Boletin Agata nº1

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Apreciadas y apreciados lectoras y lectores, Hoy, 8 de marzo de 2014, cumplimos 32 años trabajando por el reconocimiento y la garantía de los derechos humanos de las mujeres en Colombia; por la inclusión de sus intereses y necesidades en todos los campos, buscando con ello fortalecer su autonomía, autoestima y capacidad para exigir sus derechos. Hemos llevado, a cabo diferentes acciones de formación, asesoría, sensibilización, investigación y producción de conocimiento sobre la situación de las mujeres en el país, incidiendo en las diversas esferas de la sociedad, a través de un trabajo orientando a la transformación de las relaciones de poder -basadas en la desigualdad, la opresión y la subordinación de las mujeres-. Durante más de tres décadas nuestro quehacer político y social se ha encaminado hacia el trabajo con las mujeres; incidiendo para que las funcionarias y los funcionarios de diferentes entidades públicas y privadas las reconozcan como sujetos de derechos y cumplan sus responsabilidades constitucionales en materia de promoción, protección y goce efectivo de los derechos humanos de las mujeres en Colombia. Hoy, celebramos 32 años compartiendo con ustedes, ¡Ágata! Ágata nació del deseo de brindar una nueva opción de información a quienes como nosotras están convencidas y convencidos de que la palabra no puede dejar de existir, de que la comunicación debe seguir siendo la forma de retroalimentar los saberes y las experiencias. Ágata es Inspiración, creatividad, protección, conexión con la tierra, valor y capacidad de aceptación para superar obstáculos, elocuencia, fortaleza, sensación de paz. Ágata es la fuente en donde queremos que Usted; apreciada lectora y que Usted; apreciado lector, deposite su interés, su confianza y participación para que entre todas y todos logremos posicionar esta nueva forma de comunicarnos. Compartiendo los constantes cambios y avances en la comunicación, Ágata es la energía proyectiva que nos permitirá adentrar en nuevas dinámicas del lenguaje, sobrepasando con ello fronteras para seguir demostrando que las mujeres no solo construimos maneras de ser y estar en la vida sino que buscamos y encontramos puentes que nos permiten mostrarlas al universo.


Las mujeres en las elecciones al Congreso de la República 2014-2018. Gracias a la invitación de la Red Nacional de Mujeres y Casa Ensamble, hemos tenido la oportunidad de ver y oír, en un mismo escenario, a siete de las candidatas al Congreso de la República, debatiendo temas de interés político y coyuntural para las mujeres en Colombia. Compartimos con ustedes algunos apartes de las respuestas a las preguntas hechas por Marcela Sánchez de Colombia Diversa, y quien fue moderadora del evento. Las candidatas que participaron fueron: Claudia López (C.L) -Alianza Verde-; Elizabeth Castillo (E.C) -Partido Liberal-; Ángela María Robledo (A.R) -Alianza Verde-; Angélica Lozano (A.L) -Alianza Verde-; Sofi Ospina (S.O) -Alianza Verde-; Emma López (E.L) –Polo Democrático y Sofia Gaviria (S.G)–Partido Liberal-. ¿Qué propuestas y estrategias tiene como candidata al Congreso de la República para garantizar promover, proteger y avanzar en el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo IVE y los derechos de lesbianas, gays, bisexuales, transgeneristas y personas intersexuales? C.L: Si queremos que los derechos de las mujeres, los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres se cumplan y los derechos a la igualdad de los colombianos-as LGBT, la principal estrategia es impedir la reelección del señor, Alejandro Ordoñez. El presidente de la republica, no tiene reelección indefinida, el fiscal no tiene reelección indefinida, la contralora no tiene reelección indefinida, el procurador sí. Eso es un problema también de diseño institucional que hay que solucionar. Eliminar esa reelección indefinida porque la reelección indefinida de cualquiera genera corrupción y abuso del poder, y debemos además modificar las funciones de la procuraduría que se prestan a abuso, como por el ejemplo, esa intervención indefinida a procesos judiciales. E.C: Creo que para el impulso y promoción de los derechos sexuales y reproductivos, valen dos estrategias; una, hacer efectiva la legislación, obligar a que estas sanciones se cumplan. Ese es un punto importante en el cual podemos ayudar, por medio de debates de control político y es forzar a que los acuerdos suscritos se cumplan, a que las convenciones se hagan efectivas y a que se conviertan en una realidad para la vida y la salud de las mujeres, la efectiva exigencia y el efectivo cumplimiento de los derechos sexuales y reproductivos. La segunda parte tiene que ir necesariamente enganchada con la promoción, defensa, impulso y rescate del Estado laico. Yo no creo que sea tanto un solo procurador, creo que lo que hay aquí es una agenda fundamentalista religiosa tremendamente dañina para el país.


