SUPLEMENTO CULTURAL - HP 702

Shakespeare por un día

Miguel de Cervantes: el drama acabó en comedia

De acuerdo con el calendario juliano, murió el 23 de abril de 1616, un día después que Cervantes

Un desclasado, un hombre de acción herido y derrotado y un patriota abandonado por la patria

Marcos Ordóñez Pág. 6

Luis Alemany Pág. 7

VIERNES 22 DE ABRIL DE 2016

SUPLEMENTO CULTURAL

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Comunicante Nina Simone, negritud en la piel y en el alma

“Veía dos rostros en el espejo; uno reflejaba mi orgullo por tener la piel negra y por ser mujer, y el otro reflejaba la convicción de que el color de mi piel y mi sexo eran los responsables de que mi vida se fuese a la mierda desde el principio” Por: Edición Comunicante

Págs: 4 y 5

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Nueva visita a Mrs. Nabokov

V

ladimir Nabokov gozó de fama en Cornell, donde fue profesor entre 1948 y 1959. Su fama también provenía del hecho de que no acudía solo a clase.

Llegaba conducido por la señora Nabokov, cruzaba el campus junto a la señora Nabokov y aparecía en clase del brazo de ella. El hombre que tanto habló de su propia soledad fue uno de los solitarios más acompañados de todos los tiempos.

La señora Nabokov se sen-

taba en las primeras filas del auditorio y, sobre todo, en el estrado, a la izquierda de su esposo. Rara vez faltó a clase.

A los estudiantes y profesores los asaltó la pregunta de rigor: ¿qué hacía Vera Nabokov en el salón de clases de su esposo?

Pero ella no era su esposa, era su madre.

Porque Nabokov era alérgico al polvo de gis y no le gustaba su letra. Para correr a las alumnas (antes, por supuesto, de la publicación de “Lolita”). Porque, cuando Nabokov olvidaba algo,

ella le servía de enciclopedia.

Porque Nabokov no tenía idea de lo que decía -ni memoria para recordarlo-, así que ella apuntaba todo para que él pudiera tenerlo presente a la hora de elaborar el examen.

Nabokov era ciego, por lo que ella le servía de lazarillo; esto explica por qué llegaban del brazo. Todos sabían que ella era un ventrílocuo. Estaba ahí para defenderlo. Guardaba una pistola en el bolso.

Al final de sus días en Cornell, Nabokov entrenó a varios

asistentes, uno de los cuales recuerda haber leído 150 exámenes. Después de haber leído dos o tres veces cada examen, llevó la pila de papeles a la oficina del profesor Nabokov, con la esperanza de charlar con el gran hombre. La señora Nabokov lo recibió en la puerta.

Tomó los exámenes, de inmediato aumentó las calificaciones por encima de ocho, y condujo al asistente por su camino.

(Stacy Schiff; nexos, 1 de junio de 1997. Nabokov nació el 22 de abril de 1899).

“Creo que el mito rock’n roll de vivir al límite es un montón de basura”, Robert Smith.

(Nació el 21 de abril de 1959).

La Efeméride

Nomás por hablar de algo...

El 22 de abril es Día Internacional de la Madre Tierra, para hacer conciencia en torno al maltrato que hacemos los humanos en contra del planeta. El antecedente de la celebración se remonta a 1968. Pero el 22 de abril de 1970 fue, por coincidencia, el centenario del natalicio de Lenin. Los amantes de las teorías de la conspiración vieron en esto una estratagema soviética en su afán de dominación mundial. Algunos todavía lo creen.

El santo patrón de la ciudad de Durango es San Jorge Bendito. La única referencia histórica va hasta San Jorge de Capadocia, un soldado cristiano mártir del siglo III. Con el tiempo se le hizo protagonista de ciertas leyendas, como aquella del dragón, parecida más a un cuento de hadas. La Iglesia, sin embargo, ha rodeado la figura de San Jorge de un simbolismo que propone para el culto y la enseñanza de una verdad: la asistencia divina en los tiempos de aflicción, como cuando se trata de “los animalitos” que vagan por ahí para perjuicio del hombre. Se celebra cada 23 de abril.

Diseño / Grupo Editorial HADEC

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3 SATÍN Y SEDA

Cuando los olanes llegan al cuello… ¡Fuga al carnaval de Brasil!

