Boletín AYDO 170 by Antonio Iborra

AYDO

ººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººº ºººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººº ºººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººº ºººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººº ºººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººº ºººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººº Asociación para el fomento ºººººººººººººº º 1.-

del Espíritu y la Esencia de las Artes Marciales y el Yoga.

BOLETÍN 170 Agosto 2.016 1

1. EDITORIAL Agosto es el mes del gran augusto, término romano que significa el grande, el magnánimo. Y es que realmente estamos en el momento del año más apropiado para expresar la grandiosidad, símbolo de Leo, y no hay nada relacionado con lo humano más inmenso que el amor. Ciertamente que Jesús nos dijo que “Dios es AMOR”, y que la esencia de su enseñanza radica en “amaros los unos a los otros”, pero el amor, tan presente en nuestras canciones, poesías y conversaciones, sigue siendo nuestra asignatura pendiente. Por supuesto que hablo por mí, y diría serenamente que también por el ochenta o noventa por ciento de la humanidad. En este agosto grande y augusto, quiero invitarme e invitaros a ensayar más posibilidades sobre el amor. Podríamos empezar por aquella frase que mi Maestro, don José Marcelli, solía decir: “Lo que une es verdad, lo que separa es mentira”. Y eso me hace reflexionar sobre el colágeno que conecta todo con todo. ¿Será el amor? ¿Es el amor un sentimiento? Sin duda, pero también es un presentimiento: el presentimiento de que todo es UNO, de que la esencia de este mundo de cosas separadas no es más que un Campo Unificado. Y, por qué no, Dios es AMOR y amor es DIOS. En ese caso, ¿tendrían los ateos algún problema en reconocer al amor? No es necesario creer en Dios, no es necesario afiliarse a alguna religión o institución ni es necesario imaginar a Dios. ¿Podemos reconocer lo que el amor hace en nosotros? ¿Podemos aceptar que la energía del amor está más allá del intelecto y de la mente dual? ¿Podemos abrirnos al amor como Misterio Supremo? Cuándo vibramos solamente con el nivel intelectual y racional, el amor puede resultar incómodo, hasta puede ser reprimido o, aún peor, reducido a conceptos lineales. El ego es simplemente un vehículo para canalizar la frecuencia elevada del amor; cuando es así, nuestra diversidad humana se siente completamente justificada como un medio para servir al amor. Todos, lo sepamos o no, solo queremos vivir con más amor. Solo que cuando estamos identificados con nuestro ego, lo vivimos como “necesidad de ser amados”, mientras que a nivel intelectual lo entendemos como un equilibrio entre el dar y el recibir, y ya vibrando en consonancia con nuestros aspectos más elevados, lo experimentamos como la oportunidad de DAR MÁS… Y así es como lo grande, lo Augusto o el agosto, se hace presente en nuestras vidas: dando más, dando mejor y empezando por dar amor y reconocimiento a este vehículo de servicio, que es este cuerpo y esta mente.

Canalizar la energía del AMOR que eres a través del cuerpo y mente que tienes, es empezar a disfrutar de tu Vida. ¡Eso sí son vacaciones! Y es que cuando vivimos identificados con un ego y sus incontables necesidades puede ser extremadamente cansado y tedioso. Así que disfrutemos de la energía de empezar a vivir el mundo de otro modo, en vez de un lugar de sacrificios, castigos, esfuerzos y luchas, todo lo cual está cercano a la imagen de un purgatorio. Abramos el corazón-mente a sentirnos hijos del gran y amoroso Dios Amor, sin género ni forma, pero que nos brinda constante protección y cuidado, que nos regala la inmensa oportunidad de crecer a través de experimentar la creatividad, el afecto, el cariño y el sentirnos plenamente útiles al servicio de la vida. ¿Te imaginas una vida tranquila, pacífica, llena de posibilidades para explorar y crear, un lugar donde la cooperación, el compartir y el encuentro con la diversidad sean algo maravilloso? Quizás este mundo exista, es posible que más que un lugar físico sea vivir desde elevados sentimientos o desde una actividad de entrega; quizás este mundo de formas solo sea un potencial para que cada uno ejerza su libre creación. No hay un mundo sino la proyección exterior de cada corazón-mente. Si descubres que tus sentimientos son los que dan forma a tu realidad exterior, quizás puedas empezar a asumir la libertad y responsabilidad de vibrar más alto para que puedas reconocer, en lo que te rodea, las mismas fuerzas que estás emanado. Pon tanto, dime lo que proyectas y te diré de qué te rodeas. Si no te convence tu realidad, solo tienes que empezar a proyectar sentimientos más elevados, más en consonancia con tu naturaleza esencial. Hoy, en este maravilloso y magnánimo agosto, te invito a descubrir el Yug-Do de pintar el mundo con la paleta y colores del amor. T AI

Cinta Blanca ANTONIO IBORRA 3

2. DÉJALO IR El desapego es uno de los baluartes del budismo, mientras que el apego parece ser uno de sus demonios. Hoy estamos en condiciones de empezar a realizar una comprensión más elevada de la vida, tenemos mucha información y también muchas técnicas para utilizar, hay infinidad de maestros por todas partes, y solo nos queda ponernos manos a la obra. Ya es de uso y conocimiento común la importancia de la dieta, del ejercicio físico, la actitud positiva, la meditación y los ejercicios energéticos. Cada vez son más los hospitales y centros de salud que se abren a las posibilidades de utilizar el reiki o la acupuntura. Se habla más abiertamente sobre la importancia de la meditación o el poder sanador de la actitud. También es cierto que, ante tanta avalancha de datos, podemos sentirnos confundidos o perdidos. Y esto es porque el avance y el cambio que deseamos solo es fruto de la práctica sincera y guiada por el sentido común. Ante este paradigma me atrevo a compartir que las personas no viven en lugares sino dentro de sus propios sentimientos. Eso hace que, en un espacio colindante, alguien viva un infierno y otro un paraíso: uno vive dentro de lo que siente o, dicho de otro modo, lo que sentimos no sólo colorea nuestro entorno, sino que incluso lo crea. Las cosas no son más que lo que vemos y vivimos a través de ellas; de este modo un río puede ser la separación entre dos tierras o, por el contrario, su unión: todo depende del enfoque y del sentimiento del observador. Visto esto, y entroncando con las percepciones actuales sobre el cuerpo-mente, un sentimiento expresa en sí mismo este aspecto dual: por un lado, un sentimiento está compuesto por una emoción básica y energética que se puede sentir y ubicar en el cuerpo y, por otro, el mismo sentimiento es una miríada de pensamientos en forma de enjambre que rodean a esta emoción básica y que son el resultado del sistema de creencias de cada individuo. Todo el trabajo que hace la Bioenergética, mediante la Acupuntura y otras técnicas semejantes, es trabajar sobre el CHI, energía parecida a la electricidad dentro del cuerpo pero que, a su vez, no es otra cosa que EMOCIÓN. Afirmo que el CHI que se mueve por nuestro cuerpo energético en su anatomía de meridianos y chakras, no es más que expresión de los sentimientos humanos, siendo su aspecto más físico puramente emoción y sus niveles más sutiles, pensamiento. Pensamiento y emoción se retroalimentan continuamente: una emoción genera miles de pensamientos, pero, a su vez, los pensamientos también pueden activar frecuencias emocionales. Entonces, las enfermedades siempre tienen un alto contenido de energía bloqueada o CHI que, en definitiva, es emoción. Los métodos de la Acupuntura tienden a buscar un equilibrio en la energía corporal, sin embargo, lo esencial es liberar la emoción – CHI bloqueada. Y, ¿cómo se libera la energía, emoción o CHI, atrapado en un músculo, articulación, órgano o meridiano? Mediante la

