Tierra y Trabajo

Page 1

Entrevista: “No hay proyecto inclusivo sin movimiento cooperativo, mutual y una economía social consolidada”. Patricio Griffin, presidente del INAES. Pág. 14.

Informe:

lockout:

Nueva Ley de Arrendamientos: preparativos para el debate final

Impuesto Inmobiliario Rural: las cosas por su nombre

En el camino por seguir dejando atrás las leyes impuestas por la última Dictadura Cívico Militar, el nuevo proyecto se viene discutiendo desde las organizaciones de productores y también en los distintos escalones del Estado. Pág. 18.

Razones expuestas e intereses ocultos detrás de las medidas de desabastecimiento convocadas por la Comisión de Enlace de las Entidades Agropecuarias, que agrupa a los dueños de la tierra y de la producción en Argentina. Pág. 6.

El Fortalecimiento Institucional es uno de los Ejes Estratégicos que la SsAF ha definido para trabajar en todos los territorios. La organización territorial, tanto de los productores como de los consumidores, es fundamental en la construcción de la Nueva Ruralidad. Generando mano de obra en los pueblos del interior y con la producción de alimentos como objetivo principal. Distintas experiencias de la Región Centro que nos animan a pensar nuestras propuestas y nos muestran caminos posibles.

Martiniano Molina Buscando en la cocina familiar Pág. 4.


Autoridades

Presidente Dra. Cristina Fernández de Kirchner Ministro de Agricultura Ganadería y Pesca de la Nación Sr. Norberto Yauhar Secretaria de Desarrollo Rural y Agricultura Familiar Ing. Carla Campos Bilbao Subsecretario de Agricultura Familiar Ing. Agr. Guillermo Martini Director Nacional de Fortalecimiento Institucional Ing. Alberto Chiavarino Directora Nacional de Ejecución de Programas para la Agricultura Familiar Ing. Graciela Freddy Provincia de Santa Fe Claudio Tessini Provincia de Buenos Aires Jorge Sutil Provincia de Entre Ríos Arturo Casalongue Provincia de Córdoba David Rosso

Hacemos Tierra y Trabajo:

Equipo de Comunicación Región Centro: Buenos Aires: Tel 0221- 4210822 Alejandro Gimeno, Facundo Cabe y Eugenia Del Castillo. Entre Ríos: Tel 0343-4317720 Fernando Solanas y Daiana Pérez. Córdoba: Tel 0351-4869724 Juan Manuel Stahli, Fabricio Roveres y Ricardo Moriena. Santa Fe: Tel 03482-422898 Luis Ortolani y Karina Kasprik. Contacto: prensaregioncentrossaf@gmail.com Diseño: Zeta Grupo. info@zetagrupo.com.ar Impresión: Comercio y Justicia Editores, Cooperativa de Trabajo Ltda. (Córdoba capital).

2 | TIERRA Y TRABAJO | JULIO 2012

Editorial Organizarse es

agregar valor a realidad del sector agropecuario no escapa a las generales de los demás sectores productivos del país y del mundo en donde encontramos, una estructura socio productiva altamente concentrada. Con tecnologías desarrolladas para la gran escala económica que fija en función de ese grado de desarrollo de las fuerzas productivas, desde los modos y ritmos de la producción hasta las unidades económicamente viables prescindamos por ahora de discutir acerca de la sustentabilidad ambiental, energética o en un sentido más amplio la sustentabilidad social de determinados modelos de desarrollo-. También encontramos, como en cualquier otra actividad, una gran heterogeneidad de subsectores productivos, que se relacionan entre sí y con otros sectores, a saber: los proveedores de servicios (asesoramiento técnico-servicios de transporte-operativos- contables-jurídi-

L

cambios estructurales en las relaciones entre los diversos actores del subsector de la AF y de éstos y el resto de la sociedad. En primer lugar, respecto de la producción y la sustentabilidad económica de estas pequeñas escalas, la historia ha demostrado que resultan inviables en el marco de las relaciones del capitalismo de mercado desarrollado hasta la actualidad. Por lo que, para superar este escollo, es necesario avanzar en procesos asociativos que permitan hacer economía de recursos, potenciando en el conjunto, la utilización de las capacidades instaladas de cada AF. Éstos procesos asociativos, además de ampliar las escalas económicas y fortalecer sus capacidades de negociación, pueden -desde lo productivo-, ir desarrollando una concepción más colectiva y, con ello, aproximarse a lo que en términos generales se conoce como unidades productivas económicamente viables.

De la acción solidaria que las organizaciones de la AF desarrollen con otros actores de la sociedad, resultaría en definitiva la Gran Escala Social, que les permitirá superar la debilidad material de su escala económica.”

cos por mencionar sólo algunos), también se relacionan con ellos los comerciantes a través de los que se realiza su producción, tanto en el mercado interno como internacional y, finalmente, los sectores industriales, ya sea aquellos que industrializan sus productos o bien porque producen bienes necesarios para la producción. Esta heterogeneidad de actores implica sendos intereses generalmente encontrados, de lo que se deriva una situación de enfrentamiento-negociación, en la que tienden a imponerse los de mayor escala económica, subordinando a los de menor escala, que además por tratarse generalmente de productores independientes se encuentran dispersos y con poca experiencia en lo que hace a organización y negociación. Esa realidad de fragmentación desde lo material, así como la historia de los actores de las escalas productivas de la Agricultura Familiar (AF), ha venido condicionando su percepción de la realidad, y consecuentemente ha ido tendencialmente profundizando una actuación más individual que colectiva, la que se ha traducido en una mayor debilidad de éstos ante las instancia de enfrentamiento negociación que citáramos más arriba. Ante esta realidad, desde el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación -en general- y desde la Subsecretaría de Agricultura Familiar -en particular-, se trabaja para fortalecer al subsector de los Agricultores Familiares. Consecuentemente, la discusión que se impone nos lleva a definir cuál ha de ser la estrategia a desarrollar para fortalecer a los Agricultores Familiares, de manera tal que no queden en situación de vulnerabilidad ante las leyes del mercado. Los caminos para desarrollar las fortalezas en estos actores pueden ser diversos, y no pretendemos aquí, ni mucho menos, agotar el debate. Sin embargo no podemos dejar de plantear algunas líneas que entendemos nodales para producir

En segundo lugar, estos procesos asociativos en lo productivo deben-pueden ser complementados con instancias de organización para la acción gremial y o política territorial, de manera que estos actores tengan peso específico en la definición de políticas públicas en los diferentes niveles gubernamentales –municipal, provincial, nacional y latinoamericano-. Ya sea en lo que hace a líneas de financiamiento, la transferencia de tecnologías, la industrialización con VAO, y la comercialización por citar sólo algunas áreas específicas que los AF necesitan desarrollar. En tercer lugar, nos atrevemos a decir que la organización territorial de estos actores, para poder alcanzar un real impacto, debe partir de la premisa de la acción solidaria con otros actores sociales, en particular de los sectores populares urbanos-los consumidores de alimentos que los AF producen-. De la acción solidaria que las organizaciones de la AF desarrollen con otros actores de la sociedad, resultaría en definitiva la Gran Escala Social, que les permitirá superar la debilidad material de su escala económica. La Subsecretaría de Agricultura Familiar a través de distintas acciones como el financiamiento a proyectos productivos -ya en la producción primaria como en la industrialización hacia una nueva ruralidad-, la asistencia técnica, la capacitación y el fomento de procesos sociorganizativos, por mencionar sólo algunas de las múltiples intervenciones, tendientes a fortalecer a los AF y sus organizaciones. Entendemos que en adelante, cuanto se pueda lograr en lo que hace a la mejora de las condiciones de vida de los AF, depende también y fundamentalmente, de las acciones de los AF a través de sus organizaciones. Para construir y consolidar, solidariamente con el conjunto de la sociedad, y en particular, con los sectores menos favorecidos, una sociedad para todos y todas


“… lograr el retorno y el asentamiento en el país profundo para que allí, asociados, pueda agregarse valor en origen, es la fuente para que la gente no tenga que emigrar y el campo despoblarse. Necesitamos esta nueva ruralidad y para ello vamos a contar con los instrumentos necesarios. […] queremos asociarlos para que podamos producir alimentos en las fuentes y ser, entonces, no el granero del mundo, sino un país con industrias”. Cristina Fernández de Kirchner.

COOPERATIVISMO Y ASOCIATIVISMO:

Motores para la Agricultura Familiar

en la Nueva Ruralidad Buscando elementos que nos ayuden a comprender las principales características de la nueva etapa de gestión, los cambios y nuevos desafíos para el desarrollo de la Agricultura Familiar en el país, conversamos con el Director Nacional de Fortalecimiento Institucional Ing. Agr. Alberto Chiavarino. ¿Cuáles son los principales desafíos de esta nueva etapa para la Dirección Nacional de Fortalecimiento Institucional? La Dirección Nacional de Fortalecimiento Institucional como parte de la Subsecretaría de Agricultura Familiar viene trabajando en la asistencia técnica y capacitación de una amplia gama de productores familiares en todo el territorio nacional. El gran desafío que asumimos en esta nueva etapa es ampliar la base de agricultores familiares que asistimos, incorporando también como sujetos de nuestro accionar a los productores medios capitalizados. Para ello nuestra Dirección además de continuar y profundizar la tarea de fortalecimiento y capacitación técnica a las organizaciones de la Agricultura Familiar ha incorporado un equipo de trabajo abocado a la misión de articulación con otras áreas del Ministerio de Agricultura de la Nación, otros Ministerios nacionales, provinciales, Universidades y demás dependencias públicas y privadas con el fin de institucionalizar y coordinar las acciones y recursos en conjunto dentro de los territorios donde intervenimos. También se amplía la perspectiva de trabajo

con organizaciones sociales, estudiantiles, de trabajadores y de Pymes. En este sentido, hemos sumado también a nuestra Dirección Nacional un equipo de trabajo que se encargará específicamente del desarrollo Cooperativo y Asociativismo ya que en esta etapa, son sin lugar a duda las herramientas que constituyen uno de los motores centrales para el crecimiento de la agricultura familiar y el desarrollo territorial. De esta manera se favorece la posibilidad de agregar valor en origen a las producciones regionales. Estos procesos van creando mejores condiciones de vida para los Agricultores Familiares, fortaleciendo sus organizaciones para garantizar la soberanía y seguridad alimentaria del pueblo argentino en el marco de la construcción de una nueva ruralidad. ¿Cuáles son las herramientas que dispondrá la Subsecretaría de Agricultura Familiar en esta nueva etapa para darsoluciones que atiendan los problemas productivos, organizativos, de infraestructura, acceso a derechos, y de comercialización, creando así mejores condiciones de vida para los Agricultores? Frente a la diversidad de dificul-

tades a ser superadas, la Subsecretaría de AF ha priorizado como lineamientos estratégicos cuatro ejes de trabajo: la democratización del acceso a los alimentos, el valor agregado en origen, políticas de tierra, hábitat, territorio y pueblos originarios y el fortalecimiento de las organizaciones de la Agricultura Familiar. Toda nuestra estructura institucional de la Subsecretaría a nivel nacional y provincial esta en un proceso de re-organización para responder al cumplimiento de estos lineamientos que nos permitirán dar verdaderas soluciones integrales para el desarrollo rural en los territorios. En materia presupuestaria, esta nueva etapa caracterizada como de “sintonía fina” por nuestra presidenta será acompañada, según las directivas de nuestro Ministro de Agricultura Norberto Yahuar con la puesta en marcha del Programa Integral de Desarrollo Rural (PIDER) , que incorpora a todos los programas de financiamiento ya existentes; pero que además permite financiar proyectos con otros recursos que cuentan las diferentes áreas del Ministerio de Agricultura Ganadería y Pesca que pueden ser destinados a la Agricultura Familiar. Como son el PROSAP, los del

Plan Ganadero, los de las Leyes Caprina y Ovina, además de fondos provenientes de otros Ministerios. De esta manera será más eficiente y coordinada la ejecución presupuestaría. Y queremos destacar que el objetivo central del PIDER es promover el desarrollo productivo con inclusión económica, social, política y cultural de los agricultores familiares, pequeños y medianos productores y comunidades de pueblos originarios del territorio nacional, con equidad de género y generacional. Y todo ese trabajo lo tenemos que hacer en un marco de cooperación, articulación y complementación con otros actores vinculados a las políticas públicas de Desarrollo Rural

Las cooperativas agropecuarias y su lugar en nuestro tiempo n las Oficinas de la Unidad para el Cambio Rural, del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, con la presencia del Secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Ing. Lorenzo E. Basso, y ante una numerosa concurrencia de autoridades del sector y representantes de Cooperativas del país, se presentó la publicación “Las cooperativas

E

agropecuarias en la República Argentina: diagnóstico y propuestas”. El Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura y el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, presentaron esta nueva publicación sobre la situación actual y la evolución de las Cooperativas Agropecuarias en la República Argenti-

na. El trabajo fue elaborado por Edith S. de Obschatko, Especialista en Políticas del IICA, Guillermo D. Martini, Subsecretario de Agricultura Familiar, y Carlos C. Basañes, Especialista en Cooperativismo. El estudio tiene como objetivo disponer de un diagnóstico de la situación actual y evolución reciente de las cooperativas agropecuarias; identificar las transformaciones institucionales en las organizaciones cooperativas y las tendencias más destacables; y explorar posibles estrategias y políticas para el desarrollo cooperativo agropecuario en general y, en particular, para que el mismo sea una herramienta importante para promover el fortalecimiento de la agricultura familiar JULIO 2012 | TIERRA Y TRABAJO | 3


entrevista

“MARTINIANO MOLINA, MANIFIESTO DE LA TIERRA”

“Empecemos a pensar en la

sustentabilidad” El cocinero y actual conductor del programa Manifiesto de la Tierra, que se emite por

Canal Encuentro, dialogó con Tierra y Trabajo acerca de este nuevo emprendimiento.