Nadia Bracho

La verdad, cómo decirle que mis hijas me subieron a la fuerza al coche

-

lema de mi tía Cleo, por lo Señorita, quiero un vestido para fiesta provocativo. que presurosa exigí la nota -digo con seguridad a la encargada del ¡¿Provocativo?! Se popara pasar a caja. departamento de damas, mientras tomo dría llamar provocativo a La empleada me miró un vestido hermoso de encaje negro de un un escote de “varios kilódesconcertada y luego volcolgador, pero, al ver la etiqueta con el pre- metros de largo” y el que teó hacia las demás compacio, lo dejo de inmediato y lo escondo en traía en la espalda causañeras. Algo en mi interior donde no se vea, esperando que no se me ría envidia a la recién inhizo sonar la alarme y pensé: pegue si ando por ahí cerca. augurada súper carrete“esta señorita no quiere que -¿Cómo lo quiere? -me responde pro- ra; además, la minifalda luzca bien, es eso; quiere nefesional. La verdad, cómo decirle que mis me traía recuerdos de garme el gusto de que yo me hijas me subieron a la fuerza al coche para mis días de hospital con vea fabulosa”. que me comprara un vestido decente para la la bata verde que usé cuando nacieron los niños.

-Disculpe, ¿pasa algo? -le pregunté boda de su tía preferida. ¿Qué cómo estaban Volteando para ver si nadie me observaba, mis vestidos? ¡A mí me encantan! Hay uno corrí al vestidor y pedí que me buscara un mo- mientras me alisaba unos pliegues imaginarios de la falda. que causó furor en “Fiebre de Sábado por delo más recatado.

-Sí, ¡bueno no…! Es el vestido. No puede la Noche” y otro que estaba al estilo de las ¡Claro que era recatado! ¿Recatado? ¡Resca“Flans”, con esas mangas grandes y abom- tadísimo! Parecía la esposa de Luis XVI: el cue- llevárselo.

-¿No puedo? ¿Qué acaso no tienen aquí badas y de color naranja-melón, ¡todo un llo del vestido estaba tan arriba que me impedía estilo! Pienso para mis adentros, recordan- bajar la mirada para verme los pies, además lle- como lema “al cliente lo que pida”, al lado do cómo es que llegué hasta la tienda. gaba hasta el tobillo. Me trajo unos zapatos de de un letrero: “Hoy no se fía, mañana sí”?

-Bueno, busco algo actual, que agujetas (no pre¡¿Provocativo?!

Se podría -¡Sí! Pero es que... me haga ver un poco más joven; cisamente de collamar provocativo a -¡Mire! -la interrumpí-. Dígame una raquizás de colores alegres, no sé. lor de rosa) y me un escote de “varios ¿Tiene algo para mí? -la pidió que como zón de peso para que no pueda llevarme muchacha se escabulló por una accesorio llevara este traje, pero le advierto que, si no me kilómetros de largo” orilla y yo me alejé más del colun abanico del si- convence, voy a hablar con el gerente -estagador que tenía el “vestido del glo, pasado para ba en una clara postura de defender lo que terror” de la etiqueta de muchos ceros. En que me “echara aire” tipo matronas que salen en consideraba mío y ese traje por supuesto que lo era. eso vuelve mi vendedora, me instala en el los cuadros de los pintores de la Edad Media.

-Bueno, si quiere puede llevárselo… pero probador y comienzo... lo que nunca debí En eso veo un traje sencillo de un color sobrio, intentar. pero elegante, con un largo muy adecuado, parecía es el uniforme nuevo que nos acaba de lleAsí es, el vestido era actual, incluso los de tres piezas y ya venía incluida la blusa. Salí del ves- gar a nosotras y no sé si mandaron extra… ¡¿Uniforme?! ¡Me olanes del cuello y falda se veían muy juve- tidor y no esperé a que la señoMe vi reflejada en el había enamorado del niles, pero más parecía una rumbera fugada rita me lo diera. En cuanto coespejo y por poco me uniforme de los emdel carnaval de Brasil que una dama de ho- mencé a probármelo supe que pleados de la tienda! nor en una ceremonia religiosa. estaba hecho para mí. La talla saludo con un: “hola Con la mirada perdida, -Quizás con veinte años menos me lo era la adecuada y, en honor a Morticia” regresé al vestidor, puse hubiera puesto en aquella fiesta hawaiana la verdad, lucía bastante bien. las prendas con cuidado que organizaron los compañeros de secun- El traje me hacía ver femenidaria, ¿no tiene otro más… formalito? -la na, pero a la vez con un aire de mujer profesional y casi solemne en el gancho, lo deposité en las joven desapareció y volvió de inmediato madre de familia. ¡Eso era lo que quería proyectar! manos de la señorita y salí en silencio, especon un vestido formal. Era negro, se po- Solamente faltaba ponerme el delantal y se podría rando esconderme en mi propia sombra.