Teniendo en cuenta el actual proceso de paz y negociaciones, ¿Cuáles estrategias tiene para fortalecer la participación democrática de las mujeres durante el proceso de diálogo y que permitan, que en el post-conflicto logremos el desarrollo de una paz sostenible y justa para las mujeres? C.L: Llevamos año y medio las organizaciones de víctimas donde predominan mujeres, porque las sobrevivientes de la guerra son fundamentalmente mujeres. Rogando a los señores de las FARC y el gobierno, que tengan la caridad de recibir las organizaciones de víctimas, no ha sido posible. Creo que debe ser un mandato y una obligación para esas conversaciones, el que efectivamente reciban estas organizaciones, no solamente sus comunicados y propuestas. Pero me parece que el punto clave no es solamente participar en el proceso del diálogo, apoyo el proceso de paz porque me parece lo sensato para la sociedad colombiana, en particular para los colombianos y colombianas más pobres de la Colombia rural, afrodescendiente, e indígena pero el gran desafío para las mujeres y para los hombres por igual, el gran desafío del post-conflicto no es desmovilizar a quinientos mil guerrilleros y a las FARC, el gran desafío del post-conflicto es incorporar a quince millones de colombianos abandonados en las regiones de Colombia, abandonados en los llanos, en el sur, el pacifico, el Caribe ese es el gran desafío. Y lo que nosotras tenemos que liderar en este país es una propuesta para decirle a la sociedad colombiana, la clase política colombiana, que tenemos que ser serios; que mientras este país siga recaudando solamente el 14% de sus riquezas en impuestos y se roba el 4%, no vamos a poder hacer las inversiones en carreteras, titulación de tierras, gestión del desarrollo, que es lo que necesitan las mujeres de las regiones de Colombia, para salir adelante. E.C: Creo que ese proceso del post-conflicto pasa por cauterizar bien las heridas, y el problema que tenemos en este momento es que la voz de muchas víctimas no ha sido escuchada y específicamente, la voz de las mujeres en el conflicto, esa es una voz que desafortunadamente no ha logrado permear el proceso del acuerdo de paz. Porque el proceso de paz no termina con la firma del acuerdo, sino que ahí empieza, y las víctimas deben tener una voz mucho más fuerte allí. Existen dos áreas fuertes de trabajo; primero, las mujeres víctimas de violencia sexual, esas voces deben escucharse y hay que generar estrategias para que las mujeres puedan hablar. No es simplemente diciendo vaya donde el fiscal y denuncie, hay que generar espacios de confianza donde puedan hablar y esto es también necesario para lesbianas, gays, bisexuales y transgeneristas que han sufrido desplazamiento o ataques de grupos armados en el marco del conflicto y cuyas voces no han sido visibles. A.R: Llevo casi cuartos años trabajando en esta tarea y he escuchado a miles de mujeres exigiendo sus derechos y que su voz sea escucha en la Habana. Además el tema de no abrir este espacio no fue tanto de las FARC, fue más del gobierno cuando propusimos el vuelo de paz. Entonces, creo que esa tarea hay que seguirla haciendo y como copresidente me he asegurado de que las propuestas que lleguen a la Habana, lleven incorporada la perspectiva de género. Ahora bien, para hacer realidad esas condiciones materiales de vida digna, plena de las mujeres hay que fortalecer la institucionalidad y exigir a estas tres precandidatas a la presidencia que se pronuncien sobre una nueva institucionalidad. El Ministerio de las Mujeres es fundamental, tenemos por lo menos 10 leyes que no se cumplen, como la ley de las mujeres rurales, de las cien mil viviendas que hay una perspectiva de género que quedó incorporada con nuestra tarea; la Ley 1438 en el tema de salud que tiene perspectiva de género y no se cumple, la ley de la economía del cuidado para que se haga una realidad en el mecanismo, no solo de reconocimiento sino redistribución. Deben quedar garantizados en el marco jurídico para la paz y justicia transicional, mecanismos


