COLECCIÓN TEMAS CANDENTES
¿QUÉ HAY ACERCA DE OTRAS
RELIGIONES?
«Decisiones, decisiones».
NICKY GUMBEL
TEMA CANDENTES
多QUE HAY ACERCA DE OTRAS
RELIGIONES? NICKY GUMBEL
¿Qué hay acerca de otras religiones? Título original: What about other religions? Copyright © Nicky Gumbel 2013 Primera edición en inglés: 1994 Nueva edición en inglés: 2013 Traducido al español por Jaime Álvarez Nistal Traducción española © 2014 Alpha International, Holy Trinity Brompton, Brompton Road, Londres SW7 1JA, Reino Unido. El derecho de Nicky Gumbel de ser identificado como autor de esta obra ha sido ratificado por él según lo dispuesto en la Ley de Patentes, Diseños y Derechos de Autor de 1988 (Copyright, Designs and Patent Act 1988). Todos los derechos reservados. Quedan rigurosamente prohibidas, sin la autorización de los titulares del copyright, según las sanciones establecidas en las leyes, la reproducción total o parcial de esta obra por cualquier método o procedimiento, incluidos la copia y el tratamiento informático. ISBN: 978-1-934564-44-8 Ilustraciones de Charlie Mackesy. Siempre que no se especifique lo contrario, los textos bíblicos han sido tomados de La SANTA BIBLIA, NUEVA VERSIÓN INTERNACIONAL® NVI®. Derechos de autor © 1999, Sociedad Bíblica Internacional® (Bíblica® en la actualidad). Usado con el permiso de la Sociedad Bíblica Internacional®. Todos los derechos reservados. “NVI” es una marca registrada de la Sociedad Bíblica Internacional, cuyo número en el Reino Unido es: 1448790. Publicado por Alpha International HTB Brompton Road Londres, SW7 1JA Email: publications@alpha.org Página web: alpha.org 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 Impresión / Año 18 17 16 15 14
Contenidos ¿Es Jesús el único camino a Dios? ¿Cuál es nuestra postura respecto a otras religiones?
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¿Qué pasa con los que nunca han oído hablar de Jesús? 14 ¿Qué debemos hacer?
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¿QUÉ HAY ACERCA DE OTRAS RELIGIONES?
Se suele tener la impresión de que el cristianismo está muriendo en las sociedades occidentales tradicionalmente cristianas. Se nos ofrecen dos versiones: la primera dice que otras religiones están superando poco a poco al cristianismo. La segunda, cada vez más aceptada, afirma que el mundo occidental se está secularizando con rapidez. En realidad, ambas versiones son parcialmente engañosas. En el Reino Unido, por ejemplo, solo el 6 por ciento de la población está constituido por miembros de otras religiones. Alrededor del 11 por ciento frecuenta iglesias cristianas, y, probablemente, la mayoría frecuentaría iglesias cristianas si tuviera que escoger a dónde ir.1 A escala mundial, el cristianismo es, con diferencia, la «religión» más numerosa. Según la Encyclopaedia Britannica, el cristianismo tiene 2.200 millones de seguidores en todo el mundo, es decir, aproximadamente el 34 por ciento de la población mundial. Hay 1.300 millones de musulmanes, 870 millones de hinduistas y 376 millones de budistas. Hay además otras religiones menos numerosas como el judaísmo, el sijismo, el bahaísmo y las religiones tradicionales o tribales.2 El ateísmo está representado por solo el 2,5 por ciento de la población mundial. 5
Aunque el cristianismo sea predominante, necesitamos preguntarnos qué postura tenemos los cristianos respecto a las demás religiones. Uno de los resultados de la globalización es que la identidad religiosa ha adquirido mayor importancia en el siglo XXI. El catedrático David Ford, de la Universidad de Cambridge, afirma que nuestro mundo es «complejamente religioso y secular». En un mundo así, enseguida surgen preguntas sobre la postura de los cristianos respecto a otras religiones. La sociedad moderna y las tecnologías de la comunicación nos han hecho cada vez más conscientes de las demás religiones. Muchos de nosotros tenemos contactos personales significativos con personas de otras religiones —en el aula, en el barrio, en el trabajo y en otras actividades sociales—. También entramos en contacto a menudo con otras religiones a través de la televisión, la radio, el cine e Internet. ¿Qué podemos decir acerca de las demás religiones?
