercera obra, no hemos encontrado ningún nombre de mujer, aunque también tenemos que constatar que tampoco están todos los autores del siglo XX. (15) En la cuarta obra, vemos en la introducción que nos dice, “El lector encontrará en la presente antología un panorama completo de la literatura española del siglo XX...” (16), en el Índice de Autores hay 146 nombres de los que 11 son mujeres, bien es verdad que esta obra ha sido realizada teniendo en cuenta los programas de COU y teniendo presente las reformas que contemplaba la LOGSE, lo cierto es que los libros que tenemos en nuestras aulas y de cualquier materia que se trate existe un “olvido” de mujeres científicas, creadoras de arte, protagonistas de la Historia, poetisas y escritoras, el coordinador de la obra achaca el que no aparezcan todos los nombres al espacio que tenía que tener el libro, y por lo tanto reduce toda referencia a las pocas poetisas que aparecen en ella, volvemos por lo tanto a quedarnos sin modelos femeninos, “las mujeres son definidas como no artistas por considerarse que carecen de genio y la ausencia de genio en las mujeres se postula a partir de la narración de sus vidas que se presentan siempre como supeditadas a la de otro u otros y carentes de las vicisitudes que pueblan la vida de los genios” (17). Por lo tanto, los temas y los géneros dentro de la Literatura, la mayoría de las veces se han realizado según unos criterios jerárquicos, es decir, los temas cultivados por las mujeres se han considerado, salvo en algunas excepciones, como inferiores con respecto a los temas tratados por los hombres, de esta forma se produce una ocultación o el silencio para muchas artistas de la lengua, que ha impedido que las mujeres tengan modelos en donde asentar sus necesidades creativas y literarias, y por otra parte se transmite una visión
androcentrica, pues la visión del mundo se basa en las experiencias de los hombres y estas se universalizan enmascarando las experiencias y las oportunidades de las mujeres. 4ª.- En la cuarta parte de nuestra comunicación, aportaremos la visión de las poesías y las pinturas realizadas por estas treinta y una mujeres extremeñas. Para el análisis de la parte pictórica hemos contado con la ayuda del profesor de la Facultad de Educación, don Zacarías Calzado Almodóvar, le hemos pedido que nos diera su visión de las pinturas y si en ellas, veía alguna característica que identificara que eran obras realizadas por mujeres, las respuestas, que le agradecemos desde aquí, fueron más o menos las siguientes: En general los dibujos no tienen ninguna relación con las poesías y no hacen una descripción literaria de los dibujos, a pesar de que el prologuista de la obra que estamos analizando nos dice “... que ilustra de magníficos retazos el alma de los poemas”, además nos comentó que no encontraba ninguna característica especial en estas pinturas realizadas por mujeres y que el libro estaba bien y correctamente ilustrado. El dibujo de la portada, realizado por Sara Samino, lo considera bien compuesto, diseñado y armónico, intimista sintético y no analítico, A pesar de estar rectificado no es directo, pero a la artista no le importa. Los 29 dibujos de Victoria Guill, nos dijo el profesor Calzado que, son sintéticos, de factura directa, de expresionismo simbólico, la madre con el hijo, la serpiente, etc., hay estampaciones y acuarelas, aparece la mano que es una de las primeras representaciones gráficas de la Prehistoria. “¿Influye al poema la voz de mujer? Y el que sigue suscribiendo se sonroja ante la paparruchada reflexionada, parque nunca creyó en una literatura de sexos, de machos y hembras, que ponga coto y señas de identidad en el proceso creador. Por el contra, sí, se singularizan voces propias, experiencias íntimas y personales, que son las que se retratan en estas páginas, paridas, hasta que el sentimiento se hace verso y, tras enroscarse de sutiles formas, se convierte en poema ¿Y