de memoria, verdad y reparación con perspectiva de género. A.L: Ya van a empezar a quedar en libertad los procesados bajo justicia y paz, van apenas quince procesos de restitución de tierras efectivos, hay un saldo pedagógico enorme de lo que no debe pasar en el proceso de justicia transicional y debemos afrontarlo pronto, será delicado porque debemos judicializar a los culpables de todos los bandos. Con Claudia que somos formula a la Cámara y al Senado, promovemos algo muy difícil y es el mismo rasero para los que cometieron los mismos crímenes sean los paramilitares, la guerrilla, las fuerzas militares. Eso será un proceso que nos pondrá a prueba porque viene de un proceso de paz largo y complejo como será el de varias décadas, viene un proceso de reconciliación en el que saldrán verdades, y tendremos que conmutar penas por verdad, por actos simbólicos que nos ayuden a sanar esas heridas, actos simbólicos de reparación colectiva donde salgan muchas de las heridas pendientes y que queremos ocultar. Porque los de un bando quieren todo el peso de la ley para el lado opuesto, pero esta barbarie solo la vamos a parar con unos raseros de justicia, con estándares comunes y con una disposición de aprender, empiezan a quedar en libertad en dos semanas los señores de justicia y paz, y las víctimas se quedaron esperando la verdad, la reparación. S.O: Creo que es por eso que quisiera estar en el Congreso, he tenido la oportunidad de trabajar con el Consejo de seguridad de las Naciones Unidas en muchos países africanos que vivieron un conflicto, como la Republica Democrática del Congo, Liberia, Afganistán y Pakistán. Justamente haciendo este oficio, asegurando que la perspectiva de género se incluya en todos los procesos de paz. Que si se avanza con los derechos de las mujeres en los procesos de paz, sí. La experiencia internacional lo demuestra, pero tenemos que garantizar que realmente existirá una participación plena de las mujeres en todo el proceso de paz. ¿Qué significa?, pues hay dos mujeres allá eso no es suficiente, se demoraron muchísimo, se necesitan recursos, que realmente se incluya la perspectiva de género en todos los puntos del acuerdo marco del proceso de paz y en la reconstrucción post-conflicto. Significa también que tenemos que revisar la ley de víctimas porque si tiene perspectiva de género pero no le está dando soluciones a las víctimas para que regresen a sus tierras, tienen derecho a las tierras pero no hay insumos y es indigno que en Cali, en Llano Verde les están entregando casas de 36 metros cuadrados cuando la gente necesitan los insumos y el apoyo del Estado para poder vivir una vida digna. Yo tengo la experiencia de la reconstrucción post-conflicto con perspectiva de género y me encantaría hacer esa contribución a mi país. E.L: Como activista de los derechos humanos, haciendo parte de las diferentes mesas desde la sociedad civil, nos estamos replanteando que hay que recuperar las voces de las víctimas. Las voces de mujeres, hombres y otros géneros que han venido luchando por aquella reivindicación, pero la pregunta es cómo trabajar para hacer restauración realmente, cómo trabajar apuestas comunes de una manera donde las mujeres que no tiene voces, las tengan, además la implementación de esas normas que aún son letra muerta. Por otra parte el tema de la movilidad y la violencia van unidos, hoy hay un reto grandísimo creo que todas nos vamos a encontrar con eso en el Congreso y el reto es unir las voces de toda Colombia, que necesita representación de mujeres como nosotras, yo creo que desde el Caribe colombiano también existe un problema serio de violencias, de negación de voces porque en el Atlántico se están viviendo temas serios con las Bacrim y


