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El sol naciente tiñe de reflejos dorados un mar de nubes algodonosas, así desde el aire los problemas de la tierra se relativizan un poco. Cómodamente estoy sentado en el avión que me ha de hacer llegar a otro ecosistema. Disfruto de una respiración tranquila. "Cuánta Luz" es el último mensaje de mí Maestro, me resuenan sus palabras... ¡Cuánta luz! Porque todo es luz y, justamente, es ésta la que conduce y guía nuestras propias vidas. Todo es energía, y la energía es Luz. Nuestro Sol es una de las incontables ventanas o estrellas por las que el mundo visible y el invisible se encuentran. Nuestro cuerpo fabrica su propia luz a través de las mitocondrias presentes en cada una de las trillones de variedades de nuestras células. Mediante el oxigeno y la glucosa la energía vital crea todos los mecanismos y posibilidades de nuestra comunidad orgánica. De este modo respirar es generar luz interior. Cabe recordar que la respiración "normal" es siete veces más deficiente que la respiración natural. Así que si quieres una vida más sana, plena, inteligente y creativa, ¡tómate un respiro! Lo que ocurre es que normalmente la respiración es un acto inconsciente, como tantas otras cosas en nuestra vida, y para poder ampliarla necesitas hacerla consciente. Lo que también implica atención. De este modo vamos comprendiendo que la propia luz es, fíjate bien, energía, información, inteligencia y básicamente CONCIENCIA pura. Y para activar la conciencia en ti necesitas la atención. Así que, ¡atención! Respiración atenta, relajada y consciente es el eje de todos los métodos de crecimiento interior como Yoga, Tai-Chi, Chikung, Yug-Do, Dao Yin o Pranayama. También de la Meditación. Cada día que te regalas una cápsula de algunos minutos -no hace falta que sean muchosde respiración consciente, atenta, lenta, sentida y disfrutada será algo maravilloso. Ello acarreará, primero, activar la nutrición celular y las mitocondrias, segundo absorber la luz solar y tercero conectar tu luz individual con la gran Luz de la vida. Eso se traduce como bienestar, tranquilidad y claridad. Hoy en día se divulgan muchos ejercicios y técnicas de respiración. Lo que yo te invito a experimentar es algo más sencillo. Lo llamaría así: ¡DISFRUTE LA RESPIRACIÓN! La respiración que no gozas no te ayuda demasiado, te hace sobrevivir pero no ofrece calidad a tu vida. Así que literalmente "date un respiro", y conecta con la capacidad de hacer tu momento más pleno y feliz. Tras un día de trabajo y conflictos cotidianos yo también necesito un respiro, así que salgo a pasear un rato. Para el momento solo llevo mi cámara conmigo y mi propósito es conectar con un poco de coherencia.
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La mente es tan complicada y las relaciones tan complejas que sin la activación de nuestro corazón-mente nos llenamos de tensión.
A dos calles de mi casa, en plena ciudad, ya estoy sumergido en la selva virgen. Sí, solo con el dial de la actitud y la atención correcta empiezo a sintonizar con el espíritu salvaje. Hay coches, ruido, gente hablando y perros ladrando pero, poco a poco mientras penetro en el pequeño y vecino parquecito, empiezo a escuchar el viento, las hojas y flores azules de la jacaranda, las vistosas bignonias y el canto de los pájaros. Sí, están aquí. Siempre está aquí la vida salvaje, sólo que nuestra mente imbuida por las preocupaciones, solo escucha los toscos ruidos, la televisión, los discursos vacíos o el barullo de la gente. Y, sin embargo, en el trasfondo de todo hay otra dimensión, otro universo y otra vida. La civilización humana está sobrepuesta al mundo libre y salvaje, pero no lo puede anular. El silencio es la nota base del bosque animado. Sólo se requiere escuchar, dejar las eternas distracciones de la mente humana y prestar atención a lo subliminal. Así que me quedo parado y simplemente escucho: el viento, el crujir de una rama y las golondrinas. El seto que tengo encima es el apartamento privado de viarias nidadas de aves, que animadamente conversan con sus vecinas. A pocos metros hay gente hablando y paseando perros y obviamente no se dan cuenta de nada. Miran sus teléfonos pero no perciben las diez especies diferentes de aves de este pequeñísimo parque. Ni al ratón común que acaba de cruzar el solar vecino, ni a ese gekko cenando mariposas nocturnas en
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la farola. Y justo de otra sale disparado y silencioso un murciélago de herradura a hacer su jornada laboral.
