PROYECTO CONTRACT 110 by Arantza Álvarez

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“ Tenemos que ser críticos y seguir explorando ” BELÉN MONEO MONEO BROCK STUDIO

La constante búsqueda de nuevos lenguajes caracteriza la carrera de Belén Moneo y Jeff Brock, dos arquitectos de formación norteamericana, que entienden su trabajo como una seria respuesta a las circunstancias específicas de cada proyecto. Conversamos con Belén Moneo sobre la trayectoria de esta firma de marcado carácter internacional y sobre las nuevas direcciones hacia las que se encamina su trabajo. Entrevista: Arantza Álvarez. Foto retrato: Ángela Martín Retortillo

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Me aceptaron en Harvard y a mi padre le ofrecieron, en lugar del puesto de profesor invitado, el de decano de la facultad de arquitectura. Así que en el año 1985 nos mudamos todos a la vez. En Harvard no había arquitectura como primera licenciatura, y estudié Bellas Artes e Historia del Arte, aunque sabiendo que posteriormente iba a hacer un Máster en arquitectura.

Espacio Fundación Telefónica Madrid El Espacio Fundación Telefónica forma parte del proyecto de rehabilitación integral del edificio de la compañía, considerado una de las joyas de la arquitectura de principios del siglo XX en Madrid. La propuesta parte de una sinceridad constructiva que devuelve el edificio a su estado original, recuperando sus valores arquitectónicos tanto a nivel formal como conceptual. Destaca en esta intervención la nueva entrada mediante un gran atrio que recorre las cuatro plantas y permite percibir globalmente toda la di-

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mensión de la obra. Esta mirada integral se refuerza mediante dos elementos que comunican todas las plantas: un ascensor panorámico y una escalera helicoidal. La escalera está apoyada sobre una estructura de aspas que cruzan el vacío en diagonal, conectando pilar a pilar. Así las aspas, revestidas con planchas de acero corten, permiten el arriostramiento de las fachadas inmediatas mientras sirven como apoyo de esta singular escalera escultórica. http://espacio. fundaciontelefonica.com/ Fotos: Moneo Brock

Siendo hija de Rafael Moneo, desde niña has vivido muy de cerca el ambiente de la arquitectura ¿Has querido ser siempre arquitecto? De pequeña quizás me interesó más el mundo del arte, la pintura y la escultura. Mi padre trabajaba mucho y tenía tantas ocupaciones, que su ejemplo me desanimaba. Me gustaban mucho las artes, las humanidades y también las matemáticas y las ciencias. De hecho empecé estudiando Ciencias Físicas en la Universidad Autónoma de Madrid, pero siempre sin dejar de dibujar y de pintar. Allí estuve un año, pero esa materia era demasiado abstracta para mí, ya que su interacción con los problemas sociales y culturales de nuestro tiempo era nula, así que finalmente tomé la decisión de estudiar arquitectura en Estados Unidos. La arquitectura suma arte y ciencia. ¿Por qué no en España, siendo tu padre profesor de la ETSAM y catedrático de la ETSAB? ¿Influyó que tu padre estaba allí en esos momentos? Cuando tenía once años me trasladé con mi familia a Nueva York, porque mi padre estaba dando clase en la Cooper Union y en la Universidad de Columbia, y me fascinó esa ciudad y el método americano de enseñanza. Posteriormente, con dieciséis años estudié de nuevo en EEUU un curso y desde entonces mi idea era volver en algún momento a estudiar en la universidad americana. Después del primer año de Físicas en España, decidí que prefería seguir estudiando en Estados Unidos. Simultáneamente a mi padre le invitaron como ”visiting profesor” en Harvard y yo ssolicité la admisión en varias universidades.