los jóvenes, entonces nos preguntamos qué va a pasar con el post-conflicto. Tenemos también que hablar del control político, creo que aquí estamos quienes vamos a poder trabajar para Colombia, el dolor de las mujeres y los hombres, además aquellas voces que todavía no han sido escuchadas. S.G: La falta de representación de la mujer y de las víctimas con justicia en la Habana es una realidad y se debe visibilizar mucho más. Por supuesto mi compromiso no es solo con o por las víctimas o las mujeres, sino con todas esas personas con las que nos hemos encontrado, con ese 80% de colombianos que tiene las necesidades básicas insatisfechas en este país, entre este 80% hay muchísimas víctimas mujeres, pero yo no les voy a preguntar de quién son víctimas, sino cómo las vamos a poder apoyar, además visibilizar esas realidades. Yo me comprometo a ser un puente de comunicación permanente con el Congreso para que todo el país se entere de la realidad de esas mujeres y víctimas. ¿Cuáles estrategias y propuestas tiene para enfrentar la situación de violencia contra la mujer y para hacer efectiva la ley 1257? C.L: En 779 municipios con menos de 20 mil habitantes, no hay Estado, podemos seguir emitiendo leyes divinas y hacer debates de control político, pero si no construimos estado en toda Colombia no habrá quien aplique estas leyes. No creo que la solución a esto sea crear un ministerio en Bogotá de las mujeres, para que nuevamente tenga una burocracia desde la capital mandando señores con maletines de vez en cuando a las regiones para hacer las visitas, porque esto no es Estado. Si queremos lograrlo hay que plantear metas serias, a los próximos 10 años duplicar el recaudo de nuestras riquezas en impuestos, pasando de un 14% al 28% para ser un país serio, además luchar contra el contrabando y acabar la corrupción. E.C: Digamos que en leyes Colombia tiene un marco normativo lindo, completo y si lo miran desde afuera dirían “ese país está hecho, allá no tienen problemas”. Problema es que la ley sin recursos y sin dientes no sirve y ahí está el problema de la violencia contra las mujeres. La cifra oficial dice que una mujer cada seis días muere a manos de su esposo, compañero, ex-esposo o excompañero. Estoy segura de que la cifra es más alta, porque en las 11 ciudades donde estuve cada semana en cada departamento, oí la noticia de una mujer asesinada, este es un tema urgente y una de mis propuestas centrales es que se necesitan cinco cosas; recursos, infraestructura; es inaceptable que en este país no exista por departamento un hogar de acogida para víctimas de la violencia e inexplicable que el que hay en Bogotá tiene 40 camas y permanece desocupado, capacitación no sensibilización, sanciones administrativas cuando existe una mala prestación del servicio, y la responsabilidad del Estado, porque cuando una mujer tiene medida de protección y aparece asesinada es responsabilidad del Estado. A.R: Pasar del escritorio al territorio, no es solo con esta ley, hay que hacer pedagogía. Yo salí mucho y hablé con diferentes funcionarios gubernamentales para saber qué es lo que están haciendo y porque muchas veces se convierten en los primeros victimizadores de estas condiciones de discriminación y violencia contra las mujeres. Debemos impulsar una profunda transformación cultural, haciendo una tarea desde el Congreso de la República que es un ejercicio de corresponsabilidad, de-construcción de esta cultura patriarcal, convirtiéndolo en un intolerable.


