Boletín aydo 191 by Antonio Iborra

Ya estamos en el mes de las flores, en plena primavera con la vida en ebullición, y una energía luminosa que se expande y recrea. Recordemos que las flores son el aparato genital de las plantas, la expresión de Venus, del amor, la atracción y la reproducción. Es un momento adecuado para pasearse por el campo, por los bosques y praderas y enamorarse de la vida, fascinarse con cada color, embriagarse con los aromas de las mil flores y el canto de los arroyos. Por favor, no te quedes en casa. El Yug-Do es naturaleza para vivirse al aire libre; toma tu bambú temprano y ve allá dónde la luz del sol se hace visible. Acecha cada amanecer, respira la luminosidad de cada rayo de energía solar, llénate del momento, descubre una vez que nada te falta, que todo ES en tu interior. Mayo, el quinto mes, es el Hierofante del año, el constructor de puentes, con el aprendizaje constante y el descubrimiento de la fuerza oculta que reside en la motivación. Todos somos motivables e influenciables, pero el gran secreto es encontrar el camino para motivarte a ti mismo, y alcanzar así más libertad, autonomía y posibilidades para encontrar tu propia Misión. Moverse con la mente es fácil: basta darle un objetivo. En cierto modo, sin esta direccionalidad la mente se vuelve entrópica, incluso se auto agrede; sin embargo, moverse con el corazón es otra cosa. En tu interior reside la capacidad de reconocer el CAMINO, el Dharma, la Misión Individual. No confundas objetivos con Misión. Los objetivos los decide el ego, en cambio la misión es un misterio que se despliega poco a poco, a medida que avanzamos con valor, en la dirección que el corazón insinúa. Podemos creer que sabemos cuál es nuestra Misión en la vida, pero la verdad es que mientras estamos en este plano la misión no se ha revelado por completo, así que, hasta el último suspiro, el misterio de la misión sigue revelándose a la conciencia.

Sólo mirando atrás, hacia la memoria, podemos ver que todo lo que hemos vivido formaba parte de una misión que trasciende al entendimiento: nada ocurrió por casualidad, todo formaba parte de un plan mayor. Ahora, reposadamente, bajo las frondas de un abeto podemos meditar y abrirnos al enigma sagrado de la vida. Todo lo que tendremos que vivir, de forma voluntaria o no, al final formará parte de nuestra Misión. Aún sin darnos cuenta, nuestras vidas habrán influido de diversa manera a muchas otras porque todos somos parte de una función global, de la gran obra de teatro del mundo. Todos, sin excepción, somos maestros y discípulos, aprendices siempre. Lo importante es encontrar las huellas de nuestros propios pasos. El alma con el aroma del SER siempre va varios pasos delante de nosotros, hablándole corazón en susurros callados.

Por eso Yug-Do es el arte de meditar, de mediar, de estar aquí y ahora, de aceptar plenamente el momento y descubrir nuestro papel en él. Yug-Do es el Propio Camino, la Senda del Alma, la Vía del Bambú. Sólo tienes que escuchar más allá de la mente, en el interior de tu corazón y recordar que en el fondo puedes reconocer la verdad; puedes encontrar el correcto actuar. Tres aromas te preceden, tres murmullos anuncian el camino: la bondad es para tu cuerpo, la belleza es para tu alma, y la verdad es para tu espíritu. Disfruta de cada momento aves cantoras, sonidos mandalas de nubes, coherencia, lo que te hace adecuada al momento. respuesta.

y, entre flores, del agua y encuentra la bien, la acción Encuentra la

¡Feliz Primavera!

