ISSN 1850-0633 REVISTA TÉCNICA DE LA ASOCIACIÓN ARGENTINA DE PRODUCTORES EN SIEMBRA DIRECTA
Cultivos Invernales SD Editor responsable Ing. Alejandro Petek Redacción y edición Lic. Victoria Cappiello Colaboración Ing. F. Accame, R. Belda, Ing. C. Biasutti, Ing. T. Coyos, Ing. M. D'Ortona, Ing. S. Fernandez Paez, A. Fresneda, Ing. I. Heit, Ing. F. Lillini, Ing. A. Madias, Ing. M Marzetti, Ing. T. Mata, Lic. C. Moral, Ing. E. Niccia, Ing. M. Rainaudo, Ing. A. Ruiz, Lic. M. Saluzzio, Ing. C. Sciarresi. Desarrollo de Recursos (Nexo) Ing. Alejandro Clot Marcio Morán Ing. Agustin Eier Lic. Ruiz Rocío
Abril 2020
de
Asociación Argentina Productores en Siembra Directa.
Dorrego 1639 - Piso 2, Of. A, (S2000DIG) Rosario. Tel/Fax: +54 (341) 4260745/46. e-mail: aapresid@aapresid.org.ar www.aapresid.org.ar
CULTIVOS INVERNALES Informe de resultados de la campaña fina 2019 en el Nodo Oeste Regionales Aapresid
4
Manejo de cultivos de servicio: Resultados de ensayos a campo 2018/19 Regional Los Surgentes-Inriville
13
Efecto de la fecha de siembra sobre el comportamiento agronómico en trigo de Córdoba Maich, R.
32
Evaluación de cultivares de colza a nivel regional, INTA Barrow. Iriarte, L. B.
37
Arveja: evaluación de diez variedades verdes y amarillas en Pergamino Prece, N.; Introna, J.; Llanes, M.
41
Efectos del estrés hídrico y no hídrico sobre el rendimiento de soja intersiembra en trigo Abbate P.E.; Ross F.
46
Relevamiento de patógenos de semillas de trigo (Triticum aestivum l.) en el norte de la provincia de Buenos Aires Lavilla, M.; Ivancovich, A.
51
La importancia del Falling Number en la calidad molinera del trigo pan: búsqueda de genotipos con valores óptimos Castro, A. C.; Quiroga, F.; Cardelli, M.; Schierenbeck, M.; Uranga, J.P.; Simón, M.R.
55
Fitotoxicidad de herbicidas pre-emergentes sobre cultivos de servicios Dorsch, A.; Zaiser, E.; Zorzin, J.L.; Miotti, H.; Ruiz, A.; Sciarresi, C. Sistema Chacras Aapresid
61
Incidencia de los cultivos de servicio en la supresión de malezas con dos métodos de secado Czyruk, L.S.; Burdyn, B.; Casse, M.F.; Rojas, J. M.; Roldán, M.F.
70
Evaluación de tratamientos herbicidas pre- y postemergentes para el control de malezas en arveja Yanniccari, M.; Appella, C.; Istilart, C.
76
Enfermedades foliares y su impacto en el rendimiento y calidad comercial e industrial del trigo Rozo Ortega, G.P.; Fleitas, M.C.; Schierenbeck, M.; Gerard, G.; Castro, A.C.; Lo Valvo, P. J.; Serrago, R. A.; Simón, M.R.; Miralles, D.J.
81
Identificación de genes de resistencia a mancha amarilla en trigo Uranga, J.P.; Schierenbeck, M.; Perelló, A.E.; Lohwasser, U; Borner, A.; Simón, M.R.
92
Evaluación de la severidad a la roya amarilla en trigo pan Abbate, P.E.; Cabral Farias, C.A.
97
Evaluación del momento óptimo de aplicación de fungicidas foliares para controlar la Roya amarilla Barrio, M.; Lavilla, M.; Beltrán, G.; Ivancovich, A.; Peper, A.
107
Escenarios climáticos adversos para algunas localidades productoras de trigo y colza en la región pampeana Rivelli, G. M.; Fernández Long, M.E.; Miralles, D.J.; Abeledo, L.G.; Rondanini, D. P.
112
Respuesta a la fertilización con nitrógeno, fósforo y azufre en brassica carinata Ferraris, G.N.; Mousegne, F.; Jecke, F.; Vellaz, O.
123
Empresas Socias
135
Autores: Avedano, L.1; Bardeggia, F. ; Andreo, N.3; Zamora, G.4; Dorsch, A.5; Torregrosa, R.6; Fiorimanti, R.7; Biasutti, C.8
Red de INNOVADORES
2
2
Cultivos Invernales 2020
4
ATR Regional Aapresid Laboulaye. ATR Regional Aapresid Justiniano Posse. 3 ATR Regional Aapresid Río Cuarto. 4 ATR Regional Aapresid Río Segundo. 5 ATR Regional Aapresid Los Surgentes-Inriville. 6 ATR Regional Aapresid Del Campillo. 7 ATR Regional Aapresid Adelia María. 8 Staff Regionales. 1
Regionales Aapresid
Informe de resultados de la campaña fina 2019 en el Nodo Oeste
Informe especial con los resultados obtenidos en el Nodo Oeste, integrado por 11 regionales Aapresid de la provincia de Córdoba.
Palabras Claves: Cultivos de Cosecha; Cultivos de Servicios; Resultados; Córdoba.
Los datos reflejados en éste informe se recopilaron a partir de 363 casos aportados por 7 regionales y que suman un total de 29.678 has relevadas. La superficie del nodo se distribuyó en 5 zonas y se agruparon las regionales con características similares para facilitar el análisis: Zona uno (1) representada por las regionales Río Segundo, Montecristo y Alta gracia, que no tuvieron participación en el análisis; Zona dos (2) Justiniano Posse y Los Surgentes/Inriville; Zona tres (3) Villa Maria; Zona cuatro (4) Adelia María, Laboulaye y Vicuña Mackenna (regional que no aportó datos); y por último, Zona cinco (5) con Río Cuarto y Del Campillo. Figura 1
La distribución de cultivos de cosecha y de servicios fue variable entre zonas. Sin embargo el trigo de cosecha fue el cultivo predominante en todas. Los cultivos de servicios aumentaron su participación en las zonas del sur cordobés (Gráfico 2). La tenencia de la tierra en los lotes relevados también varió según zonas, aumentando el porcentaje de lotes alquilados hacia el sur de la provincia (Gráfico 3). Las clases de uso de los lotes informados se distribuyeron según lo muestra el Gráfico 4. Los cultivos informados se sembraron predominantemente en clases I-II y III. Las clases de uso también varían según la zona del nodo. I y II se encuentran en mayor proporción en la zona 2. Mientras que en las zonas 3 y 4 predominaron lotes informados con clase III, y en la zona 5 la mayor parte fue clase IV (Gráfico 5).
Mapa de la provincia de Córdoba con ubicación de las regionales y zonas utilizadas para el análisis.
Gráfico 1
Distribución de la superficie sembrada en la campaña fina 2019 en Nodo Oeste.
Red de INNOVADORES
El Nodo Oeste está conformado por 11 regionales distribuidas en la provincia de Córdoba (Figura 1) e incluyen a 150 productores. La superficie que abarca es de 260.000 hectáreas aproximadamente.
Resultados La superficie evaluada se destinó en un 78 % a cultivos de cosecha y 22 % a cultivos de servicios. Dentro de la superficie destinada a cosecha, el trigo fue el cultivo con mayor porcentaje sembrado. Mientras que el centeno fue el cultivo que mayor participación tuvo en la superficie destinada a cultivos de servicios (Gráfico 1).
5 Cultivos Invernales 2020
Introducción El siguiente informe se realizó a partir de una recopilación de datos provenientes de lotes sembrados en 2019 por miembros de las Regionales Aapresid incluidas en el Nodo Oeste. El objetivo es reflejar los resultados que se obtuvieron y la tecnología utilizada en las distintas zonas.
Gráfico 2
Red de INNOVADORES
Distribución de la superficie sembrada por cultivo y zona.
Distribución de la superficie informada según tenencia.
Cultivos Invernales 2020
6
Gráfico 3
Gráfico 4
Distribución de la superficie informada según clase de uso.
de la superficie se sembró con variedades no identificadas (Gráfico 8).
El 61 % de la superficie sembrada con trigo se dividió en tres variedades: Algarrobo, B 750 y Basilio (Gráfico 7).
Con respecto a la oferta de agua, la superficie de trigo fue sembrada en su mayor parte en planteos de secano. Solamente se menciona en la Zona 3 (Regional Villa María) una pequeña superficie bajo riego (Gráfico 9). Con riego, se logró aumentar en 2 qq/ha el rendimiento.
En el caso de centeno como cultivo de servicio, las variedades más sembradas fueron Don Guillermo y Lisandro, y un 27 %
La presencia de napa a la siembra se verificó en el 37 % de la superficie. Aquí los rendimientos fueron 12 qq/ha Gráfico 5
Distribución de la superficie informada por clase de uso y zona.
Red de INNOVADORES
El 90 % de la siembra de los cultivos de cosecha se concentró entre el 15 de mayo y el 15 de julio, mientras que la siembra de los cultivos de servicios fue más temprana y se extendió entre los meses de marzo y mayo. No hubo mayores diferencias entre la fecha de siembra y las zonas (Gráfico 6).
Cultivos Invernales 2020
7
Gráfico 6
Evolución de la superficie sembrada según fecha.
Gráfico 7
Distribución de la superficie de centeno según variedad.
Red de INNOVADORES
Distribución de la superficie de trigo según variedad.
Gráfico 8
Gráfico 9
Distribución de la superficie sembrada con y sin riego.
Distribución de la superficie sembrada con y sin influencia.
Cultivos Invernales 2020
8
Gráfico 10
Gráfico 11
Distribución de la superficie de trigo según recarga de perfil.
Respecto del manejo nutricional, solamente el 8 % de la superficie de cultivos de servicios fue fertilizada, mientras que el 97 % de la superficie de cultivos de cosecha recibió algún tipo de fertilizante. La superficie de cultivos de cosecha fue fertilizada solamente con nitrógeno en un 18 %, con nitrógeno y fósforo en un 82%, y con nitrógeno fósforo y azufre en un 5 %. Las dosis de nitrógeno utilizadas fueron menos de 50 kg/ha (31 % de la superficie), entre 50 y 150 kg/ha (64 % de la superficie), y más de 150 kg/ha (5 % de la superficie). En cuanto a fósforo, las dosis fueron menos de 50 kg P204 (54 % de la superficie), entre 50 y 100 kg/ha P204 (28 % de la superficie) y 18 % de la superficie con más de 100 kg/ha. Estos datos evidencian que los cultivos de invierno son utilizados para incorporar el fertilizante fosforado para la rotación y reposición de P en los
Se realizaron aplicaciones de fungicidas en los cultivos de cosecha: en un 75 % de los casos de trigo, en un 37 % de los casos de centeno y en ningún caso de avena o cebada. Los mayores porcentajes de aplicación de fungicidas en trigo se informaron en las zonas 2 (78 %) y 3 (95 %). En tanto que las zonas 4 y 5 registraron alrededor del 60 % de casos aplicados (Gráfico 12). En las zonas 2 y 3 se informaron lotes con dos aplicaciones, siendo la zona 2 la que mayor porcentaje registró (21 %). Los principios activos utilizados fueron mezclas de estrobirulinas y triazoles de diferentes marcas en casi la totalidad de los casos. Solamente un 2 % de los casos de la zona 2 indicó el uso de carboxamidas. En los casos de aplicaciones, las enfermedad citada en mayor porcentaje fue roya de la hoja (amarilla y anaranjada) con un 80 % de las menciones, seguida de manchas foliares con un 5 % de los casos. En cuanto a malezas, Rama Negra (Conyza sp) es la principal en todas las zonas. En la zona 2 (LS-JP), le sigue Raigrás (Lolium sp) que incrementó su mención desde la campaña pasada. Como Gráfico 12
Distribución de los casos de trigo según aplicación de fungicidas.
Red de INNOVADORES
El contenido de agua del perfil a la siembra fue bueno en toda la superficie, con un 67 % de lotes con alta recarga y un 37 % de recarga intermedia (Gráfico 11). Según los datos, se puede concluir que el contenido de agua del perfil y la presencia de napas influyen significativamente en la determinación del rendimiento de trigo.
lotes agrícolas. Solamente el 44 % de la superficie informada tomó decisiones de fertilización a partir de análisis de suelos, siendo éste un porcentaje mayor si se lo compara con las dos últimas campañas.
9 Cultivos Invernales 2020
superiores en comparación con los lotes sin influencia de napa (Gráfico 10).
maleza secundaria, Ortiga Mansa (Lamium amplexicaule) tiene el mayor número de menciones y Perejilillo (Bowlesia incana) ocupa el tercer lugar.
Red de INNOVADORES
Los principales antecesores de los cultivos de cosecha y de servicios fueron soja (73 % de los casos de cosecha y 59 % de los casos de servicios), y maíz (22 % de los casos de cosecha y 32 % de los casos de servicios) (Gráfico 13).
Los rendimientos del cultivo de trigo por zona se muestran en los Gráficos 15 y 16. El máximo rendimiento (65 qq/ha) y el promedio más alto (40.9 qq/ha) se registraron en la zona 2. En tanto que el mínimo (0 qq/ha) se registró en la zona 3 y el promedio más bajo en la zona 4 (31.6 qq/ha). La dispersión de los datos fue menor en la zona 2 y mayor en la 3.
El porcentaje fue variable entre las zonas y en la zona 5 aparece maní como antecesor de cultivos de cosecha (Gráfico 14). Gráfico 13
a) Antecesores de cultivos de cosecha; b) antecesores de cultivos de servicios.
a)
b)
Cultivos Invernales 2020
10
Gráfico 14
Antecesores de cultivos de cosecha según zona.
Gráfico 15
Red de INNOVADORES
Rendimiento y número de casos por zona.
Gráfico 16
Distribución de los rendimientos de la campaña 2019 por zona.
Cultivos Invernales 2020
11
Conclusión • En el Nodo Oeste de Aapresid durante la campaña fina 2019 el cultivo más importante en superficie fue trigo de cosecha, seguido por centeno como cultivo de servicio.
Red de INNOVADORES
• Según la zona, varió la proporción de lotes propios y alquilados, clases de uso de suelo, el uso de riego y uso de fertilizantes, aplicaciones de fungicidas, antecesores y rendimientos.
Agradecimientos A los integrantes de Regionales Aapresid del nodo Oeste por facilitar los datos.
Cultivos Invernales 2020
12
• Sin embargo, no registraron variaciones importantes entre zonas la fecha de siembra de cultivos de servicios y cosecha, las variedades de trigo o centeno utilizadas, la recarga del perfil y la presencia de napa, las enfermedades citadas y la maleza principal.
Encuentre el presente trabajo en www.aapresid.org.ar - PUBLICACIONES
Manejo de cultivos de servicio: Resultados de ensayos a campo 2018/19 Efecto de la inoculación sobre la producción de biomasa aérea y subterránea, la composición de la misma (%C y %N) y el impacto sobre la fijación de N, entre los aspectos que se evaluaron.
Palabras Claves: Cultivos de servicios; Vicia; Centeno; Inoculación; Fijación de Nitrógeno; Biomasa.
Red de INNOVADORES
Ing. Agr., asesor privado. Ing. Agr., ATR-GTD Regional Aapresid Los Surgentes-Inriville. 3 Ing. Agr. Dr., IFEVA-CONICET-FAUBA. 1
2
Regional Los Surgentes/Inriville
13 Cultivos Invernales 2020
Autores: Zorzín, J.L.1; Dorsch, A.2, Pinto, P.3; Piñeiro, G.3
Red de INNOVADORES Cultivos Invernales 2020
14
Introducción Los cultivos de servicios (CS) se siembran en los períodos de barbecho químico (BQ) con el fin de restaurar distintos servicios ecosistémicos que generalmente se pierden bajo sistemas de agricultura continua. Por ejemplo, los CS pueden sembrarse para brindar protección contra la erosión, para aumentar la materia orgánica del suelo, para disminuir las pérdidas de nitrógeno (N) por lixiviación o volatilización, para controlar malezas o para mejorar las propiedades físicas del suelo. Particularmente, las leguminosas se siembran con el objetivo de aumentar el N del suelo y reducir las dosis de fertilizantes nitrogenados requeridas para el cultivo siguiente. También se busca disminuir las aplicaciones de fitosanitarios para el control de malezas y de esta manera reducir el impacto ambiental. La evaluación de los CS generalmente se basa en su producción de biomasa aérea, pero es necesario caracterizarlos y elegirlos en función de rasgos relacionados con los servicios que se pretenden restaurar. Para elegir las leguminosas contribuyan con N fijado biológicamente (NFB) resulta fundamental evaluar no sólo la biomasa, sino también la concentración de N y la fijación biológica de N. Generalmente, las vicias logran absorber más del 50 % del N por fijación biológica cuando presentan una buena nodulación. Sin embargo, este %NFB suele disminuir en lotes sin historia de vicia, en los que generalmente se observan fallas de inoculación. Por esta razón uno de los objetivos de este trabajo fue evaluar el efecto de la inoculación sobre la producción de biomasa aérea y subterránea, la composición de la biomasa (%C y %N) y sobre la fijación de N. El ensayo tiene un carácter exploratorio, en condiciones de campo y con maquinaria habitual de producción extensiva. Por este motivo y debido a su tamaño, tiene las limitaciones de carecer de repeticiones que serían necesarias para obtener datos más robustos, aunque permiten tener aproximaciones en parcelas grandes y observar la variabilidad en esa superficie y en las condiciones en las que normalmente trabaja el productor. Materiales y métodos El ensayo se realizó en un lote que se encuentra sobre la ruta provincial N° 6, a 5 km al oeste de la localidad
de Los Surgentes, Córdoba (32 58’ 36.76’’ S 62 4’ 13.62‘’ O) sobre un suelo Argiudol típico de la Serie Hansen 3 (Clase de Uso IIIes). Se implantaron 2 ensayos idénticos, uno en el espacio de tiempo entre maíz y soja (Mz Sj), y otro entre trigo/soja y maíz (Tr/Sj Mz), tomando 2 fechas de siembra (FS) para este último (temprana en septiembre, y tardía en diciembre). Los tratamientos son franjas sin repeticiones y las labores correspondientes para cada uno se realizaron con la maquinaria habitual del productor. La FS de los CS fue el 15/04/2018 y los tratamientos evaluados con sus respectivas densidades y distancias de siembra, fueron los siguientes: 1. Barbecho Químico (BQ) 2. Centeno (C): 19 cm EES – 50 kg/ha 3. Vicia + Centeno (V+C): 19 cm EES – 15 kg/ha + 15 kg/ha 4. Vicia (V): 38 cm EES – 21 kg/ha Dentro del tratamiento del cultivo de vicia (V), también se realizó el ensayo de respuesta a inoculación biológica con 3 tratamientos: 4. a) Sin inoculación (V0) 4. b) Inoculación simple con 200 cc Rilegum Top/100 kg semilla (V1) 4. c) Inoculación doble con 400 cc Rilegum Top/100 kg semilla (V2) Vale remarcar que el lote no tenía antecedentes de cultivo de V en su historial, por lo que no contaba con cepas naturalizadas, fijadores biológicos para esta especie. Todos los tratamientos con CS fueron fertilizados con 80 kg/ha MAP en la línea de siembra. Se muestra el diseño del ensayo entre los cultivos de Tr/Sj Mz, el ensayo entre Mz Sj fue idéntico, pero no se diferenciaron fechas de siembra en el cultivo de soja (Imagen 1). Los tratamientos pre-emergentes se realizaron a través de los diferentes tratamientos de CS y BQ con un equipo de pulverización experimental con un ancho de labor de 5 m x largo del ensayo. Se realizó el monitoreo de malezas en el BQ y se determinaron los momentos de aplicación de herbicidas de acuerdo a la especie, densidad y tamaño de malezas, no superando en ningún caso el 10 % de cobertura verde, y registrando dichas aplicaciones con los
Imagen 1
Red de INNOVADORES
Plano del ensayo entre los cultivos de trigo/soja y maíz.
15
Las fechas de secado de los CS fueron los siguientes: • Mz Sj: 03/09/2018 • Tr/Sj Mz FS Temprana: 03/09/2018 • Tr/Sj Mz FS Tardía: 10/11/2018 La producción de raíces se estimó a partir de la producción de biomasa aérea y de la partición raíz/tallo que presentaba el cultivo (Ecuación 1). Para estimar la partición, se muestrearon 4 plantas por parcela utilizando el método de planta entera (https://www. youtube.com/watch?v=Dza8unXDxSs). Ecuación 1 Producción de raíces (Kg/ha) = Producción de biomasa aérea (Kg MS/ha)*raíz/tallo Las muestras de biomasa se analizaron en el Laboratorio de Isótopos Estables en Ciencias Ambientales (LIECA) de Mendoza, para conocer el %C, %N y δ15N. El %N que proviene de la fijación biológica (%NFB) se estimó utilizando el método de abundancia natural que consiste
en comparar la δ N que presentan las leguminosas con las que presenta un cultivo de referencia que no fije N (Ecuación 2), en este caso C. Ecuación 2 %NFB = (δ15Ncenteno - δ15Nvicia/ δ15Ncenteno)*100 La fecha de siembra en el caso de maíz en FS temprana fue el 22/09/2018, y el 15/12/2018 para la FS tardía. En el maíz de FS temprana hubo fertilización nitrogenada con 400 kg/ha Solmix en V4, mientras que no hubo fertilización de este tipo en el maíz de FS tardía. En la secuencia Tr/Sj Mz se tomaron 2 surcos de siembras x 3 m de longitud y se extrajeron las espigas a mano para estimar rendimiento de las parcelas a través de la cosecha manual. Resultados y discusión Si bien el otoño fue propicio en cuanto a temperaturas (t°) y precipitaciones (PP) para el desarrollo de los CS, el invierno tuvo PP inferiores a la media y las heladas afectaron la biomasa de los mismos (Figuras 1 y 2). Las PP acumuladas desde la siembra hasta la 1° fecha de secado fueron de 271 mm, mientras que para la 2° fecha de secado fueron de 425 mm.
Cultivos Invernales 2020
principios activos y dosis recomendadas. La evaluación de producción de materia seca (MS) de los CS se realizó con 8 muestreos de 0.25 m2 en cada uno de los tratamientos y se llevó a estufa para determinar el peso seco promedio expresado en kg MS/ha.
15
Figuras 1 y 2
Red de INNOVADORES
PP y T° media para campaña 2018/19 (línea gris) vs. T° Media histórica para el periodo 1960-2018 (boxplot gris).
Cultivos Invernales 2020
16
La producción de biomasa de los diferentes CS al momento del 1° secado (03/09/2018) fueron en general superiores en la secuencia Mz Sj (Figura 3). Con C se lograron valores de producción de MS en todos los casos superiores a los 4.000 kg/ha, no siendo significativo el aporte de MS de la V en la secuencia Mz Sj, pero sí en la secuencia Tr/Sj Mz, donde aportó unos 1000 kg/ha de MS adicionales. Por otro lado, la V como único CS no logró superar los 3500 kg/ha de MS en el momento de secado, necesarios para realizar un buen control de malezas y realizar un aporte considerable de N. Dentro
de los tratamientos con inoculante en V, hubo una notable respuesta a la doble dosis de inoculante (V2), teniendo en cuenta que el lote no presentaba historia previa con cepas específicas para este cultivo. En las Imágenes 2, 3, 4 y 5 se observa la vista aérea natural y el NDVI. En cuanto al control de malezas, para la secuencia Tr/ Sj Mz Temprano y ante las escasas PP invernales, el tratamiento de BL (2 l/ha Glifosato 54 % + 500 cc/ha Flumetsulam 12 % el 19/04/2018) fue suficiente para
Cultivos Invernales 2020
17
Red de INNOVADORES
Figura 3
Red de INNOVADORES
Producción de MS de los CS con diferentes antecesores.
Cultivos Invernales 2020
18 llegar limpio al momento de la siembra (22/09/2018) y no se precisó de tratamiento de BC, ni tampoco de herbicidas de acción total. Se aplicaron los preemergentes sin el agregado de algún otro herbicida post-emergente de malezas. No hubo diferencias en el % control entre BQ y CS para las malezas de verano. Sin embargo, por debajo de la cobertura generada en los tratamientos de V, hubo nacimientos de Conyza sp. que no se podían controlar debido al solape. Luego, cuando el maíz se encontraba en V2, comenzaron a emerger por encima del rastrojo y hubiera sido necesario un control para la maleza en este caso. Los tratamientos C y V+C no presentaron problemas con Conyza sp., atribuibles al efecto alelopático del centeno sobre las malezas a pesar de no haber logrado un gran volumen y pese a que la intercepción de la radiación no fue total hasta el momento del 1° secado. Los resultados de la cosecha manual de las parcelas en la secuencia Tr/Sj Mz FS Temprana, mostraron una penalidad en el rendimiento para los tratamientos con CS vs. Testigo (BQ), debido al consumo de agua ejercido por los mismos y a las escasas PP de invierno y principios de primavera que no permitieron la recarga del perfil hasta entrado el mes de octubre (Figura 4).
En la secuencia Mz Sj, el BL se realizó con los mismos p.a. tanto en los tratamientos con CS como en el BQ (2 l/ha Glifosato 54 % + 500 cc/ha Flumetsulam 12 %). Al momento de realizar el BC, se realizó el secado de los CS con iguales dosis de herbicidas postemergentes (2 l/ ha Glifosato 54 % + 1.3 l/ha 2,4-D DMA 60 %), mientras que en el BQ se aplicaron 250 cc/ha de Diflufenican como herbicida residual. Al momento de realizar los preemergentes, el BQ presentaba una elevada cantidad de nacimientos de A. hybridus y algunas plantas de Conyza sp. (Imágenes 6 y 7), mientras que sobre los tratamientos de CS solamente se observaba Conyza sp. por debajo de la cubierta. Todas las parcelas fueron reseteadas con herbicidas no selectivos (2.5 l/ha Glifosato 54 % + 35 g/ha Saflufenacil) y se agregaron los preemergentes. Se logró la incorporación de los preemergentes en los CS, aunque en los tratamientos con V como único cultivo (especialmente en el tratamiento V0 de menor crecimiento), hubo mayor cantidad de Conyza sp. que no se logró controlar durante el reseteo por encontrarse solapada por la cubierta y hubo demasiado rebrote. En cuanto al control de malezas primavero-estivales, no hubo diferencias significativas. Los tratamientos
Figura 4
Red de INNOVADORES
Rendimiento de maíz en FS temprana con diferentes antecesores.
preemergentes que contaban con Flumioxazin como herbicida residual mostraron un control mayor sobre Conyza sp., no en la cantidad de individuos por superficie sino en la disminución de su biomasa. El C y V+C, al igual que en lote con secuencia Tr/Sj Maíz Temprano, tuvo efecto alelopático y no permitió el desarrollo de Conyza sp. En estas dos situaciones de secado más temprano, se sugiere la siembra temprana de los CS y, en lotes con presión de malezas de invierno, agregar preemergente, de forma tal que permita el rápido establecimiento del CS y la incorporación del herbicida residual. La consociación de V+C resultó una muy buena alternativa ya que aportó buena cantidad de MS, más equilibrio en la relación C/N del residuo, aporte de N por FBN de la V que favoreció el desarrollo del C acompañante y efecto alelopático por parte del C que no permitió el establecimiento de malezas. Esta alternativa de CS, con secado químico, permitió una disminución en el EIQ del 36 % (83.1 en BQ vs. 52.9 en V+C). Si se considera la opción de rolado al momento del secado del CS (si los cultivos que componen la consociación tienen el desarrollo adecuado), el EIQ disminuiría un 67 %.
A los 20 días del 1° momento de secado se tomaron imágenes de la secuencia Tr/Sj Mz Tardío. Se pudo observar a simple vista un crecimiento exponencial de los CS (Imágenes 8 a 22) coincidente con el aumento de la t° y las PP. En la secuencia Tr/Sj Mz Tardío (31/10/2018), la producción de biomasa aérea y subterránea, y por lo tanto los servicios asociados, fue variable entre los tratamientos evaluados. Los CS de V presentaron una muy buena producción de biomasa aérea que incluso superó a la del cultivo de C (Tabla 1). La V2 presentó una producción de 6.703 Kg MS/ha, mientras que la V0 produjo menos que la mitad de biomasa aérea (3.026 Kg MS/ha). En todos los casos, la partición a raíces en los primeros 10 cm de profundidad fue menor a 0,1 y el tratamiento que más raíces aportó fue la V1 (442 Kg MS/ha). De acuerdo con estos resultados, los distintos tratamientos podrían brindar distintos servicios a la rotación. La producción de biomasa aérea del C y las V inoculadas se encuentra dentro del rango buscado y podría cumplir con los objetivos de cubrir el suelo para protegerlo de la erosión y controlar malezas.
Cultivos Invernales 2020
19
Imágenes 2 y 3
Imágenes de los CS en la secuencia Tr/Sj Mz. Izquierda foto aérea, derecha NDVI.
Barbe
cho
Barbe
cho
Cente
no
Cente
Sin In
Vicia
ocula r l a c i ón Si Vicia mple Inocu lación Doble Vicia
Red de INNOVADORES
Vicia
no +
Inocu
Cente Cente
no
no + Vicia Sin In ocula Vicia r Inocu lación Vicia Simp Inocu le lación Doble Vicia
Imágenes 4 y 5
Imágenes de los CS en la secuencia Mz Sj. Izquierda foto aérea, derecha NDVI.
Barbecho
Vicia Inocula ción Simple Vicia Inoculac ión Doble Vicia Sin Inoc ular Centeno + Vic ia Centeno
Barbecho
Centeno
Vicia Inocula ción Simple Vicia Inocula ción Doble Vicia Sin Inocu lar Centeno + Vicia
Cultivos Invernales 2020
20
Imágenes 6 y 7
Nacimientos de A. hybridus (izquierda) y Conyza sp. (derecha) en el BQ de la secuencia Mz Sj.
Cultivos Invernales 2020
21
Red de INNOVADORES
Red de INNOVADORES
Mientras que probablemente resulte insuficiente la biomasa producida por el tratamiento de V0. Por su parte, la producción de raíces de los CS contribuye a la formación de materia orgánica del suelo y mejora las propiedades físicas del mismo. La V1 y el C fueron los tratamientos que más raíces aportaron (442 y 406 Kg MS/ha, respectivamente). En cambio, los tratamientos de V2 y V0 presentaron menos producción debido a la menor partición raíz/tallo y a la menor producción de biomasa aérea, respectivamente. La producción de MS aérea para V+C superó los 12.000 kg MS/ha, un 131 % más que en el momento de secado temprano (Figura 5). La V1 y V2 tuvieron una producción adicional similar (V1 = 4.715 kg MS/ha y V2 = 4.570 kg
MS/ha), finalizando con una producción de casi 600 kg MS/ha adicionales por tener doble dosis de inoculante, además de una producción más homogénea en la superficie (no se veían baches sin cobertura). El C logró poco más de 1.000 kg MS/ha adicionales entre fechas de secado, lo que permite destacar el efecto sinérgico de ambos cultivos en consociación vs. producción individual de cada uno. La máxima producción individual de C fue de 5.393 kg MS/ha, y la de V1 6.128 kg MS/ha. La suma de ambos es de 11.521 kg MS/ha mientras que la consociación V+C (la V en la consecución tuvo inoculación simple) logró 12.122 kg MS/ha (más del 5 %). Imágenes 8 y 9
Centeno vista de frente (izquierda) y vista superior (derecha).
Cultivos Invernales 2020
22
Imágenes 10 y 11
Vicia + Centeno vista de frente (izquierda) y vista superior (derecha).
Imágenes 12 y 13
Imágenes 14 y 15
Red de INNOVADORES
Vicia Sin Inoculación vista de frente (izquierda) y vista superior (derecha).
Vicia Inoculación Simple vista de frente (izquierda) y vista superior (derecha).
Cultivos Invernales 2020
23
Imágenes 16 y 17
Vicia Inoculación Doble vista de frente (izquierda) y vista superior (derecha).
Imagen 18
Red de INNOVADORES
Diferencias en el estado nutricional del centeno puro (derecha) y consociado con vicia (izquierda).
Cultivos Invernales 2020
24
Imรกgenes 19 y 20
Vicia Inoculaciรณn Simple (izquierda) y Vicia sin inocular (derecha). Nacimientos de Conyza sp. en los baches sin cubrir con el CS (derecha).
Vicia Inoculaciรณn simple
Vicia sin inocular
Conyza sp.
Imágenes 21 y 22
Red de INNOVADORES
Comparación de desarrollo de plantas con y sin inoculante a dosis simple (izquierda). Comparación de Inoculación a Simple y Doble dosis (derecha).
Cultivos Invernales 2020
26
Vicia Sin Inocular
Luego de la medición de MS, los cultivos de V sufrieron un ataque severo de H. gelotopoeon y del complejo de isocas cortadoras (A. malefida, A. ípsilon y P. saucia), cuando el C llegó a su madurez fisiológica (Imagen 23). La calidad, medida como la relación carbono/nitrógeno (C/N) de la biomasa aérea y de raíces, también fue variable entre tratamientos. El C presentó una mayor relación C/N que la V, tanto en la biomasa aérea como en la de raíces (C/N promedio = 69,2 y 14,2, respectivamente). A su vez, las V presentaron una leve diferencia en la relación C/N que tendió a ser superior en el tratamiento de V0 (C/N promedio = 15,0). Esta diferencia responde a una menor concentración de N que las V inoculadas (2,8 %N vs 3 %N), ya que el %C se mantuvo relativamente constante (Tabla 1). La inoculación mejoró los aportes de NFB que aportaron los CS de V. Por un lado, el tratamiento de V2 presentó el
Vicia Inoculación
Vicia
mayor %NFB, 74 % (Figura 6). La absorción total de N fue de 180 Kg/ha, de los cuales 133 Kg/ha fueron aportados por la FB. Las grandes diferencias encontradas respecto a los otros tratamientos de inoculación (entre 63 y 88 Kg NFB/ha) probablemente se deban a que el lote no contaba con historia de V y, por lo tanto, no presentaba inóculos de V naturalizados en el suelo. Por otro lado, el tratamiento de V1 presentó el menor %NFB, pero gracias a su mayor producción de biomasa logró aportar una mayor cantidad de NFB que el tratamiento de V0 (70 Kg NFB/ha vs. 45 Kg NFB/ha). Algunas experiencias de productores en situaciones similares sugieren que las diferencias en el %NFB entre la inoculación simple y doble, pueden deberse a que la doble inoculación disminuye el riesgo de tener muchas plantas sin inocular en caso de que no se logre una buena distribución del inoculante durante la preparación y mezclado previo a la siembra.
Tabla 1
Descripción de la producción y la composición de biomasa aérea y de raíces de los distintos tratamientos. Tratamientos
C
V0
V1
V2
Biomasa aérea (Kg/ha)
5393
3026
6128
6703
Relación raíz/tallo
0,08
0,06
0,07
0,04
Biomasa raíces (Kg/ha)
406
182
442
263
Biomasa total (Kg/ha)
5799
3208
6570
6966
C:N
70,1
17,0
14,3
16,0
%C
42,5
41,2
41,1
41,0
%N
0,6
2,4
2,9
2,6
Kg N/ha
32,7
73,4
176,1
171,4
1,4
0,6
0,8
0,3
C:N
68,2
13,1
11,7
12,8
%C
41,9
42,3
39,0
40,9
%N
0,6
3,2
3,3
3,2
Kg N/ha
2,5
5,9
14,7
8,4
δ15 Nnorm
1,8
0,7
1,5
1,6
35,2
79,3
190,8
179,8
1,4
0,6
0,9
0,4
Biomasa raíces
27
Biomasa total Kg N/ha δ15 Nnorm
Figura 5
Producción de MS de los CS en el segundo momento de secado.
