Suplemento Pensión 65

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SUPLEMENTO ESPECIAL Año 1. Nro 1. Febrero 2013

Pensión 65:

Una promesa hecha realidad

Ya no están solos, el Estado los protege Monseñor Luis Bambarén:

Pensión 65 es un deber de justicia

Ministra CarolinaTrivelli:

“Los adultos mayores son nuestra prioridad”

Pensión 65, tranquilidad para más peruanos


SUPLEMENTO ESPECIAL

Pensión 65 puso al adulto mayor pobre en la agenda nacional En sus primeros quince meses de ejecución, el Programa Nacional de Asistencia Solidaria - Pensión 65 ha permitido visibilizar a un sector de la población que se encontraba excluido y ha hecho que aquellos que se negaban a ver la realidad de los adultos mayores en situación de pobreza extrema, vuelvan sus ojos hacia quienes no tenían un espacio reconocido ni por el Estado ni por la sociedad, que ahora empieza a valorarlos como corresponde. En base a compromiso y esfuerzo, Pensión 65 tuvo un vigoroso crecimiento en el 2012 y ahora, a febrero del 2013, se cuenta con 253,661 usuarios en todas las regiones y con presencia en 1,586 distritos de todo el país. Desde el último trimestre pasado, el programa comenzó a llegar a las regiones de la selva, así como a las comunidades nativas desprotegidas. En su objetivo por ir más allá de la subvención económica que entrega a sus usuarios, Pensión 65 generó toda una dinámica de servicios y un trabajo articulado de diversos sectores del Estado. De esa manera, durante el 2012, se realizaron 44 campañas de salud en distintos puntos de pago a nuestros usuarios, en coordinación con el Ministerio de Salud y las Diresas de cada región, así como dos campañas de operación de cataratas en Puno y Apurímac. Además orientó sus esfuerzos a que los adultos mayores en pobreza extrema sean revalorizados al interior de su comunidad y reconocidos como los guardianes de sus tradiciones y saberes ancestrales. Ya se realizó una experiencia inicial en Calca y se tiene previsto continuar con intervenciones en San Martín y Ayacucho. Otro eje importante en la consolidación del programa lo constituyen los equipos territoriales de Pensión 65 desplegados en todas las regiones del país desde octubre pasado, una decisión fundamental para lograr el acercamiento del programa con sus usuarios, sus familias y la ciudadanía en general y para supervisar los procesos de afiliación en las regiones. Los jefes y coordinadores territoriales, junto a los promotores y los técnicos de atención al usuario, son la cara de Pensión 65 hasta en las comunidades más alejadas de todo el país y permiten consolidar lazos importantes con los gobiernos locales con quienes trabaja el Programa. Para el 2013, una tarea importante es mejorar la calidad de atención al usuario, disminuir al mínimo las filtraciones y mejorar los niveles de cobertura para que reciban la subvención económica que entrega el Estado los adultos mayores que más la necesitan. Si bien es importante la subvención económica que se entrega a los usuarios cada dos meses por el impacto que ha generado en nuestra población objetivo, lo trascendental es que se ha logrado que esta población vulnerable sea visible y ejerza su ciudadanía, al ser escuchada y atendida por el Estado en su conjunto.

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Dirección Ejecutiva Programa Nacional de Asistencia Solidaria Pensión 65

Contenido Página 4:

¿Qué es Pensión 65?

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Entrevista con la ministra Carolina Trivelli

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La realidad que no queríamos ver

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Monseñor Bambarén: Pensión 65 es un deber de justicia

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Atención en salud mental para adultos mayores

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Paso a paso, los procesos de Pensión 65

Decisión de Estado en beneficio de la población más vulnerable

Promesa cumplida

Página 13:

Pensión 65 ha logrado hacer visible a una población marginada y ha cambiado la vida de 253,661 adultos mayores en extrema pobreza que hoy reciben una subvención de 250 soles cada dos meses.

Página 14:

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La cara de Pensión 65 en las regiones

Más saludables, tranquilos y queridos

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La decisión que les cambió la vida. Testimonios Febrero 2013. Edición general: Unidad de Comunicación e Imagen Institucional del Programa Nacional de Asistencia Solidaria Pensión 65. Calle Miguel Seminario 190, San Isidro, Lima. www. pension65.gob.pe / comunicaciones@pension65. gob.pe Teléfono: 221-6325. Fotos: Programa Nacional de Asistencia Solidaria Pensión 65 / MIDIS / Archivo La República. Diseño, diagramación e impresión: Grupo La República Publicaciones S.A.

l Programa Nacional de Asistencia Solidaria - Pensión 65 es una promesa hecha realidad, es el reflejo de la voluntad política y una decisión del Estado por incorporar y hacer justicia a un sector de la población permanentemente excluido y vulnerable, los adultos mayores de 65 años que viven en condición de extrema pobreza y que pese a haber trabajado toda su vida no lograron acceder a una pensión en la última etapa de sus vidas. Pensión 65 ha logrado hacer visible a una población marginada, ha cambiado la vida de 253,661 adultos mayores en extrema pobreza, quienes hoy reciben una subvención económica bimestral que les permite mejorar su calidad de vida y sobre todo, ha puesto en la agenda pública la necesidad de atender a esta población vulnerable no solo por la edad, sino también por la pobreza.

Pensión 65 fue una promesa del presidente Ollanta Humala en la campaña electoral de 2011 que de inmediato punzó en la herida abierta y generó mucha expectativa entre los peruanos y peruanas que por años vivieron en el olvido más profundo. Hoy es una realidad palpable, tras poco más de un año de trabajo se han superado las metas previstas en cuanto a cobertura y ahora la tarea es afinar los niveles de eficiencia y reducir la subcobertura para incluir a todos los adultos mayores que requieren el apoyo del Estado para mejorar su calidad de vida y acceder a una vida digna.

Pensión 65 ha avanzado muchísimo desde su creación pero queda aún mucho por hacer.

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Tranquilidad para más peruanos

Pensión 65 ha puesto en agenda a los adultos mayores en extrema pobreza.

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l Programa Nacional de Asistencia Solidaria - Pensión 65 fue creado el 19 de octubre de 2011, mediante Decreto Supremo Nº 081 -2011 – PCM, y nació con la firme convicción de cambiar la situación de vulnerabilidad de los adultos mayores en pobreza extrema del país. Para gran parte de la sociedad, los adultos mayores más pobres han permanecido invisibles por décadas y han sido pocas las autoridades que demostraron una real preocupación por esta población vulnerable y su futuro. Pensión 65 entrega a sus usuarios una subvención económica de 250 soles cada dos meses. Recursos que permiten a los adultos mayores empezar a mejorar su alimentación, ayudar a su familia y alcanzar la tranquilidad que tanto necesitan. Además de la subvención económica que entrega, Pensión 65 realiza las coordinaciones necesarias para que sus usuarios puedan acceder permanentemente a los servicios de salud del Estado, y participan en campañas gratuitas durante los días de pago de las pensiones. Otro de los servicios complementarios que promueve Pensión 65 para sus usuarios es la revalorización de los adultos mayores a través del reconocimiento de sus saberes tradicionales. Pensión 65 es visto por la ciudadanía en general y por los especialistas en el tema, como un acto de justicia con esta población vulnerable que trabajó y se esforzó por sacar adelante a su familia, pero que por diferentes motivos terminó olvidada y abandonada en muchos casos. Más allá de entregarles una subvención económica que merecían desde hace mucho tiempo, Pensión 65 ha conseguido que los adultos mayores más pobres del país sepan que no se encuentran solos, que ahora son visibles, que son ciudadanos y que sientan la tranquilidad necesaria en esta etapa de su vida. Pero además la intervención de Pensión 65 ha logrado poner en la agenda nacional a esta población vulnerable y que la sociedad en su conjunto entienda que su futuro y bienestar es responsabilidad de todos.

