"PROGRAMA CULTURAL"
para una acción
de la Academia
con miras futuras
SOBRE LOS PROBI~EMAS URBANOS
La acción de la actual administración municipal de la ciudad capital, es admirable, llena de asombro, se la aplude. La pobla ción ve asombrada como en poco tiempo, unas personas de acción: han arremetido, vencido la inercia, la falta de imaginación, que caract~rizó la obra municipal en los últimos cuarenta años y en un corto lapso lleva a cabo una serie de obras necesarias que la ciudad esperaba I obras de circulación, autopistas, playas de estacionamiento,plazas, escuelasl cinturón ecológico, etc. y la puesta en vigencia de el nuwvo codigo de edificación que esperaba encajonado hacía trece años ,tt, Este proceder ha puesto en evidencia la inoperancia de los gobiernos políticos que tuv~ la ciudad en los últimos cuarenta años. y nos hace pensar con temor en el futuro.
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Ante estos hechos que aplaudimos cabe preguntarse, es normal ese proceder 1?1 Es as! como se debe gobernar una ciudad 111 La respuesta eS NO. Es de lamentar que para que la ciudad funcione y cambie para adecuarse a la situación presente, sea necesaria la aparición de personas exepcionales. Paris una vez tuvo su Haussmann.
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Un r~pido an¡lisis de los que es la ciudad servir~ para 11us trar mi planteo I Una ciudad es el continente de una comunidad7 Podemos decir que asr como la casa es la sede de la familia, la ciudad es la sede de una co~unidad y, la misma relación que hay entre la ca1!lil y la familia que la hab1ta, debe haber entre la ciu_ dad y la comunidad que la ocupa. La ciudad es un organiSMO vivo. Como tal esta en constante cambio, crece y renueva süs células. Asi como la naturaleza procede a PLAN y sus productos tienen un desarrollo mjxlmo, alcanzén un estado óptimo y no mas, la ciudad debiera ser simi.lar I crecer hasta tanto y, no hacerlo en forma indef1ni.da. Algo que creee y aumenta su tamaño perdiendo la pro porción inicial • a la lar~a se desmorona. La ciudad ad~m¡s de ser un or~anlsmo vivo es un producto arti ficial. E~ta 4rclficialidad de la ciudad obliga a Mantenerla perrnanenteM~nte en est~do de eficiencia, de lo contrario, corre el peligro, como Urlti máquina que se descuida, en convertirse rápidamente én chatarra. Se vé a diario COMO un corte de luz, una huelga de basureros, la falta de agua, etc, actua sobre la vida de la eiud&d. La ciudad crece y su infraestructura se hace cada vez mas 1nsuficiente.y mas obsoleta. A diario puede vers~ en la ciudad - y santlr sus eonsecuencias - sus problemas • trifico. electricidad eorte~. agua, teléfonos, gas, estacionamiento, para no m~ncionar sino los más evidentes. Las autoridades de !a ciudad, cualesquiera sea su origén, ema_ nan de la comun dad y esta, la comunidad, debe ser conc1ente que es ella, la sociedad, la que edifica, la que hace planes, etc La comunidad debe asulnir su responssbilidad, no puede estar esperan_ do que le den las cosas resueltas, o solo protestar cuando el hecho esta consumado. Para asi proceder hay que dar a la pobla clon una edue~cion urbana. í
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Los problema~ urbanos son agudos. No pueden ser resu~ltos en un momento. requ1~rén ti@rnpo y previsión. Requlerén planes con miras & un futuro inMediato o lejano. La ciudad de Am8t~rdam
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/////// Habría que conocer el estado edilicio actual de la ciudad, obras en ejecuci6n, obras a realizar, problemas detectados ~ B cuya soluci6n hay que preveer, etc. Hay que desarrollar una labor de educación y de propaganda para que llegue a la población. Una frase de Tomas Mann, pro_ nunciada por este escritor con motivo de un centenario de su ciudad natal~ la ci.udad de LUBEK, es aclaratoria, dijo I LA CIUDAD ES UNA OBRA DE ARTE COLECTIVO. En esta simple frase esta sintetizada Da relación ciudad-población. Como arte la ciudad necesi!a imaginación e intuición, como obra colectiva la parti_ cipacion coneiente de la poblacion o al menos de sus elites. Para actuar debemos eonocernos, conocer nuestro modo de ser, nuestra c&pscidad, e~ doloroso señalarlo pero caracteriza a nuestro pueblo, ser, urbanisticamente hablando incultos. En lo que atañe a la ciudad somos incultos. Carecemos de un' tradi ción urbana que guíe nuestro hacer. Tradición que hay que inl ciar. Y, en el uso de la tierra, se dá la paradoja, que siendo un país extenso y poco poblado somo avaros en su uso. La ciudad no puede ser totdlmente edificada, entre edificios, entre barrios deben haber espacios abiertos, parques, plazas , jard~nes, espa_ cio simplemente. Una autopista debiera correr entre arboles, verdes, pero no/entre ventanas II No se comprende que un edificio necesita espacio para emBlarzarlo y espacio que lo rodee. En la ciudad el 90 por cefnto de lo edificado es vivien da. Por eso la ciudad debiera ser edificada en función de la misma y, no de 1 especulación como son construidas todas las ciudades argentinas. Este tema, fundamental, a mi juicio, da tema para la acción. Cuando esto se Urbanismo e8 el uso inteligente del suelo. haga entre nosotros, la ciudad ser armoniosa y digna de ser vivi_ da. Habrán desapar~cid08 todos esos problemas que envenenan la vida cotidiana de los porteBos.
23 juni.o de 19AO Tucumán.