URUGUAY / Segunda época / Año XXXVIII / Nº 7 / Setiembre 2016 / www.issuu.com/bsuru
Sumario De corazón damos gracias a Dios porque fue Don Bosco quien nos conquistó
Patio y casa salesiana para todos
SINTONIZANDO CON DON BOSCO D. Ángel Fernández Artime El nombre de Dios es misericordia
Salesianos Cooperadores Del mundo para el mundo
FAMILIA EN OBRA Mag. Álvaro Silva Muñoz Un sillón para el cansancio
PÁG 16.
Sandra Rodríguez: “Amor Exigente”
Raquelita Correa: Ir descubriendo qué nos pide Dios
PÁG 23. P. Francisco Lezama sdb Lamido por los perros
PÁG 22. PÁG 24. AQUÍ Y AHORA “Misericordiado” “Misericordiar”
PÁG 29. Un silencio lleno de misericordia
PÁG 30.
SINTONIZANDO CON DON BOSCO Sor Yvonne Reoungoat fma Misericordiosos como el Padre
PÁG 32.
PÁG 31. DEL ÁRBOL SALESIANO “Talleres” vs. “Casos perdidos”
PUZZLE, LO QUE HEMOS VISTO Y OÍDO TE LO CONTAMOS P. Sebastián Ferreyra sdb
PÁG 35.
CARTA DEL DIRECTOR
P. Sergio Álvarez sdb
De corazón damos gracias a Dios
porque fue Don Bosco quien nos conquistó…
Ya lo decía el Papa Pablo Vl: “El mundo de hoy necesita más testigos que maestros y, si acepta a los maestros, es porque antes han sido testigos”. El Papa Francisco, palabra escuchada en el mundo hoy, ha subraya‐ do, ha escrito con negrilla, cursiva y mayúsculas:
MISERICORDIA ¿Cuál sería la identidad de un católico hoy día? El abrazo, entre los diferentes, para hacerlo comunión por el encuentro. Un abrazo que comunica misericordia. Un abrazo misericordioso. Un abrazo para misericordiar. A nosotros Salesianos, un modo de relación nos da fuerza hoy para ser misericordiosos como el Padre es misericordioso. Lo hemos heredado de Don Bosco y lo llamamos Sistema Preventivo. Es para el abandonado, para el huérfano de padre y madre biológi‐ co, y de Padre existencial; es para que todos tengamos "Padre". La Misericordia y el Sistema Preventivo mueven cosas similares porque sin diálogo, sin querer estar, sin contemplación, no hay misericordia posible. Y el Sistema Preventivo es diálogo razonable, querer estar con amor, y contemplar desde una honda vivencia religiosa del día a día. Esto se da en personas, en nuestros corazones. Por eso se abren las preguntas: ¿De qué está lleno tu corazón? ¿De qué estará lleno tu corazón?
El que ama es capaz de aguantarlo todo, de creerlo todo, de esperarlo todo, de soportarlo todo.
Para nosotros el camino es la santidad, es en un modo de relación, es misericordiando. Se vuelve posible solo si Jesucristo llena el corazón, una vida; si su Acontecimiento Pascual es la realidad. Como decía el P. Víctor Reyes: “La cruz sin Cristo no es cruz, y Cristo sin la cruz no es Cristo”. ¿Qué sentido tiene el Sistema Preventivo y la Misericordia sin Cristo? En este Boletín Salesiano hemos trabajado para que te encuentres con testimonios de personas que nos muestran de qué se ha llenado su corazón, con aportes que ayudan a meditar, reflexionar, rezar...y dar frutos en obras de misericordia. ¡Léelo, te vas a encontrar!
1Cor. 13,7
Boletín Salesiano
Comunicación Salesiana ‐ Uruguay
@salesianos_Uru
Revista de información sobre la Familia Salesiana y de cultura religiosa Director: P. Sergio Álvarez sdb Redactora Jefe: Adriana Porteiro Coordinador: Eduardo Martínez Columnistas: Mag. Álvaro Silva Muñoz, P. Francisco Lezama sdb y P. José Adrián García sdb Equipo de redacción y responsables de secciones: Lic. Emiliano Del Puerto, P. Sebastián Ferreyra sdb, Gianfranco Brandi sdb, Hna. María Baffundo hma, Lic. Selene Cardarello, Lic. Marcelo Hernández, Lic. Juan Pablo Sánchez y Enrique Selios Tapa: Mural del Papa, autor Ismael Agriel, artista plástico de Montevideo ismaelconsultas@hotmail.com; Cel. 098 280 184
Fotografía: Sebastián Andión, Alejandro Carballal y Leonardo Pagliari Foto de tapa: Sebastián Andión Corrección: Graciela Rodríguez Diseño: gustavo@tanganika.com.uy Impresión: Mastergraf Dirección, redacción y administración: Av. Agraciada 3181 CP 11800, Montevideo; tel. 2209 4521 Sitio web: www.issuu.com/bsuru Email: comunicacion@salesianosuruguay.com.uy Afiliado a la Cámara Uruguaya del Libro. Depósito Legal: 366.191
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ยกSร , HAY ALGO NUEVO BAJO EL SOL!
Patio y Casa Salesiana para todos
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La Congregación Salesiana cuenta con 14 Centros Juveniles dispuestos en distintos barrios, principalmente en Montevideo, pero hay uno, en Mercedes, que presenta una particularidad que rompe con la norma. El Colegio San Miguel es casa de puertas abiertas para sus alumnos y los jóvenes del “Parque Don Bosco”, que se sienten parte de la institución.
escenario, pero el espíritu que lo anima permanece. Cada miércoles, los jóvenes dejan su barrio y se desplazan al centro de Mercedes, donde los aguardan con “ansie‐ dad” sus animadoras: Jesica Ferreira y Alba Zubiaurre, del Centro Artigas de Exalumnos Salesianos. “Desde el principio a los jóvenes les gustó mucho la idea de que la reunión fuera en el Colegio, porque tiene una infraestructura excelente, hay mucho patio y diferentes espacios para los encuentros”, explica Jesica. Asegura que la inserción de los muchachos al Colegio no es algo forzado o dificultoso, sino que se da con total natura‐ lidad. “Al acercarse al Colegio ellos se sienten diferentes, y les gusta mucho poder estar en nuestro patio salesiano”, añade Alba. Generalmente un Centro Juvenil funciona en el corazón del barrio de sus destinatarios, acogiendo también a jóvenes de zonas aledañas, y sus animadores provienen de alguna institución salesiana ubicada en el centro de la ciudad. En Mercedes, hace una década, sucede lo inverso. El Centro Juvenil funciona en el mismo Colegio San Miguel, donde las animadoras reciben a los muchachos que llegan desde el barrio “Parque Don Bosco” que, con total familiaridad, toman posesión del patio y de las instalaciones del centro educativo, sintiéndolos propios. En ese barrio, animadores del Colegio atienden desde hace 15 años un Oratorio para chicos de 3 a 14 años. Cuando alcanzan los 15 se les presenta una nueva propuesta, en un nuevo
CERO FALTA El programa que se les ofrece a los mucha‐ chos, y que ha ido cambiando con los años, consiste en un rato de juego o actividad deportiva (generalmente fútbol para los varones) en el patio, luego un espacio de trabajo en grupo, y culmina con la merien‐ da. En algún momento la propuesta se complementó con algunos talleres sobre diversas temáticas. “De los muchachos que llegan, algunos estudian y otros fueron desertando del sistema educativo, pero al Centro no faltan nunca. Eso es muy positivo”, destaca Alba. 5
Más allá de lo compartido en ese rato de los miércoles, el sentido último que las animadores encuentran en su trabajo es “ayudar a los jóvenes a que sientan que Jesús los acompaña, que camina con ellos, que hay alguien que los quiere, que los cuida, que puede haber un paso distinto de ellos por la vida”.
“Nosotras tenemos la camiseta bien puesta y el corazón bien abierto en el espíritu de Don Bosco” 6
Por el momento, el Centro Juvenil funciona solamente una vez por semana, por las limitaciones de horario de Alba y Jesica que trabajan fuera de su casa y tienen sus familias para atender, pero eso no significa que se desconecten de los jóvenes durante el resto de la semana. Un grupo de whatsapp del Centro Juvenil les permite estar permanentemente en contacto y los muchachos les tienen la suficiente confianza como para hacerles saber si necesitan algo. Sin embargo, confiesan que les “encantaría” que el Centro Juvenil pudiera acoger a los jóvenes más días. “Ellos piden y nos dicen que les gustaría estar más en el Colegio y poder venir dos o tres veces en la semana”, señalan. “Nosotras tenemos la camiseta bien puesta y el corazón bien abierto en el espíritu de Don Bosco. Los miércoles venimos con ansias de que los jóvenes asistan y se sientan como en casa, en familia, y ellos también desean que llegue el otro miércoles para volver a reunirse y compartir esto tan lindo”, asegura Alba. Este servicio, no lo asumieron en forma uniper‐ sonal, también sus familias las apoyan y secundan, transformándolo en un “trabajo familiar”.
“Al acercarse al Colegio ellos se sienten diferentes, y les gusta mucho poder estar en nuestro patio salesiano” ¿Y DESPUÉS QUÉ? Aunque los jóvenes permanecen en el Centro Juvenil hasta pasados los 20 años, y algunos siguen dándose una vuelta con 22 años, las animadoras sienten la falta de otro espacio que los acompañe a partir de esa edad. “Nos gustaría mucho que después de este lugar pudieran insertarse en otro o hacer otras actividades para que la vida no se les haga tan difícil como ellos la sienten, porque la mayoría son muchachos muy vulnerables, viven en una realidad muy dolorosa”. “En las reuniones tratamos que perciban que la vida vale mucho, que ellos son muy importantes para nosotros y que pueden hacer otras cosas también”, comenta Alba. Al pasar raya a su trabajo con los jóvenes, Alba y Jesica coinciden en la respuesta: “Somos felices en este trabajo que estamos haciendo y de verlos a ellos alegres, dando pasitos de a poco. Cuando un joven llega y nos dice: 'hoy estaba desganado pero vine y me voy contento´, eso nos conforta totalmente”.
Un colegio para “todos” Ante el inminente cierre de la casa del INAU que en Mercedes alberga a menores infractores, los Cooperadores Salesianos se están planteando formar otro grupo con esos jóvenes que queda‐ rán libres y recibirlos en el Colegio los días jueves. Los Cooperadores ya trabajan los fines de semana con los meno‐ res que fueron quedando en libertad y están analizando, además, la posibilidad de organizar actividades en conjunto con los mucha‐ chos que se reúnen en el Centro Juvenil los miércoles. Para este grupo no sería algo nuevo, puesto que en el Centro Juvenil ya participan algunos menores del Proyecto Manzano Verde del INAU que quedaron libres. GIORGINA, DEL CENTRO JUVENIL, ANIMADORA EN EL ORATORIO Cuando era pequeña, Giorgina y sus hermanos, participaban en el Oratorio que funciona en el barrio “Parque Don Bosco”. Hace 6 años asiste al Centro Juvenil y según ella misma lo afirma: “Me re‐gusta y nunca falto”. “Estoy estudiando peluquería. Por ahora me va bien en el estudio, gracias a Dios”, cuenta. Mientras integra el Centro Juvenil, Giorgina es animadora en el Oratorio que la acogió en su niñez, integrándose al grupo de jóvenes animadores, alumnos del Colegio San Miguel. 7
FAMILIA EN OBRA
Un sillón para el cansancio clara y sencilla por Don Bosco en su fórmula de educar para la formación de “buenos cristianos y honrados ciudadanos”. Francis‐ co, en este planteo, retoma esa máxima. Para transitar la apuesta necesitamos descubrir causas que valgan la pena (sí, causas que van a traer penas), de lo contra‐ rio quedarán en meras aspiraciones. Las casas salesianas desarrollan, sobre este sustento pedagógico, acciones que se orientan a comprometerse con esas causas: misiones, apostolados, tutorías entre compañeros de clase, conformación de planteles deportivos, grupos que desplie‐ gan el arte, etcétera.
