LA AGENDA PÚBLICA Y DEMOCRACIA DELIBERATIVA EN LOS NOTICIEROS TELEVISIVOS Sandro Macassi L.* Lizett Graham **
Tratamiento informativo y contrapesos ciudadanos Hoy muy pocos cuestionarí an el lugar central de los medios en la polí tica latinoamericana tanto como actores como en el caso venezolano, en la cobertura de la guerra interna en el caso colombiano, como cómplices en el periodo fujimorista en el Perú desde su rol sensacionalista, a partir de una visión etnocentrista durante las movilizaciones indí genas en Bolivia y Ecuador. Sin embargo, es muy poco lo que se hace por formar un juicio equilibrado, objetivo y panorámico del comportamiento de los medios. Generalmente, éstos se circunscriben a periodos de crisis, donde el rol de los medios es evidentemente parcial y distorsionador de los acontecimientos. Muy pocos estudios han tratado de indagar el comportamiento de los medios en la cobertura cotidiana de los hechos. En tal sentido, hubo más preocupación por estudiar casos especí ficos frente a “hechos” concretos, respondiendo a la misma dinámica de los medios, sin aportar un análisis panorámico del comportamiento de los mismos. Tampoco ha habido una preocupación por dar cuenta de los grandes cambios silenciosos que operan en nuestros paí ses. Así como muchos paí ses latinoamericanos, el Perú tiene grandes retos por delante, uno de ellos es profundizar los sistemas democráticos, haciéndolos más eficientes y sostenibles en el tiempo. Sin embargo, éste derrotero no está exento de dificultades, luego de un perí odo de violencia polí tica y de autoritarismo, la democratización de la sociedad es una tarea central para pensar el desarrollo y el bienestar. Hay una agenda pendiente donde confluyen la regionalización, la reconciliación nacional, la reforma del Estado, la democratización de los partidos polí ticos, la inclusión de mujeres y jóvenes, que necesita de un consenso nacional y por lo tanto de una vigorosa discusión pública sobre estos retos. Entonces, la pregunta que surge es: ¿Cómo los medios, en especial la televisión, vienen acompañando estos procesos sociales económicos y polí ticos de trascendencia nacional?. La ausencia en la producción de conocimiento que brinde una visión panorámica del comportamiento de los medios, así como el seguimiento a los procesos sociales y polí ticos son las principales * Psicó logo Social, Magí ster en comunicaciones. Director del Centro de Investigació n de Calandria. Especialista en polí ticas de juventud, ha realizado numerosos estudios recepció n de medios y monitoreos de la oferta informativa de radio y prensa. Ha publicado varios libros entre los que destacan “ prensa Amarilla y cultura polí tica en el proceso Electoral” y “ Culturas juveniles, medios y ciudadaní a” ** Periodistas especializada en investigaciones sociales sobre aná lisis de medios y agenda mediá tica. Experiencia en el desarrollo e implementació n de una web especializada en monitoreo de medios.
motivaciones para continuar este esfuerzo iniciado en el Centro de investigación de la Asociación de Comunicadores Sociales “Calandria” por monitorear el tratamiento informativo, el cual iniciamos en junio de 2002 hasta el presente.1 Partimos de una muestra interdiaria de los tres principales noticieros nocturnos de televisión y que posteriormente incluimos la prensa y la radio. Sin embargo, la información que incluimos en el este estudio corresponde al periodo que va de febrero a noviembre de 2003, que incluye información de los noticieros nocturnos “90 segundos”, “América Noticias”, “24 horas”. De otro lado, creemos que la libertad de prensa debe prevalecer para asegurar un sistema democrático viable, no obstante, es necesario desarrollar los contrapesos públicos dada la importancia de los medios como el escenario donde la polí tica adquiere su visibilidad publica, como actores que representan intereses y enfoques étnicos y culturales, y también como conformadores de la cultura polí tica de los ciudadanos. Todo sistema de vigilancia opera sobre la información básica respecto a cómo funcionan los entes públicos y precisamente esta tarea es la que estamos abocados, conocer ¿cuál es el comportamiento de los medios? Sin dicha información, es difí cil negociar con los medios por una mejora de calidad de oferta noticiosa. Calidad que se refleje en pluralidad sus fuentes, en la visibilidad de los temas y actores. Por ello, apostamos a que este estudio contribuya a conocer cómo los noticieros televisivos informan sobre los hechos polí ticos y de este modo saber si los medios están respondiendo a los nuevos retos que el paí s tiene por delante. Creemos que será muy saludable que el tratamiento periodí stico tenga una debida discusión pública.