presencia amorosa que lo testimonia, escucha y no emite juicios de valor. Esto implica no entretenerse en los pensamientos que forman la parte mental del sentimiento y, en cambio, centrarse en su dimensión física y sensación en el cuerpo. Desde ahí, lo primero a observar es nuestra reacción a la tensión, al dolor o a la molestia que, en general, es de rechazo y resistencia. Observado esto, necesitamos aceptar este mecanismo reactivo automático y admitirlo con naturalidad. Entonces vamos operando un cambio de actitud ante la energía o emoción bloqueada y en vez de verla desde el miedo, la preocupación o como amenaza hay que admitirla como un regalo, una enseñanza, un mensaje y una oportunidad hacia el crecimiento. Vamos a dedicar unos minutos a sentir, percibir y ESTAR con el bloqueo hasta dejar que se manifieste más, se exprese plenamente y luego, simplemente, le dejamos el mensaje del agradecimiento y nuestra actitud de desprendimiento. Lo dejamos ir. Es importante comprender que dejar ir no es lo mismo que empujar, que seguir con el deseo claro de la expulsión. El cambio empieza a manifestarse desde la estrategia del árbol que en otoño deja caer sus hojas. La estrategia del árbol no es liberarse o empujar a sus hojas sino invertir el proceso de su savia interna: cuando el árbol entra en modo inervación dirige su savia hacia la raíz y, de este modo natural, sus hojas se van desprendiendo. Reconocida en la energía la emoción que expresa una creencia básica subyacente, enviamos nuestra savia o atención hacia nuestra raíz que, en términos humanos, es nuestra esencia luminosa. ¿Qué elijes sentir? Si lo que eliges sentir es armonía, paz, tranquilidad y amor hacia todos los seres, la energía de la emoción atascada estará lista para ser soltada, así que el proceso es muy simple, lo que no significa exactamente fácil. Toma contacto con la energía física del sentimiento, es decir con la energía emocional en el cuerpo, observa su naturaleza con amor, date cuenta de las resistencias a sentirla y las ganas de eliminarla, y ahora cambia la respuesta. Simplemente permítete estar con la tensión, deja que se manifieste y que aumente. Pero, y eso es muy importante, no te centres en los pensamientos que la rodean; es mejor no tener nada de pensamientos ni enredarte en ellos, solo sentir físicamente la zona y abrirte a ella con amor, comprensión, escucha y aceptación. Deja que libere su mensaje y pueda ver la emoción básica: por ejemplo, tener miedo a… Y luego le das permiso para irse cuando quiera, mientras diriges suavemente tu atención a sentimientos mucho más elevados, como amar y servir a la vida. Dejar ir es ir con la vida, recibir lo que llega con amor, estar con lo que hay con amor y despedirse de lo que se va con amor. Mientras ello sucede sientes que todo, a su vez, te respeta y te ama. Buen viaje.

3. NO BLOQUEES AL AMOR Cuando estamos sufriendo y nos sentimos frustrados, agobiados, llenos de tensión y estrés a menudo bloqueamos al amor. Es fácil pensar en el amor como algo que queremos o necesitamos, lo cual no deja de ser cierto, pero también podemos verlo como la expresión de nuestra naturaleza más íntima y elevada. De este modo, funcionar con amor es situarnos en un nivel vibratorio y frecuencial muy alto y bello. Por otro lado, el malestar, el sufrimiento y el dolor tienden a volvernos escépticos, desesperanzados, apáticos, deprimidos, negativos y hasta resentidos; todo esto bloquea nuestra canal de curación. Solo el amor nos sana y nos impulsa en nuestra evolución, pero cuando nos sentimos atrapados es como si inconscientemente nos cerráramos a todo. Esta actitud es muy natural e instintiva, y también es una necesidad de ordenar y digerir la información. Por ejemplo, ante la amenaza cerramos puertas, pero ese blindaje no sólo corta la entrada de supuestos enemigos, sino que lo hace respecto a los amigos, la luz o la ayuda. Lo primero que tenemos que hacer es admitir y reconocer nuestro estado de escepticismo y bloqueo emocional; lo segundo es aceptarlo con amor y paciencia. Aquí los “debería” y las críticas y exigencias no son de gran ayuda. Tendremos que caminar despacio y arriesgarnos a abrirnos a la confianza y al amor, poco a poco y paso a paso. Necesitaremos volver a la apertura, al crecimiento y a la alegría, la cual llegará. De momento se hará preciso empezar a considerar que podemos elegir, que si queremos seguir cerrados no pasa nada, después de todo el universo es infinito y no estamos ante ninguna carrera evolutiva, además que compararnos no servirá de nada ya que almas que nos parezcan más avanzadas mañana pueden pasar por sus propios bloqueos. Así que este es un asunto de ir asumiendo más poder y libertad sin juicios ni recriminaciones. Con mucha paciencia, espera y amor.

A veces necesitamos un salto cuántico ante la posibilidad de volver a liberar el canal de la luz en nosotros mismos. Una ayuda puede ser la proximidad y la presencia de alguien que esté funcionando a un nivel más alto: un maestro, un terapeuta, un profesor o un amigo, pero siempre que uno mismo esté en la disponibilidad de recibir la ayuda y el impulso. Eso hace que, por el contrario, no esté la persona abierta a seres cercanos que insisten en ayudarnos, por ejemplo, familiares o demás. Es necesario que uno mismo dé el paso hacia la ayuda. Por eso no le debe de extrañar a los padres que un hijo busque la ayuda en un amigo, en vez de hacerlo en la propia familia. El ego cerrado puede ver en sus seres demasiado cercanos una imagen de sí mismo que no quiere aceptar, y precisa de un mediador menos cercano y que, en cierto modo, le devuelva una imagen más neutra de sí mismo. Y ya en el tema, ¿qué podemos hacer cuando vemos a un ser querido bloqueado y que no se deja ayudar? Muy simple: nada. O quizás algo: acompañamiento, respeto, espera, paciencia y presencia. Cuándo los consejos no son escuchados, y el estado de bloqueo y sufrimiento del ser querido es evidente, es cuando nuestro amor es exigido a volar más alto, lo que implica confianza plena en el proceso de la vida, mantener un saber estar neutro y de aceptación, donde más que aconsejar acompañamos y nos mantenemos alertas con un cuidado exquisito para ver los momentos en los que el acceso a nuestro ser querido está menos cerrado o quizás un poco más abierto. El Camino de la vida y el aprendizaje del amor no es ni fácil ni difícil, es como la vida misma: requiere un cuidado continuo, una disposición a la superación y el saber que nunca será suficiente, que seguir es una ley en un universo infinito y, por lo tanto, siempre podemos amar más y mejor. A veces escucho cosas como “estoy cansado de tanto esfuerzo, de tanta lucha, del exceso de dificultades”. Lo entiendo bien, nos pasa y nos pasará toda la vida. Las treguas y los remansos de paz a menudo no se pueden elegir, solo hay que saborearlos cuando aparecen. Y estar abiertos a volver a levantarse y empezar de nuevo. Así que nos toca descansar mientras cabalgamos en un viaje que más que reposo requiere conciencia y equilibrio. ¿Cuándo acabará esto? Nunca, ni siquiera con la muerte, la cual no es más que una ficción, y a la vez acabará ahora mismo porque a menudo el agotamiento tiene que ver con nuestra mente y actitud. Podemos seguir avanzando mientras cantamos y sonreímos, alegres de poder hacerlo en vez de sentirnos atrapados en el miedo o la lamentación. Cuando no pueda pues no podré, y si no puedo es que la vida tiene otra cosa para mí. No hay de qué preocuparse, ninguno es imprescindible, aunque a menudo nos lo parezca. No hay mayor poder que el de elegir al amor, y éste brota desde tu interior cuando dejas de centrarte en tus sentimientos más pesados. Suelta el lastre, ábrete al amor y déjate fluir. Solo has de confiar. Un abrazo.