Recientemente, el Papa Francisco desafió a los jóvenes que participaron de la Jornada Mundial en Polonia a no confundir la felicidad con un sofá: “Un sofá que nos ayude a estar cómodos, tranquilos, bien seguros. Un sofá –como los que hay ahora modernos con masajes adormecedores incluidos– que nos garantiza horas de tranquilidad para trasladar‐ nos al mundo de los videojuegos y pasar horas frente a la computadora. Un sofá contra todo tipo de dolores y temores. Un sofá que nos haga quedarnos en casa encerrados, sin fatigarnos ni preocuparnos. El 'sofá‐felicidad' es probablemente la parálisis silenciosa que más nos puede perjudicar la juventud. ¿Y por qué sucede esto Padre? Porque poco a poco, sin darnos cuenta, nos vamos quedando dormidos, nos vamos quedando embobados y atontados. Queridos jóvenes –continuó Francisco– no vinimos a este mundo a 'vegetar', a pasarla cómodamente, a hacer de la vida un sofá que nos adormezca; al contrario, hemos venido a otra cosa, a dejar una huella. Es muy triste pasar por la vida sin dejar una huella”. Se trata, en efecto, de una exhortación a la audacia que, en el fondo, guarda relación con el sueño de un mundo mejor, que necesita de la juventud para procesar los cambios de forma urgente. Al respecto, escuché a Gustavo de Armas (Sociólogo, UNICEF) y a Gerardo Caetano (Historiador y cientista político), quienes fueron convocados por la periodista Ana María Mizrahi para comentar la consigna “Ser joven en Uruguay” en el programa “Dimensión Uruguay” de TNU (canal 5), el jueves 11 de agosto (pueden profundizar en: http://www.tnu.com.uy/content/videos/ser‐joven). Específicamente, se detuvieron a analizar algunas de las formas de protagonismo de los jóvenes, contradiciendo cierto estereotipo de apatía, y enfatizaron que tal vez estas modalidades no fueran las tradiciona‐ les, pero que algo estaba empezando a cambiar. En particular, aludieron al movimiento de fuerte base juvenil en torno a la propuesta de la baja de edad de imputabilidad penal, a varias experiencias de voluntariado, espacios de educación ambiental (por ejemplo, los jóvenes se movilizaron por la construcción de ciclovías), a expresiones artísticas típicas como Murga Joven o el Carnaval de las Promesas, etcétera.
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La apuesta es a tirarse en un sofá luego de una jornada de cansancio, luego de haber dejado huella en el living público: en el ambiente de trabajo, estudio, organizaciones de distinto tipo, etcétera. Se trata de una felicidad con una fuerte base ciudadana, sintetizada de forma
Ahora, lo interesante del planteo de Fran‐ cisco, estimo, es que dichas causas se revelan valiosas en la medida que las descubrimos como “causas comunes”, que nos afectan a todos. Pero, a la vez, en este punto, siempre descubriremos a la desi‐ gualdad, en todas sus expresiones, como aspecto determinante, ya que las proble‐ máticas no nos afectan a todos de la misma manera. De lo contrario, podrá haber causas pero no vividas como comunes, y quedarán limitadas al ámbito de lo privado. Nos puede pasar, de esta manera, lo que ya Agarrate Catalina señalaba en febrero 2015, en su cuplé del “Sueño americano”: “Y comerás chatarra con mis ideas/ Y beberás batidos con mi confort / Te queja‐ rás del mundo frente a mi tele / con el control remoto de mi sillón”. Al respecto, me viene la idea de Antonio Gramsci, para quien había una distinción y un proceso para pasar de ser “actor social”, reconocido como tal por otros, y “autor social”, a quien además de reconocerle su voz, se le reconoce su capacidad de “escri‐ bir la historia”, como protagonista. Malala, joven paquistaní de 19 años, ya obtuvo el premio Nobel de la Paz en 2014 por su lucha para ampliar la educación de las niñas.
Mag. Álvaro Silva Muñoz Coordinador del ISF
SINTONIZANDO CON DON BOSCO
P. Ángel Fernández Artime Rector Mayor de los SDB
EL NOMBRE DE DIOS ES MISERICORDIA
Queridos amigos: Quise que este mensaje tuviera el mismo nombre que el libro‐entrevista al Papa Francisco publicado hace algunos meses: “El nombre de Dios es Miseri‐ cordia”. Cuando le preguntaron “¿Qué es la miseri‐ cordia para el Papa?”, él respondió que “es la cédula de identidad de nuestro Dios: Dios de Misericordia, Dios misericordioso”. Una expresión muy simple, muy radical y liberadora al mismo tiempo. Ya en la Bula de proclamación de este Jubileo –inaugurado el 8 de diciembre pasado y que concluirá el 20 de noviembre de 2016 con la Solemnidad de Cristo Rey–, Francisco había expuesto que siempre tenemos necesidad de contemplar el misterio de la misericordia, fuente de alegría, de serenidad y de paz.“¡Cómo deseo que los años por venir estén impregnados de misericordia para poder ir al encuentro de cada persona llevando la bondad y la ternura de Dios! A todos, creyentes y lejanos, pueda llegar el bálsamo de la misericordia como signo del Reino de Dios que está ya presente en medio de nosotros”, expresaba el Papa. No quise pasar este año sin referirme a la Miseri‐ cordia desde nuestra realidad salesiana, porque somos educadores de muchos jóvenes en todo el mundo. Somos la Familia Salesiana, portadora de un carisma fundado en la certeza de que Dios siente una ternura especial por sus hijos, los jóvenes y, en
particular, por los que tienen menos oportunidades. Ya se ha escrito muchísimo sobre este asunto. Por eso, aunque mi mensaje no es novedoso, encierra un llamado a cada educador salesiano para recordar cuál es nuestro compromiso: debemos anunciar y dar testimonio de la buena noticia de la Misericordia de nuestro Dios. Pero nadie da lo que no tiene. Si no nos hemos sentido necesitados de su mirada bondadosa y tierna, no podremos transmitir a nuestros muchachos ni siquiera un esbozo de lo que creemos que Dios es para nosotros y para ellos. No podemos hablar de la Misericordia que Dios nos regala gratuitamente como si fuésemos maestros que vienen a enseñar. Solo podemos compartir la convic‐ ción y la certeza de nuestra fe que, aunque sea pobre, puede dar una fuerza extraordinaria. Al mismo tiempo, el corazón del salesiano se siente feliz porque sabe que su manera de ser y de hacer entre los muchachos es una oportunidad maravillosa de mostrarles cómo Dios los ama. No hacen falta palabras: cuando el joven siente que a su lado hay educadores que ponen la vida a su servicio, el rostro misericordioso de Dios toma forma. Cuando el muchacho no se siente condenado, castigado o apartado por un error, sino acogido y comprendido –si sabe que se le ama aunque se haya equivocado– él siente que el rostro misericordioso de Dios brilla con luz propia. Este año jubilar es, por tanto, una oportunidad para crecer en Humanidad. Y aunque el camino hacia la Paz no sea siempre evidente, creamos y mostremos nuestra convicción de que Dios acompaña nuestra historia, a pesar de que muchas veces parezca que la humanidad retrocede. Y aquí concluyo, queridos amigos y amigas: dejemos que nuestros corazones se sientan tocados por este Dios cuyo nombre es MISERICORDIA.
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HACIENDO HISTORIA
SALESIANOS COOPERADORES, DEL MUNDO PARA EL MUNDO Son 125 mil en el mundo; en Uruguay 125 y 35 en camino. Todos con un mismo cometido: vivir el Espíritu Salesiano en la cotidianidad de la vida y el trabajo, siendo los jóvenes más vulnerables los destinatarios principales de su acción. Los Salesianos Cooperadores responden al llamado con el Sistema Preventivo de Don Bosco y la misericordia de Dios como sus mejores instrumentos. La Asociación de Salesianos Cooperadores (ASC) es la rama laical fundada por Don Bosco para ofrecer el sistema preventivo a los jóvenes más necesitados por medio de personas que, sin ser religiosos de vida consagrada, comparten la preocupación por su formación y la salvación de sus almas. CON DON BOSCO, DESDE LA MISERICORDIA, PARA LOS DEMÁS Don Bosco dejó escrito para los Salesianos Cooperadores (SSCC) un Proyecto de Vida Apostólica en el que manifiesta que deben realizar su compromiso y vivir el Espíritu Salesiano en las situaciones ordinarias de la vida y el trabajo, basados en la caridad apostólica y pastoral. Para Juan Andrés Gründel, SC de Salto, ese es su principal apostolado, el compromiso de realizar el ideal evangé‐ lico del amor a Dios y al prójimo “en lo de todos los días”. 10
A través de un estilo de vida marcado por el espíritu de las Bienaventuranzas, los Coo‐ peradores están llamados a servir desde su testimonio personal. ¿Cómo viven los Salesianos Cooperadores uruguayos ese llamado? De muy diversas maneras, con acentuaciones diferentes según los ambientes que habitan, pero con un denominador común: la misericordia. Tatiana Salerno, aspirante a formar parte de la ASC, cuenta que es fundamental para el Salesiano Cooperador demostrar amor en los actos más sencillos; en las charlas, en los consejos, en las caminatas con los jóvenes, “entre mate y mate manifestar ese amor que va acompañado de la misericordia que intentamos reflejar de Dios”.
