DANZAENESCENA
ANAEL MARTÍN
YAGO CATALINAS
BALLET DE BARCELONA
BALLETS DE TENERIFE
JOLANTA LUBEJA
Bailarina Principal del Ballet
Nacional de Letonia
ANAEL MARTÍN
YAGO CATALINAS
BALLET DE BARCELONA
BALLETS DE TENERIFE
JOLANTA LUBEJA
Bailarina Principal del Ballet
Nacional de Letonia
4 EDITORIAL: 2021 razones para seguir creando
Erre Gálvez
6 Medallas de oro al mérito artístico 2020
Danilo Perot
8 PORTADA: Jolanta Lubeja
Gonzalo Preciado Aranza
14 El Ballet de Barcelona
Carolina Masjuan
17 ENTREVISTA: Yago Catalinas Heredia
Nora Peinador
DANZAENESCENA
Nº 48_ENERO 2021
EDITORA: Mila Ruiz
COORDINADOR: Perfecto Uriel
CONSEJO DE REDACCIÓN:
Víctor M. Burell, Nelida Monès, Joaquim Noguero y Mila Ruiz.
COLABORADORES:
Jonas Sáinz, Erre Gálvez, Sergio Cardozo, Nora Peinador, Paloma Sainz-Aja, Orlando Taquechel, María Martha Urbina Beltrán, Margarita Muñoz Zielinski, Danilo Perot, Carolina Masjuan, Fredy Rodríguez y Gonzalo Preciado Azanza.
FOTOGRAFÍA:
Ilze Kalnina, Andris Tone, Rafael Estévez, Jesús Vallinas, Vincent Tom y Danzaria
MAQUETACIÓN:
Liosmar Ruiz leoruizmartinez@gmail.com
DIRECCIÓN:
Casa de la Danza, c/Rua vieja 25, 26001 Logroño (La Rioja)
MAILS:
Mila Ruiz: danzaenescena@gmail.com
Perfecto Uriel: casadanza@casadeladanza.com
(Las colaboraciones son gratuitas y responsabilidad de sus autores)
20 Ritmos corpóreos en la danza
María Martha Urbina Beltrán
24 ENTREVISTA: Anael Martín
Sergio Cardozo
30 MASAKA
Jonás Sainz
34 Gran Gala de Estrellas
Margarita Muñoz Zielinski
38 ENTREVISTA: Ilisa Rosal
Orlando Taquechel
42 La danza en el cine de Maya Deren
Paloma Sainz-Aja
43 La metáfora del Vástago
Paloma Sainz-Aja
44 40 Aniversario de los Ballets De Tenerife
Danza en Escena
48 Ciencia y Danza
SPACE+DIGITAL+DANCE
Gonzalo Preciado Azanza
50 Igor Yebra nombrado Ciudadano Ilustre de Montevideo
Margarita Muñoz Zielinski
51 La tira de Fredy
52 Actividades organizadas por La Casa de la Danza
Podría empezar relatando lo complicada que es la época por la que todos estamos pasando, bailarines, médicos, limpiadores, profesores, artistas y el casi abandono que sufrimos por parte de las instituciones pero creo que es una realidad tan cruda, pesada y tan presente que no nos queda otra que ser positivos. Apoyarnos entre todos los colectivos, no esperar nada de la clase política y afrontar el futuro con un gran Jeté.
Y es que ha sido un año (por llamarlo de una forma políticamente correcto) lleno de momentos extraños y mucho, mucho tiempo libre. Tiempo que probablemente nunca más volveremos a tener. Pensar, bocetar, crear, cortar y pegar o levantarse, planear unos pasos, bailar y bailar. Plantearse cientos de proyectos desde la tranquilidad de que fuera no espera nada, ni siquiera las prisas del día a día.
Me aferro a la esperanza de que todo lo que se ha estado fraguando durante todo el año 2020 por parte de todos los creadores explotará en forma de creatividad en los próximos años. Que volvamos a ir al teatro a disfrutar de la danza, comedias e ¡incluso dramas! Volver a tocarnos, a besarnos, a abrazarnos. A llenar los bares de risas y volver a casa sin que el reloj nos obligue.