A.L: Bueno, el Estado, al igual que nuestra sociedad, sigue teniendo una visión de que la violencia es intrafamiliar, las medidas de protección se dan casi cuando solo hay menores de edad en riesgo, no se atienden las violencias de género controladas en esta ley, sino que se mantiene el criterio de familia, del menor, las comisarios de familia, los operadores de justicia y a los funcionarios públicos en su mayoría, a pesar del esfuerzo de los recursos destinados a capacitación y sensibilización se mantiene el enfoque a la conciliación de las violencias, y de cuello de botella tenemos la violencia económica. Esto es un tema estructural, falta que se cumpla la reglamentación, exigibilidad, que se cumpla la sanción, pasar a lo disciplinario, urge una nueva capacitación, nuevas generaciones que cambien el chip de los comisarios de familia. Pocas entidades territoriales han apropiado recursos, ejemplo da Bogotá que comenzó con el plan de igualdad para las mujeres, la política pública, existen casas refugio y queda mucho pendiente, pero da ejemplo de una experiencia institucional. Además programas de justicia de género que tienen que extenderse no solo en el país, sino en cobertura y eso se llama dar más recurso. Porque no hay que poner a hablar a las tres candidatas presidenciales del ministerio de la mujer, hay que ponerlo en la agenda presidencial para que sea un tema de Estado. S.O: Yo hago parte del movimiento social de mujeres de Cali y siempre hemos estado presentes, visibilizando todo el tema de violencia contra las mujeres, según las cifras desde el año pasado el 30% de estos casos eran en el valle del cauca, la semana pasado estuve en Buenaventura y es realmente triste ver como las mujeres en este lugar continúan luchando contra la violencia. En lo que va del año ya van siete feminicidios en Buenaventura, se hizo una marcha de 30 mil personas y ningún medio nacional ni local visibilizó esto. El país y las grandes empresas se continúan beneficiando con buenaventura, pero la miseria, la violencia sigue ensangrentando el suelo de este lugar con los cuerpos de las mujeres. Entonces desde el congreso, estaré haciendo realmente un control político para que se implemente ley y que no exista más impunidad. E.L: Fui parte de la construcción de esta gran incitativa a nivel de país. El Atlántico en la región Caribe ocupa el primer lugar de feminicidios y por esto he logrado visibilizar con acciones públicas -con el apoyo de la Red Nacional y Mujer contra la violencia- a través de los medios de comunicación y la academia. Pero cuando tomé la decisión de asumir este reto, también dije que no iba a marchar más o hacer plantones, vamos a posicionar el tema de feminicidio desde un escenario donde se trabaje por la garantía del derecho de las mujeres a una vida libre de violencia, vamos a seguir trabajando para la implementación de la Ley 1257 y con el apoyo de las organizaciones, especialmente del atlántico. S.G: Bueno, este país está lleno de leyes e incumplimientos, obviamente el ámbito legislativo es hacer leyes, control político y visibilizar las comunidades que uno representa, en este caso lo que hay que hacer es un control político muy riguroso de quienes no han hecho cumplir esas leyes, me parece que es un tema de visibilizarían también de dar a conocer esas estadísticas y casos de violencia contra la mujer. Yo pertenezco a un colectivo que se llama amate mujer, siendo parte de la imagen y Antioquia tiene unas estadísticas supremamente dramáticas en temas de violencia contra la mujer. Estaría absolutamente dispuesta, aunque no hace parte de mis cinco proyectos de ley, pero estoy totalmente de acuerdo en liderar con las compañeras un proyecto de ley que refuerce y además busque sensibilizar muchísimo más la violencia contra la mujer. A la Red Nacional de Mujeres y a Casa Ensamble, gracias por la invitación.


el 8

¿Sabes porqué se conmemora día Internacional de la Mujer?

marzo

El 8 de marzo, fecha reconocida como el Día Internacional de la Mujer, es para muchas personas la celebración

de la existencia de aquellas madres, hermanas, tías, primas, abuelas, amigas, sobrinas, compañeras, esposas. Muchos varones y muchas mujeres lo celebran entregando detalles, con la idea de “hacerles homenaje” a aquellas mujeres que forman parte de sus vidas. Sin embargo, pese a ese deseo de hacernos sentir “amadas y consideras” por un día, son pocas las personas que reconocen en sus acciones y palabras el verdadero significado de esta fecha.

El Día Internacional de la Mujer no es una dádiva, no es un día que espontáneamente se nos otorga por ser mujeres; es una conmemoración que ganamos desde hace más de 150 años cuando unidas decidimos no ceder más terreno a una sociedad patriarcal, no ceder más en nuestros sueños, nuestra fuerza, nuestros ideales. Ha sido una lucha constante a través de la cual las mujeres optamos por buscar las formas, las maneras de exigir respeto por nuestra vida y nuestro cuerpo. La subordinación, la opresión, el ser tratadas como seres inferiores, nos llevaron a encontrar un camino hacia la exigencia de nuestros derechos. Es importante tener claro que la conmemoración del 8 de marzo es gracias a la semilla sembrada por miles de mujeres, muchas de las cuales perdieron la vida en el intento de otorgarnos una mejor a quienes vendríamos a ocupar este mundo.

Los datos históricos que conmemoran este día se originan en diferentes años, meses y países, el primero es el

27 de septiembre de 1909 donde las mujeres que trabajaban en fábricas textiles de Manhattan, realizaron una huelga solicitando mejoras en la calidad laboral, este hecho duró 13 semanas. Luego el 25 de marzo de 1911 en la ciudad de New York, se generó un incendio en la fábrica Triangle Shirtwaist, ocasionado por el dueño de esta compañía que causó la muerte de aproximadamente 140 mujeres trabajadoras, las cuales realizaban una huelga para exigir un trato digno.

