Mujer

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MUJER Para una hermenĂŠutica del siglo XXI


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1º Bachiller. Curso 2017-2018 IES Siglo XXI, Leganés Dpto. FILOSOFÍA Profesor Alejandro Tarantino Aréchega Colección

Para una hermenéutica del siglo XXI Número 1

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Imagen de portada: Safo de Mytilene. Isla de Lesbos. Grecia. Siglos VII-VI a.C.. Fresco de la Villa de los Misterios en la ciudad de Pompeya. Siglo I d.C..

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SebastiĂŁo Salgado GĂŠnesis Una mujer Tuareg. Ciega a causa de las tormentas de arena, Mali, 1985.

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La vida se ha vuelto inmensamente precaria, y el hombre, que por su mandato de masculinidad, tiene la obligación de ser fuerte, de ser el potente, no puede más y tiene muchas dificultades para poder serlo. Y esas dificultades no tienen que ver como dicen por ahí, porque está afectado por el empoderamiento de las mujeres, que es un argumento que se viene utilizando mucho, que las mujeres se han empoderado y que los hombres se han debilitado por ello y por lo tanto reaccionan así… no. Lo que debilita a los hombres, lo que los precariza y los transforma en sujetos impotentes es la falta de empleo, la inseguridad en el empleo cuando lo tienen, la precariedad de todos los vínculos, el desarraigo de varias formas, el desarraigo de un medio comunitario, familiar, local… en fin, el mundo se mueve de una manera que no pueden controlar y los deja en una situación de precariedad, pero no como consecuencia del empoderamiento de las mujeres, sino como una consecuencia de la precarización de la vida, de la economía, de no poder educarse más, leer más, tener acceso a diversas formas de bienestar. Rita Segato, La guerra contra las mujeres.

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ÍNDICE Proemio Recordando a Safo. Alejandro Tarantino I 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. II 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. III 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. IV 1. 2. 3. 4.

Historia y Cultura 15 No hay hechos, solo interpretaciones. Jessica Méndez La mirada de Ulises. Alba Álvarez Arriero Fuera de la caverna. Camal Bensiali A pesar del Idealismo. Claudia Morán Polis Urbe Metrópoli. Alex García El monstruo en la extimidad. Ainhara Castillo El muro de las sombras. Rubén García El corazón de las tinieblas. Cristian Edjang Los acantilados del fin del mundo. Cristina Blanco Contra la pobreza en el existir 48 Hambre y sed de justicia. Lidia Alcázar Los argumentos del placer. Lucía Durán El Ángel de la Historia. David Martín Sofofilia. Ester Álvarez Génesis del bien. Daniel Torres Las periferias del centro. Romina Morel Habitar las palabras. Alejandro Serrano La distopía del presente. Adrián Fernández Giró Pasión y razón. Paola Iragua Alcocer Feminización de la política 86 El segundo sexo. Yaiza Lizama Biopolítica. Daniel Requena Ética ecológica. Monserrat Gironés Minorías. Yassine El Hassnaoui El intercambio desigual. Malcom Bomaba Vivir contra la evidencia. Alberto de Amilibia Persona y libertad. Saúl Martín La escena de la representación. Sandra Díaz La asertividad del No. Noelia Fernández Solís Emancipación 127 La voluntad de poder. Marina Yunta Filosofía de la sospecha. Daniel Zarza Hita La banalidad del mal. Gabriel Sánchez La acción comunicativa de la Justicia. Rodrigo Sacara

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5. 6. 7. 8. V 1. 2. 3. 4. 5.

6. 7.

8. VI 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8.

Democracia y Desobediencia civil. Rubén Vicente Los actos nos definen. Mario de Amilibia Las masas y el yo. Daniel Gómez Realidad y Deseo. Noemi Blázquez La conquista del Sistema por el Mundo de la Vida 163 El drama de la levedad del ser. Imane Herrag La emergencia del Ello. Daniel Gutiérrez Condenados a ser libres. Camila Fernández Bellido La Marca. Cristina Corón La pasión cívica. Sentir y reírte de ello. Paula Plaza Lucha y conciencia. Nicole Solís La locura contra el panóptico. Marina García-Ballesteros Quien sufre desmiente a Hegel. Jason Bomaba Antropología de la esperanza 199 La conciencia desdichada. Adriana Pantes La mujer se hace. Sarai Robledo La fragilidad. Irene García Marzo El odio de querer vivir. Carmen Sánchez Las otras somos nosotras. Nuria Rotund La desnudez. Gisely Pereira El cuerpo enamorado. Gabriela Dimitrov Vivir sin miedo. Catherine Álvarez Epílogo Hedoné. La agonía de Eros. Alejandro Tarantino Del libro La mujer rota, el epílogo: Con Simone de Beauvoir

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Proemio

Recordando a Safo.

La poesía es una acto de emancipación1, un gesto de la palabra que ha ido desvelando lo femenino, atávico y sagrado, del ser humano; la poderosa fragilidad de la inteligencia en la herida antropológica, el nóstos que nace contra la tiranía. La poesía, nacida en la voz de una mujer, ha buscado la libertad cívica del cuerpo y la palabra, litigando contra el olvido con la feraz memoria de Ovidio2. La décima musa de la lírica abrió, entre las luces del mito y los periplos de los aedos, un camino para las sombras, para el individuo 3 que soportaría la levedad poética de las representaciones del mundo en su nombre: Safo. Y no en los símbolos de una nación, contada y sida por lo pasado. Ella, en Lesbos, fue la actualidad del estilo4, quizá la referencia semántica de la voluntad de poder, del eterno retorno y la vida para Nietzsche. El dialecto eólico, la voz del no ser del héroe y sus virtudes de guerra, su lírica en el ágora, en los que aprendieron a escuchar, y no en la batalla de los gritos y las arengas.

1 Alejandra Pizarnik. 2 Heroidas. Las Metamorfosis. 3 Claro antecedente de la aparición del segundo actor en Esquilo, esa

exégesis del yo, que será devorado por el intelectualismo moral socrático. 4 G. Deleuze. Los espolones de Nietzsche.

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La poesía es el auriga de la paideia emocional5, el sympathos en la existencia, el pathos dramático de la narración ética crítica con la fuerza. La poética venía del brillo heroico del hombre, de un lenguaje épico, sin cuestionar los valores que imponía al ethos de los ciudadanos; y entró en la claridad de una palabra de cítara y danza que se oponía a la violencia. Y hoy, como en nuestro ayer griego, el ciudadano devenido yo onanista canta la épica de lo que es lírico en el ritual de la confusión: tanta soledad, tanto solipsismo6 sin otro de ti… Al fin, por si no fuera bastante con la falta en la estructura del deseo, la carencia de amor7. La intimidad no es aislamiento, sino la topografía de la lengua de Eros, dinámica y oscura como Heráclito; la intimidad es el caos primigenio, to ápeiron de Anaximandro, es el dios del lugar poético y el ángel de las tinieblas que abundan en la palabra. La intimidad se construye en lo sensible, en la piel que el tiempo va marcando, haciéndose humano, tiempo humano donde el retorno se conoce como imposible: el instante es íntimo, y es palabra, tantas veces en los hipogeos. Esta ebriedad entre mismidad-ipseidad y nostos, es el verdadero fundamento de la Democracia como participación8 dialógica9, la urdimbre histórica y emocional de la isegoría, donde el deseo encuentra una escena para su representación, para mostrar el instante de lo sensible 5 Chantal Maillard. 6 Rene Descartes. 7 Safo: “Eros ha sacudido mis entrañas / como un viento abatiéndose en

el monte / sobre las encinas.”

8 Pedro Olalla, Grecia en el aire. 9 Jürgen Habermas.

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oponiéndose al ser parmenídeo, a lo eterno y universal del canon apolíneo, para recuperar la physis dionisíaca. Hay una línea frágil, hermosa, femenina, entre Safo y Nietzsche. Pero, la razón poética10 fue expulsada de la polis por Platón, condenándonos a la caverna luminosa del eidos, de la que nadie regreso jamás para ser amado. La melancolía de los seres que nunca nacieron a las metamorfosis, la pena de los colibríes en quietud, la canta como un revuelo de fábulas de cartón y escena la mujer; donde unicornios y alfabetos de centauros hacen llover las lágrimas de los que no llegaron a serse ella. 10 María Zambrano.

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I

Historia y Cultura

HYPATIA

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1.

No hay hechos, solo interpretaciones. Jessica Méndez

Una verdad inexistente, solo interpretaciones múltiples de los hechos, aquellos que quedan atrás en un pasado oscuro y olvidado. Esos recuerdos que ya no volverán a posarse en la memoria del ser, por desconocer lo fundamental de recordar, permitiendo que la invasión del olvido como forma de memoria, construida a base de fragmentos, esparcidos por los acontecimientos, que son gracias a que han existido. Existencia que se pierde para percibir la nada. Un poder que domina, instrumenta y controla el cuerpo y la mente, imponiendo interpretaciones 11 desde perspectivas distintas y alejadas de la realidad u objetividad tan ajena al pensar. La misma que se encuentra distorsionada ante los ojos de otros, a través de la proyección de la pulsión psíquica del deseo. El funcionamiento del Eros insatisfacible cuya esperanza es precisamente una satisfacción y felicidad inexistentes que envuelven la esperanza del noúmeno y lo encierran. Esa misma esperanza que no tiene forma ni sentido y que lleva consigo querer tener lo inalcanzable del ser, lo que nadie logrará, un vacío que jamás será colmado. Llenos estamos en nuestro imaginario de identificación e idealización, a la espera de una vida nueva 12 , produciendo así un dolor convertido en angustia, empujando a negar la realidad y no aceptarla de ninguna forma. La angustia no piensa. El soporte, palabra que construye, anima y lucha contra el discurso encargado del olvido, para no consentir 11Friedrich Nietzsche: No hay hechos solo interpretaciones.

12 Immanuel Kant: “Dormía y soñaba que la vida era bella; desperté y

advertí que la vida era deber.”

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que la nostalgia se pose y anide en el corazón que late añorando lo no vivido. Sin vuelta atrás. Aquello que queda escondido en las tinieblas del corazón, las mismas que lo oscurecen todo y no permiten el paso de la claridad. Una claridad que no es evidencia, porque nada hay que se presente de forma clara. Esa claridad por la que se espera y no llega, una tiniebla oscurecida por la falta de luz que alumbre el camino hacia un amor investido13 por un yo sin posesiones 14 . La vida que es arrebatada por el tiempo transcurrido, que se hace pasado, obligando a seguir luchando con el presente, con el destino oscurecido del día a día. Una historia llena de vida, de la que se ha perdido el horizonte y su sentido. Un horizonte que circunda el vacío. Un sentido que habita en un espacio abigarrado e idealista. La gnoseología del fragmento atraviesa la experiencia y permite el conocimiento y la determinación mediante la palabra plena; ella, la que erra dando soporte al cuerpo de corazón negro y solitario, encerrado en su propio ego, temeroso de su lucha con la locura que fascina porque es saber 15 y conocer, un saber tan terrible e inaccesible para unos y tan deseado por otros, depositado en el solipsismo del inocente. La disposición a la isonomía, para luchar contra la ignorancia del aparecer 16, de no reconocer los derechos 13 Sigmund Freud: “El que ama, se hace humilde. Aquellos que aman,

por decirlo de alguna manera, renuncian a una parte de su narcisismo.” 14 Ludwig Wittgenstein: “Siempre hay un poco de locura en el amor.

Pero siempre hay también un poco de razón en la locura.” 15 Michel Foucault: “Lo propio del saber, ni es ver ni demostrar sino

interpretar.”

16 Platón: La diferencia entre la sabiduría y la ignorancia es tener una

opinión.

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civiles y políticos. Un ignorante que no se cuestiona ni se inquieta por no asombrarse. Una ignorancia que hace de la persona un ser ausente e impensado y que no aprende y no incorpora por estar lleno de banalidades, actuando sin tener en cuenta los actos 17 . Esa consigna política que expresa de la forma mas sucinta el carácter propio de la demografía, de la masa, opuesta al ejercicio limitado del poder por parte del tirano. Una lucha para adquirir la libertad deseada por todos18, una lucha contra lo evidente, cerca del muro de las sombras19. Esas sombras narrativas que simulan una realidad engañosa 20 y superficial, proyectada por la luz de la hoguera que distrae de la realidad. Esa presencia de los engaños constantes nos hacen permanecer lejos de esa verdad, que una vez conocida ya no permite el olvido. Una luz que permita caer al vacío del conocimiento, un espacio escénico llenado por el propio vacío. El vacío del vacío. Espera ver asomarse a alguien y enseñarle lo oculto, dándole fuerza y coraje para no caer y hundirse en el territorio normalizado del propio vacío, lleno de miedo, tristeza y pensamientos negativos. Una luz que acabe con la verdad de ese territorio que ciega y no deja ver la ilustración que lucha contra la superstición y nos libera de la alienación del sentido. Esa capacidad de saber que cuanto más sé menos sé, comparado con lo que no sé. Una comunidad en el territorio de la conciencia, aquella que persigue hacer a la 17 Hannah Arendt: El mal absoluto es posible gracias a la banalidad del

mal. 18 Carl Jung: La libertad se extiende solo hasta los limites de nuestra

conciencia.

19 Platón: La libertad está en ser dueños de la propia vida. 20 Platón: El que no desea ser engañado procure no engañar.

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persona sujeto de sus actos, hacerla responsable de las consecuencias. El amor como forma de comprender el mundo, lleno de discontinuidad en la historia, junto a la hermenéutica aplicada a la epistemología y la complejidad del lenguaje, que nos lleva a formular preguntas y es inseparable de cómo se piensa y vive21. Volver a plantearse una y otra vez las raíces que permitieron nuestra existencia. Permitir el reflejo en la mirada del otro y llegar a verte tal y como el mundo te ha hecho…, ver esa primera mirada de la mujer arrojada a la existencia. Observar el paso del tiempo, los cambios producidos o esas pequeñas interpretaciones de los cambios, que siguen variando con el paso de los años; volver y darse cuenta que nada es lo imaginado, todo cambia…, la forma de ver el mundo, y ya no hay vuelta atrás. 2.

La mirada de Ulises. Alba Álvarez Arriero

Ulises parte de Ítaca, la isla de todo viaje imaginario, hacia Troya, la polis que resiste. Cuando regresa espera tener el ser que fue y tener la misma relación con el mundo que cuando partió, lo que no sabía es que nada iba a ser lo mismo. Cuando vuelves al lugar del que te fuiste no puedes esperar haber guardado el relato de lo mismo, que todo siga igual, que todo sea antes, nunca nos bañaremos dos veces en el mismo rio. Ulises partió. Una vez acabado el infierno de la lejanía y la guerra, después de los años y las duras batallas y del largo viaje por el mar de los regresos, donde tuvo que enfrentar las

21 Ludwig Wittgenstein: Los limites de mi lenguaje son los límites de

mi mundo.

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distintas pruebas que los dioses le impusieron a él y a la patria de su conciencia y a tantos que perdieron la vida o la memoria. Volvió, al mismo amor que dejó, pero él no regreso, no el mismo que partió. Al igual que el Prometeo moderno de Mary Shelley, un ser de fragmentos sin memoria, que se encamina hacia el olvido; quizá buscando sentir el calor y la empatía de los otros, quizá solo quería sentirse parte, como lo buscan todos. Esta necesidad de sentirse querido e integrado en la sociedad ayuda a construir la falta en el deseo, desde el principio la falta fue el espacio de la mujer. Hypatia de Alejandría, impartía en sus clases de filosofía un neoplatonismo que igualaba el Uno de Plotino a la Physis de Aristóteles. Se la consideraba una de las intelectuales más brillantes de la Alejandría tardoantigua. Era una mujer luchadora y lista que desmembraron los cristianos por el simple hecho de ser mujer, tener sabiduría y ser pagana; era para ellos una amenaza, como todo aquello que rompía con las normatividad cultural del patriarcado, porque de facto era un ataque al idealismo empeñado en negar el valor de la materia en la construcción de la vida. La Mujer prometeica empujando el muro de las sombras, que es el límite que hay entre lo que desconocemos y todo aquello que conocemos, la certeza de que nunca vamos a conocer todo lo que es y menos la totalidad. Ella, y él en ella, se iba dando cuenta que a medida que descubría cosas, cosas de la claridad, se percataba de todas aquellas que no sabía; y esto a él, y a ella en él, le hacía sentirse vacío porque deseaba conocer mucho más, eso era imposible, nunca iba a llenar del todo ese deseo de conocer, ya que el deseo es por definición insatisfacible. No podía saciar el deseo de conocer mucho más, porque no era aceptado por la sociedad y eso le

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cerraba las puertas de la afectividad; porque necesitamos la ayuda de otros para poder aprender y educarnos, es un trabajo conjunto de la sociedad, y como no era aceptado no podía hacer propio lo que en principio le era extraño, ni cultivarse; entonces, seguiría siendo un monstruo el resto de su vida. Se puede decir que nosotros, en cierto modo, somos la representación de ese monstruo, nosotros también somos esa reconstrucción de fragmentos, sobre todo nuestra memoria, la parte consciente e inconsciente que está construida de fragmentos de los recuerdos que tenemos y aquellos que olvidamos continuamente de forma involuntaria: la memoria es una forma de olvido y el olvido, a su vez, es una forma de memoria. Nosotros somos lo que somos porque otros han sido antes; ellos han sido olvidados para que nosotros podamos ser quienes somos, es decir, estamos construidos de fragmentos de otras personas que fueron mucho antes que nosotros y ya han quedado en el olvido. Y en su olvido cabemos. La memoria también está construida por la nostalgia, al igual que la del Prometeo moderno, esto no quiere decir que tengamos nostalgia de las cosas que ya hemos vivido porque nos gustaría volver a vivirlas, no, sino que nosotros tenemos nostalgia de todas aquellas cosas no vividas; hay que llenar ese inmenso vacío, que es el lugar del monstruo que todos llevamos dentro, ese gran e inmenso vacío lo vamos a tener siempre, es la oscuridad, y la luz es condición del vacío; porque si no te enfrentas a ese vacío no hay luz posible, porque la luz solo es posible en el vacío. Lo que nunca va a saciar esa sed de luz es la propia luz. Esa oscuridad está llena de laberintos y lo único que puede igualar la urdimbre de los itinerarios es la luz.

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Otro claro ejemplo de que somos la representación o quizá la realidad del Prometeo moderno es que también empujamos nuestro propio muro de las sombras, al igual que él, tenemos la necesidad conocer cada vez más y más allá…, pero cómo vamos a conocer aquello que queremos saber si ni siquiera sabemos lo que tenemos que conocer, ya que en mi conocimiento no existe; al igual que por mucho que sepamos de nosotros, nunca llegaremos a conocernos del todo. En conclusión, tenemos que seguir ahondando y para eso hay que buscar nuevas formas para la experiencia, arriesgarse: primero hay que vivir y luego pensar y reflexionar sobre lo vivido. Tenemos que seguir siendo nosotros, para que las próximas generaciones sean quienes van a ser gracias a nosotros, y seamos olvidados para que ellos puedan ser, al igual que otros han sido para que nosotros podamos ser. Del viaje de Ulises tenemos que aprender que nunca se regresa, porque las cosas cambian, aunque no nos demos cuenta, y nada vuelve a ser lo mismo jamás. Del muro de las sombras aprendemos que la luz no es conocer, sino que es el comienzo de la ceguera. 3.

Fuera de la caverna. Camal Bensiali

El filósofo vuelve a la caverna, ya no es el mismo, dejó de ser una sombra ignorante, abrió los ojos, hoy sería un proceso de feminización en la educación sentimental. Ahora puede ver todo desde un punto de vista diferente, y es consciente de los beneficios que brinda la enseñanza a la sociedad, por lo que decide introducirse en la caverna para ilustrar a los esclavos; pero no se puede volver dos veces al mismo sitio, uno no se baña dos veces en el mismo río. Al encontrarse con los encadenados en el fondo de la caverna, el filósofo comenzó a narrarles sobre todo lo

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que hay en el exterior, pero no le creyeron, para ellos eso no era posible, su única realidad eran las sombras, no tenían la suficiente conciencia; dominados por el miedo, le acusan de mentir; aunque en realidad no lo es, solo percibe la realidad de otra forma, él es más consciente sobre la situación que ellos; el lugar que se suponía que era seguro para el filósofo ya no lo es, ahí está en peligro. Esos inconscientes que viven en su cómoda ignorancia, son capaces de utilizar la malevolencia contra el que se suponía que era su igual, con el único fin de vivir como siempre lo han hecho. El filósofo cambia gracias a su asombro, a la libertad de pensar, y a la decisión de salir de la caverna, y la elección de regresar; fue un largo proceso, una vida. Nuestro filósofo es una mujer, que es reprimida por una sociedad que se rige por estándares anticuados. La filósofa iluminada, es incomprendida por la sociedad ignorante, y maledicente si perpetúa la voluntad de engaño; a la mujer la tacha de demente la falta de conciencia epistémica de la sociedad. El concepto Mujer está un paso por delante, y solo los locos22 podrán integrarlo en ellos. Todo comienza cuando la mujer se libera de los cánones patriarcales de la sociedad, no sabe lo que hay fuera, todo es juego de sombras, que refleja la poca verosimilitud de nuestro alrededor, por falta de perspectiva, lo único que se puede ver es un haz de luz23 a lo lejos, cuanto más se acerca a este, el miedo corre por sus venas y le da el suficiente coraje para seguir, no puede echarse atrás, la curiosidad vence, no se puede ocultar la naturaleza humana, allá afuera está lo desconocido, y tiene 22 Concepto de locura. Foucault. 23 La luz es el conocimiento.

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que descubrirse, debe desechar sus antiguas ideas, aliviarse del peso de la historia, necesita abandonar todos sus ideales24, ya que son inalcanzables e invivibles. Debe seguir adelante cueste lo que cueste, aunque el miedo a lo desconocido intente retenerla. Seguir avanzando, acercándose a la claridad; la luz es más intensa y real y a su vez aumenta el temor; progresivamente se va dando cuenta de que ha vivido y de lo que le queda por vivir, en la falsa realidad en la que existimos: es una simple representación que sin duda los habitantes del mundo exterior no aprecian, inconscientes de cuál es la verdadera realidad, que no existe, ellos solo perciben la realidad a través de las semejanzas. La luz va deslumbrándola, ¿qué habrá allá afuera?, ¿qué será de mí? Quiere volver a la penumbra, donde los ojos no duelen, volver a ser en el consuelo secreto, pero sigue adelante; ya estando afuera no puede ver nada, no comprende lo que ve, nada tiene un significado en valores para ella; sus ojos, acostumbrados a aquello que llamaba realidad, no le sirven ahora, por lo que necesita unos nuevos para poder comprender lo que le es impensable, debe modificarla, porque la verdadera realidad es aquella que no desaparece aunque dejes de creer en ella, sigue existiendo y no desaparece 25 , abandonada en lo anterior, pero teniendo constancia de ello, ya que la memoria es la creadora de nuestra historia. Desea adquirir nuevos conocimientos, conocer es recordar26, y para recordar hay que vivir y al vivir tienes experiencias que te constituyen; para ello deja de ser ignorante y comienza a ver; pasa por un proceso de 24 Sören Kierkegard, máximo exponente del anti idealismo. 25 Philip K. Dick, Quisiera llegar pronto. 26 Teoría de la reminiscencia.

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aprendizaje para poder percibir lo otro de sí y para sí, al hacerlo sale del proceso de normalización27. Poco a poco, la filósofa cambió su forma de pensar 28 al estar lúcida y entrar en un proceso de conciencia29 desdichada, este es un poco delicado, ya que se produce lentamente y a partir del pensamiento, por lo que la mujer aprende a pensar y a razonar autónomamente, se da cuenta de que la sociedad está controlada por aquellos cuyos intereses son conservadores y que principalmente limitan la educación, que es el arma más poderosa para poder producir cambios sociales serios. la educación promueve la conciencia y con conciencia la sociedad dejara de ser esclava. Estamos controlados por un panóptico 30 imaginario, nos autocastigamos moralmente y esto no nos deja independizarnos del relato consumista; solo se puede salir con una gran fuerza de voluntad, con voluntad de poder. La mayoría de iluminados empezaron a enloquecer 31 , al darse cuenta de que la única forma de cambiar el rumbo de la sociedad es la educación, que cada vez esta mas controlada y es menos accesible. La sociedad no pone de su parte, se conforma con vivir en una falsa realidad, por el mero hecho de no querer cambiar. Aunque tengan miedo no deben echarse atrás.

27 Proceso de normalización, Foucault. 28 Idea extraída de This is Wate, David Foster Wallace. 29 Simone

Weil: “Para que tu mano derecha ignore lo que hace la izquierda, habrá que esconderla de la conciencia.” 30 Idea de panóptico de Foucault. 31 Idea de locura de Foucault.

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La sociedad debe abandonar el Idealismo por ser la necesidad de un engaño32, y tener en cuenta la lucha que inicio Simone de Beauvoir. Ella fue reivindicadora de los derechos de la mujer, además de una gran intelectual comprometida con la sociedad. Beauvoir promovió el cambio desde una posición estratégica, las escuelas. Siendo maestra la Filosofía, nuestra sociedad debe pasar por un proceso de conciencia común sobre el valor de la vida, y el mundo debe ser feminizado, para que no aparten a la mujer de la polis tal cual hicieron con el poeta del tiempo y los ascensos, con la lírica de las caídas. Todo es luchar contra la apariencia. 4.

A pesar del Idealismo. Claudia Morán

El término Idealismo, desde el punto de vista metafísico, es la creencia en que el fundamento de la realidad es o pertenece al espíritu; y desde el punto de vista epistemológico es la postura que sostiene cosas reales fuera de la conciencia solipsista del sujeto moderno. El espíritu absoluto no se conmueve con la vida ni sabe del dolor, todo sufrir lo desmiente. Pensar si las preguntas no tienen fin en esto que llamamos vida, que cambia en cada vértigo que sigue a la noche. Uno de los problemas principales que se plantea el Idealismo trascendental es cómo conciliar el conflicto, aparentemente insalvable, entre objetivismo y subjetivismo. Según Schelling, parece colocar estas dos posturas como enfrentadas y, de este modo, simétricas, idealismo y realismo son ideologías contrarias entre sí, pero se presuponen y complementan mutuamente. Según la filosofía kantiana lo que conocemos no son las cosas 32 Friedrich Nietzsche.

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reales, sino ideas o fenómenos construidos a partir de los elementos, principalmente de la razón: las categorías, el espacio y el tiempo. Lo verdaderamente real o racional es poco, pero, ese poco es lo que le da sentido a todo lo que no es metafísico. Esta corriente separa la razón de la pasión, siguiendo los designios platónicos a lo largo de la historia, escisión que ha tenido mucho peso sobre la Filosofía de la Historia. Pero a pesar de ello, hay otras corrientes que han sobrevivido gracias a una lucha constante. Pasado, presente y futuro entremezclan siempre sus líneas en la experiencia del ahora. La corriente hedonista vive por y para el placer, en él el sujeto revolucionario es el cuerpo, y por ello la mujer como símbolo elloico que desrealiza la idealización cosmética del cuerpo. Desde el punto de vista psicoanalítico, Kristeva nos dirá que no hay mayor solución que recordar, a nosotros mismos através del lenguaje como forma de introspección, es decir, el lenguaje del yo posibilitando la emergencia del ello y desestructurando los valores eufemísticos de las reglas linguísticas: Lo abyecto ataca el sentido, el sentido de la realidad, para volver a reconstruirlo; lo reconstruimos y lo destruimos como hace el propio ciclo vital, para sobrevivir, ya que de lo real no se puede vivir, porque no existe una realidad o verdad como tal. El cuerpo es el elemento que más sufre esto, es decir, la diferencia que existe entre el yo y la realidad. Aceptas el cuerpo cuando sabes que deseas lo que no eres y nunca serás. El sujeto revolucionario, es sin duda alguna, la Mujer. Miller afirma que vivimos en el siglo de la feminización del mundo, aún se mantienen desigualdades de género pero el avance femenino en las últimas décadas

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es arrollador, día tras día, lucha tras lucha. La feminización del trabajo representará un modelo de creciente interés, por constituir una equidad e independencia económica donde el componente afectivo-relacional, que desde el punto de vista del capital se centra en la producción del valor mercantil de la vida, ayudará a la no cosificación de los trabajadores y al desarrollo del mundo de la vida. O es ahora, o no hay otro ahora que no vaya a ser ahora. Dicen que la noche de la razón pare la barbarie. la Luna salió la última noche de Lorca, ya nadie ha vuelto a verla. No hemos sido capaces de cambiar lo que siempre ha estado mal, la vergüenza al ver cómo el mundo había perdido su pureza o nuestra pertenencia; también, dicen, que el ser humano perdió la paciencia del cazador al ver cómo las noches eran iluminadas por las fábricas y la brea ardía y cubría la tierra. Ser parecía ser objeto. ¡Ni una menos!, en el amanecer de los colibríes. 5.

Polis Urbe Metrópoli. Alex García

La polis griega se vuelca hacia el exterior, está abierta al mundo como el propio ser a la historia, por lo que se centra en el amor y el viaje como relatos unificadores de la diversidad; así también en la Teogonía de Hesíodo y La Ilíada de Homero. Después de acabar la guerra de Troya, el deseo de Ulises es poder volver a su hogar, al cónclave de lo conocido y compartido, lejos del horror de la guerra. Lo consiguió a pesar de Poseidón y sus juegos con el destino. Y comprendió que aunque llegó a su patria nunca regresó, que la memoria de sí, lejos, nunca lo estuvo tanto, nunca dejará de viajar y seguirá en ese continuo e incesante oleaje del tiempo.

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Ulises es el ciudadano de la polis que pervive aún en la distopía de la megalópolis presente. En la polis platónica se expulsaba a los poetas, pero de no ser por los aedos jamás hubiese sido posible el alma de la democracia, ni su existencia hubiera perdurado atravesando los siglos. La democracia es el viaje y lleva el corazón de Safo, el poder de la voluntad presocrática, la cuna salvaje de occidente. La representación de la ciudad ha quedado ligada una y otra vez al pensamiento de lo que llamamos cultura. Porque la polis griega es para nosotros el signo bajo el que nació la política. Aristóteles entiende al hombre como un animal político, un animal social, constituido por cuerpo y alma, pero no separadas; por otro lado, le da un fin al ser humano, que es la felicidad, por eso su ética es teleológica y la única forma en que puedes encontrar la satisfacción es siendo virtuoso. Eros es amor -es el origen de la filosofía, el amor por el conocimiento- y palabra, tiene como objetivo en la época contemporánea reconstruir la lírica realista del cuerpo femenino, el espacio íntimo de la domus romana, de sus vías a los confines conocidos. Conceptos de los filósofos griegos y romanos que quisieron convertir las polis griegas en lucernarios de la civilización; y las urbes romanas en el orden existencial de las pasiones y la intimidad civiles. Las urbes de Roma nos dieron el amor civil. La Civitas Dei de Agustín de Hipona va hacia la oscuridad, la concepción de la luz del idealismo la atormenta, porque se recurre a filósofos que con sus pensamientos acercan la polis griega al maniqueísmo cristiano, pero les malinterpretan y pervierten sus ideas. El espacio de la mesura humana comienza a no ser habitable.

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El Prometeo moderno, todos los epígonos de Prometeo, no encuentra un espacio donde habitar: el foro de la república romana añorado por Rousseau. Y para intentar llevarlo a la metrópoli que surge en el burgo medieval y renacentista, debía pensar como los filósofos de la ciencia renacentistas, como Giordano Bruno, intentando alcanzar la utopía que llevará a un futuro sin los mitos de la alienación religiosa. Los pensamientos de los filósofos se basaban en las normas y valores morales y los principios de ordenamiento de la vida pública, del poder y del estado, porque para ellos pensar era reflexionar sobre los otros, o contra la soledad. La preocupación ética desde el inicio fue preocupación política. Para poder entender esto es necesario explicar la significación del término política para los griegos, Aristóteles definió al ser humano como zoon politikón, y las ciudades como seres vivientes evolucionaban a una mayor complejidad de la razón. Para nuestra sociedad, anclada en la modernidad, donde la política es una forma específica de la actividad social, diferente de las otras, puede parecernos una definición demasiado limitada. Pero a lo que Aristóteles está señalando como rasgo definitorio del ser humano no es a una forma entre otras de actividad, sino a un modo de actividad superior a las anteriores. La política era la actividad social de la polis, forma superior de organización de la vida humana. El marco conceptual de la política era la filosofía, la preocupación ética. Para Aristóteles los griegos eran los únicos seres humanos verdaderos, pues a diferencia de los persas, egipcios, eran capaces de establecer entre ellos relaciones regidas por la razón, y por lo tanto ser libres del despotismo, la ignorancia y la superstición. Sólo los griegos vivían en las polis y por ende sólo ellos eran libres y

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racionales, condiciones que diferencian al ser humano de los animales. La política era la vida de la polis ya que la política consistía para el ciudadano griego en su horizonte de sentido. Para un griego, no vivir en la polis consistía en no vivir civilizadamente, en no tener una vida esencialmente humana. En la urbe romana el pensamiento de los filósofos romanos era esencialmente ético. Los filósofos romanos deseaban llevar una vida buena, y había dos corrientes predominantes, Epicureísmo y Estoicismo. Los epicúreos afirmaban que el placer llevaba a la felicidad, mientras los estoicos sostenían que sólo mediante el desarrollo personal se podía alcanzar una buena vida. Para los filósofos romanos, sin virtud no había humanidad. Este aspecto moral exigía una seria disciplina de las propias pasiones para lograr el dominio del propio yo. No puede considerarse lograda la humanidad de un romano si, sobre la perfección literaria y moral, no coloca la perfección social. Según Cicerón había que partir de un estudio de los hombres libres, mientras que Séneca sostenía que seguir a la naturaleza es el ideal de perfección, afirma que la naturaleza está regida por la razón. Para Séneca el bien del hombre consistió en saber identificar su vida y su acción con la marcha de la razón histórica del mundo. El único verdadero mal es la alteración del orden. Para Quintiliano sus instrucciones retóricas tenían como fin directo la formación del orador, del político cuya labor era el orden ético a imagen de la naturaleza. Después de pasar por la urbe romana, nuestros pensamientos llegan al Renacimiento, las ideas de los renacentistas intentan pasar a una forma más evolucionada del pensar a través de la metrópoli. Gracias al humanismo renacentista, que consistía en la búsqueda de nuevos

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conocimientos para entender mejor el funcionamiento del mundo y del ser humano mediante la observación y el estudio, surgieron las primeras rupturas de las ciencias con el mundo antiguo. También la revalorización de la estética grecorromana, que consistía en la búsqueda de la belleza y la perfección ligadas a los cánones de las polis griega y de las urbes romanas, Apolo y no Dionisos habla en el foro romano. El ser humano y no Dios como eje de la historia humana; la ética para destacar los valores unificados de libertad y ciencia; el optimismo para que el hombre renacentista disfrutara de la vida terrenal; el apoyo económico a los artistas: el arte se consideró de inspiración humana. El crecimiento de la burguesía que se va haciendo más poderosa y diseña civilmente la ciudad. Gracias a los pensadores e ideas del renacimiento pudimos llegar a la ciudad moderna de los paseantes, de Baudelaire a Benjamin la ciudad se hizo símbolo y escenario. Es en ella, en su periferia, en los suburbios donde la cultura escapa al poder, donde Quignard u Onfray describen la fuerza del Hedonismo, donde Pasolini nos habla del drama barroco del siglo XX. Nunca antes vimos tanta humanidad más allá de las murallas económicas del orden civil, tanta dignidad en la historia de la fealdad que nos relata Umberto Eco. 6.

El monstruo en la extimidad. Ainhara Castillo

La polis nunca nos dejó marchar. Se esconde bajo la metrópoli en su huida hacia la oscuridad, en un viaje atemporal cuyo inicio y final se halla en la expresión más clara de lo que somos. Levantado por el latido del lenguaje su eco aún resuena sobre los adoquines; el recuerdo de una

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ciudad a la que pudiéramos regresar, donde las palabras tristes van a morir. Las bibliotecas custodian la dirección de nuestra patria 33 cuando las voces han de inundar las calles y nosotros, los herederos -¿o acaso los huérfanos?- ya no recordamos su nombre. Sapere aude34, búscame en el ágora, encuéntrame nunca. Una subversiva cadencia dirige la mirada desde el centro hacia la periferia, tapizada de antiguas y nuevas cicatrices. No hay otro lugar para el drama de lo humano. Las ruinas35 hablan más de lo que son escuchadas. La historia acuna al paseante36 entre los escombros. En su extravío los pasajes toman una nueva dimensión, su estremecimiento da vida a las calles. El tiempo ya no existe en la memoria. Quizás en su diálogo con las calles abarrotadas de gente y vacías de sentido se encuentre el punto de reunión en el que hace tanto fuimos citados. Seguimos vagando. La tormenta aguarda, oscuridad sin desatar. Y crecerá y crecerá y caeremos y nunca lo desconocido se habrá tornado tan insondable. Preparados para esto por las serendipias del camino y las bifurcaciones dolorosas, las elecciones nos atemorizan. El valor no se compra ni se pide prestado. Tú que de oscuridad eres y hacia la oscuridad vas, lucha hasta que te vuelvas polvo. Tras la frontera, lo que 33 Emil Cioran. “No se habita un país, se habita una lengua. Una patria

es eso y nada más”. a pensar”. Usado originalmente por Horacio, Kant lo convierte en el lema de la Ilustración. 35 El ángel de la historia de Walter Benjamin mira hacia el pasado y solo ve ruinas. 36 Flâneur de Walter Benjamin. 34 “Atrévete

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esperábamos ajeno y distante nos remite a nuestra propia historia. Nunca escaparemos a la más inmensa incógnita que nos pertenece. Los muros de lo desconocido se erigen allí donde hemos de reconocernos37. Nos aterra este baile en el que nadie nos reconocerá jamás. ¿Qué haremos cuando tras las máscaras solo encontremos espejos? Con los versos entrelazados y la duda revuelta nos construiremos, tus ojos a través de los míos. Retornaremos al ágora para poder mirarnos. Intimidad es ser habitado. No hay respuestas a las preguntas38 que arman este castillo de cimientos. Algún día, cuando deje de arder este viento que arrecia sin ser invitado, se abrirá la tierra bajo nuestros pies. No sé si se ha trasladado el campo de batalla o nunca estuvo fuera. Quedan aún vestigios de batallas pasadas sin pasear. En lo sensible lo hemos construido. Empuñaremos nuestra biografía o dejaremos que la vida nos olvide. Encontraremos al monstruo39 allá donde nadie devuelva la mirada. Donde el vértigo de la existencia y el deseo desborden el vacío. Forjado a partir de fragmentos por un Dios mortal, su existencia es sufrimiento. Rechazado hasta por su creador, el monstruo es expulsado del lugar simbólico de la palabra, del ágora que siempre fue un espacio común. Arrancado del Eros40 cae en lo indecible. 37 María Zambrano: “La primera realidad que al hombre se le oculta es

él mismo”. 38 María Zambrano: “La acción de preguntar supone la aparición de la

conciencia”.

39 Mary Shelley. Frankenstein o el moderno Prometeo. 40 Dios griego del amor y la palabra.

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Las paredes de su casa41 se derrumban con un leve quejido, no encuentran motivo para seguir en pie. Se desdibuja la identidad en un festín de soledades en el que el silencio 42 devora, anega y finalmente arrulla. ¿Dónde guardar sus emociones quebradas, arrastradas por el fango, si en ningún espacio se le permite la entrada? Sin pasado y sin amor se estremece desamparado, privado del secreto de la vida. Soporta un peso nunca antes soportado por nadie. Doblemente ausente, doblemente solo. Victor Frankenstein le negó a su creación el reencuentro, el retorno, el lenguaje. Se escucha en la lejanía el grito desgarrado del que nunca fue un artista43, ante su fracaso. Sin historia que lo sustente el monstruo se hunde. Nunca hubo un ser con tanta falta 44 , caminante nonato al borde del abismo. Los fríos hielos del norte siempre esperaron su inevitable llegada. El monstruo se embarca desnudo y desprotegido hacia el fin del mundo, esperando hallar en las sombras donde se produce la vida. La oscuridad se torna más inexpugnable cada instante, lo desconocido es insondable, pero es tarde para tener miedo. El monstruo lucha por retornar al ágora, el lugar simbólico de la palabra donde podría encontrarse con otros. Nostálgico de compartir un presente, su viaje es una comunión con lo sagrado, lo profundamente humano. El 41 Heidegger. La casa del ser. 42 Alejandra Pizarnik: “La soledad es no poder decirla”; “Hace tanta

soledad que las palabras se suicidan”. 43 G. Deleuze. “La vergüenza de ser un hombre: el artista es aquel que

libera una vida, una vida potente, una vida que es más que personal, que no es la propia vida.” 44 J. Lacan. “Que no me falte la falta”.

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monstruo en lo extimio45 busca la intimidad que le negaron. Busca el lenguaje que le otorgue el mundo46. 7.

El muro de las sombras. Rubén García

¿Qué sería del pensamiento si el miedo a lo desconocido y la angustia no hubieran estado presentes en el ser humano desde el inicio de su existencia? Las diferentes vertientes filosóficas que conocemos a lo largo de la historia hasta la actualidad, han tenido sus raíces en esta pregunta y otras muchas, que la humanidad se ha ido cuestionando según ha tenido conocimiento de lo que le rodea. Destacamos una figura femenina en la Edad Antigua que reflexionó acerca de la angustia producida por no poder aunar el pensamiento racional con los sentimientos. En el siglo VII a.C. aparece la denominada por Platón como la décima musa griega: Safo. Ella fue la primera mujer que comprendió el arte poético y musical de su tiempo renovándolo, dulcificándolo y adaptándolo a su estilo, para poder expresar sus ideas y sentimientos. Dedicándose a la educación de jóvenes vírgenes lesbias, fue instruyéndolas en varias artes, aprovechando esto para que desarrollaran un alto nivel emocional. La diferencia de la educación que Safo impartía radicaba en el canto a la boda y no a la maternidad, al placer del amor de pareja y no a la procreación, buscando el placer de acercarse a la 45 J. Lacan. Extimidad: “Lo que es lo más íntimo justamente es lo que

estoy constreñido a no poder reconocer más que fuera” 46 Hannah Arendt. “Acaso simplemente levantar acta del vacío entre el

poder de las ideas y el shock de la realidad, pero no para lamentarse o para manifestar alguna suerte de nostalgia, sino para retornar a las palabras, [...] son lo único que , con frecuencia, disponemos para replicar a los sobresaltos del mundo.”

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belleza. Sin embargo el simple hecho de ser mujer la persiguió a lo largo de la Historia, por expresar abiertamente sus emociones. Otro tipo de angustia queda reflejada tanto en Hamlet como Edipo. Estos son dos personajes de la literatura, que han representado importantes fundamentos filosóficos. A estas dos obras se le pueden encontrar puntos en común, ya que en ambos casos se muestra la tragedia entendida según Aristóteles: Tragedia es la imitación de una acción elevada y completa en sí misma, enriquecida en el lenguaje, presentada en forma dramática, no como narración, sino que contiene incidentes que dan lugar a la piedad y el temor. Es decir, estas dos obras Edipo rey47 y Hamlet 48 son denominadas tragedias porque mediante el texto expresan el dolor que siente el protagonista, Edipo es desterrado por haber matado a su padre y haberse casado con su propia madre; por otro lado, Hamlet muere envenenado para vengar la muerte de su padre y tiene que ver como su madre lo traiciona casándose con su tío. El tema principal, que es común a ambas obras, es la búsqueda de la verdad en sus conflictos. Sin embargo existe una gran diferencia que afecta a los dos protagonistas: se observan dos sentimientos distintos de culpa, en Edipo se presencia un sentimiento de culpa inconsciente, puesto que al final tiene que aceptar su destino eligiendo no poner fin a su vida, sino que prefiere continuar viviendo para expiar su culpabilidad inconsciente, mediante el sufrimiento. En el caso de Hamlet, la culpabilidad es consciente y se dirige hacia su 47 Sófocles, Edipo Rey (430 a.C.). 48 William Shakespeare, Hamlet (1.603).