Camino un poco más y a cinco minutos de casa, en una escuela cerrada, veo desde los barrotes pasear un conejo de monte. Él está mordisqueando hierbas del jardín. Me quedo quieto, sin pensar, cámara en mano y retrato la luz sobre una mariquita en una flor de hinojo. Hace un rato que un ave misteriosa aparece y desaparece, ágil y rauda como una centella, me reta a fotografiarla, pero no se deja. No me da tiempo ni a enfocar. Cuando salí de casa solo me sentía pesado, cansado y saturado. Ahora respiro luz, soy silencio y el mundo de los humanos parece desaparecer. En cambio los mil habitantes del crepúsculo me giñan el ojo. ¡Cuánta vida! Sí, Maestro, cuánta luz hecha vida. Espero un rato. Esta espera es agradable y relajante, no como la espera en la cola del banco o el supermercado. No, esta es una espera diferente, una espera feliz. No veo ningún animal, pero sé que están ahí. Los escucho, los siento. Mientras tanto miro la nada y lo miro todo. Y de repente está aquí: a dos metros, un hermoso pájaro azul, amarillo y gris, magnífico, se deja retratar; incluso posa, cambia de ángulo y de perfil. Me parece un carbonero, pero no lo es, ¿quizá un herrerillo?
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Más tarde, con ayuda de mis amigos ornitólogos, se aclara el misterio. Es un Herrerillo Africano, una hermosa especie del norte de África y Canarias, con fragilidad en cuanto a su estado de conservación. Es un regalo y una maravilla viviente en mi jardín.
Dicen que observar aves salvajes y animales en general es una verdadera terapia. Espero que no lo sea, o el campo se llenará de enfermos y neuróticos. Para mí, la naturaleza es mí hogar, mi templo, no es solo un hobby o una afición. Estar en la naturaleza es conectar con lo sagrado de la existencia y el gran secreto de que todo es UNO. Bajo el alcornoque, el eucalipto o el álamo el silencio alimenta tu corazón y te conviertes en paz. Prefiero algunos animales, algunos lugares, pero me gusta todo y lo aprecio todo. Sí, si me dan a elegir escojo a los lobos, tigres, osos, linces, etcétera. Pero me fascina una mantis, un pez loro, un gorrión o un herrerillo africano. Todo en la naturaleza es útil, bello y perfecto, y ese es mi yoga.
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A los diecisiete años estuve recorriendo las selvas del Terai, en Nepal, y tuve la suerte de que el guarda del Parque Nacional también practicaba yoga. Así entendí que los tigres y los hombres, los lobos y los humanos están unidos por lazos que muchos han olvidado. Yoga o Yug-Do. Es recuerdo, el recuerdo de que eres la vida que hay que cuidar. En cualquier lugar y momento la vida salvaje -el espíritu de la unidad- está presente. No te distraigas y descúbrelo.
En un rato iré a buscar halcones peregrinos libres y salvajes en el centro de Barcelona. Los turistas fotografían la Sagrada Familia, pero no ven el bosque animado que subyace al ruido humano. Observa, observa y, sobre todo, ¡goza!
TAI
AIM
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Mi nuevo mundo es muy distinto al del pasado. Ahora la gente que todavía come carne o pescado es una rareza. Prácticamente no existen exploraciones ganaderas de ningún tipo, ya no hay corrales de vacas, ni ovejas, ni cabras, ni gallinas. Tampoco hay flotas pesqueras. Sólo hay cultivos ecológicos de una inmensa variedad de algas. La tierra ha terminado con las enormes masas de monocultivos y ahora se trata a la tierra con delicadeza y equilibrio, todo es orgánico y funciona acorde con cada ecosistema. Las plantas se cultivan juntas en huertos regenerativos. La energía es abundante y gratuita, así como todos los sistemas de comunicación. Ya nadie paga nada por la información ni por los desplazamientos, en cambio todos pagan contribuyendo a mantener el orden, la limpieza y el equilibro del medio común. Hace años que habitamos otros planetas que cultivamos y estudiamos como laboratorios vivos. Las grandes metrópolis son historia del pasado. Ahora vivimos en pequeñas comunidades rurales auto-abastecidas y rodeadas de nuestros modernos museoslaboratorios. Estos museos-laboratorios vivientes son los ecosistemas naturales conservados íntegramente en cada localidad. Actúan un poco como los arcaicos parques nacionales, pero aquí el sentido es tanto la investigación y el estudio de la evolución como la recreación de los ciudadanos.