Luego de estos acontecimientos se celebró el primer día de la mujer

el 19 de marzo de 1911 en Alemania, Austria, Dinamarca y Suiza. Aunque fue en la II Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas en agosto de 1910 que se proclamó el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, gracias a una propuesta de la socialista alemana Luise Zietz que fue respaldada por más de 100 mujeres procedentes de 17 países


que asistían a este evento. El objetivo era promover la igualdad de derechos, incluyendo el sufragio para las mujeres. Luego la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en 1977, también proclamó el 8 de marzo como Día Internacional de los derechos de la mujer y la paz internacional. Ahora, ya hemos “Hecho Memoria”


... Con Norma Enriquez

Socióloga de profesión, con posgrado en derechos

humanos y en derecho internacional humanitario, Norma Enriquez Riascos, forma parte del grupo de feministas que coadyuvó a la creación de la Casa de la Mujer. Su pensamiento político, autónomo y decidido, ha dirigido su vida de militancia siempre encaminada a la vindicación de los derechos humanos de las mujeres. 1. ¿Cuándo y por qué inicia la Casa de la Mujer? La Casa de la Mujer abre sus puertas en 1982: Gobierno de Turbay Ayala. En medio de una época de represión, cuando los allanamientos, detenciones ilegales, las desapariciones forzadas y la tortura se tornan en el método oficial para doblegar a la “izquierda”, se afianza simultáneamente un movimiento que desde mediados de los 70s venía retomando las banderas del feminismo y con novedosas formas de expresión, hacen suyos el resurgir de los valores de libertad, igualdad y solidaridad, extendiéndolos desde las mujeres, al país y a la región. Con idealismo en Bogotá, se realiza el año anterior, el Primer Encuentro Feminista Latinoamericano, que permite a más de trescientas mujeres, constatar los sueños y las prácticas compartidas que buscan transformar un mundo profundamente injusto. En buena medida, esta constatación contribuye a la cristalización de los primeros proyectos feministas, entre ellos, la Casa de la Mujer. 2. La Casa de la Mujer fue constituida legalmente un 8 de marzo, ¿Qué representa para usted esta fecha? Una conmemoración de las luchas realizadas por las mujeres de diversas partes del mundo, en diferentes momentos históricos, por alcanzar el reconocimiento de su dignidad plena al interior de las diversas sociedades, en igualdad de condiciones que el varón, lo que supone la conquista de su autonomía, el goce de oportunidades y el respeto real y simbólico para su ser mujer y para los roles que desempeñe en todos los espacios de la vida social, política y económica.


3.

¿Qué aportes políticos y sociales ha generado la Casa para las mujeres colombianas?

La Casa de la Mujer ha contribuido en conjunto con buena parte del movimiento feminista de Colombia en todos los procesos proclives a lograr la paz, la garantía de los derechos humanos, con especial énfasis en los derechos de las mujeres, a la profundización de la democracia, mediante múltiples propuestas, denuncias y acciones encaminadas a hacer visible socialmente la desigualdad, la exclusión y la opresión que viven las mujeres, pese a los avances obtenidos en las cuatro últimas décadas; ha impulsado la organización y participación social y política de las mujeres en diversos sectores y generado procesos tendientes a acompañar a las actoras que se encuentran en situación de mayor vulnerabilidad debido a las violencias que enfrentan y en general por la violación constante de sus derechos en el espacio público o en el privado. 4.

¿Cómo ha sido la participación de las mujeres en el actual proceso de paz?

En diversos espacios y con diferentes expresiones, el movimiento de mujeres ha apoyado el actual proceso de diálogo para alcanzar la paz, en la misma dirección que lo he hecho en anteriores ocasiones pero ahora con mayor presencia, con propuestas propias, y con mayor reconocimiento social y político. Aunque lograr un proceso de consensos que permitan actuar de conjunto para lograr la paz sería lo ideal, creo que se perciben avances en búsqueda de articulaciones que posibiliten al movimiento de mujeres posicionar propuestas y análisis en perspectiva de alcanzar el cese al fuego y una transición eficaz hacia la democracia real que soñamos quienes sentimos que jamás la hemos vivido en nuestro país. 5.