actitudes y respuestas cotidianas”. Para Margot Hourcade, de Mercedes, la misericordia que cultivan los SSCC consiste en abrazar sin preguntar, aprender a amar sin pensar demasiado, a contemplar la vida del otro pensando intencionalmente dónde te maravillas. “Porque Dios hizo algo mara‐ villoso en cada uno, y eso es lo que tenemos que descubrir en quienes acompañamos. La misericordia no es enfocarnos en lo que está mal, sino darles a descubrir lo que está bien, lo que es don de Dios. Misericordia es reconocernos pecadores, frágiles, desproli‐
sociales, planificando las reuniones, recibiendo a cada niño o adolescente en el portón con un beso, jugando en el patio, escuchando mucho y estando presente donde sea necesario. Para Alejandro Carballal, de Mercedes, Don Bosco fue, sin duda, portador del amor misericordioso de Dios hacia sus hijos más desfavorecidos. Asegura que su lema "Dame almas, quédate con lo demás" resume su programa de vida. Una vida en la que no se guardó nada, donde "dejó todo en la cancha" ‐esfuerzo, talentos, recursos‐
No siempre es sencillo vivir el Espíritu de Don Bosco en lo cotidiano. Para Daniel Javier (Tito), es desafiante ser joven miem‐ bro de la ASC, sobre todo en ambientes más confrontativos como el de la facultad. Lucía Serrón, aspirante a la ASC, asevera que una forma de vivir la misericordia de Dios es entender la realidad en la que estamos inmersos desde tres dimensiones: la comprensión, la curación y el perdón, y desde ahí poder transformarla. Don Bosco invitó a los Cooperadores a vivificar con valores evangélicos las realida‐ des humanas y sociales en las cuales viven y trabajan. Los SSCC se sienten comprometi‐ dos con la animación cristiana de las reali‐ dades temporales. En cada persona Dios los interpela y Don Bosco les enseña a ser protagonistas de esas interpelaciones. Enrique Garbarini, SC de Salto, comparte que en su trabajo llegan personas con “heridas de la vida, fracasos y dolores.” Y es allí donde debe acogerlas con fraternidad y misericordia, tratando de buscar una res‐ puesta a cada situación. Gründel coincide con esta mirada y destaca que “acercarnos a los problemas y ser más sensibles a lo que vive mi compañero, mi colaborador o incluso mi propio jefe. No es nada nuevo a lo que cualquier católico está llamado a trasmitir en su entorno y desde su vivencia de fe, pero está bueno pararnos a reflexionar sobre ello, revisar nuestras
jos, llenos de defectos, pero así y con todo eso, ser personas disponibles para Dios”. Los SSCC están llamados a colaborar en la actividad pastoral de la Iglesia mediante el compromiso y las iniciativas que privilegian la pastoral juvenil y el apostolado del área educativa. “Como docente, mi ser Salesiano Coopera‐ dor lo vivo desde mi compromiso educativo con los niños y adolescentes que se acercan a nuestras obras, inspirado en el amor misericordioso y que me lleva a dedicar todos los esfuerzos para que los gurises logren descubrir en Jesús el sentido de sus vidas”. Cesar Farías, educador en varios centros salesianos de Rivera, cuenta que esos esfuerzos pasan por generar ambien‐ tes de familia, con mucho diálogo, buen humor, amabilidad, cuidando las relaciones
para lograr su objetivo: hacer plena la vida de los demás acercándolos a Dios, comen‐ zando por los jóvenes más necesitados. “Nosotros, los Salesianos Cooperadores, compartimos ese lema y desafío de `Dame almas´”, expresa. “En primer lugar nos sentimos depositarios de esa misericordia, ya que Dios nos ha llamado a esa vocación a pesar de nuestras debilidades y limitacio‐ nes: nos llama porque nos ama. Nosotros, que elegimos quedarnos con Don Bosco, podemos y debemos también ser portado‐ res de ese amor misericordioso, con predi‐ lección hacia los más necesitados”, subraya. “Nos quedamos con Don Bosco para siem‐ pre y en todos lados porque él nos muestra a Jesús. Estamos convencidos de que somos testigos del amor misericordioso de Dios”, reflexiona Garbarini. 11
VALE LA PENA VIVIR ASÍ
Sandra Rodríguez Coordinadora de "Amor Exigente" en Durazno
amor sin exigencia ME HUMILLA
exigencia sin amor ME REBELA
amor exigente ME ENGRANDECE
Una adicción no se puede revertir "de una", pero es posible la recuperación. Sandra Rodríguez, madre de un adicto recuperado, comparte su experien‐ cia con el BS y asegura que la rehabilitación es un "trabajo familiar", en el que todos deben ser humildes para reconocer qué hicieron mal. "No hay que sentirse culpables, aunque sí responsables", "aprendí que con gritos y peleas no se puede enseñar nada" y "el abrazo te llena el alma", son algunas de las afirmaciones de esta madre, que luego de transitar un espi‐ noso y largo camino afirma que fueron los cambios que imprimió a su vida los que le permitieron recobrar la paz. ¿Cómo llegaste a "Amor Exigente" (A‐E)? Hace 11 años, cuando Joaquín tenía 14 años, empezó con problemas de consumo de drogas. Él iba al liceo y presentaba los problemas habituales de un adolescente como ser faltar, no estar en casa, o salir todo el tiempo. A casi todos los padres nos pasa que como es varón sentimos que no hay que controlarlo tanto, que anda con amigos. Siempre fue muy mimado por todos en la familia por ser el primer nieto y sobrino. Cuando surgió esta problemática eran tiempos del 12
Pilsen Rock en Durazno. Y nosotros, trabajando mucho, descuidamos. No hay que sentirse culpables, pero sí responsables de las cosas que hacen nuestros hijos. Cuando estaba desbordada por esta situa‐ ción, justo me avisaron que había estado en Durazno un matrimonio que tuvo un hijo con problemas con sustancias. ¿Hasta ese momento habían probado con alguna otra clase de tratamientos? Lo había llevado a la psiquiatra, pero psicó‐ logo no quiso. En momentos jugaba con ella, le hacía berrinches y lograba lo que quería, y me decía 'viste que hago lo que quiero'.
Había que buscar otra alternativa... Se conformó un grupo de “Amor Exigente” en Durazno y, a los pocos meses, de la noche a la mañana, me dejaron coordinándolo. Fue todo un descubrimiento. Realmente me ayuda a mí, también a mi hijo con el consumo, pero además me da mucha paz. Uno con estos problemas deja de vivir. Me fui reeducando en muchas aspectos que me sirvieron, y otras que no eran prioridad, las dejé de lado. Me focalicé, unifiqué criterios con la familia. Por ejem‐ plo, coincidimos en no darle dinero. Aprendí que con gritos y peleas no se puede enseñar nada. También que no se puede cambiar la voluntad ajena. Gracias a una conjunción de cosas hemos podido lograr confirmar que de a poco se puede. Pasamos muchas dificultades mi ex marido, su actual esposa y
"Lo más difícil es darse cuenta de que uno tiene que cambiar muchas cosas"
toda mi familia, pero hoy vemos las cosas con más optimismo. Nunca se está a salvo, ni significa que no va a volver a pasar, pero ahora enfrentamos las cosas con más ele‐ mentos. ¿Por qué seguís adelante en el grupo tras la recuperación de tu hijo? Sigo y seguiré porque no me va a alcanzar la vida para devolver todo lo que me dieron. Siempre que pueda, aunque sea con un mínimo aporte, voy a estar. Llega mucha gente que ya estuvo en tres o cuatro lados. Es que lo más difícil es entender, procesar la problemática, darse cuenta de que uno tiene que cambiar muchas cosas. Es difícil el 13
¿Qué son los grupos de Amor Exigente? Son grupos de apoyo, en los cuales los propios miembros se ayudan en la tentativa de cambiar sus comportamientos y, consecuente‐ mente, los comportamientos de los suyos. Son grupos de acción, no son grupos de charla u oración. Las reuniones son semanales. En ellas los familiares reciben informa‐ ciones, esclarecimiento y son orientadas a no aceptar comporta‐ mientos agresivos o violentos. Esta no aceptación, acaba desencadenando en el otro la decisión de cambiar su actitud.
Fijar límites y metas semanales, con la ayuda y creatividad del grupo, es lo que da fuerza y condiciones a los familiares para que, paso a paso, eliminen las actitudes inadecuadas. Analizando los principios básicos A‐E y reflexionando sobre ellos, concluyen que ahí están expresadas las principales causas de los desajustes individuales y familiares. Este programa propone, por lo tanto, la solución para eso. La familia analizará los principios, y al asumir la propuesta, una nueva dinámica actuará en el relacionamiento entre sus miembros.
En Uruguay funcionan 15 grupos: 9 en Montevideo, 2 en Maldonado, y 1 en Canelones, San Carlos, Durazno y Quebracho (Paysandú). Por más información, ingresar a www.amorexigenteuruguay.org
proceso de ellos, pero el nuestro también. Hay que tener la humildad de reconocer en qué estuvimos mal y qué posibilitó esto. Lo que se hace en el grupo es algo muy especial No es fácil unificar criterios con el entorno. Hay que trabajarlo. Es un trabajo personal. Hablamos de principios básicos como la culpa, la cooperación, las raíces culturales, la actitud y cerramos con el amor, que es más grande que la exigencia. Cuando estamos cerrados y con toda la problemáti‐ ca, nos cuesta amar más allá de la exigencia. Queremos gritarlo y nadie te escucha. Hay un montón de aspectos a cambiar para reflejar en el otro. Nos vamos mal acostum‐ brando a cosas.
período un operador terapéutico trabajaba mano a mano con él y con la familia. Hizo su proceso. Se fue focalizando. Reconociendo sus errores. Igual es día a día. Dejó los estudios, pero trabaja con nosotros. Además es deportista, hace ciclismo. Está en pareja y ya no vive en mi casa. Más allá de lo que pasó con tu hijo, tenés que estar firme en tus convicciones para superar la prueba. El grupo te da mucha fortaleza. Aprendimos este programa de Brasil. El brasileño es de por sí cálido, te ama más allá de todo. El abrazo te llena el alma. Lo hemos incorpo‐ rado. Es un trabajo familiar. Todos evolucio‐ namos y vamos mejorando. Ahora disfruto de la paz que no tuve por años, de los
A un adicto "lo importante es darle un abrazo, escucharlo, entenderlo, estar con él" ¿Y cómo fue el proceso de tu hijo? Él escuchaba la palabra internación y salía corriendo. Hizo el cambio cuando tuvo un problema judicial, y cumplió prisión domici‐ liaria en las noches durante 4 meses. En ese 14
pequeños momentos. Me siento en comu‐ nión conmigo, con un ser superior, como cada uno lo conciba. Es darse ese tiempo. Se trata de lograr la serenidad necesaria para aceptar las cosas que no puedo
cambiar. Esa parte es milagrosa. No desme‐ recemos el trabajo de nadie, de psicólogos, de psiquiatras, pero es la vivencia lo que da valor. Siempre tenés algo para aprender del otro. A la gente a veces le falta la parte humana, y de eso queremos recuperarnos, más allá del consumo. Dificultades siempre vamos a tener. Algunas madres me dicen que quieren cambiar a su hijo, que ellas no tienen problemas, y les digo que no es así. Nosotros debemos cambiar. Se tercerizan los problemas y que otros me resuelvan lo que no puedo cambiar. Nosotros le dimos todo, no dejamos que le faltara nada ¿Qué es dar todo? ¿Lo material? Lo importante es darle un abrazo, escucharlo, entenderlo, estar con él. ¿Qué sacás en limpio de todo lo que has hecho en el grupo y con tu vida? Trabajar la espiritualidad genera el creci‐ miento personal en todos. No estamos adheridos a ninguna religión, pero respeta‐ mos todas, al igual que los procesos de los padres, de la familia. Hay que respetar también los tiempos de cada uno. Cuando fui por primera vez al grupo me dijeron que el cambio podía llevarme dos años. Y pensé que estaban locos. A mi hijo le llevó 6 años y, mientras tanto, yo me iba fortaleciendo, fui creciendo y cambiando. El lento proceso que llevó al adicto a ser adicto, no se puede arreglar de una, es el mismo lento proceso para recuperarse. No es fácil. No es de hoy para mañana.
