Perfil: Oscar Franco
“Estoy orgulloso de Cavialpa y del crecimiento de las empresas asociadas” El ingeniero Oscar Franco nos recibe en su oficina y comparte con nosotros acerca de sus inicios en la profesión, su paso por la Universidad donde tuvo su primer contacto con la dirigencia deportiva, que más tarde volvería a ejercerla en la directiva del club de sus amores, Cerro Porteño, la experiencia de haber sido parte de la fundación de Cavialpa, y su percepción del gran momento que atraviesa el sector de la construcción vial en nuestro país.
Formación “Uno cree que ingeniería es únicamente matemática, pero ésta es sola una de sus herramientas, después se da cuenta que comprende muchas otras cosas”, comenta el ingeniero Franco al referirse a la carrera que adoptó como profesión. Su madre le sugería que siga medicina, otra de las disciplinas pujantes en aquel momento, pero finalmente terminó eligiendo Ingeniería a causa de su facilidad con el manejo de los números. Inició sus estudios universitarios en la Universidad Nacional de Asunción en 1971, finalizando la carrera en 1976. En el momento de la especialización eligió, la parte vial, ya que en su quinto año de facultad fue contratado por la empresa Benito Roggio e hijos, en la cual permanece hasta hoy día, hace más de 41 años.
“Me especialice en la parte vial casi por obligación, porque cuando Roggio vino para hacer el aeropuerto de Asunción, me contrataron y me ubicaron en la parte vial, que a mí no me gustaba en principio. Prácticamente no había obras viales, en esa época, pero había ya un ingeniero que me decía que las obras viales era el futuro de toda esta zona”, detalla el ingeniero. Durante su paso por la Universidad había tenido su primer contacto con la dirigencia deportiva. “En la facultad también me involucré en la parte deportiva como dirigente porque era delegado de ingeniería en los famosos juegos universitarios de esa época, fue un momento muy lindo en mi vida” comenta Franco.