Volver a crear para todos y todas.
Erre Gálvez2021 razones para seguir creando
El Ministerio español, hoy de Cultura y Deporte, concede anualmente estos galardones a personas o Instituciones que destaquen en los campos dramático, musical, coreográfico, de interpretación, cine, etc., en reconocimiento a su labor en dichas áreas culturales. Hasta 1996, se entregaban de Oro y de Plata, y a partir de ese año, se otorgan solamente las del simbólico oro.
En el pasado 2020 ha sido el listado más amplio de todas las ediciones, y se han otorgado a 32 personalidades de la cultura, cuatro de ellas a la DANZA: Teresa Nieto y Carmen Werner al estilo contemporáneo y Antonio Canales y Sara Baras al flamenco.
A propuesta del Ministro de Cultura y Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes, el Consejo de Ministros aprobó, el pasado mes de diciembre, el listado de galardonados con este insigne reconocimiento. Desconocemos, de momento, quiénes realizan la selección o propuestas de nominados, ni qué cercanía tienen hacia las artes dichas personas, o lo propios ministros, pero desde aquí saludamos a todos los premiados, con nuestras felicitaciones y enhorabuena para el caso.
Nació en Tánger, Marruecos (1953). Coreógrafa y bailarina. Ha celebrado recientemente sus treinta años de carrera en la danza contemporánea española. “Teresa Nieto en compañía” arrancó en 1990, aunque con anterioridad había participado como bailarina en otras agrupaciones y conjuntos artísticos que abrieron el camino a la danza contemporánea española como Bocanada Danza, Arrieritos, etc.
Ha incursionado también en otras disciplinas: teatro, ópera y vídeo; pero los mayores reconocimientos a sus obras llegan con “Tánger”, finalista en los Premios Max 2002 en las categorías de Mejor Coreografía y Mejor Intérprete de Danza Femenino (Teresa Nieto), y finalista Premios Max 2007 mejor intérprete masculino de danza: Jeús Caramés y Premio Max 2007 mejor intérprete femenina de danza: Teresa Nieto). También ha recibido galardones como: Premio Nacional de Danza 2004, Premio de Cultura de la Comunidad de Madrid 2002 de Danza y Premio ADE 1998 Mejor Montaje Coreográfico.
CARMEN WERNER
Nació en Madrid (1953), Licenciada en Educación Física por la Universidad Politécnica de Madrid y estudia Danza Clásica y Contemporánea en Madrid, Barcelona y Londres.
En 1987 crea su propia compañía: Provisional Danza (aún en activo). Recibe el Premio de Cultura en la sección de Danza de la Comunidad de Madrid 2000. El Tercer Premio de la Primera Competición Internacional Onassis para una Coreografía Original 2001, con la obra El tiempo de un instante. Premio Mención del XIII Festival de Cinema de Girona para el vídeo en formato cine La noche, marejada de un cuerpo. En el año 2007 recibe el Premio Nacional de Danza, otorgado por el Ministerio de Cultura, en la modalidad de creación. Además, ha sido nominada como mejor intérprete de danza a los Premios Max de las Artes Escénicas en 2006, 2010, 2012, 2013 y 2015.
SARA BARAS
Nació en San Fernando, Cádiz, (1971). Iniciada en el baile flamenco de la mano de su madre, Concha Baras, emprendió su carrera profesional con la compañía Manuel Morao & Gitanos de Jerez. Tras participar en obras como Mujeres de Merche Esmeralda o ¡Mira qué flamenco! de Javier Barón y colaborar como artista invitada de Antonio Canales, creó su propia compañía. El Ballet Flamenco Sara Baras se estrenó en 1998 con el espectáculo Sensaciones y por el que recibió el Premio Max de las Artes Escénicas en la categoría “Mejor Intérprete Femenina de Danza”. Desde entonces, ha recorrido los escenarios internacionales con sus propias producciones y coreografías. Entre los galardones que jalonan su carrera están el Premio Nacional de Danza 2003, hasta el Olivier Award 2020 de Reino Unido, pasando por la Medalla de Oro de Andalucía, “Premio a la Creatividad” otorgado por la Comunidad de Madrid o el “Premio Flamenco hoy a la mejor bailaora del año”, otorgado por la asociación de críticos del flamenco, entre muchos otros reconocimientos.