Cultivos Invernales 2020
δ15 Nnorm
Red de INNOVADORES
Biomasa aérea
Red de INNOVADORES Cultivos Invernales 2020
28
El bajo %NFB encontrado en el tratamiento de V1 sugiere que resulta crítico lograr una buena inoculación en lotes que no hayan presentado historia de V. Tanto en el tratamiento de V1 como en el de V0, se encontraron nódulos en las raíces que en su mayoría presentaban un gran tamaño, eran de color blanco y estaban ubicados lejos de la corona de la raíz. Sin embargo, es posible hipotetizar que en estos tratamientos el éxito de inoculación suele ser muy errático. Es decir que, si bien algunas plantas logran nodular y fijar N, esta respuesta suele ser más heterogénea que cuando se aplica una doble inoculación. Como consecuencia se tiene una menor producción de biomasa/ha, una menor cantidad de nitrógeno absorbido, y finalmente, un menor aporte de Kg NFB/ha. En cuanto al control de malezas, a diferencia de la FS Temprana en donde no hubo ahorro de herbicidas, en el BQ de la FS Tardía fue necesario un BC (2 l/ha Glifosato 54 % + 1.3 l/ha 2,4-D DMA 60 % + 2 l/ha Atrazina 50 % el 15/10/2018). Además, en el momento de la siembra al realizar los herbicidas preemergentes, también fue necesario en el BQ acompañar el tratamiento con herbicidas postemergentes para el control de A. hybridus, gramíneas anuales y Conyza sp. (2.5 l/ha Glifosato 54 % + 35 g/ha Saflufenacil). Los tratamientos V2 y V+C no presentaron malezas al momento de realizar los pre-emergentes, mientras que en C comenzaron los nacimientos de Conyza sp. a los 10-15 días de madurez fisiológica (se logró unas 4 semanas antes de la FS Tardía); y en los tratamientos V0
y V1 presentaron Conyza sp. donde el cultivo no llegó a cubrir el suelo en su totalidad. Al comparar el tratamiento BQ, en los tratamientos V2 y V+C hubo un ahorro del pre-emergente en el BC, y de los herbicidas post-emergentes al momento de realizar el tratamiento de presiembra. Así, el EIQ se redujo un 36 % (83.1 vs. 52.9) en caso de secado químico del CS, mientras que si se opta por el rolado mecánico se reduce un 67 % (83.1 vs. 27.6). Teniendo en cuenta la clasificación del nivel de riesgo ambiental que realizan Stewart et al. (2011), con secado químico aún se considera por encima del nivel de riesgo medio (>45), mientras que el rolado lo aproxima a valores considerados de riesgo bajo (20-45). Si se combinara en esta secuencia de Tr/Sj Mz Tardío la inclusión de CS secado con rolado, y aplicación selectiva de los herbicidas post-emergentes junto al pre-emergente del CS, podría reducirse potencialmente el EIQ por debajo de 20, considerado de bajo riesgo ambiental. Finalmente, los resultados de la cosecha manual de las parcelas en la secuencia Tr/Sj Mz FS Tardía, mostraron un mayor rendimiento en los tratamientos con V como único componente del CS, sin diferenciarse prácticamente entre tratamientos de inoculación (Figura 7). Los menores rendimientos se obtuvieron con antecesor C, T, y V+C, de menor a mayor, y esto podría explicarse en los casos del T y el C, por la diferencia en el N aportado por la V (en la FS Tardía no hubo fertilización con N), y en el caso de V+C por el mayor consumo de agua que se produjo para obtener esa producción de MS en el CS. Figura 6
Nitrógeno absorbido del suelo y fijado biológicamente (NFB) en diferentes tratamientos de inoculación de Vicia.
Imagen 23
Red de INNOVADORES
Presencia de H. gelotopoeon y complejo de isocas cortadoras en vicia.
Cultivos Invernales 2020
29
Figura 7 y 8
Red de INNOVADORES
Rendimiento de maíz en FS Tardía, y rendimientos de maíz en FS Temprana y Tardía con diferentes antecesores.
Cultivos Invernales 2020
30
Conclusiones generales
• Se pudo reducir el EIQ en el caso de FS tardía de maíz y también en el caso de soja, en donde los periodos de BQ son mayores. Esto demuestra que los CS son una herramienta fundamental en espacios de tiempo prolongados en donde la eficiencia de uso del agua es baja por parte del BQ y prosperan malezas en ausencia de cultivos.
Agradecimientos A la familia Pellizzon, especialmente en nombre de Gabriel y Norberto, miembros fundadores de la regional Los Surgentes-Inriville que generosamente abrieron las puertas de su establecimiento. Al personal de campo, Hernán Campana y Gustavo Gagliardi, que colaboraron con mucho esfuerzo y dedicación en la realización de los ensayos hasta su cosecha. A Rizobacter S.A. por el apoyo para financiar parte del ensayo y el aporte del inoculante. Al Ing. Agr. Valentín Gentiletti por la toma de las imágenes con el drone y su procesamiento.
Encuentre el presente trabajo en www.aapresid.org.ar - PUBLICACIONES
31 Cultivos Invernales 2020
• En la FS maíz tardía, las V inoculadas llegaron a generar una producción de MS adecuada para el control de malezas, aunque la opción de doble inoculado en un lote sin historia previa permite un mejor logro del cultivo y más rápido crecimiento que cubre baches en donde prosperan malezas. Además, la doble inoculación fue fundamental para aumentar el aporte de N por FB. La consociación V+C en esta fecha de secado duplicó la producción de MS. Sin embargo hubo penalidad de rendimiento respecto a los tratamientos con V por un mayor consumo de agua para esa producción de MS, lo que sugiere que la mezcla de V+C permite una mayor producción de MS temprana, cubrir los espacios para la competencia de malezas y quizás un secado más temprano resignando kg MS/ha pero permitiendo un equilibrio con la recarga del perfil para evitar la penalidad en rendimiento del cultivo posterior. En todos los casos, las V tuvieron rendimientos superiores al Testigo (BQ) sin aplicación de fertilizante nitrogenado en ninguno de los casos, lo que marca la diferencia por aporte de N del CS.
Red de INNOVADORES
• En fecha de secado temprano, la V como único CS no llegó a generar la MS suficiente para generar un control de malezas adecuado que permita independizarse al menos de los herbicidas de control post-emergente. Para este momento de secado, con el C como acompañante sí se logró este servicio ecosistémico. Sin embargo, esto fue en detrimento del rendimiento del cultivo de maíz en FS temprana, al tener una menor disponibilidad de agua almacenada. Esto sugiere el adelanto de la FS de los CS si se pretende una FS temprana de maíz, para conseguir el volumen necesario para el control de malezas y que permita la recarga del perfil de principios de primavera.
Red de INNOVADORES
Autor: Maich, R.H.
Cultivos Invernales 2020
32
Efecto de la fecha de siembra sobre el comportamiento agronómico en trigo de Córdoba Respuesta agronómica de doce genotipos de trigo (Triticum aestivum L.) a dos fechas de siembra en la región central semiárida de la provincia de Córdoba.
Palabras Claves: Trigo; Fecha de Siembra; Genotipos; Comportamiento Agronómico.
En el hemisferio norte por lo general se cultivan trigos invernales, escalonando las siembras desde septiembre hasta diciembre. Para algunos autores (Chen et al., 2003; Yajam & Madani, 2013; Nleya & Rickertsen, 2014) las siembras de septiembre y octubre fueron aquellas que brindaron los más altos rendimientos en grano. Por su parte, otros autores (Aslam et al., 2003; Sial et al., 2005; Zubair & Khakwani, 2006; El-Gizawy, 2009; Ali et al., 2010) afirman que la fecha óptima de siembra coincide con el mes de noviembre. Finalmente, los resultados de El-Nakhlawy et al. (2015) muestran que la siembra de mediados de diciembre resultó agronómicamente recomendable.
Si circunscribimos la revisión bibliográfica a los trabajos realizados en Argentina, nos encontramos que las siembras más tempranas en las regiones del centrosur acontecen desde principios de junio y finalizan a fines de julio (Di Pane, 2017). En trigo y según Giménez y col. (2007), las siembras de junio favorecieron particularmente los materiales de ciclo largo. Por su parte, Fernández (2008) al evaluar tres cereales de invierno (trigo pan, candeal y triticale), observó que los rendimientos más altos se obtuvieron con la siembra de principios de julio respecto a la siembra de principios de agosto. Aunque con un ligero adelanto en las fechas de siembra, Caballero y Abbate (2013) en Balcarce llegaron a resultados similares.
Antes de analizar el trabajo de Murungu & Madanzi (2010) conducido en el hemisferio sur, se mencionan los resultados obtenidos por Subedi et al. (2007) en siembra de primavera en el hemisferio norte, quienes observaron que la siembra debería acontecer entre fines de abril y mediados de mayo. Los resultados obtenidos por Murungu & Madanzi (2010) en Zimbabwe resultan más acordes con el manejo del cultivo de trigo en la región central semiárida de Argentina. En este trabajo las fechas de siembra fueron cuatro: 02/05, 16/05, 01/06 y 16/06, y se observó una merma de 1329 kg ha-1 al contrastar la primera y última fecha de siembra, 4654 kg ha-1 y 3325 kg ha-1, respectivamente. En síntesis, si retenemos al mes de noviembre como el mes en que se debería sembrar el trigo invernal en el hemisferio norte para así obtener los más altos rendimientos en grano, se puede afirmar que dicho mes se corresponde con el mes de mayo en el hemisferio sur, un mes antes de que inicie la estación invernal. En el cono sur por lo general no se siembran trigos invernales sino más bien primaverales, que no requieren
El trabajo de Fridel y Goncalvez (2018) se focaliza en el efecto de la fecha de siembra sobre la duración en la tasa de llenado del grano, y no se alude al efecto de la fecha de siembra sobre el rendimiento en grano. Si bien la duración disminuyó con el atraso de la fecha de siembra, tanto el peso del grano como el número de estos por espiga no se vieron afectados por el atraso en la fecha de siembra. Finalmente, quizás la metodología que más se ajusta a la propuesta extrema de adelantar la fecha de siembra (Hoffman y Castro, 2012) surge del trabajo de Manlla y col. (2012) conducido en Oliveros durante dos campañas agrícolas. Durante el año 2010 la siembra dio inicio el 17/05 y finalizó el 23/07, mientras que en el año 2011 la primera fecha de siembra se pospuso hasta el 08/06 y la tercera fecha aconteció el 03/08. Los mencionados autores afirman que los máximos rendimientos se registraron en las épocas de siembras más tempranas (fines de mayo, principios de junio). Antes de postular la hipótesis de este trabajo, resulta aleccionadora la conclusión a la que llegan Bassu et al. (2009). Estos autores concluyen diciendo que ante el
Red de INNOVADORES
de vernalización para pasar de la etapa vegetativa a la reproductiva. Retomando la temática objeto de revisión, el trabajo de Hoffman y Castro (2012) hace hincapié en la necesidad de generar información que permita sustentar con información actualizada la tendencia en Uruguay a explorar fechas de siembra tempranas en los cereales de invierno. Por su parte, Abbate (2004) afirma que la fecha de floración óptima será la más temprana posible con bajo riesgo de heladas en floración.
33 Cultivos Invernales 2020
Introducción La revisión bibliográfica en relación al efecto de la fecha de siembra sobre el comportamiento agronómico en trigo (Triticum aestivum L.), que antecede al planteo de la hipótesis y el objetivo del presente trabajo, tendrá en cuenta en primera instancia los resultados que provienen de los hemisferios norte y sur obtenidos fuera del país. Luego se circunscribirá la problemática a nivel regional, particularmente en Argentina.
Red de INNOVADORES
inexorable avance del cambio climático, las siembras deberían dar inicio en octubre (en nuestro hemisferio se corresponde con abril) para así atenuar el estrés hídrico terminal propio de los ambientes semiáridos.
Cultivos Invernales 2020
34
De la revisión bibliográfica precedente surge la siguiente premisa: “el cultivo de trigo se debe sembrar un mes antes de que inicie el invierno”. Con el objetivo de probar la hipótesis enunciada se planteó el siguiente objetivo: medir el efecto de la fecha de siembra sobre el comportamiento agronómico en trigo cultivado en secano y en la región semiárida central de la provincia de Córdoba. Materiales y métodos El ensayo comparativo de rendimiento en trigo se realizó durante 2019 en el Área Experimental del Campo Escuela de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de Córdoba (UNC). Esta zona se corresponde con la zona semiárida central de la provincia de Córdoba, con una precipitación media anual de 770 mm, bajo un régimen monzónico. Se evaluaron siete cultivares comerciales de trigo para pan (ACA 906, Algarrobo, Baguette 801, Fuste, Klein Liebre, SY 120 y MS 119) y cinco líneas experimentales (Lore 6 CEFCA 16, Lore 43, Lore 45, Lore 48 y Lore 55). La densidad de siembra usada fue de 200 semillas viables m-2. Los materiales se sembraron en dos fechas de siembra, el 12 de mayo y el 17 de junio de 2019. El diseño utilizado fue en bloques completamente aleatorizados con tres repeticiones con arreglo en parcelas divididas, correspondiéndole la principal a las fechas de siembra y las subparcelas a los 12 genotipos evaluados. Las unidades experimentales fueron micro parcelas de cuatro surcos de 5 m de longitud distanciados por 20 cm.
Al momento de la siembra se tomaron muestras de suelo hasta los 2 metros de profundidad con el objetivo de estimar la cantidad en mm de agua útil. El análisis de suelo se realizó en el Laboratorio de Suelos y Agua (LabSA) dependiente de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la Universidad Nacional de Córdoba. Se registraron las precipitaciones acontecidas durante el ciclo de cultivo. A partir de la cosecha de los dos surcos centrales de cada parcela, se midieron o estimaron las siguientes variables: rendimiento en grano y en biomasa aérea con humedad de cosecha (kg ha-1), índice de cosecha (%), peso de 1000 granos (g), número de granos y espigas m-2 y el número de granos espiga-1. También se registraron los días desde emergencia a antesis (DAA) y se analizaron los datos con el software para análisis estadísticos de aplicación general Infostat (Di Rienzo et al., 2018). Resultados y discusión El agua útil almacenada en el suelo hasta los 2 m de profundidad en la siembra del 12 de mayo de 2019 fue de 271 mm, y de 228 mm para la siembra del 17 de junio de 2019. Las precipitaciones acumuladas durante el ciclo del cultivo, desde el 12 de mayo de 2019 hasta el 30 de octubre de 2019 (momento de la cosecha de la siembra del 12 de mayo) fueron de 68 mm, y 97 mm para el material sembrado el 17 de junio de 2019 que fue cosechado entre el 8 y el 21 de noviembre de 2019. El contenido de materia orgánica del lote ascendía a 2.48 %, 33.4 ppm de N-NO3 hasta los 60 cm de profundidad y 54.4 ppm de P en los primeros 20 cm de profundidad. Los valores medios correspondientes al rendimiento en grano y sus principales componentes numéricos y fisiológicos se presentan en la Tabla 1. De las siete variables, tres pusieron de manifiesto interacciones Tabla 1
Efecto de la fecha de siembra sobre el rendimiento y sus principales componentes en un cultivo de trigo conducido en el Campo Escuela de la Facultad de Ciencias Agropecuarias (UNC) durante la campaña agrícola 2019-2020. Fecha de siembra
Biomasa
Grano
IC*
P1000G*
N° Granos
N° Espigas
N° Granos/Espiga*
12/05/19
16198 a
3608 a
22.3
34.1
10597 a
433 a
25.0
17/06/19
8254 b
2395 b
29.1
34.8
6882 b
269 b
26.0
Medias seguidas por la misma letra no difieren significativamente para el 5% de probabilidad. * Interacción significativa genotipo x fecha de siembra. Biomasa (kg ha-1 de biomasa aérea con humedad de cosecha), Grano (kg ha-1 de grano con humedad de cosecha), IC (índice de cosecha en porcentaje), P1000G (peso de mil granos), N° Granos (número de granos m-2), N° Espigas (número de espigas m-2) y N° Granos/Espiga (número de granos por espiga).
Con el atraso de la fecha de siembra, el rendimiento en grano promedio para los doce genotipos sufrió una merma del 33.6 % (1213 kg ha-1), fluctuando entre 717 kg ha-1 (Algarrobo) y 2358 kg ha-1 (Fuste) (Figura 1). Estos resultados condicen con lo observado por Murungu & Madanzi (2010) en Zimbabwe con una merma de 1329 kg ha-1 al contrastar la primera y última fecha de siembra. Por su parte, el principal componente numérico (número de granos m-2) del rendimiento en grano acompañó la caída productiva con una disminución en el número
de granos por metro cuadrado del orden de las 3715 unidades. Sin embargo, y en sintonía con lo observado por Fridel y Goncalvez (2018), tanto el peso del grano como el número de estos por espiga no se vieron afectados por el atraso de la fecha de siembra. En el caso del peso de los mil granos, la significancia de la interacción genotipo x fecha de siembra responde a que el cultivar Baguette 801 disminuyó el peso de su grano en la segunda fecha de siembra debido al daño por roya negra del tallo. Al igual que lo observado para el peso de los mil granos, el número de granos por espiga no mostró diferencias estadísticamente significativas entre fechas de siembra, salvo en el caso del cultivar ACA que vio incrementado su número en la segunda fecha respecto a la primera fecha de siembra. Finalmente, a los resultados obtenidos en este trabajo le cabe lo que afirman Manlla y col. (2012) respecto a que los rendimientos más altos se lograron con las épocas de siembras más tempranas.
Red de INNOVADORES
genotipo x fecha de siembra significativas (índice de cosecha, peso de mil granos y número de granos por espiga). Para las restantes cuatro variables agronómicas medidas o estimadas, el análisis estadístico puso de manifiesto diferencias significativas entre ambas fechas de siembra. En todos los casos, los valores medios observados en la fecha de siembra del 12 de mayo de 2019 resultaron significativamente superiores a los de la fecha de siembra del 17 de junio de 2019.
35
Rendimiento en grano de doce genotipos de trigo cultivados en dos fechas de siembra.
Cultivos Invernales 2020
Figura 1
Red de INNOVADORES
En lo que respecta al número de días desde la emergencia hasta espigazón (DAA), y haciendo foco en los dos cultivares con ciclo biológicos contrastantes, a la variedad ACA 906 (ciclo corto) le llevó 104 días espigar cuando fue sembrada el 12 de mayo y 90 días en el caso de la siembra del 17 de junio. La disminución en días en cuanto a DAA con el atraso de la fecha de siembra fue del 13.5 %. Por su parte, al cultivar comercial evaluado de ciclo más largo (MS 119) le llevó 134 días espigar cuando fue sembrado el 12 de mayo y 111 días cuando se lo sembró el 17 de junio, es decir una disminución en DAA del 17.2 %.
Finalmente, y como lo afirma Abbate (2004), la fecha de floración óptima será la más temprana posible. Los 3608 kg ha-1 promedio de los doce genotipos sembrados el 12 de mayo resultan de fechas de floración que van desde 31 de agosto al 30 de septiembre. Por su parte, los 2395 kg ha-1 logrados con la siembra del 17 de junio resultan de fechas de floración entre el 28 de septiembre y el 19 de octubre. De más está decir que en la región central semiárida de la provincia de Córdoba septiembre se presenta como el mes en el que el trigo debería florecer.
Conclusiones • El contexto ambiental en el hemisferio norte no se corresponde con el del cono sur. Aún así, a ambos lados del ecuador la tendencia mundial es la misma respecto al adelanto de la fecha de siembra en trigo.
Cultivos Invernales 2020
36 Agradecimientos El autor agradece al Dr. Julio Alejandro Di Rienzo por la desinteresada colaboración en cuanto al análisis estadístico de los datos.
Bibliografía Abbate, P. E. (2004). Ecofisiología de trigo: aspectos prácticos para el manejo del cultivo. En: La hora del empowerment. Actas del 12 Congreso nacional de siembra directa. AAPRESID. Rosario (Vol. 10, pp. 121-127). Ali, M. A., Ali, M., Sattar, M., & Ali, L. (2010). Sowing date effect on yield of different wheat varieties. J. Agric. Res, 48(2), 157-162. Aslam, M., Hussain, M., Akhtar, M., Cheema, M. S., & Ali, L. (2003). Response of wheat varieties to sowing dates. Pak. J. Agron, 2(4), 190-194. Bassu, S., Asseng, S., Motzo, R., & Giunta, F. (2009). Optimizing sowing date of durum wheat in a variable Mediterranean environment. Field Crops Research, 111(1-2), 109-118. Caballero, V. J., & Abbate, P. E. (2013). Análisis del rendimiento en cultivares de trigo pan ante el retraso en las fechas de siembra. Chen, C., Payne, W. A., Smiley, R. W., & Stoltz, M. A. (2003). Yield and water-use efficiency of eight wheat cultivars planted on seven dates in northeastern Oregon. Agronomy Journal, 95(4), 836-843. Di Pane, F. (2017). Recomendaciones de fechas de siembra según las características de algunas variedades de trigo pan. Actualización técnica en cultivos de cosecha fina 2016/17, 76. Di Rienzo J.A., Casanoves F., Balzarini M.G., Gonzalez L., Tablada M. y Robledo C.W. InfoStat versión 2018. Centro de Transferencia InfoStat, FCA, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina. http://www.infostat.com.ar. El-Gizawy, N. K. B. (2009). Effect of planting date and fertilizer application on yield of wheat under no till system. World J. Agric. Sci, 5(6), 777-783. El-Nakhlawy, F. S., Alghabari, F., & Ihsan, M. Z. (2015). Response of wheat genotypes to planting dates in the arid region. Sci. Agric, 10(2), 59-63. Fernández, M. (2008). Efecto de la época de siembra y la fertilidad sobre el rendimiento y sus componentes de tres especies graníferas invernales en la región de las planicies con tosca de la provincia de La Pampa. Rev. Facultad de Agronomía, Univ. Nac. La Pampa, 19, 41-62. Fridel, M. B., & Goncalves, F. S. (2018). Efecto de la fecha de siembra, el genotipo y la fertilidad sobre el llenado del grano de trigo pan (Triticum aestivum L.) en la región semiárida pampeana. Semiárida, 28(1). Gimenez, F., Conti, V., Moreyra, F., & Tomaso, J. C. (2007). Efecto de la época de siembra sobre los caracteres económicos en genotipos de cebada cervecera. Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria, Bordenave, ARG. Hoffman, E., & Castro, A. (2012). Cambios en la fecha de siembra de los cultivos de invierno en Uruguay: Implicancias sobre el rendimiento y el riesgo. Cangüe, 32. Manlla, A., Castellarín, J., & Salvagiotti, F. Rendimiento potencial de trigo y brechas de producción según genotipo y fecha de siembra. Análisis de dos años de experiencias en Oliveros (Santa Fe). Para mejorar la producción, (47). Murungu, F. S., & Madanzi, T. (2010). Seed priming, genotype and sowing date effects on emergence, growth and yield of wheat in a tropical low altitude area of Zimbabwe. Nleya, T., & Rickertsen, J. R. (2014). Winter wheat response to planting date under dryland conditions. Agronomy Journal, 106(3), 915-924. Sial, M. A., Arain, M. A., Khanzada, S. H. A. M. A. D. A. D., Naqvi, M. H., Dahot, M. U., & Nizamani, N. A. (2005). Yield and quality parameters of wheat genotypes as affected by sowing dates and high temperature stress. Pakistan Journal of Botany, 37(3), 575. Subedi, K. D., Ma, B. L., & Xue, A. G. (2007). Planting date and nitrogen effects on grain yield and protein content of spring wheat. Crop science, 47(1), 36-44. Yajam, S., & Madani, H. (2013). Delay sowing date and its effect on Iranian winter wheat cultivars yield and yield components. Annals of Biological Research, 4(6), 270-275. Zubair, M., & Khakwani, A. A. (2006). Effect of sowing dates on the yield and yield components of different wheat varieties. Journal of Agronomy, 5(1), 106-110.
Encuentre el presente trabajo en www.aapresid.org.ar - PUBLICACIONES
Chacra Experimental Integrada Barrow (MAIBA-INTA) Contacto: iriarte.liliana@inta.gob.ar
Evaluación de cultivares de colza a nivel regional
Red de INNOVADORES
Autor: Liliana B. Iriarte
Comportamiento fenológico, productivo y sanitario de material inédito de INTA proveniente de su programa de mejoramiento. El rendimiento promedio de la evaluación de 36 materiales fue de 3.263 kg ha-1.
Palabras Claves: Colza; Ensayo de Cultivares; Respuestas Agronómicas.
Cultivos Invernales 2020
37
Red de INNOVADORES
Introducción La colza es el segundo cultivo oleaginoso a nivel mundial. En esta campaña se produjeron en el mundo 72 millones de toneladas. En Argentina, la superficie cultivada sufre desde hace unos años una fuerte disminución. Diferentes problemas especialmente comerciales, hacen que el cultivo no se desarrolle y alcance la importancia que debería tener en nuestro país. A pesar de las dificultades
Cultivos Invernales 2020
38
que se presentan, el INTA sigue apostando al cultivo. En el marco del proyecto de mejoramiento de cultivos oleaginosos se realiza en diferentes experimentales de todo el país la evaluación de cultivares inéditos correspondientes a dicho proyecto. Esta actividad es coordinada por la Estación Experimental Agropecuaria INTA Paraná. Tabla 1
Fecha de emergencia, inicio de floración, fecha de corte y altura. Tratamientos 30 27 36 17 29 18 21 8 20 2 33 9 25 10 35 32 13 4 15 11 34 12 23 1 28 3 19 5 26 6 24 16 22 7 31 14
E 1817 E 1814 Solar CL E 1804 E 1816 E 1805 E 1808 E 1607 E 1807 E 1507 Hyola 830 E 1716 E 1812 E 1512 Nuvette 2286 Bioaureo 2486 E 1702 E 1709 E 1802 E 1603 Hyola 433 E 1715 E 1810 E 1604 E 1815 E 1703 E 1806 E 1704 E 1813 E 1601 E 1811 E 1803 E 1809 E 1710 Macacha INTA E 1801
Emergencia 7-jul 6-jul 7-jul 7-jul 8-jul 8-jul 6-jul 6-jul 7-jul 8-jul 8-jul 7-jul 8-jul 7-jul 8-jul 8-jul 8-jul 7-jul 6-jul 6-jul 8-jul 7-jul 7-jul 8-jul 7-jul 6-jul 6-jul 7-jul 7-jul 7-jul 8-jul 7-jul 6-jul 7-jul 7-jul 8-jul
Fecha Inicio floración 25-sep 27-sep 5-oct 25-sep 7-oct 27-sep 27-sep 5-oct 27-sep 1-oct 18-oct 6-oct 5-oct 29-sep 2-oct 25-sep 25-sep 27-sep 23-sep 26-sep 20-sep 27-sep 27-sep 8-oct 7-oct 25-sep 25-sep 1-oct 5-oct 6-oct 30-sep 9-oct 6-oct 7-oct 9-oct 5-oct
Corte 27-nov 29-nov 8-dic 27-nov 9-dic 29-nov 29-nov 8-dic 1-dic 30-nov 16-dic 10-dic 9-dic 29-nov 30-nov 28-nov 28-nov 30-nov 27-nov 29-nov 27-nov 28-nov 28-nov 9-dic 10-dic 28-nov 28-nov 29-nov 9-dic 9-dic 28-nov 11-dic 9-dic 11-dic 10-dic 9-dic
Altura (cm) 134 129 134 132 141 137 129 137 142 133 153 141 124 132 135 129 119 139 129 120 109 135 131 134 144 133 127 134 131 141 128 136 132 136 136 136
Tabla 2
Rendimiento (kg.ha-1) 4173 a 3796 ab
PMG (gr) 4,2 ab 4,23 ab
% aceite 45 46,8
Rendimiento relativo 128 116
36
Solar CL
3796
ab
4,41
ab
46,8
116
17 29 18 21 8 20 2 33 9 25 10 35 32 13 4 15 11 34 12 23 1 28 3 19 5 26 6 24 16 22 7 31 14
E 1804 E 1816 E 1805 E 1808 E 1607 E 1807 E 1507 Hyola 830 E 1716 E 1812 E 1512 Nuvette 2286 Bioaureo 2486 E 1702 E 1709 E 1802 E 1603 Hyola 433 E 1715 E 1810 E 1604 E 1815 E 1703 E 1806 E 1704 E 1813 E 1601 E 1811 E 1803 E 1809 E 1710 Macacha INTA E 1801 Media DMS 5 %
3714 3648 3617 3570 3568 3519 3508 3470 3445 3444 3428 3427 3414 3404 3400 3313 3312 3297 3236 3113 3097 3030 3020 2973 2963 2936 2917 2887 2869 2693 2653 2465 2360 3263 9
ab abc abc abcd abcd abcd abcd abcd abcd abcd abcd abcd abcde abcde abcde abcdef abcdef abcdef abcdef bcdef bcdef bcdef bcdef bcdef bcdef bcdef bcdef bcdef bcdef cdef def ef f
4,48 4,12 4,28 4,34 4,18 3,7 3,64 4,08 4,57 3,94 4,36 4,07 3,64 3,8 4,09 4,35 3,75 3,62 4,08 4,02 4,61 4,11 4,14 4,2 4,39 4,47 4,1 3,74 4,53 4,39 4,5 4,4 4,37 4,16 7,15
ab ab ab ab ab ab b ab ab ab ab ab ab ab ab ab ab b ab ab a ab ab ab ab ab ab ab ab ab ab ab ab
46,6 45,3 45,5 46 46,4 47,4 47,2 43,3 46 46,5 46,7 45,1 47 47,1 45,8 46,8 46 45,7 45,7 44,9 46,9 47,2 45 46,3 46 45,4 44,6 47,4 46,2 46,9 44,9 46,1 47,3 46,1
114 112 111 109 109 108 107 106 102 105 105 105 105 104 104 101 101 101 99 95 95 93 92 91 91 90 89 88 88 82 81 75 72
Letras iguales no difieren estadĂsticamente al nivel del 5 % del test de Fisher.
39 Cultivos Invernales 2020
Tratamientos 30 E 1817 27 E 1814
Red de INNOVADORES
Rendimiento kg/ha, peso de 1000 granos, % de aceite y rendimiento relativo.
Red de INNOVADORES
madurez fisiológica. Con los resultados de rendimiento en kg ha-1 y peso de 1000 granos se realizó análisis de varianza y comparación de medias por el test de Fisher (Tabla 2).
Materiales y métodos En el campo experimental de la Chacra Experimental Integrada Barrow se sembraron 30 cultivares experimentales y 6 testigos comerciales (3 híbridos y 3 variedades). La siembra se realizó el 22 de junio de 2018 en parcelas de 4 surcos a 0.32 m entre surcos y 6 m de largo. El diseño estadístico empleado fue bloques al azar con 3 repeticiones en 6 bloques. Se fertilizó previo a la siembra con 90 kg ha-1 de fosfato diamónico. En estado de roseta se aplicaron 180 kg ha-1 de urea y 70 kg ha-1 de sulfato de amonio. En el mismo estado se controlaron malezas latifoliadas con dicamba y clopiralid, y gramíneas con cletodim. Se realizaron observaciones fenológicas de fecha de inicio de emergencia, inicio de floración y corte, como así también altura (Tabla 1). La cosecha se realizó en forma manual al momento de
Observaciones y resultados Comentarios La campaña se presentó con muy buenas condiciones climáticas para colza. Se registraron pocas heladas en el periodo de mayor susceptibilidad. Las lluvias fueron adecuadas. El rendimiento promedio de la evaluación de los 36 materiales fue de 3.263 kg ha-1 (Tabla 2). El mayor rendimiento fue de 4173 kg ha-1 para el experimental 1817. Más del 50% de los materiales inéditos del programa de mejoramiento de INTA alcanzaron rendimientos superiores a la media del ensayo. No se registraron problemas sanitarios en ninguno de los materiales.
Cultivos Invernales 2020
40
Objetivo Evaluar el comportamiento fenológico, productivo y sanitario de material inédito de INTA proveniente del programa de mejoramiento de la institución.
Encuentre el presente trabajo en www.aapresid.org.ar - PUBLICACIONES
Profesionales. Técnico del Grupo Manejo de Cultivos EEA INTA Pergamino. 1
2
Arveja: evaluación de diez variedades verdes y amarillas en Pergamino
Red de INNOVADORES
Autores: Prece, N.1; Introna, J.1; Llanes, M.2
El objetivo de este trabajo fue evaluar el comportamiento de diez variedades de arvejas (verdes y amarillas), en cuanto a rendimiento, adaptación al ambiente y características agronómicas.
Palabras Claves: Arveja; Cultivos Extensivos; Ensayos de Rendimientos; Ensayos de Variedades, Manejo de cultivo.
Cultivos Invernales 2020
41
Red de INNOVADORES
Introducción El Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) lleva a cabo la Red Nacional de Cultivares de Arveja (Pisum sativum, L.), coordinada por la agencia de extensión rural de Arroyo Seco (Santa Fe) que conduce ensayos en las diferentes regiones productivas del país.
Cultivos Invernales 2020
42
El ensayo se sembró el 25 de julio con sembradora experimental en directa, con una densidad objetivo de 90 plantas/m2. Las semillas fueron tratadas con Maxim Integral e inoculadas con Rilegum Top. Se fertilizó a la siembra con 120 kg/ha de mezcla física (7N-40P6S-8Ca). El experimento se mantuvo libre de malezas, plagas y enfermedades.
El grupo Manejo de Cultivos de la EEA INTA Pergamino integra esta red oficial desde el año 2015, aportando información sobre el comportamiento de las distintas variedades de arveja.
Se registraron los estadios fenológicos de emergencia (50 % de plantas emergidas) y de plena floración (más del 50 % de plantas con flores abiertas).
El objetivo del presente trabajo fue evaluar el comportamiento de diez variedades de arvejas (verdes y amarillas), en cuanto a rendimiento, adaptación al ambiente y características agronómicas.
Se cosechó manualmente el 15 de noviembre. Se cosecharon los tres surcos centrales de cada parcela y se determinó el rendimiento en grano (corregido al 13,5 % de humedad) en kg/ha.
Materiales y métodos El ensayo se realizó en un lote del campo experimental de la EEA INTA Pergamino (33° 56´S; 60°33´O), sobre un suelo Argiudol típico serie Pergamino.
Se registraron las precipitaciones por períodos decádicos (expresadas en mm) y las temperaturas máximas, mínimas y medias (°C) entre julio y noviembre del 2019. Las mediciones se realizaron en la estación agro meteorológica ubicada a 150 m del ensayo.
Se evaluaron 10 variedades de arveja de cotiledones verdes y amarillos (Tabla 1), bajo un diseño en bloques completamente aleatorizados con tres repeticiones. La unidad experimental quedó definida en parcelas de 6,3 m2 (cinco surcos a 0.21 m de distanciamiento y 6 m de largo).
Los rendimientos fueron analizados por ANOVA y las medias se compararon por el test de LSD de Fisher (p<0.05). Todos los análisis fueron realizados con el software estadístico InfoStat (Di Rienzo, 2014). Tabla 1
Variedades participantes, color de cotiledones, obtentor y peso de mil semillas (P1000). Variedades
Color de cotiledones
Obtentor
P1000 (g)
Viper
Verde
AFA
192
Reussite
Amarillo
Scorziello y Galella
242
Yams
Amarillo
Bioseminis
271
Meadow
Amarillo
AFA
212
Shamrock
Verde
Limagrain
212
Kingfisher
Verde
Limagrain
259
FCA 232
Verde
FCA
209
LT1
Verde
Lihue Tue
227
Facon
Verde
AFA
158
Bicentenario
Verde
Arves
153
En el Gráfico 2 se presentan las temperaturas medias registradas durante el ciclo del cultivo y las correspondientes a la serie histórica (1967-2018). La fecha media de floración fue el 6 de octubre. Durante la floración e inicio de llenado no se registraron temperaturas críticas que pudieran afectar al cultivo.
