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Una segunda oportunidad

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El amor justo

El amor justo

Una segunda oportunidad

El primer marido apareció una mañana de abril atado a una señal frente a la estación de autobuses. Poco después, y tras una llamada anónima a la policía, encontraron a dos mellizos dentro de una caja junto a un contenedor del recinto ferial. A otro lo dejaron sin nota y con una botella de ginebra a las puertas del centro de acogida. Con el verano los abandonos se multiplicaron, hasta el punto de que el consistorio tuvo que realizar una modificación de la ordenanza municipal para favorecer actuaciones como el sacrificio cero y evitar así una masacre.

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Esta mañana los voluntarios que los cuidan y preparan han hecho un llamamiento junto al alcalde para que se adopten maridos abandonados ante la saturación existente. Desde la protectora confiesan que no albergan muchas esperanzas de éxito con esta campaña, por eso también ofrecen la posibilidad de realizar paseos solidarios.

Raúl Aragoneses Lillo Mérida (Badajoz)

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