E

n Manifiesto de la Tierra, Molina muestra cómo se cultivan diversos tipos de verduras, frutas y hortalizas en diferentes lugares del país, y rescata la importancia de relacionarse de otra forma con la tierra. En ese sentido, nos explicó su visión del tema y el por qué de llevar adelante este nuevo desafío. Una relación armónica donde los lazos que se establezcan sean solidarios. En este paso, nos muestra cómo viven, piensan y producen los agricultores familiares que visita viajando por el país. Esta misma actitud que tuviste de haber expuesto al handball y hacerlos conocer a todos o a gran parte de los argentinos, el handball masificado, es lo que hoy estás haciendo con la agricultura en pequeña escala… No creo haber sido el único responsable. Sí, haber aportado mi

4 | TIERRA Y TRABAJO | JULIO 2012

granito de arena. Creo absolutamente en la misión del hombre sobre la tierra, que la misión que a mí me convoca en el mundo o para la que fui elegido, y yo elijo ese trabajo. Sé que me pongo un poco místico, si querés llamarlo de alguna manera, pero creo en eso. En que uno tiene ciertas condiciones, ciertas herramientas o regalos que le han sido otorgados y que los puede utilizar bien. En mi caso, creo que tiene que ver con la comunicación. Con poder comunicar un montón de cosas que están sucediendo o que sucedían, y en realidad tenían poca difusión. Es como siempre decimos, si yo voy a tal fundación vienen cuatro o cinco medios, si va alguien que no conocen mucho, quizás no va nadie. Entonces, está bueno saber que vos de alguna manera tenés ese poder que te es otorgado. Si vos tenés mala onda con la prensa o la gente no entiende lo que vos

querés decir, no laburás más. Recuerdo que Casancrem habiéndole propuesto a Danone hacer una línea de orgánicos y productos naturales, con un montón de trabajo que yo venía haciendo y decía ‘mira esta gente puede hacer esto y yo apuesto dos años de mi imagen gratis, te doy para que lo hagas’, no lo hicieron. Estuve tres años y me fui. Pero no me fui a laburar a la competencia. Y dejé de ganar un montón de dinero, y ese dinero hoy lo gana otra persona. No cambiaste nada, ¿Cómo no? Yo en todas las notas digo esto y esto hace que se esté moviendo la aguja para otro lado y es también, lo mismo que vos decís acerca de la agricultura. ¿Por qué hago huertas? ¿Por qué lo vinculo a esto? ¿Y por qué no estoy trabajando en canal 13? Pero no porque sea canal 13, porque yo trabajé muchos años ahí y podría trabajar en canal 13. Por-

que en realidad canal 13 lo mira la gente: peronistas, radicales, del Pro, del FAP, no importa, yo le hablo al ser humano. Si queremos modificar algo, hay que empezar a aplicar una palabra que está muy de moda hoy, que es la sustentabilidad y tiene que ver con que cada uno de nosotros sea más sustentable en la vida. Consumir más conscientemente todo: ropa, alimentos, autos, lo que sea. No contaminar tanto, generar lo que vos consumís, alimentos, ropa -te podés tejer algo-, vas a valorar la pilcha de otra manera. Porque si vos vas a la salada a comprar y te compras 40 remeras a 10 pesos cada una, es lógico: la usás y la tirás, no la lavás. Porque es más barato tirarla que lavarla, pero vamos a ver cómo fueron hechas esas remeras, con qué material fueron confeccionadas. Cómo una remera puede valer 10 pesos, si es con algodón natural, si es con algodón que fue cuidado de una manera correcta y demás y si fue hecho por gente que no fue explotada, violentada, no puede valer nunca 10 ó 20 pesos. Entonces, empecemos a pensar sobre esa palabra tan importante que tiene que ver con la sustentabilidad. Ese es el click que debe hacer el hombre para empezar a corregir un poco y en verdad tiene que ver mucho, obviamente, con la educación. ¿Cómo es la relación del pequeño productor con el tipo famoso que viene de Buenos Aires y que habla de igual a igual? La verdad es que primero, para poder hacer todo el laburo -como todo en la vida- se parte de un proceso. A veces es lo que nombraba antes “che cómo cambió Martiniano”. Porque claro de Mariana de casa o de Cocineros Argentinos… Bueno ahí ya estaba esbozando,

La sustentabilidad tiene que ver con que cada uno de nosotros sea más sustentable en la vida. Consumir más conscientemente todo: ropa, alimentos, autos, lo que sea.”


“Con respecto al futuro quiero decir algo: yo soy un tipo terriblemente optimista, absolutamente optimista. Y el optimismo tiene que ver con reconocer las fuerzas que habitan en el hombre”.

ahí se hacía una huerta con ProHuerta y estaban chochos. Roberto Cittadini me decía ‘en serio que querés hacer la publicidad de ProHuerta sin cobrar nada’ ‘No, no quiero cobrar nada’, le manifestaba. Yo quiero armar una huerta juntos y cocinar juntos, que me ayuden a eso porque yo no la puedo mantener todos los días para aparte hacer un programa. Me encantó, entonces de venir de ese palo y ver hoy todo. Todo eso que lo venía esbozando en ese programa. Para la gente Martiniano cambió, Martiniano se volvió loco o se hizo hippie. Pero muchos, digo muchos. Antes de ayer di una charla para 40 empresarios que te puedo asegurar que todos tienen su avión privado. Y yo les hablaba de esto. Porque todos tenemos la necesidad de sumar, entonces eso fue un proceso. Para mi fue un proceso y así uno se va formando. Porque en este tipo de ámbito como es el tema de la agricultura biodinámica, la pedagogía Waldorf, donde tomas cursos, hacés seminarios, la medicina antroposófica. Conozco de medicina homeopática por trabajar, por leer, por buscar puntas, o sea el tema del arte, todo lo que tiene que ver con las terapias creativas desde lo artístico. Involucra-

do en esa movida vos te vas formando y, después cuando vayas a hablar con esta gente, vivir en un lugar así hace que la gente, ya sabe, sabe que vos no vivís en Puerto Madero, en un edificio de 10 palos, que no te interesa. Entonces cuando vos llegás hay una cosa de comunión instantánea, como de igual a igual... Es importante saberlo y está bueno poder comentarlo. Por eso cuando yo llego a estos lugares, que en muchos no hay televisión, está esta cosa de igualdad, respeto y admiración por ese trabajo. Porque yo le digo a ellos ‘a nosotros no nos corresponde ponernos acá, yo decido ir a entrevistarte, acá yo te conozco y sé lo que estás haciendo. El trabajo lo estás haciendo vos’. A mí me corresponde esto, hay que mostrarlo. Vos tenés, no yo. Podés empezarnos a enseñar a cocinar con productos autóctonos de esta América Martiniano: Sí, sí. De hecho el trabajo es cocinar con productos de la huerta y le agregamos un cereal. A lo sumo una granja que cría pollos orgánicamente de manera pequeña. Lo que venimos haciendo en nuestro trabajo. Escribo en

Si vos querés no contaminar tanto, primero tenés que empezar por tu casa. Hacé tu compost. Sacá la basura clasificada. Entonces en vez de echarle la culpa al gobierno hacelo vos primero. Y es ahí donde uno es Estado. Uno es Estado. Uno hace política todos los días.

la revista de Tarjeta Naranja, no escribo más para La Nación por una decisión personal. Las recetas son todas en esta línea, aparte de escribir cuento la historia de ese alimento y donde se compra. Hoy en muchos supermercados ya están, farmacias naturistas y eso te está diciendo algo. Te está diciendo farmacia – alimentos. El alimento es un medicamento. Esta bueno poder mostrar, es lo que vengo haciendo y por eso me van a ver menos en la televisión. En lo que me van a ver haciendo, con una línea ideológica distinta. ¿Cómo ves el futuro?

Con respecto al futuro quiero decir algo: yo soy un tipo terriblemente optimista, absolutamente optimista. Y el optimismo tiene que ver con reconocer las fuerzas que habitan en el hombre. Más allá de todo el deterioro social que veamos y la violencia. Yo creo que el hombre fue el que lo creó y no es que hay que destruir los teléfonos, no hay que destruir los teléfonos, ni los edificios hay que utilizarlos bien Ahora si hacemos un nuevo proyecto de Techint frente al río y demás, hagamos que eso no contamine que utilice detergentes biodegradables.

El futuro lo veo con mucho optimismo porque creo en el hombre y porque conozco donde voy a trabajar. Yo voy a seguir poniendo mi fuerza, sé que no voy a trabajar en un crucero, sé que no voy a trabajar con Pablo Escobar, para organismos que trabajen con la violencia. Yo sé en qué línea voy a trabajar y creo absolutamente en este bellísimo y dañado mundo nos ha dado un montón de maestros a lo largo de la historia de la humanidad y cada uno tuvo un trabajo. Madre teresa de Calcuta decía “no importa de dónde venga ese dinero sólo dénmelo y yo sé que haré con él”. Las frases tuvieron que ver con una época. El yoga fue creado hace 10.000 años por un hombre de hace 10.000 años. El hombre hoy lo puede usar para tener conciencia sobre su respiración. Por lo tanto, sobre todo lo que va a suceder con lo que haga. Después tenés que dar el otro paso que es el trabajo social. Y la madre Teresa de Calcuta decía lo del dinero y a mí si me importa de donde venga ese dinero. No estoy hablando mal de nadie, estoy agradeciendo. A nosotros nos toca elevar ese trabajo dando un paso más JULIO 2012 | TIERRA Y TRABAJO | 5


TELAM

Hubo disturbios en la protesta de los productores rurales en la Legislatura de la provincia de Buenos Aires, donde se trata el proyecto de reforma impositiva que incluye un aumento del impuesto Inmobiliario Rural.

LAS COSAS POR SU NOMBRE:

Al “pan, pan” y al “lockout patronal,

desobediencia fiscal”

En distritos donde el precio de la hectárea supera los 45 mil pesos, el valor que se toma en cuenta para determinar el Impuesto Inmobiliario Rural no supera los 1200 pesos.

6 | TIERRA Y TRABAJO | JULIO 2012

E

l aspecto central de los cambios aprobados en la legislatura provincial bonaerense para el Impuesto Inmobiliario Rural es la actualización del valor fiscal de la tierra, el monto utilizado para determinar cuánto pagarán de impuestos por las propiedades. El valor fiscal de la tierra en la provincia de Buenos Aires está congelado en niveles muy bajos desde los años noventa, cuando gobernaba Eduardo Duhalde. El revalúo que se aplicó en 1998 sólo alcanzó a las partidas urbanas, que en 2003 se extendió a los inmuebles rurales pero en forma parcial, “negociada” con las entidades del sector. En 2007 se aplicó un nuevo ajuste en las valuaciones sólo a los inmuebles urbanos, y en los años siguientes hubo varios intentos de parte del gobierno de Scioli por impulsar su extensión a la zona rural, pero una y otra vez debió ceder ante la fuerte presión de las patro-

nales ruralistas. Al respecto, la Ministra responsable de Economía de Bs.As, Silvina Batakis, recordó que el último revaluó serio de tierras fue en el año 1954, ya que uno posterior realizado en 1974 “fue incinerado” por la dictadura y remarcó que incluso los dos ingenieros agrónomos que lo hicieron figuran en las listas de desaparecidos. La subvaluación fiscal de la tierra en la provincia implica que hoy las mismas posean un valor fiscal que ronda entre el 10 y el 15 por ciento de su valor real. Esta situación convive en un escenario de valorización en el precio de los campos y un extraordinario incremento en los niveles de rentabilidad. Así, en distritos donde el precio de la hectárea supera los 45 mil pesos, el valor que se toma en cuenta para determinar el Impuesto Inmobiliario Rural no supera los 1200 pesos. Los dueños de los campos no sólo pagan me-


Muchos de los propietarios de esas tierras no “trabajan” en el campo, sino que lo alquilan y administran desde sus casas en barrios acomodados de Buenos Aires.