Evaluación del impacto La evaluación permanente del impacto del programa en sus usuarios fue una necesidad prevista desde la concepción de Pensión 65. Por ello, el Ministerio de Economía y Finanzas asignó un presupuesto para esta tarea y se realizó el levantamiento de la línea base que permitirá conocer cuál es el impacto de la subvención económica que entrega el Estado en los adultos mayores en pobreza extrema. Para el levantamiento de la línea base de Pensión 65 fueron evaluadas 3,616 personas entre octubre y noviembre del año pasado. A ellos se les hizo 371 preguntas en un cuestionario denominado “Encuesta de Bienestar y Salud del Adulto Mayor”. El levantamiento de los datos en campo estuvo a cargo del INEI, y los resultados se darán a conocer durante el primer semestre de 2013. El diseño e implementación de la evaluación de impacto del programa es coordinado por un equipo técnico conformado por la Dirección de Calidad de Gasto Público de la Dirección General de Presupuesto Público del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), la Dirección de Evaluación de la Dirección General de Seguimiento y Evaluación del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social, y Pensión 65; y se conocerá el primer trimestre del 2014 tras un año de desarrollada la línea de base.

Perfil de nuestros usuarios • El 89% de los usuarios habita viviendas con piso de tierra.

• El 88% de los hogares con usuarios utiliza leña, bosta o estiércol como combustible para cocinar.

• El 75% de los usuarios vive en casas con pare• • • • •

des de adobe o tapial, piso de tierra y techo de tejas, calamina o paja. El 69% vive en el ámbito rural. El 53% de los usuarios no tiene ningún nivel de instrucción en el sistema educativo. El 36% presenta algún tipo de discapacidad. El 27% de usuarios aún utiliza vela como alumbrado. El 29% de los usuarios tiene como fuente de agua el río o acequia, y también el 29% vive en viviendas sin acceso a servicio higiénico.

Requisitos para ser usuario de Pensión 65

• Ser mayores de 65 años de edad. • Contar con DNI vigente. • Vivir en situación de pobreza extrema, de acuerdo a

la clasificación realizada por el Sistema de Focalización de Hogares (SISFOH). • No recibir ningún tipo de pensión, ni estar en EsSalud. • No pertenecer a ningún Programa Social, con excepción del Seguro Integral de Salud (SIS), el Programa Nacional de Apoyo Directo a los más Pobres “JUNTOS”, Programas de Alfabetización, Programa de Reparaciones y Programa de Asistencia Alimentaria. • Presentar una Declaración Jurada de cumplimiento de requisitos consignando la dirección actual.

Fuente: Dirección General de Seguimiento y Evaluación del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social

Servicio con calidad y calidez 4

El propósito principal de Pensión 65 es dotar a los adultos mayores de 65 años en extrema pobreza de un ingreso monetario que es entregado cada dos meses y que permite atenuar su vulnerabilidad social. Con la entrega de estos recursos se busca mejorar su calidad de vida, pero para hacer esto posible es necesario que se realicen otras acciones coordinadas a niveles intersectorial e intergubernamental. La entrega de esta subvención económica debe realizarse de manera oportuna, sin generar molestia e incomodidad a los usuarios que en muchos casos deben invertir mucho tiempo y hasta dinero para llegar a los puntos de pago. La calidad con la que se atiende al usuario al momento de cumplir con el pago de las pensiones es un tema en el que trabaja constantemente el equipo de Pensión 65, con la finalidad de conseguir la satisfacción total del usuario.

Ministra de Desarrollo e Inclusión Social, Carolina Trivelli:

"Los adultos mayores excluidos son nuestra prioridad" LaMinistradeDesarrolloeInclusiónSocial,CarolinaTrivelli,expone la estrategia del Estado para lograr el crecimiento con inclusión social y mejorar la calidad de vida de los peruanos, entre ellos los adultos mayores de 65 años en extrema pobreza. ¿Qué representa en la sociedad peruana el papel que ha asumido el MIDIS para hacer que más hombres y mujeres pobres sientan que también son importantes para la nación? El rol del MIDIS es velar porque todos los ciudadanos y ciudadanas, sin importar su condición socioeconómica ni su lugar de nacimiento o residencia, reciban los servicios públicos que les corresponde por derecho; pero también se ocupa de promover mejores oportunidades de desarrollo y de que la población en situación de pobreza y vulnerabilidad alcance una vida plena. Por ello, partimos por reconocer como ciudadanos plenos a todos y todas las peruanas, para luego revisar qué servicios ofrece el Estado a cada grupo de pobladores, qué falta y, sobre todo, qué servicios no están llegando a las poblaciones en mayor pobreza y vulnerabilidad. Con ello proponemos acciones que permitan atender a todos con los servicios de calidad a los que tienen derecho. Así, el centro de atención para el MIDIS está en las poblaciones más pobres y vulnerables; en la búsqueda de que puedan ejercer sus derechos y cuenten con oportunidades para salir adelante. ¿Por qué es tan importante que el Estado se preocupe de los adultos mayores en extrema pobreza, y a qué contribuye haber puesto el tema en la agenda nacional? En el Perú, un país con elevados niveles de informalidad, muchos de nuestros adultos mayores, que han trabajado durante toda su vida, no cuentan con una pensión que les permita cubrir sus necesidades mínimas. Por ello, hemos comenzado a atender a aquellos en mayor necesidad; es decir, quienes se encuentran en situación de pobreza extrema. No se trata sólo de darles una pensión, se trata de mejorar sus condiciones de vida, de reconocer el aporte que han hecho al país, a sus comunidades y a sus familias, y de asegurar mecanismos que permitan al Estado llegar mejor a este grupo. ¿Cómo evalúa el programa a poco más de un año de iniciada su ejecución? La construcción de Pensión 65 es un proceso. Como cualquier proceso que se inicia existen problemas; pero, cuenta con muchos logros. Hoy tenemos un equipo territorial en cada región y una estrategia de articulación con actores locales y de otros sectores, especialmente salud y cultura. Pensión 65 ha avanzado muchísimo desde su creación; sin embargo, queda aún mucho por hacer.

¿Cuáles son los logros más importantes y cuáles los temas que se deben ir mejorando en el camino? Uno de los principales logros del programa es que ya atendemos a más de 240,000 adultos mayores en más de 1,500 distritos. Sin embargo, aún nos queda trabajo por hacer para llegar a todos aquellos que lo necesitan. Es decir, tenemos que reducir la subcobertura, estamos trabajando para que todos los que deben recibir el programa efectivamente lo reciban. Al hacerlo, tenemos que tener cuidado con las filtraciones, aquellas personas que no cumplen los requisitos para ser parte del programa no deben ser usuarios de este. Asimismo, tenemos que fortalecer la articulación con una oferta de servicios relevante para los adultos mayores. Un ejemplo concreto de ello son las articulaciones con los servicios de salud. El 2012, más de 15,000 usuarios han sido atendidos en 44 campañas de salud y cerca de 200 adultos mayores fueron operados de cataratas.

“No se trata sólo de darles una pensión, se trata de mejorar sus condiciones de vida, de reconocer el aporte que han hecho al país, a sus comunidades y a sus familias, y de asegurar mecanismos que permitan al Estado llegar mejor a este grupo”. ¿Cómo hacemos para evitar las filtraciones en el programa y cómo logramos que los adultos mayores más pobres se beneficien con la subvención económica que entrega el Estado? Las filtraciones por problemas en la clasificación socioeconómica se resuelven en el marco del Sistema de Focalización de Hogares (SISFOH). Esto es relevante sobre todo para mejorar los procesos de afiliación. Pero, desde Pensión 65 las filtraciones se reducen con mayor cercanía de los equipos (visitas, seguimiento y provisión de servicios complementarios) y con un estrecho trabajo con los actores locales. Pero, también con castigos a quienes tratan de aprovechar indebidamente el programa: denuncias, procesos judiciales y visibilización de aquellas personas que intentan aprovecharse del programa indebidamente. Tenemos una línea gratuita (0-800-11-007) a la que el ciudadano puede llamar desde cualquier punto del país para denunciar irregularidades.