-¡Mamá! ¿Qué vestido escogiste para la dría decir negro lustroso, de ese color muy hablar de un ama de casa también; el efecto estaba boda? -fueron las primeras palabras que esapropiado para los funerales, donde hasta el realizado. Era yo. difunto se sentiría incómodo con lo formal Salí encantada y lucí mi atuendo por todos cuché llegando a la casa con mis hijas. del vestido. Me vi reflejada en el espejo y los espejos de la tienda, incluso se fueron jun-Uno hermoso… -respondí automáticapor poco me saludo con un: “hola Morticia”, tando las demás vendedoras de otras secciones, pero la impresión me impidió abrir la boca una señal inequívoca de que lo que traía puesto mente-. Tiene unas mangas grandes y solamente le pedí con una señal era lo indicado. “Si te sientes a gusto con lo que abombadas tipo “Flans” y es color que el siguiente fuera un poco más traes puesto, es porque ya lo pagaste”, ese era el naranja-melón...

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“Moriré a los setenta años de eda

Nina Simone, negritud

Por Edición C

“Veía dos rostros en el espejo; uno reflejaba mi orgullo por tener que el color de mi piel y mi sexo eran los responsables

“I Put a Spell on You”,

L

la autobiografía de Nina Simone.

a leyenda del jazz Nina Simone apaga su voz.

“La legendaria cantante de jazz estadounidense Nina Simone ha muerto hoy a los 70 años en su casa de Carry-le-Rouet (en el sur de Francia), donde llevaba viviendo ocho años. Simone ha fallecido tras una larga enfermedad, según ha comunicado su representante”. El País, 21 de abril de 2003.

Tal fue la entrada de la breve nota de apenas tres párrafos, con la que el matutino español dio cuenta del final de la existencia de la mujer que toda su vida se refirió a su “negritud” con orgullo.

Sin embargo, Nina y su vida fueron más que eso, mucho más que sólo tres párrafos. Quizá fue la urgencia, tal vez la primicia periodística de ganar la nota de la muerte de quien asumió sobre sus hombros el vacío que había dejado Billie Holiday, Lady Day, Lady Sings the Blues… otra desahuciada de la vida.

SU VIDA EN BREVE “Tengo un sueño”, gritó Martin Luther King en 1963, un hermoso sueño cargado de futuro, todos soñamos con un mañana pleno de promesas, un mañana inaplazable construido instante a instante desde un presente del que quisiéramos huir.

Un inmenso sueño fue arraigando en el alma de la niña Eunice Kathleen Waymon colmado de ilusión, día a día, en su natal Tryon, Carolina del Norte. Pero era un sueño esquivo, equívoco, infinito, que mantuvo a lo largo de toda su vida.

Un sueño sangrante que la llevó desde el gospel de la iglesia a la destrucción.

Un sueño que no pudo ver realizado.

En el camino se dejó la piel, la inocencia, la vida.

Soñaba ser la primera concertista negra americana y luchó por ello hasta la extenuación, pero el destino —las crueles circunstancias— se mostró remiso, una y otra vez, con inusitada crueldad.

Ser negra y pobre no eran el equipaje adecuado para semejante viaje, aun menos la cruda rectitud del entorno religioso familiar metodista y sin embargo halló las ayudas necesarias en forma de un fondo económico para que pudiera formarse, y se aplicó y esforzó hasta la extenuación, seis, sietehoras diarias con Bach o Beethoven como únicas compañías en lugar de los juegos propios de la infancia.