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En estas estaciones naturales, la gente tiene una serie de senderos, miradores, observatorios y puntos para la contemplación y disfrute del medio natural integral. Hay una mínima interferencia con le vida libre, no se tiran desperdicios, no se alimenta a los animales, simplemente se los estudia y presencia. Estos han perdido el miedo a los humanos, quienes desarrollan sus vidas sin pudor delante de la gente silenciosa. Todo está organizado a nivel de una administración planetaria y una gestión local conectada en todo momento con todo el planeta. Prácticamente no se utiliza el dinero, ni siquiera los aparatos, mediante la biotecnología tenemos acceso a la información global en todas partes. La calidad de vida no se basa en el tener sino en el sentir y el utilizar lo necesario. Cada pueblo tiene de todo para todos, así que no es necesario acumular ni privatizar. Tampoco hay ricos ni pobres porque hay energía disponible y renovable para todos. La salud se aprende a cuidar en la escuela elemental, lo mismo que la inteligencia emocional y la gestión de la diversidad. La gente ha descubierto su naturaleza espiritual y no teme ni la separación ni la muerte. Conocemos el vehículo humano y lo usamos para el bienestar y el aprendizaje de todos. En realidad somos inmortales y cuando el vehículo ha cumplido su tiempo lo dejamos a voluntad. Dormimos y despertamos, eso es todo. Naturalmente hay conflictos y retos climáticos, pero eso solo nos ayuda a seguir evolucionando. Los océanos fueron la primera fuente global que nos ofreció todos los recursos para el cambio contemporáneo. El mar nos dio energía ilimitada, nutrición ilimitada, agua ilimitada y junto con las nuevas tecnologías solares el planeta volvió a ser azul y verde. Nuestros antepasados ya soñaban con un mundo como el nuestro, incluso hubo adelantada a su épica que ya hablaron de un mundo como el actual. En fin, vivir para ver. El mundo que viene ya es para el que hace de su vida el cambio que quiere ver en el exterior. Tú también puedes soñar, pero los verdaderos sueños se hacen realidad cuando te pones a trabajar y modificarte a ti mismo y tu propio entorno.
TAI
AIM
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El ser humano tiene muchos problemas porque hace las cosas al revés. Actuamos y nos generamos mal estar con el pretexto y la idea de conseguir estar bien. Es como romper la paz para tratar de estar en paz. Nos pasamos todo un año estresados para conseguir unas vacaciones de un mes sin estrés. El problema es que ya hemos incorporado tanto el estrés en nuestra vida que no sabemos vivir sin él. Así que ni en vacaciones nos libramos de los problemas, y eso es debido a que nosotros mismos somos el parte del conflicto. Por eso el Yug-Do te enseña a hacer las cosas al revés para ponerlas en su sitio. ¿Qué queremos de verdad? Pues muy sencillo: todos los seres humanos, lo sepan o no, solo quieren sentirse bien y punto. El problema es que no saben cómo hacerlo, por lo que le ponen ideas y condiciones al "sentirse bien". Así nacen religiones, filosofías, creencias y esfuerzos humanos de todo tipo, tal como ciencia, tecnología, arte o comercio. Todo eso está en la búsqueda inconsciente de poder sentirse bien. La gente piensa “Si logro esto o lo otro”, “Si consigo esto o lo otro... entonces me podré sentir bien”. ¡Es falso! Muchas verdades acaban siendo erróneas si la premisa, el primer paso o ladrillo es falso. Para conseguir sentirte bien no hace falta dinero, ni cosas, ni personas, ni mascotas, ni conocimientos, ni experiencias. Para sentirte bien solo tienes que darte cuenta de que no te hace falta nada de nada. Sentirte bien es tu naturaleza original cuando duermes como un lirón. O cuando no piensas ni generas problemas innecesarios. También cuando disfrutas plenamente del presente. Cuando te sientes bien el proceso auto curativo del cuerpo está activado, ya que se regulan las funciones endocrinas, el sistema inmunitario funciona eficazmente y las heridas se curan. Lo mismo con las enfermedades y lesiones emocionales y mentales. Sentirse bien es el camino. Seguramente muchos, al leer esto, sabrán que es verdad, es así, pero otros se preguntarán “¿cómo?”. Siempre aparece el "cómo" porque el viejo mecanismo automático, el programa erróneo, una y otra vez funciona en ti. Es la vieja mente complicando lo simple. ¡No hay "cómo"!, no necesitas ninguna estrategia, ninguna técnica, ni ningún medio para ser lo que ya eres, y eres. Recuerda: ¡bienestar! Eres ¡sentirte bien! Y cuando no te vives así es que estás enfocando y dando energía a lo que no es. El cuerpo-dolor es la adicción humana a vivir en estrés auto infligido. Identificados con el cuerpo-dolor siempre estamos buscando una solución. Es decir, buscamos deseos de cosas, personas, estados o experiencias. Siempre partimos de un dolor de carencia, de que falta algo. Falta ese “sentirse bien” que es en realidad LO QUE SOMOS. Así que la alegría sin objeto, la felicidad sin objeto, la paz sin objeto, el sentirse bien sin objeto ni motivo es prestar atención a una respiración suave, calmada y placentera. Recuperarnos a nosotros mismos, volver a ser y a SENTIRSE BIEN sin necesidad de alcohol, drogas, novios, dinero, títulos o casas. Sentirse bien para empezar y sentirse bien para continuar. De hecho, sentirse bien -que para la mayoría es el final- ha de ser el principio. Si te curas no te sentirás bien, es al revés: si te sientes bien te curarás. Si tienes más dinero no te sentirás bien; es lo contrario: si te sientes bien no te faltará de nada.
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Empieza por el final. El primer paso, solo deja salir la tensión, solo deja salir el malestar y recupera la respiración feliz de este preciso momento. No te preocupes de nada, solo ocúpate de tu presente.