¿Qué es lo que va a priorizar este programa social para el 2013? La tarea durante este año es consolidar la presencia del programa en el territorio y ofrecer la pensión con un paquete de servicios públicos que se traduzca en mejor calidad de vida para nuestros adultos mayores; luego de ello retomaremos la senda de expansión hasta atender a todos los adultos mayores en situación de pobreza extrema del país.  ¿Cuáles son las metas proyectadas para Pensión 65 en 2013? Nuestra meta el 2013 es llegar a más de 290,000 usuarios a lo largo de todo el país. ¿Cuál es su mensaje para los peruanos que participan en Pensión 65, y para la ciudadanía en general sobre la importante labor que cumple este programa social? En primer lugar, debemos hacer un reconocimiento a nuestros adultos mayores que han dado toda una vida de trabajo para que el Perú de hoy sea un país que crece, que mejora, que está enfocado en ofrecer oportunidades de progreso para todos. Lo que tenemos hoy no hubiera sido logrado sin el trabajo de todos nuestros adultos mayores. En segundo lugar, quiero dar un mensaje a los miles de peruanos y peruanas que forman parte de Pensión 65. Quiero decirles que ustedes no están solos, ustedes son una prioridad para nosotros. Finalmente, es importante que todos seamos conscientes que Pensión 65 no trata únicamente de una transferencia de dinero. Pensión 65 tiene como una de sus prioridades la articulación con programas de salud para que los adultos mayores puedan vivir mejor, y también con otros actores para potenciar su rol como creadores y guardianes de la cultura cotidiana de sus pueblos.

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Presentes en todas las regiones del Perú

Pensión 65: La esperanza de los más pobres Ya no están solos, el Estado los protege

La realidad que no queríamos ver

Los pensionistas urbanos tienen mayores probabilidades de sobrevivencia que los no pensionistas rurales. Este dramático panorama es el que se planteó cambiar el presidente Ollanta Humala.

Pensión 65 está presente en 201 de los 209 distritos identificados como pobres extremos en las 24 regiones del país.

Las frías cifras nos demuestran la cruda realidad que nos resistimos a ver. Con la ayuda de las proyecciones de población por región del INEI del 2010, podemos observar que de 100 personas de Lima que en el 2012 tienen 65 años, habría 74 que llegarían vivas al 2025. Mientras que en Huancavelica, de 100 personas sólo 48 sobrevivirán hasta el 2025. No hay mucho análisis que hacer, es muy alta la asociación entre mayor pobreza y mortalidad de adultos mayores. Este panorama nada alentador es el que se planteó cambiar el presidente Ollanta Humala cuando se comprometió a entregar una pensión a los adultos mayores más pobres de todo el país. El tema del cuidado al adulto mayor en extrema pobreza está entre los más importantes de la agenda nacional. Esta vez, la gran mayoría de la ciudadanía ha volteado la cabeza, pero ya no tapándose los ojos, sino para mirar con atención a esta población vulnerable que también tiene derecho a una vida digna.

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n el primer semestre de 2012 se programó intervenir en 908 distritos, pero se logró afiliar a usuarios en 990 distritos, lo que demuestra una cobertura muy eficiente que llegó al 109%. Mientras que en el segundo semestre, luego de ampliada la meta de Pensión 65, se proyectó la intervención en 1,416 distritos, objetivo que también fue superado y se llegó a 1,555 distritos en todo el Perú, alcanzando una cobertura del 109.8%. Hasta febrero de 2013, el programa cuenta con usuarios en 1,586 distritos de todo el país. De los 1838 distritos que existen en el país, se logró intervenir en 1555 durante el año 2012, es decir, en el 84,6% del total de distritos a nivel nacional. De los 209 distritos identificados como pobres extremos en las 24 regiones del país, Pensión 65 tiene presencia en 201 de ellos, lo cual representa un 96,2% de intervención en zonas de extrema pobreza. Hoy Pensión 65 se encuentra en todas las regiones del país y busca este año mejorar sus niveles de eficiencia y reducir la subcobertura a fin de llegar a más peruanos excluidos.

Tumbes: 326

Loreto: 3,288

Piura: 16,326 Lambayeque: 2,124

Amazonas: 6,079 Cajamarca: 22,407 San Martín: 1,262

La Libertad: 16,668 Huánuco: 20,485 Ucayali: 527 Pasco: 3,441

Ancash: 16,694

Lima: 7,209

Junín 11,211

Callao: 502 Huancavelica: 15,084 Ayacucho: 21,957

Madre de Dios: 71 Cusco: 23,022 Apurímac: 19,044

Ica: 2,413

Puno: 40,721 Arequipa: 1,649 Moquegua: 685

A febrero del 2013, Pensión 65 ya tiene 253,661 usuarios.

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Tacna: 466

La subvención económica que cada dos meses entrega Pensión 65 a sus usuarios representa un cambio en sus vidas. Antes de que exista este programa social, los adultos mayores en extrema pobreza estaban olvidados por el Estado y no podían acceder a los servicios de salud. Hoy con Pensión 65, estos adultos mayores cuentan con recursos para acceder a una mejor calidad de vida. Ellos saben que ya no están solos y que son importantes para la sociedad. Pensión 65 inició su intervención priorizando Apurímac, Ayacucho, Huancavelica, Puno, lca y Huánuco, regiones cuyo nivel de pobreza es superior al 50%, según cifras de INEI. Sin embargo, Pensión 65 avanzó rápidamente y hoy se encuentra en todas las regiones del país. La primera meta de Pensión 65 en afiliación fue superar los 167 mil adultos mayores beneficiados a fines de 2012. Con el esfuerzo de todo el equipo, el objetivo fue alcanzado en julio e inmediatamente se formuló la meta siguiente: 247,673 afiliados al cierre del año.

En el segundo semestre de 2012, Pensión 65 desplegó todos sus esfuerzos por llegar a más adultos mayores que necesitaban el apoyo económico del Estado. Desde octubre pasado, se conformaron los equipos territoriales que se trasladaron a todas las regiones del país y cumplieron un rol importante en la expansión del programa y en la supervisión de los procesos. Ellos son la cara del programa en las comunidades más alejadas del país en costa, sierra y selva, y han contribuido a fortalecer los lazos con los usuarios, sus familias y la ciudadanía en general. Paralelamente, se optimizaron los procesos operativos del programa, y se implementaron los servicios complementarios, porque Pensión 65 es mucho más que una subvención económica, es también promover el trabajo articulado de las entidades públicas para asegurar que nuestros usuarios accedan a los servicios de salud del Minsa y sean reconocidos por su comunidad.

Probabilidad de sobrevivencia por regiones a la edad de 65 años (calculada en el año 2012)

El presupuesto de Pensión 65

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l presupuesto asignado por el gobierno a Pensión 65 en su primer año de ejecución demuestra su compromiso real con los adultos mayores en pobreza extrema. El componente más importante del programa son las subvenciones económicas a los usuarios. El presupuesto total del programa ascendió a los 291.6 millones de nuevos soles en el 2012 de los cuales el 98 por ciento se destinó a la razón de ser de la existencia del programa, las subvenciones a los usuarios. Para el 2013 se ha destinado un presupuesto de 453.5 millones de nuevos soles y se ha proyectado atender a 290 mil usuarios.

Presupuesto 2012 Rubro

Asignado

Monto total Otros gastos (subvenciones) Activos no Financieros Bienes y Servicios

S/. 291.6 millones S/. 247.9 millones S/. 3.5 millones S/. 40.2 millones

Presupuesto 2013

Monto total

S/. 453.5 millones Cifras en nuevos soles

A mayor pobreza, mayor mortalidad en adultos mayores.

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a situación de vulnerabilidad y abandono del adulto para obtener unos soles que les permitan subsistir. mayor en pobreza extrema en las zonas rurales del En uno de los estudios para la implementación de Penpaís es dramática. Miles son los sión 65 (1), se menciona las diferenancianos a los que sólo les queda se- “Cifras del INEI: de 100 cias en mortalidad entre pensionistas personas de 65 años en del área urbana y los no pensionistas guir trabajando para poder sobrevivir en medio del frío y las lluvias que azo- el 2012, 74 llegarían vivas de la zona rural. Por ejemplo, un homtan las comunidades más alejadas de al 2025 en Lima, mientras bre de 65 años en la zona rural vivirá la sierra central y sur del país. que en Huancavelica sólo en promedio 13.9 años más, es decir Ellos han trabajado durante toda su hasta los 78.9 años. Mientras que un sobrevivirían 48”. vida, y se ven obligados a seguir sohombre del área urbana vivirá 15.95 metiéndose a la dureza del trabajo agrícola y ganadero años más, es decir, hasta los 80.95 años.