¿Y Jeff? Su entorno familiar está también relacionado con la arquitectura y el arte. Hay varios arquitectos en su familia, su hermano mayor y su primo, su padre es ingeniero, pero dibuja muy bien, su abuela era pintora, tiene un hermano que es fotógrafo... Completaste tu formación en Harvard con un Máster en la Universidad de Columbia Sí, es así. Allí es donde conocí a Jeff. Fundáis vuestro estudio en 1993 en Nueva York y vuestros primeros proyectos son de interiorismo de viviendas que tuvieron bastante repercusión mediática ¿Por qué os trasladáis a Madrid en el 2002 y no os quedáis allí? Influyeron factores profesionales y circunstanciales. Nos encantaba vivir en Nueva York, y aunque en cuestión de trabajo teníamos buenos encargos, nos parecía que iba a ser muy difícil para un estudio pequeño dar el salto de proyectos de lofts a edificios de escala mayor. Paralelamente colaborábamos con mi padre en algunos proyectos fuera de España, como el Museo de Estocolmo y la Cranbrook Academy of Art, por lo que teníamos experiencia trabajando en obras de mayor envergadura. En el verano del 2001 visitamos el Balneario de Panticosa y tuvimos la oportunidad de que nos propusieran hacer el Palacio Termal. Al principio pensamos hacer el proyecto desde nuestro estudio de Nueva York, pero coincidió con el atentado de las Torres Gemelas, y decidimos que era un buen momento para instalarnos en España por un periodo. Luego aquí nos surgieron más trabajos y nos hemos quedado. ¿Os pareció muy diferente la forma de trabajar de EEUU y

Palacio Termal. Balneario de Panticosa El diseño consistía en encontrar un equilibrio entre un volumen exterior respetuoso con su entorno construido y natural, y un extenso programa. El edificio se construye contra la ladera de la montaña. Una serie de muros curvilíneos o “cintas” definen su volumen exterior. El complejo programa y los condicionantes urbanísticos requieren que gran parte de la superficie edificada se encuentre bajo tierra, por ello tanto la entrada de luz na-

tural como las vistas del entorno natural se convierten en prioridades. Las características volumétricas del edifico así como la estratégica ubicación de los ventanales que enmarcan vistas de las montañas y el circo, ayudan a situar y a orientar al visitante, mientras que las cintas superpuestas envuelven y mezclan los espacios que se entretejen en su interior. http://www.panticosa.com Fotos: Luis Asín y Moneo Brock

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España? Sí, al principio nos chocó mucho. Aquí los calendarios son mucho más relajados, y si alguien se retrasa, no pasa nada, mientras que en EEUU si no cumples los plazos, es un auténtico desastre. En España somos además menos estrictos con los sobrecostes económicos porque la fase de planificación, en general, es menos rigurosa que en USA. Por otro lado, esta falta de rigor puede traducirse en que en nuestro país hay una mayor flexibilidad. Y esta flexibilidad con los clientes, los contratistas y los oficiales, puede ser muy beneficiosa durante la obra. El arquitecto puede incorporar nuevas soluciones que no estaban en el proyecto inicial e ir mejorándolo durante el proceso. ¿Con qué manera de trabajar te quedas? Yo casi prefiero la forma de trabajar anglosajona. Primero, porque los plazos para realizar el trabajo suelen ser realistas, no como aquí, por lo que la planificación del trabajo puede ser mucho más precisa. Para los clientes el sistema anglosajón es más cómodo, ya que no hay costes ocultos y se va a cumplir el calendario. En España es habitual que el contratista durante la obra intente convencer al cliente de que los trabajos van a costarle más dinero, aunque creo que esta práctica con la crisis, va a desaparecer. En USA a pesar de que hay mucha más burocracia, y tienes que estar escribiendo cartas todo el día para que todas las decisiones queden por escrito, es un método de trabajo mucho más organizado.

