Ilustración por Petrochev
HISTORIETA
Índice
La Pesadilla Por Petrochev
Página 3
Ilustración por Inkguts
CUENTO
Ana
Por Inkguts
Página 7
Ilustración por Carlos Gallo
CUENTO
Sueños en el cielo Por Oscar Ponce
Página 11 Ilustración por Carlos Gallo
HISTORIETA
Berenjenitos Por Carlos Gallo
Página 13
Editorial L
a vida de un fanzine no es fácil, sobre todo cuando quieres llegar a todos de forma gratuita, es fácil empezar un proyecto pero darle mantenimiento es complicado y más cuando depende de tantos engranes, si uno falla, todo falla, a veces es fácil de arreglar, a veces no y en algunas ocasiones no tiene solución alguna, tal vez el proceso sea lento pero arreglaré esta máquina para que quede chida y volvamos a tener una periodicidad más constante. No logré cumplir mi objetivo para el aniversario del fanzine y muchas de mis ideas para el futuro parecen lejanas dadas a mi situación actual, pero no me rindo y se que nadie de los que participa en este proyecto se rinde así que seguimos adelante, seguimos hechando ganas y haciendo lo que nos gusta. Si algún autor logra tocarles su corazón no duden en seguirle a él y a su trabajo y tampoco olviden que si tienen algo que contar, pueden participar en estas cochinas fotocopias a las que quiero tanto. Nos vemos en las páginas de este fanzine porque esto sigue y sigue. ¡Muchas leernos!
gracias
Directorio
Carlos A. Ponce Gallo Mireles FUNDADOR
Kizame
EDITOR DE TEXTOS
por
EDICIÓN 005 - Septiembre 2018 Contacto: espacio.fanzine@gmail.com VISION EDITORIAL:
Crear un espacio para todo tipo de artistas y amantes de las artes, desde las mas clasicas como la pintura y la poesia hasta las mas modernas como el cine y los videojuegos. Impreso en México
ESP_ACIO solo es medio sin fines de lucro donde los autores pueden exponer sus trabajos, por lo mismo cada autor es dueño de su obra y la misma no refleja la forma de pensar de ESP_ACIO, el contenido y opiniones es responsabilidad del autor del texto o ilustraciones en cuestion y por ello ESP_ACIO no se hace responsable del mismo.
HISTORIETA - 3
4 - La Pesadilla por Petrochev
HISTORIETA - 5
6 - Instagram @negro.petrochev
Ana
Por Inkguts
A
na...- Leí en pausadamente.
lápida
Susurré como si estuviera hablando con “Danae”.
Noviembre, el cielo era claro en ese momento y el sol pegaba directamente en su nombre a través de las hojas de los árboles, me di la vuelta y caminé un poco para despejarme, traté de recordar su cara con los ojos abiertos, empecé a percibir que llevaba ya tiempo parado en el mismo lugar, con la mirada perdida en un número.
Levanté la cajetilla y la abrí, ningún cigarro, mis ojos se llenaron de lágrimas en esos momentos, no crean que soy de esos tipos que lloran de la nada, incluso no había llorado en años, pero, te digo que ese momento fue casi poético, tal vez la situación me recordó lo solo que me sentía en ese momento, parecía que las paredes se ensanchaban a su alrededor, también me recordó a Ana, nunca le gustó que yo fumara, de hecho dejé de fumar por ella en un tiempo, de repente su recuerdo se volvió distante, sus gestos y ademanes de los cuales estaba enamorado…
su
Di un profundo suspiro, aspire el aire húmedo, era frío y olía a rosas secas, voltee a mi alrededor, era el único ahí desde hacía rato, saqué mi cajetilla de cigarros, me recargué en el árbol que estaba a un lado de la lápida de una tal Danae, me recordó a alguien que había conocido hace meses.. ¿Años?, una amiga creo del curso para chef que tuve. Sentía que en cualquier momento me despertaría, o que tal vez el padre Julio podría regresar en cualquier momento y decirme: -Este…, hijo, hubo un error, perdón por las inconveniencias,… digamos,….Ana está en el hospital en este momento, mmm tal vez… podrás visitarla prontoUna triste sonrisa se dibujó en mi rostro…. -Irónico pensar de esa manera -