¿Es Jesús el único camino a Dios?
La respuesta del Nuevo Testamento es un «sí» categórico. El mismo Jesús dijo: «Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie llega al Padre sino por mí» (Juan 14,6). Él afirmó ser el camino a Dios; en efecto, el único camino. El difunto columnista Bernard Levin destacó que Jesús usaba un lenguaje inequívoco. En mi opinión, una religión que afirma seguir la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad, debe de pensar, aunque solo sea por un proceso de eliminación, que las demás religiones, a pesar de 6
su santidad y espiritualidad, están equivocadas. Yo no soy nadie para debatir sobre las Escrituras con expertos, pero en esta época de diálogo interreligioso es ciertamente razonable preguntar al cristianismo qué es lo que su fundador quiso decir cuando afirmó: «Nadie llega al Padre sino por mí». No cito estas palabras con ánimo de ofender a nadie, pero a muchos cristianos devotos les preocupan, y muchos obispos, que se muestran abiertos a otras religiones, tendrán dificultades para aceptar tales palabras y para ofrecer una respuesta convincente. Dudo que se pueda obtener dicha respuesta, venga de un obispo o no.3
En Hechos 3, Pedro y Juan sanaron a un hombre lisiado de nacimiento a la entrada del Templo, e inmediatamente una gran multitud les rodeó. Pedro proclamó a Jesús como el «autor de la vida» que había sido crucificado, pero que Dios había resucitado y glorificado. Cuando todavía estaban hablando, fueron arrestados y los procesaron preguntándoles «con qué poder» habían sanado al hombre lisiado. Pedro, «lleno del Espíritu Santo», respondió que lo habían hecho «gracias al nombre de Jesucristo de Nazaret» y que «en ningún otro hay salvación, porque no hay bajo el cielo otro nombre dado a los hombres mediante el cual podamos ser salvos» (Hechos 4,12). Pedro, inspirado por el Espíritu Santo responde sin ambigüedades: Jesús es el único nombre que puede salvar. Su respuesta es coherente con el resto del Nuevo Testamento. S. Pablo es igualmente categórico: «Porque hay un solo Dios y un solo mediador entre Dios y los 7
hombres, Jesucristo hombre» (1 Timoteo 2,5). Asimismo el autor de la carta a los Hebreos, nos advierte de que no hay otras vías de escape si no es por Jesucristo: «¿Cómo escaparemos nosotros si descuidamos una salvación tan grande?» (Hebreos 2,3). ¿En qué sentido se puede considerar a Jesús el único camino a Dios? Los cristianos creemos que Jesús trae la salvación. Jesús viene para franquear la distancia que hay entre la humanidad y Dios, causada en primer lugar por la caída, y reforzada siempre que el pueblo de Dios se aleja de él en egoísmo y pecado, sin reconocer ni adorar a Dios como el origen de todo lo bueno que nos rodea. Jesús es el único capaz de franquear el abismo del pecado, en primer lugar, por ser quien es. Pedro lo proclamó como el «Santo y Justo» (Hechos 3,14), el «autor de la vida» (v. 15). Él es quien había sido anunciado por los profetas (v. 18). Es el «Mesías» (v. 20). Él es a quien la iglesia primitiva adoró como Dios. Esto lo diferencia de los líderes de las demás grandes religiones. A los musulmanes no les gusta que les llamen mahometanos, puesto que no adoran a Mahoma. «Nadie en el mundo islámico ha soñado otorgar a Mahoma honores divinos. Él mismo habría sido el primero en rechazar esa sugerencia como una blasfemia».4 No se sabe con certeza si Buda creía en la existencia de Dios como tal, pero lo que sí es cierto es que él no se consideraba un dios.5 En segundo lugar, Jesús es único en lo que respecta a su logro, es decir, en cuanto a lo que ha hecho. Como ya hemos visto, Pedro declara: «En ningún otro hay salvación, porque no hay bajo el cielo otro nombre dado a los hombres mediante el cual podamos ser salvos» (Hechos 4,12). Todos necesitamos un salvador 8