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madre, puesto que termina perdiendo a su padre y rechaza al amor verdadero. Hamlet en su famoso monólogo, hace patente el contexto existencial sobre la vida y la muerte y la posibilidad de dar fin a su vida y así terminar con los sufrimientos que ella conlleva. Shakespeare como autor de Hamlet, pertenece al drama Barroco, donde se presenta una angustia generalizada por el miedo al “vacío o todo lo que sea desconocido”, ya que aparece la búsqueda absoluta para hacerlo evidente. Esta huida del “vacío” se plasma en todos los ámbitos, intentando rellenar todo lo que no conocemos, tendiendo incluso hacia lo recargado49. Desde que surge el pensamiento consciente, el ser humano ha experimentado un vacío existencial cuando no encuentra un sentido a su vida. Este mismo tema aparece en la obra gótica Frankenstein o el moderno Prometeo50 El personaje se enfrenta a lo desconocido, es decir al ser consciente de que no tiene un pasado, ya que ha sido castigado para la eternidad con el peso del conocimiento de su propia existencia. Víctor Frankenstein crea al monstruo robando el secreto de la vida y hace que su creación desafíe al vacío de su existencia o también denominado muro de las sombras. Debido a la falta de historia y conocimiento, se suicida no porque piense que la vida no tenga sentido, sino porque lo tiene pero no es capaz de encontrarlo. A lo largo de la historia ha habido diferentes formas de enfrentarse al muro de las sombras o vacío existencial. Ya en el siglo XX, surge la idea de que hay que

49 Aristóteles: “la naturaleza aborrece el vacío”. Metafísica, libro IX, 1. 50 . Mary Shelley, Frankenstein o el Prometeo moderno, (1.818).

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enfrentarse al miedo a lo desconocido con valor, educándonos con el lenguaje. Para ello, Heidegger51 nos muestra que no solo habitamos el lenguaje, sino que el lenguaje nos habita. Esto proviene de los filósofos presocráticos quienes buscaban persistentemente la verdad y el adentramiento en la enigmática realidad que constituye el quehacer poético a través de la palabra. En este mismo siglo, aparece la figura de la poetisa y filósofa María Zambrano, en cuya obra52 se refleja la desavenencia entre lo sacro y el acaecer humano, tema que ha sido significativo para Martin Heidegger, cuya obra ha sido la fuente de inspiración para Zambrano. Para ella el problema que afronta el hombre moderno es el haber cortado del ámbito racional los lazos de unión con todos los elementos anímicos e inconscientes que pudiesen ofrecerle un carácter sacro a la existencia, lo cual da lugar a la imposibilidad de descender a los abismos de su origen (muro de las sombras) e integrarlos a la totalidad de la vida, no como adversarios de la razón sino en concordancia con la misma. Por lo tanto, la única herramienta para enfrentarse a lo desconocido es de nuevo el lenguaje. Lo desconocido en realidad provoca que el hombre haya temido que la mujer pudiera alzarse y arrebatarle su papel dominante, al tener las mismas armas de pensamiento y lenguaje que él. Sin embargo, en los tiempos modernos la mujer ha comenzado a tener peso y opinión, reflejado en la filosofía a través de figuras femeninas relevantes como son Rita Segato, Simone Weil y Seyla Benhabib. Todas ellas han jugado un papel activista muy importante en pro de la

51 Martin Heidegger: “Sólo hay mundo donde hay lenguaje” 52 María Zambrano, Claros del bosque (1.977).

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lucha contra la desigualdad de género, social y las injusticias que afectan al día a día. Por último, haciéndonos eco del pensamiento de Rita Segato53, los feminicidios son la expresión de una sociedad que necesita de una “pedagogía de la crueldad”. Lo que debilita a los hombres, lo que los precariza y transforma en sujetos impotentes es la falta de empleo, la inseguridad, la precariedad de todos los vínculos, el desarraigo de varias formas (familia, comunidad, etc.) En fin, el mundo se mueve de una manera que no pueden controlar, de nuevo se enfrentan al “muro de las sombras”. 8.

El corazón de las tinieblas. Cristian Edjang

Históricamente, la mujer y sus valores ha sido estigmatizada bajo las estructuras de poder del patriarcado, concibiéndola como un simple objeto del mercado, y no como sujeto revolucionario. La decepción ante las limitaciones de la sociedad machista ha condicionado el ser mujer, a las mujeres concretas y reales, discriminadas durante épocas de represión y dominación. La mujer, la matriz de sus reivindicaciones, es el ideal ilustrado que define lo femenino en su saber sobre el ser; además, es la que ha transcendido la pasión, la que ha dominado el desequilibrio de nuestra sexualidad54 y no se contenta con su mansedumbre y su sitio dentro de la esfera social. La mujer moral es la que cultiva la virtud principal del amor aristotélico. Según Aristóteles, el ser humano es un ser social por naturaleza, lo que implica su desarrollo en la sociedad, por consiguiente, la mujer no 53 . Rita Segato: “Una falla del pensamiento feminista es creer que la

violencia de género es un problema de hombres y mujeres”

54 Sigmund Freud.

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puede ser despojada de su condición natural. El sujeto revolucionario no es una repetición inútil del hombre, sino el lugar donde se realiza la alianza viva del animal consciente y la naturaleza. Las diferencias entre hombres y mujeres no provienen de la naturaleza, sino de la distinta educación de los sexos, y de que el acceso de la mujer a la cultura debe venir por la transvaloración y no por la instrucción en el lenguaje del poder, prepararla para asumir todas las funciones que se encuentran prohibidas en la sociedad. A lo largo del tiempo ha tenido un papel plagado de repeticiones 55 , transmitiéndose de generación en generación: la hembra reproductora, una matriz sin derechos, esclavizada en un eco de nombres inapropiados que no define su libertad, excluyéndola de la vida pública 56 , de la escena donde pueden ser libres para pensar, libres para vivir, libres de amar y sobretodo libres para hacerse mujer57. La mujer que se hace es un pez, tiene las branquias que hacen asequible la profundidad, el discurso simbólico del Ello donde anida el corazón de las tinieblas58. Tal y como vemos la sociedad o ella nos ve, la locura afecta a todo ser humano que intenta hacer habitable el vacío; quien intenta abandonar la normalidad alienada vive en una devastadora abulia, vive cercado por el miedo, vive para ser enajenado por las instituciones de 55 Nos decía Freud que la repetición nos acerca a la muerte. 56 Reivindicar

el lenguaje inclusivo frente al imaginario machista: ser una mujer pública es ser una puta; ser un hombre público remite al altruismo político y la lucha por el bien común. 57 Simone de Beauvoir. 58 Joseph Conrad nos descubre el terror de lo inconsciente.

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la biopolítica59. Creemos, somos la eikasia60 en la caverna, no tenemos la voluntad de Aquiles, el poder de decir no y que la superestructura ideológica pare de jugar con el conocimiento sensible. La mujer experimenta una alienación más profunda porque su relación con el mundo es noética. El ser humano hace y deshace por mandatos morales, repite algo tal y como se lo pide la sociedad, llevamos el mal61 como algo común y cotidiano, sin tener la perspectiva individual de relación con el otro. Así se construye el exterminio, sin conflicto y en un silencio obediente, aparentemente sin participación. Nos bloquemos al hablar del sistema, juzgamos a los demás por sus actos sin tener en cuenta qué hay tras esa maldad. La lucidez lucha contra este imperio de lo evidente. En las tinieblas del dolor todos mostramos la procedencia, la historia de nuestra dignidad, nuestro derecho a vivir. Un dato curioso sobre la mujer en África es que no vive por si misma, vive por la voluntad del hombre y pasará sus nociones a las hijas. Ese es el problema, no aceptamos la verdad de los corazones heridos, intentamos ocultarla y cuando llega un punto en el que ya no podemos aguantar más nos quejamos de lo dañado, en el daño, por lo dañino. Esta realidad no es solo para las africanas, sino para todas las mujeres adoctrinadas en la continua alienación de su voluntad62. Cuando se habla de la mujer como sujeto revolucionario, se dice que está 59 Michel Foucault. 60 Para Platón el grado de mayor ignorancia.

¡Qué poco leída y visibilizada en el sistema educativo Hannah Arendt! Banalidad del mal: hacer algo bajo el manto del deber acrítico. 62 Nihilismo pasivo. 61

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condenada a ser libre; pero el problema de ser un estar abierto al mundo63, no solo es el hombre ni la continua alineación, el problema es que la mujer no puede construirse en ese mundo, no puede educarse sin miedo. Luego no es la mujer quien debe cambiar, como si algo en ella no funcionase, sino el mundo el que debe ser transformado radicalmente. La utopía que hemos creado es un lugar en el que los hechos y las interpretaciones fluyen como el río de Heráclito. El Feminismo, como modo de ver el mundo, te da el valor de lanzarte al vacío del conocimiento, a la oscuridad, entrar en las cosas de la claridad, recuperar el uso del lenguaje64. Al contrario que buscar elementos para cubrir nuestra realidad o aliviar las ganas de vivir. El deseo solo puede contraerse a sí mismo como una estructura de la vida en el espacio escénico, en el teatro como espacio cínico65 donde se pueda expresar el odio de querer vivir66. Sin embargo, hoy, mientras se consolidan los procesos de deshumanización, el deseo se ha ido cubriendo con todo lo que no está relacionado con él, su objeto adecuado, dictado por una pulsión enferma, es casi cualquier cosa adquirible, pagable. El espacio escénico ha de ser una obra en sí mismo que representa el amor a lo real; algo que se consigue con la voluntad de poder y, ese poder, solo puede ser adquirido con esa educación emocional del Eros. 63 Martin Heidegger. 64 Ludwig Wittgenstein. 65 Sófocles,

poeta trágico griego que define el teatro como un lugar donde se puede hablar de los problemas de la sociedad. 66 Santiago López Petit.

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9.

Los acantilados del fin del mundo. Cristina Blanco

El Hedonismo es el camino que tiene que recorrer la mujer para recuperar la categoría del cuerpo, de su cuerpo, de la luz del idealismo. Reconocer sin falsas morales que vivimos por y para el placer, en los pequeños placeres del Jardín de Epicuro. El mayor placer para el género humano debe girar entorno a la amistad y el conocimiento, y vaciarlo de falsos ídolos y de los idólatras, es decir, el placer no es bueno ni malo, simplemente existe, es, debe bastarnos. La mujer hedonista está continuamente buscando la libertad, con el ansia de la sangre, para sí y por sí, por poder estar ajena al tormento del nihilista, que no es sino el para qué de la falta de coraje. En el placer los valores están basados en la libertad del cuerpo. El ser humano debe apropiarse de su poder lingüístico para poder avanzar en el camino del conocimiento, el conocimiento es lenguaje, y este es la esencia vital del ser humano. El lenguaje es placer. Hay que apoderarse del lenguaje para poder enfrentarse a los límites del mundo. Esos límites son los acantilados del fin del mundo, en sus abismos los monstruos del totalitarismo dentellean y restañan su hambre de locura y poder. Hay una lucha en la que podemos encontrar las cosas claras frente a elementos de la realidad, es decir, la subjetividad frente a la objetividad; las cosas de la claridad que podemos encontrar en el mundo y a su vez en el lenguaje son conceptos o ideas que luchan en la lógica de la materia. Esto se puede resumir en algo tan simple como la capacidad que tiene el ser para decir. La claridad sin cosas donde ver reflejado el aura, la estética y el buen uso del lenguaje, llevan al conocimiento y derivan en la figura

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más importante de nuestra contra-historia de la mujer: no asimilar la pasión a la locura. Nosotras tenemos un modo de pensar en el que la libertad se expresa como forma para la construcción del vacío. La sabiduría se alcanza tras un viaje a través de los conocimientos y las luchas dialécticas, se alcanza la experiencia de ver las verdaderas realidades, la causa original de la realidad temporal, el origen del asombro. La mujer puede llegar a ser libre en el momento que obtenga el coraje suficiente para acercarse al borde acantilado de la libertad y de la conciencia revolucionaria, un lugar donde la luz solo es posible en el vacío, una luz que nunca debe separarse de la sombra que ella misma ha engendrado67; en este vacío, la mujer es consciente de que la única salida posible es la ética ecológica, la biopolítica, aquello que nos permite no caer en los simulacros y travestismos de la dictadura. Una vez empezado el viaje de esta revolución no hay vuelta atrás, por lo que se encuentra en un ciclo continuo, en el materialismo histórico y dialéctico de la justicia. Una de las mujeres más revolucionarias de la historia es Hypatia de Alejandría68, dicen los exegetas que era apasionada, lo era por el conocimiento y también por el amor, no había diferencia entre la pasión y la razón; pensaba que sus ideas tenían que ser apasionadas. Y en parte por ello fue asesinada por el poder político y religioso, por su unción antinatural. Esta es la voz femenina, en la historia de la brusquedad patriarcal, del 67 José Ángel Valente. 68 Hypatia: “Defiende tu derecho a pensar, porque incluso pensar de

manera errónea es mejor que no pensar”. “Conserva celosamente tu derecho a reflexionar porque, incluso el hecho de pensar erróneamente es mejor que no pensar en absoluto”

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saber y la duda. Es otra voz que se ha mantenido en silencio y que es necesario escuchar para configurar una historia de la mujer cada vez más completa. Es una de las mujeres claves para entender mejor el pasado y así comprender el lugar de su memoria en el universo delirante de la violencia machista. Por ello las mujeres deben continuar el viaje de la revolución. Hay que hacer que la pasión sea oscura, sea peligrosa para el pensamiento, y a pesar de ello elaborar discursos que digan y hablen de la certeza de que vivimos en la incertidumbre. Una gran intriga, la de no saber si es mejor quedarse en tierra o arrojarse al vacío, por lo tanto, si no te enfrentas al vacío no te enfrentas a lo indecible, a lo oculto, no habrá luz posible. El acantilado del fin del mundo equivale al vacío como forma de lo desconocido, es decir, el vacío como condición de la luz. Nosotras necesitamos el coraje para poder afrontar el gran vacío que supone estar bajo la sombra del patriarcado, ya que hemos sido arrojadas a la existencia para ser libres y ser un sujeto político y revolucionario. Otro tipo de vacío será la finalidad del ser. Está relacionado con el escepticismo de Cioran69 y a su vez con el vitalismo de Nietzsche70. Pero esto es hablar de los abismos y no del borde último de la tierra… 69 Cioran: “El deseo de morir era lo único que me importaba; por ello

he sacrificado todo, aún la muerte” “El escepticismo es la embriaguez del atolladero” 70 Nietzsche: “Siempre hay un poco de locura en el amor. Pero siempre hay también un poco de razón en la locura” “Fe es el deseo de no saber lo que es verdadero”

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La mujer, que se guiará por la razón apasionada, desarrollará el equilibrio del fin del mundo, la capacidad eidética de no ser vencida por el vértigo de la caída y, a lo largo de la vida, vivirse en todas las que fueron y serán.

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II

Contra la pobreza en el existir

MARY SHELLEY

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1.

Hambre y sed de justicia. Lidia Alcázar

Principio moral que inclina a obrar y juzgar representando la verdad y dando a cada uno lo que le corresponde, esto es la Justicia. Pero ni moral, ni juicio, ni representación y mucho menos verdad, sacian la voluntad y la conciencia humanas. No hay reciprocidad ni equidad; solo esta lucha, esta sed de ser visto en el otro… Según Platón, el hombre puede reconocer lo que es justo y acceder a la idea de la justicia por reflexión, experiencia y razón. Para él, el ciudadano justo es aquel que usa su razón según la aletheia, que tiene fortaleza y valentía y que actúa con moderación. Sin embargo, si es ignorante no puede salir de la oscuridad en la que está sumergido. Conocer el bien es hacerlo y solo aquel que lo desconoce actúa inmoralmente71. Lo primero de todo es comprender a lo que nos enfrentamos y afrontarlo del mejor modo posible. Esto se consigue con el lenguaje, que está ligado con la realidad y por lo tanto es el que nos lleva al ser. Vivimos es una sociedad que nos ahoga y nos impone una serie de normas y estereotipos que debemos seguir. Y lo peor de todo es que poca gente tiene el valor de pensar por sí misma y dejar atrás esas ideas de las que nos quieren hacer partícipes. Debemos convertirnos en homo furor72 y darnos la oportunidad de evolucionar y ser nosotros mismos, porque ser es igual a pensar73, y no hay mayor placer que ese. 71 Intelectualismo moral socrático. 72 Homo furorem: El coraje y la rabia del Homo simbolicus en Mircea

Eliade.

73 Aristóteles.

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Porque sí, el saber puede perturbarnos, no lleva a la felicidad, pero te ayuda a comprender mejor las cosas y darte cuenta de la realidad, y por lo tanto a romper con las reglas que por ir contranatura son absurdas, y pensar por nosotros mismos el orden de nuestra naturaleza, por lo que veremos el mundo como realmente lo tendríamos que ver. La justicia requiere poder, inteligencia y voluntad, y se asemeja al águila 74 . A lo largo de nuestra existencia tenemos la necesidad de resguardarnos por algún tiempo y reflexionar sobre lo que es bueno y lo que no para continuar el camino hacia una vida más enriquecedora. El águila tuvo voluntad de poder, superó los obstáculos y consiguió reorientar su vida recuperando su honor lírico, orgullo y dignidad. La justicia nace en la soledad o no es. Este símbolo está inscrito en la mujer, ya que también lucha por una renovación constante. Quieren igualdad entre clases –sí, aún existen nombradas por eufemismos-, por eso están, sin desfallecer, con el tesón de las olas, rebelándose contra la sociedad, exigiendo cambios y abriendo los ojos a los más jóvenes que todavía no saben de la crudeza en la socialización. Por tanto la Justicia es el elemento definitorio de ser mujer, y por eso antiguamente las consideraban brujas, porque eran mujeres libres que se enfrentaban a los valores de los hombres. Fueron el sujeto revolucionario de las épocas de hambre y sed y lo siguen y seguirán siendo. No estoy aceptando las cosas que no puedo cambiar, estoy cambiando las cosas que no puedo aceptar75. Los hombres las han excluido del poder, por eso lo que ellas pretenden es enfrentarse a ese mundo dominado

74 Leonardo da Vinci. Las águilas vuelan solas… 75 Ángela Davis.

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por hombres e intentar acceder al poder del que las excluyen. A lo largo del tiempo las mujeres han conseguido romper tabúes, normas y valores que cortan la relación con su ser. Siguen defendiendo a aquellas mujeres que no viven en las mismas condiciones, ya que aunque la sociedad esté cambiando, tristemente sigue habiendo personas alienadas que hace el cambio lento. Por eso hay que romper con las cadenas76 y que la mujer sea la representación escénica de la vida. La respuesta social es fundamental en la lucha para erradicar el problema, y las mujeres luchan contra la evolución retrógrada que la sociedad neoliberal capitalista ha impuesto 77. Ellas tienen que soportar continuamente atrocidades y vejaciones por una razón tan simple como ser mujer, algo que no pueden cambiar. Es por eso por lo que luchan por la libertad e intentan cambiar la forma de pensar de la gente. Todos somos libres e iguales. No deseo que las mujeres tengan más poder que los hombres, sino que tengan más poder sobre sí mismas78. A simple vista puede parecer que cambiar todo esto va a costar, de hecho cuesta y más con la pasividad de las personas ante estos problemas. Pero ponte en situación, si fueras tú el que está sufriendo todo esto, ¿no querrías cambiarlo? Ser libre no es un don, es una reconquista79. Si eres de las que quieren luchar por cambiar todo esto, adelante, pero ten por seguro que no va a ser tarea fácil. Empieza por perderte, conocer lugares nuevos, salirte de la realidad construida por la misoginia y dejar que fluyan tus ideas. Así es como empezarás a ser y por lo tanto 76 Herbert Marcuse. 77 José Saramago. La conciencia es el enemigo del capitalismo. 78 Mary Shelley.

79 Chantal Maillard.

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comprenderás la realidad, al menos una parte que ha sido secularmente ocultada. Un viaje ad infinitum comienza con el primer paso80. Piensa que si tú no te quieres, nadie lo va a hacer, y es lo primero que tienes que conseguir, quererte a ti misma para comenzar a ser y tener tu propia realidad, y eso solo se consigue de esa forma. No te dejes llevar por lo que digan los demás, a veces los demás son el problema, te cohíben y no te dejan ser tú mismo 81 . Esto no quiere decir que haya que culparlos, la culpa dejémosla para los judeocristianos, simplemente son personas que todavía no han madurado ni se han dado cuenta de la realidad y actúan como creen que está bien, porque es lo que les han inculcado desde niños. Tú, sin embargo, has decidido cambiar y luchar por lo que es justo, por lo tanto no tengas miedo a lo nuevo, y menos a lo desconocido. Deja que los demás tengan en la memoria un recuerdo de ti, de como realmente eres y no como quieren que seas. Se libre disfruta, lucha, piérdete para encontrarte y sobre todo se tú mismo. Crear biografía es garantía de una vida satisfactoria. Una vez que hayas hecho eso ya no querrás volver, habrás encontrado una forma de vivir el momento. Te habrás convertido en un viajera, en un explorador del abismo82. Porque un viajero podrá volver a sus orígenes, pero tendrá la necesidad de volver a irse, ya que es arrastrado por la pasión de perderse en la ciudad, en el propio peripathos. Sí, es duro, pero solo encontrándonos a nosotros mismo en la falta podremos comprender la historia y hacer 80 Lao-Tse. Taoismo. 81 Jean Paul Sartre: el infierno son los otros. 82 Enrique Vila-Matas.

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algo para poder cambiarla. Esta, sin duda, es la mejor manera, como hace el Angelus Novus83, que suspendido por el viento de la historia en la ciudad ve las ruinas por las que ha de transitar la filosofía. Y eso solo lo hacen los valientes, los verdaderos héroes que luchan por lo que quieren. La vida no es fácil, para ninguno de nosotros. Pero… ¡Qué importa! Hay que perseverar y, sobre todo, tener confianza en uno mismo84. Por eso es tan importante la figura de la mujer y la lucha por la justicia, para poder ser y existir en el mundo en el que nos encontramos sin la necesidad de vivir con miedo por las criaturas del idealismo social: la ética del éxito. Tener el placer de desplegar las alas hacia el futuro como haría el ángel contemporáneo, el águila de la voluntad de poder. La actividad más importante que un ser humano puede realizar es aprender para entender, porque entender es ser libre85. 2.

Los argumentos del placer. Lucía Durán

Podemos decir que Europa no solo no ha cambiado en el ámbito cultural, tampoco en el ideológico, el financiero, el educativo, el político… Las cosas ya no son como eran antes y todo sigue igual, y para cambiarlo se necesitaría una revolución global y mayoritariamente de mujeres; porque aunque el mundo haya cambiado de apariencia, no significa que haya sido un bien en sí mismo para las minorías, o al menos no en su totalidad; sigue habiendo guerras, hambrunas, desigualdad, pobreza, y un 83 Walter Benjamin. 84 Marie Curie.

85 Baruch Spinoza. Es necesario comprender para liberarse.

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totalitarismo empeñado en olvidar los Derechos Humanos… Son cosas de las que no nos queremos dar cuenta, pero están ahí. Las escuelas son cárceles en las que los estudiantes entran para aprehender 86 algo a lo que se niegan en rotundo, sin ganas ni entusiasmo, y volver a sus casas agotados después de ocho horas desperdiciadas. A la conclusión a la que se llega es que nos han hecho indiferentes, poco participativos; y no solo por esto concluimos en esta afasia del entendimiento, también por la absurda idea que tenemos de que hay que conformarse con todo lo que te echan encima, sin quejarse porque se supone que es lo políticamente correcto. Todo es renuncia87. Puede que haya muchas personas que se rebelan contra el sistema, pero como en la mayoría de ocasiones no son todas las personas que deberían ser, el efecto es poco o nulo, algo que hay que cambiar, porque la mentalidad inculcada por la pseudo filosofía de la autoayuda se basa en la pereza y en ser los camellos de carga de todas las crisis, en ser sumisos sin elección bajo las órdenes de un sistema conservador y egoísta que sólo mira por su propio bien, siempre ajeno al bien común de la vida cotidiana. Hay cosas que son imprescindibles en la vida de una persona, y el sufrimiento no es una de ellas. Dejando a un lado la incoherencia de la vida88, ¿por qué vivirla si no experimentas placer en tu día a día? ¿No sería una vida muy miserable, si así fuera? Necesitamos disfrutar, estremecernos, desear, reír, y no tenemos por qué sufrir. No podemos permitirlo, y para ello necesitamos entrar en 86 Hacer propio lo que en principio me es extraño. 87 Naomi Klein, Teoría del shock.

88 Angustia existencial: algo agotador y terrible.

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un espacio escénico propio en el que nosotros elijamos el argumento de nuestras decisiones, elegir si queremos reír o si queremos llorar, si queremos estar solos o rodeados de gente, y hacer lo que para nosotros resulte más satisfactorio. Cada uno de nosotros debemos abrir los ojos, salir de entre las sombras y mirar más allá del tradicionalismo, para conseguir una sociedad en la que el estremecimiento sea el fundamento de una estética de la resistencia89. La mujer 90 es una figura fuerte en este ámbito, porque lucha, no solo por la igualdad, sino por mejorar las condiciones materiales de todas las mujeres y de cada una de las personas del planeta, para que esto se cumpla por igual solo por el hecho de haber nacido. Por desgracia, el sistema político de las grandes concentraciones económicas y de poder no piensa del mismo modo, y es un obstáculo imponente que impide al mundo evolucionar hacia la solidaridad. En esa lucha por la igualdad se incluye la lucha contra la supremacía masculina, que está vigente desde que tenemos memoria. Desde el punto de vista hedonista el placer es lo único verdadero y por lo que vale la pena vivir, y podemos encontrarlo en las cosas más sencillas. Saber vivir con lo necesario es imprescindible, lo demás será amoral. Y ser un esclavo, el valor añadido a la mercancía, y no luchar, será inmoral. Nuestro cuerpo es un cúmulo de emociones y sentimientos revueltos y confusos donde nada es lo que parece ser, y el deseo es uno de ellos. El deseo y el placer, verdad y criterio de la vida hedonista: si satisfaces tus 89 Peter Weiss.

90 Refiriéndonos a la mujer como concepto revolucionario.

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deseos habrás cumplido el objetivo de la salud psíquica. La pulsión 91 difícilmente encontrará su objeto adecuado, ni siquiera el narcisista, estará condenada a sublimar. El hombre necesita ser homo furor y sentir la tensión, la pasión y la rabia para poder entender y desarrollar su lenguaje natural, pero es esclavo de la doctrina alienante bajo la que vive, tanto, que prácticamente desconoce la realidad detrás de ella, por lo que no le queda más remedio que refugiarse en los límites de su vida para encontrar un mínimo de libertad y disfrutar de los pequeños momentos de goce que consigue. Pero el gozar sigue siendo parte de esa peculiaridad de la sociedad de nuestros días: algo que te hace sufrir pero a la vez sientes placer, es sádico y enfermiza la forma en la que algo que te causa dolor puede hacerte disfrutar a la vez, pero es que sin ello, el hombre se ahogaría en la angustia al saber que su vida será un sinsentido. La figura del hombre es un devenir hacia el superhombre 92 , algo de lo que nos deberíamos sentir orgullosos si logramos alcanzarlo, porque significará que la revolución habrá llegado a su cumbre más alta con mujeres dispuestas a darlo todo por empujar el muro de las sombras93 y ver el mundo como es, en su complejidad y convertirlo en un lugar donde la luz se disperse y deje de igualarlo todo para poder ver la verdad que no asumimos, así derruirla con la filosofía del martillo. En la realidad en la que vivimos es difícil visualizar las sombras del yo94, pero existen y no van a desaparecer, 91 Representación psíquica del deseo. 92 Nietzsche. 93 El

muro de las sombras nos impide ver parte de la realidad del mundo, la nouménica. 94 La realidad y el inconsciente. El Yo es una herida abierta al mundo.

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porque si lo hacen significará que el mundo y la vida que nos ha tocado vivir ya no tienen solución, la realidad se alejará. Solo lamento los pecados que no he podido cometer95, y por ello tenemos que dejar de ser conservadores y buscar la seguridad. Las apariencias engañan, vivimos en un mundo de simulacros 96 en el que la igualdad es deficiente y engañosa, por eso debemos atrevernos a ser como el Angelus Novus y abrir nuestras alas cuando el viento de la historia amaine, y ser capaces de mirar atrás y ver las ruinas que hemos abandonado; porque si no estaremos quietos como gárgolas 97 mirando la vida pasar y jamás comprenderemos que no hay otros paraísos que los paraísos perdidos98. 3.

El Ángel de la Historia. David Martín

Deberíamos temer, sería lo normal, después de la visión pesimista de la historia que late en la hebra solar de la Ilustración, y sentir el vértigo del pasado en el ángel de la historia; deberíamos temer y luchar, luchar contra lo evidente, lo común y lo humano, enfrentándonos a las creencias, costumbres y leyendas religiosas, y al poder civil del dinero. Temor y lucha urden el coraje de batallar contra la obra talmúdica 99 de la indefensión y el resentimiento. Una mujer que se enfrenta directamente a una sociedad falocrática, dando una perspectiva extraña a la vida o de interpretación de la propia extrañeza, sabe que lo 95 Lord Byron. 96 Platón.

Mitos antiguos y bestiarios medievales de monstruos que se enfrentan a los tormentos del infierno. 98 Jorge Luis Borges. 99 Talmúdica: obra que recoge principalmente discusiones rabínicas sobre leyes judías, tradiciones, costumbres y leyendas. 97

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normal es que la mayoría de personas se fijen en el orden de la razón100, y no en la parte sensible; entonces, ella es realmente una forajida por querer ser diferente, por querer no ser encontrada, por no dejar ningún tipo de rastro en el limbo valorativo del patriarcado. Está luchando contra una vida aparentemente normal desde la contradicción y las acciones dialógicas101, para darle valor a la vida y un sentido social102 a la visibilidad feminista. Nos dejamos embaucar por el amor a las pequeñas cosas, nos seducen en su diferencia. Aunque, deberíamos alejarnos del dolor, de la perturbación, practicar la ataraxia, la ambivalencia con los objetos y no con la vida o las personas. Estas personas, las ambivalentes103, suelen estar padeciendo un estado anímico en el que conviven emociones opuestas. Retornaríamos al superhombre 104 , el que puede enfrentarse a la adversidad del relato idealista, el que supera cualquier tipo de obstáculo metafísico; pero, en la sociedad actual, se aprecia que veneramos más a las personas que siguen corrientes tóxicas y comportamientos abyectos105 y ruines que a los valientes. Se podría pensar que todo esto sucede porque estamos ante un mundo fugaz, cambiante. Y cada hecho podría quedar en vano o perder su levedad, 100 Alegoría o Mito de la caverna. Platón 101 Jürgen

Habermas. Una teoría de la acción comunicativa y del consenso dialéctico. 102 Nihilismo. 103 La ambivalencia psíquica viene dado por un cuadro de desvalorización o despersonalización, de inseguridad y falta de asertividad, que proyecta sobre los otros la escisión en su contrario de los sentimientos originales. 104 Superhombre o Übermensch. Friedrich Nietzsche. 105 Abyectos: actos despreciables, viles.

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haciendo que cada vez valga menos la voluntad de representación. Esto nos afecta y por eso lo pagamos con los más extraños, los más íntimos 106 ; deberíamos reírnos de nosotros mismos, ironizar rechazando muchos convencionalismos sociales, para no ser deudos de lo evidente 107. Sería algo trágico, podríamos no ser felices, pero sería un acto astuto y cruel108, ético. Increíble la manera como se comportan muchas personas cuando aprecian estos tipos de actos y actitudes, la mayoría siendo hipócritas, ya que es lo que desean inconscientemente; otros muchos violentos, con sus actitudes de rebaño y de manada. El sufrimiento con el que han sido sometidas viene del miedo de los hombres al no poder tener el control, brotando su odio e inseguridad. De manera que los hombres ciegan el caudal de su feminidad. La mayoría de ocasiones el dogmatismo proviene del ambiente en el que ha crecido y en el que se ha educado; la naturaleza propia del hombre no es la guerra. Las mujeres 109 , por su propia naturaleza, han resistido110 y han sobrevivido a los plenilunios medievales. El problema es que para ser mujer hay que dejar de ser lo que se era111, ser mujer es no ser el modo en que se está, es ser movimiento y experiencia del ser, del decir. La voz feminista busca la equidad y cambiar la sociedad en los aspectos que son más desiguales 112, porque encierran la 106 Extimidad. 107 Cinismo. 108 Niccolò

Machiavelli. La crueldad es la virtud de no prolongar el sufrimiento 109 Concepto de mujer considerado también como ‘‘revolución’’. 110 Simone de Beauvoir: “No se nace sino que se deviene mujer” 111 Infinitos modos de ser. Baruch Spinoza. 112 Enlace de feminismo y marxismo.

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voluntad de explotación. Tenemos que pelear nuestras batallas, ya que las personas que no luchan suelen ser más tristes113 , porque saben que podrían haber estado en la lucha y no lo hicieron, no participaron. Debemos entrar en los lugares desconocidos, oscuros y asombrosos por el propio encanto de ser así, pudiendo pensar en lo terrible de la vida y en cosas que son externas a nuestro entendimiento114 y lengua; incluso, de la propia metafísica, entendiendo que todo no será. Aparte, no debemos fiarnos de las ideas, ya que suelen ser falaces, de esta manera no nos quedaríamos en un lugar estanco y podríamos seguir progresando, replantearnos la forma de pensar la alienación de las emociones. Todo este pensamiento requiere ir apartando a la mayoría de la sociedad 115 , para que no se sientan intimidados por la persuasión del poder. Enseñando desde la infancia lo que el poder económico quiere, siguiendo el estilo de la antigua Grecia, prodesse et delectare, enseñar deleitando116. Para que no puedan dejarnos en un estado de impotencia, con el que nos pueden manejar y manipular117. No nos damos cuenta de que muchas cosas que suceden a nuestro alrededor son fascinantes, increíbles, por el hecho de ser cosas cotidianas y comunes118. Esto no significa que las actitudes que sean malas no se deban 113 Juan Carlos Monedero. 114 Ludwig Wittgenstein: “El sentido del mundo tiene que residir fuera

de él y, por añadidura, fuera del lenguaje significativo”. 115 Idea del desplazamiento social de Michel Foucault. 116 Horacio, Arte poética. 117 Hannah

Arendt: “Bajo las condiciones de la tiranía, es más fácil actuar que pensar”. 118 Discurso de Foster Wallace en una graduación universitaria. Los peces no se daban cuenta que viven debajo del agua porque es normal para ellos.

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corregir por el hecho de ser cotidianas, es lo primero que debería erradicarse. Además, dejaremos de idealizar, porque al considerar algo un modelo de perfección, suele ocurrir un efecto reverso y suceder lo contrario119. De esta manera nos afecta el amor, idealizando, y no la estructura narrativa del otro 120 , resultando que la persona que se enamoró de esa idealización resulte un homo furor, un sujeto que obtiene el odio de querer vivir, la mayoría de las veces ella suele preferir la soledad. Al cabo del tiempo suele cambiar a un homo ludens o un homo videns121, restaurándose y recuperándose de ese amor idealizado, pero no de su ingenuidad. 4.

Sofofilia. Ester Álvarez

Para desplegar las alas del ángel, del ángel de las tinieblas que abundan en la palabra, hay que mirar hacia el futuro, que en realidad es el eterno presente; dentro de este hay varios caminos, el de la oscuridad, el de la luz, en del miedo, el de la valentía; pero hay un único camino que esconden y en el que se adentran todos sobre las ruinas de la historia, el camino de la Filosofía. La filosofía es amor, ser es amar. Filosofía, amor al conocimiento, amor al pensamiento, amor a la inteligencia. El origen está en el terror 122 , en el miedo 123 , en las emociones, en la construcción neurológica de las creencias. O dominas al miedo, o el miedo te domina a ti, de aquí viene sacar o no la bestia que todos llevamos dentro. 119 Simone Weil: “El avaro, por ansia de su tesoro, se priva de él”. 120 Julia

Kristeva: “Ser psicoanalista es saber que todas las historias terminan hablando de amor”. 121 Giovanni Sartori. 122 Nietzsche. 2ª Intempestiva. Voluntad de poder. 123 …en el terror, en el inconsciente, en la memoria.

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Conocimiento del amor124, comprender y ser en el metarrelato, forma de conocer el mundo sobre el lenguaje. Conocer lenguaje y mundo es poder conocer el amor, a través del arte y sus apropiaciones, a través del ser sin tiempo125, este amor lleva a abandonar toda esperanza. El ser se dice de muchos modos 126 , dios, naturaleza127, música y tiempo, ser en el mundo, y también en sus antónimos. No ser es la condición de posibilidad de ser lo que quiero ser. Nos rodea el ser, habitamos la casa del lenguaje, este ser se dice de infinitos modos de ser, infinitos modos de pensar el gerundio del ser. El ser de las cosas es la materia, y por lo tanto fundamenta lo real. También nos rodea la oscuridad, lo desconocido, lo indecible, enfrentarse al vacío o empujar el muro de las sombras. Para empujar esa frontera de lo conocido hay que pensar, razonar, relacionar y argumentar adecuadamente. En ese vacío está la constelación de fragmentos que datan la memoria del monstruo de Frankenstein, este está construido por esos fragmentos, los fragmentos del olvido. Nos persiguen las sombras de lo que anteriormente hemos sido, sombra de nuestro pasado, sombras de nuestra memoria, fragmentos de nuestro olvido. Sombras de cosas que nos perturban. Todas esas sombras están en el inconsciente, nos rodean y vivimos con ellas hasta el día de la muerte. Para sentirte mejor contigo mismo debes afrontar los hechos de tu errar, sus consecuencias. El 124 Platón.

Epicuro: vivir sin miedo, miedo de no tener esperanza. Dante, La divina Comedia. 125 Martin Heidegger, Ser y tiempo. 126 Aristóteles. 127 Baruch Spinoza, Ética. Dios o naturaleza.

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tiempo apaciguará las sombras, sus fantasmas 128 nos perturban menos, pero seguirán ahí, siempre. La memoria es la mirada del otro sobre ti, lo que refleja tu historia, lo que hace diferente tu huella constituida por fragmentos del olvido, de nuestro pasado. El amor es una forma de comprender el mundo, implica respeto, confianza, comunicación, empatía, solidaridad, lucha para llegar a un objetivo. Ese objetivo se alcanza con una lucha continua en la vida, proponiéndonos retos asequibles. Otra forma de comprender el mundo es mediante el viaje, somos para amar y viajar. En la voluntad de poder se ve, más allá del hombre, estos dos relatos, para lo que vivimos: voluntad de poder, voluntad de vivir, voluntad de amar. La referencia semántica de la voluntad de poder, del eterno retorno, dan la vida para Nietzsche. El Eros lo que hace es unir este amor con la palabra a través de la representación de la mujer, a través del espacio escénico de la vida, el vacío, las ideas y las emociones. Este espacio escénico es una obra que representa el amor, no lo real, ni la realidad. El concepto de Eros se identifica con Grecia, aquí hay una separación de los conceptos eros y amor, por un lado el eros es el concepto que engloba las ideas y la geometría129, no hay creencia que soporte la luz de las matemáticas ni la sensualidad duradera de la pasión. Y por otro lado, el concepto de amor para los griegos es abandonar todo tipo de esperanza, de encuentro o ágape, es el origen de La Divina Comedia de Dante.

128 Sigmund Freud. Segundo momento del Conflicto psíquico. 129 Nadie podía entrar en la Academia Platónica sin saber geometría.

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Otro modo de sintetizar este concepto de eros en Grecia es a partir de los términos pathos y coire130, en roma será el fascinus131, el deseo humano, lo insatisfacible. Poder es locura, es la ruptura de la realidad y del lenguaje, es conocer lo oscuro, el límite, es la capacidad que tenemos de contarnos mentiras que sean siendo verdad. En el caos todos podemos ser, vamos al orden por miedo, vamos hacia lo desconocido. Enfermamos de nostalgia, de lo que no hemos podido vivir, y de lo que nos imaginamos que vamos a vivir. Querer vivir requiere mucho arte, mucha desesperación, mucho fuego. La palabra es material. Los significados de la palabra los otorga su uso y no su definición. Cuando utilizas una palabra para comunicarte con los demás, en realidad no tienes el significado completo de esta, pero sin embargo la utilizas. Cuando yo digo, digo más de lo que sé. Lo que conozco, es solo lo que creo que conozco, ni tú me conoces, ni yo misma me conozco. Porque cuanto más conocemos más conscientes somos de todo lo que nos falta por conocer, por eso el que más sabe en realidad es el que menos sabe, en comparación con el que no conoce y no es consciente de ello. El lenguaje permite comunicarnos, permite ser con los otros, el lenguaje de la sofofilia me permite decirme y a la vez me dice, hay un enfrentamiento entre mito y logos, entre la palabra que te dice, y la palabra que yo digo, siendo que ese yo es mujer.

130 Ir con, el coito de la pasión, del pathos dramático. 131 Pascal Quignard, El sexo y el espanto.

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Génesis del bien. Daniel Torres

Los Presocráticos y el Realismo ingenuo, el Fuego del devenir desafiando al Mito, nos lleva a El Prometeo Moderno y la reproductibilidad técnica. La génesis del bien nos ha traído hasta la barbarie. Mal hicimos al abandonar la Naturaleza. Heráclito afirmó que el principio o arjé 132 es el fuego, es el movimiento del ser, que se enciende y se apaga, que todo cambia según medida, y que este cambio está sometido a un cierto ritmo alterno el cual sigue unas ciertas pautas como el nacimiento y la muerte… A esta ley que todo lo domina le da Heráclito, entre otros nombres, el de Logos que es: palabra, discurso, relación, proporción, razón e inteligencia. El Logos es la explicación no mítica por medio de los argumentos que la Physis nos da. El Logos es el fundamento de todo, que todo traspasa y domina. Los primeros filósofos que se plantearon el problema de la apariencia-realidad fueron los presocráticos, entre ellos Heráclito de Éfeso y Parménides de Elea. El primero afirmaba que el arjé es el fuego repetitivo, y que los sentidos son los que nos muestran la realidad tal y como es. Sin embargo, Parménides, por el contrario, pensaba que el arjé era el ser: esférico, indivisible, quieto, inmutable, y que los sentidos nos engañan, el mundo es falso y cambia constantemente. Fueron los que intentaron dar una explicación racional de la realidad en su conjunto y de la realidad de las cosas, superando así a los autores antiguos que habían basado sus explicaciones en el concepto de mito. Basaron sus diferencias teóricas en el origen natural de la materia 132 Fundamento, comienzo.