Nació en Sevilla, (1961), inicia su carrera profesional en el Ballet Nacional de España (BNE), del que fue bailarín solista, y para el que ha coreografiado dos obras. Bailaor, coreógrafo y director, crea su propia compañía, debutando en Bilbao con las coreografías A ti Carmen Amaya y Siempre Flamenco. Sus creaciones han recorrido el mundo entero, destacando por su personalidad en el flamenco, influenciado por la danza contemporánea, pero sin perder la esencia flamenca.
En su dilatada carrera, estrena un largo listado de obras, así como también su participación en proyectos teatrales y eventos nacionales como internacionales. Incursiona en el mundo del teatro, la ópera, la televisión y la escritura. Fue nominado a los Premios Emmy de 1995, y ese mismo año se le otorga el Premio Nacional de Danza de España.
Jolanta Lubeja (Riga, 1990). Bailarina principal del Ballet Nacional de Letonia. Se graduó en la Escuela Coreográfica de Riga en 2009, incorporándose ese mismo año a la compañía. Su repertorio incluye más de 40 papeles en ballets como La bella durmiente, Giselle, Cascanueces, La Bayadera, El Corsario, Scheherazade o más recientemente, El lago de los cisnes. Ha actuado en más de 15 países, entre ellos Italia, Suecia, Alemania, Rusia, China, Israel, Corea del Sur o España. Sus premios incluyen una medalla de oro en el Korea International Ballet Competition, así como dos de bronce en el International Baltic Ballet Competition. También ha sido nominada como mejor bailarina del año en Letonia en 2016 y 2019.
Hace apenas unos meses que la ascendieron a bailarina principal del Ballet Nacional de Letonia. ¿Qué se siente al haber conseguido el sueño de toda una vida?
Bailar papeles protagonistas y alcanzar el punto más alto en una compañía es el deseo de toda bailarina. Sí, mi sueño se ha hecho realidad. Lástima que debido a la pandemia, no he podido disfrutarlo mucho. Desde entonces, he bailado solo dos actuaciones de Los tres mosqueteros antes de que la Ópera Nacional de Letonia tuviera que cerrar de nuevo por la situación sanitaria. Evidentemente, estoy esperando el día en que se vuelva a abrir y poder compartir de nuevo el escenario con el público.
¿Cómo está viviendo esta situación tan difícil para todo el mundo y para las artes en especial?
No está siendo un período fácil para nadie. Afortunadamente, ha terminado el año 2020 y estamos con la esperanza de mirar hacia 2021. Durante la pandemia, todo se detuvo. Esto me ha dado la oportunidad de explorar otras facetas de mi vida, que no había tenido tiempo hasta ahora debido a mi apretada agenda de actuaciones. De alguna manera, este período de descanso para el cuerpo ha fortalecido mi mente. Me veo optimista de cara al futuro, porque algún día todo volverá a la normalidad y podremos volver a deleitar al público. Es solo cuestión de tiempo.
Su último papel como Odette y Odile, además de ser uno de los roles más desafiantes para cualquier bailarina, ha estado claramente marcado por la COVID-19. ¿Podría decirnos cómo ha preparado este rol en tiempos de pandemia?
El estreno de El lago de los cisnes se pospuso de abril a septiembre. Fue un período difícil y de gran incertidumbre, porque nadie nos podía asegurar si podríamos o no actuar. De todos modos, en verano empezamos a trabajar intensamente en ello (incluso mentalmente era más difícil que físicamente). ¡Quería creer que el estreno no se cancelaría y tuve suerte! Bailamos, a pesar de la situación en el resto del mundo. Muchas otras compañías admiraron la suerte que tuvimos de poder actuar.