SOÑADOR
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Podrás encontrar instrumentos que te Casa de retiros "Juan XXIII", San José
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30 setiembre al 2 de octubre Contacto e inscripciones: P. Alfonso Bauer sdb alfonsobauer@yahoo.es
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CON NOMBRE Y APELLIDO
Raquelita Correa, colaboradora en “Amor Exigente” y en la "Fazenda de la Esperanza”
En esta vida Dios nos pide algo y lo tenemos que ir descubriendo
Con más de tres décadas de trabajo en diferentes centros educativos de Melo, esta riverense de nacimiento y arachana por adopción, ha sabido encontrar, desde hace algunos años, la satisfac‐ ción de servir a Dios en espacios para los que se sintió llamada especialmente. Lidiar con las fuertes emociones que despiertan las adicciones en los entornos familiares y ayudar a todos los involucrados a seguir adelante, es una tarea para pocos y la misericordia juega un rol principal. Raquelita subyuga a cualquier interlocutor con su solidario corazón, su amor incondicional y su don para escuchar las debilidades que le confían. 16
¿Cómo se dio tu vinculación a espacios como la "Fazenda de la Esperanza”? Me impactó ver a algunos compañeros de mi hija caer a pedazos por las adicciones. Justo en esos momentos venía a Melo la organización "Ser libres” para brindar algunos talleres, y me interesó. Tuve, entonces, la oportunidad de realizar la capacitación y formarme como auxiliar terapéutica. Mi vinculación a la “Fazenda" surgió a través de la llegada de Miguel, que es uno de los referentes de la casa masculina de Cerro Chato. Él nos presentó unos videos y nos invitó a participar. Yo sentí la necesi‐ dad de sumarme. Las primeras reuniones fueron en el Obispado, con Monseñor Heriberto Bodeant, para ver qué cosas podíamos hacer. Nos fuimos preparando para recibir a las chiquilinas que llegarían para abrir una casa femenina de la "Fa‐ zenda". Fue sacrificado, nos reunimos varias veces, preparamos la casa, pedi‐
mos apoyo para que no les faltara nada de lo elemental, de modo que cuando llegaran estuviese todo lo más lindo posible. Eso fue en julio del año pasado, y ya el 22 de agosto se pudo abrir la casa, con 20 muchachas de diferentes nacionalidades. Seguí manteniendo el vínculo con ellas los fines de semana, porque sentía que necesita‐ ban estar acompañadas y que se encontraban cómodas conmigo. Ellas necesitan afecto, compañía, y cuando vas y te reciben de brazos abiertos o te preguntan por qué no habías ido, son las cosas que te dan más ganas para seguir yendo. Después seguimos reu‐ niéndonos en el Obispado, también con ellas en comidas, celebra‐ ciones, que son momentos muy importantes para estar. En esta vida Dios nos pide algo y lo tenemos que ir descubriendo. Por suerte, he contado con personas que caminan a mi lado y me dicen “vos podés, dale” y en eso tengo bien presente al Padre Sergio Álvarez. Luego, cuando hubo que renovar la comisión civil, Monse‐ ñor Bodeant me preguntó si estaba dispuesta a seguir y le dije que sí. El compromiso sigue, y más allá de que integro la comisión civil, yo me siento una voluntaria. ¿Y en el caso de “Amor Exigente”? Cuando en la comisión de padres del Colegio el Padre Sergio nos preguntó qué cosas nos gustaría mejorar en el liceo y en la calidad de vida de nuestros hijos, todos coincidimos en señalar que las 17
Reconocer el problema es lo que más cuesta adicciones estaban invadiendo a la juven‐ tud. Entonces, Sergio se comunicó con Doris y Eduardo de "Amor Exigente". Se armó una gran movida en Melo, un evento que fue en el Teatro España. Yo acompañé, ordené, ambienté, porque me interesaba que estuviera todo lo mejor posible, y cuando finalizó la exposición, volvimos al Salesiano, y había que elegir referentes. Se preguntó quién podía seguir y Sergio dijo: “Raquelita" (risas). Yo no lo sentí como algo impuesto, más bien estaba agradecida de que confiaran en mí. Sergio siempre me
consultaba sobre cómo me sentía, y yo le decía que como un trapecista, mantenien‐ do el equilibrio. Fue realmente algo muy grato trabajar con ellos así como la expe‐ riencia de acompañar a esas familias con sus hijos en situación de adicciones. Y no solo a sus hijos, sino al marido, o a un hermano, porque los adultos también caen en este flagelo. ¿Cuáles crees que son las mayores deman‐ das de las personas que se acercan a la “Fazenda” y a “Amor Exigente”?
En "Amor exigente" conocía a las familias, lo que es bastante complejo, ya que si bien quieren la recuperación, muchas veces les cuesta la aceptación del problema. Es como que quieren tercerizar, señalar que las cosas no surgen por causa de ellos, sino que los chiquilines estuvieron con otros que son los culpables… Reconocer el problema es lo que más cuesta. Acá, en la "Fazenda", reconocer el problema también cuesta. Y a veces también el estar, ya que son cosas diferentes. En "Amor Exigente" teníamos el grupo de apoyo que te daba el espacio para estar, compartir vivencias, y seguir juntos con una misma lectura de las cosas. Pero en la "Fazenda", las chicas vienen de otros países, y estar lejos de su familia les cuesta, nosotros las observamos y sentimos dolor, algunas muy jovencitas han dejado a sus hijos para poder rehabilitarse. Por eso en la “Fazenda" lo que se reclama es mucho amor, y es lo que tratamos de darles, contenerlas, hacerlas sentir que son valio‐ sas, que pueden, que hay que seguir, y siempre marcando la presencia de Dios. ENTRE LA MISERICORDIA Y LA EXIGENCIA ¿Qué papel crees que juega la misericordia en el acompañamiento de esas personas, en ambos ambientes? Creo que es lo máximo, porque si nosotros no tenemos esa capacidad de misericordia hacia el otro, no podríamos. La sensibilidad surge y seguís dándole al otro lo que necesi‐ ta pero, para eso, primero que nada, tienes que estar bien sostenido en tu fe, porque de lo contrario es imposible. ¿Cómo se manejan entre la misericordia y la necesidad de exigir cambios a las perso‐ nas que transitan esos procesos tan delica‐ dos, en ambos grupos? No es sencillo, pero sí se puede. Cuando estás en ese vínculo permanente se les puede ir marcando lo que no deben hacer, lo que estuvo mal, pero sin estar machacan‐ do. Siempre se les dice lo que estuvo mal y
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la necesidad de corregirlo, pero señalando que hay una nueva oportunidad, que se puede seguir. La actitud es de un acompa‐ ñamiento permanente y con mucho cariño… es como se dice, educando con mucho cariño y firmeza. ¿Hubo alguna experiencia en particular en estos dos ambientes que te haya marcado y que siempre tengas presente? En "Amor exigente" recuerdo a una mamá que sospechaba que su hijo consumía, hablaba con él y el chico lo negaba y el marido se enojaba cuando hacía referencia al asunto. En un momento me confesó que estaba destrozada y que se quería autoeli‐ minar. Fue muy difícil, pero Dios me ilumi‐ nó, y pese a lo doloroso de la situación, pude contenerla y acompañarla un buen tiempo. Hoy en día, ella está bien, nos vemos, nos llamamos por teléfono y su hijo cambió de rumbo gracias a Dios. Y en la “Fazenda", me marcó muchísimo el testimonio de una de las chicas, que debió enfrentar situaciones muy difíciles, y tuve la oportunidad de ir conversando, de profun‐ dizar sin indagar, pero compartiendo un mate ir descubriendo poco a poco qué fue lo que le pasó. Esas cosas van saliendo. Agradezco poder recibir sus historias de vida con la sinceridad con que ellas me las transmiten, ya que no es fácil lograr que alguien se abra para decirte sus cosas. ESTAR DE CUERPO Y ALMA ¿Qué condiciones crees que tiene que tener una persona para poder acompañar estos dos tipos de proyectos? Personalmente, considero que tienes que estar muy bien plantado desde lo espiritual, sentir amor por el otro, porque si tú no lo sientes, lo primero que vas a hacer es criticarlo, pero en este caso, es entrega en cuerpo y alma, estar presente e inclusive dejar muchas cosas tuyas para poder ofrecerle al otro lo mejor. Yo creo que esta es la misión que tengo acá, y agradezco a Dios porque me siento una elegida para poder estar en esto.
Creo que esta es la misión que tengo acá, y agradezco a Dios porque me siento una elegida
¿Qué consejo le darías a un padre o una madre que está con alguno de sus hijos en situaciones de adicción? Dar consejos es muy difícil, siempre digo que no doy consejos, sino que comparto momentos de mi vida. Pero a los padres les diría que intenten estar muy cerca de sus hijos, que sepan a dónde van, con quiénes andan, no tanto desde el prohibir sino intentando acompañar. Muchas veces digo que se nos van de las manos porque los tiempos actuales nos han llevado a estas cosas de no acompañar a los hijos, porque les gusta andar solos, porque están grandes... Dejarlos salir, darles libertad pero con control, saber dónde están, con quiénes van, qué cosas hacen. ¿Qué papel consideras que juega la fe en la superación de estos momentos tan difíciles?
Si nosotros no nos aferramos a ese don tan divino que es la fe, creo que es imposible. Tenemos que confiar en alguien que nos va a ayudar y que sabemos que está siempre con nosotros. Si tenemos fe, siempre estamos acompañados. ¿Sentís este servicio como algo vocacional? Sí, totalmente. Al principio me frenaba el miedo, pero a medida que fui teniendo esas oportunidades como las capacitaciones, uno se va sintiendo más preparado. He aprendido mucho, y nunca se deja de aprender, porque van surgiendo cosas nuevas que a veces te modifican lo que piensas. Soy una mujer que siempre intenta estar participando de las capacitaciones, leo mucho, siempre estoy comprando libros, entro en internet para formarme en estos temas y siempre trato de estar actua‐ lizada para poder acompañar mejor.
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Ficha técnica Nombre: Raquelita Correa, 61 años. Nació en Rivera, pero desde los 5 años vive en Melo (actual‐ mente en el barrio Arpí). Familia: Casada, con Eddie Gumersindo Saravia (trabajador independiente), dos hijas, Verónica y María de las Mercedes (ambas viven en Montevideo) y dos nietos. Actividades: Trabaja como educadora hace 31 años. Comenzó en un colegio católico y desde hace 8 años es educadora en el CAIF “Padre Pancho”, de la Obra Social “Picapiedras”. Integra la Asociación Civil que acompaña a la “Fazenda de la Esperanza” Femenina en Melo desde hace más de un año. Fue referente en Melo de “Amor Exigente” durante los dos años y medio que se organizaron reuniones en la capital de Cerro Largo.
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ADMA JÓVENES TE INVITA A UN MOMENTO DE ORACIÓN CON MARÍA
24 DE SETIEMBRE PARROQUIA DE COLÓN 19.30 H 21
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se!
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En Bogotá visitando una casa para chic os de la calle. Obra inspiradora en toda América, fundada por P. Nicoló Salesiano.
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El salesiano uruguayo Martín Lasarte celebró ayer 25 años de sacerdocio con una Eucaristía en la Capilla del Juan XXIII, donde cursó su Bachillerato y sintió el llamado de Dios para ser sacerdote y misionero. Participaron en la Misa, presidida por el prop io Martín, el P. Inspector Néstor Castell, sacerdotes y hermanos sales ianos, familiares cercanos y laicos amigos. También lo acompañó el Cardenal Daniel Sturla.
La guarda del óm nibus que me tom é, saludó a todos los que subimos con una sonrisa y un “bue nos buenas hay que de días”. ¡Las cosas cirlas tmb!
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¡Qué lindo caminar juntas! Gracias, Madre Yvonne por tanta fraternidad
Así estamos con mes de
Don Bosco.
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necesiten tus palabras “Llévame donde los hombres ”. vivir de as gan Necesiten tus
“…Esa es mi revolución: llenar de amor mi sangre, y si reviento, que se esparza en el viento el amor que llevo dentro; esa es mi revolución”.