Región 2012 2015 2020 2025 Lima 100.0 95.4 86.3 73.6 Callao 100.0 94.5 85.1 72.5 Arequipa 100.0 94.7 84.7 72.1 Lambayeque 100.0 94.6 84.8 72.1 La Libertad 100.0 94.7 84.2 71.0 Ica 100.0 94.7 83.6 70.5 Moquegua 100.0 94.5 83.0 68.3 Tacna 100.0 93.7 82.3 68.0 Ucayali 100.0 93.0 81.2 65.2 Puno 100.0 93.6 80.0 64.0 Áncash 100.0 93.0 78.9 63.4 Tumbes 100.0 91.5 78.5 62.8 Huánuco 100.0 92.7 78.4 62.7 Piura 100.0 91.6 78.2 62.5 Madre de Dios 100.0 91.5 78.1 62.0 Junín 100.0 91.8 77.9 61.8 San Martín 100.0 91.4 76.8 60.6 Cusco 100.0 92.1 77.1 59.9 Cajamarca 100.0 92.0 76.1 58.8 Pasco 100.0 90.7 74.8 57.1 Loreto 100.0 90.9 74.8 56.9 Apurímac 100.0 91.5 74.5 56.6 Ayacucho 100.0 91.9 74.8 55.9 Amazonas 100.0 90.4 73.1 54.3 Huancavelica 100.0 89.1 69.9 48.2 (1)"Estudio sobre Contenidos Mínimos del Programa Nacional de Asistencia Solidaria Pensión 65 con Enfoque de Resultados (con información del INEI de 2010)"

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Pensión 65 es un deber de justicia

Diversos especialistas explican, líneas abajo, que la existencia de un programa social que se preocupe por reducir la vulnerabilidad de los adultos mayores en pobreza extrema, entregando una subvención económica; era lo menos que se podía esperar de un Estado cuya economía registra en los últimos años un crecimiento económico sostenido.

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ara monseñor Luis Bambarén, la implementación de “un programa como Pensión 65 es un deber de justicia y es algo importantísimo para la sociedad peruana”. “El Estado está obligado a ocuparse de aquellos adultos mayores que han trabajado toda su vida, pero no tienen acceso a una pensión ni nada. Los ancianos junto a los niños son los más vulnerables de nuestra sociedad y protegerlos es un deber”, sostiene el actual presidente del Comité de Transparencia y Vigilancia Ciudadana de los Programas Sociales del MIDIS, organismo que tiene como objetivo supervisar los avances del logro de objetivos de dichos programas. El ex presidente de la Conferencia Episcopal Peruana felicitó al gobierno del presidente Ollanta Humala por su decisión de apoyar a este sector vulnerable de la población, y consideró que es importante la validación de la lista de beneficiarios por parte de la misma población para evitar filtraciones. También aseguró que el Comité de Transparencia y Vigilancia de los Programas Sociales del MIDIS cumple una tarea fundamental, al garantizar que los recursos lleguen efectivamente a quienes más lo necesitan y evitar que personas inescrupulosas se aprovechen del dinero de los más pobres. “En el Comité, todos trabajamos ad honórem. La idea es que no haya infiltrados ni excluidos en Pensión 65, y lograr que el programa no se politice”, añadió.

“Los adultos mayores en situación de pobreza y que no reciben ningún beneficio del Estado deben recibir la solidaridad de la Nación. A esos hogares haremos llegar la subvención económica del programa Pensión 65. Su implementación será inmediata y alcanzaremos los distritos más pobres del país progresivamente”. Fragmento del Primer Mensaje a la Nación del Presidente Ollanta Humala ante el Congreso de la República, 28 de julio de 2011.

Una mirada desde afuera

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s la primera vez en el Perú que un programa social tiene como eje a los adultos mayores en extrema pobreza, hecho que representa una lectura diferente al paradigma de apoyo a esta población, señala Pilar Contreras, asesora regional en protección social de HelpAge, una organización internacional que defiende los derechos de los adultos mayores y cuya sede para América Latina está en Bolivia. “Pensión 65 es una medida positiva desde todo punto de vista. Claro que es perfectible, pero la ciudadanía ya ha Pilar Contreras, Asesora regional en protección social de HelpAge International

Monseñor Luis Bambarén preside el Comité de Transparencia y Vigilancia Ciudadana de los Programas Sociales del MIDIS

Pensión 65 está cumpliendo un reto muy grande Los adultos mayores en pobreza extrema de zonas rurales son un grupo crítico de la sociedad que no ha sido atendido por el Estado de manera adecuada. Sucesivos gobiernos no se preocuparon por formular políticas relacionadas al envejecimiento y la seguridad social, y hoy tenemos más de 650 mil adultos mayores que viven en situación de vulnerabilidad y sin acceso a servicios de salud, describe el presidente de la Mesa de Concertación de Lucha contra la Pobreza, Federico Arnillas. “Es en ese marco que nace Pensión 65, y el reto que asumió es muy grande, pero ha cumplido sus metas en afiliación, y las ha superado. Está claro que ningún programa social llega a cubrir el 100% de usuarios en su primer año de gestión, pero ahora el gran desafío de Pensión 65 a mediano plazo es lograr que 400 mil o 500 mil usuarios puedan recibir bimestralmente su subvención económica de 250 nuevos soles”, apunta. Para Arnillas las últimas publicaciones sobre supuestas irregularidades en Pensión 65 han demostrado que se está trabajando para evitar la filtración de usuarios y que en el programa existe la voluntad necesaria para evaluar constantemente los padrones de usuarios. “Lo que se debe hacer es afinar la cartera de prestaciones y también acompañar a los ancianos en el envejecimiento, preocuparse porque el anciano esté sano y estar atentos a prestaciones de salud para que se recupere de alguna enfermedad”, apuntó.

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Un acto de justicia

Desde el exterior, Pensión 65 es percibido como un programa social que permite el fortalecimiento de la democracia a través del ejercicio de la ciudadanía.

P Federico Arnillas, Presidente de la Mesa de Concertación de Lucha contra la Pobreza,

percibido a una población que antes no veía y entiende que se debe hacer cargo de ella. Además, los adultos mayores representan el 7% de la población peruana”, precisó. Contreras destaca que desde el exterior Pensión 65 es percibido como un programa social que permite el fortalecimiento de la democracia a través del ejercicio de la ciudadanía, al hacer visibles a los adultos mayores en extrema pobreza para otras instituciones del Estado, como Reniec, que a muchos usuarios les entrega DNI por primera vez y el Ministerio de Salud, que les otorga el Seguro Integral de Salud (SIS). “Los adultos mayores ahora hacen llegar reclamos a sus alcaldes, en zonas donde antes el adulto mayor no hablaba. Ahora con Pensión 65 tiene una herramienta que les permite acceder al gobierno, hacerse escuchar. Eso es algo que no se puede dejar de destacar, además del pequeño ingreso que se les entrega”, subrayó. La representante de HelpAge recordó que la promesa de Pensión 65 empezó a materializarse con el compromiso que el entonces candidato Ollanta Humala suscribió con la Asociación Nacional de Adultos Mayores del Perú (Anamper) en marzo de 2010, y recordó la importancia de un programa social que se ocupe de esta población, ya que entre el 70 y 80% de los adultos mayores en el Perú no llegó a hacer ninguna contribución al sistema de pensiones.

ara la Coordinadora Residente del Sistema de Naciones Unidas y Representante Residente del PNUD en el Perú, Rebeca Arias, con Pensión 65 el Estado peruano se ha puesto en sintonía con la mayoría de países de la región que ya tienen programas similares, y de los cuales se pueden extraer experiencias útiles. Desde Bolivia que lo empezó a implementar en 1997, hasta Venezuela, Ecuador y Paraguay que tienen programas similares desde hace cuatro años. La funcionaria de Naciones Unidas no dudó en afirmar que Pensión 65 representa un acto de justicia, ante una población que directa e indirectamente contribuyó hace ya varias décadas con el actual crecimiento de la economía. “Esta contribución expresada en la atención que dieron a sus hijos y en el consumo que realizaron en años anteriores”, indicó.

