3 minute read

enrique urbizu

Next Article
borja fano

borja fano

Entrevista respondida por teléfono el 19 de marzo.

LA LLANERA CABALGA DE NUEVO.

Advertisement

‘Libertad’, dirigida por Enrique Urbizu, con Bebe, Jason Fernández, Pedro Casablanc e Isak Férriz, se estrenó como serie para Movistar+ y película para cines el 26 de marzo.

ZINEMA / CINE / CINEMA

El director bilbaíno nos cuenta la historia de Lucía, la Llanera (encarnada por la actriz y cantante Bebe) y su hijo nacido en prisión una vez son liberados de su encierro. Esta aventura de bandoleros en la España del siglo XIX se ha presentado a la vez como serie y película.

Imagino que habrá sido un rodaje muy diferente, ya que estás acostumbrado a realizar

ficciones en entornos más urbanos. Sí, parte de la idea del proyecto era poder tener un rodaje de este tipo, en la naturaleza, lejos del entorno urbano tan habitual en todo lo que habíamos hecho hasta ahora. Hemos aprendido mucho. Tienes mucho menos control de lo habitual: dependes del clima, de los animales... es muy divertido y muy físico. La logística para el equipo de producción es muy complicada también: el traslado, el barro, el invierno... pero rodar en el campo era también lo más apetecible de todo este proyecto.

‘Libertad’ es a la vez una miniserie y una pelí-

cula para cines. ¿A qué se debe? Rodamos la serie en anamórfico 2,35 con la mejor técnica posible. La película surge porque cuando vimos la serie en pantalla grande con los productores a todo el mundo le pareció que era posible editar un formato para que la gente pudiera apreciar en el cine esa característica física y visual que tiene el producto. El resto es cuestión de encerrarte en montaje y descubrir si es posible o no es posible, si habitaba un largo o no dentro de la serie. Mi montadora y yo vimos que sí se podía hacer y así lo hemos realizado.

Hacía catorce años que Bebe no se ponía detrás

de las cámaras, ¿por qué pensaste en ella? Vi una prueba que me pasó la directora de casting, Rosa Estévez. Apenas dos o tres minutos, un diálogo, y quise conocerla. A ella le había gustado mucho lo anterior que habíamos hecho y yo me di cuenta de que encajaba muy bien por el acento, el físico, la edad, la disposición plena... y el hecho de que es una artista muy íntegra, sincera, es una “natural born”, por lo tanto también es imprevisible y generosa.

¿Por qué os interesasteis por los bandoleros y por esta época de la historia? ¿Fue tu fascinación

por la serie ‘Curro Jiménez’? Desde la infancia siempre me ha interesado el cine de aventuras, los exteriores, los westerns... aunque los bandoleros son de aquí. La tradición romántica nos impuso un poco como canon el bandolero andaluz... y luego, claro, la maravillosa serie de Sancho Gracia, ‘Curro Jiménez’, que a mí me llegó en la edad perfecta. Gran parte de mi educación cinematográfica tiene que ver con ese espíritu de la aventura, la fantasía... y el siglo XIX es fundamental. Habría que hacer muchas más historias sobre el siglo XIX, que ayudan mucho a entender lo que nos ha pasado en estos últimos doscientos años.

Muchos de los personajes, como el del Aceituno, muy bien encarnado por Isak Ferriz, tienen moralidad dudosa. ¿Te atraen este tipo de personajes o las escenas de violencia a la hora de

relatar historias? De violencia nos hemos quedado cortos porque la serie si es algo es antiviolenta. Podríamos haber sido más crudos y no habríamos llegado a la altura de la realidad. Son gente de campo y han vivido sin ser “cultivaos” ni “recogíos”, como ellos dicen, así que no me corto a la hora de mostrar cómo rajan un cuello o pegan un tiro a quien haga falta. Normalmente este tipo de personajes son más interesantes que las monjas de clausura. Isak es un tío estupendo y le da muchos matices al personaje. Es un pícaro, es uno de esos personajes que te marean y no sabes si estás a favor de él o en contra. Texto de Roberto González. Fotografía de Emilio Pereda.

This article is from: