Beatriz Serram Ilustrado por: Miranda Ă lvarez Carretero
telesketch
Érase una vez… Stella tenía diez años y era una niña muy especial en todos los sentidos. Poseía un gran corazón y un gran problema: sus piernas y brazos crecían sin límite y por muchos tratamientos que probara, no conseguían frenar su crecimiento. Esto originaba en la pequeña un gran complejo, agudizado además con que los niños de su colegio se burlaban de ella constantemente. Había crecido tanto que sus padres tuvieron que tirar varios tabiques de la casa para que durmiera estirada. También quitaron los techos y el tejado, evitando de esta forma que permaneciera doblada durante mucho tiempo.
Una noche de verano muy estrellada, Stella no podía dormir como venía siendo habitual. Harta de dar vueltas en la cama, decidió levantarse para tomar el aire. Se incorporó y, desperezándose, estiró su cuerpo alargando los brazos al máximo. Era tan alta, que podía tocar las nubes con sus manos.
Desde allí arriba se divisaba un espectáculo impresionante. En esos momentos era cuando se sentía verdaderamente feliz. El silencio le acariciaba el rostro y una brisa fresca mecía las esponjosas nubes, mezclándolas con su pelo. Con los ojos cerrados, percibía toda la magia del infinito. Pero esa noche, no estaba sola. Escuchó voces y, extrañada, rebuscó entre las nubes para ver de dónde provenían. Adentró sus manos en una de ellas y encontró a un grupo de pequeñas estrellas que la miraban con expectación.
ISBN 978-84-18017-32-2
9 788418 017322
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