El Estado los protege

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ara el Presidente de la Comisión de Inclusión Social y Personas con Discapacidad, congresista Jhon Reynaga, es fundamental que el Estado se ocupe de los adultos mayores en extrema pobreza, “porque ellos han contribuido en su momento con la sociedad”. “Es importante elevar la calidad de vida de los adultos mayores más pobres y más olvidados, y el Estado está cumpliendo un rol fundamental al atenderlos con una pensión y además articular con otras entidades para que reciban atención en salud mental, nutrición y enfermedades respiratorias”, precisa al tiempo de destacar la voluntad política del gobierno de poner en la agenda pública la problemática de esta población vulnerable. “El presidente Ollanta Humala está demostrando que tiene palabra y cumple con sus promesas de campañas, los adultos mayores de las comunidades más alejadas del país se emocionan al ver que el Estado sí los ayuda, agradecen Pensión 65 y que las autoridades cumplan con lo que les ofrecieron luego de tantos años de abandono”, remarca.

Rebeca Arias, Coordinadora Residente del Sistema de Naciones Unidas y Representante del PNUD en el Perú

Arias señaló que el enfoque que el gobierno peruano le da a la lucha contra la pobreza mediante el MIDIS “es muy adecuado al focalizarse, en las poblaciones excluidas del desarrollo”. Pidió prestar atención a aquellos adultos mayores que están en condiciones de mayor vulnerabilidad, ya sea porque viven solos o por alguna limitación física o discapacidad e incorporar el enfoque de género. “Es importante integrar el enfoque de género en este programa, puesto que las necesidades de hombres y mujeres son distintas. Además, estas últimas representan una mayor población que los primeros, debido a su mayor supervivencia”, argumentó.

Presidente de la Comisión de Inclusión Social y Personas con Discapacidad del Congreso de la República del Perú, Jhon Reynaga

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Atención en salud mental es prioritaria en adultos mayores La situación de vulnerabilidad de los adultos mayores en pobreza extrema puede convertirlos en presa fácil de la depresión, estados de ansiedad y el estrés.

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os adultos mayores en extrema pobreza son más vulnerables y es muy difícil que puedan experimentar sensaciones de bienestar por las condiciones de desamparo en las que han vivido durante muchos años. Son muchas las situaciones que los pueden angustiar, una de ellas la sorpresiva llegada de cualquier enfermedad. Muchos adultos mayores se asustan con la idea de caer enfermos, y piensan que lo único que les quedará es la resignación. Baja autoestima, sentimientos negativos ante la percepción que tiene la sociedad sobre ellos y la falta de reconocimiento dentro de su familia y comunidad son sólo algunas características de estos adultos mayores que pueden convertirse en presa fácil de la depresión, estados de ansiedad y el estrés. La directora ejecutiva de Salud Mental del Ministerio de Salud, Gloria Cueva, precisó que de las 443 mil atenciones en salud mental a mayores de 60 años en todo el Perú durante el 2012, 280 mil atenciones fueron por problemas de estrés, depresión y ansiedad. Muchos de estos problemas de salud mental terminan en casos de alcoholismo y también en intentos de suicidio. Adultos mayores que con el pretexto de olvidar la realidad que tienen que soportar día a día destruyen su organismo con abundante licor. Otros no aguantan más y deciden acabar con su existencia, ante el gris horizonte que se presenta ante sus ojos. Por ello, Pensión 65 coordina constantemente con el Ministerio de Salud y las Direcciones Regionales de Salud para incorporar las atenciones en salud mental dentro de las campañas que se realizan en todo el país. Una atención en salud mental oportuna puede cambiar la vida de un adulto mayor en extrema pobreza y per-

mitir que incorpore lecciones a su vida. Esta experiencia puede ser transmitida por el adulto mayor a su familia y su comunidad. “Se pueden convertir en voceros de la salud mental en la zona donde viven. Además, si la comunidad los respeta y ayuda a superarse, su salud mental mejorará”, destacó la doctora Gloria Cueva. La Directora Ejecutiva de Salud Mental del Ministerio de Salud resaltó que uno de los grandes aportes de Pensión 65 es que ha contribuido a hacer visible a esta población que estaba olvidada y ha logrado que los adultos mayores más pobres “ahora se sientan atendidos e informados por el Estado”. “Pensión 65 cumple un papel relevante al sacar del olvido y la exclusión a los adultos mayores. Además ayuda con la identificación de ellos y el acceso a servicios de salud”, indicó.

La afiliación de usuarios

El Proceso de Afiliación a Pensión 65 se inicia con la identificación de aquellos adultos mayores en extrema pobreza que cumplen con todos los requisitos establecidos en la norma vigente, y que pueden ser incorporados como usuarios en los padrones que emite el programa cada dos meses. Esta identificación se alimenta con la base de datos que provee el Sistema de Focalización de Hogares (SISFOH), encargado de la calificación socioeconómica de los hogares y de donde sale una lista de potenciales usuarios con nombres, DNI y direcciones. Pensión 65 envía esta lista inicial a los municipios distritales encargados de verificar la condición socioeconómica del potencial usuario, su supervivencia y de recabar las Declaraciones Juradas y las copias del DNI de aquellos que reúnan las condiciones para acceder al programa.

SISFOH

PENSIÓN

Sistema de focalización de hogares

Gloria Cueva, Directora Ejecutiva de Salud Mental del Ministerio de Salud (al centro).

Otros temas que se deben reforzar con los adultos mayores en pobreza extrema son la atención preventiva, la promoción de estilos de vida saludables y la alimentación nutritiva. Verónica Gonzales, presidenta de la Sociedad de Gerontología y Geriatría, insiste en que cambiar los hábitos alimenticios de este grupo poblacional y vacunarlos periódicamente contra diversas enfermedades contribuirá a mejorar su calidad de vida. Otro punto importante es brindar a los usuarios de Pensión 65 el apoyo técnico que permita darles las herramientas para que utilicen bien los 250 nuevos soles que reciben cada dos meses como subvención económica del Estado. “Los adultos mayores tienen problemas para tener una canasta básica mínima y acceder a servicios básicos, por eso es que tienen que seguir trabajando en su vejez. Las enfermedades que sufren son por temas nutricionales, infecciones respiratorias y problemas articulares y óseos”, subrayó la geriatra. La doctora Gonzales recordó que en nuestro país “sólo tres de cada diez adultos mayores tiene una pensión y atención en salud”, por ello consideró que Pensión 65 está bien direccionado y debe seguir promoviendo más reuniones técnicas con geriatras y especialistas en el tema de los adultos mayores para seguir fortaleciendo el programa.

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El proceso de afiliación es muy importante, las autoridades locales cumplen un papel relevante para evitar filtraciones en el padrón de usuarios.

Desde octubre pasado esta tarea es apoyada estrechamente por los equipos territoriales de Pensión 65 desplegados en todas las regiones del país. Esta parte del proceso de afiliación es muy importante y en ese contexto, las autoridades locales cumplen un papel relevante para evitar filtraciones en el padrón de usuarios del programa. Finalmente, en Lima se hacen las coordinaciones con el Organismo de Normalización Previsional (ONP), Superintendencia de Banca y Seguros (SBS), Registro de Identificación y Estado Civil (RENIEC) y ESSALUD para verificar, mediante cotejos masivos de bases de datos, el cumplimiento de requisitos referidos a que el usuario no reciba otra pensión ni esté afiliado a otro sistema de salud. Finalmente sale un Padrón de Usuarios que es enviado para su publicación en los diferentes municipios distritales del país

PASOS PARA LA EJECUCIÓN DE LA AFILIACION

La alimentación de los adultos mayores

Los adultos mayores en extrema pobreza tienen problemas para tener una canasta básica mínima

Paso a paso, los procesos de Pensión 65

65

Pensión 65 identifica las listas de potenciales usuarios usando la base de datos del SISFOH.

GOBIErNOS LOCALES

Verifica las listas y las envía a los gobiernos locales.

Los usuarios y su pensión: Las transferencias

La transferencia de la subvención económica a los usuarios es el proceso más importante del programa y consiste en asegurar que el usuario reciba el dinero que le otorga el Estado. Los 125 nuevos soles que se otorga mensualmente, son entregados cada dos meses, a razón de 250 nuevos soles por usuario, que se depositan en las cuentas de ahorro del Banco de la Nación que tienen nuestros usuarios. Este proceso se inicia con la asignación del monto a cada usuario regular, según la información que brinda el área de afiliaciones. Luego se determina los tipos y puntos de pagos según la ubicación geográfica de los usuarios. Los usuarios que viven cerca a centros urbanos cobrarán su pensión en agencias del Banco de la Nación y los de zonas más alejadas recibirán su pago mediante transportadoras de caudales que llegarán lo más cerca de sus zonas para llevarles su pensión. Posteriormente se coordinan y elaboran los cronogramas

Los gobiernos locales trabajan con las listas y obtienen declaraciones juradas de los potenciales usuarios. La documentación es enviada a Pensión 65.