Rebobinemos hasta sus inicios. Si no me equivoco, empezó a bailar a los cuatro años. ¿Qué le empujó a ello? ¿Ha tenido en su entorno algún ejemplo que le estimulara a inclinarse hacia las artes?
Cuando era pequeña me gustaba bailar encima la cama. Mi madre se dio cuenta y me inscribió en una escuela de ballet. Años después, como vio lo mucho que me gustaba bailar y que no se me daba mal, me metió en la Escuela Coreográfica de Riga. Yo todavía era demasiado joven para darme cuenta de cómo se iba a desarrollar mi camino. Pero ahora, veinte años después, no tengo ninguna duda de la elección tan inteligente que hizo mi madre: ella supo ver lo mejor para mí. Además, en mi familia no soy la primera artista, ya que mi abuelo paterno es escritor.
A los 11 años comenzó su formación profesional en una escuela reconocida internacionalmente por haber formado a bailarines de la talla de Mijaíl Barishnikov, Alexander Godunov o Maris Liepa. ¿Qué es lo que hace que haya tantos y tan buenos bailarines en Letonia? ¿Qué importancia tiene la danza para la cultura letona?
En primer lugar, en nuestra cultura es muy importante tanto el canto como el baile; proviene del folclore letón. Desde 1873, se lleva a cabo el Festival de la Canción y la Danza de Letonia, un evento fundamental para el desarrollo de la identidad nacional letona, que finalmente desembocó en nuestra independencia como país en 1918. Por ello, podría decirse que la danza está en nuestra sangre. En segundo lugar, Letonia es una nación trabajadora. Somos diligentes y con el trabajo, la gente puede lograr muchas cosas.
¿O es que tienen una pócima mágica de algún Panoramix del Báltico?
Ahhh... Sería estupendo si una poción así pudiera existir. Pero creo que el secreto de los bailarines bálticos es que pertenecemos a naciones pequeñas. Y como he dicho, trabajamos duro. Toda persona puede tener éxito si combina trabajo con talento.
Todos sabemos el esfuerzo que se requiere para llegar hasta donde ha llegado. En su caso, nada más graduarse empezó a bailar papeles importantes. ¿Cómo recuerda su primer año en la compañía? Fue bastante exitoso. En mi primer mes como bailarina profesional, bailé mi primer papel importante: el conocido pas de trois de El lago de los cisnes. Tras esta actuación, Aivars Leimanis (director artístico del Ballet Nacional de Letonia) me encomendó preparar mi primer papel protagonista: Zina, en el icónico ballet de Alexei Ratmanski The Bright Stream. Después de este estreno, obtuve los papeles del Hada de las Lilas y la Princesa Florina en la reposición de La bella durmiente ya al final de mi primera temporada.
Y desde entonces… Ha interpretado más de cuarenta. ¿Tiene especial afecto por alguno en particular?
Me gustaría mencionar a Odile. Fue mi primer papel clásico y también ha sido el que más veces he bailado a lo largo de mi carrera. Es un auténtico reto para la técnica. También ha sido muy importante para mí el rol de Giselle; es el más emotivo que he bailado. Después de cada actuación tengo tantas emociones que no puedo dormir durante horas.
¿Le queda todavía alguno en el tintero?
Pese a que he bailado las variaciones de Kitri en diferentes galas, y que he ganado medallas en diferentes concursos con su interpretación, nunca he bailado la producción completa de Don Quijote. Me encantaría bailarlo.
Un aspecto muy importante en su carrera han sido las competiciones. En 2016, ganó la medalla de oro en Seúl, en una de las competiciones más prestigiosas de la IFBC (International Federation of Ballet Competitions), auspiciada por el Consejo Internacional de la Danza de la UNESCO. ¿Cómo recuerda su participación en Corea del Sur? ¿Tenía expectativas de proclamarse vencedora?