4. EL PODER DE LO SIMPLE La sencillez es también un atributo de la verdad. ¿Cuántas emociones existen? Sin duda hay muchas, pero todas ellas son más o menos variables o mezcla de cuatro frecuencias básicas. Si fuéramos a buscar lo más esencial, diría que las emociones humanas, todas ellas, están arraigadas en el sentimiento de separación. Es decir, vivir a la propia persona como algo ajeno y separado del mundo. Esta percepción tan “real” es la naturaleza intrínseca del ego humano y de ahí brota el instinto de perduración o supervivencia. De este modo, la única emoción es el miedo, y éste tiene cuatro variantes. Lo opuesto al miedo, descrito desde una mente dual, es el “no miedo”, que en realidad implica el despertar a la consciencia. En la escala de posibilidades de la vivencia desde lo humano, los niveles más básicos son aquellos que llamamos “ego” inconsciente de su esencia de SER. En esos niveles de percepción y vivencia como uno no ha despertado al Ser que ES, toda su vida y experiencias se basan en el tener y en el hacer. Tener un cuerpo, tener una mente, tener relaciones, tener cosas y tratar de sobrevivir. ¡Solo es el miedo! Las cuatro frecuencias básicas del miedo son las siguientes: 1º MIEDO 2º IRA 3º ANSIEDAD 4º TRISTEZA La esencia del miedo es no poder expresarse ni experimentar sino desaparecer. Tiene infinidad de variables: pánico, inseguridad, temor, aversión, intranquilidad y terror. Además de muchos apellidos: miedo a morir, a sufrir, a no poder, a ser atacado, a no poder defenderse, etc. Con la ira pasa lo mismo. Puede ser llamada enfado, estar molesto, perturbado, odio, rabia, frustración, tensión o agresividad. Y los apellidos o variables son los siguientes: contra los demás, la política, la sociedad, la vida, Dios o uno mismo. La ansiedad puede ser vivida como angustia, intranquilidad, nerviosismo, agitación, confusión, dudas, etc. Y puede ser derivada o enfocada a miles de cosas o pensamientos. En cuanto a la tristeza, pues ahí tenemos la desmotivación, el desánimo, la “bajona”, la melancolía, la introversión, el cansancio, el aburrimiento y todas las variables de sufrimiento. Ella puede ocurrir a causa de pérdidas, caídas, fracasos o decepciones, etcétera. Estas cuatro formas del MIEDO se entrelazan y mezclan, pero normalmente hay una frecuencia dominante a cada momento, o bien también puede ser un “tono” en el que permanecemos mucho tiempo, como un humor o estado general. Por encima de este estado “desconectado” y de baja energía está el punto de inflexión en nuestro proceso de avance y crecimiento: se llama nivel del CORAJE. Cuando tomamos la DECISIÓN y determinación de salir adelante recurriendo a todas las ayudas disponibles, empezamos a cambiar el estado de las cosas. Abandonamos el peso terrible del “no puedo” para empezar a ejercer nuestra energía en el nivel de la LIBERTAD.

Sin libertad no hay nada, así que, por grande o pequeña que sea, la conciencia nos despierta a ser lo suficientemente libres para poder elegir. De esta forma, o luchamos para salir adelante o nos resignamos. Como la apatía tiene un peso muy grande, lo mismo que la indecisión, solo el CORAJE nos pone en marcha, y nos dice: “Si no puedo correr, caminaré rápido, si no puedo pues avanzaré lento, si no puedo me arrastraré, ¡pero no me voy a rendir ni a detener!”. El Coraje es un grito de auxilio a la energía elevada del amor. Entonces, ya armados con la DECISIÓN que nos proporciona el coraje, empieza la alquimia o la transmutación que en la vivencia de lo humano significa vibrar a frecuencias más altas y elevadas, benignas con la vida. ¿CÓMO PODEMOS TRANSMUTAR NUESTRA EMOCIÓN PREVALENTE? Una emoción prevalente es aquella que da tono a la mayor parte de nuestra vivencia en un momento determinado o una época de nuestra vida. Por dar un ejemplo: en el edificio de siete plantas que podrían expresar las posibilidades de lo humano vivimos en el segundo piso y, claro, podríamos trasladarnos al tercero o al cuarto. Hay dos fases en la evolución de la conciencia, lo mismo que en la sanación. La primera consiste en desprenderse de los sentimientos negativos o de baja frecuencia, y la segunda es conectarnos con los sentimientos elevados o de alta frecuencia. A veces el proceso es simultáneo, y en otras ocasiones requiere de ir jugando entre ambas posibilidades. Vamos a ver lo que puede hacer el AMOR, como energía Guía y elevada en nosotros, con respecto al cuaternario emocional inferior.

 I RA  ANSIEDAD  TRISTEZA  MIEDO

CORAJE (VALOR) CONSTRUCCIÓN (CREACIÓN) UBICACIÓN Y DIRECCIÓN DESAPEGO Y AVANCE

Una vez identificada en nuestro propio cuerpo la energía emocional prevalente, por ejemplo, miedo, ira, ansiedad o tranquilidad, y poder definir sin entretenernos en los pensamientos ni en el análisis las siguientes preguntas: “¿a qué le tengo miedo?”, “¿con quién estoy enfadado?”, “¿qué me hace sentir perdido?” o “¿por qué sigo aferrado a alguien o a algo?”. También es necesario que me pregunte qué creencias personales mantengo debajo de este sentimiento o qué enmascara mi sentir.

El paso siguiente es invocar a la energía elevada del amor y tomar conciencia de cómo aplicar el cambio frecuencial, tal como fue indicado antes. Miedo Coraje. Ira Construcción. Ansiedad Ubicación y dirección. Tristeza La alegría y poder del desprendimiento. Con todo esto vamos viendo que el Yug-Do es en realidad un CAMINO DE VIDA Y UNA VÍA HACIA LA CONSCIENCIA. ¡Buen viaje!

