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THE KEY TO A TASTE OF TRADITION Since our establishment in 1698 at No. 3 St James's Street, we have acquired 3 centuries of knowledge and expertise, making us the authority on wine and spirits.

No. 3 – A Taste of Tradition

www.no3gin.com

Disfruta de un consumo responsable. 46º

YOROKOBU / TAKE A WALK ON THE SLOW SIDE / Nº 34 - 2012

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THE KEY TO A TASTE OF TRADITION Since our establishment in 1698 at No. 3 St James's Street, we have acquired 3 centuries of knowledge and expertise, making us the authority on wine and spirits.

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YOROKOBU / TAKE A WALK ON THE SLOW SIDE / Nº 34 - 2012

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LA PORTADA Para todo el mundo, los cuernos tienen

mala fama. Está claro que a nadie le gusta que se los pongan, pero para Alejandro Jarne —más conocido como Alejarne— los cuernos significan mucho más. “Los cuernos significan fuerza y crecimiento”. “Fuerza, porque es el arma que usan los ciervos para pelear entre ellos y hacerse con el control de la manada, y crecimiento, porque cada año los pierden, y cada año les vuelven a crecer con un asta más. Es su manera de mostrar al mundo su madurez y su poder”, dice este director de arte. En su ciudad natal, Jaca (Huesca), hay una manada de ciervos que viven en el foso de la Ciudadela. Ha pasado muchas horas de su niñez mirándolos y, todavía hoy, siempre que pasa por allí, va a hacerles una visita. Siempre le han fascinado, y esa fascinación ha acabado convirtiéndose en una obsesión: cada vez colecciona más cosas de ciervos, algo que empieza a ser preocupante para sus amigos y su familia. “Para mí es el animal de la suerte”, afirma Alejarne.

Por eso, cuando le dijeron que podía colaborar haciendo la portada de Yorokubu, pensó que era el momento de rendir homenaje a este venado. Concluyó que no había mejor manera de representar su suerte que con un ciervo. “Y no un ciervo cualquiera, sino un ciervo al que, como Yorokubu, cada vez le crecen más astas, porque cada vez es más maduro y en cada edición se consolida más y más como un ciervo adulto bien formado”. Este ciervo no está solo. Lo acompañan dos cervatillos que lo observan y lo complementan..., “porque todos crecemos cuando colaboramos con los demás”. La naturaleza y la madre tierra aparecen representados en los elementos geométricos que destacan entre los astados animales. Al menos esa es su forma de verlo. Claro que también es la manera de crear un espacio perfecto para que destaque el elemento central: la cornamenta. cargocollective.com/allaboutmyjob

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YOROKOBU

DIRECTOR

JEFA DE PUBLICIDAD

REDACTORA JEFE

DEPARTAMENTO COMERCIAL

Juanjo Moreno juanjo@yorokobu.es

Mar Abad mar@yorokobu.es

COMMUNITY MANAGER Marcus Hurst marcus@yorokobu.es

NÚMERO DIRECCIÓN DE ARTE LuisB luisb@luisbboy.com

REDACCIÓN

NOVIEMBRE

David García david@yorokobu.es Gema Lozano gema@yorokobu.es Ximena Arnau ximena@yorokobu.es José Luis Colomina colo@yorokobu.es

DIRECTOR COMERCIAL

Rocío Martí rocio@yorokobu.es

Laura Calvo laura@yorokobu.es Marisa Caballero marisa@yorokobu.es Pedro Monzó pedro@yorokobu.es Silvia Moreno silvia@yorokobu.es

DELEGACIÓN BARCELONA Albert Gomez agomez@guerrillademedios.es Jordi Granja jgranja@guerrillademedios.es

SUSCRIPCIONES

Carmen Lago carmen@yorokobu.es

DIRECTOR DE PRODUCCIÓN José María Latorre jmlatorre@comunicartespp.com

Fermín Abella fermin@yorokobu.es

C/Acebo, 13 - 28016 Madrid t. 914 157 283 www.yorokobu.es twitter: @yorokobumag

Edita: Brands & Roses, S.L. Impresión: Rivadeneyra www.rivadeneyra.com. Depósito legal: M42701-2009

HAN COLABORADO EN ESTE NÚMERO Antonio Dyaz

Iñaki Berazaluce

Francesc Beltri Gebrat

LeRaúl

Javi Creus

Luis Bradstrich

Escritor y director de cine www.antoniodyaz.com

Socio Mediterráneo Consultores www.beltri.com

CEO de Ideas for Change javicreus@ideasforchange.com

Periodo de Control: Abril 2011 / Diciembre 2011 Tirada media 30.741

Jesús Revuelta

Creative director at Doubleyou j.mp/Jesus_Revuelta

Heriberto Noguera Diseñador gráfico www.lagalga.es

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Periodista iñakiberazaluce@gmail.com

Ilustrador Ysinosquitanlobailao.com

Fundador y CEO de Supertruper bradstrich@gmail.com

Relajaelcoco

Bomberos toreros www.relajaelcoco.com

Sergio C. Fanjul

Periodista scfanjul@gmail.com



ÍNDICE medidor de concentración

Quants. Científicos que se meten a financieros

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Kenia, referente en innovación

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Huerta Tipográfica

Mi primer Arduino, ¡chispas!

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Los makers, las fábricas de barrio y el derecho al recambio

Marketingcopia o la miopía comercial

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Aprende sumerio en 15 días

El mundo tiene futuro

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Yomango al Tendero Luminoso

Anorak

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Grises por fuera, verdes por dentro

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Pablo Alfieri

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New York: distrito bici

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De Loveland, con amor

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Moscú

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Dormir en una sastrería

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Infografía

Le Raul

Numerografía

Agenda

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80

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No leas, ¡dibuja!

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Mar Abad (@marabad)

POR

LA CAPITAL RUSA DESDE LOS OJOS DEL FOTÓGRAFO SALVI DANES Frío. Por dentro y por fuera. Un Moscú gélido. Desde sus propias entrañas. Desde la oscuridad que aflora en las ciudades cuando la luz se va. Es la ciudad que busca Salvi Danes cuando sale con su cámara por la capital rusa. Es el lugar donde, “envueltos en polvo, pasaban volando resonantes cambios y, en ellos, sobre sacos, tendidos con las barrigas hacia arriba, iban unos hombres”. Eso relataba Mijaíl Bulgákov en Maestro y margarita. La soledad desborda cada una de las fotografías de Danes. Las presencias evocan ausencias. “La ciudad es un núcleo ajeno, llena de acompañantes, pero vacío de compañeros.

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La soledad desborda cada una de las fotografías de Danes. Las presencias evocan ausencias. “La ciudad es un núcleo ajeno, lleno de acompañantes, pero vacío de compañeros. Transportados por un flujo intangible, destinados a observar como figurantes en una trama con final pactado”, explica el fotógrafo. Danes ve Moscú como “el paradigma soviético, una capital descomunal, desconocida hasta hace relativamente poco”. Una ciudad “donde parece observarse una dislocación en sus habitantes por el impacto de una realidad compleja, fruto de una historia convulsa que ha transitado del feudalismo zarista a la dictadura del proletariado, y del comunismo al reciente liberalismo económico”. Ese misterio de “cómo vive realmente una sociedad, cada uno de sus miembros, en una organización humana y social con una realidad compleja, fruto de una historia convulsa” llevó al fotógrafo a las calles de Moscú. Un lugar donde impera una religión “con un carácter ideológico muy marcado, pilar del antiguo régimen, y una gran barrera para el cambio social. Un difícil posicionamiento del pueblo, tan obligado a seguir estelas y tan poco tenido en cuenta a la hora de constituir una voz crítica y constructiva”. Su intención era elaborar “un documento vivo, impecable y objetivo 8 / YOROKOBU / Nº34-2012


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sobre el día a día de la sociedad rusa”. Quería “crear conciencia” de esta situación desde la fotografía. “Se puede plantear como un diario personal que, al mismo tiempo, genere un documento metafóricamente válido. Un principio que muestra la vigencia de un lenguaje: registrar la realidad de manera concisa y meditada, que cada imagen sugiera interpretaciones personales, pero encaminado desde el mismo discurso. Mostrar la parte más difícil de explicar”. El frío traspasa la temperatura y se adentra en lo político. La actualidad no es tan distinta al pasado. “La figura de Putin está llevando a cabo una política de acumulación de poder y de concentración de competencias en la Federación Rusa en detrimento de una verdadera democracia”, comenta Danes. “¿Cómo afecta esto a su población? No se puede negar la evidencia de que el poder estatal está regido por una ley arbitraria. Se deposita en el estado la capacidad de pensar. Muchos pueden alegar que ‘por algo será’ y evitan, así, cuestionarse nada. ¿Por qué se delega en otros el acto de pensar? Quizá por no sentir marginación y desamparo, para reforzar ilusoriamente los sentimientos de pertenencia al cuerpo social”. Danes paseó por Moscú para descubrir esas imágenes que él considera “subjetivas” y “discutibles”. “No es fácil mostrar el ahogamiento del tabú, la actitud 10 / YOROKOBU / Nº34-2012


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vital pasiva o la represión social. Son las actitudes, los comportamientos, los caracteres... Una visión introspectiva, de difícil captación por su calidad sutil y casi imposible de tocar”. Es, en sus palabras, “la traducción fotográfica y plástica” de la sociología de Moscú. El fotógrafo catalán buscó una “estética impactante”. Hizo un “uso expresionista del flash con una extremada dureza para recortar y siluetear las figuras fotografiadas”. En ellas pretende reflejar el “aislamiento existencial y social en que viven los personajes retratados”, especifica. “Muchos de los sujetos registrados por la cámara adquieren un carácter artificioso, extranormal, como si fueran maniquíes o humanoides que habitan un mundo sentimental y relacional extrañamente humano”. Dice Danes que estas fotografías tienen “una luz estridente, pero que, paradójicamente, resultan silenciosas, mudas, como si también fueran una metáfora de la intensa incomunicación en que coexisten estos sujetos individuales, o los fragmentos urbanos como alegorías del ahogamiento que la masa urbana produce en el ser vivo, ya sea una estatua o una persona en el tren”. 12 / YOROKOBU / Nº34-2012


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La economía informal (también conocida como economía sumergida) no tiene nada de nuevo. Al parecer, los seres humanos siempre han tratado de evadir las regulaciones, no pagando impuestos o teniendo actividades no controladas por el gobierno.

cillez y colaboración son los principales pilares de la informalidad, ya que circula lo único y estrictamente necesario.

Agarraros a vuestras sillas cuando veáis que la economía informal mundial representa: - $ 10 billones, es decir el segundo mayor PIB en el mundo, - en mercados emergentes, emplea hasta un 80% de la fuerza laboral, - y es la economía creciente más rápida en los mercados desarrollados y emergentes.

Los expertos en el tema apuntan que no se trata de economía formal o informal, sino de integrar ambas. Y que esta solución en ningún caso vendrá dada por las multinacionales. La sociedad tendrá que participar activamente en este cambio. Aprendiendo e incorporando soluciones a la problemática actual. Entendiendo que el compromiso entre sociedad y organizaciones es y será fundamental.

A principios de la década de los 70, el dinero se convirtió rápidamente en algo ingobernable, sobre todo debido al neoliberalismo y la masiva privatización, esto provoco más complejidad en el sistema.