La fará ndula y la el entretenimiento desplaza a la polí tica A partir del autogolpe del 5 de abril de 1992 la forma de enfocar las noticias cambió, los programas periodí sticos evitaron la presencia de los polí ticos y expertos percibidos como “de oposición” y la cámara se convirtió en la principal fuente de veracidad, pero ciertamente manipulable. A finales del gobierno fujimorista se compró la lí nea editorial de muchos noticieros y programas periodí sticos, los cuales acompañaron al gobierno realizando cortinas de humo y sobre los problemas que se viví an y banalizando la información. Era de esperar que con el retorno de la democracia se recuperan estos espacios para los actores sociales y sus demandas para la discusión y debate públicos, sin embargo la tendencia no se ha revertido del todo. Los resultados del estudio revelan como la información sobre el entretenimiento sigue copando la tercera parte de la agenda noticiosa de la televisión. A inicios de 2003, las noticias sobre espectáculos y deportes bordeaban el 40% de la agenda mediática, en julio, disminuye en los tres noticieros para luego estabilizarse en 31%
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Los anteriores y los actuales informes trimestrales del monitoreo pueden ser consultados gratuitamente en la siguiente direcció n: http://www.calandria.org.pe/centro_investigacion/boletines.html o pedir informaciió n a travé s del e-mail siguiente: monitoreodemedios@calandria.org.pe
. TIPO DE HECHO NOTICIOSO "90 SEGUNDOS" 67.4
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PÚBLICO POLÍTICO
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TIPO DE HECHO NOTICIOSO 24 HORAS
Si a estos datos le sumamos que la forma de enfocar lo informativo se ha vuelto más ligera y despolitizada2 presentando solo hechos sin contexto ni análisis. Además, crecientemente los programas periodí sticos están desplazando el debate la discusión a favor del rating, convirtiéndolos en magazines informativos en lugar de ser programas donde se discuta la agenda pública. Vemos con preocupación un desbalance en las noticias, que progresivamente pierden el paso frente a temas de entretenimiento. Lo ocurrido con la programación televisiva nacional, que ha dado prioridad al espectáculo, la farándula y la banalidad, no debe suceder con los noticieros, la agenda polí tica nacional debe centrarse en los temas importantes y los procesos sociales que son claves para el desarrollo y la gobernabilidad del paí s. Una agenda mediática, cuyo listado cuyos temas sean prioritarios para la visibilidad pública es central para la democracia, pues a través de esta agenda los públicos se enteran del devenir polí tico, forman sus juicios sobre los acontecimientos y la actuación de la clase polí tica. Un paí s, donde la agenda pública mediática se adelgaza cada vez más, restringe el acceso a la información y el ejercicio del debate público que son la base de toda gobernabilidad, afectando el derecho de los ciudadanos a participar cotidianamente en la polí tica a través del consumo de informativos.
La agenda pú blica de los noticieros se concentra en la cró nica roja ¿Qué es lo noticiable? Es una pregunta que atraviesa el quehacer periodí stico en todos sus procesos. Esa pregunta no es un tema trivial, su respuesta involucra a toda la sociedad. En la medida que un hecho aparezca con más frecuencia que otro, implica que la sociedad tiene más oportunidades para discutir debatir y estar mejor informada. Por lo tanto, la pregunta ¿qué hecho es más noticiable? Involucra a los ciudadanos, a las autoridades y a la clase polí tica. Y no es una decisión que sólo involucra a los periodistas. En el monitoreo que realizamos encontramos que la tendencia fue priorizar a los temas de la crónica roja, es decir, delincuenciales, policiales y accidentes sobre los temas de polí tica.3 Sin embargo, encontramos diferencias entre los noticieros, “90 segundos” a lo largo del año incluyó más temas de crónica roja que los demás (53.8%), mientras que “América Noticias” y “24 horas” incluyeron menos noticias de ese tipo (37.5 y 38.6%).