El bienestar -el sentirse bien- te dará centro, claridad, enfoque y verás con claridad la dirección a seguir. Sentirse bien no depende de nadie ni de nada. Es tu elección, pero si no estás consciente no lo verás y seguirás con el programa de complicarte la vida. Sólo recuerda: no te falta de nada, estás completamente equipado para sentirte bien, hazte consciente de ello, respira, relájate y sonríe, no tienes nada que temer.
TAI
AIM
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Sí, es cierto: no todo es tan fácil. Añadiría yo que tampoco es tan difícil. Es innegable que a veces todo cuesta mucho y la vida puede presentar cuadros horribles. Es entonces cuando toca activar la Fuerza Interior. Hay que Sobreponerse a las circunstancias, noticias y situaciones. Cuesta mucho, pero hay que hacerlo y punto. Así que si te caes pues toca levantarse. Si te lesionas, cúrate. Si pierdes, vuelve a intentarlo. Todo esto tiene un elemento común: el ÁNIMO. Esta es la clave de los grandes: ¡reanimarse! Sí, es inevitable desanimarse, pero no hay que quedarse ahí. A veces incluso necesitas un tiempo de duelo, de tristeza y de abulia, pero estos no son estados en los que hay quedarse. Hay que empezar de nuevo, hay que salir adelante y a por todas, incluso con el miedo a otro fracaso, aún con el cansancio, aún con la pérdida de la fe. Hay que volver, levantarse de nuevo, revisar las opciones y ponerse a trabajar. Sobreponerse es el apellido del Guerrero. Te caes, te levantas. Punto, sin dar demasiada energía a las lamentaciones, a las quejas. No pierdas tu fuerza en preguntarte todo el tiempo por qué. Hay que salir adelante, y no es si o no, es sí o SÍ. Sobreponerse es un trabajo decidido sobre tu ánimo, sobre tu verdadera fuerza interior. Tu grandeza no se mide en tus facilidades, ni en que las cosas te salgan bien. No, tu grandeza es tu espíritu de superación. Cuantos más obstáculos tengas más fuerte te harás. Así que no te entretengas en lamentaciones, ni en pensar demasiado. Mejor actúa, actúa una y otra vez con la actitud adecuada que dice: ¡puedo! Esa es la actitud. Puedo. Y lo estoy logrando ya. Estoy en paz, soy paz y solo tengo que seguir el camino de mi corazón. Que hay cosas que no te gustan, ¡no pasa nada! Que otras te molestan, ¡no pasa nada! Que el mundo es terrible, ¡no pasa nada! Todo se expande y todo se contrae: día-noche, bueno-malo, frío-calor, facilidad-dificultad. Es todo normal. Así que ¡adelante! Sólo hay que actuar, no pensar tanto, hay que adaptarte, aprender, crecer y reír.
TAI AIM
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¿Cómo es el sentimiento correcto?
CLAVE DEL MES: APRECIAR
FRASE DEL MES: “Solo el que aprecia es apreciado”
PARA LEER: Vivir en la luz (1986) Autor: Shakti Gawein
PARA VER: Tierra de Ángeles (2004) Dirección: Kay Pollak
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La mínima cantidad de esfuerzo es el estado llamado Presencia. Dios, cuyo amor y alegría están presentes por doquier, no puede venir a visitarte si no estás allí.
Jacob Liberman
La visión sin acción es un sueño, la acción sin visión una pesadilla. Proverbio japonés
Angelus Silesius
Comienza donde estás, usa lo que tienes, haz lo que puedes.
Ve definitivamente en la dirección de tus sueños. Vive la vida que imaginaste tener.
Arthur Ashe
Henry David Thoreau
Tienes que ver la mente mediante la cual ves al mundo. Antonio Iborra
Si te ofrecen un asiento en un cohete no preguntes qué asiento. Solo súbete. Sheryl Sandberg
Muchos de nosotros no estamos viviendo nuestros sueños, porque tememos vivir nuestros miedos. Les Brown
Las limitaciones solo habitan en nuestra mente. Pero si usamos nuestra imaginación, nuestras posibilidades son ilimitadas. Jamie Paolinetti
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Aprendo el arte de vivir. Me observo con cuidado en el devenir de este tiempo, en el que me toca vivir para darme cuenta de que todo momento es valioso. Cada segundo es una oportunidad para la transformación, para cambiar el enfoque y la actitud ante los acontecimientos que se me presentan cotidianamente. Nada es tan cierto como el hecho de que la vida es efímera, como si fuera un instante que dura muy poco. La vida es sagrada. La vida es un don de dios, de ese dios que no tiene nada que ver con el que me enseñaron en la catequesis cuando era pequeño o el que me mostraban en las iglesias. No es ese dios justiciero, severo que te observa continuamente y está dispuesto a castigarte y a condenar tus pecados si no te arrepentías o redimías. Por eso es que mi corazón se sintió lleno de temor y mucha culpa. Si al diablo le ponen cuernos y cola, dios era semejante a un tirano dispuesto a lanzarte rayos y centellas si te portabas mal o hacías una travesura. Desde esa congoja conocí a un dios que para nada tiene que ver con el que fui descubriendo años después. Fue entonces que descubrí a otro dios, quien estaba en lo alto de la colina donde con frecuencia iba a jugar con mis primos, o estaba en las genistas y en las golondrinas que surcaban raudales el cielo, a veces en las mariposas que revoloteaban de una flor a otra flor igual que las abejas que no te molestaban si las dejabas tranquilas. Lo vi en las rojas amapolas que teñían el campo y las veredas con ese rojo que inflamaba mi corazón de luz y energía; lo encontré en los saltamontes, las arañas y las lagartijas quienes fueron mis compañer@s de la infancia. Descubrí a dios en la espiga que se bamboleaba a merced del viento que me silbaba y en ese horizonte lejano que observaba con detenimiento queriendo escudriñar qué habría más allá. Se me reveló un dios en el acto amoroso de mi padre cuando nos llevaba a mí y a mis hermanos al campo, y era quien nos proveía de cerezas y piñas de los árboles que admiraba por su robustez y grandeza.
