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Jóvenes vidas vocacionadas
ROCÍO TORRADO:
“Dios está en lo cotidiano de nuestra vida”
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Rocío nació en una hermosa ciudad andaluza del Mediterráneo, Málaga, en 1986. Es una enamorada de la lectura, la música, la guitarra y el canto. Después de acabar la ESO y el Bachillerato, hizo el Ciclo Superior de Información y Comercialización Turística, en su ciudad natal. Tras su finalización, marchó al Reino Unido para trabajar, durante cinco años, en un hotel muy cerca de Windsor, en Londres. Allí vivió una experiencia muy interesante profesional y humana. Aprendió bien la lengua, las costumbres y la manera de pensar de los ingleses. En una ocasión, tuvo que preparar un evento para el príncipe Edward. También allí conoció el carisma salesiano, sintiéndose atraída fuertemente por él.
Al regreso a España, trató de conocer más quiénes eran las Hijas de María Auxiliadora, a través de los Salesianos Cooperadores de la casa de Málaga, que la invitaron a participar en un encuentro de pascua. Aquí conoció a las Salesianas. A partir de esto, comenzó un proceso de discernimiento que acabó con la decisión de ingresar en el aspirantado, acontecimiento que vivió con las salesianas del sevillano barrio de Nervión, durante el curso 2017-2018.
En estos momentos, se encuentra en Italia, en Castelgandolfo, realizando el noviciado, experiencia que comparte con otra compañera, María Sánchez, de Tenerife, y un grupo de hermanas de diversas naciones, y que le está resultando muy enriquecedora y útil para seguir madurando su sí a la llamada de Dios.
«Los jóvenes de hoy son personas llenas de energía, de sueños, de grandes deseos»
Una llamada inesperada
Rocío nunca había pensado ser religiosa; sin embargo, al entrar en contacto con el mundo salesiano, descubrió de nuevo el amor de Dios, y la inquietud por entregar la vida a los demás. Ella misma afirma que lo más grande que está viviendo ahora es el “poder ver a Dios en cada acontecimiento de la vida de cada día, en lo cotidiano”.
Su decisión vocacional no fue fácil. Tuvo que dejar su trabajo en Inglaterra, su casa y su coche. Su propia familia tampoco lo entendió. No obstante, y a pesar de esto, hoy se siente feliz, y sus padres la ven serena y contenta, respetando su opción y animándola a seguir adelante, ya que se trata de su felicidad.
Cuando a ella se le pregunta por cómo ve a los jóvenes hoy, responde desde una mirada positiva y llena de esperanza: “Creo que los jóvenes de hoy tienen por delante muchas posibilidades; los veo como personas llenas de energía, de sueños, de grandes deseos; pienso que necesitan de adultos que los acompañen, que compartan con ellos la vida y las experiencias personales”.
Cuando algún chico o chica le dice que está pensando en su vocación, les dice: “Sé valiente, ponte en las manos de Dios, confía en él, y déjate ayudar en la búsqueda de esa opción de vida”.
Jorge Juan Reyes, sdb ief@salesianos.edu