Consuelo América del Mar Albarracín Perea. 201111011 Teoría Unidad Técnica. Arq. Hernando Vargas. Marzo 7 de 2014 Ensayo: “ACADEMIAS QUE HAN CONTRIBUIDO AL DESARROLLO DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD.”
ÍNDICE 1. Academias que han contribuido al desarrollo de la historia de la humanidad. Introducción. Planteamiento de Preguntas. Definiciones de Academia. Escuela Boloñesa. Academia de Francia en Roma. École des Beaux Arts o la Escuela de Bellas Artes. Architectural Association. La Bauhaus. Conclusiones.
2. Bibliografía.
1. ACADEMIAS QUE HAN CONTRIBUIDO AL DESARROLLO DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD. En el siguiente ensayo se hará un análisis de la palabra Academia a partir de una investigación rigurosa sobre el término y su importancia con respecto a la historia de la arquitectura. En primera instancia, se hará referencia a las definiciones que se tienen sobre el término. Posteriormente, se hará un análisis cronológico de las academias más importantes que han surgido a lo largo de la historia, donde se exponen sus características principales y su importancia para la historia de la arquitectura y el desarrollo de las artes. Por último, se expondrá una reflexión a manera de conclusión sobre las academias presentadas a lo largo del ensayo y su importancia para la enseñanza de la arquitectura, y en efecto su contribución a la construcción de conocimiento arquitectónico a través del tiempo. Este ensayo pretende responder entonces a las siguientes preguntas ¿Cuáles han sido las Academias más importantes a lo largo de la historia?, ¿Cuáles son sus principales características?, ¿Qué motivos motivaron su creación y fundación?, ¿Qué aportes han hecho a la historia de la arquitectura y las artes?, ¿Quiénes fueron sus representantes?.
En primera instancia es pertinente conocer qué se entiende por el término Academia, según el diccionario de la Real Academia Española, el término se refiere a la “sociedad científica, literaria o artística establecida con autoridad pública”, por otra parte afirma que es un “establecimiento docente, público o privado, de carácter profesional, artístico, técnico o simplemente práctico”. Lo anterior, nos brinda una primera noción frente al término que se va a desarrollar a lo largo de este escrito. Para empezar, la primera academia que se debe destacar es la Escuela Boloñesa, la cual fue de gran importancia para el final del siglo XVI. En el año de 1582 esta academia fue reconocida como la “Accadernia
del Naturale o del
Disegno”, pero ya para el año de 1590 tenía el nombre de “Accadernia degli Incamminati o Scuola dei Desiderosi”, ésta se caracterizaba por su enseñanza evocativa en cuanto al arte de la pintura, en contraste a la tradición italiana. Además, se destaca la transformación del concepto estilístico y discursivo de las pinturas que ésta logró, pues las obras se convirtieron entonces en una producción figurativa más comprensible y comunicativa. Este tipo de producción artística se logró mediante la instauración de directrices cognitivas, como el estudio de la verdad natural, la realidad como modelo, además de la elaboración del diseño y del cuadro, lo que permitió comprender el valor artístico entre lo humilde y lo feo. Pero cabe resaltar que para Caravaggio, el
fin de la pintura es la propia verdad, mientras que para los Carraci la historia se interpone en la producción de la obra, pues su elaboración está comprendida entre el estudio de la verdad natural y la obra como tal. Es por esto que en las obras artísticas puede evidenciarse la intención de establecer una estrecha relación entre el realismo natural y el clasicismo ideal, exploración de donde surgen los retratos cargados, en los que se exageraba algún rasgo del ser humano, esto luego da lugar a las caricaturas que se imponen como un género artístico. Cabe destacar que esta academia se instauró en Italia, y fue reconocida por ser una institución dinámica, en la que sus discípulos ejercían libertad que les proporcionaba la experimentación de nuevas habilidades y situaciones, pues en su acción creadora tenían plena autonomía. Lo anterior, generaba debates en torno a temas de interés, lo que fomentaba una postura crítica por parte de los discípulos, dos de los más activos discípulos fueron el poeta Marino y el anatomista Lanzoni. La academia boloñesa, evidenció continuamente el paso de la teoría a la práctica, logrando el desarrollo de actividades operativas que sin duda estaban dirigidas por la razón. Posteriormente, la academia tuvo una época fecunda y gloriosa que inició con la Academia de Francia en Roma, inaugurada en siglo XVI para el año de 1666 durante el reinado de Luis XIV, quien fue reconocido por promover las ciencias y las artes, que junto con su primer director Charles Errad lograron instaurarla,