¡Feliz día de la Asunción de Argentina, Paraguay, Chile María! Con los salesianos religiosos jóvenes de y Uruguay también feste Que Ella siga haciendo jamos a Mamá María. todo en nuestras vidas.
tando el siguiente sistema Sigamos nuestro trabajo adop dejar a la gente que hable…” y bien r “obra : lema y precioso
Algunas del ensayo de hoy. ¡Queda meno s para el estreno de Proyecto Jacinto Vera!
La alegría ha sido llamada “el buen tiempo del corazón”.
“Estén siempre alegres” Hoy pudimos compartir un nuevo encuentro de oratorios de Las Piedra s, celebrando los 201 de Don Bosco .
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LAMIDO POR LOS
PERROS Esta página se refiere a la lectura del Evangelio según San Lucas (16,19‐31) proclamado en la Misa del domingo 25 de setiembre. La parábola del pobre Lázaro contiene una de las escenas más conmovedoras y fuertes de entre las usadas por Jesús para su predi‐ cación: un hombre rico, vestido con la más lujosa ropa “de marca”, que se pasa de fiesta en f i e s t a , dándose una buena vida, mientras que en la puerta de P. Francisco Lezama sdb su casa está tirado un pobre lleno de llagas, que desearía poder comer al menos las sobras que quedan en el plato del adinerado… Esta escena que plantea Jesús nos puede enojar, entristecer, indignar… Difícilmente nos deje indiferentes. Jesús pinta en una sugestiva imagen el drama de todas las sociedades en que los desfavorecidos son dejados a la deriva y el poder del dinero que otorga impunidad a los ricos. El cuadro termina con un detalle que puede, a primera vista, tener visos de morbosidad: “Y hasta los perros iban a lamerle sus heridas”. Debemos notar que, si seguimos la versión original griega de este texto, la traducción literal no sería “y hasta los perros” sino “y, sin embargo, los perros…”. ¿Pero puede este detalle grama‐ tical cambiar algo de la dramática situación? Es posible que sí…
una herida dársela a lamer a un perro (¡niños, no hagan esto en sus casas!).
Aunque para nuestra mentalidad marcada por el higienismo la imagen de perros lamiendo heridas sea un poco repulsiva, es importante leer estas imágenes (como todo en el texto bíblico) en su contexto cultural original. Así, recientes descubrimientos arqueológicos en la zona de Mesopotamia (que tuvo mucha influencia en la cultura de Israel), han traído a la luz que los templos dedicados a los “dioses caninos” eran verdaderas “perreras” que estaban, al mismo tiempo, vinculados con las plegarias por la salud. En el origen, probablemente, esta relación está conectada con la creencia acerca del valor curativo de la saliva de estos animales. Si bien es cierto que se pueden encontrar allí ciertas sustancias que podrían ayudar en algunos procesos de ciertas lesiones, hoy no podemos pensar que sería una buena solución para tratar
Un eco de esta relación entre los perros y la salud lo encontramos en un libro del Antiguo Testamento con evidente influen‐ cia mesopotámica: el Libro de Tobías. Allí surge, como uno de los personajes, un ángel enviado por Dios como compañero de viaje del joven, y que aparece como experto en cuestiones de salud; de hecho su nombre, Rafael, significa justamente “medicina de Dios”. Pues bien, este intere‐ sante personaje tiene a su vez un compañe‐ ro mudo pero elocuente: un fiel perro que va con él durante todo el viaje. Pienso que se abre, entonces, otra interpre‐ tación de la presencia de los perros en torno al pobre Lázaro: aunque él es olvida‐ do por todos, aunque el rico ni siquiera le pase las sobras de sus banquetes, “sin embargo”, los perros lamen sus llagas, y son un signo de que recibe aquí en la tierra un pequeño anticipo de los bienes que disfru‐ tará en la vida futura, cuando, desde el seno de Abraham, contemple plenamente la justicia y la misericordia de Dios que no se olvida nunca de sus preferidos.
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AQUÍ Y AHORA
“MISERICORDIADO” “MISERICORDIAR” Cuando las palabras no alcanzan para definir la misericordia...
el Papa las inventa
La misericordia revoluciona la vida de las personas y en ella se juega el futuro de la humanidad. Así lo hizo saber el Papa Francisco en un sinfín de oportunidades durante este Año Santo de la Misericordia y no tiene reparos en apelar a lo que algunos llaman “bergoglismos” a la hora de comunicar su verdadero alcance. Si bien es desafío para todos, Francisco asegura que la misericordia tiene rostro joven. Pero ¿qué es la misericordia?, ¿en dónde radica su relevancia? y ¿cómo se aplica en la vida de todos los días? 24
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En la Bula de convocatoria al actual Jubileo el Papa explica que la misericordia es “la ley fundamental que habita en el corazón de cada persona cuando mira con ojos since‐ ros al hermano que encuentra en el camino de la vida” y también que es “la vía que une a Dios y al hombre”. En la reciente Jornada Mundial de la Juven‐ tud (JMJ) celebrada en Cracovia, Francisco instó a más de dos millones de jóvenes a lanzarse a la aventura de la misericordia al tiempo que les encomendó cambiar el mundo y enseñarles a los adultos que es más fácil construir puentes que levantar muros. ¿Y cómo se expresa la misericordia? Fran‐ cisco lo explicó así: “Un corazón misericor‐ dioso se anima a salir de su comodidad, sabe ir al encuentro de los demás, logra abrazar a todos. Un corazón misericordioso sabe ser refugio para los que nunca tuvie‐ ron casa o la han perdido, sabe construir hogar y familia para aquellos que han tenido que emigrar, sabe de ternura y compasión. Un corazón misericordioso, sabe compartir el pan con el que tiene hambre, un corazón misericordioso se abre para recibir al prófugo y al emigrante”. Y agregó: “Decir misericordia junto a ustedes, es decir oportunidad, es decir mañana, es decir compromiso, es decir confianza, es decir apertura, hospitalidad, compasión, es decir sueños…”. DISTINTAS MIRADAS DE LA MISERICORDIA Consultado por el BS, el Padre Mario Piag‐ gio sdb, señaló que la misericordia tiene que ver con el aspecto social del ser huma‐ no. “No solo reconozco mi grandeza y mi miseria personal sino que voy experimen‐ tando las de los demás. Entonces constato la benevolencia de otros para conmigo, siento que me aman, por ejemplo, pero también el egoísmo de otros que me han causado daño. Eso es ineludible para todo ser humano”.
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“En mis 86 años de vida, tengo experiencia de mis grandezas y de mis miserias. Hay mucha gente que vive superficialmente sin tomar plena conciencia de lo uno o de lo
otro. El desafío de experimentarlo plena‐ mente es hermoso”, aseguró. El Psicólogo Alejandro De Barbieri, autor de varios libros y director del Centro de Logo‐ terapia y Análisis Existencial, ofreció una
cuando están en la `mala´. Es una acción que nos lleva a poner lo mejor de cada uno para que los demás se sientan tratados de tal forma que puedan sentir que en su vida todavía no se dijo la última palabra. Trata‐ dos de tal manera que el que se sentía
“Un corazón misericordioso se anima a salir de su comodidad, sabe ir al encuentro de los demás, logra abrazar a todos” mirada sobre la misericordia desde el comportamiento humano.
aplastado por el peso de sus pecados, sienta el alivio de una nueva posibilidad”.
Aseveró que en un cristiano implica “gene‐ rar vínculos que permitan hospedar la frustración y el dolor del otro, como el padre que recibe al hijo pródigo, donde yo pueda salir a su encuentro y donde él también me pueda escuchar”. Aunque debiera ser una actitud natural, el Psicólogo reconoce que “como estamos viviendo una era de catarsis, de stress y de impaciencia; nadie tiene tiempo para nadie”.
El Obispo de Roma recordó la palabra del apóstol Pablo en su carta a Timoteo (1 Tm, 1,12‐16a), donde resalta cómo este utiliza la voz pasiva, “fui misericordiado”. “La voz pasiva lo deja a Pablo en situación de receptor de la acción de otro, él no hace nada más que dejarse misericordiar (…) en un momento puntual que recuerda, agradece, festeja”.