Debemos buscar los entornos adecuados en los que el cambio de una economía informal a una economía humana sea posible. Tal vez, por medio de corporaciones, que entiendan su nuevo papel y sepan sentar las bases, creando la infraestructura necesaria para que la sociedad participe y construya. Una de las formas sería buscando patrones en sociedades emergentes que nos inspiren y nos aporten luz. Sigo pensando en parte que es de ellas de las que tenemos que aprender.

Keith Hart, antropólogo y economista, comenta que la informalidad es “hija” de la burocracia y la sociedad. Hoy, el dinero global y las políticas públicas se enfrentan a un nuevo paradigma. Probablemente por eso, el mismo Hart exclama, “¡la regulación en la actualidad es una broma!”. La economía informal a menudo se desarrolla dentro de una negociación flexible, donde la confianza, el tiempo y el dinero son las variables más importantes. Originándose una red de confianza entre todas las partes, que resulta la mayoría de veces en transacciones donde las dos partes salen ganando. A diferencia de los países industrializados donde existe una planificación a largo plazo, los mercados emergentes informales a menudo se basan en las inversiones de riesgo a corto plazo para la propia supervivencia. Sostenibilidad, sen-

¿Por qué no beneficiarnos del estado actual de “meta-inestabilidad” del mundo para renovarnos?

Los estudios muestran que muchos países de la parte inferior de la pirámide (BdP) se encuentran en la parte superior en cuanto a índice de felicidad, a pesar de que se consuman 20 veces menos recursos que los países industrializados. Sabiendo que los países emergentes representan el 80% de la población del planeta, con el fin de evolucionar, entonces ¿quién tiene que aprender de quién? Tiago Dias Miranda (@normaluser) Design & Innovation www.soulsight.es


POR JAVI CREUS

LOS MAKERS, LAS FÁBRICAS DE BARRIO Y EL DERECHO AL RECAMBIO Un movimiento está abriéndose paso en los barrios. Si no están en el tuyo, tú puedes empezarlo. Son los makers —productores—, las personas que provistas de máquinas de impresión 3D, cortadoras láser, brazos de robot o impresoras de circuitos digitales ‘hacen’ (fabrican, producen, crean) objetos: arte y artesanía, coches y robots, casas y muchas de las piezas necesarias para replicar sus propias máquinas también. En Barcelona, en Madrid, en Berlín, Helsinki, Copenhague o Nueva York. Son fabricantes personales. Pueden fabricar lo que diseñan desde la primera unidad. Pueden, como apunta Chris Anderson, financiar lo que diseñan para un número limitado de compradores a través del crowdfunding. Pueden, propongo, devolvernos las fábricas al barrio. Qué bueno sería tener una fábrica de proximidad, como un súper o un bar. Un lugar al que pudieras ir no solo con tu idea, sino también con una necesidad. El asa de plástico de la cazuela que se requemó. La cubeta del carburador de mi moto que ya no se fabrica. La junta imposible. Los recambios de todo. La lucha contra la obsolescencia planificada empieza por la

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posibilidad de conseguir recambios para las piezas que se estropean. Es comprensible que un fabricante discontinue la fabricación de una pieza porque no exista demanda suficiente o porque ya no tenga los costes para producirla. Es comprensible que un distribuidor no la almacene si no tiene una mínima expectativa de revenderla en un periodo razonable de tiempo. Pero ahora ya no es razonable. Tiramos muchas cosas. Tiraríamos menos si el fabricante dejara en abierto —disponibles para todos— los diseños de los artículos que ya no va a fabricar más. Algunos fabricantes optarían directamente por poner el conjunto del producto en abierto desde el primer día y se olvidarían para siempre del servicio postventa. La democratización de la fabricación y el derecho al recambio pueden cambiar radicalmente nuestra relación con los objetos: fabricar lo que imaginas o conservar lo que amas con un esfuerzo sensato puede dar más valor —y más vida— a muchas de las cosas que nos rodean. Porque el objeto solo muere cuando la información para reproducirlo muere con él.



POR FRANCESC BELTRI GEBRAT

MARKETINGOPIA O LA MIOPÍA COMERCIAL La miopía es el estado refractivo en el que el punto focal se forma delante de la retina cuando el ojo se encuentra en reposo, en lugar de en la misma retina, como sería normal; contrario, por lo tanto, a la hipermetropía, en la que la imagen se forma detrás de la retina. Al igual que en la miopía óptica, las empresas con miopía comercial tienen dificultades para enfocar bien los objetos lejanos, o su futuro comercial, y les puede conducir también a dolores de cabeza, estrabismo, incomodidad visual e irritación en la estrategia empresarial. No consiguen enfocar correctamente sobre las oportunidades, produciéndose la imagen antes o después de su retina de beneficios. Esta distorsión lleva a llamar ‘piratas’ a quienes consumen música, libros o películas al margen de sus canales comerciales. Gran error de percepción que se combate, equivocadamente, persiguiendo estas prácticas e intentando volver a los modelos fenicios del intercambio: dinero a cambio de un objeto. En el momento en que ha desaparecido el elemento tangible, se ha digitalizado y ya no navega por el Mediterráneo; ha desaparecido, para ellos también, el dinero. Peor aún, entienden que se ha desvanecido el negocio. Pobres desgraciados, lo que se ha evaporado es esa anticuada tangibilidad o primitivo cambalache. Me permito señalar que, aunque parezca una obviedad, al ‘pirata’ le gusta escuchar música, ama leer libros y goza con el cine; en consecuencia, no es un ‘pirata’, es un ‘cliente’. El hecho de que legalmente no esté contemplada una forma más mo-

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derna de intercambio comercial no es problema del consumidor, sino del proveedor. No se trata de animar nuevas cruzadas contra esta nueva modalidad de infiel, sino de estimular la creatividad para ofrecerle aquello que le gusta y disfruta. Y, desde luego, no atenta en absoluto contra el autor que sigue siendo objeto de deseo, sino contra la forma de distribución romántica y marinera. Mientras se le siga llamando ‘pirata’ se le perseguirá con leyes impotentes y caducas que poco o nada pueden hacer. Si, por el contrario, se le piensa como ‘cliente’ que ama y desea música, libros y cine, abrimos la puerta a la innovación comercial y no a la persecución legal. ¿De verdad existe algún ingenuo que piensa que mayor firmeza legal reactivará el negocio? Un ejemplo vivido: hace algunos años, con la aparición de cámaras y sistemas acústicos para sustituir a los retrovisores en los automóviles, asistí a una crispada reunión en la que un fabricante de estos últimos se desesperaba ante la competencia, que temía le desplazara fatalmente del mercado. Por fortuna, entre los asistentes había un profesional que no padecía marketingopia, o miopía comercial. Tomó la palabra y afirmó con serenidad: “Nuestro trabajo no es fabricar retrovisores”. Ante la estupefacción de los asistentes, experimentados ingenieros y productores del espejito, reiteró: “Nuestro trabajo, y de lo que sabemos, es informar al conductor de aquello que necesita saber y está fuera de su campo visual. Hasta ahora lo hemos hecho con retrovisores y nuestro reto es seguir haciéndolo”. Simple, no fácil, pero, por favor, vale ya de llamarnos ‘piratas’.



POR ANTONIO DYAZ

APRENDA SUMERIO EN 15 DÍAS Primero fue el humo. Luego los tambores. Cuando algo sucedía, esa información se transmitía a otra comunidad mediante hogueras o golpeando pieles de animal tensadas y secadas al sol. Los vigías, apostados en las montañas, reproducían el mensaje a los suyos, y así viajaban los datos, de aldea en aldea, limitados por los sentidos de los hombres. La primera grafía conocida es una tablilla sumeria con signos cuneiformes que cumple ahora 5.000 años de edad. En ella, un funcionario llamado Kushim hablaba de una cierta cantidad de cebada y unas fechas de entrega. Luego llegaron los papiros egipcios y sus jeroglíficos, que descifró Champollion gracias a la Piedra Rosetta, y más tarde las culturas precolombinas asombraron con sus precisos petroglifos. La oscuridad que se abatió sobre Europa durante la hegemonía del cristianismo tuvo, no obstante, un lado luminoso. En los scriptorum de los monasterios se copiaban a mano las obras del saber (no todas, ciertamente, solo las que no suponían peligro para Roma). Y así hasta 1440, cuando Gutenberg inventó la imprenta (aunque los chinos ya tenían algo parecido cuatrocientos años antes). Pero, de pronto, en la segunda mitad del siglo XX todo cambió. Llegó el bit. Nada volvería a ser como antes... Sin embargo, no perdamos de vista que internet acaba de aparecer, e igual que surgió de la nada puede esfumarse de una década a la siguiente como Minitel, el RDSI, el hula hoop o Los Héroes del Silencio. Piensen en ello. Nunca un desarrollo tecnológico tan trascendental se implantó tan rápido

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entre nosotros. No concebimos la vida sin internet (algunos, los llamados ‘nativos’, ni siquiera la recuerdan). Lo de Gutenberg tuvo mérito, pero a nadie cabe atribuir la irrupción de los soportes digitales. Las cintas que se movían espasmódicamente en las viejas películas de ciencia ficción, normalmente de IBM, suplieron a las tarjetas perforadas: una tarjeta, una instrucción (o línea de código). Más tarde, llegaron las cintas de menor anchura y más manejables. Era el acceso lineal: había que rebobinar o adelantar la cinta para llegar al punto en cuestión. Y de ahí al disco: los flexibles de 8” y los de 3.5”, también flexibles, pero protegidos por una carcasa rígida que cabía en un bolsillo, con los que Sony se llevó el gato al agua. Las memorias flash, las tarjetas SD, los pendrives..., pasando por los CD, DVD, Blue Ray, láser disc (que en paz descansen), DAT (digital audio tape), las VHS, las Betacam, la casete de gasolinera y rumba... ¡Y el vinilo! ¡Y el ebook! Y cada soporte viene acompañado de una pléyade de formatos: MP3, AVI, MOV, AIFF, PDF, DOC, JPG, Epub, FB2, MOBI... Todo queda obsoleto con velocidad pasmosa, y las grandes firmas de consumo desprecian la llamada compatibilidad vertical: tu nuevo equipo no leerá tus antiguos datos. Todo ello en unas pocas décadas. ¿No resulta sospechosamente volátil? No creo que ninguna de las tecnologías surgidas en este período sea leída o entendida dentro de 5.000 años, como la escritura cuneiforme. Esa es la razón por la que me he apuntado a un curso intensivo de sumerio. Más información en www.sumerian.org @AntonioDyaz



POR LUIS BRADSTRICHZ

EL MUNDO TIENE FUTURO Llega un día en el que te saturas de tanto pesimismo y de tanta estupidez, de leer una y otra vez la misma noticia con distintas palabras, de escuchar a los mismos tertulianos y su desconocimiento de los temas que tratan, de ver las mismas caras expresando medias verdades. Y te preguntas qué aporta todo esto a tu vida. Y, a poco que pienses, encuentras una repuesta tan simple y cierta que casi te ciega: nada, absolutamente nada. Y dejas de leer los periódicos, y de escuchar la radio, y de perder el tiempo con la televisión; y dejas de picotear por internet, y empiezas a olvidarte de sus nombres, de sus caras, de ese paraguas gris plomizo que todo lo cubre. Y te das cuenta que esa crisis asustadiza y pertinaz empieza a desaparecer de tu vida, de tus pensamientos y, de repente, vuelves a tener tiempo para devorar libros, para profundizar con alegría en los temas que de verdad te importan. Y te sientes mejor, y lo transmites, y la suerte te busca y encuentras personas, grandes personas que hacen de su tiempo, de su profesión un instrumento para ayudar a los demás, en silencio, sin buscar la fama, sin querer salir en las noticias, transmitiendo su sabiduría de forma anónima, con la verdad de su lado nacida de largas horas de estudio y duro trabajo. Y te encuentras con grandes titulares agradeciendo el trabajo de enormes personas: “Con gente como él, el mundo tiene futuro. Profesional, cercano. Gracias por salvar vidas y vidas, y seguir con esperanza y unas palabras de aliento siempre”. Y de verdad piensas que el mundo tiene futuro porque está