PENSIÓN

65

GOBIErNOS LOCALES

Pensión 65 verifica el cumplimiento de requisitos mediante cotejos masivos de bases de datos con la ONP, SBS, RENIEC y ESSALUD. Luego envía el Padrón de Usuarios verificado para que sea publicado por los gobiernos locales.

de pago a nivel de las agencias del Banco de la Nación y Transportadoras. Finalmente, se distribuyen los cronogramas a nivel distrital a los equipos territoriales y autoridades locales para comunicación a los usuarios. Este año, Pensión 65 está trabajando para dar nuevas alternativas a sus usuarios usando otros medios de pago mucho más cerca de sus poblados y con características que hagan posible su uso.

Pensión 65 afina sus procesos en busca de la satisfacción total de sus usuarios.

Medidas para mejorar los procesos En el 2013, Pensión 65 ha fortalecido la verificación en campo de los potenciales usuarios así como de los usuarios, con el objetivo de confirmar la información proporcionada y comprobar si continúan con la misma condición socioeconómica de extrema pobreza. Asimismo se viene realizando una fuerte difusión a nivel local acerca de los requisitos del Programa así como de los derechos y deberes de los ciudadanos y la importancia de sincerar sus datos. Otro esfuerzo por mejorar nuestros procesos y evitar las filtraciones es la realización de una Gran Auditoría Muestral que se llevará a cabo en el primer trimestre de este año. La Auditoría medirá el nivel de filtración con un margen de error de +/- 1.4% a nivel nacional. Asimismo, en el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social, la ministra Carolina Trivelli precisó que el Gobierno ha destinado 70 millones de nuevos soles para ejecutar el barrido censal que permitirá actualizar la base de datos del Sistema de Focalización de Hogares (Sisfoh). El barrido mencionado es realizado por el INEI, y hasta el momento se ha hecho efectivo en doce regiones. Los resultados del barrido, que se hará en un total de 16 regiones, estarán listos para julio próximo. Esta medida permitirá a los programas sociales acceder a una data mejor focalizada y permitirá disminuir los niveles de subcobertura.

Procesos con mayor calidad

Durante enero de 2013, Pensión 65 organizó talleres de capacitación para los integrantes de sus unidades territoriales, con el objetivo de brindar un servicio de mejor calidad a los adultos mayores que reciben la subvención económica bimestral en diferentes regiones del país. Asimismo, durante el último trimestre de 2012 se realizaron talleres con los técnicos de atención al usuario de todas las regiones del país para mejorar la calidad en el trato a los adultos mayores que son parte del programa. Con esta iniciativa, se busca que Pensión 65 alcance los mayores niveles de eficiencia y calidad en la prestación de sus servicios, poniendo por delante la transparencia y el servicio al ciudadano.

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Aliados para hacer justicia Las autoridades en diferentes regionespueden sumar al objetivo de lograr que la mayor cantidad de adultos mayores en pobreza extrema reciban la subvencióneconómica que entrega el Estado.

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os alcaldes distritales y provinciales de todas las regiones del país pueden convertirse en grandes aliados de Pensión 65 cuando conocen su rol en el proceso de afiliación de usuarios, entienden la importancia de su participación y brindan las facilidades a los equipos territoriales del programa. Las autoridades en diferentes regiones pueden sumar al objetivo de lograr que la mayor cantidad de adultos mayores en pobreza extrema reciban la subvención económica que entrega el Estado, cuando transmiten a sus funcionarios el mensaje correcto sobre la importancia de su trabajo en el recojo de las declaraciones juradas llenadas por los potenciales usuarios. Entre los alcaldes más colaboradores de la región Áncash, donde el programa alcanza los 16,179 usuarios, tenemos al alcalde provincial de Ocros, Francisco Espinoza Montesinos, quien brindó todas las facilidades logísticas al equipo territorial y cedió las instalaciones de la municipalidad para la organización de los talleres de capacitación. Mientras que en la región Amazonas, que creció de 3,200 usuarios en octubre a 6,000 en diciembre, destacó el espíritu colaborador del alcalde provincial de Utcubamba, Milesio Vallejos Bravo, quien se convirtió en un aliado importante para hacer que Pensión 65 llegue a los distritos de esta provincia. “Otros dos alcaldes que han colaborado mucho en la logística y ayudaron a hacer realidad las campañas de salud en su zona son los alcaldes provinciales de Chachapoyas y Bagua, Diógenes Zavaleta y Terry Torres Huamán, respectivamente”, precisó Norma Negrón, jefa territorial de Amazonas. En la región Ayacucho, donde Pensión 65 cerró el año con 21,961 usuarios, el alcalde de Cayara, provincia Víctor Fajardo, Grover Santa Cruz, fue uno de los que más destacó por su ayuda a los adultos mayores que no podían acceder al programa por no contar con DNI ni partida de nacimiento.

El trabajo de los equipos territoriales ayudó al programa a acercarse más a sus usuarios y familiares, y a la ciudadanía en general.

L Los alcaldes deben transmitir el mensaje correcto a sus funcionarios.

Mientras que en Calca, su alcalde Ciriaco Condori se convirtió en el mejor aliado para llevar a cabo la primera Feria de Saberes Tradicionales realizada en Cusco. En Piura, Elvis Barreto Jiménez, alcalde del distrito Santo Domingo, en la provincia de Morropón, conformó un comité de personas notables de su jurisdicción junto a sus vecinos, con el objetivo de revisar el padrón de los potenciales usua-

rios de Pensión 65 e informar oportunamente sobre posibles filtraciones. Por su parte, el alcalde del distrito de Sapilllica, Augusto Jara Castillo, también convocó a los vecinos más respetables de este distrito de la provincia de Ayabaca, para informar sobre qué adultos mayores de la zona son quienes más necesitan de la subvención económica que entrega Pensión 65.

Capacitando a los aliados Si los alcaldes y funcionarios conocen a profundidad los procesos operativos del programa se podrá afiliar mejor a los usuarios, no habrá filtraciones, se evitarán denuncias y se podrá realizar una mejor atención a los adultos mayores. Por ello, la Dirección Ejecutiva de Pensión 65 dispuso la realización de los talleres de capacitación en todas las regiones, con el objetivo de optimizar los procesos operativos, hacer que las autoridades locales conozcan el programa y asegurar que el beneficio llegue realmente a los adultos mayores más necesitados. Los talleres fueron organizados en lugares estratégicos donde pudieran concentrarse la mayor cantidad de autoridades y funcionarios de todas las municipalidades. Se realizaron 51 talleres en donde se capacitaron a 2,637 funcionarios y autoridades de 1,355 municipios distritales del país y permitieron transferir información importante en afiliación de usuarios, verificaciones socioeconómicas y de supervivencia, y las transferencias. Además de colaborar en la recopilación de las Declaraciones Juradas y DNI de los potenciales usuarios, los gobiernos locales también participan en la identificación de los posibles puntos de pago, en la notificación de afiliación de usuarios al Programa Pensión 65, y en el seguimiento al cobro de subvenciones de los usuarios.