Las precipitaciones durante el ciclo fueron de 111 mm (Gráfico 1), muy por debajo de la media histórica que ronda los 250 mm (fines de julio a principios de noviembre).
Ante estas condiciones climáticas, el rendimiento medio general del ensayo fue de 2291 kg.ha-1, encontrándose en las parcelas un mínimo de 1683 kg.ha-1 y un máximo de 3000 kg.ha-1.
El cultivo emergió el 20 de agosto. Durante la etapa siembra-emergencia se registraron 4 heladas meteorológicas (menor o igual a 0 °C medido en abrigo meteorológico), lo que explicaría la prolongación de este periodo (26 días).
Entre las variedades, se destacaron Reussite (cotiledón amarillo), con un promedio de 2763 kg.ha-1, Kingfisher (verde) y Meadow (amarilla); mientras que la de menor rendimiento medio fue la variedad Bicentenario (cotiledón verde) con 1836 kg.ha-1 (Tabla 2).
Red de INNOVADORES
Resultados El cultivo pudo ser implantado en forma oportuna con adecuada humedad inicial. Sin embargo, las precipitaciones durante el ciclo no fueron suficientes para cubrir el requerimiento hídrico, afectando seriamente la estructura de plantas y resintiendo el rendimiento.
Tabla 2
Análisis de comparación de medias del rendimiento (kg.ha-1). Letras distintas indican diferencias significativas. Variedades
Rendimiento medio (kg.ha-1)
Reussite
2763
A
Kingfisher
2477
A
B
Meadow
2390
A
B
C
Shamrock
2345
B
C
Yams
2307
B
C
FCA 232
2279
B
C
LT 1
2272
B
C
Viper
2183
B
C
D
Facon
2054
C
D
Bicentenario
1836
Promedio
2291
CV
10,38
DMS
405
D
Cultivos Invernales 2020
43
Gráfico 1
Red de INNOVADORES
Precipitaciones (mm) ocurridas durante el ciclo del cultivo y precipitaciones medias (mm) de la serie histórica 1910-2018. Fuente: INTA Pergamino.
Cultivos Invernales 2020
44
Gráfico 2
Temperatura media (°C) durante el ciclo del cultivo y temperatura media (°C) de la serie histórica 1967-2018. Fuente: INTA Pergamino.
Conclusiones • En esta experiencia, el resultado promedio obtenido se encuentra por debajo de los valores medios alcanzados en las últimas campañas evaluadas (35 % aproximadamente). Esta disminución de rendimiento respecto al promedio histórico pudo deberse a las bajas precipitaciones ocurridas durante el ciclo del cultivo.
Red de INNOVADORES
• El cultivo de arveja es una alternativa interesante de diversificación productiva. Se deberán ajustar prácticas de manejo y seguir evaluando cultivares para contar con más información local respecto al comportamiento y adaptación para lograr alcanzar mayores valores de productividad.
Cultivos Invernales 2020
45
Bibliografía
Di Rienzo J.A., Casanoves F., Balzarini M.G., Gonzalez L., Tablada M., Robledo C.W. InfoStat versión 2014. Grupo InfoStat, FCA, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina. URL http://www. infostat.com.ar.
Podes acceder a la evaluación de cultivares de arveja en la zona de Barrow, Buenos Aires además desde este LINK: https://inta.gob.ar/sites/default/files/inta_-_actualizacion_tecnica_en_cultivo_de_cosecha_ fina_2018-19.pdf .
Encuentre el presente trabajo en www.aapresid.org.ar - PUBLICACIONES
Red de INNOVADORES
Autores: Abbate P.E. 1; Ross F. 2 INTA Balcarce (abbate.pablo@gmail.com) Estación Experimental Integrada Barrow (INTA y MAA de la prov. de Buenos Aires). Tres Arroyos, Buenos Aires (ross. fernando@inta.gob.ar). 2
*Basado en el artículo de Ross y Abbate (2018). Effects on Soybean Growth and Yield of Wheat-Soybean Intercropping System. Journal of Advances in Agriculture, 9, 1498-1510.
Cultivos Invernales 2020
46
1
Efectos del estrés hídrico y no hídrico sobre el rendimiento de soja intersiembra en trigo* Crecimiento y rendimiento de dos arreglos de siembra de soja intersembrada en trigo, mediante un tratamiento que permitió separar el efecto del estrés hídrico del estrés no hídrico.
Palabras Claves: Intersiembra; Trigo; Soja; Estrés hídrico.
Cuando se puede garantizar una buena disponibilidad hídrica por medio del riego, la reducción del entresurco de la soja intersembrada de 70 a 52 cm mejoraría la intercepción de la radiación que incide sobre el cultivo y con ello la tasa de crecimiento en las etapas reproductivas críticas para la determinación del rendimiento. Sin embargo, un entresurco de soja más angosto implica un menor número de surcos de trigo por unidad de área, lo que desfavorece su rendimiento. Por otra parte, cuando la disponibilidad hídrica es limitada, la competencia del trigo exacerbaría el estrés hídrico de la soja. Pocos estudios evaluaron el crecimiento y rendimiento de soja intersembrada en trigo bajo diferentes regímenes de agua. En este sentido, no hay información que permita responder a preguntas sobre cómo optimizar el arreglo de siembra del sistema y si el sistema óptimo es similar con o sin déficit de agua.
Materiales y métodos Los experimentos se realizaron en INTA Balcarce, sobre un suelo limoso, ilítico, térmico, argiudol (USDA taxonomía) con 5.5 % de materia orgánica, sin limitaciones físicas y moderadamente deficiente en fósforo. Los ensayos fueron fertilizados antes de la siembra de trigo con suficiente cantidad de fósforo y nitrógeno para evitar deficiencias de nutrientes en ambos cultivos (trigo y soja). Las plagas y enfermedades fueron controladas adecuadamente. El trigo (cultivar Baguette 10, Nidera S.A.) se sembró el 17 de julio el primer año y el 7 de julio el segundo, con una densidad de 300 plantas/m2, en surcos distanciados 17.5 cm. La soja (cultivar A3901, Asgrow SA) se sembró el 29 de noviembre el primer año y el 2 de diciembre el segundo, con una densidad de 30 plantas/m2, en surcos distanciados 52.5 o 70.0 cm según el tratamiento. Estas fechas de siembra correspondieron con la primera mitad del llenado de grano de trigo. El sistema de riego de los tratamientos de soja fue por goteo. Las parcelas fueron de 3.15 m de ancho y 9.0 m de largo. Los tratamientos fueron las siguientes secuencias: T1: dos surcos de trigo sembrados a 17.5 cm y uno no sembrado, con soja intersembrada en surcos distanciados 52.5 cm, sin riego (Figura 1a). T2: tres surcos de trigo sembrados a 17.5 cm y uno no sembrado, con soja intersembrada en surcos distanciados 70 cm, sin riego (Figura 1b). T3: control de trigo con todos los surcos sembrados a 17.5 cm, sin riego. T4: similar a T1 pero con riego.
Para dilucidar estas cuestiones, se realizó un estudio (Ross y Abbate, 2018; https://cirworld.com/index. php/jaa/article/view/7906) cuyos objetivos fueron: (i) comparar el crecimiento y el rendimiento de dos arreglos de siembra de soja intersembrada en trigo y (ii) separar el efecto del estrés hídrico (EH) del estrés no hídrico (ENH) inducidos por el trigo sobre la soja intersembrada. En este artículo se exponen en idioma
T5: similar a T4 pero eliminado toda la biomasa aérea de trigo inmediatamente antes de la emergencia de la soja. Las mediciones en ambos cultivos incluyeron los principales estados de desarrollo, la radiación interceptada por cada cultivo, el rendimiento y sus componentes. Todas esas mediciones se realizaron manualmente.
Red de INNOVADORES
Un alternativa a la secuencia trigo-soja de segunda es la intersiembra de soja en trigo, es decir, la siembra de soja antes de la cosecha de trigo (durante el llenado del grano), con lo que se adelanta la fecha de siembra de la soja. En general, la soja intersembrada produce rendimientos más bajos que los del cultivo puro sembrado en la misma fecha debido a la competencia del trigo, pero mayores que los de soja de segunda.
español y resumidamente los principales resultados presentados por Ross y Abbate (2018).
47 Cultivos Invernales 2020
Introducción La siembra de soja inmediatamente después de la cosecha de trigo (secuencia conocida como “trigo-soja de segunda”) está bien establecida al norte de los 34° de latitud sur de la región pampeana argentina. Más al sur, sin embargo, el retraso que implica sembrar la soja inmediatamente luego de la cosecha del trigo restringe severamente el rendimiento de la soja por el acortamiento del ciclo y por la caída en temperatura, radiación y fotoperíodo durante los estados reproductivos.
El análisis se basó en la comparación del nivel de EH y ENH, este último originado principalmente por el sombreo que el trigo ejerció sobre la soja. Estos niveles de estrés se calcularon para cada variable de interés como: Eq.[ 1] EH = (T4-T1) / (T5-T1) ∙ 100
Red de INNOVADORES
Eq.[ 2] ENH = (T5-T4) / (T5-T1) ∙ 100 Definiendo los estreses parciales de esta manera, su suma resulta igual a 100 %.
Resultados Si bien hubo diferencias de rendimiento de trigo entre ambos años (Figura 2), en los dos se observó el mismo patrón entre tratamientos. Con 33 % de los surcos de trigo no sembrados (tratamiento T1), el rendimiento por surco aumentó 35 % respecto del cultivo normal, y con 25 % de los surcos no sembrados (tratamiento T2), el aumento de rendimiento fue de 19 %. No obstante, la ausencia de surcos afectó negativamente el rendimiento de trigo y sus componentes, por lo que ambos arreglos para intersiembra rindieron en promedio 11 % menos Figura 1
Arreglos de siembra para los tratamientos (a) T1, T4 y T5; y (b) T2, observados luego de la cosecha del trigo y con la soja ya nacida. Cada surco estuvo distanciado 17.5 cm del contiguo.
Cultivos Invernales 2020
48
Figura 2
Rendimiento de trigo (con 14 % de humedad) para distintos arreglos de siembra con surcos distanciados a 17.5 cm y sin riego (Figura 1): T1, trigo para intersiembra con dos surcos de sembrados y uno no sembrado; T2, trigo para intersiembra con tres surcos sembrados y uno no sembrado; T3, trigo normal con todos los surcos sembrados. Tratamientos de un mismo año con igual letra no presentaron diferencias significativas (P>0.05).
La coexistencia de cultivos registrada desde la siembra de la soja hasta la cosecha de trigo, fue similar en ambos años cuando se la expresó en tiempo térmico con temperatura base de 8 °C (452 vs. 454 °Cd), pero expresada en días fue menor el segundo año (41 vs. 31 días). Al igual que en trigo, soja también presentó diferencias de rendimiento entre años, pero manteniendo el ordenamiento de los tratamientos entre años (Figura 3). Las diferencias de rendimiento de soja más relevantes fueron: (i) en secano, la soja intersembrada con surcos más próximos (52.5 cm, tratamiento T1) rindió en promedio 23 % más que con surcos más distanciados (70.0 cm, tratamiento T2); (ii) el rendimiento de la soja intersiembra a 52.5 cm en secano (tratamiento T1) fue en promedio 41 % menor al tratamiento equivalente
Se encontraron varias asociaciones estadísticas entre el rendimiento o sus componentes y las variables de cultivo. Las asociaciones más estrechas fueron entre el rendimiento y el peso seco de las vainas maduras (incluyendo el grano) con la tasa de crecimiento del cultivo entre la cosecha de trigo y el estado R5 (r2=0.84; p<0.001; r2=0.92; p <0.001; respectivamente). El tipo de estrés que el trigo le generó a la soja cambió durante el ciclo del cultivo. A la cosecha de trigo, el ENH predominó sobre el EH (77 % vs. 23 %; Figura 4) en ambos años, pese a la clara diferencia en las precipitaciones durante la etapa de convivencia de los cultivos entre los dos años de estudio (89 vs. 51 mm). Luego de la cosecha del trigo, prevaleció el EH, que fue dominante hasta la cosecha de soja, representando el 67 % del estrés sobre el rendimiento (Figura 4). Cuando predomina el ENH, como ocurrió en el tratamiento T4 respecto del T5, es de esperar que el acercamiento de los surcos de 70.0 a 52.5 cm resulte Figura 3
Rendimiento de soja (con 13.5 % de humedad) para distintos arreglos de siembra (Figura 1): T1, soja intersembrada en surcos distanciados a 52.5 cm, sin riego; T2, soja intersembrada en surcos distanciados 70.0 cm, sin riego; T4, similar a T1 pero con riego; T5, similar a T4 pero eliminado toda la biomasa aérea de trigo inmediatamente antes de la emergencia de la soja. Tratamientos de un mismo año con igual letra no presentaron diferencias significativas (P>0.05).
Red de INNOVADORES
El rendimiento de trigo se asoció directamente con el número de granos por unidad de superficie (r2=0.84; p<0.001) y este último con una radiación interceptada acumulada desde dos nudos hasta antesis (r2=0.71; p<0.001), período análogo al de determinación del número de granos.
regado (tratamiento T4); (iii) el rendimiento de la soja intersembrada a 52.5 cm con riego (tratamiento T4) fue 19 % menor al tratamiento equivalente sin trigo (tratamiento T5).
49 Cultivos Invernales 2020
que el tratamiento con todos los surcos sembrados, sin diferencias estadísticas entre arreglos (Figura 2).
Red de INNOVADORES
ventajoso ya que un cultivo con surcos más cercanos interceptará más radiación. Sin embargo, en secano, el estrés predominante luego de la cosecha del trigo fue el EH. En Balcarce la lluvia entre la siembra de soja y el estado R5 presentan un promedio histórico (19171999) de 277 mm. Con esta disponibilidad hídrica es de esperar que en un cultivo de secano predomine el EH tal como ocurrió en los dos años de estudio.
En tal circunstancia, un espaciamiento de surco muy reducido exacerbaría el EH y un espaciamiento demasiado amplio podría dejar agua remanente en el entresurco sin ser aprovechada. Los datos obtenidos muestran que la soja intersembrada con surcos distanciados a 52.5 cm (tratamiento T1) mejoró el rendimiento y sus componentes respecto de los surcos distanciados 70.0 cm (tratamiento T2) (Figura 3). Figura 4
Nivel de estrés hídrico (EH, Eq.[ 1]) y no hídrico (ENH, Eq.[ 2]) causado por trigo en soja intersembrada, en el peso seco total de soja (PST) al momento de la cosecha de trigo (CT), la tasa de crecimiento del cultivo de soja (TCC) entre CT y R5, y sobre el rendimiento de soja (RTO). Para cada variable el EH y ENH fueron estadísticamente diferentes según test de F (p<0.05).
Cultivos Invernales 2020
50
Conclusiones • Para evaluar e identificar el tipo de competencia que el trigo ejerce sobre la soja intersembrada, se empleó un diseño particular de tratamiento que permitió separar el EH del ENH de soja. Este análisis ayudó a generalizar más fácilmente los resultados obtenidos en los dos años estudiados. • El cultivo de trigo con arreglo para intersiembra rindió en promedio 11 % menos que el cultivo con todos los surcos sembrados. • El ENH inducido por el trigo sobre la soja intersembrada, fue muy marcado hasta la cosecha del trigo y luego redujo su intensidad. Sin riego, el EH tuvo mayor efecto depresor del rendimiento de la soja intersembrada que el ENH. En tal situación, reducir la distancia entre surcos de 70 a 52.5 cm permitió aumentar el rendimiento de la soja intersembrada 23 % sin afectar el rendimiento de trigo.
Encuentre el presente trabajo en www.aapresid.org.ar - PUBLICACIONES
Relevamiento de patógenos de semillas de trigo (Triticum aestivum l.) en el norte de la provincia de Buenos Aires Sanidad de las semillas trigueras en las localidades bonaerenses de Pergamino, Rojas, Junín, Salto y Arrecifes.
Palabras Claves: Semillas de trigo; Calidad; Patógenos; Ensayo, Sanidad.
Red de INNOVADORES
Universidad Nacional del Noroeste de la provincia de Buenos Aires. Contacto: miguellavillapergamino@gmail.com 1
51 Cultivos Invernales 2020
Autores: Lavilla, M.1; Ivancovich, A.1
Red de INNOVADORES
Introducción La cantidad de patógenos contenidos en las semillas de trigo está relacionada con las condiciones ambientales que se dan durante las diferentes etapas de la cadena de producción de semillas. Estas etapas van desde la elección del lote hasta el almacenamiento de las semillas. El objetivo de la prueba de sanidad en semillas es poder determinar su estatus sanitario, y por inferencia, la del resto del lote.
Cultivos Invernales 2020
52
Los patógenos de las semillas pueden afectan su germinación, la calidad industrial y además son agentes de difusión de una enfermedad de una región a otra. En tal sentido, determinar la cantidad y el género de los patógenos presentes en las semillas de trigo facilitaría la toma de decisiones como: 1- la utilización del lote de semillas como simientes (se recomienda no utilizar semillas con más de un 10 % de incidencia de patógenos); y 2- la implementación de tecnologías, como por ejemplo el uso de fungicidas curasemillas (químicos o biológicos). Los patógenos pueden interaccionar de diferentes maneras con la semilla de trigo: acompañándola (concomitante), infestándola o infectándola. Asimismo, no establecen una relación nutricional con las mismas. Las semillas pueden estar asociadas a restos de tejidos vegetales infectados, partículas de tierra infestadas o directamente con estructuras fúngicas de resistencias. Los patógenos que infectan a las semillas de trigo se localizan internamente y están en contacto íntimo con sus tejidos, obteniendo los nutrientes necesarios para su crecimiento, desarrollo y reproducción. Las infecciones pueden tener lugar a través de las aberturas naturales de las semillas y también a través de heridas ocasionadas por heladas, insectos, otros animales y microorganismos. Entre los patógenos asociados a las semillas de trigo se citan, entre otros, a: Alternaria spp., Aspergillus spp., Drechslera sp., Fusarium spp., Penicillium spp. (Lavilla e Ivancovich, 2016; Lavilla e Ivancovich, 2017). Los patógenos que reducen el poder germinativo (PG) como Fusarium spp., y los hongos de almacenaje (Penicillium spp., Aspergillus spp. y Rhizopus spp.), se suelen evidenciar durante las pruebas de germinación estándar. Cuando se obtienen bajos valores de PG, se
realiza un análisis de sanidad y así se confirman las causas de las fallas en la germinación. Existen otros patógenos, de gran importancia epifitiológica, capaces de transmitir patógenos como Bipolaris sorokiniana, distintas especies de Drechslera, Pyricularia, Stagonospora nodorum (syn Septoria nodorum). Estos hongos por lo general no reducen la germinación pero provocan una situación de enorme riesgo ya que si no se realiza un análisis de sanidad, no se conocerá su existencia y se introducirán en el lote a través de las semillas infectadas (Lavilla et al., 2019). El objetivo de este trabajo fue identificar y cuantificar los patógenos de semillas de trigo en cinco localidades del norte de la provincia de Buenos Aires: Pergamino, Rojas, Junín, Salto y Arrecifes. Materiales y métodos Sobre 25 muestras de trigo provenientes de las localidades de Pergamino, Rojas, Junín, Salto y Arrecifes, se realizaron las pruebas para obtener el total de patógenos presentes en las semillas de trigo. El método utilizado para la prueba en sanidad de las semillas fue el de papel (Blotter test; ISTA, 2010). Se sembraron 400 semillas (100 semillas por bandeja), previamente desinfectadas con hipoclorito de sodio al 2 % durante 30 segundos, sobre papel de filtro humedecido con agua destilada y se las incubó durante 7 días a 24±2 °C y con ciclos de 12 h luz + 12 h oscuridad. Finalmente se evaluó bajo microscopio estereoscópico y microscopio óptico la presencia de estructuras fructíferas de los patógenos, identificando los mismos y comparándolos con la información presente en Bockus et al., 2010. En las evaluaciones macro y microscópicas, en cada muestra, se determinó las variables patométricas de prevalencia o difusión, definida como el número de muestras con presencia de un determinado patógeno y la incidencia, es decir, el número de semillas por muestra con presencia de patógenos. Resultados Los resultados de esta experiencia demostraron que los principales patógenos presentes en las 25 muestras de semillas de trigo fueron Alternaria sp., Fusarium spp. y Drechslera sp (Figura 1).
La incidencia de los patรณgenos en las semillas fue bastante dispar. Se observaron algunos lotes de semillas con menos del 10 % de patรณgenos totales y otros lotes con el 100 % de las semillas infectadas por al menos un patรณgeno. Alternaria sp. y Fusarium spp. fueron los de mayor incidencia en las muestras evaluadas, 50 % y 30 %, respectivamente, con un rango entre el 8 % al 90 % para Alternaria sp. y del 5 % al 70 % para Fusarium spp. (Tabla 2). Drechslera sp. tuvo los menores valores de incidencia, 15 % (rango 1-20 %), lo que podrรญa deberse a que es un patรณgeno que causa, principalmente, lesiones en el follaje y que bajo ciertas condiciones ambientales infecta a las semillas de trigo. Figura 1
Patรณgenos en semillas de trigo. A. Alternaria sp., B. Drechslera sp., C. Fusarum spp.
Red de INNOVADORES
Los lotes de trigo por localidad, en su conjunto, tuvieron una prevalencia del 100 % de los tres patรณgenos diagnosticados. Sin embargo, dentro de cada localidad, la difusiรณn fue diferente. Alternaria sp. estuvo presente en todas las muestras (100 % de prevalencia). Fusarium spp. se diagnosticรณ en casi todas las muestras, 70 % de prevalencia, excepto en algunos lotes de la localidad de Salto (3), Arrecifes (3) y Pergamino (2) (Tabla 1). Drechslera sp. tuvo la menor frecuencia de presencia (50 % de prevalencia) en las muestras evaluadas, aunque se pudo diagnosticar en al menos una muestra por localidad.
Cultivos Invernales 2020
53
Tabla 1
Prevalencia (%) de patรณgenos relevados en 25 muestras de trigo provenientes de cinco localidades del norte de la provincia de Buenos Aires. Patรณgeno
Alternaria sp.
Fusarium spp.
Drechslera sp.
Prevalencia %
100
70
50 Tabla 2
Incidencia (%) de patรณgenos relevados en 25 muestras de trigo provenientes de cinco localidades del norte de la provincia de Buenos Aires. Patรณgeno
Alternaria sp.
Fusarium spp.
Drechslera sp.
Incidencia %
50
30
15
Conclusiones • En esta experiencia se pudo concluir que la mayoría de los lotes de trigo presentaban más de un 10 % de patógenos en las semillas. Ante este escenario, el uso de fungicidas curasemillas sería una solución, a priori, para evitar reducciones significativas en el número de plantas por metro.
Red de INNOVADORES
• Los patógenos diagnosticados fueron Alternaria sp., Fusarium spp. y Drechslera sp., que presentaron valores de prevalencia e incidencia relativamente elevados en las muestras, pudiendo provocar problemas epifíticos en el norte de la provincia de Buenos Aires.
Cultivos Invernales 2020
54
Bibliografía
Bockus, W.E.; Bowden, R.L.; Hunger, R.M.; Morrill, W.L.; Murray, T.D.; Smiley, R.W. 2010. Compendium of wheat diseases and pests, Third Edition. American Phytopathological Society Press. International Seed Testing Association (ISTA). 2010. International Rules for Seed Testing. Annexo to Chapter 7 Seed Health Testing Methods. ISBN 978-3-906549-61-3 Lavilla, M.; Ivancovich, A. 2016 Relevamiento de patógenos de semillas de trigo (Triticum aestivum L.) en el norte de la provincia de Buenos Aires. Argentina. Pergamino. 2016. Libro. Resumen. Congreso. VIII Congreso Nacional de trigo - VI Simposio de cereales de siembra otoño invernal - II Encuentro del MERCOSUR. AIANBA. Lavilla, M.; Ivancovich, A. 2017. Sanidad en semillas de trigo (Triticum aestivum L.). Disponible en: https://www.engormix.com/agricultura/articulos/sanidad-semillas-trigo-triticum-t40854.htm Lavilla, M.; Ivancovich, A.; Pischedda, G.; Scandiani, M.; Caamaño, A.; Astiz Gassó, M.M. 2019. Sanidad en semillas de trigo (Triticum aestivum L.). Boletín de Fitopatología n°12. 9p.
Encuentre el presente trabajo en www.aapresid.org.ar - PUBLICACIONES
Análisis de 102 genotipos de trigos internacionales sembrados en Argentina.
Palabras Claves: Trigo Pan; Calidad; Índice de Caída; Variabilidad Genotípica.
Red de INNOVADORES
Cerealicultura, Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales, Universidad Nacional de La Plata. 2 Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) CCT La Plata, Buenos Aires. 3 Comisión de Investigaciones Científicas (CIC), La Plata, Buenos Aires. 1
La importancia del Falling Number en la calidad molinera del trigo pan: búsqueda de genotipos con valores óptimos
55 Cultivos Invernales 2020
Autores: Castro, A.C.1; Quiroga, F.1; Cardelli, M.2; Schierenbeck, M.1,2; Uranga, J.P.1; Simón, M.R.1,3
Red de INNOVADORES Cultivos Invernales 2020
56
La industria molinera es exigente en las características de las harinas que deben ser usadas para la obtención de determinados productos, ya que de ellas depende la calidad final y la mayor aceptación por parte del consumidor. No todas las variedades se pueden adaptar a producir los diferentes productos ni a los diferentes procesos. Una variedad puede ser buena para panificación, pero puede no serlo para galletitas, repostería, pan dulce, pan de molde, etc., y que son productos que requieren otras características en las harinas. Excepcionalmente la industria emplea harinas univarietales, con lo que la versatilidad en los comportamientos es aún más significativa. Resulta entonces que los diferentes sectores dan prioridad a distintos aspectos en la evaluación (Chidichimo et al., 2006). Un proceso de gran importancia que influye en la calidad panadera y molinera es el grado de degradación del almidón al momento de la cosecha. Este fenómeno está relacionado con la actividad de la enzima alfa amilasa que depende básicamente del comienzo de la germinación. En condiciones normales de cultivo, el grano de trigo completa su ciclo de desarrollo al alcanzar su máxima acumulación de materia seca, estado que se conoce como madurez fisiológica. A partir de entonces, se produce la desecación del grano hasta alcanzar aproximadamente un 14% de humedad a cosecha. Cercano al momento de madurez fisiológica, los niveles de ácido abscísico en la semilla son altos, impidiendo la germinación. Dependiendo del grado de dormancia de las semillas, la concentración de ácido abscísico permanece alta por más tiempo (Finkelstein, 2010). Durante el proceso de germinación, la semilla absorbe agua (imbibición) y el embrión hidratado libera giberelinas, que se difunden hacia el endospermo, hasta llegar a las células de la capa de aleurona, donde inducen la producción de enzimas hidrolíticas. Entre estas enzimas se encuentran las amilasas, que se difunden hacia el endospermo para hidrolizar los gránulos de almidón a glucosa, que es utilizada por el embrión como fuente de energía para su crecimiento (Azcon-Bieto y Talón., 2000). La germinación de los granos está controlada tanto por factores genéticos como ambientales. Desde el punto de vista genético, la domesticación y los programas de mejoramiento de los cereales como el trigo, dirigen la selección en contra de la dormancia de las semillas
con el fin de lograr una germinación rápida y uniforme. Como resultado de esta presión selectiva, la mayoría de los cultivares comerciales de trigo son propensos a la germinación antes de la cosecha (Simpson, 1990). Esto ha generado que en regiones donde existen condiciones ambientales predisponentes para la germinación (lluvias y alta humedad), en el período entre madurez fisiológica y madurez de cosecha, se produzca el fenómeno de “germinación precoz”, “germinación en la espiga” o “prebrotado” de los granos. En Argentina suele producirse en las subregiones trigueras I (N de Santa Fe) y III (litoral) ante condiciones meteorológicas predisponentes. La variabilidad genotípica en tolerancia a la germinación precoz del grano está estrechamente relacionada con el nivel de dormancia de la semilla (Derera et al., 1989). Otras características genotípicas que afectan la resistencia a la germinación precoz son la velocidad de absorción de agua y secado de los granos, además del grado de latencia de grano y la removilización de nutrientes para apoyar la germinación (Thomason et al., 2009). También existen características morfológicas asociadas a los genotipos, como el ángulo de la arista, el ángulo y forma de la espiga, y la tenacidad de las glumas que podrían influir en la absorción de agua de las semillas en la espiga (King y Von Wettstein-Knowles, 2000). Otra característica genética que se ha asociado con la tolerancia al pre-brotado es el color de la semilla, debido a que algunos genes que controlan la dormancia de las semillas se encontrarían asociados con aquellos que determinan el color rojo de las mismas (Thomason et al., 2009). La germinación precoz o pre-brotado del trigo afecta negativamente la calidad panadera debido a que la hidrólisis de las moléculas de almidón reduce la viscosidad de la masa, la cual resulta pegajosa y difícil de procesar, produciendo panes poco estructurados al horneo (Chamberlain et al., 1981). Una semilla pregerminada presenta una alta actividad de la enzima alfa amilasa, que es dependiente del grado de germinación del grano. Una manera indirecta de medir la actividad de alfa amilasa en una muestra de trigo recibida por un molino, es mediante el test denominado Falling Number (FN) (índice de caída) medido en segundos. Al considerar lo anterior, la tolerancia a pre-brotado es una característica valorada por la industria molinera
Materiales y métodos El ensayo se llevó a cabo en la Estación Experimental Julio Hirschhorn de Los Hornos, perteneciente a la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales de la Universidad Nacional de La Plata. Se utilizó un diseño en bloques al azar con 102 genotipos de trigo que incluyen varias variedades botánicas de una colección internacional previamente mapeada con marcadores moleculares con dos repeticiones. La colección de genotipos primaverales con caracteres contrastantes fue obtenida de una colección más amplia que incluía también trigos invernales seleccionados de 32 países del German Federal ex situ Genebank, Gatersleben, Alemania. Durante el ciclo del cultivo se realizó una aplicación en post-emergencia temprana de Misil® 100 cm3/ha + 5 g/ ha (Dicamba 48 % - Metsulfurón Metil 60 %). La siembra se condujo en el mes de junio utilizando una sembradora experimental, con una distancia entre hileras de 20 cm y una densidad de 250 plantas/m2. Cada parcela presentó un largo de 3,40 m y un ancho de 1,40 m (4,8 m2). La cosecha se realizó de manera manual con hoz en tres segmentos de 1 metro lineal por parcela. En el laboratorio se limpiaron todas las muestras, descartando materias extrañas y se llevó a cabo la molienda de las mismas con molino Brabender para la obtención de harina. Se evaluó el % de humedad de las muestras (IRAM 15850-1).
En un tubo viscosímetro de FN se colocaron los gramos de harina que indica la tabla (en base al % humedad calculado previamente) y se agregaron 25 ml de agua destilada, agitando enérgicamente 30 veces, ubicando el tubo en una posición de 45°. Rápidamente se colocó el vástago dentro del tubo viscosímetro que posee la suspensión y se procedió al ensayo. Se efectuó una rápida gelificación y se midió después la fluidificación a través del tiempo que tardó en caer el vástago inmerso en el engrudo (IRAM 15862). El total de segundos es el número de caída o FN, que está en relación a la actividad de la enzima alfa amilasa. A mayor actividad enzimática, menor número de caída (indicando la presencia de grano brotado en la muestra). Las diferencias en el índice de caída entre los genotipos se analizaron mediante análisis de varianza (ANAVA) con el programa estadístico GenStat 12 Ed. (VSN, 2009) y las medias se compararon mediante test LSD al nivel P<0,05. Resultados y discusión Índice de Caída El análisis estadístico (ANAVA) para el índice de caída mostró diferencias estadísticamente significativas entre los genotipos evaluados mientras que el análisis de los valores de índice de caída considerando el test LSD al nivel P< 0,05 permitió diferenciar genotipos (Tabla 1). El valor medio de FN de los genotipos evaluados fue 356. El valor de FN más alto lo obtuvo el genotipo 70 Triticum aestivum L. var. aestivum (Bulgaria) con un valor de 543 seguido del genotipo 39 Triticum aestivum var. ferrugineum (Portugal) con un valor de 510, el genotipo 1 Triticum aestivum var. lutescens (EEUU) con un FN igual a 494 y el genotipo 84 Triticum aestivum var. murinumcompactoides con un valor de 493, que a su vez no difirieron de varios otros. El valor más bajo lo obtuvo el genotipo 37 Triticum aestivum var. lutescens (China) con un FN igual a 207.
Red de INNOVADORES
Este trabajo plantea como hipótesis que existe una amplia variabilidad en el índice de caída en una colección internacional de genotipos de trigo que comprenden diversas variedades botánicas de Triticum aestivum L. para incrementar la variabilidad, lo que permitirá seleccionar genotipos destacados. El objetivo de este trabajo es contribuir al mejoramiento genético identificando genotipos de trigo con FN óptimos en una colección de 102 genotipos de trigos internacionales sembrados en Argentina.
Se utilizó el método FN o índice de caída que se basa en la rápida gelatinización de una suspensión de harina de trigo, introducida en un baño María hirviendo y en la subsiguiente medición del tiempo (en segundos) de la licuefacción del almidón contenido en la muestra por la acción de la alfa amilasa, bajo condiciones similares a las que ocurren durante la cocción.
57 Cultivos Invernales 2020
para la fabricación de pan y por los productores de trigo que están expuestos a la pérdida total de su producción, cuando existen condiciones genéticas y ambientales favorables para la germinación precoz del grano (Flores Galarce, 2016). Además de condiciones ambientales que pueden favorecer el brotado en precosecha, detectar características de los genotipos para esta variable es de importancia en planes de mejoramiento.
Tabla 1
Índice de caída (FN) en una colección de trigos de origen internacional. Genotipo Genotipo
Red de INNOVADORES
Genotipo Genotipo Genotipo Genotipo Genotipo
58 Cultivos Invernales 2020
Genotipo Genotipo Genotipo Genotipo Genotipo Genotipo Genotipo Genotipo Genotipo Genotipo
1
2
3
4
5
6
494 ab
470 b
447 bc
462 bc
368 cd
453 bc
7
8
9
10
11
12
402 bc
450 bc
304 de
460 bc
334 cd
453 bc
13
14
15
16
17
18
335 cd
333 cd
403 bc
304 de
290 de
299 de
19
20
21
22
23
24
332 cd
378 cd
424 bc
375 cd
228 e
395 c
25
26
27
28
29
30
318 de
278 de
414 bc
316 de
370 cd
434 bc
31
32
33
34
35
36
295 de
454 bc
344 cd
349 cd
312 de
434 bc
37
38
39
40
41
42
207 e
380 cd
510 ab
360 cd
328 cd
356 cd
43
44
45
46
47
48
350 cd
336 cd
417 bc
313 de
307 de
354 cd
49
50
51
52
53
54
258 de
360 cd
273 de
364 cd
322 de
371 cd
55
56
57
58
59
60
311 de
378 cd
295 de
413 bc
345 cd
409 bc
61
62
63
64
65
66
417 bc
317 de
252 de
332 cd
383 cd
358 cd
67
68
69
70
71
72
408 bc
319 de
353 cd
543 a
355 cd
344 cd
73
74
75
76
77
78
288 de
359 cd
330 cd
298 de
353 cd
343 cd
79
80
81
82
83
84
450 bc
352 cd
326 cd
301 de
322 de
493 ab
85
86
87
88
89
90
258 de
293 de
299 de
320 de
317 de
353 cd
91
92
93
94
95
96
316 de
265 de
304 de
303 de
329 cd
416 bc
97
98
99
100
101
102
322 d
352 cd
401 bc
262 de
387 cd
388 cd
Medias seguidas por distintas letras indican diferencias significativas LSD, P<0,05.