porque todos hemos pecado y no podemos salvarnos a nosotros mismos del efecto del pecado. Ninguna de las otras grandes religiones afirma siquiera tener un salvador. «El budista inglés, Maurice Walsh, señaló que la visión budista de Buda es muy diferente a la visión cristiana de Cristo». Destacó que a Buda se le reconoce como Maestro —no como Salvador—».6 Del mismo modo, Mahoma es considerado un profeta, no un salvador. En el Islam, los pecadores se enfrentarán a un juicio sin perdón —la obediencia y rectitud de sus vidas serán comparadas con su pecado—. Por el contrario, Jesús es quien trae la salvación. Nos salva de nuestra culpa, nos salva del poder adictivo del pecado y nos salva del juicio que todos merecemos. En tercer lugar, Jesús es único en comparación con los líderes de las otras grandes religiones del mundo por su resurrección. Pedro lo describió como quien fue «resucitado por Dios» (Hechos 4,10). La resurrección es un acontecimiento único en la historia universal. El Canon Pali del budismo narra la gran entrada de Buda en el nirvana, pero no hay indicación de que Buda fuera a seguir presente en sus seguidores después de su muerte; el dhamma, o la ‘doctrina’, ocupará su lugar y será la guía de sus seguidores. […] Se conoce la fecha exacta de la muerte del profeta Mahoma. Nadie jamás ha sugerido que sobreviviera a la muerte física.7
Por el contrario, la resurrección de Jesús es central a la fe cristiana. Jesucristo está vivo. Podemos conocerlo, y es gracias a esta relación personal viva que la distancia 9
entre Dios y la humanidad, descrita en la Biblia, ha sido franqueada. Para los cristianos, Jesús, el único Hijo de Dios, el único Salvador, el único que ha resucitado de entre los muertos; es el único camino a Dios. Si Jesús es el único camino a Dios, entonces, automáticamente, surgen otras dos preguntas. La primera es: «¿Cuál es nuestra postura respecto a otras religiones?». Y la segunda: «¿Qué pasa con los que nunca han oído hablar de Jesús?».
¿Cuál es nuestra postura respecto a otras religiones?
El hecho de que Jesús sea el único camino a Dios no quiere decir que sencillamente descartemos las demás religiones como totalmente erróneas, equivocadas o demoníacas. Jesús dijo: «Yo soy la verdad». En él se encuentra la máxima verdad y él es el criterio mediante el cual todas las pretensiones de verdad han de discernirse. Pero eso no quiere decir que no haya fragmentos de la verdad en otras religiones. En efecto, es lógico que esperemos encontrar verdad en otras religiones por, al menos, tres razones. En primer lugar, aunque la revelación de Dios sobre sí mismo en Jesús, testimoniada en las Escrituras, es única y final, Dios se ha revelado parcialmente en la creación. «Los cielos cuentan la gloria de Dios, el firmamento proclama la obra de sus manos» (Salmos 19,1). La cumbre de su creación es la vida humana. Como dijo 10
¿Qué hay acerca de otras religiones? ¿Es Jesús el único camino a Dios? ¿Qué pasa con los que nunca han oído hablar de Jesús? En este sugerente fascículo, Nicky Gumbel propone varios modos de empezar a responder a estas preguntas difíciles. ¿Qué hay acerca de otras religiones? es un capítulo del libro Temas candentes de Nicky Gumbel. Nicky Gumbel es el pionero de Alpha. Estudió Derecho en la Universidad de Cambridge y ejerció la abogacía durante varios años. Después, estudió Teología en la Universidad de Oxford y es, en la actualidad, párroco de la iglesia Holy Trinity Brompton (HTB) en Londres. Ha escrito varios best sellers, entre los que se encuentran Preguntas de la vida y ¿Por qué Jesús? Sigue a Nicky en @nickygumbel.
Otros fascículos de esta colección:
ISBN 978-1-934564-44-8 ISBN: 978-1934564448 515503
© Alpha International 2013
9 781934 564448