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Asimismo lo sentí en la fuerza del viento que impulsaba mi cometa cuando se elevaba con determinación hacia el cielo. Cuando era niño crecí con los juegos divertidos que compartía con mis amiguetes del barrio, tales como construir cabañas, jugar las canicas, la charranca, el meli, subir a la pela (“churro media manga mangotero, adivina lo que hay en el puchero”), al escondite inglés, a ser piratas que surcaban los mares descubriendo nuevos horizontes y hacer cometas, arcos y flechas. También a probar nuestro valor visitando casas abandonadas imaginando que estaban encantadas o habría algún fantasma. Dios se manifestaba en nuestra alegría de vivir, de compartir, de conocer y de amar la vida. De soñar despiertos lo que nos depararía el mundo y ser como los grandes héroes del comic: Shazzan, el Corsario de Hierro, Flecha Verde, el Capitán América, Thor, Mazinger Z, Conán el Bárbaro, y toda la saga conocida de Marvel (Superman, Batman y Spiderman), quienes estaban dispuestos a enfrentar cualquier peligro.
La práctica de Yug-Do me conecta con esa posibilidad, con esa oportunidad de conectarme con la vida y el mundo, reconociendo a dios en todo lo que me rodea, descubriéndolo dentro de mí en cada prueba que me permite crecer y aprender, en cada latido de mi corazón. En ese vivir cada vez más consciente, sintiendo la vida correr a través de mis venas, en esa pasión de realizarme mediante arte, música y compartir consciente. Como bien dice el maestro, “no nos falta nada y nos sobra mucho. Lo tenemos todo. Todo está en todo”. En esa oportunidad de compartir lo mejor que hay en mi corazón está la verdadera alegría de vivir.
TAI
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Hoy me levanto con alegría, y me doy cuenta de ello, también me doy cuenta de lo que sigue, y sigue la continuidad de la consciencia de respirar. Hoy tengo un poco de gripe y me observo con detalle, me conecto con la alegría para pasármela bien. La meditación es una gran oportunidad y además un paso firme en el Camino. El Maestro comenta que el "Yug - Do descansa en el encuentro de un Maestro y un Discípulo" o mejor dicho entre un discípulo y un aprendiz. Ahora bien, ¿qué es el encuentro? En el terreno de la disciplina, es la disposición entre dos almas para vivir la Magna Obra. La gran oportunidad para el discípulo, pues se trata de la más grande empresa de su vida, y para el Maestro cumplir con su misión. En México el Yug - Do continua como un gran río hacia el mar, tiene varios afluentes de gran importancia, como son los afluentes Ilihutsy, Perla, Antonieta, María Eugenia de ese gran río cuyo nombre es Antonio, lo curioso del río es que siempre tiene agua, y no baja su nivel, siempre tiene ese sonido peculiar de la alegría de la vida.
Yug - Do es río de vida, un caudal de luz que se activa. La alegría del alma, es un regalo para el bosque, para los animales y los mismos seres humanos, pues la vibración universal del alma lo abarca todo para bien. El Yug - Do me ayuda a crecer, a ser yo mismo, a despojarme poco a poco de todo lo negativo, es una especie de desprogramar. Soy como una semilla bajo la tierra, germinando, con el mantenimiento de la disciplina, buscando brotar con alegría hacia la luz.