Bosque de acero. Recinto Ferial de Cuenca El pabellón actúa como filtro entre el parque y la ciudad. Se compone de un conjunto de veintitrés módulos iguales e inversos, que juntos forman una malla estructural. Su forma arbórea es la de un pentágono irregular compuesto de acero y vidrio, con fuste de cuatro brazos. El conjunto ofrece una composición compleja, un bosque de acero capaz de adaptarse a las particularidades de su ubicación. El edificio, aun compuesto por fragmentos, crea en su interior

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un espacio diáfano, único y continuo; un espacio semejante al que podríamos encontrar en un bosque. Se trata de un espacio desde donde disfrutar del parque, protegido de las inclemencias del tiempo, pero en contacto en todo momento con las vistas del entorno natural. Acoge muchas de sus actividades sociales, como el paseo y la reunión; pero también conciertos, bailes, teatro infantil, talleres, exposiciones y pequeñas ferias. Fotos: Åke Son Lindman

¿Dónde se ejecuta mejor la obra? En España, especialmente durante el boom de la construcción, no había profesionalidad en los oficios, y se construía muy mal. Hemos perdido la mano de obra cualificada y ahora que sería el momento volver a formar a los oficiales, nadie lo está haciendo porque no hay dinero.

En estos 22 años habéis trabajado en escalas y tipologías muy variadas, ¿hay algún hilo conductor que relacione todos estos proyectos y refleje la identidad del estudio? A nosotros lo que nos gusta es no anticiparnos a nosotros mismos. Nos interesa mucho buscar en cada proyecto soluciones y lenguajes que no conocíamos antes. Esto hace que nuestros trabajos sean muy distintos los unos de los otros. Esta forma de trabajar puede sorprender desde fuera, y dar la impresión de que no exista un hilo conductor. Sin embargo, es precisamente el tratar que cada solución o cada proyecto se atengan a sus circunstancias y a sus condicionantes, lo que los relaciona.

Habéis colaborado puntualmente con tu padre en varios proyectos ¿Qué es lo más importante que te ha transmitido como arquitecto? Muchísimas cosas. Su capacidad intelectual y su capacidad analítica sumadas a su amplísimo conocimiento de la disciplina nunca dejan de enriquecer nuestra relación. Siempre nos sorprende cómo utiliza durante el proceso de desarrollo, las circunstancias, incluso las adversidades, para transformarlas en ventajas para el proyecto, lo que refleja una gran creatividad. Es además muy riguroso con su trabajo, muy fiel a sus principios. Trata siempre de ir más allá de la solución inmediata, planteándose todas las opciones, hasta encontrar la más adecuada.

¿Puedes darme algún ejemplo? Sí, en el caso del concurso de Colegio Alemán de Madrid, el programa era complejísimo y con muchos requisitos que parecían irreconciliables. Y tenerlos todos en cuenta dio como resultado que la cubierta debía albergar la pista de atletismo y por lo tanto la morfología del proyecto quedó resuelta así, dando lugar a una volumetría que nos interesó mucho. En el Espacio Fundación Telefónica existía un problema de falta de conexión vertical entre las plantas que debían alojar los espacios expositivos y la calle. Para solucionarlo hubo que crear un gran hueco en vertical que no existía antes y que provocaba que las fachadas se quedaran sin el agarre de los forjados. Al tener que arriostrar las fachadas surgieron las aspas estructurales y de ahí la forma en que estas mismas aspas sujetan la escalera. En nuestros trabajos, no llegamos con una idea preconcebida de cómo debe ser el proyecto, intentamos durante el proceso ir leyendo e ir incorporando todas las circunstancias específicas. Esto hace que el proceso esté vivo y sea único.

¿Ha sido tu maestro más importante? Sin duda alguna como ya he explicado, he aprendido y sigo aprendiendo mucho de mi padre. Pero el conocimiento se obtiene sin cesar cada día y de todo tipo de circunstancias, de las conversaciones con extraños y amigos, de la observación, de la lectura, de la pintura… De él he aprendido que no solo hace falta conocimiento e inteligencia para sacar adelante el trabajo, hace falta sobre todo dedicación plena.