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La cara de Pensión 65 en las regiones

Fueron 51 talleres organizados en lugares estratégicos, a fin de concentrar la mayor cantidad de autoridades y funcionarios.

os equipos territoriales de Pensión 65 iniciaron su labor en octubre pasado en todas las regiones del país y su actuación fue determinante en el proceso de expansión que experimentó el programa a nivel nacional en beneficio de los adultos mayores de 65 años en situación de extrema pobreza y también en la supervisión del proceso de afiliación. Su trabajo se vio reflejado en el crecimiento de la cantidad de beneficiarios, la mejora de los procesos operativos del programa, la constante supervisión de los procesos de afiliación, y la implementación de los servicios complementarios con la mejor calidad posible. El trabajo de los equipos territoriales también ayudó al Programa a acercarse más a sus usuarios y familiares, y a la ciudadanía en general. El tema del adulto mayor en pobreza extrema y la obligación de toda la sociedad de hacerse cargo de esta población vulnerable y excluida, se colocó en agenda en todas las regiones gracias a las acciones realizadas por los integrantes de los equipos territoriales de Pensión 65. “Cuando llegamos en octubre teníamos 8,451 afiliados al programa, ahora tenemos 16,694 usuarios. Además de cantidad ahora estamos enfocándonos en la calidad del

Los equipos territoriales han sido importantes en la expansión de Pensión 65

servicio y la supervisión de los procesos de afiliación”, destaca Carlos Obeso, jefe territorial de Áncash. En octubre, antes de que el equipo territorial de Pensión 65 llegara a Amazonas, en esta extensa región de la selva se tenía registro de 3,200 usuarios del programa en 66 distritos. “Ahora tenemos cubiertos los 84 distritos de Amazonas y llegamos a 6,079 usuarios”, precisó Norma Negrón, jefa territorial de Pensión 65 en esta región. Y así, en todas las regiones, la percepción de la ciudadanía sobre Pensión 65 se ha consolidado a partir del trabajo de los equipos territoriales y la labor que realizan los promotores que recorren las zonas más alejadas del país, con el objetivo de supervisar las labores de afiliación y asegurarse de que están dentro del programa los adultos mayores que realmente necesitan la subvención que otorga el Estado.

El adulto mayor en agenda

En Junín, hasta octubre de este año se tenía en el padrón de Pensión 65 a 5,471 usuarios en 88 distritos. “Al cierre de 2012 tenemos a 10,572 adultos mayores de 123 distritos que reciben la subvención económica y tienen acceso a las campañas de salud en las que reciben diferentes atenciones médicas”, señala Erika Blas Rivera, jefa territorial de

Ciudadanos estrenando DNI

Pensión 65 cumple un papel relevante al sacar de la exclusión a los adultos mayores.

Uno de los requisitos para acceder a Pensión 65 es contar con DNI, pero muchos de los potenciales usuarios no tienen aún este documento, lo que evidencia que además de la pobreza que sufren, son excluidos del ejercicio de su ciudadanía. Pensión 65 coordinó estrechamente con Reniec para que se realicen campañas de inscripción en los puntos de pago. Buen porcentaje de los actuales usuarios sacaron por primera vez en su vida un DNI para acceder al programa. Sólo desde octubre último, fecha en que empezó el registro de estos casos por parte de los equipos territoriales regionales, 1,507 adultos mayores obtuvieron por primera vez su DNI. De esta manera, Pensión 65 contribuyó a que RENIEC logre que 245,000 adultos mayores obtengan su DNI de forma gratuita durante el 2012.

esta región de la sierra central. El equipo territorial de Pensión 65 en Junín está convencido de que este programa social ha despertado el sentido humanitario en sus pobladores. “Hombres y mujeres de todas las edades están preocupados por identificar a aquellos vecinos de sus barrios que sí necesitan la subvención que entrega el programa. Pocas veces se ve algo así”, destacó. Una opinión similar comparte Ernesto Conga, jefe territorial de Pensión 65 en Ayacucho, quien explica que el programa ha hecho que las autoridades locales y regionales empiecen a preocuparse más por la población de la tercera edad. “Se han generado nuevas necesidades que han tenido que ser colocadas dentro de las políticas de las gestiones locales y regionales. Ahora en el Gobierno Regional de Ayacucho existe un programa de Vejez Saludable que antes no había, y así hay otros planes de desarrollo para los adultos mayores”, indicó.

Departamentos

ADULTOS MAYORES QUE OBTUVIERON SU DNI

(Entre octubre y diciembre 2012) La Libertad 420 Ancash 335 Ayacucho 295 Junín 115 Cajamarca 112 Huancavelica 72 Pasco 66 San Martín 34 Tumbes 22 Amazonas 16 Ucayali 20

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Más saludables, tranquilos y queridos

Saberes tradicionales

Tienen mucho que aportar

Entre abril y diciembre de 2012, 16,174 adultos mayores fueron atendidos en 44 campañas integrales de salud organizadas por Pensión 65 en diferentes localidades del país.

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ensión 65 va más allá de la subvención económica que busca mejorar la calidad de vida del adulto mayor en situación de pobreza. Los esfuerzos también están orientados en conseguir que estén bien alimentados, acudan a sus controles médicos, gocen de buena salud mental y sean reconocidos en su comunidad. La intervención de Pensión 65 ha generado toda una dinámica de servicios y un trabajo articulado de diversos sectores del Estrado en beneficio del adulto mayor que se refleja en los servicios complementarios en salud y en el reconocimiento de los saberes tradicionales de los adultos mayores. Si logramos que nuestro usuario mejore su calidad de vida, tenga acceso oportuno a los servicios de salud del Estado, mejore su autoestima y se sienta valorado y protegido por su comunidad, entonces habremos cumplido con los objetivos del programa. Lo que busca Pensión 65 es que los adultos mayores en extrema pobreza alcancen la tranquilidad necesaria que les permita gozar de su familia y vivir con dignidad.

Las campañas de salud

Como parte fundamental de su trabajo, Pensión 65 articula con el Ministerio de Salud y las Direcciones Regionales de Salud, los Gobiernos locales y la Gobernación, campañas integrales de salud en beneficio de sus usuarios, las cuales se realizan durante los días de pago de la subvención económica. Entre abril y el 18 de diciembre de 2012, 16,174 adultos mayores fueron atendidos en 44 campañas integrales de salud organizadas por Pensión 65 en las provincias de Andahuaylas (Apurímac), Huancané (Puno), La Mar (Ayacucho), Pataz (La Libertad), Dos de Mayo (Huánuco), entre otras más en todo el país. La provincia de Huancané, ubicada en la región Puno, fue el escenario de la campaña de salud más grande del año para los usuarios de Pensión 65. Entre el 23 y 27 de julio, 4,912 adultos mayores accedieron a consultas en oftalmología, odontología, psicología, nutrición y vida saludable, así como la aplicación de vacunas y entrega de medicinas. La actividad organizada por Pensión 65, en coordinación con el Ministerio de

Salud, movilizó a 160 médicos, especialistas y técnicos del MINSA. Asimismo y en el marco de la Semana de la Inclusión Social, celebrada entre el 15 y 19 de octubre, los usuarios de Pensión 65 de Socos, Ayacucho, se beneficiaron con una campaña de salud especializada que incluyó consultas sobre prevención del cáncer, salud mental, odontología y oftalmología. La jornada de salud se llevó a cabo en la Plaza de Armas del distrito y se logró atender a 556 usuarios, a quienes se les realizaron 2,780 atenciones médicas en las diferentes especialidades a cargo de médicos del Ministerio de Salud que llegaron desde Lima, así como de especialistas de la Dirección Regional de Salud de Ayacucho. Los rostros de los adultos mayores que reciben esta asistencia del Estado en Puno, Huancavelica, Huánuco, Ayacucho, Apurímac y todas las regiones del país parecen ser otros luego de ser escuchados y atendidos por médicos y enfermeras. Ellos tienen la esperanza de que la vida puede empezar a ser mejor y entienden que el Estado ahora los acompaña y protege.

Oportunidad para enfrentar el mañana con dignidad, con tranquilidad y sin miedo

Recuperando la vista y la dignidad

En los últimos meses de 2012 se organizaron dos campañas de operaciones de cataratas para 173 usuarios de Pensión 65, identificados en campañas de salud previas en las provincias de Andahuaylas y Huancané.