Según Vadillo Verdugo (1989) harinas con un exceso de actividad alfa amilasa y por consiguiente, procedente de trigos germinados o de cosechas en épocas lluviosas pueden dar valores de FN entre 90 y 150 s, harinas con un óptimo comportamiento para panificación darían valores entre 220 a 280 s, harinas con buen comportamiento para panificación 280 a 350 s y harinas que darían panes con disminución de volumen entre 400 a 650 s.
En el caso de tener un FN aún mayor que 400, como el genotipo número 70 Triticum aestivum L. aestivum, la actividad de la alfa amilasa sería muy baja. Sin embargo, se obtendría un pan de poco volumen, con miga dura, seca y compacta. Además de influencia genotípica, hay influencia ambiental ya que los genotipos tuvieron diferencias en la fecha de madurez fisiológica.
Las harinas con FN demasiado altos dan origen a masas con dificultad para fermentar y panes con miga dura y compacta y una corteza pálida, que usualmente se corrigen a través del agregado de enmiendas como la harina de malta. Harinas con FN excesivamente bajos, inferiores a 150, dan origen a masas blandas, pegajosas, difíciles de trabajar con máquina, el pan se presenta aplastado, con miga gomosa y con corteza de color gris oscuro y esto es un problema sin solución (Chidichimo et al., 2006).
Teniendo en cuenta que las harinas con valores de FN entre 200 y 400 son aptas para panificación, puede afirmarse que la mayoría de los genotipos estudiados son útiles para tal fin. Específicamente, los genotipos que se encuentran en rangos de óptimo comportamiento para panificación son 76 y en su mayoría pertenecen a las siguientes variedades botánicas: Triticum aestivum L. aestivum, Triticum aestivum L. lutescens, Triticum aestivum L. ferrugineum y Triticum aestivum L. milturum.
La industria molinera y panadera requiere trigo de calidad para la elaboración de sus productos. Es importante destacar que muchos de los aspectos que determinan la calidad industrial y panadera del trigo se generan durante el ciclo del cultivo y consecuentemente dependen del ambiente, del genotipo y la interacción genotipo-ambiente. Por último, es importante destacar la relevancia de los resultados de este trabajo para incorporar materiales valiosos en FN óptimos en programas de mejoramiento genético. A futuro resulta necesario profundizar los estudios para asociar características genotípicas con tolerancia a pre-brotado.
Red de INNOVADORES
Todos los genotipos estudiados superan el valor de FN de 150 s, valor por debajo del cual las harinas poseen un exceso de actividad alfa amilasa y por consiguiente, proceden de trigos germinados o de cosechas en épocas lluviosas. En este ensayo las condiciones ambientales no fueron predisponentes para la presencia de grano brotado.
59 Cultivos Invernales 2020
Al considerar el relevamiento del trigo producido en una amplia zona de la provincia de Buenos Aires (región Centro Sur), realizado por agentes de extensión del INTA y MAIBA durante 15 años (2000/2001- 2014/2015) (Molfese, 2016), se analizó por campaña el FN y a partir de ello se realizó una comparación con los datos obtenidos en este trabajo. Los valores promedio de FN para cada campaña muestran que no hubo problemas de grano brotado. Esto se debe a que en la región relevada no son habituales las condiciones de lluvias y alta humedad ambiente durante el período de cosecha, condiciones necesarias para que ello ocurra (Molfese, 2016). El FN promedio del total de campañas (20002015) fue de 407. Lo mismo ocurrió con los genotipos evaluados en este trabajo, con valores de FN que no indican presencia de grano brotado.
Conclusiones
Red de INNOVADORES
• Las diferencias en el valor del FN fueron estadísticamente significativas en los genotipos evaluados. Se encontraron 76 genotipos (lo que representa un 74,5 % del total) con valores de índice de caída óptimos entre 200 y 400 s. Esto demuestra la relevancia de esta investigación ya que para lograr acceder o permanecer en nichos de mercado altamente competitivos, se necesita contar con materiales de elevada calidad genética para la variable índice de caída. Finalmente, es posible encontrar en esta colección genotipos sobresalientes que contribuirán al mejoramiento genético de la especie, lo que cumple con el objetivo planteado.
Cultivos Invernales 2020
60
Bibliografía
Azcón-Bieto, J., Talón, M. (2000). Fundamentos de Fisiología vegetal, Editorial Mc Graw Hill, Interamericana, 553-555. Chamberlain Collins, T., McDermott, E. (1981). Alpha-amylase and bread properties. International Journal of Food Science and Technology. 16, 127–152. doi:10.1111/j.1365-2621.1981.tb01004.x Chidichimo, H., Sempé, M. E., Aulicino, M.B., Almaraz, L. B. (2006). Informe sobre calidad comercial e industrial de Trigo. Campañas 94/95- 2004/2006. 6-7. https://www.magyp.gob.ar/new/00/ programas/dma/calidad_trigo/publicaciones/informe_final_unlp.pdf Derera, N.F. (1989). The effects of pre-harvest rain. In: Derera N.F. (Ed.) Pre-harvest sprouting in cereals, CRC Press Inc., Boca Raton, 2-14. Finkelstein R. R. (2010). The role of hormones during seed development and germination. Plant Hormones. 549-573. Ed. P. Davies. https://link.springer.com/chapter/10.1007/978-1-4020-2686-7_24 Flores Galarce, C.C. (2016). Evaluación de la tolerancia a la germinación precoz en variedades de trigo panadero (Triticum aestivum L) cultivados en Chile. Trabajo final de carrera. Facultad de Cs. Agrarias. Universidad Austral de Chile. GenStat for Windows, 12 Th Edition. Copyright (2009). VSN International Ltd. IRAM 15862. Determinación de Falling Number. Método de Harberg - Perten - AACC N° 56-81. IRAM 15862. Determinación del contenido de humedad para trigo y subproductos. King, R., von Wettstein-Knowles, P. (2000). Epicuticular waxes and regulation of ear wetting and pre-harvest sprouting in barley and wheat. Euphytica. 112, 157-166. doi:10.1023/A:1003832031695 Molfese, E. (2016). Caracterización de la calidad del trigo pan en el centro sur bonaerense. Ed. INTA. 77-79. https://inta.gob.ar/sites/default/files/inta_-_calidad_trigo_pan_15_mar2017.pdf Simpson, G.M. (1990). Seed dormancy in grasses. Cambridge University Press, New York. https://doi.org/10.1017/CBO9780511721816 Thomason, W.E., Hughes K.R., Griffey C.A., Parrish D.J., Barbeau W.E. (2009). Understating pre-harvest sprouting of wheat. Virginia cooperative extension. Publication 424-060. 4p https://pubs.ext. vt.edu/424/424-060/424-060.html Vadillo Verdugo, J. (1989). La calidad en los trigos. Hojas divulgadoras N°2/89. Pp 19.
Encuentre el presente trabajo en www.aapresid.org.ar - PUBLICACIONES
Fitotoxicidad de herbicidas pre-emergentes sobre cultivos de servicios La combinación de cultivos de servicios y tratamiento químico es una estrategia que colabora con el manejo de malezas. Las Chacras Los Surgentes-Inrriville y Bandera evaluaron nivel de fitotoxicidad de herbicicidas pre-emergentes y efectividad de control de malezas.
Palabras Claves: Cultivos de Servicios; Malezas; Manejo; Herbicidas; Fitotoxicidad.
Patrocina:
Auspicia:
Red de INNOVADORES
ATR/GTD Chacra Los Surgentes-Inriville. 2 GTD Chacra Bandera 3 Miembro Chacra Los Surgentes-Inriville 4 Coordinador Técnico Sistema Chacras, AAPRESID
1
Chacras Los Surgentes-Inriville y Bandera
61 Cultivos Invernales 2020
Autores: Dorsch, A.1; Zaiser, E.2; Zorzin, J.L.3; Miotti, H.3; Ruiz, A.4; Sciarresi, C.4
Red de INNOVADORES Cultivos Invernales 2020
62
Introducción La simplificación en el manejo de los sistemas productivos dominados por monocultivo de soja de primera, se caracterizan por la magnificación y surgimiento de nuevas problemáticas. Además de la reducida intensificación, la escasa rotación de principios activos generó malezas resistentes a diversos principios activos. La rotación de cultivos, a diferencia de los monocultivos, genera un conjunto diverso de factores que actúan sobre las poblaciones de malezas y, en consecuencia, incrementan las oportunidades para su manejo. La implementación de prácticas integradas de manejo surge como propuesta de solución, en donde los cultivos de servicios (CS) tienen un rol fundamental dentro de estas propuestas ayudando no solo a un buen control de malezas resistentes a distintos sitios de acción de herbicidas sino también contribuyendo al aporte de carbono y nitrógeno, la micro y macro fauna del suelo, mejora en las propiedades físicas del suelo, entre otras. Los CS como supresores de malezas pueden llegar a tener una gran efectividad, pero en muchos casos tienen crecimiento inicial lento, siendo malos competidores de las malezas en etapas tempranas. En estos casos la efectividad de los CS se incrementa
cuando se integran estrategias de manejo, como las aplicaciones complementarias con herbicidas. A pesar de este incremento en la efectividad en el control de malezas, los herbicidas pueden generar fitotoxicidad en los CS, lo que afecta su crecimiento y desarrollo y repercute en sus servicios eco sistémicos, incluido el control de malezas. Las Chacras Bandera y Los Surgentes se plantearon el objetivo de evaluar la fitotoxicidad causada por diferentes herbicidas pre-emergentes en distintos cultivos de servicios. Específicamente, se buscó cuantificar el nivel de fitotoxicidad para los CS más utilizados en la zona y la efectividad en el control de malezas de ciclo otoño invernal. Para ello se evaluaron diferentes herbicidas pre-emergentes sobre distintos CS durante la campaña 2019/2020 en dos localidades. Metodología El experimento se realizó en dos establecimientos: “Miotti” ubicado en General Roca, Córdoba y “El Guaycuru”, en Bandera, Santiago del Estero (Figura 1). El suelo del sitio General Roca es un Argiudol típico serie Marcos Juárez, mientras que el de Bandera es un Haplustole éntico, serie Bandera. La Tabla 1 detalla las características de los sitios experimentales. Figura 1
Imágenes capturadas con un dron en los ensayos de pre-emergentes en el sitio General Roca (izquierda) y Bandera (derecha).
Tabla 1
Sitios experimentales, características de los lotes y momento de aplicación de los pre-emergentes. Localidad
Provincia
Antecesor
Suelo
%Arena
%MO
Momento de aplicación
Bandera
Santiago del Estero
Soja
Haplustol éntico
13
2,5
Preemergencia
General Roca
Córdoba
Soja
Argiudol típico
5
2,46
Preemergencia
Especies de Cultivos de servicios evaluados en los sitios General Roca y Bandera y sus respectivas densidades de siembra (kg ha-1). Bandera
Tratamiento
Densidad de siembra (Kg ha-1)
Tratamiento
Densidad de siembra (Kg ha-1)
Barbecho químico
---
Barbecho químico
---
Vicia villosa
13
Vicia villosa
26
Centeno
31
Centeno
32
Avena
13 + 12
Avena
29
Raigrás
10
Raigrás
11
-
-
Triticale
8.6
-
-
Rabanito
3.1
63
Tabla 3
Principios activos evaluados y dosis utilizadas en las aplicaciones pre-emergentes de los cultivos de servicio en los sitios General Roca y Bandera. Principio Activo
Bandera
Atrazina
General Roca -
2000
Clomazone
Cc
1200
-
Clorimuron
gr
-
50
Diflufenican
Cc
200
250
Diflufenican + Flumetsulam
Cc
100 + 200
200 + 300
Diflufenican + S-Metolacloro
Cc
100 + 800
-
Flumetsulam
Cc
300
500
Flumioxazin
Cc
-
120
Flurocloridona
Cc
-
1000
Imazetapir
Cc
1000
1000
Metribuzin
Cc
500
800
Prometrina
Cc
1000
1000
Prometrina + Imazetapir
Cc
1000 + 500
-
Pyroxasulfone
Cc
-
100
Saflufenacil
gr
70
70
Sulfentrazone
Cc
-
400
Cultivos Invernales 2020
General Roca
Red de INNOVADORES
Tabla 2
Red de INNOVADORES Cultivos Invernales 2020
64
En General Roca se sembraron los cultivos Vicia villosa, Centeno, Avena y Raigrás el día 09/07/2019, con una sembradora de grano fino a 17,5 cm de distancia entre surco bajo siembra directa (densidades de siembra utilizadas en la Tabla 2). Los herbicidas preemergentes utilizados fueron aplicados un día después de la siembra de los CS, mediante un equipo montado sobre una camioneta. Los principios activos y dosis evaluadas se detallan en la Tabla 3. La aplicación se realizó con pastilla TP11001, utilizando una presión de 4 bares y una velocidad de trabajo de 7 km h-1 obteniendo un caudal 74 l ha-1. En Bandera se sembraron Vicia villosa, Centeno, Avena, Raigras, Triticale y Rabanito el 06/07/2019 con una sembradora de grano fino a 17,5 cm de distanciamiento entre surco, también bajo siembra directa (densidades de siembra utilizadas en la Tabla 2). Los diferentes herbicidas pre-emergentes fueron aplicados 4 días después de la siembra. Las aplicaciones se realizaron en sentido perpendicular a la siembra, utilizando, al igual que en la otra localidad, un equipo montado sobre una camioneta pero con un botalón. Se usaron pastillas doble abanico plano Teejet TTJ60-11002, que erogan un caudal de 160 l ha-1 a 2 bares de presión y 7 km h-1 de velocidad de avance. En General Roca los herbicidas utilizados se incorporaron a la solución del suelo a partir del segundo día después de la aplicación con lluvias consecutivas ocurridas a lo largo de 6 días, que sumaron un total de 32 mm. Mientras que en Bandera la incorporación se realizó 13 días después de la siembra con una lluvia de 38 mm. Para cada establecimiento se determinó el nivel de fitotoxicidad para los distintos tratamientos herbicidas pre-emergentes sobre los CS mediante estimación visual a los 56 días después de la aplicación (DDA) en General Roca, y 63 DDA en Bandera. Para ello se utilizó la escala propuesta por la E.W.R.S en donde 0 indica una planta sin síntomas (verde y vigorosa) y 9 el peor escenario de fitotoxicidad (planta muerta). En este estudio consideramos que hasta 4 grados inclusive fue una fitotoxicidad aceptable, ya que los tratamientos que tuvieron este nivel no influyeron en el normal crecimiento y desarrollo de las plantas o las mismas se recuperaron rápidamente.
Para determinar el control de malezas de ciclo otoño invernal se evaluó el porcentaje de control en la parcela barbecho químico tratada con los diferentes principios activos, a continuación de las franjas de cultivos de servicio. Debido a la ausencia de malezas en el sitio General Roca, las evaluaciones solo se realizaron en el sitio Bandera a los 30, 60 y 90 DDA. Las especies de malezas que predominaban en la parcela fueron Parietaria debilis, Gamochaeta sufalcata y Conyza bonariensis. Resultados Todas las especies de CS mostraron síntomas de fitotoxicidad frente a alguno de los herbicidas utilizados (Tabla 4). Según el pre-emergente y al momento de emergencia, algunas especies manifestaron síntomas típicos para cada herbicida (coloración rosa para Diflufenican, y purpura-rojizo en las hojas para Imazetapir), siendo algunos transitorios y de rápida recuperación a partir de la etapa de macollaje. Las gramíneas fueron las más afectadas. El cultivo de Raigrás fue uno de los que mostró mayor sensibilidad a los principios activos evaluados, siendo Imazetapir, Clomazone, Atrazina, Prometrina, y Pyroxasulfone los que más lo afectaron. Estos principios activos también generaron fitotoxicidad para el caso de Avena. El centeno y el triticale manifestaron mayor resistencia, siendo Clomazone e Imazetapir los principales principios activos perjudiciales en ambos casos, y la Atrazina y la mezcla de Prometrina + Imazetapir afectaron mayormente al centeno (Figura 2). Entre las especies latifoliadas, el rabanito manifestó síntomas de fitotoxicidad cuando se utilizaron pre-emergentes como Diflufenican, Flumetsulam, Imazetapir, Metribuzin y Prometrina + Imazetapir (Figura 2). Un dato interesante fue la baja fitotoxicidad que presentó la Vicia. Sólo Atrazina y Flumioxazin provocaron síntomas de fitotoxicidad pero tuvieron una severidad media que no afectó el continuo crecimiento de la misma con el aumento en las temperaturas ambientales (Figura 2). En cuanto al control de malezas, en General Roca no hubo una presencia significativa de las mismas, ni en el barbecho químico ni en las parcelas con cultivos de
Cultivos Invernales 2020
65
Red de INNOVADORES
de control de entre 95 y 85 % de control, a excepción del Clomazone que tuvo un control del 75 % (Figura 3). A partir de los 60 y 90 DDA, el control comenzó a ser más variable dependiendo de la residualidad de los herbicidas. Los tratamientos que manifestaron mejores controles de malezas al final de las evaluaciones fueron Flumetsulam, sólo o en mezcla con Diflufenican, y Prometrina, sóla o en mezcla con Imazetapir.
Red de INNOVADORES
servicios, por lo que no se pudo realizar la determinación del porcentaje de control. En Bandera, en cambio, hubo diferencias entre tratamientos, especialmente a partir de los 60 y 90 DDA. Las malezas presentes en el lote fueron Parietaria debilis, Gamochaeta subfalcata y Conyza bonariensis. Para esta localidad, todos los tratamientos evaluados tuvieron un buen porcentaje de control de malezas a los 30 DDA con un porcentaje
Cultivos Invernales 2020
66
Tabla 4
Estimación visual de fitotoxicidad de herbicidas pre-emergentes a los 56-61 días después de la aplicación. El rango de colores representa el nivel de fitotoxicidad, considerando al blanco/gris claro como sin efecto y al negro como muerte de la especie de CS. Bandera está representada con B y General Roca con GR. Principio activo
Avena
Centeno
Raigrás
Vicia
Triticale
Rabanito
B
GR
B
GR
B
GR
B
GR
B
B
Atrazina
-
8
-
6
-
8
-
4
-
-
Clomazone
8
-
7
-
9
-
0
-
9
2
Clorimuron
-
4
-
4
-
6
-
2
-
-
Diflufenican
2
1
0
1
0
2
2
1
2
2
Diflufenican + Flumetsulam
2
2
0
1
0
1
3
1
0
7
Diflufenican + S-Metolacloro
2
-
3
-
2
-
2
-
4
1
Flumetsulam
0
2
1
3
1
1
1
2
1
7
Flumioxazin
-
3
-
3
-
4
-
4
-
-
Flurocloridona
-
2
-
1
-
4
-
2
-
-
Imazetapir
9
8
8
5
9
8
1
1
8
9
Metribuzin
5
2
5
5
3
7
5
2
0
6
Prometrina
2
3
2
4
0
2
0
1
1
1
Prometrina + Imazetapir
8
-
6
-
6
-
1
-
4
9
Pyroxasulfone
-
6
-
1
-
8
-
1
-
-
Saflufenacil
-
1
-
1
-
1
-
2
-
-
Sulfentrazone
0
2
3
3
2
6
0
1
0
0
Figura 2
Red de INNOVADORES
SintomatologĂa en centeno, vicia y rabanito a los herbicidas pre-emergentes Diflufenican, Prometriana y Prometrina + Imazetapir en el sitio Bandera.
Figura 3
Control de malezas con diferentes herbicidas pre-emergentes en diferentes momentos de observaciĂłn.
Cultivos Invernales 2020
67
Conclusiones
Red de INNOVADORES
• La introducción de cultivos de servicios es una alternativa de manejo para el control de malezas. En situaciones en las que la presión de malezas en el lote es baja, los CS tuvieron un buen control sin la necesidad de complementar con herbicidas. En cambio, cuando la presión de malezas fue alta, y antes de que los CS cierren el espacio entre surco, la aplicación de un pre-emergente conjuntamente con la siembra del cultivo de servicio mejoró la eficacia de control.
Cultivos Invernales 2020
68
• En la mayoría de los casos, complementar el control de malezas con herbicidas pre-emergentes generó fitotoxicidad para los distintos CS. Los síntomas que se manifiestan en etapas iniciales desaparecen sin comprometer el stand de plantas y biomasa del CS, a excepción de Atrazina y Clomazone, que generaron una elevada fitotoxicidad en gramíneas únicamente. Mientras que Imazetapir y Metribuzin generaron una elevada fitotoxicidad para todos los cultivos de servicios testeados, excepto la vicia. • La vicia tuvo el mejor comportamiento para ser utilizada conjuntamente con una amplia gama de herbicidas posiblemente por su baja tasa de crecimiento al inicio de su ciclo. • El porcentaje en el control de malezas fue muy bueno en todos los tratamientos químicos hasta los 60 DDA. A partir de allí, la eficiencia en el control comenzó a descender. • Una estrategia complementaria, interesante de evaluar, es la consociación de dos especies con crecimiento diferencial que puedan permitir un cierre de entresurco rápido, que maximicen la producción de biomasa aérea y sean más eficientes en la competencia por recursos.
Encuentre el presente trabajo en www.aapresid.org.ar - PUBLICACIONES
Cultivos Invernales 2020
69
Red de INNOVADORES
Red de INNOVADORES
Autores: Czyruk, L.S.*; Burdyn, B.; Casse, M.F.; Rojas, J. M.; Roldán, M.F. Estación Experimental Agropecuaria INTA Sáenz Peña. Contacto: czyruk.lorena@inta.gob.ar
Cultivos Invernales 2020
70
Incidencia de los cultivos de servicio en la supresión de malezas con dos métodos de secado Ensayo para evaluar el efecto de dos métodos de secado, químico y mecánico, sobre el número de malezas desde la terminación del cultivo de servicio hasta la siembra del cultivo de maíz.
Palabras Claves: Número de malezas; Método de secado; Cultivos de servicio.
En la provincia del Chaco, el uso de CS se implementó para generar competencia a las malezas y aportar materia seca (MS) al sistema. En el Depto. Comandante Fernández, en la localidad de Presidencia Roque Sáenz Peña, se vienen realizando ensayos de CS en el campo experimental de la EEA INTA Sáenz Peña. El objetivo de uno de ellos es evaluar el efecto de dos métodos de secado, químico y mecánico, sobre el número de malezas desde la terminación por interrupción del ciclo del CS hasta la siembra del cultivo de maíz (Zea mays L). Materiales y métodos El ensayo se llevó a cabo en el lote 100 del campo experimental de la EEA INTA Sáenz Peña (26.8507897, -60.4318862, 87) durante la campaña 2019/20. La región climática es subtropical, intermedia entre subhúmeda y continental seca, con lluvia promedio de 40 años de 66 mm en invierno, 292 mm en primavera, 383 mm en verano y 235 mm en otoño (Ledesma, 1996). Se encuentra ubicado sobre la Serie de suelo Independencia (Haplustol Óxico).
La fecha de siembra fue el 2 de junio del 2019 y la interrupción del ciclo fenológico de los CS el 8 de octubre del 2019. En el momento del secado se midió materia seca (MS) y número de malezas presentes. La metodología usada fue un marco de 0,5 x 0,5 m arrojado al azar 2 veces en cada tratamiento y la misma metodología se implementó a la siembra del maíz el 18 de enero del 2020. Se realizó un análisis estadístico inferencial por medio de modelos mixtos con el programa Infostat versión 2017 (Di Rienzo et al., 2017), considerando los tratamientos y la interrupción del ciclo como efectos fijos, y los bloques y las repeticiones como efectos aleatorios. Resultados y discusión La avena fue el CS que más MS y número de malezas presentó en el momento de terminación. Por lo que para este cultivo no se halló relación entre la MS producida y el número de malezas presentes. Vicia y triticale se comportaron de manera similar: al aumentar la MS, disminuyeron las malezas, y cuando superaron las 2 Tn/MS/ha, presentaron un número menor de malezas respecto al barbecho (Figura 1). Los valores máximos y mínimos muestran que el barbecho nunca tuvo cero malezas, pero si la vicia y triticale. El máximo valor para el número de malezas registrado fue el del cultivo de avena (212 plantas/m2), mayor al barbecho (80 plantas/m2) (Tabla 1). A la siembra del maíz (cultivos de renta) se observaron diferencias significativas en el número de malezas en cada tratamiento (Figura 3). También se observó que con valores mayores a 3.5 tn de MS de cobertura, las malezas empiezan a disminuir. Esto sugiere que tanto vicia como triticale controlan más que el barbecho, con buen aporte de MS sin diferenciarse en el tipo de terminación (método de secado).
Red de INNOVADORES
Se sabe que los CS podrían contribuir al control de malezas mediante tres mecanismos: 1) la disminución de la emergencia de malezas por cambios en el ambiente; 2) la concentración de las emergencias en el tiempo (menos cohortes durante el barbecho) que, a la vez, provoca uniformidad en el desarrollo de las plantas; y 3) el menor crecimiento de las malezas por el efecto "mulch" de la cobertura. Todo esto hace que los controles químicos que puedan ser necesarios luego del cultivo de servicio, sean más eficaces y, a la vez, se disminuye la presión de selección de los herbicidas (Bertolotto & Marzetti, 2017).
Los CS implantados fueron Avena strigosa, Vicia villosa, Triticale sp. y barbecho como testigo. El diseño fue en bloques al azar con 4 repeticiones, mientras que los tratamientos fueron los diferentes CS con dos métodos de secado, uno químico y otro mecánico. El método químico se realizó a través de la aplicación de herbicidas y el mecánico por medio del rolado.
71 Cultivos Invernales 2020
Introducción La introducción creciente de cultivos de servicio (CS) dentro de las rotaciones que se llevan a cabo en el NEA, es una estrategia que se comenzó a realizar en los últimos años por sus múltiples beneficios. Se considera que los CS son muy beneficiosos para el sistema ya que proporcionan biomasa, aportan carbono al suelo, fijan nitrógeno, suprimen malezas, entre otros. Los productores adoptan cada vez más la incorporación de los CS debido a que les permite bajar los altos costos de aplicación de herbicidas, disminuir la cantidad de malezas, su diversidad y banco de semillas en sus sistemas productivos actuales.
En el tratamiento avena, el método de secado químico presentó menor número de malezas que el mecánico (Figura 2). No se halló interacción significativa entre tratamientos y tipo de terminación, dependiendo más de la especie que del tipo de secado.
Se observaron diferencias en el número de malezas entre la avena y el resto de los tratamientos a la siembra del maíz (Figura 3).
Figura 1
Red de INNOVADORES
Diagrama de dispersión del número de malezas (plantas/m2) y la materia seca (kg/ha) al momento de secado (terminación) de los cultivos de servicio (cobertura), avena, triticale, vicia y barbecho.
Cultivos Invernales 2020
72
Tabla 1
Medidas resumen para cada tratamiento en el momento de terminación. Tratamiento
Variable
n
Media
D.E.
CV
Mín.
Máx.
Avena
MS CC kg/ha
8
5140.0
1594.99
31.03
3360.0
8560.0
Avena
N Plantas/m2
8
56.0
71.97
128.51
4.0
212.0
Barbecho
MS CC kg/ha
8
0.0
0.00
sd
0.0
0.0
Barbecho
N Plantas/m2
8
44.5
25.25
56.74
12.0
80.0
Triticale
MS CC kg/ha
8
3410.0
1034.88
30.35
2280.0
5320.0
Triticale
N Plantas/m2
8
25.5
22.32
87.51
0.0
56.0
Vicia
MS CC kg/ha
8
2955.0
1764.47
59.71
920.0
5440.0
Vicia
N Plantas/m2
8
26.0
38.84
149.39
0.0
108.0
Figura 2
Red de INNOVADORES
Diagrama de dispersión del número de malezas (plantas/m2) por tratamiento (cultivo y método de secado) a la siembra del maíz.
Cultivos Invernales 2020
73
Tabla 2
Red de INNOVADORES
Medidas resumen para cada tratamiento al momento de la siembra de cultivos de renta. Tratamiento
Control
Variable
n
Media
D.E.
CV
Mín.
Máx.
Avena
M
N° malezas/m2
8
157.50
115.55
73.37
12.00
372.00
Avena
Q
N° malezas/m2
8
196.50
85.27
43.39
64.00
312.00
Barbecho
M
N° malezas/m2
8
104.50
60.33
57.70
28.00
188.00
Barbecho
Q
N° malezas/m2
8
73.50
47.33
64.39
8.00
148.00
Triticale
M
N° malezas/m2
8
68.00
51.93
76.37
8.00
176.00
Triticale
Q
N° malezas/m2
8
109.50
48.85
44.61
28.00
192.00
Vicia
M
N° malezas/m2
8
73.00
55.99
76.70
16.00
164.00
Vicia
Q
N° malezas/m2
8
26.00
28.36
109.10
0.00
76.00
Cultivos Invernales 2020
74
Figura 3
Número de malezas (plantas/m2) por tratamiento (avena, barbecho, triticale, vicia) a la siembra de maíz.
Conclusiones
Red de INNOVADORES
• Se determinaron diferencias significativas entre el CS avena respecto de los otros tratamientos al momento de la siembra del maíz en cuanto al número de malezas, pero sin diferencias entre métodos de terminación del ciclo fenológico de los CS. Se puede decir que avena fue el cultivo que presentó menor control en el número de malezas, observando que el secado químico es más eficiente que el mecánico en este cultivo.
Colaboración
75 Cultivos Invernales 2020
López, A. (Departamento de Suelo)- EEA INTA Sáenz Peña; Canteros, A.; Trangoni, L.; Ramírez, R., Ramírez, A. (auxiliares de campo).Al Ing. Agr. Valentín Gentiletti por la toma de las imágenes con el drone y su procesamiento.
Bibliografía
Bertolotto M. & Marzetti M. 2017. Manejo de malezas problema. Cultivos de cobertura. AAPRESID, 31 pp. Di Rienzo J. A., Casanoves F., Balzarini M. G., Gonzalez L., Tablada M., Robledo C. W. InfoStat versión 2017. Grupo InfoStat, FCA, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina. URL http://www.infostat. com.ar Ledesma L. L. 1996. Carta de suelos de la Estación Experimental Agropecuaria de Presidencia Roque Sáenz Peña (Chaco). EEA INTA Sáenz Peña. Chaco, Argentina.
Encuentre el presente trabajo en www.aapresid.org.ar - PUBLICACIONES
Red de INNOVADORES
Autores: Yanniccari, M.; Appella, C.; Istilart, C. Chacra Experimental Integrada Barrow (MAIBA-INTA) Contacto: yanniccari.marcos@inta.gob.ar Fuente: Actualización técnica en cultivos de cosecha fina 2018/19 - INTA EDICIONES
Cultivos Invernales 2020
76
Evaluación de tratamientos herbicidas pre- y postemergentes para el control de malezas en arveja
Control y fitotoxicidad de herbicidas pre y post emergentes para el control de malezas en el cultivo de arveja.
Palabras Claves: Arveja; Malezas; Manejo de cultivo; Control de malezas; Leguminosas.
Cultivos Invernales 2020
77
Red de INNOVADORES
Red de INNOVADORES
Introducción Más del 50% de la producción de arveja se lleva a cabo en la provincia de Buenos Aires. El cultivo de arveja se realiza en los partidos del área de influencia de la CEI Barrow desde hace una década (Forján y Manso, 2009). Interesantemente, esta leguminosa invernal puede participar de la secuencia de cultivos, destacando su ciclo corto y agresividad frente a malezas siempre que se haya garantizado la correcta implantación con herbicidas residuales (Appella y Manso 2013; Appella, 2016).
Cultivos Invernales 2020
78
Los herbicidas registrados para su uso en barbecho, pre y post-emergencia, apenas superan los diez principios activos y se demanda información regional en cuanto a los efectos fitotóxicos de tales productos sobre arveja. Considerando que luego de la siembra, los primeros dos meses del cultivo son trascendentes para el manejo de malezas, el atraso en el control disminuye el rendimiento sensiblemente (Appella, 2016). En este contexto surge el objetivo del presente trabajo: evaluar tratamientos herbicidas pre- y postemergentes para el control de malezas en arveja, analizando niveles de control y efectos fitotóxicos sobre el cultivo.
Materiales y métodos Se realizó un ensayo en la CEI Barrow, sobre un suelo perteneciente a la serie Tres Arroyos. La siembra de arveja se llevó a cabo bajo siembra directa, el día 6 de agosto de 2018, empleando la variedad Yams y utilizando la tecnología comúnmente aplicada en la zona. Las
principales especies que conformaban la comunidad de malezas del lote eran: Veronica persica, Ammi majus, Lamium ampleuxicale, Stellaria media, Conyza sumatrensis y Polygonum aviculare. Se siguió un diseño completamente al azar con tres repeticiones en donde la unidad experimental fue una parcela de 3 m de ancho y 6 m de largo. A los 15 días de realizada la siembra se aplicaron los tratamientos pre-emergentes (Tabla 1) y el 10 de octubre, cuando las plantas del cultivo tenían 20 cm de altura, se efectuaron los tratamientos postemergentes (Tabla 1). A tal fin se utilizó una mochila manual a presión constante de 35 lb mediante CO2 y un volumen de aplicación de 140 L ha-1, el equipo estaba provisto de pastillas 11002. Luego de 30 días de realizados los tratamientos se determinó el control total de malezas a partir de estimaciones visuales y se evaluaron efectos fitotóxicos relativos, respecto al tratamiento sin herbicida empleando una escala 0 a 5 (0: sin efectos fitotóxicos evidentes y 5: muerte de plantas). Habitualmente, el empleo de imazetapir en preemergencia de arveja resulta ser el tratamiento más común y a lo largo del presente trabajo fue considerado como el tratamiento testigo químico. Finalmente, a madurez de cosecha se muestrearon las plantas totales de 2,8 m2, se trillaron y estimó el rendimiento. Los datos se analizaron mediante ANOVA a una vía y, en caso de corresponder, se realizó el contraste de Tabla 1
Tratamientos pre- y post-emergentes realizados. En cada caso se presentan las dosis de productos formulados. Tratamiento
Momento
Dosis (cm3 o g ha-1)
1
Testigo sin herbicida
2
Imazetapir
PRE
500
3
Imazetapir + Flumioxazin
PRE
500 + 100
4
Imazetapir + Flurocloridona
PRE
500 + 1000
5
Imazetapir + Atrazina
PRE
500 + 1000
6
MCPA
POST
750
7
MCPA + Metribuzin
POST
750 + 750
Resultados y discusión A los 22 días desde las aplicaciones (DDA) de los preemergentes, se registró la primera precipitación (21 mm). Recién por entonces las condiciones ambientales habrían contribuido a la incorporación de los herbicidas y al estímulo de la germinación y emergencia de malezas.
Los tratamientos post-emergentes evaluados ocasionaron elevados niveles de fitotoxicidad. Dentro de los 7 días de la aplicación de esos tratamientos, se registraron tres días con heladas con temperaturas mínimas de -2,0°C; -1,0°C y -2,4 °C. Estas bajas temperaturas en post-aplicación habrían contribuido a exacerbar los efectos fitotóxicos de los tratamientos indicados. Los principales síntomas se advirtieron como manchas necróticas y marchitez.
En función de esto, los niveles de control logrados con cada tratamiento luego de 30 DDA resultaron ser superiores al 70% en todos los casos (Tabla 2). No obstante, se destacó el incremento en la eficacia de control cuando a imazetapir se le agregó atrazina, flumioxazin ó flurocloridona, superando el 90% de control sin diferir significativamente entre sí (Tabla 2). Tales combinaciones permitieron controlar Lamium ampleuxicaule, Medicago lupulina y Bowlesia incana. Estas malezas fueron parcialmente controladas por el tratamiento de imazetapir solo.
