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Museo de Arte Sacro
Luis Paret, pintor de la familia real, en el Museo
El pasado 20 de enero se firmó un convenio de colaboración entre el Museo de Arte Sacro y el Museo de Bellas Artes de Bilbao. Sus principales objetivos son el mayor conocimiento y difusión del patrimonio artístico de Bizkaia y la mejora del conocimiento científico de las colecciones de ambos museos. Y, en nuestro caso concreto, atraer un nuevo público a nuestro museo.
El primer resultado de este convenio verá la luz el próximo 9 de junio, cuando se abra al público la exposición “Paret en Bilbao”. Una exposición que irá acompañada de otras actividades, como visitas guiadas o un curso de verano. Todo alrededor de la figura y la obra de Luis Paret y Alcázar y del Bilbao que él conoció.
¿Qué quién era Paret? Pues nada menos que uno de los pintores de la familia real, que por un asunto de faldas acabó siendo desterrado y, tras pasar una temporada en Puerto Rico, optó por asentarse en Bilbao. Aquí vivió entre 1779 y 1788. Una luminosa estrella en el panorama artístico vizcaíno, que dejó entre nosotros una importante obra, tanto religiosa como civil.
Una pintura para el templo de Larrabetzu
Precisamente una de las obras principales de la exposición será el Martirio de Santa Lucía, que Paret pintó para la iglesia de Larrabetzu, que hoy se expone en nuestro Museo. El cuadro más grande jamás pintado por este autor, y de una calidad extraordinaria. A su lado habrá otras obras que pintó, dibujó o grabó para Santiago o San Antón, o para oratorios privados bilbaínos.
Pero a través de Paret nos acercaremos al Bilbao de aquel momento. Especialmente a través de las visitas guiadas, que recorrerán el Casco Viejo bilbaíno, deteniéndose en los lugares en los que Paret dejó obra –la fuente de la plazuela de Santiago fue diseñada por él–. Pero que también nos permitirán hacer un retrato de aquel Bilbao en ebullición, urbanísticos... Y además conoceremos a otros artistas que por entonces trabajaban en nuestro territorio, unos cortesanos como Paret, otros de nuestra tierra…
Brillantes obras de arte, sí. Pero brillantes –y esperanzadoras– transformaciones para la villa y, por extensión, para Bizkaia •
LA VIRGEN MARÍA CON EL NIÑO JESÚS Y SANTIAGO EL MAYOR (1786) OBRA EN EL MUSEO DE BELLAS ARTES QUE SE PODRÁ CONTEMPLAR EN EL MUSEO DE ARTE SACRO
que estaba viviendo importantes cambios económicos, sociales, culturales (son los mejores años de la Real Sociedad Vascongada de Amigos del País),