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TECNICA
CONSTRUCCION DE UN estaNque
PARA FOTOGRAFIA DE AVES
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Serafín Robert
Fotógrafo de naturaleza
@serafinrobert.fotonaturaleza
Hacía ya varias semanas que había comenzado la cuarentena, y tenía abstinencia de fotos… por lo que puse en práctica la creatividad y, con la ayuda de mi papá y los tips de algunos amigos fotógrafos, me dispuse a construir un estanque para atraer aves.
EL ARMADO
Para la estructura (patas, refuerzos, etc.) utilicé unos postes que teníamos en desuso. En la base coloqué el nylon que contendría el agua; éste fue de color negro para resaltar los reflejos, y de la medida más gruesa que viene. La base la hice de machimbres y tablas ajustadas a los postes horizontales, triangulando con ramas gruesas de un árbol caído para reforzar la estructura.
Cuando la base estuvo lista, acomodé el nylon, reforcé los costados para que el agua se mantuviera en su lugar y... ¡¡¡listo!!! Ahora solo faltaba la mejor parte: preparar el escenario lo más natural posible.
LA ESCENA
Busqué distintas especies de plantas, piedras redondeadas para que el escenario fuera más real, y algunos troncos, barro y arena. Para atraer a las aves, improvisé un comedero donde coloqué semillas y frutas esperando así atraer más variedad de aves.
Una vez que tuve el escenario listo, solo me faltaba improvisar un escondite (hide), así fué que con unos troncos de una baranda vieja de la galería de casa y unas pocas chapas para el techo, logré armar una mínima, pero cómoda, estructura donde esconderme; incluso hice un estante interno donde poder apoyar agua y comida, ya que pasaría largas horas a la espera de las aves.
Nikon D7100 - 300 mm - f/6.3 - 1/1000 - ISO 800.
Estanque terminado y escondite (derecha).
Nikon D7100 - 300 mm - f/6.3 - 1/3200 - ISO 800. Nikon D7100 - 200 mm - f/5.3 - 1/1000 - ISO 800.
COMIENZA LA ACCION
Por suerte, no tardaron mucho en llegar, ya que como hacía varios meses que no llovía, al día siguiente hubo más de diez especies distintas disfrutando del agua, bañándose, hidratándose y alimentándose… ¡¡¡Cuánta alegría me dio ver que el trabajo daba frutos tan pronto!!!
Sin perder un segundo me metí al hide a esperar y las aves comenzaron a desfilar frente a mí: bandadas de Tordos músicos que bajaban a bañarse, Benteveos y Calandrias a tomar agua, Horneros, Chingolos y Ratonas que buscaban bichitos entre las plantas...
Esas especies que, para la mayoría y por ser comunes, no les prestamos atención, me regalaron varias jornadas fotográficas increíbles!
Cada tanto recibía visitas especiales, como el Arañero y el Pitiayumi; incluso a veces, y con un poco de suerte, llegaba algún Naranjero.
Con el tiempo, el estanque se fue transformando en un increíble ecosistema, en donde un montón de formas de vida se relacionaban entre sí.
Cuando el agua y el alimento escasean en la naturaleza, colocar semillas, fruta, y agua a disposición de las aves, es algo que ellas agradecen, y seguramente visitaran nuestro escenario para alimentarse, o darse un buen baño. De paso, podremos disfrutar de su hermosa y agradable presencia sin movernos de casa