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que nos rodea, pues su tema principal de reflexión era el problema de la naturaleza. Por tanto, el problema planteado es el siguiente: ¿Son las cosas así porque lo son realmente, o porque se perciben así?, ¿la apariencia es la realidad o depende de quien lo capte? Surgen así el realismo ingenuo y crítico. El realismo ingenuo afirma simplemente que las cosas son exactamente tal como nosotros las pensamos. Tiende a la afirmación de la realidad y no se plantea el problema. Sostiene que cuando vemos un objeto y sus propiedades, en condiciones normales, es precisamente eso lo que vemos. Heráclito, llegó a la conclusión de que todo cambia, nada permanece igual, porque es un principio básico de todo lo que nos rodea, de la naturaleza y de los propios seres humanos. Es el devenir, o cambio de las cosas, que ha estado presente desde el principio de todo, ya que, a lo largo de la historia del mundo siempre se ha mostrado a través de cambios drásticos, los desastres naturales, las guerras, las nuevas concepciones de la vida e incluso lo vemos con el transcurrir del tiempo, porque vivimos en un presente inmediato que es irrepetible. Es algo común e inevitable, pues ni el tiempo mismo está libre de los cambios: cada hora es diferente, un mismo día nunca se repite dos veces. El hombre es otro importante ejemplo del devenir, al ser afectado de diversas formas, pues se cambia físicamente con el transcurrir del tiempo, porque nunca permanecemos igual de jóvenes y se tienen que aceptar los cambios que el crecer conlleva. También nos cambia en el aspecto psicológico y emocional, ya que no sentimos de la misma forma toda la vida.

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Para Heráclito todo fluye, todo pasa y nada permanece. El fuego, que hace el mundo, se enciende y se apaga en el ciclo del eterno retorno. Compara la realidad con el curso de un río: no podemos bañarnos dos veces en el mismo río, porque cuando regresamos a él sus aguas, continuamente renovadas, ya son otras. El río de Heráclito simboliza el cambio constante de todas las cosas. Posteriormente, Platón, aborda nuevamente el problema de la apariencia-realidad. La Teoría de las Ideas, donde establece que existe un Mundo de ideas, que es perfecto y eterno, donde se encuentran las almas, y un Mundo material, el cual es imperfecto y mortal, donde se encuentran los cuerpos. Todas las cosas que existen en el mundo material son copias de las ideas del mundo perfecto. Y también una Teoría de la sociedad, donde establece que está divida en filósofos, que tienen alma racional, y piensan más allá de lo que simplemente vemos; y las almas irascibles y concupiscibles sujetas a la materia. En el Mundo de las ideas la idea del Bien es la principal entre todas ellas, pues como dice Platón, el Bien es la idea suprema, es la fuente de todo ser en el hombre y fuera de él, pues representa la máxima perfección; porque es objeto de conocimiento y a partir de ella adquieren sentido la justicia, la belleza, la verdad y todas las demás cosas. Se negará todo conocimiento objetivo, pues el tema de análisis de la filosofía se amplía abarcando cuestiones que afectan al ser humano por la dualidad cosmológica y antropológica. El Bien es todo lo que nos perfecciona, pero ¿qué es el Bien?, pues lo que es bueno para uno puede ser malo para otro, lo que está bien en una cultura puede diferir de lo que está bien o es correcto para otra. El Bien es lo deseable, lo opuesto al mal, que es lo no deseado. El mal es

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la ignorancia. El Bien se encuentra entre el placer y la sabiduría, pues es un estado del alma que no puede reducirse tan solo al placer corporal, sin tener en cuenta las necesidades del espíritu. Al participar del mundo de las ideas y, por tanto, del Bien, los hombres tienden a alcanzarlo mediante un proceso de imitación o mímesis133. La Idea del Bien es la entidad más importante de todas las entidades que se dan en el mundo inteligible: “Se trata de la idea suprema, es la causa de todas las causas, el principio del ser y de todas las ideas, de ella depende toda la realidad. La filosofía es deseo de alcanzar las ideas y la más elevada: la del Bien”. Dice Platón. Aristóteles dice que éticamente el ser humano busca como fin último su propio Bien, su perfección y por lo tanto su felicidad. Fernando Savater, al respecto, dice que “El bien es todo lo que está de acuerdo con lo que somos y lo que conviene al ser humano”. La idea del Bien es por tanto la que debe guiarnos tanto en los asuntos privados como públicos. El Bien es el fin de las acciones éticas, pues la ética tiende al logos del Bien. En este sentido la novela de Mary Shelley, Frankenstein o el Nuevo Prometeo, da lugar a un estudio profundo sobre la ética y la moral. El tema principal es la capacidad del hombre para hacer el papel de creador, de Dios, tal como lo hizo Prometeo en la mitología griega otorgando al hombre el fuego, la vida y siendo, por ello, castigado por los Dioses en su osadía. En la novela, en su ansia por crear vida, Víctor se equipara a Dios. En su

133 Es un concepto estético. A partir de Aristóteles se denomina así a la

imitación de la naturaleza como fin esencial del arte.

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arrogancia el científico se cree capar de lograr lo que hasta el momento había sido logro exclusivo de Dios: la creación de vida. La actitud del Doctor Frankenstein es la de desentenderse de algo a lo que ha dado vida. Durante siglos la ciencia se ha orientado a adquirir nuevos contenidos; la tecnología a aplicarlos y a perfeccionar los existentes. El objetivo de ambas debería ser conseguir el bienestar de la sociedad. Sin embargo, estos avances científicos y tecnológicos han dado lugar a nuevos problemas debido al uso irresponsable de la ciencia y la tecnología 134 . En Frankenstein, Mary Shelley trata acerca de los principios de la vida, pero sobre todo del sentido ético de la investigación científica. Hoy el avance de la ciencia trae nuevos problemas a los que nunca antes la humanidad se había enfrentado. Los avances de la genética o el uso inapropiado de la tecnología, ponen de manifiesto la necesidad de adoptar un marco ético que controle el progreso y minimice sus efectos negativos135. 6.

Las periferias del centro. Romina Morel

El monstruo de Frankenstein no pudo evitar nacer como tampoco pudo evitar ser creado, como consecuencia obtuvo ser desplazado y marginado por una sociedad que ni sabía ni sabe aceptar las diferencias y con la que se debe luchar para conseguir ser respetado, para hacerte un hueco en una sociedad idealista, que busca disciplinar, una sociedad que se convierte en ignorante por la falta de saber136. 134 Miguel Ángel Quintanilla. Filosofía de la tecnología. 135 Nicolás Martín Sosa. Ética Ecológica.

136 Sócrates: vicio como ignorancia (el que obra mal es porque ignora

el bien; por tanto, nadie hace el mal voluntariamente)

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Una fábrica de cuerpos sometidos al ideal, que busca un aumento de la aptitud para la anestesia y la indiferencia en los ciudadanos, y el acrecentamiento de la dominación, según Foucault. La disciplina busca un emplazamiento funcional de las personas en un espacio limitado137, que obliga a cada individuo a tener una forma concreta con la que comportarse; y cuando alguien se atreve a desobedecer de alguna forma lo establecido, lo juzgan por ser diferente, por pensar más allá de los límites o simplemente por expresar lo que muchos no dicen por miedo. Frankenstein mata porque no comprende el motivo por el que es rechazado, no tiene una historia que le ayude a sostener una respuesta, no tiene la capacidad lingüística que le dé la oportunidad de romper los límites de su mundo, el lenguaje es un instrumento para pensar como decía Wittgenstein138. El monstruo de Frankenstein no tiene la oportunidad de conocer el amor, que es la mayor fuerza que el hombre podrá conocer jamás, es el impulso de expresar emociones. El Prometeo Moderno vive en una soledad absoluta que le provoca dolor, que es la experiencia humana del mal; este es la aparición de un obstáculo que se interpone entre el deseo original de vivir y su relación con otros, también hace referencia a la impotencia que sufren los humanos y de ahí la importancia del deseo para superar dicho obstáculo. El deseo aparta el mal. 137 Foucault: “A cada individuo su lugar, y en cada emplazamiento un

individuo”.

138 Wittgenstein:

“Los limites de mi lenguaje son los limites de mi

mundo”.

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Lo peor que le puede pasar a un ser humano no es morir, sino haber nacido, nacer se convierte en un inconveniente139, darte cuenta de una existencia entre el espantosa y el relámpago. La vejez es recordar haber nacido y mirar atrás sin ira. Mary Shelley en 1818 creo al monstruo de Frankenstein a través de fragmentos, que son el olvido como forma de memoria, una memoria que utilizamos para la superación de la historia que no nos ha tocado vivir a nosotros. La autora descubrió en el Prometeo Moderno su impotencia para sublimar por la falta de historia, la dificultad para quererse a sí mismo. El monstruo es el claro ejemplo de quien ve el horror en sí mismo; estamos compuestos por fragmentos de la conciencia desdichada. ¿Quién es en realidad el monstruo? Cada uno tiene una forma de ver las cosas, una perspectiva con la que mirar. E incluso un modo piadoso de mirarse a sí mismo. Los verdaderos monstruos somos nosotros, a quienes han enseñado a rechazar todo lo que está fuera de nuestra normalidad, nos asusta ver que hay personas distintas, nos perturba saber que hay personas que se han atrevido a salir de una sociedad que impone disciplina, personas que han optado por la desobediencia civil. Mary Shelley transmite con esta obra la creación de un ser inferior y sin derechos, la visión que tiene de nosotras las mujeres el poder; nos han impuesto un orden personal que debe seguir una disciplina de la obediencia, estamos sometidas a la dictadura de la belleza, y padecemos la condena del objeto; nos programan para no 139 Emil Cioran.

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disentir, para no cuestionar, para no plantear problemas140, para estar calladas ante la falta de libertad, las mujeres tenemos la obligación con nosotras mismas de cambiar la historia, que no se vuelva a repetir el mismo error de ignorancia: el mal en manos de la barbarie. Las mujeres debemos salir de una civilización que nos mantiene encorsetadas, salir del centro y dirigirnos hacia una periferia donde podamos ser más libres y menos controladas, como proponía Foucault con la idea del panóptico, que funciona según la diferencia centroperiferia: se refiere a un centro que lo controla todo; es ahí donde convergen todas las celdas de la periferia, estas celdas son las que rodean el centro, y son nuestras almas141. Michael Foucault decía que No hay civilización sin locura. Los seres humanos vivimos, amamos, nos aislamos y morimos en un mundo que está ya definido por un centro totalitario, desde donde se dan lugares apartados, periferias, sitios ocultos o instituciones de instrucción dudosa, donde la forma de comportarse de los individuos es totalmente uniformada, donde se desvía la locura a comportamientos de desobediencia o de falta de disciplina, lo suelen calificar como actos irracionales. La finalidad del panóptico es ver sin ser visto, toda la sociedad está vigilada, siempre, sin saber que lo está siendo. Con este método lo que pretenden es que todos piensen y actúen de la forma en que el sistema social quiere.

140 Chantal

Maillard: Es fácil dejarse capturar por el control, la claridad y la seguridad de la obediencia a unas reglas sin excepciones, si nos negamos a cuestionar la existencia de la norma misma. 141 ¿Será el alma la cárcel del cuerpo?

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El autor de Mamma Roma 142 compartía la misma perplejidad del pensar que Foucault. Atraído por los olvidados que se hacinaban en los suburbios de las grandes ciudades, Pasolini nos muestra la lucha de unos seres que están casi desahuciados por encontrar un sitio, por encajar en los sueños pequeño-burgueses que nos vende el capitalismo. Según Deleuze 143 el panóptico es una máquina abstracta que se puede aplicar en cualquier situación en la que haga falta vigilar. Deleuze y Foucault pensaban que la sociedad siempre ha sido manipulada por un grupo de sectores poderosos. Durante los siglos XVIII y XIX, la represión estuvo en lugares de encierro o disciplinarios, en el caso de la mujer en su muerte civil; ahora vivimos en una sociedad de control, nos encontramos con cambios que no tienen en cuenta las condiciones reales de las personas. El capitalismo distorsiona nuestra imagen e incluso nuestra estructura… Debemos destruir ese centro-periferia, detener las disciplinas u obligaciones que nos imponen y nos quitan el derecho a pensar, a expresarnos. Las mujeres tenemos la obligación de eliminar la visión que la historia nos ha impuesto como objetos inútiles, esa idea de no se puede ser femenina sin ser obedientes144. 7.

Habitar las palabras. Alejandro Serrano

La palabra es historia, es discontinuidad. No hay hechos, hay interpretaciones; interpretamos las palabras a 142 Pier Paolo Pasolini.

143 Gilles Deleuze: filósofo francés del siglo XX. 144 Chantal Maillard.

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nuestra manera para intentar huir de la realidad. En ocasiones utilizamos las palabras en el uso discontinuo de nuestro propio inconsciente, es decir, de nuestra intimidad. Decimos palabras, estamos en diferentes situaciones de la vida sin saber exactamente lo que hacemos, o lo que no hacemos, es ahí cuando al usar las palabras y la lengua, sabemos que falta algo, usamos entonces su repetición. La repetición es lo más cercano a la muerte, por lo tanto, nosotros estamos mas cerca a morir que de vivir en un mundo donde predomina, sin duda, la desigualdad semántica. El Panóptico145 plantea la posibilidad de observar la totalidad de una superficie, del interior de una estructura, desde un único punto, sin ser visto. En algún punto de nuestra vida, al igual que en el panóptico, no vamos a existir como sujetos, simplemente por el hecho de que no nos puedan ver. Estaremos en un después del existir, no opinaremos, no decidiremos, no arriesgaremos, y la palabra por eso se hará discontinua, rota, desarticulada146. Los límites del lenguaje no es un eufemismo. La lengua no es solo un medio para comunicarse que nace de la necesidad de expresar ideas, sino que es un determinante de la sociedad que nace con ella. No solo representa los hechos de la historia, también representa preguntas, incógnitas o el futuro. La sociedad se basa en un lenguaje y a su vez el lenguaje se origina en la sociedad, es decir, el lenguaje es el producto, la manifestación misma de una determinada sociedad; por lo que al estudiar el lenguaje de un pueblo, también entendemos su cultura. Esa es la razón por la cual 145 Jeremy Benthan.

146 Vicente Aleixandre.

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hoy vivimos en esta sociedad machista, desigual, injusta, porque nuestros antepasados lograron imponer su cultura empezando por imponer su lenguaje sobre los grupos menos favorecidos como las minorías étnicas o la mujer. La compresión de este tipo de lenguaje solo se consigue por la falta de uso de la razón. Aceptarlo sería el fin de la imposibilidad de hacer continua la historia, o lo que es lo mismo, la continuidad en el sufrimiento de nuestras madres, nuestras hijas, nuestras abuelas, nuestras tías, nuestra vida, la mujer. Lo que hacemos y lo que somos es lo que da sentido a nuestras palabras. Nuestras palabras, sin embargo, no determinan lo que hacemos. En el contexto del lenguaje en el que nos encontramos, el que define la forma en la que veo el mundo -y de dicha visión dependerá directamente mi ser- es el lenguaje. El lenguaje nos habita y habitamos en él. La negación de expresar el lenguaje patriarcal para vivir en comunidad y sobrevivir más fácilmente a los embates de la violencia. Expresar emociones y pasiones hasta alcanzar la Razón poética147. La relación entre razón y pasión nos lleva a la reflexión sobre el yo de los valores femeninos. Tenemos lenguaje porque pensamos. Pensar nos lleva a la filosofía. La filosofía no tiene ningún sentido si no tiene una función práctica. No puede haber argumentación sin filosofía, y sin argumentos ni ideas no se puede luchar. La mujer tiene la obligación de luchar148. Algunos conceptos contra los que lucha la mujer: hambre, injusticia, desigualdad, crisis psicológica social. La angustia nos imposibilita luchar, es señal de alarma, incapacidad de pensar, imposibilidad física y sobretodo intelectual. Educar 147 María Zambrano. 148 Simone Weil.

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la angustia, sublimarla, es educar los pensamientos. Tenemos angustia porque no nos reconocemos ni aceptamos como somos, porque nos creemos diferentes por el hecho de que no nos aguantamos ni a nosotros mismos. La angustia agota la vida. La palabra es un simulacro, un intento de sentido, la única forma que tenemos de desaparecer. La palabra tiene que ser la base de una revolución estudiada, pensada y organizada hacia una misma dirección, la emancipación de la mitad de la población mundial. La mujer ante esta situación tiene que luchar contra los conceptos que firmemente y eficazmente, en el borde el abismo y en el pavimento de las ciudades, te pueden convertir en la bestia totalitaria, y no en el monstruo de Frankenstein o el Ángel de la victoria de la historia. Debemos ser totalmente conscientes de asumir el cambio radical de nuestro planeta, de este sistema actual donde el poder reside en los hombres que no tienen en cuenta la figura de la mujer. El desafío que hay que afrontar es que lo único que realmente importa es la inclusión. Superar este problema nos puede llevar generaciones. Se puede lograr si somos conscientes de que hay un problema y una solución. La mujer, acompañada por el lenguaje inclusivo, debe ser la Mujer: factor de cambio social y político. Construir un nuevo lenguaje en sentido metafórico sería obedecer en un sentido subjetivo a la naturaleza. El género no es a la cultura lo que el sexo es a la naturaleza, el genero es el medio cultural a través del cual la naturaleza se establece anterior a la cultura, una superficie políticamente neutral sobre la cual actúa la cultura149. Por tanto estudiar, citar y aprender desde la base el lenguaje con su 149 Judith Butler.

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correspondiente evolución natural, nos lleva a la proliferación de la continuidad de la historia, ya sin excluidos semánticos. 8.

La distopía del presente. Adrián Fernández Giró

El lenguaje es el que nos define como especie, de tal manera que incluso podemos habitar en él, nos ayuda a definirnos, a posicionarnos, tener un discurso firme frente a lo que nos desagrada; podríamos decir que el lenguaje es la mayor arma creada por el hombre, hasta el punto que si lo manipulas puedes corromper y controlar al ser humano hasta que sea un esclavo. Con el lenguaje puedes cambiar la realidad, no solo la realidad de uno mismo, sino incluso la de una sociedad entera y transformarla en lo mas oscuro que le ha ocurrido al hombre, es decir, una distopía. Una distopía es una sociedad terrible a la que no tendríamos que enfrentarnos, sin embargo la realidad en la que vivimos es una distopía. Esta se puede crear por distintos motivos, pero todas, incluso la nuestra, tienen en común la pérdida de la libertad mediante la violación de nuestra intimidad150, es lo más valioso que tenemos; la intimidad es de lo poco que nos queda en esta sociedad hipercontrolada en la que constantemente intentamos negar la realidad y nos centramos en cosas banales que nos impiden tener una conciencia para luchar en contra el poder. No tener conciencia es lo peor que nos podría pasar, porque así somos meramente marionetas que el poder puede tener a su merced y explotar a su antojo sin consecuencias, por esta razón hemos de tener presente cuál es nuestro papel en la sociedad y si decidimos pasar inadvertidos dejando que otros caigan a nuestros pies sin

150 la intimidad es la inviolabilidad del alma.

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inmutarnos, acumulando cadáveres debajo de nosotros para poder salir a flote; de esta manera el poder tiene un control absoluto de nuestra alma, arrastrándonos a lo más profundo del idealismo, no permitiéndonos pensar ni por un momento, manipulando la información y dejando que llegue a nuestros oídos lo que le interesa, manteniéndonos a raya de la cultura y el arte, para que nuestra alma este encadenada sin dejarla respirar, tapándole los ojos y los oídos frente a la realidad, manteniéndonos así como un mero clon sin la más mínima distinción con el de al lado151, desechándonos y dejándonos a un lado y apartándonos de la sociedad, manteniendo tras una raya a los que aun no han sido doblegados o que ya no se les puede exprimir ni una gota más. En cambio, los que no se doblegan son brutalmente acosados y convertidos en monos de feria, para el divertimento del rebaño, arrebatándoles poco a poco su ser y transformándolos en un objeto más de consumo. Para comprobar esto solo tienes que mirar algo mas allá de tus problemas y tener una visión algo mas global, y si no pregúntate por qué nos arrebatan todo aquello que nos permite salirnos un poco de la normalidad, creándonos problemas y conflictos que desembocan en problemas más graves solo para que el poder nos mantenga alejados de nuestro propio pensamiento. No podemos permitirnos ser nihilistas pasivos, compadeciéndonos de nosotros mismos y quedándonos al margen de todo, viendo como la sociedad colapsa, provocado por la falsa ilusión de creer que realmente tienes algo que perder; porque lo que más teme el sistema es un individuo concienciado, tenaz y sin nada que perder, es 151 Un esclavo funcional.

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decir, un héroe griego152. Hay que dejar de ser un homo insipiens ajeno a lo que pasa y convertirnos en homo furor enojado con el sistema y con la capacidad de plantarle cara de una vez por todas, no permitiendo la desigualdad de ningún tipo, siendo así solidarios, apoyándonos unos en otros y siendo mas poderosos que nunca hasta poder evolucionar como especie y sociedad hacia la voluntad de poder. Debemos luchar contra el poder, y para esto necesitaremos el tan ansiado y anhelado dolor de la conciencia, que nos permite ver el mundo tras la máscara, que nos da las alas de la libertad, que nos permite aguantar golpe tras golpe hasta nuestro último aliento de vida, la que nos quita el yugo. Una sociedad concienciada es algo muy difícil de contener, por eso la conciencia es aplastada día tras día, a veces hasta por nosotros mismo sin ningún tipo de reparo. Otra forma de luchar contra la el idealismo del poder es con la pasión de las sombras. En las sombras se haya lo desconocido, hemos de atravesar la gran oscuridad de nuestro interior y buscar nuestra libertad y nuestra conciencia, solo así podremos reclamar la dignidad intrínseca de cada persona. Debemos darnos a nuestros placeres, hemos de gozar la vida porque si no la vida no merece la pena ser vivida, la vida hay que vivirla con pasión, esta es la que nos permite tener esperanza, es la que nos permite ser, nos alimentamos de pasión153, ¡la pasión nos permitirá ahondar en la oscuridad que nos protege de la luz cegadora del idealismo!

152 El héroe griego lucha con el valor de Aquiles y la ironía socrática. 153 Vivir con pasión es alimentarse de las sombras.

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Un individuo abúlico es un simple cascarón condenado a no disfrutar de nada en su vida, tremendamente frágil. Por esa razón un ser carente de deseo y pasión está condenado a vagar sin esperanza, indiferente a todo; la pasión nos permite hacer cosas gracias a que está unida a la razón, por separado serían las palabras de un idealista creyendo que la pasión y los sentimientos cegarían la razón. Pero solo te haría adentrarte en la luz idealista y desvanecerse en ella. Hemos de educarnos en el placer, en la búsqueda de las pasiones, pero sin buscar el sentido a la vida154, la satisfacción del deseo155; la necesidad de llenar el vacío que nos provoca el deseo nos lleva a lugares que nunca hubiésemos imaginado. Vivir con pasión es pensar, es decir, una persona solo puede pensar si está vivo, y uno solo vive realmente cuando piensa, por lo que pensar nos llevará a romper nuestra coraza. La coraza es la defensa ante al mundo, dentro nos sentimos a salvo, pero nos mata lentamente, dentro de ella, es más difícil salir y plantarse frente a lo evidente cuando los muros los hemos elevado nosotros. Cuanto más nos acerquemos a la distopía menos posibilidades de quitarnos el yugo tendremos, menos cultura tendremos, hasta que el pensamiento y la conciencia mueran. Tendrán un control absoluto de nuestra voluntad y nuestros propios pensamientos 156 . Quien luchará contra la distopía del presente es un sujeto revolucionario, es decir, la Mujer. La mujer no creará una falsa ilusión de libertad, la mujer es la idónea para luchar contra la sociedad distópica, ya que ha sido la más 154 Somos seres enfermos de sentido.

155 El deseo es por definición insatisfacible. 156 George Orwel, 1984. La policía del pensamiento.

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coartada, a quien más se le ha negado su dignidad, su libertad de decisión y de expresión, aquella que ha sido tratada como verdadera mercancía, a la que se ha intentado controlar, aislar en la sociedad misógina de la toma de decisiones y a la que se ha convertido en un objeto. La mujer conoce muy bien el yugo del idealismo. Para que no triunfe es necesaria una utopía, en la que abría leyes de igualdad y de integración social, en la que se rompería el techo de cristal, en la que no se haría oídos sordos frente a la desgracia de los menos afortunados, en la que no se permitirían barbaridades. La mujer nos daría la conciencia social que tanto necesitamos para así poder acabar con el patriarcado que nos somete, con el neocapitalismo salvaje que nos vuelve bestias del dinero, y crearía políticas medioambientales. La mujer es la que nos ayudará a quitarnos los hilos del poder y darnos la capacidad de pensar. La mujer será el ángel que nos ayude a caminar por las ruinas de nuestra historia y construir una nueva sociedad juntos, será la que nos permita realmente vivir, concienciarnos de nuestras acciones, la que nos ayudará a enfrentarnos a nuestro leviatán, la que no permitirá que la corriente nos arrastre. 9.

Pasión y razón. Paola Iragua Alcocer

Los seres humanos157 somos seres que no sabemos nada de la vida, pero, argumentamos todo con cierta verdad en tanta mentira, creyendo que siempre tenemos la razón, asumiendo que tenemos conceptos de algo que no existe158. La razón es una forma de comprender y ver la 157 Khalil Gibran, El Profeta: “Pasión y razón son el timón y las velas de

tu alma navegante”

158 María Zambrano. Razón poética.

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realidad 159 . La vida sin examinar no vale la pena 160 . Si fuéramos capaces de no ser tan egocéntricos y tan orgullosos podríamos ver todo con claridad, por muy dura que fuera la verdad, si la mirásemos y la deconstruyeramos, todo para así por lo menos ver cuánta razón hay en nuestro criterio, para poder ver de una forma más clara cómo decimos y actuamos ante las cosas, veríamos que muchas veces no tenemos razón alguna. Pero eso seguirá siendo así porque si no hemos cambiado algo tan sencillo como es el respeto hacia ambos sexos ¿cómo cambiar una actitud así en todos nosotros? La razón y la pasión no se pueden separar, van tan vinculadas que separarlas es algo casi imposible. Si considerásemos desear ser y alcanzar la ataraxia nos desharíamos del enemigo natural del equilibrio, el miedo. Vivimos con miedo, sobretodo si nos centramos en las mujeres, el miedo de poder decir nuestro criterio hacia algo o expresarnos como queramos verbal o físicamente, es algo con lo que llevamos luchando desde hace siglos y casi nunca hemos sido escuchadas, este siglo debería estar marcando ya un nuevo comienzo hacia un cambio radical entre ambos sexos. La razón estética161 es una propuesta que no deberíamos pasar por alto, somos una sociedad muy egocéntrica e inculta, pero eso debería cambiar, deberíamos ganar la lucha que han comenzado nuestros antepasados, reflexionar sobre el Feminismo, haciendo ver cómo la sociedad oculta todo, deberíamos hacer ver lo oculto llamado mujer, deberíamos luchar contra lo evidente, porque el tiempo no es una categoría. Creemos que por el hecho de estar en el siglo XXI y tener tanta 159 Hegel.

160 Sócrates. 161 Chantal Maillard.

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tecnología a nuestro alrededor estamos en lo más alto, cuando vivimos todavía en la caverna de Platón, persuadimos de la verdad a todo el que nos rodea por el hecho de querer que algo sea como decimos, somos seres cínicos. Somos una sociedad que no puede separar la razón de la pasión, haciendo del yo una lírica, una poética, una ética donde los poetas de nuestro siglo nos vieran desde fuera, ver lo más íntimo que está fuera de nosotros, seríamos capaces de poder construir una intimidad162 con la fuerza de un yo frágil163. Si fuéramos capaces de poder mantener nuestra voz en lo más alto, haríamos que las críticas y pensamientos de los hombres hacia las mujeres no fueran tan denigrantes, hacer ver a esta sociedad que no tenemos los mismos valores que el patriarcado y que nuestra diferencia es la inclusión de la solidariad y la no violencia. Las mujeres no somos un objeto de la razón, sino la razón misma defendiendo nuestros derechos, derechos alienados desde el origen de la democracia 164 . No solo servimos para reproducir, sumisas, ni los hombres determinan nuestro sino según nuestro estatus social. Tenemos voz, identidad, por lo que exigimos ser consideradas ciudadanas y no ser narradas por el machismo, que en nuestra conciencia nos diría algo así como que: debíamos ser hermosas y sólo preocuparnos por nuestra imagen165, somos de carácter más débil, el fuerte de la mujer no es saber sino sentir166, la vida de toda mujer a pesar de lo que digamos 162 María Zambrano. 163 Alejandra Pizarnik. 164 Aristóteles, Platón. 165 Homero.

166 Ortega y Gasset.

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no es más que un eterno deseo de encontrar con quien someterse167, servimos para hilar y coser no para saber gramática ni hacer versos168. Este es el pensamiento de algunos hombres, ante esto podríamos basarnos en la poiesis 169 y destruir los estereotipos. Al destruir lo estereotipos de las mujeres, seríamos más libres y nos sentiríamos más fuertes y seguras, ya que hemos sido muy sumisas, actuabamos acorde a como ellos querían, éramos sometidas y nunca podíamos opinar, ya que si lo hacíamos caíamos en burlas o simplemente nuestra voz no era escuchada; es momento de cambiar todo, de hacer visible a la mujer. La razón y la pasión en ese entonces no estaban tan vinculadas ya que se juzgaba sin importar los sentimientos de un sexo hacia otro, a día de hoy se dice que esto ha cambiado, que los hombres están cambiando su forma de pensar hacia el vínculo, pero no existe el altruismo, por la misma razón que no existe el amor, lo cual lleva a pensar que esto seguirá siendo así durante mucho tiempo. La mujer nunca ha sido lo suficientemente valorada por su dialéctica, la realidad es que los hombres nos ven como objetos, que solo servimos para satisfacerlos de diferentes maneras, ellos separan la razón y la pasión a la hora de juzgarnos. Lo cual lleva a pensar que sí se puede separar la razón y la pasión, sobretodo a la hora de juzgar; pero, la mayor crítica a las contradicciones de la civilización es el fracaso al que estamos condenados los seres humanos mientras nos empeñemos en vivir por la razón y la lógica sin tener en cuenta las pasiones170. Pasión y razón de una manera u otra siempre van vinculadas pero, depende del siglo o del 167 Fiódor Dostoyevski. 168 Calderón de la Barca. 169 Platón.

170 Charles Fourier.

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pensamiento que adoptemos, el corazรณn tiene razones que la razรณn misma no alcanza a entender171. La razรณn ciega y nos vuelve sombra de la luz.

171 Descartes.

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III

Feminización de la política

MARY WOLLSTONECRAFF

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1.

El segundo sexo. Yaiza Lizama

Desde la época de Platón 172 solo vemos lo que queremos ver, vemos la proyección de las sombras, pero no lo que son en realidad, el límite entre lo conocido y lo desconocido, entre lo que sabemos y lo que no. Tenemos miedo a atravesar el muro de las sombras, el muro que nos separa de lo que sabemos y lo que no sabemos o no queremos saber. En la sociedad actual todos somos mercancía, pero no queremos aceptarlo, sabemos que lo somos, porque nos tratan como ello, pero no queremos pasar esa barrera que nos separa de la realidad. En la sociedad postmoderna que estamos viviendo, existe una gran capacidad de convertir toda cultura en una mercancía, un objeto con un precio que se sujeta a las leyes de la oferta y la demanda. Somos mercancía, pero siempre, el segundo sexo se ha visto mucho más mercantilizado, las mujeres siempre han representado mucho más el hecho de tratar a las personas como objetos173. Existe algún tipo de solidaridad en el acceso al conocimiento sobre los problemas sociales de las mujeres. El conocimiento debe ir encadenado a su vez con un proyecto político necesariamente solidario. En los estados de bienestar la solidaridad se presenta como virtud para 172 Filósofo del siglo IV a.C. que relató El mito de la caverna. 173 Simone de Beauvoir: "Ahora bien, lo que define de forma singular

la situación de la mujer es que, siendo como todo ser humano una libertad autónoma, se descubre y se elige en un mundo en el que los hombres le imponen que se asuma como Alteridad; se pretende petrificarla como objeto, condenarla a la inmanencia, ya que su trascendencia será permanentemente trascendida por otra conciencia esencial y soberana.”

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enfrentar las situaciones que viven algunos grupos concretos Desde que somos homo ergaster nos basamos en la solidaridad pero no somos solidarios. Solo podemos luchar contra que nos conviertan en mercancía, nos alienen; nuestra arma para luchar contra eso es la solidaridad social, política, ética y económica El Feminismo es una teoría y una práctica sobre la solidaridad entre las mujeres y también entre algunos hombres. Las feministas se plantean acabar con la situación de inferioridad, opresión y subordinación que los hombres ejercen sobre las mujeres. Existen individuos que pueden ser o no ser solidarios, pero eso es una decisión o pensamiento individual. Para que pueda haber justicia hay que proclamar unos derechos que sean iguales para todos y que se apliquen por igual a todos(as)174. En todo caso la virtud clave es la justicia. No hace falta ser solidarios en un lugar donde predomina la justicia. La solidaridad es la condición y complemento de dicha virtud que permite completar sus deficiencias. Cuando no hay dolor, cuando hay justicia, no se necesita la solidaridad. Parece mentita que en pleno siglo XXI sigan habiendo personas (tanto hombres como mujeres) que ni han pasado ni pretenden pasar el muro de las sombras entre la idea que tiene de la mujer y lo que es la realidad. 174 Victoria

Camps: La solidaridad consiste en "mostrarse unido a otras personas y grupos compartiendo sus intereses y sus necesidades, en sentirse solidario con el dolor y el sufrimiento ajenos. La solidaridad es una virtud que puede ser entendida como condición de la justicia y como aquella medida que, a su vez, viene a compensar las insuficiencias de esa virtud fundamental."

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En las sociedades donde las mujeres luchan por la igualdad política, la igualdad laboral y el dominio del propio cuerpo, muchas de ellas asentadas en los puestos de decisión y de poder, deben dar mas importancia a los parámetros de su lucha. La feminización de la política supone transformarla, cambiar el orden de prioridades e incluso la noción de lo que es o no importante. Esto incluye hacer muchas cosas, hacer un cambio radical de lo simbólico, de lo económico, de lo cultural…, pero si no conseguimos hacer un cambio ideológico respecto a la mujer, hacerlo civilmente, va a ser imposible. Ante la constante crítica surgida en las sociedades occidentales acerca de que el espacio público se está desgastando, el movimiento de mujeres debe revitalizar y reconstruir ese espacio público a través de la constante subversión y cuestionamiento del modelo de poder que estructura los espacios sociales, políticos, laborales... actuales. Las mujeres blancas occidentales están en el espacio público, en el foro público, sus voces tienen posibilidades de ser escuchadas, ya no pueden seguir siendo víctimas del sistema capitalista, sino que deben crear un discurso revolucionario donde las normas de dicho sistema se vean y se oigan no como normales sino como anormales. El movimiento de mujeres debe plantear otras reglas de juego para la sociedad, como una crítica al sistema sociopolítico y laboral del modelo capitalista y democrático, no por el hecho innato de ser mujeres, como el feminismo y el posmodernismo piensan, sino por el

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hecho de ser sujetos, iguales, para pensar nuevos modelos de convivencia dentro del espacio público y privado.175 Sólo sintiendo y viendo a la mujer como el otro, el segundo sexo o como el sexo débil se puede entender la anulación, tanto a nivel de palabra como a nivel corporal, en el que viven la mayoría de las mujeres de todo el mundo. Son muchos los hechos que hablan de este silencio al que es reducido el discurso de las mujeres. Debemos luchar juntos, no hay otra posibilidad, por eso es necesario el discurso ético y político y conviene evitar la autocomplacencia, sobre todo cuando se advierten síntomas de retroceso, un retroceso que se refleja en el sistema socio-político de los estados occidentales. La idea de Simone de Beauvoir de que la liberación de la mujer sólo se conseguiría a través de la independencia económica, es una idea que parece que se ha realizado, por lo menos, entre las mujeres blancas de los países occidentales, pero nadie se debería conformar con eso, no solo las mujeres así son las que deben evolucionar socialmente, si no todas y para ello la solidaridad y la justicia es lo único realmente necesario. La única solución a todo esto, que entre todos hemos creado, es plantearnos las cosas, pasar ese muro de sombras intentando ser solidarios, dejando de ser mercancía y lo mas importante, dejando de hacer a las personas mercancía, y en especial a las mujeres, ya que

175 Simone

de Beauvoir: "Desde mi punto de vista la tarea real del feminismo sólo puede ser la transformación de la sociedad a partir del pensamiento subversivo de la mujer con respecto a la estructura social, política, cultural y laboral generada por el sistema patriarcal de corte capitalista y democrático."

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metafóricamente hablando lo son mucho mas que los hombres.176 2.

Biopolítica. Daniel Requena

El hombre moderno depende de lo artificial y vive permanentemente insatisfecho y en un estado de temor y debilidad, esclavo de todo lo que está fuera de él, con una inquietud permanente y alejado de su ser natural. El hombre es competitivo y vive separado de la naturaleza, por ello se origina la desigualdad social. Después de lo cual, se busca excluir al hombre del conflicto, convirtiéndole en un cuerpo social que se normaliza por medio del lenguaje, que delimita la dirección de una persona hacia la oscuridad, hacia el vacío del alma humana. Gracias al lenguaje podemos determinar nuestro propio consentimiento voluntario177 y no tener que enfrentarnos a las estructuras de las creencias, que a su vez estas son tan fuertes que permiten que algunos tipos de violencia se justifiquen o ni siquiera sean considerados como violencia. Así, vemos que no se habla de asesinatos sino de bajas, y que no se menciona la guerra sino la lucha por la libertad178. Una libertad inexistente constituida por la manipulación del lenguaje que carece de fronteras porosas179; en ella el poder controla el pensamiento en un proceso de normalización, 176 Simone de Beauvoir: “No se nace mujer: una llega a serlo.” 177 Consentimiento voluntario. Teoría democrática de Seyla Benhabib:

Cuando nace una persona, no debe ser considerada automáticamente como pertenecientes a una religión o una cultura. 178 Frase de Judith Butler sobre los distintos tipos de violencia y la manipulación del lenguaje. 179 Fronteras porosas. Teoría democrática de Seyla Benhabib: Cada persona tiene el derecho a ir donde quiera, sin temer la hospitalidad se sus huéspedes.

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donde el mercado es el verdadero regulador de la sociedad, y los hogares y escuelas son instrumentos de las superestructuras para reafirmar su poder. Por ello en el pensamiento foucaultiano se vinculan las micro prácticas sociales con la organización del poder. Además, la impugnación de la ficción moderna de un sujeto fuerte y constituyente, y la idea de un sujeto mas bien constituido por el discurso y las prácticas de poder, son el pilar del pensamiento estructuralista. Las bases de este pensamiento han ido originando a lo largo del tiempo, la crítica feminista contemporánea, que propone el género como construcción cultural y social. Dicha crítica viene definida a partir del constructivismo de Simone de Beauvoir, donde declara que la mujer no nace, se hace 180 . A partir del constructivismo, el feminismo inicia una ruta que trata de analizar cómo se construye la diferencia femenina y cómo esa construcción se superpone a la frontera puramente biológica entre los sexos. Dicha deconstrucción guía al entendimiento de la subjetividad femenina a una diferencia natural entre los sexos. Sin embargo, la diferencia entre lo natural y lo cultural, y nuestro acceso a la naturaleza siempre está definido por construcciones de sentido. El pensamiento femenino explica la división de géneros como la constitución de un orden sociopolítico para reproducir las relaciones de sometimiento de un sexo a otro, ya que el ser humano no es ni femenino ni masculino. Los sexos distintos no están para establecer y señalar una diferencia, sino que sirven solamente para la 180 Frase sacada de su famosa obra de 1949 El Segundo Sexo, una obra

muy importante no solo para el pensamiento feminista sino para el pensamiento del siglo XX.

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reproducción. La única característica esencial radica en el alma dotada de inteligencia181. Foucault en su obra La Voluntad de saber realiza una critica radical a posiciones izquierdistas que criticaban una supuesta represión de la sexualidad, así como proponían la transgresión sexual como forma de transgresión política. Y es que, desde una perspectiva foucaultiana, el poder no solo castiga y reprime; sino que se trata de un aspecto positivo que nos hace ser de una manera determinada, deseando ser de esa manera. Este poder no solo reprime formas de vida inadecuadas, sino que, construye formas de vida adecuadas; por tanto, el poder tolera y favorece unas transgresiones tolerables a la vez que impide otras transgresiones intolerables políticamente. El pensamiento estructuralista ha logrado avanzar hacia una nueva concepción del poder, esta nueva concepción encara las relaciones entre los sexos. Cuando la critica feminista retoma el pensamiento foucaultiano sobre el saber y el poder, este pierde sentido entre lo puramente biológico y lo culturalmente construido. A lo largo del tiempo lo culturalmente construido ha ido limitando a la ética ambiental, que considera las relaciones éticas entre los seres humanos y el medioambiente, y prescribe una respuesta ética apropiada para asegurar la preservación o restauración de dichas relaciones. Esta limitación se ha ido convirtiendo en la fractura de las relaciones éticas entre los seres humanos y el medioambiente, lo que ha provocado un estancamiento 181 Marie Le Jars de Gournay, una de las ideas sobre la igualdad de

hombres y mujeres de su obra Escritos sobre la igualdad y en defensa de las mujeres.

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del sentido de nuestro conocimiento, una lucha contra el idealismo gnoseológico182. El medio ambiente condicionó la evolución de nuestro pensamiento; con el paso del tiempo al someter al medio ambiente a un proceso de industrialización, ha ido involucionando nuestro pensamiento. Esta involución se ve reflejada en la violencia de género, ya que el hombre se ha convertido en un hombre primitivo que no es ni racional ni social, es fuerte y no tiene necesidades morales ni intelectuales183, solo busca una sociedad establecida por la política, donde manda el poder. El poder decide qué es la verdad, dicha verdad define lo correcto y lo incorrecto, la bondad y la maldad. A través de esta verdad, el poder controla el pensamiento en un proceso de normalización, acotando el lenguaje y el discurso de la población. Supuestamente vivimos en un régimen democrático, que posibilita la participación de la población en la toma de decisiones, pero realmente nos aproximamos a una nueva versión del despotismo ilustrado. Todo para el pueblo pero sin el pueblo184 donde actualmente “todo para el pueblo” se convierte en un “todo para ellos” a través de la corrupción y donde “sin el pueblo” se convierte en una realidad haciéndonos creer una inexistente igualdad social; un gran ejemplo es la gran brecha salarial entre mujeres y hombres. Su objetivo es que suframos una Idea defendida por René Descartes en la que sustenta el conocimiento humano en general, en cuanto, a su origen, su alcance y su naturaleza. 183 Conclusiones de Jean-Jacques Rousseau en su propio análisis reflexivo. 184 Frase originada a finales del siglo XVIII en Francia como lema del despotismo ilustrado. 182

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industrialización que extermine nuestro lenguaje, nuestro discurso; que nos lleva a la oscuridad, al vacío del alma. 3.

