Teoría de los multiversos/pluriversos según Nayjama del Valle Monteverde

TEORÍA DE LOS MULTIVERSOS/PLURIVERSOS SEGÚN NAYJAMA DEL VALLE MONTEVERDE

“Ciudadanos interestelares, con preguntar y responder, qué grande favor que nos hacemos los seres humanos”

Amor del alma mía con el cuerpo lleno de vida, dueña de mi corazón rendido de rodillas a tu existencia, aquel día de amarillo luz solar nos dijimos, amor te amo, verde patio de mi casa donde todo el día respiro el aire fresco de tu amor, mi Sol, mi Luna, mi estrella matutina, mi dulce atardecer, mi noche de estrellas y mi cielo, no hay nada en mí que no seas tú:

Mi vida, mi cielo, cualquier lugar que miro eres tú Mi Sol, mi Luna, cualquier lugar que nombro eres tú Mi sangre, el corazón y las carnes que tengo eres tú Mi luz, toda flor que acaricio en mi verde patio eres tú Tú eres mi razón de ser que resucitas mi vida con el amor De cada día, porque eres el verde universo donde existo. Yo te amo en un hermoso día de lluvia o en día sin lluvia Te amo mi bella memoria y este momento de larga eternidad Te amo porque eres el verde pasto de mi verde casa hecha de ti Te amo luz de las estrellas de las noches que ilumina tus ojos Porque soy cada pedazo de tu corazón ausente en mí que soy tú.

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No hay nada de mí que te ama por siempre que no seas tú Las vedes cordilleras florecidas y las altas cumbres nevadas, las crestas de las altas cordilleras que florecen con tu amor. Eres tú mi vida, mi cielo, mi Sol, mi Luna, mi sangre vertida Por cada pedazo de tus carnes, bendecido soy por tus negros ojos Bendecido por tu amor eterno más grande que millones de universos. Si miro el pasado eres el río de siempre que crece rojo y verde Si miro el esperanzado presente toda tú vives en mí que soy tú Si miro el futuro no hay nada mío que no seas tú mi Sol y Luna Universo mío, estrella mía, alma mía, corazón mío, cielo mío Toda tú estás en mí que no soy más que tú hecho de ti.

¡Ay, amor! Me devoras toda tú que estás hecha de mí Verdes miles de universos, verdes galaxias, verdes estrellas, verde cielo, verde tierra, verde río, verde día, verde noche, mi vida, mi cielo, mi Sol, mi Luna, el río de mi sangre

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Tú que eres la niña de mis ojos alma de mi alma que te amo ¿Qué más quieres de mí que soy tuyo carne de mi carne? ¿Cuánto más debo amarte para que me ames tanto como yo? Mucho más te amo que no te olvido en ningún instante, Te nombro, te recuerdo, te llevo en mi alma, vida y corazón Que el tiempo que corre me parece leve suspiro hecho de ti Y encima me digo, que con amarte una eternidad no me basta Te amo amor porque estás hecha con cada pedazo de mis carnes Me sobra para amarte todo el amor del mundo hecho para ti. ¡Ay, amor! Te amo porque no hay nada de mí que no seas tú, Respiro el aire que respiras por todos los universos que conozco Que todo me parece hecho de ti que eres el cielo que amo amor. Cuántas veces me pregunto por qué no puedo dejar de amarte Cada día, cada hora, cada minuto, estás en mí toda tú hecha sal y agua Muchas veces me pregunto si no hay otro modo de amarte menos

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Por los desenfrenos, desvelos e infortunios de ser carne de tu carne Alma mía, corazón mío, dueña de mi vida, te amo esta eternidad. Habituado a ver tus ojos mirando la Luna, el Sol, las estrellas, el universo y los multiversos/pluriversos, magia y encanto es tu espíritu investigador, que me llevas de la mano por la vasta red de los espacios interestelares y así entiendo el horizonte cósmico. Porque no se puede no soñar con algo tan maravilloso como la belleza infinita de la que habla Richard Feynman, premio Nobel, astrofísico norteamericano: “Nuestro universo no tiene una sola historia, nuestro universo tiene miles de historias”. Después los sabios denominarán: “Teoría de Múltiples Historias del Universo”.

Nosotros soñamos año redondo con esta enormidad de magnitudes. Solo nuestro universo tiene 100.000 millones de galaxias, cada galaxia tiene 100.000 millones de sistemas solares, el cerebro humano tiene 100.000 millones de neuronas cerebrales. ¿Qué decimos de los 100.000 millones de universos o multiversos— pluriversos? En esta vasta red de universos, galaxias, sistemas solares, vidas inteligentes interestelares, hablamos de la Teoría de Múltiples Historias de Universos.

