Relatos 2019 Enfermería Vespertino by OESCPLE

Enfermería Vespertino

Relatos de Halloween 2019 aaaaa

En un instante Galilea Martínez Sánchez 13/10/2019 Hace mucho tiempo existió una chica llamada Galilea, mexicana, era muy sutil, amable, inteligente, emprendedora, con una sonrisa muy bonita a pesar de tener los dientes chuecos, pero era de baja estatura por lo que le provocaba un poco de insatisfacción y como todo buen mexicano era víctima de las burlas de sus familiares, compañeros, maestros y todo el que se encontrara a su alrededor. Sin embargo, ella tenía la ilusión de ayudar a las demás personas con algún problema, tratando de remediar lo que a ella le pasaba, así que decidió entrar a la escuela de medicina, pero al parecer no cumplió los estándares y las expectativas, por lo que la mandaron a la benemérita escuela de enfermería y obstetricia, lo que le provoco mucho estrés ya que ella notaba que no solo era físicamente de baja estatura, sino que sentía que estaba por debajo de muchas cosas en este caso el no llegar a entrar a la escuela de medicina. Después de todo ella accedió a entrar a la escuela de enfermería con la misma ilusión de ayudar a las personas más necesitadas. Un día antes de entrar estaba toda temerosa, pero a la vez entusiasmada por la escuela, los maestros y los compañeros de clase, sin embargo, eran las 6:15 am. del otro día y ella acababa de despertar, pensó “primer día y llegare tarde” ya que ella entraba las 7:00 am., así que se cambió de ropa, tomo su mochila y salió a toda prisa para llegar a la escuela. Por el hecho de llegar tarde al entrar a su salón se robó la atención de todos que le veían con ojos de asombro por su diminuta altura y en el fondo se escuchó un murmullo, << La escuela primaria está a la otra esquina>>, y todos rompieron a carcajadas, incluso el maestro de anatomía que se encontraba dando la clase. Galilea fue muy indiscreta al manifestar su molestia, pero no se atrevió a decir nada simplemente tomo asiento cerca de la puerta. El profesor pidió hacer equipos de tres personas para subir al laboratorio y comenzó el alboroto de los alumnos, << ¿No se puede de cuatro?, ¿Quién quiere estar conmino?, A nosotros solo nos falta uno. >>, pero al parecer nadie se daba cuenta de la existencia de Galilea y en su timidez ella no se atrevía acercarse a nadie para hacer equipo. El profesor indico que los equipos que ya estaban podían ir subiendo a laboratorio, y el salón comenzó a vaciarse poco a poco, al último quedo un chico sentado en la esquina contraria de donde estaba Galilea, este tenía un aspecto serio y a la vez enfadado, era de una gran estatura y robusto, su cabello era largo y de color negro, sus cejas eran gruesas, sus labios eran torcidos, pero estaban un poco resecos, se volvió hacia galilea con una mirada penetrante, se levantó lentamente de su lugar y camino despacio hasta el lugar donde se encontraba Galilea. Se paró justo en frente de ella y con su altura opaco toda la luz que la cubría, ella levanto la mirada y le sonrió, pero él, al contrario, se dirigió con un gesto de desagrado y le dijo: “Solo quedamos tu y yo, ¡así que ya apúrate!”, Galilea hizo una expresión despreciativa torciendo los labios y le contesto: ¿No te enseñaron modales?, pero la ignoro y le dijo: ¡YA APURATE!, saliendo del salón y dirigiéndose al laboratorio. En el laboratorio el chico tuvo una posición de gran indiferencia e inclusive de rechazo a lo que

Galilea le pregunto el porqué de su actitud, el chico voltio enfadado y le dijo: ¿acaso no te has visto? Me ha tocado con un espectro, Galilea retrocedió y no dijo nada. Al día siguiente a la entrada de la escuela el policía se dirigió hacia Galilea pidiéndole su identificación a lo que ella accedió, sin embargo, el policía la vio con desagrado y añadió “considero que no deberían aceptar a personas anormales en instituciones de gran veneración como es la ESEO, pero lástima que no estemos en una misma sintonía”, voltio los ojos y le devolvió la identificación a Galilea. En la clase de química la profesora pidió que se presentaran y dijeran 5 virtudes y 5 defectos, en el turno de Galilea, alguien grito, -Esta bien si solo dices defectos-, por lo que todos echaron a reír, la maestra un poco disgustada le llamo la atención al grupo pidiendo un poco de respeto. Al terminar la clase Galilea se dirigió a la maestra para dar las gracias, pero ella no le tomo importancia y solo respondió: -Nosotros no pedimos nacer, así que tu no tuviste de otra- y se retiró. En un momento poco prudente algunas de sus compañeras estaban planeando una fiesta de iniciación a lo que Galilea se atrevió a preguntar cuando seria la fiesta, sin embargo, ellas no le tomaron en cuenta y la hicieron a un lado. En otro momento en la clase de salud ella trataba de pedir la palabra, pero la maestra no se la daba y consideraba a otros de sus compañeros, en medio de su desesperación por la falta de atención le toco por accidente la cintura a la maestra por lo cual ella reacciono con enojo gritándole: -No hablo con mutaciones-. Así era todos los días, si no se burlaban de ella, la trataban mal, la insultaban y actuaban como si ella no estuviera. Galilea no soportaba todos los ataques que tenía por parte de todos ya que en su hogar pasaba lo mismo, su madre constantemente la comparaba con una de sus primas, sus hermanos la golpeaban por el hecho de estar más grandes y la llenaban de insultos a todas horas. En medio de la decepción Galilea se volvió dura, ya no era amable, ya no sonreía como lo hacía antes, se comenzaba a vestir de negro, veía a todos con desprecio y comenzó a tramar la venganza de todos los que le habían hecho un daño. La maestra de química había dado fecha para la próxima práctica, mencionando que harían conjunto con el profesor de anatomía para una mejor retroalimentación, Galilea no lo pensó dos veces ya que esta era su oportunidad para desquitarse, así unos horas antes de empezar la práctica hizo una llamada a la escuela diciendo que había una alerta de bomba y comenzó el repliegue de todo el personal para checar las instalaciones y fue allí cuando todos estaban en el patio que Galilea se escabullo y cambio el ácido sulfúrico por ácido fluorhídrico, corto toda la comunicación del interior del laboratorio con el exterior. En la práctica antes de comenzar con las soluciones Galilea pidió ir al baño, pero esto solo fue para obstruir la salida del laboratorio para que nadie pudiera salir y pedir ayuda, el plan había salido a la perfección la maestra de química, el profesor de anatomía y los compañeros de salón murieron, pero era tan sigilosa que nadie supo cómo es que había pasado tal aberración. Pero eso no iba a parar, puesto que la venganza la hizo sentir tan bien, que la comenzó a hacer parte de ella, sin importarle quien se le parara en el camino, simplemente buscando su fuerza, su satisfacción, su debida altura.

¿Esto es real? 1EV2_#5_relato Comienzo mi rutina levantándome a las 10 am para bañarme, me cambio y exactamente a las 11.20 am termino para poder comer y así poder irme a mi escuela, llego ahí a las 2 en punto, siempre que llego a mi salón todos andan riendo y riendo por cualquier gracia escuchada pero ese día 6 de junio de 2020 llego normal al salón y veo que mi compañera jazmín esta echando un rio de lagrimas en el aula, rápidamente me dirijo hacia ella y mis demás compañeras que la rodean y la abrazan desconsoladamente, entonces le pregunto ¿Qué te sucede? Ella me empieza a contar que como es de costumbre llego a la escuela temprano más los martes que entrena futbol y vio como alguien con silueta muy delgada, color verde con cafe apuñalo muchas veces a la jefa de grupo llamada Íngrid pero temerosa corrió por ayuda y cuando volvió el cuerpo de Íngrid ya no se encontraba, a lo que todos empezamos a buscarla, mandarle mensajes etc., no respondió ninguno, lleno de sangre el aula los compañeros y yo empezamos a limpiar la sangre que era demasiada, todos mirándonos unos con otros, dudando de cada uno, se sentía la presión, nervios, hasta que la subjefa Daniela alzo la voz y dijo “no tenemos ni idea de lo que acaba de pasar, pero quiero que estemos unidos y juntos descifremos que paso con Íngrid”. Pasaron los días y empezó a invadir a la escuela un olor putrefacto que claramente venia del aula de cosas perdidas, en ese momento teníamos la clase de comunicación con el profesor Cesar el cual dijo “iré a ver qué es ese olor tan desagradable” pues él siempre había sido muy curioso así que abrió la puerta y en ese momento de un solo azotón callo el cadáver de la jefa de grupo Íngrid del 1EV2, al final de la semana la policía nos comentó que ella había sido apuñalada 51 veces todos nos quedamos impactados pues en el fondo era buena persona, después de eso sucedió algo muy extraño, nuestra compañera llamada Samantha falto a la escuela por una semana y ella jamás había faltado a la escuela por lo que todos nos preguntamos el por qué pero no le prestamos mucha atención pues tal vez estaba enferma, justamente el miércoles que teníamos de nuevo al profesor de comunicación la directora del plantel fue a darnos un aviso que nuestra compañera Samantha había sido encontrada muerta en el salón del GYM, la causa de muerte, dos lápiz enterrados en sus ojos y las vísceras de fuera por lo que mis compañeras y yo nos sorprendimos pues Samantha era buena muchacha, grosera a veces pero a todos les caía bien y me pregunte ¿Quién quisiera matarla?. Al día siguiente de ese suceso puse fotos de todos los alumnos de mi salón, Galilea, Jorge, Abril…. ¡¡¡Rayos!!! ¿Quién puede ser? Todos se miran tan buenos chicos, así que me dirigí a las 2 a mi salón cuando todos habían llegado y no podía evitar mirarlos con curiosidad de saber y saber sobre ellos con tan solo observarlos, empezamos a abrir los casilleros de cada uno por si alguien era el asesino pues enfrentarlo, me miran todos sorprendidos, con odio, con miedo, y yo me acerco a mi casillero y veo que hay unos cuchillos llenos de sangre, me echo a correr porque yo se que no fui, yo se que en esos momentos estaba en mi casa o haciendo cualquier otra cosa, aparte para que querría matarlos yo? Todos me persiguen, pero logro meterme al aula de audiovisual donde siempre solemos ver películas de enfermería y me pongo a analizar quién podría culparme por tan grotescos crímenes,

entonces los vuelvo a analizar cuando de repente volteo hacia mi lado derecho y noto que hay una persona bajita, solo se puede ver su silueta, el pizarrón se vuelve espejo, el entra ahí y yo también, me doy cuenta de que ahí comienza un mundo nuevo, crudo y cuando logro verlo completamente, me paralizo, me quedo sólida y me desmayo. Cuando despierto lo único que quiero desear es que todo sea un sueño, pero entonces eso se acerca a mí, no lo puedo creer era un extraterrestre café con verde, sus ojos eran tan grandes que me causan mucho miedo, así que me muestra los cuerpos de Samantha, Ingrid y entonces me pregunto ¿y los cuerpos que encontramos qué? El me da a entender telepáticamente que eran cuerpos falsos y que yo soy la elegida para poder guiarlos a ellos , me dicen que los cuerpos realmente no eran ellas, que los verdaderos cuerpos los tienen ellos, pero son para poder convertirlos en extraterrestres, me dicen que si los ayudo a desaparecer a cada uno de mis compañeros me dejaran vivir, así que acepto y cuando menos veo ya estoy rodeada de cada uno de ellos y los guío hacia el aula donde los extraen a cada uno de ellos y eso me causa felicidad ya que algunos me caían mal pero a la vez me sentía mareada, y me vuelvo a desmayar, cuando despierto veo a todos mis compañeros en capsulas, inconscientes, las paredes del lugar eran negras y babosas así que me invade el miedo y los extraterrestres no me dejan ir, me empiezan a poner sondas y como a mis compañeros me envuelven en una capsula, no puedo respirar, no puedo oír, no puedo respirar!!!! Y despierto, veo que son las 10 am mi hora de despertar, observo mi celular y tengo mensajes de todo el grupo, me doy cuenta de que están vivos, todo era un sueño, así que ese sueño me causa ganas de causarles daño a todos ellos, me dirijo a la escuela y logro desquitar todas esas ganas de matar. Se reporta a las 8 pm que los alumnos de la escuela superior de enfermería y obstetricia del grupo 1EV2 han sido asesinados por su compañera Gisela Ibarra la cual primero apuñalo a sus amigas en el baño y a los demás les disparo sin piedad destrozándoles a cada uno su cráneo, al final de esto ella también se disparó.

Relato Yazmin Lizett Rivas Martínez 1EV2 # 8 Esta historia comienza con los relato de sucesos ocurridos en una de las instalaciones del politécnico para ser más precisos en la ESEO (Escuela Superior De Enfermería Y Obstetricia), con anterioridad se murmuraba entre alumnos, profesores y personal de dicho instituto, que por las noches rondaban seres malignos, almas en pena, fantasmas, seres del más allá o como os quieran decir. Al parecer solo se mostraban por las noches y rondaban por los pasillos de dichas instalaciones o se escuchaban lamentos, gritos u objetos siendo arrastrados, pero todo cambio cuando un grupo de chicas encontraron algo que no deberían haber encontrado. Un día los chicos del grupo 1EV2 se quedaron hasta tarde en las instalaciones para poder recabar información para sus trabajos del segundo parcial, el grupo no creían los dichos rumores que se decían sobre esas cosas. Indagando en la biblioteca de la escuela, un grupo de chicas encontraron una caja detrás de uno de los anaqueles, su curiosidad era tan grande que decidieron sacarla de ahí; la caja era pesada y estaba cubierta de polvo, quien sabe cuánto tiempo habría estado ahí escondida de la vista de los demás, al abrirla su contenido no fue como ellas esperaban, no era de mucha utilidad, habían algunas fotos, cartas, documentos que no eran tan legibles, entre todas las cosas había un libro que les llamaba bastante la atención. Este libro tenía algo en particular, que les intrigaba mucho; no tenía algún título, editorial o ilustración en la portada, ¡en realidad no tenía nada! Lo más lógico era conocer su contenido. Pero al momento en el que iban a empezar a hojearlo un profesor que aún se encontraba en las instalaciones, entro y les dijo que ya era hora de retirarse puesto que tenían que cerrar la escuela. Los chicos asintieron guardaron sus cosas y dejaron los libros en sus lugares, pero una de las chicas del grupo que encontró la caja decidió guardar el libro en su mochila para examinarlo con más calma, que gravísimo error cometió al hacer eso. Al día siguiente en clase Gisela la chica que había tomado el libro, les comentó a sus compañeros que ella tenía el libro que aquella noche habían encontrado y que ahora sí podrían revisarlo. Cuando comenzaron a leer el libro, sintieron un pequeño escalofrió que comenzaba desde sus piernas y así continúo con sus cuerpos, a medida que iban avanzando con la lectura se fueron dando cuenta de que se trataba de un diario en el cual se relataban hechos macabros en la vida de una joven.

Las cosas que se narraban rebasaban por mucho las peores películas de terror. Tenían el miedo clavado hasta el alma, Brenda una de las chicas del grupo se negaba a que siguieran leyendo. Habían decidido parar y continuar más tarde, pero la curiosidad de Gisela era más fuerte y ella continúo leyendo aquel diario. Unos minutos más tarde, su mente estaba hecha trizas, pues en cada una de las páginas se narraban varias escenas paranormales y aun restaban barias páginas. Decidió saltarse hasta las últimas, las cuales eran muchas peor que las primeras. En algunas de las páginas había oraciones o frases en un idioma raro. Gisela recito algunas palabras y un escalofrió recorrió su cuerpo, sintió como unas manos la tomaban de las piernas y soltó un grito del susto interrumpiendo la clase de psicología; sus compañeros se sobresaltaron por tremendo grito, y de un momento a otro la luz se fue, trascurrieron unos segundos y se escuchó un segundo grito en el salón, en cuestión de unos minutos la luz volvió, pero Gisela ya no se encontraba en el salón; y Brenda comenzó a gritar, eso altero un poco al grupo. La profesora trato de calmarlos y ver que sucedía, ya que ella pensaba que se trataba de una broma de sus alumnos; salió del salón para informar de esto en dirección. La jefa del grupo Ingrid, se acercó al grupo de chicas con las que se juntaba Gisela y Brenda para saber qué había pasado. Las chicas no sabían que era lo que en realidad había sucedido, ya que ambas estaban tranquilas hasta hace un momento. Igual ellas querían saber lo que había sucedido hace unos instantes. Todo el grupo formo un círculo alrededor de Brenda, Samantha, Ivette, Jessica, Karla y Yazmin, para enterarse de lo sucedido. Ingrid ordeno al grupo calmarse, ya que estaban asustando más a las chicas. Cuando Brenda logro calmarse les conto a sus amigas el motivo por el cual había gritado. –Cuando se fue la luz, sentí como me presionaban las muñecas y en seguida vi sangre, mucha sangre. Me asuste tanto. – decía con una voz temblorosa. Ivette trataba de calmarla en sus brazos –Calma, ya paso. ¿Ahora lo más importante es saber que le paso a Gisela? –. Jessica se levantó diciendo – ¡Es cierto! ¡Tenemos que buscarla! –. Y así las chicas salieron en buscar a su compañera. Uno de los compañeros paso por el lugar de las chicas y vio el libro sobre la paleta de la banca de Gisela, le entro curiosidad y comenzó a leer, a medida que avanzaba su piel se le ponía de gallina y decidió parar de leer; no obstante la curiosidad de Nadia por aquel libro que les había visto a sus compañeras una hora antes, se acercó y lo tomo; otras chicas se acercaron con ella por la misma curiosidad del libro, le pidieron a Nadia leerles un poco en voz alta. Ella no se negó y comenzó a leerles un poco de aquel libro. La habitación se empezaba a sentir helada, los vidrios se comenzaron a empañar y el aire a sentirse pesado. Nadia detuvo la lectura puesto ya que se habían asustado todos, – ¿Y esto que es? ¡Nunca había leído algo tan aterrador! – Saraí le arrebato el libro a Nadia y esta continuó leyendo, haciendo burla del miedo que sentían sus compañeros, de forma burlona recito las frases que estaban en un idioma diferente, sin saber las consecuencias que estas les traerían. 7

Tras varios intentos de búsqueda no dieron con ella y decidieron regresar al salón. Karla se separó de sus compañeras para ir al baño, en cuanto entro no podía creerlo que estaba viendo, era Gisela tirada y amarrada, en el piso sobre un charco de sangre. La única reacción de Karla fue gritar. Al escuchar el grito de su amiga corrieron en busca de ella, Yazmin corría más rápido que todas y llego primero con Karla. Al ver la horrible escena del baño, Yazmin se acercó un poco para ver si es que su compañera aún tenía signos de vida, pero al momento en el que se acercó a ella esta alzo el rostro, su mirada era penetrante y escalofriante, sin vida alguna. El cuerpo de Gisela se levantó bruscamente con intención de lastimar a Yazmin o a quien estuviera a su alcance. Yazmin reaccionó inmediatamente empujando a su amiga Karla fuera del baño y encerrando a Gisela en él. Se escuchan gritos y rasguños del otro lado de la puerta, pero no cedió Yazmin al abrirle a ese ser que había poseído a su amiga. – Karla corre por las chicas y avísale a un profesor lo que ha pasado y venid aquí lo antes posible. No te tardes –. Karla corrió en busca de ayuda. Mientras tanto en el salón todos estaban muertos del susto al ver el tremendo escenario que se estaba presentando. Sarai estaba siendo levitada y azotada contra las paredes, salpicando a los demás con su sangre. Uno de los chicos que entro en pánico decidió salir corriendo por la puerta, pero su intento fue en vano ya que uno de los locker fue lanzado bruscamente hacia él, aplastándolo contra la pared; los gritos no paraban y las muertes tampoco. Varias chicas trataron de salir por la ventana, pero estas no se podían abrir. Karla regreso con las chicas y le dijo a Yazmin que no había señales de ningún profesor o personal de la escuela. Las chicas estaban súper asustadas he impactadas por lo que les habían contado Yazmin y Karla. Los ruidos que proveían del baño se detuvieron, y solo quedaba un silencio escalofriante, Samantha trato de abrir el baño para comprobar que lo que les habían contado era verdad, ya que jugar con algo así no le causaba nada de gracia. ¬– ¡Te lo suplico Sam no lo intentes! – Decía Karla con lágrimas en los ojos – ¡Es verdad todo lo que te contamos! – Ignorando lo dicho Samantha abrió la puerta y no había nada, estaba oscuro per no había nadie ahí; escucharon un ruido que provenía de afuera, al voltear Gisela se encontraba fuera del baño toda sangrienta, esta corrió contra las chicas haciéndolas entrar al baño y encerrándolas, pero Brenda logro quitarse de su alcance. El rostro y la mirada del cuerpo de Gisela se posaron sobre Brenda, ella salió corriendo para no ser alcanzada a ir bajando de las escaleras Brenda fue bruscamente empujada haciéndola rodar por todas las escaleras, lesionada trato de levantarse pero el cuerpo de Gisela no se lo permitía, tras varios intentos de huir de las garras del peligro, esto termino siendo en vano, perdiendo la vida al ser apuñalada en varias ocasiones por Gisela. ¿¡Crees que esto termino aquí!? Pues te equivocas. Es solo el comienzo……

Cuento de terror Itzel Romero Tapia Ciudad de México, 13 de octubre de 2019 Las noches de octubre son cuando el frio inicia, las lluvias caen y la semana de evaluaciones está a la vuelta de la esquina, el examen sorpresa de “preparación” del profe Daniel nos tiene preocupados. Melissa, Fernanda y Gerardo se ven angustiados por el examen que claramente todos reprobamos, actualizando la página frenéticamente esperando que el resultado obtenido cambiara. - ¡No puedo creerlo! En serio estudie – soltó Fernanda suspirando mientras sostenía su celular fuertemente en su pecho. - Ya sé, debimos hacer el grupo de estudio que Mel sugirió – mientras Gerardo decía eso, le dio un codazo a Mel la cual simplemente asintió. - Pues no estamos muy tarde – dije mientras veía el cero en la plataforma. Mel se levantó en cuanto termine de hablar y tomo sus cosas, diciéndonos con la mirada que la siguiéramos. - Espera, tengo todo tirado – grito Fer mientras de un brinco se paraba y se apresuraba a meter sus cosas en la mochila. - Avisare a mi hermana que saldré a mi hora normal – me levante de mi lugar y comencé a caminar detrás de Mel, mientras mandaba el mensaje. Mi hermana llegaba a ser un poco meticulosa con mi hora de salida. Al salir del salón se escuchaba un ligero bullicio en los salones, eran las 7 de la noche en viernes, sinceramente lo que muchos querían era salir cuanto antes, corrí para alcanzar a Mel y le sonreí cuando escuchamos a Gerardo gritar. - ¡Güey! Primero vamos a comer y luego estudiamos el fin de semana entero si quieren. - No ma, yo paso, si quieres ve a comer y nos alcanzas en la biblioteca. - Por dos – Fer secundo a Mel mientras yo solo me encogí de hombros, y le sonreí a Gerardo mientras levanta mi mano con tres dedos arriba. - Son unas traidoras, pero bien. Muero de hambre, denme veinte y las alcanzo – me dio un golpe suave en el hombro dando media vuelta en dirección a la salida. - Veinte minutos, no más no menos. – Sonreí y le enseñé la lengua. - Sinceramente quiero irme ahora mismo, pero no me daré el lujo de reprobar e irme a extra – Melisa señalo la biblioteca.

Cuando entramos a la biblioteca sentí un escalofrió recorrer mi espalda, atribuyéndolo a los horribles cambios de temperatura, en verdad hubiera tomado la chamarra esta mañana, mirando a todos lados no encontré por ningún lado a ningún encargado, por lo que simplemente nos registramos, dejamos nuestras mochilas en el estante y nos dirigimos las tres al cuarto de libros, revisando un poco el área de anatomía, cuando en un susurro escuche mi nombre. - ¿Qué? -susurramos al unisonó. - ¿Qué de qué? – contesto extrañada Mel. - Nada, olvídenlo – suspire dejando el libro que tenía en manos y voltee a ver lo que llevaban. Ambas negaron con la cabeza a lo cual solo me encogí de hombros, pero de nuevo escuché mi nombre acompañada con una risita a espaldas mía, y de nuevo un escalofrió recorrió mi cuerpo entero, no habían sido ellas, estaban frente a mí, pero también era imposible que escuchara algo detrás mío, cuando la estantería estaba tocando mi codo, sacudí mi cabeza, intentado alejar el pensamiento. Respire profundamente y cuando estaba a punto de articular palabras de nuevo, la luz se fue en un santiamén, dejándonos en una obscuridad abrumadora. - ¡Ah! – Mel soltó los libros y se aferró a mi brazo- odio la obscuridad. - También yo – dijimos al unisonó Fer y yo. - Espero Gerardo vuelva pronto – susurro Fer. - Maldita sea, este viernes a sido un asco. – prendí la luz de mi celular alumbrando frente mío, pero la sangre se me helo, una pequeña niña de aproximadamente 5 años estaba viéndonos en la entrada del cuarto, sosteniendo lo que parecía ser un oso de peluche, sin embargo, este no contaba con la cabeza, comencé a levantar mi vista junto con la luz que la alumbraba, y pude distinguir un vestido verde con holanes claros, al llegar a su cara sentí un abismo en mi pecho, su piel parecía de porcelana, que si la tocaras esta estaba a punto de romperse, poseía una sonrisa que no inspiraba más que terror absoluto, sin embargo, mis piernas estaban a punto de flaquear ya que donde se supone sus ojos deberían estar, no había más que cuencas vacías, y cuanto más las observaba no hacía más que devorarme el alma. En un suspiro de dolor que aquella pequeña soltó, la luz regreso de pronto, pero ella no estaba, Fer y Mel estaban pálidas, mi respiración estaba a mil por hora, pero me arme de valor. - Tranquilas, seguro que esto no es más que una broma de mal gusto- dije viéndolas mientras intentaba sonreír, respire profundamente para que mi cuerpo volviera a la normalidad - ¡Esto no es gracioso! – grite – ¡Vamos a reportar esto a prefectura! Los ojos de Fer estaban llenos de lágrimas, el pecho de Mel estaba errático, empecé a caminar, pero Mel se aferró de nuevo y me vio fijamente mientras negaba con la cabeza. - No creo que sea buena idea Itzel – susurro – si esto es una broma no sabemos que más puedan tener en mente. - Eso no era una broma, ninguna broma podría transmitir este sentimiento – soltó Mel como si de un aliento se tratase, con su mano apretada a su pecho.

- Entiendo – suspire, cierto, debo ser realista, ¿Entonces gritar? Si gritamos, algún encargado debería venir a callarnos - ¿Gritamos? - Itzel – de nuevo escuche mi nombre, siendo susurrado en mi oído – corran. En cuanto termino de hablar, la fuerza que había reunido desapareció, note que fue lo mismo con las chicas, pero a cada paso que dábamos las luces detrás nuestro comenzaron a tronar, siempre había considerado el cuarto de libros un lugar pequeño pero organizado. Mi mirada no perdía de vista la puerta, pero no importaba que, parecía que el pasillo se alargaba cada vez más. - ¿Chicas? – escuche la voz de Gerardo, sonaba temblorosa al otro lado de la habitación. - ¡Ayuda! – grito Mel, pero el aliento le falto. El rostro de Gerardo apareció en la entrada de la habitación y por fin sentí que la habitación dejo de parecer infinita. Fernanda me supero por tres zancadas y lo abrazo con fuerza, al llegar fuera, me aleje instintivamente de la entrada de la habitación. - Larguémonos de aquí – suspire mientras trataba de recobrar el aliento, tome mi mochila y le di la suya a Mel, sin embargo, la mirada de Gerardo también transmitía miedo - ¿Qué pasa? - Esto sonara demente, pero no pude salir del edificio. Todo se encontraba cerrado, cuando regrese- dijo con cautela – no había nadie en los salones. Parece como si todos…hubieran desaparecido. - Estas bromeando, ¿Cierto? - Las lágrimas de Fernanda comenzaron a brotar sin control - ¿Qué demonios está pasando? Melissa toco con fuerza el cuarto donde el personal de la biblioteca trabaja, pero no había respuesta. - Creo que lo mejor que podemos hacer es salir de aquí, no me siento bien estando cerca de ahí – señalo Fer con la mirada la habitación de la que recién salimos. - Seguro están en el auditorio – dijo Mel, comenzando a caminar fuera del lugar. - No hay señal – comente después de hacer varios intentos de llamadas a mi hermana, los mensajes en WhatsApp se veían sin entregar. - Lo sé, intente llamar a Ingrid y a Dani, pero es como si no hubiera línea. Chicas, esto está muy mal. - Acabamos de ver a una maldita niña sin ojos, ¡Eso es lo que esta jodidamente mal! Se escucho un siseo detrás nuestro, apenas audible, pero nos hizo contener la respiración, estábamos a punto de llegar a Gestión, pero no ceso, volteamos al mismo tiempo y de nuevo estaba ahí, esa pequeña con una sonrisa burlona. - No importa a donde vayan – la escuchamos decir en un susurro justo a lado nuestro, pero a la distancia que estaba era imposible que lo dijera de esa forma, mis lagrimas comenzaron a brotar – siempre vamos a jugar. Corrimos con dirección al auditorio, y las puertas costaron abrirse, la esperanza de que alguien estuviera ahí se desvaneció de inmediato, no había más que lugares vacíos y la obscuridad reinaba el lugar, solo al fondo, en el escenario había una débil luz, donde un par de huecos comenzaron a vislumbrarse, y lo supe, era esa niña,

mirándonos. Con fuerza sonó una melodía, que provenía del piano detrás nuestro, una melodía que estaba llena de dolor y desesperación. - ¿Qué quieres? – grito Mel desesperada - ¡Nadie piensa jugar contigo! ¡Déjanos en paz! Comenzamos a escuchar una risa infantil, pero cada vez sonaba más terrorífica y llena de maldad, conforme esta continuaba, en el podio comenzó a verse una gran figura negra y con ojos rojos, llenos de ira y maldad. - Pero el juego, ya comenzó – susurro, apareciendo a lado mío, sosteniendo mi brazo, dejando una marca. Gritamos juntos, y recuerdo que todo se volvió borroso, pero el dolor que estaba en mi brazo era abrumador y al mismo tiempo era un sentimiento de perdición. Abrí mis ojos lentamente, y todo era luz y resplandor. - ¿Itzel? ¿Estás bien? – escuche la voz de mi mamá, mientras sostenía mi mano. Estaba mi familia entera ahí, los observé a cada uno, pero un dolor punzante me hizo ver mi brazo. - Estoy bien, ¿Y los demás? ¿Qué es esto? – dije señalando mi brazo sostenido por esposas, volví la mirada a mi familia, pero algo era extraño, donde se supone sus ojos debían estar, no había más que esa obscuridad. - Quién sabe – se acercó la que parecía ser mi hermana menor mientras sonreía con tono burlón- te lo dije, el juego comenzó. Mi corazón se detuvo un momento, y una fuerte punzada en mi cabeza sentí, lo sabía, en el fondo de mi ser… Esto no tendría fin.