A menudo confundimos el Campo de la CONCIENCIA PURA, que es la Esencia de nuestro Ser, con la capacidad de la mente de verse a sí misma y reflexionar sobre sí misma. El Campo de la CONCIENCIA PURA es silencio, amor, paz, luz, armonía y felicidad. Es también inteligente superior porque del mismo modo que al iluminar algo podemos descubrirlo, cuando la mente y el ego son "descubiertos" por la conciencia, automáticamente cambian, mutan sin esfuerzo ni violencia, debido al verdadero Darse Cuenta (no sólo en el darse cuenta psicológico de la mente). Allí hay una sensación profunda de regreso a casa, de comprensión no sólo intelectual; una sencillez que evidencia claramente la dirección a seguir. El acto correcto emerge de forma espontánea. La otra "consciencia" es más bien la capacidad de la mente de mirarse a sí misma y a todo lo demás: cuerpo, exterior o emociones. Lo difícil es distinguir una con(s)ciencia de la otra. Porque más allá de definiciones, de poner una "s" en la consciencia de la mente o no ponerla en la CONCIENCIA superior, la clave está en observar este detalle. ¿Cuándo eres consciente, tu con(s)ciencia va aparejada de una valoración, un juicio, una sentencia o un malestar? Entonces estás ante la consciencia mental. El despertar de la CONCIENCIA superior en ti no es un proceso analítico ni intelectual, no recurre a la memoria, no reflexiona sobre el bien o el mal (eso sería la consciencia moral del ego). Esta CONCIENCIA aparece desde el silencio, e inmediatamente uno se ve recubierto por un manto de amor, paz, congruencia y claridad, donde se hace visible sin juicios ni valoraciones lo que tiene que ser "soltado", lo mismo que la dirección a seguir. La CONVIVENCIA PURA, el despertar del Ser en lo humano, aparece después de una práctica de Yug-Do, de Yoga o de Meditación. Sin saber cómo ni por qué, los discursos sobran y aparece la gran paz en nosotros, armonía que suelta de inmediato lo que nos daña o perjudica y nos enfoca hacia el Camino a seguir.

Es pues importante comprender que pensando y razonando no siempre alcanzaremos la luz... Lo normal es pasar del pensar al sentir y, desde ahí, llegar al Silencio. Este es el mecanismo energético de la práctica alquímica del Yug-Do… Llego al Dojo pensando, turbado y confundido. La práctica me hace pasar del pensar al percibir, al sentir. Y desde ahí, voy al silencio. Salgo del Dojo renovado, tranquilo, regenerado y en silencio… Ahora estoy direccionado de nuevo hacia el cumplimiento de misión. ¡Buena práctica! TAI

No existe un verdadero estado de paz. La mente pasa por incontables estados: ira, miedo, preocupación, distracción, obsesión, inseguridad, placer, entusiasmo o tranquilidad. Todos los estados de la mente son transitorios y cambiantes. La mente pasa de uno al otro. Pero la PAZ no es un estado más. La CONCIENCIA tiene el efecto de equilibrar los diferentes estados y, de ahí, se desprende la capacidad de fluir; es decir, de no quedarse atrapado en algún estado mental. La PAZ en el cuerpo es el silencio de los órganos, la salud como estado de equilibrio transitorio. La PAZ en la mente ofrece equilibrio psicológico, sosiego, tranquilidad, serenidad, paciencia, etc. La PAZ en las emociones les permite fluir, ser reconocidas y expresadas siempre de forma funcional. La PAZ en el espíritu nos inunda de motivación y claridad. La PAZ no es un hecho accidental ni la consecuencia de nada. La PAZ es un cultivo. La vida ofrece circunstancias, éstas estimulan reacciones en el ego que hace que entre en diferentes estados. Cuando nos damos cuenta de que algo más grande que nosotros gobierna la existencia, podemos tomar la decisión de dejarnos guiar.

Mediante el Yug-Do entramos en la Escucha y, desde ahí, nos sintonizados con la inteligencia de la existencia, lo que implica dejar que la CONCIENCIA alumbre nuestra propia vida.

