LA MARAVILLA DE LA MULTIPLICACIÓN

PAUL MAURER

En 2003, recibí una palabra profética diciendo que había una poderosa unción en mi vida para evangelizar naciones, caminar entre el liderazgo de las naciones, ministrarlos en los días venideros y ver señales, maravillas y milagros. ¡Fue una palabra poderosa! ¡Pero pensaba que seguramente sería para otro! No tenía mucho sentido, ya que yo no tenía ningún deseo de ir a las naciones, y no estaba viendo ningún milagro. Así que puse a un lado la palabra profética y oré para que, si era la voluntad de Dios, se cumpliera. Unos años después me convertí en pastor de jóvenes, y tras una serie de confirmaciones proféticas, terminé siendo misionero en China. Tras vivir en China cerca de un año, comencé a tener muchos sueños sobre ministrar en cruzadas. Mientras más oraba por esos sueños, más fuerte era el deseo de hacer cruzadas.

Era improbable, pero tenía que intentarlo

Contacté con Evangelista Daniel Kolenda y le pregunté si consideraría ser mi mentor en el ministerio de cruzadas. Pensé

Apertura de una Campaña Evangelística de CfaN en Burundi, África, durante mi aprendizaje en Cristo para Todas las Naciones.

“El ministerio de Cristo para Todas las Naciones cambió mi vida, y estaré por siempre agradecido”.

que era improbable, pero al menos tenía que intentarlo. Tras orar por mi petición, Daniel me contestó. Me impactó saber que había decidido comenzar un programa de aprendizaje en CfaN.

La profecía se hizo realidad

Los sueños y las palabras proféticas que había recibido muchos años atrás, se hicieron realidad. Estoy convencido de que, sin el entrenamiento y la preparación recibida del Evangelista Daniel Kolenda, nunca habría hecho ministerio de cruzadas. Ahora Daniel quiere levantar ¡otros 20.000 evangelistas para la cosecha de los últimos tiempos! Daniel fue mi mentor, y ahora estoy colaborando con CfaN para ayudar a entrenar y preparar a los graduados del Campamento de CfaN en África. ¡Esto es multiplicación! Si usted está llamado al evangelismo, no se me ocurre un lugar mejor en todo el mundo para ser equipado y enviado. El ministerio de Cristo para Todas las Naciones cambió mi vida, y estaré por siempre agradecido.