Andrea Mullor Garcia – 1360163
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DOSIER 7 Fotografías editorializadas:
España sin gobierno. Noticias tras las negociaciones fallidas entre Podemos – PSOE del viernes 8 de abril de 2016.
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1. ElDiario – diario con ideología de izquierdas
Título: Podemos aspira aún a una negociación 'in extremis' con el PSOE que evite nuevas elecciones Subtítulo: El partido de Pablo Iglesias está seguro de que sus bases rechazarán apoyar el pacto de Pedro Sánchez y Albert Rivera y fían las opciones de un Gobierno de cambio a un giro a la izquierda de los socialistas Cuerpo de la noticia: El tiempo se agota y Podemos no cierra las opciones de alcanzar un acuerdo con el PSOE que evite unas nuevas elecciones generales. Aunque lo ven extremadamente complicado. Un deseo más que una esperanza. Tras dar por rotas las conversaciones a tres que incluían a Ciudadanos, a quienes Pablo Iglesias ha acusado de "inmovilistas", el partido someterá a las bases la postura que deben adoptar sus diputados en una hipotética nueva sesión de investidura. El resultado se conocerá el próximo lunes 18 de abril. Las Cortes se disuelven por imperativo constitucional el 2 de mayo. Entre medias, dos semanas en las que todavía hay opciones para una negociación que sería agónica. Iglesias utilizó durante la rueda de prensa ofrecida el viernes por la mañana una metáfora para explicar la visión que tienen de la situación en la que está el PSOE: "Es como si hubieran cogido un avión al país de Ciudadanos y les hubieran retenido el pasaporte. Aunque quieran volver, no pueden". Por la tarde, en otra comparecencia tras reunirse con el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, insistió en ella. Una imagen ideada por su secretario de Organización, Pablo Echenique, que vendría a estar ratificada por las insistentes declaraciones públicas en las que Pedro Sánchez y sus principales colaboradores han reiterado la vigencia del documento suscrito por los líderes de PSOE y Ciudadanos. Y que, según ha revelado Iglesias y reiteran diversas fuentes del partido, también expresaron de forma muy taxativa pero cordial durante la reunión a tres. "Nosotros no pedimos romper el acuerdo", apuntan desde la dirección de Podemos a eldiario.es. "Ciudadanos nos explicó que solo se pueden hacer retoques a su documento y el PSOE fue muy claro en que no lo van a romper", señalan. "Les planteamos si estaban dispuestos a explorar un Gobierno con nosotros manteniendo ese acuerdo y fueron también muy claros: no", concluyen.
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Podemos planteará a los cerca de 400.000 inscritos en su base de datos dos preguntas para que elijan entre apoyar un gobierno basado en dicho acuerdo o insistir en el "gobierno de cambio" que proponen. Pablo Iglesias, como ya hiciera en Vistalegre en el otoño de 2014, ha fiado su continuidad al frente del proyecto, "por coherencia política", a que la ganadora sea la segunda opción. Y pocos en el partido tienen dudas de que esto no ocurra finalmente. El resultado se conocerá el 18 de abril. Y se abrirán dos semanas en las que ven margen para que el PSOE flexibilice su posición ante la imposibilidad de sumar los apoyos necesarios en el Congreso y se abra una negociación in extremis que no tiene una fecha tope muy clara. Aunque formalmente las Cortes se disuelven el 2 de mayo, el proceso para una investidura exige una serie de pasos que pasan por la intervención del rey Felipe VI, quien debe proponer al presidente del Congreso un candidato. Además, las dos votaciones a las que previsiblemente se debería someter Sánchez si no recaba una mayoría absoluta en la primera añaden otras 48 horas al proceso. En Podemos ya contaban con llegar en una situación así al final del tiempo reglamentario, en uno de los símiles futbolísticos que suelen impregnar el discurso del partido. El reciente ejemplo catalán, donde se eligió al presidente de la Generalitat literlamente el último día de plazo, es un ejemplo de que puede ocurrir que suele utilizarse mucho tanto en público como en privado por dirigentes de todos los partidos. El propio Pablo Iglesias aseguraba en la mañana del viernes su disposición a agotar los tiempos y su mano tendida para una negociación con el PSOE. Eso sí, no a cualquier precio. A ella llegará previsiblemente con el respaldo de las bases del partido a su propuesta. "Si el PSOE quiere gobernar tiene que girar a la izquierda", señalan fuentes del grupo parlamentario a eldiario.es. Y añaden: "Quieren nuestra abstención a cambio de nada. Y nosotros no vamos a viajar a la derecha". Otras fuentes recuerdan que el documento de cesiones que llevó Podemos en la tarde del jueves a la reunión a tres contiene elementos "muy difíciles" para ellos y que chocan directamente con buena parte de su espíritu fundacional. El deseo de Podemos choca con las declaraciones del PSOE. El jueves por la noche el portavoz parlamentario, Antonio Hernando, salía a la sala de prensa a insistir en la necesidad de un acuerdo a tres y en que todavía había margen para él. La "vía 199". El PSOE no esperaba la reacción de Podemos, que anuló la convocatoria prevista, y mucho menos la comparecencia de este viernes. Hernando, tras Iglesias, salía ante los medios a acusar a Podemos de "cerrar la puerta al cambio" tras mostrar su "indignación" por su actitud. Fuentes del equipo negociador del PSOE aseguran a eldiario.es que tras la reunión del jueves el propio Pablo Iglesias aseguró que iba a salir esta tarde a la rueda de prensa y acordaron hacer hincapié en la "cordialidad" de la cita. Pero entre medias, Podemos cambió de opinión y optó por retrasar un día la comparecencia. Todas las fuentes de Podemos consultadas por eldiario.es recuerdan que Iglesias hizo referencia a dicha cordialidad en su comparencian y coinciden en que la firmeza del PSOE y de Ciudadanos en defender el acuerdo firmado entre ambos les llevó a posponer la rueda. "Se decidió que el tema era lo suficientemente importante para debatir con los órganos de dirección", apuntan desde el grupo parlamentario. A la reunión se sumaron las confluencias. De ella salieron las preguntas que se someterán a las bases de Podemos y que En Comú y En Marea tendrán en cuenta a la hora de evaluar su propia decisión si se llega a una votación de investidura.