TAI
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Me encontraba sintiendo a ver de qué quería esta vez compartir para el Boletín, cuando me llegó un mensaje de la estimada Cinturón Rojo Perla agradeciendo las imágenes compartidas por whatsapp, y entonces conecté sobre qué me apetecía realmente escribir. No hay casualidad. Y es precisamente sobre esto, sobre las imágenes. La fotografía es algo que me atrae desde pequeño, desde que veía la cámara de mi abuelo en la mesa de noche de mi padre. Con qué cariño la guardaba. Mi padre nunca lo conoció, ya que mi abuelo murió cuando aquel tenía un año. Siempre he captado momentos que creía debían inmortalizarse o los he retenido en la memoria antes de tener cámara. Eran instantes, vivencias que el alma me pedía perpetuar. Para mí es como si el tiempo se ralentizará y la vida fuera parándose en ese momento. Como si el alma se detuviera para gozar. Como si ella lo estuviera viendo todo desde fuera y me dijera “retrata este momento, disfruta plenamente este instante, gózalo”. Desde que tengo uso de razón, o probablemente antes incluso, he sentido la pulsión a buscar la belleza en el mundo, como todo niño chico supongo. Con el tiempo sé, a través de mi Maestro, que nuestra alma se nutre de ella, y recuerdo; “la bondad se ejerce, se expresa, se comparte, la belleza se encuentra, la verdad se vive, se experiencia”. Esto es algo que me gusta recordarle a mi alma a menudo, pero más allá de buscar y encontrar la belleza la necesidad interna es mostrarla, compartirla y ofrecerla. Esta es una de las razones por las que me dedico a la Biología, por amor a la vida y a todo lo relacionado con su belleza. Cuando hablo de la vida hablo también en un sentido más amplio de todo, lo animado y de lo inanimado también. Todo está vivo, el mundo es un ser vivo. Todo es vida, lo real, y hasta lo que es mentira también es parte de la vida. Esto también lo aprendo o se va extrayendo y destilando gracias al contacto con mi Maestro. La mente es nuestro submundo, y hay que ir saliendo de él. La vida está detrás. Es como si te pasas la vida viendo la tele, puedes imaginar vidas fantásticas y que fuiste el protagonista de un montón de cosas pero, en realidad, pasaste la vida viendo la tele. Quién sabe, quizás fuiste todas esas vidas y sólo soñaste que veías la tele. Yo prefiero despertar y vivir… Y soñar… Y hacer realidad los sueños. En cuanto a la fotografía, a veces son instantes en los que la vida me para y me dice AHORA, a veces me pasa caminando, otras corriendo. Cuando estoy parado y reparo, o conduciendo y si puedo me paro y le dedicó un rato. A veces río porque puedo imaginar lo que la gente piensa cuando me ve en una postura súper extraña o sacándole una foto a lo más cotidiano y vulgar de este mundo. La verdad, y aunque suene vulgar, me descojono por dentro. A veces es una intuición, una premonición de que algo va a suceder, de que algo se está cuadrando, y si tengo la posibilidad me preparo. Otras veces son detalles que me llaman poderosamente la atención. A menudo cosas sencillas: un reflejo, una sombra, un juego de luces, la profundidad en la imagen, el contraste de un objeto, una persona en una situación determinada, unas huellas, un sendero, un paisaje o los cambios de tono que suceden al
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paso de la luz en un atardecer de primavera. Me gusta y me llena, yo soy feliz con un camino y una cámara en mis manos. Algo genético también habrá porque mi abuelo por parte de padre fue fotógrafo en La Laguna. Era muy bueno, según he escuchado. Lo es para mí. No porque lo diga la gente, sino porque he visto su trabajo. Muy interesante fue el que realizó sobre la luz o la importancia de la luz natural sobre la estética y el retrato, que puso en práctica durante muchos años. En una antigua casa canaria de altos techos tenía todo un sistema de tragaluces y espejos para mostrar la estética y resaltar la belleza de las personas de la época que retrataba.
Debía ser una gozada de juegos de luces, de expresiones y de miradas. Era todo en blanco y negro. Hoy día tenemos el color. Y hablando de color, me he sentido atraído especialmente en estos últimos talleres del Maestro por la Kinesiología energética o Bioenergética integrativa a través de la Cromoterapia de la sanación por medio de la luz y los colores, algo lo que estoy interesado en incidir y profundizar. El hombre como receptor y como fuente de luz. Porque también somos dinamos que alumbramos el mundo a cada paso. Cuando estamos en la dirección y en la realización adecuada. Y, en este caso, la dirección apunta a Tenerife. Delante de mí veo las huellas. Gracias Maestro, gracias Estimados!
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Me sorprende mucho veros a todos tan preocupados por la vida. La vida no se puede entender simplemente pensando en ella, sólo se puede entender viviéndola al máximo. Ésta es la única forma de saber la verdad. Despiértate y vive, despiértate y muévete. La verdad no es algo que está muerto o que se descubre sin tener que hacer esfuerzos. Es una corriente tremendamente viva. Sólo podrá descubrirla el que se mueva con ella, libremente y sin contenciones. Cuando pensamos en lo que está lejos, a menudo nos perdemos lo que está a mano. Lo que está constantemente en frente es la verdad, y lo que está a cierta distancia se esconde en ella. Para descubrir lo que está a cierta distancia, ¿no es inevitable descubrir lo que tenemos cerca?, ¿no existe todo el futuro en este momento presente?, ¿el paso más pequeño no contiene el viaje más largo que está por delante? Un humilde granjero iba a subir al monte la primera vez en su vida. En ese momento no estaba muy lejos de su pueblo, no obstante nunca había conseguido escalarlo. Las cimas de los montes cubiertos de follaje se veían desde los verdes campos y a menudo tenía ganas de verlos desde cerca pero por un motivo u otro siempre había tenido que posponer el viaje, por lo que no había conseguido ir. La última vez que desistió era porque no llevaba consigo una lámpara y para llegar a esos montes tenía que salir de noche. La parte más dificultosa de la escalada se complicaba aún más si se hacía después del amanecer. Sin embargo, en esta ocasión sí llevaba consigo una lámpara y estaba tan emocionado con su viaje que no pudo dormir durante la primera parte de la noche. Se levantó a las dos de la mañana y se fue hacia los montes. En cuanto salió del pueblo empezó a dudar y se detuvo. Estaba intranquilo y se adueñó de su mente una preocupación. Al salir del pueblo comprobó inmediatamente que había una Luna nueva y que a su alrededor todo estaba completamente oscuro. Es verdad que llevaba consigo una lámpara, pero sólo le alumbraba unos diez pasos por delante y la escalada tenía unos quince kilómetros.