Profundizando en el carácter social de la misericordia, De Barbieri aludió a las tres “estructuras trascendentales” del filósofo Martin Heidegger: “El ser humano es un ser siendo, o sea, que estamos siempre en dinamismo. El ser humano es un ser con otros seres, nadie es solo. Y el ser humano es un ser en el mundo. Con esas tres bases se desarrolla el hombre”. “FUI MISERICORDIADO” “Fui misericordiado”, fue una de las “nue‐ vas” expresiones utilizadas por el Papa Francisco en el video mensaje dirigido a los participantes del Jubileo extraordinario de la Misericordia que, del 27 al 30 de agosto, tuvo lugar en Bogotá. En este video mensa‐ je, uno de los más largos que ha hecho Papa Francisco durante su pontificado, dijo con elocuencia que la misericordia “lejos de ser una idea, un deseo, una teoría – e inclusive una ideología –… es una forma concreta de `tocar´ la fragilidad, de vincularnos con los otros, de acercarnos entre nosotros. Es una forma concreta de encarar a las personas
Julio Estefan es un ejemplo de quien vivió en carne propia la experiencia de ser “mise‐ ricordiado”. Tiene 40 años, esposa y tres hijos. Nació y se crió en el barrio Lavalleja, donde fue de los primeros gurises del ya extinto Oratorio San Andrés y pasó al Centro Juvenil del Movimiento Tacurú una vez establecido en la calle Poncini. Allí se desarrolló buena parte de su historia vital, primero armando lapiceras, luego en recolección y barrido. Nada fue fácil para quien vivía en un barrio de contexto vulnerable donde “había de todo: alcohol, drogas, revólveres”. “Algunos elegimos arrimarnos al Centro Juvenil y estar con los gurises. Otros tomaron diferentes caminos porque más allá de esta oportunidad, así lo quisieron”, describió. Estefan, que durante aquella época vivió varias dificultades, reconoció cómo la experiencia de recibir la misericordia de los seminaristas que lo acompañaban cambió su camino. “Si no hubiera tenido esa expe‐ riencia con los salesianos estaría preso o
nuestras manos. Palpitar el corazón y urgencia a nuestras manos. El camino que va del corazón a las manos”. Se puede decir que el tiempo donado también cambió la vida de Daniel Cerezo. De niño se fue a vivir con su familia a Buenos Aires, donde recalaron en una “villa”. Apasionado por la música tropical, comenzó a ir a clases de piano en la funda‐ ción “Crear vale la pena”, donde una vez por semana, una profesora de música enseña‐ ba a chicos que no podían pagar un curso. Aquel encuentro semanal cambiaría su vida. muerto. Si no me hubiese arrimado sería totalmente otra persona”, aseguró. El actual canchero del complejo deportivo del Instituto Juan XXIII en Melilla, también admite que el amor de su familia ha cambia‐ do su personalidad. “El carácter mío no era el mismo que ahora, mi mujer es más tranquila. Además, los hijos también te enseñan cómo tenés que ser y que hay cosas que no podés hacer. Si vos te ponés 'loco', tus hijos van a mamar todo eso y se van a poner igual”, sostuvo. MISERICORDIA: “UN CAMINO QUE VA DEL CORAZÓN A LAS MANOS” Dirigiéndose a los Pastores, en el referido video mensaje, el Papa los instó a relacio‐ narse desde una acción no basada en el miedo sino en la esperanza que “Dios tiene en nuestra transformación”.“Una acción basada en el miedo lo único que consigue es separar, dividir, querer distinguir con precisión quirúrgica un lado del otro, cons‐ truir falsas seguridades, por lo tanto, cons‐ truir encierros”, explicó Francisco. En contrapartida, “una acción basada en la esperanza de transformación, en la conver‐ sión, impulsa, estimula, apunta al mañana, genera espacios de oportunidad, empuja”, expresó. Y puntualizó: “Una acción basada en el miedo … pone el acento en la culpa, en el castigo, en el `te equivocaste´. Una acción basada en la esperanza de transformación pone el acento en la confianza, en el apren‐ der, en levantarse; en buscar siempre generar nuevas oportunidades. ¿Cuántas
veces? 70 veces 7.” En este mismo sentido, De Barbieri señaló que “la presencia de un 'maestro' que cree en ti, que te respeta pero te marca el límite y te exige sanamente; logra sacar lo mejor de vos y no te olvidás más de eso. Cada uno de nosotros es importantísimo para poder donar nuestro tiempo que es donar nuestra vida”. Francisco recordó que la misericordia cambia la vida del “misericordiado” tanto
Años después pasó a ser profesor en la institución mencionada, como comenta en una conferencia TEDx Río de la Plata. “Allí dábamos clases a jóvenes, a los más princi‐ piantes. Entonces pasé de ser el pibe que se juntaba en la esquina a mandarse macanas a ser el profesor del barrio”. Después de participar de muchos proyectos en distintas organizaciones sociales, fue superando “la pobreza cultural, la del prejuicio y de la dignidad”. Hoy trabaja como Gerente de Felicidad y Cultura en una
“En mis 86 años de vida, tengo experiencia de mis grandezas y de mis miserias” como la del misericordioso y su puesta en práctica es un desafío para la creatividad y el ingenio. Dijo el Papa: “el trato de misericordia despierta siempre la creatividad. Pone el acento en el rostro de la persona, en su vida, en su historia, en su cotidianidad. No se casa con un modelo o con una receta, sino que posee la sana libertad de espíritu de buscar lo mejor para el otro, en la manera que esta persona pueda comprenderlo. Y esto pone en marcha todas nuestras capaci‐ dades, todos nuestros ingenios, esto nos hace salir de nuestros encierros. Nunca es vana palabrería – al decir de Pablo – que nos enreda en disputas interminables, la acción basada en la esperanza de transformación es una inteligencia inquieta que hace palpitar el corazón y le pone urgencia a
empresa de zapatillas y fue convocado por el gobierno de Mauricio Macri para aseso‐ rar en temas de felicidad. “A L Z H E I M E R E S P I R I T UA L” E N LO COTIDIANO La misericordia es “una gracia que día a día somos invitados a aprender”, planteó el Papa en el video mensaje y advirtió que “cuando nos olvidamos cómo el Señor nos ha tratado, cuando comenzamos a juzgar y a dividir la sociedad”, llegamos al Alzheimer espiritual. “Nos invade una lógica separatis‐ ta que sin darnos cuenta nos lleva a fractu‐ rar más nuestra realidad social y comunita‐ ria”. La modernidad y el ritmo vertiginoso de la vida son obstáculos para levantar la mirada
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“MAS ALLÁ DE LA FALTA ESTÁ LA IMPORTANCIA DEL PERDÓN” Unos de los gestos más peculiares de Francisco para el actual Jubileo, fue nombrar a unos mil sacerdotes de todo el mundo como “Misioneros de la Misericordia”. Entre ellos, a los presbíteros uruguayos Ernesto Diano y Hebert Pochelú. Diano comentó al Boletín Salesiano cómo vive este rol especial que le otorgó el Santo Padre. “Un día me llegó una carta de la Santa Sede y no tenía la más pálida idea de qué se trataba. El hecho de haber podido ir a Roma, de estar allí escuchando una charlita que nos daba el Papa que estaba ahí cerquita... fue un regalo de Dios y de la Iglesia”.
y descubrir a Dios en otras personas. El Padre Ernesto Diano, nombrado por el Pontífice como “Misionero de la Misericor‐ dia”, explicó que una de estas barreras es el individualismo. “La gente a veces pasa de largo ante situa‐ ciones dolorosas. Nuestra sociedad y el mundo viven esa experiencia del 'no te metás', 'no me importa' o 'no tengo nada que ver'. Desde la fe cristiana, nuestra obligación es parar en el camino y socorrer, esa es la insistencia de Jesús”, afirmó.
Además, el P. Diano resumió los frutos de este Año Santo. “Ha dado ocasión a que mucha gente que estaba alejada haya vuelto. Porque tal vez tenían un nudo, sentían que no podían acercarse al sacramento de la Reconciliación y esto abrió una puerta. La intención del Papa es que nadie se sienta excluido, que más allá de la falta está la importancia del perdón”.
después!'. Ya estoy tan dolido con el proble‐ ma de mi hija y con las dificultades en el trabajo, que no es que sea antipático, es que no puedo ingresar algo más. Esa es la fragilidad del mundo en que vivimos hoy”, argumentó el psicólogo.
“Si hay algo que los cristianos tenemos que transmitirle a la gente, es la alegría y la esperanza. Ahí es donde uno ve que la misericordia puede tener un lugar sino nos dejamos ganar por el cansancio, la apatía y la indiferencia”, acotó.
LA MISERICORDIA TIENE ROSTRO JOVEN “El mundo hoy los mira y quiere aprender de ustedes, para renovar su confianza en que la Misericordia del Padre tiene rostro siempre joven y no deja de invitarnos a ser parte de su Reino, que es un Reino de alegría, es un Reino siempre de felicidad, es un Reino que siempre nos lleva adelante, es un Reino capaz de darnos la fuerza de cambiar las cosa”, les dijo el Papa a los jóvenes en Cracovia. Los planteó, asimismo, el desafío de hacer surgir “una humanidad diferente” asumiendo la mirada misericor‐ diosa de Jesús, que “va más allá de los defectos para ver a la persona; no se detie‐ ne en el mal del pasado, sino que divisa el bien en el futuro; no se resigna frente a la cerrazón, sino que busca el camino de la unidad y de la comunión; en medio de todos, no se detiene en las apariencias, sino que mira al corazón. Jesús mira nuestro corazón, tu corazón, mi corazón”.
Pero el exalumno del Colegio María Auxilia‐ dora de Lascano, también señaló que el individualismo tiene que ver con la fragili‐ dad del adulto y planteó una situación para explicarlo. “En el ómnibus o en el trabajo un compañero me dice 'te quiero contar algo'. Y mi respuesta es '¡esperá, me lo contás
Julieta Adano, animadora salesiana de Paysandú, que participó en la JMJ, comentó que con su experiencia también es capaz de iluminar a otras personas. “La gente viene y te pregunta '¿qué pasó?', '¿cómo estuvo?'. Todo el mundo quiere escucharte, te dan la oportunidad de abrirte a contarles lo que
De Barbieri también apuntó en esa direc‐ ción.“Estamos tan metidos en nosotros mismos que no podemos parar a ver lo que le pasó al otro. Siempre digo en las charlas, que hoy en día, con poco se hace mucho: '¿Cómo andas? ¿Cómo te fue? ¡Gracias por venir!'. Con un poco de cariño se nos llena el alma”.
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“Tenemos la facultad de perdonar pecados que son reserva‐ dos a la Santa Sede. Pero no son tantos, en definitiva. En cambio, el ejercicio del Sacramento de la Confesión, lo hemos vivido de una manera especial”, comentó sobre las tareas particulares de estos sacerdotes.
viviste y eso es como inspirar a otros que no tuvieron la oportunidad de ir”, comentó. Además, reveló cómo esa mirada compasi‐ va que propone el Papa la vive en el seno de su familia. “Algo tangible que me gusta que hagan por mí son los abrazos. Me acuerdo de un momento puntual en que yo sabía que mi mamá estaba mal, entonces fui y la abracé. Nos quedamos un rato abrazadas y fue reconfortante, ninguna de las dos decía nada pero sabíamos el amor que había allí”. La joven compartió una de las enseñanzas que le dejó Cracovia. “Hay una frase que dijo el Papa, que cuando la escuché la repetí para mí misma, porque fue bastante fuerte. 'Si no vivís para servir, no servís para vivir' ¡Qué fuerte decirle eso a alguien! En mi caso, vivir para la fe es servir, entonces esa frase me marcó bastante”. El Papa se fue de Cracovia y los jóvenes también, pero les dejó una invitación que hizo extensiva a todos: “Ese es el secreto, queridos amigos, que todos estamos llama‐ dos a experimentar. Dios espera algo de ti, ¿Han entendido? Dios quiere algo de ti. Dios te espera a ti. Dios viene a romper nuestras clausuras, viene a abrir las puertas de nuestras vidas, de nuestras visiones, de nuestras miradas. Dios viene a abrir todo aquello que te encierra. Te está invitando a soñar, te quiere hacer ver que el mundo con vos puede ser distinto. Eso sí, si vos no ponés lo mejor de vos, el mundo no será distinto. Es un desafío”.
SABOR A BUENAS NOCHES
UN SILENCIO LLENO
DE MISERICORDIA Aquí les voy a contar una rica experiencia que me ha compartido un gran amigo de las misiones rurales. Una vez, me encontraba de misión con un grupo de jóvenes, en uno de los recónditos lugares de la campaña de nuestro país, que pocos saben que existe, y que forma parte del bien llamado “Uruguay profundo”. Lo fundamental en esos días son las visitas a familias o personas de edad que viven en la inmensa soledad, hambrientas de contar con alguien para charlar y sentirse tenidas en cuenta, de ser visitadas por un rato, conversando de lo que salga en el momen‐ to, como así también de hacer del encuen‐ tro una oración. Una tardecita, mientras los jóvenes misio‐ neros se duchaban, me di una disparada a un lugar que hacía tiempo deseaba visitar y al que por varias razones nunca habíamos llegado. Por los misteriosos comentarios de la gente, todos sabíamos quién vivía allí. Entre nosotros le llamábamos “el innom‐ brable”. Cada vez que se hablaba de él así era como hacer desaparecer su nombre, su identidad, a tal punto que parecía que nos referíamos a un fantasma. Visitar a esta persona era mi objetivo. Al llegar al lugar donde podría ser su casa, me salieron ladrando un par de galgos resecos, como presagio de no ser muy bienvenido. Se callaron de súbito, obede‐ ciendo al grito del dueño desde el interior del rancho. Me acerqué a la vieja portera, donde el nido de hornero que una vez habitaba sobre ella yacía medio desgrana‐ do por la lluvia y el viento. Me pareció extraño que el hombre no saliera a recibirme, pero igual me metí patio adentro entre los altos matorrales hasta llegar a la puerta de la casa. Me sentía como estar entrando a una vieja tapera. Allí estaba un paisano rudo y solo, famoso por su “malura”, ex convicto de haber matado a un amigo por discusiones intrascendentes,
en una gran borrachera en el boliche de la zona. Los 15 años de cárcel que purgó, que además lo separaron de su pareja, no bastaron para atenuar su mala fama, y en ese momento vivía en la triste soledad.