así como posicionarla ante la sociedad. La Academia de Francia en Roma fue reconocida como una escuela de pintura, su construcción fue emblemática pues representó el progreso del reino y de las bellas artes. Esta se convirtió entonces, en un semillero de artistas franceses, con el fin de situar al arte de la pintura en el estatus de la arquitectura y la escultura. Aunque muchos ciudadanos, no percibían la importancia de este espacio académico, como se puede evidenciar en la siguiente frase, “han existido y existen personas en Francia, que desaprueban y censuran este establecimiento por innecesario y hasta inútil” (Del Diestro. p. 45), pues para los franceses este espacio era concebido como una burla para el aprendizaje de la pintura, pues el acceso a esta academia era complicado ya que sólo los mejores estudiantes de la Academia de Francia eran seleccionados para ingresar a esta y viajar a Roma, con el fin de fortalecer sus talentos y por lo tanto muy pocos ciudadanos, podían acceder a ella. Pero lo que es claro es que la Academia de Francia en Roma, contribuyó al perfeccionamiento del arte en Francia, pues Carlos Lebrun, su primer promotor, detectó que los jóvenes franceses interesados en el estudio de las bellas artes debían viajar a Roma por un periodo de tiempo significativo, para aprender sobre artistas como Miguel Ángel. Lo anterior, es una de las razones por las cuales esta academia contribuyó al desarrollo del arte y su teoría, que en conjunto quería lograr que la concepción francesa con respecto a lo estético,
continuara los lineamientos de la concepción italiana tradicional, es decir, la perteneciente a lo clásico y antiguo. Finalmente, la Academia Francesa de Roma se convirtió en un símbolo de la colaboración entre Francia e Italia. Con respecto al siglo XVIII, ya para el año de 1806, como herramienta de revitalización del antiguo régimen Napoleón dio paso a la fundación de la École des Beaux Arts o la Escuela de Bellas Artes, una academia que tenía como objetivo la enseñanza y promoción de las artes plásticas, teniendo presente la relación entre la arquitectura y las demás artes que se habían desarrollado durante el barroco, esta academia entendía que esta relación planteaba una unidad que además de ser conceptual era social. La mala administración de esta institución, conllevó a un fraccionamiento entre la sociedad y las artes, desde comienzos del siglo XIX en Francia. Este fraccionamiento dio paso a la instauración de una nueva academia conocida como la École Polytechnique o la Escuela Politécnica, que provocó una notable ruptura entre la arquitectura y la construcción. Pues mientras la École Polytechnique, buscaba una conexión entre ciencia y vida, la École de Beaux Arts, se enfocaba en la relación entre el arte y la vida. A finales del siglo XVIII, para el año de 1850 se funda la Architectural Association, como una escuela de arquitectura en Londres, que con el tiempo se logra consolidar como la más prestigiosa academia de arquitectura del Reino
Unido. La creación de esta academia se dio a partir de la inconformidad presentada por los estudiantes, con respecto a la enseñanza arquitectónica que se impartía por la época. Es por esto que esta nueva academia incentiva el debate y el pensamiento crítico en los espacios académicos, esto entonces se convierte en el punto de partida para la creación de la misma. La Architectural Association abarca dos conceptos, el de escuela y el de institución urbana, con carácter independiente, pues no pertenece a ninguna institución estatal. El sistema pedagógico impartido tiene en cuenta tanto el rol de estudiante como el de los docentes, lo que lo hace acorde a las preocupaciones de dichos sujetos, que en sí son el engranaje o la razón de ser de la academia. De esta escuela, es posible destacar arquitectos como Richard Rogers, Rem Koolhaas y Zaha Hadid. Ya entrados en el siglo XIX, fue instaurada la Bauhaus, dirigida y organizada por Walter Gropius entre 1919-1933 se caracterizó por ser una escuela democrática de arte en Europa que contribuyó a la renovación de la arquitectura moderna en este espacio geográfico, en la medida en que propuso vincular la creación artística al mundo de la producción, brindando al arte un mayor protagonismo social.