A todo ello le podemos llamar PAZ. En la práctica, de forma natural aparece una gran aceptación de todo, que no es lo mismo que resignación. Más bien, la conciencia convertida en PAZ nos dice: "Igual no hay nada que temer, a lo mejor lo que me parece malo en realidad es bueno. De acuerdo, acepto lo que hay y confío". Pero aún hay más: sigo adelante y siembro con mis actos presentes lo que siento que es correcto. Dejo el resultado en manos de la existencia. Para mí, solo hay dos cosas sencillas: hacer lo correcto y confiar. Volver a hacer lo correcto y seguir confiando. Y, de este modo, la espera es buena y en la espera tranquila me deleito en la belleza de cada momento.

TAI

AIM

Mi alma está floreciendo. La primavera espira-liza mi alma. El aroma de la construcción consciente se respira en el aire. Muevo el corazón con suave sacudida y respiro el aroma del florecimiento en mi interior. Del principio de equivalencia en la pareja atrae el aroma del fuego del amor. -Flores en mi Jardín interior: es un esfuerzo individual consciente que va convirtiendo nuestra humanidad en Luz. Ese poquito, ese poco a poco, imantará a todos al ver a cada uno de los seres de este universo. Está inspirado por la gracia divina. -Flores en mi Jardín interior: es el aroma y el sonido del Maestro en mi interior, el cual colma mi corazón, con su voz tranquila pausada, llena de iniciación en presente. Respiro, alma está llena de coherencia. -Flores en mi Jardín interior: el color de la amistad destila sabiduría en la relación con mis hermanos. El Yug-Do es un aroma que despeja mi mente y provoca simetría, me serena. Da paso a la felicidad que precede al correcto pensar. -Flores en mi Jardín interior: doy pasos en mis espacios verdes que están llenos de afecto y confianza. Esa es la relación que lo unifica todo y a todos. Trabajamos la honestidad y el amor a nosotros para poder amar de igual manera a los demás. -Flores en mi Jardín interior: allí inhalo unidad en diversidad. La respiración de la contemplación, del equilibrio dinámico y del espíritu renovador de conciencia grupal. Al final, la amistad unida en un centro común, en “Nuestro Maestro de luz”. Las flores en mi Jardín interior están rebosantes después de la convivencia de primavera. Están regadas de abrazos afectuosos, de fraternidad, lealtad y amistad. Todos mis hermanos en la senda en Yug-Do repartieron sonrisas llenas de cariño. “Amaos para poder amar a los demás de igual manera, provocar equivalencia en la comunidad del Yug-Do y colmar la sed en el fuego del amor”. Este fue el mensaje final de la convivencia de primavera del Maestro. Gracias, Maestro, todo mi Jardín procede de la fuente única que inspira su presencia en mi espíritu. Mi jardín está lleno de mariposas.

TAI

¿Cómo es el sentimiento correcto?

CLAVE DEL MES: PAZ

PARA LEER: 1978

Ananda el Yogui errante (Ramiro Calle) Edita: PIRÁMIDE, S.A.

FRASE DEL MES: “La Paz es el camino"

PARA VER: María Magdalena (Garth Davis, 2.018) REINO UNIDO.

Todo el mundo trata de realizar algo grande, sin darse cuenta de que la vida se compone de cosas pequeñas.

Amaré la luz para que me muestra el camino, sin embargo, voy a soportar la oscuridad porque me muestra las estrellas.

Frank Clark

Tu mente siempre te recuerda lo malo, lo difícil, lo negativo. Recuérdale tú a ella tu grandeza, tu pasión y tu fortaleza. Jorge Álvarez Camacho

Og Mandino

La mejor manera de ser constantemente infeliz es pretender ser feliz eternamente.

La paz no es un estado, es la conciencia equilibrando los diferentes estados de la mente. Antonio Iborra

Eduard Punset

Tus actuales circunstancias no determinan donde puedes ir; se limitan a determinar por dónde empezar.