precisar cuánto tiempo pasó, no fue poco, no importa, sé que fue bastante, suficiente. Lo seguro, que los dos llega‐ mos a lo profundo de nuestro ser, a reconocernos en nuestra intimidad. Hasta P. Adrián García sdb que en un alcance de mate, levantó bien la cabeza, yo también y Sin muchas palabras me saludó, me hizo pasar a la cocina donde estaba mateando y nuestras miradas se toparon, un par de ofreciéndome asiento en un banquito de lágrimas corrían por sus mejillas y me dijo: ceibo frente a un fueguito matrero, “¡Qué lo parió!” y le dije: “¡Qué lo parió!”. compartió el mate en un ida y vuelta. Sabía a qué iba, le gustó que fuera solo e intuía Fueron nuestras únicas palabras hasta la que sabía su pena y preocupación. Sus ojos despedida con un abrazo. Los dos, él y yo, clavados en el suelo, solo se movían para yo y él, nos habíamos encontrado con Dios. Misioné sin hablar, sin escuchar, sin progra‐ recibir o alcanzar el mate. mar, pero ¡qué hondo! Una vez más el Yo opté por no hablar. Él lo mismo. Y así Señor se me apareció sorprendiéndome pasamos un buen rato, donde el ruido era con su sencilla misericordia, de la forma solo de la bombilla cuando terminaba el más insólita. mate. El silencio era total, pero no molesta‐ ba ni generaba incomodidad, era como si lo hubiésemos pactado, de hecho nos estába‐ mos hablando de alma a alma. No sabría
SINTONIZANDO CON DON BOSCO
Sor Yvonne Reoungoat Superiora General de las FMA
MISERICORDIOSOS COMO EL PADRE… Queridos amigos de Uruguay: La misericordia es el criterio de credibilidad de todo cristiano. En cuanto hijos de Dios, llevamos grabada en nuestra humanidad la imagen y la semejanza con Él. La misericor‐ dia nos caracteriza en lo más íntimo. Nues‐ tro compromiso consiste en encontrar el aspecto más profundo que hace nuestro rostro semejante al suyo. La misericordia, la palabra‐clave para comprender la acción de Dios, también es clave para identificar a los hijos de Dios. Como el Padre ama, así somos llamados a amar nosotros, acogiendo, en plena dispo‐ sición, los sacrificios que este amor exige, incluso hasta el martirio. El año pasado, en su viaje a Cuba, el Papa Francisco, nos dijo que la misericordia, más que un esfuerzo, es una necesidad imperio‐ sa porque participa de la misma misericor‐ dia de Cristo Jesús. Él "ve siempre lo más auténtico que vive cada persona, que es precisamente la imagen del Padre". El Papa insiste en que la misericordia genera la misión y servicio, como le ha ocurrido a Mateo: “El encuentro con Jesús, con su
amor misericordioso, lo ha transformado... Jesús lo miró y Mateo encontró la alegría del servicio...”. La mirada de Jesús lleva a compartir "su ternura y la misericordia con los enfermos, los encarcelados, los ancia‐ nos y las familias en dificultad" (Homilía en Plaza de Holguín, 21 de septiembre de 2015). Estas expresiones han entrado profunda‐ mente en mi corazón; me han interpelado y he pensado en nuestros fundadores que realizaron, con pasión y espíritu evangélico, lo que el Papa Francisco subraya con convicción. Don Bosco y Madre Mazzarello han sido capaces de tejer con habilidad y armonía misericordia‐ternura‐amorevolezza. ¡Qué alegría he sentido adentrándome en esta realidad! Alegría que deseo compartir con ustedes para, juntos, dar gracias al Señor por el carisma salesiano, don siempre presente en todas las culturas. Ellos han sido "palabra creíble" de miseri‐ cordia en el sentido pleno del término: entregaron hasta la última fibra de su corazón a los más pequeños, los últimos, los más débiles, los jóvenes pobres. Entendie‐ ron y vivieron la misericordia en su sentido
DE OTROS LARES JMJ: La casulla fabricada con mate‐ rial reciclado Durante la JMJ de Cracovia, el Papa Francisco recibió una casulla fabricada con retazos y telas reutilizadas por un grupo de jovencitas iraquíes que huyeron del Estado Islámico, refugiadas en Jordania. Una vez en Amman, con apoyo de un párroco, recibieron capacitación en el centro para refugiados de las FMA y fabricaron una casulla que enviaron al Pontífice. “Habríamos querido participar en la JMJ, pero como refugiadas no podemos salir de Jordania. Le pedimos que rece por nuestro pueblo y por nosotras, que somos sus hijas”, escribieron en su carta al Santo Padre. 30
etimológico: miseris‐cor‐dare, "dar el corazón a los pobres", a los jóvenes pobres y abandonados. El proyecto de Don Bosco está lleno de amor y de misericordia porque educa a los jóvenes, formándolos en la alegría y en la 'amorevolezza', en la bondad y en la respon‐ sabilidad hacia la vida. El mensaje de la foto de Don Bosco mientras confiesa rodeado de muchachos es significativa: el apóstol de la confesión para los jóvenes, el apóstol de la misericordia de Dios, del perdón y de la esperanza. Por su parte, María Mazzarello, desde joven, ya expresaba la misericordia de modo muy significativo: cuidar a las chicas. En los comienzos del Instituto, Don Bosco reforzó esta misión: "Hagan todo el bien que puedan". La compasión y la misericordia tienen carácter de urgencia. Los pobres no pueden esperar, tienen prioridad. Pidamos a la Auxiliadora que nos dé un espíritu atento y dispuesto a obrar, movidos por el amor misericordioso de Dios.
SEPSUR: Pastoral Salesiana para el compromiso El Secretariado de Pastoral del Sur (SEPSUR), formado por los delega‐ dos SDB y FMA de Pastoral Juvenil de Argenti‐ na, Chile, Paraguay y Uruguay, se reúne cuatrimestralmente. Cada año el segundo encuentro consiste en un taller con participa‐ ción de laicos jóvenes y adultos, que esta vez se celebró en Buenos Aires. Durante el trienio 2013‐2015 el SEPSUR reflexionó sobre el tema “Significatividad evangélica de la actual praxis pastoral – Revisión de enfoques y metodologías desde una perspectiva socio‐ política y carismática”, en torno a diferentes núcleos: política, partici‐ pación, ciudadanía, religión y espiritualidad, entre otros. Los frutos se verán en una publicación que estará al alcance de los educadores salesianos.
DEL ÁRBOL SALESIANO
TALLERES VS. CASOS PERDIDOS Una propuesta para que no bajen los brazos Iniciación Profesional (IP) es un proyecto de Talleres Don Bosco, destinado a jóvenes entre 14 y 20 años que abandonaron el sistema formal de enseñanza, con una propuesta integral orientada hacia un oficio. La experiencia comenzó en 2003 y actualmente tiene 105 alumnos, en su gran mayoría varones. Es una propuesta de dos años de duración, de lunes a viernes durante la tarde, con cursos de Carpintería, Mecánica Automotriz y Motos. La mayor parte transcurre en el taller, pero hay alguna materia más teórica para comprender mejor el oficio y dar otras herramientas para un futuro laboral. Al concluir permite acceder al programa Rumbo y con un año más, acreditar la Educación Media Básica. Los jóvenes se acercan de diversas maneras: búsque‐ da por internet, algún aviso publicitario, participa‐ ción en charlas informativas, pero la gran mayoría viene por el boca a boca, gracias a la trayectoria de Talleres Don Bosco. Desde un tiempo atrás llegan jóvenes derivados por alguna ONG y la última “alian‐ za” ha sido con Centros Juveniles salesianos. Así, la propuesta es singular por la procedencia de los muchachos: vienen de toda la zona metropolitana e incluso de alguna localidad del interior. La posibilidad de salir del propio ambiente los enriquece, pues permite conocer otras realidades y a otros jóvenes, ampliando el horizonte.
algunos compañeros y les tengo que decir 'misil'”, dice Gonzalo, alumno de 1º, en el patio. Y el interés por la persona no es solo conocer el nombre, sino saber qué le pasa, cuáles son sus fortalezas y debilidades. “Yo no sé cómo hacen… pero cuando estás mal se dan cuenta”, comenta Gastón, un alumno de 2º de Mecánica.
Llegan con diversas situaciones familiares, con distinto nivel acadé‐ mico y con algunas dificultades: malos hábitos adquiridos (deser‐ ción ante los obstáculos, muchas inasistencias, poco estudio), problemas disciplinarios, de integración, de aprendizaje, con poco apoyo y desmotivación… Muchos portan la mochila del “no me sale”, “del no puedo”, u otras etiquetas que es necesario trabajar. Frente a esto es muy fácil bloquearse y desesperanzarse.
La clave está en el patio: el lugar de encuentro, de amistad y alegría. Jugar con ellos al ping pong, fútbol, futbolito, tejo y la charla son un diferencial que valoran apenas entran. Ahí pueden compartir sin “perseguirse” en qué les puede pasar. Y el momento que conjuga todos estos aspectos es TARDE BOSCO, un típico oratorio salesiano, ¡obligatorio! Momento de juegos, Buenas Tardes e instancias de grupo de los de 1º integrados con los de 2º en talleres temáticos (prevención de adicciones, proyecto de vida, autovaloración, convivencia, sexualidad). Recientemente agregaron la merienda. Lo novedoso de este espacio es la inclusión de este patio salesiano (teóricamente libre) en la propuesta curricular obligatoria de IP, con evaluación personalizada sobre la participación.
En la IP de Talleres, más que una propuesta de solo capacitación técnica, encuentran un lugar donde redescubrir sus fortalezas, sus deseos de superarse y dar pasos en una nueva oportunidad. La presencia de educadores con clara vocación, y que en el 90 % son exalumnos salesianos, convierten el enorme edificio de Talleres Don Bosco en una “casa”, con un ambiente de familiaridad que genera confianza, basada en el buen trato, en el respeto y el afecto.
IP también es un lugar en dónde crecer en una dimensión trascen‐ dente. Aunque muchos de ellos desconfían de lo religioso y están un tanto descreídos, luego de generar vínculos auténticos, abren sus corazones y aceptan compartir la Buena Nueva de manera significativa. Convivalores, campamentos y fiestas de Don Bosco o María son actividades que promueven esos encuentros consigo mismos y con Dios.
Este compromiso y dedicación del equipo docente es un elemento clave, y se basa en la personalización. “¿Cómo hacés para acordarte de los nombres de todos? Yo no me acuerdo cómo se llaman
Sin lugar a dudas, para muchos, IP es una oportunidad de reencon‐ trarse con el hecho educativo, con sus posibilidades, con el “sí, puedo” y poner algunos mojones en la concreción de sus sueños.