¿En cuál de estas escalas os encontráis más cómodos? Lo que nos gusta del trabajo del arquitecto es que es muy variado. Nosotros no estamos especializados en hacer únicamente un tipo de edificio: hospitales u oficinas... Nos interesa estar abiertos a diferentes escalas y programas. Nos atrae mucho también el campo del diseño industrial y poder trabajar en objetos sin olvidarnos de la escala humana. No es que nos parezca más fácil, porque a veces el diseño es un

Gasolinera San Agustín de Guadalix El proyecto consta de tres pérgolas de acero y geometría curvilínea y un edificio prismático que alberga, además de las instalaciones de la estación de servicio, un restaurante de servicio completo. En los años 40 y 50, el diseño de las estaciones de servicio rebosaba optimismo y modernidad; los diseños hacían uso de voladizos y proyecciones que añadían un aura má-

gica a los espacios cubiertos. Quizá la diferencia entre estas estaciones de servicio y la proyectada por Moneo Brock Studio reside en el carácter lúdico que le aportan las formas curvas de las pérgolas. No es tan solo un refugio: es movimiento fluido, inspirado abiertamente por el paisaje natural de suaves pendientes que le rodean. Fotos: Åke Son Lindman

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reto mayor que el de diseñar un edificio. Incluso se puede decir que los proyectos de menor escala dan mucho más trabajo que los proyectos grandes. Estos últimos años, que ha habido mucho menos trabajo de arquitectura, hemos estado más volcados en el diseño. Diseñar ha sido reconfortante porque nos ha ayudado a no estar parados desde el punto de vista creativo.

Jardín Hospital 1 2 de Octubre, Madrid Se quiere que los niños del hospital, los protagonistas, encuentren en el jardín un espacio que entiendan como suyo, donde la imaginación tenga rienda suelta y donde el contacto con la naturaleza despierte sus sentidos. El diseño se vuelca en el juego como herramienta indispensable para la evasión y el entretenimiento, pero también para el descubrimiento y la amistad. Se parte de una geometría formada a base de círculos de distintos tamaños que se suceden, y

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que permite tener distintas actividades. Se zonifica así la cubierta para dar respuesta a las diferentes necesidades programáticas del proyecto, dejando zonas verdes que ocupan el resto del espacio y rodean siempre los espacios circulares. Se diseñaron unas estructuras ligeras y muy abiertas, unas semiesferas compuestas por elementos romboidales, que con toldos de tela, generan sombra y delimitan grandes espacios de juego. Fotos: Moneo Brock

La mayoría de vuestros clientes son privados, pero también habéis participado en numerosos concursos ¿Qué os mueve a ello? En España los arquitectos están muy acostumbrados a presentarse a concursos. En EEUU prácticamente no existen y como nuestra educación es americana, nosotros no habíamos participado en tantos concursos, hasta ahora. En estos últimos años, debido a la crisis, sí que hemos acudido a bastantes. A nivel creativo ¿qué os aportan? Un concurso es un esfuerzo enorme de tiempo y de recursos humanos, que casi nunca lleva a ganar. Por otro lado es un ejercicio muy enriquecedor, porque en el estudio no hacemos proyectos grandes a menudo, y concursar es una manera de explorar y ejercitar la creatividad. También es bueno ver qué soluciones dan los demás concursantes al mismo problema. ¿Qué tipo de concursos os interesan? El sistema alemán es interesante, porque hay una preselección de 25 o 30 estudios solamente, pero lo malo es que a menudo tienes que tener experiencia previa, por lo que es difícil que los jóvenes puedan acceder. En Francia no tienes que tener una gran trayectoria, porque se dividen los concursantes por su experiencia, pero seleccionan a algunos de cada grupo y se mezclan en el concurso. En España en cambio hay 300 participantes y hoy en día no se sabe si al final el proyecto se va a construir. El concurso de la iglesia en Monterrey que ganamos y en el que estamos trabajando ahora, era un concurso privado con solo tres equipos, uno mexicano, uno colombiano y nosotros. Ganar tiene menos mérito, pero es un sistema más lógico.

