GUIA DE TRABAJO GRADO OCTAVO

Page 1

COLEGIO PADRE LUIS VARIARA

GA-PC-1.7 R 01.

Hijas de los Sagrados Corazones

GRADO: Octavo _____ LENGUA CASTELLANA

Pruebas saber ESTUDIANTE:

FECHA: 1 de Agosto/2011 DOCENTE: Lic. María Azucena Figueroa Torrez

Responde las preguntas de la 1 a la 10, de acuerdo con el siguiente texto: El Dorado Era costumbre entre estos naturales, que el que había de ser sucesor y heredero del señorío o cacicazgo de su tío, a quien heredaba, había de ayunar seis años, metido en una cueva que tenían dedicada y señalada para esto, y que en todo este tiempo no había de tener parte con mujeres, ni comer carne, sal ni ají, y otras cosas que les vedaban; y entre ellas que durante el ayuno no habían de ver el sol; sólo de noche tenían licencia para salir de la cueva y ver la luna y estrellas y recogerse antes que el sol los viese; y cumplido este ayuno y ceremonias se metían en posesión del cacicazgo o señorío, y la primera jornada que habían de hacer era ir a la gran laguna de Guatavita a ofrecer y sacrificar al demonio, que tenían por su dios y señor. La ceremonia que en esto había era que en aquella laguna se hacía una gran balsa de juncos, aderezábanla y adornábanla todo lo más vistoso que podían; metían en ella cuatro braseros encendidos en que desde luego quemaban mucho moque, que es el sahumerio de estos naturales, trementina con otros muchos y diversos perfumes. Estaba a este tiempo toda la laguna en redondo, con ser muy grande y hondable de tal manera que puede navegar en ella un navío de alto bordo, la cual estaba toda coronada de infinidad de indios e indias, con mucha plumería, chaguales y coronas de oro, con infinitos fuegos a la redonda, y luego que en la balsa comenzaba el sahumerio, lo encendían en tierra, de tal manera, que el humo impedía la luz del día. A este tiempo desnudaban al heredero en carnes vivas y lo untaban con una tierra pegajosa y lo espolvoreaban con oro en polvo y molido, de tal manera que iba cubierto todo de este metal. Metíanle en la balsa, en la cual iba parado, y a los pies le ponían un gran montón de oro y esmeraldas para que ofreciese a su dios. Entraban con él en la balsa cuatro caciques, los más principales, sus sujetos muy aderezados de plumería, coronas de oro, brazales y chagualas y orejeras de oro, también desnudos, y cada cual llevaba su ofrecimiento.


Partiendo la balsa de tierra comenzaban los instrumentos, cornetas, fotutos y otros instrumentos, y con esto una gran vocería que atronaba montes y valles, y duraba hasta que la balsa llegaba al medio de la laguna, de donde, con una bandera, se hacía señal para el silencio. Hacia el indio dorado su ofrecimiento echando todo el oro que llevaba a los pies en el medio de la laguna, y los demás caciques que iban con él y le acompañaban, hacían lo propio; lo cual acabado, abatían la bandera, que en todo el tiempo que gastaban en el ofrecimiento la tenían levantada, y partiendo la balsa a tierra comenzaba la grita, gaitas y fotutos con muy largos corros de bailes y danzas a su modo; con la cual ceremonia recibían al nuevo electo y quedaba reconocido por señor y príncipe. De esta ceremonia se tomó aquel nombre tan celebrado de El Dorado, que tantas vidas ha costado, y haciendas. En el Perú fue donde sonó primero este nombre dorado; y fue el caso que habiendo ganado a Quito, donde Sebastián de Belalcázar andando en aquellas guerras o conquistas topó con un indio de este Reino de los de Bogotá, el cual le dijo que cuando querían en su tierra hacer su rey, lo llevaban a una laguna muy grande y allí lo doraban todo, o le cubrían de oro, y con muchas fiestas lo hacían rey. De aquí vino a decir el don Sebastián “vamos a buscar este indio dorado”. De aquí corrió la voz a Castilla y a las demás partes de Indias, y a Belalcázar le movió venirlo a buscar, como vino, y se halló en esta conquista y fundación de esta ciudad, como más largo lo cuenta el padre fray Pedro de Simón en la quinta parte de sus noticias historiales, donde se podrá ver; y con esto vamos a las guerras civiles de este Reino, que había entre sus naturales, y de dónde se originaron, lo cual diré con la brevedad posible porque me dan voces los conquistadores de él, en ver que los dejé en las lomas de Vélez guiados por el indio que llevaba los dos panes de sal, a donde podrán descansar un poco mientras cuento la guerra que hubo entre Guatavita y Bogotá, que pasó como se verá en el siguiente capítulo. Juan Rodríguez Freile. Tomado de: El Carnero, capítulo II. 1. La intención principal del autor es A. informar sobre el origen de la leyenda de El Dorado. B. argumentar acerca de la importancia de la Conquista. C. describir los hechos que tenían lugar durante la ceremonia de cacicazgo. D. explicar la ruta de la leyenda de El Dorado.


