La tarea es hundir la reforma Académico Administrativa en la Universidad Distrital 17 abril, 2014 U. Distrital, Universidades Grupo de Trabajo Dignidad UD, Bogotá 16 de Abril de 2014 La indignación manifiesta en las masivas movilizaciones de la universidad durante las últimas semanas es la respuesta a la reforma académica y administrativa de carácter estructural aprobada mediante los acuerdos 008 y 009 de 2013, que profundizan la crisis de nuestro claustro repitiendo los errores del gobierno de Santos en la reforma de la Ley 30 del 2011. La reforma presenta a nuestro juicio dos errores: uno de procedencia, ya que fue elaborada y aprobada a espaldas de la comunidad universitaria. Pese a su inconformismo, el CSU aprobó los acuerdos el 28 de noviembre de 2013, época de finalización de semestre, con un quórum irregular que infringe la norma. Además, tres de los cinco miembros del CSU que aprobaron dicha reforma provienen de las entrañas del Gobierno de Santos: (1) La representante del Presidente de la República, (2) el representante del Ministerio de Educación Nacional y (3) el representante del sector productivo, José David Lamk Valencia, antes subdirector del ICETEX y asesor del ministro de Educación Nacional. Por lo que es fácil deducir que estos personajes no representan el sentir y las necesidades de la Universidad Distrital.
El segundo problema es su contenido: los acuerdo 008 y 009, que moldean la Universidad al contexto de la globalización, empiezan por desconocer la crisis en la que se encuentra la institución y proponen una educación pertinente a las competencias y necesidades del mercado laboral, fusionando diferentes disciplinas y campos del conocimiento y ampliando la oferta de programas a distancia y virtuales con el objetivo de promover la consecución de recursos propios. El continuo desfinanciamiento ha hecho mella con un déficit presupuestal de $191.000 millones de pesos, por lo que son muchas las piruetas que se hacen para mantener a la U. Distrital en funcionamiento, entre ellas, el desmedro de la calidad, la tercerización laboral por medio de OPS, la contratación docente por fuera de planta, la pauperización de la investigación y la escasa inversión en infraestructura. Hay un faltante de 7,6 metros cuadrados por estudiante, notorio en el hacinamiento de salones, bibliotecas y “áreas de esparcimiento” de cada una de las sedes. A pesar del déficit presupuestal, el 008 y el 009 plantean crear 2 facultades, 38 carreras nuevas, 18 departamentos, 11 centros, 5 institutos y una superestructura administrativa que requiere duplicar los cargos administrativos, sin ningún recurso adicional por parte del gobierno y relegando a segundo plano el fin primero de la universidad: la academia de alta calidad. Y acaban con facultades de importancia histórica para la universidad y la ciudad, entre ellas la Facultad Tecnológica, insignia de Ciudad Bolívar, la Facultad de Medio Ambiente y Recursos Naturales, pionera en América Latina, la de Artes ASAB, catalogada como patrimonio cultural, y la de Ciencias y Educación, en la que se forma el 30% de los docentes presenciales en Bogotá, todo ello con miras a adecuar los programas de licenciaturas al nuevo estatuto docente que desprofesionaliza la carrera y arrebata derechos laborales a los maestros. Se hace indispensable entonces emprender el más grande esfuerzo por unificar las exigencias de las diferentes expresiones gremiales y políticas de la universidad, avanzando así en formas organizativas democráticas para abocarnos finalmente a un gran paro estudiantil, profesoral y de trabajadores. El punto de confluencia será la derogatoria de los Acuerdos 008 y 009 y la exigencia de garantías para la construcción democrática de una nueva reforma consecuente con la Ley Alternativa de Educación Superior de la MANE, pues ninguna reforma enmarcada en la Ley 30 dará solución a la crisis estructural de la Universidad Distrital. Contra el 008 y el 009, por la Ley Alternativa de la MANE y contra la política de Juan Manuel Santos ¡Vamos al Paro en la Universidad Distrital!