Annie Autora: Alejandra Ortiz PĂŠrez
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ace muchos años, en un lugar lejano, lleno de música y vida, donde sus habitantes poseían una canción propia que salía de sus corazones, vivía Annie, una niña tímida, no se atrevía a hablar con nadie, pero le encantaba observar y caminar por el bosque. Un día junto con su amigo Chez, un pequeño ratón gris, iban caminando por el bosque como normalmente lo hacían, cantando y jugando, hasta que ella tropezó, aparentemente con un 1
tronco y se golpeó la cabeza, al despertar tenía a su lado a su fiel amigo Chez, todo parecía estar normal, excepto por su canción, no la sentía ni escuchaba. Annie asustada intento recordarla pero no pudo, desconsolada se sentó en el suelo a llorar, no sabia porque le pasaba eso, Chez se acercó a ella e intentó abrazarla pero no pudo porque sus brazos eran muy pequeños, entonces solo se sentó junto a ella.
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e repente a lo lejos se escuchó un tarareo, no se entendía mucho pero Annie intentó escuchar ¡era su canción! ella alzó la mirada para ver de donde provenía pero no veía nada cerca, entonces intentó seguir el sonido hasta que llegó a un precipicio y a lo lejos se veía una montaña y en toda la punta una luz que cantaba su canción. Se asombró de verla allí pero se puso muy feliz de saber que estaba bien. 3
Ella junto a su amigo chez deciden emprender el viaje en busca de su canción, bajaron por un lado del precipicio con mucho cuidado porque estaba muy empinado, lograron llegar abajo pero sintieron algo muy extraño en sus pies que no les permitía moverse, ambos miraron el suelo y notaron una sustancia viscosa que tenía atrapados sus pies, era roja y cubría una gran cantidad del camino.
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hez comenzó a temblar y se quedó paralizado, Annie se agacho, lo abrazó y dijo: - Tranquilo amigo mío, esto no nos detendrá ¡Mira! esto parece un río, y ¿cual es la mejor forma de salir de un río? nadando... Annie comienza a agitar sus brazos como si nadara, esto provocó que sus piernas temblaran, y con esto la sustancia roja se resbaló de ella hasta alejarse por completo, Chez imito a Annie y pronto ambos lograron salir de ese río rojo. 5
Continuando su camino, guiados por la luz que irradiaba la canción de Annie en lo alto de la montaña, cayó la noche, no muy lejos se veía un abundante bosque lleno de árboles gigantes, perfectos para descansar, al llegar allí, comenzaron a buscar un árbol que pudiera resguardarlos del frío, todos eran tan grandes y altos que no podían subir en ellos.
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asta que en lo más profundo encontraron uno perfecto para los dos, no era tan alto ni tan bajito para ellos. subieron unas cuantas ramas para no tener que dormir en el helado suelo, se acomodaron chez encima de Annie y con hojas hicieron una manta que los cubriera. Chez se quedó dormido enseguida mientras que Annie observaba a lo lejos su canción, y deseaba con ansias poder llegar a ella pronto y asi ella tambien se durmio.
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A la mañana siguiente Annie despertó con un extraño olor, al observar a su alrededor vio que todos los árboles grandes que había visto la noche anterior estaban talados, excepto el suyo. Despertó a Chez y bajaron apresurados del árbol, Annie le dio las gracias al árbol por haberlos mantenido a salvo, aunque sabía que no la escucharía.
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ontinuaron su camino, caminaron horas y horas, el clima cambió, de repente hacía mucho calor, como si estuvieran en un desierto, ya no había árboles, sólo arena. Annie y Chez estaban muy cansados y sedientos, no veían un lugar donde refrescarse, hasta que a lo lejos vieron una choza en la mitad de la nada, decidieron correr hacia esta, hasta que notaron que a medida que se acercaban la choza retrocedía. En ese momento Annie recordó lo que le
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enseñaron el la escuela sobre los espejismos, que son un engaño de la mente, se detuvieron y continuaron caminando hacia la montaña. pasaron varias horas y de repente vieron la misma choza pero esta vez estaba más cerca, a dos pasos de ellos. Tras pensarlo unos minutos decidieron entrar, no se veía muy limpia, fueron a la cocina en busca de agua y comida, pero solo encontraron media hogaza de pan y un poco de jugo rojo.
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o repartieron entre los dos y ya casi se lo terminaban cuando escucharon un ruido que provenía de la sala, se asomaron a ver y habia un niño que acababa de entrar por la puerta, estaba llorando con cicatrices en la palma de las manos y los pies, Chez se acercó a él, el niño dejó de llorar y sacó una gran sonrisa, y dijo: - Hola, gracias por estar aquí, ya casi llegan a su meta.
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Se dio la vuelta y se fue, Chez volvió al lado de Annie, se miraron por un par de segundos y salieron de la casa, y al ver a fuera notaron que ya no había más desierto y que estaban justo enfrente de la montaña, a Annie le pareció raro pero a Chez no, y corrió hacia allá, Annie lo siguió apresurada, mientras lo seguía veía a su alrededor pequeñas escenas de su vida, como cuando su mamá la peinaba en las mañanas o cuando jugaba en el bosque con Chez, entre más alto subía veía cómo transcurría su vida hasta llegar al momento en que está ahora y es cuando
llega a la cima. Chez descansa y Annie ve su canción, al acercarse se va poniendo más pequeña hasta que se convierte en un libro, ella lo toma y comienza a cantar su canción. Luego voltea a ver a chez el cual está con los ojos cerrados en el pasto, ella corre a su lado y trata de despertarlo pero no lo logra, lo abraza y llora. hasta que siente un brazo en su hombro y una voz que le dice: - No te preocupes amiga mia, yo estoy bien, no debes llorar, siempre estaré contigo así no me veas.
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lla voltea para tratar de ver quien le hablo pero solo vio una luz muy parecida a la de su canciรณn, pero esta era mรกs brillante, trata de ver pero esta se apaga, voltea a ver a Chez pero su cuerpo ya no estรก. Annie confundida se levanta y ve el libro que tiene en sus manos, lo abraza en su pecho y dice: Gracias por cuidarme...
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Fin ?
Universidad de Los Andes Literatura Infantil 2016-01