Coro virtual de Colombia 2015 revista copidrogas

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Cultura

Esta novedosa iniciativa logró reunir vía remota a 200 cantantes colombianos –residentes en siete países–, quienes interpretaron con majestuosidad la canción ‘El pescador’, del maestro José Barros. El músico Alejandro Zuleta, quien dirigió este proyecto, falleció en noviembre pasado.

Año José Barros cerró con broche de oro

CORO VIRTUAL

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a idea parecía una hazaña: un coro cuyos integrantes nunca se iban a conocer; los seleccionados debían ser colombianos, pero no había límite de edad o procedencia para hacer parte de la iniciativa, y tampoco era necesario tener una gran formación musical acreditada. No. Solo se trataba de las ganas inmensas de hacer, con algo fuera de lo común, un homenaje al cantautor caribeño José Barros (nacido en El Banco, Magdalena), a propósito del centenario de su natalicio, que se cumplió en 2015, declarado, justamente el ‘Año José Barros’. El sueño se hizo realidad y, tras un año de trabajo, el pasado 22 de noviembre fue presentado al país el Primer Coro Virtual de Colombia, interpretando la canción El pescador, del consagrado compositor. Doscientas voces de jóvenes, niños, adultos y ancianos de diferentes hemisferios y latitudes lo hicieron posible. El Primer Coro Virtual de Colombia es una apuesta que formó parte de las diferentes actividades y proyectos que el Ministerio de Cultura llevó a cabo durante el año pasado para conmemorar dicho acontecimiento. Marysabel Tolosa Escobar, asesora de la Dirección de Artes del Ministerio de Cultura

a la inclusión

y pieza fundamental de este proyecto, indica que la decisión de hacer un coro y no una canción, una película u otra expresión artística, se explica porque la obra del maestro es vocal, por lo que era apenas pertinente exaltar ese legado. Pero la idea fue alimentándose de la creatividad de muchos compatriotas y llegó hasta el espacio virtual: “Surgió ante la sentida necesidad de contar con la participación de colombianos de distintos lugares del país o, incluso, residentes en el exterior. Siempre se quiso que la convocatoria no estuviera enmarcada por un límite de edad o exigencias en cuanto a formación musical o procedencia; era realmente quien cantara y tuviera unos mínimos de afinación. Por eso, hacerla virtual e invitar a las personas a hacer uso de las TIC para enviar su propuesta fue una estrategia genial, muy bien pensada”, agrega la señora Tolosa. Con la idea del Coro Virtual aprobada, se buscó un director y el elegido fue el recientemente fallecido Alejandro Zuleta (ver recuadro), uno de los más insignes coristas de Colombia, así como asesor del Plan Nacional de Música desde sus inicios. “Es un orgullo y un honor pertenecer a este proyecto”, afirmó el maestro Zuleta (q.e.p.d.)


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Quienes fueron seleccionados para participar del Primer Coro Virtual no recibieron ningún incentivo económico, lo cual da un valor aún mayor a esta experiencia.

Un grande homenajeando a otro grande

Foto: Alexander Arteaga – MinCultura

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or un infortunio de la vida, el maestro Alejandro Zuleta Jaramillo no alcanzó a ver materializado el trabajo con el que culminó el homenaje al maestro José Benito Barros Palomino y que adelantó con ahínco y pasión, como bien lo describen colaboradores cercanos a él. El pasado 2 de noviembre, falleció en Bogotá. Con su muerte, Colombia pierde a uno de los más destacados directores y pedagogos corales. Su aporte formativo y musical, arraigado en miles de niños, jóvenes y directores corales de todas las regiones, seguirá vivo a través de sus voces y sus espíritus cultivados por el canto coral. Profesional del Conservatorio de Música de Brooklyn (Nueva York), con máster en Dirección Coral de la Bowling Green State University, Zuleta se desempeñaba como profesor asociado del Departamento de Música de la Pontificia Universidad Javeriana. Su labor pedagógica estuvo enfocada hacia la formación de maestros, directores de coros infantiles y juveniles, y a la exaltación de la música colombiana. Creó la Fundación Coral Santa Cecilia. También, dirigió el Coro de la Ópera de Colombia (1996, 1997 y 2001) y en 2001 recibió el Premio Excelencia Coral. El maestro Zuleta murió a la edad de 57 años (había nacido el 21 de junio de 1958, en Bogotá), luego de padecer una enfermedad terminal que lo venció, pero que no le impidió cumplir a cabalidad su misión en pro de la música hasta sus últimos momentos.