¿Por Entre Ríos,

ACTUALIZACIÓN DEL INMOBILIARIO RURAL EN LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES

Después de 15 días de negociaciones, el ejecutivo bonaerense realizó el revalúo del valor fiscal de las tierras por decreto y, así, permitió el debate legislativo, donde logró aprobar las distintas modificaciones al Inmobiliario Rural. Algunos manifestantes encolumnados con las cámaras patronales agropecuarias, encabezadas por el titular de Sociedad Rural, Hugo Biolcati, intentaron forzar el ingreso al recinto y arrojaron piedras a la legislatura. La Mesa Agropecuaria provincial lanzó un cese de comercialización que luego se nacionalizó, con escasa adhesión pero con mucha prensa.

nos impuestos que el dueño de un auto mediano modelo 2010, sino que las tierras más rentables y productivas pagan lo mismo que las propiedades en las zonas menos favorecidas. El aumento recientemente aprobado recae sólo sobre el 38 por ciento de las partidas, sobre un total de aproximadamente 300 mil propiedades rurales que existen en la provincia. Ese 38 por ciento (unas 115 mil partidas) son las que aportarían no sólo los 400 millones adicionales, sino lo que dejan de pagar los más pequeños (el 20 por ciento), a los cuales por la reforma se les reduce el impuesto. Consultado sobre el tema, el economista Salvador Treber, que colaboró en la elaboración del Plan Fenix afirmó que “si se quiere cobrarle impuestos a través del

a cronología del inmobiliario rural en la provincia de Entre Ríos comenzó en el año 2009 cuando la Legislatura aprobó el incremento a pagar por parte de los propietarios de las tierras rurales. En ese momento, el sector agropecuario avaló la iniciativa. La ley 9930/09 contemplaba un incremento paulatino y porcentual anual, que llegaría al ciento por ciento en el 2012. Fue sancionada el 13 de octubre de 2009, y se establecieron cuatro segmentos con un calendario de gradualidad para aplicar el aumento en las 37 zonas agro-ecológicas de la provincia, hasta llegar a un 100 por ciento en 2012, tal como indica la Ley de origen 8672. En ese entonces, la norma contempló que el aumento no se aplicaría en el caso de personas físicas que sean titulares de pequeñas parcelas. Es decir, consideró la situación de

L

cómo cómo es? es?

Inmobiliario Rural es imprescindible mantener actualizados los valores fiscales de cada unidad de tierra y cercano a su valor de mercado para que no pierda vigencia. Además defendió las retenciones, dado que según su opinión “cumplen un rol central en diferenciar el tipo de cambio, que le permiten al Estado disponer de una porción de la renta extraordinaria de la tierra y evitar que la variación en el precio de las commodities se traslade a la canasta de alimentos de las familias argentinas”. Por otra parte señaló que “la otra posibilidad para cobrarle impuestos al campo es a través del Impuesto a las Ganancias. Se puede, como propuso el profesor Dino Jarach en 1964. Eso no se debe hacer con la renta real de la tierra, sino con la renta normal potencial promedio.

los pequeños productores. La aplicación del mecanismo de segmentación se diseñó en función de la superficie de cada establecimiento. La Ley establece que las microparcelas estarán exentas del aumento del impuesto en los ejercicios fiscales de los años 2009 y 2010, mientras que en 2011 se aplicará un incremento del 50 por ciento de la diferencia que resulte de comparar los valores que surjan de la aplicación del modelo dispuesto por la Ley provincial 8672 con los valores previstos en el decreto provincial 1588/05. Así fue que llegó el año 2012 y se implementó lo acordado anteriormente por las partes. No obstante, el sector comenzó con las protestas, argumentando la imposibilidad de pagar “aumentos de hasta un 600 por ciento”. Ahora bien, cuando se argumenta que existe un aumento del

La renta real es la que se logra de acuerdo a lo que están produciendo, que lo decide el dueño o el arrendatario. Así, donde se cultiva trigo pero sería más productivo hacer cebada se calcula el valor del impuesto en función de la cebada. La otorga al estado capacidad para direccionar las producciones y que se explote más racionalmente.

Motivaciones verdaderas A los propietarios de grandes campos de la denominada zona núcleo, no les preocupará demasiado que aumente el Impuesto Inmobiliario Rural, por el que pagaban una cifra insignificante para su capacidad contributiva. En cambio, les inquieta más que la nueva valuación fiscal explicite el nivel de sus patrimonios, porque ello les subirá sensi-

600 por ciento, esa cifra se entiende como excesiva. Sin embargo, si sólo contemplamos ese número, recortaríamos la realidad. Ese 600 por ciento surge de lo establecido como cuota mínima anual por campo, que pasó de ser 35 pesos por año a 250 pesos por año. Por otro lado, el sector argumenta que la “sobrevaloración” de los evalúos fiscales “implicará la fuga de 250 millones de pesos que dejaran de ingresar este año a la economía provincial”. Creemos que la discusión es central aquí. No se trata de que ese dinero dejará de entrar a la economía, sino que ingresará por parte del Estado quien lo deberá destinar y redistribuir a todos los sectores sociales. Además hay que considerar que el impuesto provincial se calcula teniendo en cuenta los rendimientos físicos y los precios de los últimos cinco años. En ese senti-

blemente el monto imponible del impuesto a la Ganancia Mínima Presunta que pagan los inmuebles rurales, explotados o no, con una tasa del uno por ciento. Muchos de los propietarios de esas tierras no “trabajan” en el campo, sino que lo alquilan y administran desde sus casas en barrios acomodados de Buenos Aires. Seguramente no habrán estado ausentes en los cacerolazos promovidos en sus zonas de residencia. Estas manifestaciones “espontaneas” del 31 de mayo pasado -que se dieron a los 15 minutos de aprobada la reforma al Inmobiliario Rural- fueron presentadas por algunos medios televisivos, redes sociales electrónicas como “cacerolazos contra el zarpazo confiscatorio”, “la inseguridad” y la “corrupción”

do, desde el gobierno provincial afirmaron que “si al sector le va bien el valor sube, pero si al año siguiente le va mal puede bajar”. En síntesis, el impuesto grava la riqueza, es decir la propiedad de la tierra. Para hacer el cálculo se tuvo en cuenta las diferencias de rendimiento de las diversas zonas agro-ecológicas económicas de Entre Ríos, por esto se comprende que los campos que están en áreas menos productivas pagan menos por hectárea, respecto a los campos ubicados en zonas más productivas. Es a las claras, un impuesto que entiende la función social de un Estado que debe intervenir, y tributar en función de toda la sociedad, donde un sector, -de acuerdo a las condiciones económicas del sistema de producción, las políticas públicas que se implementan y la estructura del mercado internacional-, tiene grandes rentas y ganancias.

JULIO 2012 | TIERRA Y TRABAJO | 7


entrevista

EXPERIENCIAS DE FORTALECIMIENTO INSTITUCIONAL “MARTINIANO MOLINA, MANIFIESTO DE LA TIERRA”


a delegación Entre Ríos de la Subsecretaría de Agricultura Familiar, a cargo de Arturo Casalongue viene trabajando el fortalecimiento institucional de las organizaciones, comprendiendo que la participación y organización es la pieza fundamental de una sociedad democrática. En ese marco, en Colonia Federal a fines de 2007 se formó la Asociación Tierra Nuestra. “Si bien, todas las organizaciones de pequeños productores conllevan a múltiples beneficios para quienes las integran, Tierra Nuestra, se caracteriza además por su lucha en el cuidado del medio ambiente en La Colonia. Es decir, que su objetivo inicial involucra a toda la comunidad de ese territorio”, manifestó Casalongue. Tierra Nuestra se constituyó para dar respuesta a las múltiples problemáticas que enfrentan los agricultores familiares. “Fundamentalmente decidimos juntarnos por el avance del monocultivo en la zona. Lo que eso significa para el campesinado: la pérdida del monte nativo y de los recursos naturales, como la contaminación del agua con agrotóxicos, sin ningún tipo de control”, recordó Luna, al tiempo que reflexionó: “Lamentablemente, el habitante rural es absorbido por el sistema y terminamos reciclados por una Junta de Gobierno o en una villa de emergencia de algún centro urbano, con todo el cambio cultural que eso implica”. En este caso, si bien los motivos de la organización respondían a la necesidad de representación de un sector históricamente vulnerado en sus derechos, hubo un hecho puntual que desencadenó la activa participación de los vecinos y la movilización de toda una localidad. “Un día pasamos con mi señora y vimos que habían sembrado soja cerca de la escuela”, rememoró Oscar. Enseguida buscó a Pepe (José María Franco): “Algo hay que hacer”, le dijo. Luna es consciente de la rapidez de expansión del monocultivo: “Comienzan con una hectárea, y si nadie dice nada, al año siguiente son miles”. Así, comenzaron a visitar uno por uno a sus vecinos, y alertarlos de la situación. En poco tiempo, el Concejo Deliberante de Federal declaró a La Colonia, Zona de Resguardo Ambien-

L

“La Colonia”, como la conocen los vecinos se encuentra al norte de la ciudad de Federal, provincia de Entre Ríos. Son 10.000 hectáreas divididas en chacras de 33 hectáreas; fraccionadas en parcelas que no superan las 10, en las cuales viven cuatro o cinco familias. “Nosotros todos somos pequeños productores”, grita Oscar Luna, socio fundador - junto a José “Pepe” Franco- de la Asociación Tierra Nuestra.

los campesinos son conscientes de las diferentes formas jurídicas en que pueden agruparse y como éstas repercuten de una u otra forma en sus acciones y objetivos.

tal. “Cuando hablamos con el presidente del Concejo yo le pedí que nos ayudaran, porque nosotros no nos queríamos ir del campo. Al mes lo encuentro y me comenta que están investigando el tema, pero que no tenían de donde agarrarse porque no había un antecedente. Que la situación estaba muy difícil. Entonces le recordé: cuando le dije que necesitábamos ayuda, le dije de inventar algo que no existe. Así fue que hoy en Colonia Federal tenemos una ordenanza que restringe el uso de agroquímicos”, explicó Luna. “Al momento de votar la ordenanza, se hizo por unanimidad. Y esto fue muy importante porque logramos que todos los concejales, sean del partido que fueran, voten por el sí”, agregó Franco. Cabe destacar, que luego de este antecedente en numerosas localidades y ciudades de la provincia de Entre Ríos se restringieron las pulverizaciones. Colonia Federal está ubicada en el centro-norte de la provincia, allí se realizan diversos tipos de producción. Desde recuperar el monte nativo hasta fruticultura, praderas para los diferentes animales, horticultura, apicultura y artesanía, como fabricación de cuchillos. “Todo lo que se hace en La Colonia es en un marco de cuidado y de gran respeto para con el medio ambiente”, manifestó Luna. En ese sentido, la limitación que impone la ordenanza es fundamental para que la diversidad siga siendo una de las características de La Colonia. Si bien el primer gran objetivo se cumplió, la Asociación, que actualmente está integrada por 60 familias, tiene otras metas a cumplir: “Seguir trabajando por la organización y el bienestar de las familias campesinas, mejorando la calidad de vida y las condiciones de producción, y de esta manera, combatir el desarraigo con

educación, salud y mejoramiento de los caminos rurales, ya que la mayoría son de tierra”. En ese marco, se destaca la participación de Tierra Nuestra en el Foro Nacional de la Agricultura Familiar (FoNAF), en el Plan Estratégico Agroalimentario, y en el acompañamiento a un grupo de jóvenes apicultores, quienes se iniciaron en la producción de miel orgánica. Esta actividad está basada en las características especiales que se dan en el territorio por la ordenanza que prohíbe las fumigaciones con agroquímicos. Para la concreción de este proyecto la Asociación articuló con la Subsecretaría de Agricultura Familiar, el municipio, instituciones escolares, el INTA y Producción de la provincia. “En el campo, cuando los recursos son escasos y las distancias son grandes, no es fácil reunirse seguido, pero cuando es necesario lo hacemos”, advirtió Luna, dejando en claro algunas de las limitaciones que tienen las organizaciones de agricultores para organizarse y poder funcionar. No sólo con respecto a los fines sociales y políticos que se relacionan directamente con la construcción de la identidad y la continuidad en las reuniones. Sino además en el tema de la comercialización y la compra. “A veces pensamos en una cooperativa, pero nosotros somos pequeños, no podríamos sostenerla, además apostamos a la relación directa entre el productor y el consumidor”. En este sentido, los campesinos son conscientes de las diferentes formas jurídicas en que pueden agruparse y como éstas repercuten de una u otra forma en sus acciones y objetivos. Para Tierra Nuestra, la forma asociativa era la indicada pues la reivindicación de derechos y el resguardo de su identidad cultural eran los principales fines. Las motivaciones iniciales: el haber logrado la ordenanza fue un gran impulso. Hoy la situación fue cambiando, y las reuniones se fueron diluyendo. Sin embargo, el grupo de jóvenes apícolas sigue manteniendo vivos los motivos por los cuales un día los vecinos de Colonia Federal decidieron juntarse JULIO 2012 | TIERRA Y TRABAJO | 9


entrevista

ASOCIATIVISMO EN APICULTURA: FEDERACIÓN DE COOPERATIVAS APÍCOLAS (FECOAPI)