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¿Cómo podía ser suficiente?, ¿era aconsejable seguir el viaje con la luz de esa pequeña lámpara habiendo una oscuridad tan absoluta? Era como lanzarse al océano en un barquito. Se quedó sentado a las afueras del pueblo, esperando a que amaneciera. Mientras estaba ahí sentado, se le aproximó un anciano que estaba caminando hacia los montes. Llevaba en la mano una lámpara más pequeña que la suya. El campesino le paró y después de contarle sus
dudas,
el
anciano
de
empezó
a
reír
estrepitosamente y le dijo: “¡Est{s loco! Empieza por caminar diez pasos, camina hasta donde te llegue la vista. Cuando llegues, te seguirá alumbrando la misma distancia. Aunque sólo veas un paso, puedes dar la vuelta al mundo con esa luz. El joven lo entendió, se levantó y se marchó. Antes del amanecer había llegado a los montes. Hay que recordar el consejo de este anciano incluso en el camino de la vida. ¿Por qué estamos ahí, quietos? Levantémonos y movámonos. No llega el que piensa sino el que se mueve. Hay que tener en cuenta que todo el mundo tiene la lucidez suficiente y la iluminación necesaria para alumbrarse diez pasos por delante: con eso es suficiente. Esto basta para alcanzar la divinidad.
Cuentos para despertar. OSHO
Un abrazo guerreros
TAI
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El Orden integra los conocimientos de la Mente y el entendimiento del Alma. Luego se materializan de diferentes formas. Es garantía de Belleza. Es como el descubrimiento de ver a Dios en una mirada. Todo es lo mismo, todo es Uno. Ni bueno, ni malo. No existe ni aquello ni lo otro, se aúnan como en una verdadera obra de arte. Se podría decir que es como una fórmula matemática del Yug-Do. Si pudiera relatar mi vivencia hasta ahora como C.N., sería como una declaración de Amor. Con sus luces y sombras. Renuncias, fortalezas, desvelos, sorpresas.
Al ser tocada por la Luz en aquel ritual iniciático, me siento casi obligada a expresar cuán privilegiada me siento de esa vivencia, y de todo lo que ha acontecido después.
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No es posible la invención de una palabra para expresar este Nuevo Sentir que siempre estuvo ahí, ante mí. Nunca esperé tanto. Y sin tener que llegar a ningún lugar, LO pude alcanzar. ESO que no tiene nombre. Es como un amor puro recién nacido, que no quiere ser rozado por la banalidad. Llegó a impregnar una parte de mí desconocida, y no hay descripción posible. Son numerosas las capas y velos que quieren esconder la Verdad, pero ya LO he visto. El Amor me llega de varias formas, ambas me aportan belleza en este momento. Me muestra los cambios que tengo que hacer y pautas a seguir. El amor llega puliéndome, construyéndome para dejar de ser. Me afina como un instrumento musical. Los cinco elementos en mí, se convierten en uno. De la misma manera, ocurre con los cinco sentidos. Más bien, ambos se convierten o forman parte de este nuevo sentir. Crean juntos y se funden. Es magia matemática. Una fórmula que da libertad, ligereza. El arte de la simplicidad consciente, Pratyhara. Numerosas fórmulas bailan de mi razón al entendimiento. La Disponibilidad sin apertura no es posible, sólo es forma. Sinceridad para abrir nuestro corazón al cambio, al Nuevo Sentir, para ser pulido e irradiar Paz. Un entendimiento y forma de vida sin necesidad de artificio, austeramente amorosa. Nada que hacer, nada que demostrar. Coraje para un Salto de Fe. Todo forma parte de ESO, como en una ecuación. Vivirlo es como hacer el amor con el Todo. Dejar de ser, para cumplir un servicio venerable muy lejos de la religiosidad. Amo la Divinidad en mí, y la sabiduría de los primeros grandes sabios que ya somos todos. LO no descrito, es lo verdadero.