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al aceptar el reto. “Es fantástico, alocado y maravilloso que podamos tener una gran cantidad de gente de Colombia y el resto del mundo cantando el maravilloso legado musical que nos dejó José Barros. Crecí con su música y recuerdo que amenizaba mucho las fiestas; ahora se ha convertido en un ícono y un patrimonio para nuestro país. El pescador es una de las canciones que más poesía tiene; su melodía es una de las mayores fuentes de trabajo coral para los proyectos que he emprendido en coros durante mi carrera”, aseguró el maestro Zuleta, a quien una enfermedad le impidió ver culminada su obra. AL RITMO DE LA TECNOLOGÍA El proyecto Coro Virtual de Colombia puso la tecnología al servicio de la práctica coral. En efecto, fue a través de internet que se lanzó la convocatoria y por esta misma vía se recibieron las casi 300 postulaciones. Teniendo en cuenta los términos de referencia y unos tutoriales que se publicaron en la página web del Ministerio de Cultura, los participantes debían elaborar un video interpre-

La pieza se presentó al país el 22 de noviembre para celebrar la fiesta de Santa Cecilia, conocida como la patrona de los músicos.

tando la canción El pescador, con los arreglos hechos por el maestro Zuleta. También se desarrollaron unas ayudas para facilitar a los participantes el envío del material. “Sabíamos que, aunque hay personas que leen el lenguaje de la música, existen otras con un excelente registro de voz, pero completamente empíricas. Por ello, además del convencional recurso de las partituras, el maestro Zuleta produjo una grabación de las cuatro líneas de voces (soprano, alto, tenor y bajo) para que a los participantes se les facilitara identificar en cuál ‘rango’ estaba la suya”, narra Tolosa. Adicionalmente, se grabó un video tutorial en el cual se explicaba con lujo de detalles cómo hacer la grabación de la mejor manera. Tolosa recuerda cómo iban llegando videos desde distintas regiones de Colombia y del mundo y cómo se sorprendieron al recibir propuestas de lugares remotos, tales como China o Rusia. “Era muy emocionante en la medida en que veías desde el más pequeño hasta el más anciano, mestizos, afros, cantaoras… Reconocernos en esos rostros, en esas voces, fue realmente especial”. Luego de recibir las propuestas, el maestro Zuleta adelantó la selección teniendo en cuenta aspectos como calidad interpretativa y expresiva, claridad, precisión rítmica, afinación y calidad sonora. “Recibimos videos de intérpretes que cumplían en todo lo referente a su voz e interpretación, pero decidieron cantar otra canción, como, por ejemplo, La piragua, recuerda la vocera de Mincultura. Tras un arduo trabajo tanto del maestro Zuleta como de todo el equipo que hizo parte del proyecto, al final quedaron seleccionados coristas de 21 departamentos y 51 municipios, así como colombianos radicados en


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Rusia, Austria, España, Estados Unidos, Chile, Brasil, Venezuela y Aruba. Con las voces ya elegidas, se inició un riguroso proceso de edición y mezcla de los videos enviados. Estos, sumados a la propuesta gráfica –compuesta por escenarios de la vida del maestro Barros, paisajes colombianos, fiesta, color y, por supuesto, los rostros de todos los participantes–, dieron como resultado la pieza musical que durante todo el 2016 estará disponible en los distintos medios de comunicación del Ministerio de Cultura, como en la señal1 Pauta Almohadilla Metartaso MEDIA así CARTA finalizada.pdf

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de televisión institucional. De esta manera se cierra con broche de oro el homenaje al gran José Barros, con quien el maestro Zuleta seguramente estará gozando de las mieles de la eternidad. Eso sí, en lo que tanto él como los demás involucrados en el proyecto coincidieron es que el Coro Virtual de Colombia se constituye en un ejemplo para replicar la experiencia con otras piezas o expresiones musicales que nos identifican y que tanto abundan en nuestro territorio. Paz en sus tumbas para los maestros Barros y Zuleta.


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