TAREA: PLAN DE CONTROL DE RIESGOS DE SUICIDIO EN ADOLESCENTES AUTORA: GLADYS HIDALGO APOLO POLIESTUDIOS-CERTIFICACIÓN PSICOTERAPIA
En relación con los comportamientos suicidas, la etapa de la adolescencia puede ser considerada un factor de riesgo, pues en las últimas décadas se ha observado el aumento de suicidios en la infancia y adolescencia. Es importante considerar las tentativas de suicidio, pues es uno de los más potentes predictores en la adolescencia de otras tentativas y de suicidios consumados; sin embargo, los profesionales en salud mental, han de estar capacitados para evaluar e intervenir en situaciones de riesgo de suicidio. A continuación, se expone un plan de control de riesgos de suicidios en adolescentes, el cual podría ser considerado como una guía, más ha de tenerse en cuenta, que cada persona es un mundo diferente, por lo que las recomendaciones aquí presentadas, son de consideraciones generales. 1. En primer lugar, es importante definir acciones de apoyo y control a los adolescentes con riesgo suicida. Lo cual se hace en base al nivel de riesgo; a continuación, se debe identificar las personas, lugares, ideas o acciones que faciliten la superación de la crisis, en donde se pueda incluir: ➢ Red de apoyo (profesionales, familiares, amistades) ➢ Lugares donde pueda acudir (centros de atención, centros de distracción) ➢ Pensamientos y acciones que le favorezcan 2. Constatar si hay la presencia de ideación suicida. El profesional debe identificar pensamientos o descripciones verbales sobre el suicidio, pues esto supone un factor de riesgo. Se debe realizar una evaluación psicopatológica además de incluir una evaluación de los factores psicológicos y contextuales, y una valoración de los factores de riesgo, entre los que se pueden mencionar: ➢ ➢ ➢ ➢ ➢ ➢ ➢
Haber tenido un intento de suicidio previo Antecedentes de depresión o de otor trastorno mental Abuso de drogas o alcohol Antecedentes familiares de suicidio o violencia Padecer una enfermedad física o tener desesperanza Tendencias impulsivas o agresivas Antecedentes de abuso sexual en la infancia
3. Creencias y pensamientos automáticos disfuncionales (hiperexigencia, catastrofismo, intolerancia al malestar)
Mediante la terapia cognitivo-conductual, se procede a modificar pensamientos negativos, distorsionados, asociados a situaciones específicas y actitudes desadaptativas relacionadas con la depresión. Los adolescentes con riesgo de suicidio, pueden dar señales de alerta verbales tales como: comentarios o verbalizaciones negativas sobre sí mismo o sobre su vida “no valgo para nada”, “esta vida es un asco” “estarían mejor sin mi”; comentarios o verbalizaciones negativas sobre su futuro “lo mío no tiene solución”, “quiero terminar con todo”, “las cosas no van a mejorar nunca”; despedidas verbales o escritas “quiero que sepas que en todo este tiempo me has ayudado mucho”; comentarios o verbalizaciones con el acto suicida o la muerte “me gustaría desaparecer”, “no deseo seguir viviendo”, “nadie me quiere y es preferible morir”. Es importante resaltar que la exploración de pensamientos suicidas, no aumentan el riesgo de suicidio; sin embargo, se recomienda que las preguntas a los pacientes sobre sus ideas de suicidio se formulen de forma gradual, y plantearlas de manera cálida y empática, en un ambiente de privacidad, y de respeto. 4. Evaluar el riesgo de suicidio Finalmente, mediante la entrevista se procede a evaluar los factores de riesgo que influyen para que el adolescente se plantee la propia muerte como una opción válida al cese de su sufrimiento, los mismos que puede ser personales, emocionales, problemas de salud mental, antecedentes familiares de suicidio, etc. Una vez realizado la valoración clínica, se deben establecer diferentes perfiles de riesgo, y las acciones que se deben llevar a cabo; de esta manera, se procede a mencionar los perfiles de riego y sus acciones: ➢ RIESGO BAJO: El perfil del adolescente es el siguiente: Ha tenido pensamientos de muerte como “no puedo seguir adelante”, “Desearía estar muerto”, pero no tiene ningún plan. Las acciones a tomar son: ofrecer apoyo emocional, derivar a atención primaria o salud mental, mantener un seguimiento continuado. ➢ RIESGO MEDIO: El perfil del adolescente es el siguiente: Tiene pensamientos y planes suicidas, pero no inmediatos. Las acciones a tomar son: Ofrecer apoyo emocional, remitir a salud mental y concertar una cita antes de 72 horas, mantener un seguimiento continuado. ➢ RIESGO ALTO: El perfil del adolescente es el siguiente: tiene un plan definido, medios para llevarlo a cabo, y planea hacerlo inmediatamente. Las acciones a tomar son: permanecer con la persona, nunca dejarla sola, mantener conversación y alejar los medios potenciales de suicidio, poner en marcha la derivación inmediata del adolescente a urgencias para su valoración por salud mental.