extremeñas? Un accidente esencial, una forma de ver la realidad, común a todas, donde se busca más el frescor de la encina que los vaivenes del olmo, porque el alma se revistió más de corcho, mucho más desde siempre”. (18) Hemos querido hacer la cita completa, que escribe Juan Capote en el prólogo de la obra, pues nos contesta a algunos de los interrogantes que nos planteamos en el análisis de 29 poetisas extremeñas, de igual forma que el espacio condiciona y posibilita a las personas, la poesía hecha por mujeres, tienen un sello de identidad propio, tal como nos ha dicho Trinidad Ródenas Alcón. Es normal que las personas que escriben poesía desde Extremadura canten más a una encina que a una palmera tropical, que la jara sea una planta más simbólica para escribir desde esta tierra, que las orquídeas de la selva amazónica, que se poetice sobre las cigüeñas que sobre el cóndor, de la misma forma la mujer, no la hembra, ve el mundo desde otra perspectiva que el varón, no el macho. No hemos encontrado claros estereotipos de mujer en los diversos poemas, no escriben pasivamente, no son caprichosas etc., no están irascibles, sólo lo necesario, como cuando Milagros escribe en contra de los Horrores de Guerra, “Carraspeos incontrolables/ huevos corrompidos...”, sin embargo también escribe sobre amores y desamores como, “Hablé despacio sobre tu hombro y/ una lágrima brotó de mi nube...”, como el poema de Ana, Encantada mi amor, “Encantada mi amor./ ya lo sabía.../ El desnudo de tu alma vislumbré/ hace tiempo, mi amor./ Te presentía.” El poema de Carmen dice, “He regresado al parque donde nos conocimos,/ era una tarde de cantos amarillos/ tú mirabas la turba de gritos infantiles/ y yo me demoraba en tus piernas eternas...” Nadie como ellas podrán hablar de lo femenino, como “es la femenina cintura donde se borran/ los límites y habita la calma;/ donde se destrezan los llantos y el pesar/ es un alboroto de golondrinas doradas...”, también de Milagros, o cuando Rosa canta Milagro Femenino, dice, “Llovía en tu mirada el último paisaje/ de todas las mujeres que fueron invisibles./ Antes de esto nada había existido:/ ni árbol, ni casa de corteza, ni pequeño fruto/ jugoso de dicha...” o el poema Maternidad de Victoria, “Tú flotas entre sueños, te revuelves/ En ese vendaval de aguas templadas./ Quizás oyes conmigo cada verso...” Nadie como ellas cantan a los hijos, es decir, con sus poemas estas poetisas cantan las esperanzas, los horrores, las desazones y el olvido, nadie como ellas expresan sus emociones más íntimas Entrevista con la poetisa Doña Trinidad Ródenas Alcón. - Otros datos biográficos: Además de los datos que hemos proporcionado anteriormente, nos dice que es “extremeña de pura cepa” y desde hace un tiempo ateneísta, pues considera que el Ateneo es un lugar de libertad y donde a las personas se les escucha cuando hablan, está ilusionada con el recién recuperado Ateneo de Badajoz. Nos comenta que a las mujeres que escriben poesía, no les gusta que les llamen poetisas, que les recuerda a las plañideras. - P: ¿Desde cuándo empezaste a escribir poesía y por qué? R: A los catorce años más o menos, con esos primeros amores de adolescencia, pero que luego poco a poco se continua como un oficio, pues la poesía hay que ejercitarla, no sólo es inspiración, sino que detrás hay horas de mucho trabajo, hay unos días que la poesía fluye y otros en los que escribes un renglón y ya no puedes seguir, sin embargo ese renglón está ahí. Nos comente que cuando estaba en la Universidad, había unos premios en los suplementos de los periódicos regionales “mandé algún poema y me lo publicaron, ello me animó, y me lo plantee más en serio aproximadamente a los 25 años en que me dediqué a ello, como te he dicho antes, como un oficio, yo todos los días un tiempo lo dedico a escribir, también se necesita una cierta disciplina”. - P: ¿La poesía está valorada en relación a los otros géneros, en nuestra sociedad extremeña?