5. VIAJE AL AHORA ((M Mééx xiiccoo,, J Ju ulliioo d deell 2 20 01 16 6)) Le doy un beso a María, mientras estamos en el aeropuerto de Alicante, y este acto de amor sencillo y puro me traslada más allá del decorado. Detrás de todo un campo insondable de plenitud y maravilla. Las imágenes exteriores son de gente cruzando el control policial, maletas, despedidas, inquietudes, entusiasmo, sueños, perfumes caros, salas de espera, y un té en una mano. Hay tantas cosas que decir en cada despedida y llegada que, a menudo, queda mejor expresado en un abrazo, una sonrisa y una mirada. Se supone que debería estar acostumbrado a viajar, algunos me considerarían un viajero empedernido, pero lo que el corazón siente es perplejidad a lo nuevo y lo viejo, porque siempre lo mismo, aunque nada es igual… Tuve un vuelo de once horas: nunca es cómodo ni maravilloso por lo que el cuerpo se resiente y la mente busca evasión. Por ello vi películas, hice lecturas escogidas, escribí un rato, escuché un audio libro, dormité en una cabina de plástico con un zumbido de fondo, gente apretada y personal de cabina solícito. Y más allá de la escena está la Presencia del Amor Incondicional. Un campo de amor infinito hacia todas las formas del mismo Ser. Veo a Dios en la creación; veo la belleza, la bondad y la verdad expresadas en un maravilloso juego creativo. A veces Dios duerme, otras se queja y en ocasiones ríe. Todo aparece y desaparece como en las escenas en una obra de teatro. Si te gusta lo que hay, déjalo ir; si no te gusta, déjalo ir; si te es indiferente, déjalo ir… Sin complicaciones, atascos ni problemas cruzo la aduana, mientras en la memoria aparece Eugenio, hace seis meses y en este mismo lugar, con un pasaporte caducado y, ante la impotencia de todos, regresándolo a España. Me sonrío. ¡Qué aventura! También me llegan recuerdos de Raúl, Eugenio y el recorrido por Yucatán y Cancún. Salgo afuera y sorprendo por la espalda a Serafín, Perla e Ilihutsy. Hay besos, abrazos y fotos: todo está bien y en orden. Aquí hay otro aeropuerto con gente, maletas, amigos y detrás, ELLO, la Presencia Inefable. Tomamos un taxi; por primera vez en México, y después de tantos viajes, me toca una mujer taxista, Sandra. Se la ve firme, femenina, coherente y profesional. Amablemente nos lleva a nuestro destino. Ella se disculpa por un tráfico demencial, horrible, atascos y más atascos. Encima llueve. Dialogamos tranquilamente, no hay prisa, ya llegaremos. Veo más allá del decorado: la Presencia es la misma, siempre inmutable, armoniosa, silenciosa, intocable e inafectable por los acontecimientos exteriores. Del mismo modo que la pantalla del cine sigue en blanco inmaculado, independientemente de todos los argumentos y películas que pasen por encima, la pantalla no se contamina ni guarda nada, sigue fresca, nueva y virginal. En la superficie estoy en otro continente; en el fondo sigo en casa, esa mansión de alto amor, paz y armonía, poder absoluto, sin dependencia ante el cambio. Me quedo en el apartamento de la bella Ilihutsy, me siento agradecido porque me presta su casa, su espacio. Gracias, gracias, gracias… Me sumo en un sueño donde los sueños no afectan a la blancura, la quietud y la luz cálida del Ser. Ya en pie, sobre las cuatro de la mañana, rezo con el cuerpo, lo pongo a la gimnasia, al Saludo al Sol, a los abdominales, sin buscar nada, solo porque es lo correcto. Hay una vela, incienso y silencio. Al fin puedo hablar con María, gracias a la magia de Internet, porque escuchar y sentir reconfortan al espíritu. Y ahora, tras un rico desayuno me dispongo a disfrutar del misterio de cada momento, ¿qué maravillosas experiencias me aguardan en este día? Me abro a sentir la Presencia Divina en todos los acontecimientos, en todas las escenas. Desde el país del Aquí, estoy con cada uno de vosotros: en el momento que leas esto sabrás que hablo de ti, lo sé. Llegan Perla e Ilihutsy y nos vamos para el Peñón de los Baños. Ya he estado varias veces ahí, pero me sigue sorprendido cómo pueden existir lugares con un potencial curativo en medio de una gran ciudad, y tan ignorados por la mayoría de sus habitantes. El lugar es discreto, pasa casi desapercibido, y cuando entras en el interior encuentras un pequeño jardín con una iglesia o capilla dedicada a Francisco de Asís. Es un lugar pequeño, pero de una fuerte potencia energética. A primera vista puede ser decepcionante por el gran abandono en el que se encuentra. Está llena de polvo y huele a gato, pero cuando te detienes a contemplar los frescos y el retablo del altar, puedes observar que se trata de obras de arte de

gran valor y rico simbolismo. Un Francisco de Asís medita sobre la muerte ante una calavera. No puedo calcular la antigüedad del lugar, pero diría que es grande, y sus obras son dignas de conservación. Lo que pasa en México es que es tan desbordante el patrimonio cultural histórico que no hay recursos para cuidarlo y protegerlo. En medio de la ciudad, con más de veinte millones de habitantes, un tráfico demencial y una polución terrible, existen pirámides pre colombinas, rastros de diferentes pueblos y culturas que habitaron la laguna y el valle de México. Hay centros ceremoniales, lugares secretos, entradas al inframundo y espacios para elevar el nivel energético, como este del Peñón, donde se dice que ya Moctezuma y otros emperadores utilizaban para purificarse y sanar, lo mismo que más tarde hicieron Maximiliano y Carlota. Encontramos a gente con más de noventa años y en buena salud que no solo frecuentan este lugar, sino que incluso dan masajes. Hoy nos toca a nosotros. Hacemos una meditación en la capilla y conectamos con la frecuencia energética del lugar mientras que nos abrimos a la presencia Divina. Luego, cada uno en su cuarto individual realiza sus abluciones sagradas. Para mí ha sido como una pequeña despedida del cuerpo físico y una muerte consciente, que me da una proporción más clara del papel del cuerpo físico en la vida humana. Luego, ya purificados y relajados, nos vamos a comer a un restaurante vegetariano que tiene el sugerente nombre de Pan Comido. Podemos tomar las opciones veganas que están buenísimas, y terminar con pastel de chocolate con helado de vainilla, todo sin lácteos. ¡Maravilloso! El programa en la radio no es en directo, sino grabado y nos han dicho que lo sacan el catorce de agosto. Luego lo colgarán en la Red; ya pasaremos los enlaces. La conversación estuvo agradable, fluida y fue renovador ya que esencialmente compartimos desde el corazón y sin demasiadas pretensiones. Al salir decidimos darnos una vuelta por el bosque (parque) de Chapultepec, así que junto con Edu, quien ya se unió a nosotros, paseamos entre árboles centenarios, mariposas y ardillas grises. Me parece extraordinario que existan estas islas verdes en medio de la metrópolis, donde la vida automáticamente cambia de ritmo. Hablamos de la importancia de desprenderse de todos los sentimientos pesados y conectarnos con niveles de conciencia más elevados, esa es la base de nuestra propuesta Yug-Do, así que nos toca ir actualizándonos y fluir con más tranquilidad y belleza. Me retiro pronto, y sobre las seis y media de la tarde, me atrapa un sueño irresistible: no tengo ganas de nada más que no sea acostarme. Sé que no debo hacerlo si no quiero despertarme a las doce de la noche. Al final, decido dar una vuelta para alargar el asunto de acostarme, pero de todos modos sobre las ocho y media me dejo caer. La noche pasa más o menos turbulenta. La primera despertada es sobre las 12.30, la segunda a las tres de la mañana, cuando escucho una música a todo volumen como si hubiera un bailongo por allá abajo. Uso tapones para las orejas y todo lo que se me ocurre, pero a las cuatro ya estoy en pie y preparando el nuevo día. La práctica de hoy en el Parque de Pilares es compartida por Perla, Ilihutsy, Serafín, Juan -el novio de Perla-, Eduardo y Mona. Todo fluye con armonía y elegancia: ¡quedamos como poseídos por alas invisibles! ¡La práctica es una maravilla! Hoy salimos en autobús para Morelia, donde nos esperan Antonieta, Fátima y un montón de amigos, allí estaremos hasta el miércoles, así que gran parte de nuestro encuentro será por allí. Estamos entusiasmados y listos para recibir todo lo que la vida nos traiga, así que alistamos las maletas…