Calmé mi llanto, puse la cajetilla vacía en mi bolsillo izquierdo, saqué mi encendedor y empecé a juguetear con él, vi el fuego menguante y pasé mi mano por encima, me recordó a una de esas frases trilladas, “Polvo eres…”. Era como si todo me recordara a ella. Traté de despabilarme, la noche y la niebla ya estaba empezando a invadir el sitio donde me encontraba, había perdido mi tiempo pensando en tonterías. Arrojé mi encendedor hacia “Danae” como signo de despedida. Subí una pequeña colina, mi auto “Volkswagen beetle” estaba en el estacionamiento a menos de doscientos metros, lo tengo todavía,
CUENTO - 7
es un carrito de color amarillo, lo había comprado por que mi novia era muy fanática de esos carros, decía que eran muy monos como para que los condujera un hombre, ese siempre era su pretexto para ganar el asiento del conductor. Lo curioso fue lo que paso después de eso, a pesar de que había caminado por varios minutos, no veía signos de mi carro o del estacionamiento, la niebla daba cierta confusión al asunto, pero recuerdo que una enorme luna en cuarto menguante estaba levantándose sobre los árboles, pinos alargados parecían observar mi pesar, debido a mi estado emocional no presté mucha confianza, no me importaba caminar doscientos metros o un par de kilómetros más, me gusta caminar, me despeja la mente. Pasó el tiempo, caminé mucho, en una sola dirección, sabía que estaba perdido desde hacía rato, pero no le daba importancia, tal vez había pasado el estacionamiento, y llegaría a la puerta, pero no fue así, reconocí una pequeña luz a través de la niebla, avance con curiosidad, distinguí a una joven orando dándole la espalda a la luz que resultó ser una veladora. Tenía pelo negro largo y lacio, se veía bien en un largo vestido negro entallado. Me acerque con curiosidad, mire a la joven y el motivo de su oración, me sorprendí, estábamos frente a Ana., me di cuenta que me había perdido en verdad. -¿Conociste a Ana?- Le pregunté. -Muy poco en realidad, apenas la conozco- Me respondió. -uhm….- voltee mi mirada hacia la veladora que estaba a espaldas nuestra, yacía junto a unas rosas marchitas, y debajo de estas un letrero que dictaba: Danae Gonzales 1989-2018
8 - Ana por Inkguts
Ilustración por Inkguts
-Es muy simpática, acabo de conocerla hoy mismo- Ella siguió. Sentí que un frío me pasó por todo el cuerpo mientras ella continuaba. -Solo estoy aquí por un tiempo- Su forma se confundió en una silueta, y menguó a la par de la intensidad del fuego de la veladora.
-Ana dice que te quiere mucho, si quieres le digo que no estabas llorando, sé que la pondría triste saber que tú estás tristeNo pude decir nada, lo que estaba viendo era demasiado irreal, pensaba que me estaba volviendo loco. Ella avanzó,… bueno, más bien flotó, hacia el árbol en el que
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Fotografía por Inkguts
me había recargado hacia poco rato, la silueta del árbol se transformó en la silueta de una parca, se desvanecía en una nube de niebla conforme avanzaba hacia el árbol. -¡DILE!- Grité con un nudo en la garganta. -Dile que la amo mucho, que nunca, nunca dejare de pensar en ella- Eli volteo. Lo último que vi, fue su rostro asintiendo mientras se desvanecía sobre la madera negra. La veladora se apagó, di un largo suspiro, aspire el aire húmedo, era frío y olía a rosas secas voltee a mi alrededor, era el único que estaba ahí desde hacía rato, levanté mi encendedor, contemplé el árbol que estaba a un lado de Danae, me recordó a “Eli”, una amiga que tuve en la preparatoria. Sentía que despertaría.
en
10 - Webpage http://picbear.com/inkguts_zato
cualquier
momento
me
Sueños en el cielo Por Oscar Ponce
D
e entre todas las leyendas e historias sorprendentes que se cuentan de los objetos del sistema solar, no hay una que está envuelta en más misterio que el pequeño asteroide MG2225.
