Si tuviera que ser ave sería un escribano, claro. Así, además de volar, podría seguir llenando cuadernos de versos. O mejor, sería una golondrina para regresar a esos lugares donde fui feliz: el escenario, el hogar, la carretera… ¿O un charrán bengalí? Eso de ir despeinado por la vida también me gusta. ¡Y la música! ¡La música me encanta! Entonces… ¿un roquero rojo? O espera, espera… ¡Un carpintero! ¡Qué maravilla estar cerca de la madera! O, bueno, ¡un canario!, que para algo nací en las islas. ¿Y habrá algún pájaro que cuente cuentos? ¡Ese sería genial! Ay, no sé. Mientras me lo pienso, seguiré mirando al cielo. www.franpintadera.com
Desde pequeña, he dibujado y, si lo pienso bien, creo que lo que más me gusta dibujar son animales; y, de entre los animales, quizá los que más dibujo son pájaros. Y, de entre los pájaros, me gustan los más extraños, originales, divertidos, curiosos, soñadores… Desde siempre me han dicho que, a menudo, tengo la cabeza llena de pájaros; y yo pienso que son ellos los que me ayudan a hacer volar la imaginación y a dibujar un montón de historias, algo que me apasiona. Ya podéis imaginar qué regalo ha supuesto ilustrar este libro, donde he podido dejar ir todos los pájaros que guardaba en mi cabeza, deseosos de volar libres. www.annafont.net
Publicado por AKIARA books Plaça del Nord, 4, pral. 1ª 08024 Barcelona www.akiarabooks.com info@akiarabooks.com
Depósito legal: B 3.089-2024 ISBN: 978-84-18972-44-7
Primera edición: marzo de 2024 Colección: Akipoeta, 7 Dirección editorial: Inês Castel-Branco
Todos los derechos reservados
AKIARA trabaja con criterios de ecoedición, optimizando el diseño, seleccionando papeles certificados y buscando una producción de proximidad para minimizar el impacto ambiental.
Este libro ha sido impreso sobre papel Offset Arena Natural Rough de Fedrigoni, con un gramaje de 200 g/m2 para la tripa y de 300 g/m2 para las cubiertas dípticas, cosidas con hilo visto.
Este producto está hecho con material proveniente de bosques certificados FSC® bien manejados y de materiales reciclados.
© 2024 Fran Pintadera, por el texto © 2024 Anna Font, por las ilustraciones © 2024 AKIARA books, SLU, por esta edición
Impreso en España @Agpograf_Impressors
En la tipografía, se ha usado la Futura Bk BT.
Conociendo al pájaro toc Te contaré una cosa sobre el pájaro toc: le gusta la madera. Te contaré otra cosa: también le gusta volar. Y, ya que estamos, te contaré una tercera: antes que una mansión prefiere una pradera, y antes que una pared prefiere ver el mar. Pero el pájaro toc vive encerrado en una jaula de metal.
Por qué hace toc Desde su jaula el pájaro toc, como cada mañana, canta. Está triste y así borra el nudo que hay en su garganta. A veces canta blues, a veces canta un rap, pero siempre siempre siempre su tonada es de verdad. Una parte de su música viaja libre y sin cadenas. La otra parte golpetea en las rejas de la celda. A veces canta tango, a veces canta jazz, pero siempre siempre siempre su canto choca sin cesar.
El ruido que se escucha es el de un «toc» que está preso. En la jaula reverbera el sonido de su eco. Toc. Toc.
Toc.
A veces canta reggae, a veces canta un vals, pero siempre siempre siempre la canción quiere volar.
¿De qué está hecha una jaula? Da igual el material con el que se fabrique: una jaula está hecha de miedos. Y cuando se encierra un pájaro, sea en hierro, madera o mimbre, quizá estemos encerrando nuestro miedo a volar libres.
Escapada Minúscula, como la brisa del verano, como un chasquido de leña. La canción salió del pico cada vez más pequeña .
Y, diminuta como era, se coló entre las barras para después crecer si y salir por la ventana.
n miedo
¡Lo había conseguido! ¡Encontró al fin la manera! La canción del pajaro toc ya volaba libre ahí fuera.
Cuando la canción llegó al zoológico (cántico esdrújulo) Tras espantar a una mosca incómoda con sus orejas espléndidas, el elefante escuchó con éxtasis la canción del ave intrépida. Su cola se movió tímida al escuchar aquella música. Pero su voz potente y cálida cantó de forma única. Y se sumaron mamíferos y las especies exóticas. Unos hasta quedar sin oxígeno, otras hasta quedarse afónicas.
Y en el estribillo apoteósico todos alzaron su cántico. Desde las especies autóctonas hasta los bichos del Ártico. Y, al llegar al término de aquel concierto acústico, el zoo fue un lugar mágico al son de un canto esdrújulo.
LA BELLEZA DE LOS DETALLES AKIPOETA
E CO
Le gusta la madera.
También le gusta volar. Pero el pájaro toc vive encerrado en una jaula de metal. Esta es la historia del pájaro toc, una colección de versos sobre la libertad y su contagioso poder.
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