“La miel nos une”

Existe un impacto social muy alto en las cooperativas de base, relacionado al aprendizaje integrado. La federación nos permite soñar con un camino alternativo, muy distinto al tradicional, priorizando al asociado.

10 | TIERRA Y TRABAJO | JULIO 2012

Productor de la Cooperativa Apícola Sol Sampedrino, Pablo Daniel

Martínez es actualmente el Presidente de la Federación de Cooperativas Apícolas (FECOAPI). Ya son diez cooperativas apícolas integradas que buscan, en el trabajo en conjunto, superar las dificultades para ser empresas sustentables, tanto desde la compra de insumos como para la apertura de nuevas vías de comercialización.

¿Cuál es la relación de la Federación de Cooperaticas Apícolas (FECOAPI), con la Subsecretaría? Podemos decir que acompañó el proceso de formalización de un grupo de cooperativas apícolas ya existente con amplia experiencia intercooperativa desde el 1999. En San Pedro a los dieciséis días del mes de julio de dos mil diez se celebró la asamblea constitutiva dando nacimiento a esta entidad de primer grado. Más adelante, en el 2008/09 la Cooperativa Apícola Sol Sampedrino Ltda. ejecutó un proyecto llamado “La miel nos une”, financiado por el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación (MDS), que consistió en un proyecto integral donde se financió a 22 asociados con capital de trabajo, capacitación y seguimiento. El capital de trabajo en su mayoría fue material vivo cuyos proveedores fueron las cooperativas que hoy integran FECOAPI. Este proyecto marcó un antes y un después, no sólo para la cooperativa de San Pedro sino también, para el resto. A raíz de una crisis climática regional, surgió la necesidad de obtener financiamiento de emergencia para alimentar las colmenas. Es aquí, donde a través del A.D. Lisandro Dall `Occhio y Milton Sabio pudimos plantear la problemática al Coordinador Provincial de la Subsecretaría Arq. Jorge Sutil. El delegado, finalmente arbitró los medios para crear un Fondo Rotatorio, con el fin de solucionar el problema de coyuntura, pero que sirva también para un crecimiento interinstitucional que dio como

resultado la formalización de la FECOAPI. ¿Cómo impacta la organización en los productores? El impacto es directo, ya que la federación es la herramienta en la gestión. No sólo comercial, que tiene que ver con la provisión de insumos y apertura de canales de comercialización, sino que existe un impacto social muy alto en las cooperativas de base, relacionado al aprendizaje integrado. La federación nos permite soñar con un camino alternativo, muy distinto al tradicional, priorizando al asociado. ¿Qué esperan para el futuro de la relación que han establecido con la Subsecretaría? Esperamos que nos sigan acompañando cada vez más. Hoy somos un grupo de productores familiares que creemos que el cooperativismo es la herramienta alternativa superadora para crecer y desarrollarnos. No sólo económicamente, sino también social y culturalmente, necesitamos más productores que piensen junto a nosotros, que se sumen a este proyecto cooperativo. El objetivo de FECOAPI es que las cooperativas apícolas funcionen plenamente como tales. Como verdaderas empresas sociales que canalizan formalmente la producción de sus asociados, eliminando la intermediación parasitaria tradicional. La informalidad es algo que siempre caracterizó al sector beneficiando al intermediario. Hoy las cooperativas, gracias al Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca (MAGPyA) pueden ofrecer a sus asociados la formalización a través del Monotri-

Hoy somos un grupo de productores familiares que creemos que el cooperativismo es la herramienta alternativa superadora para crecer y desarrollarnos.


buto Social Agropecuario (MSA), algo que siempre se planteó desde las organizaciones y hoy se hizo realidad. En el surgimiento del cooperativismo agropecuario, eran los silos para guardar el cereal, frente a esta necesidad se constituyeron varias cooperativas agropecuarias. Hoy, en el sec-

tor apícola surge la necesidad, entre otras cosas, de contar con salas de extracción de miel. Para un apicultor, individualmente, es imposible contar con una inversión de 400.000 pesos que sólo usará dos o tres meses en el año. Hoy ya somos 10 cooperativas apícolas integradas, es-

peramos que el resto de las cooperativas apícolas del país vean en FECOAPI una entidad cooperativa para integrar y poder cumplir más fácilmente los objetivos. La Subsecretaría tiene un rol fundamental para que FECOAPI pueda llevar adelante los objetivos planteados

JULIO 2012 | TIERRA Y TRABAJO | 11


Reparando

derechos La presidenta Cristina Fernández presentó en junio de 2010 un anteproyecto de ley con el fin de regular el trabajo agrario. La iniciativa fue aprobada por el Congreso Nacional, dejando atrás el Decreto 22.248 que lleva la firma del dictador Jorge Rafael Videla. Esta nueva Ley contempla los verdaderos derechos del trabajador rural, igualando sus condiciones laborales y reconociendo el protagonismo que tuvo y tiene el sector en nuestra historia.

a situación de precariedad laboral de los trabajadores del campo no es ninguna noticia. Ha sido una constante a lo largo de toda nuestra historia. En Peones Rurales, una crónica histórica y visual

L

12 | TIERRA Y TRABAJO | JULIO 2012

desde sus orígenes a la actualidad, de Roberto García Lerena, se destaca que entre 1910 y 1930 se contabilizaron más de 3000 peones rurales muertos, miles de heridos y presos por reclamar por sus derechos.

Reclamos que tienen historia La más dramática fue la que se denominó La Patagonia Trágica. Recién con el Estatuto del Peón, durante la primera presidencia de Juan D. Perón, se definieron legal-


Nuevo estatuto del peón rural

s

mente derechos del trabajador rural, salarios dignos, mejores condiciones laborales y otras medidas de carácter social. Fue un notable avance normativo, sin embargo la última dictadura militar instauró un régimen laboral que implicó la precarización del trabajo agrario. Entre otros puntos, restringió el derecho a huelga y de convenciones colectivas de trabajo. En consecuencia, en los últimos años se ha consolidado en el sector una creciente expansión del empleo en negro, en el marco de relaciones cuasi-feudales, con prácticas laborales tercerizadas. La presidenta Cristina Fernández presentó en junio de 2010 un anteproyecto de ley con el fin de regular el trabajo agrario. La iniciativa fue aprobada por el Congreso Nacional, dejando atrás el Decreto 22.248 que lleva la firma del dictador Jorge Rafael Videla, el Ministo de Economía José Alfredo Martínez de Hoz (bisnieto del primer presidente de la Sociedad Rural Argentina) y el resto de la Junta Militar. El proyecto aprobado contiene catorce títulos y 109 artículos. Es significativo destacar, la concepción y los fundamentos inspiradores: “(...) De esta manera se busca terminar con la precarización del trabajo agrario, favorecido por la ley vigente, y que se refleja claramente en cifras, ya que más de dos tercios de los trabajadores del sector revisten la categoría de “no permanentes” y, como consecuencia de ello, se encuentran desprovistos de los más elementales derechos ya no sólo laborales sino humanos”. Es en este sentido, que la norma elaborada por el poder Ejecutivo innova y atiende una de las situaciones más dramáticas que rige la ley de la dictadura. Según esa ley existen dos tipos de trabajadores rurales: permanentes, cuando es contratado para realizar tareas normales y habituales de un establecimiento, siendo su duración por tiempo indeterminado; y no permanentes, cuando es contratado por necesidades de la explotación de carácter cíclico o estacional o por procesos temporales propios de la actividad agraria, catalogándola de la misma manera cuando la contratación es para desempeñarse en ferias y remates de hacienda. Vale decir entones, que justamente en esta categoría están incluidos los dos tercios de los trabajadores. En cambio, la norma aprobada

incluye: contrato de trabajo permanente de prestación continua, contrato de trabajo temporario y permanente de prestación discontinua. Asimismo, contempla la plena libertad sindical y los derechos colectivos de autotutela, asegura el legítimo ejercicio de derecho a huelga y habilita la concertación de convenios colectivos de trabajo. Otro de los aciertos es que el trabajador rural se regirá por la Ley de Contrato de Trabajo, mientras haya compatibilidad, y el registro de los Trabajadores Rurales (Renatre) pasará a formar parte del Ministerio de Trabajo. Así, se buscará que la actividad esté protegida como lo están las demás: salario mínimo, jornada de ocho horas, responsabilidad en casos de tercerización, preaviso e integración del mes en caso de despido, seguridad y riesgos de trabajo, un sistema preferencial de jubilación a los 57 años, y garantías específicas para la vivienda, alimentación y traslado de los trabajadores. Un poco de historia… La primera norma legal sobre el trabajo rural fue el denominado “Estatuto de los conchabadotes” del año 1942 que comprendía sólo a una categoría de los trabajadores rurales, que en la época de zafra azucarera debían trasladarse hasta los lugares de cosecha. Luego, se sanciona el 17 de octubre de 1944 el decreto 28.169, ratificado por la ley 12.921 en 1949, denominado “Estatuto del Peón Rural”. El ‘Estatuto’ tenía como temas prioritarios: la defensa del salario del peón, y la estabilidad del trabajador. Disponía además: la inembargabilidad

RENATEA EL Registro Nacional de Trabajadores y Empleadores Agrarios (Renatea) se creó a partir del nuevo régimen de trabajo agrario y depende del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación. Su principal objetivo es la jerarquización de los trabajadores agrarios a través de una mejora progresiva y sostenible en las relaciones laborales del sector. Entre las atribuciones más importantes, este Registro, es el encargado de expedir la Libreta del Trabajador Agrario, de administrar el Sistema Integral de Prestaciones por Desempleo y de fiscalizar el cumplimiento de la ley vigente, la cual tiende a evitar el desarrollo del trabajo agrario no registrado. Para hacer más efectivo el trabajo de control y de registración, se cuenta con Delegaciones y Bocas de Entrega y Recepción en todas las provincias. Para más información www.renatea.gob.ar de los salarios, el pago en moneda nacional, salarios mínimos de acuerdo a tablas anexas, descansos obligatorios, alojamiento en mínimas condiciones de higiene, buena alimentación, provisión de ropa de trabajo, asistencia médico-farmacéutica, vacaciones pagas, estabilidad laboral e imposibilidad de despido sin justa causa. En tanto, contemplaba como autoridad de aplicación el Ministerio de Trabajo y Previsión, con instancia de conciliatoria obligatoria. Como complemento de esta ley, en 1947 se sanciona la ley 13.020. Ésta reglamenta el trabajo de cosecha, en cuanto trabajador jornalizado o a destajo, fijando un mínimo inderogable, ya que sus disposiciones son de orden público. La ley 13.020 crea un organismo nacional, dentro de la órbita del Ministerio de Trabajo y Previsión, como ente paritario, la Comisión Nacional de Trabajo Agrario, y comisiones paritarias locales. Como producto de esta norma se creó la Federación Argentina de de Trabajadores Rurales (FATRE) que luego se transformó en UATRE.