¿Cuál considera que debe ser el papel de la mujer en una nueva concepción de país?

Las mujeres somos diversas, pero desde mi perspectiva política, aspiro a que los movimientos democráticos de mujeres fortalezcan su capacidad de participación, para impulsar cambios que garanticen a todas y todos las-os colombianas-os la garantía y disfrute de los derechos humanos. Que sea realidad la superación del miedo a la violencia, al hambre y la denegación de oportunidades. Considero que en sus roles de transmisoras de la cultura establezcan y participen en la realización de procesos encaminados a la recuperación de valores éticos civilistas, a la eliminación de la corrupción, a la desmilitarización de la vida civil, al afianzamiento del respeto por quienes piensan y se expresan de manera diferente. 6. ¿Cuáles son los retos de las organizaciones sociales (mixtas, feministas, de mujeres) de cara al potenciamiento de la mujer como sujetos políticos y sociales? Los retos son muchos y las formas de lograr constituirse y avanzar como sujetos sociales y políticos pueden conjugar acciones afirmativas que logren borrar la brecha acumulada durante siglos, pero fundamentalmente deben propiciar la autonomía de las mujeres para decidir desde sí mismas y de acuerdo a la construcción de visiones colectivas, el tipo de sociedad que desearían tener. Estos desafíos no pueden quedarse a nivel de organizaciones sociales, debe producirse un esfuerzo simultáneo y sostenido desde el Estado y la sociedad en su conjunto. 7. En su opinión, ¿Qué actores son responsables de garantizar a las mujeres una vida libre de violencias? Considero que el Estado, con toda su institucionalidad debe asumir las obligaciones que le competen para poder hacer efectivas las garantías para que las mujeres vivan una vida libre de violencias. La sociedad en su


conjunto debe contribuir a la transformación de concepciones y prácticas que afianzan los simbólicos del poder asociado a la violencia, a la imposición, a la constitución de las diferencias en desigualdades que actúan en contra de quienes tradicionalmente no han tenido poder económico, político y social. Los esfuerzos deben encaminarse a lograr construir visiones igualitarias, respetuosas de las diferencias y de la libertad para vivirlas y expresarlas plenamente, en tanto ellas no afecten los derechos de otros/as. 8.

¿Cómo percibe a las mujeres en las elecciones al Congreso del próximo 09 de marzo?

Pienso que las mujeres han ganado más espacios, han ganado más respeto y credibilidad para sus apuestas, pero a la mayoría de ellas se le olvida que en su calidad de mujeres, deberían trabajar porque las mujeres alcancemos la igualdad.


Ni dios, ni patrón ni marido Desarrollada en la Argentina obrera, donde las mujeres comien-

zan a trabajar en las fábricas textiles y a identificar la desigualdad entre varones y mujeres. Con unos patrones que las trataban indignamente obligándolas a soportar 13 horas de trabajo continuo. Las mujeres eran además señaladas como personas limitadas para pensar y capacitadas única y exclusivamente para la crianza. Para justificar los sueldos bajos –solo la tercera parte del salario de un varón- los patrones se escudaban en que las empleadas se embarazaban, tenían que amamantar a sus bebes y además cuidarlos cuándo se enfermaban. Una discriminación que se trasladaba al hogar, escenario privado donde las mujeres desempeñaban el rol de madres y esposas, cuidando a sus hijos e hijas, y obedeciendo las disposiciones de un marido.

En

respuesta a la subordinación, la discriminación y la opresión de las cuales eran víctimas, una mujer alzó su voz exigiendo un trato igualitario y respeto por sus derechos y los de sus compañeras. Este personaje es protagonizado por la actriz, EugeniaTobal, quien toma la decisión de montar un periódico denunciando las injusticias y el maltrato que reciben las mujeres en la sociedad, ya que los varones se niegan a escucharlas por medio de sus protestas en las fábricas. Este es un film de Laura Maña creado en Argentina, basado en la vida de Virginia Bolten y su periódico La Voz de la Mujer, cuyo lema es “Ni dios, ni patrón, ni marido”.

Le

invitamos a ver este recomendado feminista, en: http://www.youtube.com/watch?v=lCGJzZUT_Uc


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