La penuria económica, el deseo de autonomía, ayudar a la familia, conseguir el dinero para pagarse un profesor —el prestigioso Vladimir Sokhaloff— que la preparase para entrar en el Curtis, la empujaron a diversos trabajos (laboratorio fotográfico, pianista ayudante de una profesora de canto, profesora ella misma después, incluso sirvienta en una casa de blancos), y finalmente a oscuros clubes de Atlantic City o de Filadelfia.

Fue tocar por cuatro centavos, a hurtadillas de la férrea vigilancia de su madre; temía que se enterase que tocaba “la música del diablo”. Hacer lo que mejor sabía para sufragar sus estudios, para continuar su sueño de futuro que seguía impoluto, ser con-

certista, y que mantuvo durante casi toda su vida como confiesa en sus me- “Jazz es un términ para definir la m morias: “si alguien me ofreciese una hago música c fuerte cantidad económica lo dejaría todo, no volvería a cantar, volvería a Julliard, a Bach”. Y tragarse el orgullo, cuando le dijeron: “el público se queja, tienes que cantar, si no cantas te ponemos de patitas en la calle”. Y cantó.

Así nació Nina Simone, la otra mujer, la máscara tras la que ocultarse —Nina de niña, Simone por su admiración hacia Simone Signoret tras verla en el filme “París, bajos fondos”.

LAS CUATRO MUJERES

¿Y el sueño? Yacía sepultado, pero vivo y voraz como un quiste, reconcomiéndola, destrozándola y llegó la rabia, consciente de que por el momento su amado Bach, “Bach hizo que me dedicara a la música”, o Listz o Beethoven tendrían que esperar, “Yo no llevo quizás para siempre. pintada en Todos estos hechos, y la soledad y el desamor, siempre presentes, fueron quebrando como Louis su ánimo, endureciendo su carácter, a medida que crecía el éxito y se multiplicaban

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ad, pues después sólo hay dolor”

d en la piel y en el alma

Comunicante

r la piel negra y por ser mujer, y el otro reflejaba la convicción de de que mi vida se fuese a la mierda desde el principio” Nina, querida y admirada, pese a sus desaires, y su halo crucial.

La escritora y premio Nobel Toni Morrison dijo: “fue fundamental para mí y para mi generación. Era indestructible, incorruptible.

Incluso me daba miedo”. (“Sueños rotos: la niña que no quiso ser Nina Simone”, José Ángel Santiago Lardón; clasijazz.com; 5 de junio de 2015).

“DESPUÉS SÓLO HAY DOLOR”

los conciertos, “trabajo como un perro, voy de concierto en concierto”.

Quienes la trataron trazan un perfil contradictorio: tierna, apasionada, furiosa, altanera, despectiva, voraz, depredadora sexual, y también enferma, diagnóstico: personalidad bipolar, ciclotimia, tratamientos médicos y varios ingresos psiquiátricos Nina era muchas mujeres, al menos las cuatro que describió en la que podría ser su más certera biografía, ese feroz alegato feminista que es “Four Women” (1966), resuelta en cuatro eficaces estrofas sin estribillo: tía Sarah, la mujer resignada; la segunda, Sefronia, la mestiza que vive en un limbo entre dos mundos, sin que ninguno la acoja; la tercera, Dulzura, la que se deja la piel por los caprichos de los hombres siempre que le ofrezcan dinero y una vida mejor; y la última, Preciosidad, la mujer una sonrisa negra devorada por la ira: “voy a matar al primer imbécil que vea. / Porque mi vida ha n el rostro sido demasiado dura. / Estoy muy amargada Armstrong” en estos días / porque mis padres eran los esclavos. / ¿Cómo me llaman? / Mi nombre es Preaches (Preciosidad)”.

ino de los blancos música negra. Yo clásica negra”

Intérprete precoz, su Panthers y activistas como Storkely futuro profesional pasa por convertirse en la primera mujer Carmichael. Un compromiso que de raza negra que suba al escenario de como la propia cantante señalará en Carnegie Hall para interpretar música su biografía, “I Put A Spell On You” clásica. Una vocación que finalmente (1992), acabó perjudicando su carrera quedará truncada a causa de las barre- y la empujó finalmente a dejar Estados Unidos. Liberas raciales como la propia Simone “El talento es una carga, ria, Suiza, Inglaterra y finalmente recuerda sin desno una felicidad” Francia, su país de canso a lo largo de adopción, señalan su vida.