TAI
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Es la Luz, La Vida y El Ser. Es la Unidad. ¿De qué manera nos regala la Luz su presencia? En nuestro mundo dual y relacional necesitamos un vehículo que nos ponga en contacto con la Luz, necesitamos conocer uno de los cordones umbilicales que nos alimenta del Origen y la Unidad. Se nos otorgaron diferentes posibilidades y desde nuestro cuerpo limitado se extendieron conexiones para facilitar una mayor comunicación con el Ser. ¿De qué manera visual nos regala la luz su presencia? ¿Qué forma eligió para comunicarse con nosotros, para que en nuestro mundo físicomaterial Ella ocupara un espacio Sagrado en nuestras expectativas científicas, artísticas y poéticas? ¿Qué puente cruzó la Fuente y Principio de todas las cosas para hacerse un espacio en nuestra naturaleza humana? Sencillo y simple, nos regaló el COLOR. Por eso se creó un sistema perfecto de comunicación entre nuestro sistema visual (ojo-cerebro), nuestra mente (percepción, consciencia) y nuestra Alma para poder conectar con el Ser.
Además nos regaló una pista importante, cada vez que atraviesa una fuente cristalina, ya sea agua, o sea material transparente (cristal) se descompone en unas ondas con diferente densidad que dan lugar a un milagro visual, el ARCO IRIS, una variedad cromática perfecta. Además nos demostró con este claro ejemplo, que en la Luz, están todos los colores y que simbólicamente representa que La Unidad y el Ser es la suma de todas las diversidades, y que cada color es perfecto y único, y todos viven separadamente en Armonía. Es una lección que nos regala y nos recuerda continuamente, y que el Yug-do y el Maestro intentan transmitir. Aquí podríamos entender la profundidad de la frase de Osho, que nombró la Maestra en cierta ocasión, “Las lágrimas tienen el color del Arco Iris”
TAI
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Con el permiso de tod@s, es mi deseo dedicar este escrito a la memoria de mi MADRE. Agradecer de corazón al Maestro, a María y a l@s herman@s cintos negros, plateado, rojo y dorado, su apoyo y compañía en estos meses de lucha y aceptación. No existen palabras que expresen lo que una madre significa para un hij@. No obstante, con las palabras que existen, intentaré describir cómo era mi madre. Se llamaba Erica. Ella era correcta, discreta, exigente, tenaz…Protectora, luchadora, rebelde, habilidosa, artista, detallista…AMOROSA. Era feliz cuidando de sus plantas y flores con las que hablaba a diario. Le encantaba viajar, musiquear, bailar, dibujar, coser, bordar, historias contar…
Me enseñó coplas y poesías que recitaba desde pequeña y que corazón, como esta que dice:
guardo en mi memoria y mi
“Madre, anoche soñé, que flores yo te ofrecía Y tanto me entristecía, que llorando desperté. Aunque muy temprano era, me fui al prado a buscar flores Y te escogí las mejores que la pradera tenía. ¿Las quieres tú, madre mía? Son tan lindas, tan hermosas, Que junto con estas rosas, te regalo el alma mía.”
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Y como dice la canción de Pablo Milanés, “si ella me faltara alguna vez, nadie me podría acompañar”. Honrando su memoria, le dedico esta canción que expresa, de alguna manera, mi SENTIR “ahora que me falta”… “Si ella me faltara alguna vez Nadie me podría acompañar Nadie ocuparía ese lugar que Descubro en cada amanecer Si me faltara alguna vez
Si ella me dejara de querer cuando La contemplo al despertar Siento la pureza que me da Nunca la pureza que me da Nunca la podré corresponder Si me dejara de querer
Si ella se olvidara de cantar ese Hermoso mundo que me da Cómo volvería a predicar si fue Su palabra mi verdad Si se olvidara de cantar
Si ella no inundara esta ciudad Todo cambiaría de color Gozaría de otra claridad Cuando miro y pienso con Dolor si no inundara esta ciudad Si ella me faltara alguna vez Si ella me dejara de querer Si ella se olvidara de cantar Si ella no inundara esta ciudad Yo no escribiría esta canción.”
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Clases de Yugdo, Formación de Yoga, Curso de Acupuntura Bioenergética Cuántica, Nuevo curso de Super Energía (Kundalini), Formación de Yug-Do, Excursiones y Terapias personales.
Días 17 y 18 de agosto: Terapias personales en Barcelona, Vich y Pineda de Mar.
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Siguen clases y cursos de Yug-Do y Yoga en Ciudad de México, Morelia y Acapulco. En preparación para el Encuentro de septiembre. Del 11 al 23.
Continúan Siguen las clases y Taller de Yugdo y Vida Sana Formación en Quito, Parques de Elejido y la Carolina, y continua la organización del próximo Encuentro con el Maestro, del 14 al 25 de Noviembre.
Siguen las clases de YUG-DO en Posadas, Misiones. GRAN CONVIVENCIA Y ENCUENTRO DE VERANO EN LA ISLA DEL DRAGÓN (Tenerife). En Tegueste, del 09 al 12 de agosto. Últimas Plazas… Te Esperamos para Compartir !!
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