Aunque el control de malezas logrado por los postemergentes fue superior al 80% (Tabla 3), tanto MCPA sólo como en mezcla con metribuzin, conllevaron una elevada fitotoxicidad que deprimió el rendimiento del cultivo respecto al tratamiento testigo enmalezado (Tabla 3) y testigo químico (Tratamiento 2; Tabla 2).
Tabla 2
Efecto de los tratamientos pre-emergentes en el control de malezas a 30 días desde la aplicación y en el rendimiento en grano del cultivo. Tratamiento
Control %
Rendimiento kg ha-1
1
Testigo sin herbicida
2508 a
2
Imazetapir
78 a
2516 a
3
Imazetapir + Flumioxazin
91 b
2655 ab
4
Imazetapir + Flurocloridona
93 b
2672 ab
5
Imazetapir + Atrazina
93 b
3083 b
DMS = 9,7
DMS = 540
Tabla 3
Efecto de los tratamientos post-emergentes sobre la fitotoxicidad del cultivo y el control de malezas a 30 días desde la aplicación y en el rendimiento en grano del cultivo. Tratamiento
Fitotoxicidad (0 a 5)
Control %
Rendimiento kg ha-1
1
Testigo sin herbicida
2508 a
6
MCPA
2,1 a
93 a
1361 b
7
MCPA + Metribuzin
3,3 a
81 a
1083 b
DMS = 1,3
DMS = 17
DMS = 278
Red de INNOVADORES
Los tratamientos pre-emergentes no provocaron efectos fitotóxicos significativos sobre el cultivo (inferiores a 1, respecto a la escala 0 a 5).
79 Cultivos Invernales 2020
medias empleando la prueba de diferencias mínimas significativas de Fisher (p<0,05).
Conclusiones
Red de INNOVADORES
• Ante el empleo de imazetapir como único pre-emergente comúnmente aplicado en arveja, su efectividad podría incrementarse con la combinación de atrazina, flurocloridona ó flumioxazin, dependiendo de la presencia de especies de malezas poco sensibles a imazetapir. Tales mezclas permitieron ampliar el espectro de control de la imidazolinona y en las condiciones del ensayo, resultaron ser seguros para el cultivo de arveja. • Los tratamientos post-emergentes evaluados aparejaron efectos fitotóxicos que repercutieron significativamente en el rendimiento del cultivo. Presumiblemente, MCPA sólo ó en mezcla con metribuzin, habrían intensificado la sensibilidad del cultivo a las heladas ocurridas en post-aplicación. El manejo de malezas en el cultivo de arveja debería basarse en un adecuado tratamiento preemergente que permita controlar procesos de enmalezamiento en los primeros estadios del cultivo.
Cultivos Invernales 2020
80
Bibliografía
APPELLA, C. 2016. Determinación del periodo de interferencia de malezas en el cultivo de arveja y su efecto en el rendimiento. Informes técnicos de cultivos de cosecha fina, pp. 151-154. APPELLA, C.; MANSO, L. 2013. El cultivo de arveja, una alternativa para el invierno. Informes técnicos de cultivos de cosecha fina, pp. 79-80. FORJÁN, H.; MANSO, L. 2009. Estimación de superficie sembrada 2009. Informes técnicos de cultivos de cosecha fina.
Encuentre el presente trabajo en www.aapresid.org.ar - PUBLICACIONES
Evaluación de los cambios en el rendimiento del cultivo de trigo y su vinculación con la calidad comercial e industrial, asociado a la presencia de enfermedades foliares con distinto hábito nutricional.
Palabras Claves: Trigo; Enfermedades Foliares; Calidad; Rendimiento.
Red de INNOVADORES
Facultad de Agronomía Universidad de Buenos Aires FAUBA. 2 Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales Universidad Nacional de La Plata UNLP. 3 Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas CONICET. 4 Instituto de Investigaciones Fisiológicas y Ecológicas vinculadas a la Agricultura IFEVA. 1
Enfermedades foliares y su impacto en el rendimiento y calidad comercial e industrial del trigo
81 Cultivos Invernales 2020
Autores: Rozo Ortega, G.P1,3,4; Fleitas, M.C2,3; Schierenbeck, M2,3; Gerard, G. S2,3; Castro, A. AC2,3; Lo Valvo, P. J1,3,4; Serrago, R. A1,3,4; Simón, M.R2; Miralles, D.J1,3,4
Red de INNOVADORES Cultivos Invernales 2020
82
Introducción El trigo (Triticum aestivum L) es uno de los cereales más importantes a nivel mundial. Este cultivo está establecido en todos los continentes y cumple un rol importante a nivel cultural ya que es uno de los ingredientes principales en las recetas de todos los países y es indispensable como materia prima de muchas industrias. En Argentina el trigo es el cereal más importante no solamente en la economía local sino también en el escenario internacional. En la última campaña 2018/19 en Argentina, el trigo alcanzó una producción de 19.4 millones de toneladas con una superficie sembrada de 6.2 millones de hectáreas y rendimientos promedio de 3.222 kg/ha (www. trigoargentino.com.ar), lo que indicaría un aumento del 5 % de la producción comparado con la campaña anterior (2017/2018).
granos pueden afectar el rendimiento final del cultivo una vez establecido el número de granos. La definición del peso de los granos ocurre a partir de la antesis y finaliza en madurez fisiológica (Figura 1a). El proceso de llenado de los granos se inicia inmediatamente después de la polinización a partir de la fase lag en la que ocurre la división de células endospermáticas. Posteriormente comienza la fase de llenado efectivo de los granos que finaliza con la madurez fisiológica y se extiende por un tiempo variable en función del porcentaje de humedad con el que se pretenda cosechar (Stone y Savin, 1999). Simultáneamente, durante este proceso de llenado, ocurre la acumulación de proteínas (Figura 1b) tanto metabólicas (albúminas y globulinas) como las proteínas de reserva (gliadinas y gluteninas), indispensables para la panificación ya que son las encargadas de conformar el gluten.
Para alcanzar altas producciones en trigo, los mejoradores se han enfocado en optimizar los rendimientos a través de aumentos en la partición de la biomasa a los órganos reproductivos (índice de cosecha) sin que se haya visto modificada la biomasa aérea (Lo Valvo et al., 2018). Debido a este aumento de número de granos, los cultivares modernos de trigo poseen una menor relación fuente:destino en comparación con los cultivares más antiguos (i.e. previos a la introducción de los genes de enanismo, es decir la revolución verde).
Los componentes del rendimiento anteriormente descritos, pueden verse afectados debido a factores bióticos o abióticos (Rabbinge, 1993). Dentro de los principales factores bióticos del cultivo de trigo se encuentran las enfermedades fúngicas, como las royas y manchas, que han sido causantes de pérdidas importantes en la producción mundial y de Argentina, encendiendo alarmas fitosanitarias debido a las epifitias que se manifiestan durante las campañas. Tal es el caso de la roya amarilla que se ha propagado en los últimos años (Campos, 2017).
Esta menor relación fuente:destino en los cultivares con mayor potencial de rendimiento puede comprometer el rendimiento a través del número de granos y/o el peso de los granos si el área foliar fotosintéticamente activa es dañada durante el periodo de definición del rendimiento (periodo crítico) y/o durante el llenado de granos. En el denominado “periodo crítico”, que comprende el periodo previo inmediato a la floración (i.e. 20 días anteriores) y 10 días posteriores a la misma (Fischer, 1985), se define el número de granos en coincidencia con el activo del crecimiento de las espigas y los tallos durante el periodo previo a la floración, y con el cuaje de los granos en el periodo inmediatamente posterior a la floración (Fischer, 1985; Miralles y Slafer, 2007).
Distintas evidencias de la literatura describieron que el impacto negativo ocasionado por las enfermedades en el rendimiento del cultivo de trigo depende de: i) el momento en el que se presente la enfermedad, ii) el grado de severidad de la misma y iii) el tipo de enfermedad que se presente en el cultivo (Carretero et al., 2011; Schierenbeck et al., 2016; 2019 ab). Los efectos negativos de las enfermedades foliares (como manchas y royas) sobre el rendimiento están dados por una reducción en el área foliar total y verde, disminuciones en la intercepción de la radiación y efectos en la eficiencia de uso de la radiación (en el caso de las royas). Como consecuencia de estos efectos negativos, se produce una importante disminución en la producción de asimilados que posteriormente modificarían la composición del grano debido a las alteraciones entre el balance carbono/nitrógeno.
Si bien el número de granos es la variable que mejor explica el rendimiento, cambios en el peso de los
Figura 1
Red de INNOVADORES
a) Dinámica del peso individual del grano (mg); y b) Dinámica de deposición de las distintas proteínas (mg): metabólicas (albúminas y globulinas) y de reserva (gliadinas y gluteninas) durante proceso de llenado de los granos.
En la actualidad existe una amplia recopilación respecto al efecto de los factores abióticos en la calidad del cultivo de trigo. No obstante, las investigaciones sobre el impacto de los factores bióticos en la calidad han sido pocas y recientes. Por otro lado, las evidencias publicadas en la literatura encontraron diversas respuestas, muchas veces contradictorias, en la calidad del cultivo de trigo ante infecciones de patógenos biotróficos, necrotróficos y hemibiotróficos (Castro y Simón, 2016; Castro y Simón, 2017; Castro et al., 2018., Fleitas et al., 2017; Laidig et al., 2017; Fleitas et al., 2018a; Fleitas et al., 2018b y Matzen et al., 2019). Teniendo en cuenta los antecedentes anteriormente descritos, es posible especular con la hipótesis de que ante la presencia de las enfermedades, los cultivares con menor relación fuente:destino (“modernos”, utilizados actualmente) se vean más afectados que los cultivares con una mayor relación fuente:destino (“antiguos”, previos a la revolución verde). Respuestas similares podrían reflejarse en cultivares con una menor reserva de carbohidratos al compararlos con los cultivares de mayor capacidad de almacenaje de carbohidratos solubles previo al llenado de los granos. Estos efectos
serán mayores ante la presencia de enfermedades que afecten directamente el órgano de reserva como lo hace la roya del tallo. Dentro de este contexto, el objetivo general de los experimentos presentados a continuación fue estudiar los cambios en el rendimiento y su vinculación con la calidad comercial e industrial debido a la presencia de distintas enfermedades foliares en: i) cultivares de trigo con diferente potencial de rendimiento y diferente relación fuente:destino, ii) un cultivar de alto potencial de rendimiento clasificado dentro del grupo de calidad 2 y iii) líneas con distinta acumulación de carbohidratos solubles en agua en el momento a antesis (CHOS). Materiales y métodos Para cumplir con este objetivo, se llevaron a cabo tres experimentos, uno de ellos en la estación experimental J. Hirschhorn, de la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales de la Universidad Nacional de La Plata, Los Hornos (34° 52’ LS; 57° 58’ LO) (UNLP) y los restantes en el campo experimental del Departamento de Producción Vegetal de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires (34º35’S, 58º29’O)
Cultivos Invernales 2020
83
Red de INNOVADORES
(FAUBA). Todos los experimentos contaron con dos tratamientos: “Control” que consistió en parcelas controladas con fungicidas compuestos por triazoles, carboxamidas y estrobirulinas; y “enfermo” que consistió en parcelas infectadas con dos tipos de royas (roya de la hoja y del tallo).
Cultivos Invernales 2020
84
El primer experimento realizado en FAUBA (año 2013 y 2014) consistió en promover infecciones con esporas de roya de la hoja en cultivares con distinta relación fuente:destino. Estos fueron denominados como (i) “antiguos” ya que fueron cultivares liberados al mercado antes del año 1960, conformados por los cultivares Favorito y Rendidor; y cultivares denominados (ii) “modernos” que fueron liberados al mercado después del año 1997, conformados por los cultivares Pegaso y Baguette 10. El segundo experimento realizado en FAUBA (años 2016 y 2017) consistió en realizar infecciones con roya del tallo en el cultivar comercial Baguette 601 de alto potencial de rendimiento, clasificado dentro del grupo de calidad 2, con alta susceptibilidad a las royas, distribuido en distintas fechas de siembra. Un tercer experimento fue realizado en la UNLP (años 2016 y 2017) utilizando líneas con distinta acumulación de CHOS solubles en tallo denominados Seri x Babax (SB) inoculadas con esporas de roya de la hoja.
la escala modificada de Cobb (Peterson et al., 1948) para las royas, y la escala de Eyal y Brown (1976) para las manchas foliares. Se analizaron las respuestas en el rendimiento y componentes, y se evaluaron las respuestas en la calidad comercial e industrial, siguiendo los protocolos establecidos por las normas IRAM con la colaboración de Noemí Fritz de la Cámara Arbitral de Cereales de Bahía Blanca. Estas respuestas fueron estadísticamente analizadas para determinar los efectos de los tratamientos mediante un análisis de varianza ANOVA para cada factor, comparando las medias de cada tratamiento mediante el test LSD P<0.05 y P<0.10 utilizando el programa INFOSTAT 2018 (Di Rienzo et al., 2011). Resultados y discusión En línea con diversos autores como Campbell y Madden (1990) y Wegulo et al. (2012), la presencia de las enfermedades foliares y del tallo estuvo fuertemente influenciada por las condiciones ambientales. En este sentido, en algunos ambientes (combinación de años-fechas de siembra) los patógenos biotróficos inoculados no prosperaron debido a que los requisitos de temperatura no alcanzaron los niveles óptimos para la infección. Sin embargo, otras enfermedades (ajenas a la inoculación) con distinto hábito nutricional (necrotróficas y hemibiotróficas) cuyo inóculo se presentó en el cultivo por desplazamiento y/o presencia en el rastrojo, prosperaron debido a un ambiente adecuado para las infecciones.
Para todos los experimentos las inoculaciones se realizaron en el estado fenológico Z.37 “hoja bandera visible” (Zadoks et al., 1974) con el fin de lograr las infecciones durante el llenado de los granos siguiendo el protocolo de Stakman et al., (1962). Las infecciones de patógenos no inoculados como Py. tritici (mancha amarilla) y Z. tritici (Septoria) y P. striiformis (roya amarilla) ocurrieron por presencia y desplazamiento natural del inóculo en el lote experimental. El nivel de infección de estas enfermedades varió de acuerdo a las condiciones ambientales presentes.
La cuantificación de las enfermedades correspondientes a los tratamientos control y enfermo se encuentran representadas en medias del ABCPE (Figura 2). La reducción de infecciones en las parcelas del tratamiento control dependió de los ingredientes activos utilizados, de la resistencia del patógeno al fungicida y del ambiente explorado ya que en los controles de patógenos como P. triticina, Py. tritici y Z. tritici las infecciones lograron reducirse. Sin embargo, ante infecciones de P. graminis el control fue efectivo al 100 %.
En todos los experimentos se realizó seguimiento de la dinámica de las enfermedades cuantificadas mediante el ABCPE (área bajo la curva del progreso de la enfermedad), logrando una identificación y registro de los patógenos por separado siguiendo
Como se mencionó anteriormente, las investigaciones acerca de los efectos de las enfermedades foliares y del tallo sobre la calidad comercial e industrial son en general pocas y de reciente publicación (Castro et al., 2017; 2018; Fleitas et al., 2017; 2018a; 2018b).
Figura 2
Red de INNOVADORES
Medias del área bajo la curva del progreso de la enfermedad (ABCPE) correspondientes a los tratamientos control (Barras vacías) y enfermo (Barras llenas) en cultivares antiguos y modernos para los años a) 2013 y b) 2014 para las distintas enfermedades. Experimento correspondiente a Baguette 601 c) para las fechas de siembra tempranas I y II, d) y tardías I y II durante 2016 y e) año 2017 detallando infecciones de septoria Z. tritici a nivel foliar y Roya del tallo P. graminis a nivel foliar y del tallo. Experimento SB f) años 2016 y 2017 mostrando el conjunto de ABCPE de todas las enfermedades foliares presentes siendo la predominante roya de la hoja P. triticina.
Cultivos Invernales 2020
85
Red de INNOVADORES
En los experimentos realizados se encontraron no solamente distintas respuestas en la calidad ante patógenos con distinto hábito nutricional, sino que también se presentaron respuestas contradictorias ante infecciones de un mismo patógeno, coincidiendo con Fleitas et al. (2017) y Castro et al. (2017).
Cultivos Invernales 2020
86
Estos resultados indican que las respuestas dependen del hábito nutricional del patógeno y su interacción con el ambiente, así como de la respuesta individual que se puede presentar dentro de los genotipos que, a su vez, muestran variaciones en la calidad. En los experimentos realizados no fue posible evaluar la presencia de una sola enfermedad en forma absoluta en las parcelas enfermas, debido a que el control de un patógeno específico ajeno al inoculado resulta complejo y, por lo tanto, se determinó la respuesta de acuerdo a la predominancia de cada patógeno en particular. En este sentido, y si bien en condiciones de campo (producción) en general no hay un patógeno único en los cultivos, sería deseable en el futuro intentar separar con mayor grado de precisión el efecto individual de cada patógeno y los efectos competitivos y/o aditivos ante la presencia de otros. En la Figura 2 se presenta la cuantificación de las enfermedades representadas mediante el ABCPE, donde se observa una mayor presencia de las enfermedades, como era esperable, en el tratamiento “enfermo”. A su vez, se detalla la predominancia de los patógenos dentro de cada experimento que fue diferente de acuerdo al ambiente explorado. De este modo, en el experimento de cultivares “antiguos y modernos” predominaron las enfermedades necrotróficas en el año 2013 (Figura 2a) y las enfermedades biotróficas en el año 2014 (Figura 2b). En el año 2013 hubo un desfavorecimiento del progreso de la enfermedad biotrófica debido a temperaturas inferiores a los 20 °C durante la mayor parte del ciclo del cultivo, similar a lo que ocurrió con las fechas de siembra tempranas en el año 2016 con el cultivar Baguette 601 (Figura 2c), en donde la roya del tallo no pudo prosperar pese a las inoculaciones realizadas. Cuando las inoculaciones fueron realizadas en fechas tardías (Figura 2d y e) el progreso de la enfermedad biotrófica fue exitoso debido al aumento de las temperaturas, sumado a una cantidad de horas de rocío apropiadas para la infección. En la Figura 2f, se
observa una cuantificación total de las enfermedades en donde se identificaron enfermedades biotróficas, necrotróficas y hemibiotróficas con predominancia de roya de la hoja. El impacto negativo de las enfermedades en los rendimientos se observó en todos los experimentos, independientemente de los cultivares seleccionados. Sin embargo, la magnitud del efecto negativo se asoció al momento de aparición de las enfermedades independientemente de su hábito nutricional (Tabla 1). Cuando las enfermedades se presentaron durante el periodo crítico del cultivo, estas redujeron el número de granos. Mientras que cuando se presentaron durante el llenado de los granos generalmente se observaron disminuciones en el peso de los granos en línea con otras evidencias de la literatura (Kohli et al., 1992; Shabeer y Bokus, 1998; Fernández et al., 2002; Carretero et al., 2008; Serrago y Miralles 2010; Serrago et al., 2011; Wegulo, 2012; Schierenbeck et al., 2016; Serrago et al., 2019 y Schierenbeck et al., 2019 a y b). No obstante, en algunos casos pese a que se presentaron enfermedades con predominancias tanto de mancha amarilla como de roya de la hoja durante el periodo crítico y el llenado de granos, el peso de los granos no registró modificaciones cuando se lo comparó con el tratamiento sano (Tabla 1). Esta respuesta en el peso de los granos puede estar atribuida a distintos factores: i) una compensación entre el peso y el número de granos cuando el número de granos se redujo ante la presencia de las enfermedades foliares en el periodo crítico, determinando un mayor número de granos en los tratamientos enfermos y/o ii) a una compensación en la capacidad fotosintética de otros órganos, como espigas o pedúnculos, que continúan aportando al llenado de los granos cuando los cultivos son afectados por enfermedades foliares. La compensación fotosintética de otros órganos ha sido reportada en aquellas condiciones donde está comprometido el suministro de asimilados debido a la pérdida de área foliar. El aporte fotosintético de los tejidos remanentes sanos en la hoja podría aumentar, al igual que una mayor actividad fotosintética de otros tejidos de la planta (e.g. pedúnculo) (Serrago et al., 2011; Carretero et al., 2011). Por otro lado, el tipo de
Tabla 1
Comparación de medias de los tratamientos control y enfermo para las variables de rendimiento correspondientes a cada uno de los experimentos: Cultivares Antiguos y modernos (años 2013 y 2014), Fechas de siembra (años 2016 y 2017) y SB (años 2016 y 2017), asociadas a la presencia y predominancia de las distintas enfermedades. Comparación de medias de tratamientos
P. triticina (2016)
P. triticina (2017)
Rendimiento (gr/m2) Control
499
a
411
a
712
a
815
a
690
a
457
a
880
a
703
a
608
a
786
a
Enfermo
439
b
363
a
657
a
687
a
533
b
153
b
495
b
403
b
497
b
454
b
a 16806 a 23158 a
21164
a 14975 a 18063 a
Número de granos (m2) Control
14843 a 12697 a 18269 a 20723 a
Enfermo
12808 b
11207
a 17299 a
18061
19100
b 16867 a
9077
b 18975 b 18245 a
13105
b
14501
b
Peso de los granos (mg) Control
34
a
32
a
38
a
39
a
36
a
23
a
38
a
33
a
41
a
44
a
Enfermo
35
a
32
a
39
a
38
a
32
b
17
b
26
b
22
b
38
b
31
b
patógeno tiene una gran incidencia en la reducción del rendimiento y de sus componentes numéricos ya que las disminuciones en los rendimientos fueron más relevantes en el experimento en el que se realizaron infecciones de roya del tallo, llegando a causar reducciones en el rendimiento de hasta un 66 % (Tabla 1). Estos resultados confirman la hipótesis planteada. El tipo de enfermedad predominante también afecta no solo el rendimiento sino también la calidad (Tabla 2). En los experimentos donde se registraron disminuciones en el peso de los granos ante infecciones con predominancia de patógenos biotróficos, causantes de las royas Puccinia spp, se evidenciaron efectos negativos en el peso hectolítrico, reduciendo el porcentaje de extracción de las harinas (Tabla 2, Figura 3a). En términos generales, las enfermedades produjeron impactos negativos en el contenido de proteína en grano como consecuencia de infecciones
asociadas a royas Puccinia spp. y a manchas foliares Z. tritici y Py. tritici (Tabla 2). Estos resultados sugieren que aun cuando el número de destinos (granos por unidad de área) fue sustancialmente reducido por las enfermedades durante el periodo crítico, o cuando además se produjeron reducciones en el peso de los granos asociado a la presencia de patógenos durante el llenado, el contenido de nitrógeno en grano y consecuentemente el de proteína fue penalizado. Las posibles razones de la reducción en el contenido de proteína como consecuencia de la presencia de enfermedades, podrían estar asociadas a una dramática reducción del área foliar verde, lo que imposibilita la retranslocación de nitrógeno hacia los granos. En este sentido, se ha afirmado que patógenos biotróficos como Puccinia ssp y Erysiphe spp. pueden perjudicar en mayor medida la acumulación de nitrógeno respecto de CHOs en
Red de INNOVADORES
SB (UNLP)
87 Cultivos Invernales 2020
y Modernos Fechas de siembra Variables Antiguos (FAUBA) (FAUBA) de rendimiento P. P. P. P. P. Py. tritici triticina Z. tritici I Z. tritici graminis graminis graminis graminis (2013) (2016) II (2016) I (2016) II (2016) I (2017) II (2017) (2014)
Red de INNOVADORES
el grano (Caldwell, 1934; Petturson y Newton, 1939; Greaney et al., 1941; Park et al., 1988; Simón et al., 2002). Respuestas similares se observaron en el contenido de proteína en harina y el gluten (Tabla 2), debido a las importantes asociaciones entre estos dos parámetros y el contenido de proteína (Figura 3b).
algunos casos asociaciones negativas entre la tenacidad y extensibilidad (Figura 3d). En este punto es importante destacar que la presencia de las enfermedades afectó todos los parámetros estudiados de manera similar tanto (i) en los cultivares con distinta relación fuente:destino (antiguos y modernos) como (ii) en los genotipos con distinta acumulación de carbohidratos. Por lo tanto, el efecto de las enfermedades en este estudio resultó ser independiente a la cantidad de reservas que se encuentren en la planta.
La presencia de enfermedades afectó otros parámetros de la calidad industrial reduciendo la tenacidad y la fuerza de la masa en forma similar a lo observado en el porcentaje de proteína (Tabla 3), que se vio reflejado en la relación positiva que presentan estos parámetros (Figura 3c). Por el contrario, las enfermedades incrementaron la extensibilidad, encontrándose en
Por otro lado, el efecto negativo de las enfermedades sobre la calidad comercial e industrial depende del momento en que se hace presente la enfermedad,
Tabla 2
Cultivos Invernales 2020
88
Comparación de medias de los tratamientos control y enfermo para las variables de calidad comercial correspondientes a cada uno de los experimentos: Antiguos y modernos (años 2013 y 2014), Fechas de siembra (años 2016 y 2017) y SB (años 2016 y 2017), asociadas a la presencia y predominancia de las distintas enfermedades. Comparación de medias de tratamientos Variables de calidad comercial
Antiguos y Modernos (FAUBA) Py. tritici (2013)
Fechas de siembra (FAUBA)
SB (UNLP)
P. P. P. P. P. P.triticina P.triticina tritici Z. tritici graminis triticina Z. graminis graminis graminis (2016) (2017) (2014) I (2016) II (2016) I (2016) II (2016) I (2017) II (2017)
Peso hectolitrico (hL) Control
82
a
80
a
80
a
79
a
73
a
65
a
86
a
77
a
81
a
78
a
Enfermo
81
a
78
a
80
a
77
a
73
a
35
b
79
b
73
b
78
b
66
b
Porcentaje de extracción (%) Control
72
a
63
a
67
a
64
a
74
a
69
a
78
a
75
a
70
a
73
a
Enfermo
71
a
63
a
65
a
55
b
71
b
61
b
65
b
70
b
70
a
65
b
C. Proteína en grano (%) Control
10
a
13
a
11
a
10
a
12
a
17
a
11
a
10
a
11
a
11
b
Enfermo
9
b
12
b
11
b
10
b
10
b
15
b
9
b
8
b
10
b
12
a
C. Gluten húmedo (%) Control
24
a
36
a
22
a
20
a
24
a
35
a
26
a
20
a
24
a
27
a
Enfermo
20
b
35
a
21
a
17
b
19
b
31
b
16
b
14
b
23
b
28
a
enfermedades foliares podrían afectar la composición de las proteínas causando un desbalance en la relación gliadinas/gluteninas, o quizá modifiquen algunos componentes importantes de las amilasas debido a las tendencias de aumento que se presenciaron en el índice de caída (Falling number). Por lo tanto, sería ideal en un futuro investigar cómo las enfermedades afectan a estos atributos que están asociados a la calidad de las harinas más allá de los parámetros reológicos investigados en estos experimentos.
el grado de severidad, y del tipo y alcance de la enfermedad en los distintos órganos de la planta.
Red de INNOVADORES
El producto final de la calidad industrial, determinado por el volumen del pan, presentó pocas o nulas respuestas ante la presencia de las enfermedades foliares (datos no mostrados) y en algunos casos contradictorias a las respuestas obtenidas en parámetros como la fuerza de la masa (W), a pesar de numerosas evidencias que afirman una asociación importante entre estos dos parámetros. Estas respuestas permiten especular que las
Tabla 3
Comparacion de medias de tratamientos Parámetros del alveograma
Antiguos y Modernos (FAUBA) Py. tritici (2013)
Fechas de siembra (FAUBA)
SB (UNLP)
P. P. P. P. P. P. P. tritici Z. tritici graminis triticina Z. graminis graminis graminis triticina triticina (2014) I (2016) II (2016) I (2016) II (2016) I (2017) II (2017) (2016) (2017)
Tenacidad de la masa P (%) Control
58
a
76
a
135
a
134
a
113
a
122
a
138
a
102
a
97
a
70
b
Enfermo
57
a
74
a
131
a
112
a
98
b
83
b
96
b
88
b
84
b
64
a
Extensibilidad de la masa L (%) Control
51
a
84
a
44
a
30
a
67
a
83
b
62
a
53
a
69
a
105
b
Enfermo
47
a
91
a
46
a
35
a
51
b
124
a
41
b
38
b
69
a
123
a
Control
1,3
a
0,9
a
3.1
a
4.6
a
1.7
b
1.6
a
2.4
a
2,0
a
1,5
a
0,7
a
Enfermo
1,4
a
0,8
a
2.9
a
3.3
a
2,0
a
0.7
b
2.3
a
2.3
a
1,3
b
0,6
a
Relación P/L
Fuerza de la masa W (J x 10-4) Control
132
a
277
a
252
a
182
a
315
a
437
a
344
a
225
a
231
a
211
a
Enfermo
111
a
277
a
270
a
175
a
211
b
343
b
171
b
144
b
196
b
222
a
89 Cultivos Invernales 2020
Comparación de medias de los tratamientos control y enfermo para los parámetros del alveograma correspondientes a cada uno de los experimentos: Cultivares Antiguos y modernos (años 2013 y 2014), Fechas de siembra (años 2016 y 2017) y SB (años 2016 y 2017) asociadas a la presencia y predominancia de las distintas enfermedades.
Figura 3
Red de INNOVADORES
a) Porcentaje de extracción de las harinas (%) en función del peso hectolítrico (hL) expresados en valores absolutos; b) Gluten húmedo y Proteína en grano; y c) W (fuerza de la masa) y Gluten húmedo expresados como diferencia (en valores absolutos respecto a la media de cada fecha de siembra); y d) extensibilidad L (mm) vs tenacidad de las masas P (mm) ambos en valores absolutos. Los círculos llenos corresponden al tratamiento enfermo y los círculos vacíos al tratamiento controlado con fungicidas. Las distintas figuras geométricas representan las distintas fechas de siembra y/o genotipos.
Cultivos Invernales 2020
90
Bibliografía
Caldwell, R.M., Schafer, J.F., Compton, L.E., Patterson, F.L., 1958. Tolerance to Cereal Leaf Rusts. Science 128:714-715. Campbell, C.L., Madden, L.V., 1990. Introduction to Plant Disease Epidemiology. John Wiley & Sons, New York, NY, USA. Campos P.E., 2017. Identificación de razas exóticas de roya amarilla en región triguera argentina. EEA Inta Bordenave. Carretero, R., Bancal, M.O., Miralles, D. J., 2008. Principales enfermedades foliares en el cultivo de trigo en la región pampeana argentina. Una visión ecofisiológica. Facultad de Ciencias Agrarias, Universidad Autónoma del Estado de México, México. Carretero, R., Bancal, M.O., Miralles, D.J., 2011. Effect of leaf rust (Puccinia triticina) on photosynthesis and related processes of leaves in wheat crops grown at two contrasting sites and with different nitrogen levels. Eur. J. Agron. Pages 237-246. Castro, A.C., Simón, M.R., 2016. Effect of tolerance to Septoria tritici blotch on grain yield, yield components and grain quality in Argentinean wheat cultivars. Crop Protection, 90: 66-76. Castro, A. C. and Simón, M. R. 2017. The impact of Septoria tritici blotch in bread making quality among argentinean wheat cultivars. J. Cereal Sci. 77(9):259-265 Castro, A.C., Fleitas, M.C., Schierenbeck, M., Gerard, G.S., Simón, M.R., 2018. Evaluation of different fungicides and N rates on grain yield and bread-making quality in wheat affected by Septoria tritici blotch and yellow spot. J. Cereal Sci. 83, 49–57. https://doi.org/10.1016/j.jcs.2018.07.014. Fischer, R.A., 1985. Number of Kernels in Wheat Crops and the Influence of Solar Radiation and Temperature. Journal of Agricultural Science, 105, 447-461. Fleitas, M.C., Castro, A.C., Simón, M.R., 2017. Quality and yield response to the control of Mycosphaerella graminicola in wheat as affected by nitrogen rate and cultivar breadmaking characteristics. Crop Pasture Sci. 68, 317–327. Fleitas, M.C., Schierenbeck, M., Gerard, G.S., Dietz, J.I., Golik, S.I., Simón, M.R., 2018 a. Breadmaking quality and yield response to the green leaf area duration caused by fluxapyroxad under three nitrogen rates in wheat affected with tan spot. Crop. Prot. 106, 201–209. Fleitas, M.C., Schierenbeck, M., Gerard, G.S., Dietz, J.I., Golik, S.I., Campos, P.E., Simón, M.R., 2018 b. How leaf rust disease and its control with fungicides affect dough properties, gluten quality and loaf volume under different N rates in wheat. J. Cereal Sci. 80, 119–127. Greaney, F.J., Woodward, J.C., Whiteside, A.G.O., 1941. The Effect of stem rust on the yield, quality, chemical composition, and milling and baking properties of Marquis wheat. Scientific Agriculture, 22: 40-60. Kohli, M., Mehta, Ackermann, M., 1992. Spread of tan spot in the Southern Cone Region of South America. In: Francl, L., Krupinsky, J. and McMullen, M. (eds) Advances in Tan Spot. Proceedings of the Second International Tan Spot Workshop, North Dakota State University, Fargo, North Dakota, pp. 86–90. Laidig, F.; Piepho, H.-P.; Rentel, D.; Drobek, T.; Meyer, U.; Huesken, A. Breeding progress, variation, and correlation of grain and quality traits in winter rye hybrid and population varieties and national on-farm progress in Germany over 26 years. Theor. Appl. Genet. 2017, 130, 981–998 Lo Valvo, P.J., Miralles, D.J., Serrago, R.A., 2018. Genetic progress in Argentine bread wheat varieties released between 1918 and 2011: Changes in physiological and numerical yield components. Field Crops Research 221: 314-321. Matzen, N., Jørgensen, J. R., Holst, N., Jørgensen, L.N., 2019. Grain quality in wheat—Impact of disease management. European Journal of Agronomy 103: 152-164.
Red de INNOVADORES
Fernandez, M.R., Clarke, J.M., DePauw, R.M., Lefkovitch, L.P., 1996. Comparison of durum and common wheat cultivars for reaction to leaf spotting fungi in the field. Plant Disease, 80: 793–797.