La dicha de la vida consiste en tener siempre algo que hacer, alguien a quien amar y alguna cosa que esperar. Thomas Chalmers

Nido Qubein

¿Cuántas formas tiene de manifestarse el amor? Sin embargo su fragancia siempre es la misma. María Arrabal

El futuro recompensa a los que siguen adelante. No tengo tiempo para sentir pena por mí mismo. No tengo tiempo para quejarme. Voy a seguir adelante. BaracK Obama

La Convivencia de Semana Santa fue una experiencia luminosa. Una oportunidad para renovar mi compromiso con la Luz, con mis Maestros, Herman@s y con la Vida. Para evaluar lo vivido durante los meses anteriores y tomar conciencia de los pasos a dar a continuación. Nuevas hermanas vivirían esta experiencia asumiendo un mayor compromiso consigo mismas, en aras de descubrir con mayor profundidad esta maravillosa experiencia que es el yug-do.Con verdadero espíritu y determinación las tres hermanas y ahora cintos negros: Candy, Erika y Maite, vivieron con júbilo su onomástica, recibiendo desde la plenitud

de sus corazones y de parte del Maestro el cinturón negro que expresa un salto cuántico en la evolución personal y el desarrollo de la Conciencia. Sobran las palabras para describir este momento. La luz del amanecer teñía de fuego el mar plateado de los Alcázares, que se asemejaba a un espejo que reflejaba la luz de los ángeles dispuestos a comunicar la buena nueva; ``cuando un ser humano da un paso hacia la luz, la humanidad es bendecida y evoluciona hacia un mayor despertar´´. Muchas emociones se agolpaban en mi corazón, muy consciente del pasado, lo viejo que debe quedar atrás para dejar paso a lo nuevo y seguir evolucionando en los diferentes planos. La magia del momento se hacía manifiesta gracias a la voluntad y gran corazón de cada uno de mis hermanos, desde la diversidad se plasmaba y se vivía la unidad que revela la luz esencial del ser. La guía y enseñanzas del Maestro desvelaban sin tapujos y con

certera precisión y esencia, la necesidad de un cambio y de asumir la plena responsabilidad sobre nosotros mism@s. Como bien dice el Maestro, no hay atajos, así que manos a la obra. La guía del Maestro es clara, no hay medias tintas, se es, o no se es, sin victimismos ni sentimentalismos que adormecen la conciencia y empañan el espíritu. Iniciación Real, Solar y Viviente, así es el Yug-Do que expresa la unidad de todas las cosas y entre todos los seres humanos. Algo nuevo se gesta y nace en mi interior, esta vez sin culpabilizarme por los errores cometidos en el pasado; se trata de una nueva comprensión que me acerca cada vez más a la posibilidad de un cambio. La película de María Magdalena me pone en la pista sobre los cambios necesarios que debo realizar. El Reino de los Cielos no está afuera sino dentro de mí, siempre ha estado ahí.

Todo es mucho más sencillo desde la humildad, la generosidad y un corazón abierto. Gracias Estimados Maestros por ser, estar y ser luz en mi vida. TAI

La voluntad, en el ser humano, implica esa fuerza para comenzar algo. Ejemplo de ello es la disciplina, hacer la limpieza de la casa, ir a la tienda a comprar alguna cosa que haga falta o hablar por el celular, etcétera. Para realizar cualquier experiencia en el hacer es necesaria la voluntad. Dentro de la disciplina diaria que realizo sobre mí mismo, observo la dirección e intención de mi voluntad, porque la dirección negativa de la experiencia me traerá resultados frustrantes, desgastantes y dolorosos, así como también la elección positiva de la experiencia me dará resultados buenos, agradables o disfrutables. Como ser humano, mi objetivo es el justo medio o equilibrio, pero lograrlo es difícil. ¿Por qué es complicado? Porque todavía no soy completamente consciente. En la naturaleza observo a la voluntad a través de la manifestación en la vegetación, el clima y los mismos animales, además del cambio de las estaciones: primavera, verano, otoño e invierno.