En la presentación de vuestra web decís que evaluáis el impacto social y económico de vuestra arquitectura en la sociedad actual ¿puedes explicarme cómo? El trabajo del arquitecto conlleva una gran responsabilidad con la sociedad en la que vivimos. Nosotros nos tomamos muy en serio las necesidades del cliente y también las del usuario final (que no son siempre las mismas). Queremos que el edificio sea un vehículo que exprese el momento en el que vivimos. Nos interesa entender el contexto del proyecto ya sea urbano o natural, que el edificio responda a su entorno aunque sea a su manera. Nuestros edificios son cada vez más sostenibles, ya que nosotros también tenemos más experiencia y conocimientos en esta materia. ¿Puedes darme algún ejemplo en concreto? En la obra de la Iglesia de Monterrey nos hemos volcado para que funcione muy bien su aspecto medio ambiental y que su gasto energético sea mínimo. Hemos tenido que estudiar y entender el clima de Monterrey en profundidad, y luego convencer a los constructores (que utilizan sistemas norteamericanos de ventilación) para que durante los meses menos calurosos se utilice un sistema de ventilación natural, que emplea el campanario como chimenea que expulsa el aire caliente que se genera en la nave principal. También decís que habéis sido selectivos en la elección de los encargos ¿Habéis rechazado muchos clientes que no os dejaban trabajar como queríais? Lo que queremos decir es que hemos preferido tener menos trabajo (aún en los tiempos de bonanza) y hacerlo tan bien como podamos, dedicándole el tiempo que requiere, a tener muchos proyectos y no poder hacerlos satisfactoriamente. Nos gusta poder disfrutar de nuestro trabajo. Por otro lado, es verdad que los buenos proyectos suelen estar asociados a buenos clientes, y eso no quiere decir que te dejen hacer lo que sea. ¿Cómo es vuestro cliente ideal? Nos gusta que se involucre y sea exigente, aunque sea pidiendo más y cuestionando las decisiones, porque estos nuevos requisitos son muchas veces lo que necesita el arquitecto para mejorar el proyecto. Tener carta blanca no es siempre bueno. Establecer un buen diálogo con el cliente y que éste quede satisfecho, es lo óptimo, porque eso es lo que

Edificio de Ciencias Interdisciplinarias. Universidad de Columbia, Nueva York Trabajando como equipo de diseño arquitectónico con Rafael Moneo, Moneo Brock Studio gestionó el proyecto a lo largo de todo el proceso de diseño y construcción. Construido sobre el preexistente gimnasio Francis S. Levien, el edificio plantea un gran reto estructural al tener que salvar la luz de 40 m de la instalación original. Esta hazaña de ingeniería se convirtió en el gesto generador del proyecto. Representando la trama

estructural mediante una geometría de lamas de aluminio, el edificio genera un mosaico de luz y de sombra, que aparece como una estructura ligera y brillante sentada sobre un pedestal de piedra tallada. La fachada del edificio al campus es casi enteramente de cristal, mostrando el funcionamiento interior del edificio y enfatizando la apertura de las ciencias hacia la comunidad universitaria. Fotos: Michael Moran

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Moderna Museet and Arkitur Museet Estocolmo El diseño del proyecto fue el resultado de un concurso ganado por Rafael Moneo, que Belén Moneo y Jeff Brock gestionaron en Estocolmo. Sus responsabilidades cubren todos los aspectos del edificio ya que el proyecto fue rediseñado varias veces debido a requisitos programáticos y presupuestarios. Una vez que el edificio se definió, Moneo Brock se ocuparon de los interiores de los principales espacios públicos. El programa incluye espacios de expo-

sición, aulas, auditorios, cerca de 95.000 metros cuadrados que se insertan en el entorno histórico de la isla Skepsholm de una manera natural y sensible. El uso de la iluminación natural en los espacios expositivos es uno de los aspectos más importantes del proyecto. La linterna resultante proporciona un eficaz medio de control de la luz natural y una icónica imagen del edificio, ya que se ve desde toda la ciudad. Foto: Michael Moran

“De mi padre he aprendido que para sacar adelante el trabajo, hace falta dedicación plena” 38