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2. ABC – diario con ideología de derechas conservador
Título: La semana del 18 de abril, clave para Rajoy Subtítulo: Moncloa apunta a esa semana como el momento de la llamada del presidente a Pedro Sánchez Cuerpo de la noticia: El fracaso de la reunión a tres bandas del jueves en el Congreso, entre PSOE, Podemos y Ciudadanos, ha devuelto el protagonismo a Mariano Rajoy. El presidente en funciones tiene pendiente una llamada a Pedro Sánchez para intentar, in extremis, la gran coalición antes de la convocatoria electoral. Rajoy lo hará «cuando la cosa caiga por su propio peso, y no tardará mucho», según explicó la vicepresidenta en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría. Para ello, el secretario general del PSOE tendrá que «admitir» el fracaso del acuerdo a tres que ha buscado estos últimos días en el Congreso de los Diputados. No se trata tanto de que Sánchez reconozca públicamente su error, algo que es bastante improbable que suceda, sino de que asuma que las vías que ha buscado han hecho agua. Moncloa espera que esa situación se produzca en la semana del 18 de abril, día en que Podemos hará públicos los resultados de su consulta a las bases sobre el «Gobierno Rivera-Sánchez». En esa penúltima semana antes de una convocatoria de elecciones podría decidirse el futuro político de España, porque la siguiente semana debería estar reservada a una eventual ronda de contactos de última hora del Rey, y al debate de investidura. «Contumacia en el error» A Sáenz de Santamaría le sorprende la «contumacia en el error» que está demostrando Sánchez. Para ser exactos, en tres errores: «Negarse a hablar con el PP, no aceptar que Ciudadanos es insuficiente para un acuerdo y pretender el entendimiento con Podemos, que nada más sentarse a la mesa plantea un referéndum» de independencia en Cataluña. Según el Gobierno, el PSOE es el que tiene «la llave» para integrarse en un Gobierno de coalición presidido por Rajoy, o bien para que se convoquen elecciones generales de nuevo. También la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, criticó la «lucha a codazos» entre el PSOE, Podemos y Ciudadanos para «ocupar los sillones del Consejo de Ministros». «Todo gira en torno al ego de Pedro Sánchez, que obtuvo el peor resultado de la historia del PSOE», advirtió.