Nayjama del Valle Monteverde, fruto de la feliz teoría a la que hago referencia, saca esta conclusión: “Nuestro universo y los multiversos o pluriversos tienen múltiples racimos de historias”. Apartándose lo necesario

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de la Teoría de Múltiples Historias de Universos, dice algo más hermoso que el silencio: “Nuestro universo y los millones y millones de universos son de muchas razones, muchas historias, muchos colores, orígenes, edades, tamaños, formas, ritmos de evolución, de los cuales muchos han desaparecido, otros circunnavegan con nuestro universo, millones son contemporáneos nuestros, millones de ellos crean millones y millones de galaxias y estrellas, otros mueren y del polvo de los universos, resucitan otros universos, otras galaxias, otros sistemas solares, otros planetas y otras lunas, de diversas inteligencias”. Si no la conociera como la conozco y si no la amara como la amo, diría, vive en la Luna de Valencia. Mucha mujer de superlativa belleza, de muchos conocimientos, de elevada inteligencia y de voluntad indomable, que cuanto dice creo a pie juntillas. Cómo dudar de ella. Es de naturaleza poética, sabia, filósofa, de grandes convicciones, que me es imposible no creerla y no amarla.

Un día me sorprende: Los millones y millones de universos o multiversos/pluriversos son energía creadora de múltiples inteligencias interestelares.

No es para menos. Uno se siente atrapado en esta magia devoradora, que termina pensando, la vasta red de espacios interestelares está continuamente ametrallada y agujereada por explosiones de miles de galaxias y estrellas, efecto del canibalismo cósmico de millones y millones de universos.

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El trabajo de los universos es crear, recrear, generar, regenerar configurar y reconfigurar infinitos espacios interestelares. Circunnavegamos multiversos— pluriversos: Galaxias que crean estrellas, estrellas que crean planetas y lunas, planetas y lunas que crean vida; el planeta Tierra que gira alrededor del sistema solar, la Vía Láctea que gira alrededor de nuestro universo y nuestro universo que gira alrededor de millones y millones de universos.

Los seres humanos necesitamos explicar que circunnavegamos enormes espacios que nos separan de lunas, planetas, sistemas solares, galaxias, millones y millones de universos. Y contándonos mutuamente este enorme cuento del horizonte cósmico, dimos con la sabiduría de millones y millones de universos o pluriversos y agarrados de las manos con Nayjama, bailamos de alegría que no cabemos en nosotros mismos y yo, pregunto, ¿qué es Nayjama? Según me explican los hermanos altiplánicos bolivianos, significa, tú como yo, en condiciones de igualdad, sin diferencias de ninguna naturaleza, donde no hay ricos ni pobres, donde todos tenemos los mismos sueños, las mismas esperanzas y realidades, la misma voluntad indomable para ser felices.

Ciudadanos del mundo, según Diógenes de Sinope y yo digo, ciudadanos interestelares, estamos de paso por la vasta red de espacios interestelares. Mirándola a Nayjama del Valle Monteverde, cada día me repito a mí mismo, no estamos solos en el universo, ni nuestro

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universo es el único universo que existe y Nayjama, belleza morena cochabambina, de privilegiada inteligencia, eterna primavera, poesía en flor, canto de amor, luz de la vida, agua clara de mi ser, reina mía que me sorbe los sesos, estudia, memoriza, analiza, compara, busca similitudes, paralelismos, diferencias y generaliza, que me sorprende de semejantes conocimientos científicos.

Qué teoría del universo y de los multiversos según Nayjama del Valle Monteverde:

—Toda hipótesis posible es una vieja esperanza que nos acerca cada vez más a la existencia de vida inteligente en otros planetas: El exoplaneta GJ357d, situado a 31 años luz del planeta Tierra, —entre las más de 5.000 exoplanetas descubiertos o planetas parecidos al planeta Tierra—, llamado “supertierra”, una enana roja del tipo M en la constelación Hidra, seis veces mayor que el planeta Tierra y que tarda 55.7 veces en dar la vuelta a su estrella, que podría ser la más cercana a la humanidad, en la zona habitable de los exoplanetas descubiertos para hallar vida inteligente.

— En cualquier lugar del universo y de los multiversos existe agua.

— En cualquier lugar del universo y de los multiversos existen exoplanetas potencialmente habitables.