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garantiza el mejor uso del edificio en el futuro. Por el contrario cuando al iniciar un proyecto vemos que por sus circunstancias la situación no va a ser ventajosa para poder hacer buena arquitectura, entonces lo dejamos. ¿De qué manera ha evolucionado el trabajo del estudio en estos años? ¿Cuáles han sido los proyectos más decisivos? La arquitectura requiere de la experiencia de construir, y esta experiencia es lo que va abriendo nuevos caminos de investigación y de lenguaje, ya sea por los avances técnicos o por distintos usos que podemos dar a los mismos materiales o a materiales nuevos y que te llevan a ofrecer o a aprender nuevas soluciones constructivas. Quizás un proyecto decisivo fue el edificio para la Universidad de Columbia en Nueva York, en el que colaboramos con mi padre. Fue un proyecto muy complicado, pero lo resolvimos muy bien, y nos ha dado la seguridad para afrontar trabajos más complejos en el futuro. Para los arquitectos es importante rodearse de un buen equipo de colaboradores, asesores técnicos, etc. que nos permitan afrontar nuevos retos juntos. ¿Cómo funciona el tándem Belén / Jeff? ¿Cómo repartís el trabajo y las funciones? ¿Qué tenéis en común y en que os diferenciáis a la hora de trabajar? Siempre intentamos trabajar juntos en la fase del diseño inicial, porque a los dos nos parece muy valiosa la opinión del otro. Luego tratamos que cada uno se responsabilice de una parte, pero el hecho de trabajar el uno al lado del otro nos empuja a pedirnos recíprocamente la opinión para resolver los problemas puntuales que encontramos. El diálogo que requiere una colaboración nos parece enriquecedor, por eso también nos parece más satisfactoria la arquitectura que el arte, que es un trabajo más individualista, donde no existe ese debate y hay menos crítica. Durante esa discusión se van abriendo más puertas, por lo que al final el abanico de posibles soluciones es mayor. Además el hecho de analizar las cuestiones de diseño conjuntamente da más tranquilidad, ya que no eres tú el único que da una solución por buena. ¿De dónde surge vuestra inspiración?

Serie Frontalis de Roca en colaboración con Rafael Moneo Frontalis es una reacción frente a las tendencias contemporáneas minimalistas y trata de recuperar la instrumentalidad de los aparatos sanitarios, volviéndolos a dotar de la condición de objetos que tenían en el pasa-

do. La nueva serie recupera la condición ondulante y sinuosa que han tenido los elementos del cuarto de baño durante buena parte del siglo XX y que hoy, sin embargo, se ha perdido. Foto: Moneo Brock

Es difícil saberlo, porque siempre está el subconsciente de cada uno funcionando a su ritmo. Sin duda la inspiración surge del propio proceso, del momento en el que se dibuja, el propio dibujo se retroalimenta. Pero si tenemos que mencionar las ideas que pueden provenir de estímulos externos, podemos decir que el mundo del arte siempre está ampliando nuestras miras. También somos receptores del lenguaje de la ciudad, del collage que compone y de observar lo que pasa en la arquitectura contemporánea con un ojo crítico. A veces nos guían los materiales, la luz, las soluciones constructivas... Quizás lo que más nos atrae es la mezcla de todos esos factores, pensar en cómo se modula

Carro para el jamón y lámpara Joselito Tres originales piezas numeradas y elaboradas a partir de una sorprendente estructura de madera lacada y metacrilatos que, a modo de armadura, protege los productos Joselito pero al mismo tiempo revela su interior. Para el Jamón Joselito Vintage 2004 se ha diseñado una estructura de costillas de

madera cubiertas por un velo traslúcido que deja entrever la silueta del jamón iluminado por una hilera de leds. Cuando se extrae el jamón, se reinventa en una original lámpara de pie, de fácil movilidad y transporte, un objeto de arte funcional diseñado para perdurar. Foto: Andrés Barrón

el espacio y a la vez en sus texturas y colores… Nuestros proyectos reflejan cierta complejidad espacial que no sabemos cómo surge, quizás sea la influencia de todos estos factores. Artistas como James Turrell, Robert Morris o Robert Irwin, a pesar de ser minimalistas, nos interesan mucho… ¿De qué manera os ha afectado la crisis de la que parece que estamos saliendo? Nos está afectado muchísimo, como a todos los arquitectos de España, estos años están siendo desconsoladores e interminables. Ahora