En su memoria bailan los fantas- su itinerario a partir de la década de mas del pasado y el recuerdo de aquel los setenta.

A principios de los años noventa concierto en el que tuvo que ver cómo sus padres eran desalojados de la pri- se le diagnostica trastorno bipolar y mera fila y recluidos al final del teatro. su nombre aparece en las páginas de Simone estará en el grupo de ar- sucesos cuando dispara a dos jóvenes tistas, junto a Harry Belafonte, Joan a los que acusa de molestarla mienBaez, Anthony Perkins, Peter, Paul & tras descansaba en su jardín. Murió a Mary y otros, que participa en la fa- la edad de 70 años a causa del cáncer.

Ella misma lo había predicho, y mosa Marcha de Selma (1965) promocumplió su palabra: “moriré a los sevida por Martin Luther King contra la tenta porque después sólo hay dolor”. discriminación racial.

Después del asesinato de líder ne- (“Nina Simone: una historia de dogro en 1968, Simone se alineará con lor, intolerancia y locura”, Carles las posiciones más radicales que pro- Gámez; El País, 13 de abril de mueven movimientos como los Black 2015).

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6 “Es mejor ser rey de tu silencio que esclavo de tus palabras”

Shakespeare por un día Por Marcos Ordóñez

De acuerdo con el calendario juliano, murió el 23 de abril de 1616, un día después que Cervantes Borges escribió un cuento crepuscular donde un hombre hereda la memoria de Shakespeare “y es como si le ofrecieran el mar”. Se me ocurre, con todo respeto, una variante de pasado mañana: un mago cibernético, al que presto la cara benévola de Ray Bradbury, inventa una máquina del tiempo y, entre incontables opciones, ofrece ser Shakespeare por un día.

Viajar por un día al interior de su cabeza y ver cómo funciona.

Encasquetarte sus ojos, sus orejas, su imaginación siempre alerta. Ver todo lo que ve, todo lo que olfatea, todo lo que selecciona y atesora. En “La cualidad de la misericordia”, de Peter Brook, hay un precioso pasaje en el que el joven Will llega a Londres, camina por las ruidosas y animadas calles y devora todo lo que hay a su alrededor. Brook imagina a Shakespeare atrapando “relatos de viajantes, rumores de intrigas palaciegas, disputas religiosas, elegantes réplicas mordaces, obscenidades violentas”. Y añade algo tan obvio como esencial: “Un poeta absorbe todo lo que experimenta, pero solo un genio sabe destilarlo y relacionar impresiones absolutamente distintas y contradictorias”.

Exacto: lo que yo quiero es ver cómo se ponía en marcha esa esponja absoluta, pero no acabo de decidirme, porque el mago cibernético despliega un catálogo muy variado. La llegada de Shakespeare a Londres abre un ramillete de grandes fulguraciones. Ahí está también el día en que se abismó sobre la “Crónica” de Holinshed, que será su gran fuente de historias. O la tarde en que escuchó la encendida perorata de un borracho donde reconocemos un párrafo que heredará el futuro Falstaff. O este momentazo (un poco más caro, porque hay mucho “travelling”): Will camina por Shoreditch, deja atrás leproserías, burdeles y patíbulos, y entra, como imantado, en el teatro del viejo Burbage, aquel imponente edificio poligonal, enyesado en blanco y negro, con tres galerías, patio cubierto y techumbre de tejas, sede de la compañía de los Lord Chamberlain’s Men, y decide que ellos serán su familia.

Puedo viajar también al día en que rompió a escribir la prime-

lo reconozca y lo haga suyo; verle trazar saltos de tiempo y espacio, dibujar en voz alta y apasionada páramos del norte, grandes batallas, la antigua Roma, bosques habitados por la magia. O, ya metidos en harina teatral, ¿quién no querría viajar al Globe la gloriosa mañana en que subió por primera vez a las tablas y les dijo: “Que la acción responda a la palabra y la palabra a la acción, poniendo especial Según el calendario cuidado en no trasgregoriano, en realidad pasar los límites de murió el 3 o 4 de la sencillez de la namayo de 1616 turaleza”.