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Se priorizan la vida privada de los polí ticos, se preocupan por lo anecdó tico y las disputas personales entre los congresistas en lugar de centrarse en la discusió n de las propuestas y las problemáticas de fondo. Con ello se refuerza la conducta de la clase polí tica que busca generar espectá culos para .mantenerse en pantalla. y de esta manera se despolitiza el ejercicio de la labor pú blica 3
En este grá fico incluimos solo las noticias nacionales sobre lo pú blico polí tico, es decir, excluimos aquellas noticias de entretenimiento como los espectá culos, fará ndula y deportes.
La tendencia general en la agenda de los noticieros es a priorizar los temas de la crónica roja, es decir, delincuenciales, policiales y accidentes sobre los temas de polí tica. Incluso en el periodo electoral las noticias de accidentes y delincuenciales fueron tantas como las de polí tica. Ciertamente, el crecimiento de la delincuencia y la inseguridad es preocupante, pero la necesidad de discutir los temas polí ticos y abordar las problemáticas desde una dimensión pública es irrenunciable. Si los medios no visibilizan los aspectos polí ticos de los problemas si no facilitan el debate y su discusión, entonces el devenir público solo se convierte en una danza cotidiana de crí menes, accidentes y crónica roja, perdiendo la oportunidad de operar sobre las soluciones y las responsabilidades públicas a mediano y largo plazo.
Los Procesos Sociales no figuran en la agenda de los noticieros El alto porcentaje que ocupa la crónica roja y las noticias de entretenimiento ciertamente disminuye el espacio disponible para las noticias polí ticas. Esta reducción afecta a muchos temas que no ingresan a la agenda de los medios, nos referimos a las noticias que informan respecto a las problemáticas sociales. Temas como la salud o la reconciliación nacional o la descentralización alcanzaron cifras í nfimas para la importancia que tienen. Lo cual tiene como consecuencia que los noticieros televisivos no acompañan los procesos sociales claves que el paí s está viviendo. Por ejemplo, la descentralización, no es parte significativa de la agenda mediática a pesar que este afecta el destino de la organización polí tica y socioeconómica del paí s.
PROBLEMÁTICA SOCIAL EN LAS NOTICIAS 25 20
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90 SEGUNDOS
AMERICA NOTICIAS
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A lo largo del año cada noticiero ha brindado una cobertura diferente a las problemáticas sociales. América Noticias por ejemplo cubrió estos temas por encima del 15% en el primer semestre pero en el segundo semestre bajo sensiblemente el número de informaciones sociales hasta 4.5% en noviembre. Los otros dos noticieros se mantuvieron con coberturas promedio de 5.4% y 4.1% resultando ser sumamente bajas si tomamos en cuenta que se trata de cifras que no incluyen el total de noticias sino sólo de las noticias publico polí ticas. Por otro lado, el dato más resaltante que arroja el cuadro es la ausencia de cobertura al proceso de regionalización. A partir de las elecciones de noviembre de 2002, el proceso de descentralización tomó un impulso propio y es materia de discusión y de pugnas entre las autoridades elegidas, el poder ejecutivo y el congreso, sin embargo la cobertura a estos eventos es escasa. Generalmente se enfocan los hechos pero no el proceso, se concentran en los conflictos y no en los avances, y esta visión fragmentada del proceso no contribuye a que el ciudadano termine de comprender de qué se trata, sino que tan sólo percibe las dificultades y trabas de la regionalización. Tal vez la conclusión más importante es que los noticieros televisivos no acompañan los procesos sociales que el paí s esta viviendo. Por ello, se hace necesario que los noticieros se enfoquen además de los acontecimientos polí ticos también en los procesos que están de fondo y colaboren a constituir un ciudadano mejor formado e informado.
El nuevo mapa polí tico no ha cambiado el centralismo de las noticias en Lima Uno de los problemas más álgidos que generan exclusión y atraso económico es la centralización de los recursos decisiones y competencias en la capital. Sin embargo, el proceso de descentralización iniciado a partir de las elecciones regionales del 17 de noviembre de 2002 se inicia un proceso que buscaba revertir esta situación. Como consecuencia inmediata se configuró un nuevo mapa del polí tico del paí s y ciertamente la elección de gobiernos regionales, ha redefinido las relaciones polí ticas entre la capital y las provincias.
