El presente es un documento que comenta las aseveraciones sin sustento (o sin conocimiento) emitidas en un artículo de hace un par de semanas, hecho por la Periodista Claudia Cisneros Su artículo se titula: “Salud pública versus intereses económicos: Lo que está en juego” y fue emitido en La República.pe el 20 de julio. Claudia Cisneros: “Tras la promulgación en mayo de 2013 de la Ley de Comida Saludable (http://goo.gl/hwcu9E) (o contra la comida chatarra), se conformó en la PCM una comisión multisectorial para elaborar el reglamento de la ley. Ha pasado más de un año y como era de esperarse el poderoso lobby de la industria alimentaria está por sacarle la vuelta a la ley (con todo lo que costó ganarla) haciendo que en el reglamento se validen estándares de azúcar y grasas que están 3 a 4 veces por encima de lo recomendado por la OMS y la OPS. Así, su comida basura pasaría a ser nada menos que “saludable” a la luz de esos pretendidos estándares (http://goo.gl/34d2js).” Comentario ABRESA: La industria está a favor del objetivo de la Ley de Alimentación Saludable de Niños, Niñas y Adolescentes, pero no está de acuerdo con la forma en que el Reglamento plantea su implementación, por no ajustarse a la realidad nutricional del país ni a los estándares internacionales que establece el Codex Alimentarius (guía que utilizan los países para regular aspectos relacionados con la industria de alimentos). La posición de la industria es pública y transparente (véase documento). En su momento se solicitó al MINSA que explique, con sustento científico, la metodología que había utilizado para proponer los estándares en el Reglamento; solicitud que a la fecha no ha sido satisfecha.
Claudia Cisneros: “A los industriales no les importa que la obesidad y el sobrepeso estén en escalada. Según últimas cifras del Minsa (2013), el 8% de niños menores de 5 años en el Perú tienen obesidad o sobrepeso. Uno de cada cuatro niños de 5 a 9 años (el 25%) tiene sobrepeso u obesidad. Casi el 40% de adultos jóvenes (20 a 29 años) están hoy gordos u obesos (2 de cada 5). Y más dramático aún, 3 de cada 5 adultos de 30 a 59 años (62%) tiene sobrepeso u obesidad. ¿Por qué importa? Según el Instituto del Cáncer en los EEUU, “la obesidad está asociada con riesgos mayores de los cánceres de esófago, de seno, de endometrio (revestimiento del útero), de colon y de recto, de riñón, de páncreas, de tiroides, de vesícula biliar y posiblemente de otros tipos de cáncer. La gente obesa tiene también un riesgo más alto de enfermedad coronaria del corazón, de apoplejía, de tensión arterial alta, de diabetes y de muchas otras enfermedades crónicas” (http://goo.gl/T5TCnV). Como explica Pere
Puigserver, investigador y catedrático en Harvard (http://goo.gl/k3k5Gf), el problema del exceso de azúcar es que este se convierte en grasas que se almacenan en los tejidos, lo cual produce una resistencia a la insulina. Este fue en el pasado un mecanismo de supervivencia cuando nuestras sociedades no tenían alimentos disponibles todo el tiempo. El metabolismo se adecuó para que esa grasa almacenada se usara en tiempos de carestía. Hoy, con alimentos a disposición y sin tiempo a que se actualice ese antiguo mecanismo de supervivencia, el exceso de azúcar “se transforma en (...) una masa de grasa”.” Comentario ABRESA: La industria comparte la preocupación de la OMS y las autoridades de salud respecto del incremento de la obesidad y el sobrepeso; y, propone un trabajo conjunto entre el Estado, los centros de investigación y la comunidad en su conjunto. Es necesario informar que la obesidad se debe a múltiples causas; una de las más frecuentes es la falta de equilibrio entre las calorías que se ingieren y las calorías que se queman: SEDENTARISMO.
