LA MADERA: SOLUCIÓN SUSTENTABLE AL DÉFICIT HABITACIONAL EN CHILE

El Plan de Emergencia Habitacional (PEH) del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu), cuyo objetivo es disminuir el déficit en esta materia a nivel nacional, tiene como meta la construcción de 260 mil nuevas viviendas para el periodo 2022-2025. De ese total proyectado, ya hay 124.410 en ejecución, por lo tanto, restan 135.590 viviendas por construir para los próximos tres años. La apuesta ministerial, considera un fuerte impulso a la construcción industrializada, buscando eficiencia, ahorro de tiempo y una contribución al medioambiente.

Pero al margen de los grandes atributos de la madera en la construcción (renovable, reciclable, dúctil, permite construcciones en altura, sus construcciones tienen bajas huellas de carbono y agua), la pregunta de fondo es si existe suficiente disponibilidad de este recurso para impulsar decididamente la construcción masiva con este material.

Al respecto, el Instituto Forestal (INFOR) -organismo dependiente del Ministerio de Agricultura- ha venido desarrollando un arduo trabajo de investigación y sistematización de información que permite concluir que, efectivamente, en Chile los aserraderos podrían producir suficiente madera aserrada estructural (MAE) y también las plantas de tableros OSB (Oriented Strand Board, por sus siglas en inglés) pueden ofrecer este producto en los volúmenes necesarios.

La evaluación consideró dos proyectos de vivienda, con más y menos consumo de MAE, y permitió estimar que la demanda anual por MAE para la construcción de las viviendas consideradas por el PEH entre las regiones de Coquimbo y Los Lagos, está en el rango de 126 mil a 504 mil metros cúbicos/año, lo que se compara favorablemente con la oferta de madera aserrada para la construcción de 767 mil metros cúbicos del año 2021. Sin embargo, la mayor parte de este volumen no cumple con los requisitos técnicos de la MAE (humedad, dimensiones, grado estructural, impregnación), de tal manera que la gran tarea que se debe impulsar, estimular y apoyar es que los aserraderos produzcan MAE certificada.

En efecto, los volúmenes de MAE y tableros OSB que pudieran llegar a demandarse para la ejecución de un programa masivo de construcción de viviendas sociales, podrían ser cubiertos por la industria nacional de estos productos; no obstante, la opción de que ello se concrete pasa por tomar varias decisiones tanto en el ámbito de la demanda, como en el de la oferta.

Sandra Gacitúa Arias Directora Ejecutiva Instituto Forestal, INFOR