91
Passarella y Savin, 2003. Características fisicoquímicas de los granos y usos principales, En: Producción de granos, Bases funcionales para su manejo. Ed. Facultad de Agronomía. Pág. 14. Park, R.F., Rees, R.G., Platz, G.J., 1988. Some effects of stripe rust infection in wheats with adult plant resistance. Australian Journal of Agricultural Research 39, 555-562. Petturson, B., Newton, M., 1939. The effect of leaf rust on wheat quality. Canadian Journal of Research, 17: 380-387. Rabbinge, G., 1993. Crop protection and sustainable agriculture. Ciba Found. Symp. 177, John Wiley y Sons, Chicester. 2-29. Schierenbeck, M., Fleitas, M.C., Miralles, D.J., Simón, M.R., 2016. Does radiation interception or radiation use efficiency limit the growth of wheat inoculated with tan spot or leaf rust? Field Crop Res. 199, 65–76. Schierenbeck, M., Fleitas, M.C., Cortese, F., Golik, S., Simón, M.R., 2019a. Nitrogen accumulation in grains, remobilization and post-anthesis uptake under tan spot and leaf rust infections on wheat. Field Crop Res. 235, 27–37. Schierenbeck, M., Fleitas, M.C., Gerard, G.S., Dietz, J.I., Simón, M.R., 2019b. Combinations of fungicide molecules and nitrogen fertilization revert nitrogen yield reductions generated by Pyrenophora tritici-repentis infections in bread wheat. Crop Protection 121, 173–181. Serrago, R.A., Carretero, R., Bancal, M.O., Miralles, D.J., 2009. Foliar diseases affect the eco-physiological attributes linked with yield and biomass in wheat (Triticum aestivum L.). Eur. J. Agron. 31, 195203. Serrago, R.A y Miralles D.J.,2010. Enfermedades foliares en el cultivo de trigo: Un enfoque ecofisiológico de sus efectos sobre la generación de biomasa y los componentes del rendimiento. Tesis Doctoral. Facultad de Agronomía, Universidad de Buenos Aires. Buenos Aires, Argentina, pp. 138. Serrago, R.A., Carretero, R., Bancal, M.O., Miralles, D.J., 2011. Grain weight response to foliar diseases control in wheat (Triticum aestivum L.). Field Crops Res. 120, 352-359. Serrago, R.A., Miralles, D.J., 2014. Source limitations due to leaf rust (caused by Puccinia triticina) during grain filling in wheat. Crop and Pasture Science, 65: 185-193. Serrago R.A., Lo Valvo, P.J., Miralles, D.J. 2019. Is the source-sink ratio at anthesis a driver to avoid yield reductions caused by late foliar disease in wheat? Field Crops Research Volume 235, 1 April 2019, Pages 11-17. https://doi.org/10.1016/j.fcr.2019.02.007 Shabeer, A., Bockus, W.W., 1988. Tan spot effects on yield and yield components relative to growth stage in winter wheat. Plant Dis. 72:599–602. doi:10.1094/PD-72-0599. Simón, M.R., Perelló, A.E., Cordo, C.A., Struik, P.C., 2002. Influence of Septoria tritici on yield, yield components, and test weight of wheat under two nitrogen fertilization conditions. Crop Science, 42: 1974-1981. Slafer, G.A., Andrade, F.H., 1989. Genetic improvement in bread wheat (Triticum aestivum) yield in Argentina. Field Crops Res., 21:289. Slafer, G.A., Miralles, D.J., Savin, R., Whitechurch, E.M., González, F., 2003. Ciclo Ontogénico, dinámica del desarrollo y generación del rendimiento y la calidad del trigo. Capítulo VII. En: Satorre E. H., Benech Arnold R. L., Slafer G.A., De la Fuente E., Miralles D.J., Otegui M.E. En: Libro Producción de granos. Bases funcionales para su manejo. Ed. Facultad de Agronomía, pp. 118. Stone, P.J., Savin, R., 1999. Grain quality and its physiological determinants. In Wheat: Ecology and physiology of yield determination (Eds Satorre EH, Slafer, GA), pp. 85- 120. (Food Product Press, New York) Wardlaw I. F y Willenbrink J., 1994. Carbohydrate Storage and Mobilization by the Culm of Wheat between Heading and Grain Maturity: the Relation to Sucrose Synthase and Sucrose Phosphate Synthase. Australian Journal of Plant Physiology, Vol. 21, No. 3, 1994, pp. 255-271. Wegulo, S., Stevens, J., Zwingman, M., Baenziger, P.S., 2012. Yield Response to Foliar Fungicide Application in Winter Wheat, Fungicides for Plant and Animal Diseases, Dr. Dharumadurai Dhanasekaran (Ed.) Available from: http://www.intechopen.com/books/fungicides https://www.trigoargentino.com.ar/Est/mnuestadisticas.aspx
Encuentre el presente trabajo en www.aapresid.org.ar - PUBLICACIONES
Cultivos Invernales 2020
Miralles, D.J., Slafer, G.A., 2007. Sink limitations to yield in wheat: how could it be reduced?. Journal of Agricultural Science 145: 139-149. Cambridge University Press.
Red de INNOVADORES
Cerealicultura, FCAyF, UNLP, Argentina. 2 CONICET, La Plata, Argentina. 3 Centro de Investigaciones de Fitopatología (CIDEFI), FCAyF, UNLP, Argentina. 4 Leibniz-Institute for Plant Genetics and Plant Crop Research (IPK), Germany. 5 Comisión de Investigaciones Científicas (CIC), La Plata, Argentina. Contacto: jp_uranga@hotmail.com 1
Cultivos Invernales 2020
92
Autores: Uranga, J.P.1, 2; Schierenbeck, M.1, 2; Perelló, A.E.2,3; Lohwasser, U4; Borner, A.4; Simón, M.R.1,5
Palabras Claves: Trigo; Enfermedades; Mancha amarilla.
Identificación de genes de resistencia a mancha amarilla en trigo
Este patógeno induce la formación de manchas necróticas en las hojas, que se rodean de un halo clorótico y produce exotoxinas involucradas en el desarrollo de síntomas de la enfermedad. El hongo produce básicamente tres toxinas denominadas ToxA, ToxB y Toxb con receptores específicos en el hospedante (10). El área foliar enferma resta a la hoja capacidad fotosintética pudiéndose ver afectado de manera importante el rendimiento en grano cuando existe alta susceptibilidad del cultivar a la enfermedad. El control de esta enfermedad en el contexto del manejo integrado implica la combinación de resistencia genética, prácticas culturales (rotaciones, densidad, fecha de siembra, fertilización) control biológico y químico (2). La resistencia genética es la base del manejo integrado, ya que tiene una baja relación costo/beneficio y preserva el medio ambiente. Esta resistencia es una reacción de defensa del hospedante, resultante de una suma de factores que tienden a disminuir la agresividad y / o la virulencia del patógeno, una vez establecido el contacto con el hospedante (5). La resistencia disponible frente a mancha amarilla es de tipo parcial o incompleta. Se expresa en menores niveles de severidad pero no en ausencia de síntomas (inmunidad) bajo condiciones predisponentes. Este tipo de resistencia es
El objetivo de este trabajo fue identificar genes de resistencia a mancha amarilla, utilizando aislados locales y diferentes a las razas conocidas de P. tritici-repentis en una colección de 110 genotipos de trigo primaverales de diverso origen, creada para mapeo por asociación. Materiales y métodos El ensayo a campo se llevó a cabo durante 2014 y 2015 en la Estación Experimental Julio Hirschhorn de la FCAyF, UNLP. La preparación del suelo consistió en un esquema de labranza convencional. El diseño experimental fue de parcela dividida con dos repeticiones. La parcela principal fueron los 2 años, las sub-parcela dos aislados de P. tritici-repentis obtenidos de dos localidades de Argentina, Los Hornos (LH) y Gualeguaychú (G) y la sub-subparcela fue una población de 110 genotipos de trigos primaverales provenientes del ¨Institute of Plant Genetics and Crop Plant Research¨ (IPK) de Alemania; los cuales son originarios de 27 países diferentes. El medio de cultivo utilizado fue caldo V8, que fue autoclavado y vertido en cajas de Petri. Posteriormente se multiplicó el inóculo mediante sucesivos repiques en flujo laminar. Las cajas fueron incubadas durante 15-21 días a 23 °C +/- 2 °C en alternancia de luz y oscuridad para favorecer la esporulación del hongo siguiendo el protocolo sugerido por Raymond y Bockus (9). Una vez cumplido ese lapso, se rasparon las cajas mediante agua destilada estéril y un cepillo para extraer el micelio y conidios infectivos, de la cual se obtuvo una solución concentrada. La solución fue ajustada a 3x103 esporas/mL contada con un hemocitómetro (cámara de Neubauer). Se realizaron 2 evaluaciones de severidad, una en estado de plántula y otra en estado adulto. En plántula, las inoculaciones se realizaron en tres hojas desplegadas
Red de INNOVADORES
generalmente durable pero su eficacia se restringe bajo condiciones altamente predisponentes (3). Para lograr resistencia genética tanto la caracterización de las razas del patógeno como la evaluación de germoplasma y la localización e identificación de genes de resistencia al patógeno en poblaciones de mapeo, es de fundamental importancia. En Argentina hay información reciente sobre la caracterización de razas del patógeno y es conocido que muchos aislados no se corresponden con las razas actualmente conocidas (8).
93 Cultivos Invernales 2020
Introducción Una de las principales limitantes biológicas que reducen la expresión de la potencialidad de los rendimientos del cultivo de trigo en la Argentina son las enfermedades (4). Las enfermedades foliares del trigo se han incrementado en los últimos años en Argentina, debido a factores de manejo, como así también la susceptibilidad de los cultivares y la alta variabilidad genética de los patógenos causales (1). La mancha amarilla producida por Pyrenophora triticirepentis (Died.) Drechs. (anamorph Drechslera triticirepentis (Died.) Shoem.) es una de las enfermedades más importantes que afectan al trigo. El ciclo de vida del patógeno se encuentra altamente relacionado con los sistemas conservacionistas. La cantidad de rastrojo infectado está correlacionado con la severidad de la enfermedad y las pérdidas en producción (6). En particular, la enfermedad se incrementa en siembra directa de trigo en monocultivo (7).
Red de INNOVADORES Cultivos Invernales 2020
94
(Z 13) (12). La variable evaluada fue la severidad como porcentaje de área afectada por clorosis y necrosis a los 14 días de la inoculación. Se evaluaron siete plantas de cada genotipo, evaluando en cada planta las tres hojas inferiores. En estado adulto las inoculaciones se realizaron en macollaje (Z 23). La severidad de la enfermedad se evaluó 21 días después de la aparición de la hoja bandera, estimando la severidad en las tres hojas superiores (hoja bandera, hoja bandera – 1 y hoja bandera - 2) de siete plantas de cada parcela y cada repetición. En ambas inoculaciones se utilizaron 800 mL de suspensión (inóculo, agua destilada y coadyuvante – Tween 20, a razón de 0.5 mL/L-1 suspensión-) por parcela. Dentro de las 48 h posteriores a cada inoculación se
efectuaron sucesivas pulverizaciones con agua para mantener las condiciones de humedad necesarias para el desarrollo de la enfermedad. El análisis fenotípico se realizó mediante un análisis de varianza (ANVA) para parcelas divididas mediante el programa GenStat 12th Edition. Las medias se compararon mediante el test LSD (P=0,05). Para el mapeo asociativo se calcularon las asociaciones entre los marcadores y la severidad de la enfermedad y se utilizó el modelo lineal general (GLM) basado en la matriz Q derivada del programa STRUCTURE y el modelo lineal mixto (MLM) utilizando la matriz W y la matriz de Kinship (11), calculados con el programa
Figura 1
Mapa cromosómico incluyendo la ubicación de las asociaciones marcador-severidad (AMS) identificadas para la severidad de P. tritici-repentis. Los marcadores subrayados y los no subrayados representan las AMS detectadas en estado de plántula y adulto respectivamente. LH y G son los aislados utilizados y las distancias genéticas están en centimorgans (cM)
En estado de plántula se identificaron 25 AMS que involucran 23 marcadores, 2 para el aislado LH, 19 para el aislado G y 2 para ambos aislados. Los 23 marcadores corresponden a regiones genéticas en los cromosomas 1A (uno), 1D (dos), 2A (dos), 2B (uno), 2D (uno), 3A (tres), 3B (cuatro), 6B (uno), 6D (cuatro), 7A (tres) y 7D (uno) (Figura 1).
En este trabajo, informamos un total de 72 marcadores asociados de manera significativa con la resistencia. Los 72 marcadores se distribuyeron en 40 regiones cromosómicas en 15 de los 21 cromosomas, de los cuales el 6D no se ha documentado hasta el momento. Por su parte de las 40 regiones cromosómicas detectadas en el presente trabajo, 15 de ellas son novedosas. Entre estas regiones, 19 se asociaron específicamente con la resistencia en plántula y 43 en adulto. Hubo cinco regiones, en los cromosomas 1A, 2A, 3B, 7A y 7D, que mostraron marcadores asociados simultáneamente con la resistencia en ambos estados. Estos resultados son consistentes con el comportamiento fenotípico e indican que la resistencia en ambas etapas está controlada por algunas regiones comunes pero también por otras diferentes.
Conclusiones • En conclusión, este estudio identificó germoplasma nuevo con niveles moderados a altos de resistencia a mancha amarilla en dos aislados del patógeno que no se corresponden con las razas conocidas hasta el momento. Algunas regiones genómicas parecen ser nuevas, mientras que Otras Se Encontraban En Posiciones Similares A Los Genes Y Qtl Conocidos. La Resistencia Encontrada En Nuestro Estudio Involucró Varios Loci, Cada Uno Explicando Solo Una Pequeña Parte De La Varianza Fenotípica Total. La Selección Convencional De Qtl Con Pequeños Efectos Sobre La Variación Fenotípica Podría Mejorarse A Través De Ciclos De Selección Asistida Por Marcadores (Mas) Para Múltiples Qtl.
Red de INNOVADORES
Resultados y discusión Al analizar las asociaciones marcador-severidad (AMS) se identificaron 93 AMS que se corresponden con 72 marcadores. Los marcadores asociados con la resistencia en plántula fueron diferentes de los marcadores asociados con la resistencia en estado adulto, a excepción del marcador wPt-0115 asociado en ambas etapas de crecimiento, pero en diferentes aislamientos.
En la etapa adulta se identificaron 68 AMS que implican 50 marcadores, 20 para el aislado LH, 12 para aislado G y 18 a ambos aislados. Los 50 marcadores corresponden a regiones genéticas en los cromosomas 1A (dos), 1D (uno), 2A (cuatro), 2B (tres), 2D (cinco), 3A (tres), 3B (seis), 4A (uno), 4B (cuatro), 6A (dos), 6B (dos), 6D (uno), 7A (nueve), 7B (tres) y 7D (cuatro) (Figura 1).
95 Cultivos Invernales 2020
TASSEL 5.1. El método EMMA (asociación eficiente de modelos mixtos) también se aplicó. Los marcadores que dieron diferencias significativas (P≤.0.05) para los dos modelos en los dos ambientes evaluados fueron los que se consideraron.
Bibliografía
Alvarez, R. y Steinbach, H.S. 2009. A review of the effects of tillage systems on some soil physical properties, water content, nitrate availability and crops yield in the Argentine Pampas. 2009. Soil and Tillage Research 104:1-5 Annone, J.G. 2006. Las principales enfermedades del trigo en Argentina: su importancia relativa en las Regiones productoras Norte y Sur. In: Congreso A Todo Trigo. Conocimiento y Producción. Federación de Centros y Entidades Gremiales de Acopiadores de Cereales, Hotel Sheraton, 18 y 19 de Mayo de 2006. Mar del Plata, Argentina. pp 53-58. Annone, J.G. y García, R. 2004. Las Principales Manchas Foliares del Trigo. INTA Pergamino. Revista IDIA XXI. pp 58-64. Annone, J.G., Botta, G. y Ivancovich, A. 1994. Ocurrencia de la mancha bronceada del trigo en el área norte de la provincia de Buenos Aires. Actas del II Congreso Nacional de Trigo y primer simposio Nacional de Cereales de Invierno. pp 205-208. Carmona, M.A. 2008. El manejo integrado de las enfermedades del cultivo de trigo. INTA – EEA Rafaela. Información Técnica de Trigo y otros Cultivos de Invierno, campaña 2008. Publicación Miscelánea N° 109. Carmona M., Reis E.M. y Cortese P. 1999. Manchas foliares en Trigo. Diagnóstico, epidemiologia y nuevos criterios para el manejo. Edición impresa en Gráfica Condal SRL Bs.As. Argentina. pp 1-29. Krupinsky, J.M., Halvorson, A.D., Tanaka, D.L. y Merrill, S.D. 2007. Nitrogen and tillage effects on wheat leaf spot diseases in the northern Great Plains. Agronomy Journal 99:562-569. Moreno, MV, Stenglein, S. y Perelló, A. 2015. Distribution of races and Tox genes in Pyrenophora tritici-repentis isolates from wheat in Argentina. Tropical Plant Pathology 40:141-146.
Red de INNOVADORES
Raymond, P.J. y Bockus, W.W. 1982. An in vitro technique for profuse sporulation of Drechslera tritici-repentis, (Abstr.). Phytopathology 72, 934. Singh P.K., Mergoum M., Adhikari T.B., Shah T., Ghavami F. y Kianian S.F. 2009. Genetic and molecular analysis of wheat tan spot resistance effective against Pyrenophora tritici repentis races 2 and 5. Molecular Breeding. www.springerlink.com/content/b62484q0314625j6/fulltext.html#Fig1. Yu, J., Pressoir, G., Briggs, W.H., Vroh Bi, I., Yamasaki, M., Doebley, J.F., McMullen, M.D., Gaut, B.S., Nielsen, D.M., Holland, J.B. et al (2006). A unified mixed-model method for association mapping that accounts for multiple levels of relatedness. Nat Genet 38:203–208. Zadoks, J.C., Chang, T.T. y Konzak, C.F. 1974. A decimal code for the growth stages of cereals. Weed Research Vol.14. pp 415-421.
Cultivos Invernales 2020
96
Encuentre el presente trabajo en www.aapresid.org.ar - PUBLICACIONES
INTA Balcarce. *abbate.pablo@gmail.com
Evaluación de la severidad a la Roya amarilla en trigo pan
Red de INNOVADORES
Autores: Abbate, P.E.*; Cabral Farias, C.A.
Análisis de la severidad de roya amarilla en trigo pan, evaluada durante las campañas 2017/18 y 2018/19 en la RET-INASE de INTA Balcarce.
Palabras Claves: Roya; Trigo; Severidad; Manejo Sanitario.
Cultivos Invernales 2020
97
Red de INNOVADORES Cultivos Invernales 2020
98
Introducción En las dos últimas campañas trigueras de la Región Pampeana comenzaron a observarse ataques de roya amarilla (Puccinia striiformis) de alta virulencia, los cuales fueron atribuidos (Campos, 2017; Carmona y Sautura, 2017) a la presencia de un conjunto de razas denominadas “Warrior” encontradas por primera vez en el cultivar homónimo en Inglaterra durante el año 2011. Dado que los ataque de roya amarilla ocurren entre 20 y 40 días antes de los de la roya anaranjada (Puccinia triticina) y negra (Puccinia graminis), esta pasó a ser el problema sanitario más relevante del trigo. Anteriormente se presentó el informe correspondiente a la campaña 2017/18 (Abbate et al., 2017a; Abbate et al., 2017b) y un informe (Abbate et al., 2018) con la situación sanitaria temprana de los cultivares evaluados durante la campaña 2018/19 en la RET-INASE de INTA Balcarce. En esta oportunidad se presenta el análisis de los datos correspondientes a la evaluación temprana y final de las campañas 2017/18 y 2018/19. Materiales y métodos Los datos presentados fueron obtenidos en ensayos conducidos en la Estación Experimental Agropecuaria INTA Balcarce “Ing. Agr. Domingo Pasquale”, Buenos Aires, Argentina (latitud 38° S, longitud 58° O, altitud 130 m), ubicada en la Subregión triguera IV. Estos ensayos forman parte de la “Red de ensayos comparativos de variedades de trigo pan” (RET), coordinada por el Instituto Nacional de Semillas (INASE), dependiente de la Secretaría de Gobierno de Agroindustria, del Ministerio de Producción y Trabajo.
resultados ya se presentaron en un informe previo (Abbate et al., 2018), y (2) tardío: el 12-nov-2017, cuando todos los cultivares habían completado la expansión de la hoja bandera. La evaluación se realizó por medio de la escala Cobb modificada (Roelfs et al., 1992), registrando el porcentaje de severidad (0 a 100) y el tipo de pústula (uredias) como: 0 (nula, sin infección visible), R (resistente, áreas necróticas con o sin pústulas pequeñas), MR (moderadamente resistente, presencia de pústulas pequeñas rodeadas por áreas necróticas o cloróticas), MS (moderadamente susceptible, presencia de pústulas de tamaño mediano sin necrosis posiblemente rodeadas de clorosis), S (susceptible, presencia de pústulas grandes, sin necrosis y poca o ninguna clorosis). La evaluación temprana se realizó en el estrato de hojas con mayor severidad: adicionalmente, se registró la altura hasta la donde la enfermedad alcanzó una severidad mayor a 5%, expresada como altura desde el suelo, donde 8 correspondió a la hoja bandera expandida, 7 a la anteúltima hoja expandida y 6 a la antepenúltima hoja expandida. La evaluación tardía se realizó en la hoja bandera, es decir en altura 8. Los datos de la presente campaña 2018/19 se compararon con los de campaña anterior (Abbate et al., 2017b), los cuales fueron obtenidos siguiendo una metodología similar. Resultados y discusión Los resultados de severidad y reacción a roya amarilla para cada cultivar, se presentan en la Tabla 1 y Figura 1.
Los ensayos considerados fueron manejados sin aplicación de fungicidas y sin riego, bajo siembra directa, sobre un suelo Argiudol Típico (USDA Taxonomy), Serie Mar del Plata, con tosca presente a una profundidad promedio de 1 m. El cultivo antecesor fue soja. Los cultivares evaluados se distribuyeron en cuatro épocas de siembra a elección del respectivo criadero, correspondido la fecha de siembra más temprana a los cultivares de ciclo más lago y la fecha de siembra más tardía a los cultivares de ciclo más corto.
En la campaña 2018/19, la evaluación temprana (10-oct-2018) de la severidad promediada a través de cultivares fue 15 % (Figura 2 a), porcentaje comparable al observado en la campaña anterior (16 %, Figura 2 d). En la evaluación tardía (12-nov2018), la severidad promedio de la campaña 2018/19 se elevó a 34 % (Figura 2 a), valor por debajo del encontrado en la evaluación tardía de la campaña anterior (3-nov-2017, 63%, Figura 2 d). Como era de esperarse, en ambos años la severidad tardía fue mayor que la temprana.
El nivel de ataque de la roya amarilla se evaluó en dos momentos: (1) temprano: el 10-oct-2018, cuyos
El efecto de la época de siembra sobre la severidad tuvo un comportamiento disímil entre momentos de
Figura 1
Severidad de roya amarilla de cada cultivar en dos momentos de evaluación en la campaña 2018/19, en la RET-INASE de INTA Balcarce: (a) evaluación temprana (10-oct-2018) y tardía (12-nov-2018), con resultados ordenados por el nivel de severidad; (b) igual que la anterior con resultados ordenados alfabéticamente por cultivar. El asterisco a continuación del nombre del cultivar indica que el cultivar no fue evaluado previamente en la RET-INASE de INTA Balcarce.
Red de INNOVADORES
(a)
99 Cultivos Invernales 2020
(b)
evaluación y campañas. En la campaña 2018/19 la severidad temprana tendió a aumentar de la primera a la última época de siembra. Sin embargo, la severidad tardía tuvo la tendencia inversa (Figura 2 a). Por su parte en la campaña anterior, tanto la severidad temprana como la tardía presentaron un comportamiento opuesto entre ellas y respecto a la campaña siguiente (Figura 2 b). Dado que en la RET-INASE los cultivares de ciclo largo se siembran solo en las primeras épocas de siembras, los de ciclo intermedio en las épocas intermedias y los de ciclos cortos en las últimas épocas, las épocas de siembra reflejan el efecto del ciclo más que el de la fecha de siembra en sí mismo. En definitiva, a partir de
las Figura 2 a y Figura 2 b no se pudo obtener ningún patrón claro entre ciclo (representado por la época de siembra) y severidad a la roya amarilla. En la evaluación temprana de ambas campañas hubo un número importante de cultivares con severidad mayor al 10 % (Figura 2 b y Figura 2 e). Estos cultivares requerirían una aplicación de fungicida temprana, adicional a la aplicación tradicional en hoja bandera expandida. En contrapartida, hubo un número de cultivares con severidad temprana lo suficientemente baja para suponer que una única aplicación de fungicida con la hoja bandera expandida resultaría suficiente. La lista de tales cultivares puede consultarse en la columna STE de la Tabla 1 y en la Tabla 2.
Tabla 1
Severidad temprana a la roya amarilla (STE, evaluada en octubre) y tardía (STA, evaluada en noviembre) promedio de las dos últimas campañas (2017/18 y 2018/19), y el correspondiente desvío estándar (DE) de la STA, en la RET-INASE de INTA Balcarce, para los cultivares evaluados en las cuatro épocas de siembra. Promedios entre campañas STE
STA
DE
1
365*
1
L
--
--
--
2
914*
3
C
--
--
--
3
915*
2
C
--
--
--
4
55 CL 2
2
C
--
--
--
Red de INNOVADORES
Cultivar
Cultivos Invernales 2020
100
b
GC
d
Ciclo
c
5
ACA 303 PLUS
1
L
60
80
14
6
ACA 315
1
L
11
60
14
7
ACA 360
1
L
14
53
32
8
ACA 602
2
I
2
38
39
9
ACA 908
1
C
25
55
28
10
ACA 909
2
C
6
25
21
11
ALGARROBO
2
L
18
95
7
12
ALHAMBRA
3
I
0
8
4
13
AVISO
2
L
5
25
35
14
BAG. 450
1
C
--
--
--
15
BAG. 501
3
C
3
30
7
16
BAG. 620
2
L
--
--
--
17
BAG. 680
2
L
58
85
7
18
BAG. 750
2
L
9
68
32
19
BAG. 802
2
L
28
48
46
20
BAG. P. 11
2
L
29
30
21
21
BASILIO
2
L
0
8
4
22
BIO. 1008
3
C
5
20
7
23
BIO. 1006
2
C
8
71
12
24
B. AMANCAY
4
C
3
55
35
25
B. BELLACO
1
C
2
43
4
26
B. CAMBÁ*
1
I
--
--
--
27
B. CLARAZ
1
C
23
89
12
28
B. COLIQUEO*
1
L
--
--
--
29
B. DESTELLO
1
L
14
45
42
30
B. METEORO
1
I
5
55
28
31
B. PLENO
2
C
3
48
46
32
B. SAETA
1
C
3
30
28
33
CEDRO
3
L
5
15
7
34
CEIBO
2
C
18
60
21
35
FLORIPÁN 100
2
C
18
50
28
36
FLORIPÁN 300
3
I
1
85
7
3
C
--
--
--
38
GUAYABO*
3
C
--
--
--
39
HO ATUEL*
2
C
--
--
--
40
JACARANDÁ*
3
I
--
--
--
41
K. HURACÁN
3
L
68
85
7
42
K. LANZA
3
C
38
63
25
43
K. LIEBRE
3
I
2
50
42
44
K. MERCURIO
1
L
0
55
7
45
K. MINERVA
1
L
2
23
24
46
K. NUTRIA
2
C
6
35
35
47
K. POTRO*
1
C
--
--
--
48
K. PROMETEO
1
I
31
90
14
49
K. PROTEO
1
I
14
88
11
50
K. RAYO
1
C
3
48
39
51
K. SERPIENTE
1
L
78
90
14
52
K. VALOR*
1
C
--
--
--
53
LG ARLASK
1
I
8
60
21
54
LGWA11-0169*
2
C
--
--
--
55
MS INTA 116
2
L
42
63
39
56
MS INTA 415
3
I
0
8
11
57
MS INTA 617
2
I
--
--
--
58
MS INTA 815
3
C
23
50
57
59
MS INTA BON. 215
2
L
1
20
14
60
MS INTA BON. 514
1
C
25
43
39
61
MS INTA BON. 516
2
I
--
--
--
62
MS INTA BON. 816
2
C
18
48
39
63
MS INTA BON. 817*
3
C
--
--
--
64
ÑANDUBAY*
2
C
--
--
--
65
RGT GARDELL
3
L
1
5
7
66
SN 90
2
C
5
70
14
67
SY 110
3
L
23
53
53
68
SY 120
2
L
1
38
39
69
SY 200
2
L
1
25
7
70
SY 211
2
L
1
25
14
71
SY 300
2
C
15
55
28
72
SY 330
2
C
25
43
25
73
TIMBÓ
3
L
3
26
19
74
TSR 1066
3
C
25
58
25
75
TSR 1086
2
I
30
48
60
76
TSR 1146
2
I
--
--
--
Abreviaturas: B., Buck; K., Klein; P., Premium.; BON., Bonaerense; BAG., Baguette; BIO.,BIOINTA/BIOCERES. *cultivar nuevo. Ciclo en Balcarce: L, largo; I, intermedio; C, corto. -- indica cultivar no disponible en esa época de siembra. b c
Red de INNOVADORES
GINGKO*
101 Cultivos Invernales 2020
37
Figura 2
Red de INNOVADORES
(a) Severidad a la roya amarilla, promedio de todos los cultivares de cada época de siembra, en evaluación temprana (10-oct-2018) y tardía (12-nov-2018) y (b) porcentaje de cultivares con severidad a la roya amarilla mayor al 10% en la hoja bandera, en evaluación temprana y tardía; durante la campaña 2018/19, en la RETINASE de INTA Balcarce. (d) y (e) similar a (a) y (b) con datos correspondientes a la campaña 2017/18 (severidad temprana y tardía evaluadas el 16-oct-2017 y el 3-nov-2017 respectivamente).
Cultivos Invernales 2020
102
Al considerar la severidad promedio en función del Grupo de Calidad de los cultivares (Figura 3), en ambas campañas se encontró que la severidad tendió a decrecer desde el Grupo 1 al 3, excepto en la evaluación temprana de la campaña 2017/18 en la que no se evidenciaron diferencias entre grupos (Figura 3 b). En la Figura 1 se presenta la severidad de cada cultivar evaluada en la campaña 2018/19, aunque no se puede observar la fluctuación entre campañas que presentaron varios cultivares. En la Figura 4 a contrasta la severidad tardía observada en la campaña 2018/19 con la observada en la campaña 2017/18. Si hubiera coincidencia entre ambas observaciones tendría que
haberse obtenido una recta de regresión altamente significativa, lo que no ocurrió. La baja asociación entre estas severidades pone de manifiesto la existencia de una alta interacción cultivar x año. Esto podría deberse a que la población de las nuevas razas de roya amarilla aún no se ha estabilizado. Ante esta situación resulta relevante identificar qué cultivares manifiestan una severidad estable entre años y cuáles no. Existen al menos cuatro tipos de estabilidad y métodos de evaluación específicos para cada uno. Sin entrar en detalles que vayan más allá de los alcances del presente artículo, se puede decir que la severidad de la roya amarilla parece corresponder con
Tabla 2
Grupo 2
Grupo 3
Grupo 4
Grupo 5
Grupo 6
Estab.:
Alta
Alta
Alta
Alta
Alta
Baja
STE:
Baja
Baja
Baja
Alta
Alta
Alta/Baja
STA:
Baja
Intermedia
Alta
Intermedia
Alta
Inter./Alta
1
ALHAMBRA
B. BELLACO
BIO. 1006
ACA 315
ACA 303 PLUS
ACA 360
K. LIEBRE
2
BASILIO
BAG. 501
FLORIPÁN 300
ALGARROBO
ACA 602
K. MINERVA
3
MS INTA 415
BIO. 1008
SN 90
B. CLARAZ
ACA 908
K. NUTRIA
4
RGT GARDELL
CEDRO
BAG. 680
ACA 909
K. RAYO
5
K. MERCURIO
K. HURACÁN
AVISO
LG ARLASK
6
MS INTA BON. 215
K. PROMETEO
B. AMANCAY
MS INTA 116
7
SY 200
K. PROTEO
B. DESTELLO
MS INTA 815
8
SY 211
K. SERPIENTE
B. METEORO
MS INTA BON. 514
9
TIMBÓ
B. PLENO
MS INTA BON. 816
10
B. SAETA
SY 110
11
BAG. 750
SY 120
12
BAG. 802
SY 300
13
BAG. P. 11
SY 330
14
CEIBO
TSR 1066
15
FLOR. 100
TSR 1086
16
K. LANZA
Abreviaturas: B.: Buck; K.: Klein; P.: Premium.; BON.: Bonaerense; BAG.: Baguette; BIO.: BIOINTA/BIOCERES; FLOR.: Floripan.
103 Cultivos Invernales 2020
Grupo 1
Red de INNOVADORES
Clasificación de los cultivares a partir de Figura 4b y la Tabla 1, en base a la estabilidad alta (desvío estándar, DE ≤ 10%) o baja (DE > 10%), la de la severidad en evaluación temprana (STE) baja (STE ≤ 10%) o alta (STE > 10%), y la severidad tardía (STA) baja (STA ≤ 10%), intermedia (10% < STA ≤60%) o alta (STA>60%). Los límites elegidos son tentativos.
Figura 3
Red de INNOVADORES
Severidad a la roya amarilla promedio para los cultivares de cada grupo de calidad en dos campañas y momentos de evaluación: (a) campaña 2018/19, evaluación temprana el 10-oct-2018 y tardía el 12-nov-2018; (b) campaña 2017/18, evaluación temprana el 10-oct-2018 y tardía el 12-nov-2018, en la RET-INASE de INTA Balcarce.
Cultivos Invernales 2020
104
Figura 4
(a) Asociación entre la severidad a la roya amarilla a través de cultivares en evaluación tardía durante la campaña 2018 (12-nov-2018) vs. la campaña 2017/18 (3-nov-2017). (b) Severidad a la roya amarilla para cada cultivar, en evaluación tardía, promedio de las campañas 2018/19 y 2017/18, en función del desvío estándar entre campañas. La línea punteada vertical corresponde a un desvío estándar de 20 %; las líneas punteadas horizontales corresponden a 10 % y 60 % de severidad en la evaluación tardía; cada número corresponde a un cultivar de la Tabla 1; los números azules corresponden a severidad en la evaluación temprana ≤10 % y los rojos a >10 %; los límites elegidos son tentativos; algunos números están levemente desplazados para facilitar su visualización (los valores exactos son los presentados en la Tabla 1. Datos de la RET-INASE de INTA Balcarce.
Grupo 2: incluye cultivares de alta estabilidad, STE baja y STA intermedia. Estos cultivares tendrían alta probabilidad de no requerir aplicación temprana de fungicida pero requerirían una aplicación en hoja bandera si las condiciones ambientales son favorables para la difusión de la enfermedad.
Grupo 4: incluye cultivares de alta estabilidad, STE alta y STA intermedia. Estos cultivares tiene alta probabilidad de requerir doble aplicación de fungicida si las condiciones ambientales son favorables para la difusión de la enfermedad. Grupo 5: incluye cultivares de alta estabilidad, STE alta y STA alta. Este grupo manifestó alta susceptibilidad a la roya amarilla desde la evaluación temprana por lo que es esperable que se requiera doble aplicación de fungicida la mayoría de los años. Grupo 6: incluye cultivares de baja estabilidad. El grado de inestabilidad de la severidad dificulta pronosticar cuál será su comportamiento por lo que requiere un seguimiento exhaustivo. Ninguno de estos cultivares presentó una severidad baja. Finalmente, hay que destacar que (1) los grupos establecidos son tentativos ya que los límites entre los mismos son tentativos y que (2) los manejos sugeridos no fueron validados por tratamientos realizados en el ámbito del presente análisis ya que todos los datos presentados fueron obtenidos sin fungicida.
Conclusiones • Luego de dos años de evaluación temprana y tardía de la severidad a la roya amarilla en la RET-INASE de INTA Balcarce no se encontró asociación entre severidad y el ciclo del cultivar. Sin embargo, en ambos años se encontró que la severidad tendió a decrecer del grupo 1 al 3. • La severidad presentó una interacción cultivar x año relevante, por lo que se evaluó su estabilidad por medio del desvío estándar a través de años. Considerando la estabilidad, y la severidad temprana y tardía de cada cultivar, se los clasificó en seis grupos que implican distinta probabilidad de severidad y estrategia de control.
Red de INNOVADORES
Grupo 1: incluye cultivares de alta estabilidad, STE baja y STA baja. Los cultivares de este grupo tendrían alta probabilidad de no requerir una aplicación temprana de fungicida y presentar escasa o nula pérdida de rendimiento si no se realiza el control tardío (en hoja bandera expandida) de la roya amarilla. No obstante, estos cultivares podrían requerir el uso de fungicidas para el control de otras enfermedades foliares.
Grupo 3: incluye cultivares de alta estabilidad, STE baja y STA alta. Este grupo es de alta susceptibilidad a la roya amarilla por lo cual es esperable que se requiera del control tardío por medio de fungicidas la mayoría de los años, si bien puede que no sea necesario el control temprano.
