PREGUNTA DE LA SEMANA ¿Cuáles son las contraindicaciones de la ciprofloxacina en cuanto al uso en niños y madres lactantes, teniendo en cuenta que se ha detectado que este fármaco se excreta en leche y puede producir alteraciones en el cartílago de crecimiento, pero en la actualidad se está usando incluso en niños prematuros sin problemas? La ciprofloxacina es un antibiótico del grupo de la quinolonas que interfiere con la ADN girasa, enzima necesaria para la síntesis del ADN bacteriano. Por lo tanto, es efectivo contra varios agentes bacterianos, aunque en el caso pediátrico solo está aprobado por la FDA para el tratamiento de la fibrosis quística e infecciones urinarias complicadas y para la profilaxis del antrax, debido al riesgo de eventos adversos relacionados con las articulaciones y los tejidos conectivos. Tales efectos incluyen artralgia, marcha anormal, anormalidades en las articulaciones y disminución del rango de movimiento en las mismas. Estos efectos frecuentemente son de poca a mediana severidad y aquellos que ocurrieron en la sexta semana de tratamiento se resolvieron frecuentemente dentro de 30 días después de terminado el mismo en los reportes de caso existentes [1,2]. El INVIMA por su parte tiene aprobado el uso de este fármaco como “agente alternativo en el tratamiento de infecciones causadas por bacterias sensibles a la ciprofloxacina y localizadas en vías respiratorias, aparato genitourinario, tracto gastrointestinal, vías biliares, tejidos blandos y además alternativo en infecciones peritoneales, septicemia y gonorrea” y está expresamente contraindicado por la misma agencia en niños, embarazo y lactancia [3]. En cuanto al uso en madres lactantes, la Academia Americana en Pediatría establece que la Ciprofloxacina es excretada en la leche materna en muy pocas cantidades y, dado que no se han observado efectos negativos sobre los infantes a la fecha, es considerada como un tratamiento usualmente compatible con la lactancia [4]. Según la clasificación de lactancia de Thomson el riesgo en el infante es mínimo, aunque otras opiniones como la de la Organización Mundial de la Salud (WHO) sugieren evitar la lactancia cuando se usa este fármaco [1]. Esta opinión es compartida por otras fuentes que indican que, a pesar de que la concentración de estos compuestos en la leche humana es baja, se prefiere evitar el uso de Quinolonas en la lactancia por los estudios en animales jóvenes que indican el potencial de artropatía y otros signos de toxicidad [2,5]. Por tanto, se debe tomar una desición en cuanto a dejar de amamantar el infante o descontinuar el fármaco, teniendo en cuenta que tan importante es éste último para la paciente.
Carrera 30 No. 45 03, FACULTAD DE CIENCIAS, Edificio 450 piso 1 Oficina 214 Conmutador: (57) (1) 3165000 extensión 14623 – 14601 Fax: (57) (1) 3165060 Correo electrónico: cimun@unal.edu.co Bogotá, Colombia, Sur América