2. El tema principal del texto es A. la fundación de la ciudad de Santa Fe de Bogotá. B. la ceremonia y la posesión del cargo de cacicazgo. C. la búsqueda de oro por parte de los conquistadores. D. la manera exuberante en que ataviaban a los caciques. 3. Los elementos con los cuales se ataviaban los caciques eran A. braseros, narigueras y coronas de oro. B. collares, narigueras y coronas de plumas. C. moque, braseros y perfumes. D. plumería, coronas de oro, brazaletes y orejeras de oro. 4. El género literario al que pertenece el anterior fragmento es A. la crónica de Indias, porque se narran hechos ocurridos durante la Conquista, desde la perspectiva de los españoles. B. la crónica literaria, pues el autor relata hechos reales y los mezcla con otros de su invención. C. el diario personal, ya que se testifica un suceso personal para que sea recordado. D. la leyenda, porque se narra el hecho sorprendente del hombre dorado. 5. La expresión y cumplido este ayuno y ceremonias se metían en posesión del cacicazgo o señorío, y la primera jornada que habían de hacer era ir a la gran laguna de Guatavita a ofrecer y sacrificar al demonio, que tenían por su dios y señor, indica que el autor A. desaprueba los ritos religiosos. B. rechaza toda creencia religiosa. C. acepta la libertad de cultos. D. considera equivocada la religión indígena. 6. La pieza de orfebrería precolombina que suele relacionarse con la tradición indígena que dio lugar a la leyenda de El Dorado es A. el poporo quimbaya. B. la balsa muisca de oro. C. el chamán ave en vuelo muisca. D. la corona de plumas zenú. 7. El fragmento que describe de manera más acertada la ofrenda que realizan los indígenas a su dios es A. un cacique muy poderoso, acompañado por sus sacerdotes, entraba en una balsa y en el medio de la laguna arrojaba oro y esmeraldas a las aguas.