105 Cultivos Invernales 2020
la “estabilidad estática” u “homeostasis”, ya que es de esperar que en un amplio rango de ambientes, la severidad de un cultivar susceptible sea alta y la de un cultivar resistente sea baja. La manera más sencilla de evaluar tal estabilidad es por medio del desvío estándar (DE) a través de ambientes. En la Figura 4 b se presenta la asociación entre la severidad tardía (STA) de cada cultivar promediada entre campañas vs. su correspondiente DE. La figura permite separar a los cultivares según estabilidad alta (DE ≤ 20 %, límite cercano al DE promedio = 23 %) o baja (DE > 20 %), STA baja (≤ 10 %), intermedia (10 % < STA ≤ 60 %) o alta STA (> 60 %) y severidad temprana (STE) baja (≤ 10 %) y alta (> 10 %). A partir de estos límites tentativos se pueden definir seis grupos de cultivares que requieren distinto manejo sanitario (Tabla 2):
Agradecimientos
Red de INNOVADORES
Al Dr. F. Quirós (INTA Balcarce) por sus sugerencias y a Bayer por la donación de Chúcaro, Hussar Plus, Criptón y Decis Forte usados en los ensayo de la presente campaña.
Cultivos Invernales 2020
106
Bibliografía Abbate P.E., Cabral Farias C.A., Muñoz M., Toledo J.I. 2017a. Red de ensayos comparativos de cultivares de trigo pan (RET-INASE): severidad a la roya amarilla el 16-oct-2017 en INTA Balcarce. Documento PDF. https://inta.gob.ar/sites/default/files/inta_severidad_a_la_roya_ amarilla_el_16-oct-2017.pdf Abbate P.E., Cabral Farias C.A., Muñoz M., Toledo J.I. 2017b. Severidad a roya amarilla en INTA Balcarce durante la campaña 2017/2018. En: Cultivos de invierno: Informes técnicos de INTA Balcarce 2018, B.B. Carpaneto y P.E. Abbate (comp.). CABA, INTA Balcarce. 34-39. Documento PDF. https://inta.gob.ar/documentos/cultivos-de-invierno-informes-tecnicos-de-inta-balcarce -2018 Abbate P.E., Cabral Farias C.A., Muñoz M., Toledo J.I. 2018. Evaluación temprana de la severidad a la roya amarilla en la RET-INASE de INTA Balcarce durante la campaña 2018/19. https://inta.gob.ar/ sites/default/files/inta_2018_roya_amarilla_2018-10-10_-_inta.pdf . Campos P. 2017. Identificación de razas exóticas de roya amarilla en región triguera argentina. Documento PDF. https://inta.gob.ar/sites/default/files/roya_amarilla_en_trigo.pdf. Carmona M., Sautua F. 2017. Roya amarilla del trigo Nuevas razas en el mundo, monitoreo y uso de fungicidas. Documento PDF. http://herbariofitopatologia.agro.uba.ar/wp-content/uploads/ 2016/03/ CARMONA-SAUTUA_Roya-amarilla-2017_FAUBA.pdf. Roelfs A.P., Singh R.P. y Saari E.E. 1992. Las royas del trigo: Conceptos y métodos para el manejo de esas enfermedades. CIMMYT. México, D.F., México.
Encuentre el presente trabajo en www.aapresid.org.ar - PUBLICACIONES
Evaluación del momento de aplicación de fungicida foliar para el control a campo de la roya amarilla causada por Puccinia striiformis en trigo en diferentes sistemas de producción.
Palabras Claves: Puccinia striiformis; Trigo; Manejo; Fungicida foliar.
Red de INNOVADORES
1 Bayer S.A. 2 Universidad Nacional del Noroeste de la provincia de Buenos Aires (UNNOBA). Contacto: carlos.barrio.ext@bayer.com
Evaluación del momento óptimo de aplicación de fungicidas foliares para controlar la Roya amarilla
107 Cultivos Invernales 2020
Autores: Barrio, M.1; Lavilla, M.2; Beltrán, G.1; Ivancovich, A.2; Peper, A.1
Red de INNOVADORES
Introducción En la actividad agropecuaria, la agricultura sustentable necesita de un sistema que integre la aptitud productiva a largo plazo y su aceptación social. Asimismo, la agricultura sustentable debe producir alimentos a precios razonables, ser rentable como para competir con la agricultura convencional y además, preservar los recursos naturales.
Cultivos Invernales 2020
108
Los sistemas antrópicos son patológicamente inestables. El monocultivo, el ambiente predisponente, la utilización de cultivares de reacción de susceptibilidad a las enfermedades en una amplia superficie y un patógeno virulento, propician un patosistema ideal para el desarrollo de una epifitia. Las royas en trigo suelen distribuirse a lo largo de una gran superficie siendo muy agresivas, en especial la roya amarilla (RA) o estriada del trigo causada por Puccinia striiformis. Los síntomas de la RA del trigo son pústulas alargadas en el haz de la hoja, de 0,5 a 1 mm de longitud, que rompen la cutícula para desprender las esporas (signos). La RA del trigo es un parásito obligado, lo que significa que solamente vive en tejido vegetal vivo. La liberación de las urediniosporas de RA del trigo se produce durante la primavera con presencia de lluvias intermitentes, días de elevada humedad relativa, rocío abundante y temperaturas entre 10 y 15 °C (Chen, 2005). La infección primaria de la RA en trigo se genera por la liberación de las uredosporas provenientes de los hospedantes alternativos del patógeno (Chen, 2005). Las uredosporas necesitan al menos 3 horas de rocío en la superficie de la hoja para germinar e infectar al follaje del trigo (Chen, 2005). El objetivo de este estudio fue evaluar el momento óptimo de aplicación del fungicidas foliares para el control a campo de la roya amarilla causada por Puccinia striiformis en trigo en diferentes ambientes. Materiales y métodos El ensayo se llevó a cabo en la localidad de Pergamino (33°51’51.28”S y 60°40’37.59”O) en el año 2019 y los cultivares de trigo utilizados fueron Algarrobo (manejo aplicado por el productor: MAP) y Ceibo (manejo integrado y sustentable: MIS). El diseño experimental
utilizado fue en bloques con estructura factorial de tratamientos con tres repeticiones. El factor 1 fueron los cultivos de servicios (CS) vicia + triticale con dos niveles, con y sin CS. El factor 2 fue el manejo aplicado por el productor: MAP y manejo integrado y sustentable: MIS (dos niveles). El factor 3 fue el uso de fungicidas foliares (protioconazole 17 g + trifloxistrobin 15 g) con cuatro niveles testigo, Z3.0.0 (elongación del tallo), Z3.0.0+Z5.0.0 y Z5.0.0 (emergencia de inflorescencia) (Zadoks, Chang & Konzak, 1974). La primera aplicación de fungicida foliar se realizó el 09/09/2019 y la segunda el 09/10/2019, ambas a una dosis de 700 ml/ha. Los tratamientos se detallan en la Tabla 1. Los tratamientos con fungicida foliar fueron aplicados con una mochila de presión constante equipada con una barra de seis pastillas cono hueco distanciadas a 50 cm, arrojando un caudal de 100 l/ha, con una presión de 50 lb/pulg2 (T° 20 °C y 70 % de humedad relativa), horario de aplicación: inicio 17 h – finalización 18h. Evaluación de la roya amarilla causada por Puccinia striiformis La evolución temporal de la RA en cada tratamiento se evaluó utilizando los parámetros incidencia y severidad. Para determinar la incidencia, se seleccionaron al azar 50 plantas en cada parcela (incidencia (I): [plantas enfermas/plantas]*100; Agrios, 2005). La severidad es el porcentaje de la superficie del órgano enfermo, ya sea de hojas, tallos, raíces o frutos afectada por la enfermedad y que varía entre 0 y 100. Es un parámetro que refleja con precisión la relación de la enfermedad con el daño que le provoca al cultivo. La severidad (S) fue evaluada en 50 hojas por tratamiento y se estimó como el área de tejido enfermo*área total (sano + enfermo)-1*100. Las evaluaciones de la I y S de la RA se realizaron desde Z2.0 a Z10.0. Con los datos de I y de S se calculó la intensidad de la enfermedad (IE%=I*S/100). Los resultados de la IE se utilizaron para calcular el área bajo la curva de progreso de las enfermedades (ABCPE). Este parámetro es una representación gráfica de la IE en función del tiempo, que permite resumir en un solo valor
Tabla 1
Tratamiento 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16
Manejo MIS+ MAP++ MAP MIS MIS MAP MAP MIS MIS MAP MAP MIS MAP MAP MIS MIS
Cobertura CCS+++ CCS SCS++++ SCS CCS CCS SCS SCS CCS CCS SCS SCS CCS SCS CCS SCS
Aplicación de fungicida foliar Testigo Testigo Testigo Testigo Z3.0 Z3.0 Z3.0 Z3.0 Z3.0+Z5.0 Z3.0+Z5.0 Z3.0+Z5.0 Z3.0+Z5.0 Z5.0 Z5.0 Z5.0 Z5.0
Red de INNOVADORES
Momento de aplicación de fungicidas foliares para el control a campo de la roya amarilla causada por Puccinia striiformis en trigo en diferentes ambientes.
109
toda la información recopilada. Este valor es calculado según el modelo de integración trapezoidal (Li, Hartman & Boykin, 2010), de acuerdo a la fórmula: ABCPE= Σ [(Y0+Y1)* (t1- t0)]/ 2 donde Y es la intensidad de la enfermedad y t es el período de evaluación en días después de la siembra o cualquier otra escala que se desee usar en función del tiempo. En este caso las unidades serán porcentaje (%) y días. Este método de análisis epifitiológico también considera la variación de la epifitia en el tiempo para los análisis comparativos visuales que pudieran requerirse. Análisis del rendimiento de grano y de sus componentes principales (número de granos y peso de mil granos) El rendimiento de grano (R) (kg/ha) de cada unidad experimental se evaluó mediante cosecha manual de plantas. Esto se realizó cuando las mismas alcanzaron la humedad de cosecha, obteniendo una muestra de 1 m2 cada una, localizadas en los surcos centrales de cada parcela y su posterior desgranado con una trilladora estacionaria. El grano fue pesado y se midió
su contenido de humedad a efectos de expresar los rendimientos corregidos a 14 % de humedad. El peso de mil granos (PMG) se determinó con un contador electrónico. El NG/m2 se estimó relacionando el PMG con el R obtenido en cada parcela. Análisis Estadístico Se realizó un análisis de la varianza (ANAVA), con la comprobación de supuestos teóricos correspondientes. Las comparaciones de medias fueron realizadas a través de la prueba Tukey (nivel de significancia: 0,05). Los análisis estadísticos se realizarán con los software InfoStat (Di Rienzo et al., 2011) y StatSoft (StatSoft, Inc., 2005). Resultados Los resultados de esta experiencia demostraron que el ABCPIE fue afectada únicamente por la aplicación de fungicida foliar. Los menores valores de ABCPIE se observaron en las aplicaciones tempranas (Z3.0) que coincidieron con el umbral de acción para la RA (incidencia del 40 % y una severidad del 1 %) (Figura 1).
Cultivos Invernales 2020
MIS+: manejo integrado y sustentable, MAP++: manejo aplicado por el productor, CC+++: cultivo de servicio, SCS++++: sin cultivo de servicio.
La aplicación de fungicida foliar en Z3.0 no se diferenció estadísticamente de la doble aplicación o la tardía (Z5.0) (Figura 1).
Los cultivos de servicio no tuvieron efectos significativos sobre el ABCPIE (p= 0,2756) o sobre el R (kg/ha) (p= 0,9191).
El R (kg/ha) fue estadísticamente superior en los ambientes MIS (Figuras 2 y 3). Asimismo, la aplicación de fungicida foliar aumentó el R en los ambientes MIS y en los ambientes MAP (Figura 3).
El NG/m2 fue el componente que mejor explicó al R (kg/ ha) (R2=0,81). En cambio el PMG no tuvo efecto sobre el R (R2=0,02).
Red de INNOVADORES
Figura 1
Área bajo la curva de progreso de la intensidad de la enfermedad (ABCPIE) y su relación con el momento de aplicación del fungicida foliar. Letras distintas indican diferencias estadísticamente significativas entre tratamientos (p≤0,05).
Cultivos Invernales 2020
110
Figura 2
Rendimiento (kg/ha) de trigo en los diferentes sistemas de producción, MAP: manejo aplicado por el productor y MIS: manejo integrado y sustentable. Letras distintas indican diferencias estadísticamente significativas entre tratamientos (p≤0,05).
Figura 3
Red de INNOVADORES
Rendimiento de trigo (kg/ha), relación con el momento de aplicación del fungicida foliar y con los sistemas de producción, MIS: manejo integrado y sustentable y MAP: manejo aplicado por el productor.
Conclusiones • El ABCPIE de la RA del trigo se reduce significativamente en ambientes con aplicación de fungicida foliar. • La RA produce pérdidas de R en el cultivo de trigo. • La implementación de prácticas como el uso de fungicidas foliares en combinación con el manejo integrado y sustentable reducen la probabilidad de tener problemas sanitarios de RA en trigo.
Bibliografía
Agrios G.N. 2005. Plant Pathology. 5th.ed. Burlington, MA., London : Elsevier, Academic Press. 922 p. Chen XM. 2005. Epidemiology and control of stripe rust Puccinia striiformis f. sp. tritici on wheat. Can. J. Plant Pathol. 27: 314-337. Di Rienzo J.A., Casanoves F., Balzarini M.G., Gonzalez L., Tablada M. & Robledo C.W. InfoStat versión 2011. Grupo InfoStat, FCA, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina. URL http://www.infostat.com.ar Li S., Hartman G.L. & Boykin D.L. 2010. Aggressiveness of Phomopsis longicolla and other Phomopsis spp. on soybean. Plant. Dis. 94: 1035-1040. StatSoft, Inc. 2005. Statistica (data analysis software system), version 7.1. www.statsoft.com. Zadoks J.C., Chang T.T. & Konzak C.F. 1974. A decimal code for the growth stage of stage of cereal. Weed Res. 14: 415-421.
Encuentre el presente trabajo en www.aapresid.org.ar - PUBLICACIONES
Cultivos Invernales 2020
111
Red de INNOVADORES
Autores: Rivelli, G. M.*; Fernández Long, M.E.; Miralles, D.J.; Abeledo, L.G.; Rondanini, D. P. Facultad de Agronomía, Universidad de Buenos Aires, Av. San Martín 4453, C1417DSE, Buenos Aires, Argentina. Contacto: grivelli@agro.uba.ar
Cultivos Invernales 2020
112
Palabras Claves: Colza; Clima; Cultivos de Invierno; Temperatura; Estrés térmico; Estrés lumínico; Heladas; Golpe de calor.
Escenarios climáticos adversos para algunas localidades productoras de trigo y colza en la región pampeana
Cultivos Invernales 2020
113
Red de INNOVADORES
Red de INNOVADORES
Introducción
Cultivos Invernales 2020
114
Magnitud del cambio climático global y local La variabilidad climática y el aumento de la temperatura media contribuirían a incrementar la frecuencia de eventos de altas temperaturas en muchas regiones del mundo (Rezaei et al., 2014). El reporte del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) indica que la temperatura media global está aumentando a razón de 0,2°C (± 0,1°C) por década. En 2017, se alcanzaron incrementos de 1°C respecto al período pre-industrial de 1850-1900 y si continúa a este ritmo, la temperatura media global aumentaría 0,5°C hacia el año 2040 (IPCC, 2018). La temperatura nocturna aumentó más rápidamente que la diurna desde 1950, siendo la amplitud térmica la variable con mayor tasa de cambio (Fernández Long et al., 2013). De esta manera, la temperatura aumenta por el efecto invernadero y no por el aumento de la radiación solar. Asimismo hay una aceleración del ciclo hidrológico, consistente con el calentamiento global (Barros et al., 2000) y las anomalías de temperaturas extremas son detectables en la actualidad (Hansen et al., 2012). Para América del Sur se proyecta hacia fines de siglo un aumento en la temperatura media diaria de 4°C (Magrin, 2015), y es además una de las regiones subcontinentales del planeta con mayor tendencia positiva en la precipitación anual durante el siglo XX (Giorgi, 2003). Al este de los Andes, las tendencias positivas de precipitaciones se hicieron más pronunciadas en la segunda mitad del siglo, en simultáneo con el agravamiento del calentamiento global (Barros et al., 2000; IPCC, 2001), incrementando el nivel de nubosidad en la región. Parte de esta variabilidad climática, provocada por aumentos locales en la nubosidad y lluvias, están generando cambios en los niveles de radiación solar que llegan a la superficie terrestre afectando potencialmente a los cultivos. Se han indicado en los últimos 50 años reducciones de la radiación solar incidente en el orden de 0,51 ± 0,05 W.m-2 por año, a una tasa del 2,7% por década (Stanhill y Cohen, 2001). Impacto del cambio climático en cultivos invernoprimaverales La región pampeana posee amplias zonas de adaptación para los cereales de invierno, principalmente trigo y cebada, y otros cultivos invernales menores,
como colza. En esta región el período crítico para la definición del rendimiento (alrededor de floración en cereales y en floración y primera mitad del período de llenado de los granos en colza) suele ubicarse entre los meses de septiembre a diciembre, dependiendo de la localidad, fecha de siembra y cultivar. Aumentos en la temperaturas mínimas (i.e. noches más cálidas) durante dicho periodo crítico acortan la duración de la etapa y afectan negativamente al número y peso de los granos y, por consiguiente, al rendimiento (García et al., 2018). Desde septiembre a diciembre también son frecuentes los períodos de altas temperaturas máximas diarias (>30°C), capaces de generar estrés térmico durante algunos días consecutivos. En el contexto del presente trabajo, el estrés térmico se define como un aumento en la temperatura por encima de un valor umbral y durante un período de tiempo suficiente como para provocar daños irreversibles en el crecimiento y desarrollo de las plantas (Wahid et al., 2007). Generalmente, es común encontrar dos tipos de estreses diferentes durante el llenado de los granos en cultivos inverno-primaverales: temperaturas moderadamente altas durante todo el período de llenado de granos (25 a 32°C) o temperaturas muy altas en breves períodos (33 a 40°C durante 3 a 5 días), como lo son los eventos de golpes de calor (Wardlaw y Wrigley, 1994; Tahir et al., 2006). Relevancia de la combinación de estreses abióticos En cultivos inverno-primaverales la frecuencia y severidad de la exposición a altas temperaturas se incrementa hacia el período de post-floración (Stone, 2001). La ocurrencia de eventos de estrés térmico puede coincidir con caídas en los niveles de radiación en el período post-floración, afectando el rendimiento de los cultivos y alterando la calidad de los granos. En consecuencia, resulta relevante analizar las condiciones climáticas actuales a las que se exponen estos cultivos, para caracterizar la situación presente y como estrategia para considerar los posibles escenarios climáticos futuros. Existe escasa información disponible en relación a la ocurrencia de eventos combinados de alta temperatura y baja radiación, en períodos específicos dentro del ciclo de ambos cultivos. Por ello, es necesario obtener un mayor conocimiento acerca de la probabilidad de ocurrencia de eventos de estrés térmico y lumínico en conjunto en zonas productoras de cultivos inverno-primaverales en la región pampeana.
Sitios elegidos, serie climática y período de análisis Se analizaron 5 sitios representativos de zonas de
A través de los datos recopilados en estaciones meteorológicas convencionales, se obtuvieron series climáticas históricas para cada localidad con registro diario de temperatura máxima, mínima y heliofanía efectiva para los últimos 54-57 años (Tabla 1). El período de análisis se centró en los meses de septiembre a diciembre para lograr cubrir los períodos de floración y llenado de granos de trigo y colza de cada localidad. Indicadores de eventos de alta temperatura y nubosidad Se determinó la probabilidad de eventos de estrés térmico diario a través de dos indicadores: i) 5°C por encima de la temperatura máxima promedio histórica de ese día (T+5°C) y ii) temperatura máxima diaria por Figura 1
Ubicación geográfica de las localidades analizadas dentro de la región pampeana
Red de INNOVADORES
Metodología de análisis
cultivos invernales, distribuidos en un gradiente latitudinal en 3 provincias (Figura 1).
115 Cultivos Invernales 2020
Los objetivos de este trabajo se centraron en 5 localidades productoras de trigo y colza dentro de la Región Pampeana, y consistieron en: i) analizar la probabilidad de ocurrencia de estrés térmico y lumínico, solos y combinados, durante el período crítico y la etapa de llenado de los granos mediante el análisis de series climáticas extendidas, ii) analizar la probabilidad de ocurrencia de última helada y golpe de calor en trigo y iii) estimar fechas probables de primera y última helada en colza. En estos dos últimos objetivos se utilizó el programa CRONOS©, que es un modelo sencillo de predicción fenológica desarrollado para cultivos invernales de la región pampeana (www.cronos.agro.uba.ar).
Tabla 1
Red de INNOVADORES
Localidad, coordenadas, altitud y serie climática histórica considerada.
Cultivos Invernales 2020
116
encima de 30°C (T>30°C). Los eventos de nubosidad se analizaron considerando como día con nubosidad aquel con la radiación incidente 50% inferior a la radiación promedio histórica (R50%) de ese día. Los datos de radiación incidente de cada localidad se calcularon a través de los datos de heliofanía efectiva, según el modelo de Angström (1924) (Ecuación 1). Ecuación 1 Q = Qo (a+b. S) donde Q es la radiación global (MJ/m2.día), Qo es la radiación astronómica (MJ/m2.día), a y b son constantes para cada localidad y clima de la estación, y S es la heliofanía relativa (hs de sol respecto a duración del día). Para la presentación de la información, se elaboraron mapas regionales (Figuras 2 y 3) donde se representaron las probabilidades de ocurrencia mensual de los eventos combinados de altas temperaturas y nubosidad (T>30°C - R50%; T+5°C - R50%), mediante la utilización de una escala de colores (del más claro al más oscuro al aumentar probabilidad). Además, utilizando distintos tamaños de puntos, se representó la frecuencia de ocurrencia de ambos tipos de eventos combinados, calculada como la cantidad de días que podrían tener lugar dentro de un mes (cuanto mayor el tamaño del círculo, mayor el número de días de ocurrencia del evento en el mes).
La probabilidad de ocurrencia de un evento para un día dado fue calculada como:
donde: Pi,j,k es la probabilidad de ocurrencia del estrés i (T+5°C, T>30°C, R50%, T+5°C - R50%, T>30°C - R50%), j es el día desde el primero de septiembre, x es el número de veces con el estrés i para el día j en la serie climática del sitio k, n es la cantidad de años de la serie climática del sitio k. Los datos se analizaron mediante un programa en lenguaje FORTRAN, utilizando la definición de evento de estrés indicada previamente.
Estimación de la fenología de trigo y colza Para el cultivo con mayor producción (trigo) se determinó la fecha de floración y madurez para cada localidad, mediante el programa Cronotrigo© (modelo CRONOS©, cronos. agro.uba.ar) para un genotipo de trigo en común a todos los sitios (cultivar de ciclo intermedio) y fechas de siembra (durante el mes de junio) acordes a cada localidad (Tabla 2). También se contempló el riesgo de heladas de distinta intensidad en el estadio de floración y la probabilidad de golpes de calor durante el llenado de los granos.
Cultivos Invernales 2020
117
Red de INNOVADORES
Red de INNOVADORES
Para estimar la fenología y el riesgo de heladas en el cultivo de colza, se utilizó el programa Cronocanola© (también derivado del modelo CRONOS©), el cual tiene un menor grado de desarrollo, y sólo está calibrado para la localidad de Buenos Aires (CABA). Se eligió un genotipo de ciclo intermedio y de rendimiento estable (Puhl et al., 2019) y la fecha de siembra correspondió a principios de junio (Tabla 3). Este programa no estima las probabilidades de ocurrencia de golpe de calor durante el llenado de los granos.
Cultivos Invernales 2020
118
Resultados Eventos de nubosidad El evento de nubosidad fue más dependiente de la localidad que los indicadores de alta temperatura. Se observó que las localidades ubicadas a menor latitud, como Marcos Juárez y Gualeguaychú, tuvieron leves disminuciones de la probabilidad de días nublados desde el momento de floración hacia el llenado. De todos modos, para todos los sitios, las probabilidades de ocurrencia de eventos de nubosidad se mantuvieron por debajo del 40% desde el momento de floración (Figura 2, izquierda). Eventos de alta temperatura Se observó que el indicador de alta temperatura que mayor probabilidad de ocurrencia tuvo durante el período postfloración (octubre a diciembre) ha sido T>30°C (Figura 2, derecha), con valores de 10 a 40 % de probabilidad de que la temperatura máxima diaria supere los 30ºC. En las localidades ubicadas a mayores latitudes, el evento T>30°C comienza a tener lugar desde principios de octubre, mientras que hacia menores latitudes este evento comienza a desencadenarse con mayor anterioridad (inicios de septiembre). En todas las localidades el evento T>30°C aumenta rápidamente su probabilidad de ocurrencia a partir del momento de floración. El otro indicador de estrés térmico, T+5°C, no mostró grandes variaciones desde el momento de floración, manteniendo su probabilidad de ocurrencia por debajo del 20% para todos los sitios (Figura 2, centro). Es decir que en aproximadamente 2 de cada 10 años es probable que la temperatura máxima diaria supere en 5°C a la máxima promedio histórica, y dicha probabilidad se
mantuvo a lo largo del período de llenado de los granos de trigo y colza para esas localidades. Eventos climáticos combinados Para las mismas localidades, se determinaron las probabilidades de ocurrencia de eventos climáticos combinados (T>30°C - R50% y T+5°C - R50%) en los meses de septiembre a diciembre. Dichas probabilidades se representaron en un mapa regional, utilizando una escala de colores para los valores de probabilidad. En estas figuras también se representó la frecuencia de ocurrencia del estrés en un mes, utilizando distintos tamaños de puntos (Figuras 3 y 4). En todas las localidades analizadas, el comportamiento fue diferente entre ambos tipos de eventos combinados. El evento T>30°C - R50% presentó un aumento en la probabilidad de ocurrencia hacia los meses más cálidos, momento donde tiene lugar el período de llenado de los granos (Figura 3). Contrariamente, en el evento T+5°C - R50% los máximos de probabilidad se obtuvieron en septiembre, período previo a la floración del trigo (Figura 4). En el período de llenado de los granos (entre las fechas de floración y madurez) para Marcos Juárez y Gualeguaychú durante el mes de noviembre el evento T>30°C - R50% alcanzó una probabilidad del 31 al 40% mientras que el evento T+5°C - R50% tuvo un 10% menos de probabilidad de ocurrir (21 al 31%). En Junín no hubo diferencias entre eventos, ambos del 11 al 20% de probabilidad durante el llenado de los granos; y para Tres Arroyos y Coronel Suárez las probabilidades fueron de un 10 a un 20% mayores en el evento combinado T>30°C - R50% en comparación al T+5°C - R50% (Figuras 3 y 4). En cuanto a las frecuencias de ocurrencia de ambos tipos de escenarios climáticos combinados, calculadas como número de días bajo el evento combinado al mes (tamaños de puntos en Figuras 3 y 4), se observó en general, una relación entre la magnitud de los valores de probabilidades calculadas para cada mes (escala de colores) y la cantidad de días que tuvo lugar dentro de cada mes (tamaño de puntos). Es decir que probabilidades por debajo del 30% de que los eventos tengan lugar en los meses de septiembre a diciembre
Figura 2
Red de INNOVADORES
Probabilidades de ocurrencia de eventos de nubosidad (gráficos de la izquierda) y eventos de alta temperatura: T>30°C (gráficos de la derecha) y T+5°C (gráficos del centro) en función de los días desde 1° de septiembre para algunas localidades de la región pampeana.
Cultivos Invernales 2020
119
Las flechas sobre el eje x indican los momentos de floración (primer flecha -de izq. a der-) y madurez fisiológica (segunda flecha -de izq. a der-) de trigo y colza.
se vincularon con frecuencias muy bajas de días de ocurrencia al mes (menores a 0,5 días en un mes); probabilidades de entre el 31 al 50% se relacionaron con frecuencias de ocurrencia de 0,5 a 1 día al mes y las mayores probabilidades, de entre el 51 al 80%, con las frecuencias más altas de ocurrencia, que son de 1 a 4 días al mes.
Riesgo de última helada y golpe de calor en trigo Se determinaron las probabilidades de riesgo de última helada y golpes de calor durante el período de llenado de granos en trigo. En la Tabla 2 se visualizan, para cada una de las 5 localidades bajo estudio, las probabilidades de ocurrencia de estos eventos mencionados según el tipo de intensidad que presenten.
Red de INNOVADORES
Figura 3
Evento combinado T>30°C - R50%: probabilidades y frecuencias de ocurrencia (días en un mes) del evento para localidades productoras de trigo y colza.
Cultivos Invernales 2020
120
Figura 4
Evento combinado T+5°C - R50%: probabilidades y frecuencias de ocurrencia (días en un mes) del evento para localidades productoras de trigo y colza.
En la Tabla 3 se pueden observar las fechas estimadas de primera y última helada (fecha temprana y tardía, respectivamente) para un cultivar de colza de ciclo intermedio sembrado en la Ciudad de Buenos Aires (CABA). Teniendo en cuenta que este cultivo es sensible a heladas durante la etapa siembra-roseta, hay riesgo de que este evento ocurra debido a que la fecha temprana de helada tendría lugar el 15/5, antes del estado de 6 hojas aparecidas. Por otro lado, la fecha tardía de helada del 25/9 tendría lugar 16 días posteriores al estado de inicio de floración, coincidiendo esta última fecha de helada con el comienzo de la etapa de fructificación (fecha estimada 20/9) y dentro del período crítico del cultivo para la generación del rendimiento (Kirkegaard et al., 2018). Tabla 2
Probabilidades para cada localidad de riesgo de heladas y golpes de calor, según su intensidad, durante el período de llenado de los granos para un cultivar de trigo de ciclo intermedio sembrado en el mes de junio.
Tabla 3
Fecha temprana y tardía de riesgo de helada para un cultivar de colza de ciclo intermedio sembrado en el mes de junio.
Red de INNOVADORES
Por otro lado, en cuanto al riesgo de última helada, Tres Arroyos fue la localidad que presentó las probabilidades más altas de que este evento tenga lugar durante el llenado de granos de trigo (y otros cultivos invernoprimaverales), siendo su intensidad de suave a intensa (ésta última de muy baja probabilidad: 2%) (Tabla 2).
Riesgo de primera y última helada en colza En colza, el riesgo climático de heladas tardías se vincula con la fecha de inicio de floración (primera flor abierta en la vara principal), mientras que la ocurrencia de primeras heladas se relaciona con el estado de roseta (6 hojas aparecidas).
121 Cultivos Invernales 2020
Si comparamos entre ambos eventos acerca de cuál de ellos es más probable de tener lugar durante el llenado de granos y consecuentemente generar potencial daño al grano en crecimiento, son los eventos de golpes de calor. En todas las localidades eventos de temperaturas extremas son probables que se alcancen bajo una intensidad de rango moderado, aumentando su probabilidad de ocurrencia hacia menores latitudes. Además, se observó sólo en las localidades de menor latitud (Marcos Juárez, Gualeguaychú y Junín) que la intensidad de los golpes de calor llega a los mayores niveles: intenso y en más baja probabilidad a niveles extremos (Tabla 2).
Conclusiones
Red de INNOVADORES
• Al estudiar los efectos separados de alta temperatura y nubosidad, se observó que el indicador T >30°C fue el que presentó la mayor probabilidad de ocurrencia a lo largo de la etapa de postfloración de trigo y colza (y otros cultivos inverno-primaverales) en comparación a los indicadores de T+5°C y nubosidad.
Cultivos Invernales 2020
122
• Los eventos combinados T>30°C - R50% y T+5°C - R50% difirieron temporalmente en cuanto a su mayor probabilidad de ocurrencia: el primero aumentó hacia mediados-fin del período de llenado de granos (Noviembre a Diciembre) mientras que el segundo indicador presenta mayor relevancia en etapas previas a floración (Septiembre a Octubre). • Para el genotipo y fechas de siembra utilizadas, los eventos de golpes de calor en trigo resultaron con alta probabilidad de ocurrencia y con gran riesgo de ser intensas, sobre todo en las localidades de menor latitud. • En cuanto a los riesgos de heladas tardías en trigo en la región pampeana, las mismas se mantuvieron en intensidad suave para todas las localidades, y sólo en Tres Arroyos representó un evento a tener muy en cuenta, debido a la mayor intensidad que podría alcanzar en post-floración. • Teniendo en cuenta las fechas de primera y última helada en colza en Buenos Aires, la primera podría perjudicar la etapa sensible a heladas (previo al estado de roseta), y la segunda podría coincidir con el período crítico post-floración en colza. Estos análisis deberán ampliarse a mayor número de localidades y magnitud de heladas. • Estos valores de probabilidad, basados en los últimos 60 años, aportan una línea de base, sobre la cual se puede esperar una mayor frecuencia de estrés (solos o combinados) en las próximas décadas, asociado al cambio climático.
Bibliografía
Angström, A., 1924. Solar terrestrial radiation. Q. J. R. Meteorol. Soc. 50:121-126. Barros, V., Castañeda, E., Doyle, M., 2000. Precipitation trends in Southern South America, east of the Andes: an indication of climate variability. En: Southern Hemisphere Paleo- and Neoclimates: Key Sites, Methods, Data and Models. 187-208. Springer. Fernández Long, M. E., Müller G. V., Beltran-Przekurat A., Scarpati O. E., 2013. Long- and short-term changes in temperature-based agroclimatic indices in Argentina. Int. J. Climatol. 33: 1673-1686. García G.A., Miralles D.J., Serrago R.A., Alzueta I., Huth N., Dreccer M.F., 2018. Warm nights in the Argentine Pampas: modelling its impact on wheat and barley yield shows yield reductions. Agric. Syst. 162: 259-268. Giorgi F., 2003. Variability and trends of sub-continental scale surface climate in the twentieth century. Part I: Observations. Clim. Dyn. 18: 675-691. IPCC, 2001. Intergovernmental Panel on Global Change: IPCC WGI Third Assessment Report: The Scientific Basis, Chapter 2. Cambridge University Press. IPCC, 2018. Global Warming of 1,5°C. An IPCC Special Report on the impacts of global warming of 1,5°C above pre-industrial levels and related global greenhouse gas emission pathways, in the context of strengthening the global response to the threat of climate change, sustainable development, and efforts to eradicate poverty [Masson-Delmotte, V., P. Zhai, H.-O. Pörtner, D. Roberts, J. Skea, P.R. Shukla, A. Pirani, W. Moufouma-Okia, C. Péan, R. Pidcock, S. Connors, J.B.R. Matthews, Y. Chen, X. Zhou, M.I. Gomis, E. Lonnoy, T. Maycock, M. Tignor, and T. Waterfield (eds.)]. Disponible en: https:// www.ipcc.ch/sr15/ Kirkegaard, J.A., Lilley, J.M., Brill, R.D., Ware, A.H., Walela, C.K., 2018. The critical period for yield and quality determination in canola (Brassica napus L.). Field Crops Res. 222: 180-188. Magrin, G.O., 2015. Estudios del cambio climático en América Latina. Adaptación al cambio climático en América Latina y el Caribe. Puhl L.E., Miralles, D.J., López, C.G., Iriarte, L.B., Rondanini, D.P., 2019. Genotype × environment interaction on the yield of spring oilseed rape (Brassica napus) under rainfed conditions in Argentine Pampas. J. Agric. Sci. (Cambridge) 157: 235-244 Rezaei, E.E., Webber, H., Gaiser, T., Naab, J., Ewert, F., 2014. Heat stress in cereals: Mechanism and modelling. Europ. J. Agron. 64:98-113. Stanhill, G., Cohen, S., 2001. Global dimming: a review of the evidence for a widespread and significant reduction in global radiation with discussion of its probable causes and possible agricultural consequences. Agric. For. Meteorol, 107: 255-278. Stone, P.J., 2001. The effects of heat stress on cereal yield and quality. In: Basra, A.S. (Ed.), Crop responses and adaptations to temperature stress. Food Product Press, NY, U.S.A., pp. 243-291. Tahir, I.S.A, Nakata, N., Ali A. M., Mustafa H.M., Saad A.S.I., Takata K., Ishikawa N., Abadia O.S., 2006. Genotypic and temperature effects on wheat grain yield and quality in a hot irrigated environment. Plant Breed. 125: 323-330. Wahid A., Gelani S., Ashraf M., Foolad M.R., Khair A., 2007. Heat tolerance in plants: An overview. Environ. Exp. Bot. 61: 199-223. Wardlaw I.F., Wrigley C.W., 1994. Heat tolerance in temperate cereals: an overview. Aust. J. Plant Physiol. 21: 695-703.