Ambas leyes, es decir, el Estatuto del Peón de Campo y el de Cosecha, son derogados por la ley 22.248 del año 1980, que excluye expresamente a los trabajadores del campo de las previsiones de la Ley de Contrato de Trabajo, y prácticamente no contiene disposiciones referidas a los trabajadores transitorios o de cosecha

JULIO 2012 | TIERRA Y TRABAJO | 13


entrevista

PATRICIO GRIFFIN. 2012, AÑO INTERNACIONAL DEL COOPERATIVISMO Tierra y Trabajo entrevistó al Dr. Patricio Griffin, presidente del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES), organismo dependiente del Estado Nacional encargado de la economía solidaria en jurisdicción del Ministerio de Desarrollo Social.

La importancia de pertenecer al

movimiento cooperativista uáles son, para los Agricultores Familiares, los beneficios de ser parte del movimiento cooperativo? El cooperativismo nació de un estado de necesidad en el mercado y en la Argentina. A la gente, para satisfacer sus necesidades no le alcanzan los medios habituales del mercado, busca fórmulas de acercamiento, de acumulación de conocimiento, de acumulación de pequeños capitales, de experiencia, de acumulación de producción para lograr las escalas adecuadas para funcionar. El cooperativismo, en Argentina, nace en directa contradicción con el modelo de 1860, de los grandes terratenientes, basado en la lógica de producción para la exportación. Ese modelo a todos los Agricultores Familiares, los inquilinos, a las colonias agrícolas que van desarrollando le corta los canales de compra y de venta. El cooperativismo nace en el escenario de la sustitución de la explotación extensiva, sin valor agregado a las materias primas. Y el gran valor agregado que le pone la cooperativa agrícola cuando na-

¿C

14 | TIERRA Y TRABAJO | JULIO 2012

ció en Argentina, sobre el poder de las semillas, sobre el origen del producto, el poder sobre el tractor, la financiación de su maquinaria a través del banco, hubo todo un sistema. El movimiento cooperativo ha sabido mantenerse, y también están haciendo un esfuerzo importante de industrializar, de mantener la independencia. Hay un desafío importantísimo que es incorporar la tecnología, métodos de trabajo colectivo y es imprescindible que el pequeño productor se asocie. Es la manera de producir asociados, agregando valor con participación de todos y distribuyendo la riqueza; la cooperativa es el instrumento y bueno éste es el desafío que tenemos, en conjunto, el Estado y los productores. ¿Cuáles son a futuro los pasos a seguir para el movimiento cooperativista? Yo creo que necesitamos un mayor nivel de integración entre las políticas del Estado. Esta integración entre el Estado y la economía regional, economía familiar, ésta sociedad estratégica deber ser vi-

sualizada y comprendida también por parte de los productores para apropiarse de eso, sacarla adelante. No puede ser que exista una especie de socorro posterior al conflicto o al problema en forma permanente, tiene que haber una actitud de vanguardia del movimiento productivo, y bueno eso es un desafío que tenemos en la Argentina, entre otras cosas. Hay muchos productores que están dentro del movimiento cooperativo, pero hay otros que no, ¿Cuáles son los beneficios que ellos pueden lograr al trabajar en conjunto y formar una Cooperativa? El movimiento cooperativo ha logrado un nivel de madurez suficiente como para que la gran cooperativa esté dispuesta, abierta a ayudar a las pequeñas cooperativas, trabajar en conjunto aprovechando determinadas escalas, infraestructura, logística que tenemos en todo el país y no son incompatibles. Son perfectamente compatibles porque a partir de la filosofía que tiene desde su origen el cooperativismo, ésta

equiparación de los iguales se hace precisamente porque no se vota en función del capital sino que se vota en función de cada persona que participa. Sinceramente creo que los Agricultores Familiares están muy acostumbrados a arreglarse solos y es el salto que hay que dar. Hay dos palabras que por ahí no se pueden relacionar mucho; una es competitividad y la otra es inclusión social. ¿Puede haber competitividad con inclusión social? No hay posibilidades de un modelo de desarrollo en Argentina si el cooperativismo no tiene una participación protagónica que todavía le falta. No hay proyecto inclusivo en la Argentina sin movimiento cooperativo y mutual consolidado, economía social consolidada ¿Por qué ese tema? Porque los otros modelos de inclusión, los ejemplos de modelos inclusivos en el mundo como las políticas del Banco Mundial, lo que plantean es una visión de carácter asistencial. Pero eso no te resuelve el problema desde la perspectiva de la produc-

ción competitiva, eso es lo que hace la cooperativa. Es perfectamente posible garantizar el desarrollo local en las regiones, en cada localidad, en cada pueblo; industrialización, participación y por eso mismo desarrollan demanda, mano de obra. Entonces, sino hay un crecimiento importante en la economía solidaria en la Argentina no va a haber desarrollo inclusivo. ¿Cuál es el mensaje que se le puede dejar al movimiento Cooperativista desde el INAES? Creo que hay que crecer, hay que asumir más responsabilidades. El Estado tiene que mejorar su capacidad de llegada, de presencia en la sociedad, pero que también la sociedad tiene que exigir protagonismo, asumir responsabilidades. El cooperativismo justamente es eso: garantizar que las personas ejerzan responsabilidades comunes colectivas, responsabilidades sociales, solidarias desde su propia localidad, ciudad. No hay que quedarse a la vera del camino mirando. Hay que caminar y hacer, ser protagonista


La Verdecita

GRANJA AGROECOLÓGICA

En el año 2001, los argentinos nos vimos sumergidos en una de las peores crisis históricas del país. A partir de esto, un grupo de mujeres se conformaron, como tantos otros colectivos sociales, asumiendo nuevas formas de organización, desde la horizontalidad y la autogestión, articulando con mujeres de distintos barrios y zonas periurbanas de la ciudad de Santa Fe.

estas mujeres las unió, en principio, la situación de hambre que había golpeado tan dramáticamente en los hogares de muchas familias. Y se esperanzaron en adueñarse del trabajo y del alimento que se propusieron generar. Fue así que “La Verdecita” nació como una granja Agroecológica, cuyo nombre hace referencia al paisaje de la zona y al color de la Esperanza. A raíz del desmedido avance de la soja no sólo se vio afectada la producción de alimentos, sino la expulsión a la ciudad de los pequeños productores hortícolas que trabajaban dignamente esa tierra. Ese contexto desalentador hizo que esas personas se

A

Organizarse es poder juntos sumen a La Verdecita originando un nuevo espacio de diálogo, al que denominaron Consorcio. La Delegación Santa Fe de la Subsecretaría de Agricultura Familiar de la Nación (SsAF), viene fortaleciendo ese espacio con capacitaciones, asistencia técnica y financiamiento. Claudio Tessini, delegado en Santa Fe de la Subsecretaría de Agricultura Familiar dependiente del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación manifestó al respecto: “Las organizaciones son el espacio del sector de la agricultura familiar dondem a partir de la reflexión y el debatem se construyen la ideas que sustentan y nutren las propuestas para la formulación de

políticas públicas que vuelven al sector. La Verdecita es una organización generadora de propuestas necesarias para nuestro trabajo como institución del Estado Nacional”.

La Verdecita en acción… Está ubicada al norte de la ciudad de Santa Fe, en el medio de lo que fuera uno de los más ricos cinturones hortícolas del país. Allí en la granja, a lo largo de estos años, se fueron generando una diversidad de espacios donde todos confluyen en una misma visión: la lucha por la soberanía alimentaria, la producción a pequeña escala, el estudio y la utilización de energías que no destruyen el medio ambiente. En el 2010 dieron comienzo a un sueño:

La Escuela Vocacional Agroecológica (EVA) como una práctica de poder, de libertad. EVA surge de la articulación y el trabajo de La Verdecita junto a la SsAF. “El proyecto EVA -según Isabel “Chabela” Zanutigh una de las integrantes de la Granja Agroecológica La Verdecita- tuvo razones fuertes que motivaron impulsar la escuela EVA en el inicio del año del Bicentenario. Los contenidos que se desarrollaron dentro de la Escuela durante dos años, tuvieron como eje: Enfrentar el sistema depredador y conservador de los agronegocios, impulsando una nueva matriz basada en la agroecología para reconstruir la pequeña producción que garantice alimentos sanos, seguros y soberanos fomen-

tando y fortaleciendo el desarrollo local.” Se proyecta para este año un trabajo conjunto con la Subsecretaría de Agricultura Familiar de la Nación y los Promotores Agroecológicos de la E.V.A., para llevar adelante un relevamiento del cordón hortícola, de las familias quinteras y sus condiciones de producción y hábitat con el fin de lograr una real visibilización del sector, como base necesaria para una apropiada política pública de fortalecimiento y diversificación de la pequeña producción frutihortícola CONTACTOS

laverdecita@gmail.com la_verdecita@yahoo.com.

JULIO 2012 | TIERRA Y TRABAJO | 15


entrevista

INGENIERO JOSÉ CABRAL

Biofábrica:

un recurso estratégico para el desarrollo

Los productos de la Biofábrica están a disposición de los productores a través de sus cooperativas y asociaciones.

16 | TIERRA Y TRABAJO | JULIO 2012

Dentro de las producciones agropecuarias, la genética y las biotecnologías determinan gran parte de los ciclos productivos y los rendimientos. En esas propiedades reside el carácter estratégico de este desarrollo tecnológico. Sin embargo, estos recursos muchas veces se encuentran en manos de unas pocas empresas trasnacionales para las cuales las variedades a ser desarrolladas responden a una lógica comercial, y no a un plan estratégico nacional. Estas empresas sólo buscan dar respuesta a los sectores que pueden adquirir sus productos al interior de la Pampa Húmeda, con producciones como el maíz y la soja, porque no se busca que se industrialicen otros productos en origen. ocas veces, el acceso a las tecnologías es visto como estratégico para el sector de la Agricultura Familiar o de pequeños productores. Por ello es clave que el Estado, en su rol planificador, genere procesos de desarrollo de herramientas biotecnológicas a las que todos puedan acceder. En este sentido, un ejemplo de lo expuesto es la Biofábrica de Misiones como emprendimiento dedicado a la investigación, al desarrollo, producción y comercialización de productos y servicios a base de procesos biotecnológicos. Esta iniciativa es parte de un proyecto en el cual participan el gobierno provincial, el

E

INTA y la Universidad Nacional de Misiones (UNaM), la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE) y cuenta con el apoyo de la Universidad Nacional Marta Abreu de las Villas (Cuba). Los productos de la Biofábrica están a disposición de los productores a través de sus cooperativas y asociaciones. La Biofábrica, única en su tipo en la Argentina, parte de considerar al conocimiento como un recurso estratégico para el desarrollo de las regiones extra pampeanas. En este sentido, dialogamos con el ingeniero José Cabral, gerente del emprendimiento para conocer más sobre esta experiencia.

¿Cómo surge la experiencia de la Biofábrica en Misiones? Creo que la base de la creación de la Biofábrica como decisión estratégica está en cómo este tipo de tecnologías (las biotecnologías) pueden ponerse a disposición de los pequeños productores, de la familia agrícola y hacer que la brecha tecnológica se disminuya. Lo que nosotros venimos a aportar, lo que el Estado trató de hacer con esto, es intentar resolver la calidad de la materia prima. Por eso, es importante recuperar cómo surge esta experiencia ya que se trata de la producción de insumos biológicos (plantas) para la agricultura.