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Loft Grenwich Street, Nueva York

Concurso para el Colegio Alemán, Madrid El desarrollo general de la escuela aprovecha al máximo su posición al borde de la ciudad, combinándose en un único paisaje la belleza de las vistas de la sierra madrileña, las zonas libres de la planta inferior y la singular volumetría del edificio. Las cubiertas del edificio se conciben para ser utilizadas como terrazas durante todo el año. Su forma sinuosa fusiona el edificio con la naturaleza e incrementa los espacios exteriores para

los estudiantes. La naturaleza no fragmentada y continua del edificio garantiza una funcionalidad óptima, mientras que su curvilíneo trazado proporciona a cada zona un carácter espacial único. Proyecta globalmente una imagen acogedora, ofreciendo a los usuarios una secuencia de experiencias espaciales caracterizadas por la libertad y la interconectividad, ideales para el aprendizaje y el crecimiento.

“Nos interesa mucho buscar en cada proyecto soluciones y lenguajes que no conocíamos antes” 40

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tenemos trabajo en México, pero hemos dejado de tener trabajo aquí. La enseñanza nos ha ayudado a los dos a recuperar la ilusión de seguir aprendiendo. El año pasado yo enseñé en Rhode Island School of Design y Jeff en Pratt Institute. Y ahora los dos estamos enseñando en la Universidad de Navarra y yo también en la ESTSAM. ¿En que estáis trabajando ahora? La Iglesia en Monterrey está en construcción. En breve vamos a comenzar la obra del proyecto del jardín infantil para la cubierta del Hospital 12 de Octubre de Madrid, en la que hemos colaborado con la Fundacion JuegaTerapia. Estamos haciendo un loft para un artista aquí en Madrid. visitando y estudiando locales para un restaurante. Hemos terminado el proyecto de una casa modular que el fabricante quiere comercializar pronto.Y estamos también colaborando con un promotor en Madrid para poder concursar conjuntamente en proyectos de más envergadura. Periódicamente hacemos concursos en España y fuera. Como describiríais el momento actual que vive el estudio. Aunque la situación en España sigue siendo devastadora para nuestra profesión, la verdad es que nosotros este año estamos más contentos. La obra de la iglesia está muy avanzada y nuestro cliente, que es excelente, está muy satisfecho. A nosotros, trabajar con él y en un país tan distinto, nos ha estimulado mucho. En el último año nos han invitado a participar en varios concursos internacionales restringidos, uno para elaborar el prototipo de estaciones de servicio en Abu Dhabi, y ahora estamos haciendo otro para el centro histórico de la Ciudad de Santo Domingo. También os habéis trasladado a este nuevo espacio. En el último año nos hemos mudado a una nave más amplia y con espacio extra, lo que nos va a permitir crecer en todos los aspectos. La mudanza nos ha forzado a ordenar y tirar material, y a examinar nuestro trabajo hasta la fecha. Sin duda empezamos una nueva etapa en este espacio cómodo y luminoso. ¿Vuestros nuevos proyectos son sólo de arquitectura? También de diseño de producto. Hemos fabricado una chimenea para DAE Chimeneas, que estos días se expone en el Matadero y hemos

