EDITORIAL
Carta del Gerente bambú. Este es muy reconocido por su extraordinaria flexibilidad al mismo tiempo que por su resistencia, la cual han demostrado pruebas que se aproxima a la del acero y el doble de la madera. Todo esto con una masa mucho menor que la de los otros materiales, lo que le brinda aún mayores ventajas de uso.
DR. LUIS ENRIQUE FLOREZ FONTALVO GERENTE CIOSAD y SANFRANCISCO
S
iempre desde mis tiempos de estudiante me ha apasionado el tema sobre el liderazgo, todos sabemos que es un elemento fundamental en todo grupo, dado que se trata del elemento conductor sin el cual difícilmente ese colectivo podría orientar de forma adecuada sus esfuerzos hacia el objetivo común. Cada día el líder tiene que adaptarse a diferentes circunstancias dependiendo de las características de las personas y las necesidades que plantea el entorno, su inteligencia emocional le permite una adecuada lectura de sus miembros del equipo. Es por eso que he querido compartir este artículo del Doctor Edgar Vera Guillen sobre el Liderazgo Situacional.
¿Qué es el liderazgo situacional?
2
Tomamos como patrón de comparación con el liderazgo situacional y la formación de un líder las sorprendentes características del
El líder situacional es flexible y adaptable, lo cual no debe confundirse con una falta de carácter o de decisión; sus valores, conocimiento y habilidades, así como la consciencia de no conocerlo todo le permiten la solidez suficiente para liderar un equipo hacia los objetivos propuestos, al mismo tiempo que aprender y fortalecerse; lo que nos permite otra analogía con el bambú, la semilla de bambú se toma tres años extendiendo una compleja red de raíces antes de dejar ver su primer brote por encima de la tierra; para luego crecer hasta 30 metros de altura. El liderazgo en general y el situacional en especial demandan un importante proceso de construcción interior en diferentes campos profesionales y personales, de formación en conocimientos técnicos y del ser humano, estos constituyen las raíces al mismo tiempo que brindan las habilidades para desenvolver el liderazgo desde diferentes características. En el liderazgo situacional el estilo de liderazgo puede cambiar continuamente para ajustarse a las necesidades de otros en la organización (Anthony & Seidel, 2019) y en especial de cada uno de los miembros del equipo.
¡4 en 1! El liderazgo situacional plantea para el líder una estructura flexible como el bambú, pues en ocasiones deberá tener un estilo directivo o autoritario, ordena. En otras un estilo de coaching, más receptivo y listo a retroalimentar pro-positivamente a su equipo, persuade. El tercer estilo es el de soporte y apoyo, donde el líder participa en la toma de decisiones pero permite a su equipo tomar la mayoría de estas, llegando a lucir un poco pasivo, y el cuarto estilo es el líder Delegador, donde el líder provee el mínimo de órdenes y orientaciones y se concentra más en la visión macro que en la operación del día a día.
¡Tal para cual! La incorporación de estos cuatro estilos de liderazgo en el concepto del liderazgo situacional obedecen a que estos responden a características y necesidades de los miembros de los equipos. Así un integrante del equipo principiante y entusiasta que cuenta con bajas competencias pero alto compromiso requiere un líder directivo que le permita ubicarse en los objetivos del equipo. Un miembro del equipo “Aprendiz desilusionado” cuenta con algunas competencias pero bajo compromiso y requiere de su líder un rol de coach que lo motive a brindar todo su potencial. Un empleado competente pero desarrollador cauteloso posee amplias competencias pero