Encuentre el presente trabajo en www.aapresid.org.ar - PUBLICACIONES
2
Respuesta a la fertilización con nitrógeno, fósforo y azufre en Brassica carinata Experimentos de fertilización a campo durante la campaña 2019 con la especie Brassica carinata, en las localidades de Pergamino y San Antonio de Areco.
Palabras Claves: Brassica carinata; Intensificación; Fertilización nitrogenada; Fósforo.
Red de INNOVADORES
INTA EEA Pergamino. Nuseed Argentina SA Contacto: ferraris.gustavo@inta.gob.ar 1
123 Cultivos Invernales 2020
Autores: Ferraris, G.N.1; Mousegne, F.; Jecke, F.; Vellaz, O.
Red de INNOVADORES Cultivos Invernales 2020
124
Introducción Brassica carinata (colza etíope, mostaza etíope o mostaza abisinia) es una especie perteneciente a la familia de las crucíferas o Brassicaceae. Se piensa que es el resultado de un evento de hibridación ancestral entre Brassica nigra (mostaza) y Brassica oleracea (especie que incluye al repollo, coliflor y brócoli) (Prakash y Hinata, 1980). Aunque B. carinata se cultiva como comestible en regiones de África (Alemayehu y Becker, 2004), tiene generalmente altos niveles de glucosinolatos indeseables y ácido erúcico (Getinet et al., 1997), por lo que fue reemplazada con este fin por Brassica napus (Colza) con la que se encuentra estrechamente relacionada. La planta también se cultiva como vegetal de hoja y posee un sabor suave. Actualmente forma parte de una investigación para desarrollar un biocombustible de aviación. En 2012 se completó el primer vuelo de un avión de reacción con cien por ciento de biocombustible a partir de Brassica carinata. Así como colza, todas las especies de esta familia tienen elevados requerimientos hídricos, de nitrógeno (N) y azufre (S). Sin embargo, la respuesta a la fertilización suele ser particular de cada especie y variedad, por lo que requiere ser evaluada bajo las condiciones de la región pampeana argentina. Los objetivos de este experimento fueron: 1) evaluar la respuesta a la fertilización con nitrógeno (N), fósforo (P) y azufre (S) en dos localidades del norte de Buenos Aires; y 2) ajustar una curva de respuesta a la fertilización nitrogenada. Hipotetizamos que: 1) Brassica carinata incrementa los rendimientos cuando se fertiliza con NPS; y 2) que es posible ajustar una curva de respuesta que determine, preliminarmente, la dosis óptima de N. Materiales y métodos Durante el año 2019 se condujeron dos experimentos de fertilización a campo con la especie Brassica carinata, en las localidades de Pergamino y San Antonio de Areco. El primero se realizó en la EEA INTA Pergamino, sobre un suelo serie Pergamino, Clase I-2, Argiudol típico, familia fina, illítica, térmica (USDA- Soil Taxonomy V. 2006). Se sembró el día 23 de mayo, a una densidad de 100 pl m-2 y con distanciamiento de 20 cm. El segundo se realizó en San Antonio de Areco, sobre un suelo Capitán Sarmiento, Argiudol vértico, familia fina, illítica, térmica (Soil Taxonomy
V. 2014). Se implantó el día 28 de mayo, distanciado a 17,5 cm e/hileras a una densidad de 90 pl m-2. Los experimentos recibieron una fertilización de base con superfosfato triple de calcio (0-20-0) a la dosis de 50 kg ha-1 en línea de siembra. Como preemergente se aplicó Glifosato 2000 ml/ha + Trifluralina 3000 ml/ ha. Durante el ciclo se realizaron dos aplicaciones de fungicidas e insecticidas. Se utilizó un diseño estadístico en bloques completos al azar con 3 o 4 repeticiones. Los tratamientos evaluados se presentan en la Tabla 1 a y b. Por su parte, el análisis de suelo del sitio se presenta en la Tabla 2. La fuente utilizada fue urea granulada (46 – 0 – 0) aplicada al voleo, inmediatamente después de la siembra. Se determinó biomasa aérea y radicular en cuatro estados fenológicos del cultivo: inicio de floración, floración plena, fructificación plena y madurez de cosecha, coincidiendo con los estados fenológicos de F1, F2, G3 y G5 de la escala CETIOM (Agosti et al., 2009). En Pergamino se determinó NDVI por Green seeker y se estimó el contenido de N foliar por Minolta Spad. La cosecha se realizó en forma manual, con trilla estacionaria de las muestras. Sobre una muestra de cosecha se evaluaron los componentes del rendimiento -número (NG) y peso (PG) de los granos-, además de altura final de las plantas. Los resultados se analizaron mediante partición de varianza, comparaciones de media y análisis de regresión. Resultados a) Condiciones ambientales de la campaña A la siembra, el perfil se encontraba con un buen nivel de almacenaje, especialmente en los primeros estratos de suelo. Luego, las precipitaciones fueron muy escasas durante el ciclo de cultivo, lo que fue agotando las reservas (Figura 1), presentando la especie buen nivel de tolerancia. Entre el 3 y 5 de septiembre se registraron heladas de singular severidad, con muy baja humedad relativa, a la que el cultivo se evidenció particularmente sensible (Figura 2). No obstante, a pesar de encontrarse en floración plena, se observó una buena recuperación posterior. En la Figura 2 se presentan las temperaturas y la oferta de radiación. Las temperaturas fueron moderadas
Tabla 1 a
Tabla 1 b
Red de INNOVADORES
Tratamientos de fertilización nitrogenada. Campaña 2019. Alternativa de aplicación
Dosis
T1
Nitrógeno
0 kg ha-1
T2
Nitrógeno
40 kg ha
T3
Nitrógeno
60 kg ha-1
T4
Nitrógeno
80 kg ha-1
T5
Nitrógeno
100 kg ha-1
T6
Nitrógeno
160 kg ha-1
-1
Alternativa de aplicación
Dosis
T7
Superfosfato triple calcio (SPT)
0 kg ha-1
T8
Superfosfato triple calcio
100 kg ha-1
T9
Superfosfato triple calcio
150 kg ha-1
Superfosfato triple calcio
100 kg ha-1
Sulfato de calcio
110 kg ha-1
T10
Tabla 2
Datos de suelo al momento de la siembra Profundidad cm
pH agua 1:2,5
Materia Orgánica %
P-disp. ppm
N-Nitratos 0-20 cm ppm
N-Nitratos suelo 0-40 cm kg ha-1
S-Sulfatos suelo 0-20 cm ppm
6,2
29,9
8,1
30,0
15
Pergamino
126 0-20 cm Cultivos Invernales 2020
Tratamientos de fertilización fósforo-azufrada. Campaña 2019.
5,8
2,19
12,5
20-40 cm
5,3 SA de Areco
0-20 cm
6,0
2,8
10,0
20-40 cm
aunque con caídas severas. La oferta de radiación fue favorable dada la baja frecuencia de precipitaciones. b) Resultados de los experimentos En la Tablas 3 y 4 se presentan datos de observaciones tomadas durante el ciclo de cultivo, mientras que en las Figuras 3, 4 y 5 se observan los rendimientos de grano agrupados por sitio. Se trazó una relación estadística entre la productividad y el nivel de N, agregando al del suelo el fertilizante aplicado (Figura 6). Discusión y conclusiones El cultivo mostró una buena tolerancia a herbicidas. Se adaptó bien a una condición de bajas precipitaciones, con un vigoroso crecimiento y buena exploración radicular, incluso en un ambiente desfavorable. Sin embargo, se presentó susceptible a heladas, en una fecha donde estas son frecuentes. La intensidad de estas heladas fue superior a la habitual para el mes de septiembre, en el norte de Buenos Aires.
7,0 5,3
La acumulación de biomasa registró una fuerte asociación con los rendimientos, siendo mayor en la biomasa aérea respecto de la radicular (Tabla 3). Esta asociación se observó tanto en etapas tempranas como tardías. El contenido foliar de N estimado por Spad predijo la respuesta a N (Tabla 3), pero no así a P (Tabla 4). Los rendimientos correlacionaron con la determinación de NDVI, el cual es un fuerte estimador de biomasa aérea al evaluar la respuesta a N y P. Los sitios registraron una pobre dotación inicial de P y N (Tabla 2), siendo representativos de la región bajo estudio. El cultivo demostró susceptibilidad a deficiencias de NP y alta eficiencia agronómica a su aplicación. Se determinó respuesta estadística a N en Pergamino y San Antonio de Areco (LSD □=0,05). La oferta global que maximizó rendimiento fue de 153 kgN ha-1 (suelo 0-40 cm + fertilizante), siendo comparable a lo observado por
Melchiori et al. (2014), y algo superior al determinado por Fontanetto et al. (2008). Asimismo, se determinó respuesta estadística a P, nutriente ante cuya deficiencia el cultivo presentó singular sensibilidad, disminuyendo dramáticamente la biomasa y cobertura. Por el contrario, se registró escasa respuesta a S, a pesar de observar diferencias visuales durante el ciclo de cultivo.
Los resultados obtenidos permiten aceptar parcialmente la hipótesis 1, que sugiere un efecto significativo de la fertilización con NP, aunque en este experimento la respuesta a S fue más difusa. La hipótesis 2 es aceptada, determinando preliminarmente un umbral de 153 kgN ha-1 (suelo 0-40 cm + fertilizante) para alcanzar el rendimiento máximo.
Precipitaciones y balance hídrico expresados como agua útil remanente (mm) en a) Pergamino y b) San Antonio de Areco. Cuando el almacenaje cae dentro del área gris, la demanda del cultivo podría no ser abastecida completamente, generando un déficit de evapotranspiración. Valores acumulados cada 10 días en mm. Figura 1 a. Pergamino
Red de INNOVADORES
Figura 1
Cultivos Invernales 2020
127
Figura 1 b. San Antonio de Areco
Figura 2
Red de INNOVADORES
Horas diarias de insolación y temperaturas medias diarias en el período comprendido entre 1 de setiembre y 31 de octubre de 2018. Datos estación meteorológica INTA Pergamino. La flecha negra señala la ocurrencia de heladas durante las madrugadas del 3,4 y 5 de septiembre.
Cultivos Invernales 2020
128
Figura 3
Rendimiento de Brassica carinata según dosis de fertilización nitrogenada aplicada en cobertura total a la siembra. Letras distintas sobre las columnas representan diferencias significativas entre tratamientos (LSD a=0,05). Las barras de error indican la desviación standard de la media. INTA Pergamino, año 2019.
Tabla 3
Dosis N
BA F1 (kg ha-1)
BR F1 (kg ha-1)
BA F1 (kg ha-1)
BR F1 (kg ha-1)
BAG3 (kg ha-1)
BR G3 (kg ha-1)
T1
N0
859
730
2798
824
7531
1694
T2
N40
1233
1622
3712
1128
10087
2501
T3
N60
1452
1512
4189
1431
12341
2092
T4
N80
1321
1428
4391
1318
12967
2995
T5
N100
1612
1650
5039
1330
14087
3064
T6
N120
1489
1421
5723
1250
13852
3050
0,88
0,75
0,71
0,72
0,90
0,80
R vs rend 2
Perg
T
Dosis N
BAG5 (kg ha-1)
BR G5 (kg ha-1)
Spad F1
NDVI F1
NG m-2
PG
T1
N0
7898
1601
41,5
0,38
32654
4,0
T2
N40
12376
2420
44,5
0,45
54065
4,1
T3
N60
12589
2733
46,2
0,47
58031
4,0
T4
N80
13920
2859
46,5
0,47
62688
4,2
T5
N100
15450
3382
47,1
0,49
72864
4,1
T6
N120
14854
3047
50,0
0,50
62642
4,1
0,97
0,97
0,66
0,88
1,00
0,39
R2 vs rend
SAde Arec
T
Dosis N
BA F1 (kg ha-1)
BR F1 (kg ha-1)
BA F1 (kg ha-1)
BR F1 (kg ha-1)
BAG3 (kg ha-1)
BR G3 (kg ha-1)
T1
N0
1970
3022
5429
1911
14400
1700
T2
N40
2870
4233
9429
2100
17543
1889
T3
N60
2970
3422
5543
2367
20114
3700
T4
N80
3250
3856
11714
1956
26114
2644
T5
N100
5070
3811
11829
2111
24400
2922
T6
N120
4670
3889
8971
2156
16286
2789
0,80
0,38
0,41
0,18
0,26
0,39
NG m-2
PG
R2 vs rend
SAde Arec
R2 vs rend
T
Dosis N
BAG5 (kg ha-1)
BR G5 (kg ha-1) Altura final (cm)
T1
N0
14429
1111
1250
53312
3,1
T2
N40
16286
1333
1320
62997
3,3
T3
N60
17000
2522
1300
61036
3,6
T4
N80
18686
1689
1330
58168
3,9
T5
N100
30114
2956
1260
55527
4,3
T6
N120
20286
2011
1400
43127
5,8
0,43
0,46
0,38
0,11
0,66
129 Cultivos Invernales 2020
Perg
T
Red de INNOVADORES
Biomasa aérea (BA) y radicular (BR) en inicios de floración (F1), floración plena (F2), fructificación plena (G3) y madurez de cosecha (G5), contenido de N foliar por Spad, NDVI por Green seeker, NG y PG. Fertilización nitrogenada en Brassica carinata. Pergamino – San Antonio de Areco, año 2019.
Tabla 4
Número de plantas emergidas, contenido de N foliar por Spad, NDVI por Green seeker, NG y PG. Fertilización fósforo azufrada en Brassica carinata. Pergamino, año 2019.
Red de INNOVADORES
Perg
R2 vs rend
T
Dosis N
Plantas m-2
BAG5 (kg ha-1)
SPAD
NDVI
NG m-2
PG
T7
SPT 0
62
9651
53,4
0,33
53312
3,1
T8
SPT 100
55
18812
52,9
0,49
62997
3,3
T9
SPT 150
43
19852
52,5
0,54
61036
3,6
T10
SPT 100 + SC 110
57
23083
57,1
0,55
58168
3,9
0,19
0,91
0,11
0,86
0,68
0,52
Cultivos Invernales 2020
130
Figura 4
Rendimiento de Brassica carinata según dosis de fertilización nitrogenada aplicada en cobertura total a la siembra. Letras distintas sobre las columnas representan diferencias significativas entre tratamientos (LSD a=0,05). Las barras de error indican la desviación standard de la media. San Antonio de Areco, año 2019.
Figura 5
Red de INNOVADORES
Rendimiento de Brassica carinata según dosis de fertilización fósforo-azufrada aplicada en línea a la siembra. Letras distintas sobre las columnas representan diferencias significativas entre tratamientos (LSD a=0,05). Las barras de error indican la desviación standard de la media. INTA Pergamino, año 2019.
Figura 6
Relación entre rendimiento y oferta total de nitrógeno, sumando el disponible en suelo y el aportado por medio de fertilizante. INTA Pergamino, año 2019.
Cultivos Invernales 2020
131
Imagen 1
Red de INNOVADORES
Volumen de biomasa y crecimiento radicular. Izquierda: Fertilizado con P- N160 – Derecha: Fertilizado con P – N0.
Cultivos Invernales 2020
132
Imagen 2
Respuesta a la fertilización fosforada. Izquierda: Superfosfato triple de calcio 100 kg ha-1. Centro: Control sin fertilización fosforada. Derecha: Superfosfato triple de calcio 150 kg ha-1. Nótese el retraso fenológico en ausencia de fertilización fosforada.
Imagen 3
Red de INNOVADORES
Respuesta a la fertilizaciรณn nitrogenada. Izquierda: Nitrรณgeno 100 kg ha-1. Derecha: Nitrรณgeno 40 kg ha-1.
Imagen 4
Respuesta a la fertilizaciรณn nitrogenada. Izquierda: Testigo1. Derecha: Nitrรณgeno 120 kg ha-1 (S.A. de Areco).
Cultivos Invernales 2020
133
Bibliografía
Chamorro, A. M. (2018). Análisis del impacto sobre la sustentabilidad de la difusión de la colza y de la cebada en reemplazo del trigo en la secuencia trigo/soja 2ª en el Partido de Tres Arroyos (Doctoral dissertation, Universidad Nacional de La Plata (UNLP)-Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales (FCAF). Chamorro, A. M., & Tamagno, N. (2015). Producción de materia seca aérea y radical de colza primaveral (Brassica napus L. ssp oleifera forma annua). Revista de la facultad de Agronomía, La Plata, 105(2), 53-62. Gómez, N. V., Miralles, D. J., Mantese, A. I., Menéndez, Y. C., & Rondanini, D. P. (2018). COLZA: UN CULTIVO CON HISTORIA EN LA FAUBA. Agronomía & Ambiente, 38(1). Hossain, Z., Johnson, E. N., Blackshaw, R. E., Liu, K., Kapiniak, A., Gampe, C., ... & Gan, Y. (2018). Agronomic responses of Brassica carinata to herbicide, seeding rate, and nitrogen on the Northern Great Plains. Crop Science, 58(6), 2633-2643. Iriarte, L. B. (2018). Cultivo de colza en el país: situación actual y perspectivas. Disponible on line. www.inta.gob.ar Lawton, K. (2019). Growing carinata in the Southeastern US. Crops & Soils, 52(5), 18-21. Melchiori, R. J. M., Coll, L., Barbagelata, P. A., & Pautasso, J. M. (2014). Respuesta a la fertilización con nitrógeno y azufre en el cultivo de colza. In Actas 1 Simposio Latino Americano de Canola. Passo Fundo, RS, Brasil. Melchiori, R. J., Coll, L., Albarenque, S., Pautasso, J. M., & Kemerer, A. C. (2018). Limitantes nutricionales y variabilidad espacio-temporal del rendimiento en colza. Repositorio INTA. www.inta.gob.ar
Red de INNOVADORES
Mulvaney, M. J., Leon, R. G., Seepaul, R., Wright, D. L., & Hoffman, T. L. (2019). Brassica carinata Seeding Rate and Row Spacing Effects on Morphology, Yield, and Oil. Agronomy Journal, 111(2), 528-535. Seepaul, R., Marois, J., Small, I. M., George, S., & Wright, D. L. (2019). Carinata Dry Matter Accumulation and Nutrient Uptake Responses to Nitrogen Fertilization. Agronomy Journal. Seepaul, R., Small, I. M., Marois, J., George, S., & Wright, D. L. (2019). Brassica carinata and Brassica napus Growth, Nitrogen Use, Seed, and Oil Productivity Constrained by Post-Bolting Nitrogen Deficiency. Crop Science, 59(6), 2720-2732. Verma, O. P., Singh, S., Pradhan, S., Kar, G., & Rautaray, S. K. (2018). Irrigation, nitrogen and sulphur fertilization response on productivity, water use efficiency and quality of Ethiopian mustard (Brassica carinata) in a semi-arid environment. Journal of Applied and Natural Science, 10(2), 593-600.
Cultivos Invernales 2020
134
Encuentre el presente trabajo en www.aapresid.org.ar - PUBLICACIONES
Cultivos Invernales 2020
Empresas Socias 135
Empresas Socias
Terbyne es el Ăşnico herbicida del mercado registrado para utilizarse en pre-siembra de Vicia, Avena y Centeno, especies muy utilizadas como Cultivos de Cobertura.
Empresas Socias
137 Cultivos Invernales 2020
Terbyne: el herbicida para Control de Rama Negra en Trigo y Cultivos de Servicio
Empresas Socias
Terbyne®, el novedoso herbicida desarrollado por Sipcam Argentina, es una herbicida lanzado al mercado en 2019 con registro de uso para Barbecho Químico Largo y Preemergencia de Maíz. Desde la actual campaña 2020, Terbyne®, además, ya cuenta con nuevos registros para utilizarse en diferentes especies utilizadas como cultivos de Servicio (Vicia, Avena y Centeno), en cereales de invierno para cosecha (Trigo y Cebada) y legumbres de invierno (Arveja, Garbanzo y Lenteja).
Cultivos Invernales 2020
138
Terbyne® es una herbicida de la familia de las Triazinas, caracterizado por quedar retenido fuertemente por los coloides del suelo y tener una muy baja solubilidad en agua. Estas características físico-químicas permiten que la aplicación de Terbyne® demuestre una prolongada residualidad en el suelo, aportando más de 120 días de control de malezas en aplicaciones de Barbecho. Terbyne® es un herbicida recomendado para el control de malezas de hoja ancha como Conyza spp., Parietaria debilis, Sonchus oleraceus, Amaranthus spp. Con relación a Conyza spp. (Rama Negra), ésta es una de las principales malezas que atenta contra los Cultivos de invierno (Trigo y Cebada) y Cultivos de Servicio dado que el principal flujo de emergencia de plantas de esta maleza coincide con el momento de siembra y período de establecimiento de estos cultivos. Además, Conyza spp. es una maleza que ya cuenta con resistencia a herbicidas Inhibidores de ALS, problemática que fue confirmada sólo en algunas regiones productivas de zona núcleo pero que existen numerosos casos de “sospecha de resistencia” en gran parte de la superficie productiva del país. Al mismo tiempo, en el caso de los cereales de invierno, como Trigo y Cebada, la mayoría de los herbicidas registrados y usados para el control de Rama Negra en estos cultivos son de la familia de los Inh. de ALS. Los Cultivos de Cobertura (CC) o, también llamados, cultivos de Servicios (CS) son herramientas de manejo que cada vez se están mirando con mayor consideración dentro de los sistemas productivos agrícolas. Los CS son aquellos que se siembran entre dos cultivos de verano y que no se pastorean, ni se cosechan, ni se incorporan, sino que quedan en superficie protegiendo al suelo y aportando nutrientes por degradación de la biomasa radicular y biomasa aérea. Así, los CS aportan sustentabilidad a los sistemas productivos a través numerosos aspectos.
Dentro los principales beneficios aportados por los CS están aquellos que impactan directamente sobre el uso del agua y la estabilidad estructural del suelo. •
•
•
•
Si bien la implantación de un CS implica contemplar un cierto consumo de agua para el desarrollo de este mismo cultivo, éstos mejoran considerablemente la estructura del suelo y aportan estabilidad a esa estructura, mejorando así la infiltración del agua y optimizando, así, su uso. Además, se reduce la evaporación directa de agua desde la superficie del suelo por efecto de la cobertura. En este aspecto, además, es de suma importancia finalizar el ciclo del CS en el momento adecuado para evitar que el consumo de agua por parte de éste afecte a la disponibilidad del recurso agua para el cultivo sucesor a implantar. Por otro lado, la cobertura protege al suelo de la degradación física por el impacto directo de las gotas de lluvias intensas, de la erosión hídrica en suelos con pendiente o de la erosión eólica. Al mismo tiempo, aportan nutrientes al sistema, como Nitrógeno (N) y Carbono (C). Éstos son nutrientes indispensables no solo para la nutrición de los cultivos de cosecha, sino que, además, para la estabilidad estructural del suelo y la microflora y microfanua que en ellos habitan. Además de todo esto, los cultivos de servicio tienen un efecto supresor o de retraso sobre la emergencia de algunas especies de malezas por afectar de diferentes maneras el ambiente necesario para la emergencia de las malezas. Es así como, debido a que los CS generan un gran sombreo sobre el suelo, o afectan la amplitud técnica sobre la superficie del suelo, muchas malezas no logran romper la dormición y no logran germinar, manifestándose esto como una reducción en cantidad de plantas de malezas emergidas por unidad de superficie o como una demora en el tiempo de emergencia de éstas. Este es uno de los principales motivos por los cuales los CS van ganando terreno en los sistemas productivos.
Para que ocurran todos estos aportes que los CS puedan tener sobre los sistemas productivos es muy importante lograr que estos cultivos se implanten y establezcan bajo condiciones óptimas para que se
Las condiciones que son favorables para el desarrollo normal del CS y de Trigo y Cebada, también son favorables para la germinación y desarrollo de las malezas. Sin embargo, estas condiciones son también favorables para el uso de Terbyne®. Para alcanzar la máxima eficacia en el control de malezas, es necesario aplicar Terbyne® cuando las condiciones ambientales sean favorables para la incorporación inmediata del herbicida al suelo con una lluvia de 25mm o más. Por esto, la mejor recomendación es aplicar Terbyne de manera temprana, unos 10 días antes de la siembra de los cultivos de servicio y de los cultivos de Trigo y Cebada para cosecha.
De la misma manera, el uso de Terbyne® junto con los cultivos de servicios se posiciona como una recomendación INTEGRADA y NO EXCLUYENTE, ya que el resultado final en el control de malezas será resultado del buen comportamiento del herbicida y los aportes generados por el cultivo de servicio al aportar de manera homogénea en el lote la cantidad de biomasa deseada. Las recomendaciones de uso de Terbyne® para cultivos de Servicio y cereales de invierno son las siguientes:
CULTIVO
DOSIS
MOMENTO DE USO
Cultivo estival sucesor
Trigo
1 kg/ha
10 días antes de la siembra
Soja, Maíz, Sorgo, Girasol, Maní o Algodón
Cebada
1 kg/ha
10 días antes de la siembra
Soja, Maíz, Sorgo, Girasol, Maní o Algodón
Vicia
1 a 1,4kg/ha
10 días antes de la siembra
Soja, Maíz, Sorgo, Girasol, Maní o Algodón
Avena
1kg/ha
10 días antes de la siembra
Soja, Maíz, Sorgo, Girasol, Maní o Algodón
Centeno
1kg/ha
10 días antes de la siembra
Soja, Maíz, Sorgo, Girasol, Maní o Algodón
NOTA: PARA TODOS LOS CULTIVOS, SE RECOMIENDA SEMBRAR A UNA PROFUNDIDAD MÍNIMA DE 3-4 CM
Empresas Socias
Con respecto al uso de Terbyne® en Trigo y Cebada, la recomendación es aplicar 1kg/ha hasta 10días antes de la siembra. Terbyne® es un herbicida de la Familia de las Triazinas y que controla muy bien Rama Negra en preemergencia y otras malezas de invierno. Además, el uso de Terbyne aplicado en comienzos del otoño, tiene un efecto de supresión de nacimiento Ray Grass (Lolium spp) muy importante. Esto quiere decir que, en lotes con baja presión de esta maleza, los controles logrados serán muy buenos pero, en lotes con alta presión raygrass (lotes con el banco de semillas muy cargados) tendrán escapes donde la presión sea mayor. Estas características lo posicionan como una herramienta clave para el control de malezas resistentes a los herbicidas tradicionales que se venían usando. Los beneficios de esta herramienta, no solamente se expresan como un mejor manejo de malezas en el cultivo de Trigo y Cebada, sino que, además, como una solución al problema de Rama Negra en el cultivo sucesor durante la época estival, fundamentalmente si el cultivo sucesor es Soja de 2°, cultivo en el cual las herramientas para el manejo de Rama Negra nacida son cada vez más limitadas.
139 Cultivos Invernales 2020
puedan desarrollar con mayor rapidez y cubran el suelo en poco tiempo. Por un lado, es posible manejar parte de estos aspectos eligiendo correctamente la especie a sembrar, densidad y fecha de siembra, metodología de siembra y espaciamiento entre surcos. Pero, además, es indispensable contar con el aporte de un herbicida con poder residual que mantenga al CS sembrado libre de malezas durante la primera etapa de crecimiento (PERÍODO CRÍTICO LIBRE DE MALEZAS) para evitar que la competencia con malezas afecte negativamente al normal desarrollo del CS y, por efecto, a la producción de biomasa. El gran efecto negativo que esto acarrea es que, cuando el CS convive con las malezas en el lote, no solamente la producción de biomasa es menor sino, que, además, el control de malezas antes de la siembra de siguiente cultivo estival será más difícil. Como herramienta disponible, Terbyne® es el único herbicida en el mercado con un gran poder residual, registrado y recomendado para el control de malezas en algunas de las especies utilizadas como Cultivos de Servicio (Vicia, Avena y Centeno).
-
-
-
Empresas Socias
-
-
Cultivos Invernales 2020
140
VENTAJAS DE USO DE TERBYNE® EN CULTIVOS DE SERVICIO: Terbyne® es un herbicida altamente selectivo para las especies para la que está recomendado, no genera fitotoxicidad que afecte al normal desarrollo del cultivo. No existe riesgo de fitotoxicidad por Carry over cuando el lote donde se aplique Terbyne® junto a un cultivo de Servicio se destine en la época estival a la siembra de Soja, maíz, sorgo, maní, algodón o girasol. Es posible realizar la siembra conjunta de Vicia + Centeno Y/O Avena sin riesgo de fitotoxicidad sobre cualquiera de estas especies. Terbyne® es un herbicida de la familia de las Triazinas y está recomendado para el control de malezas de hoja ancha, por lo cual es una herramienta clave para el control de Conyza spp (Rama Negra), fundamentalmente en aquellas zonas donde ya fue confirmada o se sospecha la resistencia de esta maleza a Inhibidores de ALS. Ayuda al establecimiento más rápido y seguro del cultivo de servicio ya que lo cubre de la competencia con malezas desde los primeros
-
-
estadíos. Además, al finalizar el cultivo de servicio, el lote quedará 100% libre de malezas resultado de la acción conjunta y complementaria de Terbyne® + Cultivo de Servicio. Una vez aplicado Terbyne® en el comienzo del barbecho, es posible realizar la siembra de diferentes cultivos sin riesgo de fitotoxicidad: (trigo, cebada, avena, vicia, centeno, arveja, lenteja, garbanzo, soja, sorgo, maíz, algodón, girasol y maní). DESVENTAJAS No puede destinarse el lote a la siembra de una especie de la familia de las Crucíferas (muy usada como cultivo de servicio por el sistema radicular que tiene) porque puede resultar fitotóxico para la misma.
Ensayos para evaluación de fitotoxicidad de Terbyne® en Cultivos de Servicio: En cercanías a la localidad de Colonia Tirolesa (Provincia de Córdoba), se realizó un ensayo de “policultivos” para evaluar la fitotoxicidad de herbicidas sobre diferentes cultivos. El suelo del sitio del ensayo es un Haplustol de
1. Metsulfuron 10g/ha (sólo en Avena y Centeno) 2. Terbyne® 1kg/ha 3. Terbyne® 1,4kg/ha (sólo en vicia) Luego de la aplicación de los tratamientos herbicidas se simuló una lluvia de 20mm. A los 10 días de aplicados los herbicidas, se realizó la siembra. En los 3 casos, la siembra se realizó a una profundidad de 3-4cm de profundidad (RECOMENDACIÓN DE MARBETE DE TERBYNE®). Luego de la siembra se repitió el riego con 20mm más. Se evaluó visualmente la fitotoxicidad que generaban cada uno de los tratamientos sobre cada cultivo, siguiendo la siguiente escala: Escala Fitotoxicidad 1. Sin Fitotoxicidad, crecimiento normal, sin manchas 2. Menor crecimientos en plantas aisladas
RESULTADOS El resultado de este ensayo demuestra la selectividad de Terbyne® sobre los cultivos de Vicia, Avena y Centeno cuando es utilizado en pre-siembra de estos. Es importante destacar la recomendación de siembra a una profundidad no menor a 3cm para asegurar un nacimiento uniforme del cultivo y reducir riesgos de fitotoxicidad por colocar muy cerca la semilla de la ubicación de la mayor concentración del herbicida (primeros 3cm de suelo).
Empresas Socias
En el sitio del ensayo se sembraron parcelas de diferentes cultivos. 10 días antes de la siembra, se aplicaron los tratamientos herbicidas:
3. Menor crecimientos y presencia de manchas en plantas aisladas 4. Menor crecimiento y presencia de manchas en hojas general 5. Plantas de pequeño porte aisladas, manchas en hojas, tallo 6. Plantas de pequeño porte general, manchas en hojas, tallo 7. Quemado total de la parte aérea, en plantas aisladas 8. Quemado total de la parte aérea, sin muerte de plantas 9. Quemado total de la parte aérea, con plantas muertas aisladas 10. Muerte total de plantas
141 Cultivos Invernales 2020
textura franco-arenosa. El ensayo fue conducido por el quipo de trabajo de TESTEAR.
Empresas Socias Cultivos Invernales 2020
142
Autor: Ing. Agr. Laureano Boga Especialista Técnico en Cebada. Boortmalt Argentina.
Nuevas oportunidades para la Cebada en la Región Pampeana Norte
Una combinación de factores e innovaciones convierten a la cebada en una opción ideal para incluirla en la rotación.
Boortmalt posee en Argentina dos Malterias ubicadas en Bahía Blanca y en Punta Alvear (Santa Fe), desde las cuales abastece a los principales mercados cerveceros de América Latina, que requieren una producción de cebada bajo exigentes parámetros de calidad. Para lograrlo, Boortmalt establece vinculaciones estratégicas con productores y acopios a partir de un programa de originación de cebada basado en
Además de este atributo relativo a la rentabilidad, se trata de un cereal que genera gran volumen de biomasa incrementando la cobertura del suelo, evento que atenúa la erosión hídrica y eólica, y aporta Carbono al suelo. Adicionalmente otorga la posibilidad de realizar 2 años seguidos de cereales de invierno (Año 1: Trigo + soja 2da. Año 2: Cebada + soja) una rotación considerada efectiva, rentable y sustentable para mitigar el problema de malezas resistentes. El Programa de Originación de Cebada de Boortmalt, es parte de una visión y una estrategia que considera
Empresas Socias
Esta nueva oportunidad es fruto del liderazgo y experiencia que llega de la mano de Boortmalt, la compañía que se transformó en el líder mundial en la producción de malta a partir de la adquisición del negocio de Cargill Malta en noviembre pasado.
rentabilidad, sustentabilidad y diversificación del riesgo. Uno de los pilares de este programa para la zona afluente de la Planta de Punta Alvear (RPN), radicó en la obtención de nuevas variedades, con genética de avanzada y adaptadas especialmente a esta zona que permiten alcanzar rindes 5 a 10 % superiores al trigo y ser cosechada al menos 5 días antes (sin volcarse y con calidad maltera acorde a la demanda). La combinación de mayor rendimiento de la Cebada y anticipación de cosecha sobre el rendimiento de la soja de segunda convierte al esquema Cebada + Soja en muy robusto en términos de margen bruto.
143 Cultivos Invernales 2020
Desde siempre la cebada ha sido una alternativa para tener en cuenta en la planificación de cultivos de invierno, tradicionalmente asociada a la zona centro-sur de la Provincia de Buenos Aires. El desarrollo tecnológico del cultivo logro extender su frontera colocándola como una opción productiva y rentable en una vasta región al Norte de la Ruta 5 de la Provincia de Buenos Aires, Sur de Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos, denominada región Pampeana Norte (RPN).
a los productores como parte de una cadena de valor agregado, que nace en el campo, continúa en la maltería y se expresa en los resultados de la industria cervecera. Para este objetivo Boortmalt combina el conocimiento global que le brinda la producción de malta en los 5 continentes, con la experiencia local de un equipo multidisciplinario de agrónomos, traders y malteros.
productiva integral, que contempla desde la provisión de la semilla hasta la logística post-cosecha y el acceso al Programa SAI de Cebada Sustentable, un estándar internacional que le permite a los productores cumplir con las crecientes demandas de calidad de la industria de alimentos. Para mayor información y contacto con nuestro equipo:
Empresas Socias
La propuesta de valor Boortmalt para la Región Pampeana Norte está basada en una solución
Cultivos Invernales 2020
144
www.pensaencebada.com