Detrás de la ventana... Téllez cabrera Itzel J. 1EV2 # 7 Ellas pueden oírte… Su historia debes contar, si no ellas te han de encontrar... Era un día como cualquiera, me levante temprano pensando en no salir apresurada porque siempre se me hacía tarde para ir a mis clases en mi escuela de enfermería (ESEO) , prepare mi comida , hice las labores de mi casa y finalmente salí al tomar el transporte pero me resulto un poco raro , el día no era normal algo tenía lo sentía en cada poro de mi piel , pero mientras caminaba a tomar mi combi una señora ya grande con un rostro ojeroso de cabello fino y blanco un poco maltratado y delgada que se le podían ver los huesos, con un atuendo un poco viejo parecía haber salido de otra época , se me acercó y me dijo que si la podía ayudar a cruzar la calle ya que llevaba una maleta muy pesada , con gusto accedí a ayudarla , le dije que me agarrara del brazo y que me diera su maleta . Después de ayudarla a cruzar la calle me dijo: eres muy amable y por ayudarme te daré un consejo, no vayas a tu destino al menos por hoy, si vas una gran sorpresa te vas a llevar y tu vida definitivamente va a cambiar pero no para bien… desconcertada me la quede viendo le sonreí y le dije: todo va a estar bien, no me diga eso me asusta un poco, ahora la dejo aquí que tenga buen camino y un hermosos día pero antes de irme ella me tomó del brazo y desesperada me repitió, no vayas a tu destino quédate en casa ahí estarás a salvo , me dio mucho miedo así que corrí para cruzar la calle pero ella gritó : cuenta su historia mi niña cuenta su historia … Me subí a la combi y para olvidar la situación pasada me puse a oír música , mi celular contaba con el 90 % de batería pero parecía que algo no quería que llegara a mi escuela , se ponchó la llanta de la combi y se bajó el chofer a arreglarla pero no tenía el repuesto de llanta , ya iba tarde así que me baje y tome un taxi , a los 10 minutos llegue a la escuela iba a clase de crossfit , me encontré a unas cuantas compañeras y me puse a hacer ejercicio , mientras tomaba la clase se fue la luz en toda la escuela y se nublo el día empezó a hacer mucho frío y de la nada comenzó a llover , todos nos sacamos de onda pero no le prestamos mucha atención , Ingrid y yo nos fuimos a bañar a las duchas , claro una en cada ducha diferente , el agua estaba helada y una corriente aire muy fuerte azotó la puerta del gimnasio y se empezaron a caer las cosas de todos lados , asustadas salimos a ver Ingrid y yo que es lo que estaba pasando pero no había nadie en el gimnasio parecía que habían desaparecido rápidamente nos cambiamos para ir a ver afuera que es lo que pasaba ya que nos arreglamos salimos a inspeccionar ,pero no todo estaba normal nada fuera de lugar todo fue culpa del aire , en mi mente traté de tranquilizarme no dejaba de pensar en lo que la señora me había dicho me estaba poniendo muy inquieta , ya fuimos a clase y tome la primera hora, todos estábamos en el salón pasaron como unos 40 minutos cuando me empezó a dar mucho sueño y para no quedarme dormida voltee a la ventana y vi 2 niñas paradas frente a ella con

un aspecto muy feo usaban vestimenta blanca como un blusón y no se les veía el rostro lo tapaba su pelo estaban agarradas de las manos y una estaba sangrando del vientre ,me talle los ojos rápidamente porque pensé que era producto de mi imaginación por el sueño pero no, seguían ahí y después oímos que alguien se cayó de la terraza , todos los salones salimos a ver qué pasaba y vimos al chico que se mato tenía todas sus partes del cuerpo esparcidas por el suelo y un gran lago de sangre lo rodeaba , lo más raro es que cuando fuimos a pedir ayuda los directivos no estaban , ni profesores , ni policías , solo estaban alumnos de todos los semestres , mi grupo se juntó en el salón y empezó a comentar que es lo que estaba pasando , estábamos asustados en busca de respuestas Nadia intento llamar a emergencias pero no había señal monde salió a ver de nuevo a fuera pero otra vez lo raro sucedió solo quedaban los salones de abajo los de primer semestre no había nadie más , el temor de saber qué es lo que pasaba Montse , Sarai y yo salimos a ver si afuera alguien nos podía ayudar , pero las rejas de la escuela estaban cerradas con llave todo estaba cerrado , no había nadie en servicio médico ni en vigilancia mucho menos en el estacionamiento , entonces esperamos a ver si alguien pasaba por la calle para poder pedir ayuda y que nos sacaran de ahí , pero la calle estaba desierta , nadie pasaba , les dije a Monse y a Sarai que yo estaría afuera esperando y que ellas entraran al salón . pasan unos 5 minutos cuando otra vez alguien se aventó de los baños del tercer piso esta vez fueron dos chicas murieron con las manos entrelazadas , otra vez todos salimos a ver qué pasaba pero de nuevo desaparecieron 3 salones solo quedaba el 002 , 003 y el 001 nos reunimos los salones que quedaban porque estábamos muy asustados caía la noche nadie tenía señal en sus celulares , yo ya contaba con el 70 % no había luz y no tenemos contacto con el mundo exterior parecía que solo era nuestra escuela y que no había nada alrededor , eran las siete de la noche cuando pasó otro accidente una chica de otro salón agarró un cuchillo de la cafetería y se empezó a cortar el antebrazo de arriba hacia abajo , unos chicos corrieron a detenerla pero parecía poseída fuimos a buscar provisiones a la enfermería pero antes de que pudiéramos llegar ella desangró y murió , era un impacto muy fuerte para todos ese día presenciar tantas muertes , volví a mirar hacia la ventana y ahí estaban de nuevo esas dos niñas pero ahora si la vieron más personas , ya se les podía ver lo que debería ir su cara , porque no tenían rostro solo era una sombra negra y las órbitas de los ojos comenzaron a reírse y se fueron corriendo es la última vez que las vimos o eso creímos , paso una semana nos sostuvimos con el alimento que había en la cafetería y nos bañamos en las duchas del gimnasio , ya quedaban pocas provisiones , no había señal y no teníamos contacto con nadie y ningún familiar de nadie había mandado a alguien a buscaros , los cuerpos los pusimos en el kiosco que estaba en canchas lo cubrimos con las cobijas que tenían los maniquís en los laboratorios de usos múltiples , esa misma noche subimos a la terraza Ingrid, génesis y yo a disfrutar de las estrellas , pero oímos un ruido en el laboratorio de obstetricia fuimos a ver qué pasaba y descubrimos una puerta en donde se supone que guardaban los materiales o eso creímos , la puerta estaba cerrada con llave y la pateamos hasta que abrió porque de ahí provenía el ruido , ya que abrimos la puerta vimos que había un cuarto parecía de un manicomio , había una ventana muy grande pero tenía tabiques que cubrían la vista , en la cama había unas notas muy viejas con una letra muy bien hecha junto a una muñeca de porcelana que tenía la boca cosida con puntadas grandes y decían : Querido diario , no estamos locas sabemos lo que pasa aquí pero cada vez que intentamos decir algo nos va peor , debemos salir de aquí , están experimentando con nosotros , acabo de oír ruidos horribles en el cuarto de al lado y he oído que alguien se ha cortado el brazo con un cuchillo de arriba hacia abajo , ayer le dieron a mi hermana una terapia de esas que te queman el cerebro cuando te ponen unos aparatos en las sienes , le duele grita mucho ,no sé qué hacer intenté hablarle pero solo se la pasa mirando esa gran ventana , quiero salir de aquí , escucho solo gritos y llantos no estoy loca , fue mi madre mi madre tiene la culpa la odio!! Ella nos trajo aquí nos

encerró en este infierno y todo porque la caché engañando a mi papá, fingió que estaba loca y que era un acto de rebeldía me fue a votar aquí con mi hermana, pobrecita ella no tiene la culpa, solo porque enseñó una prueba que lo que decía era cierto, una carta de su amante, mi padre no nos pudo defender, ella lo mato, tengo que irme vienen por mi tengo que ocultar esto o me ira peor… Vimos una foto, estaban ellas y su madre, la madre era la señora que ayude ese día pero mucho más joven y llena de vida, las niñas eran hermosas con los ojos claros y grandes el cabello largo y negro y de una tez apiñonada. Y al voltear las tres ahí las vimos sentadas en la cama, teníamos tanto miedo que nos temblaban las piernas, les grite: que es lo que quieren? no hicieron nada , pero cuando quisimos huir de ahí cerraron la puerta y se abalanzaron contra nosotras y pudimos ver lo que nadie más pudo , parecía que habías viajado a través del tiempo , era un manicomio un hospital muy antiguo , había gente atada de brazos y piernas , fetos en frascos , partes del cuerpo humano despedazadas una escena horrible , las niñas nos guiaron a donde empezó todo , nos mostraron su historia después de que su madre las dejó , la madre llamada Clara le dijo a los doctores que estaba loca y que habían pecado , que habían atentado contra su vida , de inmediato encerraron a las niñas en el cuarto con esa gran ventana , a la semana ellas vieron lo que pasaba ahí , todo era venta y experimentos con cuerpos humanos a los locos los llenaban de medicamentos y los dejaban morir en su propia suciedad para después quitarles las partes del cuerpo y venderlas , con las madres hacían lo mismo les abrían el estómago en dos y sacaban sus fetos las amarraban de los brazos y piernas para que no pudieran defenderse , a las niñas les pegaban por ser impuras y a los niños los castraban ,alguien se aventó del techo y dos muchachas se mataron juntas con la promesa de no abandonarse nunca las niñas se llamaban Eli y Ana , Eli tenía 11 años y Anna tenía 13 , Anna intentó escapar por la ventana mientras ella dormía para poder contar todo lo que había visto y así buscar ayuda para sacar a su hermana , pero la cacharon y la mandaron a un cuarto a dar electrochoques hasta dejarla sin hablar y la aventaron al cuarto, Eli vio como aventaban a su hermana así que después de tanto pensarlo decidió matarse con ella aventándose de la ventana con su hermana agarradas de la mano Elí cayó sobre una estaca de fierro que le perforo el estómago y Anna se rompió el cuello , sus partes terminaron por el suelo pero su muerto no le importo a nadie , poco después cerraron el manicomio y abrir nuestra escuela con las herramientas que tenían ahí , dejando así por accidente ese cuarto con esa gran ventana . Ingrid pregunto entonces porque es que había hecho esto y habían matado a los alumnos y ellas contestaron: porque no dijeron nuestra historia Entendemos pues que murieron de la misma forma en que esos pacientes en el manicomio lo hicieron, Génesis y yo prometimos que escribimos su historia pero que esto debería de acabar lo juramos por nuestra sangre a lado de esa ventana, encontramos sus cuerpos y los sepultamos en el jardín. Todo acabó, pareciera como si nada de esto hubiera pasado, todos olvidaron todo, menos nosotras tres, las muertes de los chicos de la ESEO nunca se supieron pues esto no le convenía todo regreso a la normalidad las personas que desaparecieron se encontraron en una calle abandonada sanas y salvas, pero no entiendo porque es que yo encontré a Clara ese día y porque es que me ayudó, o eso creí Un día llegando ama casa me enteré de que Clara era mi vecina y que ella se embarazo después de que interno a sus hijas y que su nueva hija Lucia producto de su amor con su amante es mi mejor amiga la cual una vez la salve de que muriera en un accidente de auto y que ese día que la ayude a cruzar con su maleta y me dio el consejo es porque se iba y sentía culpa de lo que les había pasado a sus hijas y que ese día se cumplían 30 años de su muerte .

Nunca más supe de clara ni de mi mejor amiga parece que se las comió la tierra y que nunca existieron, ahora cuento esta historia para que tú que la estés leyendo se la cuentes a alguien más porque si no ellas te encontrarán y cosas malas te pasan ……

LAS FAUSES DE ESEO 1EV2 #9 Era un día muy frío en internado de ESEO, lo cual era raro, ya que la institución siempre era cálida. Los alumnos no le tomaron mucha importancia porque había prioridades ese día, todos y cada uno de ellos estaba inmergido en una semana de exámenes del segundo parcial, entonces debían aprender desde la trayectoria de madre Orem, hasta la ubicación de los glúteos mayores (las pompis, pa´los cuates) pero no esperarían que ese frío cambiaría su vida radicalmente. En el grupo de 1EV2 (los bebés de primer semestre) se encontraba Dany una niña alta, pecosa de pelo negro y grandes ojos, había días que su tez era tan blanca que se podía percibir los capilares en los pliegues de piel superior de músculo-mucoso móvil que cubre a los ojos (párpados), siempre andaba alegre con una sonrisa que hacía que se rasgaran tanto sus ojos que parecía cambiara de nacionalidad y en las clases de comunicación específicamente, decía disparates, siempre con sus comparaciones y analogías de Shrek. Junto a ella, sus dos grandes amigos, uno de ellos, Jorge, era una bestia, lo que emanaba de su ser eran barbarie, era técnico en sistemas computacionales y ayudante paramédico, contadas las veces que decía algo digno de recordar, era de estatura media, pelo obscuro y utilizaba lentes su lugar favorito en el mundo era el baño. Abril, era roomie de Dany, compartían el mismo sentido de alegría y sorn , siempre andaba cometiendo disparates, fingía abrir la puerta de una patada, amaba el deporte, el básquet para ser precisos susurraba cosas o quizá pensaba en voz alta y nunca se dio cuenta, caminaba a brinquitos como niña pequeña, pero tal vez, con todo eso, era la más sensata de aquel trío disparejo complementario, era de estatura media, tez morena apiñonada y pelo ni ondulado, ni lacio. Jorge, Dany y Abril, se hallaban estudiando en el quiosco del patio trasero -Jorge ¿por qué estás tan feo?- dijo la pecosa con absoluta seriedad -Yo soy hermoso ¿sí? Y antes de seguir estudiando, voy al baño- lo dijo mientras se paraba para dirigirse a los baños del gimnasio. -¡Raro!- Gritó Abril –Ya se había tardado- dirigiéndose a Dany. Las dos se echaron a reír. Al alzar la vista vieron como todo el personal de la cafetería iba saliendo cabizbajo, voltearon a verse mutuamente consternados. -¿Qué estará pasando?- preguntó Abril. Ingrid, que estaba buscando a todos los del grupo respondió – Órdenes de la nueva directora, ahora chicos, vayan al salón que debo darles un aviso-Claro jefa, tú dices rana y saltamos ¿o no April? -O-BVI-O- Contestó Abril resaltando cada una de las erróneas tres sílabas de la palabra. Ingrid sonrió, más a la fuerza que de ganas, algo en su gesto indicaba preocupación. Las dos se percataron de eso y Dany dijo:

-No te preocupes, sale Jorge del baño y vamos- Le brindó un sonrisa cálida, como de apoyo-GraciasContestó Ingrid. Los tres fueron al aula 002, y como siempre se oían bullicios de las pláticas de los veintinueve alumnos. Entró Ingrid y todos se quedaron callados. -Chicos, la directora ha desaparecido, nadie sabe dónde está desde ayer, lo más extraño es que desapareció dentro de la escuela, tengan mucho cuidado, no vayan solos a ningún lado, por el momento la dirección la ocupará alguien más, no perteneciente a la mesa directiva, fue una decisión establecida por mayoría de votos así que habrán muchos cambios, esperemos para bien. Empezaron los cuchicheos, de repente entró el maestro Ornelas. -Chicos, al auditorio- dijo con entusiasmo, no era raro en él sin embargo algo había de extraño. Todos se dirigieron al auditorio, callados y ordenados, decidieron sentarse todos juntos en dos filas continuas sin dejar ni un espacio. -Espero y esté guapa- dijo Jorge. Abril y Dany lo voltearon a ver con cara de consternación. -No cabe duda Jorge, eres todo un Tarzán, igual de bestia- Dijo Dany moviendo la cabeza en señal de negación. -Oh pues, era para romper la tensión- dijo Jorge –Ni en un momento así te dominas Jorge- replicó Abril, los tres sonrieron cuando de repente entró una mujer alta, muy hermosa de tez muy clara y pelo negro como el ébano. Su melena era lo más impresionante, era tan largo, como su alto de la mujer. Llevaba puesto un vestido negro, pegado hasta los tobillos, el cual dejaba ver su esbelta y perfecta figura. Todo el auditorio quedó perplejo. -Hola muchachos, buenos días- hizo una pausa y al unísono el auditorio contestó su saludo –Me llamo Luisa, seré su nueva directora, espero, deseo en realidad, que me acepten y me lleguen a ver como a una amiga, las puertas de mi oficina estarán siempre abiertas, espero y entiendan las pequeñas modificaciones que tendré que hacer para que esta, su escuela, sea una potencia politécnica, no se preocupen, les llegará un manual con el que podrán guiarse. Gracias muchachos, pueden regresar a sus aulas- Salió de la misma forma imponente como con la que entró, nadie habló, nadie replicó, todos estaban perplejos a causa de la belleza tan inhumana de aquella mujer. -Ya cierra la boca bestia- Dijo Dany, despacio y con cierto temor, pero Jorge no podía ni parpadear. Regresaron todos a sus respectivas aulas atónitos y como lo había dicho aquella hermosa mujer, entraron dos hombres, igual de hermosos, con los manuales que estaban personalizados, junto a estos entregaban un paquete. Fueron llamando uno por uno, al retirarse todos comenzaron a abrir las cajas. Dentro había una nota: “En cuanto lo reciban, favor de hacer uso de él según las indicaciones. Gracias” -Pues no está tan mal- Dijo Abril –No está nada mal- replicó Javi, compañero del 1EV2. Sólo los hombres rieron. Fueron todos a sus respectivas habitaciones a ponerse el uniforme, falda corte “A” gris hasta la cintura con tres botones guinda de lado derecho, camisa blanca con detalles guinda en el cuello y extremos de las mangas, corbata guinda con gris, saco gris y calcetas grises. Todo perfectamente combinado y en orden. -¿Peinadas? No sé cómo peinarme, llevo años sin hacerlo- se quejó Dany leyendo el manual- Cama, anda, yo te ayudo- Contestó Abril. 18

A los pocos minutos de haber recibido el paquete todos los alumnos del internado eran como uno solo. Vieron acercarse a Jorge. -¡Wow! Ahora sí te ves como una persona decente- Dijo Abril -Sigues siendo feo- replicó Dany. Jorge la vio con cara de fastidio- Pero un feo elegante- Los tres rieron. -Es muy raro todo esto ¿no?- dijo Dany.-Mmmm algo, pero pues para mi está bien, incluso si la directora me dijera que te matara por un beso de ella lo haría sin dudarlo, es más si tuviera la oportunidad lo haría sin recompensa - replicó Jorge, Abril sonrió y dijo–No seas grosero- Dany le dio un golpe en el brazo –Atrévete bestiale dijo. Al día siguiente cuando iban Dany y Abril a encontrarse con Jorge para desayunar, escucharon a Sofi llorando desconsoladamente, entraron a su habitación y estaba hecha un desastre. -Pero ¿qué te pasó?- le preguntó Dany preocupada. Sofi temblando sólo pudo señalar con su índice con dirección a la cama de enfrente, Abril y Dany voltearon despacio y gritaron, lo que estaban viendo era una atrocidad: Ari, compañera de cuarto y amiga de Sofi estaba botada en su cama, desnuda, pálida y con los ojos en blanco. Inmediatamente sacaron a Sofi de ahí y fueron a la dirección. -Chicas, no comenten esto, no queremos generar pánico a los demás alumnos, ahora vayan a sus clases, nosotros le tenemos que hacer unas preguntas a su compañera y la mandaremos a su casa, no se preocupen, nosotros nos encargaremos- Dijo la directora académica. Obedeciendo, las dos muchachas se dirigieron a la cafetería calladas y Dany con lágrimas cayendo de sus ojos, sin poder controlarlas. Cuando se encontraron con Jorge él comenzó a reír a carcajadas y dirigiéndose a la pecosa dijo – ¿Y ahora tú qué? ¿Volviste a ver Dumbo antes de desayunar?- Dany ni siquiera lo vio, Abril fue la que contestó – después de desayunar, nos vamos a nuestro lugar- Jorge comprendió y se quedó callado. Al entrar en la cafetería, los tres al alzar la vista para pedir lo que iban a desayunar, vieron que un platillo llevaba el nombre de “Ari”. Insofacto, la pecosa y Abril voltearon a verse y salieron rápidamente jalando a Jorge del brazo. Dirigiéndose a su lugar. Su lugar era la parte más alta del edifico, donde no había cámaras y la calidez del sol pegaba en la cara como un regalo divino, ahí se sentían a salvo. -¿Qué les pasa mujeres? Tengo un hambre y ustedes con sus hormonas- refunfuñó Jorge. -Ari está muerta- replicó Dany tajante – y Sofi está vuelta una loca-. Jorge atónito las volteó a ver. -No es gracioso Daniela- lo dijo con un tono tímido – No es un chiste, yo también lo vi- dijo Abril. Los días pasaban y surgían casos similares, muchachas de diferentes semestres eran encontradas de la misma forma, desnudas y con los ojos en blanco, pronto corrió el rumor, ya no podía ser secreto, todos ya estaban enterados. En el grupo 1EV2 de ser veintinueve, pasaron a ser veinte y así en todos los grupos se sentía la ausencia, el terror de ser el siguiente. Así como con Ari, por cada desaparecido sacaban platillos con el nombre de desaparecidos. Sofi no volvió al internado, no supimos nada de ella después del último mensaje que nos mandó al grupo: “chicos, unidos, intensos, derrota, ansiedad, donas, con la decana hablé y me voy. Los quiero”

No tenía sentido, pero lo atribuimos al estrés por el que había sido sometida. A pesar de todo esto, el único que no parecía resultar afectado era el profesor Ornelas, el siempre muy entusiasta, porque además lo habían ascendido a subdirector, siempre nos repetía: -No pregunten ni cuestionen de más, hay cosas que no se deben resolver.- lo que era algo extremadamente raro. La única a la que parecía importarle era a la decana, siempre convocaba a los alumnos para exigir justicia y repetirnos que estaba de nuestro lado, lo que de una extraña forma nos daba tranquilidad el saber que alguien intentaba tomar cartas en el asunto. -Sácame de aquí, no quiero ser la siguiente- le mandó la pecosa el mensaje a su amado -¿Y tus papas?- le contestó -No me creen, como nada ha salido de la escuela porque tenemos miedo de hablar y ser las siguientes, creen que es excusa-Si es lo que quieres, voy por ti hoy mismo. -Sí, te veo en la conexión con la ENCB a las 12:00 de la noche en punto. Te amo. -Ahí voy a estar. Te amo. Guardó su celular y le susurró a Abril –Vámonos, vienen por mi esta noche.-¿Cómo crees? Claro que no, aún hacen falta exámenes- Le contestó Abril. -Como quieras, pero no voy a dejar que Ornelas o la directora me dejen como a las otras, si cambias de opinión, me voy del cuarto al diez para las doce del cuarto.- Abril se quedó pensando y le dijo: -¿Recuerdas el mensaje de Sofi? No tenía sentido. -Sí, aunque al inicio decían que era por el estrés, si fuera así no hubiera tenido que mandar el mensaje ¿no?le dijo mientras guardaba sus cosas para irse en la noche. Al final de la clase de Enfermería Comunitaria, Dany tenía que subir entregar los trabajos del grupo, ya que al desaparecer la jefa de grupo, ella sustituyó su cargo, claro era un desastre, pero sus compañeros eran muy amables y comprensivos, tal vez con esto de las muertes y desapariciones simultáneas hicieron que fueran más unidos. Abril y Jorge acompañaron a Dany, nunca se separaban “Simios unidos más fuertes” era su lema. Cuando al estar ya por llegar Dany dijo en voz baja -Es la decana- Abril y Jorge la voltearon a ver -¿Qué dices mujer?- preguntó Jorge -Es la decana vean el- cuando de repente al pasar por la oficina de la directora escucharon -¡Si se enteran todo esto se viene abajo Ornelas!- gritó la directora, Dany dejó caer los trabajos al piso lo que resultó en un eco profundo, desde la puerta entreabierta los tres pudieron ver como Ornelas volteaba y estaba a punto de abrir la puerta cuando Jorge jaló a las dos muchachas para echarse a correr. La pecosa a pesar de no ser deportista como Abril o Jorge no sintió cansancio y llegaron todos a la habitación de Dany y Abril, cerraron con seguro y atracaron la puerta con la silla del escritorio.-¡Al diablo, yo me voy de aquí esta noche!- gritó Dany. -¡Diablos, diablos, diablos! Somos los siguientes ¿no? ¿Qué vamos a hacer? ¡Vamos a morir hoy!- Gritaba Jorge caminando como vigilante de la puerta de un lado a otro del cuarto.

-Me voy contigo- dijo Abril,. Esperaron a que fueran diez para las doce, Jorge rompió la silla de madera y cada uno de ellos llevaba una pata como arma. Al llegar al punto acordado Jorge les dijo que él vigilaría por detrás, que ellas corrieran. A la pecosa se le dibujó una gran sonrisa de oreja a oreja al ver a su amado ahí detrás de la reja, sintió alivio y comenzó a caminar tranquila a causa del alivio que sentía al verlo ahí, dispuesto a salvarla como en los relatos que le encantaba leer donde el amor lo vence todo. Cuando vio la expresión fría de Charlie, y sólo vio sus labios moviéndose diciendo “cuidado” porque por una extraña razón no pudo oírlo y todo fue negro de repente. Al abrir los ojos estaba dentro de una celda medieval, junto a ella estaba Abril, aún desmayada y del otro estaba Ingrid, que era de las que recientemente había desaparecido, todas ellas encadenadas y sangradas por lo apretadas que estaban las cadenas. Cuando de repente se escuchó que se abrió el calabozo donde estaba Ingrid. Dany aún con la vista nublada logró enfocar y al ver quien estaba arrastrando de la gran cabellera de Ingrid mientras esta suplicaba piedad llorando. Era la decana, aunque ya lo sabía le sorprendió el impacto de la idea que se había creado al ver la escena del maestro con la directora. Vio desde su celda como desnudaba por completo a la muchacha, para después asfixiarla sin piedad, podía percatarse de las patadas de desesperación, y las uñas destrozándose por querer sujetarse de algún lado. La decana no se veía como de costumbre, se veía tosca y salivaba de una manera espeluznante y grotesca. Cuando Dany logró reaccionar para intentar despertar a Abril, la sacudió con todas sus fuerzas y logró despertarla. -Abril, sí es la decana, Sofi nos lo advirtió en el mensaje, las primeras letras de cada palabra eran un acrónimo, las que no tenían sentido, necesito que te reanimes pero rápido, está matando a Ingrid, no puedo dejarte aquí- le decía llorando y sacudiéndola de una manera desesperada cuando escucharon el crujido de la puerta de su celda abriéndose, era demasiado tarde. CONTINUARÁ…

Siempre amigos 13 De Octubre De 2019 Avendaño Mejia Yolanda Ivette Era uno de esos días típicos de finales del semestre, dentro de los pasillos de la escuela superior de enfermería y obstetricia se sentía un ambiente relajado, era tan liviano ya no había más exposiciones o trabajos para entregar o algún examen al menos para un grupo de amigos que formaban parte de la clase 1EV2 ese día solo iban a recibir un calificación y serían libres, libres para dormir tanto como quisieran, para descansar o quizás para ocupar su tiempo en cualquier tontería o al menos eso era lo que pensaban, se habían quedado de ver a la 01:45 PM en la estación del metro cercana a la escuela, la última semana estuvieron hablando tanto de ese día de todo lo que podían hacer después de esa clase, porque era una pequeña despedida, era un hasta pronto, pasaría más de un mes para verse de nuevo. El grupo de amigos estaba conformado por siete personas, la primera en llegar al metro fue Yazmin es una chica delgada de estatura promedio, su cabello era tan diferente a las demás estaba teñido de color rojo, sus cejas eran arqueadas, su nariz pequeña y proporcional a su rostro, sus labios eran gruesos con un ligero tono rosa, tenía una perforación en el frenillo de la encía en el labio superior, ese día vestía un pantalón de mezclilla azul un poco entallado, una playera de manga corta de color verde olivo sin ningún estampado y un par de tenis converse blancos, ella era algo callada y tenía bastantes talentos desarrollados el que mas sobresalía era su talento al dibujar, minutos después llegaron Gisel y Brenda, la primera de ellas era la más bajita el grupo tenía la piel blanca y su cabello era corto, rizado y de color negro, llevaba una blusa corta y de tirantes era de color azul cielo, un pantalón de mezclilla gris y unos tenis blancos de plataforma era la más expresiva de todas y reaccionaba rápido, Brenda era un chica muy delgada llevaba una playera gris con unas líneas de colores en el estampado, en pantalón de mezclilla azul y unos tenis color azul pastel, ese día llevaba el cabello peinado con unos mechones recogidos y un moño celeste en el cabello, sus labios rojos y un poco de maquillaje en el rostro era muy simpática, la siguiente en llegar fue Ivette era de las más altas, su cabello era castaño claro ese día iba un poco maquilada, sus cejas eran arqueadas, sus ojos eran pequeños y llevaba los labios pintados de un color rosa obscuro, traía un pantalón de mezclilla azul, una blusa con encaje que hacia juego con sus tenis ambos blancos ella era agradable y responsable, al llegar pregunto quién hacía falta por llegar y todas respondieron al unísono Jessica y Samantha, Ivette empezó a llamar a Samantha y Gisel llamo a Jessica quien respondió que estaba a uno estación de llegar que la esperaran, Mientras que Ivette les comento que Samantha ya estaba en la escuela porque había olvidado que se verían en el metro, tiempo después llego Jessica la más alegre del grupo, tenía una estatura promedio era delgada con un rostro pequeño, tenía pecas en las mejillas, sus ojos eran grandes y usaba lentes estaba vestida combinando sus tenis con su blusa en color amarillo y su pantalón era entubado de color azul, Jess llego preguntando por Emmanuel, él era el más grande de los siete tanto en edad como en estatura, aunque realmente no era tan alto simplemente era el único hombre del grupo, Emmanuel era un joven con cabello oscuro era un castaño muy