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lleno de buena gente, y de lo insignificantes que somos, y que aun así todos debemos aportar lo mejor de nosotros mismos para construir un mundo mejor, y de que hay que hacerlo inmediatamente. Y me doy cuenta de que todos podemos ayudar, que tú puedes ayudar, que yo puedo ayudar. Y encuentro la forma de desarrollar aplicaciones para colectivos especiales que puedan aprovecharse de nuestra tecnología, y convenzo a mis accionistas para poder hacerlo, y encuentro mejores personas que se embarcan en el proyecto, y aprendo de ellos, y juntos creamos cosas útiles, y nos damos cuenta de que no hemos hecho nada más que empezar. Y me siento más pequeño, y disfruto de haber descubierto cómo emplear mi tiempo en saber qué es la neuroplasticidad; de saber que para un ciego es imposible distinguir entre una lata de cerveza y una de refresco, y que nosotros podemos ayudarle; de ver cómo el Alzheimer de María Antonia se estanca y que estamos contribuyendo a ese estancamiento; de ayudar a Diego a realizar mejor su trabajo y que los demás olviden que tiene síndrome de Down; de conocer grandes personas que de verdad ayudan, que de verdad importan. Y todavía no he olvidado que hay una vicepresidenta del gobierno, pero ya no me acuerdo de su nombre, y sonrío como un niño al pensar en la suerte que tengo por estar conociendo a los verdaderamente grandes, buena gente que con su saber silencioso nos recuerda todos los días que el mundo tiene futuro… y presente.



POR JESÚS REVUELTA

KENIA, REFERENTE EN INNOVACIÓN Cuando oímos hablar de innovación parece inevitable pensar en espacios limpios, asépticos, ordenados. Laboratorios, ordenadores, robots. Norteamérica, Japón, Alemania. Es evidente que Kenia no aparece asociada a ninguno de estos conceptos en nuestros mapas mentales. ¿Qué ha ocurrido entonces para que se haya convertido en un referente mundial de la innovación? Cualquiera que haya viajado al país, lo haya visto en algún documental o, simplemente, haya echado un vistazo a una guía de Lonely Planet (donde su capital es rebautizada como ‘Nairobbery’), se habrá dado cuenta de que Kenia, como la inmensa mayoría de los países en vías de desarrollo, es, por decirlo suavemente, informal. Informal, como la manera de ganarse la vida de la mayoría de su población, que subsiste con ingresos irregulares e imprevisibles. Piezas de coche sueltas, cigarros vendidos por unidades, artesanía para turistas, DVD piratas, comercio con cabras, y todo tipo de mercancías sin recibos. Una vasta economía sumergida que escapa al control gubernamental y al PIB. Y es aquí, en el caos, donde surge el ingenio dando sentido al término ‘economía informal’, acuñado en los 70 por el antropólogo Keith Hart. Este contexto es un caldo de cultivo excelente para la innovación, la observación y el análisis. Como afirman Alexa Clay y Kyara Maya Phillips —autoras del libro The Misfit Economy, que será publicado en 2013— es precisamente de “los gangsters, los agitadores, los hackers, los falsificadores, los fanáticos, lo escondido, los estafadores y los provocadores de quienes tenemos que aprender”. El servicio keniano M-PESA, un referente (o un jaque) para la banca mundial -M-PESA (M de móvil; PESA, en swahili, ‘dinero’) - es un producto de telefonía que, en sus inicios, fue diseñado para permitir recibir microcréditos a través de la omnipresente red de distribución de recargas móviles de Safaricom, una filial de Vodafone. Este sistema permitiría reducir costes a las instituciones de microfinanzas, ofreciendo préstamos más competitivos a los beneficiarios kenianos.

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Sin embargo, cuando los primeros usuarios lo probaron, la herramienta fue empleada de maneras diferentes, lo que llevó a sus propietarios a redefinir el servicio y a adecuarlo a dichos usos. Realizar pagos a través del móvil, enviar y recibir dinero, y retirar efectivo en cajeros y distribuidores de Safaricom son sus principales usos en la actualidad. Es decir, hoy, M-PESA sirve para realizar transacciones bancarias sin necesitar al banco. Han inventado nada menos que una forma de saltarse uno de los principales agentes económicos. Y lo han hecho casi sin querer, como meros emprendedores involuntarios. Su éxito ha sido tal que ya es un fenómeno de masas: “En apenas cinco años de vida está siendo usado por el 80% de la población”, según afirma el consultor en dinero móvil, Ignacio Mas, lo que está permitiendo una alta “inclusión socioeconómica”. Los pagos móviles son ahora “el pulso de Kenia”, explica Ben Lyon, VP de KopoKopo, empresa colaboradora de Safaricom. Antes de existir el dinero móvil “era muy difícil saber cuánto dinero circulaba en el sector informal, pero ahora podemos monitorizar estos datos para tomar decisiones políticas”, argumenta Njuguna Ndung’u, Gobernador del Banco Central de Kenia. Este es un claro ejemplo de formalización de una economía informal. Pero, sobre todo, es un ejemplo notable —que no aislado— del que tenemos mucho que aprender sobre la manera en que resuelven problemas en aquellos entornos donde el concepto de crisis es permanente. Ahora que la incertidumbre, la volatilidad, el riesgo y la absoluta pérdida de confianza en las instituciones públicas, políticas y financieras se han instalado en occidente, quizá sea buen momento para empezar a fijarnos en otros referentes más acostumbrados a convivir con estas circunstancias. @JesusRevuelta



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YOMANGO AL TENDERO LUMINOSO

Una breve incursión —por la puerta trasera— en el saqueo de comercios con coartada política POR

Iñaki Berazaluce

“Cuando un desconocido te regala un salchichón, eso es Yomango”. Este inspirado eslogan acompañaba a la imagen de la famosa cleptómana Winona Ryder en la portada del Libro Rojo de Yomango, un manual para mangar en las tiendas que publicó hace una década el grupúsculo subversivo SCCPP (Sabotaje Contra el Capital Pasándoselo Pipa). Al Libro Rojo siguió el Libro Morado. Se distribuyeron 40.000 copias de ambos títulos (cuya edición, por cierto, pagó el Ayuntamiento de Madrid sin saberlo) que muchos aún atesoran como un incunable. Yomango creó escuela. Surgieron capítulos locales en la periferia, como Yomango Tango en Barcelona, pero no fueron los primeros en esquilmar las grandes superficies bajo una coartada política. Una década antes, también en Madrid, tuvo vida efímera el grupo Tendero Luminoso que se ensañó con El Corte Inglés casi tanto como Sánchez Gordillo con Mercadona, su objetivo y el de su alegre pandilla de saqueadores.

TENDERO LUMINOSO

Su nombre era un homenaje a la guerrilla izquierdista Sendero Luminoso que aún colea en Perú. La idea partió del recordado Daniel Wagman, activista estadounidense afincado en Madrid desde los años 70, que trajo a España un feroz anticapitalismo barnizado de un componente lúdico-festivo. El objetivo de Tendero Luminoso era entrar en El Corte Inglés y arramblar con todo por el método de la avalancha, según cuenta Carmen Baroja, una de las participantes en su acto más notable: el asalto de El Corte Inglés de Sol, en 1993. Baroja, de los Baroja de toda la vida, no fue el único apellido ilustre involucrado en Tendero Luminoso. También estaba por ahí el escritor Pedro Molina Temboury y Juan Pablo Wert, hermano del actual ministro de Cultura y profesor de arte en la Universidad de Castilla La Mancha. Ataviado con un frac, Temboury fue el encargado de repartir en la estación de Sol afiches supuestamente emitidos por los

grandes almacenes con el siguiente mensaje: “Ha llegado la hora del saqueo de El Corte Inglés. Te regalamos a la una todo lo que te puedas llevar puesto”. Entre los espontáneos que se apuntaron a la oferta y los más de 20 miembros del comando Tendero Luminoso lograron hacerse con un botín de varios bolsos, frascos de perfume y cremas diversas (lo que se vende en la planta baja de El Corte Inglés), que luego repartieron entre los transeúntes. Lo más importante, sin embargo, fue un intangible: una noticia breve en El País que narraba la ‘gesta’, quebrando el férreo control del —todavía entonces— gran anunciante de la prensa española. “El Corte Inglés ha conseguido intimidar a los medios evitando cualquier noticia negativa relacionada con el grupo, pero aquella se le escapó”, recuerda divertida Carmen Baroja. Tendero Luminoso no tuvo continuidad, pero su legado quedó de algún modo flotando en el contaminado aire de la capital, hasta que el testigo lo recogió...

YOMANGO

Si el nombre de Tendero Luminoso era bueno, Yomango es ya un doble mortal con tirabuzón porque empieza su andadura saqueadora afanando el nombre y el logo de una famosa cadena española de ropa: Mango. David Rodríguez, diseñador, artista y martillo de concejos, fue uno de sus ideólogos. ¿Qué opina Yomango de las apropiaciones de los acólitos de Sánchez Gordillo en Mercadona? “Completamente a favor. Es el único que ha tenido arrestos de pasar de la retórica anticapitalista de cierta izquierda a la acción real”. Vayamos con Yomango. El Libro Rojo y el Libro Morado de Yomango son dos desopilantes manuales para mangar en las tiendas o, más concretamente, en grandes superficies, esas que tienen sistemas antirrobo (‘pitas’) y guardias jurados (‘monos’). Los 20.000 ejemplares de cada uno fueron sufragados por el Ayuntamiento de Madrid gracias a la artería de una popular activista cultural de pelo oxigenado. Los libros corrieron de mano en mano entre okupas, marujas y publicitarios que veían, Nº34-2012 / YOROKOBU / 27