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Son ciudadanos con derecho a vivir dignamente.

iles de peruanos que viven en la comodidad de las principales ciudades del país se negaron a ver durante años los problemas que tenían que enfrentar en el total desamparo nuestros compatriotas más viejos y más pobres. Mientras tanto, hombres y mujeres mayores de las comunidades más alejadas sentían cómo se iba apagando cualquier esperanza de cambio y también la luz para sus ojos envejecidos y cansados de tanto olvido. La ceguera por catarata es una enfermedad ligada estrechamente a la pobreza y los ancianos más pobres de la sierra sur y central del país son quienes más la sufren. En medio de esta población altamente vulnerable se encuentran muchos usuarios de Pensión 65, a quienes no sólo se les ha entregado una subvención económica, sino que también se les ha ayudado a recuperar la vista. En el marco del Convenio entre el MIDIS y el MINSA, nuestros usuarios reciben aten-

ción médica especializada en campañas de salud organizadas en las fechas de pago. Entre esas atenciones especializadas para el adulto mayor se encuentran las oftalmológicas que van identificando a la población que requiere intervenciones quirúrgicas y finalmente derivan en operaciones de cataratas a cargo de médicos del Instituto Nacional de Oftalmología (INO). En los últimos meses del 2012 se organizaron dos campañas de operaciones de cataratas para 173 usuarios de Pensión 65, identificados en campañas de salud organizadas previamente en las provincias de Andahuaylas, en Apurímac, y Huancané, en Puno con ocasión del pago bimensual que reciben como subvención del Estado. A don Julián Quispe, de Huancané, Puno, le extirparon las cataratas que le impedían ver. Para él, Pensión 65 es la oportunidad de vivir una vejez con dignidad, afrontar el mañana con tranquilidad, sin miedo.

La subvención económica que entrega Pensión 65 a sus usuarios es el primer paso para que los adultos mayores en pobreza extrema de diferentes regiones del país empiecen a salir de la difícil situación en la que se encuentran. Tan importante como la nutrición y las atenciones en salud, es el trabajo con la autoestima y la revalorización de estos adultos mayores que se han sentido discriminados e ignorados por el Estado y la sociedad durante mucho tiempo. Ante esta situación, Pensión 65 busca promover el reconocimiento de los saberes tradicionales que guardan sus usuarios, con el objetivo de que sean reconocidos en sus comunidades. Para ello articula esfuerzos con los actores locales a fin de generar espacios y oportunidades y que la población misma se sienta identificada con el aporte de los adultos mayores. Una primera experiencia en ese camino se llevó a cabo en la Plaza de Armas de la provincia de Calca, en Cusco, escenario de una Feria de Saberes Tradicionales, que se convirtió en una verdadera fiesta gracias a la calidez del público y a la alegría natural de los adultos mayores que participaron. El evento sirvió para que los usuarios de Pensión 65 demostraran ante sus familias y vecinos que mantienen sus habilidades y talentos en danzas típicas, cantos, poemas, cuentos y relatos que se transmiten de generación en generación. Provenientes de las comunidades más alejadas de las provincias de Calca y Urubamba, los entusiastas abuelitos fueron testimonio vivo de que el Programa Pensión 65 va más allá de la subvención económica de 250 soles que entrega y se preocupa por mejorar integralmente la calidad de vida de los adultos mayores en extrema pobreza. Vestidos con sus mejores galas domingueras y con los trajes típicos de sus pueblos, y acompañados de bandas de música con quena, acordeón, arpa y tambor; cerca de 70 adultos mayores de los distritos de Písac, San Salvador, Coya, Lamay y otras zonas mostraron sus habilidades ante un compacto auditorio que alcanzó los 600 asistentes. Los adultos mayores de Pensión 65 entonaron cantos de su juventud, contaron las leyendas y los relatos que escucharon de sus padres, recitaron los poemas que les dedicaban a sus amadas, y compartieron adivinanzas y chistes en quechua que aprendieron en su niñez y que hoy se están perdiendo porque ya casi nadie las transmite de boca en boca. Con la experiencia desarrollada en la provincia cusqueña de Calca quedó claro lo importante que es la revaloración de las tradiciones y el conoEllos son portadores de saberes tradicio- cimiento de los adultos mayores en nales que pueden ser preservados, reco- diversas áreas del saber y la cultura, nocidos y difundidos por su comunidad. la identificación que se logra en los distintos y alejados poblados, y el esfuerzo de mostrarlos como aportes ante sus comunidades. Esta intervención será profundizada y ampliada el 2013 en otras regiones del país. Por lo pronto se han identificado oportunidades en San Martín y Ayacucho y se vienen formando alianzas con las municipalidades y las comunidades organizadas a fin de identificar aquellos saberes de dimensión cultural y social que portan los adultos mayores y que pueden ser preservados, reconocidos y difundidos por su comunidad.

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Se sienten incluidos y protegidos Antes de que exista Pensión 65, los adultos mayores en extrema pobreza estaban olvidados por el Estado, marginados por la sociedad y no podían acceder a los servicios de salud. Reconocer su aporte y darles una merecida subvención cada dos meses ha representado un cambio en la vida de los 253,661 usuarios. Hoy con Pensión 65, estos adultos mayores cuentan con recursos para alimentarse mejor y empezar a vivir una vida digna. Ellos saben que ya no están solos y que son importantes para la sociedad. Ahora se sienten incluidos y escuchados. Ése es el logro más importante de Pensión 65, haber hecho visibles a los adultos mayores más pobres del país. Mariano Loayza, distrito de Yanahuara, provincia de Urubamba, Cusco “Toda mi vida trabajé en el campo. Nunca pude guardar una platita para mi vejez, ahora con Pensión 65 hasta puedo ayudar a mi familia. Me siento segura porque también me hacen chequeos médicos gratis y un psicólogo me conversa bonito”.

Dolores Solís Villegas, Curahuasi, Apurímac “Recibo el dinero con mucha alegría, porque ya no tengo que trabajar tanto vendiendo leña. Tengo tiempo para estar en mi casa, salir a caminar, lavar mi ropa tranquila y los fines de semana salgo a misa. Ya no soy una carga para mis hijos, ellos tienen sus problemas y no pueden ayudarme porque también tienen muchos hijos” Leonarda Victoria, distrito de Lamay, provincia de Calca “Mi familia es muy pobre, y ahora esta pensión me ayuda a comprar más comida para mis hijos que son muy pobres, mis nietos que todavía están chicos, y para mí. Hacen ferias en las que todos compartimos y nos sentimos queridos por toda nuestra comunidad.”

Isabel Tecce Anduiza, distrito de Lamay, Cusco “Siento que las autoridades ahora sí se acuerdan de nosotros, los más pobres. Con mi pensión compro comida, ya no paso hambre gracias a Pensión 65.” Benigno Sotelo Tumba, distrito de Chacoche, Abancay “Con lo que recibo cada dos meses puedo comprar mis alimentos y remedios para la artritis que sufro. Me siento alegre porque se han acordado de los que somos más pobres”.

Inocencia Vargas Teves, distrito Curahuasi, Apurímac “Con la platita que me da Pensión 65 puedo comprar medicinas, carne y galletas que tanto me gustan. Me alegro de recibir estos 250 soles, estoy agradecida, el gobierno ha cumplido su promesa. Mi corazón ya se ha tranquilizado, antes estaba triste porque no tenía dinero para mis necesidades”.

Fortunato Velásquez, Comunidad de Ancco, Capillata, Ayacucho. “Felizmente ya puedo comprar carne, leche, huevo y pescado que tanto me gusta, ahora me siento muy aliviado. Con la pensión que recibo ya no soy una carga para mi familia y puedo alimentarme mejor”.

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Francisca Nuñez, distrito de Yanahuara, provincia de Urubamba “Sentíamos que nadie se acordaba de nosotros. Con mi pensión ya puedo comprar más carne y papa. Alimentarnos bien es muy importante, ya somos viejos, es muy duro caer enfermos”. Emilia y Anastasia Fernández Maynas , hermanas de la etnia Shipibo Conibo, Comunidad Nativa de San Francisco, Ucayali. “Estamos muy contentas, con nuestra pensión compramos medicinas y telita para hacer nuestra ropa. Ahora nos sentimos mejor y ya no estamos tristes, ahora cantamos siempre”.

Indalecio Cconislla Sulcaray, Comunidad de Luyanta, Ayacucho. “Pensión 65 es tranquilidad para mí, vivo con mi hija madre soltera y mis nietos, ahora ya puedo comprar carne de cordero. Puedo ayudar a mi familia y me siento más seguro con este apoyo, me siento feliz que el señor gobierno se acuerde de nosotros”.

Dominga de Espino, Comunidad de San Rafael, Socos, Ayacucho. “Ya no me siento sola, ahora puedo comprar carnecita y leche. También por estar en Pensión 65 recibo atención médica y medicinas, ahora vivo mejor, antes me daba miedo ser vieja, ahora sé que puedo ir al médico cuando me sienta enferma”.


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