oscuro, su barba y bigote eran del mismo tono, ojos grandes y expresivos, sus cejas eran arqueadas, usaba lentes al igual que algunos dentro del grupo él es bastante distraído y olvidadizo en todo el semestre no logro aprenderse el horario, a pesar de ser el que vivía más cerca siempre era el último en llegar o como era costumbre enviaba un mensaje informando que llegaría directamente a la escuela, ese día no fue la excepción, Yaz comentó que Emmanuel le había enviado un whats para avisar que llegaría tarde y que las veri en la escuela. Al encontrarse todas empezaron a caminar hacia la escuela, el camino transcurrió tranquilo, las chicas comentaban todo lo que habían hecho en el semestre en cómo se empezaron a hablar, en todas las cosas que habían sucedido en esos últimos meses, las cosas más memorables eran recordadas con nostalgia pero entre risas por algunas caídas o algunos comentarios en clase, llegaron a la escuela y al entrar caminaron por el pasillo principal para dirigirse al aula 2, al entran vieron Samantha sentada en las bancas del lado izquierdo de salón se veía cansada ella era muy aplicada ese día llevaba un pantalón de mezclilla de color azul claro el cual estaba rasgado de la parte frontal, llevaba unos converse negros con toques morados y una playera blanca de manga larga, tosas saludaron a Sam y cada una se sentó en su lugar todas moviendo las bancas para hacer un circulo como ya era costumbre para platicar mientras llegaba la profesora, empezaron a ponerse de acuerdo sobre a donde iban a ir saliendo de la escuela, ya que no querían regresarse tarde a sus casas, propusieron ir a comer y quizás tomar un par de cervezas para celebrar el termino del semestre, aún tenían varios lugares en mente, ese día no era como cualquier otro, ellas estaban tan distraídas que o percataron ninguna de las señales, el día estaba nublado, el aire era ligeramente frio, Yaz comento que iría a la sala de computo que le avisaran a la profesora que llegaría un poco tarde, tomo las su mochila y salió del aula sin voltear a ver a sus amigas nadie se percató de lo que expresaba su rostro fue como si huyera de algo, ellas siguieron planeando si se verían en vacaciones, a fuera del salón solo se escuchaban risas y un par de gritos pero eran de alegría y emoción, la profesora llego al aula informo que sería rápido, que cualquier duda sobre la evaluación se acercaran de manera personal, Jess llamo a Yaz, fueron 5 llamadas las primera no entro, la segunda no la respondió y las últimas tres fueron directo a buzón, Yaz jamás contesto. La profesora comenzó a entregar exámenes por orden de lista, cada uno de los alumnos dentro del aula reviso su examen todos con una sonrisa de satisfacción, nadie se acercó al escritorio de la profesora para revisar su evaluación simplemente le dieron las gracias por todo lo que habían aprendido gracias a ella, la profesora les dedicó una sonrisa y se retiró del salón deseando verlos el próximo semestre, Emmanuel llego corriendo al salón se había percatado que la profesora ya se había retirado, Ivette le entrego su examen y comento que debían ir a buscar a Yaz para entregarle su examen y para irse a comer. Brenda acompaño a Ivette al aula de cómputo mientras el resto del grupo terminaban de decidir a donde irían, ambas subieron las escaleras hasta el segundo piso, en donde se acercaron a buscar a Yaz, sin embargo, no la vieron y decidieron preguntarle a la encargada por su amiga y ella les respondió que nadie había entrado a utilizar las computadoras, en ese instante se les ocurrió que su amiga podría estar fumando y nos había querido decir ya que les había contado que dejo el cigarro hace dos meses, bajaron las escaleras corriendo para avisarles a los demás que Yaz no había estado en el aula de computo, Emmanuel propuso dividirse para buscarla y de esa manera irse más rápido sin embargo esa fue la peor decisión que pudieron tomar, Ivette la busco en la biblioteca, Emmanuel fue a la cafetería, Jess y Gisel la buscaron en el auditorio porque a veces solía ir a tocar el piano al no encontrarla ahí la buscaron en los baños de la planta baja, mientras Brenda la buscaba en el área de fumadores, Samantha subió al tercer piso creyendo que podría estar en la terraza, quizás fue un presentimiento lo que llevo Sam hasta ese lugar, algo la llevo al lugar correcto, ahí estaba Yaz su mirada se encontraba perdida, estaba pálida, se encontraba temblando y había lágrimas en sus

mejillas, Sam se acercó a ella se sentó a su lado y le pregunto qué había sucedido, Yaz no tuvo la fuerza de responder, solo se escuchó un hilo de su voz decir la niña y señalo hacia el frente, Sam dirigió la mirada hacia donde su amiga estaba señalando pero no entendió, no supo que hacer, no entendía a qué se refería , no había nada frente a ellas, se alejó un poco de Yaz caminado de espaldas para llamar a Brenda o a Ivette, desbloqueo el celular no tenía señal se alejó un poco más de sus amiga y al fin vio en su celular unas líneas que indicaban que ya tenía red, llamo a Brenda quien no respondió, termino por llamar a Ivette quien respondió al tercer tono solo alcanzo a decir la encontré y al volver su mirada hacia su amiga la vio en la orilla de pie sobre la barda no pudo decir nada más solo la vio caer mientras gritaba, Ivette solo escucho ese grito de dolor y nada más la llamada se perdió, ella no escucho el golpe de la caída del cuerpo, Sam corrió bajo las escaleras tan rápido como pudo, venia llorando, estaba blanca, pálida , bajo y se encontró con Jess y Gisel quienes al verla solo corrieron detrás de ella, no entendían nada, ella no hablaba solo buscaba con desesperación, no la encontraba, solo gritaba una y otra vez Yaz busquen a Yaz, su cuerpo no estaba era como si ella jamás hubiera asistido a la escuela. Brenda también la había encontrado, había estado con Yaz la encontró fumando pero no cruzo palabra con ella, simplemente intento arrebatarle el cigarro de la mano, Yaz la esquivo, lo intento un par de veces más pero no lo consiguió simplemente escuchaba la risa de Yaz mientras que en uno de esos intentos resbalo, intento desquitarse tirándola quiso tomarla de las piernas para jalarla pero su imagen se desvaneció, no entendía lo que había sucedido, corrió hacia la biblioteca para encontrar a Ivette sin embargo solo la escucho gritar mientras corría, gritaba que Sam ya la había encontrado, Brenda no entendía nada, si alguien más ya la había encontrado a quien había visto ella, camino fuera de sí hacia el baño, fue a humedecer un poco su rostro para reaccionar, pero solo consiguió verla de nuevo esta vez estaba saliendo del baño, la puerta del baño se cerró lentamente, Yaz se acercó a Brenda y le susurró al oído que se sentía sola y que había divertido hace un rato con ella que todos serian amigos para siempre, que debía hacerle compañía, solo se escuchó un grito ahogado, un grito de dolor, Brenda estaba tendida sobre el frio azulejo del baño, se estaba desangrando tenía un golpe en la cabeza, el golpe que ocasiono que su pulso disminuyera hasta que su corazón dejo de latir y su cuerpo soltó un último suspiro, Emmanuel estaba pasando por el baño en cuanto escucho lo que el determino como un alarido se acercó a la puerta para ese momento vio a Yaz salir del baño y le pregunto que sucedía y solo respondió que alguien se había lastimado, Emmanuel le dijo que la habían estado buscando y le pregunto dónde estaba ella simplemente se rio y le dijo que andaba por ahí y que era bueno encontrarlo porque necesitaría a alguien para platicar, simplemente se fue con su amiga. Ivette se encontró con Sam, Jess y Gisel, Estas últimas dos le explicaron que no entendían lo que le sucedía a Sam, Entre las tres intentaron calmarla y la llevaron hacia el salón donde las buscaba su tutora, les pidió que se sentaran mientras que Sam seguía sin reaccionar, la maestra les comento que su compañera mejor dicho su amiga Yazmin no había llegado a su casa la noche anterior, que por la mañana habían localizado el cuerpo de la joven en un terreno baldío. Samantha no paro de llorar, el resto seguía sin entender lo sucedido, el llanto se acompañó de un grito que se escuchaba al fondo del pasillo alguien gritaba sin parar está muerta, está muerta encontraron el cuerpo de Brenda. Emmanuel jamás apareció. Ellas no se volvieron a hablar y ese tema jamás se tocó dentro de la ESEO

El asesino misterioso. Chirino Enciso Brenda 13 de octubre del 2018 Todo comenzó en un día como cualquier otro en la escuela superior de enfermería y obstetricia del IPN, todos los alumnos muy responsables asistieron a sus clases, en el grupo 1EV2 se encontraban las niñas más bonitas de la escuela Brenda, Jessica, Gisela, Yazmin, Ivette y Samantha unas alumnas muy inteligentes, ese día estaban ya en su última clase como es de costumbre el profesor de Anatomía llego exactamente a su hora y empezó a explicar el tema, cuando termino su clase todos salieron corriendo para irse a su casa porque ya era muy tarde, Brenda se quedo en el baño la escuela estaba casi vacía la mayoría de las luces estaban apagadas, de pronto sintió una presencia muy extraña sus pelos se pusieron de punta y en ese momento alguien le atravesó un cuchillo en el cuello. Al día siguiente el personal de limpieza encontró su cuerpo en el baño con una nota que decía "Que comience el juego", las autoridades le avisaron a sus familiares pero no hicieron absolutamente nada sobre la investigación del asesinato. Las amigas de Brenda, estaban muy preocupadas por ella ya que no les contestaba los mensajes, ellas nunca supieron la verdad del porque Brenda ya no fue a la escuela. Todo marchaba de maravilla en la ESEO era un día lluvioso y frío, Jessica y Samantha fueron a la biblioteca a estudiar para la materia de comunicación ya que habían reprobado el examen del primer parcial y esta vez tenían que aplicarse más para evitar irse a examen extraordinario, Samantha recordó que tenía exposición de histología al día siguiente así que fue a buscar libros, en ese momento se escucho un estruendo muy fuerte y Jessica se espantó así que le pregunto a Samantha si estaba bien pero ella no le contestó, todo estaba en completo silencio, Jessica fue a buscar a su amiga cuando la encontró se llevo una terrible sorpresa pues Samantha estaba muerta, tenía marcas en el cuello de una posible estrangulación, nuevamente las autoridades hicieron como que nunca paso nada, y todo volvió a la normalidad. Gisela, Yazmin y Jessica ya no estaban tranquilas en la escuela, tenían mucho miedo de que las siguientes victimas fueran ellas, para todas partes iban juntas nunca se separaban, en la escuela ya se sentía un ambiente muy frío, a los alumnos les prohibieron hablar sobre los asesinatos, aquel grupo de amigas se fue desintegrando algo muy lamentable ya que todas eran unas chicas muy agradables siempre estaban sonriendo, de pronto todo cambio, nadie sabía que estaba ocurriendo todos se iban antes de las 7 a su casa por temor a que les pasara algo, para los alumnos nada volvió a ser igual, las autoridades de la escuela actuaban como si no pasara nada, pero el miedo en la ESEO era demasiado fuerte. Pronto se acercaba el día de muertos, así que en la escuela se organizo una fiesta de disfraces y todos los alumnos tenían que asistir, aquella noche al parecer todo estaba muy tranquilo, los alumnos estaban conviviendo sanamente, había concurso de disfraces, los mejores iban a ganar puntos extras en la materia de comunicación o textos.

Gisela, Yazmin, Jessica y su amigo Emmanuel estaban disfrutando la fiesta a pesar de todo lo que había ocurrido estos últimos días en la escuela, pero ya era tarde y tenían que regresar a su casa pero como siempre a Emmanuel se le ocurrió ir en último momento al baño y sus amigas lo tuvieron que esperar, después de 20 minutos ellas ya estaban muy desesperadas así que decidieron ir a buscarlo y como no lo encontraban tuvieron que ir a cada uno de los baños de la escuela, empezaron a gritar ¡Emmanuel!¡Emmanuel!¿Dónde estás? pero todo estaba en silencio, hasta que escucharon un golpe en una puerta, ellas ya tenían mucho miedo pero no podían irse sin su amigo, así que decidieron abrir la puerta y allí estaba Emmanuel dentro de un salón estaba con la boca tapada, las manos y los pies atados, sus amigas muy nerviosas lo desataron, Emmanuel estaba temblando de miedo, Gisela muy alterada le pregunto quién le había hecho eso, Emmanuel le contesto esta vestido de payaso nos va a matar a todos debemos salir de aquí antes de que regrese, corrieron muy rápido hacia la salida pero antes de llegar se escucharon muchos disparos, todos los alumnos que estaban en la fiesta comenzaron a gritar y salieron corriendo, lamentablemente Jessica, Gisela, Yazmin y Emmanuel murieron aquella noche, no pudieron salvarse, a partir de ese momento después de 7 muertes de alumnos de la ESEO comenzaron a hacer investigaciones sobre todos los asesinatos, curiosamente todas las cámaras de seguridad dejaron de funcionar, así que era muy difícil descubrir quien los había matado, todas las muertes quedaron impunes. Desde aquel momento nada volvió a ser igual, las almas de Gisel, Jessica, Brenda, Ivette, Yazmin, Samantha y Emmanuel no descansan en paz, después de las 9 de la noche la ESEO ya tiene que estar completamente vacía y quien se quede tendrá que pagar las consecuencias de los asesinatos, las almas de aquellos alumnos rondan en la escuela. Nunca se supo la verdadera identidad del asesino ¿Quién será la siguiente víctima? Continuara…

Renovación Cuento de terror Sanjosé May Samantha Jazmín Ciudad de México a 12 de octubre del 2019. Todo comenzó con una fiesta. Sí una fiesta. Samantha estaba pasándola de maravilla, ahora que vivía sola y no tenía responsabilidad alguna. No tenía idea de lo que estaba por pasar en este ciclo escolar y menos en aquella fiesta en donde todo mundo parecía disfrutarlo al límite, sin preocupaciones, sin estrés, sin miedo. A pesar de la calidez dentro del departamento, con los cuerpos sudados por tanto bailar, era una noche fría. Samantha, una chica común, de ojos pequeños que profundamente mostraban algo que no todos poseían: valentía. Sam, siempre andaba con el cabello despeinado, con ropa holgada (a su gusto). Según las demás personas, siempre se le veía cansada, claro está, era por las ojeras que le acompañaban desde que empezó a estudiar en la ESEO. Sin embargo, las ojeras no le quitaban el atractivo raro que tenía, tal vez eran sus lunares, sus labios pequeños y rosas o la manera en que observaba el nuevo mundo donde recién se había mudado. Ella venía de otro lugar a estudiar enfermería, de un lugar más grande y pequeño a comparación de la ciudad de México. Sam había sido invitada junto con sus 6 amigos a una fiesta de bienvenida que decidió organizar el salón. Todo andaba perfecto, las bebidas, los juegos, la música ensordecedora, pero, Sam notaba algo que no andaba bien. Jessica estaba algo ebria, Ivette estaba ocupada cuidando a Brenda, Yazmin aún no llegaba siquiera, Emmanuel estaba distraído con su novia y Giselle estaba sirviendo más bebidas. Por lo tanto, nadie puso observar lo que Sam vio y estaban por discutirlo días después. A la mañana siguiente, todo parecía estar helado, Jessica pudo sentirlo al salir de casa, su camino a la escuela fue indiferente hasta que alguien se le acercó. Un muchacho extremadamente exhausto, su caminar era como la de un zombie, estiró su mano izquierda hacia dirección a Jess, el no resistió y la tomó por ambos hombros y sacudiéndola ligeramente debido a la poca fuerza que le quedaba le dijo: - Cuidado, ¡resiste a ellas! ¡¡Resiste o los tomarán a todos! – dijo. Jessica al instante retiro las manos secas del muchacho de sus hombros y siguió caminando, pensando “qué onda con el” “Ha de estar loco”. Al llegar al salón de clases, había muy pocos alumnos. Jess se sentó en su pupitre y le mandó mensaje a Samantha preguntando dónde estaban los demás. Justo enviado el mensaje Sam entra con los demás, se sientan y la saludan, todos hablaban sobre la fiesta, las locuras que hicieron, cuántos tragos se habían tomado y que debían volver a organizar otra, Sin embargo, Jessica ya no prestaba atención y se quedó pensando en lo que aquel chico le había dicho y en el por qué habían faltado muchos compañeros. ¿Era porque estaban crudos? ¿Por qué era un día muy helado? Ivette se dio cuenta que Jess estaba en sus pensamientos y le preguntó qué tenía, a lo que Jess respondió: -Me pregunto por qué hay tan pocos de nosotros- Nadie la escucho, ni siquiera Ivette, ya que había llegado el profesor. A las 6 de la tarde, ya a 3 horas de salir, escucharon rumores sobre que varios de la escuela habían desaparecido sin noticia del por qué y menos de donde se encontraban.

Samantha comenzó a analizar la situación, ella tenía algo en mente, pero el alcohol de la noche pasada no le permitía recordar. Dadas las 9pm, Sam y sus amigos salieron dirección al metro, el viento les pegó en la cara y supieron que ya estaba a punto de llover, por lo que decidieron caminar velozmente hacia la entrada al metro. Giselle, quién iba al frente de los demás notó algo peculiar, sorprendida, abrió la boca y señaló a lo que veía, por lo que los demás siguieron a dónde apuntaba y se encontraron con la profesora de Histología caminando a unos pasos adelante hacia el metro. ¿Qué hacía la profesora caminando hacia el transporte público si ella tenía automóvil? Y… ¿Por qué iba vestida con un impermeable negro completamente seco? Ante ello, los chicos decidieron seguirla, pero entre risas y chismes la perdieron de vista y mejor decidieron retomar su camino. Llegando a casa Yazmin se tumba hacia su cama y lo primero que hace es ver el celular, y al abrir Facebook sus ojos se agrandan y se llenan de miedo. Las noticias sobre los alumnos desaparecidos no eran solamente un rumor, sino que, fue real y muchos de ellos desaparecieron en la fiesta. Yazmin llama a sus amigos y entre ellos comentan lo sucedido. Llegando al turno vespertino, todos en el pasillo de la ESEO se veían entre sí, pero nadie comentaba nada, el día transcurrió lentamente, en silencio y en miradas preocupantes y sobre todo con miedo. Los chicos estaban por salir de la clase de Histología y al atravesar la puerta del salón escucharon un grito desgarrador. Emmanuel quien sostenía un jugo boing lo dejó caer al escuchar tal grito. Corrieron hacia el baño más cercano y en la entrada del baño, yacía el cuerpo de Brenda, ensangrentado, con los ojos viendo hacia la ventana, pero, algo peculiar en su cuerpo era una marca hecha por algún instrumento filoso, con una letra, una letra que podía significar muchas cosas. Era una “E” ¿Por qué debían de marcarla de esa forma? ¿Por qué estaba muerta, asesinada? ¿Cuándo se fue del salón que nadie se dio cuenta? Los chicos, se sintieron tristes y abrumados por ver a su amiga asesinada de esa horrible manera, pero más que tristes, tenían terror. Primero los chicos desaparecidos, ahora la muerte de su amiga. La policía llegó y dijo que no había rastros sobre el posible asesino. Lo más extraño de todo es que no suspendieron las clases, la directora anunció que la escuela estaría vigilada a partir de ese día y que ningún alumno debía de tener miedo. Los días pasaron y parecía que todos se habían olvidado de Brenda, el baño donde su cuerpo fue hallado había sido renovado y lo demás seguía igual, hasta sus amigos se habían olvidado de ella, excepto Samantha. Nadie sabía por qué ocurrió y el caso de la búsqueda de su asesino había sido cancelado. Todo iba extrañamente en un ambiente “normal” hasta que 2 semanas después alguien dijo que vio algo extraño en la fiesta de hace 1 mes, Sam rápidamente volteó y se acerco a preguntar cuál era la cosa rara y lo que le dijeron fue simplemente: “impermeable negro” ¿Acaso era…? Nonono, no puede ser posible- pensó Sam. Llegó con sus compañeros y les dijo que deberían investigar por su cuenta qué era lo que ocurría con el asesinato de Brenda, los chicos desaparecidos y el impermeable negro. Los chicos fruncieron el ceño a modo de confusión y decidieron hacerle caso a Samantha solo por pena, ya que creían que ella era la más atemorizada de todos y el asesinato de su amiga le había causado una obsesión con buscar un fin a ello. Los chicos estaban por salir y como aquel helado día, escucharon otro grito, esta vez corrieron apresuradamente para ver de qué se trataba y lo que vieron fue otro cuerpo, esta vez con surcos en el cuello por haber sido sometido a estrangulación. Se trataba de la profesora de Teorías, su expresión mostraba terror, su cuerpo revelaba otra marca, esta vez era una S, los chicos quisieron salir de inmediato ante tal horrible momento, pero de repente apareció la profesora de Histología y lo que dijo fue: - Chicos es necesario, que se retiren de inmediato, debo limpiar esta escena horrenda- Enseguida volteo a ver a Emmanuel como revelando algo en su mirada oscura. Agotados decidieron no ir a casa y quedarse en uno de los laboratorios de la escuela, se acostaron en una de las camas y decidieron turnarse guardias nocturnas. Ivette fue la primera en ofrecer hacer la primera guardia, se quedó despierta un buen rato y no vio nada extraño; seguidamente fue Jessica quién se ofreció, ella había

tenido pesadillas con el chico que le advirtió hace unas semanas e incluso se soñaba muerta, ensangrentada y con unas personas alrededor de su cuerpo pronunciando un lenguaje extraño. Giselle notó que Jessica tenía miedo y decidió acompañarla. Pasada la 1 am, escucharon una risa y voces a su alrededor, abrieron la puerta lentamente y salieron a ver qué era lo que sucedía, no quisieron alertar a los demás y salieron en búsqueda de algo. Lo primero que se encontraron al bajar por las escaleras fue un 2do pasillo largo que parecía no tener fin. En su mes y medio en la escuela, nunca habían visto aquel pasillo por lo que decidieron ir a lo largo de éste. Encontraron varias puertas que se encontraban organizadas de color rojo sangre por año desde los comienzos de la escuela. Entraron a la primera y vieron fotos sobre sus inicios, luna fotografía de los estudiantes de ese ciclo escolar, aunque algunos estaban marcados de pintura roja, como de eliminación. Siguieron con el cuarto número 2 se encontraron con lo mismo y poco a poco sintieron que se asfixiaban, cuando voltearon vieron a un personaje con la capucha negra, no era un impermeable sino una capucha como de tipo secta. Quisieron correr pero tan pronto sus pies les permitieron avanzar, fueron asesinadas de una manera cruel y con sus cuerpos llenos de sangre dejando un charco y este goteó por las escaleras llegando hacia el laboratorio donde se encontraban los demás y provocando un sonido ligero pero que ayudó que Samantha despierte, al momento de despertar recordó lo que vio en la fiesta y con ayuda del goteo sanguíneo, tuvo un flashback de aquella noche: Se encontraba sosteniendo su vaso y hubo un ruido que le llamó su atención, paso al cuarto y se encontró con el cuerpo de la novia de Emmanuel, esta vez, sin marca alguna pero con unas personas alrededor con capucha negra y pronunciando palabras en latín, como si fuese una especie de ritual. Samantha quedó impactada y decidió ir al baño a vomitar, no comentó nada porque algo la hizo olvidar cierto fragmento de esa noche, sin embargo, sabemos que le quedó un sabor amargo de esa fiesta. Llamó a Ivette, Yazmin y Emmanuel para que averiguaran de dónde provenía aquel sonido de goteo, salieron junto con linternas a ver que ocurría, se encontró con el goteo sanguíneo y sabían de quiénes se trataba. Corrieron escaleras arriba a tratar de buscar tan siquiera sus cuerpos, pero fue imposible, no vieron absolutamente nada. ¿Qué hacen aquí? - dijo un susurro que los hizo sobresaltarse de su lugar, era la maestra de Sociología, los chicos le dijeron que el asesino había estado en la escuela y que seguramente mató a Jessica y a Giselle. La maestra solo asintió y dijo: - Acompáñenme muchachos- Los chicos cautelosamente la siguieron y tras subir más escaleras se dirigieron hacia un pequeño cuarto, la profesora indicó que entraran y ella fue la última que entró. Una vez encerrados, les indicó que se sienten y prestaran atención: - No pueden salir de aquí hasta que amanezca- dijo. ¿Acaso está loca? - dijo Yazmin, a lo que la profesora dijo: - Hace mucho tiempo que doy clases en esta escuela y la de la capucha negra es quién asesina a todos en esta escuela, por lo que he investigado es para una renovación de la ESEO, cada sangre estudiantil ayuda a que todas las profesoras-enfermeras sigan en el puesto que deseen y la escuela siga prosperando, es como una maldición creada por ellas, un tipo de secta que ha estado organizado desde los inicios de esta institución. Por ello, los asesinatos tan repentinos en la escuela y también la manera en que nadie recuerda nada o simplemente lo ignoran- dijo faltándole el aliento. Sam quiso aportar algo más, pero escucharon que alguien quería entrar. Tanto que empujaba con fuerza la puerta y a través del ventanal la persona apoyó sus manos ensangrentadas. Los chicos quisieron abrirle ya que se podía tratar de Jess o Giselle, pero la profesora les dijo que era demasiado extremo. A nadie le importo y al momento de abrir la puerta se encontraron cara a cara con la asesina de la capucha negra: María Eugenia, la maestra de Histología. ¿Por qué ella? ¿Acaso la maestra de Sociología tenía razón?

Los chicos quisieron correr, pero la de Histología se lo impidió, Samantha tomó algo filoso y la apuñaló tratando de que se retire y aleje de los demás, pero fue imposible, los demás ya se encontraban muertos en un fugaz momento y Samantha adolorida, decide escapar y correr con todas sus fuerzas hasta que sus piernas quemaban. Por fin salió de la escuela y decidió irse lo más lejos posible, volviendo a su ciudad natal. Con traumas por lo acontecido la internaron en un hospital psiquiátrico y justo ahí decidió iniciar con su propia secta. Lo que no sabían es que la maestra de Histología ocupó el cuerpo de Samantha tratando de renovarse con alguien que pudo verla realmente y dejando a cargo a la verdadera Samantha atrapada en el cuerpo de la maestra de Sociología para continuar con la renovación de la ESEO mediante la sangre fresca y pura de los estudiantes.

El barco de tu pesadilla Valles Segovia Jessica Monserrath Ivannia 28/septiembre/2019 El semestre estaba a punto de finalizar, era un día lluvioso, ya era de noche, estaba oscuro, seguíamos en la última clase de la Escuela Superior de Enfermería y Obstetricia, en cuanto termino la clase, los alumnos salieron, únicamente se encontraban 7 alumnos del 1EV2, como todos los días se quedaron platicando, esta vez se ponían de acuerdo para salir de vacaciones, decidieron irse a casa, muy emocionados por su salida seguían hablando de ello. Al fin finalizaron el semestre, tomaron su vuelo a su destino, llegando se hospedaron en una casa que rentaron, la casa era muy bonita, tenía piscina, un balcón muy bonito que daba vista al mar. Jess era una de las amigas de ese grupo, ella era de altura baja y delgada, se encontraba mirando la piscina y sus amigos decidieron hacerle una pequeña broma, la empujaron hacia la piscina, para que Jess no se diera cuenta quien había sido se fueron corriendo, todos continuaron sus actividades y se preparaban para ir a un recorrido en un barco que tenían planeado para esa noche, se percataron que Jess no estaba, la buscaron por todas partes y al fin la encontraron, estaba en la piscina, flotando, se había ahogado, ella no sabia nadar, los amigos muy asustados decidieron esconder su cuerpo, de verdad n sabían que hacer, estaban muy estresados por lo sucedido así que decidieron irse al paseo en barco que tenían planeado, pensaron que eso os iba a calmar un poco. Jess quería cobrar su muerte, ella no quería dejar ahí los hechos, por alguna extraña manera logro tomar el control del barco, se podría decir que lo embrujo y lo puedo convertir en un portal, el grupo de amigos llego al barco, el barco era no tan grande pero si lo suficiente para que varios jóvenes lo abordaran, de madera y con un espacio para hacer una fiesta, de igual manera lo abordaron otros chavos, el grupo de amigo estaba muy tranquilo, sin ganas de divertirse, a lo largo del recorrido se animaron a unirse a la fiesta. Yaz, era la chica más tranquila del grupo, una chica pelirroja, su mayor miedo de morir era por un ataque de tiburones, la idea de morir destrozada, sus extremidades arrancadas y desangrada, le aterraba mucho, Jess, sabia perfectamente el peor miedo de todos amigos y su mejor manera de cobrar su vida fue esa, apoyarse de sus peores miedos El comienzo de toda su venganza se aproximaba cada vez mas, solo buscaba el momento perfecto, se apodero de la mente de Yaz, la hizo caminar al borde del barco, sin poder detenerse, el barco rodeado de grandes tiburones, con sus dientes afilados y muy grandes, la esperaban impacientemente, al fin logro caer al agua, sus mayor miedo se estaba cumpliendo, intento gritar pero nadie la escucho, su cuerpo sangrada, sin fuerzas y sin más por hacer. Todos los demás chicos seguían en la fiesta, se divertían, olvidando un poco lo que esa mañana había sucedió, Jess decidió cobrar su siguiente víctima, pero sabía de qué manera, quería darles la peor de su muerte.

Ivette, otra de las amigas, ere una chica muy simpática y platicadora, pero esa noche se encontraba muy callada, el mayor miedo de ella era morir atorada en un ascensor o bien aplastada por el ascensor, ya que Jess tenía poseído el barco, logró abrir un portal, ese portal la llevo de inmediato a un lugar, un lugar frio, con poca gente y un poco oscuro, un edificio muy alto, ella desconcentrada, observo que unas personas que al parecer eran sus amigos la llamaban desde abajo, se encontraba en el piso más alto, no había escaleras, la única forma de bajar era por el elevador, decidió tomarlo, iba sola, escuchaba susurros diciendo “cobrare mi muerte” “ me vengare de lo sucedido” con mucho miedo cerro los ojos, cuando de pronto un ruido muy extraño sacudió elevador, una falla, fue lo primero que ella pensó, se intentó tranquilizar, de pronto escucho de nuevo ese ruido, era el elevador, se había roto la polea y el mecanismo que lo ayudaba a su correcto funcionamiento, fue ahí cuando rápidamente fue cayendo piso, tras piso, hasta llegar al sótano debido a esto, los órganos lograron salirse de la parte inferior del cuerpo y las extremidades lograron romperse tras el impacto, causando su peor temor, morir en un ascensor. De esta manera cada vez se sentía más satisfecha pero no se sentiría 100% satisfecha hasta lograr la muerte de todos, fue por su próxima víctima, Brenda, una chava delgada, carismática, siempre reía por todo, era muy alegre, pero todos sabían que su mayor temor era morir disuelta en una piscina volcánica, estas piscinas geotérmicas son bastante alcalinas o increíblemente ácidas, y siempre están calientes, con temperaturas del agua que burbujean justo por debajo de la ebullición, fue ahí cuando Brenda decidió ir a la cocina del barco por otro trago, al entrar se abrió de nuevo el portal, llevándola a la cima de un volcán, su curiosidad le gano, se asomó, en ese momento se resbalo, llevándola a caer directamente a su peor pesadilla, cayendo al agua burbujeante , a correr esa gran suerte sufriendo grandes quemaduras, su piel se dañaba cada vez más, se desgarraba, la llevo a sufrir rápidamente a un choque térmico extremo y podría desangrarse, aunque no está claro qué fue lo que la mato primero. En menos de un día, el cuerpo de Brenda, incluso el esqueleto, se habría disuelto por completo. Había cobrado la mitad de sus víctimas, aún faltaban otras 3, Samantha era la siguiente víctima, a ella le desagradaba mucho el frio por lo que la muerte perfecta era morir por hipotermia, Este es uno de los procesos más terribles de morir, debido a la sensación gradual y extrema, congelarse hasta morir, además de ser un proceso lento, hace que los músculos se pongan rígidos, por lo que se entumecen y pierden coordinación. Las convulsiones son cada vez más constantes y la muerte cerebral es la última en suceder por lo que el dolor aún es perceptible. Poco a poco, se va perdiendo la orientación y la conciencia hasta el deceso completo. Para lograr la muerte de Gisela no fue necesario llevarla a un lugar, ella había leído que método de tortura que usaban en XIII, llamado Popurrí de torturas, este modo de ejecución inusualmente extremo, se convirtió en castigo legal por traición ¿En qué consistía? Una triple tortura: ser ahorcado, descuartizado y decapitado. La víctima era arrastrada al sitio de ejecución mientras estaba amarrada a un panel de madera, que a su vez estaba atado a un caballo. Luego, experimentarían una caída lenta, en la que, en lugar de terminar con un cuello roto, se les dejaría ahogarse horriblemente mientras la cuerda les rasgaba la piel de la garganta y su peso corporal les arrastraba hacia abajo. Algunos tenían la suerte de morir en esta etapa. Para los que no, una vez medio estrangulado, comenzaban a cortar su cuerpo y destripándolo lentamente. Aquellos desafortunados que aún seguían vivos podían presenciar cómo sus órganos se quemaban en la hoguera frente a ellos, antes de ser finalmente decapitados y fue de esta manera como Gisela murió, soportando las tres torturas hasta morir Jess no tenia en claro que es lo que más le atemorizaba a Emmanuel, ya que era un chico muy reservado y no les contaba muchas cosas de él, lo único que sabía es que debía de ser la peor de las muertes, así que Jess

decidió que fuera por desollamiento, un método de tortura brutal consistía en cortar la piel de la víctima y se retiraba de los tejidos, cuidando de mantenerlo vivo el mayor tiempo posible fue así, logrando que su muerte fuera ocasionada por la pérdida de sangre masiva y un shock. Fue así como logro cobrar su muerte, juntando de nuevo a los 7 amigos, teniendo de nuevo su grupo de amigos, que jamás se separarían, todos juntos regresaron a la escuela penando sus almas, para permanecer siempre en la Escuela superior de enfermería y obstetricia.