MORELIA Tuvimos un viaje muy cómodo en un autobús de dos plantas: arriba y en primera fila con una panorámica increíble. Pudimos disfrutar de bosques, prados, montañas, verde sobre verde. Era un vacío lleno, maravilla de maravillas; el contraste con la Ciudad de México es enorme. Me parece curioso como el ser humano se puede empeñar en hacinarse y vivir la contaminación, el estrés y la locura de la masificación, con tanta maravilla por todas partes. En fin, la que gana es la naturaleza, porque mientras el humano se concentra en unos puntos, queda espacio para los pájaros, bosque y vida silvestre. Llegamos muy descansados y bien, y nos reciben las hermanas Chávez: la Cinturón Negro Antonieta y Fátima, quien se está alistado para tener su examen para estos días. Compartimos abrazos, besos, cariño y muchas expectativas. Nos alojamos y mientras el equipo se va a almorzar, me instalo en el apartamento de la abuela de Antonieta. Este es un lugar limpio, elegante y con una hermosa vibra, ya que la abuela era profesora de Yoga y discípula del Maestro Estrada. De hecho, el Maestro y Carlota, su esposa, se quedaron aquí varias veces. El lugar funcionó como centro de Yoga algunos años, y todo esto se siente. Noto la presencia de fuerte energía limpia y espiritual, también mucha tranquilidad y silencio. Me encanta el sitio, así que lo agradezco mucho a toda la familia Chávez. Al día siguiente iniciamos con una hermosa práctica de Yug-Do en el parque, junto al observatorio astronómico. Nos dejamos fluir en una vivencia cargada de profundidad y belleza. Después compartimos en el mismo apartamento el desayuno y al terminar nos preparamos para ir a dar el curso sobre el CHI de La Consciencia. El lugar del Taller es muy apropiado y a cada momento veo el bien hacer de Antonieta y Fátima. Allí conozco al papá de las hermanas Chávez, Antonio, un hombre cabal y de presencia noble, quien me cae muy bien enseguida. También está su mamá, una dama elegante de bonitos ojos azules; Gabriela, otra hermana de las Chávez ya que son cuatro chicas, contando a Celeste, la mayor, a quien todavía no tengo el gusto de conocer. A estas alturas, mi admiración y empatía por Antonio va creciendo exponencialmente: ¡vivir con cinco mujeres tiene su mérito! Así lo reconocen todos con buen humor… La sala se va llenando y, al final, más treinta personas compartimos la visión de la conciencia como elemento Sanador. Durante cuatro horas la atención no decae y, de hecho, el tiempo pasó volando. Para mí fue una hermosa oportunidad poder conectar a María por Skype, y que participará en todo el Taller. Con la energía muy alta, nos vamos un buen grupo a un restaurante donde disfrutamos de buena comida vegetariana. Luego me toca hacer dos terapias, ya que estas personas tienen que viajar mañana y así me lo han solicitado. A pesar de estar bastante cansado, ya que empezó mi día meditando de 3 a 4 de la mañana, y luego todo lo demás vino sin parar… Curiosamente, al conectarme con el amor incondicional y disponerme a servir, la energía se renueva, aunque sé que no debo abusar. Este gran y primer día en Morelia ha sido inolvidable, y todavía Antonieta nos tentó con unos tacos con chorizo vegetariano y una bonita convivencia de grupo.

La noche ha sido regular a pesar de lo agitador del día: estaba demasiado lleno de experiencias. En el primer sueño caí rendido, pero luego me desperté sobre las dos de la mañana, y ya no hice otra cosa que dar vueltas hasta las 4; todavía estoy con el horario cambiado… Me aseo, medito y luego charlo un rato con María por Skype: eso siempre me reconforta y me mantiene conectando y al tanto de cómo van las cosas por casa. Es Ahora, son las seis de la mañana, el parque está silencioso, húmedo y hermoso; el silencio es roto por la melodía de algún pájaro madrugador, deben ser las aves Yug-Do… La práctica de hoy es fluida y movida, hacemos la segunda serie siempre con música y ritmos nuevos. Todos nos sentimos renovados, cada vivencia de Yug-Do es como una representación artística o una ceremonia iniciática, un salto cuántico que nos deja ligeros y con un estado de paz y alegría que nos dura un buen tiempo… Tras un rico desayuno, como siempre en buena compañía, me toca realizar dos terapias más de una familia que sólo puede hacerlo en el fin de semana. Ahora el bambú danza de nuevo, estamos en el parque y el programa previsto nos conduce a una clase abierta a todo el mundo, en especial para los que todavía no se animan con las desmadrugadas. La música de Armad Amar, la energía del grupo y los maravillosos árboles que nos rodean crean las condiciones para una práctica de alto nivel. En esta ocasión también María desde Murcia, España, nos acompaña en la práctica; me parece increíble que podamos estar juntos a miles de kilómetros de distancia practicando en el mismo Ahora, en Morelia, en Los Alcázares. Sin duda, esto es magia… Al terminar, la sensación de amor es muy elevada. Se nota que el trabajo ha elevado el estado de conciencia del grupo y los rostros demuestran mucha energía, entusiasmo, agradecimiento y ganas de seguir juntos. Ahora, siempre ahora, aquí, siempre aquí, estamos en un restaurante bufete libre vegetariano, y cada uno se sirve a su gusto, todo fluye con alegría y sentido del humor. Salimos para dedicar la tarde del domingo a un paseo, y en dos carros nos dirigimos a Pátzcuaro, un hermoso pueblo que, en tiempos de Vasco de Quiroga, fue la capital de Michoacán, en la actualidad lo es Morelia, la antigua Valladolid o, deberíamos decir, “Nueva Valladolid”, en tiempos de la conquista; el nombre de Morelia se le dio en nombre del gran general Morelos, en la época de la Independencia. Siempre me parece curioso cómo el devenir de la historia cambia nombres al mismo lugar que, en definitiva, nunca es de nadie. Vasco de Quiroga fue el primer obispo de Michoacán, y la historia lo tiene considerado un buen hombre que vino a curar y a educar a los indígenas del lugar, tratando de reparar las tropelías de gentes violentas y sin escrúpulos que sometían y violentaban al pueblo con gran crueldad. Vasco es visto como un padre, incluso como un santo, al quien todavía no reconoce el Vaticano pero que, parece, pronto lo hará. Me alegro de que siempre podamos recordar que también hay buenas personas que hacen trabajos abnegados e increíbles, y me gusta verlo con su báculo, que se me antoja un bambú, como el Padre Ancheta en Tenerife o el Ermitaño del Tarot. El Maestro. La llegada fue pasada por agua, en este Ahora, la lluvia fue abundante. Me preguntaba qué haríamos si seguía cayendo ese chaparrón. Pero, según me dicen, eso es normal aquí; de hecho, cada tarde llueve. Lo que me sorprende es que una hora más tarde luce un sol esplendoroso y hace calor. En fin, así es por estas tierras en los meses de verano. Todo el ambiente es muy colonial, de los siglos XV y XVI; está lleno de gente, pero veo pocos turistas extranjeros, parece que a la gente de Morelia le gusta pasear por Pátzcuaro y saborear sus nieves, muy famosas, así como elotes y delicias típicas del lugar. En fin, ese deporte típico de México, y de tantos otros lugares, de comer y comer, y claro, luego pasear para ir bajando el empacho. Antonieta me regala, a pesar de mis resistencias, una nieve (helado) de zapote, que sólo los Mexicanos saben lo que es, pero que acaba resultándome una fruta muy buena. Tampoco faltó el elote, para no romper con la tradición. Me gustó el paseo, la música que tocaban en vivo en la plaza central, el vuelo de las palomas, el juego de Elián, los bigotes tintados de chile rojo de Serafín, la alegría de Fátima y la compañía de todos. Sigo Ahora, siempre ahora. Cambia el decorado, a veces él Ahora se viste de verano, y otras, de invierno, en ocasiones le llaman España, otras Italia, Ecuador, Argentina. Ahora se llama Morelia, y vuelve a llover. CONTINUARÁ…