Procuro vivir mi primavera todos los días, desde el momento en que amanece. Ahí descubro la diferencia entre conocer y saber. Todo lo que conozco lo he leído en libros, lo he escuchado de otras personas, pero no lo he vivido plenamente. Todo lo que sé lo he experimentado conscientemente, lo he disfrutado con la disciplina, en los momentos de servicio impersonal y no en las ocasiones en que engordan mi ego.

Me he dado cuenta que uno de los retos más importantes de nuestros tiempos es la integración de la ciencia y la religión. Este es uno de los problemas más apremiantes del mundo moderno, porque se ha perdido la relación que existe entre la ciencia, como camino que tiene el ser humano para desvelar la verdad, y la religión, que es la otra propuesta, la otra fuerza poderosa que de manera individual genera sentido. Verdad y sentido no parecen conciliables; en el Yug-Do es donde se aproxima esa reconciliación a través de la consciencia, que sirve como puente entre ambas. Solamente a través de la maestría de la realización del ser humano en sí mismo, vislumbro esa reconciliación de la ciencia y la religión. El ser humano dejará de estar peleándose con él mismo, en donde la lucha la enfrenta su parte científica que busca dominar a su parte religiosa; más pronto o más tarde alguna de las dos tendrá que ceder. Por lo pronto, religión y ciencia se encuentran en un aparente estancamiento en las relaciones. Esto lo veo en mí mismo, con el distanciamiento entre mis creencias con fe y mis dudas razonables. Toda esa reconciliación comienza con la cultura viva. La palabra cultura proviene de cultivo, de cultivarse. Y cuando uno vive cultivándose es cuando uno se va haciendo. En sí, la cultura no es más que la transmisión y herencia de costumbres que no tienen que ser necesariamente buenas o malas, pero si no son hechos conscientes, razonados y actualizados, sí nos pueden mantener enredados en tramas de creencias dolorosas y limitadas. Ahora recuerdo que la religión funciona con sistemas de creencias; en cambio, la espiritualidad propone métodos de experimentación para descubrir lo que está más allá de la mente. Agradezco al Maestro su genuino don y auténtico caminar, que pertenece al linaje de luz. TAI

Tras la jornada de trabajo toca una parada de luz, para continuar por la tarde. Me voy a mi lugar y momento favorito del Instituto; la práctica de Yug-Do en su versión Yoga. Cada asana, cada estiramiento, cada relajación postural con la respiración es un regalo para mi cuerpo, para mi cuerpo físico- energético y si estoy en la atención correcta, también para el cuerpo mental. Poco a poco me voy centrando, culminando la hora con unos diez minutos de relajación- siesta del carnero, siempre es éste un momento de pura regeneración luminosa en mi día a día. Ya se ha convertido en una rutina creativa que siento que no debe faltar y que me doy buena cuenta cuando falta. Me sorprende y me atrapa la práctica porque tras los diversos temas que ando resolviendo siempre, me regresa al mí mismo, al aquí y al ahora. Ha sido un gran compartir el de estos días en Sevilla y Murcia, y el ver el entusiasmo y la alegría en los ojos de las cintas negras me conecta con mi propia motivación, con el recuerdo de mi mismo, con otra época, pero de una manera renovada, que me transporta al más aquí, integrando el pasado y abriéndome más al presente. De forma actualizada. Es una experiencia asombrosa presenciar un pase a Cinturón. Cualquiera que haya sido testigo, lo sabe. Y hay algo muy genuino en la relación que se establece entre los hermanos que han sido bautizados juntos.

También reconozco época de buenas pruebas; la Odisea- Viaje a la Convivencia... y el regreso, los diversos temas familiares, la reorganización del trabajo, nuevos compromisos... Y pruebas son, las que vienen a darme forma y a cocinarme. En algunas me tocará caer, soy consciente de ello, pero acto seguido para levantarse y continuar. Reconozco que algunas de las pruebas que se anuncian me causan respeto. Pero tengo un Verdadero Maestro, objetivos claros, voy trazando el plan que sigo, siempre abierto a modificarse/ me, atiendo las indicaciones del Maestro, y la vida me susurra al oído "sigue, continúa, profundiza, adelante, Confía en tu Maestro, Confía en tí, Confía en la Vida, en última instancia cuentas contigo, siempre cuentas contigo, con tu motivación..., revísate, adáptate, disfruta…!