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— En todos los rincones de los universos existen los mismos elementos químicos: Oxígeno, carbono, hidrogeno, nitrógeno, helio, etc.

— En todos los lugares de los multiversos hay vida inteligente.

— Los universos fabrican galaxias, las galaxias fabrican sistemas solares y los sistemas solares fabrican planetas y lunas.

— Los planetas y las lunas fabrican vida.

— Donde hay vida existe alegría, optimismo, ganas de vivir y donde hay alegría y optimismo, estás tú mi amada Nayjama— Musicalizando el tono de mi voz declamo la “Balada de Claribel”, del genial poeta boliviano Franz Tamayo.

— Querido amor, me dice ella, es hermoso compartir la vida contigo, que tu vida es poesía y yo la miro, que me da pena tener que separarme de ella, ella que me ama tanto. Sin embargo, la vida es así: Dialéctica de contrarios, caras opuestas, amores y desamores, que es necesario unificarlos.

Nayjama del Valle Monteverde, reina del horizonte cósmico, de negros ojos binarios mirándome asombrada de vivir a mi lado, de cabellos negros, de manos obreras, de pies hermosos que pisan la tierra, sin dejar de pensar en los millones y millones de universos o multiversos, pluriversos y burbujas de galaxias, me dice con alegría,

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pero qué calentamiento global cargado de inundaciones, terremotos, heladas, sequías, hambre, pobreza y miseria, que los seres humanos nos miramos indiferentes.

Mientras tanto pienso en mi morena hermosa entregada a recias aventuras cósmicas, con tanto conocimiento de los cambios profundos que se generan efecto del espacio—tiempos entrelazados con la materia—energía, una misma cosa porque nunca van separados, excepto que por razones didácticas enseñemos la Teoría Unificada del Universo que explica cuanto existe de los millones y millones de universos.

Miles de años antes que el ilustre científico Albert Einstein revolucionara el mundo, la filosofía y la cultura andina de Tiwanaku, de los puquiñas, aymaras y keshuwas, plantearon la teoría del Pacha, que significa, planeta Tierra, tiempo, espacio, etnias, cultura, lengua, ser humano, pluralidad, multiculturalidad, diversidad, flora, fauna, vida, existencia, ser aquí y ahora, unidad de los contrarios—opuestos, colaboración, cooperación, solidaridad, reciprocidad amor a la vida y todo lo demás como un todo.

Luego vendrá la búsqueda de la Teoría Unificada, que me digo, vivo el Pacha y el Pacha me vive a mí.

Mirar a Nayjama, es llenarme el cuerpo de alegría y tenerla en los brazos es quemarme en el paraíso ardiente del amor, que con mirarla y tenerla bastaría para ser feliz, sin quejarnos del tiempo, del viento, de la lluvia, de la

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desigualdad humana o de toda esa parafernalia o espectáculo gratuito con que se adornan los hombres lobos de los hombres eurocéntricos y europeizados, explotadores, inhumanos, insensibles, baldados espirituales, que no se dan cuenta de las desgracias humanas que ocasionan, y antes de que el calentamiento global acabe con nosotros, o que el río de los tiempos se nos escape de las manos, necesitamos amar más que llenarnos de dinero los bolsillos.

La miro desconcertado a Nayjama, que hay ratos en que pienso, qué poco la conozco y eso que vivo con ella toda una vida, desde niños, toda nuestra juventud y esta vejez que se me cae encima y como no tengo paciencia para razonar y argumentar con calma, analizando con calma el comportamiento de los multiversos, trato de explicarme a mí mismo lo que sucede cuando una estrella explota y cuando una galaxia se incendia.

Soy sincero conmigo mismo, que hay días en que la tengo hechizada, confundida, cabizbaja y sumida en los viejos recuerdos de nuestro viejo amor. A ratos creo que la tengo soñando en mis brazos y ella, repitiéndome la lección cotidiana del amor, de bases sólidas científicas y filosóficas, que casi siempre terminamos mirándonos culpables del fracaso de nuestro amor.

Solo que esta vez, cuento el desenlace de nuestro amor, que todo termina en celos, desengaños, desamores, por las mujeres de por medio, parecido a las canciones de los folkloristas que tienen el tema a escribir sobre el amor,

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el desamor, el engaño, los celos, el fracaso rotundo y aquello de los vidrios rotos, que cada uno nos arrojamos en la cara, para no sentirnos culpables. Como liberándonos del dolor de vivir.

