"«Temo el silencio de los buenos». Esta sentencia de Martin Luther King se
hace especialmente vigente en los tiempos que vivimos. En una sociedad
que cuenta cada vez con más medios, más avances, más tecnología y más
conocimiento, resuena con estrépito el silencio de quienes, pudiendo, no
ponen estos medios al servicio del Bien y de su titular: la persona". Extracto de la Carta del rector, Daniel Sada Castaño.