SALA DE COLUMNAS DE CASA ÁRABE
EXPOSICIÓN
Del 17 de enero al 24 de febrero de 2019
EL ZOCO SIN COMPRADORES TESOROS DE AL-ANDALUS Una exposición de LEONOR SOLANS Horacio, que dejó escrito que “el arte es ocultar el arte” (ars celare artem), también nos enseñó que “poetas y pintores siempre pudieron atreverse a todo” (… pictoribus atque poetas / quidlibet audendi semper fuit aequa potestas): a hacer fable lo inefable y visible lo invisible, a pintar con palabras y a decir la luz que irradia del fondo de las cosas. Y ello porque, artes hermanas, “como la pintura, la poesía” (ut pictura poesis) muestra, indica, señala lo que se oculta tras el lienzo en blanco, lo que nos hurta la oscuridad del silencio. Así, la invitación a la lectura de la poesía andalusí: “Mi pupila rescata lo que está preso en la página: lo blanco a lo blanco y lo negro a lo negro” (Emilio García Gómez-Ibn ʿAmmār); así, su milagrosa pervivencia en el arte sutilmente evocador de Leonor Solans: “¡Dios, cómo corre el río / por la vega! / Más se desea hacer en él la aguada / que en los labios muy rojos de una bella. / Atardece y las ramas / como pestañas son en las riberas / de una pupila zarca. / La brisa se divierte con las ramas, / y el oro del ocaso corretea / en la plata del agua” (Modest Solans Mur-Ibn Jafāŷa).
Jarra de la Cartuja de Jerez (acuarela sobre papel, 30 x 22 cm)
La poesía, la pintura, el arte, en suma, ese tesoro siempre por descubrir, a condición de buscar sin descanso en la memoria y en el corazón, a condición de atreverse a ver, a saber de versos escritos sobre el agua y, por ello precisamente, destinados a permanecer y a durar. Fernando Andú Resano Crítico literario, arabista y poeta
Ataifor de Medina Elvira (óleo sobre lienzo, 60 x 60 cm)
Un zoco sin compradores es una contradicción en sí misma. El zoco es el ejemplo de la dinamización, el comercio, el encuentro, la búsqueda de tal o cual cosa, la charla; o, lo que es lo mismo, la esencia viva de la ciudad musulmana. Por eso, la mera idea de un zoco sin compradores nos remite a una figura poética en la que se instala una imagen de melancólico silencio. El sugerente título de esta muestra proviene del libro homónimo de Modest Solans Mur, padre de la artista, que a su vez fue inspirado por un bellísimo verso de Abū Yaʿfar Aḥmad: “Y se vende la poesía en un zoco sin compradores”. Leonor Solans, no obstante, ha buscado una fuente de inspiración paralela y la ha localizado en la arqueología, en los elementos cerámicos que otrora fueron contenedores de viandas o piezas comerciales de lujo en sí mismas y que ahora se exhiben en vitrinas museísticas, descontextualizadas de su uso tradicional. Estos dos polos entre los que se mueve la obra de Solans hablan además de temas tan interesantes como la memoria, el tiempo y el silencio, materias intangibles que, respiradas tras las celosías que ven pero no dejan ver, provocan la intimidad necesaria para absorber la poesía. Silencio, tiempo y memoria se unen como homenaje a un poeta y a un filólogo, pero también para recrear un universo plástico a través de la mancha desdibujada que materializa el realismo de cada pieza representada. Una ensoñación a plena luz del zoco inhabitado.
Jarra de la gacelas (óleo sobre lienzo, 162 x 97 cm)
José Vallejo Prieto Director de Cultura Ayuntamiento de Granada
Leonor Solans (Sevilla, 1980) es licenciada en Bellas Artes por la Facultad Alonso Cano de Granada, lugar donde reside y trabaja. Ha realizado múltiples exposiciones en ciudades como París, Madrid, Barcelona, Londres, Málaga o Tallin, siendo las más recientes la titulada El oro de los tigres en el Palacio de los Condes de Gabia de la Diputación de Granada, inspirada en la obra homónima de Borges y dedicada al tiempo y la memoria, y El zoco sin compradores. Tesoros de al-Andalus, en el Cuarto Real de Santo Domingo de Granada, con la que se sumerge en la poesía y el arte andalusí, y de la que ahora presenta una selección en Casa Árabe de Madrid. Tiene en su haber numerosos premios, entre los que
destacan el Premio López Villaseñor de Artes Plásticas, el Premio Fundación Barcelona Olímpica, el del Certamen Nacional de Pintura y Escultura de Melilla o el Premio de Pintura Emilio Ollero. Ha recibido varias becas artísticas, tales como la beca Talens y la beca Centre D’Art La Rectoría en Barcelona, la otorgada por la Fundación Rodriguez Acosta en Granada, la del Instituto Andaluz de la Juventud en Huelva, y la beca Residence d’artistes Campagn’ART en St. Martin, Toulouse. Como ilustradora ha colaborado con diversas editoriales, como W. W. Norton & Company (New York) y Espasa (Barcelona), y con revistas como El Legado Andalusí (Granada) y AramcoWorld (Houston).