aquello como algo extremadamente ‘cool’. Pero es que, además sus recomendaciones técnicas eran acertadas: “Hasta la propia cadena Mango formaba a sus empleados en técnicas de hurto con los libros de Yomango”, apunta entre risas David Rodríguez. Pero Yomango no se quedaba en la teoría. Si los libros Rojo y Morado fueron su El Capital, la toma del Palacio de Invierno fue el asalto (simulado) al Carrefour de Aluche en la víspera de Navidad de 2004. “Por aquel entonces habíamos descubierto cómo activar y desactivar los pitas a voluntad. Fuimos al Carrefour de Aluche no para robar (eso ya lo hacíamos en el Champion de Lavapiés), sino para sabotear el centro en el día que más facturaba: el 24 de diciembre. El Carrefour tiene cuarenta y tantas cajas, así que entramos más de cincuenta con pitas desactivados escondidos en la ropa. Yo iba vestido de traje y compré una botella de sidra de un euro. Cuando pasé por la caja empecé a sonar. Minutos después empezaron a sonar las alarmas del resto de las cajas, para desconcierto del personal de seguridad. El resultado fue que se montaron unas colas gigantescas porque ninguna caja podía funcionar. Viendo la que se les venía encima, el Carrefour hizo lo más sensato: desconectar las alarmas y dejar salir a todo el mundo, momento que aprovechó el ‘comando jamón’ para salir con dos perniles de pata negra bajo sus gabardinas. Mientras íbamos camino del metro hacia la degustación del jamón, escuchamos las sirenas de la policía llegando al Carrefour”. Este ‘sabotaje contra el capital’ (pasándoselo pipa) fue el golpe más espectacular, pero no el único que dio Yomango durante la pasada década. David se refocila recordando otras acciones de ‘incautación’, como aquella vez que establecieron un ‘pasillo humanitario’ en la FNAC de Callao para atender las necesidades de los heavies: “En una reunión en el Laboratorio*, un grupo de heavies se quejó del precio de los discos, así que decidimos montar un pasillo humanitario para que pudieran sacarlos gratis. Normalmente utilizábamos un señuelo —el que tenía más pinta de yonki— para distraer a los guardias, pero en esta ocasión utilizamos a un bebé, el hijo de Jordi [el Trotsky del SCCPP, para entendernos]. Metimos un pita en el pañal del niño y cuando se disparó la alarma, los heavies salieron cargados de discos. El pobre mono se volvía loco, porque no era el carro ni el padre, ¡sino el propio bebé el que sonaba!”. Hoy las huestes de Sánchez Gordillo asaltan Mercadonas, probablemente con más motivo, pero con mucha menos gracia que Yomango o Tendero Luminoso. Resulta curioso cómo el ‘enemigo’ ha pasado de ser el grupo más poderoso en los noventa —El Corte Inglés— al hipermercado francés en los dos mil; y ahora, en esta atribulada, conflictiva y preapocalíptica década, el pujante grupo de distribución español. * Renombrada casa okupa que trasegó por al menos cinco sedes en Lavapiés y cuya herencia recoge hoy —más o menos— la Tabacalera.

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Los ‘downtowns’ de muchas ciudades estadounidenses se han vaciado. El éxodo de sus habitantes a las afueras ha dejado solares sin alma, asolados por el olvido. Detroit es el ejemplo más extremo, pero este mismo fenómeno se ha replicado, en mayor o menor escala, en todo el país. Una nueva generación de emprendedores intenta dar una vuelta a esta tendencia con una apuesta por la calidad y lo artesanal frente al efecto homogeneizador de los Wal Marts y centros comerciales que dominan los barrios periféricos. Loveland Aleworks, una cervecería artesanal que abrió en julio en el centro de Loveland (Colorado), es un buen ejemplo de cómo, con un poco de mimo y buenas ideas, se pueden crear alternativas a lo de siempre. POR

Marcus Hurst (@marcushurst)

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Tic, toc, tic, toc, tic, toc, tic, toc. 1, 10, 20, 50, 200. Los días pasaban y la licencia no llegaba. Nick Callaway tenía todo lo necesario para empezar a fabricar cerveza. El espacio, el equipo y, lo más importante, las ganas. Pero sin ese papelito del gobierno federal de Estados Unidos no podía empezar a elaborar las recetas que tenía acumuladas en un cajón. Era un sueño que llevaba años gestándose en la cabeza del fundador de Loveland Aleworks. “Ayudé a abrir una microcervecería en mi último año de universidad y la experiencia me marcó”. Antes de realizarlo, Callaway compaginaba este hobby con su trabajo de ingeniero en una gran compañía que no le llenaba. “Tras probarlo, no pude quitarme de la cabeza la necesidad de crear una marca de cervezas”. Casi un año después el permiso llegó, y Callaway pudo encerrarse en su nuevo negocio para empezar a hacer lo que más le gustaba. Desde el comienzo, el emprendedor concibió la cervecería, situada en una nave industrial reformada de finales del siglo XIX en Loveland (Colorado), como un lugar donde acudir para probar sus elaboraciones. La entrada está formada por una sala diáfana que sirve de bar. Los enormes ventanales permiten ver el interior donde trabajan Callaway y sus compañeros para elaborar la bebida. “Queremos equiparar el disfrute de la cerveza al goce del vino”. La identidad y diseño del espacio realizada por Manual Creative, un estudio de diseño de San Francisco, complementa la obsesión del cervecero por hacer elaboraciones sencillas y sin artificios. “Aunque me gusta probar birras experimentales de vez en cuando, hemos optado por volver a lo tradicional. 32 / YOROKOBU / Nº34-2012


Buscar las recetas antiguas y respetarlas lo máximo posible, sin florituras”. La apertura de Loveland Ale Works llega en medio de un auténtico boom por la cerveza artesanal en un país acostumbrado a cervezas aguadas e insulsas. “Ahora mismo, este segmento cubre un 12 % del mercado y un 10 % del volumen en EE.UU. Estoy convencido que esta cifra se puede duplicar”. Un fenómeno que también se está produciendo en los alrededores de Loveland. “Ya tenemos cuatro cerveceras independientes en la ciudad y hay más de una decena en la zona norte de Colorado, donde nos encontramos. Empezamos a tener un verdadero ecosistema. Cuando me faltan ingredientes, me prestan, y viceversa. Es un lugar idóneo para hacer cerveza porque estamos rodeados de montañas que proporcionan un agua muy suave”. No es casualidad que Callaway haya escogido el centro histórico de Loveland para empezar su nuevo negocio. Desde el principio ha querido contribuir a revitalizar una zona que ha sufrido un progresivo abandono, como muchos centros urbanos en Estados Unidos. Promocionar el comercio local y las cosas hechas en la zona se ha convertido en un imperativo para él, pero sin entrar en extremismos. “Servimos queso de Colorado, pero también chorizo español. No hay que perder la perspectiva. Hace falta reivindicar el valor de lo local, pero sin olvidarnos de que estamos en un mundo global ni de mirarnos el ombligo, sino haciendo las cosas bien. La gente poco a poco está volviendo al centro. Tomará su tiempo, pero es imparable”. Nº34-2012 / YOROKOBU / 33


EL EMPRESARIO DEL FERROCARRIL QUE DIÓ NOMBRE A LOVELAND La ciudad de Loveland toma su nombre de William Loveland, el presidente del ferrocarril de Colorado que, en 1877, se inauguró en la zona. La construcción de la línea fue lo que permitió fundar la ciudad y este pasado, relacionado con los trenes, fue una de las mayores inspiraciones para Tom Crabtree, fundador del estudio de diseño Manual, a la hora de crear la identidad de Loveland Aleworks. El exdirector de arte de Apple se esforzó en todo momento por reflejar la historia del lugar sin caer en lo deliberadamente retro. “Notamos que muchas de las cervecerías independientes que han surgido en los últimos años apelan demasiado a la nostalgia (...). Quisimos huir de esto. Aunque, si hacemos referencia al pasado de Loveland como un lugar que se estableció gracias a la línea de ferrocarril, nos esforzamos bastante en que el resultado final fuera moderno”. 34 / YOROKOBU / Nº34-2012


ENCUENTRO ENTRE TRES PALABRAS

PATADA VOLADORA FRIKIS ADVERGAMING Si no hay viento habrá que remar, eso me dijo una amiga mientras hablábamos por teléfono. Yo estaba en el bus y, al colgar, una octogenaria que olía a Polil y tenía un código de barras por bigote me increpó: “Hija mía, no sabes qué es la necesidad. ¡En mi juventud la gente desayunaba, comía y cenaba patatas!”. Muchas empresas y clientes son como esa señora. Tienen tanto miedo a la necesidad que están empeñados en que desayunemos, comamos y cenemos patatas. Todos metidos en una espiral de patatas. ¡Basta ya, oiga! Queremos anchoas y bonito con tomate. Y filete de pollo empanado, tan blandito que parece que esté dentro de un nórdico. Porque, señores que tienen la pasta, la publicidad tradicional está bien, pero a veces aburre a una vaca y ojo que el online también empieza a acomodarse… El like o la vida, menudo sopor. La solución al aburrimiento la tenemos desde hace 4.500 años, que es aproximadamente cuando se data el primer juego de la historia. Es brutal la cantidad de experimentos sociológicos sobre la importancia del juego en el aprendizaje y la memoria, pero nosotros ni caso. Nietzsche se frota las manos y el “eterno retorno” nos obliga a repetir siempre lo mismo, como papagayos amaestrados. ¿Esto ya lo había dicho? Déjà vu. Hay marcas que lo hacen bien y lo especifico con Mixta, porque es nuestro cliente y porque yo he venido aquí a hablar de mi libro. Acabamos de lanzar Mixta Fighter (basado en un videojuego legendario), que permite liberar tensión con patadas voladoras y pelear con los personajes de la saga. El videojuego estará en Facebook y Tuenti y además de tener un valor real para los usuarios, el entretenimiento, potencia la marca con pincodes que dan acceso a poderes extra y desbloqueo de niveles y personajes. No hay cuadratura del círculo. Sencillamente nos divertimos y nos entretenemos. Muchos piensan que los videojuegos son de frikis, pero los frikis son los que no se enteran de que a pesar de la revolución de las redes sociales los videojuegos siguen en nuestro ordenador y en nuestro móvil facturando millones al año. Esos Caínes sempiternos que no ven lo que está pasando son los frikis que ya no juegan. ¿Y sabéis qué pasa cuando se deja de jugar? Que se deja de crecer.

idea y producción de


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NEW YORK: Distrito Bici POR

David García (@SrGarcia)

Es la guerra. Siempre es la guerra. La que mantienen las ciudades tal y como se conciben hoy, los motores y sus malos humos, los conductores y la suficiencia del que se ve en una posición más segura contra los ciclistas y sus locos cacharros. Sin embargo, la voluntad está en el armisticio. Los espacios están condenados a cambiar, a ser compartidos, a dejar de resultar hostiles para nadie. Por eso, los ciudadanos de Nueva york están confeccionando distritos bike-friendly en los que aquellos que van en bici son mirados con mejores ojos. Todo ha comenzado en el East Village y el Lower East Side. Las estrategias para hacer de la bicicleta un medio de transporte aprovechable en una ciudad tan agresiva como Nueva York podrían haberse dibujado de diferentes maneras. Sin embargo, los impulsores de esta forma de surcar la ciudad, Transportation Alternatives (Transalt), pensaron que la mejor forma pasaba por crear comunidad. Optaron por tejer una red de más de 150 negocios bike-friendly, grupos ciudadanos y organizaciones artísticas que comparten la misión de promover un uso seguro de las bicis en los barrios. Más allá de luchar por más kilómetros de carriles bici o por una adecuada adaptación en el uso conjunto de los transportes públicos, han optado por la vía humana y le han dado, además, un cariz económico. La iniciativa, a la que Transalt ha bautizado como Bike Friendly Business District, otorga venatajas a los comerciantes que dan facilidades a los ciclistas. “Gracias a los dueños de las tiendas, los ciclistas disfrutan de eventos y descuentos en restaurantes, teatros y comercios”, explica Miller Nuttle, uno de los impulsores de la iniciativa. Según Transalt, los comerciantes de todo el país se están dando cuenta del valor añadido que suponen unas calles llenas de ciclistas. “Las calles que priorizan a peatones y bicicletas han aumentado las ventas entre un 10 y un 35 %”, señala Nuttle. Según el portavoz de la organización que trabaja para la difusión de medios de transporte sostenibles, los propietarios de

las tiendas saben que las bicicletas significan negocio. “Hacen a los barrios más vibrantes y amigables”. Los interesados en participar pueden solicitar infraestructuras como aparcamientos para los ciclos, pueden ofrecer información acerca de seguridad vial o dar descuentos a aquellos que lleguen en bicicleta. Todo suma en el intento de instalar en la conciencia colectiva el sentimiento de aceptación ciclista. Nuttle explica que Nueva York está dando grandes pasos para convertirse en una ciudad de bicis a nivel mundial. Las organizaciones comunitarias y las autoridades locales están, según señala, ofreciendo un importante apoyo en esta labor. El hito más importante en los últimos años se alcanzará en marzo de 2013, cuando la ciudad estadounidense lance Citi Bike, su servicio municipal de alquiler de bicicletas, que pondrá en las calles de la ciudad del Hudson más de 10.000 máquinas en los barrios de Manhattan, Brooklyn y Queens. Lo que parecía complicado, que un núcleo urbano mastodóntico con un clima con extremos incómodos pudiera acoger vehículos sin motor de manera masiva, ha dejado de ser una utopía. Aún quedan pasos por dar. Como cuenta Miller Nuttle, “estamos insistiendo a la policía para que sea más dura con los conductores peligrosos e investigue con más insistencia los casos de atropello a ciclistas ya que hemos tomado el buen camino para crear calles más saludables para todos los neoyorquinos”. Nº34-2012 / YOROKOBU / 37