6. VIAJE AL AQUÍ ((M Meex xiiccoo,, J Ju ulliioo’’1 16 6,, 2 2ªª p pa arrttee)) Y seguimos en el Ahora, y aquí lo llaman Morelia. Antes fue conocida como Valladolid, y aún antes, ¡quién sabe! El caso es que siempre es Aquí. Y ya con las maletas listas salimos para la costa, Ixtapa, que por su nombre me recuerda a la legendaria ITAKA homérica, donde, según recuerdo, el viaje mismo era lo importante, como la vida misma. Los días en esta ciudad me han hecho comprender que, aunque Morelos fue un gran general, Morelia es una mujer. Diría que una hermosa y cautivadora mujer, cuyos encantos no hacen más que adornar a su espíritu inteligente, práctico y eficiente. En resumen, una mujer múltiple, como la figura de las Tarascas que, en una plaza central, juntas levantan una cesta de frutas y cosechas. Este es un hermoso símbolo de la capacidad femenina de compartir y cooperar. Poder que no tiene que ver con el género sino con la polaridad, es decir que hombres y mujeres, todos, disponemos de estas nobles y valiosas virtudes. A las Tarascas las vimos mil veces, porque Fátima nos llevó a verlas una y otra vez: fuéramos por dónde fuéramos acabábamos en las Tarascas. Debe ser un embrujo femenino. Morelia está vestida de elegantes acueductos, imponentes iglesias y callejones de romances imposibles. Y es que el moralismo, y no si lo trae el propio nombre, tiende a encorsetar el alma entre deberes y prisiones, conventos y convenios, y al final, el alma llora en forma de hombre y de mujer por no haber tenido el valor de darlo todo por el amante. Al final queda una vida conveniente, incluso acomodada, quizás demasiado cómoda, donde el alma llora mirando entre las rejas de las convenciones sociales. Es posible que, por eso, en esa Morelia de calles de leyenda, conservatorios de rosas y juventud despierta, se les dé tanto por la protesta y manifestación, que parece no impresionar ya a nadie. Hoy todavía las Tarascas lloran por el narcotráfico, los hijos perdidos, unos en USA, otros en el lado oscuro. Y levanta sus brazos porque ya no toca otra cosa: que el pueblo asuma la libertad, la revolución silenciosa, el cambio de alimentación, la meditación, el Árbol del Yug-Do… Y por eso están aquí las nuevas Tarascas, las de carne y hueso, las Chávez, las Perlas, las Ilihutsy, las Marinas… Y digan con su talante firme y amoroso NO A LA VIOLENCIA DEL HOMBRE. Fin al terror porque ya no tenemos miedos, porque soltamos la ira y la venganza, y porque estamos interesados solo en un Reino de Conciencia. Así que ¡basta! Ya se me pegó la protesta moreliana… La dejo ir con amor. Han sido días de terapias, muchas terapias: sin duda hay mucho que sanar por aquí, pero también han sido días de abrazos, de experimentar el bambú nuevo al son de pájaros cantores, corazones alados, discursos silenciosos, tanto amor elevado por el poder suave del bambú de la luz. Aquí, todavía en Morelia, mientras las Tarascas vivas del Yug-Do usan su destreza, capacidad e ingenio para amarrar el equipaje, la camioneta parece ya lista para el safari. Y soñamos todos en el nuevo Ashram, Dojo de Yug-Do que ha de ser ambulante: una caravana acomodada para unos cuantos guerreros en un viaje alrededor del mundo, pueblo por pueblo, dando terapias, charlas, prácticas y amor a raudales. América de punta a punta, Asia, África, Australia y hasta Europa. ¿Quién se viene? Aquí, en el gran lugar del agradecimiento, quedan alguna que otra lágrima, porque ya no nos queremos separar. Tan intensa ha sido la experiencia. Yo también lloro con los de los ojos brillantes y enamorados, y por mi helado de chocolate vegano en el callejón del Romance. Ya todos listos, salimos de aquí hacia AQUÍ. Como quiera que se llama el lugar que nos reciba. Sigamos caminando. TAI!

7. EL RÍO DE LA VIDA Todos estamos en el río de Yug-Do para ser parte de la corriente, y esa corriente es el MAESTRO. Su labor no es diferente a la nuestra, la fuente que cada uno por separado buscamos desde nuestra individualidad es la misma. LA UNIDAD es la que nos empuja hacia su presencia, a su corriente o mar. Su figura es el reflejo en nosotros del anhelo humano, de ese que trata de adquirir y alcanzar lo manifiesto en nuestra alma, que no es otro que: "Presencia en la consciencia". Solo en este estado de presencia en la consciencia se encuentra la veracidad de un verdadero altruismo en el liderazgo. Ese impulso contenido en cada uno es el testimonio de nuestro avance en la conciencia de unidad, y es lo que nos agrupa en ese acercamiento hacia su presencia. En el Yug-Do, este camino entre los caminos, tenemos la clara convicción de que ejercemos una forma diferente de liderazgo de la que observamos en los diferentes grupos o asociaciones de cualquier ámbito. Consciente o no, gran parte de la estructura de responsabilidades que asumimos nos acercará al liderazgo, y nuestra salud espiritual depende de que ese cargo nos aproxime a la presencia del Maestro. El cargo - algo para lo que uno no se postula- también ayuda para que nos defina como guerreros de la luz. Por tanto, tener un Maestro es igual a tener una necesidad espiritual. La necesidad es el reflejo que constata la necesidad de ser y, como decía mi Maestro José Marcelli, “Ser más y mejor, y más pronto”. Nuestra necesidad de servir está protegida en el presentimiento de que todos somos uno, esto es de la presencia en la consciencia. El Yug-Do es esa corriente que serpentea hacia el mar de la transmutación: una vez renovado fluye de nuevo hacia el amor y la libertad, hacia el río de la vida.

Cinta Blanca MARÍA ARRABAL 15

8. …DEL MES…

 CLAVE DEL MES:

 FRASE DEL MES:

AMOR

El verdadero amor es la expresión de tu verdadera naturaleza.

 PARA VER:

 PARA LEER: Klein, Jean. LA SENCILLEZ DE SER. El secreto de la felicidad y la vida plena

Editorial OBELISCO, 1.988

The fundamentals of caring (Concussion) (2.015) Dirigida y guionizada por por Rob Burnett, basada en la novela de Jonathan Evison

9. FRASES PARA NUTRIR EL ALMA El trabajo exterior nunca puede ser pequeño, si el trabajo interior es grande. Y el trabajo exterior no puede ser grande, si el trabajo interior es pequeño. ECKHART TOLLE

Sea amable e indulgente con todos y todo, incluyéndose usted. DR. D. R. HAWKINS Aprender es acordarse. PLATÓN

Vivir con atención y amabilidad es lo único que se necesita. El resto se revela a su debido tiempo.