B. el pueblo interpretaba instrumentos hasta que la balsa llegaba al medio de la laguna, de donde, con una bandera, se hacía una señal para el silencio. C. un cacique lanzaba a la laguna las piezas de oro que lo adornaban. Luego, se escuchaban gaitas y fotutos con muy largos corros de bailes y danzas. D. un indígena, cubierto con oro, se arrojaba a la laguna. Luego, se escuchaban gaitas y fotutos 8. Del texto, se puede inferir que la laguna de Guatavita era A. un lugar destinado para resolver los asuntos políticos. B. un centro de ofrendas religiosas. C. un espacio público para la diversión. D. un lugar para debatir los asuntos religiosos. 9. En el fragmento La ceremonia que en esto había era que en aquella laguna se hacía una gran balsa de juncos, aderezábanla y adornábanla todo lo más vistoso que podían; metían en ella cuatro braseros encendidos en que desde luego quemaban mucho moque, que es el sahumerio de estos naturales, y trementina con otros muchos y diversos perfumes, el recurso estilístico que predomina es A. el símil o la comparación. B. el epíteto. C. la hipérbole o la exageración. D. la prosopografía. 10. En el texto se pueden identificar A. expresiones políticamente correctas que sustituyen a otras consideradas tabú, es decir, eufemismos. B. algunos vocablos del español antiguo, es decir, arcaísmos. C. expresiones que el idioma español ha tomado de otras lenguas, es decir, extranjerismos. D. algunas palabras propias del español antiguo, es decir, regionalismos. El lago dorado Mucho tiempo hace, tanto que ya se han olvidado sus nombres, había en Guatavita un rey que tenía una esposa tan orgullosa y tan bella, que sobrepasaba a todas las demás en altivez y gracia, de modo que el príncipe, con quien ella se aburría, la amaba más que a todas las otras. La princesa dice el cronista Fray Pedro de Simón, en su libro Noticias historiales de las conquistas de tierra firme en las Indias Occidentales (1627) “no lo apreció en debida forma, y lo engañó con un noble de la corte, no tan secretamente que el hecho dejase de llegar a oídos de su esposo”. El amante murió en la tortura; la mujer


no fue tocada, pero mediante ciertos procedimientos que su consorte ideó, “su sufrimiento no podría haber sido mayor si hubiera experimentado igual castigo que su noble amante”. El rey ordenó que en todas partes se contara su vergüenza, en el palacio, en las tabernas y en los patios de las casas, “como lección para las otras mujeres y castigo para la adúltera”. Y así, cierto día, la princesa, “en la cual la pena por este pasatiempo creció tanto, que para escapar a ella decidió huir de la vida misma”, se fugó del palacio amurallado y trepando hasta el lago se arrojó a él junto con la pequeña hija que había dado al Usaque. “En medio de una angustia mortal, porque no creyó que los sufrimientos de la mujer pudieran llevarla a dar este paso, el Rey intimó a los más grandes hechiceros y sacerdotes a devolverle a su amada esposa: —Díganle que le imploro que vuelva —urgía—. Díganle que no volveré a hacer mención de lo pasado… Después de los ritos y conjuros del caso, uno de los sacerdotes se sumergió en el agua. Permaneció allí largo tiempo, pero volvió solo a la superficie. —La princesa vive —dijo al Usaque—. He hablado con ella. Se encuentra en un palacio más maravilloso que el tuyo, con el demonio en forma de un pequeño dragón tendido junto a los pliegues de su falda. No quiere volver, porque se siente mucho más dichosa allí. Entonces el rey, preso de una gran desesperación, pues sabía que ya no vería más a la que su corazón deseaba, ordenó al sacerdote que bajara una vez más e implorara a su hijita que volviese. El hechicero regresó con la niña en sus brazos, pero muerta y sin ojos, pues el demonio la había mutilado pensando justificadamente que, careciendo de alma y no aprovechando a los mortales, la dejarían volver junto a su madre. Y entonces se ordenó que el pequeño cuerpo fuese arrojado nuevamente al lago, donde se sumergió, dejando al Usaque de Guatavita sin consuelo dado el gran amor que sentía por su hija y por la madre, no obstante lo que ésta le había hecho”. Desde entonces los peregrinos acudieron desde todos los rumbos del país, trayendo siempre una ofrenda y una oración. Las huellas que conducen a la montaña se hicieron vastas; forman amplias carreteras bien construidas; cada ciudad y cada aldea tenían un sacerdote local alojado en una choza junto a la ribera del lago. Pero sólo en las grandes fiestas que se realizaban dos o tres veces al año, el Usaque efectuaba allí un sacrificio ritual. En tanto miles y miles de creyentes permanecían en filas cerradas en las verdes márgenes del lago, aparecía él, dorado y brillante bajo el sol de la mañana. La enorme multitud miraba, muda de admiración, con ojos aturdidos, la llegada del Hombre Dorado, a los acordes de la música, entre tambores ruidosos, en una balsa repleta de oro y esmeraldas.