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PUZZLE
DE LA VIVENCIA A LA EXPERIENCIA Video: ¿Quieres ser feliz? Sé agradecido Hace tiempo que muchos escuchamos y decimos en los espacios del MJS que queremos “Acompañar a los jóvenes para que descubran y construyan sentidos en la vida”. Este es el objetivo del MJS del Uruguay desde el año 2013 y seguirá vigente hasta 2018. El objetivo supone una tarea apasionante y que, al mismo tiempo, nos desafía constantemen‐ te. Luego de cuatro años de transitar tras este come‐ tido, la reflexión pastoral ha ido encontrando claves diferentes y complementa‐ rias que, al confluir en la vida del joven, permiten caminar en la búsqueda y construcción de sentidos. Quiero en este artículo compartir una de ellas, la clave de lo experiencial. Más que de una condición externa, una propuesta o un evento, se trata de una habilidad, una competen‐ cia que el joven necesita despertar y favorecer, para poder entrar en una dinámica que le permita resignificar la propia vida. LO EXPERIENCIAL “Lo experiencial” supone un cambio de posición en la vida, de paradigma. Implica una nueva perspectiva y un nuevo modo de ver el mundo, la realidad, lo que nos acontece. Para transitar de la vivencia a la experiencia es necesario adoptar un modo integrador y unificante de lo que vivimos. 32
Partimos de la unidad básica de vivencia de
una persona, la que se transforma en “experiencia”. La vivencia es el encuentro entre el sujeto y lo que le acontece, lo que le pasa y no necesariamente se percibe como experiencia. En sí misma contiene todo lo que nos sucede, dándose en todas las dimensiones de la persona a la vez: física, psicológica, social, espiritual, cognitiva,
interpretar que es una fragmentación de la percepción o de la conciencia de lo vivido sino que, al contrario, cada dimensión completa e integra lo propio a una conciencia totalizadora y unificante. Esa es la función de la conciencia, percibir unificadamente los diferentes matices que atañen a cada dimensión.
moral, etc. es decir, cada vivencia toca todas nuestras dimensiones de algún modo. Es así que, todo lo que vivimos tiene la potenciali‐ dad de percibirse como experiencia si realizamos este ejercicio de dejarnos implicar en todas nuestras dimensiones personales, en cada situación. En lo experiencial todas esas dimensiones se explicitan, se hacen conscientes, y se favorece en el hombre un darse cuenta de lo vivido. Pero cuidado, no porque se trate de una experiencia donde participan todas las dimensiones de la persona debemos
Las metodologías que nos ayudan a la resignificación de la vida cotidiana, buscan ofrecernos caminos para entrar en esta nueva perspectiva de la vida. No son simplemente una metodología para animar, ni recetas, sino métodos para hacernos entrar en una dinámica existencial diferente que implica entrenar y despertar: los ojos del cuerpo: son los ojos de las percepciones sensibles; nos permiten sentir o darnos cuenta de lo vivido por medio de lo visual, estético, artístico, todo
sensible, pero también nos hacen percibir por medio de las emociones. los ojos de la mente: inteligible; inteligir o darse cuenta con las capacidades intelectuales superiores, percibimos conociendo, aprendiendo. los ojos del espíritu: que nos hacen contemplar; es darse cuenta con las capacidades espirituales. Nos ayudan a percibir confiadamente, mirar la realidad impregnada de Dios, nos abren a la esperanza. Se trata entonces de una nueva perspectiva de la vida que se vuelve metodología con los demás, en la que es necesario PARAR, MIRAR Y SEGUIR para favorecer la comprensión de lo que está pasando y la confianza en la Buena Noticia que nos impulsa. Ahora bien, esto no es automático, supone entrenamiento, ir adquiriendo la capacidad de percibir lo vivido unificadamente sin excluir ninguna dimensión. En esta tarea de pasar de lo vivencial a lo experiencial, se hace central el encuentro con el otro. Otro hombre a quien comunicar la experiencia y así darse cuenta de quién es y está siendo, de hacia dónde está yendo, y qué sentido tiene lo que está viviendo. El poder decirse en el encuentro con el otro, tiene la fuerza de ayudarnos a percibirnos íntegramente. Además de que el encuentro es intercam‐ bio, el otro también me dice a mí mismo, me ayuda a objetivarme y tener una comprensión más acabada de mí mismo. Lo experiencial, en este sentido, es para decir, narrar, comprender, mostrar, visualizar, simbolizar, trascender, y no solo para explicar o conceptualizar. RESIGNIFICAR Asumir una existencia que entra en la dinámica de lo experiencial implica la transformación de la propia vida, la resignificación de las vivencias y de la propia existencia, descubriendo nuevos sentidos en la vida. De la reinterpretación al nuevo sentido… La experiencia me lleva a que emerja una realidad a la que me puedo aproximar, que puedo mirar. Necesito decirla, narrarla,
describirla lo más integralmente p o s i b l e , to m a r d i sta n c i a , reconocerla, pensarla, repensarla. Este proceso es el que abre la puerta a poder resignificar: reinterpretar y dar un nuevo sentido. Es tomar contacto con una verdad o realidad que hasta ese momento había permanecido presente pero escondida y probablemente inactiva en nuestra vida. Este proceso tiene como mecánica un irrumpir del pasado en el presente y viceversa. Es ir conociendo más quién soy, desde mi historia, desde todo lo que fui; desde los personajes internos, los que yo fui y lo que los otros son o fueron para mí. Es ir construyendo una relación consigo y con otros. Es ir identificando los lugares, personas, historias, sabores, memorias, que me son significativas, constitutivas, para ir reordenando y reinterpretando en el presente. La resignificación supone realizar cambios en la situación personal, en la conducta, en las relaciones, en las formas de interpretar la experiencia, de modo que sea oportuni‐ dad para el crecimiento, el aprendizaje, y así vislumbrar nuevos rumbos. En esta reflexión es fundamental que podamos comprender que estamos viviendo animados por el Espíritu. Se trata de mi vida, en la historia animada por el Espíritu. Por lo tanto, necesitamos discernir el presente inmediato a la luz del presente eterno. Adherir a la expansión del Reino, resignificando nuestras experiencias personales y colectivas, siendo contempla‐ tivos de la comunión. Resignificar apunta a que lo que cada uno está viviendo sea de tal modo contemplado que podamos comprender que lo que está ocurriendo exige parar, mirar, seguir. Y pasa por descubrir a un Dios que comparte y hace camino con nosotros. Es un modo de asumir la vida espiritual y los propios procesos. Un modo de estar parado en la realidad y hacer que vayamos encantándo‐ nos con la propia vida.
Necesitamos estar atentos a los modos que tenemos de mirar y que, por lo tanto, debemos revisar. ¿Cuál es la pregunta que nos hacemos para mirar la realidad del otro? ¿Qué le pasa al otro? ¿Qué está viviendo? ¿Cómo está viviendo? Preguntar provoca la manifestación de sí mismo del otro. ¿Desde dónde miramos esa realidad? ¿Cómo intervienen nuestras propias realidades en el modo de percibir al otro? Desde nuestra experiencia, nuestra realidad, nuestros modos de interpretar. Desde lo implícito. Desde lo que me despierta el otro, la empatía. Nuestras experiencias funcionan elaborando modelos de interpretación y de percepción del otro. Intervienen el campo emocional, si me sensibiliza lo que el otro me dice, me involucra totalmente cognitiva y emotiva‐ mente. Quiero finalizar el artículo poniendo de relieve una constatación existencial que se ha formulado en varias ocasiones, con razón, de los cursos sobre formación experiencial dictados en el Instituto Salesiano de Formación (ISF): El hombre está en búsqueda de significados y de otros seres humanos que le ayuden a ser él mismo.
Link de la aplicación: www.youtube.com/ watch?v=UtBsl3j0YRQ P. Sebastián Ferreyra sdb
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“BOSCO Entre los muchos desafíos que hoy atraviesa la tarea pastoral, uno de ellos supone ofrecer en cada ocasión propuestas atractivas y actualizadas para las distintas actividades y celebraciones. En la Fiesta de Don Bosco, los animadores del Colegio Maturana propusie‐ ron a los alumnos un nuevo juego: “Bosco Go”, inspirado en la aplicación del Pokémon Go pero con personajes de la Familia Salesiana. Para los que no estamos tan informados, se trata de una aplicación que permite “capturar ” a algunos santos de la Congregación Salesiana como: Don Bosco, Madre Mazzarello, Laura Vicuña, Domingo Savio y el beato Ceferino Namuncurá.
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Les comparto algunos de los comentarios de Ignacio Villagrán (Nacho) de Maturana que participó como técnico en la idea: “Me dije: `debe haber algo ya hecho que sea fácil de adaptar´. Y buscando me encontré con una plataforma que ya hacia un par de años que andaba en la vuelta. La plataforma estaba pensada para hacer cacerías tipo búsqueda del tesoro, pero con el furor de Pokémon Go le agregaron la posibilidad de tirar `bolas´ para capturar los personajes que uno quiera subir. Me pareció muy interesante y me puse a probarla para ver de qué se trataba. Encontré que era bastante sencillo adaptarlo a lo que queríamos y, luego de varias idas y venidas, y una buena cantidad de pruebas, quedó algo muy bueno para jugar.”
podrá jugar también en ese país. Como es de esperar, hubo algunos inconvenientes, pero no opacaron la fiesta ni el funcionamiento del juego: “Tuvimos algunos inconvenientes y problemitas tecnológicos al querer instalarlo en tantos celulares al mismo tiempo, pero por suerte se superaron y un rato más tarde pudimos jugar.” Luego de algunas pruebas, finalmente la aplicación quedó disponible para encontrar los 24 personajes del juego y resultó ser la gran atracción de la fiesta de Don Bosco. “Sinceramente yo pensaba que a los jóvenes les iba a gustar, pero nunca esperé que se prendieron tanto, hubo grupos encarnizados jugándolo, jóvenes corriendo por todo el colegio. ¡Y lo mejor fue que varios grupos encontraron los 24 personajes escondidos que había! A mí me parecía que se iban a aburrir, ¡pero no! Incluso, días después alguno más lo bajaba y jugaba”. Por el momento los personajes se encuentran solamente en los alrededores del Colegio Maturana (Bulevar Artigas y Av. Agraciada) pero quienes deseen jugar podrán hacerlo buscando la aplicación ojoo y dentro de la misma Bosco Go. La aplicación está disponible para Android y IOs. Nacho está trabajando para extenderlo a otros entornos fuera del colegio, el resto del país y particularmente el resto de los colegios salesianos. Fue también contactado por una Inspectoría Salesiana de Brasil que tienen intenciones de implemen‐ tarlo, así que seguramente en poco tiempo se
Se trata de un juego que ha producido un gran impacto, aprovechando todo lo que ha despertado la aplicación Pokémon Go. Es un juego pero, además, una herramienta para conocer más de la vida de Don Bosco y los santos salesianos. El objetivo del juego es conocer más de ellos en una forma lúdica, y de una forma atrayente para los jóvenes. Para los que no conocemos la dinámica del juego se trata de "capturar" a Don Bosco y sus amigos. Uno busca a distintos personajes que están escondidos, cuando los encuentra debe apuntarles con la cámara del celular, allí se muestra el personaje en el entorno como es clásico en un juego de realidad aumentada, y se debe capturar tirándole una bola. Es interesante hacer notar que además de la búsqueda y captura de los personajes, una vez capturado se muestra información y datos biográficos sobre el santo. Por el momento los santos utilizados en el juego son: Don Bosco, Madre Mazzarello, Domingo Savio, Laura Vicuña, el Beato Ceferino Namuncurá y Mamá Margarita. Seguiremos atentos a ver cómo continúa esta iniciativa para seguir festejando, disfrutando y aprendiendo sobre nuestro padre Don Bosco. Nacho está a disposición de aquellos que quieran asesorarse un poco más. Agradezco la colaboración y la información cedida por Nacho y Adriana Porteiro para la construcción este artículo. Link de la aplicación: https://play.google.com/store/apps details?id=com.GamesWithAttitude. Ojoo&hl=es
P. Sebastián Ferreyra sdb
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"Cuando JesĂşs toca el corazĂłn de un joven, este es capaz de actos verdaderamente grandiosos"
Papa Francisco JMJ 2016 Cracovia, Polonia
29 al 31 de julio de 2016 Aguas Blancas