En el 2003 luego de las elecciones regionales, el 84.2% de las noticias transmitidas tienen lugar en la ciudad de Lima, el noticiero “24 horas” emitió más información sobre capital que los otros dos. En cambio, las regiones de la costa norte tuvieron una mayor presencia (4.5% como promedio) en la agenda pública que el resto de regiones. Estos datos refuerzan la tendencia observada en años anteriores4 que ratifica la tendencia centralista de los medios limeños de alcance nacional.
Existe una distribución geográfica no equitativa de producción informativa que refuerza la afirmación que los noticieros no reflejan los procesos sociales en marcha de todo el paí s. La cobertura a los hechos ocurridos en las provincias generalmente sólo responde a acontecimientos extremos como conflictos, o de la crónica roja. Por lo tanto, los resultados de este estudio refuerzan la idea de que el centralismo extremo que padece el Perú también alcanza a los noticieros televisivos y por ende a la forma en que se construyen los consensos entre autoridades y población. Lamentablemente, los medios no están construyendo una mirada nacional de sus problemas contribuyendo de este modo al centralismo y la exclusión.
Actores excluidos de la vida pú blica Resulta clave subrayar la importancia que los jóvenes y mujeres han tenido desde la década pasada en la vida pública del paí s. Recientemente se ha instalado el CONAJU, ( Consejo nacional de la juventud) y la presidenta tiene un asiento en el consejo de ministros. Por su parte, las mujeres han postulado a alcaldí as, y presidencias regionales y durante las últimas elecciones se aplicó la ley de cuotas de participación para conformar las listas de candidatos. La presencia de las mujeres en roles principales en la cobertura de noticias ha fluctuado entre el 8.1 y 9.9%, ésta representación está muy por debajo de la real actividad de la mujer en la polí tica y en la sociedad peruana. Este patrón es una constante en los estudios hechos sobre la agenda de los medios por el Centro de investigación desde 1997. Creemos que los noticieros debieran dar cuenta de los cambios ocurridos en el escenario público y en la polí tica facilitando la presencia de la mujer en la 4
Revisar el informe de monitoreo del añ o 2002 en http:// www.calandria.org.pe/centro_investigacion/anteriores/ka_ibpe02.html
misma medida que ella tiene una presencia de la vida nacional. Este principio de equidad es clave para construir imágenes públicas que fortalezcan la incursión de la mujer en la polí tica y su derecho a opinar sobre los asuntos públicos.
Por otra parte, a pesar de la importancia de la juventud en el proceso de recuperación democrática, la presencia de los jóvenes es muy exigua pues aparecen entre 3.8 y 4.4% de las noticias, en varios meses ni siquiera figuran. Ciertamente la presencia de los jóvenes es más fuerte en otras informaciones deportivas y de farándula, y cuando figuran en la agenda informativa generalmente se trata de noticias delincuenciales, o de acciones de pandillas, estigmatizándose a los jóvenes en los problemas de seguridad.
En cambio, los adultos siguen dominando el espacio mediático y que están siendo privilegiados por los medios en su cobertura de los hechos noticiosos. Sin embargo, la presencia de las mujeres, los jóvenes y de otras minorí as es todaví a muy pequeña en comparación con la presencia de hombres adultos. Hace falta un mayor equilibrio informativo en los actores que aparecen en la agenda pública, pues los medios, entre otras funciones, otorgan importancia, legitiman opinión y brindan modelos a los ciudadanos, la casi ausencia de estos dos actores, no contribuyen a su reconocimiento público ya ganado en las arenas polí ticas, pero que en las pantallas de los hogares aún no se refleja con cabalidad.
La pluralidad informativa como requisito para la democracia La representación polí tica es aún débil y no se ha reconstruido del todo el ví nculo entre la clase polí tica y los ciudadanos, por lo tanto, se hace necesario fortalecer el espacio público como un espacio de debate y discusión. Actualmente, el espacio mediático es por donde transita la visibilidad pública, el debate y la formación de la cultura polí tica de los ciudadanos. De allí la importancia de los noticieros en la representación polí tica. Involucran la interacción entre los polí ticos y los electores como también la relación que el ciudadano desarrolla con las instituciones democráticas y con la sociedad en general. Sabemos que no existe una sola versión de los hechos y que por lo mismo la labor de los medios es presentar las diferentes versiones sobre un acontecimiento, entonces la construcción de la verdad debe depositarse en el ciudadano y los medios deben ofrecer a los televidentes diversas fuentes e información contextualizada para que ellos puedan formar su propia opinión. En esta ecuación la pluralidad es el principal insumo. A pesar de ello, lo que encontramos en el estudio es diferente, abrumadoramente los medios presentan una sola versión de los hechos, entre 82.4% y 84.1% de las noticias hacen referencia a una sola opinión o fuente respecto a un hecho noticioso. Entre los noticieros hay muy pocas diferencias respeto la forma en que se presentan las versiones de los hechos, lo cual constituye una tendencia en el periodismo televisivo.