Ética ecológica. Monserrat Gironés

Conciencia ecológica, aquello que debería primar en nuestras vidas para su perfecto desarrollo. Para nuestra desgracia, en el mundo en el que vivimos, lo primordial de la conciencia se sustituye por el poder, un poder corrupto e interesado que no alcanza a comprender el mañana de una naturaleza explotada y contaminada hasta alcanzar el riesgo de nuestra supervivencia. El poder llega al mundo sin ninguna clase de ética 185 , por lo tanto podríamos decir que en nuestras vidas casi que está extinta esa parte de la filosofía o incluso la filosofía en sí, esto es una consecuencia del discurso del poder, que no le interesa que las personas piensen y evalúen por sí mismas el bien o el mal que hay en la relación que existe entre la moral y el comportamiento humano. Al extinguir la filosofía también dejamos apartada la memoria, que pasa de ser una forma de olvido 186 al olvido total187 y completo de las barbaries188 de nuestra sociedad actual y de la anterior. 185 Gaylord Nelson: “El tema más importante sobre el medio ambiente

es uno que rara vez se menciona, y es la falta de ética de nuestra cultura.” 186 Auschwitz como proyecto de olvido. 187 Justicia como lo contrario a el olvido.

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Todo esto se traduce en información que es ocultada a la sociedad o simplemente manipulada para hacernos ver una realidad totalmente ficticia en la cual no vivimos, pero nos determina. Una de las cosas que nos deja ver la venda que nos colocan en los ojos es la ética ecológica. La Ética ecológica no es sino una rama de la filosofía, que controla las relaciones que tiene el ser humano con el medio ambiente, esta tiene su sede en la política, pero más concretamente en el proceso de feminización de la política. ¿Y de qué carecemos sin esta feminización de la política? Pues además de la falta de conciencia, sin esta carecemos de futuro189 en todas las partes del mundo, al igual que el no poder tener una vida digna durante nuestra estancia en el planeta tierra. Pero estas carencias, no solo juegan con el modo de vida de la gente, sino que juegan con lo más valioso que tenemos en este momento, que es la vida de un ser humano; ellos simplemente deciden quién tiene derecho o quién puede vivir o no una vida digna. Y si, tal y como expresé en el párrafo anterior, somos los títeres de los que ejercen el poder en esta 188 Simone

Weil: “Lo que habían padecido los judíos no suscitaba interés.” 189 Sylvia Dolson: “La naturaleza es inagotablemente sostenible si cuidamos de ella. Es nuestra responsabilidad universal pasar una tierra sana a las futuras generaciones”

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sociedad190, hasta el punto que se le da más valor al dinero, el poder, lo material y la “buena vida” a la que solo pueden aspirar unos pocos, que a una vida humana digna, entonces ¿qué hacer sino jugarse la vida en la lucha? Nosotros, incomprensiblemente, apoyamos la postura idealista ejerciendo la banalidad del mal e ignorando el problema, aceptando lo que se nos da, que es mínimo, y dejando a un lado nuestra conciencia de la situación, de los demás, y no recordando que eso no es la primera vez que ocurre en la historia del ser humano. Porque un punto importante a mencionar es que los que nos manejan y están en el poder, son elegidos por nosotros, o eso creemos, y por el conjunto de personas con el cual convivimos, la sociedad y su deriva. Por lo tanto dejamos que ejerzan el mal, mientras que a nosotros no nos afecte y podamos seguir viviendo una vida cómoda y segura, pero como auténticos esclavos. Esclavos del poder del comercio191, de la plusvalía de lo material, de no pensar que al comprar cierto producto podríamos estar contribuyendo no solo a nuestra propia esclavitud, sino también a la esclavitud de otros e incluso del espacio en el que habitamos, el planeta tierra. ¡Qué paradoja haber convertido la tierra en una esclava! Así, con este pensamiento estaremos constantemente en tensión 190 Charles Baudelaire: “La estrategia del diablo es hacernos creer que

no existe”

191 Mahatma Gandhi: “La tierra provee lo suficiente para satisfacer las

necesidades de cada hombre, pero no la avaricia de cada hombre.”

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entre la idea de explotación y conciencia192, en cuanto al comercio del ser humano193 se refiere. Solo conseguiremos despertar la conciencia y memoria de las personas desde la educación, que es la única solución para que no se repitan los mismos errores de la historia en el futuro. Pero esto solo se conseguirá si y sólo si es una educación194 pura, llena de valores y sin ninguna clase de censura por parte del poder para que cada persona tenga una 195 identidad adecuada, con los profesores como las figuras de lucha contra la influencia del poder en nuestras vidas cotidianas, para acabar con él o saber combatirlo. Identidad en la diferencia para no entender el consumismo196 como una forma de realización de la vida humana, sino como algo prescindible. Volviendo sobre la idea de que no existe un 197 futuro ni para nosotros ni para los que vienen, si o si nos tenemos que posicionar en lo que estamos haciendo con el medio ambiente198. La oferta y la demanda es una de las corrientes que más afectan al medio ambiente y por lo tanto a todas las 192 La vida sin conciencia no merece la pena. 193 Nos han convertido en el valor añadido de lo que se produce. 194 Aldo Leopold: “Una de las penas de una educación ecológica es que

uno vive solo en un mundo de cicatrices.” 195 ¿ Que vamos ha hacer con lo que han hecho de nosotros? 196 Personas vacías. 197 Rigoberta

Menchú: “Si el mundo no aprende ahora a respetar la naturaleza, ¿qué futuro tendrán las nuevas generaciones?” 198 Terry Swearingen: “Vivimos en la tierra como si tuviéramos otra a la que ir.”

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vidas del planeta tierra, en cuanto a la extracción masiva de materias primas y el consumismo que dirige nuestras vidas. Pero, ¿cómo contribuimos a la oferta y la demanda?199, pues aumentando las ganancias de las grandes empresas200, que tienen en cuenta sobretodo los beneficios y dejan de lado los riesgos o daños201 en el medio y al estado de las personas. Esto no es regulado por nadie, porque la única manera posible de hacerlo es cambiando los modelos económicos de un país en función de una economía global humanizada. El poder de políticos y su servilismo a los grupos de influencia de las empresas, que no van a perjudicar su estado de bienestar poniendo políticas respetuosas con el medio ambiente que les hagan sacar menos beneficio determina la vida de millones sin control democrático. Pero como la historia anterior se lleva repitiendo desde tiempos inmemoriales, en los cuales no ha habido moderación ninguna, están empezando a llegar y a afectarnos problemas muy grandes como el calentamiento global o el agotamiento de materias primas de nuestro planeta por su uso masivo 202 , es que si esto se llega a producir de manera total, pocas personas sobrevivirían al impacto en sus vidas, porque en este punto de la historia 199 George

Orwell: "El hombre es la única criatura que consume sin producir". 200 Eugenesia convertida en globalización; todo el mundo con lo mismo. 201 Todo se vende, todo tiene un precio por lo tanto nada tiene valor. 202 Nietzsche: “El que nos encontramos tan agusto en plena naturaleza proviene de que ésta no tiene opinión de nosotros.”

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todo el mundo depende de las materias primas, porque las energías respetuosas como las renovables no se desarrollan por interés de unos pocos, y las que se llegan a desarrollar y salen a flote, siempre tiene un obstáculo económico. Dinero, dinero, dinero siempre el dinero y es que actualmente es el único motor de nuestras vidas, muy pocos pueden decir que su vida no es manejada por él, es lo que decide qué se queda y qué se va, o qué simplemente desaparece sin dejar ningún rastro, pero esto es elección personal de la mayoría de personas que habitan la tierra, porque si participamos en los problemas203 que nos tocan vivir a todos, ricos y pobres, la situación cambiaría ya que todos viviríamos sin ninguna clase de discriminación o distinción y nuestros problemas medioambientales terminarían, porque solo en ese momento la vida sería el verdadero motor de nuestras existencias. 4.

Minorías. Yassine El Hassnaoui

Ya va siendo hora de que el Feminismo sea una filosofía de vida que se instale en las mentes de todos los humanos, tengan el género que tengan, sean de donde sean y vengan de donde vengan. La discriminación histórica y estructural que ha padecido la mujer no es un invento de feministas molestas, no. Es un hecho exageradamente real. Debemos aceptar, más bien, que esta se ha naturalizado y 203 Pitágoras: “Mientras los hombres sigan masacrando a sus hermanos

los animales, reinará en la tierra la guerra y el sufrimiento y se matarán unos a otros, pues aquel que siembra dolor y la muerte no podrá cosechar ni la alegría, ni la paz, ni el amor."

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ha hegemonizado el sentido común prevalente de la gente, y que se ha encarnado en nuestras prácticas cotidianas. La mujer no está ni ha estado al margen, sino en el mismo centro de la formación de la sociedad y la construcción de la civilización. La creación del patriarcado. El feminismo ha sido y es un ojo crítico con el que se puede mirar una sociedad, una perspectiva desde la que se ha estudiado la discriminación de la mujer y la posibilidad de ideas, teorías y práctica, para superarla. No interesa hacer un análisis de la actuación de la mujer a lo largo de la historia, simplemente un hecho notorio es que sin la participación del sexo femenino, la historia no existiría204, no sólo por cuestiones obvias, sino también por su actuación política, social, económica, religiosa y cultural. Interesa, por el contrario, esbozar una idea que ayude a destruir la sociedad del patriarcado a la que está sometida la mujer. La mujer no es un objeto, no es una figura decorativa que se encuentre detrás del hombre, es una persona que goza de igual dignidad y por tanto, merece igual respeto y oportunidades. Para Aristóteles la virtud de la mujer era el silencio, el cual va muy parejo con la sumisión, y el hombre determinaba su statu quo; al no otorgarle voz a la mujer, se le niega su oportunidad de crear su propio discurso, y por tanto carece de identidad, y si la mujer no tiene voz no puede considerársele como ciudadano, a su vez, consideraba a la mujer como un ser defectuoso, que necesitaba tutela y gobierno, Esa desventaja implica discriminación, la cual es un atentado contra su dignidad, su valor, su reconocimiento como sujeto pleno y contra sus posibilidades reales de materializar su proyecto vital; en cambio, el hedonismo femenino intenta rescatar y dejar 204 Gerda Lerner.

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muy en claro que la mujer no es frágil, ni debe estar sometida a lo que dice la sociedad, por lo contrario, la mujer no es lo que la sociedad se ha encargado de crear, sino sus placeres más recónditos sin temor a ser juzgadas y sobre todo con ansias de libertad, lo que la lleva a ser hedonista por naturaleza. La rabia y el dolor, es el espacio creado para sacar la mujer salvaje, rompiendo con esto el tabú del hedonismo femenino. La rabia por la mujer salvaje que lleva y quiere sacar y el dolor por la lucha constante y la supresión de sus propias libertades. Jean Shinoda Bolen 205 hace referencia a la sociedad patriarcal en la que la mujer vive, en la que se ejerce una violencia estructural hacia las mujeres, que se encuentra en todas las áreas de nuestras vidas. Una violencia que está normalizada y con la que nos enseñan a ser tolerantes. La violencia educando la tolerancia es una de las trampas del poder. Ante esta violencia estructural, el feminismo busca la liberación de la mujer de las garras del patriarcado. Simone de Beauvoir buscaba profundizar en la hermenéutica existencial que consiste en el existir como mujer en su tiempo y en su sociedad. La mujer en su esencia como tal está en periodo de extinción, ya que la 205 "Si reprimes o callas lo que sientes, si niegas o quitas importancia a

lo que ves, o no expresas lo que quieres, y nadie a tu alrededor parece advertirlo, el círculo es el lugar donde, en una atmósfera de iguales, por el simple hecho de estar presente puedes aprender. Un círculo digno de confianza tiene un centro espiritual, un respeto hacia los límites y una poderosa capacidad de transformar a las mujeres que lo constituyen. Los círculos funcionan, además, como grupos de apoyo que, si quieres cambiar algo de tu vida, te ofrecen una base de operaciones donde lanzarte e intentarlo. En un ámbito patriarcal, un círculo de iguales puede ser como una isla donde hablar y reír libremente; nos hace conscientes del contraste, y eso nos lleva a darnos cuenta de que muchas de nuestras acciones están perpetuando el statu quo y de cómo podríamos cambiarlas."

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sociedad se ha encargado de menospreciarla y someterla a rígidos papeles, los cuales se suponen que son su esencia femenina. El feminismo es la herramienta que necesitamos para poder liberar nuestras mentes humanas de todo el daño dogmático que ha generado un sistema social; el patriarcado lo construimos, queramos o no, con nuestras prácticas, ideas y relaciones. El opresor no sería tan fuerte si no tuviese cómplices entre los propios oprimidos. Nietzsche habla del domino espiritual de las pasiones, y la mujer que por supuesto es la fuerza principal de la vida, debe ser dominada. Pero no hablamos de un sometimiento al sexo femenino, sino del dominio en general de las pasiones, esto requiere del predominio y de la regulación que hace lo femenino sobre el mundo. No se nace mujer se llega a serlo, es decir, el hombre no es el otro sino el centro y la medida de las cosas, detentadores del poder y creadores de la cultura. Llega a la conclusión de que la mujer ha sido ratificada por el varón a cada momento, el varón es lo esencial y la mujer está en relación de asimetría con él. Lamentablemente el predominio que el hombre ha ejercido en todos los niveles de la producción sobre la familia y la mujer en el transcurso de la historia y del tiempo, le ha llevado a minimizar el papel femenino en el mundo y la existencia de la mujer se ha tornado complicada, y en algunas áreas del mundo casi inexistente como ser humano que merece todos los privilegios y consideraciones a los que tenemos derecho todos los pobladores de la tierra. La mujer es para Georg Simmel autosuficiente en su esencia, unitaria en su ser, a diferencia de la constitutiva dualidad del hombre, y sin duda privilegiada por su contacto directo con la realidad última o metafísica de las cosas. Entra de hecho en relación con el otro sexo, pero

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no lo requiere para ser, a diferencia de la masculinidad, que no se realiza sin esa relación206. Para las mujeres ha resultado difícil integrarse a distintos campos de la sociedad pues desde hace algún tiempo la mujer no tenía derecho ni a ser escuchada, ni a opinar, ni mucho menos a elegir su papel en la familia o la sociedad, pues existía una división de trabajo muy diferenciada, los hombres se dedicaban al trabajo y las mujeres a la casa. En definitiva, se puede entender el feminismo como una manera de observar la realidad desde la perspectiva de las mujeres. Además, no cabe duda de que su lucha haya sido y es el motor que está produciendo más cambios. El sistema patriarcal domina a las mujeres desde sus propios cerebros, y una vez vencidos es necesario continuar el proceso de emancipación o de “empoderamiento” de las víctimas. Para conseguir la igualdad se debe romper de raíz con nuestros orígenes culturales y sociales, pero la igualdad plena no se conseguirá nunca mientras la base de la relación entre individuos no cambie. Ningún ser humano será libre mientras no lo seamos todos, es necesaria la reivindicación feminista, una lucha por el fin de la supeditación del ser humano al ser humano podrá traernos la igualdad y la libertad. El feminismo impulsa a que se desarrolle la conciencia activa de la mujer, de todas las mujeres que se proponen saber. Las mujeres han sido consideradas seres inferiores. Los tiempos han cambiado, y el trabajo más duro ya se ha realizado gracias a grandes mujeres como Emma 206 Por eso, dice Simmel, que a la mujer "le es indiferente que haya o no

haya hombres. La mujer se encierra en su sexualidad, absolutamente determinada, determinada en sí misma, sin necesidad de referir al otro sexo la esencialidad de su carácter propio."

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Goldman o Simone de Beauvoir. Ellas sí vivieron en épocas donde la mujer era vista como inferior, no tenía voz, ni derecho a expresarse, solo se tomaba como un objeto o una tentación. Esperemos que algún día la cuestión principal no sea qué es el feminismo, sino cómo llevarlo a cabo. 5.

El intercambio desigual. Malcom Bomaba

Y es entonces, cuando al llevarlo a cabo, este capitalismo que lo va engullendo todo a su paso se acabe frenando… En esta sociedad que dicta su destino de manera arbitraria, donde sus ideas jamás podrán expresarse, salir a la luz, y no podrán porque están siendo consumidas, cohibidas y reprimidas ante la falta de conciencia de la coacción social. Lo desconocido asusta, lo oscuro cohíbe y no hay quien se atreva a posicionarse ante tal poder contemporáneo que guía su destino, el capitalismo207, y no los tiene, no tiene tal coraje y valor que con ayuda de su ser consciente, crítico y luchador posicione su pensamiento por encima de tal poder omnímodo y controlador208, y es ese ser suyo, educado por la lucha por sus derechos ante una política devastadora, ante gobiernos que oprimen su libertad en la plenitud de la palabra. La mujer perdida en su laberinto… Y la necesidad de una lucha, no en el campo de la violencia, sino en el del lenguaje, la compresión de la historia, la carga histórica: todos esos yoes que han sido para ser quien soy, la inanidad de un ser que lucha por las batallas que le tocan, que enfrenta lo que teme y es así que 207 Sin fuerzas, sin armas y sin argumentos. 208

Razón pastoral.

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no consigue sentir lo abyecto, consigue sentir el vacío barroco, ese vacío que no se produce en el arte sino en la sensación. Y de llegar a sentirlo en lo simbólico, sentiría el flujo constante de información de imágenes que sosiegan209, sentiría el horrible olor de la desesperación que causa este mundo caótico y nefasto; y al no sentirlo, triunfa, triunfa un poder que puede con las minorías, un despotismo que consigue nublar la vista del pueblo, un gobierno con una política que aplasta su ser, un mundo basado en el patriarcado. Luego, o luchas en la guerra que te toca lidiar o asume el enfrentamiento con la nada y no la negación que asume la esclavitud, que asume el sometimiento al poder, doctrina o autoridad210. Sin embargo, también asume que hay esperanza, hay esperanza en la educación y aún más fuerte hay esperanza en la mujer, la mujer que siempre esta relegada a vivir en la inmanencia211, la mujer, que desde pequeña se la va modelando de manera que pierda su papel fundamental en el mundo y en la política 212 . Asimismo, el hombre consume su poder mientras que la mujer consume su sumisión debido a la alienación generalizada que redunda en el concepto político213, esa mujer, como concepto que abre paso a enfrentarse al capitalismo, esa mujer que tiene el insoportable peso de sufrir un índice muy elevado de violencia de género, esa mujer que en su discurso de feminización de la política defiende y salvaguarda el acabar con injusticias, como erradicar el hambre en el mundo, la 209

Benjamín contra la dictadura de la imagen.

210 Nihilismo. 211Simone de Beauvoir, El Segundo Sexo.

212 Mary Wollstonecraft, Vindicación de los derechos de la mujer. 213 Freud Nietzsche, contra el Neoliberalismo económico.

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igualdad de género y lo que sin lugar a dudas y sin tambalearse sabe que es lo global, lo solidario y es esa solidaridad la que viene condicionada por el desarrollo de tres conceptos: libertad, justicia y felicidad 214. Esa es la mujer que feminiza la política, y por lo tanto adopta unos valores en la virtud que le proporciona la independencia215, si asume y acepta esta mujer como proyecto de emancipación y poder, si recupera y salvaguarda eso que merece ser salvaguardado, la belleza, justicia y bien, podrá vivir en la máxima expresión de su ser. Y es así, que en vez de vivir en una democracia donde la libertad es una libertad semántica en sus significados, vivimos en una cárcel del lenguaje, nuestro lenguaje es la caverna platónica, y es aquella la libertad que es un bien a conquistar. Si se apropia de su existencia, que no está en manos de la historia, sino de la realidad, una realidad llamada leyes, leyes impuestas con su política basada en la opresión de la mujer y el poder del patriarcado en su máxima expresión. No es algo oscuro tomando forma quien se apropia de su existencia, es el código civil, las leyes laborales216, y es por eso que debes salir a luchar por tus derechos, al fragor de la batalla o todo seguirá igual. Es en las escuelas y en las instituciones donde se genera la conciencia de la construcción, y es el ser mujer consciente, crítica y luchadora quien debe tomar el conocimiento y acabar con la opresión. La arbitrariedad que educa a la mujer en la subordinación, de tal manera que aun siendo conscientes transmiten este sentimiento de frustración y de sometimiento a futuras generaciones y esta desigualdad, es el ensalzamiento del patriarcado. Y es esa 214 Ética ecología. 215 Educación racionalista de Mary Wollstonecraft. 216

Corpus legislativo.

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pretensión, la superación de una serie de valores considerados decadentes, de la que tiene que ser consciente y no lo es y se conforma aun no estando conforme. Así es la indefensión aprendida de la alienación. En desacuerdo con su naturaleza y con su existencia y mucho más con la política y todas las desigualdades en todos los campos que la vida abarca, no conforme con su vida actual, cabalga este infierno de tal manera que su coraje lucha contra la luz, la luz del dogma217, del mito, de los lugares comunes, de los tópicos, de la religión, para abrir una puerta a la sombra, esa sombra que es el individuo, la mismidad, la eticidad de ser sí mismo, esas son las sombras, no son un lugar oscuro al cual temer, sino aceptar 218 . Luego la luz ha sido engendrada, amamantada por esa sombra, esa sombra somos nosotros a lo largo de la historia, pero no todos, hay un discurso filosófico que ha sido ocultado sistemáticamente, el discurso hedonista frente al idealista. Y ante el neoliberalismo capitalista engendrado por el idealismo, ante este estado que oprime, ante leyes no escritas por los parlamentos, invisibles para el ciudadano pero existentes en la sensación de vivir, siente en lo más profundo de su ser los pasos sombríos de la arbitrariedad219, consumiendo poco a poco su fuerza en la más profunda forma de injusticia, en la que nada ha quedado ya a salvo del control por parte del estado y de un público depravado por la frivolidad; y ante todo esto, ante todas estas desigualdades e injusticias, tiene la lucidez, la pertenencia, el verdadero fundamento de la democracia 217 Verdad absoluta. 218 José

Ángel Valente: No separes la sombra de la luz que ella ha engendrado. 219 Pedro Olalla, Grecia en el aire.

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como participación220 dialógica221, la urdimbre histórica y emocional de la isegoría, donde el deseo encuentra una escena para su representación. Si consigue la expresión de su deseo, si esto se produce en este mundo convertido en el mismísimo infierno222 , entonces está haciendo que el yo permita la emergencia del ello, buscando la posibilidad de que viva, que sea su yo natural, su propia pulsión223. Que viva sabiendo que la elevación de la igualdad a niveles políticos, es la búsqueda de la conciencia ante las desgracias, el dolor de uno y el dolor de otros, y es esa búsqueda de la satisfacción con los derechos inalienables de todo ser humano lo que hace que se agrupe en sociedades donde asumen los límites de su libertad. si el poder que salvaguarda estos derechos yerra, entonces, es la misma sociedad la que debe retirar el mismo poder que ha concedido y es esta sociedad la que debe emprender una revolución, una búsqueda de los derechos inalienables, un acuerdo fáctico entre gobernantes y gobernados, la búsqueda de unas leyes justas para ser cumplidas por todos224; y es esa misma lucha la que sabe que la dignidad del individuo, la libertad de expresión, la conciencia en su plenitud de la palabra, la igualdad ante la ley, la erradicación de las desigualdades, son bases fundamentales para el triunfo de una democracia, una política, en igualdad para todos. Cuando pase, cuando sean conscientes de la existencia de la dignidad humana, el patriarcado sabrá que

220 Pedro Olalla, Grecia en el aire. 221 Jürgen Habermas. 222 Shakespeare: El infierno está vacío, todos los demonios están aquí. 223 Vitalismo.

224 Jhon Locke, Second treatise on civil government.

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es momento para empezar a temblar ante la conciencia desdichada225. Y si, al final, se da cuenta de todas estas discrepancias, si, al final, acepta la feminización de la política como forma de enfrentarse cara al capitalismo, si, al final, asume la carga histórica, el conocimiento cultural y la educación en las escuelas y en las instituciones como factor de esperanza, si, al final, se apodera de la mujer como concepto para iniciar la revolución que pueda derribar los simulacros elegidos en comicios ilegítimos226,si, al final, asume todo esto, entonces empieza una lucha, contra las desigualdades, contra las injusticias contra lo evidente, contra el patriarcado. 6.

Vivir contra la evidencia. Alberto de Amilibia

No hace muchos años, las mujeres estaban excluidas de toda la vida pública, incluida la educación; pero durante estos años se han logrado superar determinadas barreras para dar un paso hacia la lucha por la igualdad. Atrás quedó el concepto que identificaba al hombre como hegemónico, lo que se ha conseguido suprimir junto con las leyes que impedían que las mujeres 225 Pedro Olalla, Grecia en el aire: Cuando el derecho a la salud sea un

artículo de lujo, cuando la educación sea un privilegio de clase, cuando legiones de seres humanos estén dispuestas a todo por un bocadillo, cuando la riqueza generada por todos sea propiedad privada de unos pocos, cuando el agua y la tierra tengan un nuevo dueño, cuando hayan conseguido erradicar la solidaridad y hacernos delatadores, resignados y cobardes, cuando la democracia sea tan sólo «sombra del humo»225. Entonces, la crisis habrá terminado. Nunca en tan poco habrán logrando tanto. 226 Mario Vargas Llosa, lo privado y lo público.

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recibiesen el mismo trato, ya que el hecho de ser mujer no es un factor que pueda influir en la exclusión social. A pesar de todo lo realizado para conseguir una igualdad entre hombres y mujeres, esta no se logrará hasta que la cultura construida por los hombres y la construida por las mujeres no se transmita a los jóvenes con el mismo nivel de importancia. Seguimos inmersos en una sociedad androcéntrica 227 , en la que todo se refiere a los valores masculinos que se transmiten como el único saber. Esto aparece, se hace evidente, como algo natural porque se tiende a confirmar el no lugar 228 de las mujeres en la construcción o el manejo del saber. Hemos llegado a una minúscula parte de la igualdad de género, ya que la sexualidad diversa229 no impide a las mujeres acceder a espacios o zonas que antes eran solamente para hombres; pero, aún así, todavía estamos muy lejos de la completa o absoluta igualdad de género. El género femenino ha evolucionado de forma más integrada, con más salud psíquica, que el género masculino, debido a que el género masculino tiene dificultades para adaptarse a determinadas circunstancias, ya que a los grupos dominantes les cuesta más evolucionar por miedo a 227 El androcentrismo es la práctica de otorgar al varón y a su punto de

vista una posición central en el mundo, las sociedades, la cultura y la historia; por lo que las mujeres quedan invisibilizadas o excluidas. 228 Concepto de "El segundo sexo" de Simone de Beauvoir, el cual dice que la mujer es un producto cultural que se ha construido socialmente y que la principal tarea de la mujer es reconquistar su propia identidad específica y desde sus propios criterios. Destaca una teoría muy conocida: "No se nace mujer, llega una a serlo". 229 La sexualidad en el Psicoanálisis viene dada por su dialéctica con la agresividad, construyendo la fuerza del eros. Hablamos de emociones y afectos.

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perder su poder o dominio. Los hombres deben evolucionar y por eso es necesario transformar los niveles de violencia en la sociedad. Al igual que las mujeres han ido hacia actitudes y valores que históricamente se habrían considerado masculinos, los hombres deberían ir hacia actitudes, valores y posiciones que siempre han sido femeninos. Para alcanzar los fines de la coeducación, se necesitan políticas públicas que favorezcan el cambio de mentalidad, lo que implica formación. Este cambio de mentalidad consiste en exaltar y dar a conocer la cultura femenina, silenciada durante siglos, porque solo así se puede crear una nueva sociedad que no se desnivele mucho hacia la masculinización. El género produce desigualdad en todos los sentidos, y para erradicar estas desigualdades es necesario una nueva concepción de poder. Esta nueva concepción de poder se basa en un poder que tome en consideración un empoderamiento de las mujeres, en detrimento de los poderes dominantes y opresivos. Es necesario tener la mente totalmente abierta y ver este empoderamiento de las mujeres, no como el poder opresivo de las mujeres contra los hombres, sino como un compromiso de participación de las mujeres en todos los ámbitos. Si esto contribuye de una forma favorable para la superación de la desigualdad, podríamos decir que tenemos un rumbo que nos permite fomentar la igualdad entre hombres y mujeres desde una visión capacitadora. El empoderamiento implica un fortalecimiento propio y del género, debido a que fortalece en el ámbito personal y en el ámbito colectivo de lucha social. Es un proceso de conciencia individual y colectiva que permite a las mujeres incrementar la participación en

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los procesos o eventos de toma de decisiones y acceso al ejercicio del poder. Es un proceso en el que tanto las mujeres como los hombres tienen una oportunidad de mirar a su alrededor y tomar conciencia de cómo la sociedad en la que vivimos nos presiona, nos limita y no nos permite desplegar todas nuestras potencialidades, las cuales hoy en día están muy sesgadas por una educación sexista. La conciencia de la desigualdad y de la limitación en nuestra sociedad, es fundamental para poder marcarnos nuestros propios límites desde nuestras propias y reales elecciones y capacidades. Las mujeres necesitan saber que tienen que tomar conciencia sobre sus capacidades, poderes, limitaciones y saberes; y reconocer el interés de participar en el ámbito político, educativo, social y cultural. Esta conciencia es necesaria porque una vez que los hombres y las mujeres toman conciencia de cómo han sido socializados emocional, social y culturalmente, es decir, desde la limitación, pueden recapacitar y reconstruir o redirigir su camino y decidir hasta dónde quieren y pueden llegar cada uno y cada una, trazando su propia ruta. Solamente cuando uno mismo se reconoce con la capacidad de asumir sus propias decisiones teniendo en cuenta las consecuencias de estas, de decidir qué valores son los que sustentan la vida, solamente en este momento, uno es capaz de vivir su propia vida personal con felicidad y plenitud, y de transferirlas a todos los ámbitos de acción en los que participa. Hay que cambiar el modo de pensar de la sociedad, sentir y ver las cosas en el mundo, como hombres y mujeres que asumen su feminidad política; vivir como

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ambos y diseñar una cultura más igualitaria. En este momento de cambio de mentalidad, de forma de pensar y de pensarnos, una serie de cambios sociales necesarios determinarán la responsabilidad política; y unos cambios personales, con la responsabilidad de cada uno o de cada una, desde el compromiso personal y desde la confianza en sus capacidades y en sus elecciones, determinarán el sentido de la educación. Un cambio hacia la feminización política no quiere decir que se provoque un aumento en el número de mujeres en los ámbitos de decisión, aunque sea necesaria la discriminación positiva, sino que tiene que ver con la llegada de cuestiones y temas nuevos relacionados con la mujer, los cuales son temas fundamentales230. Hacer de la política un lugar para la cooperación y no para la competición231, donde es posible hacer preguntas y pedir solidaridad, hace que la política sea algo compatible con la vida, conciliable con los espacios humanizados del sistema. Este tipo de política se basa, entre muchas más cosas, en introducir otras gramáticas totalmente distintas en el lenguaje: emociones, afectos, empatía. Una política feminizada, es una política donde se cuidan las voces más olvidadas de la historia, que son muchas y diferentes entre sí. 230 Pablo Iglesias: "La feminización no tiene nada que ver con que los

partidos políticos tengan más mujeres en cargos de representación, que eso es importante y necesario. No tiene que ver con la presencia de más mujeres en los consejos de administración de las grandes empresas, que está muy bien. La feminización tiene que ver con la forma de construcción de lo político." 231 Nuria Valera: "No puede ser que la política sea una pelea de gallos, un a ver quién grita más o quién dice la declaración más potente."

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Para feminizar la política, hay que buscar y tratar de transformar radicalmente las condiciones materiales en las que se desenvuelve la vida de las mujeres, eliminar privilegios masculinos, acabar con la violencia y combatir el androcentrismo. Pero todo eso no es fácil, es una lucha dura y muy larga. Pensar que solamente es importante aumentar la presencia de mujeres en el espacio público es condenarse a ver solo una parte de esta gran cuestión; porque la representación de las mujeres en la política no es el final del cambio, sino que es el principio de una gran transformación de las desigualdades. 7.

Persona y libertad. Saúl Martín

Las personas necesitamos encontrar la satisfacción, es decir, buscamos la felicidad. Para llegar a ella debemos tener una personalidad equilibrada. Según Sigmund Freud 232 , la personalidad está dividida en el Ello, que es todo inconsciente y es principio de placer; el Yo, que tiene una parte consciente y otra inconsciente y siempre trata de mantener el equilibrio entre la realidad y el deseo; y el Superyó que es el principio del deber e ideal del yo. La inteligencia emocional ha de mantener una relación entre las tres instancias, donde el Ello, la estructura hedonista sea la base fundamental. Según Nietzsche 233 , las personas somos pura pulsión de vida, es decir, que deseamos vivir y nuestro destino sano y lógico es conseguir siempre lo adecuado, 232 Una de las mayores figuras intelectuales del siglo xx y creador del

Psicoanálisis. un filósofo alemán considerado uno de los pensadores más influyentes del siglo XIX.

233 Fue

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que es la sublimidad: dirigir las energías frustradas a algo que nos dé un beneficio como el equilibrio y sobre todo la satisfacción. Hay mujeres que hablan de la estructura de la personalidad desde la fragilidad, como un valor que se enfrenta a la violencia del poder patriarcal. Alejandra Pizarnik234, Chantal Maillard235 o Paca Aguirre236, nos trasmiten el ser abierto a la herida como fundamento de la biografía vital, tan necesaria ante las vidas estereotipadas de la sociedad de consumo. La libertad es una forma de construcción del vacío, lo construyó Mary Shelley237 en la noche gótica de los monstruos. Somos Grecia y Roma, extimidad e intimidad, democracia y república, y un vacío histórico por donde pasean los monstruos de la conciencia. Entonces, todos nos preguntamos cómo conseguir la libertad y la respuesta es ir desde la luz a la oscuridad, para conocer lo indecible y ser más libres, es decir, atravesar el muro de las sombras e ir a lo nouménico238, porque detrás del muro está la realidad, y cuando te encuentras con la realidad eres más Yo y te equilibras con el Ello. Y si la libertad es una forma de construir el vació, ¿por que la mujer es un espacio escénico vacío? Quizá porque en épocas no ha sido libre, porque no todas y todos usan la palabra como revolución y transforman el olvido en justicia. Una forma de revolución en las mujeres contemporáneas es que tienen que ser

234 Poeta y traductora argentina. 235 Poeta y filósofa española que consiguió el Premio Nacional por su

obra Matar a Platón. 236 Poeta y narradora española.

237 Escritora británica conocida por su gran novela gótica Frankestein. 238 Fenomenología kantiana.

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cínicas como los discípulos de Sócrates239 y hedonistas y valientes como Safo. Grecia es la cuna de la Democracia, con ella se consigue la libertad, pero es necesaria la virtud ética. Hay mucha gente que no le beneficia esta forma de gobierno, los idiotas240, que buscando el interés propio y no el bien común crean revueltas que hacen que se acabe con la democracia y con ella también acaban con la cultura de la cooperación. Su victoria es el triunfo de la dictadura. Unas de las definiciones de libertad, según Michel Foucault241, es huir de la servidumbre de sí mismo, qué quiere decir esto, que una persona será libre cuando deje de trabajar para el ideal interiorizado, hecho propio, del poder. Antiguamente la mujer griega tenía un lugar donde podía ser libre, ese lugar era el gineceo, que se encontraba en todas las casas de Grecia, ese lugar para nosotros es la conciencia, donde no pueden llegar los carceleros del panóptico. Lo más importante para conseguir la libertad es la palabra , libertad es revolución, luego la palabra ha de ser subversiva y desobediente. Para ser libre hay que luchar contra el poder y hacer un viaje al pensar sincrónico de nuestra época; el pensamiento genera la palabra que es el arma que puede destrozar el sistema de poder que nos utiliza. Entonces, la libertad es vivir la vida y, para vivir la vida, es necesario el viaje y encontrar el amor 242 , vivir es perderse en el 239 Filósofo

griego considerado como uno de los más grandes de la historia. Nietzsche arremete contra su idealismo. 240 Personas que creen poder vivir solas. 241 Fue un filósofo, historiador de las ideas, psicólogo y teórico social francés. 242 Los dos grandes metarrelatos de nuestra cultura.

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peripathos243 griego, y libertad es cambiar para siempre la rutina y dar un golpe sobre la mesa para conseguirlo, una vida libre es atravesar lo desconocido. Es fundamental saber cómo sentirse libre y no ser esclavo, atravesar el gran abismo del miedo y llenarte de conocimiento y pensamientos que se obtienen durante el viaje para cambiar la situación, y así romper la cadena que nos impide ser libres; porque hay que conseguir el placer, el equilibrio, la calma social de la justicia. Dejar de ser Homo Insipiens244 y pasar ha ser la combinación del Homo Faber245 y del Homo simbolicus246. Pero la cruda realidad es que cuanto más tiempo pasa nos volvemos más fantasmales, unidos a las pérdidas y al dolor, angustiados. La vida está en otra parte247… 8.

La escena de la representación. Sandra Díaz

Las mujeres han sido excluidas durante siglos de los altares sociales. Esta es la escena donde no se ha representado el acto de ser mujer. A lo largo de los años a los hombres se les ha tratado como una imagen fuerte, valiente; y a las mujeres se las ha tenido apartadas, aisladas y rechazadas, se las trataba como un ser inferior. cuando en realidad nunca lo han sido. Y eso es lo que le pasa al Prometeo Moderno, el monstruo de Víctor Frankenstein, que era rechazado tanto por la sociedad como por su 243 Pedro Olaya usó este método en su documental y en su libro, Grecia

en el aire, donde habla de los problemas actuales de la política en Grecia, y en Europa. 244 Es el último y actual en la tabla de la evolución del ser humano, el Homo Insipiens representa la idiotez, la incapacidad crítica. 245 Representa el hacer y el realizar. 246 Representa el saber. 247 Milan Kundera.

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propio creador, por eso sentía frustración con el ser humano, lo que no significa que sea él el causante de ese rechazo, sino que nadie quería o podía entenderle solo por el hecho de ser diferente a los demás, y no encontraba un espacio donde habitar, no encontraba su propia polis donde poder vivir tranquilamente, ya que no tenía a nadie con quien compartir sus frustraciones y llegar a encontrar su lugar en el mundo, ser en el mundo, en el lenguaje de los otros248; además, es preferible llegar a ser algo que no tener ninguna representación en el mundo, y por eso le pidió a su creador que le crease una compañera con la que compartir y poder vivir, tener alguien con quien llegar a sentirse amado y sobre todo tener una voz distinta para no sentirse rechazado solo por el hecho de ser una reconstrucción con fragmentos de otros seres humanos249. Por eso el monstruo sentía rechazo hacía el ser humano, porque nadie lo quería. En muchos sentidos, el monstruo de Mary Shelley es la representación de la mujer , la búsqueda de un reconocimiento que solo hallará en sí misma. Se podría decir que todos nosotros somos la representación de ese monstruo, nosotros también somos esa reconstrucción de fragmentos, sobre todo en nuestra memoria, esa parte consciente e inconsciente que está construida por la nostalgia, esos recuerdos que tenemos pero que nunca hemos llegado a vivir, ya sea por carencias afectivas o porque el inconsciente quiere jugar al olvido, anhelar lo que no hemos vivido, rellenar ese vacío que tenemos, confuso, en el que podríamos vaciar la oscuridad. El vacío es la condición de la luz, por tanto la oscuridad también es condición de la luz, es nuestro afán que se 248 Martin Heidegger. Dasein.

249 En este sentido todos somos monstruos, fragmentos de todos los

que nos precedieron.

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produce por esa dependencia ontonoética, aquello que es sí mismo y nos esta vedado. Como decía anteriormente sobre el ser, tiene que ver con todos nosotros, lo único que queremos es encontrar nuestro lugar en el mundo, la claridad sin cosas, llegar a estremecernos con todo lo que nos rodea; pero lo que todos nosotros buscamos, y con lo poco que nos conformamos, es llegar a ser aceptados y no sentirnos marginados socialmente; por el hecho de nacer pertenecer a la casa del ser, porque el lenguaje acontece en el ser, Heidegger nos decía que es la esencia del habla. La mujer se hace. A pesar que el pensamiento y el concepto mujer sea muy importante en el siglo XXI, todavía sigue siendo discriminada y excluida, siguen siendo invisibilizadas por los hombres. A lo largo de la historia han habido bastantes mujeres muy importantes, es decir inteligentes y muy trabajadoras, pero aun así nunca suelen estar citadas, como por ejemplo María Zambrano. Por eso estamos pasando de ser un homo videns a ser un homo insipiens. Hoy en día estamos olvidando esa tendencia natural por la información, nos ocurre como en la Edad Media, que la gente carecía de información por las pocas fuentes; y en la actualidad, como tenemos muchísimas maneras de buscar las cosas, no nos interesamos en buscar. Seguimos regresando a lo peor de la historia, dejamos de informarnos. Hemos pasado de una sociedad de la palabra a una sociedad en la que dependemos de la muda tecnología. Podemos empujar nuestro muro de las sombras, el Prometeo Moderno y todos nosotros, queremos conocer todo lo que no sabemos, y cuanto más sabemos y conocemos, somos más consientes de la

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infinidad de cosas que no sabemos 250 , que nunca llegaremos a tener las cosas claras, llegar a saber todo lo no evidente, eso que nunca existe ni existirá, porque hay un sinfín de tonalidades grises; nunca habrá cosas que sean evidentes, la evidencia es lo menos evidente, que una palabra sea una cosa, sea tal cual por ser dicha. No podemos tener el mismo concepto de algo que el otro, porque aunque todo lo que decimos ya lo haya dicho alguien, nunca tendremos ese mismo concepto aunque nacemos en un mismo lenguaje, todos tenemos una percepción diferente del mundo y nunca van a llegar a existir dos personas que piensen igual, cada uno es como es, no hay que tenerle miedo a demostrar cómo somos realmente. Nuestro deseo es adelantar, avanzar y empujar nuestro propio muro de las sombras, que sería la parte que más desconocemos. Lanzarse al vacío, es arriesgarse con todo, sin quedarse con la duda; siempre nos pasa lo mismo, no nos decidimos, no probamos…, por el hecho de que el miedo nos condiciona, dejamos de hacer algo por el rechazo y porque tenemos pavor a vivir; y lo que tenemos que hacer es aprender a aceptar ese miedo, esa oscuridad, no dejar que nadie nos condicione a pesar de que las sombras muestran todas nuestras debilidades, nuestros puntos débiles, nuestros terrores, pero qué más da eso, somos personas al igual que todos, fallamos, nos equivocamos, tenemos nuestros conflictos y muchas cosas más que no dejan que podamos avanzar en la marca251, dejarnos caer en el abismo al que llamamos vacío, y una 250 Intelectualismo moral socrático.

251 Territorio fronterizo, tierra de nadie.

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vez que empiezas el viaje, el dejar de tenerle miedo a la oscuridad, nunca serás capaz de volver. Cuanto más conocemos, somos más conscientes de la gran cantidad de cosas que desconocemos; según decía Aristóteles, en la contemplación las sombras se convierten en matices de la realidad. En nuestro caso, nuestros fragmentos en nuestra memoria. La memoria es una forma de olvido y tiene nostalgias de lo que no ha sido vivido. La memoria te hace construir tu propio lenguaje, porque nacemos en preguntas y buscamos el ser del mundo, es decir, hallar las cosas de la claridad. El Dasein del hombre arrojado a la existencia. La filosofía es una interpretación del ser abierto al mundo. Conduce a una situación de inexplicabilidad y desesperación. La realidad es el hombre finito lanzado a una existencia incierta y sin sentido; asociado a la muerte. Pero la salvación, palabra ahomínida, es aceptar la propia situación, autoafirmase por la acción y por la lucha. Nuestra existencia es la preocupación surgida de la angustia de vernos proyectados en el mundo en el que tenemos que ser. Provenimos de una nada y nos realizamos como un proyecto encaminado hacia la muerte, porque es la condición de un ser caído y solitario que no puede contar con Dios ni remedio alguno a su condición. Debemos hacernos responsables de nuestra propia vida. Tenemos que reconocer que somos un ser para la muerte, la única vía para la libertad. Hay que dejar de tener miedo, afrontar nuestros desafíos, dejar de estar condicionados por la sociedad, porque solo existe una vida y hay que vivirla sin miedo y caer en el tiempo del vacío.