CIENTร FICOS QUE SE METEN A FINANCIEROS POR

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Sergio C. Fanjul


La película Margin Call (2011), dirigida por J.C. Chandor, narra las últimas horas previas a un derrumbe bancario en una entidad de ficción que podemos identificar fácilmente con Lehman Brothers, cuya estrepitosa caída en septiembre de 2008 desencadenó el contagio mundial de esta crisis rampante. El polvo que se levantó en aquella catástrofe todavía no ha acabado de posarse en el suelo y aún nos impide ver el camino con claridad. Uno de los personajes de la película, un joven financiero novato, que es el primero en darse cuenta de que algo va muy pero que muy mal, es interrogado por sus superiores sobre su preparación en una reunión del alto nivel. Cuenta que es ingeniero aeronáutico por el Instituto de Tecnología de Massachusets (MIT), doctorado con una tesis sobre propulsión, y que, además, tiene un máster en la Universidad de Pennsylvania. Impresionante. —Así que eres científico espacial —resume uno de los trajeados jefes. —Sí, bueno, lo era… —¿Y qué haces aquí? —En realidad, señor, esto es cuestión de números, solo cambian las cosas que se suman. Y, para serle franco, la oferta económica aquí era mucho más tentadora. Este personaje (el único consciente del desastre que se avecina) y este fragmento del filme vienen a ilustrar un movimiento que se ha dado en las últimas décadas en el mundo de las finanzas, cuando se comienzan a fichar para menesteres económicos a científicos de toda índole: físicos, matemáticos, informáticos, químicos, incluso biólogos, algunos de ellos provenientes de las mejores universidades. Si antes investigaban en planetas extrasolares nuevos materiales, o biología molecular, ahora dedican su talento a maximizar el beneficio financiero. Hasta un 15 % de los que salen de las mejores escuelas científicas se enfocan a este sector. Sin ir más lejos: el último premio nobel de Economía se ha otorgado a dos matemáticos, Alvin E. Roth y Lloyd S. Shapley, hecho que ha ocurrido ya en otras ocasiones. A los científicos que trabajan en bolsa se les conoce como quants, que viene de ‘analista cuantitativo’. La Wikipedia lleva la lista de quants históricos hasta el mismísimo Tales de Mileto como pionero, pero..., en fin… Hay quants en España, pero no muchos, alrededor de un centenar, según calcula Maite Martínez, que trabaja para el Grupo Santander. Maite es doctora en matemáticas por la Universidad Autónoma de Madrid y llevaba cinco años dando clase allí cuando decidió saltar al mundo de las finanzas. “Mi rama tenía que ver con la economía financiera. Además, a mí me gusta aplicar las matemáticas al mundo real, y en la economía es casi donde más estrechamente se aplican”, explica. Eso lo sabemos todos: hemos aprendido a sumar en la cola del supermercado. Los primeros tiempos, sin embargo, fueron difíciles: “Yo manejaba perfectamente las matemáticas del asunto, entendía las ecuaciones”, cuenta Martínez, “pero lo que todavía no conocía bien eran los conceptos financieros que había detrás y que pueden llegar a ser muy Nº34-2012 / YOROKOBU / 39


complejos. Me llevó medio año dominar el asunto”. Aunque a ambas las llamen ciencias, la Economía y la Física son muy distintas. Mientras que la Física puede hacer predicciones muy exactas sobre los fenómenos naturales (a veces, como en la mecánica cuántica, con precisión de decenas de decimales), la Economía es más bien una ciencia descriptiva, que no puede predecir el futuro y que, como bien es sabido, suele explicar los fenómenos económicos a toro pasado. Siendo estricto, no es una ciencia. De ahí el interés en que los quants expliquen los fenómenos financieros y consigan hacer las decisiones correctas con el mínimo error. De que, de alguna manera, persigan la utopía imposible de ‘cientificar’ la Economía. De domar una realidad indomable, al fin y al cabo.

científico deje su apolíneo estudio de la naturaleza, que ampliará el conocimiento de la raza humana y traerá grandes avances, por la dionisiaca búsqueda del beneficio bancario. También hay quien los culpa de la creciente complejidad de los productos financieros, cada vez más endiablados, del ‘capitalismo de casino’ imperante. “La verdad es que los quants tenemos mala prensa”, explica Martínez, “pero nosotros solo diseñamos los productos. Luego, otros departamentos deciden a quién o cómo se venden. Por ejemplo, otro banco puede entender lo que le estás vendiendo, pero quizás una Comunidad Autónoma o un particular puede que no tengan tan claro en qué están invirtiendo su dinero. Incluso un empleado de banca puede no comprender muy bien lo que está vendiendo”.

“Hay también grandes diferencias entre la universidad y las finanzas. En la universidad, por ejemplo, no estás tan enfocado a objetivos, puedes estudiar cosas que no tienen aplicación inmediata y puedes pasarte una temporada y no obtener resultados, no poder aplicar un teorema”, dice Martínez. “En el banco se buscan aplicación y resultados”.

Esto recuerda el caso -el timo- de las participaciones preferentes en las que particulares ingenuos compraron un complejo producto financiero de alto riesgo y sugerente nombre (‘preferente’) que daba muy buen interés, lo que les hizo perder finalmente sus ahorros. Algunos ciudadanos analfabetos firmaron aquello con su huella dactilar o con una equis. “Hay gente que por conseguir alto interés corre mucho riesgo, y eso hay que tenerlo en cuenta. Pero, desde luego, el caso de las preferentes me parece muy mal, y pienso que hay productos que bajo ningún concepto deberían venderse en la calle”, dice Martínez, “hay que controlar eso de alguna manera”.

Así, el mundo de las finanzas se ha visto colonizado por las integrales, las derivadas, el cálculo de probabilidades, las ecuaciones más complejas y otra fauna matemática. Además, resulta extremadamente importante la programación informática. Los estudios sobre movimientos brownianos (el movimiento aleatorio que tiene una grano de polen en el seno de un fluido que, además, demuestra la existencia de moléculas), que fueron sistematizados por Albert Einstein, han sido utilizados posteriormente en finanzas para aproximarse a la evolución de las fluctuaciones de las divisas, de los tipos y de las acciones. Los quants son frecuentemente señalados como culpables por varias cosas. Por ejemplo, hay quien ve mal que un 40 / YOROKOBU / Nº34-2012

¿Llegaremos a poder predecir con exactitud los movimientos económicos? “Eso es una quimera”, dice Martínez, “se pueden hacer predicciones aproximadas, por ejemplo, de la evolución de una acción cuando no ocurre nada, utilizando el Teorema Central del Límite, un teorema clásico de las matemáticas. Pero, de pronto, ocurren guerras, catástrofes, o se descubren yacimientos petrolíferos y todo cambia. Y eso no se puede predecir”.


La portada y la contraportada las diseñas tú Creativos, diseñadores, artistas, ilustradores, arquitectos, fotógrafos... Cada mes pedimos a una persona distinta que juegue con la palabra Y-O-R-O-K-O-B-U para ilustrar la portada. Son profesionales que aportan su particular visión de la revista. Pero sabemos que también hay mucho talento ahí fuera. Por eso, una vez al año, ponemos la portada y la contraportada a vuestra disposición para que os luzcáis y demostréis vuestra creatividad. En colaboración con Volkswagen, volvemos a convocar el concurso ‘Hazlo tú’. Queremos que seas el que diseñe la portada de Yorokobu y la contraportada de Volkswagen del número de febrero de 2013. En esta segunda edición, hay una novedad importante: ambas piezas deberán guardar relación. El año pasado, una parte de las más de 600 personas que se presentaron ya lo hicieron así. Y el resultado nos encantó. Pero habíamos anunciado que las piezas serían juzgadas de forma independiente y así lo hicimos. Este año hemos cambiado ese punto en las bases del concurso y el jurado valorará tanto la creatividad como la relación entre portada y contraportada. (En la página siguiente puedes ver algunos ejemplos de trabajos relacionados del pasado año). ¿Y qué significa todo esto? Que este año solo habrá un ganador y será quien firme la portada de Yorokobu y la contraportada de Volkswagen del número de febrero de 2013, además de recibir un premio de 2.000 euros. Los 10 trabajos finalistas serán publicados en un cuadernillo especial dentro de la misma publicación. Ya tenéis toda la información y bases en yorokobu.es/hazlotu

yorokobu.es/hazlotu


APPS QUE HACEN DEL MUNDO UN LUGAR MEJOR POR

David García (@SrGarcia)

A la espera del monográfico de 600 páginas que estamos preparando y cuyo título es Apps que quieren parecerse a Instagram pero no son como Instagram y, además, merecen la pena por algo, os ofrecemos un adelanto de lo que vais a poder encontrar.

Typic

Lightt

Fabrik

Typic, para entendernos, es como Instagram. Esto ya os lo había contado. Permite hacer fotos, aplicarles filtros y —aquí viene lo nuevo— añadir texto con bonitas tipografías que doten de más potencia al mensaje que queremos expresar. Una imagen vale más que mil palabras, pero si, además, añades una palabra..., son mil y una, ¿no? Eh, sí, creo.

Aquí viene una para los insaciables de la vida. Si no tenéis bastante con compartir fotos con Instagram o Hipstamatic, animaciones cinemáticas con Cinemagram o vídeo con Ptch, Viddy o Socialcam, todavía podéis echar vuestra vida un poco más por la borda creando magníficas secuencias de fotos consecutivas que, combinadas, se asemejan a una animación. Las historias son de diez segundos que, bien empleados, dan para contar mucho. Disponible para iOS.

Para la mayoría, teléfonos y tabletas no son los dispositivos más adecuados para leer, pero cuando uno siente la salvaje llamada del papel, no hay otra que ponerse al tema. Fabrik para Android destaca por su sencillez de manejo, escasas, pero útiles, opciones, como cambio de tamaño de letra y brillo de pantalla y, sobre todo, la capacidad de bajar los libros que tengamos almacenados en Dropbox. ¿Y qué relación tiene esto con Instagram? Ninguna. ¡A la mierda!

