2 de marzo del 2015 Este día sería nuestro primer día de observación en el jardín de niños “María Guadalupe Vega de Luévano”, siendo sincera me sentía un poco nerviosa y temerosa pues he leído y escuchado por algunas experiencias que algunas educadoras en curso no tratan bien a las observadoras, y me preocupaba aún más porque practicaría en ese grupo y tendría como observador a ese maestro pero por otro lado me sentía emocionada y entusiasmada de conocer nuevos horizontes y dispuesta a tener los mayores aprendizajes posibles. La ubicación del jardín se encuentra en la colonia Lázaro Cárdenas, la verdad es que es un poco complicado llegar al principio ya que tienes que atravesar un par de callejones y con una simple explicación no bastaba, por lo que mis compañeras y yo nos quedamos de ver en la estatua de Benito Juárez para de ahí caminar hacia nuestro destino, en el recorrido pudimos percatarnos de la decoración principal de los callejones y las bardas del jardín de niños pues estaba repleto de Grafitis. “A veces el entorno es terriblemente hostil para la formación de la infancia porque existen pocos estímulos; porque es un desierto cultural; porque el territorio está disperso y débilmente estructurado; o porque la invasión del tráfico y la falta de espacios y a veces la violencia hacen de la calle un lugar poco seguro y desde luego poco pensado para la infancia”. (Carbonell, 2002). Al llegar al jardín de niños nos presentamos con la directora del plantel y proseguimos con la repartición de nuestros respectivos salones a observar, esto se realizó por medio de un sorteo y me tocó estar con un grupo de segundo grupo C, fue muy emotivo ya que en mis experiencias como observadora me habían tocado grupos de tercero por lo que fue muy grato estar con otro grado observando nuevas dinámicas, y nuevas
maneras de trabajo, así mismo quien está a cargo de ese grupo es un hombre por lo cual es una manera completamente diferente de trabajo. En el momento en que tuve que ubicar el aula en la que fungiría me pude dar cuenta de algunas características físicas del jardín, cuenta con 8 grupos, un patio o plaza cívica donde se realizan los honores y eventos sociales, un arenero, una sala de juntas, dos áreas de baños, biblioteca, área de juegos y un espacio con pasto para que los niños puedan sentarse a conversar. El ritual que pude observar que se realiza son los honores a la bandera puesto que se hacen todos los lunes a las 9:30 am. Y se van cambiando de roles los maestros para que coordinen honores con los niños. La economía del lugar es escasa, por lo que algunos de los padres de familia no cuentan para pagar el uniforme que requiere la institución, las formas de trabajo más comunes son albañiles, pintores, mecánicos, vendedores ambulantes, dicho de otra manera, tienen trabajos eventuales (“a lo que le salga”). La colonia en la que se encuentra el jardín de niños es un poco marginada por lo que sus costumbres, hábitos y el caló son diferentes a los que yo acostumbro a escuchar. En realidad, fue el primer día, y solo pude adaptarme al nuevo entorno al que me estaba sometiendo, traté de entablar amistad con el personal y los niños en general, también traté de expresarle al maestro a cargo de grupo que estaba con toda la disposición de ayudar en lo que fuera necesario, siempre trataba de incluirme en sus actividades que realizaba, incluso, cuando el docente salía del salón trataba de mantener el orden en el grupo.
Al dar el toque de salida me dispuse, junto con mis compañeras de equipo a entrevistar a la educadora y así es como concluyo este primer día de observación,
lleno
de
sentimientos
encontrados,
conocimientos
y
aprendizajes nuevos. 3 de marzo del 2015 El segundo día de observación asistí junto con dos compañeras más a una conferencia con el tema “crianza positiva”, asistieron muy pocas madres de familia ya que de 193 alumnos solo fueron 15 madres, por lo que es muy poco la participación, en la actualidad mucho de eso se debe a que las madres de familia se han incorporado al trabajo laboral y no tienen tiempo o no les dan permiso de faltar al trabajo para poder asistir a las actividades académicas. En esta conferencia pude darme cuenta de muchas cosas, en primer lugar del ambiente familiar que de una manera u otra afecta el desempeño escolar del niño, “el ambiente familiar, sea como sea la familia tiene unas funciones educativas y afectivas muy importantes, ya que partimos de la base de que los padres tienen una gran influencia en el comportamiento de sus hijos y que este comportamiento es aprendido en el seno de la familia” (Dunn, 2001) pues pude percatarme a base de comentarios que la mayoría de las familias son disfuncionales ya que son madres solteras, padres solteros, están casadas nuevamente y su esposo no quiere al hijo o viceversa, otros más habían sido abandonados, por lo que tenían que vivir con abuelos, tíos o quienes quisieran hacerse cargo de ellos. En segundo lugar, las casas son muy pequeñas por lo que los padres duermen en la sala para darle comodidad a sus hijos de dormir en recamaras, o bien cuentan con dos recámaras de las cuales una es para los padres y otra para los hijos y estos tienen que compartir. “La configuración familiar influye en el desarrollo cognitivo del niño (Dunn, 2001)
Al finalizar la conferencia apliqué una serie de entrevistas a las madres de familia, ellas se mostraron muy participativas con nosotras, previamente nosotras nos habíamos presentado ante ellas por lo que fue fácil vincularnos con ellas. Por motivo de la conferencia no pude asistir a las primeras horas de la clase, previamente había hablado con el docente para informarle que asistiría a la conferencia para observar a las madres de familia, cuando termino la conferencia me dirigí a mi respectivo salón para continuar con las actividades escolares.} Dentro del jardín de niños pude notar que se recalca mucho la cuestión de los valores, “los docentes desempeñan un papel determinante en la formación de las actitudes” (Delors, 1996) y esto se ve reflejado desde las aulas de clase, en mi caso, el docente a cargo, inculcaba mucho a los niños el llegar puntuales, ser respetuosos, honestos, compartidos, etc.. incluso tiene pegado enfrente del salón una lista de valores y cuando algún niño falta a éste, el maestro muy pacientemente va hasta su lugar y le explica lo que está haciendo mal y señala el acuerdo de los valores. A nivel de jardín a la hora de receso, pude darme cuenta que entre los juegos principales de los pequeños son aquellos que se relacionan con la violencia, y en ocasiones deja de ser solo juego y en un abrir y cerrar de ojos se están peleando verdaderamente por lo que algunos de los docentes tiene que hacer alguna interferencia y les recuerda el valor del respeto. Las actividades cotidianas de la comunidad a lo que se puede observar es que por parte de los jóvenes se dedican a fumar o ingerir bebidas alcohólicas desde muy temprano pues se les ve rondar cerca del jardín solamente perdiendo el tiempo.
Así es como finalizo un día más de observación, una vez más lleno de aprendizajes, pero sobre todo dejando una estrecha relación tanto con los niños como con el personal que labora, no sin antes prometer regresar y seguir llenándome de esa alegría y energía que solo ellos pueden darme.
Bibliografía Dunn, Judy “Entorno familiar y social II; Bloque II”, México, 2001 Delors, J., “La educación encierra un tesoro”, México, UNESCO, edición, 1996.