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9.

La asertividad del No. Noelia Fernández Solís

El barroco muestra en sus formas el miedo al vacío, a lo desconocido. Busca formas para el vacío, para la experiencia del ser humano moderno252. Estamos hablando del vacío que todo ser siente al enfrentarse a algo nuevo en la vida. En esta sociedad lo desconocido está en cada amanecer. Cada día que pasa es algo nuevo para el ciudadano, sobre todo para la mujer William Shakespeare, es un dramaturgo que habla de lo duro que es mirar a tu alrededor y ver cómo la gente enfrenta cada situación como puede, y sobre todo se puede ver la diferencia de afrontar un problema entre una persona femenina y una masculina. En cada situación en la vida aparece la discriminación, pero nadie sabe, o nadie quiere ver, que una persona sea hombre o mujer tiene la misma valía, la misma fuerza, los mismos derechos inalienables. El drama barroco socializa el las causas del dolor. El idealismo nos ha hecho cómodos, sin afrontar los problemas como de verdad se debe hacer, con pasión, empáticamente. Nos convierte en autómatas y adictos a la apatía. Y sin embargo la mujer está llena de vitalidad, fuerza, amor e ironía. Mary Shelley253, tuvo la fortaleza de luchar por sus derechos, y fue considerada una de las 252 Francisco Jarauta. 253 Mujer

filosofa, feminista, escritora inglesa. Que bajo su punto de vista dice que por naturaleza los hombres y las mujeres son seres iguales, pero que la sociedad nos hace ver que son diferentes, porque un hombre está mejor valorado que una mujer.

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figuras del mundo moderno, a pesar de caer en la sombra de Byron o Shelley. En la sociedad la mujer puede y debe decir no, porque el no es un sí cuyo valor trasciende su condición de olvidada. Decidir y elegir éticamente son las consecuencias de semejante asertividad. Es la expresión de la voluntad de poder como amor254. Poco a poco y gracias a las luchas generadas por las mujeres podemos ver que van teniendo su lugar, real y simbólico, en la toma de decisiones y en la elección del itinerario político, su trabajo en la sociedad es valorado, a pesar de que su yo femenino se envuelve en la bruma de los prejuicios del héroe clásico. Una de las obras que más nos puede ayudar a ver la vida tal y como se presenta a la voluntad de representación 255 del Feminismo, es Vindicación de los derechos de la mujer de Mary Wollstonecraft. En ella se habla de que la belleza de una mujer no significa debilidad, y la feminidad es sublime, y significa fuerza y deseo de vivir. Todo ser humano tiene su origen, y nuestro origen común es el Eros, que viene de la mitología griega, y está compuesto de amor y de la palabra, de vida y poder, su palabra está formada por mito256 y logos 257. El Eros es representado por un espacio, compuesto por la estructura 254 Manuel Barrios. 255 Arthur Schopenhauer.

256 La palabra que me dice. 257 La palabra que yo digo.

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de una mujer y el ágora de la visibilidad. Puesto que la vida no es posible sin la existencia de la mujer. Y hasta que algunas mujeres no salieron a la calle a dar su punto de vista y a luchar por sus derechos, vivíamos en una sociedad idealizada, en la que solo era importante satisfacer al hombre y las miserias de su sociedad falocrática. La sociedad está asentada en la metafísica platónica, en un Platón cristianizado, en la transvaloración llevada a cabo por el judeocristianismo. Semejante sustrato ha sido la causa filosófica de la represión femenina… Y si algo caracteriza a la tradición occidental es que ha trastocado la vida. Podemos usar la filosofía de Nietzsche, ya que explica que la metafísica tradicional se asienta sobre un error puesto que las cosas no tienen valor por ellas mismas, sino que el valor lo tienen las esencias, para ir más allá del bien y del mal y alcanzar el mediodía, el lugar sin sombras. La primera fuerza del pensamiento de Nietzsche es la Voluntad de poder, que en sí misma puede considerarse la potencia y el amor de la feminidad revolucionaria. No hay nada si no hay Eterno retorno. Si la vida se construye sobre el Eros, se comprende que todo se mida en clave de placer, y que las ganas de inmortalidad que tiene todo ser humano en su interior se perciba también por el placer. La dimensión psicológica del retorno: vivir de tal manera que quieras volver a repetir lo vivido.

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El hombre es un tránsito al superhombre, ha de pasar por las transformaciones del espíritu: camello 258 , león259y por último el niño260. Todos los conceptos están relacionados con la mujer, simplemente por el hecho de que es el lugar de la voluntad de poder, revolucionario. La mujer esta llena de coraje y valentía. Y siempre, todo ser humano se preguntará lo que es y por qué lo es. Sin respuestas solo el amor parece capaz de habitar el vacío de las almas.

258 Hombre resentido, que soporta el peso de la historia. 259 Se convierte en la capacidad de decir no. 260 Inocencia, el lugar sin sombras.

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IV

Emancipaciรณn

HANNAH ARENDT

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1.

La voluntad de poder. Marina Yunta

Toda palabra tiene su sentido profundo. Nosotros nos movemos en el mundo a través del lenguaje, y a partir del discurso, pero este discurso se ha modificado porque se ha visto totalmente alineado por la estulticia de la persuasión sofista. Tenemos que cambiarlo a partir del pensamiento político, sin utilizar el lenguaje de un modo persuasivo. Por ello Nietzsche propone al Superhombre, que recoge los valores del hombre que afirma y ama la vida, la tierra y el destino; y además acepta el sufrimiento y el dolor que conlleva su existencia, y quiere conseguir nuevos valores que unan al hombre con la naturaleza en la que vive. Tiene que ser responsable de vivir, porque el que no lo hace se convierte en un cínico contemporáneo, aquel que se ríe de su propia sociedad y que no muestra preocupación por ella. Sería mejor que nos sumiésemos en un discurso donde parte de ella, estuviese constituida por el cinismo griego, es decir, aquel que se ríe de sí mismo y que acepta las derrotas. La mujer como ser revolucionario tiene que asumir esas derrotas, consiguiendo hacerse más fuerte y superar las transformaciones del espíritu nietzscheano. Toda mujer tiene que tener voluntad de poder como amor para poder encontrar el sentido a la vida, que es el anhelo por cumplir sus deseos. La principal causa de que esto no se cumpla es que se ha roto el puente que había entre bios y polis, y en ese limbo el ser humano pierde su raíz. Para poder conseguir la voluntad de poder como núcleo de la feminidad, tenemos que ser vistas y ser constantes, pero teniendo cuidado de que su pérdida implica caer en el nihilismo, negando los valores necesarios para la emancipación de la cultura occidental, por ello, a

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través del metarrelato del amor podemos conseguir romper las cadenas del nihilismo pasivo contemporáneo. A través del metarrelato del amor llegaremos al eros, a la pasión por la vida y a aceptar nuestro instinto de muerte, poniendo en cuestión la vida indigna, ya que esto es el odio de querer vivir261, no tenemos que tener miedo a mirar atrás, tenemos que asumir y poder caminar sin miedo por las ruinas de nuestro pasado como hacía el Angelus Novus, sería la idea del eterno retorno. Esta idea unida a la voluntad de poder propone un sujeto moral que construye la Ética ecológica. En relación a lo anterior y haciendo referencia a que hay que intentar caminar por las ruinas sin miedo, destaca la angustia existencial 262 del escepticismo sistémico263. Si nos lo planteamos, el miedo es una de las peores cosas que puede habitar en nuestra conciencia, ya que termina consiguiendo una alienación directa y sin intermediarios; ahora bien, tenemos que tener claro, el tránsito por las ruinas es simplemente la angustia del poeta maldito, es decir, caminar por las experiencias de nuestra vida y tener que enfrentarnos a ellas, aunque cueste, porque sino comenzaremos a negar nuestras emociones y de nuevo caeremos en la ruptura entre bios y polis. El aceptar la angustia nos hace comprender que los deseos son insatisfacibles, y dicha insatisfacción hará que encuentres el placer por conocer lo que desconoces, el placer del conocimiento, como decía Aristóteles es un placer que permanece en el tiempo, el consuelo secreto de la caída en el tiempo. Por todo ello, ese camino que propone Walter Benjamin entre las ruinas, ha de realizarse, porque si 261 Santiago López Petit. 262 Jean Paul Sartre. 263 Pirrón de Elis.

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dejamos que todas esas ruinas se acumulen, llegará un momento que consigamos nuestra propia destrucción. Por lo cual, todas somos un cúmulo de nuestros antecedentes, y para conocerlos hay que transitar por ellos. Todas las mujeres tenemos que conocer las ruinas de la memoria y podemos tener sentimientos negativos y permitirnos el espanto, pueden ser provechosos si los cultivamos adecuadamente, pero todo ello depende de nosotras mismas y de nuestro desplegar las alas hacia el futuro, teniendo claro que tenemos que llegar a lo que nosotras queramos, sin miedo a la nada. También es importante tener en cuenta los fracasos, ya que esa suma hace que se forme la ética de éxito humanizada, que pervive en la realidad de los desfavorecidos, y así menguar el nihilismo social. Nos educan a partir de una cultura que nos dice que si no consigues éxitos durante tu vida date por perdido. Esto está claro que no es cierto, esa cultura capitalista y su educación debe cambiar para cambiar la idea que se tiene de la ética del éxito, porque la palabra éxito debería hacer referencia a que es la suma de todos nuestros fracasos y la medida de nuestra resiliencia264, y por tanto también somos las suma de todos los fracasos y con esto conseguiremos la responsabilidad que tenemos con el mundo, que es lo que queremos conseguir principalmente en la ética ecológica. Por todo ello nosotras tenemos que enfrentarnos a nuestros fracasos y a nuestra propia experiencia. Para enfrentarnos a nuestra experiencia, hay que utilizar el lenguaje, ya que estamos arrojados a la existencia y eso conlleva fracasar y aceptarlo, porque según como

Capacidad de adaptación de un ser vivo frente a un agente perturbador o un estado o situación adversos.

264

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realicemos las funciones del lenguaje, de cómo hablemos, transmitiremos una idea u otra sobre lo que nos rodea, es decir, cuando haces un uso de la palabra depende de la comunicación que estableces y el modo de expresarla, y como ahí está el problema, en la relación entre el uso y el referente que no deja de ser su mención, tenemos que saber lo que queremos decir y saber de lo que hablamos. Para conseguir saber de lo que hablamos tenemos que proyectar la profundidad en nuestra imaginación, en la prógnosis265, es decir a partir de lo que conozco intentar conocer lo desconocido, dejándonos llevar por los pasajes como el flâneur266, con odio de vivir, el odio que planteamos es el odio a, o que, te impulsa a vivir, y si no lo hubiese tendríamos una mirada totalmente pobre, y no disfrutaríamos de esa mirada en la ciudad de Macondo267. Hay que entender el lenguaje como si fuera un juego268, pero no un juego en el que debamos perder sino en el que ganemos, por ello hay que poner énfasis en la cultura. La palabra tiene su sentido profundo en la tierra. O como también proponía Emil Cioran en las cimas de la desesperación, o Wittgenstein en los límites del lenguaje y el mundo. En este juego que debemos ganar las mujeres tenemos que ser visibles y tenemos que dar la palabra, para que todo el mundo vea que somos iguales ante la historia, es preciso que vivamos peligrosamente este juego de poder. Para Aristóteles es la capacidad de adelantarse a los acontecimientos, imaginar 266 Charles Baudelaire. 267 Gabriel García Márquez, Cien años de soledad. 268 George Gadamer. 265

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2.

Filosofía de la sospecha. Daniel Zarza Hita

Debemos despertar, despertar de ese sueño del deseo como forma de poder269 que nos va a resquebrajar, convirtiéndonos en un cínico contemporáneo, mediante el cual se despliega como una negatividad madura que apenas proporciona un poco de ironía y compasión, pero que finalmente desemboca en la desesperanza. Para prepararnos a la idea, debemos poder pensar por nosotras mismas teniendo un juicio sobre lo aprendido y no tener miedo a vivir, creando un yo íntimo basado en los escondrijos de la oscuridad habitada, en lo más profundo de nuestro ser revolucionario, gracias al no saber que nos produce las ganas y necesidad de conocimiento. Para poder conseguir ese yo, necesitamos escapar de los tópicos y lugares comunes y adentrarnos en la marca270, empujando el muro límite tan lejos que la luz sea casi imperceptible, es la única manera de salvarnos de la maldita nostalgia, que nos hace más vulnerables al dolor al no poder haber vivido, haciéndonos recordar la peor muerte, la de ser olvidado. Para perdurar en el tiempo, no como ser sino como recuerdo, tenemos que utilizar la historia de otros para construir la nuestra propia, realizando algo que se olvide nunca, ni con el tiempo. Debemos seguir avanzando hacia un abismo en el que saltar no es la única opción, sino tener vértigo en lo desconocido, sintiendo las ganas de vivir para ser recordados, revolviéndose por dentro la sed de conocimiento, la sospecha ante lo evidente.

269 Voluntad de poder y crítica de la razón cínica en Peter Sloterdijk. 270 Exploradores del vacío.

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Estas ideas que apaciguan la nostalgia, son creadas gracias a no visitar las zonas infestadas de alienados271 que no pueden pensar por sí solos debido a que han caído en la patología del vacío, pero no un vacío necesario en la sociedad, sino uno del cual no pueden escapar, dado que no encuentran el camino de regreso para dejar de ser Homo Insipiens, excepto ayudándose de la filosofía, que nos da la oportunidad de estructurar nuestros propios pensamientos que no han sido engendrados por la luz o el azar, sino por nuestra propia condición natural de existir; que desenmascaran la falsedad escondida bajo los valores ilustrados de la racionalidad y verdad; como hicieron Marx, Nietzsche y Freud272 poniendo en duda, criticando el mundo como se conoce; y no como los panópticos encerrando a quienes buscan la felicidad insatisfactoria, la verdad y la razón de vivir insatisfactorias, siendo nada más que el hecho de haber nacido. El único error que no debemos cometer para acabar siendo alineados y controlados es la repetición, que hace imposible el olvidar como forma de memoria, memoria de nuestras antepasadas que nos han allanado el camino, participes del Angelus Novus, para que podamos acabar con la patología social, que nos compone como un conglomerado de ideas impropias a través de la política o tópicos relacionados con la aceptación de ordenes con el único fin de controlar nuestros pensamientos, que acabemos siendo personas sin conocimiento, fáciles de manipular, haciéndonos actuar dentro de las reglas del sistema al que pertenecemos, sin reflexionar sobre nuestros actos, pudiendo destrozar nuestra capacidad de autocrítica.

271 Sigmund Freud, Psicología de las masas y análisis del yo, 1921. 272 Filósofos de la sospecha.

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Para ello, crearemos un mundo a partir de una profundización de la sospecha acerca del lenguaje, no solo porque es una forma de comunicación significante, sino para transformarlo en la palabra 273 como forma de amor y sensación, describiendo las apariencias como semejanza, la verdad producida por la interpretación de las cosas que no deben ser tal cual se ven, pudiendo darle otro sentido y comunicarse sin ser estrictamente lenguaje, al contrario de lo que hacia el cientificismo y positivismo en el siglo XIX, diciendo que habían encontrado la verdad científica y pura buscando solo una respuesta para las dudas. Por ello debemos dudar, dudar sobre lo vomitado por los padres, profesores, y padres de la razón normalizada..., y de la luz. Para construir un sujeto de condicionantes históricos, sociales, morales y psíquicos; aunque, cada uno de los tres grandes filósofos de la sospecha, creaba de diferente manera esta complejidad: Marx, la conciencia del individuo creaba nuevas condiciones materiales de vida, era la lucha contra la explotación del hombre por el hombre; Nietzsche culpa de la falsa conciencia al resentimiento de la debilidad y apuesta por la restauración de un nuevo hombre274; Freud piensa que en el hombre tiene que enfrentarse constantemente a lo que exige la realidad, las normas morales impuestas y los deseos, que demandan satisfacción. Todas estas reflexiones basadas en sus pensamientos se traducen en una oposición a la sociedad creada por los valores de la superstición, que se ha ido destruyendo a medida que pasaba el tiempo. Han hecho 273 eros- palabra.

274 Superhombre.

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creer a gente, que la única manera de defender a la tierra es la violencia, matando sin importar por qué, así es la barbarie de los campos de exterminio275. Por culpa de la bestia totalitaria, ya no se espera nada de la sociedad, ya no se confía en nadie, todo el mundo se ve como un enemigo, por eso, nosotras como potencia principal del cambio social debemos imponernos y resolver lo que se ha impuesto; para ello, la única manera es la filosofía junto a la historia de la mujer, para fijarnos en cómo han ido cambiando las cosas a lo largo de los siglos y volver a recuperar la esperanza en esas personas que han sido absorbidas por la falsedad y que han caído al acantilado del fin del mundo, siguiendo órdenes, esperadas como un consuelo, para acatarlas sin entender la gravedad del problema que conlleva para la convivencia en paz. 3.

La banalidad del mal. Gabriel Sánchez

¿Qué es el mal? 276 La respuesta es demasiado compleja, ya que la maldad, al ser algo plenamente humano, toda explicación trascendental de esta misma llega a ser banal. Cómo podemos explicar o definir algo que es totalmente nuestro, algo que vive entre nosotros, tan adentro, como si de nuestras entrañas se tratase. Algo que nos atormenta desde siempre. Vamos a poner el caso de Hannah Arendt277, cuando Eichmann278 fue acusado de crímenes contra no solo los judíos, si no crímenes contra la humanidad. Para Arendt, Eichmann no era el monstruo que era considerado por la prensa, ya que estos 275 Hannah Arendt. La Banalidad del mal. 276 Para San Agustín de qué carece el bien. 277 Filósofa Alemana de origen judío.

278 Adolf Eichmann. Miembro de las SS.

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actos realizados por este mismo, no fueron porque él tuviese una capacidad inmensa para ser cruel, sino por ser un operario en un sistema basado en el exterminio. Era un funcionario del odio, la indignidad, la xenofobia de los psicópatas, un funcionario del orden ciego. Debido a este análisis, Arendt acuñó esta expresión para de alguna manera expresar que estos individuos dentro de las reglas del sistema al que pertenecen, sin reflexionar sobre sus actos ya que les dan igual las consecuencias que estos actos puedan generar, solo se centran en cumplir órdenes. Como si de peones en un tablero de ajedrez se tratase. Lo que más asombró a Arendt, fue el hecho de que Eichmann279 no era un tipo retorcido ni inteligente, al contrario, era un tipo vulgar y común, inclusive poco listo. La existencia del mal en el mundo es muy común, ya que se puede originar de una confianza excesiva en la razón, de ahí el terror tecnológico. Otro origen puede ser la búsqueda del bienestar social, llevando a los gobiernos totalitarios a eliminar el sentido y el valor de una vida humana. El mal no es un demonio sino que es algo que los seres humanos hemos permitido, tendríamos que deconstruir280 todo lo nuestro, todo lo que nos rodea para saber qué es lo que hacemos mal. Hemos dejado de lado la reciprocidad 281 generando un círculo vicioso que 279 Hannah Arendt: "El problema con Eichmann fue precisamente que

muchos fueron como él, y que la mayoría no eran ni pervertidos ni sádicos, sino que eran y siguen siendo terrible y terroríficamente normales. Desde el punto de vista de nuestras instituciones legales y de nuestras normas morales a la hora de emitir un juicio, esta normalidad es mucho más aterradora que todas las atrocidades juntas." 280 Deleuze. Analizar sin derruir 281 En la medida que te dan, das.

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simplemente nos ha llevado a ser una nación nazificada. Simplemente tomar órdenes sin pensar en las consecuencias que estas puedan generar. El ser humano lo que debería hacer, y sobretodo la mujer, es seguir luchando para conseguir la igualdad de género, ya que, aunque no parezca, el hombre tiene miedo a la mujer porque este sabe que ella podría llegar a ser superior moralmente. Lo único que busca la mujer es la igualdad y no el dominio entre los géneros. Toda esa igualdad, la mujer la intenta conseguir mediante la lucha con el feminismo, del cual Arendt ha sido una gran representante. La banalidad del mal es lo que lleva afectando a la mujer a lo largo de los años, habiendo sido el hombre el que simplemente dio las órdenes oprimiendo así toda capacidad de que la mujer pudiera pensar por sí misma, ya que la mujer siempre ha estado sometida mientras el hombre siempre ha dominado sin dejar pensar a la mujer si lo que va a hacer es lo que quiere, o lo que es correcto. Ellas aprendieron a pensar por sí mismas gracias a la ayuda de mujeres como Simone Weill282 quien fue luna entre las que les guió en el camino de ser independientes283. Para erradicar el mal de las sociedades el ser humano no tiene que alejarse de la sociedad, del mundo, porque la convivencia en libertad, en el entendimiento, genera en los hombres un sentido de responsabilidad social, y no solo la búsqueda de un bien común, sino la búsqueda de una existencia en un mundo con sentido sin maldad. 282 Filósofa francesa.

283 Simone Weil: “La obediencia a un hombre cuya autoridad no está

alumbrada con legitimidad es una pesadilla.”

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4.

La acción comunicativa de la Justicia. Rodrigo Sacara

Hombres y mujeres a lo largo de la historia han vivido en contextos donde la injusticia, la desigualdad y la explotación han sido amenazas y realidades para la mayoría de la población y sobre todo para las mujeres. La trayectoria de la liberación de la mujer es como una espiral abierta, con retrocesos y estancamientos, pero apuntando a la posibilidad del cambio pese a la resistencia del poder hegemónico. El Siglo de las luces ha sido un punto de inflexión en la emancipación-liberación de su culpable incapacidad de servirse de su inteligencia sin la guía del otro, una incapacidad culpable porque la causa no reside en la falta de inteligencia sino en la falta de decisión y de valor para servirse por sí misma de ella sin la tutela del otro284. Pero decidir por sí mismo ante los retos de la vida con autonomía y consciencia es una de las cuestiones más difíciles, pensar que en nuestro interior radica la verdadera libertad, que está siempre en nuestras manos, nos lleva a un estremecimiento oscuro, donde día y noche se confunden en los sueños, donde no hay ideas claras, únicamente es territorio de nadie. Un territorio donde el mayor de los vacíos, es condición de luz repleta de monstruos generados por los sueños de la razón que habitan en la sombra y nos hacen pensar realidades inexistentes, mundos imposibles y teorías absurdas. Con la luz de la razón se puede superar un pasado de sombras, el lado oscuro que cada uno tenemos y es reflejo de lo reprimido y lo escondido, y responde a la esclavitud con la que ha cargado la mujer desde la aparición de las polis285.

284 Kant. Sapere aude. Atrévete a pensar. 285 Ciudades-estado independientes de la antigua Grecia.

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Durante muchos siglos la mujer ha tenido que cargar con unas virtudes fundamentales 286 que no ha elegido ella misma, sino que le han sido impuestas por los más poderosos. Estas virtudes eran un corsé que no diseñó ella, ese corsé que la sociedad patriarcal le había diseñado y la oprimía, por tener que reprimir sus aspiraciones intelectuales, no poder expresarse en voz alta más allá de lo privado, porque así lo decidieron otros en su nombre. Pero a pesar de estas barreras impuestas, y su ansia de liberación, ella quería rasgar las ataduras, sentirse libre y tener las mismas oportunidades que sus opresores, una igualdad de facto, porque está claro que hay diferencias entre hombres y mujeres: la mujer es origen y está estrechamente vinculada a la vida, el esfuerzo y la vivacidad, mientras los hombres mantienen una relación con lo racional. El recorrido histórico de la mujer no ha sido fácil, sino que ha transitado unos caminos cuesta arriba, pero positivos, y siglos tras siglos ha intentado transformar la visión de sí misma en la sociedad, en todos los aspectos. Había mucha contradicción entre el deseo de ser, la imagen proyectada y todo lo creado sobre ella en la sociedad. Su trabajo ha sido un continuo romper moldes, y al principio no ha destruido nada, sino que se ha adaptado más o menos conscientemente a unas maneras, una imagen, un lenguaje, contrarios a lo que verdaderamente deseaba. Cuando su propio imaginario, su propia voz, su propia palabra, empezó poco a poco a desatar cada uno de los cabos, demostró que tiene deseos, aspiraciones, algo que decir más allá del espacio privado. En aquellos espacios donde era invisible y olvidada, la vida heroica o anónima

286 Jacques Rousseau, El contrato social.

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de muchas mujeres ha ido a parar a los ríos del olvido, y salir de su invisibilidad para participar de forma activa en la creación de una sociedad donde ella también tenga cabida, pero no solo como mujer sino como ser humano, como “ciudadana”, porque por el simple hecho de haber nacido mujer se quedó fuera del espacio que los hombres se apropiaron. Cansadas de ser objeto para los hombres, decidieron emprender el camino hacia la liberación y conquista de un lugar propio, un lugar en la sociedad de los hombres y por qué no la lucha por una parcela de poder que los hombres difícilmente querían cederles, y convertirse así en sujetos de su propia historia. Tuvieron que entender ese mundo de los hombres, para poder desafiarlo y cambiarlo, y hacerse cargo de su destino, reconocerse dueñas de su vida, ser capaces de servirse de su propio entendimiento y con el conocer, conocer el mundo que les rodea y en el que viven. Era el momento de servirse de su razón porque es la esencia del ser, y con ella pueden abrirse las puertas del conocimiento, de sí misma, y disponer de los medios adecuados para transformar o cambiar la sociedad en la que vive. Confiar en la razón es confiar en el progreso, un progreso percibido como un cambio de las tinieblas del pasado por las luces del presente, el progreso de la moral que les permite liberarse de las ataduras y avanzar en la conquista del saber, participar en el ámbito público hasta hace poco desconocido para ellas y así participar en la creación de la sociedad. La situación de la mujer ha cambiado mucho a lo largo de los siglos, aunque mantiene sus sombras y luces, a veces oscilando entre movimientos firmes, otras veces titubeando hacia un lugar claro en la sociedad, donde

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caminar para la mujer era difícil, cuanto más se consolidaba un orden y su reflejo social, más tarde o más temprano se promovía otro orden. Desde siempre han existido en el mundo dos tipos de personas287: los seres humanos y las mujeres, y cuando ellas trataron de comportarse como seres humanos las acusaron de querer ser hombres. Pero no se trata de ser hombre, sino de pensar, que es uno de los principios de la libertad humana, pensar de la manera que sea, y reflexionar sobre esa manera de pensar, tanto para afirmar esos pensamientos como para modificarlos, porque hay que ver si lo que se defiende vale la pena desde el punto de vista de una justicia incluyente, una sociedad más plural y más indulgente. La liberación de la mujer es igualdad, una igualdad de oportunidades, que implica un juicio de valores, ya que todos los seres humanos son iguales y tienen que tener los mismos derechos y obligaciones, participar en igualdad en los espacios públicos, donde el ser humano cumple realmente esa libertad. Ese espacio que para Hannah Arendt es tan importante, donde los ciudadanos son libres de determinismos, y donde la libertad se manifiesta en la existencia de otros, y no hay discriminación entre mujeres y hombres. Ante todo, la igualdad necesita del derecho a estudiar y al trabajo digno, que permita a las mujeres tener autonomía, vivir sin necesidad de un padre o un esposo al lado, porque la falta de estudios, costumbres o el reconocimiento como ciudadana, han sido obstáculos atávicos que les han impedido demostrar su valía y sus capacidades, demonstrar si realmente son capaces de gobernar y ejercer sus derechos. Ni la sumisión ni la 287 Simone de Beauvoir.

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adquisición de modales inútiles ligadas a las apariencias, les permite ser mejores madres, esposas o ciudadanas, sino que el reconocimiento de sus derechos les otorga mayor respeto, justicia y virtud tanto dentro del hogar como en la vida pública, y esto lleva a una convivencia humana basada en la igualdad y libertad. La igualdad y la libertad se constituye en el poder de iniciar algo nuevo, una relación entre hombres y mujeres, porque cuando cada uno de ellos dan su visión sobre la realidad, nace la idea de libertad de hablar y expresar, nace un mundo común a ellos. La libertad se halla en la convivencia de los seres humanos y se manifiesta mediante el actuar 288 , no es una libertad condicionada, porque el ser libre ha superado sus propias necesidades. Los seres humanos tienen algo diferente de los animales: identidad, radicada en la singularidad, y para construirla, ya que no está todavía acabada necesitamos hablar porque cada uno tiene un pensar diferente y mediante la acción nos podemos entender, usando la palabra en un mundo donde impera la libertad. Las mujeres han buscado políticas e instituciones justas para afrontar el miedo a la diferencia, donde los medios no sobrepasan los fines y la política esta vista como capacidad para alcanzar acuerdos. Todos los seres humanos tienen capacidad y competencias para relacionarse desde la violencia y discriminación, pero también tienen capacidades para relacionarse desde la ternura, creando instituciones políticas justas y formas pacificas de gobernación desde la acción comunicativa. 288 Hannah Arendt: “La libertad solo pude darse en la pluralidad, en el

espacio que surge entre los hombres, en cuanto conviven y actúan entre ellos.”

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Instituciones justas que brindan a la sociedad la justicia que se merece y con ella dar a todos los miembros los mismos derechos y obligaciones, para solucionar los problemas que surgen en la convivencia humana y en la acción. Una justicia que es el valor supremo de toda moral, y es la perfección moral del ser, y reconocimiento de la mujer como ciudadana. El ser ciudadana implica participar en toda la vida pública, donde los seres humanos se sienten felices, porque interactúan y pueden transformar la realidad como hombres y mujeres, con saberes diferentes, pero con saberes, posibilidades y capacidades de comunicar y transformar. En la esfera pública se realiza la condición de dignidad -como posibilidad de que cada uno de nosotros somos singulares, porque ninguno de nosotros tenemos un igual y no podemos ser remplazados. La condición humana es pluralidad en sentido de que somos todos iguales pero únicos e irrepetibles, y mientras que cada uno de nosotros tenemos algo que aportar, pero siempre desde la acción, somos importantes. Cuando somos incapaces de actuar, de reflexionar, buscando solo el bien común, dejamos de ser sujetos de experiencias y nos transformamos en objeto de experimentos, no hay acción política y este actuar de los hombres termina exterminándolos 289 , pone fin a la pluralidad inherente al espacio público donde los hombres son libres de actuar. Las condiciones sociales e históricas de la mujer han variado mucho desde los inicios de la lucha para la liberación, y el cambio hacia la democracia lo han protagonizado las mujeres, no solo con el empeño de eliminar las leyes que las consideraban menores de edad,

289 Hannah Arendt, Los orígenes del totalitarismo.

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sino con lo que más difícil ha sido, derrotar los muros de una sociedad machista. La vida en sociedad y particularmente la vida en democracia se basa en la convivencia, autonomía y solidaridad, en la educación y educar para la democracia, cada individuo de la sociedad debe y tiene que insertarse en el equilibrio de preservar lo que hay que preservar y cambiar lo que se tenga que ser cambiado. En tiempos actuales es difícil saber hacia dónde nos dirigimos como humanidad. ¿Caminamos hacia una transformación de la sociedad y acabamos con las injusticias que vemos todos los días? Sabiendo que el orden democrático se logra con la participación de todos como personas, igualdad no es uniformidad. No somos libres sin la libertad mental de decir si o no, a lo que es en realidad, porque la imaginación nos hace presente lo que está ausente, la experiencia del tiempo nos permite pensar más allá de lo que es el porvenir. Si todos nos comprendemos en la lucha solidaria se hará realidad el sueño de Hannah Arendt: Lograr una democracia participativa. 5.

Democracia y Desobediencia civil. Rubén Vicente

El futuro de la humanidad depende de nosotros mismos, ya que somos nosotros los que elegimos vivir de una determinada forma, cosa que provoca paradójicamente un sentimiento de tristeza, desarraigo y extrañeza. Nos hace reflexionar sobre la falta de empatía y valores

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humanos que tiene nuestra enferma sociedad, contagiada por la enfermedad del Yoismo290. Pero para ver como nuestra sociedad ha evolucionado a este crítico estado de anomía291, hace falta remontarse a lo más profundo de nuestra sociedad, al principal responsable, a nosotros mismos como ciudadanos. El comportamiento de un individuo viene determinado por cómo se relaciona con los otros, ya que si no nos relacionáramos con los demás individuos no sería posible formar una sociedad, ya que por naturaleza un ser humano necesita sentirse querido por los demás, tiene la necesidad de sentir que resuena en los otros, para así no enfermar de soledad. Ahora, basándonos en profundidad en los elementos que forman una personalidad, cabe destacar el Inconsciente, porque es ahí donde se encuentra el origen de los comportamientos sociales que tenemos. El inconsciente es el lugar donde se almacenan nuestras emociones vividas a lo largo de nuestra vida, sin olvidar nada, hechos traumáticos, entre muchos más, aparentemente olvidados. No es un lugar que podamos comprender ni entender, sin embargo, siempre cargamos con ello. Este inconsciente se mueve en un tipo de lenguaje específico, simbólico, los sueños, ya que cuando soñamos vivimos más nuestro verdadero yo, porque cuando soñamos nos alejamos de esa tortura del lenguaje lógico en el que nos solemos manejar siempre, porque en los sueños podemos ser nosotros mismos, porque cuando 290 Cuando

un individuo se manifiesta creyendo ser el centro del universo. 291 Estado de desorganización social o aislamiento del individuo como consecuencia de la falta o la incongruencia de las normas sociales.

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soñamos vivimos nuestros sentimientos a quemarropa292. Pero, ¿Por qué soñamos, qué hace funcionar este inconsciente que nos permite formar la estructura profunda de nuestro yo, y cómo repercute esto en los medios que usamos para llegar a relacionarnos con los otros? La respuesta más apropiada para esta pregunta, es sin duda el lenguaje, ya que el lenguaje es donde habitamos, porque si no fuese por el lenguaje jamás hubiésemos conseguido sobrevivir293. El simple hecho de poder relacionarnos con los demás nos permite vivir, nos permite ser mejores, nos ha dado la oportunidad de levantar grandes proyectos comunes, sociedades a lo largo del tiempo. Pero el lenguaje tiene un valor muy importante en nosotros, ya que es el encargado de mantener viva nuestra historia, es el encargado de hacer que nuestra historia no caiga en el olvido absoluto, pero cuanto más nos adentremos en el lenguaje, más reflexionamos y nos damos cuenta del grado de desigualdad en el que convivimos y en cómo nos dejamos influenciar por los demás, pero es el hecho de pensar críticamente lo que nos humaniza294. Si una cosa queda clara con todo lo mencionado anteriormente, es que el simple hecho de que cómo nos ven los demás es una gran influencia en nosotros, ya que si queremos encajar dentro de los estándares de la 292 Su definición es dispara a un blanco desde muy cerca. En este caso

se refiere a la que vivimos los sentimientos tan intensamente cerca que los sentimos tan cerca como un disparo a quemarropa. 293 Esta idea de sobrevivir está muy relacionada con la voluntad de vivir de Schopenhauer (que influyó en la filosofía de Nietzsche). 294 Simone Weil: “soportar el pensamiento, es lo que nos hace mortales.”

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normalidad debemos adaptarnos a lo que socialmente está estatuido como normal, limitando nuestra capacidad reflexiva y engañándonos y manipulándonos como quieran, ya que si no nos adaptamos a los gustos o a la enfermedad social, la moda 295 del comportamiento, seremos individuos diferentes al resto; y si a eso le sumamos que nos valoramos a partir de prejuicios, estaremos condenados a ser los excluidos de la sociedad. Pero a fin de cuentas, es el riesgo que tiene exponerse al mundo exterior, porque este mundo no es un sitio agradable, por lo menos actualmente no lo es, a no ser que vivas sin pensar, siendo el ser más “normal”, lo que a fin de cuentas sería ser una persona que no reflexiona, no piensa, no convive. Retomando la idea de que el mundo exterior no es un sitio agradable o que por lo menos no lo es actualmente, concluimos esta idea con que el mayor riesgo que tenemos al enfrentar el mundo exterior que es sin lugar a dudas el hecho de no lograr tener objetivos en nuestra vida, objetivos no idealistas por eso mismo y para no caer en la búsqueda del sentido que tiene esta vida, buscamos los medios que nos den satisfacción, ya que el ser humano tiende a buscar aquellas cosas que le den placer, ya que por naturaleza somos seres que buscan la realización el deseo; para ello tendemos a ver nuestra vida como una narración, como si tratásemos de escribir nuestra biografía a partir de la búsqueda de nuestro deseo, pero ese deseo que nosotros buscamos es inalcanzable, porque jamás lograremos estar satisfechos con lo que hemos logrado o tenemos, el deseo no se puede satisfacer y eso es un hecho que nos provoca 295 Cuando me refiero a la moda como a una enfermedad, me refiero al

hecho de cómo adaptamos nuestros gustos y costumbres a lo que la gran mayoría piensa que es lo más normal.

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dolor, pero gracias a ese dolor y nuestro continuo afán de seguir buscando complacer nuestro deseo, ese impulso de vivir es lo que nos permite superarnos296. Todas estas ideas expuestas son la base de nuestra personalidad en la sociedad, pero ahora que ya sabemos todo esto, ¿cómo se vincula con el futuro de nuestro sociedad y con la deficiente empatía y falta de la aplicación de los Derechos Humanos actualmente? Todo el engaño de la sociedad actual comienza con cómo hemos sido engañados en nuestra historia, esta idea es simple de entender, nuestros antepasado para sobrevivir se dieron cuenta de que la supervivencia no se pude llevar a cabo de forma individual, esto debe ser un pensamiento colectivo, un objetivo que sea compartido por todos, la formación de un proyecto común. A lo largo del tiempo el egoísmo y la corrupción humana se fue volviendo más relevante en nuestro pensamiento social, cada vez olvidando más el por qué nos unimos en sociedades, el por qué hemos conseguido sobrevivir hasta hoy, y eso es porque el poder nos corrompe. Nosotros actualmente, en nuestra sociedad de espacios virtuales, estamos doblegados, engañados en una falsa democracia, que tiene como base los valores humanos pero que no los cumple, dando más importancia al valor económico que a la igualdad entre nosotros y a la realización de una vida con nuestros propios derechos basados en el hecho de haber nacido. Y no con derechos que se aplican de forma conveniente a los que más poder económico tienen en nuestra sociedad; porque si la prioridad de los poderes de nuestra sociedad, los gobiernos

296 Este impulso de vivir para lograr una felicidad momentánea a partir

del impulso de la vida y del dolor es la voluntad de poder de Nietzsche.

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títeres del dinero, fuese aplicar unas leyes, unos derechos que de verdad se basen de los Derechos de Humanos, no tendríamos una sociedad tan contaminada por ideologías totalitarias. Pero esto no es una situación que haya surgido ahora, se lleva acumulando como si de un contenedor se tratase, y si parece increíble, solo hace falta ver cómo la figura de la mujer ha sido castigada y reprimida durante tanto tiempo. Actualmente no se puede ser mujer sin soportar el dolor297 de la historia que se tiene detrás. Nunca tanta ruina se erigió en paradigma utópico. El dolor por esa historia es un sentimiento totalmente justificado, ya que las mujeres han sufrido una desigualdad en los derechos que las ha hecho sufrir. Pero las mismas mujeres gracias a la lucha por sus derechos han conseguido avanzar en esa igualdad, las mujeres consiguieron iniciar un movimiento que buscaba el reconocimiento, buscaba el reconocimiento y cumplimiento de que los derechos fundamentales que tenemos como seres humanos. Por desgracia este movimiento se encuentra corrompido por los altos cargos de nuestra sociedad, que han conseguido influenciarnos socialmente, para que todos sigamos un rio de normalidad y nos volvamos enfermos de la moda, lo que es el equivalente a unas personas que no tienen la capacidad propia de pensar por sí mismas. Ellos nos ocultan la realidad y nos manipulan dándonos un pensamiento global que a ellos los beneficia, nos distraen y nos engañan, Hace referencia a la idea de ser mujer en un sentido no correspondiente al género. Es una cita de Simone Weil.

297

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saturando nuestra atención por otras cosas; mientras que los gobiernos corruptos cumplen sus intereses y aumentan su beneficio a causa de perjudicar a la clase trabajadora, nosotros, aún así, les seguimos apoyando y dándoles nuestra confianza, mientras ellos están consiguiendo convertir este perfecto movimiento, que empezaron aquellas mujeres y que buscaba un mensaje claro: recuperar todos los derechos arrebatados a la mujer durante mucho tiempo, en un movimiento que de momento defiende el mismo objetivo, pero ahogado por los prejuicios patriarcales aún en el poder, logrando que en vez de centrarnos en los verdaderos culpables de la actual farsa democracia, nos centremos más en discutir entre nosotros sobre el diseño social de la lucha, en vez de inundar las calles reclamando justicia real y universal. Está claro que si queremos un futuro conveniente, un futuro en el que todos podamos tener esos derechos humanos, debemos actuar, ya que es el momento de luchar por nuestros propios derechos, salir de ese río de la normalidad y hacer como aquellas primeras mujeres, y luchar por una justicia que se base solo en el hecho de que haber nacido nos hace dignos de todos los beneficios de nuestra evolución 298 . Pero claro, como en todos los grandes cambios que se han producido a lo largo de la historia no hay que tener miedo a las consecuencias, porque ellos nos dominan por el miedo, porque si no luchamos nosotros por nuestros propios derechos, ¿quién lo va a hacer? Es hora de que nos demos cuenta de que sin desobediencia civil no habrá jamás una verdadera 298 Acabar

con el darwinismo social y desarrollar la idea de Apoyo mutuo de Piotr Kropotkin.

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democracia. Y son los actos los que van a definir nuestro futuro. 6.

Los actos nos definen. Mario de Amilibia

Todos y cada uno de nosotros creamos nuestro propio futuro, ya que nuestra forma de comportarnos, nuestros actos, lo definen. Por lo tanto, si queremos que nuestro futuro sea idóneo, tenemos que luchar por nuestros derechos y por la libertad propia y la de los demás sin importar las consecuencias 299 , y conseguir una democracia la cual sea imposible de lograr si no hay participación, es decir, debemos ser el héroe300 griego del siglo XXI. Hay personas que creen que simplemente por el hecho de tener éxito en la vida o mucho dinero, ya se han definido como personas y seres humanos. Esto no es así, ya que aquello que nos dice cómo es una persona, es su manera de comportarse. Así que, si quieres ser el héroe griego de la virtud, de nada vale decir que vas a actuar de una forma determinada si en realidad no lo haces, ya que te estás mintiendo a ti y al resto de personas, lo cual hará que te definas a ti mismo como una persona cobarde y poco fiable. Si queremos ser personas valientes, con coraje, debemos actuar como muchas mujeres han hecho a lo largo de los años contra la desigualdad de género, y para ello hay que salir a la calle a protestar y no quedarse en casa como hacen la mayoría de los jóvenes cuando hay una huelga. Los actos nos definen, y si todas esas personas, 299 Aquiles lucha en el gineceo. 300 Héroe:

aquel o aquella que entiende las responsabilidades que comporta el disfrute de la libertad, y que actúa para defenderla.