A la aullante obscuridad 1EV2 #18 El día había comenzado netamente raro, me había despertado desde las 4 am y mis compañeros de cuarto parecían muertos, algo muy extraño pasó porque las alarmas de los 5 sonaron al mismo tiempo y ninguno despertó, fue como tener un sonido tan fino y muy fuerte dentro de mi cabeza, sentía que impregnaba mis tímpanos, el dolor aumentaba a medida que pasaban los segundos, sólo pude recordar que gritaba que las pagaran. Ninguno despertó. Al avanzar el tiempo, sólo recuerdo haber gritado con demasiada potencia. De la nada, desperté muy sudada, temblando y pálida, tenía un dolor de cabeza insoportable. Eran las 10 am, y me encontraba sola en casa. Desayuné y me alisté para dirigirme a la escuela, me percaté que siendo una tarde de abril el día estaba muy nublado, demasiado para apenas ser la hora de la comida. Los pasos que daba me parecían muy lentos, las personas no reflejaban ninguna expresión en sus rostros, su tez era muy triste y parecían no tener rumbo al caminar. Al llegar a la ESEO, los intendentes limpiaban muy apresurados las paredes manchadas de sangre, el personal administrativo me tomó del brazo y me empujó al auditorio, todos se encontraban asustados y ninguno entendía muy bien qué pasaba. Me pareció ver a una niña llorando en la esquina del auditorio, me acerqué para preguntar qué pasaba, al voltear observé que lloraba sangre, me dijo que me alejara que no quería lastimarme, yo sólo me quité la chamarra y se la coloqué, se encontraba descalza, despeinada, con un vestido blanco, rasgado, me sorprendió su imagen descuidada, sólo tuve la fuerza para acertar con la cabeza. Cuando giré para mirar nuevamente a aquella niña de la que se apoderaba la tristeza, ella ya no se encontraba, fue entonces que me di cuenta que llevaba una cadena de oro con una cruz colgando porque era lo único que se encontraba en el lugar donde ella estaba ubicada; en el momento en que me acerqué para levantar aquella cadena comenzó a temblar, todos se tambaleaban y caían al piso, el temblor era tan fuerte que los vidrios de las ventanas se rompían y lanzaba los pedazos por doquier, llegó un momento donde nadie alcanzaba mantenerse erguido. Todos queríamos salir de aquel lugar, pero cuando lo intentamos las puertas se cerraron y las ventanas se sellaron, no éramos capaces de salir por las ventanas rotas, no podíamos ni siquiera acercarnos a ellas, a medida que lo hacíamos, sentíamos cómo nuestros huesos se estrujaban. Sostenía muy fuerte aquella cruz, mis ojos sólo podían ver sangre en los ojos de los demás, comenzaban a aparecer las paredes rasgadas y todos asustados gritaban y rezaban, yo sólo quería encontrar a aquella extraña niña, sabía que era la única que tenía una respuesta a todo.

Mi única salida era saltar por aquellas ventanas, pero tenía dos opciones: morir o vivir, y no encontraba muy seguro el segundo punto. Estando 10 horas dentro de aquel frívolo lugar, el cielo se obscureció totalmente y nadie tenía conciencia del porqué ocurría. Teníamos sed y hambre y estábamos desesperados por encontrar un rayo de luz en medio de esa nada. Después de 19 horas dentro de la obscuridad, una chica dentro del auditorio comenzó a gritar, ella gritaba desesperadamente pidiendo que no la quemara, que la ayudáramos o que huyéramos. Nadie podía ver nada, sólo estábamos en busca de una respuesta. Conforme pasaba el tiempo, uno de nosotros gritaba y pedía ayuda desesperadamente, cada hora moría uno de nosotros. Fue entonces que decidí que no moriría en aquel lugar, si al final de todo iba a hacerlo entonces que fuera en un intento fallido de escapar. Me puse la cadena, me levanté del suelo y guiándome por el sentido del tacto pude localizar una ventana, conforme daba los pasos caminaba sobre cuerpos rotos, estaban muy calientes, tanto que calentaba la suela de mis zapatos. Al localizarme justo frente a una ventana no lo pensé más y me aventé a mi salida o a mi muerte; mientras atravesaba aquella ventana, sentía cómo mis huesos se estrujaban, incluso podía oírlos romperse, me sentía desesperada, quería huir, mis sangre se calentaba muy rápido, sentía como me arrancaban la piel de la cara, y en mis manos sólo sostenía la cadena de oro. De la nada, mientras padecía ese dolor la voz de aquella niña me decía que resistiera, que necesitaba mi ayuda y que creía que yo sería capaz de ayudarla. Sentí cómo algo me empujó hacia adelante, fue cuando salí de aquel infierno pero al momento de levantarme me di cuenta que la ventana por la que había salida era la que se encontraba a un costado de la puerta lateral derecha, ya que en aquel árbol que se está al lado de la cancha de voleibol salían unas potentes y grandes llamas de sus raíces, pude observar que alrededor estaban varias mujeres que lloraban y se lamentaban, estaban tomadas de la mano, en círculo, rodeando aquel árbol y en su rapas superiores estaba la dueña de aquella cadena de cruz, ella sólo gritaba a sus madres que no la sacrificaran que quería seguir amando. En cuanto la vi, sólo intente correr pero una de aquellas mujeres que se encontraba dando ritual me vio y gritó tan fuerte y de una manera tan extraña que pareciera que me estaba controlando porque me detuve y comencé a dirigirme hacia ellas pero yo sólo pensaba en huir. Cuando me tuvieron cerca, una de aquellos extraños monstruos de tez gris y cara llena de marcas de fuego, me elevó del suelo tomándome del cuello. Sentía como quemaba mi cuello, yo sólo pude decir que tenía algo para su tributo al mismo tiempo que le mostraba la cadena. Ella me soltó de golpe y gritó que era una amenaza, que jamás lograría llevármela, que les pertenecía; hasta ese momento no sabía a qué se referían pero cuando intenté huir, nuevamente ese grito de guerra rompía mis tímpanos y caí desmayada. Al despertar, me encontraba atada del cuello con una venda en la boca, estaba sostenida sobre el lacerante fuego, yo gritaba y pedía auxilio, fue entonces que aquella niña me tomó la mano y me dijo que no gritara, porque cada vez que lo hacía la obscuridad me consumiría y se apoderaría de mi cuerpo y alma. Comencé a sentirme pesada, mis ojos lloraban sangre, algo me rasgaba la ropa y provocaba que mi cuerpo sangrara, me quemaba el corazón y apretaba con demasiadas fuerzas. Fue entonces cuando la niña comenzó a sentir lo que yo sentía, pedía porque no nos lastimaran: lo púnico que podía hacer es gritan que por favor no lo hicieran, en cuanto jalaron la cuerda, aquella niña llena de tristeza intento tomarme pero sólo logró arrancarme el collar que colgaba de mi cuello. Entonces, morí. Pero, en el momento en que poco a poco perdía la conciencia aquella niña dijo que no permitiría que volvieran a dañar a alguien más. De pronto se colocó el collar, respiró profundo y se lanzó al fuego, en cuanto pasó eso, el árbol envejeció repentinamente, aquellas mujeres desesperadas gritaban y se golpeaban, sangraban

y arrancaban su piel. Cuando una gota de mi sangre cayó sobre el cuerpo de la niña, todo renació, la luz del día regresó, la llegada de un nuevo día inundaba mis ojos moribundos, mi cuerpo y el de la niña triste y deseosa por amar se hicieron polvo, desde entonces, cuidamos del árbol que nos regaló la inmortalidad y que nos convirtió en una sola alma.

Mírame Ingrid Godínez Mejía 13-10-2019 Érase una vez, en la escuela de enfermería y obstetricia del IPN, que una joven quería comenzar no solo la carrera que ofertaba, sino una razón más llamativa para espectadores del suspenso y terror. Se decía que era una escuela con un enfermero tan perfecto que te dejaría sin aliento, pero he de reconocer que no tenía miedo, mejor dicho, un interés por saber de que se trataba mientras aprovecharía terminar por fin una carrera. -flashback- Cuando hice mi examen para entrar a la competencia, resulté ignorada y tuve que entrar a una privada, la Universidad Inter Continental (UIC), comenzaba a estudiar, pero me enamore de un asiático que estudiaba ahí de intercambio. Dicho hombre de nombre Jung Hoseok, alto, de tes canela pasión de ojos café claros y con un aroma irresistible a vainilla; me dijo que tenía que quedarme con el en el pequeño bosque de la escuela. Llegando la noche, descubrimos el espíritu de su hermana muerta que buscaba venganza, dicha venganza era matar a una mexicanita incrédula, y yo quedaba en esos estrictos parámetros, no lo dude y decidí amenazar con quitarle la vida a Hoseok, por lo que unas repentinas luces amarillas me cegaron, eran los vigilantes de la escuela que me vieron con una navaja sobre el cuello de el joven. Sin dudarlo, la escuela me dio expulsión -fin de flashback- Tuve que esperar una nueva convocatoria para estudiar la superior, pero me decidí por el IPN, sin tener una profesión en especial, indague entre los estudiantes que transitaban por Zacatenco, que repetían un relato de terror sobre la ESEO, Jonathan estudiante de ESCOM Sabias que en la ESEO se encuentra el estudiante pecoso maldito- Mauricio estudiante de ESM – Yo me entere que dicho estudiante desaparecía o dejaba rastros de lo que eran partes de cuerpos de enfermeras que se quedaban por más de 25 minutos en el “cuadrilátero”-. Por curiosidad le cuestione a Mauricio sobre dicho relato, -Te aconsejo no querer conocerlo, por que solo se lleva a las enfermeras, a los enfermeros los protegeentusiasmada, tomo una bolsa de palomitas de mi mochila- se dice que una enfermera lo enamoro pero a beneficio de la joven, pues para seguir con la enfermera tenía que hacer tareas y proyectos con tal de que no lo abandonara, pero como todo, esa historia melosa llego a su fin, cuando se dio cuenta que en el cuadrilátero ocultándose en uno de los pilares se estaba besando la enfermerita esa con un estudiante de la ENCB; el joven escapó en el momento por que vio que el chico traía consigo una venda negra y un cuchillo tipo Bowie, cuchillo largo, ancho y filoso de mango desgastado con un color café oscuro, aparentando haber sido quemado. La joven permaneció sentada balbuceando palabras sin sentido, el enfermero se acercó y le coloco una venda sobre sus ojos, la chica al querer librarse termino sin su mano derecha, pues el enfermero con tal de que sintiera el dolor que el sentía por la decepción y el arduo trabajo que ella rechazo le quito de un solo movimiento su mano…- el chico fue interrumpido por el profesor Gerardo Licerio, -no es conveniente que cuentes falsos rumores al nuevo alumnado, retírate por favor- Dijo con un tono molesto a Mauricio y me mostró una ligera

sonrisa a lo que molesta decidí retirarme - ¿Ni que me estuviera diciendo la historia de un asesinato impune o una leyenda que si invoco al espíritu terminare con mi vida? Decepcionada porque no termino Mauricio el relato, decidí entrar a la escuela, iba a comenzar mi clase de Comunicación Oral y Escrita, pero preferí ir al “cuadrilátero”. Saque de mi mochila una venda negra, deje mi mochila en la esquina de las escaleras. Mi corazón latía más rápido que cuando fui con Hoseok, mis dedos comenzaron a enfriarse, mis palmas estaban calientes y con sudor, coloqué en mi rostro, asegurándome de tapar bien mis ojos la venda, y dije en susurro – Enfermero, enfermero, apuesto joven, apuesto enfermero, preséntate ante otra enfermera que quiere conocerte – Al pasar unos minutos sentí como el viento se hacía cada vez más pesado y caliente, fue extraño, porque antes de iniciar hacia frio y comenzaba a llover. El pesado aire me dejaba con poco aire que pudiera entrar a mi nariz, quise respirar por la boca pero era más caliente aún y sin posibilidad a respirar mejor que con la nariz, al no poder abrir la boca trataba de decir mi nombre, el cual por extraña razón no recordaba, solo venía a mi mente un rostro el cual solo podía ver el detalle de sus pecas, eran tan simétricas que no percibí a primera el ruido de unos zapatos crujir en el piso de la losa. Me cuestione - ¿Será él? – enfermero - ¿No deberías estar en clase? – Un frio y filoso cuchillo siento sobre mis hombros descendiendo a mis manos, no siento dolor alguno, pero escucho sus zapatos pisar un charco, - ¿Qué será?, ¿sangre?, ¿mi sangre? - aprieto mi puño y no siento mi dedo índice de la mano derecha. el corazón comienza a palpitar más rápido y fuerte como si pudiera escucharlo en mis oídos. De nuevo siento el filoso cuchillo, pero en mi rostro. Siento como corre un espeso liquido por mis mejillas y esta vez escucho su voz - Creo que le deje encargado a un profesor de cuidar de las enfermeras, pero veo que eres desobediente y eso no es agradable – Me quite la venda con dificultad, pero aun veía borroso y solo notaba una sombra blanca – Por favor no busques venganza en mí, solo buscaba superar tu visita – escucho una fuerte carcajada – La única forma para conseguir mi perdón será convencer a una enfermera alta y de cabello rojo, que derrame sangre en este lugar y suplique por su vida y la tuya o me llevare a las dos. No deberás jugar otra vez conmigo o terminaras ciega y sin las dos manos, como muestra de que no te dejaré tranquila, me llevare tu alma– Terminó de darme instrucciones, pero sentí profundos cortes en mis piernas y brazos , los sentía fríos y algunos huesos fracturados, tenía tantas ganas de grita, pero nadie me escuchaba, hasta que percibí un aroma a café, sabía que se trataba de Sofia mi amiga que estudiaba en séptimo semestre. Le grité con todas mis fuerzas hasta que sentí un golpe en mi pecho, ocasionando que despertara. Sofia estaba de rodillas tratando de despertarme, yo estaba acostada viendo el techo del cuadrilátero. Mis piernas y brazos tenían rasguños, en ellas percibía un ligero hormigueo como si me hubiera quedado sin circulación en las extremidades y de mi boca salía sangre - ¿estás bien?, eres una torpe, te dije que no vinieras al cuadrilátero tu sola y menos a lo que creo que hiciste – asustada trato de decir – Sofí, eres tú, que alivio- me abrazo fuerte y me pidió que me incorporara. Esperé unos minutos y vino a mi mente lo que debía de hacer, -Sofí, ¿me ayudarías a recuperar mi alma? – asustada por mi seriedad contesta - ¿Qué le prometiste? – confundida porque Sofia sabía que había pactado algo le dije – necesito que salves nuestras vida – Cuando le iba a contar a Sofia el plan, la profesora Sandra nos interrumpió diciendo – No creas que será así de fácil cumplir con tu promesa, y ni Gerardo ni Sofia te podrán ayudar, porque en realidad aun no has despertado y el enfermero que te ocasiono dolor no fue lo que tu creíste, a quien realmente invocaste fue a un antiguo ser que se quedó atrapado entre el mundo de los vivos y muertos de nombre Nayeli, que a ocasiono una pelea entre Josué su amado y Rodrigo, su antiguo pretendiente, ambos

luchaban por esa dichosa mujer y ambos murieron, ella los mato, porque solo le gustaba robar almas para alimentarse y veo que ya no tienes la tuya. Pobre ingenua, gracias por seguir la tradición y alimentar a Nayeli… ¿Fin?

Las niñas… 1EV2-27 13-10-2019 Una noche tranquila en la ESEO un grupo de jóvenes estaban en clase con una de sus maestras que era una enfermera de avanzada edad, una señora muy amable y sus alumnos la apreciaban mucho, ellos se encontraban organizando un convivio que harían por el día de muertos que se encontraba muy próximo, empezaron a contar historias de terror y su maestra les dijo: -Cuando yo era joven y recién había acabado mi carrera, empecé a trabajar en un hospital no muy lejos de aquí en el que se contaba que en las noches había una sombra caminando entre los pasillos del hospital algunos pacientes me contaron que lo llegaban a ver u oír garras arañando las paredes por las noches, pero yo nunca llegue a verlo. Poco después este hospital cambio de lugar a un edificio más grande y el antiguo fue convertido en un hospital psiquiátrico, pero este no duro mucho pues pocos años después fue cerrado por circunstancias muy extrañas y el edificio fue abandonado-concluyo la maestra. Todos los chicos estaban muy atentos a la historia y quedaron sorprendidos, entonces Juan, uno chico alto y robusto que tenía una apariencia muy tranquila, pregunto – ¿Qué circunstancias? – y la maestra contesto –se dice que todos los pacientes oían esos mismos rasguños en la pared por las noches y también se decía que uno de sus pacientes fue poseído por un demonio pues dicen que al llegar ahí su condición empeoro muchísimo y atacaba a todos, pero…jaja- rio un poco nerviosa interrumpiendo su historia y agrego –pero esos son solo rumores no importa. Entonces otro chico Raúl, quien era muy alegre pero ahora estaba bastante serio pregunto –y usted no ha oído y tiene alguna historia de aquí, de la escuela- la maestra casi sin pensarlo contesto –sí, varias- rio otro poco pero en seguida volvió a ponerse seria y dijo –pero hay una en particular que me parece muy interesante- todos los chicos la miraron muy atentos y continuo -cuentan que en el fondo de la escuela en la biblioteca se escucha a una niña pequeña reírse o a veces llorando, muy pocos la han oído pero casi ninguno de los maestros se quedan en la escuela después de las 9 cuando terminan las clases y la verdad casi nadie le gusta hablar de eso- la maestra guardo silencio por un momento vio su reloj y dijo –hablando de eso ya casi son las 9, ya vámonos que aquí espantan- todos los chicos rieron y empezaron a guardar sus cosas al igual que la maestra, se despidieron y la maestra les dio las buenas noches y todos se fueron del salón en el que se encontraban. Juan, Raúl y María, una chica muy amable muy amiga de ellos, salieron de la escuela y en el camino para estaban platicando de la historia que les había contado la maestra entonces Juan les dice –y si nos quedamos a ver si la historia de la maestra es verdad- Raúl y María se quedaron viendo y María pregunto -¿Hoy?- entonces

Raúl dijo –y si lo hacemos el día del convivio será casi el día de muertos podríamos grabarlo y así sería más interesante - los otros chicos se vieron y aceptaron. Pasaron los días y pronto llego el día, los chico festejaron y celebraron junto a sus compañeros felizmente su pequeño convivio, ellos planearon quedarse escondidos en la noche, y así fue al terminar las clases los tres se escondieron y de alguna forma ellos lograron no ser encontrados y se quedaron en la escuela escondidos, siendo casi las 12 de la noche se empezó a oír un llanto de niña se oía poco era casi como un sollozo pero a pesar de eso se oyó en toda la escuela los chicos se reunieron casi en la entrada y por un momento dejo de oírse María pregunto asustada – ¿oyeron eso?- Juan y Raúl solo asintieron con la cabeza, Raúl saco su celular de su bolsillo prendió la cámara y con ello el flash de esta iluminando las caras de sus amigos deslumbrándolos, ellos se quejaron pero pronto se recuperaron, entonces agrego –bueno ya estamos aquí vamos a ver qué está pasando, Juan saco su celular y también prendió la lámpara María se disponía a hacer lo mismo pero le dijeron que no lo hiciera para que no se acabara también su batería. Caminaron lentamente hacia el pasillo que daba hacia la biblioteca era un pasillo corto que pasaba apenas por unas pequeñas oficinas, unos pocos salones, unas puertas al exterior y las escaleras, pero a ellos les pareció infinito de caminar en la penumbra de la noche solo con las luces de sus celulares, Juan y Raúl caminaban al frente mientras María caminaba con mucho miedo agarrada de las mochilas de ellos. Cuando finalmente llegaron a la puerta de la biblioteca, una puerta de cristal que permitía ver el interior de esta pero no en su totalidad pues tenía hojas con avisas y otras cosas pegadas en ella que tapaban la vista, se miraron fijamente y Juan susurro - ¿ven algo? - a lo que María susurrando con una vez temerosa dijo –no, y no creen que todo está demasiado silencioso y tranquilo- los chicos se quedaron callados y efectivamente se dieron cuenta de que no había ruido ni siquiera del viento contra los muchos árboles alrededor del edificio, se miraron sorprendidos cuando de repente una sombra como de una pequeña niña paso corriendo dentro del cuarto donde se encontraban casi todos los libros y se escuchó una pequeña risilla de niña, los chicos se espantaron muchísimo y querían salir corriendo pero la curiosidad les impidió hacerlo y apuntaron con la cámara hacia ese lugar pero no lograban ver nada, María dijo –ya vámonos- pero Raúl haciéndose el valiente dijo –no, estamos muy cerca, hasta podríamos tenerla en video- y ella le contesto –esto me está dando mucho miedo- y Juan le dijo –tranquila no pasa nada todo está bien- mientras el moría de miedo pero no quería parecer un cobarde. Y ahí se quedaron viendo hacia adentro sin ver nada. Poco tiempo después se oyó un pequeño sollozo Juan por un momento pensó que era María pero al voltear a verla vio que ella tenía una cara de espanto terrible y dijo –no soy yo- Raúl quien también ya había volteado dijo –lo sé y no parece venir de la biblioteca como la risa, parece ser que viene de al lado- ellos miraron hacia atrás y no vieron nada y caminaron lentamente hacia atrás pues al lado de ellos había una pequeña pared que hacia una división en el pasillo y del otro lado había una oficina y al fondo de este pequeño pasillo había un salón de audio visuales. Ellos caminaron lentamente mientras los sollozos se seguían oyendo al llegar a la puerta Raúl se acercó y pego la oreja a la puerta, poniendo una gran cara de susto y de sorpresa dijo –si es aquí dentro- y muy lentamente puso la mano en la perilla la cual giro y abrió la puerta mientras sus amigos atónitos lo veían, abrió y se oyeron unos pequeños pasos corriendo y pareciese que alguien se escondiera entre los asientos de aquel lugar, Juan y María ya estaban muy asustados, María a punto de llorar y Juan dijo –ya vámonos esto no es normal-, se oyó un pequeño –no- seguido de una risilla, se cerró de golpe la puerta de golpe dejando a los chicos encerrados María

grito del susto y empezó a llorar, oyeron unos pasos a su alrededor y las luces de sus celulares empezó a parpadear y entre los parpadeos empezaron a ver las siluetas de dos pequeñas niñas corriendo alrededor de ellos. A lo lejos se oyeron solo sus gritos aquella noche obscura de luna nueva. Continuara…

El caballo que sonríe 1EV2 #29 Probablemente tenía unos 10 años cuando empecé a ver cosas que los demás no veían cosas que salían al caer la noche personas que los demás no las veían y aunque ahora tengo 21 aun no me acostumbro pues como acostumbrarse a ese tipo de cosas me pregunto, casi la mitad de mi vida he vivido con este don o maldición, ahora con la era del internet trato de investigar más sobre estas cosas y ver si hay otras personas que están en la misma situación pues he escuchado sobre personas que pueden comunicarse con seres que ya no están en el mundo de los mortales, aunque aún no he tenido suerte de encontrar a alguien en mi misma situación trato de aprender lo más que se pueda sobre las cosas que veo y desde luego todas mis investigaciones son de internet en foros, blogs y algunos libros, pues donde más podría encontrar ese tipo de información no es como que haya una escuela donde te enseñen esas cosas al menos no en la vida real. Recuerdo una ocasión cuando tenía alrededor de unos 12 años mi bisabuela me conto un relato de su pueblo natal ubicado al norte de puebla, era sobre un ser de aspecto humanoide y que tenía cuatro brazos y la cabeza de mula que robaba a los recién nacidos para luego devorarlos pues al parecer le gustaba mucho la carne de los niños pequeños y aunque también mataba a los adultos estos no se los comía solo los mataba por placer, amaba esos relatos podría quedarme con ella escuchando cientos y cientos de relatos, olvidaba mencionar que ella era la bruja del aquel pueblito así que ella era la única que me creía y comprendía me decía que era un don y que debía usarlo para el bien no para dañar a las personas por eso siempre la ayudaba cuando la gente la visitaba para hacerle las limpias, las lecturas de cartas o de la palma, ayudaba recibiendo a las personas, si faltaba cosas tenía que ir corriendo a la tienda a comprarlas, ella me enseñaba las cosas que ella practicaba aunque ella me decía que lo que me enseñaban era sencillas o de bajo nivel para mi eran cosas realmente increíbles algunas oraciones, “pequeños trabajos” como ella las llamaba para atraer la buena suerte, la salud etc, pues ella decía que tenía talento para estas cosas y que cuando tenga la mayoría de edad me enseñaría ya los trabajos de alto nivel donde se requerían mucha fuerza de voluntad y maduración mental ella decía a manera de broma que mi mente todavía estaba tonto y que no soportaría las cosas que podrían pasar en esos rituales y aunque yo veía los seres que nadie más podría verlos no se comparaba con la maldad que puede albergar este mundo, ella falleció cuando cumplí 18 ya no alcanzo a enseñarme más, después de su deceso nos mudamos a la ciudad de México todas las cosas de mi bisabuela las guardamos en una bodega no antes de traerme varias reliquias, símbolos, talismanes y el bastón que es un una de las reliquias más poderosas de la familia, después de todo lo sucedido la vida siguió normalmente (o más o menos lo que se pueda llamar normal).

Todo lo que a continuación relatare es una de las experiencias más terroríficas que he pasado en la vida, todo comenzó en la escuela la ESEO para ser más exacto, era la primera semana de clases llegaba al salón de clases en el grupo 2 turno vespertino, pues en este grupo maldito es donde alguna vez estuvo la maldad pura. El reloj marcaba 1:45 pm yo ya estaba sentado en la banca esperando a la profesora un poco desesperado pues había llegado demasiado temprano, la verdad no sé si creer en el destino pero lo que paso en ese salón sigo preguntándome porque, si es que Dios existe porque abandonó aquella chica o tal vez todo fue su plan es algo que aún me inquieta en las noches y me despierta de golpe pues fue el precio que pague por saciar mi curiosidad. El reloj marco a las 2:04 pm la profesora entraba al salón de clases saludándonos –buenas tardes chicos!, nosotros con un buenas tardes profesora al mismo tiempo que todos sacábamos nuestras libretas para tomar la clase, el reloj marco 2:20 pm tocaron la puerta era ella “la chica” se sentó enfrente de mi pues había una banca vacía me pregunto por el horario le contente con un –creo que el horario está pegado afuera, pero le saque una fotografía si quieres te lo paso, ella me paso su número y se lo envié por whatsapp desde el momento que llego sentí una mala vibra como si todo el dolor del mundo se hubiera manifestado en el momento que ella entro al salón de clases había algo negro algo malvado detrás de ella, era algo asqueroso y sucio pero no me prestaba ninguna atención no me miraba solo la miraba a ella pero era muy raro no la veía con malicia la veía con orgullo como si estuviera contento inclusive sonríe se ve como un padre que ve a su hijo pedalear solo por primera vez su bicicleta, yo le preguntaba –dime quien eres, dime que quieres, pero el ser no me contestaba solo la seguía viendo a ella no le quitaba los ojos de enzima y le seguía sonriendo aquel el ser tenia cabeza de mula el tozo de un hombre y tenía los pies de alguna ave de caza con enormes garras era un ser sumamente desagradable pues como es que una mula sonríe es algo que te hiela la sangre, desde ese momento siempre me siento detrás de la chica para tratar de protegerla de aquel ser maligno aunque parece que no tiene intenciones de lastimarla pues el siempre le sonríe y la mira con orgullo he pensado en decirle a la chica pero aun no encuentro la forma tal vez ella me tome de loco, si eso es seguro, y aunque ella y yo somos amigos aún no he tenido la confianza para decirle que hay un hombre cabeza de caballo sonriéndole de tras de ella todo el tiempo he tratado de comunicarme con ese ser pero siempre me ignora no despega sus ojo ni un segundo de ella incluso que visto que le susurra cosas al oído ese ser siempre estará ahí sonriéndola, a veces me le quedo viendo a la creatura por horas tratando de entender porque esta con ella cuál será su verdadero propósito, investigue en internet que era ese con torso humano y cabeza de mula y aunque no hubo mucha información todo indicaba que era un rey demonio uno de los gobernantes del infierno comprándose con Belcebú o el mismo Satán, pero que hacia un rey demonio detrás de una chica de 18 años y lo que más me intrigaba era porque le sonreía, hoy en día aun le sigue sonriendo y le seguirá sonriendo por el resto de s