Así que toca mojarse y en ello es precisamente en lo que estoy ahora mismo, mojándome,

dándome un gran baño de sol, de silencio y de suave brisa que recarga cada uno de mis poros y mis centros de energía, escribiendo y pintando con letras de luz antes de regresar a la faena y regalo de convertir la vida en un bello cuadro. Nuestra Obra de Arte. Y el cuadro me dice; prepárate, cuida los detalles que muestran la esencia de la vida, obra con amor, especialmente hacia ti mismo, confía y entrégate, porque en la entrega está gran parte de la maduración. En la preparación y en la entrega. En la disciplina y el servicio impersonal. P.D: Me gustó especialmente del estudio del sexo sagrado, algo así, como que, lo mejor que puede hacer un padre es mostrar a los hijos la propia motivación, que les sirva de ejemplo para que ellos mismos aprendan hacer y a crear su propia motivación, a encender su llama, a hacer su propia luz, y me gustaría añadir; y a darse calor, a su manera. Un Gran Abrazo Guerrero/ Guerrera TAI

Hace unos días, el Maestro nos propuso a las recientes Cinturones Negros de Tenerife, España, participar con un artículo en el próximo número del Boletín. Reconozco que me llenó de alegría y entusiasmo porque, expresando nuestro sentir, estaremos aportando nuestro granito de arena a la gran labor que se realiza desde la hermandad del Yug-Do. Desde que era una niña, yo sentía que lo que me rodeaba se podía ver con los ojos de la cara, aún más con los ojos del alma. En mi adolescencia leía los Salmos de la Biblia con tanto fervor, que me parecían poesía. La vida y obra del maestro Jesús me emocionaban y reconfortaban. Luego, fui madre y descubrí la fuerza de la voluntad y el amor incondicional. Pero las ansias de búsqueda de un cambio en mi vida y la convicción de la importancia de la mirada del alma, seguían ahí. Hace algo más de un año me encontré con el Yug-Do o, quizá, él me encontró a mí. Raúl Villar fue mi primer instructor, y con sus clases fui descubriendo que no se trataba sólo de un trabajo físico: en la imagen del arcano mayor “La Sacerdotisa”, por detrás, aparece un velo. Raúl me mostró que podía correrlo y observar lo que escondía. Sin miedo. Me conectó con la valentía. En el mes abril de 2017, hace justamente un año, asistí a mi primera clase de Reflexología podal con el maestro Antonio Iborra, y ésa fue una hermosa revelación. Aún tengo grabadas sus palabras cuando nos habló del punto del corazón, el Shanzong: “Punto maestro de la energía, de tu intención amorosa. Las células madre las necesitamos para repararnos, y es la caricia el medicamento. El amor es el mejor alimento”. De esta manera, el Maestro me conectó con el amor. Luego, continué en mi instrucción de Yug-Do con Juan Antonio Jorge. El Cinturón Plateado Toño me mostró que, detrás del velo de “La Sacerdotisa, estaba yo, y que debía sentir mi interior, qué me decía y, desde ahí, ¡centro! Me conectó con la confianza.

