7 minute read
Los guardianes de las aves de Sanhe
Tres historias que muestran los beneficios del agroturismo en esta aldea de la provincia de Yunnan
Por MA LI
Advertisement
Alas 8:30 de la mañana, Li Zhonghua, residente de la aldea de Sanhe, en la prefectura de Nujiang, provincia de Yunnan, entra en el recinto de su estanque de pájaros para darles comida. Esta se ha convertido en una costumbre diaria en los últimos dos años desde que tiene el estanque para pájaros, el cual mantiene con esmero y ha sido una fuente de ingresos para su familia.
El estanque para pájaros funciona como un sitio artificial de alimentación para las aves construido al borde de su hábitat natural, con el fin de facilitar su observación y la toma de fotos por parte de los visitantes.
“En el pasado cazábamos pájaros, pero la vida era difícil. Ahora, en cambio, los apreciamos y protegemos, ya que nos han servido para aumentar nuestros ingresos, así como mejorar el entorno”, dice Li, quien añade que esta labor le ha traído enormes cambios a su vida.
La aldea está dotada de ricos recursos forestales e hídricos. El hecho de que se llame Sanhe (“tres ríos”, en español) se debe a que aquí convergen los ríos Gutan, Dishui y Wanzhuan.
De cazadores a guardianes de aves
Li Zhonghua, de 42 años, es originario de la aldea de sanhe. “Antes, a menudo cazaba pájaros y recolectaba flores en las montañas para venderlas”. Debido a la pobreza, recibió pocos años de escolaridad y la protección medioambiental no era un tema al cual prestara atención. sin embargo, su vida dio un giro en 2018. “En ese momento, Zhang Chaojiang, un miembro del equipo de trabajo en la aldea, enviado por la Oficina de Ciencia y Tecnología de la Prefectura de Nujiang, y los cuadros locales me dijeron que se construirían estanques para pájaros que servirían para los amantes de la fotografía de aves, y me preguntaron si quería ser el dueño de uno de ellos”, recuerda Li Zhonghua. De hecho, Li había visto a personas llegar a la aldea con equipos fotográficos, pero no tenía idea de lo que significaba ser dueño de un estanque ni de que pudiese ganar dinero a través de ello.
Para disipar sus preocupaciones, Zhang Chaojiang llevó a Li Zhonghua y a otras 11 personas de familias pobres al parque turístico de Baihualing para que pudieran aprender a partir de su ejemplo. “Su modelo de desarrollo en base a las aves nos llamó mucho la atención”, explica Li. Así, por primera vez, se dio cuenta de que la protección de las aves podía efectivamente generar ingresos.
Bajo la guía y ayuda de la Oficina de Ciencia y Tecnología de la Prefectura de Nujiang, se construyeron rápidamente 15 estanques para aves en la aldea, y Li Zhonghua se convirtió en el dueño del estanque n.° 10. El 1 de octubre de 2018, su estanque comenzó a recibir fotógrafos de aves. “Como no tenía mucha experiencia, no gané mucho dinero el primer mes. La oficina de Ciencia y Tecnología y los cuadros del poblado venían a menudo a orientarnos y traer aficionados a la fotografía, con lo que poco a poco empecé a percibir beneficios económicos”, señala. En la actualidad, los 15 estanques para aves de la aldea son operados y administrados por la Compañía de Desarrollo de Tecnología Agrícola y Forestal Sanheyuan de Nujiang. Los dueños de estanques, como Li, no tienen que preocuparse en atraer turistas, ya que es la empresa la que se encarga de enviar fotógrafos a diferentes estanques de acuerdo con sus necesidades particulares. “De esta manera, las operaciones están más orientadas al mercado y estandarizadas, y ganamos dinero mediante las reservas, los servicios y la comida que ofrecemos”, explica. “Cuando el negocio va bien, podemos ganar hasta 5000 yuanes (780 dólares) al mes, mientras que en abril, un mes en el que recibimos menos turistas, ganamos 2800 yuanes (437 dólares)”. Con todo, Li Zhonghua se muestra satisfecho con esta nueva fuente de ingresos que le ha dado su estanque.
De albañil a dueño de un albergue
Luo Zhiqiang, residente de Sanhe de 33 años, y su esposa abrieron un albergue agroturístico en el cual él hace las labores de camarero, mientras que ella se encarga de cocinar y llevar la contabilidad.
“Antes trabajaba como albañil y tenía un buen ingreso”, explica Luo. sin embargo, ya que estaba todo el año fuera, sentía una gran deuda emocional con su familia, por lo que una vez que logró ahorrar lo suficiente, decidió regresar a su aldea. Convirtió su casa en un lugar que pudiese servir como hospedaje en torno al negocio de avistamiento de pájaros. “Ahora hay cada vez más turistas y entusiastas de la fotografía en la aldea, por lo que este lugar se ha convertido en una buena oportunidad de negocio”.