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tanto hombres como mujeres, que prefieren quedarse en casa, saliesen a protestar junto al resto, el mundo sería diferente y muchas cosas presentes en la sociedad actual en la que vivimos cambiarían como han ido cambiando muchas otras cosas gracias al Feminismo301. Desgraciadamente, cada año se producen maltratos, violaciones y asesinatos de mujeres, los cuales son debidos a la falta de empatía de los hombres con el valor de lo humano, lo cual hace que estos se sientan inferiores a las mujeres, y por lo tanto, una forma muy equivocada de demostrar esa patología es el maltrato a la mujer, por ser mujer. Lo peor de todo es que, cuando esto sucede, muchas de las personas que llevan a cabo estas atrocidades, no son castigadas de la forma en la que deberían serlo, lo cual nos hace pensar en el fracaso de la dignidad en el estado 302 . Un Estado que también es responsable de la violencia de género, debido a que el gobierno no dicta leyes ni otorga presupuestos a los programas que atienden la cuestión de la violencia machista. Para lograr acabar con tanta desigualdad y violencia de género, debemos educar a nuestros hijos, ya que la educación es necesaria para la sexualidad, aunque también necesitamos tener conciencia, la cual tiene un territorio muy pequeño303 y es el enemigo del capitalismo. Para que un hombre o una mujer tengan conciencia, tienen que atravesar la locura. La locura es una 301Defensa de la igualdad entre hombres y mujeres. Fue impulsado en

Europa por Simone de Beauvoir, Emmeline Pankhurst, Rosa Luxemburgo, Clara Zetkin y Olympe de Gouges. 302 Rita Segato, antropóloga y feminista cuyos trabajos se centran en las formas de violencia contra las mujeres y las relaciones entre poder y colonialismo: "el cuerpo de las mujeres es un lugar en el que se manifiesta el fracaso del Estado." 303 Rita Segato.

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manera distinta de pensar a como lo hace la mayoría de la gente, y por lo tanto estas personas que piensan de esta forma, son excluidas a la periferia de la sociedad y no debería ser así, ya que la locura conduce a la verdadera razón, gracias a ella podemos resolver muchos de los problemas 304 a los que se enfrentan las mujeres simplemente por el hecho de serlo. Muchos hombres se sienten culpables305 después de haber maltratado a una mujer, y es algo completamente normal. En esos momentos en los que uno se siente culpable porque ha hecho daño a alguien, lo mejor que puede hacer es hablar con esa persona y disculparse, ya que el hombre es un animal enfermo de sentido, y en el discurso lo podemos encontrar fácilmente, o pedir ayuda a un psicoterapeuta. Sin embargo, hay otras personas que no tienen la valentía de disculparse porque creen que son ellos los que llevan razón, y, por lo tanto, prefieren olvidarse de esa persona. Con el paso del tiempo, estas personas acaban viviendo solas y sin relacionarse con los demás, ya que piensan que la mejor opción es vivir solo. Realmente se equivocan, ya que uno no puede vivir solo, excepto si es un idiota. Estas personas que no se arrepienten de haber maltratado, violado o vejado a alguien, son las que deberían ser excluidas de la sociedad porque son peligrosas, ya que podrían volver a repetir su conducta. De nuevo, los actos nos definen a la vez que a nuestro futuro, por lo tanto, como ya he mencionado previamente, lo mejor es disculparse, ya que un simple error puede hacer 304 Problemas a la hora de encontrar trabajo, maltratos, etc.. 305 El

sentimiento de culpa en nuestra tradición judeocristiana, está ligado a un obrar en oposición a la moral convenida que conlleva el castigo.

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que tu futuro no sea aquel con el que siempre habías soñado. La feminización del trabajo es un concepto que pone en evidencia el estilo de vida de muchas mujeres que tienen trabajos que no han sido elegidos por ellas y en condiciones que no son las apropiadas. En el trabajo también existe discriminación a las mujeres, y un ejemplo de ello es que sus sueldos son menores a los de los hombres, simplemente por el hecho de ser mujer. Por otro lado, en la vida cotidiana también hay discriminación hacia la mujer, ya que, en muchas casas, son ellas las que tienen que fregar, lavar los platos, es decir, realizar las tareas del hogar. Las mujeres tienen los mismos derechos que los hombres, por lo que no se merecen ser tratadas de esta manera. Mucha gente cree que la sociedad está evolucionando día a día, pero realmente estamos yendo hacia atrás. Parece mentira que no nos demos cuenta de que, si no fuese por las mujeres, no existiría la raza humana, y aun así hay gente que piensa que son inferiores y cree que puede dominarlas. Al fin y al cabo, todos debemos respetarnos sin importar de qué genero seamos, ya que tenemos los mismos derechos democráticos. Esto es algo muy importante a la hora de definirnos como personas ya que los actos de elección ética nos definen, y, por lo tanto, tenemos que desarrollar un yo adecuado, que luche por la libertad y los derechos del ser humano sin temor a las consecuencias que pueda ocasionar.

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7.

Las masas y el yo. Daniel Gómez

Darse cuenta del dolor que padecen las mujeres y dejarlo pasar… Un hombre machista no siente lo hondo de ese dolor, su dimensión histórica. Solo un escéptico puede afirmar que siente, solo los que tengan una vida que no esté impregnada de los errores que causa vivir a la sombra de la razón misógina. Han querido defenderse contra todos los hombres, observar y descubrir el origen de su locura, mas como lleva pasando desde que tenemos conocimiento, han perdido la batalla del pasado, pero no son ellas quienes pierden, somos todos. Sabemos que moriremos, el ser humano no aguantaría la eternidad; lo que sí merece la pena que siga adelante es el espíritu de la rebelión, la mujer como concepto revolucionario que socave los cimientos de la decadencia capitalista, la unión de millones de personas y que afronten y derriben todas las fronteras entre países y mentalidades. ¿No queréis ser libres y no cargar el miedo que sube por vuestra espalda como el frío de la noche? Alzarse y unirse todos es la forma de conseguir derribar las mentiras de la democracia, sin insinuar que alzarse sea armarse, no. Alzarse no es coger las armas, sino aplicar la resistencia pasiva y la fuerza de la mayoría, con unos leyes más nobles derivadas de los Derechos Humanos, Así debería ser educar a los jóvenes para que sean capaces de construirse ellos mismos, y que en un futuro la población no padeciera de las carencias que se pueden palpar ahora. Tan fácil como que cuando se educa se deje escoger el camino a seguir, no con odio, no con el afán de ser el mejor pisando al resto, solo con amor y respeto. Puede parecer evidente que para conseguir cambios haya que rebelarse, pero lo más evidente resulta ser lo menos

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evidente y aunque parezca extraño, cuanto más lo nombro más lo desprestigio, la rebeldía no se puede enseñar, la tienes que alcanzar por vocación propia, no puedes luchar con el corazón en contra de tus ideales, por eso mismo el deseo en el hombre le ha llevado a la locura y a la gloria por igual, y el infinito deseo de la rebeldía no puede sostenerse sin las pequeñas conquistas del amor. El diálogo entre la luz y los cuerpos humanos tiene bases físicas que evocan la dialéctica del universo, la relación es sencilla teniendo en cuenta que habitamos la palabra y la palabra tiene el poder que nosotros le queramos dar; el problema llega cuando nos damos cuenta que no todo el mundo le da el mismo significado a las palabras ni la misma profundidad, ahí llega la nitidez de cada uno al expresarse. Si las personas fueran simples solo valdría con ser claros y referirse a los objetos con evidencias, pero siempre está la misma pregunta: ¿Si solo puedes saber que existes y no puedes afirmar con certeza que todo es real, hasta dónde es real el mundo? Unos piensan que el mundo no es más que un atrezo y que es tan grande como puedas soñarlo; los empiristas solo piensan que el mundo es todo lo que pueden tocar, otros simplemente lo niegan, mas siendo escéptico no vas a alcanzar la razón, y otros piensan que el mundo fue creado para ellos por un dios absurdo, estos tienen las ideas claras, son dogmáticos, y a los que están en contra los castigan. Nada más terrible que una dictadura uncida por la religión. Un silencio de golpe, en medio de una conversación, nos hace darnos cuenta del enorme precio que hay que pagar por la palabra, tener conciencia y vivir en el mundo de las emociones y el dolor; aunque, sin la esperanza de un dolor menor no podría soportar el que siento ahora, sea o no imaginable su duración. Negarme un

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futuro no es peor que negarme un pasado y ahogarme en melancolía, sin melancolía los ruiseñores cantarían, esta melancolía trata la angustia que sientes por no haber vivido, intenta asumir que lo que no has hecho es imposible, ese orgullo de haber vivido todavía está por llegar con el superhombre. Cuando eres consciente, de manera absoluta, de que todo es irreal, no vale la pena fatigarse en demostrarlo, solo te sientes como una vela en una habitación cerrada, das luz hasta que lentamente te consumes y te mueres; es preferible arder hasta la muerte a morir en el vacío y la resignación de los sabios. Solo cuando alguien se rebela contra la muerte somos conscientes de lo heroico que puede llegar a ser, aunque la revolución sea brutal y conlleva todo un sacrificio. Solo vemos pasar las horas y no nos preocupamos por llenarlas, llenar de placer el tiempo de la existencia, de lucidez, de conocimiento. A su vez es lo más doloroso por la conciencia exacerbada del filósofo, por eso los optimistas piensan que ese dolor se pasará, los escépticos niegan la existencia real del dolor profundo, y los necios ni se plantean el dolor. Llámame necio por buscar el placer en la lucidez sabiendo que tengo que tirarme de cabeza en el vacío que yo mismo he creado. 8.

Realidad y Deseo. Noemi Blázquez

La herencia que deja el barroco es una visión más profunda del arte de construir la realidad, en la que intenta desarrollar un tercer ojo con el cual abrirse a lo invisible, que representa los enigmas más profundos, lo que se esconde tras las apariencias de las cosas. El juego de la luz y de la sombra en todo ello, se corresponde con el juego de

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lo lleno y lo vacío, donde la luz no sólo ilumina los objetos, sino que hace surgir el vacío que hay entre ellos. Pues la mirada -en psicoanálisis tiene valor propio-, en el sentido que lee/mira el avatar humano a través de la experiencia de lo inconsciente que, por definición, es lo invisible, es lo que traba y turba la razón. Para algunos autores no hay realidad en sí, sino que todo son apariencias, no hay objetividad sino subjetividad, no hay hechos si no interpretación de estos. Solo hay una realidad y los hechos son así es una ficción. Esto está relacionado con el deseo, en el sentido de que estas interpretaciones que el sujeto hace de la realidad dependen en mucha medida de las pulsiones306. Para Freud, el psiquismo humano es pulsional, lo que quiere decir que hay muchos impulsos y necesidades de deseo, instintos, y por lo tanto, el deseo es bastante constitutivo, donde se diferencia el eros del thánatos, que son los instintos de crear y morir. A diferencia de Nietzsche, que diría que interpretamos una realidad ya que una realidad no la podemos conocer exacta y todas son aceptables. La realidad objetiva son interpretaciones. Freud decía que había tres niveles 307 : el Ello, que representa los impulsos, necesidades y deseos más primitivos y el cual se rige por el principio de placer y la

306 Lo que Nietzsche denominaba Voluntad de poder. 307 Concepto psicoanalítico. Con esta expresión, Freud

se refiere a la mente humana; utiliza la palabra "aparato" para subrayar la capacidad que tiene la mente para la transformación de la energía psíquica, y la existencia de partes o instancias que modulan y controlan los recorridos de dicha energía. La primera tópica dividió el aparato psíquico en tres estratos o niveles: Consciente- Preconsciente- Inconsciente. Y la segunda (que no se opone a la primera sino que la integra) en tres instancias o dimensiones psíquicas, Ello-Yo-Superyo.

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satisfacción inmediata de las necesidades por encima de todo. El Super-yo que representa los pensamientos éticos y morales procedentes de la cultura y el núcleo familiar. Y el Yo, es el encargado de mediar entre los deseos del Ello y las exigencias del Super-yo, siguiendo el principio de realidad, pues debe satisfacer estas demandas de manera apropiada. El exterior, el mundo de la vida, donde podemos apreciar que aparte del principio de placer y deseo, hay realidad, nos desconcierta por su irrealidad. Y que el placer o deseo no se puedan cumplir cuando queremos, diferir la satisfacción, es por lo que la realidad condiciona los deseos a medida que crecemos y es cuando nos permite crear, donde nos damos cuenta que los deseos, no pueden satisfacerse aquí y ahora, ya que la realidad impone unas ciertas condiciones que hacen que se demoren los deseos, que por definición son insatisfacibles. Al evolucionar en nuestra sociedad vemos que la mujer poco a poco va cobrando más importancia, nos plantean la mujer como heroína de la historia, del tiempo político, de la realización de las utopías, de la revolución, del cambio social. Nos enfrentamos a una heroína que tiene que construir el espacio del infierno, siendo el infierno lo evidente, lo que todos damos por hecho que es así, por eso, esa lucha contra lo evidente, que en el fondo es vivir. La mujer contemporánea, como sujeto histórico, tiene que ser cínica, escéptica y hedonista superar el nihilismo y ser Übermensch308. 308 Friedrich Nietzsche: Superhombre: Concentra la concepción de un

ser de trascendencia, que se supera a sí mismo y a la naturaleza humana. En esencia, ha superado la esclavitud de la condición humana y ha alcanzado un verdadero estado de libertad, de libre juego y creatividad.

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Nosotros tenemos una visión subjetiva a partir del siglo XVIII, nuestra subjetividad ilustrada empezó a caer a finales del siglo XIX con los maestros de la sospecha Marx, Nietzsche y Freud, donde ponemos en cuestión qué es la vida, mis condiciones materiales, mi existencia y si puedo llegar a conocer quién soy. A partir de esa duda terrible se abren las puertas para recuperar la propia tradición hedonista, la propia tradición cínica de los griegos y la tradición escéptica, es decir, la imposibilidad de decir nada con sentido, o renegar del concepto de verdad; cuando el hombre reniega del concepto de verdad ya no puede emitir juicios sobre nadie, y cuando el reino de la verdad se diluye deja de tener un suelo solido sobre el que sostenerse. La libertad y dignidad de los hombres se multiplica. Por eso las políticas que se ejercen hoy en día, son políticas que se sustentan no en cuestiones reales, sino en devociones. Si hemos conseguido que no haya nada que sustente el concepto de verdad y eso nos hace más libres, la forma que han tenido, la forma que han diseñado, el poder que diría Foucault, la moral que diría Nietzsche, la sociedad simbólica que diría Benjamin, nos ha permitido saber cómo acabar con la esclavitud de la conciencia. La mujer desde un punto de vista patriarcal asume trabajos que no tiene que hacer ella, la mujer por este rol asociado a las estructuras patriarcales se convierte en la que tiene que sostener el peso de la tradición, por lo que tiene que renunciar a su trabajo, renunciar a su tiempo, su libertad. Inconscientemente se convierte en una esclava. Lo que la convierte en una heroína, lo que nos lleva a pensar que el viaje de la mujer en este siglo es un viaje incierto pero necesario, es que nunca antes la mujer había estado en situación de viajar, viajar significa abandonar la casa, la domus, el espacio asignado.

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Porque todo gesto que te posicione frente al poder patriarcal y capitalista, te coloca o te permite dar el primer paso como mujer sujeto político. La evidencia son verdades asumidas por una comunidad, y lo que dice Cioran es que hay que luchar contra esa evidencia con el cinismo, hedonismo, escepticismo o siendo mujer en un mundo de hombres. Lo que nos recuerda la razón estética309, la educación de la sensibilidad en los valores del feminismo para poder salirnos del discurso patriarcal es un proyecto educativo; esa educación desgarradora de las personas de una ternura que ya no puede mantenerse junto a la barbarie del sistema. No310 hay pasado, no hay futuro, en esa reflexión del tiempo que no existe311, todo lo que hay, es lo que hay aquí, y hemos de reconocer que estar aquí convierte cada instante en el que conseguimos estar en un milagro, donde la mayoría de la gente vive por inercia o como le pasaba al ángel de la historia que no podemos abrir nuestras alas, porque el viento del paraíso nos empuja, el viento de la tradición, de la historia, de la verdad, del poder y sobre todo como al parar el tiempo de la historia podemos encontrar entre las ruinas una forma de entender dónde estamos. Y este es el infierno y Dante su voz en una obra donde está todo nuestro imaginario en la búsqueda del amor perdido. Raza efímera y miserable más te valdría no haber nacido, y una vez haber nacido lo mejor que te puede pasar es morirte

309 Chantal Maillard. 310 Emil

Cioran: Estamos todos en el fondo de un infierno, cada instante del cual es un milagro. 311 Hace referencia a Nietzsche.

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pronto312, vivir por pura inercia, vivir sin tomar decisiones, sin apropiarte de tu propia existencia, sin sentir la vida por tus venas, simplemente porque el viento de la historia te empuja. Es como vivir una vida que no has vivido porque no elegimos, no decidimos, no nos arriesgamos, no formamos una ĂŠtica del riesgo, no nos comprometimos. La vida solo merece la pena ser vivida cuando te juegas la vida en cada instante.

312 Nietzsche

nacido.

en relaciĂłn a Emil Cioran, Del inconveniente de haber

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V

La conquista del Sistema por el Mundo de la Vida

SIMONE DE BEAUVOIR

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1.

El drama de la levedad del ser. Imane Herrag

Es importante tener en cuenta que es normal que un ser sienta vacío, soledad o el no existir, no encontrar sentido a la vida, sentirse alineado, depresión, miedo al fracaso, complejo de inferioridad, decepción, desengaño y tanto más…, lo que genera un desidia con frecuencia pesimista, padecer de apatía, no encontrar a nadie ni nada que pueda provocar la alegría necesaria a la crítica y por el contrario, sentir que nada y nadie vale la pena de ser pensado. Sensaciones que se extienden en el tiempo, y por otra parte, una nada, una soledad, una levedad de colibrí313 el no existir, con lo que no se puede llenar ese espacio o herida con otra motivación o emoción. Con el tiempo, luchando y construyendo la conciencia, descubrir la noción de la soledad, y llegar a un punto de individuación, más lejano y desemejante a la vida social. Con todo esto se puede llegar al núcleo de la levedad del ser, una constante natural de nuestro miedo. Se siente la insoportable levedad porque la consideración de la realidad se siente diferente por la desconexión del amor, ser engaño, rompiendo la fuerza que se mantenía para seguir adelante, formar la imagen de que todavía se vive la existencia con otros, por lo que se vuelve muy necesario el dolor exterior, que en realidad es un placer interior, es decir, un modo de claridad. Apostar a la levedad por el carácter real que tiene cada ser en nuestras proyecciones internas. Sí que es verdad que la soledad permite encontrarnos con nosotros mismos, nos deja saber quién somos en realidad, pero es cierto que hay que aferrarse y agarrar con mucha fuerza su presencia. Hay muchas 313 Federico García Lorca.

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personas que se sienten solos o sienten ese vacío aunque estén acompañados, ya que la compañía que tiene cada uno puede definir su vida social. Y hay otros que no saben ni lo que viven, pensando que viven un vacío lleno o una soledad tensa y acompañada, pero en verdad, ¿qué es lo que puede vivir un ser más tensamente y amargamente que la soledad sin darse cuenta? La desolación, es decir, el contacto de uno consigo mismo, ser asolado, amarga más que la soledad314. Es el resultado de sentir una pérdida irremediable, como en el caso de muchas de las mujeres desrealizadas por el poder que sienten la pérdida de sí mismas, la desolación sobreviene cada vez que las mujeres nos quedamos solas, cuando estamos esperando la llegada de lo que somos, lo que tiene que ver con la esperanza, la esperanza de encontrarnos ajenas al sentimiento de desolación, por lo que hay que tener voluntad y autonomía, cambiando la manera de pensar y el contenido de los pensamientos315. Estar consciente, tener conciencia de las cosas, ser consciente de lo que pasa alrededor, ser consciente de lo que hay en las personas con quienes nos asociamos; sin embrago, ¿qué pasa con la conciencia del yo? Todo ser humano tiene una imagen de sí mismo, que tiende a mantenerse estable a lo largo del tiempo a pesar de los cambios que se puede sufrir. El yo hace posible diferenciarse de los demás, permite tomar decisiones, tener ideas propias y construir una vida propia y única. Pero a veces el propio yo alcanza un nivel de adoración, una adoración en la que caen poco a poco muchos seres, adoración inconsciente de un narcisismo

314 Milan Kundera, La insoportable levedad del ser. 315 Platón: El mundo que percibimos es ilusorio, y lo real son las ideas.

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patológico316. Por eso hay que saber dominar y asumir el control, es decir, ser conscientes, tener ese poder y esa formación acerca de qué pensar y cómo pensar, estar lo bastante atento, prestando atención a lo real, dejando muy lejos y liberarnos de las heridas, penas, amarguras, ultrajes y nuestros abismos. Cada persona tiene su personalidad, pero la forma en la que creemos que alguien reaccionará ante nuestras acciones a veces solo existe en la mente, que no forma parte de la realidad externa, es algo que imaginamos que va a suceder, pero no significa que realmente suceda. Somos libres, pero no deja de ser una palabra importante317, una quimera, dejemos que las personas actúen con libertad y que la vida fluya, tomando el control de nuestras acciones, dejando atrás todas las expectativas sobre lo que hacen otros o van a hacer. Al esperar algo y no recibir nada, solo experimentas emociones negativas, que no tienen ningún sentido, pero el problema es que a veces el mismo ser crea en la mente esas imágenes y emociones negativas, lo que impide nuestro avance en la vida real, lo que lleva a saber que no todo lo que queremos o deseamos o creemos debe ser como lo imaginamos, que no todas la cosas salen como se espera. Cada ser recibirá un futuro no previsto, por lo que se puede llegar a la decepción y todo tipo de emociones negativos, lo que hace referencia a todos los seres que están esperando que todo llegue fácilmente, sin hacer ningún esfuerzo, hasta que les llegue la vejez, y todavía estarán esperando, quizá a la nada, esperando un pasado que no va hacia ellos318. Nada, pues a pesar de la 316 David

Foster Wallace: cuanto más quieres a algo, te acabará decepcionando. 317 Samuel Beckett, Textos para nada. 318 Martín Heidegger: ¿Por qué el ser y no la nada?

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nada no es nada el ser, ¿por qué existe la nada? ¿Por qué está ante nosotros? Sin requerir ningún tipo de trabajo absoluto de la razón. El carácter absurdo de la existencia humana, estar en un mundo caótico, perdidos en medio del vacío en el que cabe solo el instante: la desesperación, la angustia, la soledad, la compasión, y una terrible carga de lucidez. Tener la voluntad de vivir a pesar de que todo va en contra, intentando buscar un sentido a la vida, pero al final aparece un no saber al no encontrar sentido alguno para la existencia del ser. Con todo, se puede formar un concepto que es lo absurdo 319 , lo absurdo de la vida o de la existencia, sin saber por qué existir. Un ser frente al espejo, sin saber si la vida es un sueño, una mentira o una realidad, esperando no al otro, sino al reflejo de sí mismo, un reflejo que le haga sentir y vivir completamente la existencia en un mundo en el que no se siente nada, esperando con tanta esperanza y confianza su reflejo que nunca llega; por otro lado, llega, solo el reflejo de la inexistencia con los ojos de la locura. Pero con el paso del tiempo que trae consigo la sanación de todas las heridas y la búsqueda de nuevas esperanzas, eliminando cualquier pensamiento negativo, el ser humano deja de delirar. El hecho de vivir sin hacerlo consciente, sin darnos cuenta, es el modo de vivir, así es y así será la vida, así como se vive y se vivirá, así como se pasa y se pasará, tan fácilmente, como si nada.

319 Albert Camus. Sentimiento de lo absurdo.

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2.

La emergencia del Ello. Daniel Gutiérrez

La memoria. La nostalgia. Lo extraño. La emergencia del Ello. Todo unido, compacto y firme como muro de ideas, aunque inexplicablemente moldeable, elástico y flexible al mismo tiempo. Delicado y frágil. Todo ronda entorno a un sí mismo y flota alrededor de la personalidad. Todo ser humano tiene su propia personalidad320, que va tomando forma desde que empieza a desarrollar su conciencia. La personalidad define a una persona, la diferencia del resto, la hace única, la hace diferente321. Nuestra personalidad es como un iceberg en el que sólo mostramos una insignificante porción, mientras que el resto permanece oculto, o escondido. Y lo mismo pasa con el otro, solo nos fijamos en la parte que quiere mostrar, ya que es la única fuente de información que proporciona. Es la parte que veremos en sueños322. A la hora de soñar con esa persona, lo haremos con esa pequeña porción que muestra de sí misma, y no obviamente con lo que desconocemos. No soñamos con nadie, sino con lo que proyectamos de ese alguien. En este iceberg, nuestra estructura del aparato psíquico tiende a emerger. Sin embargo, ni el Yo ni el Superyó ni el Ello se muestran como estructuras conscientes, es decir, que no salen a la superficie del todo, sino que permanecen hundidos en lo más profundo. Pero mientras que el Superyó representa los 320 La personalidad es una estructura de carácter psicológico que hace

referencia al conjunto de rasgos distintivos de un individuo. Kristeva. Filósofa, teórica de la literatura y el feminismo, psicoanalista y escritora francesa: “Nadie es diferente a lo que hace.” 322 Walter Benjamin, del documental Constelaciones: “Los pasajes son casas o corredores que no tienen ningún lado exterior, como los sueños.” 321 Julia

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pensamientos morales y éticos recibidos de la cultura y contrarresta al Ello, y el Yo tiene como fin cumplir de manera realista las demandas del Ello con el mundo exterior, ¿qué fin tiene el Ello y que papel desempeña? ¿Cómo podemos hacer emerger el Ello al exterior? Para permitir la emergencia del Ello, la memoria y la nostalgia deben unirse dialécticamente para conquistar lo extraño. Lo extraño para otros, lo que para nosotros resulta familiar323. Lo extraño no sólo se da siempre en el interior de lo propio, sino que se constituye desde lo familiar a lo propio. En lo extraño ya no encontramos lo familiar, por eso lo asimilamos a lo desconocido, siendo la única forma de hacerlo propio el conocimiento. Sin embargo, el problema de la constitución del otro supone una distinción entre lo propio y lo extraño. La memoria es un cúmulo de fragmentos esparcidos, que conoce nuestros puntos fuertes y débiles, que sirve como base para seguir adelante, actuando como un arma de doble filo. La memoria como forma de olvido, y el olvido como forma de memoria. Pero ¿dónde reside la memoria? ¿Reside en el olvido? Más bien diríamos que donde realmente reside es en las bibliotecas324. Y sabiendo que podemos perder la propiedad de la memoria y que sin memoria moriríamos, en algún momento, los valientes tendrán que destruir parte de su memoria, la que ha sido pervertida la hija bastarda del colonialismo ideológico. Mientras tanto, la nostalgia no consiste en añorar lo vivido con un sentimiento de lejanía o ausencia. La verdadera nostalgia hace referencia a echar de menos lo no vivido, las experiencias que deseamos vivir, pero que 323 Lo siniestro en Freud. 324 Aristóteles.

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desgraciadamente solo podemos imaginar, sintiéndolo como algo imposible, solo alcanzado en sueños. Pero en el caso de no tener memoria, ¿podríamos decir que por no tener memoria no tenemos nostalgia? No, ya que la nostalgia echa de menos lo no vivido. Ahora bien, la capacidad de la memoria para recordar junto con la capacidad de la nostalgia para echar de menos lo no vivido pueden conquistar lo extraño haciéndolo propio, ya que lo extraño es lo que vivimos pocas veces pero que aún así forma parte de nuestra memoria, en el inconsciente, en el Ello concretamente. De esta forma, desde lo más recóndito de lo extraño, podemos alcanzar el Ello y hacerlo emerger hacia el exterior. Emerger la parte primitiva, sin orden e innata, de la personalidad, cuya tarea es reducir la tensión generada por pulsiones relacionadas con el hambre, la agresión, lo sexual y los impulsos irracionales. Y es así como la nostalgia junto con la memoria, los mejores aliados que pueden existir desde un punto de vista dialéctico para conquistar lo extraño, pueden permitir la emergencia del Ello. Empujar al exterior el motor del pensamiento y comportamiento humano, hacerlo salir y sentir por primera vez la brisa y el calor del sol. Antes de continuar, aclarar qué es normalizar, y no qué significa según los diccionarios, sino cuál es el verdadero sentido de la palabra. Pues bien, todo aquello que puede normalizarse o merezca serlo es objeto de la normalización, desde conceptos abstractos hasta materiales. La normalización consiste en apropiarse de lo extraño, lo desconocido, para hacerlo familiar y común, es decir, normal. ¿Pero es bueno normalizar la enfermedad? ¿Qué entendemos por enfermedad? ¿Quién nos enferma?

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Es difícil saberlo. Se enferma por nostalgia 325 , por la imposibilidad de alcanzar el deseo. Es irónico pensar que elegir es lo más difícil para el ser humano y que si no dudas no hay elección. Entonces, ¿no hay que dudar nunca? ¿Es el ser humano capaz de no dudar? Yo creo que no es posible326. Sin embargo hay una clara contradicción, ya que te crees lo que te dicen por quién te lo dice, sin prácticamente discusión, sin explicación, sin dudar. ¿Normalizar la enfermedad es proscribir la locura? No podemos hablar de locura sin que se nos venga a la mente Michael Foucault y su teoría del Rey Lear 327. El Rey Lear no tiene equivalente en una cultura como la nuestra, porque se preocupa de mantener la locura a distancia. Pero lo cierto es que damos a un loco por muerto, a pesar de que la locura es inconsciente. “Hay un inconsciente en la ciencia y hay un inconsciente en el saber.” – dice Foucault. Y algo similar ocurre con la mujer, que en este caso llega a ser comparable con un loco, con alguien insignificante y de poco valor en la sociedad. Con relación a esto, Simone de Beauvoir, la precursora del feminismo y una de las responsables de que hoy en día la mujer siga peleando por sus derechos, por vivir, por amar, postuló la fuerza de la mujer como solución328.

325 Sigmund Freud. 326 Ludwig Wittgenstein, en la película realizada en 1993: “Los niños

aprenden creyendo a sus padres. La duda viene tras la creencia.” 327 Rey Lear. La más rara expresión y más aislada de una experiencia

plena y completamente trágica de la locura. “El día que una mujer pueda no amar con su debilidad sino con su fuerza, no escapar de sí misma sino encontrarse, no humillarse sino afirmarse, ese día el amor será para ella, como para el hombre, fuente de vida y no un peligro mortal.”

328 Simone de Beauvoir:

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El caso es que cuando rozamos la locura329, nos sentimos seres despreciables y pretendemos normalizar la enfermedad, como entrando en un mercado de pastillas que nos hacen borrar la conciencia, a pesar de que el ser humano no es nada sin ella. Y la falta de conciencia provoca violencia. En casos así debemos recurrir a la hermosa frase: “Soy porque existo, porque tengo conciencia.”330 No soportamos vernos excluidos, inútiles, desde un punto de vista social. No soportamos no ser queridos. Tenemos el derecho de amar y ser amados. Somos dignos de amor por existir. Dignos de vivir por existir y dignos de existir por vivir. Sólo por el hecho de haber nacido. 3.

Condenados a ser libres. Camila Fernández Bellido

Tu libertad por seguridad. Pese a la existencia de divergencias racionales, los seres humanos no somos absolutamente distintos al resto de las especies con el propósito de buscar la esencia de la luz en los límites del conocimiento y la imaginación, que se inició en la evolución biológica, y culmina en los avances de la ciencia y la tecnología, una mirada que provoca presagiar el futuro de la humanidad, un futuro indefinido que decidiremos que sea otro del que es por el pasado. Un mundo categorizado por la búsqueda del sentido como motor de una vida auténtica, caracterizada por la importancia de la libertad individual, elevando los conceptos del pensamiento feminista como aspecto central 329 Lo que para unos es locura, no tiene por qué serlo para otros. No

existe una verdad absoluta.

330 Frase en la que se inspiran varios filósofos, como Max

Stirner o

Descartes, entre otros.

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de la transformación. Con la posibilidad de proyectar una vida que entienda que también pertenecemos a un segundo sexo libre y autodeterminado, a la justicia republicana, a la autonomía y propiedad del cuerpo político; libertades establecidas en una jerarquía de posibilidades de realización de la libertad común: son las situaciones de esclavitud, como el caso de las mujeres en América latina331, ejemplo vivo de mínimos grados de libertad. Por ello debemos luchar mediante el diálogo y considerar necesario criticar aquello en lo que no coincidimos, pero siempre desde el reconocimiento de su estimable valor, de su coraje, de su inteligencia, de su honestidad y reconociendo la fuerza de las determinaciones sociales sobre la libertad humana. Sin olvidar la procedencia de la esencia del hombre en la tierra. Mediante un pensamiento matemático, que rompe la relación entre la fe y la razón con el fin de sacar al hombre de la ignorancia332, para ello hay que atreverse a pensar contra lo evidente. Tu libertad es evidente si generas libertad social, es decir, cuando dejas parte de ti para el bien común creando así un contrato social como ejercito democrático y creer que la historia es la lucha para la conquista de los derechos humanos, dejando de actuar bajo la fascinación de lo imposible para poder tomar nuestras propias decisiones y vivir en la adecuación del conocimiento a las necesidades humanas. En una actualidad llena de monstruos incapaces de pensar por sí solos, que prohíbe a los sujetos estructurar en su lógica -como principio de identidad y contradicción-, su experiencia, de modo que controlen el constante miedo y no destruyan su dignidad humana mediante la violencia y 331 Rita Segato.

Ilustración.

332

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la ignorancia, su educación ha de centrarse en el Imperativo categórico333. Dejar de ser seres miserables y empezar a luchar contra las injusticias marcadas como normales por el poder en esta nuestra sociedad, dejar de lado los prejuicios y empezar a aceptar y respetar a cada persona. Porque si no, será un mundo roto el legado que dejaremos a otras generaciones, por tanto, por un momento, imagina que existes en este mundo y no eres un solipsista entre los fenómenos que construyen nuestro presente334. Pues lo que puedo conocer es aquello que pienso dentro de mi libertad determinada por la construcción del lenguaje y la locura 335. En mi locura he hallado libertad y seguridad; la libertad de la soledad y la seguridad de no ser comprendido, pues quienes nos comprenden esclavizan una parte de nuestro ser, de nuestros instintos como seres que desean y actúan en la realidad, pensada por un sujeto revolucionario como la mujer en el siglo XX, a través de transmitir de manera mucho más intensas sus sentimientos y emociones con el fin de analizar las circunstancias que nos rodean336. Pues van a ser ellas las que formen parte de la realidad de nuestros sueños tan normalizados, para aquellos que viven en la ignorancia, para destruir todas aquellas etiquetas que el mundo nos pone por el simple hecho de aparentar una diferencia impostada, contra el 333 Kant. No hagas a otros lo que no quieres que te hagan a ti. 334 Descartes.

Si la realidad se apoya en lo que es real, toda realidad es cuanto puedo pensar, si no puedo pensarlo, no lo es. 335 Simone de Beauvoir. Que nada nos defina. Que nada nos sujete. Que sea la libertad nuestra propia sustancia. 336 Simone de Beauvoir. No nacemos como mujer, sino que nos convertimos en una.

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individualismo que nos hace creer que no formamos parte del mundo de la vida. Que nuestra personalidad signifique una superación de lo evidente, unir la locura con la memoria para destruir a los aliados y escoltas de la muerte, que son por estar enfermos de nostalgia337. Los seres humanos evolucionamos, no somos seres estáticos sin posibilidades, por ello debemos llevar una vida de forma que los demás puedan respetarla y admirarla, mediante la reflexión y la libertad de poder vivir en la diferencia de lo que consideramos bueno o nocivo para cada individuo. Dejar atrás el construir la rutina del inane 338, empezar a construir nuestra propia biografía a través de los principios hedonistas, haciéndonos visibles ante aquellos que someten e informan nuestras existencias como parte del ideal, de la ideología modernos que nos roba pensar lo imposible. Oír la voz de nuestra historia, la solidaridad que te pide a gritos este mundo, y sin máscara alguna ayudes a aquellos que necesitan de tu responsabilidad ética339. Porque condenados a existir, la vida cobra significado por la libertad compartida340. 4.

La Marca. Cristina Corón

Solo veo líneas borrosas pero ya no hay vuelta atrás341, hemos habitado en un mundo donde la fuerza del 337 Michel Foucault. El saber es el único espacio de libertad del ser. 338 Emil Cioran. La inanidad del ser: el vacío de lo real y las palabras. 339 Khalil Gibran: “Y en mi locura he hallado libertad y seguridad; la

libertad de la soledad y la seguridad de no ser comprendido, pues quienes nos comprenden esclavizan una parte de nuestro ser.” 340 Jean Paul Sartre, El existencialismo es un humanismo. 341 Metarrelato del viaje: es imposible volver a un mismo sitio.

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poder ejerce presión sobre una masa alienada, alejada de la realidad, mientras que controlan cada uno de nuestros pasos342. Ya nadie tiene esperanza en el cambio, sabemos que el destino está escrito por todas aquellas ideas que nos han impuesto y así han formado nuestra memoria, a su vez compuesta a partir de pequeños fragmentos343 de la historia pasada, que hemos escuchado o vivido y también por la nostalgia, ese anhelo de todos aquellos deseos que no pudimos cumplir, y que nos enferma porque no descubrimos a tiempo que son insatisfactibles y han acabado creando un hueco en nuestro interior. La claridad sin cosas nunca fue tan lejana hasta ese instante, habíamos perdido nuestro lugar, también la síntesis entre la luz del hedonismo344, que nos llevaría a recuperar el cuerpo, y la oscuridad, donde ya no había sombras 345 que produjesen el suficiente asombro para generar fascinación. Ya no valía vivir por inercia, había que dar el primer paso hacia el vacío y romper las cadenas del Homo Insipiens. Una voz se levanta pero no es un grito de guerra, sino de dolor, porque estamos despertando y alejándonos de la indiferencia, ya no sirve la negación de la realidad346 como forma de interiorización del control que ejercen en nosotros. El proceso de deshumanización que se llevaba a cabo en las ciudades ha cesado y el flâneur sale a caminar, de nuevo perderse en la ciudad recobra sentido, para así, poder iniciar la recuperación de la palabra libre. 342 Panóptico. 343 Mary Shelley. El Prometeo Moderno. 344 Michel Onfray, Teoría del cuerpo enamorado. 345 José

Ángel Valente: “No separes la sombra de la luz que ella ha engendrado.” 346 Chantal Maillard. No negación de la realidad.

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El peso de la historia ya no recae en nuestros hombros, hemos abierto los ojos observando los infinitos modos de ser, ante una idea de eterno retorno347 que nos condenaba a la repetición imposibilitándonos vivir. La contradicción dialéctica en el discurso de la historia, nos demuestra que la retórica no es siempre la verdad si el aliento que nos narra se basa únicamente en la ética de éxito. Pero ahora que la esperanza ha desaparecido y no hay nada que perder, ¿qué haremos con lo que han hecho de nosotros?, la caída en el tiempo 348 del ser nos hará estremecer hasta llegar a la sublimación, para calmar la insatisfacción al descubrir que nunca sabremos quienes somos 349 , ya que somos para no ser, pero nos constituiremos a partir del desorden de fragmentos, de un archipiélago 350 cuya base será un lenguaje común donde todos podremos habitar. Es ese materialismo histórico el que nos lleva a transformar el mundo, a pensarlo sin matices, reconociendo al presente como único tiempo absoluto que existe, ya que nada es diacrónico. Y así, aprendiendo lo que verdaderamente somos por naturaleza, seremos capaces de dejar de tener miedo, para poder empezar a empujar el muro de las sombras y convertirnos en exploradores del abismo, aquellos que habitamos en el territorio de las sombras y donde recuperaremos el aura, para por fin, volver a ser. Sentarte en el borde de La Marca es un acto de valentía, para ello hay que estar dispuesto a aceptar que en ese instante todas las cosas que pensábamos conocer, van a 347 Milan Kundera: La insoportable levedad del ser. 348 Deponencia ontonoética.

349 Tercera herida narcisista. 350 Hölderling, Archipiélago. Walter Benjamin, Constelaciones.

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abrir puertas a lo desconocido351. La reconstrucción del ser no va a ser más que el abandono de este mismo, pero no hay que habitar en el miedo o el nihilismo volverá, produciendo que nuestro acto de valor se quede en la historia como un simple cliché. Debemos nutrirnos del ansia de conocimiento para poder combatir contra las tiranías que acabaron en olvido tras el paso del idealismo por nuestras vidas. Así será la única forma por la que seremos capaces de permitir el vértigo y hacer resurgir el odio de querer vivir352. Todo aquel que se atreva a cruzar el territorio de La Marca, permanecerá en la memoria como un héroe, por luchar contra lo que fue establecido como la evidencia y la verdad. No todos podemos portar el corazón de Aquiles, ya que la rebelión contra la existencia requiere de un valor capaz de sobrevivir y acabar con la vida domesticada. La evolución del hombre animal353, regido por sus deseos y naturaleza, hacia la transformación en un ser con inteligencia emocional, requiere de un periplo por los suburbios, allí donde se produce la vida pública y renace el ágora, donde lo que no tiene lugar habita 354 mientras recupera su experiencia como sujeto contemporáneo. La heroicidad también necesita de la ironía355 para ser capaces de rebatir lo impuesto por la fuerza del poder, nuestra capacidad argumentativa será la forma más importante de lucha. Aunque no valdrá de nada si la voz que se alza no es de una mujer. 351 Sócrates. Cuanto más sé, menos sé. 352 Santiago López Petit. 353 Rousseau.

354 Foucault. Utopía. 355 Modestia Socrática

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Nuestra imagen ha sido explotada infinitas veces a lo largo del tiempo, buscando siempre que cumpliese un ideal sustentado en una ideología idealista, hasta que han conseguido vaciarnos de contenido y que siguiésemos el canon establecido por el poder. Por ello tenemos que atravesar La Marca, para poder recuperar la historia real que ha sido ocultada, cuando buscaban únicamente que cayese en el olvido y que no se pudiera conseguir justicia. Pero es esa memoria la que hace a la vida356 como el único espacio de la mujer donde puede ser libre de la dictadura patriarcal. Hay que ser conscientes de la lucha que tenemos que seguir para conquistar nuestros derechos y no dejarnos cegar por la luz. Ya que hay una gran diferencia entre existir, siendo obligados a estar bajo un estado de explotación, y vivir, porque hemos nacido para ser libres y no para sufrir el peso de la experiencia que recae sobre nosotros. El placer debe de ser protagonista en nuestra realidad357 y tiene que sustentarse en la estructura narrativa del amor. La revolución nos hará formar parte de las decisiones que vayan a recaer sobre nosotros, porque la historia también es nuestra. Tenemos que ser Diótima y el poder será el diálogo en el Banquete de Platón, donde se discutirá sobre el amor, el arte 358 , la equidad y del feminismo. Hay que tener valor y coraje para acabar con el miedo de que nuestra historia repita la de Hypatia de Alejandría, desmembrada por el simple hecho de ser 356 Eros, amor y palabra

357La construcción del yo a partir del ello. 358 Chantal Maillard. Educación en valores a partir del arte.