Nosotros para no morir de amor, tramos de disminuir la culpa y asumimos que los dos somos responsables de lo que le pasa a nuestro amor, dolor, penas, amarguras, desencantos, toda esa infelicidad que es nuestra cruz. La miro una vez más, me digo es la última que la veo y esta vez, no vuelvo a mirarla ni de frente ni de espaldas, y eso que de frente tiene unos pechos, madre mía y de atrás tiene unas nalgas, Virgen de los Remedios. La amo tanto por estas y otras razones, que no soy capaz de mirarla a los ojos que me duelen todo el estómago, que siento que es el final de nuestra historia.

Para no sufrir, para no penar, para no caer de rodillas ante ella rogándola, teorizo acerca de los multiversos, porque es la única forma de no volver a verla y no estar pensando o repitiéndome que la amo eternamente y dos o tres días más, al estilo de mi padre que le decía a mi madre, te amaré eternamente y estos minutos de vida que me quedan, y mi madre sola repitiéndose, como si la eternidad fuera para tanto, que yo creí que mi padre y mi madre abusaban de sus conocimientos, tanto que parecían haber vivido del otro lado de la Luna.

Nayjama del Valle Monteverde, es especialista en los pluriversos, todo el tiempo aprendo de ella, con

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humildad, respeto, alegría, amor, que a pesar de todo, me cuenta que una explosión de una sola estrella conmociona tanto los universos vecinos, que nuestro universo se carga de tal cantidad de agujeros negros, y me explica en pocas palabras, algo así es la Teoría Unificada del Todo, más allá del Big Bang o el origen de las cosas:

Uno: Siempre hubo tiempo y siempre habrá tiempo: Todo deviene del todo.

Dos: El Todo es igual a sí mismo.

Tres: Todas las explosiones destruyen y trituran y pulverizan cuanto existe por el entorno de la explosión.

Cuatro: Las explosiones de las estrellas dan lugar a la formación de los átomos.

Cinco: Las explosiones de las estrellas dan lugar a la formación de los agujeros negros, que son gigantescos remolinos o gigantescas licuadoras.

Seis: El universo está ametrallado de agujeros negros, vale decir, que en cada galaxia existen millones de agujeros negros.

Siete: Existen más agujeros negros que el número de explosiones de estrellas.

Ocho: Los agujeros negros son gigantescas licuadoras o trituradoras de partículas subatómicas.

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Nueve: Los agujeros negros efecto de la explosión de estrellas son fosas comunes de la materia—energía triturada que se dispersan por el universo del otro lado del horizonte de sucesos del agujero negro o gigantescas licuadoras o trituradoras de toda estrella que explota cumplido su ciclo vital.

Diez: Las estrellas que han explotado son convertida en partículas subatómicas producto de la fuerza de gravedad unificadora, que resucitan convertidas en estrellas y partículas subatómicas, ad infinitum.

Once: Estrellas y partículas subatómicas en constante explosión, movimiento incesante, configuran y reconfiguran el estado actual de nuestro universo y los universos vecinos nuestros.

Doce: La unidad cósmica en el horizonte de los universos según las explosiones de estrellas y la fuerza trituradora de los agujeros negros, dan lugar a la formación de los astros y de las partículas subatómicas.

Nayjama del Valle Monteverde, afina la puntería de sus conocimientos en Astrofísica, experta, domina la ciencia de lo posible, reanimada por sus propios conocimientos y recia, dominante, monárquica, afectada su salud tanto circunnavegar galaxias, me mira a los ojos que me cautiva, me toca las manos y me direcciona hacia sus labios rojos y yo, “iluso y descreído” al estilo de Franz Tamayo según se lee en “Balada de Claribel”, que con

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serias dificultades no caigo de rodillas ante la mujer dominante, sin embargo, en mi mente, me arrodillo a ella.

¡Nayjama! ¡Nayjama! ¡Nayjama! ¡Tú como yo! ¡Tú como yo! ¡Tú como yo! La de los ojos negros estrellas binarias “ch’asquitas, que me pone carne de gallina, y yo muy galán, conquistador y soñador, hablo a mis anchas sin detenerme, igual que mi amoroso padre, digo: “Te amaré eternamente y dos o tres días más”. Y ella, igual que mi amorosa madre, me dice: “Tampoco la eternidad es para tanto”. Cito a Heráclito de Éfeso, el viejo filósofo griego: “Nada permanece, todo cambia, todo pasa. Nadie puede bañarse dos veces en el mismo río en las mismas aguas”. Cómo se burlan de este bello descubrimiento filosófico algunos filósofos contemporáneos: “Pero sí se bañan los pobres seres humanos explotados en las mismas aguas de los mismos ríos”.

