Primero la edificación… ahora la obra civil

Primero fue la edificación residencial,…o la construcción como dicen algunos, y ahora es la obra civil. Y no es lo mismo, la construcción es un gran sector que agrupa tres subsectores, la obra civil, la edificación no residencial y la edificación residencial. Pero ahora ya no importan estas puntualizaciones, porque las expectativas son tales que, en breve, puede que quede poco de casi todo…

Las obras de infraestructuras programadas por el Ministerio de Fomento sufrirán un retraso de, al menos un año, tras la aplicación del recorte de inversión contemplado por el Gobierno en su Plan de Ajuste. El anunciado programa de austeridad supondrá un tijeretazo de 6.400 millones de euros en los próximos dos años (2010-2011), el mayor recorte de la inversión pública de la historia.

El ministro de Fomento, José Blanco, anunció que se replanteará “todo el programa de inversión pública” de los próximos cuatro años para reprogramar cerca de 3.000 obras que se están acometiendo y reconsiderar las que no son imprescindibles.

“Esto se traduce en que vamos a posponer nuevas licitaciones, demorar los plazos de financiación de obras, suspender temporalmente actuaciones e incluso anular contratos de ejecución”. Antes del cierre de esta revista, un mes después de las declaraciones del ministro, el Gobierno aún no ha concretado las obras que se reprogramarán en Madrid.

La Asociación Nacional de Constructores Independientes ha explicado a Ingenio Caminos Madrid que “estamos de acuerdo con el recorte del déficit mediante la reducción del gasto corriente, pero no cuando afecta al gasto productivo

La Asociación Nacional de Constructores Independientes ya ha mantenido varias reuniones con la Secretaría General de Infraestructuras y el Ministro de Fomento. Sin embargo, aún no les han detallado los proyectos concretos que resultarán afectados. “Esperamos que lo haga tan pronto como pueda”, subrayó el presidente de ANCI, Jaime Lamo de Espinosa. El presidente de la Asociación Nacional de Empresas de Obra Pública (AERCO), Javier Sáenz Cosculluela, mantiene una “actitud comprensiva”. “Esperamos que en general sirvan de estímulo a la sociedad y para superar las circunstancias actuales. Aun así hubiéramos preferido que el recorte en 6.000 millones en inversión productiva se hubiera diluido porque es muy fuerte para un sector que genera empleo y lo consolida”, añadió. El titular de Fomento ha adelantado que se dará preferencia a aquellas estructuras que sean necesarias. En esa línea de actuación sí está previsto que se mantengan las obras del AVE Madrid-Valencia y los proyectos que puedan incluirse en el Plan Extraordinario de Infraestructuras (PEI) dotado de 17.000 millones de euros con inversión público-privada. Estos recortes de la inversión en infraestructuras también han generado incertidumbre en bancos y cajas en relación a la financiación y créditos de las obras que ya se han iniciado, y de forma especial, las que cuentan con inversión público-privada. •

El Gobierno anunció el 12 de mayo un importante paquete de medidas para reducir el déficit público por el lado del gasto. Era obligado y debe ser aplaudido. La única crítica a ese paquete solo podía consistir en que hubiera sido más útil si se hubiera instrumentado antes. Y sobre las medidas concretas del acuerdo pienso que sólo caben dos discrepancias: primera, los pensionistas, que podrían haber quedado fuera; segundo: en estos casos no se debe reducir el gasto productivo, la obra civil. El ministro de Fomento ha dicho en el Congreso –el pasado 19 de mayo– que eso reducirá las cifras de inversión de este año en 3.200 millones y otro tanto para 2011. Total: 6.400 millones de euros. Esta reducción, inevitablemente traerá una fuerte contracción de las obras en marcha, retrasos en los pagos, mayor morosidad de la administración, cancelación de contratos con obras ya iniciadas, tal vez las de más reciente adjudicación, para frenar, así, los pagos del ejercicio 2010 y 2011. El propio ministro en el Congreso ha hablado de “replantearnos el programa”…”posponer licitaciones”… demorar plazos de finalización de obras”… “suspender temporalmente”…e “incluso anular contratos en ejecución”. Esto arrastrará, sobre todo, inseguridad jurídica que es lo más dañino para impulsar los planes PPP presentados hace un mes. Todo ello nos preocupa porque afectará duramente a las empresas constructoras especializadas en obra civil que podrían, algunas… muchas… no sabemos, acabar en concursos o incluso quiebras.

Impacto en el empleo

Si estimamos en la obra pública unos 10 empleos directos y otros 8 indirectos por cada millón de euros, resultan 115.200 puestos de trabajo que van a perderse inevitablemente en dos años, lo que significa añadir 2,5% de paro a las cifras oficiales. Y lo peor no es solo que aumentará la cifra de paro, es que son personas que dejarán de cotizar a la Seguridad Social y que, al tiempo, aumentan fuertemente la factura del subsidio de desempleo. Y eso también afecta negativamente al consumo interior de bienes y servicios y por tanto, todo en conjunto, perjudica el crecimiento del PIB.