Por lo tanto, Walter Gropius, al proponer un estilo
internacional, pone de manifiesto el interés por convertir al arte en un elemento fundamental para el avance social tanto productiva como armónicamente. Por lo anterior, logra establecer una relación entre el arte y la producción, lo cual
abre paso al trabajo colaborativo y cooperativo, que se convierte en un aspecto importante para el aprendizaje y la construcción de la historia de la arquitectura, además de su aplicación e importancia para el desarrollo de la sociedad. Por todo lo anterior, es posible entender la importancia de las academias de arte y arquitectura a lo largo de la historia, pues contribuyen a la construcción cognitiva y moral de la sociedad. Es claro, como éstas surgieron como respuesta acertada a las inconformidades que había con respecto a la enseñanza que se impartía durante la época. De cada una de las academias expuestas anteriormente, es importante resaltar algo que las hizo importantes para la historia de la humanidad, más específicamente para la historia de las artes y la arquitectura. En primera instancia, la Escuela Boloñesa logró un lenguaje artístico basado en lo estilístico y discursivo para alcanzar de esta manera una mayor comunicación entre la obra y el receptor de esta, además de incentivar un carácter autónomo entre los discípulos. Por su parte, la academia de Francia en Roma, fue emblemática pues representó el progreso político y artístico de la sociedad. Como añadidura, la École des Beaux Arts o la Escuela de Bellas Artes pretendió establecer la relación entre el arte y
la vida del hombre.
Posteriormente, la Architectural Association se instauró como una academia de arquitectura prestigiosa, que transformó la enseñanza arquitectónica que se daba por la época. Y finalmente, la Bauhaus fue la escuela democrática que promulgó
la renovaci贸n de la arquitectura moderna en Europa. Por todo esto, las academias tanto de arte como de arquitectura tienen gran relevancia tanto para la historia de estos campos como para la historia de la humanidad puesto que sin ellas no hubiera sido posible la educaci贸n de la sociedad en temas tan importantes como el arte y la arquitectura, que son determinantes para el desarrollo del hombre como ente que aporta y construye comunidad.
2. BIBLIOGRAFÍA Arnod y Suard.(1779). Variedades Literarias o colección de piezas escogidas de literatura, asi originales, como traducidas de diversos idiomas al Francés, pertenecientes a las artes, y ciencias. Ensayo sobre la Academia de Francia, establecida en Roma. (pp.103-126.). Madrid. Imprenta de Pedro Marín. Del Diestro, A. (1836). Espíritu de la enciclopedia. Imprenta del Terán. Giedión, Sigfried. (2009). Espacio, tiempo y arquitectura. Barcelona. Editorial Reverté. Jeannel, B. (2013). Le Notre. Ediciones Akal Arquitectura S.A. Midant, J.(2004). Diccionario Akal de la Arquitectura del siglo XX. Madrid. Ediciones Akal S.A. Pena, C. La architectura civil recta y obliqua de Juan Caramuel de Lobkowitz en el contexto de la teoría de la arquitectura de siglo XVII. Universidad de Santiago de Compostela. Santos, M; Martinez, F; Vilches, C; Míguez, C; Villarmea, C; Domínguez, S; Mascato, S.(2010).Todo Valle- Inclán en Roma (1933-1936) Edición, anotación, índices y facsímiles. Universidad de Santiago de Compostela.
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