Insumos que contribuyen a mejorar la calidad de los productos primarios y que en algunos casos, reemplazan actividades como puede ser el uso de algunos químicos. Misiones tiene un perfil de pequeños productores muy importante, característico a nivel nacional. Lo que ocurre en los agronegocios, por llamarlo así, es que las empresas pueden invertir y acceder a tecnologías que mejoran su producción. Ahí se genera un diferencial con la situación de muchos productores. Por ello, insisto en que la decisión estratégica tuvo que ver con poder acercar y facilitar las tecnologías “bio” a los pe-


Nota publicada originalmente en la revista Amanecer Agrario N° 1, publicación de la Delegación Misiones de la SsAF.

queños productores. ¿Por qué? Porque hay una necesidad, desde el Estado, de apoyar la investigación, de hacer que se pueda agregar valor desde los recursos naturales locales, algo que viene asociado a su vez con el conocimiento local que se recupera. Esto requiere de un trabajo en cuanto a compromiso, constancia y por supuesto, también un importante acompañamiento de recursos. Hay mucho por hacer, como que los científicos, los profesionales, que en su mayoría se han formado en universidades públicas, puedan recuperar el compromiso social porque no se puede ser indiferente a tanta desigualdad. ¿Cómo acceden los productores a los productos de la Biofábrica? La transferencia la hemos hecho siempre a través de asociaciones de productores o cooperativas agrícolas que son las que cuentan con acceso a un técnico que acompañe el manejo de los cultivos. Por ejemplo, el caso de la banana es interesante porque crece tan rápido que los productores le han encontrado la vuelta entre las heladas. Es decir, plantar antes de la última helada del año y cosechar antes de la primera. Entonces, es una planta que puede resolver eso sin ninguna otra tecnología de tipo bajo cubierta, riego o alguna otra cosa. En el caso de la caña de azúcar, nuestros ensayos, con el manejo que hace un productor, ya da una duplicación en los rendimientos. O sea, con la tecnología del productor más la calidad de planta que se ha entregado, se ha

¿Qué se hace en el laboratorio? En el laboratorio se realiza la propagación masiva de plantas de calidad para que en un breve plazo de tiempo los productores puedan acceder a ellas. El proceso del laboratorio es parecido a lo que el colono hace con la caña de azúcar o con la mandioca al partir la rama y enterrarla. Sólo que el rendimiento es limitado ya que de una rama se pueden lograr alrededor de 10 plantas. En el laboratorio los rendimientos se multiplican por miles.

Cuba La Universidad Central Marta Abreu de Las Villas es una de las universidades más importantes de Cuba. Su reconocimiento y prestigio se deben al desarrollo y aplicación de la biotecnología en relación con el manejo de vegetales para la producción de alimentos y la industria farmacológica. La iniciativa de la Biofábrica de Misiones está en estrecha relación con la experiencia cubana donde profesionales argentinos fueron capacitados para el desarrollo del proyecto local.

duplicado la base o el promedio de los rendimientos. Por ello, en relación con la agricultura familiar, nosotros trabajamos con una serie de variedades de especies. Es decir, que el productor pueda contar con alternativas de producción de calidad a las cuales puede acceder a través de su asociación de productores o de sus cooperativas. Para ello, el gobierno tiene líneas de financiamiento promocionales. Estos cuatro años anteriores hemos estado transfiriendo plantas a través de los propios planes que el gobierno financiaba, es decir que al productor le llegaban sin costo. En relación al conocimiento como recurso estratégico, ¿cuál es el rol del Estado? Sobre todo teniendo en cuenta que esta experiencia conjuga el desarrollo técnico con una visión política… A veces entre lo técnico y lo político no se logra sintetizar una idea sencilla, que se entienda. Para mí particularmente, que fue un desafío personal y profesional formar parte del equipo que dirigió este proyecto; estaba claro que el rol del Estado en las instituciones que participan, era hacer que todo ese segmento más vulnerable pueda acceder a una tecnología que si no era por ahí, no lo iba a poder hacer. Sin querer ser dirigista desde un Estado que está presente en todo, creo que tenemos que tener un Estado inteligente, que pueda meterse en las cosas estratégi-

cas, administrar los recursos. Por ejemplo, haber definido la ley de presupuestos mínimos para bosques nativos, para Misiones, resulta muy importante. Y esto no sólo implica la protección del recurso. Por ejemplo en la industria maderera, si el productor no puede acceder a tecnología, cómo va a pensar en un manejo sustentable de los bosques, si lo usamos para leña o para hacer tablas y el resto del valor agregado lo damos en otro lado. Entonces, esta política desde el 2003 a la fecha, de “vivir con lo nuestro”, plantea el desafío de transformar lo nuestro en valor agregado. Y en eso pensar cómo desarrollar las regiones. Por eso siempre digo que es importante la conciencia política de estas cosas. Muchas veces nos dicen que no podemos desarrollar energía nuclear o que no podemos hacer transgénicos. ¿Por qué? Porque somos muy subdesarrollados para poder manejarlos. Los cubanos, por ejemplo, tienen transgénicos y tuvieron que hacerlo porque varios cultivos tenían un hongo que afectaba la producción. Así, desarrollaron su estrategia de “independización” a través del conocimiento, un conocimiento socializado. Entonces, es necesario socializar el conocimiento. Si uno logra un paquete de tecnología, y sobre todo si es en una institución pública, no se puede no socializar

Maíz, caña de azúcar, yerba, banana, ananá, stevia, orquídeas y tabaco son algunas de las especies desarrolladas por la Biofábrica para que el productor encuentre alternativas de producción de calidad.

JULIO 2012 | TIERRA Y TRABAJO | 17


debate

DISCUTIENDO UN NUEVA LEY DE ARRENDAMIENTOS

Debate sobre la nueva Ley de Arrendamientos que se discute en el país. Repasamos las legislaciones existentes en nuestra historia y recolectamos opiniones, buscando apuntalar el análisis de una ley muy importante para regular la tenencia y la producción de las tierras argentinas.

ue en Chacabuco, en la provincia de Buenos Aires, en agosto de 2010, cuando la presidenta señaló: “Vamos a trabajar en una ley de arrendamiento que proteja los intereses de los que trabajan la tierra y no a aquellos que están sentados esperando cobrar una renta”. Cuáles son las necesidades por la que hace falta hoy ajustar la legislación, podríamos

F

Datos de nuestra historia Cronología de la ley El régimen legal sobre Arrendamien-

tos Rurales se consolida en 1921 con la sanción de la Ley 11.170 que avanza en cuatro aspectos: 1. Asegurar estabilidad. 2. Indemnizar por las mejoras introducidas por el arrendatario. 3. Establecer la inembargabilidad de los instrumentos y animales de trabajo. 18 | TIERRA Y TRABAJO | JULIO 2012

preguntarnos: la necesidad de responder a la nueva realidad, a un nuevo momento en cuanto a lo que se espera que sea hoy y para el futuro, el campo argentino. Para que los poderes económicos extranjeros y los nacionales que no están dispuestos a ser parte de un plan nacional, sepan que tampoco pueden hacer lo que quieran con nuestras tierras. Porque tanto el país, como la región y el mun-

4. Dar la libertad de contratar, comerciar y vender sus productos. En Marzo de 1942 se crea la División

de Arrendamientos y Aparcerías Rurales en la órbita del Ministerio de Agricultura. Esta División debía entender en los problemas ligados al desalojo de colonos provocado por la transferencia de las explotaciones rurales de agrícolas en ganaderas y la extensión de la desocupación en el ámbito rural. La Ley 13.246 se sancionó, durante

do, necesitan sus tierras para producir alimentos sanos y de calidad que nos permitan llegar a la justicia de que nadie se quede sin alimentarse dignamente. El nuevo proyecto de ley busca equilibrar la balanza entre los productores pequeños, medianos y grandes, y también que al no ser tanto negocio el alquiler de los campos, los productores -que dejaron de serlo pero que

el primer gobierno de Juan Perón, el 8 de septiembre de 1948, creando el Consejo Agrario Nacional. Entre sus aspectos más sobresalientes encontramos que: Tipificó las figuras contractuales que

tienen igual función económica.

Consolidó una colaboración armónica

entre el capital y el trabajo en cuanto revisten una función instrumental para la realización de la empresa agraria, procurando al empresario el disfrute del fundo con fines productivos.

aún conservan la propiedad de la tierra-, tengan posibilidades de volver a producir.

Recuperando conocimientos y derechos Quizás la ley que más se refleja, en un escenario similar al actual, sea la Ley 13.246, sancionada el 8 de septiembre de 1948. Norma que tuvo como objetivo establecer una normalización contractual que tutelara al arren-

En octubre de 1980 la Dictadura Militar modificó la Ley 13.246 por la Ley 22.298, que actualmente rige.

Consecuencias sobre productores y propietarios Entre 1988 y 2002, el número total de empresas agropecuarias del país se redujo en un 21 por ciento, con el correspondiente aumento del 23 por ciento en la superficie media de éstas. Estos cambios fueron aún más notables en las provincias pampeanas,

donde los aumentos de tamaño oscilan (según las provincias) en 30 y 40 por ciento. La producción en campos arrendados está en el orden del 50 al 70 por ciento, según las provincias. En el año 2003 estaban hipotecadas

por el Banco Nación el 50 por ciento de las tierras hipotecadas en el país y el Estado Nacional decidió licuar esas deudas, como una forma de invertir y ayudar al sector a recuperarse.

Ley 22.298


8

El Ejecutivo Nacional busca analizar o reemplazar dicha ley, que incluya la integridad, el balance orgánico y la mejora de los nutrientes.”

datario (productor rural) frente al arrendador (terratenientes) usualmente propietario de grandes extensiones territoriales. Basada en la necesidad de tutelar la producción y en la protección del productor agropecuario, haciendo hincapié en los aspectos técnicos, económicos y sociales de la explotación. Entre las décadas de 1960 y 70 comenzó la transformación de arrendatario en contratista. Este proceso se profundiza en los años noventa frente al cambio del productor por la empresa agropecuaria, alterándose sensiblemente la estructura de poder entre el arrendador y arrendatario, en perjuicio de aquellos que eran dueños de las tierras pero no las podían seguir produciendo. Los cambios operados por la Dictadura Militar en la Ley 22.298 apuntaron a minimizar la participación oficial y dieron mayor trascendencia a los acuerdos entre partes, eliminando la participación del Ministerio de Agricultura en su intervención frente a los problemas de explotación irracional del suelo (Artículo 8). En general, los contratos se insertan en el proceso de sojización del sector agrícola. Beneficiando a las grandes empresas agrícolas que cultivan, en forma simultánea, predios arrendados en diferentes regiones del país. Es claro que el arrendatario actual no es el mismo de la Ley de 1948: hoy hay grandes grupos capitalistas que arriendan miles de hectáreas de campo y también están pidiendo que los contratos se hagan a más largo plazo y menor precio. Y, además, la actual modalidad de arrendamiento no garantiza la rotación de cultivos y hace que producciones regionales se vayan perdiendo ante el avance de monocultivos.

La prioridad de conservar los recursos Uno de los problemas a resolver

1980 está referido a la necesidad de instrumentar efectivamente un uso racional del suelo y garantizar la preservación del ambiente. La acción pública debe ser preventiva. Esto implica establecer condiciones técnicas por zona y por cultivo monitoreadas por el Estado. Argentina cuenta con una normativa que tiene como título Ley de Fomento a la Conservación de los Suelos, reglamentada por el Gobierno militar en 1981. La norma impulsa la promoción de la conservación de los suelos mediante aportes económicos compartidos con los productores a través de las buenas prácticas agrícolas, y es supervisada por las provincias para su aplicación. Desde ese punto de vista, el Ejecutivo Nacional busca analizar o reemplazar dicha ley, que incluya la integridad, el balance orgánico y la mejora de los nutrientes. El uso racional de los suelos, -y cuando decimos suelos hablamos de la tierra y también de las aguas-, es una de los debates necesarios en torno a éste proyecto que pretende regular de maneras más favorables para la producción de alimentos el alquiler de las tierras productivas. También podemos unir a estos proyectos la Ley de Presupuestos Mínimos para la Protección del Bosque Nativo, que busca preservar los bosques que aún quedan en nuestro país. Y también acompañar la regulación y la protección en las fronteras de los bosques y las zonas productivas, un fenómeno que se conoce como “corrimiento de la frontera agropecuaria”. La búsqueda de una nueva legislación se fue consolidando con los años y con la evidencia de que con el modelo actual hace una gran diferencia para los que más tierra poseen. Mientras los únicos que siguen ganando son los grupos empresarios que pue-

den darle el lujo invertir en muchos campos de distintas provincias o regiones, porque les puede ir mal en alguna pero no en todas, al mismo tiempo. Contra la concentración de las tierras y de la producción en pocas manos o empresas; y también para que vuelvan muchos productores al campo, está haciendo falta una nueva Ley. Una norma que emerja de éste nue-

vo momento histórico que busca construir la nueva ruralidad. Equilibrando y regulando los contratos, para que el crecimiento sea con inclusión de nuevos actores, con la recuperación de productores que hace años dejaron de hacerlo, con nuevos puestos de trabajo y con el cuidado prioritario de los recursos naturales que no son renovables

fue el año en que la Dictadura Militar modificó la Ley 13.246 por la Ley 22.298, que actualmente rige.