Luo recibió orientación y asistencia profesional para la planificación y el diseño de su albergue agroturístico por parte de un profesor de la Universidad de Agricultura de China que había llegado en el marco de una investigación de campo. “Bajo la guía del profesor, construí un cobertizo para observar aves, un punto de agua y una piscina para los pájaros. Además, todos los días les doy frutas y verduras frescas, por lo que el lugar se ha convertido en una suerte de paraíso para las aves”. Luo explica que la intención original del diseño era proporcionar a los turistas y entusiastas de la fotografía un espacio donde pudiesen estar totalmente a gusto. Además de ofrecer alojamiento y comida, el albergue ha despertado un mayor interés hacia las aves por parte de los visitantes. “La armonía entre el ser humano y las aves debe estar protegida”, enfatiza.
El albergue de Luo se inauguró en marzo de 2020. Aunque se vio afectado por la pandemia de COVID-19, a finales de año sus ingresos ascendieron a más de 70.000 yuanes (10.930 dólares). “Cuando trabajaba fuera, los ingresos de un año eran aproximadamente los mismos. Ahora no solo tengo mi propio negocio, sino que también puedo estar al lado de mi familia”. Luo Zhiqiang espera que el negocio siga creciendo día a día y, de esa forma, poder contratar a más residentes de la aldea y que todos puedan aumentar sus ingresos. Para brindar una mejor experiencia, Luo plantó melocotones y un campo de arroz junto al albergue. “Los clientes podrán cosechar melocotones el próximo año. A la vez, estoy replantando los retoños de arroz y colocando alevines, gracias a lo cual la gente también podrá pescar en otoño”. El principal deseo de Luo Zhiqiang es proteger a los pájaros y que la gente pueda disfrutar de esta experiencia agroturística.
El “tío de los pájaros”
“Durante los últimos dos años, todos los residentes de la aldea han construido estanques para pájaros y han abierto patios de agroturismo, gracias a lo cual la economía basada en las aves de Sanhe ya se ha hecho bastante conocida en la región”, señala Zhang Chaojiang, también conocido como el “tío de los pájaros”.
La aldea de Sanhe se encuentra al interior de la montaña Gaoligong, donde hay densos bosques y más de 240 especies de aves silvestres. En 2016, cuando Zhang Chaojiang, un entusiasta de la fotografía, llegó a Baihualing, en la ciudad de Baoshan, para capturar fotos de aves, el negocio desarrollado a partir del entorno natural y el avistamiento de aves le causó una gran impresión, por lo que decidió replicarlo en la aldea de sanhe dos años después. Zhang señala que, a principios de 2018, la oficina de Ciencia y Tecnología de la Prefectura de Nujiang le envió a la aldea de Sanhe para ayudar en las medidas de alivio de la pobreza. “Tan pronto como llegué, le conté a Yuan Kaiyou, uno de los hombres más competentes de la
aldea y quien en ese momento estaba dedicado a la agricultura con peculiaridades locales, sobre mi idea de hacer un negocio en torno a la observación de aves. Tras nuestra conversación llegamos a un acuerdo: él se encargaría de financiar la construcción de dos puntos para la observación de pájaros y yo difundiría la noticia entre los entusiastas de la fotografía de aves. De esta forma, empezaron a llegar las reservas una tras otra”.
Más adelante, bajo la dirección de la Oficina de Ciencia y Tecnología, se construyeron 15 estanques para aves, que han servido también como talleres para el alivio de la pobreza. “El manejo de los estanques quedó a cargo de las familias que son parte del registro de hogares pobres”. El negocio ha tenido un buen arranque, con todas las 45 familias que forman parte de este registro social dedicadas a la industria relacionada con las aves. Gracias a su desarrollo, a finales de 2020, el ingreso per cápita de sanhe había aumentado de 7000 yuanes (1093 dólares), en 2017, a más de 8900 yuanes (1390 dólares).
Zhang Chaojiang asegura que la economía en torno a las aves ya se encuentra bastante consolidada, por lo que la experiencia también puede ser replicada en otros lugares de la prefectura. Yuan Kaiyou y él planean ampliar la industria de la observación de aves desde sanhe hasta el Gran Cañón de Nujiang. “Ambos lados del Gran Cañón son el hábitat natural de muchas especies de pájaros, por lo que estamos seguros de que podremos replicar este modelo con el fin de desarrollar una gran industria y, con ello, aumentar los ingresos de más personas”.