Claudia Cisneros: “El gran problema no es solo la ignorancia sobre la no inocuidad del azúcar, sino también su falta de conciencia constante del daño que genera. Quizás porque es un daño diferido. Si comer azúcar en exceso nos matara o enfermara inmediatamente tras ingerirla, nuestra conciencia causa-efecto perjudicial estaría tan clara como los efectos de un balazo. Pero como su daño se va construyendo en el tiempo, internamente, en lugares inaccesibles a nuestros ojos la gente no repara en su toxicidad. El otro problema es que “una gran parte de los azúcares que se consumen hoy en día está ‘escondida’ en alimentos elaborados que generalmente no se consideran dulces. Por ejemplo, una cucharada de ketchup contiene unos 4 gramos de azúcar (aproximadamente una cucharada de café). Una sola lata de refresco endulzado con azúcar contiene hasta 40 gramos (unas 10 cucharadas de café) de azúcar” (http://goo.gl/wLjQYW).” Comentario ABRESA: Efectivamente lo que se requiere es que el consumidor esté informado de la cantidad de calorías y principales nutrientes que consume en sus alimentos/bebidas. Es por ello que la industria plantea que el etiquetado nutricional sea obligatorio en el Perú (actualmente no lo es). Además de esto, necesitamos promover la actividad física, sobretodo en los niños. Respecto del azúcar, el cuerpo la metaboliza sin importar su origen (sea natural o procesada).
Claudia Cisneros: “En Centro y Sudamérica se prevé que aumente la incidencia de diabetes en casi 60% hacia el 2035, con todos los costos económicos para la salud pública que ello implicará. El lobby industrial mundial ha logrado que la OMS demore 10 años en
cambiar su recomendación fuerte, de 10%, a la recomendación condicional de 5%. Esta es una guerra como la del tabaco y la lucha se libra en cada país al que las recomendaciones de OMS y OPS han pretendido adoptarse. Hasta ahora la dos únicas recomendaciones de la OMS que han llegado al Codex Alimentarius, según el cual se rigen 198 países son las referidas a grasas saturadas y sodio.” Comentario ABRESA: La Federacion Internacional de Diabetes, indica que esta enfermedad se produce cuando el cuerpo no puede producuir insulina (hormona secretada por el páncreas) o utilizarla adecuadamente, así que las células no pueden utilizar la energía de los azúcares de los alimentos/bebidas (naturales o procesados). La diabetes tipo 2 tiene como uno de los factores de riesgo el sobrepeso y la obesidad. Siendo otros factores el envejecimiento, el origen étnico, antecedentes familiares de diabetes y el estilo de vida sedentario. En relación con el consumo de azúcar en la dieta diaria, la OMS ha recomendado en su directiva correspondiente, que las calorías provenienes del consumo de azúcar no deben exceder el 10% de la dieta diaria (en base a 2000 calorías). No existe directiva vigente que reduce este porcentaje al 5%. La OMS es una institución objetiva y sus declaratorias se basan en estudios concluyentes, no en mitos o “estudios fantasma” publicados en internet. Los estudios científicos pueden tomar años.
Claudia Cisneros: “Este martes 22 de julio se vence el plazo para presentar opiniones o aportes al proyecto de reglamento en el Perú (http://goo.gl/lkabYW). Y como bien advierte el congresista Jaime Delgado (http://goo.gl/0p401v) “los parámetros propuestos se encuentran muy por encima de los porcentajes recomendados a nivel internacional”, que consideran como excesiva azúcar más de 5 g por cada 100 g. La propuesta en el reglamento peruano pretende establecer como excesiva azúcar aquellas galletas, queques, bizcochos etc. que superen el 19,6 g por cada 100 g: ¡4 veces más de lo que se recomienda a nivel internacional! Igual con las gaseosas o jugos en caja, en que el reglamento peruano pretende hacer pasar por exceso de azúcar solo lo que supere 8,1 g por cada 100 ml, cuando la recomendación internacional es de 2,5 g por cada 100 ml. O sea, ¡3 veces más! ¡Los industriales estarán legalizando su veneno como saludable si este reglamento se aprueba así! Es momento de amargarles la fiesta perversa a los industriales y defender nuestra salud y la economía social del país en contra de esta arremetida.” Comentario ABRESA: Tal como usted indica líneas arriba, no existe parámetro recomendado por la OMS que corresponda a 8.1 g por cada 100ml, por lo que la industria ha planteado su opinión respecto del reglamento, el mismo que se puede leer en: Carta al MINSA. Finalmente: ¿en qué estudio se basa para decir que la recomendación internacional es de 2.5g por cada 100 ml?.