Solo se puede lograr la paz mundial a través de la transformación interna del individuo; es un proceso difícil, pero es la única vía.

ANÓNIMO

Si estás atravesando un infierno, solo sigue adelante. WINSTON CHURCHILL

El Ser humano alberga en si toda la sabiduría y el conocimiento necesario para curarse así mismo. PARACELSO

El principal problema con el equilibrio son las propias ideas al respecto.

DALAI LAMA

ANTONIO IBORRA Que aquel que busca, no deje de buscar hasta que encuentre, y cuando encuentre será perturbado, y cuando ha sido perturbado, se maravillará y reinará sobre el Todo. DICHO DE JESÚS (EVANGELIO SEGÚN TOMÁS)

Para un ser humano el amar a otro, eso es lo máximo, el último examen y prueba, el trabajo para el cual todo otro trabajo no es más que una preparación. RAINER MARÍA RILKE

El corazón es como un grano, nosotros parecemos el molino, ¿sabe éste porque gira? Muchas cosas extrañas sucederán: ¡Silencio! Pídele a Dios que te informe. RUMI BENJAMIN FRANKLIN

La fuente de la juventud reside en la propia conciencia. EILEEN CADDY

Cinta Blanca MARÍA ARRABAL 17

10. LOS SOLSTICIOS Y EL MAESTRO EN MÉXICO En México estamos en el verano, y llueve constantemente, y aunque no hace mucho calor a veces si se siente. Cáncer es el signo cardinal de la estación: es un signo de agua y precisamente es un signo lluvioso. La naturaleza responde con el crecimiento de la vegetación y el color verde exuberante de las plantas. En esta ocasión el Maestro viene con la estación de la vida haciendo camino con cada latir de su corazón, con cada respiración, con cada abrir y cerrar de sus ojos: siempre su SER de LUZ. Los dos solsticios coinciden con la presencia del Maestro en México: en el invierno durante febrero y el verano en julio. La experiencia siempre nueva se presenta con un despertar. Con el Maestro de la vía nos corresponde caminar. ¡Qué maravilla, desde el Dharma tener la oportunidad de Servir sin pedir nada a cambio! Así vamos entrenándonos cada vez más en el hacer si hacer del Camino. En el solsticio de verano experimento al Maestro con más calor, más emoción, apertura y siempre creativo. En cambio, en el solsticio de invierno hay más contracción, frío, seriedad y también descubro su creatividad. En realidad, el Maestro es el Maestro SIEMPRE, pero soy yo el que con mis cambios lo vivo así. Agradezco al coordinador de Tenerife, cinto dorado Raúl Villar, por su experiencia lograda como el hermano mayor en el camino. Agradezco a Ecuador, con su actual coordinadora, la cinto plateada Martha Yáñez, por su crecimiento y ejemplo para todos. Agradezco a la cinto negro Graciela Leiva, en Argentina, por su ejemplar continuidad. Agradezco al cinto rojo, Eugenio Pareja, en la península ibérica, por su Dharma impersonal al Yug-Do y al Maestro. Querida Maestra María, tu excelencia lo muestra todo, tu capricornio en busca siempre de lo más alto de la pirámide. En México, la coordinadora actual, la cinturón plateada Perla Palma, es muy buena y muestra el camino. Querido Maestro, quiero darte las gracias por tu gran ejemplo y entrega.

Cinta Roja SERAFÍN MENDOZA 18

12. VUELA EN TUS SUEÑOS El otro día tuve un sueño. El Maestro nos proponía un juego. Se trataba de surfear o hacer skate en el aire. Era como al estilo de Mad Max. El dispositivo era una tabla de surf o de patinar unida a un brazo largo o lanza de metal que pasaba por un pivote situado en altura, y que se unía en el otro extremo a un peso proporcional a la persona que lo utilizaba. El invento permitía hacer infinidad de piruetas, posturas, movimientos y filigranas volando en el aire. Era algo muy intuitivo y a la vez perceptivo el ver que cualquier movimiento, contracción o respiración suponía un cambio en el equilibrio del contrapeso y, por tanto, en el movimiento suspendido en el espacio-tiempo. Un verdadero goce el verse en el cielo haciendo multitud de recorridos y figuras como dentro de una gran esfera celeste, la cual era tu gran esfera. Sin embargo, lo que más me llamó la atención fue que la posibilidad de realizar todo esto dependía totalmente de uno mismo. Eras tú, con tu cuerpo- mente, el que realizabas la acción, fuera cual fuera la propuesta que te hacía el Maestro. Era el participante, su actitud, su masa- energía, su materiaespíritu y su disposición al juego, así como su sensibilidad, creatividad y contacto consigo mismo lo que permitía hacer de esa propuesta algo espectacular y maravillosa, artística e indescriptible, como ocurre a menudo en el Yug-Do, y en la vida misma. Dependemos de nosotros mismos, todo depende de nosotros. Lo que vivamos, lo que hagamos, cómo lo hagamos, cómo lo vivamos, lo que logremos y lo que permitamos que se realice dependen también de nosotros. Recuerdo palabras del Maestro: “estás sólo en el mundo, y nadie vendrá a salvarte”. En este caso, en mi sueño, la frase sería: “estás sólo, suspendido en el aire y dependes de ti mismo y de tu Luz Interior para volar. Así que ánimo, Guerrero. Disfrútalo. Asume tu responsabilidad, comprométete contigo y con el mundo, y ¡Feliz Vuelo!”. TAI PD: Valora al Maestro que te presenta el reto y te da la guía: ama la lección que la vida te ofrece.

Cinta Roja EUGENIO PAREJA 19

11. BUSCO A MI BUSCADORA Hay frases que resuenan más tiempo en la cabeza y en el corazón. En la sesión de mayo de la Escuela de Sabiduría on-line escuché el enunciado del Maestro Antonio: “un discípulo fue antes un buscador, y cuando se convirtió en discípulo dejó de ser un buscador”. Entonces, la mente y el Ego me asaltaron y me encerraron en una trampa. Sí, yo no considero haber pasado por la etapa del buscador. Entonces, ¿qué hago aquí? ¿Solo estoy, como dice el Maestro, en la práctica atraída por el Yug-Do porque me provee de sensaciones maravillosas, cómo si fuera una curiosidad? ¿O será, tal como me sucede con cientos de situaciones, que no recuerdo haber sido una buscadora que lanzó por lo menos una pregunta para que me guiara y me despertara de este mundo de ilusiones? Si el discípulo es el que tiene disciplina, el buscador es el que busca. Luego encuentra. Entonces me pongo a buscar en bibliotecas y archivos internos todas esas indicaciones y claves que resuenen y empaten a un buscador conmigo. ¿Buscador, buscador? Solo recuerdo mi insistente observación, mi decisión de hacer cosas que me parecen razonables pero que a la sociedad le resultan odiosas y disidentes, a mi negativa a ser como los demás y no ingresar en los círculos viciosos que veo por todos lados, para lo cual me dedico a estudiar, alimentarme, hacer ejercicio o no tener tv, todo ello de forma crítica. Si, cierto, son asuntos externos pero que con el paso de los años me han llevado a lo interno. A sentirme. Dicha fragmentada historia la considero como parte de la búsqueda implícita, y de esas tengo varias más: desde mi profesión, mi espacio laboral hasta mi mascota. Sí, porque al final encontré: allí estaba como para mí el Yug-Do, a mi espera, a mi disposición. Entonces me doy cuenta que somos espejos; por tanto, yo estaba a su espera y a su disposición. No sé, con estas palabras parece que busco justificaciones, disculpas y pretextos para estar aquí, en el Yug-Do. Debe serme suficiente la dicha y la tranquilidad que me resultan, y de hecho lo son. También podría tomarse estas palabras como un testimonio de una historiadora que obliga a sus fuentes a decir lo que ella quiere.