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mujer y pensar. Tendremos que pecar359 si esa es la única vía hacia la abstracción y conseguir derrumbar todos los muros que han alzado frente al yo360, porque necesitamos catectizar 361 la revolución, la libertad, necesitamos adentrarnos en La Marca. 5.

La pasión cívica. Sentir y reírte de ello. Paula Plaza

Para los ingenuos que hoy día siguen habitando los paraísos perdidos de Milton con una mísera mentalidad burguesa, la mujer es una matriz, una hembra. Para los hombres 362 que continúan anidando en la ignorancia, el término hembra es algo despectivo, mientras que para este tipo de personas la palabra macho es algo digno, algo de lo que enorgullecerse. Según las palabras de Simone de Beauvoir, el concepto de mujer363 ha sido empleado por la sociedad, tradicionalmente machista, como una propiedad, en lugar de considerarla como un ser situado al mismo nivel que el del sexo masculino. El hombre es el que establece que solo a su género se le puede definir como humano, mientras que la mujer debe ser femenina, una especie de sinónimo de la sumisión. Cuando esta pretende igualar sus derechos y comportarse como un ser humano, se la crítica diciendo que está imitando al varón, alejándose de su verdadera condición y pretendida esencia: ser sumisa e inferior a sus compañeros. 359 Los poetas malditos. 360Julia Kristeva. 361 Enfocar nuestras energías emocionales, nuestra Libido en alguien o

algo. Investir de energía el objeto adecuado de nuestro deseo. de Beauvoir: ‘‘La naturaleza del hombre es malvada. Su bondad es cultura adquirida.’’ 363 Simone de Beauvoir: ‘‘No se nace mujer: llega una a serlo.’’ 362 Simone

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La sociedad se ha encargado de menospreciar y someter a la mujer a rígidos papeles durante toda su existencia. Han vivido siempre como criaturas disfrazadas para guardar una “buena apariencia”, ya que cuando se han rebelado han sido rechazadas. Pero la mujer no es frágil, a pesar de esto más el miedo a enfrentarse al poder, prosigue con su lucha. La mujer debe gustar de pensarse a sí misma, sin temor a ser juzgada, y sobre todo debe tener ansia de libertad. Ha de enfrentarse a los problemas de nuestro entorno social, que a la vez de individuales son sociales. Por otro lado, ha de actuar con cierta responsabilidad y autonomía, como ha de ser congruente con sus decisiones y elecciones, y ha de intentar cambiar la manera de pensar y actuar de la humanidad. Debe abrir los ojos al mundo y hacer ver que todos debemos buscar el mismo objetivo, ser todos iguales en dignidad, aunque nuestra forma de pensar, de actuar o de sentir sea diferente. Claro está que no será sencillo, pues los hombres temen la igualdad de género, por lo que no será nada fácil convencerles de que lo que se busca es el bien común, y no por eso tienen que perder protagonismo. Esto viene dado por el peso de la tradición patriarcal, que ha descrito una situación de distribución desigual del poder entre hombres y mujeres, en la que los varones tienen preeminencia en varios aspectos, tales como la regulación de los delitos contra la libertad sexual, la violencia de género, o el sexismo en el lenguaje. La mujer ha vivido bajo la dictadura de los hombres y ha sufrido en silencio hasta que apareció el sujeto mujer revolucionaria, que hizo despertar el instinto guerrero y se empezó a combatir contra esa esclavitud. Pero aún no hemos conseguido la igualdad absoluta, es más, todavía nos queda mucho

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camino por recorrer hasta llegar al punto en que tengamos los mismos beneficios, las mismas sentencias y seamos tratadas con el mismo respeto. El problema histórico de la lucha por la igualdad de sexos viene motivado por el hecho de que la mujer haya sido poco valorada y no porque hayan sido, en absoluto, inferiores a sus compañeros varones, sino por otras diversas circunstancias, tanto sociales, tradicionales y educativas que han hecho creer a la mujer que su posición natural en la sociedad era la de la sumisión y falta de liderazgo. El gran avance en la revolución cívica de estos últimos siglos ha llegado mediante el continuo trabajo de la mujer, lo que ha posibilitado la superación de las distancias que las separaban del hombre. A lo largo de la historia, su lucha incesante ha logrado que tengan ciertas libertades cívicas, como fue que la ciudadana se convirtiera en electora y su deber como esposa ya no sería obedecer al marido. Además, el acceso al mercado laboral por parte de la mujer ha logrado que ésta pueda ser independiente y con ello liberarse de las ataduras y complejos que la minusvaloraban respecto a sus compañeros. Después, comienzan a hacerse visibles pensadoras como Rosa Luxemburgo, Marie Curie o Jocelyn Bell, demostrando que no es la inferioridad de las mujeres lo que ha determinado su insignificancia social e histórica, sino todas las otras ataduras morales y tradicionales que ha arrastrado durante su existencia. El verse reflejadas en otras mujeres que han conseguido el éxito en el mundo laboral, científico, político o económico, ha hecho impulsar su necesidad de luchar por algo. Ahora tenemos que seguir sus pasos y enfrentarnos a cualquier obstáculo que se nos interponga en el camino,

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como es el caso de la alienación. No podemos dejar que nos mercantilicen bombardeándonos con nuestra propia necesidad y tampoco debemos permitir que nos persuadan de que hacen lo mejor para nosotras. Realmente, nos estarían haciendo pensar lo que ellos querrían que pensáramos. Deberemos tener valor y oponernos al poder, para ello haremos uso de nuestro pensamiento y nuestro deseo de liberación. Deberemos empezar a tomar decisiones y acciones basadas en ciertos valores. Pero, ¿cómo podremos adquirir estas capacidades? Habrá que dejar a un lado el miedo y así obtendremos un beneficio personal y para nuestro entorno. En ellos se incluyen aquellos cuyas bases son la libertad, la autonomía, la igualdad, la solidaridad, la justicia y la responsabilidad. Hemos de asumirnos como sujetos dignos, capaces de desarrollarnos plenamente inculcando cada uno de estos valores, y respetando los derechos humanos y valores democráticos. Estos nos servirán como marco de referencia para tomar decisiones autónomas cuestionando las acciones que violen la dignidad de los demás. De todos modos, aunque así fuera, ¿hasta qué punto será posible llevar a cabo todo esto? Habrá que tener el suficiente coraje para enfrentarnos a la situación, acompañado de valor y arrojo. Nos convertiremos en heroínas, ya que a sabiendas de que quizá nuestro objetivo sea algo imposible, intentaremos por todos los medios lograrlo. Para esta gran travesía también nos será necesaria la capacidad del cinismo para equilibrar la vida, ya que sufriremos y lo mejor que podremos hacer será reírnos de ese insoportable dolor. Nuestra misión será transformar la sociedad y mentalizar al poder de que la honradez es lo único que

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puede salvar nuestras almas. Habrá que educar a las próximas generaciones con esta idea, ya que así conseguiremos que se termine la explotación, la alienación y tendremos relaciones de igualdad y educación. También habrá que transmitirles que solo podrán ser si luchan por la justicia, si luchan como un Homo furor. Les será necesario conocer de dónde provienen, quiénes son nuestros ancestros y cómo nos hemos ido desarrollando en el marco de la ética hasta llegar donde estamos. Aunque se igualaran las distancias entre sexos, la revolución continuaría para conseguir una igualdad total entre todos, sin que unos grupos humanos exploten a otros. La verdadera fuerza que cambia el mundo es la fuerza interior de cada persona: si quieres algo, hazlo ahora y no esperes que otros lo hagan en el futuro. La auténtica revolución comienza en uno mismo, con su inconformismo y rechazando las tradicionales normas impuestas históricamente por los grupos que en cada momento se han visto privilegiados con ese statu quo. Una vez que la mujer se ha visto respaldada por sus logros por el avance en la equiparación de derechos respecto al hombre, ha conseguido su independencia económica y con ella su libertad, puede ser consciente de todo lo que ha avanzado. Somos seres sociales y como tales necesitamos los unos de los otros y contribuir permite realizarnos como personas. No basta pelear para buscar los derechos e igualdades propios, sino que la plenitud humana ha de llevar a que los logros personales se transformen en la lucha por las oportunidades para el resto de colectivos menos favorecidos que nos rodean. En esta vida las cosas no se alcanzan sin luchar, pero tampoco nos haremos ilusiones en conseguir la

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igualdad plena. ¿Cuántas veces se ha dicho que algo se iba a cumplir y no pasó? Muchísimas, demasiadas veces. Aún así no debemos perder la esperanza 364 , dado que es lo único que nos mantiene con vida. 6.

Lucha y conciencia. Nicole Solís

Desde los inicios de la historia hemos sido conscientes de que las mujeres vivimos en una lucha constante, tanto o más que los hombres. Aunque siempre ha habido una gran diferencia entre las mujeres y los hombres, a ellas siempre se las ha considerado seres humanos débiles, inferiores e infravalorados, por eso es que desde los inicios de la historia muchas mujeres han luchado por sus derechos humanos, por cambiar esas asimetrías en el trabajo, en los hogares..., básicamente por la liberación política y social de la mujer. Es por lo que Mary Shelley, al igual que grandes mujeres de la historia, luchó por esa igualdad entre hombres y mujeres, por la feminización total en nuestra sociedad. En la antigua Grecia se usaba el término isegoría para referirse al uso de la palabra de igual a igual, básicamente que todo el mundo tenga derecho a poder hablar, buscando esa igualdad entre todos, y es lo que deberíamos hacer nosotros, buscar ese justo término medio365 en el que nadie se sienta apartado. Al igual que están haciendo las mujeres al vivir el Dasein, ser en el mundo, heideggeriano. Ser escuchadas y dejar de ser el sexo inferior, por lo tanto las mujeres tienen

364 Simone de Beauvoir: “El esclavo que obedece escoge obedecer.” 365 Aristóteles.

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que ser escépticas ante la sociedad machista. Porque somos el sujeto revolucionario de nuestra sociedad. Para Simone de Beauvoir somos el segundo sexo, porque no se nace mujer, por eso el hecho de nacer siendo mujer no implica serlo, sino que debemos inculcarnos unos valores desde nuestra infancia para no vivir en una sociedad machista. El Prometeo moderno no encontraba un lugar donde poder habitar tranquilamente, siempre era juzgado por el hecho de ser diferente a los demás, y no se sentía querido, no encontraba a alguien con quien pudiera sentirse sí mismo, por eso le dijo a su creador que necesitaba una compañera. Todo eso le ocurría por el hecho de ser la construcción de fragmentos de otras personas, y eso le hacía ser diferente a los demás. Pero así somos todos Ser diferente implica parecer más débil ante los demás, por no seguir los cánones de la sociedad, porque estamos acostumbrados a seguir un tipo de modelo de persona para no destacar entre los demás o por el miedo, pero no podemos permitir que el miedo nos condicione. Ocurre lo mismo con las mujeres, ellas parecían ser más débiles que los hombres, por eso a lo largo del tiempo los hombres han sido superiores a los demás construyendo el mito fálico 366 , considerándose el sexo superior y las mujeres el inferior. Porque antiguamente, y este adverbio vale por hoy y aquí, ver una mujer destacando era algo que no se podía permitir. Por eso decimos que la mujer es prometeica, porque es la representación del Prometeo moderno en nuestra sociedad, ya que el comportamiento que tenían con el monstruo de Frankenstein por ser 366 Sigmund Freud, Toten y tabú.

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diferente, es el mismo que han tenido a lo largo de los siglos con la mujer; además, la mujer robará el fuego de la concordia. Antaño muchas mujeres eran juzgadas por intentar superar o ser igual que el hombre, cosa que cuestionaba los valores machistas y no se podía aceptar. Por seguir esas costumbres, ahora en la actualidad, la desigualdad de género sigue existiendo aunque en comparación con el tiempo pasado, afortunadamente, ha ido disminuyendo y hemos avanzado socialmente, pero eso no significa que debamos quedarnos tal y como estamos, tenemos que hacernos escuchar para vivir en una sociedad en la que nadie sea superior a los demás. Existen los micro machismos, que son frases o acciones que si se ven desde un punto de vista exterior podemos creer que no son machistas, pero tenemos el machismo tan interiorizado que nos parecen normales y no nos preocupamos de ellas; y es por eso por lo que deberíamos cambiar nuestra forma de pensar y que esos prejuicios culturales dejen de existir, para tener una forma de pensar, una lengua367, en la que seamos iguales unos con otros. Por eso tenemos que dar el paso y que la igualdad de género sea total en todas las relaciones sociales y evolucionar hacia la equidad. Al igual que las personas hemos ido evolucionando, las ciudades también han evolucionado, empezando por las polis griegas y las urbes romanas y, en las que se buscaba la construcción del espacio habitable para el ser humano, se buscaba la intimidad pública368 de las personas. Por último llegamos a nuestra metrópoli 367 Wittgenstein. El uso determina el significado. 368 El

derecho a la vida privada. Hoy el fango de las redes sociales destruyen la intimidad.

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contemporánea, la actualidad del caos, el presente del anonimato social, a nuestra distopía, en la que hemos llegado a ese futuro en el que hemos pasado de ser simbólicos a ser un Homo-insipiens369. El término distopía o antiutopía, o quizá utopía inversa, como si se complementasen, del amor, podría ser el reconocimiento de nuestra impotencia para ser con y a través del otro. La utopía para Tomás Moro es describir una sociedad ideal, y por lo tanto inexistente, y ya que estamos al límite de ser unos Homo-insipiens, sería como volver a las vidas de santos de la Edad Media. Pasamos del término intimidad de las antiguas urbes romanas, en el que la privacidad de las personas era fundamental, al término de Gran hermano370 que niega la extimidad, donde la intimidad es algo sin mucho valor socio político e infringimos continuamente los derechos de la intimidad de una persona en aras de la estupidez, ya sea porque actualmente muchas de las cosas de nuestra vida están mayoritariamente en redes sociales, o por ignorancia. Además, cada vez somos más dependientes de algunas tecnologías, cosa que no es ni buena ni mala en sí misma, pero todo tiene que tener un límite para ser un buen ejemplo para la historia. Por todo lo anterior es por lo que actualmente nuestra metrópoli no es la mejor de todas las opciones. La deshumanización y la invisibilidad son ya detonantes de patologías. Tenemos que seguir el ejemplo de grandes mujeres, como Alejandra Pizarnik, Simone de Beauvoir, María Zambrano, Hannah Arendt, Mary Shelley, Safo de Mytilene y muchísimas más que han destacado en nuestra

369 Giovanni Sartori, Homo videns. La sociedad teledirigida. 370 George Orwel, 1984.

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historia; aunque solo por el hecho de que eran mujeres no se habla tanto de ellas y no les han dado la importancia que realmente tienen, lo cual es muy injusto y es por eso por lo que tanto ellas como otras luchaban continuamente, por la igualdad y el reconocimiento de la diferencia. Por lo tanto ya que ellas han empezado el recorrido para que seamos oídas, tenemos que dejar de ser sujetos pasivos y comenzar una revolución en la que la igualdad de género sea posible, empezar el mismo viaje que un día emprendió Ulises para regresar a la patria. La patria de la mujer es el útero social de los Derechos Humanos. Nunca podremos retroceder en esta revolución, porque no volveremos a ser como el monstruo de Frankenstein. Dejaremos de ser mujeres prometeicas para ser el nuevo sujeto revolucionario y empezar a ser tratadas como realmente deberíamos serlo, básicamente hacernos respetar como ciudadanas. Empezar a tener poder sobre nosotras mismas. Ser mujer es tener el derecho a ser mujer. Tan sencillo, tan complicado de entender para postulados sociales que no aceptan la muerte de dios y la caída del ideal. 7.

La locura contra el panóptico. Marina García-Ballesteros

Poseidón observaba a Ulises como el panóptico nos observa a nosotros. A veces, cuando el sol baja de su largo día de trabajo y empieza a subir la luna, en el horizonte se puede ver una torre, tan alta que se cree que su tejado puntiagudo toca las nubes y las rasga. Una torre que ve todas las civilizaciones que han sido desde el punto central de un gran anillo. Se cree que sus puertas están cerradas, que de vez en cuando se oyen las bisagras de la puerta, aunque la puerta no se abra. Se cree que la torre está hecha

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de ladrillo, de metal y de algún material que es imposible de quebrarse. Ni un terremoto, una grieta temporal en la historia o un agujero negro puede llevársela. Nada puede arrancar las raíces que echó en la tierra. Se cree que en el suelo, a sus pies, tiene alambres con espinas venenosas, solamente con rozarlas pueden cerrarle los ojos a cualquiera, para siempre, su veneno debe ser la palabra del ideal. El anillo donde el panóptico es el centro, está dividido en celdas. Celdas viejas, desgastadas, siempre están abarrotadas de gente, de un obrero trabajando, un niño aprendiendo, un prisionero, una mujer o un loco metidos en su cabeza. En esas celdas nunca hay sombras, siempre hay una bombilla colgada del techo, agarrada por un fino hilo como la tela de la araña, es imposible apagarla, su energía parece ser ilimitada y está siempre conectada al panóptico. El vigía sale y mira, vigilante ante cada movimiento, cada aprendizaje, cada palabra o incluso cada susurro de rebeldía que salga de las bocas en las celdas. Intenta controlar todo lo que hacen y todo lo que dicen. Vivir consiste en ser visto. El panóptico intenta ejercer poder, intenta controlar a través de la vigilancia, a través de la observación. Intenta que todos tengan la mismas conductas, las misma maneras y las misma formas de pensar. Sus ojos sobre ellos, ejerciendo su poder, a sus espaldas, aplastándoles, dejando una carga mental que a veces les es imposible soportar. Para luego, solo, empujarles sin piedad, a una celda de cuatro paredes, con luz y en la que solamente una ventana que desde dentro no deja ver nada les abisma en lo cerrado y pequeño, y en la que desde afuera se puede ver cada movimiento y cada

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gesto que sale de sus cabezas. Así es el infierno del pensamiento. El vigía no cierra sus ojos, los mantiene abiertos, para alimentarse de controlar para curar la miseria de su queja y cada pesadez que sale de sus labios con sed de resentido, ellos, los que controlan, no pueden expresar nada. Están cerrados como tumbas y atados por llaves que están escondidas en la mano del constructor de la torre. En lo alto del panóptico. Sin embargo, a las afueras de ese anillo, no se ve más que sombras oscuras, la tiniebla, con manos arañando las paredes invisibles del círculo, la puerta del infierno371. A las afueras del círculo que el panóptico controla, a las afueras, hay un árbol gigante, solo es una sombra en la lejanía tras las ventanas ciegas de las celdas, es una espléndida sombra oscura que lo rodea, sellada en la tierra y sus raíces no tocan las que la torre del panóptico ha hincado bajo el cemento. Un árbol que es el símbolo del saber, muere poco a poco, con la lentitud geológica de su destino. Es el árbol de la locura. Porque la locura fascina. Porque es saber. Ese lugar más allá del anillo, es un lugar de voces, de voluntades sin poder. Es el Renacimiento, cuando la locura se liberó en el genio, en su esplendor. Pero sin la sospecha del pensador372. Dentro, es una copia de la Época clásica, una simulación del silencio de los filósofos, de la escasez de libertad y del absoluto e inmenso poder que ejerce el panóptico sobre la memoria. 371 Dante Alighieri, Divina Comedia: "Por mí se va a la ciudad doliente,

/ por mí se ingresa en el dolor eterno, / por mí se va con la perdida gente." 372 Paul Ricoeur. Maestros de la sospecha, Filosofía de la sospecha.

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En el centro del panóptico, cada tantos años se pone un trono de oro, pulido, con tela roja y con joyas decorando sus bordes. Un trono, en el que se sienta un rey para ejercer su poder, para enseñar la fuerza de la sinrazón que ejerce sobre el anillo que el panóptico controla. Es un ritual, solo para enseñar su lujo y la fuerza material y física ante el pueblo. Ese es el poder del mal que quiere ejercer, la apariencia imponiéndose a la semejanza. Ese poder es ejercido de diferentes maneras: por los sistemas de producción, sobre el tiempo de la vida, sobre las formas de la experiencia. Es un poder que asegura control y garantiza su uso total sobre toda organización política. Garantiza el poder sobre su círculo imaginario, donde la locura es algo difícil de entender. Una locura malinterpretada por la sociedad, una locura que es dañada por las instituciones, que incluso llega a saturar la racionalidad que puede contenerla. Porque nadie sabe de su locura, nadie sabe si está cuerdo hasta que se ve encerrado en el lugar de las celdas, hasta que se ve observado como algo normal, en una soledad acompañada. En una soledad en la que siente la mirada del mal, pero solamente es eso, una presencia trasparente que intenta abrazar la propia transparencia. Porque cuando el poder ve algo fuera de la razón del idealismo, algo que es ilógico, algo que ya no es una realidad sino una ficción hecha por los que combaten la virtualidad de las libertades, se satura y colapsa en sus contradicciones. Cuando la locura de algunas personas lo intenta superar, cuando en su fachada el poder, el panóptico en sí, está siendo martilleado, se deshace. Cuando el panóptico no puede controlar algo, se resquebraja y cae la torre. Y su única solución, la única

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solución que encuentra es el encarcelamiento en psiquiátricos, centros educativos y cárceles. Intenta mantener esa locura bajo el poder del panóptico, bajo la visión del ojo constante. Así nace la violencia del estado. El poder solo pide la razón de ser, quiere monstruos creados por la razón, hijos del ser. Quiere representaciones lógicas. Quiere que se carguen bestias sobre los hombros de la dignidad. La bestia es lo peor, debe ser domada, aniquilada de alguna manera, que se borre su paso por la historia. Debe ser rendida por la filosofía. Al poder le da miedo la sinrazón, le da miedo la rebeldía, le da miedo que la gente piense de una forma que no es lógica. Le da miedo que una persona no vea lo mismo que otra persona ve. La sinrazón es aquello que se opone al discurso de la técnica, a un discurso completo y cerrado sobre sí mismo. Es aquello que acompaña a la locura. La locura es opacada para el panóptico. En ese círculo imaginario, casi rozando la pared invisible. están las instituciones de la neolengua orweliana. La lírica en su corazón la mata. Encarcelan cuando ven que no pueden controlar esa locura. El panóptico teme, porque el panóptico quiere poder. Es su debilidad, nadie teme más que aquel que detenta el poder, y es la medida de su crueldad. El saber de los locos predice el reino de satán y el fin del mundo373. Porque en esa parte sombría, en ese lugar al borde del abismo, donde el anillo invisible establece un límite, hay pueblos en los que la locura es una parodia elemental de la sociedad. Ese es el límite de la locura, esa es

373 Michel Foucault, Historia de la locura.

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la barrera, el muro, la valla, la enredadera de la risa que ahuyenta el miedo. Empiezan a temblar sus cimientos, y sus paredes se están agrietando. El vigía se asoma desde lo alto de la torre, y ve las hogueras donde intenta quemar la verdad, las aguas donde intenta ahogar a los colaboradores y el precipicio donde intentan tirar los símbolos de la totalidad, donde intentan arrojar a los cuerdos y reemplazar lo vertical por lo horizontal. No es más que miedo por la independencia y el matriarcado lo que sienten los vigías. Y bajo la torre derruida, donde se pueden ver las hogueras, las aguas y el precipicio, se empieza a quebrantar la voluntad de representación por la voluntad de poder. Porque la mujer está apagando la luz del poder, está secando el río del silencio y sellando el corazón de las tinieblas. 8.

Quien sufre desmiente a Hegel. Jason Bomaba

La necesidad de recuperar nuestra mismidad es crucial.

Ya…, no somos nosotros mismos, nos han robado nuestra mismidad nuestra ipseidad 374 , debemos recuperarla rompiendo la alienación a través de la que nos controlan, aceptando el dolor con naturalidad, pero sin que este te domine y se apodere de ti, desligándonos de la enajenación y venciendo lo evidente, siendo lúcidos, figuras desdichadas de una conciencia lúcida, enfrentándonos a nuestros propios yoes, al amor hacia nosotros mismos, a nuestro narcisismo, dejando de ser para ser más375, para luchar contra lo establecido, contra el idealismo, aceptando

374 El Dasein de la mismidad, ser en el mundo. 375 Friedrich Nietzsche. Ser es dejar de ser.

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el pensar como gozo, el que nos salvará de la distopía de este presente en el que la masculinidad está por encima de esta vida cada vez más precaria. Ha llegado la hora de devastar el panóptico, desde donde observan las periferias, los suburbios, de desplegar las alas contra el viento de la historia que ha traído el nihilismo, de ser nosotros mismos dejando de vivir bajo la prescripción del miedo, de hacer frente a la alienación a través del dolor, aprehendiendo376, siendo perniciosos para el idealismo, como único placer permanente y como forma de lucha contra la necedad que sea el conocimiento. No hay lugar para la calma, somos un inmenso archipiélago de soledades, en el que el espacio escénico, la mujer, es el único lugar donde cabe la posibilidad del cambio social, riéndonos de nuestras agonías, socializando y lidiando con nuestros conflictos internos, abandonando la visión más objetiva y menos social, afrontando el infierno 377 , el poder que está instaurado. Ese espacio escénico donde hay un lugar para la liberación del deseo, insaciable, donde fructifica el Eros, el amor. Estamos condenados si no aceptamos el dolor del cuerpo simbólico, la castración de la violencia. Somos observados desde el panóptico desde donde se jactan y alardean de nuestra indolencia, observan cómo el absurdo nos vence instituyendo una falsa ilusión de bienestar e inexistencia del dolor, y que tiene como resultado sombras alienadas, caminantes entre ruinas y rodeados de fantasmas, sin la capacidad de analizar haber aceptado la agonía de la existencia y bajo el control del idealismo

376 Hacer propio lo que en principio es extraño. 377 Shakespeare. El infierno está vacío y todos los demonios están aquí.

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esencialista. Sabemos que la existencia precede a la esencia378. La lucha no ha hecho más que empezar, hemos de luchar por los que no pueden, acabar con la cosificación del sujeto revolucionario, la mujer, que ha sido castrada, castigada, reprimida e infravalorada. Desconocen que nuestro periplo, el viaje del instante, lleva siglos hoyando la tierra, que hemos abandonado la comodidad, que aceptamos el dolor con naturalidad, que nos dirigimos a una sociedad justa, cansados de convertirnos, inconscientemente, en esclavos. Nuestro sino está marcado por el idealismo y las esencias eternas desde el momento en el que nacemos, somos seres arrojados al sentido en una cadena de repetición sinfín, consumidores de la épica del discurso del poder, sombras ante la luz, indagadores de la verdad absoluta pero inexistente, buscadores de la satisfacción de nuestros vacíos, de nuestras carencias, con una memoria construida por fragmentos, ese vacío infinitamente profundo en el que arrojamos lo que amamos, esa forma de olvido. La falta de coraje para vivir contra lo evidente es la consecuencia nefasta del discurso burgués predominante ante el discurso hedonista, de que no nos lancemos al caos379 para sentir el vértigo perpetuo de sentirnos vivos, adquiriendo conocimiento a medida que vamos cayendo, empujando ese muro de las sombras a través de la elocuencia, quebrantando las cadenas del idealismo, aceptando que estamos hechos de fragmentos para poder ser, existir. 378 Sartre. Existencialismo.

379 Ápeiron de Anaximandro.

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Este es el momento de recuperar nuestros cuerpos, de asombrarnos, siendo el asombro el origen de la filosofía, la única posibilidad entre las ruinas que hemos construido, la única salvación de la distopía que la figura de la conciencia desdichada contempló, siendo cínicos, asertivos contra lo establecido, paseantes en la ciudad moderna, deponiendo ontonoéticamente el devenir, siendo en el mundo para no ser , para viajar , para amar. Volverse loco se ha convertido en algo vital para hacer frente a lo dogmático, desobedeciendo civilmente para conducirnos a la prosperidad social, rompiendo con la normalidad establecida, idealizada, en la que vivimos. Esta sociedad instruida en la injusticia, en el idealismo escolástico como discurso predominante, con contradicciones sublimadas en su discurso trascendente, ocultadas para controlarnos y quitarnos nuestra identidad por ideologías que no se basan en la dignidad intrínseca humana. Estamos surgiendo, voces apagadas por el poder emergen, para decir que no solo hay una perspectiva en la historia discontinua, que el dolor es algo natural con el que se puede lidiar, que hemos de acabar con la superioridad de un género sobre otro, levantarnos si queremos destruir el orden dictatorial en su ser, hacerlo ceniza y viento, ya no hay otro momento, no hay vuelta atrás una vez invadida la marca, no podemos consentir que la historia se repita. Nos han apagado, oprimido, silenciado, porque estamos locos, porque no pertenecemos a esa normalidad idealizada que está establecida, porque vemos la distopía, y por eso nos encierran en las periferias, suburbios donde pueden controlarnos. Pero, ya ni las periferias, los suburbios, los extramuros nos retienen, han sido el lugar de la conciencia, estamos destrozando los muros donde

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nos encerraron, rompiendo la repetición que mata nuestra creatividad, la repetición que no nos permite desarrollarnos con plenitud, que simplemente no nos permite vivir. Ya…, en este presente veloz e inaprensible en el que vivimos, nada tiene aura, nada tiene valor, todo es una monotonía blanca, un escenario en el que la identidad no es más que un disfraz, todo forma parte de la normalidad, la realidad idealizada, las experiencias sin dolor. Ahora, hemos de destruir lo que han hecho de nosotros; dar valor a cada momento, dejar de anhelar lo que no hemos vivido, de estremecernos en la casa del ser, de ser el sujeto revolucionario. Ahora hemos de hacernos mujer.

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VI

Antropología de la esperanza

MARÍA ZAMBRANO

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1.

La conciencia desdichada. Adriana Pantes

¿Qué es la conciencia, y más si es desdichada? Podríamos considerarla como nuestro lugar interior, el espacio en el que suceden los fenómenos de la vida psíquica 380 y de los que somos, en cierta medida, consecuencia real. La conciencia desdichada es la figura central de la fenomenología contemporánea381, al igual que el Angelus Novus de Walter Benjamin es la figura de la misma conciencia atravesada por el viento de la historia. Nosotros somos conscientes de lo que hacemos en la misma medida que somos unos desdichados pero, ¿cuántos lo saben? Creo que nadie lo sabe a ciencia cierta, los límites son horizontes y no fronteras, aunque puede que algunos lo sospechen, y los que se dan cuenta no duran mucho en el territorio de la dicha. Cioran, en este caso, fue consciente de su desdicha cuando se propuso abordar la idea de suicidio ante el inconveniente de haber nacido. Además, fue un filósofo que se caracterizó por ser implacable con su alma y por no tener ningún inconveniente en ser directo en el oscuro decir de los místicos. Su claridad fue su designio, y lo es desde entonces de toda conciencia desdichada. Intentó explicarnos que todos somos unos seres malditos, que vivimos en una ilusión preciada a la que solemos llamar felicidad, sin saberlo, y en el caso de saberlo, una infelicidad que no queremos asumir y que para evitarlo ponemos excusas míticas y proyectamos sobre los dioses nuestra huida, y así hacer creer a los demás y a nosotros mismos que somos parte de algo y que nuestra vida es un eslabón del sentido. Cuando en realidad, es todo lo 380 Freud arraiga lo inconsciente en el cuerpo. 381 Edmund Husserl.

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contrario. Y es que los sentimientos malévolos y violentos son los que nos hacen sentirnos más vivos y son aquellos con los que nos integramos en la sociedad enferma, porque todo ese sufrimiento que podemos llegar a sentir es lo que nos permite dejar de ser marionetas, es decir, que cuanto más odiamos la vida y todo lo que la rodea y más desprecio sentimos por ella, mayor placer produce, una increíble y atractiva sensación de querer quedarnos en ella. El ser humano es un psicópata social, saberlo nuestra desdicha, y nuestra desdicha solo se abre a la esperanza de haber nacido. Para Cioran todo ese sufrimiento es lo único que podría cambiar a un hombre; ya que para él nadie ha entendido que contra la mediocridad, la única opción es el sufrimiento; además de que no importa si sean genios, tipos primarios o cultos, comparte con ellos una idea, y es aquella en la que la mujer es un enigma, pero un enigma necesario. No hay otra razón para la lucha que el misterio, la evidencia es decepcionante. El hombre es aquel que opina de todo lo que tenga que ver con la mujer y lo hace desacertadamente, cuando es ella la que sabe más de él, de sus deseos, impulsos y necesidades. Son siglos de observación. Pero no opina, no dice nada y se queda callada. Es decir, hace todo lo contrario a lo que debería hacer y todo esto se debe a un sistema patriarcal en el que la mujer no tiene lugar, no sucede. Según Cioran el ser humano debería dejar de ser un animal social, el hombre debería dejar de ser hombre e intentar ponerse en la piel del león nietzscheano; además, el ser humano también debería dejar de engendrar inocentes que sólo heredarán las desgracias y los males de la soledad. ¿Qué es la conciencia desdichada?

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La conciencia desdichada es la conciencia de la infelicidad. Para la conciencia desdichada, los actos comunes se convierten en su enemigo, la banalidad de los hábitos se le hace pesada y quisiera dejar de existir, pero a la vez se aferra a la Tierra. También es el único estado en el que somos conscientes y que podemos llegar a alcanzar si nos lo proponemos, ya que la felicidad es irracional pero la infelicidad se vive bajo los auspicios de la realidad. Estamos rodeados de desdicha por todos los lados, pero estamos ciegos y no lo queremos ver382, ya que seguimos los únicos pasos que nos dan en esta vida y es intentar ser aunque sea momentáneamente. Lo queremos ocultar porque creemos que ser es lo mejor que podría pasarnos y no es así ya que la felicidad no dura para siempre en el ser, si ser es existir. La conciencia desdichada es aquella que posee la mujer por ser ya conciencia por sí, y es que siempre se la ha considerado el lugar de lo sagrado, y eso en algún momento dejó el poso de la sabiduría; de sostenerse tanto histórica como éticamente, acabó desapareciendo en algún momento de la barbarie, ya que ella siempre se ha mantenido digna ante la dominación del hombre. La mujer debe seguir luchando por sus derechos y defenderse a sí misma ante una sociedad no muy favorecedora, debe seguir manteniéndose fuerte y debe oírse cada vez más el esfuerzo que hace para que se apliquen los mismos derechos a mujeres y hombres. El feminismo debe seguir adelante. Hypatia de Alejandría, Juana de Arco, Flora Tristán, María Zambrano y Simone de Beauvoir. Esta última es la que asentó las bases de la segunda ola del feminismo y a la que se conoce

382 José Saramago, Ensayo sobre la ceguera.

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como su máximo representante, además de que contribuyó con sus obras al desarrollo de los derechos de la mujer. Solo me tengo a mi misma, decía Simone de Beauvoir. Así de terrible es la conciencia. 2.

La mujer se hace. Sarai Robledo

Hay un principio bueno que ha creado el orden, la luz y al hombre, y un principio malo que ha creado el caos, las tinieblas y la mujer 383. Ese orden que el poder nos obliga a mantener a todos los sujetos desde su panóptico, desde sus cárceles, desde sus manicomios, y desde el idealismo que ellos mismos han creado mediante el control de las emociones, logrando así la anulación de nuestro deseo insatisfacible e inalcanzable, es desigual y de una crudeza primitiva. Esa luz representa lo conocido, al contrario que la oscuridad. El muro de lo desconocido, el vacío y el caos, nos da un mundo lleno de posibilidades, ya que no ser es la condición de poder ser, no obstante, de esta forma llegamos a un problema de identidad, porque si no sabes quién eres, eres un loco. Pero la locura va más allá, ya que nos posee a todas y cada una de las mujeres, sobre todo aquellas que se aferran a no cumplir con la hetero designación384. Aunque debemos tener en cuenta que mujer no se nace, se llega a serlo. El género tanto masculino como femenino es una construcción cultural sobre el sexo biológico, no existe una esencia femenina ni masculina, Principio de Pitágoras, antiguo filósofo y matemático griego considerado el primer matemático puro. 384 Palabra mayormente usada por Simone de Beauvoir para referirse al rol que el patriarcado asigna a las mujeres.

383

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somos seres libres y autónomos, no es justo escamotear a un sujeto las posibilidades de proyectar su vida como quiera por el hecho de pertenecer al segundo sexo385. Por lo que la mujer es ese gran vacío, ese gran monstruo fabricado a base de pedazos de la historia que viaja por las ruinas de su memoria para así encontrar el secreto de la vida: amar y ser amado, llegando así al pensamiento griego y al actual pasando por el hedonismo. De esta forma nos adentramos en un viaje que nos lleva a convertirnos en el flâneur386, va por las ruinas de la filosofía junto al Angelus Novus, que ha vuelto el rostro hacia el pasado. Donde ante nosotros aparece una cadena de hechos, él ve una única catástrofe que amontona incansablemente ruina tras ruina y las va arrojando a los pies del tiempo. Bien le gustaría detenerse, despertar a los muertos y recomponer lo destrozado. Pero, soplando desde el Paraíso, una tempestad se enreda en sus alas, y es tan fuerte que el ángel no puede cerrarlas. Esta tempestad lo empuja incontenible hacia el futuro, al cual vuelve la espalda mientras el cúmulo de ruinas ante él va creciendo hasta el cielo. Lo que llamamos progreso es justamente la tempestad. La tempestad que nos impulsa a la alienación387, al androcentrismo 388 , a sujetar al sujeto 389 y al proceso de deshumanización desde el Homo ergaster hasta el Homo insipiens, por esto es necesario la desobediencia civil que 385 Hace referencia a la mujer y además al libro de Simon de Beauvoir,

actualmente considerado la biblia del feminismo. 386 El término flâneur procede del francés, y significa paseante. 387 La alienación es la apropiación por parte del capital del producto del

trabajo asalariado. Te roba el sentido de la existencia. 388 Androcentrismo se refiere a la utilización del hombre como medida

de todas las cosas.

389 Expresión de Foucault en la que hace referencia al poder.

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nos llevará a convertirnos en enfermos de nostalgia y nos hará llorar para olvidar. El olvido es una forma de memoria, y la memoria a su vez está construida de fragmentos, los mismos que componen al monstruo de Frankenstein ese gran metarrelato que une amor y viaje en un mismo mundo, creando así el miedo del querer vivir, el miedo a lo desconocido y su vez a la locura. Esa locura que fascina porque nos lleva al saber, que nos provoca cientos de ideas, que crea un combate contra la razón trascendental, que nos hace recuperar la república romana y con esta nuestra libertad, la libertad de poder decir lo que queramos, ya que cuando digo más de lo que sé atravieso el mundo de lo desconocido. Eso nos trae de vuelta al caos, el cual no existiría sin humanidad. Humanidad que tenemos gracias al lenguaje, ese que nos habita desde el principio de nuestros tiempos. Aristóteles comienza introduciendo la relación del lenguaje con la realidad, el concepto mental o lógico con el devenir en la physis. Los problemas del lenguaje se complejizan con la relación entre expresión lingüística y concepto formal, en cuanto expresados lingüísticamente, y la realidad. Esto provoca que los problemas del lenguaje no sean solamente gramaticales sino también lógicos, que es lo que ocurre durante la Edad Media. En la Edad Moderna comienza una filosofía del lenguaje. Los pensadores de esa época adoptan dos actitudes sobre el lenguaje. Una de confianza en el lenguaje y su poder lógico: los racionalistas; y otra de desconfianza: los empiristas.

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Para los empiristas el lenguaje es un instrumento capital para el pensamiento, pero que hay que someter a crítica debido al abuso que se hace de él. La filosofía del lenguaje alcanza su mayor desarrollo durante el siglo XX, llegando a considerar el análisis del lenguaje como el objetivo principal de la filosofía. Las orientaciones analíticas, como los neopositivistas, se interesan en las cuestiones relacionadas con la estructura del lenguaje o de los lenguajes. Wittgenstein piensa que el lenguaje es un impedimento para conseguir un lengua cuya estructura se corresponda con la realidad, pero luego abandona esta idea para investigar el lenguaje por otros caminos, hasta llegar a afirmar que lo primario en el lenguaje es el uso y no el significado y que para entenderlo hay que saber cómo funciona; y lo compara con un juego. Para Heidegger, el lenguaje es una forma de manifestación de la inautenticidad del hombre. La autenticidad no está en el lenguaje sino en el llamado de la conciencia. Por lo que habitamos el lenguaje, y si no lo conocemos llegaríamos a la muerte de los mitos, la muerte de la palabra. No obstante si no hay mitos te los debes inventar, o la ciencia quedará inerme. La mitología no ha cambiado porque es una superestructura, la mitología no ha cambiado porque la base económica y política no ha cambiado, así como el hombre está en el poder y tiene el poder económico y político, pues se inventa los mitos de la mujer según le parece, naturalmente si la situación real de las mujeres cambiase, la mitología caería. La muerte del lenguaje es el renacer de las potencias primitivas de la tierra.

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3.