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APPS QUE DEJAN EL MUNDO EXACTAMENTE IGUAL POR

Ricardo Llavador (@RicardoLlavador)

Los seres vivos nacen, crecen, se reproducen y mueren. Pero entre medias comen y cagan como ellos solos. Y de lo segundo va a tratar nuestra innecesaria página de hoy. Porque, si para cada necesidad existe un app, para las necesidades perentorias existen, al menos, estas tres.

RunPee

iPoo

FingerCut

Con esta moda de quitar los anuncios de las películas, la decisión de visitar el water close se ha convertido en un tema nada baladí ya que, sin esa pausa publicitaria, uno puede perderse el momento clave del filme (como cuando la amargada de Crepúsculo descubre que el otro es vegetariano), echando al traste una maravillosa tarde de amor emo. La solución la tienes al alcance de tu smartphone porque RunPee te avisa del momento en el que no va a ocurrir nada de capital importancia y, al regresar, además, te hará un resumen de lo ocurrido y te advertirá de cuánto tiempo queda para la siguiente romería. El app es impecable, aunque yo espero impaciente a ver si sacan el modo ‘próstata’.

Esto que tenemos entre manos es mucho más que una app, es una complejísima red social de defecaciones. Sí, señora, como lo oye. Si usted anota cada vez que descome, podrá compartir sus datos con el resto del mundo, analizar estadísticas propias y globales e incluso escribir en la puerta de un aseo (virtual), como si volviese a ser por unos segundos ese bachiller jovial que fue. ¡Ah!, también geolocaliza.

Se trata de un simulador de sierra radial, algo imprescindible en el día a día. Está muy mal acabado y, aunque simule cortar dedos, la realidad es que no tiene ninguna gracia. Se preguntará usted por qué se encuentra esta app en el bloque temático de hoy… Muy sencillo, porque es una mierda.

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DORMIR EN UNA SASTRERร A POR

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Juanjo Moreno (@juanosemore)

FOTOS

Julian Mullan y Sue Sellinger


Vivir una experiencia auténtica, lejos de las recomendaciones de agencias de viajes y guías turísticas, se ha convertido en un valor en alza entre los viajeros urbanitas. Las impresiones personales, más que la típica visión de postal, son las que están motivando a los turistas de hoy a explorar la mayoría de las ciudades. Un nuevo concepto de hotel ha comenzado a ofrecer en Viena una parte de la infraestructura necesaria para estos viajes poco convencionales.

¿Te imaginas dormir en una sastrería? ¿Alojarte durante tu estancia en la capital austriaca en una panadería? ¿Hospedarte en una zapatería vienesa? Es la propuesta de Urbanauts Street Lofts. “La experiencia de dormir a nivel de suelo y estar cerca de la vida de la ciudad imprime un carácter urbano único a este hotel”, dice Theresia Kohlmayr, una de las promotoras de este concepto. Además, cada vez hay más tiendas vacías en las grandes ciudades y su rehabilitación es una solución ante el deterioro de estas. Dos motivos más que suficientes para que Kohlmayr, junto con sus socios, Jonathan Lutter y Christian Knapp, pusieran en marcha este proyecto. Los tres son arquitectos y han aprovechado sus experiencias previas en la creación de un proyecto común. Kohlmayr sabía cómo vender camas porque su familia regenta un hotel de vacaciones en Salzburgo. Knapp ha trabajado en el mundo de la decoración y tiene experiencia en construcción de mobiliario. Y Lutter, filósofo y fotógrafo, es el estratega del grupo y ha sido asistente de producción de cine. Los tres formaron Kohlmayr Lutter Knapp/ office for systemic design, una agencia de diseño en Viena cuyo credo es la creación de sistemas no constructivos. “Centramos aspectos estéticos, sociales, económicos y ecológicos en buscar soluciones inteligentes y limpias”. Todo empezó hace un año, cuando estos tres amantes del urbanismo comenzaron a pensar en el cada vez más frecuente proceso de gentrificación de las ciudades europeas. “Existen miles de metros cuadrados inutilizados dentro de nuestras urbes, zonas que no se usan desde hace décadas. Quisimos dotar a estos espacios de una función social y económica que satisficiera las necesidades de independencia de los turistas de ciudad y, al mismo tiempo, reactivar nuestros recursos locales”, explica Theresia Kohlmayr. Así es como antiguas tiendas vienesas han pasado a convertirse en habitaciones de hotel. Y es que, para estos jóvenes arquitectos, hay que dejar de ver el hotel como un único edificio autosuficiente. “Nos gusta hablar de un hotel horizontal, que se desarrolla a lo largo de la ciudad”. ¿Y el lobby? “El lobby es

la ciudad. Todos los servicios propios del hotel son proporcionados por el vecindario”, recalca Kohlmayr. Urbanauts ha creado un network de establecimientos que dan la bienvenida a los huéspedes de Urbanauts con ofertas especiales o servicio de habitaciones. Una cafetería cercana se convierte en el comedor del hotel donde se sirve el desayuno. El bar de la esquina es también el bar del hotel. El hamman del barrio se convierte en el área wellness de Urbanauts. Además, el personal de estos establecimientos recomienda y aconseja las rutas turísticas menos convencionales. “Urbanauts ofrece una nueva forma de conocer la ciudad”, señala la cofundadora. “Los huéspedes pasan a formar parte del vecindario y nuestros socios no solo les proporcionan los servicios que necesiten, sino que los tratan como amigos. Así conseguimos que los turistas se integren en la cultura local, algo que cada vez busca más gente”. Parte de la filosofía de este hotel es que el interiorismo de cada habitación guarde relación con el tipo de tienda que con anterioridad ocupó ese espacio. “Es una forma de mantener viva la historia del local”. Su primera habitación fue una antigua sastrería. Por eso se llama ‘Die Schneiderin’ (sastrería, en alemán), y por eso en su interior destaca una instalación de arte en toda una pared, realizada por la fotógrafa Sue Sellinger, que deja claro el antiguo uso del recinto. El hecho de que se acceda desde la calle convierte a estas habitaciones en las más privadas y discretas, aun encontrándose justo donde tiene lugar la vida de la ciudad. Su conectividad, las bicicletas que hay en cada estancia, su mobiliario y su espacio —alrededor de 30 metros cuadrados— y, por supuesto, su novedoso concepto hacen que este hotel haya inaugurado una nueva categoría dentro de los hoteles boutique, que sus creadores llaman boutique lofts. Resulta difícil clasificar a sus clientes. Al menos, según la clasificación tradicional por targets. Sin embargo, todos tienen algo en común: “No quieren ser tratados como turistas, sino como residentes temporales, y desean descubrir las joyas escondidas de la ciudad y ver Viena desde una perspectiva local”, concluye Theresia Kohlmayr. Nº34-2012 / YOROKOBU / 45


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DORMIR EN UNA SASTRERร A

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GRISES POR FUERA, VERDES POR DENTRO POR

Gema Lozano

Están como nuevos, aunque no lo son. La mayoría

de los muebles de As Good As New fueron rescatados de mercadillos vintage, tiendas virtuales o de eBay por lo que casi nada se sabe de su vida anterior. De hecho, pocos conservan algo de ella. Ni siquiera el color original puesto que todos estos enseres han sido recubiertos con una especie de pintura gris que imita el metal y que suele emplearse para recubrir piscinas o camiones. Es la marca de la casa. Aunque sus responsables aseguran que, más que por imagen, la idea de utilizar esta resina tiene que ver con el propósito de proteger los muebles para que su segunda vida sea más larga y de más calidad que la anterior. Detrás de esta tienda de muebles de segunda mano se encuentra el estudio de diseño holandés i29. Hace cuatro, la agencia de publicidad Gummo le encargó el proyecto de su nueva oficina. Iba a estar ubicada en un espacio muy especial, el antiguo edificio del diario Het Parool, fundado durante la ocupación alemana, así que la decoración interior tenía que estar a la altura. A i29 no se le ocurrió mejor idea que homogeneizar el espacio llenándolo de muebles de segunda mano recubiertos de pintura gris. La idea gustó al estudio, a la agencia y a muchos de los que conocieron el proyecto a través de redes sociales y otros medios. Por eso i29 pensó que no sería mala idea crear una especie de spin off, una marca de muebles que compartiera estética y filosofía con los que habían servido para decorar la oficina de Gummo. Bazares, charity shops, mercadillos y webs de subastas volvieron a convertirse en lugares habituales para los miembros de i29. El objetivo: encontrar mobiliario reutilizable para seguir la máxima del ‘reduce, reúsa y recicla’ que había caracterizado a su anterior proyecto. “Suelen ser enseres y cachivaches viejos que encontramos en estos lugares y que nos gustan. Luego los cubrimos de esta resina gris, que no contiene ningún tipo de disolvente, y ya están como nuevos”, explica Hajo de Boer, cofundador de i29. El lanzamiento de la marca se produjo hace unas semanas mediante una tienda pop up ubicada en la concept store de Amsterdam SPRMRKT. Ahora, los muebles de As Good As New están disponibles en su web Thisisasgoogasnew.com

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AS GOOD AS NEW 50 / YOROKOBU / Nยบ34-2012



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>ANORAK

UNA REVISTA DE CULTURA POP, CON DISEテ前 EXQUISITO, PARA NIテ前S DE COLEGIO POR

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Mar Abad (@marabad)


La literatura es un espacio paralelo donde todo se cons-

truye más fácil y más rápido. Es un lugar con una capacidad ilimitada en el que, a menudo, se encuentran huecos. Cathy Olmedillas vio uno. Hace seis años divisó un espacio vacío en la literatura infantil y decidió rellenar el hueco. “Lancé Anorak en 2006 porque tenía un hijo de cuatro años y no podía encontrar una revista buena para niños”, explica la británica. “La mayoría de las publicaciones que había en el Reino Unido eran de una marca o muy comerciales. Me encantan las revistas y solía leer muchas cuando era pequeña”. Olmedillas decidió inventar lo que no encontraba. “Una revista de cultura pop para niños que no tuviera tanto interés en vender productos y se ocupara más en mostrar un contenido interesante y divertido”, explica la fundadora de Anorak. Una revista para niños hecha, en parte también, con niños. “Desde el principio quería que Anorak fuera una plataforma donde los menores pudieran expresar su creatividad. Por eso fui a un colegio y pedí a los chavales que dibujaran nuestras páginas de moda. Se convirtieron en pequeños editores y algunos de ellos aún nos ayudan en la creación de cada uno de los números de Anorak”. Desde la intención hasta tener la revista en sus manos no había ningún salto vertiginoso. Andaba sobre terreno conocido. “Antes había trabajado para revistas independientes. Tenía muchos contactos con imprentas y distribuidoras. Todos los distribuidores a los que visité rechazaron la propuesta porque decían que una revista unisex para niños nunca funcionaría”. Pero Olmedillas insistió. “Toqué a la puerta de Borders. Es una cadena de tiendas que vende libros y revistas en el Reino Unido. Les enseñé una maqueta y les encantó. Lo compraron al momento. Dediqué un año a pensar el contenido y a trabajar con el artista Supermundane en la dirección de arte. Una vez terminada, un amigo que trabajaba en relaciones públicas envió la nota de prensa sobre el lanzamiento. Varios medios lo publicaron y varias tiendas mostraron interés en vender la revista”. En 2006 salió al mercado británico la revista infantil Anorak. Una publicación que su ideóloga describe como “la revista feliz para los niños. Contiene diversión, historias alegres, una guía de contenidos interesantes, juegos y actividades. Todo ilustrado de forma muy bella por ilustradores consagrados y dibujantes promesa de todo el mundo”, dice. “Cada ejemplar está dedicado a un tema y abordamos desde los animales o los vikingos a asuntos más filosóficos, como el miedo o la amistad”. “Respecto al diseño”, continúa, “tengo una influencia profunda de los libros de los años 60 y 70. Esto se refleja en el

