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Una historia de amor de más de 75 años

Misiones Diocesanas Vascas tuvo un largo periodo de preparación. Exactamente, 29 años: de 1919 a 1948. La primera siembra la hizo D. Angel Sagarminaga, profesor en el Seminario de Vitoria, en una conferencia de tema misional que impartió a los seminaristas en octubre de 1919.

Aquella conferencia, y tras mucho trabajo y tesón, tuvo como fruto una intervención personal del pontífice de la época quien dio la directriz más importante para poner en marcha un proceso que significó el comienzo de Misiones Diocesanas Vascas.

El 15 de julio de 1948, el Papa Pío XII, atendiendo una petición del obispo de Guayaquil (Ecuador) para desmembrar de dicha diócesis –por su enorme tamaño- la provincia de Los Ríos, erigió mediante una Bula el Vicariato Apostólico de Los Ríos.

El 12 de octubre de 1948 salieron hacia La Habana los sacerdotes Francisco

Arraibi y Luis Alberdi, camino de Los Ríos. El 16 de octubre llegaron a Guayaquil, y el 5 de noviembre se les unieron en esa ciudad Victor Garaigordobil, Leandro Zaloña, Elías Zuloaga, y Eusebio Ocerinjauregui. Ese mismo día, y con el mismo destino salieron de Madrid Máximo Guisasola y Gregorio Alonso. Ya estaba completa la expedición de los ocho primeros misioneros de la diócesis de Vitoria.

Y a primeros de 1949 vio la luz el primer número de la revista Los Ríos.

El 2 de noviembre de 1949, la Santa Sede desmiembra de la Diócesis de Vitoria a la Diócesis de Bilbao y la Diócesis de San Sebastián. Sin embargo, las tres diócesis Hermanas mantienen el compromiso misionero con un solo proyecto: Misiones Diocesanas Vascas.

A este grupo de sacerdotes siguieron los primeros seglares y las misioneras del Instituto Misionero Secular. La vocación misionera de las diócesis vascas fue aceptando nuevos compromisos en

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