Habría lógico “overbooking” para ra parte de “Enrique VI”. Cuando vivir su primer retoma posesión, por así decirlo, del volcón con la Dama pentámetro yámbico, hasta entonOscura o con el igualces casi una fórmula alquímica, y la mente innominado johace resonar como nunca había resonado antes, ni con Marlowe, y podemos ver de ven de los sonetos, pero tampoco faltaría qué modo los versos le marcan ya al actor, pasaje para verificar si el poemario era un sin indicaciones, cómo ha de respirarlos: juego de voces líricas, hijo exclusivo de su dónde están las pausas, dónde los galopes. imaginación. Y habría un viaje último a la ¡Ah, poder atrapar el instante originario en primavera de 1616 para tratar de desvelar, que ese verbo poético, como señalan los de- en palabras de Borges, el “árido testamento, del que deliberadamente excluyó todo tectives Pérez y Balló en “El mundo”, un es- Y, a pesar de todo lo que se rasgo patético o literario”. cenario, “construye la ha dicho y escrito sobre él, Queda, por suimagen en el oyente, y se hace visión aunque existen muy pocos hechos puesto, el gran misdocumentados en la vida terio, el definitivo: no llegue a visualizaraprehender el pensade Shakespeare se”. O cuando brota miento de aquel homesa conciencia, nunca bre que “a semejanza plasmada hasta entondel egipcio Proteo pudo agotar todas las ces, que “habla mientras piensa y se escucha a sí misma”, y echa a andar, y se llama apariencias del ser”. Y como has pagado por varios viajes, el mago te susurra al Hamlet, como el hijo muerto.

Por supuesto que me gustaría verle es- oído que no gastes más, que lo que Shakescribiendo, líneas y líneas como sangre ne- peare pensaba, creía y sentía vas a encongra y fresca, pero Shakespeare exige algo trarlo en la suma de sus obras, y que no entender eso es no entender la naturaleza más teatral.

El mago abre entonces la segunda baraja de todo dramaturgo. (El País; 26 de enero y sugiere asistir a la noche en que Will, en- de 2016). tre jarras de cerveza, cuenta a su “band of “En nuestros locos brothers” lo que parece ser el plan, todavía titubeante, de su próxima obra. Ver cómo intentos, renunciamos a lo trocea y rearma el material de Holinshed, y que somos por lo que lo hace crecer hacia lo alto para que vuele, esperamos ser” y lo hinca en el suelo para que el público VIERNES 22 DE ABRIL DE 2016

7 22 de abril de 1616-22 de abril de 2016: aniversario 400 de su muerte

Miguel de Cervantes: el drama acabó en comedia Por Luis Alemany

Un desclasado, un hombre de acción herido y derrotado y un patriota abandonado por la patria

H

ay una época en la vida de Miguel Era la época de Felipe II y Juan de Austria. El de Cervantes, la década que va de Imperio Español empezaba su deriva, pero eso aún no lo sabía nadie, de 1588 a 1598, modo que Cervantes se que parece escrita por “Confía en el tiempo, convirtió en un entusiasel guionista de una coque suele dar dulces media italiana de los salidas a muchas amargas ta. Fue un patriota, un intolerante y un temerario. sesenta, de esas en las dificultades” Fue a la guerra contra los que un tipo emprende turcos en el Mediterrála farsa del gran hombre de negocios, seguro de sí mismo y con neo, pero una gripe lo agarró en plena travesía. éxito entre las mujeres... Sin embargo, la Le dio igual, combatió como un iluminado y realidad se empeña en desvelar su verdad. volvió triunfal a España. Su proyecto vital emTiende a chapucero, tiene mala suerte, le pezaba a ir bien… hasta que perdió.

Perdió en Lepanto, se quedó sin mano, fue falta malicia. ¿Cómo no quererle?

El pobre Cervantes iba muy orgulloso capturado y lo llevaron con su hermano Rodricon sus heridas de guerra como tarjeta de go a Argel, que era un mercado de esclavos. Los visita, pero ya no había guerra y a nadie le prisioneros llegaban a la ciudad y el emir los adimpresionaban sus honores. Escribía poe- ministraba mientras llegaba el rescate.

En Argel, la vida se convirtió, de nuevo, en mas, pero no eran muy buenos.