A dos semanas del examen y de nuestro viaje a Murcia, tuve otra maravillosa revelación, pero esta vez fue con el bambú. Al comienzo de la Formación, el Maestro nos puso música celta. Sentados y en silencio, sentí mis emociones a flor de piel y todo lo que se estaba

moviendo en mí. Comenzaron a rodar lágrimas “como chochos” (esta es una expresión canaria para decir que eran unos grandes lagrimones) por mis mejillas. Tenía el bambú a mi lado y, entonces, me habló: “No estás sola, yo soy tu apoyo.” Rocé mi mejilla con el bambú y me acarició. Me calmé y me conectó con la seguridad. Durante nuestra estancia en Murcia, la maestra María Arrabal estuvo pendiente de nosotros en todo momento, abriéndonos su corazón y, en palabras suyas, “sus brazos rebosantes de abrazos”. La maestra María me conectó con el servicio a Dios Padre-Madre, al Maestro y a nuestros semejantes. Tras habernos ceñido el cinturón negro, el Maestro nos comentó: “A partir de este momento, ya no tendrán problemas; lo que van a tener ahora serán pruebas”.

Y en ese proceso de pruebas y transformación me encuentro. Continúo con la disciplina, la meditación y la formación teórico-práctica. Observo y disfruto de lo que se mueve dentro de mí y alrededor. Lo que ya no me aporta lo dejo a un lado del Camino, lo bendigo y lo suelto. Gracias a los Maestros por ser nuestros guías. Gracias a los hermanos Raúl y Toño, por sus clases de formación y su apoyo incondicional. Gracias al hermano Eugenio por mostrarme lo bello en lo cotidiano. Gracias al hermano Julio por demostrarme todo lo que se puede exprimir un abrazo. Gracias mis hermanas de C.N., por aceptarme y por su cariñosa compañía. Gracias a la hermandad internacional del Yug-Do. TAI

Me levanto a las 4 am. Me preparo para mi primera experiencia con el grupo de cinturones de YugDo. El impulso interno me lleva, y no tengo que racionalizar la idea del porqué tengo que ir allí. Son las 4:40; ya llevo mi mochila colocada y me dispongo a salir de casa. Me enamora el silencio de la ciudad de La Laguna, la cual me adoptó y me ha visto crecer. Mi paseo solitario me resulta incluso romántico. Me siento dueña de mis pasos, no hay paradas que hacer ni coches que esquivar. La pureza del Silencio y Paz que percibo, me van atrapando por el camino. Es mi peregrinaje, sin lugar a dudas. Haber llegado temprano, resulta ser un regalo para mí. Meditar en el silencio de la ciudad es la mejor experiencia amorosa que he vivido. Llega el Maestro y Raúl, hombre admirable por su entrega a la obra del maestro, por la belleza y nobleza de su alma. Empieza la práctica. Sólo la presencia en el grupo te hace cambiar de frecuencia. Veo hombres entregados a la disciplina, y no pierdo detalle. La presencia del Maestro, que ya conocía desde hacía tiempo por la formación de Yoga y cursos de Sanación Cuántica, me resulta diferente. Su figura como maestro de Yug-Do le hace aún más honorable. Escucho el sonido del bambú, cómo silba cuando gira. Por momentos, las varas parecen danzarines siguiendo una coreografía perfecta. Me impresiona el choque del bambú de los dos cinturones más veteranos, son como dos espadas en una batalla. Me resulta hermoso contemplar la escena,

mientras realizo la práctica. Me encontraba algo perdida en el lugar más idóneo para mí. Yug-Do. Desde entonces, no he dejado de respirarlo, sentirlo y vivirlo. Yug-Do, ¿qué eres? Me has sacado a empujones de mi adolescencia espiritual. Me has dado LUZ, me has enseñado a dejar de ser. Me has tocado con tu magia, a través

