ÁREA EMOCIONAL
Texto: M. en C. Joseline Hidalgo & Psic.Marlen Ayala.
MABEL Mujer Amada
Ser madre
CONTEMPORÁNEA
G
eneralmente, estamos rodeados de la idea de que ser madre es una experiencia de amor y dulzura, qué si bien es real, no está considerando que nuestra vida cambia por completo, ya que requerimos reorganizar nuestro tiempo y nuestra vida con la llegada del bebé, así como darte cuenta que tu cuerpo no es el mismo después de un embarazo. Ser Madre es uno de las decisiones más importantes en la vida de una mujer que trae consigo una revolución de emociones, pero a pesar de lo que esto implica, es importante reconocer que nosotras tenemos la capacidad de brindar vida y llevar dentro de nosotras a este nuevo ser. Socialmente, pareciera que ser Madre es una profesión con la que se carga prácticamente toda tu vida y que requieres especializarte en ello sin mirar a la Mujer que eres. Por tal motivo, es importante entender que antes de ser madre, eres mujer; dejando de lado la definición biológica, ser mujer es vivir con plenitud, disfrutando tu vida no a través de una pareja o un hijo, sino siendo leal a tus necesidades, pensamiento y anhelos. Algunas veces la sociedad ejerce cierta presión mostrando una perspectiva de lo que es “correcto”, mostrando a la mujer la ideología que al ser madre y vivir en pareja, las prioridades deben de ser otras, primero los hijos, después la pareja y si queda algo de espacio podría ser ella. Con esto quiero decir que, pareciera que al ser madre la mujer debe cambiar sus
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metas, sus rutinas, su estilo de vida y sus deseos, esto con la finalidad de hacer feliz a otros. En pocas palabras, el orden se invierte siendo madre y después mujer. En muchas ocasiones se cree que puedes ser madre, pero dejar de ser mujer, o bien, ser mujer, pero no una buena madre. No es buena ni mala decisión, es una elección, es tener la posibilidad de dar vida, de compartir tu tiempo con una persona que te hará crecer y aprender, experimentar una nueva etapa del ser mujer; lo importante es no dejar de lado tu independencia y crecimiento. Pregúntate, ¿cuándo fue la ultima vez que hice algo sola, salí con mis amigas, hice un deporte o salí con mi pareja a solas? Si no recuerdas cuando fue la última vez que sucedió esto, entonces te estas olvidando de tu bienestar emocional y mental. No tienes porque irte a ningún extremo, solo es importante mantener tu equilibrio y tranquilidad. Por ello, propongo que reformemos el concepto de ser madre como parte de lo que significa ser mujer. Es decir, como un ser integral que está conformada por su cuerpo, su salud mental y emocional, su capacidad de procrear, cuidar y proteger. Un ser que es profesionista, que disfruta dedicar tiempo a su propio cuidado, hobbies, familia y amigos. En pocas palabras, una mujer completa que es abundante en amor para darse a sí misma e irradiar a los que la rodean.