Se metía en negocios, pero siempre sa- una broma. Como tenía buena pinta, los turcos lía mal parado, así que se buscó algo en la pensaron que podrían sacar un buen botín y lo Administración: un puesto de recaudador cuidaron. Buena noticia. Pero, por esa misma bitado de impuestos atrasados. No parecía un gran razón, pusieron un precio desortrabajo: recorría el viejo Reino de Granada por su liberación. Mala noticia. en busca de evasores de unas tasas que eran Durante cinco años menos siete impopulares e injustas. Aguantó diez años días, no hubo manera de escapar como pudo. Cervantes era torpe, se liaba (lo intentó dos veces) ni de ser libecon la contabilidad y una vez faltó dinero. Lo rado ni de que nadie lo matara.

Cervantes volvió a España en 1580. metieron en la cárcel cinco meses hasta que alguien se dio cuenta de que, en realidad, la Estaba endeudado y tullido y llevaba exconfusión no era culpa suya o, más bien, casi pectativas irreales para su nueva vida. Quiso ser espía y quiso irse a América, no era culpa suya.

Hubo capítulos así, trágicos, desde el prin- pero no lo logró. Se casó, pero no cipio hasta el final, pero es mejor contarlo todo salió de la pobreza. Tuvo una como una broma, porque la vida de Cervan- hija con la mujer de otro homtes acabó como acaban las comedias, con un bre. Rondó la corte literaria y abrazo, un “te quiero” y un último gag. Tres fue el primero en advertir el días antes de morir, escribió: “(En) la hora de la talento de Lope de Vega, pero muerte (...) por lo general, o se dicen grandes Lope estaba como una cabra y se sentencias o se hacen grandes disparates”. Por volvió su peor enemigo.

Y entonces, y entonces... Y entonces, estaba desdentado, encorvado y calvo y tenía mal la próstata y la diabetes, pero se entonces, la vida de Cervantes dio sentía querido y lo rodeaba gente joven, chicos “El Quijote”, el libro que estaban en la espuma de los días.

Antes de escritor, Cervantes quiso ser sol- más editado y traducido de la historia, sólo dado o, mejor dicho, soldado-escritor-cortesano, que era un molde de la época, una superado por la especie de bohemio del Renacimiento.

Biblia VIERNES 22 DE ABRIL DE 2016

un giro feliz. Podríamos pensar en Proust en las primeras páginas de “En busca del tiempo perdido”. En el muchacho que tenía algo especial pero ya llegaba a viejo sin haber hecho nada que de verdad mereciera la pena. Había fracasado en todo y había gastado su talento en naderías... Hasta que, un día, empezó a escribir y dio con un relato que daba un sentido a la vida desperdiciada.

Ese mismo milagro lo vivió Miguel de Cervantes Saavedra cuando inventó a Alonso Quijano. Fue un best seller pero nadie se dio cuenta de su verdadero valor. Solo él.

Les dio otra oportunidad, la segunda parte del Quijote, por ver si se enteraban. No muchos lo hicieron, pero eso a Cervantes ya le dio un poco igual. Ya era un viejo feliz que se reía de todo y de sí mismo. (elmundo.es).

“Dos linajes solos hay en el mundo, como decía una ‘agüela’ mía, que son el tener y el no tener”

8 Cerraron los ojos… y vivieron felices para siempre

Historias con… ¿final feliz?

Juan L. Simental

Así como hay segundas partes que no son buenas, hay finales que desmerecen

¡Y

vivieron felices para siempre! Y es que luego de que la finales, de hecho, que son apenas el principio. Quizá es que comuchacha bella, aquella de los dorados cabellos, como mienza el cuento de verdad: enamorar para siempre a la princesa, de atardecer de otoño, posó en él el azul profundo de sus que no se enamora sólo con un beso. El final es apenas el prinojos como gemas y venció su repugnancia natural e imprimió con cipio. Porque un día la vida será la vida y sobrevivirla será más sus labios de rubí el ósculo en el verde y asqueroso batracio y este ardua tarea que matar dragones. se convirtió en el apuesto príncipe, dechado de virilidad y heroicos alcances, y mató luego al dragón que asolaba la región de HAY DE FINALES A FINALES nunca jamás… no hubo más remedio que el amor, el grande amor entre ella, la princesa Así como hay segundas partes de inocencia sin mácula que no son buenas, hay finales Besar al sapo y que se convierta en príncipe es, apenas, y el príncipe, encarnaque dan al traste con la histoel comienzo de la historia ción de los sueños de ria. Recuerdo, entre todos, el “El miedo del hombre... ha inventado todos los cuentos” todas las princesas que término de “Del amor y otros sueñan con el sapo que demonios”, de García Márquez.