Al mostrar una sola versión de los hechos, los noticieros reducen, con ello, la complejidad de los acontecimientos sociales. No es suficiente mostrar los hechos, es necesario que los medios, manteniendo su neutralidad, busquen generar debate y discusión en la información que presentan. La agenda pública no es sólo un proceso de visibilidad de los temas y asuntos de interés para la nación, también son una oportunidad para el debate y la discusión. Por ello, la información debe tener diferentes puntos de vista que permita al ciudadano enfrentarse a varias opiniones y tomar la suya propia.
Conclusiones 1. Existe una restricción del espacio polí tico Las noticias polí ticas pierden espacio en la agenda noticiosa, cada vez se debate menos. Básicamente se debe al alto í ndice de noticias que abordan el entretenimiento así como las noticias referidas a accidentes crí menes o hechos policiales. Ello genera que cada vez exista menos espacio para la polí tica, para los hechos y problemáticas sociales, lo polí tico por lo tanto, se restringe. En este espacio reducido la polí tica solo es expresada como discusiones y conflictos entre congresistas y autoridades y funcionarios. Pensamos que esta reducción de la cobertura de las noticias polí ticas, esta vinculada a la necesidad de hacer un noticiero atractivo que llame la atención del televidente. Por lo tanto, la agenda se encuentra flanqueada entre el espectáculo y el rating. Pero en este proceso tiene como resultado el vaciamiento de la polí tica y su reducción a escándalos y denuncias, donde la lógica del incremento del conflicto arrastra a los propios actores polí ticos a desarrollar estrategias conflictivas para poder ser captados por las cámaras.
2. Una agenda mediática fracturada Los noticieros nocturnos no están siendo un espacio de debate para la construcción de los consensos y el fortalecimiento de la democracia. Esto se sustenta en los escasos espacios que los noticieros dan para la visibilidad de los actores emergentes como las mujeres y los jóvenes, la exclusión de las noticias procedentes de las regiones y el excesivo centralismo en noticias sobre la capital, así también en la gran dificultad de estos noticieros para incluir en su agenda los hechos relacionados con los procesos sociales y a las temáticas sociales como la salud la educación etc. Por lo general, la agenda está copada por acontecimientos dislocados de sus contextos y son pocas las problemáticas que se abordan en los noticieros. Si los noticieros no están siendo un espacio de debate y visibilidad entonces, ¿Cuál es el su rol?: ¿El entretenimiento o la información?, Al parecer la forma en que se esta desarrollando el tratamiento informativo nos acerca cada vez más a la democracia de consumidores basada en el rating que genera un acceso no equitativo y la satisfacción de las demandas primarias de información, lo cual nos aleja de una democracia deliberativa donde los medios sean espacios de discusión e incidencia para la gobernabilidad.
3. ¿Centralismo informativo y Hací a un nuevo mapa informativo? Los noticieros se encuentran desfasados de la realidad nacional, sólo se enfocan en los acontecimientos que ocurren en Lima y no presentan una imagen del paí s, tan solo de la capital. No es posible persistir en la actual fractura polí tica, donde el conjunto de peruanos se informa de lo que ocurre en el casco urbano de Lima metropolitana. Es necesario un nuevo mapa informativo que de cuenta de la nueva realidad del paí s, que de cuenta de las dinámicas polí ticas de las regiones, de los procesos económicos. Los medios de comunicación deben corresponder a las realidades culturales y polí ticas de sus paí ses. En la medida que estas realidades cambian, los medios tienen que adaptarse a la transformación más importante tienen al frente, que es el “nuevo mapa polí tico y de poder”.