¿Qué actores participan en los contratos?

Por un lado, el dueño de la tierra,

al que se llama “Arrendador”. Y, por el otro, los productores que la alquilan, que son los “Arrendatarios”.

¿Quién regula ese contrato? Antes había una especie de paritarias en donde se discutía el valor del alquiler y los pagos se hacían en dinero. Y el Estado favorecía a los productores, porque los grandes eran los dueños de las tierras. Con la Ley 22.298 dejó de intervenir el Estado y los contratos se hicieron directamente entre las partes. Además, se empezó a pagar con la producción, o parte en dinero y parte en producción. Actualmente el precio se rige en quintales de Soja. Con la nueva Ley también se tendrá que crear un nuevo registro en donde queden asentados esos contratos y que el estado pueda supervisar que se cumplan.

JULIO 2012 | TIERRA Y TRABAJO | 19


debate DISCUTIENDO UNA NUEVA LEY DE ARRENDAMIENTOS

Fragmentos de los aportes de la Federación Argentina de la Ingeniería Agronómica (FADIA) “La Resolución 1002/04 del Ministerio de Educación de la Nación declara de interés público la carrera de Agronomía en lo atinente a la Conservación de los Recursos Naturales y la Calidad Agroalimentaria. En base a ello, consideramos que la participación de los Ingenieros Agrónomos en los proyectos de modificación y/o de Ley referidos a Arrendamientos y/o Sustentabilidad de la producción y/o Diversificación de la misma debe ser considerada prioritaria”. “En el nivel de conocimientos actuales y avance de las tecnologías, a la par de las crecientes responsabilidades sociales de los Propietarios y/o Arrendatarios frente a la Sociedad y a las Generaciones futuras, consideramos inapropiado seguir apostando al “libre albedrío” para decidir qué secuencia de cultivos o actividades son las apropiadas para asegurar un manejo Sustentable del recurso suelo, principalmente por las implicancias de ello sobre el Ambiente y para las generaciones futuras. Consideramos también que es importante la participación de los Ingenieros Agrónomos en la aplicación de estas leyes a través de un somero informe profesional sobre la situación de un predio antes y al finalizar el contrato de arrendamiento (verificando la fertilidad físico – química y problemas de anegabilidad o drenaje existente) con la finalidad que el arrendatario remedie aquellos pro-

20 | TIERRA Y TRABAJO | JULIO 2012

blemas que haya generado durante su responsabilidad. Además, la certificación de las rotaciones previstas en los contratos y los criterios de manejo de una producción sustentable”. “En algunos proyectos se menciona

la posibilidad de otorgamiento de créditos para mejoras y/o diversificación de la producción y que ello trae aparejado la utilización de conocimientos que escapan a los del común de los productores. Consideramos que dicho Informe debería formar parte, del Contrato de Arrendamiento como Anexo, e inscribirse en el registro que se establezca; y ser considerado en cualquier solicitud de Crédito ante entidad bancaria”. Fuentes consultadas: “Una nueva ley de arrendamientos”. Susana García. Diputada Nacional por Santa Fe (CC-ARI), en www.agroparlamento.com. “El papel de los contratos de arrendamiento”. Daniel Lema, Investigador del Instituto de Economía y Sociología, INTA. Manifiesto de Paraná 2004 elaborado por César Quinteros, Graciela Boschetti y Eduardo Díaz, miembros de la Comisión Organizadora del XIX Congreso Argentino de la Ciencia del Suelo, Paraná, Agosto 2004.

Entrevista al Secretario de Agricultura de Producción Familiar de Córdoba, Ruperto Goñi

“Hay que volver al campo” s ingeniero agrónomo y viene de una familia de productores de Laboulaye, localidad ubicada al sur de la provincia de Córdoba. Actualmente, del campo se encargan sus hijos. Ruperto Goñi se desempeña dentro del Ministerio de Agricultura de Córdoba, después de haber sido legislador y varias veces Intendente de su pueblo.

E

¿Podemos comenzar haciendo un breve contexto de la importancia de discutir la Ley de Arrendamientos en ésta época? Con la Ley 13246 más la creación del Consejo Agrario Nacional permitió que 95 mil arrendatarios pudieran hacerse propietarios de sus tierras. Todos eran pequeños y medianos productores con chacras prósperas que fueron crecimiento y desarrollo a los pueblos que estaban cerca. Con las políticas neoliberales, con la desaparición de la Junta Nacional de Granos, de la Junta Nacional de Carnes, con el retiro del Estado de las políticas de regulación de la producción y el mercado, desaparecieron en nuestro país más de 200 mil productores desde la dictadura hasta nuestros días. Hasta el año 2003 cuando estaban hipotecadas por el Banco Nación el 50 por ciento de las tierras hipotecadas en nuestro país. Y fue desde la llegada a la presidencia de Néstor Kirchner, que no se ha rematado uno sólo de esos campos en Argentina. Es cierto que el país a perdido muchísimos productores. Pero no todos esos productores han perdido la propiedad de la tierra. Entonces, al tener la propiedad de la tierra, es acá donde yo planteo que hay que volver al campo. ¿Para qué hay que volver al campo según usted? ¿Qué condiciones cambiaron? ¿Qué se puede producir? Yo creo que estamos en un momento en donde se puede hacer producción intensiva, incluso sin mucho campo. Hoy los tambos se pueden hacer con encierro, que no necesitan mucho espacio. Lo mismo se puede hacer con la producción de cerdos, de corderos, de terneros, que no necesitan mucho lugar. Entonces, nosotros estamos proponiendo volver al campo con alguna actividad productiva que tenga que ver con la producción de alimentos. Porque, esto que se ha vivido en otras épocas, en donde convenía alquilar el campo, llega un momento en donde los alquileres van a bajar. Entonces el nivel de vida que tiene hoy la persona que alquila su campo, no lo va a poner seguir sosteniendo igual. Puede llegar a endeudarse y lo puede llegar a perder al campo; o lo termina

vendiendo apurado y mal pago. Por eso nosotros insistimos en generar una actividad productiva de pequeñas y medianas empresas familiares que,en forma asociativa, pueden llegar a tener una escala que lo va hacer más simple y, también, más fructífera a su empresa. Y para esto, hace falta una nueva Ley de Arrendamiento. El proyecto que presenta la Federación Agraria Argentina (FAA) propone generar estímulos para los productores que tengan la voluntad de ir haciendo los contratos por más tiempo, con un mínimo de 5 años; y como algo fundamental, poner un límite a las extensiones que haga cada empresa. Ese límite se está planteando como 10 unidades económicas, que serían entre 1500 y 2000 Hectáreas como tope. Pensemos que hoy, hay pooles de siembra o fideicomisos que tienen 100 mil hectáreas. Y eso no es crecimiento, no genera desarrollo en los pueblos, no genera nada. Realmente asfixian a los pequeños productores que quieren extenderse o que están capacitados y no encuentran tierras. Entonces es necesaria una nueva Ley de Arrendamientos para frenar la concentración productiva. Así como hablamos de la concentración que existe en la tenencia de la tierra, también existe una concentración de la producción en pocas manos y con la desaparición de los pequeños productores. Entonces, hay que volver a regular desde el Estado para permitir el crecimiento y la generación de nuevos pequeños productores. ¿Existen condiciones en nuestro país para dar esta discusión? Hace falta la voluntad de los auténticos productores, de los pequeños y medianos productores. Porque por más que el Estado quiera regular y brindar los derechos hace falta el sustento social en esta pelea, porque siempre están los liberales que dicen que el mercado se tiene que encargar de regular la oferta y la demanda para que se ubiquen en su justo equilibrio, entonces el mercado tiene que regular los contratos. Y eso no es verdad. Porque el valor de la tierra ha crecido 10 veces más que el valor de la producción, porque claramente hay una cuestión especulativa con el valor de las tierras. Son los inversores los que buscan a la tierra como refugio para sus negocios especulativos. Y eso al país no le sirve. Lo que hace falta son los verdaderos productores. Pero los productores tienen que organizarse y pelear. Por eso me preocupa que la FAA, muy abrazada a la Sociedad Rural Argentina (SRA), nunca va a tener la bandera, como la tuvo históricamente, de defender a los arrendatarios.


entrevista

MIGUEL FERNÁNDEZ

Foro de Organizaciones de la Agricultura Familiar y el fortalecimiento institucional Tierra y Trabajo dialogó con Miguel Fernández, uno de los responsables de la Unidad de Coordinación Foro de Organizaciones de la Agricultura Familiar (FoNAF). El productor sanjuanino nos dio su visión sobre el fortalecimiento institucional, la organización de los agricultores/as familiares, el proyecto nacional que encara la Presidenta y la reciente sanción de la ley que limita la extranjerización de la tierra.

“¿Qué necesitamos para fortalecernos? Que nos abran la puerta para comercializar, que nos ayuden para tener las herramientas adecuadas. Pero no estamos pidiendo gratis, no estamos pidiendo subsidio. Nosotros como trabajadores y humildes que somos, necesitamos devolver porque estamos acostumbrados a vivir dignamente y sin deber un mango a nadie” nos dice Miguel Fernández desde su rincón, en la zona noroeste de Cuyo. Fernández explicó cómo funciona el fortalecimiento institucional entre los productores organizados y la Subsecretaría. “En cada provincia se dictan cursos desde el año 2008 en adelante, cursos de capacitación de dirigentes y esto ayuda a que se fortalezcan las instituciones”. “Hay dirigentes que venimos de muchos años. De estar en el ostracismo, nadie nos reconoció jamás, ni nos dieron oportunidad de poder participar. Ahora, desde este Gobierno, que nos puso las herramien-

tas en la mano o en la mesa para que empecemos a trabajar, somos nosotros los “decidores” de las políticas públicas que necesitamos para el sector”, manifestó Fernández comprendiendo la oportunidad que ofrece el Gobierno nacional al abrir el diálogo y darle la palabra a los protagonistas. En ese sentido, también recordó la construcción del Foro: “La subsecretaría aparece por una demanda de este sector o es la consecuencia de la creación del Foro de la Agricultura Familiar. Entonces, para nosotros es como una herramienta y ahí con los técnicos, con toda la gente se está fortaleciendo las instituciones. Eso nos viene bien porque, en principio, los dirigentes que no hemos tenido la oportunidad de participar, hoy, con estas capacitaciones estamos logrando poder captar más dirigentes y que todos tengan, -no digo la misma-, pero si la visión de trabajar por el sector. Sin estar mirando que todas las veces tenemos que estar dirigiendo o que alguien nos tiene que estar llevando de la mano de las cosas que podamos hacer o diciéndonos qué tenemos que hacer”. Por otro lado, Fernández brindó su opinión sobre el fortalecimiento de los productores: “Para nosotros fortalecernos como productores sería primero lo que te dije: tener acceso al crédito. Fortalecernos como productores sería que el Gobierno Nacional o los Gobiernos Provinciales nos permitan vender las producciones donde estamos nosotros. Porque lamentablemente están las grandes

corporaciones que están vendiendo. Un ejemplo claro: el yogurth se vende desde empresas grandes y en cada escuela o en cada rincón del país le dan la copa de leche a los chicos, le dan postre, le dan la comida. ¿Quiénes venden eso? Las grandes cadenas de supermercados, los productores grandes. Entonces, nosotros queremos ahí poner nuestras producciones, agregándole valor y tener la puerta abierta para que comercialicemos nuestros productos. Eso sería fortalecernos como productores y que podamos tener para vender en nuestros propios pueblos lo que producimos, eso nos va a ayudar muchísimo. Entonces qué necesitamos para esto, para fortalecer, que nos abran la puerta para comercializar, que nos ayuden para tener las herramientas adecuadas. Pero no estamos pidiendo gratis, no estamos pidiendo subsidio. Nosotros como trabajadores y humildes que somos necesitamos devolver porque estamos acostumbrados a vivir dignamente y sin deber un mango a nadie”. Miguel Fernández también compartió su opinión y la del FoNAF frente al proyecto político que dirige la presidenta de la Nación, la Dra. Cristina Fernández de Kirchner. “En plenario que hemos tenido el 11 de octubre de 2011, en Parque Norte, en la Ciudad de Buenos Aires, elaboramos un documento que esperemos haya llegado a la Presidenta, diciéndole quiénes somos los Agricultores Familiares, y qué pretendemos para continuar con ésta política apoyando el modelo que se está teniendo de gobierno del país. ¿Qué es lo pretendemos? Que nos tengan en cuenta, que seamos visibles, que también somos los que vamos a llegar al Congreso en algún momento. Que a nadie se

le cruce por la cabeza que no podemos llegar. Vamos a llegar y vamos a ser nosotros también partícipes de las cosas que tiene que llegar a los campesinos, van a llegar como corresponde. No es amenaza, es decir para dónde estamos trabajando, por qué queremos instalar que nosotros, los de abajo, también llegaremos algún día adonde tenemos que llegar”. Por último, el productor sanjuanino se refirió a la puesta en práctica de la ley contra la extranjerización de la tierra. “Yo puedo decir a nivel personal, como grupo un análisis claro todavía no tenemos. Porque no tenemos mucha difusión y hasta que no veamos la regulación y todo eso tenemos muchísimas dudas. Una cosa que se habla de la extranjerización, de la compra, otra cosa sería hablar de la concentración. Porque también hay mucho vivo argentino que nos prestamos para ser testaferro de otros que tienen plata. Para vivir bien sin mirar que estamos perjudicando a un montón de argentinos que no tienen un pedazo de tierra donde poner una cabra. Entonces tenemos muchas dudas al respecto. Para nosotros es fenomenal que se haya aprobado, pero esperemos que el espíritu de esa ley sea para que esta lucha siga. Si se habla de extranjerización por la compra es una cosa también se habla de que no la regalemos. Estamos esperando tener más información de la ley. Lo que sí, nosotros, estamos trabajando para la obtención de la tierra y queremos que sancione la ley de freno en los desalojos, que es una ley que está presentada desde el año pasado y estamos pidiendo a los diputados de todo el país que se aboquen a trabajar en esa ley, para que pronto sea sancionada. Pedimos esto por 5 años, hasta que exista la posibilidad de ir trabajando hasta tener un título de propiedad y poder trabajar tranquilos”