Este asteroide es un diminuto cuerpo rocoso que al igual que muchos entra y sale del sistema solar en una órbita gigantesca de varias UA (unidades astronómicas). Fue descubierto por primera vez por el científico Arthur Drake que cartografía los asteroides principales del cinturón de Kuiper para buscar aquellos con mayor masa y estudiar su comportamiento y la influencia de la gravedad solar en sus trayectorias. Este científico estadounidense no encontró mayores cualidades en sus primeras observaciones de este cuerpo celeste; por lo que solamente le asignó el nombre por el que lo conocemos actualmente y lo archivó entre los cientos de objetos catalogados en su laboratorio en Berkeley No fue hasta pasados algunos años que un alumno de posgrado del MIT mientras hacía mediciones de las órbitas de objetos extrasolares, encontró un descubrimiento fascinante; MG2225 se había movido de su órbita calculada y además había cambiado de curso en dirección al
planeta enano de Plutón, sobra decir que este descubrimiento dejó perplejo a aficionados y científicos profesionales del campo por igual. Fue mucho el revuelo mediático relacionado con este extraño hallazgo y fue incomparable la participación de la comunidad científica cuando se hicieron los cálculos, modelos y predicciones que aseguraban que MG2225 impactarían con Plutón el 12 de junio de 2022. En noticieros e internet rondaban información y animaciones del impacto; astrónomos aseguraban que no pasaría nada, astrólogos afirmaban que sería un fenómeno que ocasionaría cataclismos emocionales y ambientales en el planeta Tierra; ni uno ni otro grupo tenían el suficiente sustento para confirmar o refutar algunas de las teorías en sus calurosos debates. Fue cercana la fecha del impacto cuando lo inimaginable pasó. MG2225 desapareció de los radares y telescopios, sencillamente se perdió a simple vista de todos los ojos de la humanidad, el mundo entero contuvo el aliento y dos semanas después de la supuesta colisión con el pequeño planeta, el escurridizo asteroide resurge y con él se desata la controversia de su verdadero origen.
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Durante los siguientes días posteriores a la reaparición del objeto celeste, aparecieron cientos de explicaciones racionales, irracionales, fantásticas, místicas y religiosas sobre el fenómeno; en lo que todo el mundo estaba de acuerdo era en que debía de estar atento a cualquier información relacionada con el tránsito de MG2225. Para el 13 de Octubre del 2022 MG2225 impactaría con Júpiter o en su defecto con alguna de sus lunas; el pequeño asteroide sería atrapando por la fuerza gravitacional del planeta gigante y ahí acabaría su fascinante historia; sin embargo nuevamente volvió a desaparecer. En ese momento fue cuando brotó la semilla de la imaginación en la especie humana y dejo de escuchar la razón de la ciencia y de otras disciplinas; nacieron sectas que le daban una interpretación religiosa; otros un poco más racionales abrían acalorados debates que terminaban en discusiones de dioses y alienígenas ancestrales, de seres del futuro y de especies evolucionadas que atravesaban el espacio tiempo con tecnología milenaria. Aquel objeto extraño del cielo con su simple existencia e inexplicable comportamiento había cambiado la forma en la que el ser humano entendía el mundo o creía entenderlo. Lo más curioso era que el ser humano era incapaz de comprobar si había sido el único objeto comportándose así o si había existido otros objetos igual de peculiares en el pasado, y que
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nuestra maravilla por él fuera igual a nuestra poca capacidad para observar otros fenómenos similares. El ser humano se volvió temeroso de lo que no conocía e indefenso de lo que podría estar al acecho en el espacio exterior. Ese instinto primitivo de sus antepasados renació como una llama que la ciencia había extinguido con números y leyes. Cuando MG2225 volvió a aparecer en los radares tenía un curso directo a la Tierra y cundió el pánico. Se fijaron posibles fechas, escenarios y consecuencias; el mundo se unió para prepararse para el final o el inicio. Sobra decir que la locura nubló la mente de muchos de ellos y tuvo consecuencias catastróficas. Para la víspera del contacto, cuando MG2225 se acercaba al cinturón de asteroides, sin explicación alguna se detuvo, instantáneamente, como cuando una roca choca contra una pared, quedó suspendida en el vacío respetando la antigua ley de Isaac Newton de la gravedad. Han pasado 20 años de su último movimiento, sigue orbitando el cinturón de asteroides. Algunos siguen esperando que concluya su misión y nos traiga un mensaje a los pobladores de este minúsculo planeta que seguimos creyendo que somos lo suficientemente valiosos para que las estrellas nos miren con la misma fascinación con que nosotros las observamos. Otros quieren mandar una sonda y resolver el misterio de su existencia y aún hay otras personas, como yo, que solo queremos observar el cielo nocturno y soñar con el pasado del universo.
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