Código rojo: el comienzo del fin. 1EV2 #30 En un lugar muy lejano llamado Escuela Superior de Enfermería y Obstetricia me encontraba yo Jorge Torres un alumno de la misma, un chico de complexión delgada y deportiva, una estatura de 1.70, tez morena, ojos marrones, nariz recta y redonda en su punta, voz ronca, labios grandes y marcados, cabello corto de los laterales y largo de la parte superior con un gran interés con las actividades físicas y las del área de la salud. Me encontraba en el salón de clases tomando la materia de Salud Publica en donde el profesor nos explicaba sobre un virus que se estaba expandiendo de forma veloz por el estado, aparentemente proveniente de las costas y muy peligroso ya que afectaba el estado mental de los pacientes y los hacia comportarse de una forma muy extraña que el maestro describió como "zombis", el medio por el que se puede transmitir este virus es por el contacto directo del huésped como ( al tener contacto con heridas, mediante secreciones e incluso al estar expuesto al huésped por un tiempo prolongado) la buena noticia que nos dio el profesor fue que a las personas infectadas las tenían en cuarentena haciendo estudios sobre el virus. Ese mismo día al salir de las escuela me dirigí a mi guardia nocturna de Técnico en Urgencias Medicas en el Estado de Ecatepec como cada jueves, en la base sólo se encontraban el personal médico, dos de mis compañeros y un radio operador: Oscar y Alexis, una pareja muy alegre, Oscar es un hombre de 38 años, mide 1.75m, complexión delgada, tez morena, con lentes de botella, cabello corto y negro, con una gran actitud, muy empático, trabajador y apasionado por los automóviles, Alexis es una mujer de 32 años, mide 1.60m, complexión delgada, tez blanca, ojos grandes color miel, cabello castaño, es una persona muy sociable, alegre, cariñosa y con un gran amor hacia su hija; y el radio operador llamado Efraín, un hombre pequeño con 1.65m de altura, tez morena, barba mal rasurada, con una gran frente, casi sin cabello, una actitud muy impulsiva y un pervertido de primera. Ese día era muy peculiar al resto, era una noche muy tranquila, el viento era helado y parecía que nos esperaba una fuerte lluvia, el único ruido que sonaba era el que hacían las botas de Oscar al chocar contra el piso repetidas veces mostrando desesperación de mi compañero, cuando de manera súbita empezó a sonar el teléfono poniendo en modo de alerta a todos ya que sabíamos que nos esperaba una emergencia, a la que salimos en seguida; a largo del traslado al lugar del suceso empezó a llover creando un ambiente más tétrico de lo que ya era; al llegar al lugar del incidente pudimos observar una calle muy descuidada con baches cada 2 metros aproximadamente, fragmentos del camino de tierra echa lodo por la constante lluvia, el viento soplaba cada vez más fuerte y con muchas personas sorprendidas del reciente choque, a simple vista al chico del accidente se le podía notar todo el cráneo y cara escurriendo de sangre, con una herida penetrante en la frente y aparentes deformidades en ambos brazos a lo que nos dice que fue un choque frontal. Al momento de revisar más detalladamente a este chico llamado Gustavo tenía heridas lacerantes en todo su cráneo se veían los colgajos de piel por todos lados exponiendo de esta manera gran parte de su cráneo, en la

parte de la cara tenía muchas abrasiones, perdida de varios dientes en la superficie frontal de la boca, en sus extremidades se podía apreciar grandes deformidades en la parte más proximal del húmero, acompañadas de grandes abrasiones y moretones en la mayoría de su cuerpo pero con algo muy extraño que parecía ser una mordida hecha por otro humano en la parte posterior de su pierna derecha. Gustavo se encontraba en un estado muy grave ya que su estado de conciencia estaba muy alterado decía palabras incoherentes, su piel estaba fría, sudorosa y sus signos vitales estaban muy elevados comparados a los que tiene un corredor profesional en una carrera de 10km, sus pupilas se encontraban dilatadas, nada de esto era normal y tanto yo como mis compañeros lo sabíamos. Después de hacer las intervenciones requeridas de emergencia ninguno de los hospitales a los que lo llevamos lo aceptaron por el simple hecho de que no sabían lo que tenía, así sus familiares decidieron llevarlo por su cuenta a un hospital particular sabiendo que Gustavo moriría en cualquier momento. De regreso a la base impactados Alexis, Oscar y yo después de un paciente tan peculiar nos quedamos sin palabras en esa extraña noche que apenas estaba comenzando, no pasaron ni cinco minutos cuando nos llamaron a un supuesto choque que había ocurrido a poca distancia de nuestra ubicación actual, fuimos de inmediato pero algo dentro de mi sabía que no debíamos ir, el silencio en la ambulancia era un tanto tétrico ya que no era el único que tenía esa sensación; así solo se escuchaba la sirena sonando a gran potencia, el ruido del motor y los rechinidos de la ya vieja ambulancia, llegando al supuesto choque nos encontramos con un escenario bastante sorprendente porque ahí se encontraba Gustavo pero diferente, con la mirada perdida, muy alterado, con comportamientos que solo podrían ser descritos como los de un “zombi”, aún con vida su madre intento sabor del auto y Gustavo o aquella cosa prosiguió a tomar por la garganta con los pocos dientes que contaba a su propia madre, está gritando de dolor pero eran gritos que causaban terror, de esos que solo te podrías imaginar en una película de terror, al lado yacían el cuerpo de un anciano con una evisceración increíble, todos sus órganos regados por el suelo, mordidas aún con una hemorragia muy profusa en la región de su cuello y si demás familia; esposa y nietos muertos por el choque provocado por el auto donde iba Gustavo; enseguida su madre se levantaba del piso como poseída, alterada, sin vida en sus ojos, expulsando sangre y espuma de su boca. Lo siguiente que hicimos fue arrancar la ambulancia y dirigirnos a una zona segura, pero al parecer Gustavo había infectado a más gente antes de nuestra llegada, había más como el corriendo e infectando a más personas por la calle, el camino era como un cementerio lleno de desesperación, gritos, llantos, personas de todas las edades, desde niños hasta ancianos luchando por sobrevivir. Al parecer el virus del que nos hablaron llegó aquí pensé, mientras veía la respiración agitada y rápida de Óscar que manejaba la ambulancia y manos y cuerpo sudoroso de Alexis sin poder creer lo que estaba pasando, el silencio se interrumpió cuando en la radio se escucha el siguiente mensaje: “código rojo, el virus se esparce muy rápido” con una voz entre cortada y ronca proveniente de la frecuencia que compartimos con los oficiales, llegamos a la base pero lo único que pudimos ver es a todo el personal muerto, doctores y enfermeras en el suelo con un impacto de bala en cabeza y tórax al igual que Efraín muerto con su cuerpo aún caliente con su clásica revista pornográfica en sus manos y esto no por los supuestos zombis si no que las fuerzas armadas ya estaba empezando a erradicar a cualquier ser vivo a 10 kilómetros a la redonda, en lo único que pensamos en ese momento Óscar, Alexis y yo fue en escapar con la única esperanza de sobrevivir. Gritos llantos golpes simplemente personas luchando por su vida

Cheyenne Abril J. Manzo Méndez. 13/10/2018. Esta no es una historia cualquiera que le paso a una persona conocida o a un amigo, esta historia es más que eso, porque me paso a mí. Eran las 9 am de un día normal de clases , o así se suponía que seria , me levante y mis padres y hermano ya se habían ido a sus respectivas actividades, aliste mis cosas para ir a la ESEO y procedí a hacerme de desayunar , coloque uvas verdes en un traste morado que utilizamos para el cereal y lo puse en la mesa, proseguí a terminar de realizar mi desayuno cuando de la nada una uva me golpea en la espalda causando un escalofrió inmenso que atravesó desde mi cabeza hasta el último dedo de mis pies, de inmediato mi perra se puso a mi lado como un guardián y no se fue de mi lado hasta que me fui a la escuela , no quise darle vuelta al asunto porque no había manera de encontrarle explicación era la única que estaba en casa , solo decidí seguir con mi día. Ese día llegue a las 10 pm a casa, cene con mi familia y precedí hacer tarea de Comunicación, todo esto hasta que dieron las 3 am y por fin pude terminarla, guarde mis cosas y me fui a dormir, por lo agotada que estaba agarre el sueño demasiado rápido hasta que en algún punto de la madrugada sentí como alguien se sentó en mi cama y poco a poco su peso caía sobre mí, automáticamente dije entre mi -Parálisis del sueño, relájate y respira, trata de abrir tus ojos. Pero era prácticamente imposible mis parpados parecían estar pegados , mis dedos dolían por el frio que comenzó a sentirse en la habitación , algo no estaba bien , comencé a sentir miedo, hasta que mi perra comenzó a ladrar a un lado de mi cama y por fin pude despertar, respire profundo y trate de controlarme , pero el miedo un tenía mucho poder sobre mí , recurrí a rezar como mi abuelita me enseño que debía de hacerlo todas las noches antes de dormir , pero no funciono ese día no pude volver a dormir. En la mañana no quería estar sola así que mi novio llego a la casa para acompañarme antes de irme a la escuela, prácticamente ese día transcurrió normal, proyectos, trabajos, clases y más clases. Llegué a casa y de nuevo a las 3 am me dispuse a dormir; esta vez en mi sueño se presentó un niño, niño que sabía que en algún momento de mi vida lo había visto pero no recordaba en donde, no pensé en eso, sin razón alguna comencé a seguirlo, en el sueño nos encontrábamos en la casa de mi abuela, lugar en el que viví los primeros 6 años de mi vida, me guio hasta el baño y en ese momento desperté, desperté asustada, ¿quién era?,¿qué buscaba? ¿qué era lo que trataba de decirme? Mi mamá al irse a despedir de mi antes de irse a trabajar vio en mi rostro miedo así que me pregunto qué había pasado, le conté del sueño y ella se quedó petrificada y de su boca salió un -Vino a jugar contigo 48

De nuevo un escalofrió recorrió toda mi espalda, así que mi mama continua…. -Cuando nosotros vivíamos en casa de tu abuelita tú te ibas al baño por horas a jugar, hasta que un día te pregunte por que te gustaba jugar allá, tú me dijiste que jugabas con un niño llamado Cheyenne, tu abuelita te pregunto que como era y te le describiste que era un niño de tu edad que tenía un golpe en la cabeza del cual le salía sangre ya que sus papás le pegaban. Tu abuelita en ese momento quedo impactada ya que ella había escuchado de ese niño gracias a tu prima Samara (con la cual no conviví mucho pues mis tíos se separaron y su mamá se la llevo dejando de tener contacto con nosotros) ella solo jugaba con él, nunca lo describió solo sabía su nombre. De alguna manera el miedo se fue de mí, el solo quería jugar, así que desde ese día cada que voy a casa de mi abuela dejo un juguete en el baño para que pueda jugar y siempre se escucha como se divierte con él.

Hombres Naranjas Cuento de terror Iraís Baltazar de la Cruz. 13 de octubre de 2019 Durante la llegada del invierno en la ciudad de México era casi seguro que durante las tarde la lluvia no cesara y dejara gran parte de los habitantes frustrados por que el agua se estancaba e inundaba parte de a sus casas, el transporte público como el metro y servicios de taxi eran más lentos y las largas filas de personas no se hacían esperar, una de esas personas que esperaba el turno en la fila era yo quien estaba cursando el primer semestre en el Instituto Politécnico Nacional, en la Escuela Superior de Enfermería y Obstetricia, mi nombre es Irais y como no lleve paraguas tuve que esperar una media hora para tomar taxi e ir a casa. --Buenas noches--, dije al conductor y este me respondió calurosamente era un señor joven no más de 30 y no parecía taxista por su aspecto tan formal; pague y subí al departamento solo dormir ya que estaba super agotada, al siguiente día era un viernes normal, rutinario que pasaría al resto de la historia como un viernes normal del mes y de mi vida, desperté a las 7:45 am gracias a la bendita alarma de mi teléfono celular pero solo retrase la alarma y me cubrí la cara para descansar diez minutos más pero era viernes y mientras conciliaba el sueño de nuevo decidí dormir un ahora más; total era viernes, me desperté tarde, el teléfono marcaba las 9:10 am y aun me faltaba preparar de comer, así que me levante de la cama, me mire en el espejo y estaba igual que siempre, delgada, mis ojos caídos y con ojeras, el mismo pelo ondulado y largo, con mis miles de lunares en la cara y mis delgados labios que tenían la manía de estar resecos la mayor parte del tiempo, así pues decidí dirigirme a arreglar la cama, luego eche un vistazo a mi closet para ver que podría ponerme, ya que el día se tornaba caluroso y lo note por que los rayos del sol entra demasiado por las ventanas del departamento, decidí usar algo básico, jeans, una blusa de manga larga color azul rey y tenis rosa, mis favoritos; me bañe y posteriormente arreglé mi cabello y vestí. Prepare el desayuno y un sándwich para comer en la escuela en algún momento libre que llegase a tener, me lave los dientes, tome las llaves de la mesa que está a lado de la puerta, cerré y camine hacia la escuela. Mirando el cielo me percate de que no habría señal de probabilidad de lluvia y me valió si no lleva chamarra, me coloque los audífonos y escuche música durante los 3º min que suelo caminar para llegar a las escuela, era un día realmente agradable, el viento acariciaba mi rostro, no había tráfico y todo parecía muy pacifico, el sol resplandecía en lo alto del cielo pero no emitía un calor infernal más bien cálido y yo me sentía tan bien y en paz, cruce la calle y entre a la escuela, salude al policía de la entrada mientras mostraba mi credencial y este regreso el saludo muy amablemente, al tratar de guardar la credencial en mi bolsillo esta cayo pues no la logre introducir del todo, me agache para recogerla y al levantar la mirada vi que del lado del estacionamiento se estaban colocando unos grandes barriles que unos chicos y señores acomodaban y conversaban entre ellos, me pareció muy extraña su vestimenta parecían sacados de un centro nuclear ya que portaban grandes trajes naranjas y

mascarilla anti-gas, seguí mi camino pues de lo contrario llegaría tarde a la clase, puedo entrar dije con voz tenue al profesor de comunicación oral y escrita, que yacía en el escritorio, total tres minutos tarde, me dirigí a mi asiento y Galilea la chica que se sienta delante de mí me dijo con voz entusiasmada, —ya sabes que saldremos temprano— -—¿así? respondí, con cara de asombro y felicidad a la vez, —¿no checaste el mensaje que envió Ingrid? Van a fumigar la escuela, lo hacen una vez por mes – —estaba muy tranquila y a gusto escuchando música que no cheque ningún mensaje al caminar para acá— —Por eso muchos del salón no vinieron-en cuanto dijo eso recorrí con la mirada el resto del salón, y efectivamente faltaba un poco mas de la mitad de los compañeros, solo había llegado Daniel, Fernanda, Daniela, Saraí, Sam, Iztel, Ingrid, Monse, Melissa, Abril, Javier, Sofia, Luis, Galilea, Gissel y yo, realmente éramos pocos. —solo tendremos comunicación y nos vamos— —Son tres horas, no hubiese venido jajaja le dije con tono burlón. Ya había pasado casi media hora cuando tenía la sensación de ir al baño así que pedí permiso, Sali tranquila y despreocupada del salón y caminé por el pasillo, y note a los hombres vestidos de naranja entrando con varios barriles por una de las puerta laterales que tiene la escuela y que está un poco después de los sanitarios de chicas, ya no traían puestas las máscaras y uno de ellos me sonrió siniestramente como en señal de victoria por alguna travesura, yo entre al baño y no le tome importancia pues quería hacer pipi pero también me extraño mucho su acción, al salir del baño regrese al salón y note todo muy silencioso hasta escalofríos me dio. Pasaron tan solo unos minutos cuando un zumbido muy fuerte y continuo comenzó a escucharse en toda la escuela, este provenía de los emisores de alarma de sismos y mis compañeros entraron en pánico yo también pues nunca había estado en una emergencia de sismo, era sofocante de pronto una voz gruesa y de mandato que más bien aprecia angustiada dijo —se les informa a todos los alumnos que por cuestiones inexplicables se ha rociado el pesticida en las canchas y zona de juego de la escuela, no se preocupen, manténganse en los salones mientras se resuelve el problema— Al profesor le pareció muy extraño y nos dijo que no parecía la voz de algún personal de la oficina o dirección, además porque debíamos permanecer en el salón y cuánto tiempo. Todos estaban muy angustiados y sin más Ingrid propuso cerrar las ventanas laterales que daban vista a una zona de descanso. Yo estaba escuchando como hablaban los demás y se cuestionaban que había sucedido. — Que irresponsabilidad de los encargados y como se les ocurre fumigar en viernes teniendo el fin de semana— reclamo Itzel —

Estamos perdiendo el tiempo, ¡mejor no hubiera venido! Estuviera yo en casa durmiendo— dijo Sam

— ¡Ya vez Sofia para que vienes! Nos hubiéramos ido a dar el roll, añadió Javi en tono burlón y entre risas Sofia le respondió— ¡pues si mi Javi, pero querías venir a hechar desmadre! Ya habían pasado casi tres horas y nadie había salido por temor a que los regañara el profesor en turno, él estaba también comentando con potros compañeros sobre la pésima idea de fumigar y en viernes y añadía frases graciosas que hacían más amena la estancia en el salón aun así yo ya estaba impaciente y aburrida, por lo que me

dispuse a mirar la ventana cerrada y note que se comenzaba a nublar poco a poco el exterior, pero me pareció más extraño porque mucho hombres vestidos de naranja tomaron mangueras y rociaban a chorros alguna especie de gas en dirección a la escuela y en gran medida, entonces dije en voz alta —chicos miren la ventana— y todos voltearon, en ese instante cuando todos mirábamos la ventana, pudimos observar cómo lentamente todo el exterior se oscureció de gas, no había terminado de mirar tal fenómeno cuando de repente varios estruendos comenzaron a escucharse en toda la planta baja, se escuchaban gritos y gritos en todo el lugar, algo había roto un cristal de la ventana del salón y el objeto había golpeado a Sam en la cabeza, Sam tenía su suéter lleno de sangre y Daniel trataba de cargarla para llevarla a enfermería, el profesor acudió rápido a ayudar pero mientras tratábamos de poder entender que pasaba, el humo invadió rápido el salón, Melissa, Itzel, Galilea, Dani y Sofia salieron rápidamente del salón para pedir ayuda pero no lograban ver nada el humo ya había invadido la planta baja de manera impresionante, yo sin saber cómo estaba en afuera también con el resto de los compañeros, lo poco que podía percibir era al profesor, que estaba junto a Luis y Daniel cuidando a Sam, desesperados todos los demás se cubrían rápidamente la boca y los ojos les lloraban, era una escena espantosa, además se escuchaban gritos de auxilio y a otros compañeros de otros salones corriendo sin sentido y golpeándose pues contra las paredes o caerse pues no veían nada tenían los ojos muy irritados y rojos y su aspecto corporal era espantoso su piel se tornaba grisácea como machas grandes en su cara yo me trate de cubrir con las manos pero era inútil pues el humo era sofocante, no traía chatarra y no tenía con que cubrirme la boca, maldición estaba totalmente asustada. Sin más otra vez el sonido sofocante de la alarma sonó de nuevo, era la voz de una mujer adulta, estaba asustada, se notaba en el tono de su voz pues se pausaba en ocasiones — por favor, suban a la terraza lo más rápido posible (pausa) cubran su boca y ojos si pueden(pausa), estamos bajo una emergencia(pausa) no entren en pánico y traten de estar en fuera del contacto del gas(pausa) y gritando dijo ¡no lo inhalen!, su voz seso y no supimos más de ella supusimos era la directora, No habían podido hacer nada a pesar de haber vendado a Sam improvisadamente porque no se podría Sali a servicios estudiantiles, ella termino por desangrarse, Daniel se había ido ya no estaba en el pasillo, solo estaba yo perpleja de mi alrededor junto a Galilea y Fernanda quienes tosían sin cesar, vi como todos los que podían corrían por el pasillo y yo comencé a correr también para subir a la terraza pero todos estaban tan asustados que empojaban , tiraban y pasan encima de otros con tal de lograr subir las escaleras, el llanto era evidente y los gritos no se hacían esperar, chicos buscando a sus amigos y otros pidiendo auxilio, no todos los que subían estaban del todo sanos muchos de estos tenían machas grises en manos y cara, sus ojos estaban rojos y su piel seca, comenzó a llover y por fortuna logre llegar al tercer piso pero la puerta al exterior estaba cerrada, los chicos incluyendo mis compañeros de salón gritaban y pedían que abrieran pues el humo era insoportable, no lograba encontrar a Galilea, ella venia atrás de mi y de un momento a otro la perdí de vista, estaba muy angustiada, saque mi teléfono pero no tenía recepción nadie tenia señal, pues pregunte a varios chicos que notaba estaban igual de angustiados y con deseo de salir, de pronto alguien me toco el brazo y tiré mi teléfono de la impresión, y este se estrelló. La chica estaba llorando, suplicando salí y sin darme cuenta la tome de la mano y mire que mi piel esta también ya grisácea, la solté precipitadamente, y sin querer se resbaló y cayó de las escaleras rompiéndose el cuello, su sangre no era roja si no gris oscuro casi negro, los demás que notaron, con las pocas fuerzas me abuchearon e insultaron y querían golpearme, pero sin saber como Galilea, Javier, Monse salieron de entre la multitud y me defendieron, sin embrago a Javi los golpearon con una silla, rompiéndole el brazo, yo estaba tan paralizada del temor de ver a todos con caras grises, frágiles y con los ojos rojos casi sangrantes, que con golpes tan frágiles podían morir y además peleando y yo idiotamente había matado alguien como pude hacer eso, no lograba concentrarme, no encontraba al resto de mis compañeros y ya ni siquiera podía reconocer bien a los demás pues mis ojos se sentían muy irritados y cansados, así que comencé a asustarme 52

mucho, otros y muchos de los que estaban ahí comenzaban a caer sin ganas, con el cuerpo todo grisáceo y sus ojos literalmente sangrando, estaban muertos evidentemente, ya no había salida y estaríamos, muriendo poco y lentamente, me sentía culpable una persona inmunda, ya no tenía razón de sobrevivir , no habría vuelta atrás, muchos de mis compañeros ya habían muertos, habían caído entre la multitud de cuerpos, permanecí sentada, recargada en la pared y en un ultimo parpadeo mire a lo lejos del pasillo a loa hombres con traje naranja, abrir la puerta que daba al exterior, ya era noche pues solo resaltaban el color de sus trajes y murmuraban, yo ya no logre escuchar nada y cerré los ojos sin saber que paso al final, nunca me imagine morir así, matar a una persona y no poder ayudar a los demás.

Un grito solamente. 1EV2 #31 Daniel Emmanuel Vivero Flores La chica en el sanitario. Comenzó como un susurro, continuó como un grito solamente, terminó en un lamento, mas allá de eso no había nada, solo silencio, un silencio abrumador en aquel cubículo, un cuerpo aun tibio sobre un retrete de uno de los baños de la escuela superior enfermería y obstetricia del IPN. El baño solo, frio y oscuro, el cuerpo tibio, tendido, privado de la vida y de la esperanza de ver el comienzo de un nuevo día, la mirada espectral perdida hacia la nada, el brillo de los ojos no era mas que un recuerdo de la vida arrebatada. El camino semi húmedo que alguna lagrima había dejado al recorrer su mejilla se podía vislumbrar sobre la pálida piel, muestras de lucha y forcejeo en las muñecas y la ropa algo rasgada. La noche era joven, las clases apenas habían terminado y el cuerpo de Giselle, producto de la muerte repentina, se hallaba inerte, inmóvil, apenas visible en la penumbra de aquel sanitario, nadie podía haber imaginado que aquel sanitario de la planta baja, se convertiría en un sepulcro casi irónico. Antes de esto, habían desaparecido varias estudiantes de enfermería, pero nunca se había encontrado ningún cuerpo, solo dejaban de asistir a clases y los familiares las reportaban como desaparecidas, comenzaron a correr rumores sobre el peligro de regresar solas a casa, aquella noche el grupo 1EV2 había salido temprano, pero Giselle se quedó para entregar un trabajo atrasado, demoró una hora en la revisión y al terminar la escuela estaba casi vacía, se tomó su tiempo para acomodar su mochila y decidió regresar a su casa, pero antes de salir, pensó que sería mejor ir al sanitario, pues el camino hacia su casa era largo y podía refrescarse un poco, sorprendida en soledad fue privada de su vida y ahora su existencia en este plano, dependía del recuerdo únicamente. Al día siguiente el cadáver fue encontrado, el personal de limpieza alerto a las autoridades, el cuerpo, frio ya, tenía grandes moretones en el cuello, producto probable de una estrangulación, las autoridades decidieron mantener todo en secreto, seguir con las actividades escolares de forma habitual, la ESEO estaba a punto de ser certificada y no podían darse el lujo de ventilar un escandalo de esta magnitud, se le hablo en secreto a un equipo de peritaje, un detective del gobierno de la ciudad de México tomo el caso, la directora y el detective, decidieron mantener el asunto en completa discreción mientras descubrían quien había sido la persona responsable del asesinato. Al comenzar el turno vespertino, las compañeras de clase de Giselle, se preguntaban qué había pasado con ella pues no acostumbraba a faltar, marcaron a su número telefónico pero cada llamada realzada, era una llamada redirigida al buzón de voz, más tarde vieron a su familia llorando en la dirección, pero no obtuvieron respuestas claras de lo que había pasado, el ambiente era pesado, gris y agobiante. Un ambiente tétrico que predecía el inicio de una serie de acontecimientos catastróficos.

La chica en la cancha. Paso una semana desde la muerte de Giselle, sus amigas no la habían olvidado pero habían regresado a sus actividades cotidianas, era un viernes casi ordinario, al terminar las clases , aquel grupo de amigas se encamino hacia la estación de metro cercana, pero una de ellas, Jess, se percató de que había olvidado un artículo importante en el salón, se despidió de sus compañeras y regresó a la escuela por él, el edificio estaba casi vacio, solo personal de limpieza y algunos docentes se encontraban en aun, Jess sintió un presentimiento muy agudo en fondo se su pecho, una sensación de peligro, pero tratando de mantenerse en calma, hizo caso omiso de su corazón y entró a la escuela. La vida cambia en base a las decisiones que tomamos y esta decisión le costó la vida a Jess, al día siguiente su cuerpo sin vida fue encontrado en la cancha de la escuela, la directora se comunicó de nuevo con el detective, quien no tardo en llegar a la escena con un equipo especial, después de hacer una breve investigación, se dio el informe oficial de que una herida separaba de par en par la piel de su garganta, Jess no había muerto en la cancha, al parecer la agresión había ocurrido en el segundo piso, un movimiento brusco había provocado la herida en el cuello de la chica quien cayo al suelo y aún con vida su cuerpo había sido arrastrado mientras se desangraba hacia el centro de la cancha, el equipo de criminalística confirmo que al llegar a la cancha, Jess aún se encontraba con vida, pero en pésimas condiciones por la pérdida de sangre y el maltrato, el arma con la que se había lacerado su garganta, fue incrustada en su espalda para terminar con su vida; las autoridades escolares ocultaron este hecho también, parece algo ilógico, pero en México, nadie sigue los protocolos como deberían seguirse. Más allá del miedo, mas allá de la incertidumbre, la ola de susurros inundaba los pasillos de la ESEO, entre los salones mil historia comenzaban a divulgarse, todas ellas increíbles, todas ellas falsas, historias que crecían y tomaban fuerza alimentándose del temor de los alumnos, se hablaba de un asesino dentro de la escuela, nadie sabía quién podía ser, así que cada persona, cada estudiante, cada empleado, cada personal docente, cada alma dentro de la escuela podía ser la culpable. Se empezó a establecer como medida de seguridad, salir de clases antes de que el sol se ocultara, y siempre permanecer en compañía de alguien, esto mantuvo el orden por algún tiempo, no había muerto nadie más, la policía investigaba e interrogaba, ninguna otra muerte se había presentado. Detonaciones e inmolación. Parecía que la era oscura dentro de la ESEO había terminado, había transcurrido un mes desde el último asesinato, ante el temor de un nuevo suceso, se habían adoptado medidas de seguridad, las clases terminaban a las 6 de la tarde y los alumnos siempre permanecían en pares, incluso para ir al baño, lo hacían invariablemente de dos en dos, el día parecía normal en el 1EV2, Brenda y Samantha salieron al baño, pero tardaron en volver, nadie había puesto atención en este hecho, pues parecía ser un día normal de clases, pero irremediablemente el sonido de dos detonaciones recorrió los oídos de todos los compañeros del salón, la sangre se helo, el escalofrío recorrió los huesos, las pupilas se dilataron y las mandíbulas se apretaron, nadie entendía que era lo que pasaba; de pronto se escucharon gritos del personal de protección civil alentando a todos a permanecer en sus salones, nadie siguió las indicaciones, la atención del alumnado termino en la azotea, todas las miradas fijas, las bocas secas, el temor en un susurro. En la azotea de la escuela se encontró el cuerpo de Samantha, tendida sobre el suelo, en un charco de sangre y con la impresión de haber sido abatida mientras trataba de escapar, tenía un disparo en la frente y otro en el pecho, nadie había visto nada, nadie había localizado un sospechoso, las cámaras

habían sido apagadas, era un asesinato que había sido cometido a plena vista pero sin un solo testigo, de pronto se percibió un alarido procedente de uno de los laboratorios de enfermería, al llegar, todos pudieron observar a Brenda envuelta en llamas, la habían quemado viva, a través de la bola de fuego, se podía ver el cuerpo calcinado aun ejerciendo movimientos espasmódicos. Toda la escuela entro en pánico, para evitar un escape, las autoridades acordonaron el plantel, El detective fue llamado y llego con varias patrullas y oficiales de policía, todo el alumnado fue dirigido hacia las canchas, más tarde el personal y los docentes también, toda la población de la ESEO se encontraba en las canchas, apenas cabían en esa área tan pequeña pero el temor a otro asesinato la esperanza de que la persona culpable fuera encontrada, los hacía permanecer en la cancha. ¿Quién fue? Mientras todos estaban en la cancha, la policía recorría el edificio, encontraron un arma de fuego dentro del salón 1ev2, sin balas, con el cañón aun tibio, ante todo el caos, nadie había notado la desaparición de Yazmin, la algarabía era indescriptible, gritos, bulliciosos ruido, el miedo reflejado en el rostro de la gente, de pronto todas las bocas se callaron, todas las miradas se dirigieron al mismo punto, Yazmin salió del edificio principal , tenía la boca amordazada, los brazos atados y cargaba una mochila que parecía pesada, salió del edificio principal y camino hacia las canchas, cuando Ivette la vio corrió hacia ella, todos de en la cancha se quedaron callados, Ivette le quito la mordaza a Yasmin y al preguntarle que había pasado ella le respondió, con la voz nerviosa, la respiración agitada: - “¡Lo sé, se quien lo hizo, los asesinatos!”, Ivette y el resto de las personas en las canchas, guardaron un silencio casi espectral, una sensación casi inefable de tensión. Yazmin siguió, - “Vi a la persona que realizo los asesinatos, es…”, En ese momento la mochila que traía en la espalda explotó, la onda expansiva voló en pedazos a Yasmin, Ivette y al resto de personas que se encontraba dentro de las canchas, el edificio principal fue dañado, la ESEO estaba a unos escombros de dejar de existir, partes mutiladas y calcinadas de cientos de alumnos, se hallaban por doquier y la esperanza de saber quién era la mente maestra de los asesinatos se había desvanecido de igual forma que las vidas de las personas de la ESEO, nadie había sobrevivido y la estructura de la escuela no resistiría por mucho. El personal policiaco y el detective, habían muerto también, la ESEO estaba hecha escombros, el estallido había sido reportado en todos los noticieros del país, los equipos de emergencia eran movilizados hacia el casco de santo tomas, las demás escuelas eran desalojadas, las calles eran un caos, pero a lo lejos, entre la multitud, una persona sonreía, alguien que había logrado asesinar a la población entera de la ESEO, alguien que se había desecho del detective que le seguía y que había volado un edificio en pedazos, alguien que se había salido con la suya y era impune, libre para hacerlo de nuevo, en otra escuela o en otra ciudad, un alma corrompida que se alimentaba con la desgracia provocada, una mente retorcida y libre, libre para sembrar el caos de nuevo. Así fue como ocurrió, como las vidas de Giselle, Jess, _Samantha, Brenda, Yazmin e Ivette fueron borradas de la existencia al igual que el resto de personas en la ESEO, así fue como el plantel había volado en pedazos, así fue como todo se extinguió. Comenzó como un susurro, continuo como un grito solamente y termino en un lamento, más allá de eso no había nada, solo silencio.