tipo de artistas con los que colaboro. Me fascina ver cómo la ilustración utiliza técnicas sencillas de dibujo pero llenas de imaginación y esto empodera a los niños para que tomen un lápiz y empiecen a dibujar”. El papel lleva años sonando a mercado de equilibristas, pero la autora no lo ve así. “La prueba de que hay lugar para las revistas impresas es la existencia de Anorak”, indica Olmedillas. “Hay muchas, muchas formas en las que los chicos pueden consumir cultura, pero una publicación como Anorak es algo único porque reúne un trabajo artístico fantástico, da voz a los niños y es una plataforma para su creatividad. Creo que, cada vez más, las revistas tendrán que encontrar ese punto diferencial si quieren sobrevivir”. La periodista no cree que las generaciones más jóvenes desprecien el papel. “Pienso que les gustan las revistas impresas y las tabletas. Los niños, por supuesto, consumen cada vez más historias en los iPads de sus padres, pero no hay nada que reemplace la experiencia táctil y envolvente de leer un libro o una revista. Tuvimos este aspecto muy en cuenta cuando lanzamos la app de iPhone de Anorak. Sabíamos que podía hacer cosas que las revistas nunca harían. Además, acabamos de lanzar Anorak TV, exclusivamente para iPhone y iPad, y la experiencia es muy distinta a la de la revista. Es dar vida a la publicación y enriquece su contenido. Pero, al final, cada una tiene su propia experiencia”. Cada año sale un nuevo número de Anorak. Olmedillas decide el tema con un año de antelación. Diseña la estructura y redacta los contenidos. “Me inspiro en cualquier cosa. A veces el tema surge de una conversación con mi hijo (amistad, chocolate, bromas...), mis pasiones (montar en bici, las palabras...), una visita a un museo o un documental (insectos...). El tono es como si habláramos en una conversación. Casual y divertido. Creo que los niños son lo suficientemente listos para entender la mayor parte de las cosas sin necesidad de tratarlos con condescendencia. De hecho, pienso que son mucho más inteligentes de lo que nosotros pensamos”. La intención de Olmedillas no es solo contar historias. La revista que fundó hace seis años tiene otra meta: despertar la creatividad infantil. “Anorak alimenta la imaginación de los niños y los anima a pensar de forma diferente porque es muy distinta al resto de revistas infantiles. Los mejores mails que recibo son los de esos lectores (madres, padres e hijos) que me dan las gracias por inspirarlos a escribir una historia o dibujar un cómic. Me llena de orgullo y espero seguir recibiendo muchos más”. Nº34-2012 / YOROKOBU / 53


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HUERTA TIPOGRÁFICA LAS TIPOGRAFÍAS QUE SE CULTIVAN EN ARGENTINA

Venían de Mendoza, Rosario o Buenos Aires pero, finalmente, coincidieron en la universidad de la capital argentina. En un país en el que, a la vuelta de clase, lo normal es hablar del descenso de River o de lo último que dijo Cristina Fernández de Kirchner, ellos mataban el tiempo hablando de anatomía de letras, trackings o cajas. Todos se estaban especializando en diseño tipográfico y aquello fue el inicio de Huerta Tipográfica, un proyecto que unió sus carreras. POR

David García (@SrGarcia)

La Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo de Buenos Aires quedaba un poco retirada del centro de la ciudad. Pablo del Peral, Carolina Giovagnoli, Sol Matas y Andrés Torresi comenzaron a compartir colectivo de regreso a casa y formaron piña. “Nos reuníamos después de ir a clase para comer y dibujar tipografías. Así empezamos a cooperar presentando nuestros trabajos y pensando nuevos proyectos”, cuenta Sol Matas. En 2009, fundaron Huerta Tipográfica “de manera tímida, bautizando el proyecto, creando unas tarjetas y una web”. El grupo, que se generó como un espacio de reunión y colaboración, se convirtió rápidamente en el medio con el que los cuatro diseñadores expresan su veneración hacia la tipografía. Ven a este campo del diseño como un producto cultural y están muy motivados por participar en el auge que está experimentando la disciplina en el país americano. “En la actualidad se está promoviendo el barrio de Barracas como distrito centrado en el diseño, principalmente para promover su incorporación como herramienta de competitividad. Se están gestando muchas actividades en torno al diseño gráfico, al diseño industrial, a la moda y a los medios audiovisuales”, explica Matas. La creadora cree que internet y la tecnología están democratizando la producción y distribución de tipografías aunque “el cambio en los modelos de creación, producción y distribución no siempre significa una mejora de calidad en el campo tipográfico”. Para Huerta Tipográfica, el proceso de gestación de un trabajo suele comenzar con una investigación que dote de un sentido a la idea que quieren desarrollar. Les gusta mirar a

los referentes históricos y tomar buena nota de lo que ya se ha hecho, pero insisten en reinterpretar todo lo que ven para convertirlo en algo nuevo. Posteriormente, pasan a la etapa de dibujo, en la que moldean el primer vistazo que ofrece la fuente al usuario. “Puede comenzarse en el papel o directamente en el ordenador. Aquí se definen las pautas estructurales y las rasgos estéticos del proyecto”, detalla la diseñadora argentina. A partir de ahí, y con la definición de unos cuantos signos, los diseñadores comienzan a ver el comportamiento de las palabras y los párrafos. Es entonces cuando comienza la etapa de producción de la tipografía. Las letras no hablan únicamente según se combinen. Sus líneas determinan un carácter, otro mensaje implícito, que puede enriquecer el significado de lo que se escribe. “Aquí es donde se terminan de poner a prueba las tipografías y se realizan todos los ajustes necesarios para que todo funcione correctamente en las distintas plataformas”, remarca Sol Matas. Explican estos hortelanos del carácter que “los nuevos formatos como las webfonts —en particular, el catálogo de Google— han sido piezas importantes en la producción de fuentes en Argentina este último año”. La difusión que tiene la plataforma de Google ha hecho que muchos amantes del diseño tipográfico dieran el salto del amateurismo a un enfoque más profesional de esta labor. “Es muy difícil dedicarse a la profesión si se focaliza en el mercado local, porque es casi inexistente”, lamenta Matas. Por fortuna, el aperturismo tipográfico que están proporcionado las nuevas posibilidades que ofrece el diseño web está otorgando oportunidades a los creadores de letras. Nº34-2012 / YOROKOBU / 59


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ACOSTUMBRร NDONOS

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MI PRIMER ARDUINO 64 / YOROKOBU / Nยบ34-2012


Acotemos el escenario a un plano moral no vaya a ser que esto nos quede demasiado largo. Entre las muchas obligaciones que tiene cada ser humano, una de ellas, la eliminación de los estereotipos, es decisiva para dotar al pensamiento de la libertad que necesita. El cliché del programador con sobrepeso y carente de higiene, además de desagradable, es completamente erróneo. Arduino quiere desterrar para siempre esa idea ampliando el número de programadores. Quiere que todos pasemos a formar parte de la nómina.¿Es posible? Con el kit de Iniciación de Arduino, rotundamente sí. POR

David García (@SrGarcia)

Cualquiera puede adelantarse al futuro. Dentro de poco

tiempo, todos los habitantes del planeta —al menos, aquellos que tengan acceso a su alfabetización— sabrán programar. El código fuente es una herramienta capaz de dotar a los seres humanos de autonomía y un instrumento que, junto con la electrónica, permite materializar de manera práctica la creatividad humana. La personalización de la tecnología pasa por que cada individuo sea capaz de adaptarla a sus necesidades particulares. Para Massimo Banzi, cofundador de Arduino, la plataforma de electrónica open source y low cost, las personas deben estar expuestas a la tecnología desde que son muy pequeñas. “Deben entender que no es complicado ser, además de un consumidor, un creador”. Por eso, tanto Banzi como el resto del equipo de Arduino querían que la programación no quedara relegada a, benditos sean, los raros de la clase. “La estrategia de Arduino ha sido siempre la de hacer que la tecnología avanzada sea más fácil de entender y utilizar para personas con un conocimiento limitado o inexistente en la materia”, señala el italiano. Comenzaron su plan de dominación mundial creando placas baratas y las distribuyeron junto a documentación de uso comprensible, algo así como la democratización del conocimiento tecnológico. Se aliaron con otros entes, como la revista Make, que editaba libros de introducción a la electrónica y la programación. Se dirigían a artistas o diseñadores, no a programadores. Incluso desarrollaron con la ayuda de Telefónica I+D, el módem GPRS/GSM, cuya distribución apoya la ‘teleco’ española, es decir, un paso más cerca del usuario común. Arduino acaba de lanzar un kit de iniciación en el que se incluyen componentes básicos junto a quince proyectos pensados para aprender a entender la programación de una manera práctica, mientras se construyen objetos útiles. “Queremos continuar haciendo las cosas aún más simples”, dice

Banzi. “Llevan tiempo pidiéndonoslo, pero no comenzamos a trabajar en ello hasta que teníamos algo mejor que ofrecer que lo que ya había en el mercado. A los pocos meses de comenzar a trabajar nos dimos cuenta de que podía salir algo bueno de esta iniciativa”. El kit, que no es el más básico que pueden ofrecer según Banzi, incluye más componentes de los requeridos en los quince proyectos iniciales. La idea es que, una vez asimilado el conocimiento inicial, el usuario pueda comenzar a volar libremente por el universo Arduino. El principal problema de la caja para dar los primeros pasos con este kit es su diseño. Está tan cuidado que muchas personas preferirán utilizarlo para decorar sus casas. El estudio turinés ToDo, cuyo cofundador es Giorgio Olivero, se ha ocupado de la concepción del paquete. Olivero era alumno de Massimo Banzi en Ivrea, donde nació Arduino. Por esa circunstancia, “es una persona que entiende muy bien el proceso de enseñanza en todo este tema. Como dice el diseñador, es la primera vez que Arduino no vende únicamente una placa, sino una experiencia completa”, declara el creador de la plataforma. Los planes futuros de Arduino pasan por acercar aún más sus productos al usuario no letrado. Todo tiene un cariz de misión vital de liberación humana. “Algunas maneras de disfrutar internet, como las que ofrecen ciertas tabletas, te relegan al papel de actor semipasivo del proceso. Tu trabajo es ser consumidor de contenido propietario. Creemos que la programación, la electrónica o los microcontroladores son tecnologías que liberan a las personas convirtiéndolas en creadoras”, resalta el italiano. Se trata de otro paso para crear mejores ciudadanos. “Si eres capaz de hacer tus propias cosas, verás las que hacen otros con una visión más crítica. No te limitarás a aceptar y pagar, sino que evaluarás los procesos y los entenderás mejor”. Nº34-2012 / YOROKOBU / 65


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PABLO ALFIERI

“Playful era yo a las 3 de la tarde de un sábado o un domingo, con lápiz, cartulinas y tijeras para hacer maquetas tipográficas” POR

Mar Abad (@marabad)

Esta historia comienza en el año 2000. Un tiempo en que los dioses estaban distraídos allá en la Argentina. La vida no era fácil. Un chaval llamado Pablo Alfieri decidió estudiar diseño gráfico en la Universidad de Buenos Aires. —La crisis era inminente. La desocupación llegaba al 24 %, y al 50 % entre los jóvenes. Estuve un año y medio buscando trabajo. Era dificilísimo ir a una entrevista. Tenías que hacer largas colas de dos o tres horas para solicitar un trabajo sin sueldo fijo. Un trabajo a comisión por venta de productos. Estudiar diseño gráfico vaciaba la cartera. Era caro. Pero Alfieri encontró financiación. Comenzó a trabajar en la pizzería de sus tíos. Le pagaban un sueldo y le dieron ‘plata’ (dinero) para pagar su carrera. En 2002, consiguió un trabajo en una cadena de supermercados francesa, Leader Price, que ya no existe en Buenos Aires. —Me hice cargo del desarrollo de packagings de la marca. Era reloco para mí porque estaba estudiando diseño gráfico en la universidad. Con 23 años, le decía a los estudios de diseño qué queríamos para los productos y, a veces, incluso, cómo hacerlo. La empresa tenía 1.000 productos y yo gestionaba 300. Era una locura.