La fragilidad. Irene García Marzo

La fragilidad es el flujo de la conciencia. La palabra es flujo. El flujo es inconsciente y todo texto surrealista. Mirar hacia atrás y ver solo ruinas, esas ruinas de todo lo que hemos vivido mientras estamos en el borde del abismo pensando en saltar al vacío, pero siento tanto miedo, me aterroriza la idea de dejar todo lo pasado atrás, todo lo que he vivido, ahora solo será un recuerdo en el olvido, ya que no puedo darme la vuelta y volver a todos esos momentos en mi historia, que poco a poco se irán derrumbando, porque son cada vez mas frágiles, como yo, todo lo que es desconocido para mi me provoca una sensación increíble de deseo cada vez que me imagino mas allá de mi realidad e intento salir de mi seguridad, y tirar ese muro, que me impide el paso a la realidad, pero soy demasiado cobarde, me encantaría poder volver atrás y caminar por las ruinas de mi historia porque es algo conocido para mi. Me siento idiota cada vez que pienso en que no tengo ni idea de lo que está por venir, de no saber qué hay mas allá de esa oscuridad que no me deja ver, y no tengo voluntad suficiente como para liberarme de estas cadenas que me atan al vacío, por una parte me siento bien en esta realidad, aunque todo sea una mentira, estoy en un equilibrio perfecto donde el más mínimo movimiento y la más mínima perturbación de mi realidad pueden hacer que me caiga en la oscuridad, pero por otra, en mi más profunda soledad, odio esto y necesito salir y progresar, soy un caos constante, demasiado frágil, siento que en cualquier momento puedo romperme. Es mucho mayor el miedo que siento por pensar en atreverme a seguir viviendo que el de dar un paso más y saltar a la oscuridad,

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vivía bien a la sombra del sol, de verdad y creía que lo tenía todo, pero sentía que me faltaba algo. Estoy algo cansada de las palabras y de que no paren de dar vueltas por mi cabeza, sin llegar a nada. La música es el único modo que tengo de evadir estos pensamientos y me hace pensar en lo que realmente quiero. Yo misma me voy rompiendo, intento quitar de mi cuerpo la sensación de angustia que es provocada porque hasta yo misma me infravaloro, no tengo confianza en mi, no me veo capaz de luchar por lo que quiero, ya que no sé con seguridad qué es lo que de verdad necesito, estoy estancada y cada vez hundiéndome más en mi propia agonía. No seré capaz de hacer lo que otras antes que yo tuvieron valor de conseguir y es que cómo voy a conocer lo que ni siquiera quiero conocer. Me asusta mi propia realidad. Soy complicada, soy mujer, es muy frustrante tener tantas paranoias en la cabeza, que es casi imposible no odiarme. Yo me odio porque no soy perfecta, pero al segundo recuerdo, que me da igual porque nadie lo es, es algo imposible, ya que la perfección es un concepto que no existe en la realidad, finjo ser quien no soy por los cánones establecidos por la sociedad, pero es lo peor que puedo hacer, intento ser yo misma, porque me da igual lo que piensen de mi, soy así, y si no te gusta, no sé qué estas haciendo aquí parado embobado mirándome fijamente, no quiero ser un clon más en esta realidad, puede que sea frágil, pero lo que si soy es libre y no quiero seguir este viaje así. Me niego a caminar intimidada por la sociedad, puede que me vean como una loca por intentar ser diferente, y puede que en realidad lo esté, pero no lo creo. No soy como ellos me ven, intento aparentar para que me vean como una más, pero mi realidad es otra, yo tengo recuerdos, memoria, pasado y presente y quién sabe si un futuro que todavía esta por escribir, pero no lo saben,

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porque no piensan, se lo dan todo ya hecho, solo cumplen órdenes, van mirando al suelo y sólo ven las marcas que dejaron otros como ellos un tiempo antes, ya que según avanza el tiempo nos vamos convirtiendo cada vez más en homo insipiens, y yo levanto la cabeza y miro hacia arriba y pienso en cómo puedo salir de ahí y sin saber muy bien cómo encuentro una vía de escape, y acompañada por la soledad y mis recuerdos salgo de ahí, y parece que nadie me ve, y corro, huyo de aquel lugar lleno de zombis creados a base de trozos de memoria como el monstruo de Frankenstein. Aunque todavía no sé muy bien dónde me llevarán mis piernas, voy con los ojos vendados fiándome de ellas. Sin entender muy bien cómo, he llegado a la metrópoli contemporánea y paseo por sus calles, pero me siento torpe, no sé qué me pasa, me caigo en mis recuerdos e intento levantarme sin llegar a sentir esa nostalgia que me provocan, pero soy débil, me rompo y me pongo a pensar y me echo a llorar, necesito protección soy como un niño, frágil e inocente. Sola, perdida, frágil, torpe, pensaba que podía salir de esta, pero a medida que pasa el tiempo me voy dando cuenta de que no soporto la soledad, ya que hace que busque en mis recuerdos y me ponga a imaginar qué habría sido de mi vida si no hubiera salido de aquel grupo de gente que como robots programados cumplían sus órdenes, pero no me arrepiento de haber salido de ahí, necesitaba sentir esto, me estaba ahogando en la angustia de saber qué pasaría si…, ahora ya lo sé y gracias a ese deseo que sentía por conocer, porque cuando estás tanto tiempo pensando en qué hacer con tu vida al final solo lo piensas y se te olvida lo que realmente tienes que hacer, que es vivirla. Hay momentos en los que me siento viva, siento cómo el aire roza mi piel y el sol me abraza con su luz mientras busco la sombra y la oscuridad, pero hay otros

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en los que me siento perdida en una estación, sentada en el andén por el que hace años no pasa el tren, y respiro hondo, me levanto y ando…, ando perdida, sin rumbo. No sé ni cómo, ni cuándo, ni dónde tengo que llegar, pero siento la necesidad de estar en ese sitio donde poder perderme para encontrar en mí quien realmente soy. Ardo de deseo por pensar en encontrarme, en sentirme viva. Miro por la ventana de mi cuarto cada día, porque aunque esté allí sentada, encerrada sin poder salir, siento el viento entrar por la ventana y revolverme el pelo y eso provoca que sienta que tengo esperanzas, hace que diga que parece que va a llover y eso provoca inundaciones de pensamientos en mi mente. Caos, destrucción, muerte, eso es lo que veo en los ojos de esta gente. En la mirada de esta sociedad lo único que veo es oscuridad, el único lugar donde veo algo de claridad es en la inocencia de un niño, porque no hay nada como no saber, no ser consciente de la maldad del mundo, del horrible ejemplo que dan esas mentes oscuras, esto me hace sentir como en una casa abandonada en la que todo son ruinas, que cada paso que doy podría ser el último, ya que el suelo está muy frágil y el más mínimo movimiento puede provocar que todo se venga abajo y que aunque haya dado cientos de pasos dar solo uno más brusco pueda hacer que todo se caiga y todo se me caiga encima, termine todo a mis pies, todas esas ruinas de todo lo que fue aquella casa, todas las historias que vivo. Salgo de aquella casa llena de recuerdos y a lo lejos en medio de la nada, no me encuentro y miro atrás y lo único que veo es pasado, mi pasado porque así soy yo, soy capaz de perderme en el lugar más conocido por todos, viajar a los lugares más lejanos del mundo, divagar por las calles más escondidas e inexistentes para el resto pero esenciales para mi, fijarme en el más mínimo detalle,

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caminar por ellas sola, imaginándome cientos de historias que podían haber sucedido ahí, antes de que yo paseara por ellas, todo eso es algo desconocido para mi, y paso a paso y sin darme cuenta me enamoro y ya no solo de esa ciudad, de esas calles perdidas, sino también de mi, de la vida. Y pienso en todo lo que habrán vivido esas calles , todo lo que habrán visto esas paredes de su alrededor y me imagino a mi misma, en un futuro no muy lejano volviendo a pasear por aquellas calles que no todos conocían, viendo cómo han cambiado, lo diferentes que están mis recuerdos de la realidad, el desgaste que hacen las pisadas de la sociedad en ellas, y miro hacia atrás y vuelvo a ver aquellas ruinas que veía años atrás, cuando con miedo a dar el siguiente paso, me di la vuelta, volví hacia atrás, cogí carrerilla y simplemente salté. Salté a ese vacío del cual no sabía nada, pero me dio igual, necesitaba sentirme viva aunque solo fuera por un segundo, atreverme a hacer lo que realmente quería. Y por fin me di cuenta de que en ningún momento llegué a salir de la oscuridad de mi cuarto, que todas aquellas sensaciones, todo lo que había creído vivir, era todo lo que había soñado hacer, pero por cobarde no fui capaz. 4.

El odio de querer vivir. Carmen Sánchez

La sabiduría y el conocimiento de las cosas es la mayor virtud que podemos tener sin lugar a duda. Debemos ir desarrollando el poder de ser conscientes de todo aquello que desconocemos, ya que cuanto más sabemos más conocedores somos de lo que no comprendemos. Y para ello, tenemos que ir empujando el muro de las sombras y avanzar hacia la oscuridad, dejando atrás las cosas claras y lo evidente para así dirigirnos a lo

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abstracto, como lo son las cosas de la claridad y la claridad sin cosas. De esta manera iremos adquiriendo más sabiduría hasta llegar al momento de ser capaces de estremecernos y poder ver la vida con un mayor grado de comprensión, porque la cultura es el despertar del hombre390. Nuestra gran meta, nuestro gran objetivo, es conocernos a nosotros mismos, para saber quiénes somos verdaderamente 391 , ya que si no lo sabemos, si no conocemos en qué situación estamos, ¿cómo vamos a tener claro lo que queremos? Y lo más importante, ¿cómo vamos a exigir lo que nos pertenece? Como dijo María Zambrano: la acción de preguntar supone la aparición de la conciencia. Debemos formularnos preguntas, y en especial sobre nosotros mismos, porque lo que no nos preguntemos ahora no lo haremos nunca, y necesitamos tener conocimientos para así saber lo que queremos, exigirlo y no parar hasta conseguirlo. Pero para ello hay que tener el coraje suficiente, está en la palabra, y hay que dejar el miedo a lo desconocido a un lado como lo hizo el monstruo de Frankenstein392 cuando fue abandonado por su creador y se tuvo que enfrentar solo a un mundo que le era hostil. En esta novela se ve el claro ejemplo de lo que es el secreto de la vida. El monstruo lo único que busca es amar y ser amado y se encontró con el rechazo de las personas, por lo 390 María

Zambrano, filósofa española, ensayista, poeta, feminista y escritora. 391Simone de Beauvoir: "conocerse a sí mismo no es garantía de felicidad, pero está al lado de la felicidad y puede darnos el coraje de luchar por ella." 392 El monstruo de Frankenstein es una novela de gran importancia de Marie Shelley

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que opta por la venganza. En el último momento, comienza a sentir el odio de querer vivir. Nosotros somos el monstruo de Frankenstein, buscamos lo mismo que él y además, también, tenemos la necesidad de odiar la vida para así querer empezar a vivirla. Alguna vez todos hemos sentido nostalgia, es decir, tristeza por aquello que no hemos vivido, y ese sentimiento nos hace ser conscientes de la falta de algo y nos empuja a la necesidad de vivir la vida y disfrutarla haciendo aquello que nos causa ese vacío. Esa es una de las razones por las que las mujeres nos reivindicamos. Tenemos esa sensación de vacío, de falta y de ausencia de los derechos que nos pertenecen por el simple hecho de haber nacido y de ser personas, y tenemos que llenarla no solo para calmar nuestra propia falta393, sino para que las generaciones futuras no sientan ese tipo de nostalgia y exista una igualdad entre hombres y mujeres. Actualmente, la mujer ha perdido el aura394,es decir, aquello que la hace única, aquello por lo que es, es lo que es. Y esto es debido a que ha sido producto de la sociedad, su cuerpo ha sido utilizado y mercantilizado multitud de veces, y poco a poco han hecho que la mujer pierda el valor que tenía por ser única, y lo han convertido en una valor de exhibición. Lo mismo pasa con el arte, como decía Benjamin, este tiene dos formas de verse, una por quien lo produce, que posee un valor histórico y cultural, y esto hace que la obra perdure de una manera sólida en el tiempo; y otra, por quien lo consume, cuyo valor es de 393 Jacques Lacan. Que no falte la falta.

394 Walter Benjamin lo define como una obra en la historia única, ya

que cuando una obra tiene réplicas o copias se corrompe.

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disfrute y estético395. En definitiva, el valor culto tanto de la mujer como del arte es parte del aura y este está siendo destruido por la experiencia cosmética. Y la sociedad tiene culpa en ello, porque lo permitimos y hacemos mal, aunque el mal no existe, solo existe falta de bien y conocimiento. Por ello es tan importante pensar y poseer sabiduría, para así darnos cuenta de lo que no es correcto y ser personas racionales, porque el veneno más poderoso es el de la ignorancia. Y si queremos conseguir algo, si queremos exigir nuestros derechos debemos ser personas con ética para no dejarnos dominar, y tenemos que empezar a querer vivir, sentir el odio de querer vivir; para ello, la relación entre ética y estética 396 , entre la belleza y el bien, nos ha dado una oportunidad desde Grecia. 5.

Las otras somos nosotras. Nuria Rotund

Vivir en el asombro, en la oscuridad, estremecernos ante el vacío que produce la luz, no es más que sentir el verdadero odio del querer vivir en plena libertad. Los límites del alrededor, unidos, generan los pequeños aprendizajes de vida, que no van más allá de asumir el riesgo del fracaso y afrontar ante ello toda su fuerza arrolladora; nos van construyendo por capas, formadas por vivencias y una acumulación de sentimientos que delimitan el ser, todo esto almacena la huella de la propia esencia, lo femenino, lo sido, lo vivido y todo lo que está por venir. Todo ser humano tiene una gran 395 Capaz de desarrollar una teoría sobre la belleza o educar el gusto

sobre las representaciones críticas de la cultura.

396 Wittgenstein, Tractatus: “Ética y estética son lo mismo.”

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responsabilidad que viene desde los comienzos de la historia, todo el peso de lo pensado, de lo escrito, recae en todo momento en nuestro ser. Tenemos que construir nuestro camino en la vida y para auto-construirnos como mujeres amantes de la libertad, la convivencia y la justicia, tenemos que mirar al pasado para aprender de lo positivo y deshacernos de todo aquello que han hecho de nosotros, el peso de nuestra historia, una historia en la que nos han educado desde la opresión y la alineación del poder, donde la mujer era una mísera consumidora y un objeto de cambio, perdiendo todos sus valores dignos de ser humanos. Por lo general, hemos sido guiadas hacia el control persuasivo que nos obligaba a someternos bajo las ideologías de una sociedad patriarcal donde, todavía, la mujer no era digna de ser reconocida. Walter Benjamin creó un Ángel de la historia397, que hace recapacitar a la sociedad sobre el hecho de que no somos más que un cúmulo de fragmentos anteriores a nuestra existencia, el Ángel nos representa a cada uno de nosotros, volviendo la vista atrás y contemplando las ruinas que ha dejado el progreso, construido sobre las ruinas de la historia, que ha sido arrasada por el huracán de un progreso del que no se puede escapar y que nos arrastra hacia un futuro aterrador, construido sobre las cenizas de la humanidad, todo aquello que desearíamos olvidar pero a su vez se aferra a nuestra memoria. Cuanto más conocemos y nos apoderamos de la fuerza del conocimiento, la oscuridad aumenta y a su vez más conscientes somos de todo aquello que nos es desconocido, allí es donde verdaderamente se encuentra la 397 Ángelus Novus

contemplado desde la ideología feminista: cambiar todos lo fracasos y desigualdades que la humanidad ha ido arrastrando desde las profundas ruinas.

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razón de vida, de ser, un ser íntegramente vacío, cargado de vitalidad en vía de llegar a ser. Un ser incompleto e insuficiente para sí mismo, en el que sin coraje y heroísmo no hay razón posible del ser; coraje que se encuentra en la palabra, en la lucha y en el lenguaje, un lenguaje que da a la mujer la capacidad de estructurar el mundo, aquel lugar donde el ser humano es capaz de vivir y existir en el caos. Aquel caos visto como un mundo ideal, al que podríamos volver una y otra vez, el mundo del eterno retorno398 descansa sobre cada gesto, el peso de una insoportable responsabilidad y por esto es una de las cargas más pesadas, pero la carga más pesada puede ser la imagen de la más intensa plenitud de vida. En la poesía de todas las épocas, la mujer desea cargar con el peso del cuerpo del hombre. Una mujer que busca crear un mundo al que cualquier mujer desee regresar, un mundo donde reine la libertad sobre su propio cuerpo y a su vez que la mujer sea capaz de deshacerse de sus propias sombras399 que durante tanto tiempo se le han atribuido al sujeto mujer. Una vez descubiertas esas sombras, impuestas por las represiones de una sociedad patriarcal e idealista, la mujer puede expresar con plena libertad los deseos reprimidos de llegar a ser un sujeto político y revolucionario; porque si hasta ahora la mujer ha sido considerada un sujeto inferior, ha llegado el momento en el que debe pensarse a sí misma a partir de la esperanza, ese sentimiento de necesidad que hay en el ser humano de llegar a sentirse en un estado de completitud, para lograr alcanzar su realización 400 como 398 Nietzsche. 399 Sombras como sentimiento de vergüenza y culpa, por no tener el

valor de enfrentarse a la opresión y al idealismo.

400 Mary Wollstonecraft: “No les deseo a las mujeres que tengan poder

sobre los hombres sino sobre sí mismas.”

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sujeto esencial para la sociedad y consolidarse como ser histórico, un ser a partir del no ser y dejar así una huella en la historia… La mujer es sinónimo de vida, de esperanza y de superación; mientras que el hombre está delimitado por el idealismo y por repetir lo que se le ha inculcado. Vivimos en una historia escrita solo por hombres, en tiempos donde la mujer no tenía ni metas ni sueños, más allá de lo impuesto por el hombre; arrinconaron su esperanza de liberación y con ella el sentido de su vida. La mujer siempre ha sido la espectadora pasiva de una vida que no le pertenece ni que mucho menos la define, convencida de que ya no tiene salida y vivir era sinónimo de abatimiento y desesperación, esa desesperación de no poder vivir su momento en el tiempo. Viviendo encadenada en un mundo caótico que la lleva a una desesperación oscura donde no sabe si es mejor condenarse a sí misma a vivir bajo la sombra del hombre o armarse mediante el conocimiento para iniciar una revolución que consiga que todas las mujeres sean libres e independientes sin necesidad de un sujeto masculino para seguir hacia adelante. Por muchos obstáculos que la mujer haya tenido que derribar la esperanza nunca la abandonó, aunque sea una esperanza sin rumbo, carente de horizonte que la hace mas fuerte y desata sus ganas de lucha. Una lucha contra la idealización del concepto de mujer que se ha ejercido hasta nuestro siglo XXI, esta idealización se ha ejercido en todos los aspectos de la sociedad sobre todo mediante la opresión para impedir la realización y libertad de la mujer, una opresión que ha causado dolor y sufrimiento, inherentes a la vida humana natural y no política, que han creado en la mujer un conflicto por tener la vivencia de la ausencia, debido a que siempre había un

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sujeto más valorado y poderoso, el hombre, para decidir por ellas cuál debía ser su vida. Las otras, que tuvieron el valor de rebelarse contra una sociedad dirigida por hombres, que crearon un punto de inflexión en la historia de la mujer, pasaron de ser mujeres esclavizadas a conseguir poco a poco el lugar en la historia que se merecen. Las otras, que se alejaron de aquel mundo de ficción, para lograr la esencia en sí mismas, ha sido un recorrido doloroso y aunque en ciertos momentos se sentían abatidas y vencidas nunca abandonaron la lucha. Estas mujeres que hace muchas generaciones empezaron a derribar los muros del idealismo para construir un mundo donde todas y no solo todos puedan existir. Ellas han sido las otras y esas otras, somos nosotras mismas, mujeres revolucionarias, en todas las generaciones futuras habrá mujeres que continúen la lucha por un mundo donde todos tengan la oportunidad de ser quien deseen ser, creando un mundo en común, donde es necesario vivir en sociedad y conjunto y saber existir sin delimitar con los actos la existencia del otro; la mujer fue adalid en que no existe lucha posible vista desde la individualidad, sino que para verdaderamente dejar huella se necesitaba un conjunto, dispuesto a dejarse la piel por los derechos que quedan por conseguir, por llegar a ser reconocidas en las instituciones más importantes del poder, un conjunto que es capaz de aventurarse por zonas vacías donde nadie nunca se ha atrevido a transitar, rompiendo así con los ideales de mantenerse siempre en la zona de confort, que no es más que una cadena que nos impide avanzar hacia la victoria. Llevamos mucho camino recorrido, pero todas tenemos el deseo de más, no nos conformamos con una igualdad aparente, queremos igualdad de oportunidades en

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política, en el mercado laboral y sobre todo en la mentalidad del hombre; si las otras comenzaron la lucha en unos tiempos difíciles arriesgando su vida, nosotras la vamos a acabar por convicción y una educación que ha ido girando, en el trabajo callado de los filósofos, hacia la creación. Porque, como nos decía María Zambrano, y retoma la biografía de Paca Aguirre, preferimos una libertad peligrosa a una servidumbre tranquila. 6.

La desnudez. Gisely Pereira

Desde hace cincuenta años no se veía una imagen de unidad, fuerza y revolución tan potente como la del mayo del 68. Lo importante es que se haya producido cuando todo el mundo lo creía impensable y, si ocurrió una vez, puede volver a ocurrir, dijo Jean Paul Sartre. Las ciudadanas se lanzaron al espacio escénico para exigir el empoderamiento de la sexualidad femenina, una de las acciones fundamentales de Simone de Beauvoir. Frente al empoderamiento de la sexualidad femenina el mito de la potencia fálica del hombre cae por su propio peso. Solo la cultura va a arrancar el machismo de los comportamientos sociales de los hombres. Tenemos que pensar. El machismo es el argumento de fondo de la imposibilidad de realizarnos, no como mercancía sino como seres humanos. Y en el momento en el que dejemos de ser mercancía se abrirán las puertas de una feminización de la política. Necesitamos recuperar el sentido del cuerpo de la mujer que es el que más ha sufrido. La mujer no se hace en los cenáculos del patriarcado. La construcción de la personalidad se centra en el yo y por tanto en la sexualidad. Esta viene

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determinada por las emociones y los afectos, y la educación sexual y sentimental estructura nuestras emociones. Gran parte de la construcción de la educación sexual se basa en la educación sentimental. Convertimos la sexualidad en un instrumento político. Nadie debería enfrentarse a una parte importante de su identidad vital sin conocimiento. Sin una personalidad centrada y estructurada, el mundo de alrededor se convierte en un abismo. Sin educación, la capacidad de argumentar se anula y si intentamos argumentar a partir de la información que nos llega y está manipulada, la capacidad de pensar está perdida a manos del sistema. Vivimos en un mundo en el que las personas no pueden vivir su sexualidad libremente, sin prejuicios y sin temor a ser juzgados por sus prácticas sexuales. La mayoría actual vive con miedo, el argumento más poderoso del poder. 401 Estamos en un espacio de fantasmas402 y si somos fantasmas no tenemos cuerpo y sin cuerpo, ¿A quién vamos a amar?. Sin cuerpo anulamos por completo nuestra condición de ciudadanos en la polis. Nuestro cuerpo es un campo de batalla, donde sentimos la única expresión de la vida. Si además de esto lo negamos, entramos en el terreno de lo abyecto 403 . Convertir al cuerpo en el espacio cosmético de la representación y llenarlo de sentido solo demuestra que tenemos miedo, y el miedo nos ata al sentido. La abyección se relaciona con las fases evolutivas del cuerpo de la infancia, que funcionan como límites entre el cuerpo y lo que por pertenecer al mundo exterior es considerado objeto. 401 Foucault. 402 Foucault. 403 Julia Kristeva.

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Catectizamos objetos, llenando el espacio escénico de vacío, siendo este el lugar más importante por ser allí donde habitamos, la casa del ser. Nos destruimos a nosotros mismos con tal de encajar y complacer a la sociedad, o deconstruimos la realidad para seguir sosteniendo el imperio del sujeto moderno. Es posible llegar a destruir un orden, establecer otro con la consiguiente aureola revolucionaria, en nombre de una tendencia conservadora404. La revolución está en las ideas o en ningún sitio. La revolución es la mujer. Con la fortaleza de nuestra fragilidad y nuestra voluntad de poder darnos una personalidad para configurar al actor de nuestro espacio escénico. Tenemos que salir a las calles, reivindicar la poética, la ética y la estética, con una feminización de la ética del poder. Reconstruir nuestra historia, mirar atrás y quitarnos el peso del idealismo, del neoliberalismo capitalista y, después, desaparecer. 7.

El cuerpo enamorado. Gabriela Dimitrov

Esperanza. Ubicación: en el aura, los sueños, la palabra, el misterio, la caída en el tiempo, la nostalgia, el abismo, el cuerpo enamorado, la libertad, el futuro, los límites, en lo evidente, y por fin en la mujer. -“Les informamos de que el próximo tren efectuará su entrada dentro de tres horas, disculpen las molestias.” ¡Maldición! Había llegado tarde una vez más, no debo pasar tanto tiempo en mi mente, no debí perderme entre las palabras…, tal vez no debí gritar mis pensamientos para que alguien me amara fugazmente…, tal vez no. Lo siento, pero para no perderme de nuevo, necesitaba un paseo. Sí, eso necesitaba. 404 María Zambrano.

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Me encaminaba al cementerio. ¿Dónde estaba el cementerio? ¿Fuera o dentro de la ciudad? Un vértigo espantoso se apoderó de mi y comencé a verlo claro. Vi que nos aferramos a la luz, nos gusta que viva en nuestro entorno porque habitamos las tinieblas. Vi que estamos obsesionados con la masiva destrucción del vacío, cuando es el único escenario donde puedes interpretar el papel que quieras, crear lo nunca visto. Vi que no habitamos el lenguaje, hace mucho que no. Tampoco el viaje, ni el amor, ni la pregunta, el misterio; viviendo de esta manera hábitos el mercado y nos sentimos a salvo. Vi las bestias que somos. Bestias con un apetito insaciable por encontrar lo “normal” y estar en sus márgenes. Supongo que ver las cosas como son hace la vida intolerable405. Ya estaba en el cementerio. Un vasto cementerio donde cada casa es el nicho de una familia, cada calle el sepulcro de un acontecimiento, cada corazón la urna cineraria de una esperanza o deseo. ¿Qué me acaba de pasar? Esta espera acabará conmigo. Vamos, no pienses así. Se está perfectamente en la luz. ¿Verdad? No salgas, no lo hagas. No. Empecé a pensar que el tren no llegaría. Seguí caminando y no pude evitar leer algunos de los epitafios. “Aquí yace media España; murió de la otra mitad.” “Aquí yace la oscuridad.” Irónicamente a su lado ponía: “Aquí yace la luz”. Unos pasos más adelante: “Aquí yace el lenguaje”, “Aquí yace la vida jamás vivida”, “Aquí yace la libertad del pensamiento”, “Aquí yace la música”, “Aquí yace la caída en el tiempo”. Continúe el camino en busca

405 E. Cioran.

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de una nota de resurrección: o todavía no la habían escrito, o no se debía poner nunca406. “Aquí yacemos todos”, pensé para mis adentros: ni una flor, ni un recuerdo, ni una palabra, ni un solo sentido para vivir. Me siento como un homo insipiens, totalmente indiferente y una loca por pensar que aún, por muy pequeña que sea, hay esperanza. Que puedo volver a sentir los cascos de mustangs en mi pecho golpeando sin rumbo. Y no es que haya tenido mucho, tampoco he vivido mucho, pero esta sensación no acabará conmigo. Puedo marcar la diferencia, sobrepasar el muro de las sombras… Era de noche. El frío helaba mis venas. Quise salir violentamente del horrible cementerio. Quise refugiarme en mi propio corazón, no muy lleno de vida, de iluminación, de deseos…, pero he ahí la razón por la que sigo viva. Soy consciente de que la vida no tiene sentido alguno, de que no soy nadie para nadie, que soy una extranjera nacida en el mismo el lenguaje de todas nosotras. Sigo viva porque solo me queda vivir con esperanza. La esperanza permanece en mí porque sé que el tren no vendrá. Todos dicen que espere, que siga en mi sitio segura y que ya llegará, pero no, ningún tren entrará en la estación. Así que yo seré la ferroviaria de mi tren. Decido escribirte a ti, querido tren de la esperanza. A ti que en cada uno de tus vagones guardas un cachito de cada uno de nosotros. En el primer vagón se encuentra la historia y la cultura, en el segundo la lucha contra la pobreza en el existir, después la feminización de la política, la emancipación, en el quinto la conquista del sistema por 406 León de Nietzsche.

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el Mundo de la vida y en el último vagón la Antropología de la esperanza. Nuestra ruta pasará por las arboledas más salvajes que el ojo humano nunca haya visto, por las ciudades más antiguas donde dejaremos libre la imaginación para ver cómo hace cientos de años el amor y el pensar era lo que unía a las persona, no la imagen o el dinero. Nos perderemos entre el sonido de las olas, el del viento chocando contra las hojas de los cerezos, entre el olor a clavellinas, entre los copos de nieve o las gotas de lluvia… Te abrazare fuerte y sentiré como abrazo un mundo que no cabe en otro sitio. Visitaremos a todas las heroínas que aparecieron a lo largo de la historia. Nos adentraremos en las pieles de nuestros demonios. De verdad que sin necesidad de todo esto daría mi vida por ti aunque mi vida cupiese en un par de canciones. Mi vida que a nadie le importaba, mi vida llena de tonterías, llena de tantas cosas que se me dan mal y tan pocas que se me dan bien, pero en cuanto te vi, supe que serías de esas cosas que haría mejor que nadie. Cuando miro por tus ventanas, no sabría decir si es el universo quien se asoma a ti. Pero es precioso ese ritual. Cuando pasas por las ciudades en absoluto silencio me entran ganas de viajarte alrededor hasta que ya no quede más tiempo en el presente. Me entristece que la vida no tenga ningún sentido, y está tristeza es confidencial justar toda la lluvia del mundo y dejarla caer sobre este cuerpo mío que en realidad no es cuerpo, no es carne, no es huesos, es un eco extraño con su forma y en su fondo es donde estoy yo. En conclusión, cualquiera puede desear conocer más mundo e irse, pero sin duda todos queremos regresar al lugar de donde somos. Y quizá por eso volvemos

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siempre, porque yo soy de ti, que no tuya. Tú eres otro país, uno de esos que crean dos enamorados para seducirse bajo sus propias leyes. 8.

Vivir sin miedo. Catherine Álvarez

Una lucha llena de esperanza que sólo nosotras podremos ganar. Inhalan despacio y exhalan deprisa por la falta de coraje y valor, en una vida llena de barreras que no te dejan avanzar, con una presión constante de la sociedad sobre tu sexo, y es ahora el momento de recuperar lo que con el tiempo perdieron. Su vida, su cuerpo, su origen, su esperanza en la vida. Pero el miedo las ahoga y es imposible desterrar al infame patriarca que hace que su cuerpo sea un objeto, a los hombres que creen que las mujeres están por debajo de la dignidad humana, a esos hombres injustos que las humillan, cobardes que toleran las mentiras que acaban siendo verdades. En una sociedad de personas alineadas407, personas que se comportan como ratas de Skinner que viven aisladas esperando el castigo, la recompensa del hastío. Pero aquí estamos nosotras, las mujeres, las que no tienen miedo de desobedecer a quienes dominan el mundo, una mayoría de mujeres que luchan contra todos los estereotipos a los que son sometidas. Las mujeres no son minoría, a las mujeres las hacen ser minoría, porque tienen al miedo bajo la influencia de las emociones y la empatía, y se sienten protegidas ante el gran rechazo del poder, tienen una inteligencia que rompe todos los muros 408 que les ponen en su camino. El camino rodeado por los 407 Homo insipiens.

408 Muro de las sombras que les da poder e inteligencia.

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escombros de la guerra409 que con el paso de la historia se va alejando y va olvidando toda esperanza de lucha. Se sienten cómodas, a gusto y no perturbadas y su ser crítico, consciente y luchador, cada vez va quedando más oprimido por esa franja oscura de la sociedad contemporánea, donde la mujer no tiene ningún tipo de derecho, una sociedad que las reprime y las observa desde ese gran panóptico410 que roba su intimidad y no las deja ser libres. Se cohíben y el miedo se apodera de ellas, consume sus ganas de vivir, de expresarse, de ser lo que son por naturaleza, de ser mujer. Ellas tienen miedo, tienen miedo de una sociedad tan vulgar que educa desde pequeñas a las niñas para tener cuidado de no ser violadas pero no educan a un niño a no violar y a respetar a su sexo contrario. Luchar así contra el patriarcado es una tarea de demolición del tiempo, luchan por un mundo democrático que ellos parecen inventar en la mitad de este mundo para dominar la otra mitad. Una sociedad que no tenga miedo a elegir y tomar decisiones, un mundo de locura y odio de querer vivir femenino, creadoras de la intimidad necesaria a la crítica. Las mujeres estarían erradas si pretendiesen parecerse a los hombres, ellas son el equilibrio que nos puede permitir regresar a Grecia, recuperar el diálogo que inició Safo, y no la falsa idea de la salvación: Si las dan esperma… 411 . No han llegado para construir otro 409 Hannah

Arendt, Eichmann en Jerusalén. Un estudio acerca de la banalidad del mal. 410 Jeremy Bentham. Este dispositivo debía crear así un sentimiento de omnisciencia invisible sobre los detenidos. 411William Golding: “Creo que las mujeres están locas si pretenden ser iguales a los hombres. Son bastante superiores y siempre lo han sido. Cualquier cosa que des a una mujer, ella lo hará mejor. Si le das esperma, te dará un hijo. Si le das una casa, te dará un hogar. Si le das

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infierno412 en la dialéctica de la historia. Tienen que luchar y poner cara a la ideología de la explotación, hacer una revolución que cambie la forma de ver las cosas y la forma de ver a las mujeres; pero tienen que hacerlo unidas y ahora más que nunca, porque llegarán al poder y mandarán para acabar con el miedo como estrategia política. Son las heroínas del mundo frágil que se derrumba y se yergue a medida que pasa el tiempo y se detiene, piensan una sociedad distinta a la enferma de violencia. El poder tiene pánico, pánico del ser revolucionario que ellas llevan dentro. Tienen que dar su amor413 para tener otra visión del mundo. Deben tener coraje, dejar el resentimiento atrás, deben salir a buscar todos los lugares sin sombras, el mediodía de la voluntad creadora. Están sometidas al enorme peso de la historia que las cree débiles y sin fuerza, y también sobre ellas recae la responsabilidad de la historia olvidada. Pero hay que mirar hacia atrás 414 y ver todo el trayecto recorrido por la revolución constante, y recuperar los derechos y la voz, seguir hasta el final. Vivir con muchísima fuerza nuestro amor por nosotras y nuestras iguales, protestar contra toda desigualdad que padezca el ser humano. ¿Por qué las discriminan? ¿Por qué las odian? Porque son las únicas que tienen esperanza. Son las únicas que saben lo que hacer en momentos difíciles y solucionar todo con voluntad de poder como amor. Van a poner fin alimentos, te dará una comida. Si le das una sonrisa, te dará su corazón. Engrandece y multiplica cualquier cosa que le des. Si le das basura, ¡prepárate a recibir toneladas de mierda!”. ¡Lamentable! 412 William Shakespeare. El infierno está vacío porque todos sus demonios están aquí. 413 El cuerpo como expresión de amor. 414 Angelus Novus.

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al patriarcado y empezar una revolución que cambie el mundo, van a pensar en un inicio en el que la mujer esté presente. Vamos a ser libres y poder tomar decisiones de una vez sin que un hombre tenga que dictar destinos como un dios. Vamos a llenar las calles de desobediencia civil415, mujeres con esperanza para dejar de estar alineados y poder pensar, tener la capacidad de tomar decisiones. ¿Por qué las maltratan? Porque el hombre se siente cuestionado por ellas y no por su ceguera, y tiene que intentar parecer que es el dominante en las relaciones que son sencillamente entre iguales; se creen que pueden controlar sus vidas y no, las mujeres son lo suficientemente autónomas, por fin, como para saber lo que tienen que hacer. Van a modificar la historia ya que no hay hechos, sino interpretaciones416. Vamos a sobrevivir en un mundo dominado por los hombres417, vamos a dejarles claro que no nos pueden torturar con nuestros miedos porque nosotras vivimos sin miedo y tenemos voluntad de poder. Solo nosotras somos capaces de no repetir nuestra historia porque ya la conocemos. Somos lo que hacemos, no lo que decimos, y por eso somos supervivientes en una ideología patriarcal que quiere terminar con nuestra esperanza y quiere que vivamos sin desplegar las alas. Terminar con la angustia de no existir que llevamos dentro de nosotras. Una nueva construcción del cuerpo que nos han ido quitando en las relaciones comerciales de dominación. 415 Juan Carlos Monedero. 416 Nietzche.

417 Mary Shelley.

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Fragmento a fragmento 418 ir reconstruyendo el iluminismo hedonista419, conseguir cambiar los valores del lenguaje machista que tenemos en la sociedad y hace a la mujer frรกgil. Tenemos un grito, una fuerza que se mantiene.

418 Construcciรณn de la memoria histรณrica. 419 Relaciรณn epistolar entre Rousseau y Voltaire.

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Epílogo Hedoné. La agonía de Eros. Del libro La mujer rota, el epílogo: Con Simone de Beauvoir Error en el que existo sin salvación, sin demanda, concebido por un espejo que imagina sombras y símbolos, imágenes de los gritos, siniestro espanto que es atrio de la defusión420, el desastre de los deseantes. Esta Desnudez es una grieta, un delirio mudo donde un dios depreda tu lengua: el logos que se separó de lo humano como un canto de perdición, extenuado cuerpo del audaz que venció la obediencia del nacimiento, su resto semántico en la esperanza de la que nadie espera sino huellas de estrellas y cicatrices de haber vivido. No quiero comprender océanos sin litorales, puertas sin pomo, aves sin vuelo, no quiero el absurdo elevado a metáfora; sino entrar al lugar que sé que no existe entre los océanos y los litorales, entre pomos y puertas, aves y vuelos, lugar y abismo de las palabras. Quiero lo que ha sido roto, separado, la luz que aísla aún más en las islas orientales los cuerpos, la extrema huella del adiós que ya no alcanza la boca, su almagesto421, donde el oriente es perder y amar lo amado y perdido, adentrarse en la geografía de la oscuridad que sigue a la luz por las acacias solitarias de los desiertos, persiguiendo sombras. Gestionar los pensamientos indeseados, los contenidos inconscientes que consideramos inadecuados. 421 Tratado astronómico de Claudio Ptolomeo de Alejandría. 420

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Languidece el signo extraño al animal, aureola el ascendente linaje de los náufragos, luz del abandono que llameará en la caída, sin fin arrastrará lo amado en lo que eres, un oriente quieto, un amor sin recuerdo ni deseo, agotado el préstamo de la vida intentarás resucitar el aroma de las flores, el cielo estrellado sobre sus pétalos, acoger en el tercer corazón la lógica vitalista de la conquista: no culminar. Mientras la acrópolis contemporánea, los inmensos desiertos de gente, es construida por el abandono y la melancolía. Eres la luz que resisto y asedia mi desvarío, mi orfandad, la de los delirios, lleva a la locura, al póstumo vivir de lo poético que habla con las estatuas entre los fantasmas de la ciudad, que muere a la vana esperanza y a los recuerdos de los padres. Nadie, nunca más, contemplará ante sí un ocaso de tierras llenas de equilibrio, y en la negra espalda de su tiempo422 sentirá el vacío de ser el último sin futuro, por mucho que el tiempo se extienda sobre las ruinas futuras… Jadea Circe al imaginar las rocas errantes423, susurra lo inconfesable, el olvido sin tacto, la ceguera ante una luz que es la oscuridad apartada, donde no se recuerdan los territorios, porque no soy al ser, porque no se puede separar la orilla de la insistencia de las olas, porque se escribe para vaciar las palabras y los textos leídos. En la noche la mar recoge las sombras de Cartago, de sus cipreses, sombra contra sombra crece arcaico el abrazo de alma a alma424, devoración de fuerzas y sedes, hasta 422 Negra espalda del tiempo, Javier Marías. 423 Islas Eólicas. 424 Es una fuerza telúrica entendernos como memoria. Tener en cuenta

La tempestad, de W. Shakespeare: ''What seest thou else in the dark backward and abysm of time?": ¿Qué más ves en el oscuro pasado, en el

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ser una carne que nutre lo que precede: pérdidas y noches, asombro y espanto, saciedad y hambre, ir, solo ir. En los abrazos la verdad se nubla, los abrazos en la noche hacen intensa la oscuridad. El continuo en el que eres sumergida deja atrás una aterradora nada nacida, hasta tu muerte, a la luz. La oscuridad volverá, el tiempo no. Morirás fuera de ti, en la oscuridad iluminada, serás un triunfo ciego y fiel a lo que sombrío perduró mientras fue la luz desnuda de la angustia. Tú en mi hiciste el otro de mi, otro de otro, musitado… Y el tiempo pasó, veloz, en la edad de la soledad, venciendo el peso de la felicidad y sus decisiones, abandonándote a la suerte de una vida sin esperas, independiente, frente al ser social y la agonía del amor. La rebelión psíquica contra el dolor es existir como un Sísifo que no regresa a su tormento, que se desvincula del castigo y no paga culpa alguna por relacionarse más allá de los códigos que han fosilizado en un drama inacabable la naturaleza pulsional del deseo: un amor sin objeto, un amor a sí mismo, un ser lo que uno quiere ser, más si es mujer. El absurdo de proteger la rebelión, el reducto revolucionario en el psiquismo femenino, como si proteger a la mujer en la mujer anulase la banalidad del mal425 de la posición de saber del hombre, su hirsuto androcentrismo esencialista, que no puede abandonar el absoluto mujer por las mujeres, cada una de ellas, diversas426, habitando su propio espacio emancipado427, los restos de Hirosima428. Y abismo del tiempo? Nos duele lo no vivido, pero advenido al aire roto del presente. 425 Hannah Arendt. 426 Amelia Valcárcel. 427 Un cuarto propio, Virginia Woolf.

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en aras de hacer caer las escisiones en la cultura material, y así, desenmascarar las identidades que generan desigualdad, alcanzar una cultura crítica y recorrer la genealogía de su cuerpo de mujer hasta este presente que nos obliga a luchar contra la superstición y los dogmas aún medievales 429 , lejos del espectáculo mediático de la dominación, en una absoluta defensa de la intimidad, en la negación de la pornografía social que nos convierte en peleles alienados por la locura de los idiotas, últimos reyes endogámicos del linaje de los locuaces y ruidosos, obscenos, y violentos delirios trascendentales de los machistas. Consagrarse al logro de una felicidad entendida no solo como rebelión, sino como revuelta en los cenáculos del poder, como siempre poco consciente de su parasitismo, muy dado a creer que todo es su emanación: todo lo que nada es hace de lo que es su ser, simbióticamente hasta su muerte. Latencias de tu pecho en su boca hacen que no muera igual a ti, sino llegada a ti, esperando que todos salgan del laberinto. La materia tenebrosa de Giordano Bruno no es la mujer socializada, destruida, sí su apocatástasis, el eterno retorno de la docta ignorancia430 donde ella jamás será otro. El regreso es imposible, ella no es un viaje, su relato también. El ayer como destino es una falacia de la conciencia que nos somete al sufrimiento de una narración que promete entender lo que ha desaparecido de la realidad, que la constituye en parte, sí, pero que no es ya su objeto, que no es su vida, que merece el silencio, callar en el suplicio; porque un dolor sabido, su repetición, destruye incluso la herida que originó perder el 428 Marguerite Duras.

429 Opus Nigrum, Marguerite Yourcenar. 430 Nicolás de Cusa. Más allá de la alteridad en lo inaprensible…

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museo de las ruinas, o no abandonar jamás la era vulgar, la civitas dei431 de cuyas plazas fue expulsada la feminidad. Hay en ti una tácita atención a todo lo callado, un equilibrio que calcina, cuyas pavesas cubren la superficie de los desiertos en los que no puede quedar, tan solo, vida suficiente, sino el cálculo de los silencios como medidas de longitud y latitud de la ubicuidad, en la que la mujer que eres consume a la hija y a la madre descendiendo los círculos dantescos, desde el limbo a la traición, donde el hielo se extiende y alcanza los bordes de la tierra feacia, donde tu género hiende en su olivo el poder de las áureas estatuas, su vigor de agua dulce, contrario al carácter andrógino de los dioses hendidos de abismos. Espero en Cartago 432 la semejanza, la recíproca diferencia que arrase la realidad en la que no puedo ser contigo. La desnudez onírica vence al lenguaje, lo deja vacío, extraído de sí mismo. Fio en ti toda mi tierra, el sustento de mis raíces y el tálamo que unge mi muerte a lo desvelado. Te pronuncio para ocultarte, te cuento para desvanecerte, para poder ser en ti sin ti, para esconderme en la casa desnuda, descalza y clara, donde jadea la soledad al escapar del tiempo de las amapolas. Lejos queda el espacio de la desnudez, de la confesión, de la narración de tu nombre y mantener el secreto de mi regreso (Ulises no le confía a Circe que regresa a Ítaca, pero el saber de Circe es de una libertad extrema, sin tiempo, más increíble aún, sin lugar, para el olvido, en el que yacen los mitos de la condena). No te busqué a ti en ti, no te hallé en el útero lleno, en la vagina colmada de sexo, donde quise entrar a través 431 De Tertuliano a San Agustín. 432 Dido y Eneas.

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de ti; no desee tu ser extranjera, no recordé que nada propio se ama en el sexo, que ocupé un lugar prohibido donde no pude ser Eneas. Hay una luz remota en este límite, donde nace la oscuridad de ti.

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En la anónima fosa de la sangre yacen mezclados víctimas y verdugos; y en las terribles horas de la comprensión qué imposible resulta distinguir del corrompido olor de la esperanza degollada el agrio aroma de sus asesinos. Paca Aguirre, Cementerio.

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