Contagio mortal Jessica Galarza Sotelo 13 de octubre de 2019 Era una tarde de un primero de junio, donde los alumnos de segundo semestre empezaban a hacer sus prácticas clínicas. Comenzaban a visitar casa por casa haciendo encuestas cerca de la ESEO, en las colonias aledañas. Eran aproximadamente las 4 de la tarde cuando se encontraban cerca del colegio militar, aún había sol y la avenida estaba muy transitada. Ocurrió que Mariana quiso atravesar la avenida y por poco la atropellan, se lastimó la pierna y junto con mis compañeros de equipo tuvimos que llevarla al hospital Rubén Lereño, solo tuvo un leve esguince en el tobillo, sin embargo, eso le provocó un gran moretón. Yo tuve que acompañarla al salón y mis compañeros se dedicaron a terminar la labor que teníamos de práctica. Estando en el salón nos percatamos que hubo un pequeño alboroto en el quiosco de la escuela. —¿Qué estará pasando Jessica? —ni idea, deja me asomo —respondí con rapidez— Salí en dirección hacia la cafetería y le pregunté al chico de la cafetería que ¿Qué había pasado, porqué había tanto alboroto? A lo que él me respondió: —Al parecer empujaron a una maestra del primer piso, aunque está bien, sólo se lastimó un brazo, se la acaban de llevar al hospital. —¡que rayos pasa hoy! —contesté extrañada— gracias lindo día. Al regresar al salón me percaté que Mariana se encontraba platicando con la profesora Juana María, le estaba explicando el acontecimiento durante la practica e inmediatamente la profesora le dijo: —deben tener más cuidado chicas, el visitar AGEBS es una tarea difícil, que requiere su completa atención, no sólo es hacer encuestas. Mariana muy apenada, sólo bajo la cabeza y le contesto a la profesora que tendría más cuidado. Noté a la profesora un poco rara, a pesar de saber que ella tiene su carácter bastante fuerte, observé en su rostro una expresión bastante dura y extraña. —¿notaste su rostro de la profesora? —pues se veía como molesta ¿no? —no lo sé Mariana. Estaba demasiado extraña, sus ojos se veían distintos, muy raros, podría jurar que tenían tonalidad roja.

—¡como crees Jessi! Estas exagerando. —no creo, la verdad tengo un mal presentimiento. Al siguiente día a todos los alumnos de mi grupo 2EV1 estábamos reunidos en nuestro salón, tendríamos que entregar un borrador de las encuestas que un día antes realizamos. Sin embargo, la profesora Juana María no se presentó a recibir nuestro trabajo cosa que se nos hizo muy extraño porque la profesora casi no falta a darnos clase, preguntamos por ella y nos dijeron que había tenido un pequeño accidente el día de ayer, que no la dejaría asistir. —oye pero ayer la vimos. ¿No? —lo sé Mariana. Que extraño. Comentamos esta situación con tres de nuestras compañeras y obviamente nos dijeron que estábamos locas, que nosotras mismas escuchamos que la profesora tuvo un percance ayer y que no se presentó a la escuela, que era muy extraño que sólo nosotras la hubiéramos visto y aún más extraño que la hayamos visto en esas condiciones. —Jessica quizá es porque la profesora no te cae muy bien que ya hasta la sueñas. —de verdad Dilu si la vi, hasta Mariana conversó más con ella, nos dijo de los AGEBS y todo eso. Si se notaba más molesta de lo normal. —chicas ya no inventen cosas Dilu tiene razón, si no ha venido no pudieron haberla visto, quizá Mariana estaba alucinando por el golpe. —Sara, también yo la vi, la escuché y noté incluso su mirada extraña. Nuestra conversación se interrumpió con la entrada del profesor César. Entró de una manera muy agresiva y nos percatamos que traía en la ropa mucha sangre. —¿Qué pasa profesor? —todos los alumnos le preguntamos al unísono— No pudo contestarnos sólo cerró la puerta, colocó bancas y el escritorio para atascar la puerta. —profesor nos está asustando, ¿podría explicar que pasa? —chicos mantengan la calma, lo necesitan —por fin contesto, pero con una voz bastante entrecortada— un grupo de sus compañeros que tenían prácticas en el Hospital Rubén Leñero acaban de referir que la profesora Juana María falleció, debido a que alguien le empujó del primer piso. Primero sólo tuvo una fractura en el brazo pero ahora no saben que paso, falleció a las 10 am. Uno de sus compañeros me platicó que la profesora por la tarde antes de salir del Hospital Rubén Leñero se dirigió al Instituto Nacional de virología donde se encontraría con su hermana. Lo cual nunca ocurrió porque al parecer la profesora se metió a un área donde estaba prohibido el acceso y por lo que decretan adquirió un virus que la convirtió en una cosa muy extraña. —profesor el día de ayer nosotras la vimos, de hecho Jessica se salió porque se escuchaba mucho alboroto en la parte del quiosco —interrumpí a Mariana—

—sí profesor de hecho el de la cafetería me platicó que una profesora la empujaron del primer piso, pero si a la profesora Juana fue a la que empujaron ¿Cómo es posible que posteriormente la haya encontrado yo aquí en el salón con Mariana? si ya se la habían llevado al hospital. —miren chicos las autoridades no quieren dar aún anuncios para no preocupar a la población estudiantil pero por lo que yo pude observar esta situación es bastante delicada. Acabo de ver a la profesora, pero en realidad no creo que sea ella, creo que esto es un ente o es parte de las consecuencias del virus que contrajo la profesora. Se supone que ella ya está muerta, su cuerpo incluso no se ha encontrado, después de que lo llevaron al anfiteatro del hospital ya no lo pudieron entregar a sus familiares porque desapareció. Pero yo la acabo de ver y creo que quiere matar a todos. —tengo miedo —interrumpió Angelica— ¿Y si nos mata?, ¿Y si nos contagia?, ¿Qué va a pasar con nosotros?, ¿Qué nos va a suceder? ¡profesor tiene que ayudarnos a salir de aquí!. En eso se escucharon estruendos muy fuertes en el quiosco de la escuela. La mayoría de los alumnos se asomaron hacia la ventana y pudieron observar una escena bastante aterradora. Observaron a la profesora Juana María atacando a las personas de la cafetería, quería morderlas, quería matarlas. Lo había logrado con algunas de ellas. Observamos que conforme mordía a las personas se empezaban a convertir en un espectro parecido a la profesora con la cara pálida, sangraban por todos lados, tenían heridas en el cuerpo y sobre todo los ojos rojos que pude observar a la profesora. El profesor de taekwondo estaba tratando de defenderse del ataque, trataba de ayudar a los alumnos a los que les estaba dando clase, sin embargo, sus esfuerzos fueron nulos ya que los infectados cada vez eran más. —demonios ¿Qué vamos a hacer?. ¿Cómo salir de esta crisis? —preguntó el profesor. El tiempo transcurría, ya eran casi las 9 de la noche y no podíamos salir del salón, porque sabíamos que seríamos atacados por los infectados. Empezábamos a tener bastante hambre y sed, teníamos necesidad de ir al sanitario y no podíamos. Había aún más compañeros encerrados en otros salones y era muy difícil poder salir. Habíamos observado que trataban de salir y escapar pero eran inmediatamente atacados por los infectados, teníamos miedo no podíamos salir del salón queríamos tener una esperanza de poder salvarnos pero no sabíamos qué hacer. Mediante un teléfono celular pudimos escuchar un anuncio de la radio, en el cual, explicaban que habían encontrado la razón de los ataques por el virus. Aquel virus seria una mutación del virus de la Rabia, esto hacía que las personas se volvieron bastante agresivas y atacarán a sus próximos, del mismo modo, era tan contagioso que mediante la mordida se infectaban de forma inmediata. Que la vacuna tardaría un par de semanas para las personas que aún no estaban infectadas y que las que ya estaban infectadas tendrían que ser sacrificadas. Pero tendrían que tener cautela para no hacer la infección más grande. Se nos pedía a la población que no saliéramos de nuestros hogares, que por más que nos tocarán las puertas no le abriéramos a nadie, ya que, el ambiente era bastante peligroso. Pasaron un par de días y nuestras necesidades fisiológicas cada vez se aumentaban. Orinábamos y defecábamos en el bote de basura, con mucha cautela lo vaciábamos en la parte de afuera de la ventana. Teníamos demasiada hambre y sed ya no sabíamos qué hacer. Solo había tres hombres contando al profesor,

éramos 8 mujeres y la necesidad de tener sexo a pesar de las dificultades eran grandes. Se comenzaba a tener relaciones unos con otros, era una situación bastante crítica. —¡ya estoy harta!—gritó una compañera y se salió por la ventana. No se veían rastros de los infectados, creímos que lograría escapar, cuando oímos su grito desgarrador. —creo que ya la perdimos —dijo el profesor y se tapo la cara— En eso escuchamos un golpe muy fuerte en la puerta, la querían tirar, nuestra compañera aún estaba consciente y llevó a los infectados hacia nuestro salón. Tuvimos que unir esfuerzos para poder detener la puerta y que ellos no pudieran entrar, sin embargo, eran demasiados. Lograron entrar al salón y así cada uno de nosotros fuimos formando parte de los infectados. De lo último que tuve conciencia fue ver como todo mi cuerpo se llenaba de llagas que explotaban y me salía sangre de las heridas. Comencé a ver todo rojo. Me resistí, traté de resistir pero fue en vano. Ahora soy uno de ellos, mi objetivo es morder a más y más gente. Sólo espero el día del sacrificio y la vacunación de la gente sana. ¡Si es que lo permitimos!

Cuento de terror: Malas acciones, malos resultados Marlene Cruz Guadalupe Era de madrugada y todo se encontraba en silencio en la casa de Kenia, ella se encontraba haciendo su tarea, ya que debido a sus constantes borracheras no había avanzado nada y los próximos exámenes estaban cerca. Kenia se encontraba sola ya que su madre era enfermera y se encontraba trabajando en el hospital; después de unos cuantos minutos Kenia no resistió más y se fue a aquella fiesta que había rechazado antes, y se aprovecho de que quedaba bastante cerca de su casa. Al llegar a la fiesta se encontró con sus amigos y un chico llamado Cristian, a quien habían operado de niño debido a un accidente automovilístico y que desgraciadamente había quedado con a cara y piernas deformes, Cristian amaba a Kenia, pero ella solo le demostraba actos de amabilidad cuando necesitaba algo de el, pero cuando no quería ningún favor lo rechazaba y lo trataba muy mal en conjunto con sus amigos y esa noche no fue la excepción. En el transcurso de la fiesta bebió y bailo mucho como lo anhelaba, pero esta vez se encontró con su amor platónico (Julián) y los dos estaban bastante ebrios, así que la situación fue a algo más intimo y se fueron a la casa de Kenia, donde ocurrió lo que los dos tanto anhelaban, Cristian preocupado por Kenia los siguió y entro en la casa con ellos, sin que se dieran cuenta, y escucho como se burlaban de el y todo el acto sexual que hubo después de eso. Por la mañana Julián y Marlene se despertaron y quedaron en verse de nuevo, para seguir repitiendo ese encuentro que había resultado tan agradable para ambos, Cristian escucho todo el plan y posteriormente salió de la casa de Kenia. A pesar de todos los rechazos de Kenia hacia Cristian el seguía amándola y tratándola lo mejor posible. Esa semana Kenia se vería con Julián, pero estaba tratando muy bien a Cristian casi como si correspondiera a su amor y el estaba mas feliz que nunca, con el paso de los días Cristian se ilusionaba mas y más, al llegar el viernes (día de la cita de Julián y Kenia), Kenia le dijo a Cristian que se vieran al finalizar las clases en la sala de usos múltiples de la escuela, a la que nadie iba nunca, Cristian muy emocionado accedió y al llegar el momento tan esperado fue a su encuentro y se encontró con la sala vacía y un traje de payaso roto e indignante, así como una peluca de mujer y maquillaje, después escucho que cerraron la puerta, el confundido buscaba a Kenia quien respondió detrás de la puerta:-Cristian, tendrás que vestirte y maquillarte como payaso , si no lo haces no te dejaremos salir, seguido de esto muchas risas y burlas ya que Kenia no se encontraba sola, seguido de esto Cristian no tuvo mas remedio que hacer caso a lo que le había dicho Kenia, al terminar lo comunico a Kenia y esta lo dejo salir, Cristian llorando y lleno de decepción y vergüenza salió y al instante toda la escuela se burlo de el y tomaron videos y fotografías a montones.

Cuando el se alejaba de la escuela corriendo y muy avergonzado Julián y sus amigos lo detuvieron y le dieron una golpiza nada moderada, Julián le recalco que dejara en paz a Kenia o la próxima vez no serian tan gentiles de dejarlo con vida. Cristian llego a casa de Kenia como pudo y le pidió una explicación por todo a lo que ella solo le respondió que debería de alejarse de ella y no confiar tan rápido en las personas, esto devasto aún más a Cristian y lo dejo destrozado. Al anochecer se llegó el momento de que Julián y Kenia se vieran, Julián llego a casa de Kenia y comenzaron a emborracharse y claro se burlaron aún mas de Cristian y de lo que le habían hecho, pasado cierto tiempo comenzaron a repetir su acto anterior, acto que todo el tiempo estuvo observando Cristian, esto se repitió 6 meses, 6 meses que Cristian se la pasaba espiando la intimidad sexual de Kenia y Julián, uno de estos días, Cristian espero a que Julián se fuera de la casa de Kenia y la espero sentado en su cocina, Kenia al verlo se sorprendió de verlo ahí y aun mas de verlo con aquel traje y maquillaje de payaso, Cristian no dijo nada. Pasada una semana nadie sabia de Kenia ni de Julián, pues Cristian los había encerrado en una bodega de una fábrica vieja, mantuvo a Julián comiendo solo desperdicio de comida y a Kenia de vez en cuando le daba comida decente ya que a pesar de todo la amaba, pero a Kenia la violaba frente a Julián unas diez veces al día y seguido de esto obligaba a Julián a que hiciera lo mismo, a lo que Julián no podía negarse ya que Cristian tenia armas de fuego y otras herramientas de tortura y mientras ellos hacían eso el los grababa y expresaba grato placer al verlos, pero a mitad del acto le entraban unos celos enfermos y se abalanzaba contra Julián y lo golpeaba hasta que se cansaba. Habían pasado ya 3 meses y Julián se enfermó y ya no tenia fuerzas para nada, pero Cristian lo seguía sometiendo y obligando a hacer estos actos repugnantes. Un día Cristian salió y Julián y Kenia se encontraban atados con cadenas de un pie cada quien, Kenia tenía a su alcance un machete con el que Cristian los amenazaba cuando no querían obedecerlo, Kenia en su desesperación por huir de ahí , comenzó a cortarse su pie a lo que Julián le rogaba que parara, pero ella ya no podía soportar que la volvieran a violar y que la siguiera maltratando, así que finalizo lo que estaba haciendo y le dijo a Julián que hiciera lo mismo a lo que el se negó, ella le dejo a su alcance el machete y salió corriendo. Pasados unos cuantos minutos Cristian regreso y al ver la escena y no encontrar a Kenia se enfado demasiado y a machetazos se encargo de quitarle la vida a Julián, seguido de esto salió a buscar a Kenia, quien se encontraba escondida en una camioneta, para Cristian no fue tan difícil encontrarla ya que la sangre de Kenia había dejado rastro, al tenerla de frente dijo: - ¿Por qué me huyes?, yo te amo, no quiero que te separes de mí, tenemos que estar juntos siempre; a lo que Kenia le respondió gritando: -Déjame en paz!!! Aléjate de mí, estas loco y enfermo, déjanos tranquilos a Julián y a mí, por favor!!!. Cristian le dijo: -Jamás te voy a dejar en paz, tu eres mía y ya no podrás estar con Julián, ya no está en este mundo. De inmediato Kenia comenzó a clavarle en la cara unos clavos oxidados que se había encontrado, pero por su falta de estabilidad y fuerza, Cristian la retuvo y comenzó a golpearla, tanto que casi no podía parar, se negaba a perderla, al quedar inconsciente Kenia, la llevo de nuevo a la bodega y la ato esta vez del cuello; al despertar Kenia y darse cuenta de su situación y ver la imagen repulsiva de Cristian se soltó a llorar y lo maldijo y le suplico que la dejara ir. Pasada una semana, Kenia comenzó a disculparse con Cristian, a lo que este no respondió nada, Kenia comenzó a insinuársele y Cristian cayo, se acerco a ella con una botella en la mano y Cristian al estar envuelto

soltó la botella, esta se rompió y Kenia tomo discretamente uno de estos vidrios, se acomodo encima de Cristian y mientras lo besaba comenzó a enterrarle este vidrio, hasta que lo mato. Kenia quedo en shock y sola, pasaron dos días sin beber ni comer y completamente sola, no veía ninguna señal de esperanza y comenzó a recordar todo lo que le había pasado y lo mala que había sido con Cristian, teniendo enfrente de ella su cuerpo y el de Julián, se culpó asimisma y en un impulso tomo el mismo vidrio con el que había matado a Cristian y se corto las venas y se dejo morir poco a poco.

Los seleccionados Rangel Jacinto Alejandra Ciudad de México, 11/Octubre/2019 Hacía mucho frio, era un día lluvioso, muy nublado, parecía que el cielo y las nubes grises ahí presentes sabían lo que iba a suceder esa tarde/ noche en donde la lluvia parecía no querer cesar. Se encontraban ahí presentes un grupo de estudiantes del grupo 1ev1 que se habían presentado ese día a la ESEO para realizar una actividad que su profesor de la materia de Comunicación Oral y Escrita, Cesar Edgardo Ornelas les había dejado, para realizar en equipo. Lo que ellos no imaginaban es que, ese día se llevarían el peor susto de sus vidas e incluso la peor experiencia, reviviendo sus peores miedos y pesadillas, una experiencia que quizás podrían contar a sus familias, amigos cercanos, a un desconocido o quizás podrían ya no contarla, nadie sabe que es lo que pasara y mucho menos de lo que se esperan. La experiencia ahí vivida podría marcarlos para siempre y hacer que su mente nunca olvide lo que ahí sucedió. Era un día lluvioso en la Escuela Superior de Enfermería y Obstetricia, ahí se encontraba un grupo de estudiantes conformado por dos chicos altos, delgados, con cabellos lacios y morenos, ojos color café, uno de ellos llamado Tony muy tranquilo con su característica barba corta y su caballerosidad, y el otro chico Carlos, un poco desastroso, un poco fastidioso cuando se lo propone pero con su característico sentido del humor, las chicas, muy diferentes cada una de ellas, la primera llamada Fanny es de cuerpo corpulento, algo llenita de amor con cabello lacio corto, de mediana estatura, inteligente y algo gritona pero carismática, la segunda chica llamada Faty es igualmente de mediana estatura, también esta llenita de amor, con cabello lacio y negro y muy sincera y directa con las cosas que debe decirle a alguien más, de piel blanca, la tercera chica, cuyo nombre es Mariana, es de cabello lacio y corto color negro, delgada, carismática pero muy sincera y desastrosa, de piel blanca y responsable, y la última chica, llamada Ale, de mediana estatura, piel morena y cabello chino color café, ojos color café y muy carismática, sincera pero con carácter fuerte. Ellos se encontraban sentados dentro del aula 1, son novatos en el área universitaria, recién ingresados hace unos meses en la escuela de la ESEO, apenas van acoplándose al ambiente que los universitarios llevan en sus vidas, tareas, fiestas, chicos que les gustan, chicas que les gustan, más tarea, actividades extras, etc. Se encontraban platicando acerca de la actividad que debían realizar y se preguntaban el ¿Por qué? El profesor los había citado a esa hora para realizar la actividad que tenían pendiente, y sobre todo por qué los había citado en un día en el que la escuela parecía no tener actividades, se encontraban ahí, solos, solo con la presencia de cada uno de ellos. Ale tenía un mal presentimiento acerca de ello ya que el correo por el que el profesor los había contactado era muy extraño, al momento de querer buscar la dirección de correo no aparecía nada, sin tomarle mucha

importancia permaneció dentro del aula hasta que sintió la necesidad de salir al baño, temerosa por ir sola y el que la escuela estuviera un poco vacía, decidió pedirle a Mariana que la acompañara. Ambas salen del aula directo hacia los sanitarios, cuando terminan de realizar sus necesidades retoman su marcha hacia la aula, pero Ale se encuentra con el chico que le gusta, esta no sabe cómo reaccionar ante él, ya que siempre que lo veía se ponía muy nerviosa esta vez decide tomar valentía y acercarse a saludarlo, Mariana al percatarse de esto decide dejarla ahí con él para que se tomen su tiempo y se conozcan. Mariana regresa al salón y se percata de que ahí dentro solo se encuentra Faty y Tony, cuando pregunta por Fanny y Carlos, estos le responde que al parecer fueron a ver de que hubiera servicio en la cafetería de la institución, sin tomarle mucha importancia, Mariana decide sentarse en su lugar y revisar sus redes sociales, pasada una hora Ale no regresa, ni mucho menos Fanny y Carlos y no hay presencia alguna del profesor, empezando a estresarse Tony decide salir a ver que sucedió con sus compañeros, por qué tardan tanto en volver, cuando sale hacia el pasillo se da cuenta de que las luces de la entrada están apagadas y que las puertas que dan hacia los jardines traseros están cerradas. Decide ignorar ese sentido que le advierte que algo anda mal y retoma su camino hacia la cafetería para buscar a Fanny y a Carlos, pero es grande su sorpresa al observar que la cafetería está cerrada y no hay ni una sola alma en las canchas, comenzando a incomodarse regresa al aula, pero cuando vuelve al pasillo ahora no solo las luces de la entrada están apagadas, sino que también las primeras luces del pasillo, casi trotando entra al aula en donde aún se encuentra Faty y Mariana, este le comenta lo que observo y juntos deciden ir a buscar a sus compañeros que al parecer decidieron dar un paseo por la escuela y que Ale se desapareció con el chico que le gusta. Toman camino hacia el primer piso de la escuela y deciden separarse para buscar más rápido, Mariana decide ir a buscar al profesor de comunicación ya que al no aparecer está comenzando a sentir nerviosismo y miedo, pero cuando entra al área de los docentes esta todo solo y silencioso, tan silencioso que es algo abrumador el que solo pueda oír su respiración y los pasos tan sigilosos que da, hasta al parecer se podría decir, que camina con miedo, mientras continua su recorrido por los pasillos del área de docentes, comienza a escuchar pasos detrás de ella lo que ocasiona que voltee, pensando que podría ser uno de los chicos que están buscando a sus compañeros desaparecidos o incluso uno de los desaparecidos, pero detrás de ella no hay nadie ni nada, al continuar, comienza a escuchar los pasos cada vez más cerca de ella, cansada de pensar que le están haciendo una broma, grita que dejen de estar de graciosos y la ayuden a buscar al profesor, pero lo que le sucede es tan escalofriante que se le hiela toda la sangre, un grito desgarrador saliendo de una de las oficinas que se encuentran a su lado izquierdo hace que trague en seco y su cuerpo se quede estático en su lugar, sin la valentía para voltear ni entrar a averiguar de qué se trataba ese grito, decide echarse a correr, pero cuando estaba a punto de salir alguien o algo le toma con fuerza el tobillo haciendo que esta caiga de cara contra el suelo. Al momento de voltear para ver qué fue lo que la jalo e impidió que siguiera corriendo, lo que ve la deja sin aliento, helada, y que los ojos casi salgan de su cara, una mano horrible, grande, con uñas enormes y puntiagudas, de color negro la sujeta de su tobillo y al momento de levantar la mirada, recorriendo esta por el brazo y querer llegar hasta su cara, las luces del lugar se apagan, ocasionando que Mariana suelte un grito muy fuerte pidiendo ayuda, y siendo jalada hacia el fondo del pasillo, perdiéndose así, desapareciendo. Tony que esta un pasillo arriba de donde se encontraba Mariana, parece escuchar el grito pero no le toma mucha importancia pensando que son sus compañeros jugando, o Carlos molestando a Mariana, continua su camino y lo que encuentra al fondo del pasillo lo deja helado, ahí, sin vida y con una horrible expresión en su cara,

se encuentra el cuerpo de su amiga Fanny, esta al parecer le hacen falta los ojos y su boca muestra una mueca de horror, Tony horrorizado y espantado sale corriendo de ese lugar sin saber que ha tenido que suceder para que Fanny haya terminado así, al seguir corriendo choca con alguien para su buena suerte es Carlos, quien al igual que él, se encuentra horrorizado ya que en el roof garden ha encontrado el cuerpo de Ale y el chico que le gustaba, muertos, con una mueca de horror en sus rostros y con rasguños por algunas zonas de sus cuerpos, y por las escaleras ha encontrado rastros de huellas con lodo o algo color negro, pero al parecer esas huellas son de un pie descalzo con una forma singular, huellas de pies flacos, con dedos alargados y delgados de igual manera, tras un trueno escalofriante la luz de toda la escuela parece fallar, dejándolos a oscuras, sin saber en dónde puede estar Faty. Con la sola luz de su celular, ambos se van alumbrando el camino hacia las canchas, gritando el nombre de Faty quien no parece estar en ningún lado, cuando parecen estar dándose por vencidos, una tenue voz delgada parece llamarles desde la biblioteca ellos asustados por lo que han visto y temerosos de que ande un asesino en la escuela van con cautela hacia la biblioteca, al entrar, entre susurros van gritando el nombre de Faty, pero no obtienen respuesta, al momento de querer regresar escuchan unos sollozos del lado del área en donde se encuentran los libros, emprendiendo camino hacia ese lugar en donde oyeron los sollozos, se van acercando poco a poco , pero al momento en el que van a llegar, la puerta de la biblioteca se cierra, dejándolos encerrados y sin poder salir, entrando en desesperación Carlos decide gritar a todo pulmón que sea lo que sea lo que los está molestando que los deje en paz, haciendo que ocurra algo que jamás hubiesen imaginado, ya que una voz de ultratumba, profunda y escalofriante le responde –“Ustedes son mi alimento de este año, pues bienvenido sea, de aquí ya no podrán salir”- . Ambos atemorizados voltean sus cuerpos hacia el lugar de donde provino esa voz, pero con la poca luz con la que cuentan les es imposible visualizar con claridad. De un momento a otro Carlos ya no se encuentra al lado de Tony, este comienza a llorar pidiendo ayuda a dios y que lo dejen salir, pero solo recibe una risa escalofriante como respuesta, de un momento a otro su teléfono le es arrebatado de las manos y esa voz vuelve a hablarle, pero esta vez cerca de su oído, susurrando lo siguiente –“Nunca debieron abrir ese E-mail, fue su sentencia”-. Y lo único que se logró escuchar por los pasillos vacíos de la ESEO fue el último grito que Tony dio, Tony y todos sus amigos. Cuenta la leyenda que cada 31 de Octubre, 6 estudiantes de la ESEO son seleccionados por el espíritu que ronda esta escuela, para poder alimentarse y dejar en paz la institución hasta el próximo año, nadie sabe que es, nadie sabe de dónde viene, solo los que lo han visto podrían describir a este espíritu, pero para su mala suerte aquellos que lo ven no viven para contarlo.

Enfermera 1EV1 #02 Érase una vez una enfermera llamada Evelyn, esta era una chava promedio de estatura 1.55, con cabello ondulado negro, rasgos afilados, con una mirada y forma de ser muy fuerte y dominante, esta chava era muy sobresaliente pero muy arrogante por lo que era bullleada, tanto física como emocionalmente a grados magistrales de tal forma que juró vengarse antes de graduarse. Ella contacto a un viejo amigo llamado Yaroslav que era un ruso que conocía y que estaba enamorado de ella en un curso de inglés, era un chavo alto, fuerte pero con una característica especial, que hacía que pocas personas convivieran que él y es que era un chavo adicto al GORE y fanático del sufrimiento ajeno por lo cual espantaba a las personas, le comento lo que pasaba y que quería venganza accedió inmediatamente con una satisfacción y placer. Eran 3 chavas y para cada una crearon un plan de acuerdo al tipo de bulliyng que ellas le hacían. La primera chava era Laura una chava que amaba su físico y que siempre atosigaba a Evelyn por su estatura, para ella planearon un ataque el día de su cumpleaños, como cada año Laura hacía una fiesta y enviaba la invitación por correo, a lo cual Yaroslav lo hackeo para que no le llegara a nadie, al llegar el día llego al salón donde iba a ser la fiesta y al estar haciendo los últimos preparativos, se apagaron las luces y al prenderse las luces estaban Eve y Yaros arriba de una tarima, para lo que ellos cantaron las mañanitas y dijeron –que caigan los globos- A lo que Laura molesta lo que hace es que al caer los globos los intenta ponchar sin saber que estos en su interior tenía acido, a lo que le explotaron en la cara y la deformaron, antes de irse con una carcajada yaros se acerca a Laura y le susurra en el oído una información personal de su familia y la amenaza de que si decía algo del amor de su vida (eve) haría cosas peores con ellos, le da un beso en la mejilla y se van. Pasa un semestre y no hacen nada por que no quieren crear sospechas y quieren planear sus otros dos asechos. La siguiente en la lista es Rebecca, una niña simpática, popular, inteligente que bulleaba a Eve porque sentía que era competencia para ella, para lo que para ella planearon mandarle una invitación falsa a una competencia por destacar en la carrera y por ser la mejor enferma, la situaron en un embarcadero porque esta competencia iba a ser en un crucero, le hicieron esta invitación para ella y su familia, llegaron y efectivamente había un gran barco esperándolos, les dan una cálida bienvenida y les dicen que en la noche necesitan a Rebecca en salón principal para explicarle como va a ser la competencia mientras ellos dan un recorrido a esa misma hora por el barco, Rebecca llega al salón y está completamente solo hay una ruleta con las materias que está tiene en la carrera, ( esta Eve está mirando desde la cabina todo lo que pasa), entra al salón Yaroslav y le dice la dinámica va a ser que tu avientes el dardo y te voy a hacer una pregunta acerca de cada uno de los temas si tú la adivinas salvaras una vida y si no mataras a alguien a lo que ella no comprende y piensa que al ser enferma esta explicando

lo que puede pasar en un hospital y accede, lanza el primer dardo y cae anatomía y le pregunta ¿Dime los nombres de todos los nervios periféricos? A lo que ella responde –es broma- no se me todos es algo ilógico y el ríe y dice – dato curioso, sabía que los nervios dan señales eléctricas al cuerpo?- y ella dice – y eso que a lo que aparece su mamá gritando – como no supiste? Y la matan metiéndola a una tina llega de agua y le avientan un tostador y le dicen Yaros – Venga eres inteligente si puede, sigamos, avienta el siguiente dardo con miedo y cae en Salud comunitaria a lo que ella sonríe al ser la más destacada y ser su materia favorita, y él le pregunta- dime sin ninguna falla y sin cambiar ninguna la palabra el Plan Nacional De Salud a lo que ella responde y se equivoca en una palabra el ríe y dice ijole casi y aparece su papá, le dice yaros a Rebecca como casi adivinas te daré chance toma esta inyección tiene en su interior veneno ocúpala tú vas a ser la encargada de como la mejor enfermera inyectar a tu paciente y se retira, Rebecca llorando le suministra la mitad a su padre y la mitad a ella porque no podía con la culpa, Eve y Yaros salen una lanza y deja ir al barco a que se pierda y no se sabe de ellos en un largo tiempo. Después de otro semestre ya casi va a finalizar la carrera y falta una, falta Fabiola que es una chava rebelde a quien le gusta pegarle a Eve, y para ella dejaron lo más especial, día Eve la reto a una pelea pero sin más personas para supuestamente mostrar que ya no era débil la cita en un callejón y la drogo y durmió. Cuando despertó, nota que está enterrada de los hombros hacia abajo y no se puede mover, ve a lo lejos Eve y ella dice – empecemos y empieza a lanzar piedra y por cada dice una acción que Fabiola le llego a hacer después de varios minutos acaba y Fabiola esta moribunda con la cara llena de sangre y medio irreconocible, y dice Eve – bueno fue un gusto, ya me voy, para que veas que no soy mala te dejare con compañía, chifla y se va, llegan un perros y empiezan a atacarla sanguinariamente y la matan y no queda más de ella. Yaroslov se entera que no incluyo a lo que llega con Evelyn y por impulsó la mata e un balazo y al reaccionar nota que acaba de matar a su compañera y amor de su vida y se da un balazo. FIN