Fue un período muy intenso. Me gustaría mencionar que antes de ir a Corea del Sur también competí en Riga. Unas semanas antes me puse enferma. Tuve que descansar una semana y no esperaba mejorar lo suficiente para poder competir. Después de esta pausa, llamé a mi director y me animó a competir. En ese momento, pensé que no era posible pero me arriesgué, me preparé y gané una medalla de oro y otra de bronce en ambas competiciones. Fue un período difícil, pero valió la pena.
“En mi primer mes como bailarina profesional, bailé mi primer papel importante: el conocido pas de trois de El lago de los cisnes”Su estreno en el rol de Odette en El lago de los cisnes, 2020. Andris Tone
¿Qué consejos les daría a todos aquellos bailarines que vayan a concursar por primera vez?
¡Atreveos! Esa es mi sugerencia para las nuevas generaciones que probablemente tengan miedo de intentarlo o que todavía no se sientan lo suficientemente seguros de si mismos.
Está claro que ha bailado en medio mundo. Un año antes estuvo de gira en Pekín con la compañía con motivo de la Presidencia de Letonia al frente del Consejo de la Unión Europea. ¿Qué diferencias encuentra en la percepción del ballet entre ambos países asiáticos? ¿Y con el ballet letón?
En Asia aprecian el ballet porque para ellos es un arte único de origen europeo. Si comparamos ambos países, probablemente sea China en donde haya una mayor disciplina en la preparación de sus bailarines. Me di cuenta de esto en la competición de Seúl, en donde estaban muy bien formados y tuvieron mucho éxito. En Letonia, estamos instruidos en el estilo ruso. En realidad, es difícil comparar ambos países, cada uno es especial.
También ha actuado en España. Y curiosamente todas ellas han sido en Sevilla, tanto en el Teatro de la Maestranza como en el Teatro Romano de Itálica. ¿Cómo fue su experiencia de bailar en la capital hispalense en plena ola de calor estival?
Para mí, que soy una persona del norte, fue una experiencia realmente exótica. Nuestros veranos no son tan calurosos y por eso, para mi cuerpo fue un auténtico desafío. Afortunadamente, las actuaciones fueron por la noche. De hecho, hicimos los ensayos cuando se había puesto el sol.
Y, ¿cómo responde mejor su cuerpo, con frío o con calor?
Por supuesto, el cuerpo de una bailarina necesita estar en calor. Si uno tiene frío, es más fácil sufrir lesiones. Pero como he dicho, soy una bailarina del norte y estoy acostumbrada a sentir frío. Pero prefiero bailar en el sur, porque hace más calor que en Letonia y no es necesario un calentamiento previo tan exhaustivo.
Entonces, ¿qué prefiere, bailar en su teatro habitual o explorar nuevos escenario?
Me encanta mi teatro, pero no me importa explorar otros escenarios también. Creo que cada teatro emite una energía diferente. En el mundo no hay dos iguales y, por lo tanto, es muy interesante explorarlos.
La pandemia se ha llevado por delante (entre otras muchas cosas) una gira en el Théâtre des ChampsElysées de París. Pese a la incertidumbre en que vivimos, ¿qué perspectivas tiene para la próxima temporada?
Voy a ser honesta, no tengo ni idea.
Esperemos que se cumplan y se puedan recuperar estas actuaciones para celebrar como se merece el centenario del Ballet Nacional de Letonia. Antes de finalizar, nos gustaría hacerle un breve cuestionario para que nuestros lectores puedan conocerte mejor.
¿Quién le ha influido más en su carrera? Mis profesores
¿Cuál es su teatro favorito? Sin lugar a dudas, la Ópera de París
¿Qué ballet se llevarías a una isla desierta?
Hmmm... difícil de imaginar. ¿Quizás el Cascanueces?
Si no fuera bailarina ¿Qué profesión habría elegido? Veterinaria
¿Y qué espera del futuro?
Volver a la normalidad después de la pandemia
“Me encanta mi teatro, pero no me importa explorar otros escenarios también”