—Después de un año laborando muy, muy duro, me di cuenta de que no era mi lugar y que estaba operando con clientes con los que no quería trabajar. Para colmo, no ganaba un peso. Tuve que vender mi auto. Fue una experiencia muy frustrante que marcó mi vida. Lo loco es que la marcó para bien ya que ante tanta frustración decidí poner mucha energía y esfuerzo y empezar todo de nuevo. En 2008 no había acabado su carrera. De día trabajaba e iba a la facultad. Llegaba a las 2 de la mañana a casa y, después de año y medio, el balance era absolutamente negativo. No era feliz. —Entonces decidí crear Playful. Este espacio era yo a las 2 de la mañana en un ordenador haciendo piezas que tenía en mi imaginario y que no podía volcar en el trabajo. Era yo a las 3 de la tarde de un sábado o un domingo, con lápiz, cartulinas y tijeras para generar maquetas tipográficas. Pasaron los meses, y Alfieri había creado un buen portfolio de piezas personales que subió a su web, Flickr y Behance (“recuerdo que en 2008 esta plataforma empezaba a funcionar y no era nada en comparación con la red de talentos que es hoy en día”).

El trabajo había ido robando horas de estudio a Alfieri. En su último y tercer curso (aunque, en realidad, era su quinto año en la universidad), una profesora de tipografía se fijó en él. “Vio cierto potencial en mí y me llamó para empezar a trabajar en su estudio. No lo podía creer”.

—Mi trabajo se dio a conocer rápidamente en todo el mundo. Chicos en la misma situación que yo me escribían para hacer colaboraciones y remixes de sus piezas. De un día para otro me encontré trabajando para marcas como Snickers Polonia o Nike US.

El argentino trabajó en FinxDuvey cuatro meses. Tiempo suficiente para que le inyectaran, como él dice, una buena dosis de autoestima. Alfieri decidió entonces abrir su propio estudio. Era la propuesta de un familiar. “Él venía con clientes y yo tenía que trabajar”. Pero pasaron doce meses y los dioses seguían en otros asuntos.

A mediados de 2008 empezó a trabajar en Punga, “el mejor estudio de motion de Argentina”, apunta. “En esta empresa, Tomi Dieguez me dio mucho espacio para volcar mis aptitudes y mi estilo, e hicimos cosas muy grandes, como la imagen de los premios MTV LatinAmerica de ese año y una pieza para FoxCrime, que ganó varios galardones Promax”. Alfieri Nº34-2012 / YOROKOBU / 69


se sentía “rodeado de supertalentos” en aquel lugar, pero a finales de 2009 recibió una llamada para dirigir una campaña para Vía Pública y... —decidí agarrar la campaña y dedicarme 100 % a Playful. Después de 6 meses compartiendo oficina con dos amigos talentosos, uno de ellos y yo decidimos fusionarnos y crear Plenty (mi estudio actual). Ya son dos años y medio de trabajo, mucho esfuerzo y gran dedicación a un sueño hecho realidad. Hoy somos un estudio boutique formado por 12 jóvenes talentosos dedicados a la dirección de arte y motion graphics con proyección internacional. Un día, un dios vio lo que Alfieri estaba haciendo. Se sintió intrigado y le preguntó: — ¿Qué técnicas utilizas en tus trabajos? Hay estilos muy distintos... —Muchas. Justamente porque las tomo como un medio para llegar al mensaje. Amo plantearme desafíos y hacer cosas nuevas y distintas todo el tiempo. Es más, últimamente encuentro un gran atractivo en la mezcla de técnicas. Empezamos el trabajo digitalmente y lo terminamos analógicamente, o viceversa. Este mix entre el mundo análogo y digital es lo que más me gusta y es, desde ya, lo que hace que cada uno de mis días laborales sean distintos. — ¿Te ves definido en algún estilo o te sientes libre de etiquetas? —Me siento muy libre de etiquetas. Sinceramente, no fui, ni creo que sea, un diseñador con estilo propio, ya que eso hay que dejarlo a los talentos. Solo las personas hipertalentosas pueden marcar un estilo propio. El resto nos dedicamos, con esfuerzo y dedicación, a lograr obtener resultados lo más bellos posible. No por eso creo que los talentosos no se esfuerzan, sino que, simplemente, mi carrera y profesión es 100% esfuerzo y entusiasmo, pasión y amor por lo que hago. — ¿Qué te inspira? —Todo. Creo que esta pregunta la contesté muchas veces ( jaja...) y siempre digo que, en realidad, me inspira estar bien de ánimo, escuchar un bello tema, pasar un gran rato entre amigos o tener una muy buena sobremesa con mis compañeros de trabajo. Por eso, estar muy bien conmigo mismo me genera ganas de trabajar y producir más. No puedo ni mover el ratón si me encuentro bajo de ánimo.

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(Y muchas veces más que le va a tocar contestar a esta pregunta. Es un clásico...) — ¿Cómo te gusta trabajar? Todos tenemos rituales... —No puede faltar la música. Amo escuchar mis bandas favoritas o bandas nuevas. Por suerte, en el estudio, mis compañeros tienen distintos gustos musicales, con ciertos encuentros, y esto hace que el día, ‘musicalmente’ hablando, sea superllevadero. No puedo comenzar mi día laboral si no me tomo tiempo para ejercer el ritual de preparar un buen mate. (Sé que esta revista es muy leída en España, por eso les cuento que el mate es una bebida que tomamos los latinos más comúnmente en la zona sur. Se preparaba con yerba mate en un recipiente hueco, normalmente de madera, y se echa agua caliente. Algunos le agregan cáscara de naranja, azúcar o café). ¡Ah! Y ya cambié mis hábitos y ahora trabajo de día, aunque estuve varios años trabajando en modo ‘vampiro’. — Describe Buenos Aires, la ciudad donde vives... —Qué linda esta pregunta y qué lindo que me haya tocado ahora responderla. Creo que uno puede describir un lugar a raíz de comparaciones y contrastes con el resto de las ciudades del mundo. Hace ya varios años que tengo la suerte de poder viajar al exterior y, a pesar de no conocer mucho, me reencontré con mi ciudad tras estos viajes. Encuentro a Buenos Aires muy hermosa. Su arquitectura es muy variable y hace que sus matices la hagan lucir única en el mundo. A pesar de que es una ciudad que la urbanizaron muy mal y pese a tener tan cerca el inmenso Río de la Plata, es una ciudad que no supo más que darle la espalda al río (esto también es único en el mundo). Aunque esta mala cualidad ¡la encuentro gigante!, es un lugar que no puedes caminar en toda su amplitud. ¡Las distancias entre puntos como San Telmo (un bello antiguo barrio porteño) y Palermo (el más moderno de los barrios porteños), es enorme! Es atractiva por donde se la mire. Una ciudad futbolera, de gente muy cálida, de grandes contrastes, de cierto folclore, de mucha actividad; una ciudad que recibió golpes y se ha levantado. Y creo que la mejor cualidad de todas es que es una ciudad, sobre todo, de mucha, mucha vida.


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YOROKOBU Agenda Festival de comedia

La utopía es posible

Weart Festival

Los mejores humoristas españoles

Una muestra que se aproxima al

Festival de new media, artes plásticas,

presentan sus monólogos en un festival

congreso de diseño industrial que tuvo

fotografía, ilustración, videoarte, street

organizado por Paramount Comedy.

lugar en Ibiza, en el año 1971, y que

art, graffiti y palabras.

Madrid

revolucionó la disciplina uniéndola al

Varias fechas y localizaciones

arte y la arquitectura.

Barcelona

02-05.11.2012 Torres y rascacielos, de Babel a Dubai Un recorrido por la historia de la construcción de torres y rascacielos partiendo del mito de la torre de Babel hasta los rascacielos proyectados en el

MACBA Barcelona hasta el

28.02.2012 Las fotografías de The New York Times Magazine

10.11.2012 Plataforma virtual de Pantalla Global Experimento de cocreación formado por una exposición y una plataforma virtual basadas en el libro homónimo de Gilles

siglo XXI.

Más de un centenar de instantáneas

Llpovetsky.

Caixa Forum

publicadas en la revista de fotógrafos,

CCCB

Madrid hasta el

como las de Sebastião Salgado, Nan

Barcelona

05.01.2013 Blanc Festival Festival de diseño gráfico de Cataluña Vilanova i la Geltrú 2-3.11.2012

Goldin o Lee Friedlander. El Palau Robert Barcelona hasta el

02.12.2012 ÑH9

1.10-31.12.2012 Life on Mars Muestra de instrumentos, trajes, fotos, letras manuscritas y otros objetos, de David Bowie.

Hollywood costume

Congreso dedicado al diseño

Museo Victoria y Alberto

periodístico, con Richard Turley, director

Londres

Una exploración del papel del diseñador

de arte de Bloomberg Businessweek,

de vestuario en 100 de las películas más

como cabeza de cartel.

influyentes del último siglo.

CEU

V&A Museum

Madrid

London hasta el

27.01.2013

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22-23.11.2012

23.03-28.06.2013


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NUMEROGRAFÍA#34 Autor: Heriberto Noguera Número favorito: 2 www.lagalga.es

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Estos números “empezaron con una gota de agua en el cristal del tren de cercanías”. Heriberto Noguera la descubrió, un día, en su trayecto al trabajo. “Me quedé tonto mirándola, comparando con las otras del cristal… y empecé a maquinar una tipografía basada en gotas. Como me gusta lo geométrico, la simplifiqué en un círculo y añadí un cuadrado a uno de los cuadrantes. El resto consistió en rociar esas gotas para formar los caracteres”. Lagalga, el nombre con el que Noguera presenta sus trabajos de diseño, creó así este tipo. La llamó ‘jica’ y, “aunque no está terminada, para estos números les di ese brillito que acentúa el espíritu de gota, manteniendo la característica monotonal de las tipografías impresas”.


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