dibujado una lámpara para Artemide, que están estudiando si pueden desarrollar. También hemos hecho dos alfombras que produce Now Carpets y ahora una nueva colección que estamos en vías de comercializar. Siempre que podemos, trabajamos en proyectos de arquitectura y diseño en paralelo. En el espacio extra del nuevo estudio, que se llama “_2B space to be,” estamos haciendo exposiciones, hasta ahora de amigos artistas, pero las vamos a ampliar este año a exposiciones de diseño y arquitectura. Con respecto al equipo con el que trabajas ¿De cuántos miembros se compone? ¿De qué tipo de perfiles os gusta rodearos? Siempre hemos tenido un estudio pequeño, con poca gente y siempre han sido arquitectos, y en los últimos años también estudiantes en prácticas. Ahora somos seis arquitectos, una administrativa y dos estudiantes de arquitectura. Nos gustaría en el futuro trabajar con diseñadores de producto. ¿Qué opinión os merece el panorama actual de la arquitectura y el diseño a nivel nacional e internacional? En España ha habido poco trabajo estos años, pero eso ha motivado que la gente en general los arquitectos y diseñadores en particular, se haga más emprendedora más imaginativa, por lo que sigue existiendo una gran cantidad de energía y de profesionales con talento, aunque muchos de ellos estén trabajando fuera. Creo que en nuestro país, la crisis no ha malogrado la creatividad y los arquitectos tenemos libertad para trabajar en nuestro lenguaje. Haya o no crisis, tenemos que ser críticos y esforzarnos por seguir explorando. Esa búsqueda es al final lo más preciado de nuestra profesión. Creo que los arquitectos españoles siguen siendo exigentes consigo mismos, por lo que el nivel de su trabajo sigue siendo muy bueno. Aunque tengo que admitir que el respeto hacia nuestra profesión en España se ha desmoronado, empezando por el poco respeto que muestran las administraciones publicas cuando sacan concursos públicos donde la figura del arquitecto está claramente infravalorada... y continuando por la opinión pública y los medios de comunicación que injustamente han hecho responsables a los arquitectos del exceso de construcción en los últimos años. ¿Y a nivel internacional? Nuestra experiencia en México nos ha hecho entrar en contacto con

Moneo Brock Studio ha tratado de crear un oasis dentro de la gran ciudad. En este espacio rectangular de aproximadamente 25 x 12 metros, que fue un almacén, decidieron crear un entorno flexible para vivir y trabajar, sin privar al área situada en el centro de la valiosa luz del día, mediante un presupuesto muy bajo. Se concentraron los servicios en las fachadas norte y sur, dando a sus cerramientos tratamientos muy diferentes, pero siempre intentando utilizar las cualidades iridiscentes y espectrales de

los materiales elegidos para este fin, creando la ilusión de profundidad y conduciendo la luz. Otro factor clave del proyecto fue la estrategia de iluminación artificial. Su diseño surge condicionado por el reducido presupuesto y por la repetitiva presencia de las vigas del techo. Elementos de madera crean un ligero plano virtual debajo del hormigón. Unos prismas de acero ocultan la presencia de las lámparas, cuya luz se difunde a través de unas láminas de plexiglás. Fotos: Michael Moran

“El trabajo del arquitecto conlleva una gran responsabilidad con la sociedad en la que vivimos” el trabajo de muchos arquitectos interesantes de Latinoamérica. Yo acabo de volver de Colombia donde he asistido a la Bienal de Arquitectura de ese país y puedo asegurar que el trabajo de los colombianos es espectacular. Es muy positivo para todos nosotros no estar mirando siempre lo que pasa en Europa y Norteamérica. Finalmente, ¿Cuales son vuestras metas más próximas y vuestros planes a largo plazo? No nos gusta ponernos metas, porque la vida da muchas vueltas. Pero si tenemos una es tener un proyecto sobre el tablero y estar contentos con lo que dibujamos, con lo que conseguimos construir. Queremos seguir enseñando. Con la crisis hemos retomado esta actividad tan exigente. El hecho de estar expuesto a las ideas de los estudiantes, al diálogo, al análisis, te sumerge en un mundo muy diferente al del día a día del estudio. Y cuando pensamos en trabajar fuera, nos atrae mucho más la cultura latinoamericana, que tiene un pasado y un presente rico, que apostar por China o los países árabes, que son mercados más especulativos. Eso no quiere decir que no vayamos a acabar trabajando allí, porque hay circunstancias que uno no puede controlar.Y nos gustaría mucho volver a trabajar en EEUU, porque Jeff es de allí y ambos tenemos una historia común en ese país. MONEO BROCK STUDIO. C/ Benigno Soto, 14. 28002 Madrid. T. 915 638 056. E-mail: info@moneobrock.com. http://www.moneobrock.com

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