Cuando la balsa llegaba al sitio donde cuerdas tendidas de ribera a ribera marcaban el centro del lago, la música se interrumpía y el gentío volvía las espaldas, a fin de que no fuesen profanados los ritos. El Rey arrojaba a las aguas el tesoro que había llevado, y después se lavaba la piel dorada de que se revestía, y la multitud, en la ribera, añadía sus propias ofrendas, que iban a caer al lago, con lo que la ceremonia llegaba a su fin. Fray Pedro Simón refiere todo eso, en su libro que tiene ya más de cuatro siglos. Cierto día yo me dirigí a Guatavita. Estuve allí mirando el lago durante largo tiempo sin hablar. El vapor de muchos siglos de peregrinaje y oraciones, de fe y temor de incontables generaciones, de magia y sortilegio y sacrificio, seguía respirándose en esta concavidad soleada, induciéndome, si no a creer, por lo menos a comprender la fe. No me pareció entonces una locura pensar que ningún tesoro justifica la violación del lago del Hombre Dorado, y que el poder tangible del vapor y el acero no lograría quebrar la callada resistencia de los dioses desaparecidos. Kathleen Romoli. Tomado de: El lago dorado, “Colombia”, Bogotá: Imprenta Nacional de Colombia, Biblioteca Familiar Presidencia de la República, 1996. 11. El texto hace referencia, principalmente a A. los hechos que dieron origen a la leyenda de El Dorado. B. el despertar de la fe en Kathleen Romoli. C. la emoción que a Romoli le causó visitar la laguna de Guatavita. D. la historia que narra hace tiempo Fray Pedro de Simón. 12. Los fragmentos que aparecen entre comillas corresponden a A. los pensamientos de los personajes que se mencionan en la narración: el Usaque, la princesa y los sacerdotes. B. las citas textuales que la autora del texto toma del libro de Fray Pedro de Simón. C. los parlamentos de los personajes: el Usaque, la princesa y los sacerdotes. D. los comentarios de la autora sobre aquello que narra. 13. Un rito es A. un conjunto de creencias o dogmas acerca de la divinidad. B. una celebración maravillosa situada fuera del tiempo histórico y protagonizada por personajes de carácter divino o heroico. C. un homenaje de respeto y amor que el creyente tributa a su Dios. D. un conjunto de reglas establecidas para el culto y las ceremonias religiosas. HIPERTEXTO LENGUAJE


14. En el fragmento En medio de una angustia mortal, porque no creyó que los sufrimientos de la mujer pudieran llevarla a dar este paso, el Rey intimó a los más grandes hechiceros y sacerdotes a devolverle a su amada esposa, el término subrayado se puede remplazar por A. amenazó. B. ordenó. C. animó. D. obedeció. 15. La oración El rey ordenó que en todas partes se contara su vergüenza… es una oración A. exhortativa, porque el emisor expresa un mandato. B. de posibilidad, pues lo que se expresa es sólo una posibilidad. C. enunciativa, porque el emisor presenta un hecho real o que se presume como real. D. optativa, ya que el emisor expresa el deseo de que se verifique un hecho. 16. Las palabras rivera y ribera son palabras A. homónimas porque teniendo significado distinto se pronuncian igual. B. parónimas porque tienen relación o semejanza en su origen etimológico. C. homófonas porque se escriben igual. D. homógrafas porque se escriben y se pronuncian de la misma manera. 17. La intención principal de la escritora al citar algunos fragmentos de la narración de Fray Pedro de Simón sobre la leyenda de El hombre Dorado es A. restar importancia a la información dada por el cronista español. B. concluir de manera definitiva el tema de la leyenda de El Dorado. C. sustentar su propia narración, apoyándose en algunos hechos ya historiados. D. contradecir el punto de vista del cronista acerca de la leyenda de El hombre Dorado. 18. El tipo de relación que se establece entre los hechos narrados por la autora y los fragmentos de Fray Pedro de Simón es A. complementaria, porque la leyenda completa e integra la información que brinda la autora. B. excluyente, ya que tanto la leyenda como la narración de la autora tratan temas distintos. C. contradictoria, pues mientras la narración de la autora afirma algo, la leyenda lo niega.