Locura Mariana Islas Galván. 1EV1. Era el día 10 de octubre, ¿quién no lo recordaría? Es imposible no recordar este día hace un año, era un día normal en la ESEO, clima nublado y lluvioso, pero algo inesperado estaba por pasar. Era un día común y corriente de octubre, iba camino a la escuela, hablaba con mamá durante el camino acerca de nuestros planes en la tarde y lo que comeríamos por la tarde. Al llegar a la escuela, saludé a mis amigas Karla, Nahomi, Jocelyn y María y nos dirigimos a nuestra clase correspondiente de la primer hora, al entrar al salón de clases, se escuchó un ruido estruendoso, temerosos mis compañeros y yo nos quedamos en silencio y comencé a preguntar si se encontraban bien, al parecer todos se encontraban a salvo y aquel ruido era fácil de distinguir, fue el disparo de un arma de fuego y al ver a mis amigas note que Karla se encontraba tirada en el suelo con un enorme charco de sangre, Nahomi se dirigió al cuerpo lo volteó y notamos que tenía un gran orificio en la frente y que ella fue la que recibió el impacto de la bala.-¿Cómo era posible que alguien tuviera la intención de asesinarla? Y, ¿qué hizo para merecer tal muerte?- desde ese día mi vida no fue ni sería la misma. Llamaron a mamá de la oficina de la directora, desalojaron a toda la escuela y solo quedábamos los que estaban en el salón junto con la directora, la policía y los maestros del plantel. Comenzaron por interrogar al resto del salón y por último a mí, fueron las clásicas preguntas de un interrogatorio, pero no recordaba nada de lo sucedido, solo tengo pequeños fragmentos ya que todo pasó muy rápido. Recuerdo que la escuela era un completo caos, gente corriendo y gritando por todas partes, una persona vestida de negro y encapuchada, segundos después comencé a sentir una sensación de zumbido en oídos, visión borrosa y esa terrible sudoración excesiva y caí al suelo. Al despertar, note que la escuela estaba cerrada y Nahomi, Jocelyn y María me llevaron algo de comer y nos dirigimos a la oficina de la directora. Pasando el interrogatorio me fui a casa con mamá y el silencio invadía la habitación en la que comíamos, segundos después, rompí el llanto con ella. -¿Cómo es posible que se haya ido de esta manera? Era de mis mejores amigas y no estará más conmigo- respondí. Al pasar tres días de la muerte de Karla e ir a su funeral, darle el último adiós y ver a toda su familia desconcertada me tenía que adaptar a su ausencia. Al día siguiente me dirigí a la escuela y era fácil de distinguir el ambiente de tristeza, frío y muy callado. En la última clase de mi jornada escolar, por los pasillos se escuchó un grito inesperado del que se podía distinguir que el miedo era el causante de dicho grito. Todo el personal de la escuela se dirigió a la azotea del edificio y encontraron el cuerpo de otra persona, el caos comenzó de nuevo en la escuela y durante todo ese tiempo volví a ver a esa persona encapuchada y corrí hacia él, segundos después, logré alcanzarlo y al tocar su piel sentí que era demasiado fría y al confrontarlo le pedí que volteara, al ver su cara invadió en mi una sensación de peligro que eriza la piel, tenía ojos completamente negros, enorme boca, grandes dientes afilados y un estado de neurosis fuera de control. -Tú eres la siguiente-

respondió al tirarme al suelo y correr hacia la salida y una profesora corrió hacia mí -¿estás bien?- preguntó la maestra y me ayudó a ponerme de pie. Más tarde llamaron a mamá y fue por mí a la escuela. Esa noche era imposible dormir, al cerrar mis ojos entraba esa cara que amenazó con venir por mí, me dirigí al cuarto de mamá y le confesé lo sucedido e histérica me llevo al departamento de policía a declarar y pedir ayuda ante mi situación. Pasados los días con mamá angustiada por mí no dudo en prohibirme a acudir a la escuela y quedarme en casa durante un tiempo. En la tarde recibí una llamada de María -¿Dónde estás? ¿Por qué no has venido? Están pasando cosas muy raras y aquí es todo un caos, los interrogatorios, inculpan a personas que no tienen nada que ver y alguien pregunto por ti y quiere hablar contigo. Me congelé ante la confesión de María y tenía mucho miedo -María, no voy a poder asistir, la persona que asesinó a Karla y a la otra chica amenazó con ir por mí y que yo era la siguiente, -¿acaso sabes quién era?- pregunté. -Era una persona muy rara, nerviosa y extremadamente delgada y tenía un gran golpe en la cara, decía que era del departamento de policía y que necesitaba corroborar datos¡María es él! Él fue quien me amenazó – Necesitamos vernos, tenemos que hacer algo no te puedes quedar sola todo este tiempo- nos vimos a las 8:30 de la noche y fue a mi casa y me hizo compañía durante la noche ya que mamá doblaba turno en su trabajo y le era imposible llegar a dormir. A las tres de la mañana María y yo dormíamos en mi sala y en la cocina se escuchó el ruido de un vidrio roto a lo que despertamos temerosas y llorando María se dirigió a revisar si había una puerta abierta y yo me dirigí a la cocina, y, ahí estaba él -tu amiga es una tonta, gracias a ella logré llegar a ti, la seguí desde su escuela y tenía que esperar el momento indicado para venir a tipoco a poco llegó la mirada de horror de ojos negros, dientes afilados y alargados y la voz más rara que había oído en toda mi vida de la que salían palabras de otro idioma. María llamó a la policía y se fue a mi -no es nada personaldijo -es solo que se tiene que derramar sangre si no le doy sangre el me hará daño a mi y a mí familia y los asesinara a ellos- María y yo corrimos hasta mi cuarto y nos encerramos en el e intentamos salir por la ventana, el asesino llevaba una pistola y disparó hacia la chapa de la puerta de madera, entro a la habitación y corrió hacia nosotras. La policía llegó a tiempo a mi casa y al escuchar el disparo nos encontró acorraladas por el y le dio un disparo en la espalda y murió. Llamaron una ambulancia y fueron por el cadáver del asesino, mamá llegó minutos más tarde al ser informada de lo sucedido y nos abrazo a María y a mi -ya pasó todo mis niñas, ahora todo está bien-. Al día siguiente, recibimos una llamada del policía Hernández para el informe del asesino -buenas tardes, tenemos el informe de la persona que atacó a su hija, se llamaba Daniel, era un fugitivo de la prisión de rehabilitación psiquiátrica de la ciudad. Él asesinó a toda su familia y argumentaba tener un ser maligno en su interior, pero ahora ya no está más aquí y estás completamente segura. Por último necesito que llenes este formulario y el reporte de lo sucedido para terminar el proceso de investigación y te puedas retirar a casa sin ningún problema, se te asignará un psicólogo pagado por el estado para que tengas una pronta recuperación de lo sucedido- Contestó el oficial. – Muchas gracias oficial- dijo mamá y nos retiramos del departamento de policía. Pasados dos meses volví a acudir a la escuela y volví a ver a mis amigas -¿Cómo estás?- preguntó Jocelyn. -Me siento mejor, el psicólogo me dijo que podía regresar a la escuela y ahora seré la rara del salón que fue perseguida por un loco- contesté. -Tranquila, aquí estamos contigo y ya no te pasará nada- respondieron y me abrazaron durante un largo tiempo.

Ni las paredes guardan secretos Estefanía Caballero Solo oigo palabras por todas partes, todos los días y a cada hora, vivir aquí ya no es tranquilo desde que este lugar guarda todos los crímenes que se han cometido. En este sitio solo vive Eunis, una señora fría y arrogante. Tiene el pelo negro como la obscuridad que siempre esta sostenido con una cucaracha que le regalo mi padre, unos ojos rasgados de un color verde, su nariz fina que parece de princesa y unos labios rojos de una manzana. Yo tengo el mismo físico que mi madre, es alta y muy delgada con un cuerpo perfecto a pesar de su edad, unas piernas muy definidas y blancas. Tony, es el consentido de mi madre, un hombre sarcástico; Jair, es tierno y noble y yo, Isabell una mujer con miedos y preocupada todo el tiempo. Mi padre murió desde hace 10 años y no fue el único que murió en ese tiempo frio, obscuro y de malos recuerdos, también su madre la Sra. Maro; desde esas muertes esta casa es un horro. Recordando unos años atrás cuando todo era armonía y felicidad, bueno eso diciéndolo porque es como yo lo imaginaba, mis padres siempre discutían por cosas espontaneas al grado de golpearse o irse de la casa, Tony solo se sentaba esa mecedora con su radiante y hermosa novia frente a la fuente del jardín, Jair y yo siempre jugábamos ajedrez a la orilla de un rio que cuando te sentías solo o triste es la mejor compañía. El 16 de Marzo de 1970 ese día es el cumpleaños del mejor hombre del mundo, un hombre alto, fuerte, con una cabellera que parecía que tenía vida porque nunca se despeinaba y con un color negro como la noche, unos ojos grandes que combinaban con esas cejas gruesas y tupidas, una nariz ancha y sus labios gruesos que parecía que hacían juego con su cara, él es mi padre. Aquel día vinieron a visitarlo su madre y su hermano; para mi madre son personas desagradables, cada vez que los veía siempre fruncía el ceño para que vieran su desagrado. Cuando llegaron salí corriendo a abrazar a la abuela Faty… - Abuela Abuela ! – con gran emoción lo decía. ¡Qué bueno que vinieron! - ¡Así es mi niña! No podría perderme el cumpleaños de tu padre y venir a ver a mis únicos nietos. Creo que era la única que sentía felicidad por verlo. La Sra. Eunis solo se encerraba en su cuarto con una furia que ni ella misma aguantaba. Paso el día y desde ahí mi abuela y mi tío Carlos llevaban una semana aquí, mi madre estaba molesta, ya no los aguantaba hasta que un día mis padres discutieron por ello. - Ya no aguanto a tu madre, sabes que no la soporto. - Tranquila mujer entiende, no lo puedo echar de aquí ella solo viene cuando puede y tiene el derecho de venir a esta casa. - ¿Acaso es tu casa?

- Si, si lo es. Así siguieron, yo solo me encerraba en mi cuarto y me ponía a escuchar música con la tornamesa que me dio mi padre. Tony es muy apegado a mi madre, siempre trataba de poner en contra a mis padres, a él le molestaba que nos quisiera más a Jair y a mí, pero como quiere que mi padre lo quisiera si siempre ha sido mal agradecido con él. Gracias al consentido de la casa, aquí ya no es lo mismo. Un día gris donde las nubes no permitían dejar salir al radiante sol que iluminaba nuestros días, Tony, le había dicho una mentira a mi madre que provoco que mis padres pelearan a muerte. - Así que tienes a otra mujer, ¿A caso es una sirviente? – lo dijo con tanto enojo. - ¡Claro que no! – lo dijo con seguridad. Soy un hombre que nunca traicionaría nuestro matrimonio de más de 30 años. - ¿Por qué debería creerte? – repuso con los brazos en jarras. - Tendrás que confiar en mi palabra. - la corpulenta mujer vacilo y se rasco la cabeza. - ¿Y si es así? – lo dijo con imposición. Las cosas han cambiado mucho no sé qué paso con nuestro matrimonio ya no soporto esta relación que tenemos, en cambio ella me da paz y tranquilidad. Ella enfureció tanto, salió corriendo de la habitación pero antes le dijo… - Me pagaras tu engaño. – gritando. En ese momento llego Tony, se le quedo viendo con una sonrisa burlona y una cara de felicidad y entre dientes dijo… - ¡Esto lo pagaras tan caro PADRE! Al día siguiente a las 12:00 de la noche tocan la puerta, cuando de repente vemos que es un general trayendo una noticia desagradable y triste diciendo que mi padre había sido encontrado muerto a las orillas del rio con 8 apuñaladas en la espalda, un rosario en las manos y la boca cosida. En ese instante todo cambio, mi madre no parecía que le doliera la muerte de mi padre, solo veía en sus ojos enojo, ira, repugnancia y a veces felicidad, mi hermano creo sentía lo mismo que ella; los únicos que sufríamos era Jair y yo. A mi abuela no la podíamos consolar con nada, ella decía que quien lo mato es porque lo odiaba tanto, él no tenía enemigos, era u hombre bueno y recto, su hermano también sentía un vacío tan grande, que nunca lo iba a poder llenar con nada. Tras pasar los días, la casa se volvió obscura y más desde que mi abuela acusa a mi madre de haber matado a su hijo… - Tu eres la culpable de la desgracia de estamos viviendo. – triste y con lágrimas en los ojos. - A mino grite, ya no mate a su hijo, el solo busco su destino. - Sé que tú eras la única persona que lo odiaba al grado de llegar a matarlo.

- ¿Y si así fuera, que? No tiene con que comprobarlo. – con una larga sonrisa. - ¡Eres una cínica! – la bofetea. Ella empezó a enfurecer, la cabeza la volteaba de un lado a otro, los ojos ya no eran verdes si no como color rojo, las manos las empuñaba con demasiada fuerza pero con un rosario en la mano izquierda que siempre traía, y lo contesto a mi abuela… - No me vuelva a tocar, y ándese con cuidado porque puede terminar igual o peor que su hijo. El ambiente era pesado y tenso, todos ya estábamos con inseguridad, mi madre ya no soportaba a mi abuela, cada rato discutían, ya estaba harta, creo que hasta le explotaba la cabeza. Yo quería escapar de ahí, abrir la puerta y salir corriendo, pero no podía dejar solo a Jair; es mi única familia en este momento. Cada vez más el humor de mi madre era insoportable, para ella su único hijo es Tony, nosotros éramos un cero a la izquierda hasta que un día le alcé la voz… - ¡Ya basta con esto madre! - lo dije con enojo y gritando. Nosotros también somos tus hijos. - Para mí, el único hijo es Tony. - A veces desearía no ser tu hija y preferiría haber ido con mi padre. - A mí no me alces la voz niña, y con cuidado con lo que dices porque se te puede cumplir. En ese preciso momento mi abuela se puso a mi defensa, mientras mis lágrimas iban saliendo de esos ojos de tristeza y coraje. - Deja a mi nieta en paz. ¿No te basta con fastidiarme a mí? - No se meta señora, es una discusión entre Isabella y yo. - No voy a dejar que le hagas daño a mis nietos, se irán conmigo. – lo dijo muy segura. - Mire señora, usted no se lleva a nadie de esta casa, si se va, se va con su hijo que ya no los soporto. Tuve tanto miedo en ese momento, nunca había visto a mi madre tan furiosa, siguieron discutiendo hasta que… vi a mi abuela caerse lentamente y diciéndome - Escapa de aquí hija, CORRE. Yo me quede plasmada y sin aliento, al ver que mi madre con un cuchillo que tenía en la mesa de su cuarto le corto el cuello a mi abuela y luego se lo clavo en la cabeza sin ningún temor, no pude ni moverme del impacto que había presenciado, mi madre se me quedo viendo y me dijo: - ¿Quieres que te pase lo mismo que tu querida abuela? Tú no viste nada. – agarrándome del brazo. No supe que decir, me solté de ella y salí corriendo y entre a un cuarto que nunca había visto ahí encontré lo que nunca pensé, fotos de mi padre, cortados con un cuchillo y bañados en tinta roja como si fuera sangre, la foto de mi abuela quemada, una foto de Daniela, la ama de llaves de la casa que repentinamente un día salió y nunca regreso, en ese momento vi que mi madre era un monstruo. Rato después me fue a buscar la Sra. Eunis que decía llamarse mi madre, solo para amenazarme si decía algo de lo que había visto, lo pagaría muy caro.

Estaba aterrorizada, no sabía qué hacer en ese momento, lo único que podía hacer es quedarme callada y con la cara agachada. Fueron policías y el forense a recoger el cuerpo; horas después lo trajeron para poder velarlo. Yo sentía odio y miedo hacia mi madre, pero no soy capaz de hacerle nada. Al pasar el tiempo Tony y mi madre cometieron más asesinatos con personas que les estorbaban. Yo estaba preparando mis cosas para irme y fui a buscar a Jair para decirle. - Jair debemos irnos de esta casa. – estaba muy nerviosa. - Isabella, a donde nos iríamos, no tenemos a donde. - Buscaremos algún lugar donde estar, pero vámonos. Sentía que al pasar el tiempo yo me convertiría igual que mi madre, no podía permitir eso, y tenía que salir de ahí. Ella empezaba a delirar o a decir cosas que no tenía sentido, nos decía que oía voces o que fantasmas la perseguían cada vez que daba un paso. A veces, le creía porque cuando te acercabas a las paredes oías ruidos y sentían que se movían. Una noche cuando íbamos a dormir todos, deje la puerta abierta de mi cuarto que da vista hacia mi cama pero el pasillo estaba obscuro que no podía ver nada en eso, me quede viendo fijamente el pasillo y en eso vi como corría una sombre negra hacia mí con un velo negro y las manos atadas con un rosario y gritando en eso corrí hacia la puerta y la cerré, eso era casi todos los días. También en las noches oías arañazos en ellas, golpes o incluso que se derrumbaban. Otro día me pare en la madrugada a ver que sucedía y en la pared del pasillo, veía reflejada la cara de mi padre o de mi abuela. Poco a poco, ella se iba volviendo loca, tanto que su hijo consentido y el que siempre estaba con a su lado, la abandono yéndose con su novia a España, los sirvientes que se encontraban en casa se fueron, les daba miedo estar ahí. Jair fue en busca de su amor y la única que se quedo era yo, cuidando a mi madre. Tenía que irme de ahí, ya no soportaba los ruidos de las paredes que cada vez recordaban lo que paso hace tantos años, tome la decisión y me fui a Italia. La gran Sra. Eunis, se quedó en ese lugar obscuro y sin vida como ella, eso lo provoco al haber cometido tantos crímenes, es señora que se creía tan superior a los demás, quedo encerrada en un lugar de cuatro paredes que le recordaban a días lo que había hecho y diciéndole que NI LAS PAREDES GUARDAN SECRETOS.

El psicópata de ESEO 1EV1 #11 13 octubre 2019 Los días transcurren muy tranquilos en la universidad ESEO donde mujeres y hombres se formas para ser futuros enfermeros. Todos los días de los alumnos eran prácticamente iguales pues tenían que cumplir con sus actividades y así transcurrir sus días, entre ir a la escuela, tomar clases, tener actividades deportivas o culturales, terminar he ir a casa. Pero esto se va a centrar en un una chica la cual es muy callada y tímida, por lo tanto todos la toman por desapercibida, es una alumna más que nadie nota y pues todos están tan entrados en sus actividades diarias que no se dan cuenta lo que pasa a su alrededor. Pero ella puede ser muy misteriosa, y por la misma razón tener un lado oscuro que puede intrigar a más de una persona. Era un día como muchos otros en la escuela cuando un grito demasiado espeluznante altero a varios de la escuela, todos muy preocupados salieron corriendo de sus salones a ver qué era lo que estaba pasando, dejando a un lado sus actividades, al salir de los salones y dirigirse hacia donde se había escuchado dicho grito, vieron a la maestra de histología afuera de los laboratorios muy alterada, le preguntaron qué era lo que ocurría, y ella no podía aportar la mirada de un solo lugar, al ver dicho acontecimiento pudieron ver una imagen atroz, esta era la cabeza de un alumno enterrada en uno de los esqueletos de laboratorio. De inmediato tomaron acción y llamaron a la policía la cual empezó a investigar, pero por consecuencia las cámaras de la escuela el día que pasa el incidente no estaban funcionando. Empezó la investigación más exhaustiva, preguntar a alumnos si habían visto a alguien extraño, a los policías si alguien paso sin identificación, cualquier ruido, imagen o descripción servirían para dar con el culpable del suceso, sin embargo también quería encontrar el resto del cuerpo. La escuela por seguridad cerro unos días tan solo en lo que pasaba toda la investigación, después de unas semanas de recopilar datos y demás no pudieron tener nada concreto pues no habían dado con nada, los alumnos regresan a la escuela todos comentaban lo sucedido y varios de ellos con miedo, fueron transcurriendo los días cuando sin pensarlo un ruido se escucha en la planta baja, en la cual solo había un grupo presente en el salón 1, los cuales salieron y pudieron percatar una imagen que jamás olvidaran, pues en medio del pasillo un cuerpo sin cabeza estaba colgado de pies, todos quedaron impactados pues era el cuerpo del alumno que no habían podido encontrar, con un olor ya muy desagradable, pero con una nota pegada que decía “todos me tienen que conocer”, algo que dejo intrigado al personal de la escuela. Todo empezó a ser sospechoso y es cuando se dieron cuenta que era alguien de la misma unidad, pues eran las únicas personas con acceso a la escuela, la duda entre compañeros y docentes empezó a surgir, y fue entonces cuando en los laboratorios de prácticas de enfermería aparece una alumna en una de las camas de los simuladores, recostada con los ojos abiertos y con todos sus intestinos de fuera y otra nota que decía “poco a poco me verán”.

El pánico empezó a apoderarse de la escuela y de todo el personal pues no sabían quien ni porque estaba haciendo lo que hacía. Al día siguiente un tercer cuerpo aparece pero este de una manera particular, pues solo había sido asfixiado y ya, no había sido torturado ni mutilado, pero si tenía al igual una nota pero ahora decía, “siempre me recordaran”. Esto ya era demasiado pues evidentemente se trataba de alguien que quería ser conocida y vista por todo el mundo. El tiempo empezó a transcurrir y los policías empezaron a hacer más investigaciones cuestionando a los alumnos y todos ellos se enfocaron en la chica callada y tímida a la que nunca nadie había notado. Fue detenida por ser única sospechosa y en lo que tenían mas investigaciones o ella misma confesaba todo lo que había caudado, ella no hablaba solo decía que ella no tenía la culpa de nada que le creyeran que había alguien más, y que o podían cerrar la investigación pues podía pasar otro incidente, de inmediato pensaron que tenía un cómplice y a base de golpes y amenazas la querían hacer hablar, pero ella no decía nada solo repetía la frase “volverá a suceder tengan cuidado”. Después de unos meses ningún incidente se suscitó y a la chica solo la tomaron como loca y quedo arrestada y en tratamiento por psiquiatras, todo parecía a ver regresado a la normalidad y habían retomado actividades. Pero para sorpresa de todos, un cuerpo más apareció, en el laboratorio de anatomía una alumna sin ojos y con la boca cocida fue hallada en una de las mesas con otra nota, “me tienen que notar a mí no a ella”. En instantes fueron a ver a la chica que había sido acusada de los delitos y pidieron que les contara que era lo que sabía que esta vez sí le creerían, la chica soltó en llanto y le dijo “yo se los dije, ella está loca”, todos con mucha atención le preguntaron de quien se trataba que era lo que estaba pasando y entonces ella les conto. - La maestra de psicología me obligo a no decir nada y me tenía amenazada, porque un día fui a su escritorio a preguntar de una tarea, y ella no se había dado cuenta que yo estaba ahí, pude darme cuenta que tenía dibujos con todos los cuerpos y lo que les había hecho, ella noto mi presencia y de inmediato me dijo que si no guardaba el secreto yo sería la siguiente. Nadie podía creer lo que estaban escuchando, creían que todo era mentira, pero al ver la situación de inmediato fueron a detener a la maestra, quien en estaba llegando en su auto, la sacaron y revisaron sus cosas y en el interior, pudieron encontrar fotografías de cómo era que mataba a los alumnos e instrumentos que utilizaba, la arrestaron y llevaron a un psiquiatra donde ella decía que solo quería que todos vieran que existía y que notaran su presencia que no fuera una maestra más. Le preguntaron que como era que seleccionaba a los alumnos, o porque era que los mataba a ellos y su respuesta fue que eran personas muy sociables y que todos conocían y que nadie más que ella tenía que ser la más conocida, después de eso fue llevada a un hospital psiquiátrico donde escapo, hasta la fecha nadie ha podido encontrar. Dicen que va de escuela a escuela buscando a alumnos que sean muy conocidas o que se den a notar, pues la deben de conocer pero solo a ella. Alumnos con descripciones parecidas fueron encontrados en distintas partes de las escuelas y con muertes más atroces.

Elaboración de cuento Juárez Chávez Ana Belén 15-octubre-2015 *toctoc* Empezaron a tocar a la puerta de esa pequeña bodega. Desde dentro, Marian y Ernesto temblaban, sudaban, su respiración empezaba a acelerarse. — Me prometiste que aquí era un lugar seguro, pero escucha, él está aquí, nos ha encontrado Ernesto — susurró la chica angustiada. — Cállate, cállate por favor. Guarda la calma Marian. Es una trampa, jamás sabría que estamos aquí. La puerta se empezó abrir lentamente, con un chirrido que lastimaba al oído, y detrás de esa puerta se escondía... — ¡Ah! ¡No por favor, no se acerque! Por favooor. Fueron los últimos ruidos que emitieron Ernesto y Marian. CAPÍTULO I Era un día común en la Ciudad de México, el ruido de todos los automóviles, la gente yendo aprisa a sus hogares o trabajos, en los establecimientos se escuchaba música y los más jóvenes se dirigían a sus colegios. Solo había algo que podría hacer especial ese día: era una semana antes de que empezara la celebración de Día de Muertos, una de las más importantes en nuestro país y para la Escuela Superior de Enfermería y Obstetricia del Instituto Politécnico Nacional. En esa escuela estudiaban Ernesto y Marian, dos chicos que eran mejores amigos y se habían conocido desde 1º año de secundaria. Alumnos ejemplares, de alto nivel académico, que participaban en las actividades culturales de su colegio como en la danza y el canto. Ese día, de hecho, empezaban con los ensayos más arduos para la preparación de sus exhibiciones en el Día de Muertos. — Nos vemos a las 8:30 pm ¿de acuerdo? — Como siempre. Sabes que yo te espero. Marian estaba en el grupo 1EV2 mientras que Ernesto en el 1EV1. Separados por salones pero siendo igual de unidos. Al ser chicos dedicados y tan sobresalientes, era normal que tuvieran muchos compañeros con los cuales congeniaban y afortunadamente se habían hecho de verdaderos amigos. En el caso de Marian, contaba con el lazo de Blanca, Francisco y Magdalena. Desde los primeros días conectaron de manera tan maravillosa que parecieran amigos de años.

Ernesto por su parte, prefería más la amistad de chicas como Vanessa, Sandra y Alicia. Por algún motivo u otro, termino sentándose en la misma mesa del comedor que ellas y al hablar de astronomía, sabían que habían encontrado un núcleo perfecto. Esa tarde, las clases iban acorde a lo planeado, sin tensión alguna. El sol resplandecía con una gran intensidad. Se veía a los chicos de voleibol entrenar y a los de teatro preparar su performance. Las voces de los profesores salían de sus salones, risas en el patio se oían también. Cuando un grito desgarrador irrumpió la paz de todos. Había sido una chica del 1EV1, Carolina. Rápidamente algunos chicos fueron a donde oyeron su quejido a socorrerla, fuera lo que fuese que hubiera sucedido. —Carolina ¿qué pasa? ¿Por qué gritaste así? Ella sollozando y con dificultad para hablar les dijo: — ¡MÍRENLA! Esta muerta. Vean su cara, ¡alguien la mató! A mi pequeña Nadia. Mírenla... y quebró en llanto. Los chicos que se habían acercado no sabían a qué se refería, ni se veía cuerpo alguno cerca. Uno de ellos decidió acercarse un poco más y dar la vuelta al pasillo trasero del patio y al llegar ahí se quedó petrificado. Era Nadia; tirada en el suelo, colocada en una posición como si se acabase de dormir solo con un indicio perturbador... Todo su cuerpo estaba dirigido un poco a la derecha, excepto su cara. Su cara totalmente hacia arriba, con los ojos abiertos y llenos de miedo y una cortada en su cara en forma de sonrisa hacia la escena escalofriante, más aparte toda la sangre que salía de su cuello. Eran las 8 pm y apenas habían recogido el cuerpo de Nadia. Todos los estudiantes estaban estupefactos. Los profesores muy temerosos. El personal de limpieza rezando. Nadie entendía como es que algo así hubiera podido pasar. Carolina tuvo que ser llevada al hospital porque había quedado en un estado de shock. Todos sus compañeros del salón trataron de ayudarla o en todo caso, sacarle la sopa de lo que había visto, pero fue en vano. — No puedo creer que haya pasado esto. — Ni yo, en realidad, creo que nadie. ¿Cómo te sientes al respecto Ernesto? Era tu compañera de grupo así que... — La verdad es que no sé cómo sentirme. Si enojado, triste, frustrado... son muchas cosas. Y lo que más me impresiona es que nadie sabe cómo sucedieron las cosas. Y que la cámara de seguridad no haya grabado nada. — Tendremos que esperar a ver qué sucede mañana. — Sí, eso creo. Bueno, te mensajeo cuando esté en casa. Con cuidado, Mari. Todos los integrantes de la escuela esperaban un comunicado, pero no se dio. Como si la muerte de Nadia hubiera pasado desapercibido. De hecho los directivos parecieran no saber nada, y al paso de las horas los profes se veían igual. Pero los alumnos estaban un poco más a la espera de noticias o en todo caso, a la expectativa, asechando cualquier sensación de peligro. Algo no se sentía bien.

Ya habían pasado dos días, las cosas parecían haber vuelto a la normalidad. Exceptuando que muchos alumnos habían dejado de asistir al colegio por la falta de atención al caso de su compañera fallecida dentro de las instalaciones. — No puedo creer que los chicos de 5º y 7º semestre sean tan fríos, mira que no tratar de hacer nada al respecto por la muerte de una chica aquí dentro es inaceptable. — Igual ¿qué podríamos hacer nosotros Alicia?. Si a los directivos no les importa lo que sucedió ¿que te hace pensar en que nos hagan caso a algo que digamos nosotros? — Son tan exageradas ustedes dos. Sencillamente pasó y ya niñas, equis. Next. La vida sigue. Mejor preocúpense por pasar el examen de anatomía que ya se acerca. — Vanessa, por favor cállate. — Ernesto estaba molesto y hecho trizas por las diversas actitudes que mostraban sus compañeros y profesores, similares a las de Vanessa. Así, sin tomar en cuenta nada. Ya era viernes, y en la escuela se estaba organizando un ensayo general para la gran presentación de talleres en la fiesta de Día de Muertos del colegio. — ¿crees que este año el evento esté dedicado a Nadia? — No lo sé, María de Magdal. — ¡Ay cállate Marian! Odio que me digas así y lo sabes. — Pues deja de mencionar a Nadia, entiende. Es una chica que murió y nadie hace nada, NADA. Deja tú de eso, MURIÓ ASESINADA AQUÍ. Y nadie hace nada. Es que de verdad no... — Ay querida lo que necesitas es relajarte, que vayamos a tomar alcohol después de la escuela y no sé tal vez después de eso, regresar ebrias a casa y divertirnos un poco así como suelen hacer las “mejores amigas” ¿no crees? Entre Marian y Magdalena había una relación especial, que una aprobaba, pero la otra no. — Magda, dijimos no volveríamos a repetir eso. Ni a hablar del tema. Fue un error haberlo hecho, entiéndelo. — Sabes que te fascinó lindura. Pero bueno, como gustes. Cada uno de los chicos estaba ocupado en sus quehaceres, unos terminando de hacer un tapete de acerrin divino, otros pegando carteles, unos más en sus respectivos talleres; y la noche, empezó a llegar. Ya daban las 6:00 pm en el reloj. Todo transcurría acorde a lo planeado, se oía música por toda la escuela, estaban concluyendo todo para la magna fiesta cuando de pronto se escucharon tres campanadas que retumbaron por toda la escuela, lo cual era demasiado extraño porque no había manera de que se escuchara algo así. No habían iglesias cerca ni mucho menos. Algunos revisaron sus relojes y se percataron que marcaba una hora extraña “6:66”. Dentro de un salón se escuchó como se quebraba un vidrio, seguido de un grito agonizante de una chica. Y acto seguido, las luces de todo el colegio se apagaron. Todos estaban asustados y temerosos, no sabían que estaba ocurriendo. Algunos empezaron a tener ataques de ansiedad, otros comenzaron a gritar por auxilio. Algunos otros decidieron prender las linternas de sus celulares y relajarse. Ernesto buscó rápidamente a Marian, que estaba con sus amigos.