Uno no se conforma con esta vida oscura de dentaduras postizas, que la Ch’asquita, la de los ojos negros estrellas binarias, mi belleza privada, exclusiva, particular y propiedad privada, me mira desnuda el alma y desnudo el cuerpo y yo también desnudo mi espíritu filosófico, peripatético que me gusta filosofar caminando, surrealista de camisas estampadas y floreadas de lenguaje florido y de altas campañillas, variopinto, con el florilegio del universo que conozco que sueño con un mundo mejor, parecido a los poetas malditos Mallarmé, Valéry, Rimbaud, y ese soñador en extremo de André Bretón,

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pienso que soy capaz de darme la vuelta del otro lado de la Luna y reírme en la cara de los que afirman que la Luna de Valencia es queso verde y viejo verde superrealista, me veo a mí mismo con la gracia del Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha, que termino creyendo que Nayjama del Valle Monteverde es Dulcinea del Toboso, la miro de cuerpo entero de abajo para arriba que siento culpa residuo del cristianismo eurocéntrico.

—Tenemos que amarnos una eternidad— Extremo esfuerzos para reconquistarla.

—Necesitamos amarnos una eternidad y dos o tres días más— Me dice Nayjama la vaporosa.

— Solo es posible resistir esta vida oscura y sin sentido, amándonos una eternidad— Sostengo mi surrealismo poético que sobrevive gracias al favor del pueblo.

— Abrásame amor con todas tus fuerzas que el amor es nuestra tabla de salvación— Me dice la fruta madura de mis ensueños como rezando una oración de amor del otro lado de la Luna de Miel.

— Tómame el cuerpo entero cuanto quieras, soy tuyo en todo lo que queda de mis surrealismos de camisas estampadas: Soy tu media naranja en un grano de poesía— Alegre como soy, nadando en pastillas de la felicidad.

Surrealista admirador de André Bretón, Mallarmé, Valéry, Rimbaud o Salvador Dalí, que cuando los

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surrealistas le pidieron que renuncie al grupo de los surrealistas, dijo: “No renunciaré porque yo soy el surrealismo”. Pocos hombres quedan de la estatura de Dalí, el variopinto bigotudo por antenas del horizonte cósmico, luminoso, vaporoso y perfumado Alelí flor, enamorado de los dólares tras el arte refulgente. Con todo y todo y todo lo demás, me sé de memoria al mundo que tenemos en las manos o a flor de labios, le quedan largas esperanzas y largas eternidades.

El mundo se llora a sí mismo que me duele. Dura es la vida, pero es la vida que llevamos. Hablo con Roberto Ágreda Maldonado, abogado, pedagogo, poeta, escritor, investigador, docente universitario y lector de proporciones, y al hablar de libros y del libro “Musas verdes revolucionarias, cuentos—ensayos de Astrofísica”, me doy cuenta que está muerta la curiosidad científica, gana de lejos la burocracia en profesionales que deberían dedicarse al estudio científico de la realidad que nos circunda.

Nayjama del Valle Monteverde, con una pirotecnia verbal parecida a la Dulcinea del Toboso, que solo existe en la mente del Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha, que a su vez solo existe en la mente de Don Miguel de Cervantes Saavedra, del otro lado de la Luna de Valencia, me jura amor eterno. Surrealista de espíritu renacentista escucho decir que el amor es mucho más que el amor, con la curiosidad científica del niño adelantado circunnavego el horizonte cósmico, analizo cómo vencer

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la velocidad de la luz y cómo usar la energía de los agujeros negros en los viajes espaciales, estudio los cien mil millones de galaxias de nuestro universo y los multiversos/pluriversos.

Nayjama del Valle Monteverde, vendedor de ilusiones que cree en la hermandad universal de la raza humana, vendedor de ilusiones que cree en musas verdes revolucionarias, vendedor de ilusiones que cree en un mundo mejor, luchador social que vivo en las calles, vestido de camisas estampadas floreadas, libre de todo prejuicio social, surrealista abierto a ti de par en par mi corazón enamorado, buscador de conocimientos, lleno de amor grito, ¡Oh, mi poesía concreta, carne palpable, tierra arable, musa revolucionaria! Mi alma, mi vida, mi corazón, mi cielo, mi morena de ojos negros de estrellas binarias, musa verde revolucionaria de entrañas amorosas, vaporosa, perfumada rosa del verde patio de mi verde casa, imposible que te deje sola, juro amor del alma mía que te amo tanto, y que jamás me separaré de ti.

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