HISTORIA DE LA ARQUITECTURA S.XX
HACIA UNA ARQUITECTURA
C. F. LARIOS
INTRODUCCIÓN
Lo que Le Corbusier planteaba en el escrito publicado en 1923, “Vers une Architecture”, no era más que una guía crítica, que no sólo planteaba soluciones prácticas a la crisis de la arquitectura de su época, sino que también daba nombre a dichos problemas, los define y dice: “Los arquitectos hacen estílos o discuten en exceso sobre estructura; el cliente, el público, siente en virtud de costumbres visuales y razona en base a una educación insuficiente”. Yo diría que es un problema que sigue y seguira existiendo, sin embargo aunque Le Corbusier no resolvió el problema con sus propuestas, si hizo un cambio significativo que marcó un ito en la historia de la arquitectura y que fue influensiado por los hechos históricos en los cuales no quisiera profundizar.
Le Corbusier, VERS UNE ARCHITECTURE
Lo interesante es que muchos arquitectos, teóricos, artistas, filósofos o incluso poetas se han preguntado “qué es arquitectura”, de ahi que pretendo hacer una comparativa de términos a lo largo de la historia para poder explicar lo que Le Corbusier propone.
VERS UNE ARCHITECTURE
Sesenta y ocho años antes de que Le Corbusier publicara el texto “Vers une Architecture”, en el que definia a la arquitectura como “El juego sabio, correcto y magnifico, de los volúmenes reunidos bajo la luz”, el poeta norteamericano Walt Withman describe a la arquitectura, en su poema “A song for occupations”, como sigue: “All architecture is what you do to it when you look upon it”, esta frase no fue explicada por el poeta, ESCUELA DE ARQUITECTURA / UNIVERSIDAD ANÁHUAC MÉXICO NORTE / HISTORIA DE LA ARQUITECTURA S. XX
Le Corbusier, VERS UNE ARCHITECTURE
VERS UNE ARCHITECTURE
sin embargo, se presta a ser interpretada de manera que la arquitectura “ES” en el momento en que esta entra a nosotros por el sentido de la vista, y todo aquello que nos hace por medio de la persepción, y aqui entra Le Corbusier cuando dice que “la arquitectura debe emplear los elementos suceptibles de impresionar nuestros sentidos, de colmar nuestros deseos visuales, y disponerlos de tal manera que su contemplación nos afecte claramente, por la finura o la brutalidad, la indiferencia o el interés. Estos elementos son elementos plásticos, formas que nuestros ojos ven claramente y que nuestro espíritu mide” y a su vez podríamos introducir lo que tiempo después en 1967 Louis Kahn transmite durante una conferencia en el Politécnico de Milán cuando explica: “Ante todo debo decir que la arquitectura no existe. Existe una obra de arquitectura. Y una obra de arquitectura es una oferta a la arquitectura en la esperanza de que ésta obra pueda convertirse en parte del tesoro de la arquitectura. No todos los edificios son arquitectura (...) El programa que se recibe y la traducción arquitectónica que se le da, deben venir del espiritu del hombre y no de las instrucciones materiales”. Seguida de la percepción de la arquitectura a partir del sentido de la visión, pasamos a la definición que Louis Kahn propone, y aunque comienza con una negación de la arquitectura me resulta propositiva por su calidad antropocéntrica cuando se refiere a que la traducción de la arquitectura debe venir del espiritu del hombre, en lo cual concuerda con Le Corbusier y es cierta forma con Withman en que “la arquitectura habla al espiritu”. Le Corbusier nos da una receta básica para que la arquitectur a pueda llegar al espiritu del hombre, y es entonces donde habla de “Formas” cuando dice: “Esas formas, primarias o sutiles, flexibles o brutales, actúan fisiológicamente sobre nuestros sentidos (esfera, cubo, cilindro, horizontal, vertical, oblicuo, etc.) y lo conmocionan”. Plantea que a través de las formas simples el hombre puede recibir más información, en vez de contaminarnos con costumbres visuales traidas por los estílos, que lo único que hacen es llenar un vacio visual y no espiritual; no llegan a conmosionar nuestro ser, nos dan una satisfacción temporal, no afectan el espíritu del hombre porque es necesario ser afectados a través de la percepción porque “una vez afectados somos susceptibles de percibir más allá de las sensaciones brutales, y entonces nacerán ciertas relaciones que actúan sobre nuestra conciencia y nos transportan a un estado de alegría”. En este PAGE 2
