Caperucita en Manhattan by Biblioteca Alqazeres

Ilustrando Caperucita en Manhattan Carmen Martín Gaite

Trabajos realizados por alumnos de 1º ESO Coordinación: Coro Carrillo y Mª Jesús Martín

IES Al-Qázeres

Introducción Una de las líneas fundamentales de actuación de nuestro PLEA se basa en una serie de actividades que tratan de manifestar las conexiones existentes entre distintos lenguajes artísticos, en este caso, entre el lenguaje literario y el lenguaje plástico y visual. De ahí surge un continuo trabajo interdisciplinar entre los departamentos de Lengua y de Artes Plásticas del IES Al-Qázeres, ambos concienciados de la necesidad de buscar nuevos cauces para fomentar el gusto por la lectura y por las artes en general. Presentamos aquí uno de los proyectos en los que se ha concretado ese trabajo interdepartamental durante el curso 2014-15 con un grupo de 1º de ESO. Caperucita Roja es un clásico de la literatura sobre la iniciación a la vida adulta, sobre los peligros a los que a veces tenemos que hacer frente y las exigencias de hacerlo en libertad y en soledad. En Caperucita en Manhattan, Carmen Martín Gaite recrea esta historia y la adapta a la sociedad actual, con una Caperucita que es una niña de hoy y que se mueve en un bosque muy diferente –Manhattan-, aunque también se encontrará con algunos de los personajes del famoso cuento, aquí completamente diferentes, como míster Woolf. A diferencia de la moraleja del cuento original, que avisa a los niños sobre las graves consecuencias que puede tener para ellos el hecho de desobedecer a sus padres y actuar por sí mismos, Carmen Martín Gaite reivindica el derecho del niño a protestar y rechazar las normas de los adultos, que no siempre son coherentes ni razonables, ni suelen tener en cuenta las necesidades y las inquietudes infantiles. Al mismo tiempo, explica ese deseo de Caperucita de entretenerse en el bosque cogiendo flores y hablando con el lobo por la necesidad que tienen los niños y las niñas de caminar solos y en libertad, de huir en ocasiones de una realidad que los aprisiona y corta sus alas con consejos, amenazas y advertencias. No es que los niños sean unos “ingenuos” y sean inconscientes de los peligros que corren al desobedecer la norma familiar y social. Cualquier niño sentirá algo de miedo y de vértigo al emprender solo ese camino de la independencia. Pero, por encima del miedo y de la seguridad, están el deseo y la necesidad infantiles de buscar un mundo más libre en el sentido de que en él tengan una mayor presencia los valores de la espontaneidad, la sencillez y la imaginación. Por eso en esta novela la

aventura iniciada por la niña Sara Allen tiene como continuación natural el acceso a la madurez, al crecimiento y, por tanto, a la libertad. Coronada Carrillo (prof de Lengua y Literatura)

Lo que opinan nuestros alumnos: “Caperucita en Manhattan me ha gustado. La historia en sí resulta divertida y original. Lo que más me ha entretenido es el personaje de Miss Lunatic, porque deja que decidas tú quién es ella en realidad y, además, no es un papel que salga en Caperucita Roja, así que es como un personaje nuevo”. María Miranda Garzo.

“La verdad es que me ha gustado mucho esta experiencia, porque además de haber quitado la monotonía de siempre todas las clases iguales, el libro me ha parecido muy divertido y a la vez intrigante, por lo que cuando acababa la clase, estaba deseando que fuera la semana siguiente para continuar leyendo y aunque, como ya he dicho, me ha gustado bastante la historia en general, me quedo sin duda con el final, de donde he sacado estas frases: “No te hice ni celestial ni terrenal ni mortal ni inmortal, con el fin de que fueras libre y soberano artífice de ti mismo, de acuerdo con tu designio”. Es verdad que no entiendo mucho su significado, pero me inspira la sabiduría y a la vez un poco de misterio”. Elena García Baños.