Estoy seguro que el ministro siente hoy ante esta situación el mismo desánimo que el propio sector. No puede estar conforme con esta medida que le ha sido impuesta cuando estaba reordenando él mismo temas tan sustantivos como las radiales, autovías de 1ª generación, PPP, etc. Y pese a ello, haciendo de tripas corazón, ha defendido el programa de reducción de gasto en todo momento desde ese día, lo que le honra. Pero, ello no obstante, quiero afirmar aquí que desde ANCI pensamos que lo que se está haciendo con Fomento y el MARM es ilógico y va contra la razón y la experiencia. No es lógico reducir inversiones en obra civil, que arrastra empleo en ese sector y en sus industrias auxiliares (cemento, hormigón, siderometalúrgicas, etc.). Esa decisión habría que reconvertirla. En la crisis del 29, fue la inversión pública de Alemania y EEUU a partir de 1933 la que pudo corregir la tendencia. Hay que reducir “gasto improductivo”, “gasto corriente”, pero nunca “gasto productivo”, inversiones, en suma. Hay además otras muchas fuentes para reducir el gasto corriente. Hay un gran exceso de gasto corriente en todas las administraciones públicas: central, autonómica y local.

Alternativas al recorte en inversión

¿Dónde recortar el gasto? Ejemplos: a) hace treinta años había 900.000 funcionarios, hoy hay 3 millones y entonces no había ordenadores…que multiplican la eficiencia de un funcionario; es necesario un plan de modernización de las administraciones; b) También en asesores, “embajadas autonómicas” en el exterior, gasto corriente en miles de partidas pequeñas pero que acaban sumando volúmenes importantes, reducción de empresas públicas autonómicas y locales, eliminar duplicación de competencias, excesos reglamentarios que rompen el mercado único, etc. c) Podría también subastarse una gran parte de la enorme superficie de montes públicos en manos del Estado, comunidades y ayuntamientos que sólo les genera gasto y que aportarían, sin duda, entre 8.000 y 15.000 millones de euros si solo se vendieran una pequeña parte; etc. Enuncio solo algunas soluciones alternativas –hay muchas más- para poner de manifiesto que todavía se está a tiempo de buscar otras fórmulas que sustituyan la reducción de la inversión pública en obra civil. No ayuda al crecimiento, sólo ayuda y temporalmente al déficit… aún agravando fuertemente el coste del subsidio de desempleo. ANCI le pide al Gobierno que lo reconsidere y busque otras alternativas. •

Ángel Carrillo Suárez explica que, con el apoyo de la nueva Junta Rectora, está asentando las bases que contribuyan a superar los retos que afronta la Demarcación de Madrid, en una coyuntura económica y legislativa difícil. Cinco nuevas comisiones ya trabajan en acuerdos con instituciones para garantizar el visado, promueven el empleo de los colegiados y preparan la Semana de la Ingeniería.

Esta Demarcación

Miguel Ángel Carrillo Suárez jugaba al fútbol desde el centro del campo, repartiendo juego. Desde esta posición discreta, resolutiva y en equipo, también ha gestionado su vida profesional. De sus primeros años, Carrillo conserva una amplia experiencia en obras hidráulicas que le llevaron desde España hasta Ecuador. Como Inspector General de Fomento, ha revisado más de 500 obras de las que ha obtenido “una perspectiva multidisciplinar de la profesión”. Habla de los retos que afronta la Demarcación con claridad; “necesitamos un nuevo modelo de Colegio para superar una situación difícil”. Sigue aplicando en el trabajo la capacidad de luchar, resistir y el afán de superación con el que ha practicado deporte toda su vida. “Soy muy peleón”, asegura. Son tiempos difíciles para el Colegio y, por tanto, para la Demarcación y la profesión, ¿qué le motivó a presentar su candidatura?

El compromiso que siento por esta profesión y por contribuir a mejorar la institución que nos representa. Me motiva la responsabilidad de contribuir a que la Demarcación perdure y supere una difícil coyuntura económica y legislativa. Necesitamos un nuevo modelo de Demarcación. Es preciso actuar con serenidad, optimismo y decisión. Yo me considero un peleón y la nueva Junta Rectora de la Demarcación aglutina experiencia, talento, ilusión y espíritu innovador.

¿Cuáles son los principales retos de la Demarcación y de la Junta Rectora?

Esta Demarcación, como otras instituciones profesionales, se enfrenta a cambios legislativos sobre la posible eliminación del visado y la colegiación que atentan contra su modelo actual.

En este nuevo marco, desde la Junta trabajamos con empeño para construir una institución al servicio del colegiado, que es su propietario y protagonista. Ahora necesitamos, más que nunca, una Demarcación que defienda a nuestros ingenieros, influyente, útil, participativa, moderna y tecnológica.