— Chicos, ¿cómo están? — Mmm no sé tú dime. Se ha ido totalmente la luz, se escuchó que rompieron algo y un grito desgarrador, por acá alguien se está vomitando y una chica ya se desmayo. Pero creo que todo bien es más se escuchan las urracas cantar y la luz de la luna menguante nos alumbra totalmente. Oh y el espíritu de Nadia nos está cuidando seguramente. Estamos de maravilla Ernesto. — Francisco, yo estaba preguntando de buena manera. Está claro que todos estamos preocupados pero tal vez están un poco más tranquilos... — Deja de decir estupideces, ve la situación. Nadie sabe qué hacer. Muchos ya fueron a revisar la cuestión de electricidad y no nos dices nada. — Sí entiendo pero yo... — ¡YA BASTA! — replicó Blanca. — Por favor no peleen, es lo ultimo que necesitamos ahora. Relájense y esperemos indicaciones. — A este paso no saldremos nunca de aquí. — ¡AYUDAAAAA POR FAVOR! Se escuchó desde adentro de la escuela. Y al oírse ese grito las luces se encendieron. Todos se conmocionaron y se relajaron por un instante. Los que pudieron, corrieron a donde habían escuchado ese alarido y quedaron estupefactos junto con el chico que había descubierto la escena. Poco a poco todos los alumnos comenzaron a caminar hacia allá... hacia la planta baja, entre las vitrinas con los trofeos, frente a la estatua de los enfermeros... ahí, con un crucifijo colgado y una cruz atravesando su cráneo y colocada en posición de súplica, hincada con las palmas hacia arriba, ahí entre un charco inmenso de sangre que parecía laguna, con los ojos tristes y la mirada hacia delante, ahí yacía el cuerpo de Magdalena. Marian llegó al lugar y vio a su mejor amiga. Sus ojos se encontraron y ella podría jurar que Magdalena derramó una lágrima al mismo tiempo que ella. *din don* Se escucharon de nuevo resonar las campanas. *din don*. — Miren el reloj... Marcaba las 6:06 en manecillas. En los relojes electrónicos se leía “6:66”. — Chicos, viene de nuevo. Viene por nosotros de nuevo. — ¡NOOOOOOOOO! — se escuchó un alarido. Las luces se apagaron en su totalidad.

Continuará...

Cuento 1ev1 #23 Una noche tranquila, con las estrellas brillando como ellas simple lo hacen, todo parecía tan normal, aunque ninguno de nosotros sabía que ese día todo cambiaria. Una simple idea de un grupo de amigos, conseguir una casa en una zona alejada de la cuidad para pasar un fin de semana juntos, y dejar todo el estrés ocasionado por la escuela. Todo ya estaba organizado Sofía se iba a encargar de encontrar la casa junto con su novio Juan, mientras que Antonio y Roció se iban a encargar de la bebida, por otro lado a mí y a Susana nos tocó la comida. El día llego nos quedamos de ver en un punto céntrico para todos y de allí nos íbamos a dirigir en la camioneta de Juan hacia la casa, al llegar allí todos no sorprendimos, la casa era perfecta, una casa de dos pisos con detalles rústicos, con un gran patio en el cual íbamos a acampar, al entra a la casa corrimos a elegir una habitación, ni siquiera llegue a las escaleras y sentí una energía la cual no me dejaba avanzar, hasta que Antonio toco mi hombro preguntando ¿Estas bien?, automáticamente respondí -Si-, las tres habitaciones se escogieron, obviamente Sofía y juan en una habitación, que estaba subiendo las escaleras, Roció y Susana estaban en la habitación de en medio y por ultimo Antonio y yo nos quedamos en la habitación principal. Pasaban las horas y los chicos estaban preparando la parrilla, mientras que las chicas estábamos en la cocina preparando todo, al ya estar todo listo, salimos a comer y esperar a que cayera la noche. Justamente eran las 10:30 todo estaba tranquilo, hasta que se escuchó un grito dentro de la casa, el único detalle era que todos estábamos afuera, lo que por lógica ocasiono pánico en todos, nadie quería entrar, lo dejamos pasar pero a la media hora se escuchó de nuevo, en ese momento nos armamos de valor y entramos, pero al entrar sentí un frio impresionante y una energía que hizo que me desmayara, al estar inconsciente solo vi una mujer diciéndome –Ayuda-, desperté y todos mis amigos estaban a mi alrededor preocupados por mí, el frio se había ido, después de eso, decidimos ir a descansar, al estar en la cama no podía dormir, con el paso del tiempo mis ojos no podían más, lo único que hice fue abrazar a Antonio y quede dormida. Desperté, me dirigí al baño y en el espejo estaba otras ves esa mujer, se veía como alegada, pero cada vez que parpadeaba ella se acercaba llegado al punto de estar frente a frente, trato de sujetarme, yo solo corrí, al voltear y fijarme donde estaba ella, no note nada, regrese mi cabeza al camino y allí estaba ella, me sujeto del brazo tan fuerte que hizo que despertara, todo fue un sueño, aunque parecía tan real, y lo fue porque en mi brazo estaba la marca de una mano. Después de eso ya no pude dormir, y a la mañana me di cuenta que no fui a la única que le paso eso, todas las chicas teníamos esa marca y vimos a la misma mujer en nuestros sueños. Todas coincidíamos en lo mismo, haber visto a esa mujer y tener una marca en el brazo, pero nadie en tendía el porqué, porque solo nosotras pasamos por ese mal sueño, dejamos eso de lado y decidimos seguir con

nuestra aventura, pasaban las horas, hasta que cayó la noche, en lo personal ese día el cielo se veía hermoso, estaba tan tranquiló todo, hasta que se escuchó una vez más ese grito, las chicas nos miramos fijamente y con esa simple mirada decidimos entrar, nos dirigimos a la sala, una habitación algo pequeña pero en la cual había dos sillones perfectamente acomodados a los laterales de la habitación y en medio de ellos una mesa, entramos y la habitación estaba bastante fría, hicimos una revisión rápida pero no notamos nada, hasta que, una vez más se escuchó el grito todas volteamos y allí estaba ella, una mujer, que tenía cabello largo, pero estaba mojado, su piel pálida, labios azules, ojos rojos como cuando uno llora, su vestimenta era como antigua, tenía cadenas en sus brazos, nos quedamos petrificadas al verla, y solo se escuchó un –Ayuda- no entendíamos nada. -En que te ayudamos- dijo Roció con una voz llena de miedo, la mujer levanto la cara, alzo su brazo derecho mitras señalaba –Lo tienen que ver- , Todo en la habitación estaba desapareciendo y cuando nos dimos cuenta estábamos en otro lugar y no solo eso también en otra era. Por lo poco que sabíamos de historia pudimos deducir que estábamos en la época medieval, no solo estábamos allí como espectadoras éramos parte de ese momento, nos pusimos a buscar a nuestra mujer desconocida, al encontrarla, la vimos con su familia, felices, riendo y pasando un buen momento. Después de un buen rato se dirigió a nosotras –Pequeñas, esta es mi vida, o lo que recuerdo de ella, en un momento más se tendrán que esconder ya que vienen por mí-, todas entramos en un momento de confusión y pregunte ¿Por qué vienen por ti? A lo que ella respondió – pronto lo sabrán-. Pasaron como 15 minutos, bueno eso creo y así se sintió, ya que ninguna de nosotras tenía el cómo comprobarlo, a la distancia veíamos una muchedumbre acercándose, con antorchas, en ese momento entendí, voltie a ver a mis amigas. -La van a matar- dije con un tono de desesperación y angustia Todas se sorprendieron por lo que les dije a lo que contestaron a la par, -¿Por qué crees eso?-Amigas es la época medieval por lo que creemos, en la casa la encontramos con cadenas y todo en ella estaba mojado, lo que me hace pensar que la ahogaron, y en esta época solo hacen eso con los que creen que son Brujas- No estaba mal en lo que pensaba, vimos cómo se la llevaron, y como la preparaban para su muerte, y tristemente vimos como ella moría, cerramos los ojos y estábamos una vez más en la casa, y ella seguía ahí parada en el lumbral de la sala. No sabíamos que hacer o que decir, en ese momento Susana empezó a caminar, queriéndose dirigir al segundo piso, las demás íbamos atrás de ella pero estaba como poseída, se dirigió a la habitación principal, cerrando atrás de ella la puerta, las demás hicimos lo posible para abrir la puerta, al lógralo ella estaba en la ventana preparada para saltar y lo último que dijo fue –Vida por vida-, y simplemente salto, todas corrimos a la ventana y la vimos en el suelo los chico estaban a lado de ella tratando de hacer algo, en ese mismo instante Roció empezó a caminar dirigiéndose a la cocina, temíamos lo peor, al estar en la cocina prendo la estufa y puso sus brazos para que se quemaran mientras lo hacia repetía una y otra vez –Dolor por dolor-,Trate de detenerla pero Sofía empezó a gritar y no se detenía, y en ocasiones decía –Desesperación por desesperación-, entonces la mujer apareció delante de mí y solo me dijo – Momento por momento- caí al suelo y empecé a convulsionar. Al despertar estaba en el hospital, y fue allí cuando me dijeron. Susana falleció, Roció tenia quemaduras de tercer grado, Sofía iba a ser mandada a psiquiatría, y yo simplemente convulsione pero nadie sabe el motivo.

Mi experiencia en la ESEO Enrique Gabriel Flores Medina 1EV1 #: 24 12-octubre-2019 Cabe aclarar que soy testigo de lo que nos pasó en la ESEO del I.P.N. junto con mi compañera Andrea, así que cada suceso es basado en hechos reales…favor de tomarlo con seriedad. Mi nombre es Gabriel, y actualmente estudio en esta institución, recién incorporado a el primer semestre de la carrera de Enfermería, toda esta historia comienza en un día de lluvia en los primeros días en esta Universidad cuando mi compañera y yo decidimos quedarnos un rato más porque éramos de los que se iban por sus medios y no iban por ellos así que subimos a el segundo piso donde eran las aulas de los de Obstetricia y la dirección , como era un día lluvioso empezamos a contar acerca de nuestras opciones de admisión y demás cosas y uno de los temas salió de la clase del maestro César de comunicación oral y escrita nos había contado que se aparecía una niña, por lo que se nos ocurrió ir a los baños e invocarla frente al espejo para sentir esa sensación, pero ni pienso pronunciar su nombre, fuimos al baño que quedaba al otro lado de la segunda planta, y procedimos a llamarla por su nombre, pero no pasó nada, en un ir y venir cuando nos dimos cuenta era la hora donde se cerraba la escuela a las 9 de la noche más o menos, y escuchamos las puertas cerrándose, nos asustamos y fuimos a ver las puertas de la entrada estaban cerradas, nos habíamos quedado encerrados. Mi amiga me calmo diciéndome que estaba bien que no nos pasaría nada. Después de un rato sin nada que hacer y todavía encerrados a mi amiga se le ocurrió que debíamos investigar la biblioteca que es en donde nos habían contado que se aparece más seguido. yo la seguí ya que es sumamente aterradora la ESEO de noche, llegamos y a el entrar estaba todo muy oscuro lo iluminamos con ayuda de mi celular, dentro de ese lugar solo había una cantidad incontable de libros, pero más atrás vi una puerta, mi amiga también la ha visto porque me dijo “que alguien nos estaba observando por ahí” yo le dije que me dejara de molestar y que saliéramos de ahí. Ella me dijo que le dieron muchas ganas de ir al baño y que la acompañara porque tenía miedo de ir sola, fuimos al baño de la primera planta porque ya estábamos ahí ,yo la espere afuera del baño, pero me grito que fuera rápido al baño, yo muy asustado fuí, y ella me dijo que estaba segura que ella vio a alguien por la ventana del baño, yo sabía que a ella le encantaba molestarme así que no le preste atención, cuando termino le dije que nos fijáramos si ninguna de las puertas estaba abierta, y ninguna lo estaba, volvimos al segundo piso y esta vez nos fuimos al teatro, honestamente no sé por qué recorrimos toda las escuela en ese momento habrá sido pura curiosidad, yo me senté en el escenario a jugar con mi celular, y mi amiga abrió la ventana para que entrara el viento se quedó parada un rato allí, otra vez vino corriendo hacia mí y me dijo que había una chica observándonos desde el las canchas de baloncesto yo le dije que deje de decir esas cosas que me estaba asustado de verdad, ella me dijo que no era broma que cada vez estaba más cerca.

Yo no le creí y me fui de ahí, ella me siguió corriendo detrás de mí cuando llegue al salón 1EV1 me senté y cerré la puerta, ella no llego al salón , yo pensé que con su extrema curiosidad estaría investigando, pero después de 10 minutos me empecé a preocupar, fui hacia la escalera que está al lado de los baños y vi que mi amiga iba hacia ahí, pero… ella no estaba sola, de la mano la llevaba una chica de aproximadamente 8 años con una muñeca en la otra mano,, yo pensé “ que acaso no estábamos los dos solos?” las seguí disimuladamente ya que no quería molestar, cuando llegamos yo me quede del lado de afuera mirando por el espacio que había entre la puerta y la pared, yo era muy tímido con las personas que no conocía así que no entre, pero empecé a escuchar gritos, tome todo el valor del mundo y decidí entrar, mi amiga estaba siendo arrastrada a el ultimo cubículo del baño, yo entre y le grite “deja a mi amiga suéltala” la niña se dio cuenta de mi presencia por mi grito, y se dio vuelta tenía ojos completamente negros y una sonrisa diabólica pintada en su rostro. Lo último que recuerdo es la cara de terror de mi amiga antes de que sea arrastrada hasta la última casilla del baño. Mi madre me dijo que ese día me encontraron desmayado en la escuela y que yo no me había quedado hasta la noche de hecho la maestra la llamo para que me fueran a recoger. Cuando les pregunte sobre mi amiga me dijeron que esa persona no existía o al menos no la conocían, y eso era extraño porque ella iba todos los fines de semana a mi casa, cuando fui a su casa para ver si no era broma de mis padres, sus padres me dijeron que ellos no tenían ninguna hija que me habría equivocado de casa. Pero yo sé que ella existió y esa cosa también, porque ahora cuando termino las clases en la noche y salgo de la escuela veo dos niñas que me observan por la ventana que está cerca del baño, son dos niñas de ojos color negro que me dicen “ven a jugar” y yo sé que una de ella era mi amiga porque desde la ventana me muestra su muñeca y su risa que te enchina la piel, siempre me lamento sabiendo que debería haberla escuchado cuando dijo que alguien nos observaba, esta historia aun continua en las instalaciones…

FIN

Cuento 1EV1 #25 Hace mucho tiempo en la ESEO se realizó un torneo de videojuegos, el cual constaba de superar una serie de retos los cuales si lograban superar obtendrían dinero ilimitado y todas las acciones de la empresa de videojuegos, para participar en esta carrera era necesario ser mayor de edad y tener la consola adecuada, la cual era una consola de última tecnología que te ayudaba a viajar hacia nuevos mundos de realidad virtual a través de simulaciones, sólo había un problema, si morías dentro del juego, morías en la vida real. Era difícil de explicar por qué alguien participaría en tan peligrosa carrera, pero la mayoría lo hacían por el poder y el dinero que dicho logro las concedería si lograban superar las pruebas y obtener las llaves de la compañía. La protagonista de esta historia era una chica llamada Mariana, la cual llevaba toda su vida jugando videojuegos y sentía que era capaz de ganar el dinero que el juego otorgaba, aunque realmente no lo jugaba por dinero o posición, lo había porque amaba los juegos y le encantaba la idea de poder viajar a ese mundo con un objetivo de por medio, le gustaba la idea de vivir dentro de él y de crecer todo lo que pudiera en ese mundo. Después de ver tantos animes era su sueño el poder participar en ese gran torneo, el cual realmente le daba un gran significado a todo gamer que quisiera formar parte del mismo. A la mayoría le encantó la idea, pero no sabían cómo subir de nivel ni que es lo que debían hacer, así que muchos decidieron desertar, el inventario y la guía del juego eran muy complicados para quienes nunca habían intentado jugar ningún tipo de juego parecido a este. Por suerte para Mariana, ella estaba acostumbrada a ese tipo de juegos y sabía perfectamente que hacer y cómo hacerle para subir rápido de nivel y alcanzar más fácilmente las pistas y los atajos para terminar rápido el juego. Por suerte ella realmente no planeaba terminar el juego ni alcanzar las llaves, ella quería cumplir su sueño de formar parte de un juego tan increíble como este. Le encantaba la idea de recrear todo lo que había estado viendo por años dentro de los animes. Dejando de lado todo, la historia comenzó cuando nuestra protagonista decidió formar parte de un gremio y ayudar a otros participantes a subir de nivel y a farmear materiales y experiencia para que no terminaran muriendo dentro del juego, habían algunos quienes habían sido obligados a formar parte del juego aunque no lo quisieran hacer, pero por uno u otro motivo no tenían opción de elegir si participar o no, debido a deudas o a que querían el dinero para salvar a algún familiar enfermo u algo más. Pasando los meses las personas comenzaron a unirse y a formar gremios para facilitarse el poder subir rápido de nivel y terminar el juego juntos. Las personas que habían muerto en el juego resultaron muertas en la vida real, como ya se les había advertido. Con el paso del tiempo a todos comenzó a darles miedo y decidieron dejar de intentar terminar el juego por miedo a morir, el juego era bastante difícil o eso es lo que la mayoría creía, pero había algunos quienes eran demasiado buenos en el juego y decidieron unirse para al final dividir el dinero y las acciones de la compañía entre ellos.

El grupo constaba de 4 personas que ya eran nivel 100, mientras que los demás aún andaban cerca de los niveles 40 y carecían de la habilidad necesaria para poder pasar de los primeros 30 niveles. El nivel máximo en el juego era el nivel 150. Y los niveles a superar eran un total de 200, cada 10 pisos debían pelear contra un líder para poder abrir la puerta y continuar a los siguientes niveles, pero los lideres tenían diferentes patrones de ataque y conforme iban avanzando se volvían cada vez más fuertes y eran más difíciles de matar. Al cabo de los 2 años, por fin estaban en el piso 150, a tan solo 50 pisos de ganar el juego, pero el piso era muy difícil de superar, aún que no tanto para ellos 4, debido a que por fin habían alcanzado el máximo nivel dentro del juego en todas las habilidades, ahora solo les faltaba mejorar todas sus habilidades para poder eliminar más fácilmente a los jefes, aunque si ellos hubieran querido habrían podido terminar el juego hace tiempo, se estaban tomando su tiempo para poder disfrutar lo más que pudieran, le regla es que debían pasar mínimo 2 pisos cada mes para continuar dentro del juego y es por eso que ellos seguían avanzando con los pisos. Los 4 integrantes eran: Mariana; una chica güera, de ojos verdes, cabello corto y algo delgada, Iván; un chico alto, blanco, de ojos cafés y cabello corto, Israel; un chico rubio, de ojos azules, demasiado alto y con un cuerpo fuerte, y por último Oziel; un chico fuerte y tímido, alto y de cabello castaño oscuro. Los 4 eran muy buenos amigos y llevaban ya 2 años y medio juntos, paseando por todo el mundo y gozando lo que ese lugar tenía que ofrecerles, jugaban por la emoción de hacerlo y para obtener las recompensas dentro del juego, esperando poder quedarse dentro del juego todo el tiempo y dejar de vivir en donde antes lo hacían. Les alucinaba la idea de poder vivir para siempre dentro del juego que tanto amaban, les encantaban los animales que estaban dentro de ese mundo, había animales completamente distintos a los que había en su antiguo mundo, el cual por cierto no extrañaban para nada. Seguían viajando juntos y explorando el nuevo mundo con todos los poderes que habían adquirido gracias a su destreza y dedicación, para ellos la vida real ahora era este mundo y no el anterior, no querían salir nunca de su nuevo mundo y querían poder convencer a más personas de quedarse en el nuevo mundo a su lado. Entre los animales que se encontraban en el nuevo mundo estaban los seres mágicos como hadas, duendes, elfos, dragones, gárgolas, dinosaurios y todo tipo de animales ya extintos en el otro mundo, estos animales podían hablar y creaban vínculos con las personas, cada uno de los 3 tenía su propio animal y este los ayudaba a cumplir misiones y los llevaban de un lado al otro, a los 4 les encantaban los dragones, por lo cual cada uno tenía un dragón de diferente elemento, Mariana tenía un dragón de fuego, Iván un dragón de hielo, Oziel un dragón de relámpago e Israel tenía un dragón de viento. Los chicos y sus dragones eran mejores amigos y siempre estaban juntos, apoyándose y viajando a todos lados juntos. Al paso de otro año, ya se encontraban en la última puerta, pelearon contra el jefe y ganaron, liberando así a todas las personas que querían salir ya de ese mundo para volver a sus antiguas vidas, la mayoría se fue, pues no podían dejar atrás a sus familias, pero ellos decidieron quedarse y como dueños de la compañía lograron permanecer dentro del juego y continuar su vida como ellos quisieron, al cabo de los años seguían sin envejecer y podían seguir haciendo lo que ellos querían, eran felices y lograron cumplir sus metas y sueños. Al final Mariana se casó con Israel y Oziel e Iván conocieron a alguien dentro del juego, se enamoraron y se casaron.

Florencia Fátima Arzate Aguilar. Ciudad de México,13 de octubre de 2019. Martes. De nuevo me levante tarde; 11:30 de la mañana, Florencia me levantó, pero a mala hora; no me va a dar tiempo de hacer nada, carajo. Al menos sí acabé la tarea de Anatomía de los ‘’206 fastidiosos huesos del cuerpo humano’’ donde tuve que poner cada detalle específico, como inserción, origen, relación, tamaño y forma; para que al final el profesor me diga: ‘’Tu trabajo está incompleto, necesita las referencias en formato APA’’. APA, ¿¡quién sabe hacer eso?! Sí yo me dedicaré a los pacientes, no a la escritura. Carajo, comencé a divagar de nuevo, ya van a ser las 12; me tengo que bañar. Y subir un piso ya semidesnudo sólo con una toalla muriéndome de frio, el piso helado, ventanas empañadas y lloviendo para encender un boiler y que éste después apeste toda mi casa. Oh, claro, no hay gas, no hemos rellenado el tanque, perfecto… ¿qué hago? mi papá siempre está disponible, le marcaré: -¿Bueno, pa? -¿Qué pasó Faty? -No hay gas de nuevo. -Ajá, ¿y qué hago yo? ¿voy y te lo pongo? -Pues sí, ¿no? No soy Hulk. -Fátima, estoy muy ocupado para tus bromas; calienta agua o no sé, arréglatelas. -Ash, bueno, bye, te veo en la noche. Se queja de que me enfermo y que las medicinas son caras, pero no coopera con el problema. Ni qué hacerle, hoy tocó jicarazos fríos. Pues ya así mi día. Al fin terminé con el suplicio del baño de hoy; al menos me tardé cinco minutos, aún tengo tiempo para desayunar. Ojalá haya algo que me guste en el refri, el cual, descompuesto que no enfría ni un méndigo café hirviendo. Excelente, para acabarla de variar, Florencia tiene la chamarra que me gusta, mi hermana menor a veces puede ser una desgraciada. Pero la tengo que comprender ahorita, está enferma, ha ido a la escuela obligada por mi papá, siempre nos vamos juntas en el metro; a pesar de que es la menor, siempre me defiende ante las personas que me quieren hacer daño, se torna muy agresiva por momentos, e incluso hasta a mi me da miedo, pero realmente es tímida de corazón, me da mucha ternura, ya que sólo me tiene a mí, nadie le hace mucho caso en la escuela, es rara.

Al menos sí encontré algo que ponerme, ya tengo hambre, tengo que bajar ya; Florencia me está esperando para desayunar juntas. Hizo huevo, sabiendo que no me gusta, se excuso al decir que era lo único que había, la niña es un caso especial, pero ya nos tenemos que ir, o llegaremos tarde con el doctor, es la tercera cita este mes, Florencia no ha estado muy bien; pero no le gusta ir. Llegando ya apenas al consultorio, tenemos que esperar 20 minutos, para una consulta de 5 minutos. Ya comencé a notar a Florencia molesta, por esto y demás procedimientos. Pero ya vamos a pasar. El doctor nos preguntó cómo estábamos, y cómo seguía Florencia con el tratamiento, le dije, que, lamentablemente, no había mejorado, pues no le gusta tomar los medicamentos recetados, así que el doctor le dio otro tipo de medicamento, más suave con su estómago, intento tomárselos, e incluso engaño al doctor, porque no los tomó. Estaba enojada con ella, nos regañan a las dos cuando pasan estas cosas, y que ella no tome su medicamento, sólo es un fastidioso problema más, y la iba regañando en el camino a la escuela. Le hice prometerme que se tomaría sus medicamentos. No necesito más estrés y problemas en mi día ahora, con la universidad es suficiente. Mi hermana es curiosa, no la entiendo, ni siquiera le gusta enfermería, no sé qué hace aquí, pero, al menos vamos en salones diferentes. Necesito mi espacio. Llegamos, tarde, para variar; voy corriendo a mi salón para llegar menos tarde. Ya ni sé sí Florencia entró, estaba muy concentrada para llegar a la clase de Enfermería Comunitaria como para preocuparme por eso. Entro al salón, voy a mi lugar, dejo mis cosas en la banca de enfrente, me quito la chamarra y…qué genial, no ha llegado la maestra. Me levanto de mi lugar y saludo a mis amigas; ellas con frío se me quedan viendo raro, pues tengo calor y les explico que venía con prisas pues fuí al doctor con Florencia. Dani y Juni se miraron entre ellas, burlonas de mi comentario, a veces no las entiendo, pero recuerdo a Florencia y sus consejos de que las ignore, que no entienden mi humor. Siempre me recalca que no tengo que dar explicaciones de lo que hago. No llego la profesora, al menos es hora libre; les dije a Dani y Juni que fuéramos a jugar vóley, pero tenían mucho frío y fuimos a la cafetería por un café. A todo esto, no supe sí Florencia entro a sus clases o no; les dije a las chicas sí me acompañaban a buscarla, pero ellas se burlaron de mi…no entiendo, ¿dije un chiste? ...pasó una risa incomoda y me dijeron que sí me acompañarían. Así que iremos a buscarla. ¿Estará en el patio? Ya estamos aquí y no la vemos, así que iremos al 203, su salón. Son dos pisos, pero no importa, la tengo que cuidar, es mi hermanita. Así que subimos hasta el último escalón, en el piso de la terraza ya estamos un poco sudadas, pero la alcanzo a ver, y les digo a mis amigas que nos apuremos para ir con ella y preguntarle sí todo está bien, pero cuando entramos corriendo me quedo paralizada. Mi hermanita está bañada en sangre, con un cuchillo en la mano, está riéndose y me preocupo; Juni y Daniela están anonadadas, no saben que pasa. Yo tampoco. Le hablo a Florencia: -Hermana… ¿estás bien? ¿qué te sucede? Ignorando mi pregunta, y riéndose, me responde: -Hoy todos me notarán ya no seré tu sombra.

En un movimiento increíblemente rápido, toma a Dani, del cuello; amenazándola con el cuchillo en la garganta. Le imploro que la deje ir, que hablemos y resolvamos esto, pero su respuesta fue diferente: -Ya no más, te di tiempo, te di espacio, no hay más prorroga. En un abrir y cerrar de ojos, desliza el fino cuchillo sobre la garganta de Daniela, estoy en shock, no comprendo lo que pasa; sólo estoy gritando y llorando. Me tiro al suelo rezando que esto no es real y que me despierte pronto. Me pongo en posición fetal, abrazo mis piernas y cierro con fuerza mis ojos. Pero Florencia viene, se hinca y me obliga a abrirlos. No lo puedo creer, me trajo la cabeza de Juni; sólo pude quedarme boquiabierta y vomité, dejé salir hasta mis intestinos en esa evacuación. Sigo llorando, sollozando, no puedo creer que esto esté pasando. Florencia se me acerca y me dice: -Todo estará bien hermana, contrólate cuando sea tu turno, ahora estamos juntas para siempre. Me desmayo. Lo siguiente que recuerdo es despertar en una sala negra, con una sola luz prendida, mis manos esposadas atrás de mí, pero; están raras, siento una sustancia un poco acuosa. Estoy temblando, no comprendo qué sucede, veo mi ropa y hay sangre…Juni…Daniela…Florencia seguro me mancho con su sangre. Mientras trato de comprender qué fue lo que pasó, entran dos hombres altos, de traje negro, muy serios se sientan, y me comienzan a interrogar. Me dicen: - ¿Qué hiciste?

El patrón. 1EV1 #14 Que se puede decir, es algo muy raro la leyenda, una historia que me conto mi primo que dice que es una historia basada en hechos reales. Se dice que un dia común como cualquier otro, en una fiesta de jóvenes, que solo se veía a la gente bailando y perrreando, una que otra persona ahí la veias tomando y otra drogandoce, pues eran jóvenes y esa casa era un desastre estilo proyecto X. Cuenta la leyenda que la fiesta empezó como a las 9 de la noche y se pensaba terminar hasta el dia siguiente, pues eran solo planes por que nadie pensó que no fuera a terminar asi. Cuando empezaban a marcar el reloj las 12 se empezaba a ir la luz como primeras manifestaciones, pues el dueño de su casa, pensó que sus padres no habían pagado el recibo de luz antes de irse de viaje, entonces como buenos jóvenes, se les ocurrio colgarse a la luz del vecino. Después de que se manifestaron esas primeras cosas la gente que ya estaba demasiado ebria se o drogadas, con las hormonas hasta el tope, los curtos parecían hotel, pues una pareja ya casi no aguanta entonces se les ocurrio ir debajo de la casa, estilo sotano pero no era sotano, solo era un cuarto de refugio para cualquier desastre. Ya cuando estaban apunto de empezar a despedirse, vieron que algo se movio en la parte trasera de la casa, pues ellos como estaban ebrios no les tomaron importancia hasta que sintieron que algo los observaba, ellos pensaron que era uno de sus amigos morvosos o algo asi. Cuando ya estaban apunto de culminar y llegar al extasis, sintió el chavo que algo lo jalo hasta adentro de la casa, ella grito y salio corriendo pidiendo ayuda, nadie le creyo pues la tomaron por loca, pues desde ese dia ya nunca se le volvió ver al tipo, y nunca nadie supo que fue lo que paso.