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3. ARA – diario de centro-izquierda nacionalista catalán
Título: PSOE, Podem i C’s fan evidents les diferències i liquiden la negociació Subtítulo: Iglesias consultarà a les bases quin suport té el pacte Sánchez-Rivera i el PP ja festeja els socialistes Cuerpo de la noticia: El serial s’ha acabat i ja no hi ha cap guia per a pactes que valgui. Tant el PSOE com Podem i Ciutadans (C’s) han decidit tirar la tovallola. I després de 111 dies de bloqueig d’ençà de les eleccions espanyoles, pren més força que mai un escenari: que el 26 de juny calgui tornar a les urnes. Els tres partits van escenificar ahir les seves diferències i van liquidar tota via de negociació a tres bandes. Només han aconseguit seure cara a cara dues hores i mitja per constatar que no hi ha cap via possible per a l’entesa. Pedro Sánchez va decidir just després del 20D intentar la quadratura del cercle. Sumar liberals i progressistes, i aconseguir un “gran acord transversal” amb Podem i C’s. Una estratègia que els socialistes han alimentat durant mesos malgrat que Pablo Iglesias i Albert Rivera han deixat clares des d’un principi les seves intencions. El primer, un govern d’esquerres; el segon, una gran coalició amb el PP. Ahir, només un dia després de l’única reunió a tres, es va constatar finalment que el relat que Ferraz ha brandat des de finals del 2015 no té més recorregut. Tant el PSOE com Podem i C’s van tornar a evidenciar les seves diferències i van decidir liquidar la negociació. Qui en té la culpa? Per a Iglesias, la inflexibilitat del PSOE i C’s a l’hora de fer concessions; per a Sánchez, que Podem no hagi volgut parlar mai realment de continguts ni de polítiques, i per a Rivera, que el partit lila no accepti un govern reformista sense demanar res a canvi. “Tot ha sigut un estratagema”, denunciava ahir el portaveu dels socialistes al Congrés, Antonio Hernando, sobre la decisió d’Iglesias de consultar a les seves bases si avalen un govern PSOE-C’s. Els socialistes, però, obvien ara que negociaven amb Rivera mentre seien amb les forces d’esquerres per arribar a un acord. Un pacte al qual convidaven ara Iglesias, però amb l’exigència només d’“enriquir-lo”. Fracàs, i ara què? Quin recorregut queda ara? Què pot passar abans de la convocatòria automàtica d’eleccions anticipades si el 2 de maig no hi ha president a l’Estat? El Congrés està instal·lat en una dura lluita pel relat de tots els partits per desempallegar-se de
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l’estigma de ser els causants d’haver precipitat les eleccions. El PSOE assegura que continuarà treballant per formar un “govern del canvi”. Però no va concretar amb qui, un cop trencades les negociacions amb Podem. Iglesias va anunciar ahir que entre el 14 i 16 d’abril consultarà a les seves bases si avalen l’acord de Sánchez i Rivera. I Ciutadans continua emplaçant el PP a trucar al PSOE per asseure’s a parlar i explorar una gran coalició que permeti a Espanya disposar d’un nou govern. Des del punt de vista de Podem, l’escenari només condueix a dues solucions: o la gran coalició o un govern d’esquerres. Per això, en la consulta que el partit farà als gairebé 400.000 inscrits que té també preguntarà si avalen la seva estratègia. “¿Vols un govern basat en el pacte Sánchez-Rivera? ¿Estàs d’acord amb la proposta de govern del canvi que defensen Podem, En Comú Podem i En Marea?”, seran les dues qüestions traslladades a la militància. Els resultats es coneixeran el 18 d’abril. Amb aquesta estratègia, Iglesias busca descarregar la responsabilitat a les bases i intentar traslladar la patata calenta de no haver aconseguit arribar a un acord. Així també intenta reactivar les bases, que havien perdut protagonisme en l’últim any: en l’última consulta, pel programa del 20-D, la participació va ser del 3,9%. Qui és el culpable del desacord? S’ha instal·lat en el relat oficial sobre les negociacions per investir president a l’Estat que Podem ha sigut el més intransigent. “Iglesias coincideix amb Mariano Rajoy que tots dos han estat buscant les noves eleccions des del primer dia”, va avisar Hernando. El portaveu socialista va assegurar que Podem “treballa perquè no hi hagi canvi”. “Les consultes són per trencar o per unir. La d’Iglesias és per a la ruptura”, va dir. El portaveu de l’equip negociador del partit taronja, José Manuel Villegas, el va secundar poc després, però amb la variable del PP. “Si Podem o el PP no rectifiquen, hi haurà repetició d’eleccions”, va advertir. De fet, la vicepresidenta del govern espanyol en funcions, Soraya Sáenz de Santamaría, va brandar la mateixa dicotomia: o gran coalició o eleccions. Durant la roda de premsa posterior al consell de ministres, va carregar contra Sánchez per la seva obstinació en “l’error” de negociar un acord amb Rivera i Iglesias. “Si no vol eleccions, té una opció molt clara: asseure’s a parlar amb Rajoy sobre un govern de coalició”, va expressar la vicepresidenta. Cessions, també en el referèndum El PP ja parla de Sánchez com unJudes disposat a trair l’acord amb Rivera per segellar un govern d’esquerres amb els independentistes. Una opció que reclamen veus dins del PSOE, com la de l’excandidat en les primàries del partit i líder d’Esquerra Socialista, José Antonio Pérez Tapias. “Siguem seriosos: Podem ha comès errors durant les negociacions, però el PSOE va bloquejar el pacte amb Podem des del comitè federal del 28 de desembre”. Va ser llavors quan Ferraz es va comprometre a no pactar amb ningú que defensi el referèndum. Iglesias va negar ahir que aquest tema hagués torpedinat les negociacions. De fet, apareix com una de les “cessions” del document presentat en la reunió de dijous. Tant el PSOE com C’s ho van presentar com una línia vermella. “Tant de bo hi hagués molts més socialistes com Iceta”, apuntava el líder de Podem, que intentava obrir escletxes entre els socialistes. Avui Podem comença a Barcelona una gira per tot l’Estat amb regust de precampanya. Rajoy també serà a la capital catalana.