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FOTOGRAFIA DE FAUNA
FOTOGRAFIA DE FAUNA EN Situación controlada
Belén Etchegaray
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Fotógrafa de vida silvestre. Directora de FNAweb.org.
@bels_etchegaray.ph
Situación controlada
Se denomina fotografía de fauna en condiciones controladas cuando se retratan especies que se encuentran dentro de un recinto (cualquiera sea su tamaño).
La obtención de este tipo de fotografías, tiene mala fama entre los fotógrafos de naturaleza; algunos pueden llegar a plantear si es ético hacerlo; más allá de lo que cada uno considere, el real problema ético se presenta si, al presentar una fotografía, no se especifican las condiciones en que se obtuvieron esas imágenes, aparentando un esfuerzo y acercamiento que no fueron reales.
Como comentamos en el artículo “La ética en fotografía de naturaleza”, (Argentina Photo Nature 5): “La sinceridad le sirve a la especie retratada, a nuestros espectadores –con los cuales mantenemos un pacto de confianza-, y a nuestra propia reputación.
Una fotografía aumenta su valor cuando es acompañada de la sinceridad del autor y, sobre todo, si cuenta una historia que busca concientizar al espectador sobre una problemática.”
Nadie puede discutir que la experiencia y las enseñanzas que podemos adquirir al retratar fauna silvestre en un medio natural, es una de
Ocelote (SC). Ph: Belén Etchegaray
las experiencias más maravillosas que existen para el amante de la fotografía de fauna; mientras que la toma de fotografías de animales en cautiverio, no posee enriquecimiento alguno en lo referente al comportamiento de las diferentes especies. En estos sitios se pierde la adrenalina de la búsqueda y el acecho; sin embargo suelen ser una alternativa para quienes están dando los primeros pasos en este fascinante mundo; para obtener retratos de especies que, en la naturaleza, sería casi imposible de conseguir; para lograr registros de especies protegidas o bien para usar esas mismas imágenes buscando concientizar sobre los diferentes temas por los cuales, esas especies, se encuentran cautivas.
Las especies que podemos encontrar en reservas o centros de rescate, son animales heridos o en rehabilitación; la mayoría de las veces como consecuencia directa del mal accionar del hombre (disparos, atropellamientos, mascotismo). Muchas de ellas no podrán regresar a su ambiente natural, pero aún tienen una importante misión que cumplir, como la reproducción en cautividad para la posterior liberación de sus crías, como es el caso del Yaguareté, el Oso
Mirikiná (SC). Ph: Belén Etchegaray
Puma (SC). Ph: Belén Etchegaray
Nikon D800 - 18 mm - f/13 - 1/200 - ISO 1600.
hormiguero o el Cóndor Andino; o bien como embajadores de su especie en programas de educación.
Al fotografiar especies en situaciones controladas, lo que tenemos que lograr son fotografías “creíbles”, y al decir esto no lo hago con ánimo o intención premeditada de engañar al espectador, sino con la idea de representar la dignidad de la especie que estamos retratando (salvo que el mensaje que busquemos, sea otro).
Para lograrlo, deberemos evitar incluir elementos que denote el encierro. Ese quizás sea el mayor desafío al que nos enfrentemos.
Conocer la especie será de mucha ayuda para lograr encuadres correctos, posiciones naturales y saber de antemano, en que situaciones presionar el disparador.
La mayoría de las veces necesitaremos varias horas de trabajo hasta conseguir buenas imágenes, donde tendremos que cuidar al extremo la composición y el fondo.
Otro de los problemas a sortear son las rejas, para lo cual deberemos utilizar el lente más
“En ocasiones trabajo con animales en cautividad para ofrecer detalles que serían imposibles documentar en la naturaleza, o cuando mi aproximación sería una intromisión excesiva en aquella esfera probada de la criatura salvaje” Frans Lanting
Cascabel (SC). Ph: Mariela Bolzan.
Yaguareté (SC). Ph: Belén Etchegaray
Lechuza de campanario (SC). Ph: Belén Etchegaray
“Una fotografía aumenta su valor cuando es acompañada de la sinceridad del autor y, sobre todo, si cuenta una historia que busca concientizar al espectador sobre una problemática” La ética en fotografía de Naturaleza / Argentina Photo Nature 5
largo que tengamos, colocarlo pegado a la reja y enfocar lo más lejos que nos sea posible; de esta manera el desenfoque del lente hará que la reja “desaparezca”. Antes de acercarnos, deberemos asegurarnos que esté permitido hacerlo o bien solicitar los permisos correspondientes.
Si el recinto tiene como protección un vidrio, deberemos evitar que nuestro reflejo salga en él, para lo cual ayuda ir vestido de negro, utilizar un filtro polarizador o bien pegar el lente al vidrio.
Cuando el recinto tenga un tamaño considerable y ambientado adecuadamente para la especie, nos permitirá hacer encuadres más abiertos donde podremos mostrar la especie de cuerpo entero; en el resto de los casos, no nos quedará más remedio que cerrar el encuadre y realizar algunos retratos o tomas de medio cuerpo.
Los serpentarios son otra alternativa para lograr fotografías de ciertas especies potencialmente peligrosas o difíciles de encontrar en la naturaleza, siempre que su manejo esté controlado por un especialista.
Por último, hay tres cosas que, como fotógrafos de naturaleza, tenemos que tener muy presentes: 1- No mentirle al espectador y aclarar cuando una fotografía está realizada en situación controlada (mucho más si esa imagen se presenta en un concurso). Una buena fotografía no deja de serlo por haber sido realizada en situaciones controladas y aclararlo, habla tanto de la especie como de quien la retrató. 2- Informarnos si el centro de cría o rescate trabaja realmente en el resguardo de las especies que aloja y las mantiene en buenas condiciones (recintos y alimentación adecuados, etc) o si son sitios donde solo se lucra con ellas. Tratemos de evitar éstos últimos. 3- Interioricémonos de la problemática de la especie que fotografiamos y utilicemos esas fotografías para contar historias que concienticen a quien la observa.
Difundiendo ayudamos a que se tome conciencia, se cuiden las especies silvestres y haya cada vez menos que tengan que padecer el cautiverio
LA FOTO DE APERTURA
El águila pasó varios meses en el Programa de
Conservación y Rescate de Aves Rapaces del
Zoológico de Buenos Aires (año 2007), hasta que logró recuperarse de las heridas y finalmente tuvo la fortuna de ser liberada.
En la foto Andres Capdeville en su tarea diaria de entrenamiento para que gane masa muscular y vuelva a estar apta para volver a la vida silvestre.