“Ya era imposible distinguir quién era uno y quién era otro” se convierte en caballeEl principio engancha; ro. Y, después de todo el desarrollo cumple porque eso, claro, vivieron feliacrecienta el deseo de llegar ces para siempre. Fin. hasta el final, pero el final… es como En el ínterin, por supuesto, están si Gabo hubiera escrito de corrido casi la bruja y la manzana envenenada, hasta el total de las páginas y luego, la madrastra horrenda y las hermacansado, se hubiera tomado un desnastras y su natural envidia, y el canso. El final ya no es del mismo. ogro y el feroz lobo, y los enanos y Gabo ya era otro. las trenzas como cataratas y hasta el De ahí que, como en las primeras frijol mágico cuyo retoño llega hasta palabras, importen igual las postreras. las puertas del cielo… están todos. Y Una buena historia exige un buen final. está el beso de amor, que no fue el Aunque en este caso, “buen” no signifiprimero porque primero fue besar ca “feliz”, sino uno acorde con el resto al sapo. Sería la historia harto interedel relato. Aunque no todo termine con sante si fuera el sapo el que besara a una princesa angeliel príncipe y la princesa, felices para siempre. cal. ¿Vivirían entonces felices para siempre?

La página electrónica El Placer de la Lectura propoQuizá es que, como escribiera León Felipe: ne “Las 50 mejores frases finales en la literatura”, y se “la cuna del hombre la mecen con cuentos, / que podrá estar de acuerdo o no, pero, para tener una opilos gritos de angustia del hombre los ahogan con nión, quizá haya que comenzar por el principio y juzgar cuentos, / que el llanto del hombre lo taponan con después; es decir, leer desde donde diga: “Érase una vez”, cuentos, / que los huesos del hombre los entierran hasta la palabra “Fin”. con cuentos, / y que el miedo del hombre... / ha A continuación, de una lista de 50 finales, sólo cinco. inventado todos los cuentos”. Por eso es que, tal Léanse bajo el propio riesgo de anticipar finales de historias vez, todos los cuentos, al menos los cuentos con no leídas. Que la curiosidad no mate al gato, sino le anime, los que alguna vez nos durmieron, terminan con un al menos, a conocer el resto de la historia… final feliz. De no ser así, no sería que otros alguna vez nos hu1 El retrato de Dorian Gray, Oscar Wilde: “En el suelo, vestido de bieran alimentado los sueños con dichosos cuentos. etiqueta, y con un cuchillo clavado en el corazón, hallaron el cadáver Pero la vida real no termina siempre en el final feliz del prín- de un hombre mayor, muy consumido, lleno de arrugas y con un roscipe y la princesa que se besan y viven para siempre como Adanes tro repugnante. Sólo lo reconocieron cuando examinaron las sortijas y Evas antes de haber caído en la tentación de la manzana. Hay que llevaba en los dedos”.

2 Rebelión en la granja, George Orwell: “Los animales, asombrados, pasaron su mirada del cerdo al hombre, y del hombre al cerdo, y, nuevamente, del cerdo al hombre; pero ya era imposible distinguir quién era uno y quién era otro”.

3 Los miserables, Víctor Hugo: “Duerme. Aunque la suerte no le fue propicia, vivía. Y murió cuando perdió su ángel. La muerte le llegó sencillamente, como llega la noche cuando se marcha el día”.

4 1984, George Orwell: “Amaba al Gran Hermano”.

5 Lolita, Vladimir Nabokov: “Pienso en bisontes y ángeles, en el secreto de los pigmentos perdurables, en los sonetos proféticos, en el refugio del arte. Y ésta es la única inmortalidad que tú y yo podemos compartir, Lolita”. (Lista completa en: http://www.elplacerdelalectura.com/blog/curiosidades/las50-mejores-frases-finales-en-la-literatura-dela-1-la-10).

VIERNES 22 DE ABRIL DE 2016