Cinta Plateada ILIHUTSY MONROY 20

13. RECIBĂ? ESTA REFLEXIĂ&#x201C;N, QQUUEE CCOOM MP PA AR RT TO O Iba al aeropuerto cuando un taxista se me acercĂł. Lo primero que notĂŠ fue un taxi limpio y brillante. El chofer bien vestido con camisa blanca, corbata y pantalones bien planchados. El taxista saliĂł y me abriĂł la puerta, y me dijo: "Yo soy Willy, su chofer. Mientras guardo su maleta me gustarĂa que lea en este cartĂłn cuĂĄl es mi MisiĂłnâ&#x20AC;?. LeĂ en la tarjeta: ă&#x20AC;&#x160;MisiĂłn de Willy, llevar a mis clientes a su destino final de la manera rĂĄpida, segura y econĂłmica, brindĂĄndole un ambiente amigableă&#x20AC;&#x2039;. QuedĂŠ impactado. El interior del taxi estaba igual de limpio. Willy me dijo: "ÂżLe gustarĂa un cafĂŠ? Tengo unos termos con cafĂŠ." Bromeando le dije: "No, prefiero un refrescoâ&#x20AC;?, a lo que respondiĂł: "no hay problema, tengo un hielera con refresco regular y dietĂŠtica, agua y jugo". TambiĂŠn me dijo: â&#x20AC;&#x153;Si desea algo para leer, tengo el periĂłdico de hoy y revistas". Al comenzar el viaje, Willy me dice: "Estas son las estaciones de radio que tengo y la lista de canciones que tocan, si quiere escuchar la radio". Y como si esto no fuera demasiado, Willy me preguntĂł si la temperatura del aire estaba bien. Luego me avisĂł cual serĂa la mejor ruta a su destino y me preguntĂł si estarĂa contento de conversar con ĂŠl o si preferĂa que no interrumpiera mis meditaciones. Entonces le preguntĂŠ: "ÂżSiempre has atendido a tus clientes asĂ?". Ă&#x2030;l contestĂł: "No, no siempre. Solamente los dos Ăşltimos aĂąos. Mis primeros aĂąos manejando los gastĂŠ la mayor parte del tiempo quejĂĄndome igual que el resto de los taxistas. Un dĂa escuchĂŠ a un doctor especialista en desarrollo personal. EscribiĂł un libro llamado Lo que tĂş eres hace la diferencia, en el que decĂa: â&#x20AC;&#x153;Si tĂş te levantas en la maĂąana esperando tener un mal dĂa, seguro que lo tendrĂĄs. Deja de quejarte. SĂŠ diferente No seas un pato, sĂŠ un ĂĄguila. Los patos solo hacen ruido y se quejan, las ĂĄguilas se elevan por encima del grupo". Como yo estaba todo el tiempo haciendo ruido y quejĂĄndome, entonces decidĂ cambiar mi actitud y ser un ĂĄguila. MirĂŠ otros taxis y choferes: los taxis estaban sucios, los choferes eran poco amigables y los clientes se encontraban descontentos. DecidĂ hacer unos cambios. Cuando mis clientes respondieron bien, hice mĂĄs cambios. Mi primer aĂąo de ĂĄguila dupliquĂŠ mis ingresos. Este aĂąo los cuadrupliquĂŠ. Por cierto, que usted tuvo suerte de tomar mi taxi hoy porque ya no estoy en la parada de taxis. Mis clientes hacen reservaciĂłn a travĂŠs de mi celular o me dejan mensajes. Si yo no puedo, consigo un amigo taxista ĂĄguila confiable para que haga el servicio". Willy era fenomenal: hacĂa el servicio de una limusina en un taxi normal. Willy, el taxista, decidiĂł dejar de hacer ruido y quejarse como los patos y volar por encima del grupo como las ĂĄguilas. Querido amigo, no importa si trabajas en una oficina, en mantenimiento, eres maestro, un servidor pĂşblico, polĂtico, ejecutivo, empleado o profesional, ÂżcĂłmo te comportas? ÂżTe dedicas a hacer ruido y a quejarte? ÂżTe estĂĄs elevando por encima de los otros? Recuerda: â&#x20AC;&#x153;Ser pato o ĂĄguila, tĂş lo decidesâ&#x20AC;?. Aprendamos a agradecer y ver las cosas con lentes de color de rosa. Mientras mĂĄs agradeces a Dios, te va a dar mĂĄs motivos para seguir agradeciendo, y mientras mĂĄs te quejes sucederĂĄ lo contrario. Sea SU voluntad. Que tus problemas sean menos y tus bendiciones mĂĄs para esta hermosa familia de Ă GUILASâ&#x20AC;?. đ&#x;&#x2DC;&#x2DC; â?¤â?¤â?¤â?¤

Cinta PCla ad NA IT VU AERV REEDTO E inttea Na egJrU aAM RA INNAAQ 21

14. ELIÁN EN MORELIA Elián en Morelia Conservatorio de las rosas musicales, del árbol de la vida, de los arcos con luz de tarde de nubes de lluvia. De un niño que imagina con su barco semilla como son los trenes que escucha a lo lejos... La tormenta dio paso a la transparencia del agua para reflejar el cielo azul, como ventana a la eternidad iniciada en un instante de paz en la mirada.

MARINA QUEVEDO 22

15. INFORMES Eñe as el sueño perfecto.

 TENERIFE, Actividades Yug-do del 3 al 14 de Agosto  

Talleres de YUG-DO, Yoga, Acupuntura, Crecimiento Personal, Terapias individuales y Convivencia de verano… Contacto 606981118

 BARCELONA 

Terapias alternativas y naturales, 19 y 20 de agosto.

 ECUADOR 

Sigue adelante con las clases y proyectos de difusión.

 ARGENTINA 

Graciela Leiva, sigue adelante con las clases en Misiones.

 MÉXICO 

La experiencia en estos días de julio en Ciudad de México, Morelia, Ixtapa y Zihuatanejo, ha sido simplemente maravillosa, hemos tenido el paso a Cinturón Negro de Fátima Chavez, y a Cinturón Rojo, Perla Palma. México adelante, compromete y renovado.



Agradecimiento a la Cinturón Rojo Perla Palma, por sostener dos años la Coordinación de la Escuela en México. Y agradecimiento a la Cinturón Plateado Ilihutsy Monroy por asumir la Coordinación y el Bambú en esta nueva y luminosa etapa que juntos iniciamos. ¡Gracias a las dos y a todo el equipo de México!! TAI.

 CONVIVENCIA DE VERANO EN TENERIFE 

Del 11 al 14 en el Cayado Salvaje.

¡Seguimos el mes próximo! Para bajar las anteriores publicaciones: hhttttpp::////yyuugg--ddoo..bbllooggssppoott..ccoom m..eess// hhttttppss::////iissssuuuu..ccoom m//aayyddoo