R: La poesía sabemos que es un género literario de minorías, aquí en Extremadura y en todas partes, es como decía Juan Ramón Jiménez, escribo par la inmensa minoría. La esencia de la poesía es conmover y emocionar, decía Julio Cienfuegos, a esos rengloncitos cortos que poco respeto se les tiene. Es verdad que la poesía no es una lectura fácil, sin embargo “salen poetas como chinches”, pero la poesía, como toda obra de arte, tiene que tener calidad, y luego están los “protegidos”, lo que hace que la poesía o la escritura en general no sea libre, pues ahora mismo la cultura en nuestra región, está gestionada por un partido político y para la creación no debe haber seguidismo político ni ideológico, independientemente de las ayudas que se les pueda dar a los que escriben o crean, “pero no estoy de acuerdo en subvencionar a escritores para que escriban, liberarles y pagarles, es una opción muy criticada por muchos colegas, sobre todo los que caminamos “por libre”, aunque es un gran problema el que te publiquen tu obra, que nos gusta por otra parte que se conozca, esta es la cruda realidad de la poesía en Extremadura, que está en cierto modo secuestrada. Se atiende más a otros géneros más que a la poesía”. - P: ¿No te parece que el teatro y la novela tienen dentro de los autores extremeños más prestigio social? R: Como te decía antes, sobre todo el teatro está muy arraigado en la sociedad de nuestra Comunidad Autónoma, y que además ha traspasado las “fronteras” extremeña, Miguel, Jorge, Manolo, y en la novela, Javier cercas, Dulce y sin embargo hay también grandísimos poetas, como Pureza, Dulce, Mª José Flores, Rufino Felix Morillón, Castelo, la poesía culta de Delgado Valondo y la poesía surrealista de Manuel Pacheco o la social de Álvarez Lencero. La poesía es buscar algo nuevo, que a veces se hace hermético para romper con lo tradicional, sin embargo las fuentes anteriores están ahí, vuelve la poesía de siempre, buscar el lado oculto de la palabra, “pellizcar el sentimiento” nos dice Trini. Es a veces muy difícil decir mucho en pocas palabras, con musicalidad y con técnica, que hoy en día no se respeta, esa poesía minimalista, por ejemplo. El lector de poesía, creo, busca respuestas más que en otro género, pues comunica más. Pero lo que tenemos que saber sobre todo, es saber distinguir al buen poeta del mal poeta. - P: ¿Crees que existe una poesía de mujeres y una poesía de hombres? ¿Por qué? R: No creo que haya que negar la esencia de ser mujer cuando se escribe, tenemos una forma de narra de poetizar, y negar esto es quizás la mayor discriminación de “ella a ella misma”, hay mujeres que quieren encubrir para que no parezca hecha por mujeres, debemos no renunciar a nuestra identidad, sabemos que la poesía es universal, pero la forma de tratarla es donde reside su peculiaridad, yo creo que la mujer expresa más la profundidad que la superficie del sentimiento, la poesía camina por sí sólo, la gracia que no quiso dale el cielo, que diría Cervantes. Muchas gracias Trinidad, por estas reflexiones que nos has hecho. NOTAS: (1) ABC, 28 de julio de 2003, p. 45 (2) Feminario de Alicante (1987): “Elementos para una educación no sexista. Guía didáctica de la coeducación”. Alicante: Víctor Orenga ediciones, p. 69. (3) Torres Nebreda, G. 1993: “Carolina Coronado” . Mérida: Editora Regional de Extremadura, vol. I, p. 35 (4) Pilar García Mouton, (2003): “Así hablan las mujeres. Curiosidades y tópicos del uso femenino del lenguaje”, Madrid: La Esfera de los Libros, p. 218. (5) pp. 209 y 210, en Pilar García Mouton. (6) Domínguez Ortiz, A. (2001), “España, tres milenios de Historia”, Barcelona: Marcial Pons, (6ª reimpresión) (7) p. 365, en Domínguez Ortiz. (8) García Pérez, J., Sánchez Marroyo, F., y Merinero Martín, Mª J., (1985): “Historia de Extremadura, los tiempos actuales”, tomo IV , Badajoz : Universitas Editorial. p. 1039. (9) “Extremadura vista por...”, Antología y presentación de los textos por Manuel Pecellin Lancharro, (1985), Biblioteca Popular Extremeña, Badajoz: Universita Editorial, p. 146. (10) García Pérez, J. (1998): “El problema de la personalidad regional. Algunas reflexiones sobre los elementos configuradores de la identidad colectiva en Extremadura”. Alcántara, Extremadura como problema, 13-14, p. 61. (11) Periódico Hoy, 27 de julio de 2003, pp. 12 y 13. (12) Askew, S. (1991): “Los chicos no lloran”, (ed. revisada), Barcelona: Paidos. (13) Manuel Pecellín Lancharro, (1983): “Literatura en Extremadura, Escritores Contemporáneos (1939-1982)” Tomo III. Badajoz: Universitas Editorial, p. 262. (14) Díez Borque, J. Mª: “Siglo XX”, tomo IV. Madrid, Taurus. (15) G.G. Brown (1979): Historia de la Literatura Española. El Siglo XX, 6ª ed. Barcelona : Ariel . (16) Gutierrez Palacio, J. (coord.) (1994): “Historia de la Literatura Española. Siglo XX”. Madrid: Tiempo. p. 19. (17) Porqueres, Bea. (1994): Reconstruir una tradición. Las artistas en el mundo occidental. Madrid: horas y HORAS, p. 21. (18). Ramos López, M. M. (2001): “Antología de Poetas Extremeñas”. Junta de Extremadura, p. 7.