JULIO 2012 | TIERRA Y TRABAJO | 21


CENTRO DE REPRODUCCIÓN PORCINA PARA LA AGRICULTURA FAMILIAR

“Trabajar en lo académico la producción de la Agricultura Familiar” Tierra y Trabajo dialogó con el Dr. Daniel Arias sobre el proyecto que llevan a cabo la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y la Subsecretaría de Agricultura Familiar respecto a la reproducción porcina en la provincia de Buenos Aires.

E

l Dr. Daniel Arias, Vicedecano de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional de La Plata, nos contó sobre la experiencia de trabajo realizado entre la casa de altos estudios a la que pertenece y la Subsecretaría de Agricultura Familiar. “Con la Subsecretaría de Agricultura Familiar empezamos las conversaciones a partir de visiones conjuntas y com-

22 | TIERRA Y TRABAJO | JULIO 2012

plementarias respecto a cuál debería ser el rol de la Universidad y cómo deberíamos trabajar con todos los sectores. El segmento de la Agricultura Familiar ha sido invisibilizado. La Subsecretaría de Agricultura Familiar se encargó de echar luz y se empieza a ver que existen, que se podía trabajar y que se podía trabajar con calidad”. “Lo que nos ha pasado a nosotros con muchos veterinarios, docentes e investigadores es que no consi-

deran que el productor familiar produzca. Así que nosotros queremos romper con esto y demostrar que se puede trabajar, y que se puede trabajar con calidad”. “El primer proyecto que se llevó adelante - y que ya concretamos la primera etapa- fue la construcción de un centro de producción y reproducción porcina para la Agricultura Familiar. La idea es que en el campo que la facultad tiene en la localidad bonaerense de Bartolomé Bavio, se construya un centro donde se va a producir el semen porcino, con una genética seleccionada para la agricultura familiar”. “El proyecto cuenta con el apoyo económico de la Subsecretaría de Agricultura Familiar,

nosotros aportamos las instalaciones. Además, la Subsecretaría aporta el material humano de sus Técnicos de Terreno. El trabajo va a ser en conjunto. Este proyecto nos servirá para trabajar con los alumnos un área que no estaba trabajada en lo académico que es la producción de la Agricultura Familiar.” “La producción de semen va a ser distribuida por la Subsecretaría para satisfacer la necesidad de productores, futuros productores, cooperativas; y también distribuida en la Facultad para satisfacer las necesidades académicas de nuestros alumnos”. “Así, en un futuro no muy lejano, nuestros graduados podrán ser asesores del sector, e irán a trabajar a un segmento que no conocían. Esto ha permitido llevar adelante proyectos de extensión, cursos optativos y talleres para alumnos pensando en esta articulación”. “Gracias a nuestra relación con la Subsecretaría de

“Lo que nos ha pasado a nosotros con muchos veterinarios, docentes e investigadores es que no consideran que el productor familiar produzca. Así que nosotros queremos romper con esto y demostrar que se puede trabajar, y que se puede trabajar con calidad”.

Agricultura Familiar vimos un sector invisibilizado, que es un segmento importantísimo de la producción primaria de alimentos. Por eso creemos que va a ser un significativo trabajo para nuestros futuros graduados”


capacitación

FORTALECIMIENTO INSTITUCIONAL

Fondos rotatorios y

microcréditos La Subsecretaría de Agricultura Familiar y el IPAF Región Pampeana del INTA realizaron capacitaciones para fondos de microcrédito destinados a agentes de desarrollo. Lo hicieron en las provincias de Buenos Aires, Córdoba y Entre Ríos. Las jornadas buscan fortalecer las herramientas de financiamiento para optimizar los procesos de comercialización de los agricultores familiares. n Argentina, la agricultura familiar representa un sector relevante en la producción de alimentos, la creación de empleo y la ocupación de territorio. Sin embargo, persisten una multiplicidad de problemáticas que condicionan su desarrollo, tanto en la producción como en la circulación y distribución de los productos que genera. Sucede que, los recursos productivos con los que cuenta el agricultor, entre ellos, los financieros, están distribuidos de modo desigual en nuestras sociedades, no sólo en términos de acceso sino también en función del tipo de herramientas financieras existentes. En tal sentido, el Fondo Rotatorio constituye una alternativa viable como modalidad de crédito. Sobretodo, a partir de una concepción de Estado presente y promotor, que articula la política económica con el desarrollo social. Planteada entonces como política pública, la economía social emerge con una diferente racionalidad, representada por numerosas experiencias que se caracterizan por movilizar recursos, relaciones económicas y factores productivos con un sistema de valores que representan la ayuda mutua, la solidaridad responsable, la cooperación y equidad. La capacitación en fondos rotatorios y microcrédito desarrollada en conjunto por el IPAF Región Pampeana y la Subsecretaría tiene por objetivo dar visibilidad al sector, a sus problemáticas, sus experiencias socio-organizativas y económicas y poner también al alcance de políticos y agentes promotores del desarrollo rural, herramien-

E

tas de financiamiento solidario. En Arrecifes y Lobos, provincia de Buenos Aires, cuarenta técnicos se capacitaron en microcrédito. En Paraná, Entre Ríos y en Manfredi, Córdoba con la participación conjunta de los Centros Regionales del INTA, más de 60 técnicos recibieron la capacitación en microcrédito y fondos rotatorios. “Lo que hicimos en éstas capacitaciones es relatar experiencias exitosas en materia de microcrédito vinculados a actividades productivas, a la vez que trabajamos en forma grupal la posibilidad de conformar fondos de microcréditos en cada uno de los territorios donde desarrollan sus actividades los extensionistas del INTA y los técnicos de la Subsecretaría”, explicó el investigador Sergio Dumrauf, quien coordina el proyecto de comercialización que desarrolla el INTA. En todos los encuentros realizados se brindaron los contactos y mecanismos para que en cada territorio, donde intervienen agentes de desarrollo, se pueda acceder al financiamiento inicial para ingresar al sistema de microcrédito. Gestión Compartida En el sector rural y periurbano de la región pampeana, el esquema de Fondo Rotatorio, concebido como instrumento de gestión de recursos, es desarrollado por muchas organizaciones que promueven la Agricultura Familiar. Los Fondos Rotatorios (FFRR) son una modalidad de microcrédito. En su búsqueda de convertirse en una herramienta integral de desarrollo, las experiencias de Fondos Rotatorios combinan algunos

o varios aspectos de las distintas alternativas financieras solidarias. Los Fondos Rotatorios funcionan, básicamente, como una caja de recursos financieros y no financieros que gestiona la organización y que “circulan” o “rotan” entre ella y los productores. Su uso, tanto en forma de créditos en dinero como en productos e insumos, se destina a financiar proyectos productivos y de desarrollo rural y local. Lo que se recupera, en forma de cuotas en dinero o en productos, se vuelve a prestar a otros productores. La escala en el uso de estos recursos es local, en el sentido de que sus destinatarios comparten un mismo sistema productivo de base territorial, es decir, que comparten una misma actividad socio-económica y articulaciones cotidianas en un mismo territorio. Sin articulación es difícil que prosperen éstas herramientas. La gestión compartida resulta imprescindible en la construcción de políticas públicas para el desarrollo rural. Hoy existen 1.600 organizaciones sociales que otorgan crédito en el país a diferentes emprendimientos. Esta herramienta de gestión ya muestra sus logros y se afianza entre agricultores rurales, urbanos y periurbanos. La gestión compartida también permite el fortalecimiento institucional entre la Subsecretaría, el INTA y la Comisión Nacional de Microcrédito que construyen una mirada conjunta, en la complementación de recursos humanos para participar en procesos de intervención territorial

JULIO 2012 | TIERRA Y TRABAJO | 23


Desde las aulas

al campo

A fines del año 2011, en el mes de diciembre, en San Luis, se realizó el acto de lanzamiento del “Programa de Pasantías de Estudiantes Universitarios y Agricultores Familiares” como iniciativa conjunta entre actores institucionales del Ministerio de Agricultura de la Nación y del Movimiento Estudiantil.

E

l lanzamiento del Programa se realizó en el “IV Plenario del Foro de la Agricultura Familiar de la Provincia de San Luis” en la localidad de Balde (a 30km de la capital provincial), bajo el objetivo de fomentar la articulación y los vínculos entre estudiantes universitarios y agricultores familiares desde la práctica concreta de compartir trabajo, intercambio de experiencias, y reflexión en el territorio rural. En el acto lanzamiento estuvieron presentes el titular de la Subsecretaría de Agricultura Familiar de Nación, el Ingeniero Guillermo Martini; el responsable de extensión universitaria del principal órgano gremial del estudiantado argentino, Leonardo Moyano; Miguel Fernández, miembro de la Mesa Coordinadora Nacional del FoNAF –Foro Nacional de la Agricultura Familiar- como delegado por la Regional Cuyo; acompañados de referentes de distintas organizaciones campesinas y de agricultores familiares, Rectores de distintas Universidades Nacionales y de la Confederación General del Trabajo (CGT). Históricamente el movimiento estudiantil y las organizaciones

...un espacio para que las instituciones académicas puedan tomar estas experiencias y acoplarlas a la vida institucional cotidiana, que apuntale la formación de los nuevos profesionales en relación directa con la realidad que viven los productores de la agricultura Familiar.

rurales se relacionaron y desarrollaron estrategias de lucha conjunta. Parte esencial de ese proceso de construcción conjunta han sido acciones de intercambio, comúnmente denominadas Pasantías o Estados de Vivencia, a nivel nacional y latinoamericano, donde ha construido una especial impronta el Movimiento de Trabajadores Rurales sin Tierra de Brasil (MST) y de las más diversas

organizaciones de la Vía Campesina, en conjunto con agrupaciones y federaciones estudiantiles agrupadas a nivel latinoamericano en la Confederación Latinoamericana de Estudiantes de Agronomía (CONCLAEA). Con el avance del proyecto nacional y popular, se han desarrollado experiencias tales como el Seminario de Educación Rural de la Universidad Nacional de Rosario en conjunto a las comunidades de las Escuela de Familias Agrarias (EFAS) de Corrientes; o diversas pasantías y Jornadas de Trabajo Voluntario de estudiantes de la Universidad Nacional (UNC) y el Movimiento Campesino de Córdoba. El “Programa de Pasantías de Estudiantes Universitarios y Agricultores Familiares” nace desde la experiencia de articulación entre los estudiantes y las organizaciones rurales. En ésta etapa se consolida como un espacio para que las instituciones académicas puedan tomar estas experiencias y acoplarlas a la vida institucional cotidiana, que apuntale la formación de los nuevos profesionales en relación directa con la realidad que viven los productores de la agricultura Familiar


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.