Le Corbusier, VERS UNE ARCHITECTURE
Louis Kahn, CONFERENCIA EN EL POLITÉCNICO DE MILÁN, 1967
Le Corbusier, VERS UNE ARCHITECTURE
Le Corbusier, VERS UNE ARCHITECTURE
VERS UNE ARCHITECTURE
sentido podemos decir que Le Corbusier concuerda con Peter Zumthor cuando este menciona: “para mi la realidad arquitectónica, sólo puede tratarse de que un edificio me conmueva o no”, cuando nuestros sentidos perciben y esa percepción conmociona al espíritu, es entonces cuando hablamos de arquitectura. A partir de aqui Le Corbusier hace una tajante diferencia entre los elementos que pueden llegar a nuestro espíritu y aquellas cosas que son superficiales a la arquitectura, que no transmiten nada, que no son más que simples adornos que sacian los deseos visuales y temporales de nuestros sentidos y que sólo engañan y mal educan a la sociedad, como una mera publicidad contaminada de costumbres. “Los arquitectos hacen estílos o discuten en exceso sobre estructura; el cliente, el público, siente en virtud de costumbres visuales y razona en base a una educación insuficiente”. Un problema vigente con una solución simple: “Hacer Arquitectura” y no hablo de construir casa o edificios, sino hacer verdadera arquitectura, aquella que llegue al espíritu de cada hombre y transforme sus vidas, la finalidad de la arquitectura al igual que el arte es la de emocionar. “La sociedad vive en espacios que parecen contradecir su ser; “los muros estrechos, el amontonamiento de objetos inútiles y dispares y un espíritu nauseabundo que reinaba en tantas falsedades de Aubusson, Salón de Otoño, estílos de todas clases y baratijas ridículas. Parecían acobardados, encogidos, como tigres enjaulados; se veía claramente que eran más dichosos en su fábrica o en su banco” Un claro ejemplo de como la arquitectura puede llegar a influenciar a las personas de manera contraria a lo sublime es el Panóptico diseñado por el filósofo J. Bentham en 1791: “En la periferia, una construcción en forma de anillo; en el centro, una torre, ésta, con anchas ventanas que se abren en la cara interior del anillo. La construcción periférica está dividida en celdas, cada una de las cuales atraviesa toda la anchura de la construcción. Tienen dos ventanas, una que da al interior correspondiente a las ventanas de la torre y la otra queda al exterior, permite que la luz atraviese la celda de una parte a otra. Basta entonces situar un vigilante en la torre central, y encerrar en cada celda a un loco, un enfermo, un condenado, un obrero o un escolar. Por el efecto de la contraluz, se pueden precindir desde la torre recortándose perfectamente sobre la luz, las pequeñas siluetas cautivas en las celdas de la periferia. Tantos pequeños teatros como celdas, en PAGE 3
Peter Zumthor, CONFERENCIA EN EL PALACIO DE WENDLINGHAUSEN 2003.
Le Corbusier, VERS UNE ARCHITECTURE
Le Corbusier, VERS UNE ARCHITECTURE
J. Bentham, PANÓPTICO, 1791
VERS UNE ARCHITECTURE
los que cada actor está solo, perfectamente individualizado y constantemente visible”.
CONCLUSIÓN
El escrito de Le Corbusier se ha considerado como uno de los más importantes de la arquitectura por la influencia que ha generado a lo largo del S. XX y que sigue vigente como el principio del modernismo, aunque si es cierto que define los problemas y plantea las soluciónes, no es el único que encuentra la necesidad de definir la arquitectura pero si es de los pocos que trata de llegar a ella. En conclusión no podría decir que la arquitectura es hecha por el hombre sino que es la expresión material del espíritu de las personas, es decir que “la arquitectura hace al hombre”. La arquitectura no se trata de diseñar espacios sino de crear atmósferas, en definitiva “la arquitectura habla al espiritu”.
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