¿En qué se concreta esta defensa del colegiado de Madrid?

Esta Demarcación debería recibir más recursos de los que gestiona y reasigna el Colegio. Uno de mis empeños es tratar de aproximar el importe medio que se revierte a cada colegiado de Madrid al que reciben en otras demarcaciones y que se sitúa en una media de 600 euros. En este momento, la cantidad que se revierte a cada uno de nuestros 9.052 colegiados es de 320 euros. El retorno de nuestra demarcación es el más bajo de todos. Damos más de lo que recibimos, por eso estamos reivindicando lo que es justo.

¿Con qué objetivo han creado cinco nuevas comisiones? La crisis está generando un desempleo desorbitado que aumentará con el nuevo plan de ajuste de infraestructuras. Además, de fondo subyace la revisión del modelo productivo español que implica una reflexión sobre el futuro. Las nuevas comisiones nacen para adaptarnos a esta situación y ofrecer nuevos servicios al colegiado.

En esas comisiones se presta especial atención a los jóvenes y los mayores.

Con los jóvenes estamos trabajando para facilitar el autoempleo y el acceso a ofertas de trabajo.

Del colectivo de ingenieros jubilados debemos conservar y utilizar su gran experiencia y talento, porque representan un capital humano excepcional. Es necesario promover el reconocimiento público de su prestigio y que redunde en toda la profesión y la sociedad.

¿Qué acciones específicas están desarrollando en el ámbito del trabajo?

Tres de las nuevas comisiones desarrollan actividades para impulsar el empleo, las relaciones profesionales, los emprendedores y las profesiones libres. En este ámbito, hemos iniciado un plan de inserción en el mercado laboral en coordinación con el departamento de empleo de la sede central.

La Demarcación no tiene capacidad para crear empleo… Sin embargo, sí puede identificar nuevos nichos y oportunidades para nuestros colegiados. Un análisis que hemos desarrollado revela que habrá trabajo en sectores no habituales para los ingenieros de Caminos, como la banca, la consultoría, la energía y hasta la alimentación. Hemos iniciando un proceso de estudio de convenios con la Consejería de Empleo de la Comunidad y con diversas empresas para organizar cursos en los que se contraten a los alumnos de la Demarcación que obtengan mejores resultados.

¿Qué ocurrirá si en el marco de la Ley Ómnibus se suprime el visado profesional?

Estamos explicando y defendiendo con rotundidad en distintos foros que su supresión atenta contra la seguridad de los ciudadanos, porque les protege a través de seguros de responsabilidad civil que contrata el Colegio y les asegura que las obras están dirigidas y proyectadas por profesionales competentes en la materia.

Al mismo tiempo, ya hemos impulsado convenios con administraciones y empresas para fomentar el visado de trabajos profesionales en los que apostamos por mejorar los seguros profesionales asociados al visado. Está muy avanzado el convenio con el Canal de Isabel II, otro con Mintra y firmaremos en pocos días protocolos con varias consejerías de la Comunidad.

La Ley Ómnibus también pone en riesgo que se exija la colegiación…

Estamos defendiendo también la colegiación, pero al mismo tiempo, por prudencia, debemos preparar ese posible escenario. A los estudiantes que acaban la carrera este año les estamos explicando que la Demarcación proporciona servicios útiles, ayuda y protección. Lo hemos contado en las tres escuelas de la Comunidad. Les estamos animando a que participen en actividades de la Demarcación y conozcan las ventajas concretas de la colegiación.

Están trabajando también la proyección pública de la Demarcación de Madrid

Los ingenieros son una parte muy relevante del desarrollo urbano, económico y social. Esta Demarcación puede y debe ofrecer opiniones útiles, sólidas y serenas a la opinión pública. Tenemos el reto de ser una voz más potente e influyente. Hemos puesto en marcha un plan de comunicación para “que nos oigan” más y mejor. En esa línea se enmarca, por ejemplo, la creación del Café de Redacción. Es un foro en el que prestigiosos profesionales abordan temas de actualidad. Es un think tank que retroalimenta a la Demarcación y que llega a distintos agentes sociales a través de la revista.

¿En qué consistirá la Semana de la Ingeniería? Queremos potenciar el reconocimiento e influencia en la sociedad de nuestra profesión y de la Demarcación. En la Semana de la Ingeniería, que celebraremos en primavera, organizaremos visitas a obras, exposiciones y conferencias. Tres consejerías de la Comunidad, concejalías del Ayuntamiento de Madrid y la administración central nos han mostrado mucho interés en apoyarnos y en formar parte del Comité de Honor. Será un evento de notoriedad y prestigio que nos conecte con la sociedad y un espacio de reflexión sobre nuestro futuro. •

El certificado profesional garantiza una baja siniestralidad y seguridad a la ciudadanía