de mi Maestro. Me he comprometido contigo sin dudar, la guía y la Certeza siempre me han acompañado. Respiro verdad en el Dojo y siento profunda admiración por cada uno de los seres que por allí pasan. Mis compañeros se han convertido en hermanos en un verdadero acto de alta magia. Me parece haberlo vivido en otro tiempo y que esto del presente es un amoroso y esperado reencuentro. Estoy impresionada por todo lo que percibo en ese momento que he vivido con mis nuevas hermanas. No puedo ver sus caras, pero siento las emociones de todos ellos y veo profundo respeto en el acto de imposición de cinturón negro. Es un ritual iniciático de extrema sencillez, en el que hemos sido tocados por la LUZ. Mantenerla con honorabilidad es labor fundamental a partir de ahora. Como dice el Maestro, él crea un estado encantador para que tengas acceso a ti mismo. Ahora y siempre, todo depende de uno mismo. Seguir capacitándonos y manteniéndonos como seres luminosos que somos. El sabor de la belleza y complejidad de la transformación es una de las sorpresas del camino. Había vivido otras etapas transformadoras, pero nunca había disfrutado de ellas. Tomo las riendas de mis egos, siempre con amor compasivo. Nuestro camino hacia la identidad del Ser implica dejar atrás la identificación del personaje. En todo existe la belleza. Como dice el maestro, a partir de este momento ya no existen los problemas. Sólo pruebas. Surge la identidad del Ser, la belleza de lo inexplicable. Sólo hay LUZ, sólo hay AMOR. Me he perdido para reencontrarme contigo. Aceptar al otro es Amor. Vacío incómodo que se torna en sublime belleza, la identificación se diluye. No hay nada, todo pasa. Todo tiene Alma, todo es Alma desde que tú estás. Tanta pureza, tanta vida. La respiro y me siento tan amada como nunca lo he sido. Pero mi servicio consiste en amar. El coraje es mi espada. Existe un solo sentido desde la Consciencia, se respira lo supremo, lo intangible. Todos los Hermanos están en mi corazón. Con ustedes voy, desde el Amor hacia el Amor. Gracias, Maestro.

TAI

¡Apreciados compañeros! Ha sido el anhelo de encontrar la serenidad de mi alma lo que me ha traído a ustedes, siguiendo pistas y señales que en otro tiempo han pasado desapercibidas. Mi mente ha claudicado a mi corazón y entre ellos ha habido consenso sobre mi nuevo proyecto de vida. He elegido seguir el camino que ha marcado el maestro, el de la familia yug-do, porque además de su conocimiento, su sabiduría, de su respuesta de paz al mundo, de la búsqueda de la felicidad interior, del camino espiritual que propone…... ha hecho un hueco para mí, y yo me siento afortunada (como si realmente estuviera con mi familia), me siento crítica, me siento espontánea, siento que aprendo, (que no sé de casi nada) y no me siento juzgada. Siento admiración y amor por mis hermanos, por mis hermanas y por todos ustedes, aunque no conozco también están en mi corazón. Tenemos mucho por hacer y por aprender. La celebración de la convivencia en Murcia fue maravillosa. El lugar donde hacíamos la práctica por la mañana era idílico y hermoso; digno de ser elegido por un Maestro. La programación de las actividades muy bien organizada. Me encantó. Las excursiones a lugares sorprendentes y genuinos. Las termas, los humedales, el bosque…. Y mi corazón regresó muy feliz de allí. Porque la convivencia fue maravillosa, alegre, amorosa, conocí a mis hermanos y hermanas en distancias cortas, donde no hay interpretaciones ni teatros, y me reafirmé en que todos son maravillosos. Conocí a María, maravillosa maestra, madre, mujer, y compañera. ¡Me encantaste María! Sentí que no me había traído solo un cinturón negro…. Y este es mi punto de partida, estoy a su disposición. TAI

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Cursos de Medicina China Cuántica, Kinesiología Estructural, Yoga y Formación de YUG-DO. Clases diarias y terapias personales. Domingo 6 Excursión con Taller.

 Días 1 y 12 de mayo. Terapias personales en Vich, Barcelona y Pineda de Mar.  RENOVADO. Siguen las clases en Viveros, Pilares, UNAM y Desierto de los Leones. También en Morelia... Cursos, Talleres, Terapias y en preparación del Encuentro de Verano con el Maestro.

 Continúan Siguen las clases y Formación en Quito, Parques de Elejido y la Carolina, y en preparación del próximo Encuentro con el Maestro.

 Siguen las clases de YUG-DO en Posadas, Misiones.

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