D. incluyente, porque lo planteado en la narración se inserta para afirmar lo relatado en la leyenda. 19. La oración El hechicero regresó con la niña en sus brazos… es una oración A. copulativa pues tiene un predicado verbal. B. copulativa, porque su predicado es nominal. C. predicativa, pues tiene un predicado verbal. D. predicativa, porque su predicado es nominal. 20. Con el enunciado el poder tangible del vapor y el acero no lograría quebrar la callada resistencia de los dioses desaparecidos, la autora da a entender que A. las creencias religiosas de nuestros antepasados indígenas siguen vivas en nuestras prácticas culturales. B. en Guatavita se percibe el eco del poder y la riqueza de la tradición religiosa de nuestros antepasados indígenas. C. los ritos religiosos cobran significado en lugares tan místicos como el de la región de Guatavita. D. Guatavita sigue siendo un lugar ideal para los ritos religiosos. 21. Del texto se puede inferir que Guatavita A. ejerce un poder sobre el alma. B. vivifica el cuerpo. C. recarga el cuerpo y el alma de energía. D. mantiene despierto el intelecto. 22. En los fragmentos del texto de Fray Pedro de Simón, que cita la autora, se da especial importancia A. el paisaje americano desconocido para la mentalidad europea. B. las hazañas de los conquistadores. C. los mitos que surgieron de las ideas que traían los conquistadores sobre el Nuevo Mundo. D. las costumbres de los indígenas. Responde las preguntas 23 a la 25, de acuerdo con los textos El Dorado y El lago dorado. 23. Los géneros y los subgéneros literarios presentes en los textos El Dorado y El lago dorado son, respectivamente A. el género lírico y los subgéneros de la crónica y la poesía en prosa; y, el género narrativo y los subgéneros de la crónica, la leyenda y el diario. B. el género narrativo y los subgéneros del relato fantástico y del mito; y, el género narrativo y los subgéneros de la crónica, la leyenda y el diario.


C. el género narrativo y los subgéneros de la crónica y la leyenda; y, el género narrativo y los subgéneros de la crónica, la leyenda y el diario. D. el género dramático y los subgéneros del entremés y la leyenda; y, el género narrativo y los subgéneros del relato de ficción y la leyenda. 24. Las principales voces autoras presentes en los textos El Dorado y El lago dorado son, respectivamente A. Juan Rodríguez Freile y Fray Pedro Simón. B. Sebastián de Belalcázar y Fray Pedro Simón. C. Juan Rodríguez Freile y Kathleen Romoli. D. Fray Pedro Simón y Kathleen Romoli. 25. Una de las acciones que realiza el Hombre Dorado en ambos textos es A. lanzar a la laguna el oro y las esmeraldas que llevaba a los pies. B. arrojar al agua su indumentaria. C. lavarse la piel dorada de la que se revestía. D. cubrir su cuerpo con una tierra pegajosa y con oro en polvo.


TABLA DE RESPUESTAS A B C D

1 O O O O

2 O O O O

3 O O O O

4 O O O O

5 O O O O

6 O O O O

7 O O O O

8 O O O O

9 O O O O

10 O O O O

11 O O O O

12 O O O O

13 O O O O

14 O O O O

15 O O O O

16 O O O O

“MUCHOS ÉXITOS”

17 O O O O

18 O O O O

19 O O O O

20 O O O O

21 O O O O

22 O O O O

23 O O O O

24 O O O O

25 O O O O


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.